Anda di halaman 1dari 5

5.

JUSTICIA, JURISDICCION O DERECHO PROCESAL


CONSTITUCIONAL

El debajo ha surgido por la forma de utilizar la denominación de Justicia


Constitucional o Derecho Procesal Constitucional para comprender a la ciencia
que estudia a los mecanismos procesales de protección de la constitución. El
maestro mexicano Héctor Fiz Zamudio dice: “Es un mecanismo de defensa y
refiere dominarlo como Justicia Constitucional, porque entiende que
filosóficamente persigue valores que están por encima del ordenamiento jurídico
positivo y que jurídicamente son el conjunto de mecanismo procesales por medio
de los cuales lo jueces deciden los conflictos constitucionales, que cuando se
habla de jurisdicción constitucional nos referimos a la exigencia de órganos
especializados para resolver los conflictos.” Por su parte, el institucionalista
peruano Domingo García Belaunde se refiere al tema como jurisdicción
constitucional porque es fundamentalmente la capacidad de los órganos del
estado (no importa cuales) para pronunciarse temas constitucionales y que
decisiones sean de carácter vinculante; no obstante estas denominaciones hoy
ha adquirido relevancia la nominación de derecho procesal constitucional, como
la califico el ilustre procesalista Niceto Alcalá – Zamora Castillo, no sin
desconocer que la paternidad de esta nueva ciencia jurídica se le debe de
atribuir al jurista al Hans Kelsen, entendido como los mecanismo procesal
creados para ser ejercido por el juez, destinados para ser cumplir el principio de
la supremacía constitucional de la carta fundamental y respeto a los derechos
fundamentales de la personas. Ahora bien, al nivel comparado se habla ya de
Derecho Procesal Constitucional peruano, que une en un solo cuerpo, que une
en un solo cuerpo de leyes las dispersan normas de procesos constitucionales,
lo que permite un manejo adecuado y evita dudas sobre la aplicabilidad de
determinadas de instituciones jurídicas, que se encontraban en diversas leyes;
además de contener novísimas incorporaciones acorde con nuestra realidad.

Como lo refiere José Peña Gonzales la defensa de la constitución se lleva a cabo


en dos planos, desde el punto de vista jurídico la defensa en garantizar que los
órganos estatales se adecuen siempre a lo que la constitución establezca; sin
embargo, dada la inevitabilidad de abuso del abuso del poder y la incapacidad
para auto-limitarse, resulta imprescindible establecer un avalla contra esa
posible violación como ello da lugar a la teoría llamada justicia constitucional y al
tema del controle la constitucionalidad de la ley. Desde el plano político ha de
preverse la posibilidad de circunstancias excepcionales para cuya solución se
cuente con mecanismo excepcional.

6. ORIGEN

Nestor Pedro Sagües destaca que aparte de la aparición de los interdictos


romanos, el juicio de la manifestación e justicia mayor se puede establecer 3
efimeritas:

En primer lugar el Habeas Corpus Amendmet Act; en segundo lugar, el fallo de


1803 del Leading Case Marbury vs Madisson y, en tercer lugar la constitución de
Austria de 1929. Y como lo refiere el jurista Gerardo Eto Cruz, un cuarto
cumpleaños se produce el 31 de marzo de 1841, fecha en que se aprueba la
constitución del estado y actúan donde bajo la inspiración de manuel Crescencia
Rejon con el juicio de amparo.

Esta nueva ciencia surge debido al auge que adquiere el constitucionalismo, pero
de su derecho se evidencia que no basta que exista un norma sustantiva o
material, llamada “Constitución” sino que es necesario que dicha norma
sustantiva se cumpla en todo los ámbitos del sistema jurídico como norma
suprema; asimismo como la fuerza vinculante de la efectividad de los derecho
fundamentales.

7. CONCEPTO

El profesor Victor Julio Ortecho Villena, referirse al concepto afirma:


“Es el conjunto e reglas y procedimiento que permiten al juez constitucional
desarrollar y emplear su función jurisdiccional con ciertas particularidades
distintas a las norma s procesales ordinarias”

Art. III Principio Procesales

Los procesos constitucionales se desarrollan con arreglo a los principios


a dirección judicial del proceso, gratuidad en la actuación del demandante,
economía, inmediación y socialización procesal.
El juez y el tribunal constitucional tienen el deber de impulsar de oficio los
proceso salvo en los casos extremadamente señalados en el presente código,
asimismo, el juez y el tribunal constitucional deben adecuar la exigencia de las
formalidades prevista en el este código al logro de los fines de los procesos
constitucionales.

Cuando en un proceso constitucional se presenta una duda solucionarse


respecto si el proceso debe declararse concluido, el juez y el tribunal
constitucional declararan su continuación.

La gratuidad prevista en el artículo no obsta el cumplimiento de la resolución


judicial firme que disponga la condena en costos y costas conforme a lo previstos
por el presente código.

A. DIRECCIÓN DEL PROCESO


Podemos distinguir entre los sistema procesal el dispositivo e inquisitivo,
por el primero son las parte las que deben impulsar el desarrollo del
proceso no interviniendo mayormente el juez de la causa; en cambio,
mediante el segundo, es el juez el que interviene en el proceso con más
atribuciones realizados en el proceso nuestro actual código de
procedimiento penales contienen principio mas no así el código el código
procesal penal que se rige por el sistema dispositivo.
Con la dación del código procesal Constitucional el sistema normativo al
nivel de jurisdicción constitucional ha optado el principio inquisitivo, donde
el juez constitucional tiene la obligación de impulsar de oficio de esta
materia.
Este principio sin lugar a duda constituirá un herramienta que su adecuada
mente puede lograr la protección de los derechos fundamentales de la
persona, pues dejar librado el proceso constitucional ala partes puede
presentar las parte en algún momento que los ostentan el poder pueda
ejercer su fuerza aun dentro del proceso constitucional; es por ello que
para los fallos judiciales sea eficaces es necesario que cumplan con
proteger lo derecho cuya tutela oportunamente se pide; así, es el juez el
director del proceso y guiara la lograr una respuesta que responda la
realidad y que pueda ejecutarse prontamente pues nada valdría una pieza
literaria jurídica impecable, si es que resulto para proteger los derecho de
la persona no se va a cumplir, lo cual generaría un sentimiento encontrado
contra la administración de justicia nacional; es necesario la aplicación del
principio correspondiendo al juez constitucional impulsa el proceso en
forma razonable y analizar la intervención de las partes a fin de evitar
pedidos maliciosos o maniobras dilatorias.

B. GRATUIDAD DEL DEMANDANTE

La justicia constitucional es gratuita de la naturaleza de protección de los


derechos fundamentales y de orden jurídico que se declaran, como lo contrario
significa que el estado no protege en lo mínimo los derechos fundamentales y
dejar librados su relación a aspectos económicos (tasas judiciales), que sin lugar
a dudas constituirían un entorpecimiento en el resto de los mismos.

Como principio debe estar sujeto determinadas consecuencia por los resultados,
lo contrario significaría en los casos que no se cosa del derecho constitucional
alegado se ponga en funcionamiento todo el sistema de justicia de manera inútil
con el consiguiente gasto por parte del estado y sin carga para el demandante o
denunciante sin tener fundamento; sin embargo lo que más preocupa es la
evidencia temeridad conque actúa el justiciable que pese a conocer que no existe
el derecho ocurre a la instancia constitucional para logra una demora,
postergando los derecho legítimos de terceros, en este último caso el beneficio
s pierde es desestimatoria y se condena al gasto en el proceso. Pero el
demandante en el caso de temeridad procesal no solo debería ser condenado al
pago de costas y costo, sino que debería imponérsele multa por su actuar
temerario, obviamente abría que aplicar supletoriamente el código procesal civil,
por ello, podría colisionar con el principio de legalidad, de ahí que la sanciona
debería ser incorporado el código constitucional; adicionalmente, otra como la
posibilidad de remitir copias al Ministerio Publico para que se pueda denunciar,
aunque ello no es necesario que conste de forma expresa.

B. Economía Procesal
El principio de economía procesal es la reducción de actos procesales,
obviando el trámite de actos necesarios y no contribuyan a resolver
conflicto planteado. Entendido como el ahorro de tiempo, gasto y esfuerzo
en la actividad procesal sin que ello implique vulnerar otros derechos
como el de defensa o seguridad jurídica, entre otros.
La economía procesal tiene conexión con la celeridad procesal, esta
última concentrada como la rapidez resuelve la judicatura las
controversias que se plantean.

Anda mungkin juga menyukai