EL JUICIO VERBAL
I. CONCEPTO Y ÁMBITO DE APLICACIÓN
El juicio verbal, regulado en los art. 437 y ss. LEC, es un proceso ordinario rápido destinado al
enjuiciamiento de objetos litigiosos de escasa cuantía económica o que se caractericen por la simplicidad
de su tramitación. El ámbito de aplicación de este proceso declarativo se obtiene a través de un criterio
negativo y de otros dos positivos: el uno de carácter cuantitativo y cualitativo el otro.
1. NEGATIVO
De conformidad con lo establecido en el art. 250.2 «Se decidirán también en el juicio verbal las
demandas cuya cuantía no exceda de seis mil euros y no se refieran a ninguna de las materias previstas
en el apartado 1 del artículo anterior». Lo que viene a establecer este precepto es que aquellos objetos
litigiosos, cuyo valor no exceda de 6.000 euros y no se encuentren previstos en alguna de las ocho reglas
establecidas por el art. 249, que determina el ámbito de aplicación del juicio ordinario, serán tramitadas
por las normas del juicio verbal.
2. POSITIVOS
Tal y como se ha avanzado, los criterios positivos son dos: cuantitativo y cualitativo.
A) Cuantitativo
A través de este procedimiento se dilucidarán aquellas demandas, cuyo objeto sea igual o
inferior a los 6.000 euros. Esta cuantía habrá de reflejarse en escrito de demanda, pudiendo ser
impugnada por el demandado en su escrito de contestación o revisada de oficio por el tribunal,
en cuyo caso se le otorgará la posibilidad de subsanación.Pero los bienes litigiosos de cuantía
inestimable (así, por ej., una obra de arte) han de dilucidarse siempre por las normas del juicio
ordinario (art. 249.2).
B) Cualitativo
También se tramitarán por las normas del juicio verbal toda una serie de relaciones jurídicas,
aunque su valor exceda de 6000 euros, pero que presenten la característica común de que su
tramitación no resulte excesivamente compleja. Tales relaciones materiales se encuentran
previstas en los ordinales 1º a 13º del art. 250.1, pudendo ser sistematizadas en las siguientes:
a)procesos sumarios, tales como 1los juicios posesorios (interdictos de retener y recobrar, obra
nueva y ruinosa: art. 250.1.2º-6º), 2el proceso para la protección registral de los derechos reales
(art. 250.1.8º.7º) y 3el de desahucio por falta de pago (art. 250.1.1º); b)procesos especiales, de
entre los que se encuentran 1el proceso de alimentos (art. 250.1.8º), 2el de consumidores para
el ejercicio de la acción de cesación (art. 250.1.12º), 3el de contratos de ventas de bienes
muebles a plazos y arrendamientos financieros (art. 250.1.10º y 11º), 4el ejercicio del derecho
de rectificación (art. 250.1.9º) y 5el derecho a la comunicación de los parientes con los hijos
menores (art. 250.1.13º).
IV. CONTESTACIÓN
Una vez presentada la demanda, el Letrado de la Administración de Justicia la admitirá si cumple con los
requisitos legales o la inadmitirá en los supuestos contemplados en el art. 404 (falta de jurisdicción o
competencia o incumplimiento de sus requisitos formales sin subsanación), en cuyo caso dictará
propuesta de resolución para que el Juez dicte la resolución pertinente.
Tradicionalmente, una vez admitida la demanda, el referido Letrado había de convocar a las partes a la
celebración de la vista, en la que el demandado había de formular su contestación oral. Pero, debido a
que dicha contestación por su carácter sorpresivo, podía generar indefensión al actor, la LRLEC (2015) ha
establecido la necesidad de que la contestación se formule también de forma escrita. Así pues, al
demandado le conferirá un plazo de diez días para que conteste por escrito a la demanda en la forma
ordinaria o mediante impresos normalizados, si compareciera sin Abogado (art. 438.1).
El demandado puede formular también reconvención, siempre y cuando cumpla con determinados
requisitos: en primer lugar, ha de existir conexión entre su pretensión reconvencional y la deducida por
el actor; en segundo, la reconvención no puede exceder del ámbito de aplicación del juicio verbal (pues,
en tal caso, habrá de interponerla por el cauce del juicio ordinario) y finalmente no puede interponer
pretensiones propias de los juicios sumarios o cuyas sentencias no produzcan los plenos efectos de la
cosa juzgada o hayan de dilucidarse a través de un procedimiento especial (art. 438.2). El
incumplimiento de estos requisitos es vigilable de oficio, sin perjuicio de que el actor los denuncie en su
escrito de contestación a la reconvención.
Asimismo, las partes, en sus escritos de demanda y contestación habrán de pronunciarse sobre la
celebración de la vista. Si ninguna de las partes la solicitase y el Tribunal no considerase procedente su
celebración, dictará sentencia sin más trámites; pero, si alguna de las partes lo solicitase, el Letrado de la
Administración de Justicia citará a ambas a la celebración de la vista dentro de los cinco días siguientes,
la cual habrá de realizarse en un plazo no superior a un mes (art. 438.4 y 444.1). La citación contendrá la
información de que las partes pueden iniciar negociaciones para obtener una satisfacción extraprocesal,
de que han de comparecer con la advertencia de que, caso de incomparecencia de alguna de ellas,
tenerla por confesa de los hechos perjudiciales y de que han de traer los testigos y peritos, salvo los que
haya de ser objeto de citación judicial, en cuyo caso determinarán sus datos de identificación y domicilio
a efectos de las notificaciones. Si el demandante no asistiera a la vista, se le tendrá por desistido en su
demanda y se le impondrán las costas e incluso una condena al pago de daños y perjuicios, si el
demandado así lo solicitase. Y si no compareciera el demandado, se desarrollará la vista con los efectos
de la «ficta confessio», tal y como ha quedado dicho con anterioridad (art. 442).