ANTECEDENTES HISTÓRICOS
Entre los distintos métodos usados para el estudio de las balas, se pueden
resaltar por su originalidad los siguientes: Método de Cordonnier.- "Gráfica de
un proyectil"; consiste en la obtención de una gráfica mediante un dispositivo
especial, que permite registrar las irregularidades producidas por el cañón sobre
el cuerpo de la bala.
Método de la Policía técnica de Lyon.- Basado en el examen comparativo de
las características de los campos y estrías de las balas, con las existentes en el
interior del cañón del arma sospechosa, número, ancho, inclinación, etc.. Para el
estudio se emplean microscopios, micrómetros y oculares milimétricos. Método
de Balthazard.- Consiste en rodar la bala disparada sobre una hoja de estaño,
usando una regla a modo de guía, y presionando sobre la bala para obtener los
detalles contenidos en su cuerpo. El estudio se hace por comparación tras
fotografiar y ampliar los resultados obtenidos.
Así, en el estudio de una bala o una vaina, se pueden observar dos tipos de
marcas, unas accidentales, carentes de valor identificativo, pues generalmente no
está producidas por el funcionamiento normal del arma; otras repetitivas, de gran
utilidad, pues, demuestran una identidad de conducta.