Haz un registro de cada mesa. Haz una tabla de cada mesa y cada trabajador
(aprende la disposición de las mesas de memoria). Trata de memorizar cuántas
personas están en una fiesta y lo que hay en las mesas. También hay que tener
en cuenta de que estás ahí para que los camareros no se sientan agobiados.
Para saber cuánta gente está cenando. Su hay lista de espera, asegúrate de
obtener el nombre de todos los comensales para que sean tenidos en cuenta.
Evita darles un marco temporal específico. Explícales que tienen que esperar un
poquito a que su mesa esté preparada. Nunca digas que tienen que esperar 5-10
minutos. Los huéspedes suelen ser algo impacientes y pueden tomar la decisión
de irse a otro lado a cenar.
Después de saludar a los invitados, asigna los asientos teniendo en cuenta
la altura y corpulencia de los comensales. No los pongas en una sala o mesa
pequeña. Además, si uno de los invitados tiene problemas para caminar, dale un
asiento cerca del anfitrión.
Cuando decidas donde los vas a sentar, rota los servicios. Distribuye las
mesas uniformemente entre los camareros. Pero ten presente también el espacio
que dispones. Intenta que haya espacio suficiente entre los comensales.
Cuando el cliente se siente, coloca la carta en su lugar para cada uno de
ellos o entrégales en mano la carta. No te limites a lanzar los menús sobre la
mesa sin decir nada.