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Audiencia Provincial

Audiencia Provincial
de Granada (Sección 4ª) Sentencia num. 13/2010 de 15 enero

AC\2011\902

SEGURO DE AUTOMOVILES: atropello del actor en el patio interior de la empresa al maniobrar una
carretilla elevadora propiedad de ésta y conducida por uno de sus empleados que estaba efectuando
labores de carga y descarga dentro del recinto que posee la misma: exclusión de la cobertura tanto
del seguro obligatorio como del seguro voluntario por no considerarse un hecho de la circulación.
DAÑOS Y PERJUICIOS: INDEMNIZACION: lesiones concurrentes: informe pericial y aplicación de la
fórmula de Balthazard: cuantificación.

Jurisdicción: Civil

Recurso de Apelación 516/2009

Ponente: Ilmo. Sr. D. Juan Francisco Ruiz-Rico Ruiz

La Audiencia Provincial de Granada declara haber lugar al recurso de apelación interpuesto


contra la Sentencia de fecha18-02-2009dictada por el Juzgado de Primera Instancia núm. 5 de
Granada, revocándola en el sentido expuesto en los fundamentos jurídicos de la presente
Resolución.

AUDIENCIA PROVINCIAL DE GRANADA


SECCION CUARTA
ROLLO Nº 516/09
JUZGADO GRANADA 5
ORDINARIO Nº 539/07
PONENTE SR. D. JUAN FRANCISCO RUIZ RICO RUIZ
SENTENCIA NÚM. 13
ILTMOS. SEÑORES:
PRESIDENTE
D. ANTONIO GALLO ERENA
MAGISTRADOS
D. MOISÉS LAZÚEN ALCÓN
D. JUAN FRANCISCO RUIZ RICO RUIZ

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En la ciudad de Granada a quince de enero de dos mil diez. La Sección Cuarta de esta Iltma.
Audiencia Provincial, ha visto, en grado de apelación los
precedentes autos de juicio ordinario 539/07, seguidos ante el Juzgado de Primera Instancia
Número 5 de Granada, en virtud de demanda de D. Humberto , representado en esta instancia por
el Procurador/a Sr/a Peralta Ruiz, contra CÍA. ASEGURADORA LIBERTY INSURANCE GROUP
representado por el Procurador/a Sr/a Luzón Tello, en esta alzada, y PLÁSTICOS FERRO S.L.
Aceptando como relación los "Antecedentes de Hecho" de la sentencia apelada, y

ANTECEDENTES DE HECHO
PRIMERO .- La referida sentencia, fechada en 18 de febrero de 2009 , contiene el siguiente fallo:
"Que desestimando la demanda formulada por D. Humberto , representado por la Procuradora Sra.
Peralta Ruiz, contra la aseguradora Liberty Insurance Group, representada por el Procurador Sr.
Luzón Tello, debo absolver y absuelvo a dicha demandada de las pretensiones deducidas en su
contra, imponiendo a la parte demandante el pago de las costas causadas. Que estimando
parcialmente la demanda formulada por D. Humberto , contra la mercantil Plásticos Ferro S.L.,
representada por el Procurador Sr. Luzón Tello, debo condenar y condeno a dicha demandada a que
abone al actor la cantidad de 59.957,90 euros, más intereses a determinar en ejecución de
sentencia; todo ello sin imposición de costas, de manera que cada parte abonará las costas
causadas a su instancia y las comunes por mitad."
SEGUNDO .- Sustanciado y seguido el presente recurso, por sus tramites ante esta Iltma.
Audiencia Provincial, en virtud de apelación interpuesta por la parte demandante, por escrito y ante el
Órgano que dictó la sentencia; de dicho recurso se dio traslado a demás partes, para su oposición o
impugnación; tras ello se elevaron las actuaciones a este Tribunal, señalándose día para su Votación
y Fallo, en que ha tenido lugar.
TERCERO .- Han sido observadas las prescripciones legales de trámite.
Siendo Ponente el Magistrado Iltmo. Sr. D. JUAN FRANCISCO RUIZ RICO RUIZ.

FUNDAMENTOS DE DERECHO
PRIMERO
.- No hay duda de la forma de suceder el siniestro en virtud del cual se reclama la indemnización
por el daño sufrido que tuvo lugar el día 15 de octubre de 2003 en que se produjo el atropello del
demandante en el patio interior de la empresa Plásticos Ferro S.L. al maniobrar una carretilla
elevadora propiedad de ésta y conducida por uno de sus empleados que estaba efectuando labores
de carga y descarga dentro del recinto que posee la misma en el término de Atarfe. Tampoco la hay
de la condición de vehículo de motor que tiene dicha carretilla , así como de su obligación de
aseguramiento impuesta por el Art. 2 de la LRCSCVM ( RCL 1968, 690) . La cuestión principal radica
en si se trata de un hecho de la circulación amparado por el seguro obligatorio o voluntario del ramo,
concertado en este caso con la codemandada Liberty Insurance Group. La respuesta no puede ser
otra que la consideración de este hecho como ajeno a la circulación de vehículos de motor y, por
tanto, no cubierto por dicho seguro.
El Art. 3 del Reglamento sobre responsabilidad Civil y Seguro en la Circulación de Vehículos de
Motor, aprobado por R.D. 7/2007 de 12 de enero(sic) ( RCL 2001, 126) , señala que "a los efectos de
la responsabilidad civil derivada de la circulación de vehículos a motor y del seguro de suscripción
obligatoria regulado en este Reglamento, se entienden por hechos de la circulación los derivados del
riesgo creado por la conducción de los vehículos a motor a que se refiere el artículo anterior, tanto
por garajes y aparcamientos, como por vías o terrenos públicos y privados aptos para la circulación,
tanto urbanos como interurbanos, así como por vías o terrenos que sin tener tal aptitud sean de uso
común". Añade el párrafo segundo del apartado 2 que "tampoco se considerarán hechos de la
circulación los derivados de la realización de tareas industriales o agrícolas por vehículos a motor

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especialmente destinados para ello, sin perjuicio de la aplicación del apartado 1 en caso de
circulación por las vías o terrenos mencionados en dicho apartado.
En el supuesto enjuiciado claramente puede observarse que el siniestro acontecido no es un
hecho de la circulación amparado por el aseguramiento que prestaba la demandada, pues se
encontraba efectuando labores industriales, es un vehículo especialmente destinado a la carga y
descarga de materiales para su almacenamiento y el lugar por el que circulaba, en que se produjo el
atropello del trabajador de la propia empresa, no era apto para la circulación pues el movimiento del
vehículo dentro del recinto para aquellas funciones es la finalidad propia del mismo.
Así lo viene reconociendo la jurisprudencia de las Audiencias Provinciales y del Tribunal Supremo,
como la SAP Vizcaya, Sección Tercera, 10 de febrero de 2005 ( PROV 2005, 101233) : "Teniendo en
cuenta lo anterior a la vista de las actuaciones resulta acreditado que, y así lo recoge la sentencia la
colisión se produjo en un terreno privado, cuya función es ser lugar de carga y descarga, actividad
industrial, aunque esa misma actividad y exposición lleve producir una cierta circulación, y siendo ello
así, la responsabilidad de la aseguradora es evidente, por cuanto que la misma y así nuevamente lo
recoge la sentencia, cubre con la póliza suscrita la actividad industrial y el funcionamiento de la
carretilla precisamente se efectúa y por ende engloba dentro del campo de dicha actividad industrial,
en tal sentido aún cuando propulsada a motor esta destinada a las actividades industriales propias
para su diseño y en el entorno de la actividad industrial de suerte que si por circunstancias
concurrentes, cual es la posibilidad de que en dicho almacén quepa la circulación de vehículos a
motor a causa de la existencia de una exposición, produciéndose el siniestro con dicho medio
industrial la responsabilidad no ha de ser sino cubierta por la póliza suscrita."
La SAP de Lleida, Sección Segunda, 27 de junio de 2006 ( PROV 2007, 64773) : "Si aplicamos,
pues, este criterio al supuesto que ahora se enjuicia, la sentencia de primera instancia habrá de ser
confirmada por no ser objeto de cobertura el hecho dañoso determinante de responsabilidad civil, al
no constituir hecho de la circulación. Efectivamente, el atropello se produjo en las instalaciones
industriales de Indulleida SA, en la zona destinada a la descarga de la fruta que los camiones
transportan hasta la misma. La carretilla elevadora , además, estaba participando en las actividades
de descarga de los camiones, pues se dedicaba a retirar los palets que, transportados por los
camiones, habían sido vaciados de su contenido de fruta. Si bien en ese lugar había en aquel
momento camiones que no circulaban, no puede decirse que se trata de una zona destinada a ese
fin, no al aparcamiento de vehículos, aún cuando esporádicamente ello pudiese suceder. tampoco
puede considerarse que se trata de un espacio apto para la circulación a los efectos citados en el art.
3.1 del Real Decreto , pues si bien es cierto que para poder efectuar las operaciones de carga y
descarga es preciso que los camiones circulen o se desplacen, no es esta la finalidad o aptitud de
ese espacio. En este caso el atropello del demandante se produjo en un recito privado; que no está
abierto al público en general; no es vía pública ni tampoco es de uso común; ni tampoco es utilizado
por una colectividad indeterminada de usuarios, sino que se produce en el interior de las
instalaciones de una industria cuando tanto el conductor del toro o carretilla elevadorcomo la propia
víctima, estaban efectuando funciones propias de su cometido laboral. No puede, por tanto,
considerarse que nos encontramos ante un espacio apto para la circulación, so pena de vaciar de
contenido la exclusión prevista en el art. 3.2 del real decreto , pues es evidente que la mayor parte de
vehículos industriales y agrícolas para poder desarrollar su cometido precisan de superficies que
permitan su circulación, su traslado de un sitio a otro."
La SAP de Barcelona, Sección Primera, 9 de junio de 2008 ( PROV 2008, 266187) : "En efecto, de
lo actuado resulta debidamente acreditado que el accidente se produjo en la plataforma de acceso al
almacén (espacio claramente identificado en las fotografías aportadas junto a la demanda), es decir,
en un lugar donde solo pueden circular vehículos "toros" con la finalidad de trasladar las mercancías
del almacén a los camiones (muelle de carga y descarga), y cuando dicho vehículo efectuaba tareas
de carga y descarga (circulaba cargado)."
La SAP de Alicante de 17 de marzo de 2009 ( PROV 2009, 222914) : "Así las cosas, debe
acogerse el recurso de apelación en este extremo pues no nos encontramos en presencia de un
"hecho de la circulación" ya que: 1.-) el vehículo de motor causante del siniestro (toro o carretilla)
está especialmente destinado a actividades industriales; 2.- en el momento del siniestro estaba

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realizando tareas industriales como es la de transportar "palets" desde el interior de la nave al recinto
exterior; 3.-) el recinto exterior no es una vía destinada a la circulación en el sentido del artículo 3.1
del real decreto 7/2001, de 12 de enero , toda vez que es un recinto acotado destinado a la función
de muelle de carga y descarga... El seguro de responsabilidad civil por circulación suscrito con la
apelante será operativo cuando no concurran las circunstancias referidas, esto es, cuando no realice
actividades industriales y circule por vías o terrenos de uso común."
Por último la STS de 21 de noviembre de 2005 ( RJ 2006, 40) : "El recurrente viene a decir que
cuando el vehículo "circule" por vías privadas que no estén "especialmente destinadas o acotadas
para el desarrollo por dicho vehículo de un trabajo o labor industrial o agrícola" el seguro ha de cubrir
los riesgos. El motivo no puede ser acogido. Por una parte, se enfrenta de plano con el resultado de
la prueba, que, además ocioso es decirlo, es competencia de la Sala de instancia. E ignora, por otra
parte, la cuidadosa valoración de los preceptos que invoca realizada por la Sala, y ya antes por el
Juzgado. El siniestro ocurrió dentro de la nave, o al menos del recinto. La Sala ha examinado con
rigor el hecho y ha analizado la norma de aplicación para llegar a la conclusión de que se trata de un
riesgo no comprendido, no cubierto por la póliza, según ya se ha dicho. precisamente el artículo 1º
de la Ley 50/1980 de 8 de octubre ( RCL 1980, 2295) viene a decir que se han de indemnizar los
daños dentro de los límites pactados. Luego se ha aplicado con absoluta justeza al determinar que
no hay cobertura porque el riesgo no es objeto de cobertura."
Esta excluye la cobertura tanto del seguro obligatorio como del seguro voluntario por no
considerarlo un hecho de la circulación.
De todo lo que venimos diciendo podemos deducir que el aseguramiento de este tipo de vehículos
dentro del ámbito del seguro obligatorio o voluntario tiene sentido cuando no se cumplan las
condiciones o requisitos establecidos por el Art. 3, 2, 2º del Reglamento citado para no considerarlo
hecho de la circulación, es decir, que este tipo de vehículo no desarrolle tareas industriales o
agrícolas, no estén especialmente destinados a ello o circulen por vías o terrenos aptos para la
circulación.

SEGUNDO
.- En lo que ha de prosperar el recurso es en lo relativo a la cuantificación del daño. No se discute
la indemnización fijada por los días de asistencia hospitalaria (1.463,65 #) y días de impedimento
(10.090,90 #). Sin embargo, el Juzgador de Instancia no aplica correctamente la fórmula para el caso
de lesiones concurrentes al estipular el Anexo de la LRCSCVM que "si son más de dos las lesiones
concurrentes, se continuará aplicando esta fórmula y el término "M" se corresponderá con el valor del
resultado de la primera operación realizada". De acuerdo con lo que establece el informe del perito
judicial y la operación efectuada en el escrito del recurso, aplicando la denominada fórmula de
Balthazard, la puntuación que corresponde por las secuelas fisiológicas ascienden a 30 puntos a los
que hay que añadir otros 7 puntos por el perjuicio estético. La indemnización correspondiente a unas
y otra ascienden a 29.997,60 # y 4.044,18 #, respectivamente, que han de ser incrementados en
otros 3.404,18 # por el 10% de factor de corrección sobre incapacidades permanentes.
Por último, nos parece adecuada la cantidad de 35.000 # concedida por la incapacidad
permanente total para su trabajo habitual otorgada por el órgano competente de la Seguridad Social
y refrendada judicialmente, a la vista de la entidad de las lesiones y la edad del perjudicado que en la
fecha del accidente contaba con 60 años.
Sumando todos estos conceptos la indemnización por los daños y perjuicios ha de ascender al
importe total de 84.020,51 # por lo que se ha de estimar la demanda.
Vistos los artículos citados y demás preceptos de pertinente y general aplicación,

FALLAMOS
Esta Sala ha decidido revocar la sentencia dictada por el juzgado de Iª Instancia nº 5 de esta
ciudad, en el solo sentido de elevar la indemnización a cargo de la entidad Plásticos Ferro S.L. a la
suma de 84.020,51 #, manteniendo los restantes pronunciamientos de la misma, todo ello sin hacer
imposición de las costas de esta alzada.

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Así por esta nuestra sentencia lo pronunciamos, mandamos y firmamos.


PUBLICACION.- Leída y publicada ha sido la anterior sentencia por el Magistrado Ilmo. Sr. D.
JUAN FRANCISCO RUIZ RICO RUIZ, Ponente que ha sido de la misma, doy fe.

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