Mercadotecnia
Las etapas lógicas (no son las únicas) del proceso de planeación en mercadeo son:
Diagnósticos:
Proyecciones:
Planeación:
Después de fijadas unas metas, vendrá la parte de organizar el cumplimiento de las mismas.
En el caso del mercadeo, la planeación básicamente consistirá en la determinación de la
mezcla de mercadotecnia más adecuada para el producto o servicio a introducir.
Planear:
Políticas de precios
Tipos de medios a utilizar y mensaje
Sitios, lugares y formas de venta
Elementos de comunicación
Desarrollo del producto adecuado
Como es lógico, planear los elementos anteriores implica mezclar las políticas de la empresa
en términos de mercadeo, con la administración de recursos financieros y de logística de la
empresa.
Planeación debe tener en cuenta las limitaciones tanto financiaras como físicas para
desarrollar las actividades propuestas.
Objetivos de la publicidad.
Ayudar a la venta de un producto
Ayudar a un programa de relaciones públicas de la empresa.
Hacer saber al público cualquier información relacionada con la empresa, sus artículos
servicios.
Combatir la competencia.
Ayudar a una promoción de ventas.
Asegurar el uso correcto de un artículo.
Crear ciertas ideas o actitudes respecto al producto o servicio.
Lanzar un nuevo producto al mercado.
Medios que se utilizan en la Publicidad.
Cine
Radio
Televisión
Prensa
Relaciones Públicas.
Crear prestigio
Promover ventas
Prevenir y solucionar problemas de carácter laboral
Desvanecer prejuicios que existan en contra de la empresa
Educación del público sobre los que es la empresa
Investigación de la opinión pública
Análisis e interpretación de la opinión pública
Establecimiento de las tendencias de la actividad pública
Asesoramiento en la formación de las políticas de la empresa
Obtención de la comprensión y el apoyo de cada uno de los públicos afectados, a favor de la
empresa
Producción
El problema de la planeación de la producción juega un papel preponderante en las
operaciones de manufactura. El problema consiste en decidir qué tipo y cuánto se
debe fabricar de un producto en los periodos de tiempo futuros. Este tipo de
decisiones se basan en una gran cantidad de factores, incluyendo las horas‐
máquina y las horas‐hombre disponibles por periodo, los márgenes de ganancias
deseados, los costos de almacenaje, etc. La estimación de la demanda de
productos manufacturados para los periodos planeados es de particular importancia
en este tipo de problemas.
La planificación de la capacidad es fundamental para el éxito a largo plazo de una
organización. La capacidad excesiva puede ser tan fatal como la capacidad
insuficiente, lo cual se demuestra en la práctica administrativa. Al escoger una
estrategia de capacidad los directivos deben analizar preguntas como: ¿Cuánto
“colchón” se necesita para manejar la demanda incierta y variable? ¿Debemos
expandir la capacidad antes de que la demanda se manifieste claramente o es mejor
esperar hasta que la ultima se perfile con mayor certeza? Se requiere un método
sistemático para contestar estas y otras preguntas similares y para desarrollar una
estrategia de capacidad que sea apropiada para cada situación.
En general este tipo de problemas ha sido muy poco explorado a pesar de constituir
en la actualidad uno de los casos más comúnmente encontrados dentro de la
práctica de la ingeniería industrial.
Cuando un empresario toma la determinación de invertir para producir un
determinado producto o productos, es necesario tener una estrategia operacional,
que guiará y especificará lo que se desea alcanzar con las operaciones que se
realicen. La perspectiva de la planeación estratégica toma en consideración la
planeación de la ubicación de las instalaciones, capacidad de operaciones y
distribución de las áreas a largo plazo.
Planeación de la capacidad
Estructura organizacional
El segundo vector o estructura organizacional depende de la misión; es decir, sigue a la
estrategia.
La estructura no es inamovible, depende de la estrategia, por ello en un entorno agresivo
(turbulento) las organizaciones establecen nuevas estrategias que a su vez demandan nuevas
estructuras, por lo tanto, las estructuras deberán ser flexibles, capaces de responder a los
cambios
del entorno. Este vector, es el socio‐técnico, en el que los resultados finales individuales y de
grupo se relacionan con el clima organizacional. Los modelos de estructuras organizacionales
se
representan con las organizaciones cerradas y mecánicas, en un extremo, y con las abiertas y
orgánicas, en el otro.
En la estructura organizacional se debe considerar:
a) Aspectos horizontales tales como división del trabajo, grado de especialización, relaciones
lineales y la departamentalización de las tareas organizacionales, etc.
b) Aspectos verticales entre los que se incluye la delegación, la descentralización, el número
de
niveles jerárquicos y el tramo de control, con algunos de sus efectos como son la satisfacción
del
trabajador y la toma de decisiones.
c) Cultura organizacional donde se identifica el sistema de trabajo para la optimización de
ideas,
actitudes de servicio, visión compartida, principios y valores compartidos, compromiso,
disciplina,
liderazgo, entre otras.
Diseño de transformación
transformación, y éstos deberán ser de acuerdo con las necesidades del mercado
objetivo.