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Caracas, Noviembre del 2018

Universidad Central de Venezuela

2do Año de Trabajo Social

Orianna Márquez

Taller de Proyectos / Prof: Lenny Lurua

Ensayo del Libro: “El Mundo de Sofía” en la Edad Antigua

Cuando nos sumergimos en esta grandiosa historia del Mundo de Sofía nos podremos dar cuenta
de cómo poco a poco diferentes historiadores han marcado una diferencia en el mundo. Un día
empezaron a cuestionarse interrogantes que quizás otras personas no le surgían o que
simplemente no se atrevieron a indagar y a tratar de dar una respuesta a estas interrogantes.

Así, para empezar a relatar de estos historiadores, el libro comienza con la presencia de una chica
común de familia que un día cualquiera, en medio de varios acontecimientos que le suceden
comienza a preguntarse: ¿Quién soy? De ese momento en adelante se comienza a relatar la
filosofía por el paso de la Edad Antigua.

Los filósofos afirmaron que hay una respuesta para nuestra vida, a quién somos y por qué vivimos.
Lo único que se necesita para ser un buen filósofo es la capacidad de asombro, le decían a Sofía,
aunque le puntualizan que a pesar de que las cuestiones filosóficas conciernen a todo el mundo,
no todo el mundo se convierte en filósofo. Para los filósofos, a pesar de llegar a descubrir algo,
seguirán pensando que el mundo es un ser misterioso en los que todavía hay más cosas que
descubrir y que ellos poseen la capacidad de susceptibilidad para intentar resolver estos
acontecimientos.

El descubrir y el surgir de la filosofía con el tiempo fue variando. Al principio solo se planteaba
como una creencia religiosa, pero esto fue cambiando en Grecia alrededor del año 600 antes de
Cristo, como una creencia a través de mitos. Durante estos mitos encontramos a dioses como:
Zeus y Apolo, Hera y Atenea, entre otros. Homero fue uno de los primeros que plasmo sus ideas
acerca de la filosofía, esto siendo alrededor del año 700 A.C, tema que fue discutido luego por
otros filósofos griegos. Se llegó a pensar que los mitos no eran más que imaginaciones humanas. El
objetivo de estos primeros filósofos fue explicar los procesos de la naturaleza y acordaban que
había una materia primaria que explicaba el nacimiento de las cosas.

Relatando un poco sobre los tres filósofos de Mileto, se comienza con Tales, el cual descubrió
varios sucesos y el que decía que el agua es el origen de todas las cosas y que todo está lleno de
dioses. Por su parte, Anaximandro, el otro filósofo, decía que el mundo es uno de los muchos
mundos que nacen y perecen en lo que él llamo: “lo indefinido”. El tercer filósofo llamado
Anaxímenes, decía, que el origen de todo era el aire o la niebla, es decir, tanto la tierra como el
agua y el fuego tenía su origen en el aire (aprox. 570-526 A.C). En sí, los tres filósofos estaban de
acuerdo en que tenía que haber una materia primaria de la que estaba hecho todo lo demás que
ellos conocían para ese entonces.

Parménides, otro filósofo griego pensaba igual que ellos, solo que él logró indagar más allá y
afirmaba que su obligación era descubrir toda clase de ilusiones, a esto se le llamaba racionalismo.
Heráclito, contemporáneo con Parménides, parecía que tenía más fe que este, diciendo que todo
fluye y que se está en constante movimiento y que Dios se muestra en ese “constante
movimiento” llamándolo: logos, es decir, razón.

Como se puede ver, dos filósofos que mantienen opiniones totalmente diferentes pero que aun así
se mantenían firmes. Empédocles, viendo la situación, decía que ambos tenían razón pero que se
equivocaban en una cosa, y era en que ambos decían que había un solo elemento, opinión que él
rechazaba y que afirmaba: “la naturaleza tiene en total cuatro elementos o raíces, llamados: tierra,
aire, fuego y agua.” Es entonces por estos cambios que existen cambios en la naturaleza.

Resumiendo ahora un poco de Anaxágoras, él opinaba que la naturaleza está hecha de muchas
piezas minúsculas, invisibles para el ojo, mientras que Demócrito relataba que todo tenía que
estar construido por unas piececitas pequeñas (átomos) e invisibles eternas e inalterables;
posición que hoy día puede decirse que es así, ya que la ciencia lo ha demostrado. Demócrito
entonces puso fin a la filosofía griega de la naturaleza.

Todos estos filósofos aportaron grandes ideas y los llamaron presocráticos, pero se decía que hubo
tres grandes filósofos que marcaron la antigüedad en la civilización europea, ellos se llamaron:
Sócrates, Platón y Aristóteles.

Sócrates (470-399 A.C) se interesó más por ayudar a los demás que por la propia rama de la
filosofía; él era considerado un sofista, es decir, una persona que con lo poco que sabía, estudiaba
e investigaba, y su gran opinión fue que solo sabía una cosa y era que no sabía nada y que en esa
base se encontraba la razón del hombre.

Platón (427-347 A.C) le llamaba la atención lo que es eterno e inmutable en la naturaleza y en la


moral y la sociedad, que para él, son una sola cosa, intentando captar una propia realidad.
También hablaba de filosofía de estado, que se caracterizaba por el racionalismo, es decir, que un
Estado sea gobernado por la razón.

Aristóteles (384-322 A.C) mantenía que las formas de las cosas son como las cualidades específicas
de las cosas, su mayor grado de realidad es lo que sentimos con los sentidos. Él pensaba que
nosotros poseemos pensamientos e ideas pero también una razón innata con la cual nacemos.
Aristóteles se enfocaba en los cambios que surgían en la naturaleza y que las cosas de ella
pertenecían a grupos y subgrupos. Así mismo, las cosas de la naturaleza se podían dividir en dos
grupos: los inanimados que son aquellos que no podían ser cambiados a no ser por factores
externos, y las cosas vivas que tienen posibilidad de cambiar. También creía que los movimientos
de las estrellas y los planetas son los que cursan el movimiento de la tierra. Muchas eran las ideas
y pensamientos de Aristóteles, solo por nombrar alguna de ellas en el enunciado anterior, se ve
como este personaje dejó una gran enseñanza en su larga trayectoria de vida.

Culminando con esta etapa de la Edad Antigua, a Sofía le mencionan el Helenismo, período que
duró unos 300 años. Se nombra Helenismo porque la época como la cultura que estaba en ese
momento era cuando dominaba tres reinos helénicos: Macedonia, Siria y Egipto. Para ese tiempo
se impone la cultura romana y la lengua latina que hace resaltar lo que es la Antigüedad tardía.
Antes de llegar esta época existía una cultura, religión y filosofía distinta, por lo que luego del
cambio cultural, empieza a existir una mezcla de ideas filosóficas, religiosas y científicas.

Los historiadores de Atenas fueron puente de inspiración para varias corrientes filosóficas del
momento, que hacían que nuevas formas de pensar no eran más si no gran parte de las ideas
planteadas desde tiempos atrás, en este caso, ideas tomadas por Sócrates, Platón y Aristóteles.

La nueva filosofía de los helénicos era en qué consistía la verdadera felicidad y como conseguirla.
Para ello nombraron cuatros aspectos importantes considerados como corrientes filosóficas:
Cínicos, Estoicos, Epicúreos, Neoplatónicos.

Los Cínicos (400 A.C) decían que la felicidad no se encontraba en los bienes materiales y que no
había por qué preocuparse por la salud, sufrimiento o la muerte.

Los Estoicos (300 A.C) opinaban que todos los seres humanos formaban parte de la misma razón
universal o “logos”. En cambio de los cínicos, decían que la enfermedad y la muerte son procesos
naturales que nos llevan a nuestro destino y que todo ser humano debe reaccionar con
tranquilidad ante cualquier acontecimiento feliz de la vida.

Los Epicúreos (341-270 A.C) (Filósofos del jardín) sus afirmaciones eran que el resultado efectivo
de una acción fuera visto siempre con sus posibles efectos secundarios. Así mismo, si el resultado
efectivo se realiza a corto plazo, tiene que haber otro que sea más duradero y más placentero.

El Neoplatonismo (205-270 D.C) mantenía que el mundo está en tensión entre dos polos, un
extremo dado como la luz divina (Dios) y el otro extremo la oscuridad total. Todo esto quiere decir
que la oscuridad no tiene existencia ya que es una ausencia de luz y que lo único que existe es Dios
o el Uno, es decir, la luz divina, en donde a veces pueden existir débiles resplandores del Uno.

El Misticismo explica que no hay un abismo entre Dios y la creación y que sólo se tiene la
experiencia de haber sido absorbido por él. Personas que no pertenezcan a ninguna religión
relatan experiencias místicas.

Se ha relatado un breve resumen de la experiencia de Sofía por el mundo de la filosofía, esta vez
en la etapa de la Edad Antigua. A medida que ella conoce más de estas personas y de el por qué
esta en este mundo, además de preguntarse quién es, es cuando más le interesa saber sobre la
filosofía y toda su transición en la historia del universo. A pesar de aciertos y desaciertos, éxitos y
fracasos de estos grandes historiadores, Sofía no deja de sumergirse en el mundo de conocer, y en
todo el sentido de la palabra: quien es. Para ella, el tiempo transcurre, pero más aprende.

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