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EL ALMA DE LA TOGA:

“El alma de la Toga” es un libro escrito por Ángel Osorio y Gallardo, abogado y político español,
en el que se define lo que es y lo que debe ser un abogado. Este autor toma en cuenta diversos
contextos de la vida profesional del abogado, los desglosa desde el punto de vista moral y ético,
presenta ejemplos con casos concretos y da su opinión sobre cada aspecto. A continuación, se
expondrá un corto análisis sobre cada capítulo de la obra.

¿Quién es abogado?

El autor del libro nos pone a reflexionar desde el primer capitulo cuando nos cuestiona respecto a
quien es abogado. Establece que abogado no es quien se gradúa de la carrera de derecho y mucho
menos aquel que busca complacer al cliente a todas costas para obtener una retribución económica,
sino más bien debería ser el abogado esa persona que ejerce con dignidad la carrera y siempre va
en busca de la justicia y el mantenimiento del estado de derechos en el que vivimos. Comparto el
criterio del autor y puedo agregar que el hecho de estudiar cualquier carrera no te hace un
profesional, puesto que ese título denota muchísimo más que eso, entiendo que los abogados son
personas que sienten respeto por la profesión y realizan su labor de la mano de valores
fundamentales y por ende que dignifican el ejercicio de esta.

La Fuerza Interior

El capitulo nos hace entender que el abogado que precedentemente definimos necesita de una
fuerza interior, pero ¿a que se refiere el autor con esto? La fuerza interior es esa que nos impulsa
a creer en nosotros mismos y afianzar nuestro criterio y proceder en los valores que hemos ido
cultivando a lo largo de nuestra vida tanto personal como académico-profesional, puesto que hay
momentos en el ejercicio de la profesión que podemos dudar de nuestro criterio, pero siempre y
cuando el proceder esté sostenido en la ética profesional y en derecho debemos creer que hacemos
lo correcto.

La sensación de Justicia

"La Justicia no es fruto del estudio sino una sensación", nos dice Ángel Osorio. Reflexionando
sobre esta frase, entiendo que es cierto puesto que no existe un sentido tangible de la justicia, sino
más bien es un criterio abstracto que se construye en la sociedad y cada persona de igual forma
crea su propio criterio de esta, que se va afianzando a través de las vivencias y de las culturas.
Entonces ese es el momento que nos preguntamos ¿dónde está lo justo? Y vuelvo a repetir que no
hay un criterio uniforme para establecerlo, es por eso por lo que las normas se interpretan y no se
aplican exegéticamente, todo en busca de la justicia.

La moral del abogado

Ese es uno de los pilares de todas las personas aun sin importar su profesión, la moral el ese
conjunto de valores que tenemos independientemente de los demás, pero sin lugar a dudas en la
práctica de la profesión se pone muchas veces en duda cuando desistir o mantener la moral. Lo
importante aquí es no dejarse llevar del que dirán y hacer las cosas con convicción de conciencia
y valores y seguramente se estará haciendo lo correcto.

El secreto profesional

El secreto profesional es un tema muy delicado puesto que la violación de este podría devengar en
responsabilidad para el abogado que osase romperlo. Pero que pasa si el mantener ese secreto,
vulnera esa moral de la que tanto hemos hablado. Esta es quizás una de las dudas mas grandes,
pero al final si me preguntan a mí, es cierto que no se debe rebelar el secreto, pero entiendo que si
el caso va en contra de tus creencias, debes dar un paso al costado puesto que el cliente de igual
forma merece ser representado por alguien que pueda poner todo de sí.

La Chicana

Es un recurso que solo debe utilizarse cuando no hay nada mas que hacer, puesto que lo que se
pretende es alargar un proceso, para poder presentar o recabar pruebas. Es el ultimo método debido
a que un abogado que ejerza diligentemente su profesión no tendría problema con los plazos
previamente establecidos. A menos que se necesite el plazo adicional para poder llegar a la justicia
y poder encontrar la verdad.

La sensibilidad

Se necesita un balance en ser una persona fría y apática que no se conduele de la situación que
padece nuestro cliente, pero a la vez no podemos ser super emocionales que se nuble nuestra
habilidad de ver las cosas con claridad y de pensar objetivamente. Entiendo que la clave está en la
empatía, ponerse en el lugar del otro mas no dejar que la situación nos abrume. Algo muy
importante que establece el autor es dejar el triunfo en la sala de audiencias porque sacarlo de ahí
solo engrandecería el ego mas no el corazón.

El desdoblamiento Psíquico

Es poder desconectarnos y como así los establece el titulo abrir nuestra mente para poder ofrecer
un mejor servicio. Este punto va de la mano con el anterior puesto que es necesaria la empatía para
ponerse en el lugar del cliente y dejar de lado aspectos personales que no nos permitan ejercer de
forma eficiente la profesión.

Independencia

Esto lo que da a entender es que debemos trabajar por nuestro cliente y sus mejores interés y no
para el cliente, puesto que los mismos al estar dentro del problema puede que no vean tan
claramente el panorama como lo haría un abogado. Entender que siempre debemos ejercer la
profesión con respeto y no como un simple trabajo por el cual el cliente paga y por ende espera
determinado resultado a capa y espada.

El trabajo

Cada persona como esta sustentada en su moral, tiene forma de trabajo diferente y procederes
diferentes y esto no quiere decir que un proceder sea el correcto sobre el otro, es por esto que se
entiende como una conducta que se aleja de la ética, el criticar el trabajo del colega aun a sabiendas
de que no es el proceder correcto. Uno como profesional debe velar por ejercer su trabajo apegado
a los estándares éticos y a la propia moral, hacer lo mejor sin desmeritar el trabajo del otro.

La palabra

Partiendo de la frase que dice que lo mas valioso que tiene todo ser humano es su palabra, cuando
hablamos del abogado esto n oes menos cierto, puesto que más allá de lo que está escrito, cuando
el abogado dice algo, se entiende que lo que dijo es vinculante, tiene peso y por ende credibilidad.
No vale de nada tener mucho dinero y ganar muchos casos si nadie confía en ti, tanto como
profesional asi mismo como ser humano. Por otra parte, el abogado debe saber expresar por escrito
sus palabras puesto que los documentos hablan por si solos y la dedicación que se pongan en la
realización de estos habla del profesional como tal.

El estilo forense, el arte y la abogacía, la clase y la hipérbole

Decido tratar estos capítulos juntos puesto que entiendo que guardan cierta relación.

La abogacía es un arte ya que más allá de la profesión, hay que ser oradores, escritores, explicar
en pocas palabras, sin necesidad de hacer uso de la hipérbole, convencer, persuadir y sobre todo
obtener un resultado favorable mientras se mantiene el estilo y los valores que caracterizan a la
profesión. Esto se debe realizar sin caer en practicas desleales, para evitar caer en esto, debemos
vivir en constante capacitación y práctica. Debo se igual forma mencionar la clase no se refiere a
niveles de superioridad, sino que habla de la forma en que el abogado traduce el estilo mediante el
arte y lo presenta a las personas, ya sea contraparte, cliente y/o juez.

Elogio de la cordialidad

Como personas educadas que son los abogado, los problemas siempre se dejan de lado y al
momento de dirigir la palabra, se debe mantener la cordialidad, este punto también esta relacionado
con lo tratado en la síntesis compilatoria de los capítulos descritos precedentemente.

Como se hace un despacho

Mas allá de intereses económicos y de estrategias de mercadotecnia, luego de la lectura de este


capitulo me he permitido reflexionar que, para la instauración de un despacho, es muy importante
ser cautelosos a la hora de elegir nuestros socios, puesta que seria un calvario trabajar con personas
cuya filosofía de trabajo difiera significativamente de3e la tuya, es por eso que entiendo que se
debe velar por conformar el despacho con personas que compartan nuestros mismos ideales.

Especialistas

Anteriormente se entendía que el abogado tenía que ser todólogo y manejar todas las ramas del
derecho. Con el tiempo se fue destruyendo esa concepción y ahora se enfoca en la especialización
con el objetivo de poder desarrollar a cabalidad un área del derecho. Yo entiendo que no es ético
por parte de un abogado querer tomar todos los casos sin distinguir la rama, solamente para percibir
un beneficio económico, puesto que lamentablemente eso no nos permite dar lo mejor de nuestras
capacidades y por ende se refleja en los resultados del trabajo.
La abogacía y la política

la política guarda mucha relación con la política, porque desde la segunda es que se crea el
ordenamiento jurídico al que debemos estar suscritos los abogados, por eso es importante que,
aunque la práctica de la política no nos llame la atención, ajarnos de la misma, sino que mas bien
si queremos un país que siga los lineamientos de la justicia la ética nuestra participación es
fundamental.

Libertad de defensa

Las personas tienen la libertad de decidir quien quiere que los defiendan, pero es innegable el papel
del abogado en este escenario porque, el afectado por mas que tenga dominio de hecho sobre el
tema, no cuenta con un bagaje jurídico que soporte el conocimiento como los abogados y si lo
tuviese entonces no gozaría de la imparcialidad suficiente para defenderse de la mejor manera.

Los pasantes

Son el inicio de todo aspirante a ser abogado, porque es en esa etapa donde se comienza a adquirir
la practica necesaria para poder aterrizar todos los conocimientos adquiridos en el salón de clases.
Esta etapa también puede ser de vital importancia para saber si la abogacía es el camino que te
llenara de satisfacción todos los días y para saber si esta es la profesión a la que te deseas inscribir.

La defensa de los pobres

Sabemos que la justicia no tiene clase social, es por esto que la defensa de los pobres debe hacerse
con la misma euforia con la que se haría cualquier otra. Es deber del abogado, luego de que acepta
un caso, poner todo su empeño y esto va más allá que el beneficio que pueda percibir, ya que a lo
largo del libro se reitera ese equipaje de valores con el que cuenta el abogado.

La toga

La toga más allá de ser un formalismo procesal implica de igual forma sentimientos y además
distingue al portador con una profesión que pueda avalar que la lleva puesta, además de que se
presume que quien la tiene posee conocimientos en el área jurídica y que su capacidad esta
enfocada a la resolución de los problemas que de esta índole puedan surgir.
Decálogo del abogado

El autor en este capitulo enuncia lo establecido en el decálogo como una forma de dar a entender
esos deberes que en el ejercicio de nuestra profesión jamás debemos olvidar.

Para finalizar no queda mas que resaltar la importancia del libro para toda persona que ha elegido
el derecho como profesión y que espera ser llamado abogado y la importancia de aplicar todo lo
descrito puesto que esto nos diferencia de ser simplemente licenciados.

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