Las heridas que te causa quien te quiere, son preferibles a los besos engañadores de quien te odia,
El ignorante, si calla, será tenido por erudito, y pasará por sabio si no abre los labios.
Mejor son dos que uno, pues reciben mejor paga por su trabajo.
Porque si caen, el uno levantará a su compañero; ¡pero pobre es el que está solo!
1
Cuando caiga no habrá otro que lo levante.
También, si dos duermen juntos se calientan mutuamente, pero ¿cómo se calentará uno solo?
La mujer sabia construye su casa; la necia, con sus propias manos la destruye
El que cava un hoyo caerá en él, y el que hace rodar una piedra, sobre él volverá
2
Nadie tiene tanto poder como para evitar la muerte y vivir para siempre.
Mejor es el lento para la ira que el poderoso y el que domina su espíritu que el que toma una ciudad.
De nada sirven las riquezas el día de la ira, Pero la justicia libra de la muerte
3
Como anillo de oro en el hocico de un cerdo es la mujer hermosa y apartada de la razón.
Sabiduría ante todo; adquiere sabiduría; Y sobre todas tus posesiones adquiere inteligencia
Cruel es la ira e impetuoso el furor; pero ¿quién podrá sostenerse delante de la envidia?
Aún hay esperanza para todo aquél que está entre los vivos.
4
Y he visto que la sabiduría sobrepasa a la necedad, como la luz a las tinieblas.
El sabio tiene sus ojos en su cabeza, mas el necio anda en tinieblas; pero también entendí yo que
Aún en la risa, el corazón puede tener dolor y el final de la alegría puede ser la tristeza.
Cuando viene la soberbia, viene también la deshonra; mas con los humildes es la sabiduría.