UNIVERSIDAD DE CÓRDOBA
FACULTAD DE CIENCIAS AGRÍCOLAS
INGENIERÍA AGRONÓMICA
2019
MACROELEMENTOS PRIMARIOS
• NITROGENO (N)
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oscuro y la maduración se retrasa, el periodo de crecimiento puede alargarse (Navarro y
Navarro 2003).
• FOSFORO (P)
Función en la planta: El fósforo interviene en muchas de las reacciones que utilizan energía
dentro de la célula ya que forma parte integral de las moléculas que acumulan energía como
el adenosín trifosfato (ATP). Estas moléculas se forman como resultado de la fotosíntesis y
son utilizadas en la respiración de la planta. Por consiguiente, es de vital importancia para la
generación de células nuevas; por ejemplo, la producción de raíces al inicio de los ciclos
vegetativos. Compuestos análogos al ATP, como el uracilo trifosfato (UTP), guanina
trifosfato (GTP) y citosina trifosfato (CTP), se requieren en las síntesis de azúcares,
fosfolípidos y ácidos ribonucleicos (RNA). El fósforo es el responsable, además, de la
naturaleza fuertemente ácida de los ácidos nucleicos, así como de la excepcionalmente alta
concentración de cationes en las estructuras de estos ácidos (Fernández 2007).
Deficiencias y exceso: las alteraciones por la ausencia de fosforo son notables en la parte
área y en sistema radicular de la planta, los síntomas de deficiencia de este elemento se
manifiestan en las hojas que se hacen delgadas, erectas y de menor tamaño a las normales
con las nervaduras poco pronunciadas. Por la movilidad del fosforo en la planta las hojas
bajeras manifiestan primero el síntoma, además, las hojas pueden necrosarse, tomar colores
pardos rojizos y caerse precozmente.
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Las alteraciones por exceso de fosforo se observan experimentalmente solo en cultivo de
medio líquido. En ciertos suelos enriquecidos fuertemente por aportaciones masivas y
repetidas de fertilizantes fosforados solubles, son frecuentemente clorosis férricas por la
insolubilización que sufre el hierro ante dichos excesos (Navarro y Navarro 2003).
• POTASIO (K)
Función en la planta: Según Taiz y Zeiger (2006). El potasio, presente en las plantas como
catión K+, tiene un papel importante en la regulación del potencial osmótico de las células
vegetales. También es un activador de muchos enzimas implicados en la respiración y en la
fotosíntesis. Este elemento es de vital importancia para el desarrollo vegetal, ya que activa
más de sesenta enzimas. Por ello, juegan un papel vital en la síntesis de carbohidratos y
proteínas. mejora el régimen hídrico de las plantas, regula el cierre y apertura de los estomas
y aumenta su tolerancia a la sequía, heladas y salinidad. Las plantas sufren menos
enfermedades. participa en la síntesis de azúcar, almidón y proteínas (dentro de sus uniones
peptídicas). Intervienen en la fosforilación oxidativa que se reduce en las membranas de las
mitocondrias.
Dado que el potasio puede movilizarse hacia las hojas más jóvenes, estos síntomas aparecen
primero en las hojas más viejas, es decir, en las hojas maduras de la base de la planta.
También se puede producir el curvado de las hojas. Los tallos de las plantas con carencia de
potasio pueden ser delgados y débiles con entrenudos anormalmente cortos. En el maíz con
carencia de potasio, las raíces pueden aumentar la susceptibilidad a la presencia de hongos
en el suelo, y esta susceptibilidad, junto con los efectos sobre el tallo, da lugar a un aumento
en la tendencia de la planta a doblarse fácilmente hacia el suelo (encamado).
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Fitotoxicidad: Según CIAT (1981). La falta de potasio, también se puede estar ante una
situación de exceso del mismo que, como consecuencia, bloquea la absorción de otros
minerales, como puede ser el calcio, el magnesio, el manganeso, el zinc o el hierro.
Este exceso, a nivel visual, provoca que la planta tenga un color mucho más oscuro. Si en el
caso de la carencia la planta se tornaba amarillenta, en este caso se torna marrón oscuro.
Además, dará paso a otras múltiples carencias producidas, precisamente, por esa cantidad de
sobre fertilizante.
MACROELEMENTOS SECUNDARIOS
• CALCIO (Ca)
Forma de asimilación: El calcio es absorbido por la planta en forma de ión Ca2+. El calcio
presenta una alta densidad de carga neta en su superficie, lo que le permite unirse a las
moléculas de agua, es decir, como ión hidratado se absorbe con más lentitud que un catión
monovalente (Salisbury y Ross, 1994; White y Davenport, 2002), por lo cual la entrada de
Ca2+ a la célula es exclusivamente por medio de canales en la membrana. Según White (2001)
el movimiento del calcio en la raíz se da primero por vía apoplasto hasta llegar a las células
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endodermales y cuando los iones de Ca2+ no pueden superar la barrera física de la endodermis
por dicha vía, entran a las células por medio de canales que les permiten continuar el trayecto
hasta el xilema; sin embargo, la movilidad a través del simplasto sigue siendo restringida por
las concentraciones bajas de Cacit, inhibiendo así las corrientes citoplasmáticas de dicho
catión (Thuleau et al., 1998).
• MAGNESIO (Mg)
Forma de asimilación: Según Kass (1996). El magnesio, asimilable por las especies
vegetales como ion Mg+2, es un elemento sumamente móvil dentro de la planta.
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Deficiencias y excesos: Según Navarro (2003). Los síntomas más típicos aparecen en primer
lugar en las hojas, corrientemente en verano y presentan tres características generales que
permiten una identificación relativamente fácil:
• Clorosis en algunas zonas del limbo, dispuestas con bastante simetría respecto al nervio
principal, o a lo largo de los bordes. Los tejidos cloróticos se necrosan con rapidez, y ello
puede suponer la primera manifestación visible.
• Los síntomas se observan en primer lugar en las hojas más viejas, transmitiéndose
después a las más jóvenes. En ambos casos pueden aparecer en ellas coloraciones
púrpuras y brillantes. El hecho se debe a la gran movilidad que el magnesio tiene en la
planta, lo que le permite trasladarse desde los órganos adultos a los más jóvenes cuando
éstos lo requieren.
• Las hojas alteradas suelen desprenderse prematuramente, quedando solo con hojas de las
ramas.
Todos los síntomas señalados son bastante característicos. No obstante, pueden prestarse a
confusión cuando empiezan, sobre todo con las deficiencias de manganeso, hierro, cobre y
zinc. Solo la evolución posterior de las alteraciones producidas puede permitir entonces su
caracterización definitiva.
Según Moreno (2007). No existe síntomas visibles para identificar la toxicidad provocado
por una elevada disponibilidad de este elemento
• AZUFRE (S)
Función en la planta: El azufre es una parte vital de todas las proteínas de las plantas y de
ciertas hormonas de las plantas. También se usa en la formación de ciertos aceites y
compuestos volátiles que se pueden encontrar en la familia de las cebollas y ajos.
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complejos con metales pesados). El azufre (S) es un elemento esencial para el desarrollo y
mantención de las plantas (Watkinson y Kear, 1996).
MICROELEMENTOS
• HIERRO (Fe)
Forma de asimilación: el hierro puede ser absorbido por la planta mediante su sistema
radicular como Fe+2 o como quelatos de hierro. La forma Fe+3 es de menor importancia,
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debido a la pequeña solubilidad de los compuestos férricos en la mayor parte de los suelos
(Navarro y Navarro 2003).
• ZINC (Zn)
+2
Forma de asimilación: el zinc es absorbido por la planta como Zn o como quelato por
vía radicular o foliar. En ella, su movilidad no es grande, hallándose preferentemente
acumulado en los tejidos de la raíz cuando se encuentra un suministro adecuado en el suelo.
Deficiencias y exceso: los síntomas de deficiencia comienzan en las hojas jóvenes con
amarillamiento progresivo y disminución de tamaño, pueden ser estrechas y puntiagudas, en
algunos casos las hojas más jóvenes se tornan albinas. Las nervaduras permanecen verdes,
en las hojas adultas, solo en ocasiones se aprecian estas alteraciones. En general las ramas
pueden secarse desde las puntas y hay defoliación, los frutos son pequeños de baja calidad
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con perdida de color e insípidos. Las alteraciones por exceso no es fácil observarlas en
suelos alcalinos dado que el pH elevado tiende a inmovilizar el elemento, pero cuando se
trata de suelos ácidos, las hojas presentan pigmentaciones rojas en el peciolo y nervadura
acompañado de una amplia clorosis debido a un bajo contenido de hierro. Dado que el zinc
actúa como catalizador de reacciones oxidativas por cual impide la reducción del hierro y su
transporte dentro de la planta (Navarro y Navarro 2003).
• MANGANESO (Mn)
Función en la planta: Los iones manganeso (Mn2+) activan un gran número de enzimas en
las células vegetales. En concreto, descarboxilasas y deshidrogenasas, implicadas en el ciclo
de los ácidos tricarboxílicos (ciclo de Krebs), son activadas por este catión divalente. La
función mejor definida del manganeso se da en las reacciones fotosintéticas en las que se
genera oxígeno a partir de agua (Marschner 1995).
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Fitotoxicidad: Según CIAT (1981). El exceso de Mn en el suelo tiene dos efectos en la
planta:
• Por su antagonismo con el Fe, el Mn bloquea la absorción de dicho nutrimento por
la planta e induce una deficiencia de Fe.
• El manganeso absorbido por la planta se acumula en el tejido foliar, principalmente
en las hojas viejas causando toxicidad al tejido foliar, lo que se manifiesta por
manchas o puntos necróticos o de color pardo.
En algunos casos estos síntomas de toxicidad se pueden observar también en las nervaduras,
en el envés de los foliolos.
• COBRE (Cu)
Funciones en la planta: el cobre hace parte de enzimas ya sea como activador o formando
parte de ellas como grupo prostético. El cobre hace parte de enzimas como son fenolasa,
laccasa y acido aspártico oxidasa, otras son la diamina oxidasa, citocromo oxidasa (también
compuesta de hierro y cobre que actúan como transportadores de electrones), superóxido
dismutasa y plastocianina. Todas estas enzimas son de importancia en las reacciones redox
como la fenolasa que cataliza la reacción de hidroxilación de ciertos monofenoles a o-
difenoles, y la oxidación de estos a o-quinonas (Navarro y Navarro 2003).
Forma de asimilación: este elemento es absorbido por la planta como Cu+2 o como
complejo orgánico (Cu-EDTA, por ejemplo), por vía radicular o foliar. No es muy móvil
aunque puede desplazarse en cierta proporción de las hojas viejas a las jóvenes. La movilidad
o traslado depende del estado en que se encuentra y del grado de deficiencia que la planta
presente. En algunos casos es prácticamente inmóvil (Navarro y Navarro 2003).
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que pierden vigor, adquieren color oscuro y a engrosarse, sin desarrollo. Junto a estas
alteraciones se puede presentar deficiencias de hierro y la captación de fosforo se reduce
notablemente por el alto contenido de cobre, y la toxicidad por cobre aumenta en los suelos
ácidos.
• CLORO (Cl)
Forma de asimilación: el cloro es absorbido por la planta bajo la forma Cl-, no solo por vía
radicular sino también por sus partes aéreas, sus requerimientos fisiológicos son bajos del
orden de una 5 ppm.
Deficiencias y excesos: las deficiencias por cloro pueden presentar síntomas como el
marchitamiento de la planta y clorosis foliar junto aun bronceado o necrosis de ciertas zonas
y disminución del tamaño y en casos agudos no hay producción de frutos. La toxicidad se
manifiesta por un adelgazamiento de las hojas con tendencia a enrollarse. Posteriormente
surgen amplias neurosis que van extendiéndose y finalmente se secan.
• BORO (B)
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Adicionalmente, el boro afecta las actividades de algunas enzimas, tiene la capacidad de
integrarse a varios compuestos polihidróxicos, aumenta la permeabilidad en las membranas
y, por ende, facilita el transporte de carbohidratos, participa en la síntesis de la lignina y en
otras reacciones, es esencial para la división celular, está asociado a la absorción del calcio y
su empleo por las plantas, y regula la relación potasio/calcio en las especies vegetales
(Moreno, 2007).
Deficiencias: Según Taiz y Zeiger (2006). Las plantas con carencias de boro pueden exhibir
una gran variedad de síntomas, según las especies y la edad de las plantas.
Un síntoma característico de la carencia de boro es la necrosis negra en las hojas jóvenes y
en las yemas terminales. La necrosis de las hojas jóvenes se produce sobre todo en la base
del limbo de la hoja. Los tallos pueden ser anormalmente rígidos y quebradizos. También se
puede perder la dominancia apical, de modo que la planta llega a estar muy ramificada; sin
embargo, los ápices apicales de las ramas pueden presentar pronto síntomas de necrosis
debido a la inhibición de la división celular. Estructuras como el fruto, las raíces carnosas y
los tubérculos pueden presentar necrosis o anormalidades relacionadas con la ruptura de los
tejidos internos.
Fitotoxicidad: La toxicidad del boro para las plantas se demostró antes que su carácter de
nutriente esencial. Los compuestos de boro son lo bastante soluble para intoxicar el agua para
las plantas. Por ello, el contenido en boro es uno de los factores que se consideran para
determinar la calidad de agua de riego. El reconocimiento del boro permitió identificar varios
problemas, que habían sido considerados como enfermedades no parasitarias, con
deficiencias de este micronutriente. Así sucedió con la enfermedad de las puntas del tabaco
y la pudrición del corazón (Thompson y Troeh, 2002).
• MOLIBDENO (Mo)
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ayuda a la reducción del nitrógeno nítrico absorbido por la planta en la forma amónica. En el
proceso de reducción el molibdeno actúa como cofactor, es un donante directo de electrones
(Navarro y Navarro 2003).
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REFERENCIAS
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como complemento de la unidad audiotuturial sobre el mismo tema. Contenido
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Marschner, H. (1986). Mineral nutrition of higher plants. Academic Press, Londres. pp. 7-
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Thuleau, P., J.I. Schroeder y R. Ranjeva. (1998). Recent advances in the regulation of plant
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White, P.J. (2001). The pathways of calcium movement to the xylem. J. Expl. Bot. 52(358),
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White, P.J. y R.J. Davenport. (2002). The voltage- independent cation channel in the plasma
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