Seis meses en Europa, seis meses en Estados Unidos, la vida de este indio
decididamente moderno, aunque auténtico, se aproxima a veces a la hazaña de Maratón; su
objetivo: reventar las “ampollas” que conforman los países europeos, y que sus viejas
tradiciones les acerquen. Con él, compartiréis la más franca jovialidad, así como la más
intensa emoción, y si preguntáis a esta fuerza de la naturaleza: “¿no echas de menos tu
país?”, quizá se ría, con una risa enorme, respondiendo que “la Tierra es la misma por todas
partes”, pero si lo observáis con atención advertiréis que una incontrolable nostalgia
atraviesa su mirada, presa todavía del sol que abrasa las Grandes Planicies.
Annie Pazzogna
CIERVO PATICOJO
Mientras mi padre vivía no tuve ansía de enseñar. Estaba demasiado obsesionado por
aprovechar mi tiempo, y sabía que él se ocupaba convenientemente de las Danzas del Sol y
de las otras ceremonias. Yo trabajaba en Hollywood en las películas y estaba muy atareado.
La muerte de mi padre me pilló totalmente por sorpresa. No estaba preparado para ello,
nunca había pensado que partiría algún día.
Recibí la Pipa Sagrada y la cofia de plumas. Fue muy difícil aceptar esta nueva vida.
Siempre había vivido espiritualmente, pero al mismo tiempo me había divertido bien
durante todo este período, había abusado del alcohol y de las drogas, y había estado en
prisión. Todas estas experiencias habías sido necesarias para que pudiera enseñar a
continuación. Debo precisar que nunca he hecho mal ni herido a nadie para ir a prisión. En
el sistema americano vas a prisión si careces de dinero; es así que los mayores criminales
pasean por la calle en completa libertad.
De golpe debía ocupar el lugar de mi padre, yo era Cuervo Paticojo (Lame Deer),
pues Cuervo Paticojo no muere nunca. Durante un año rehusé creerlo; mi familia, mis
amigos, no dejaban de telefonearme, de escribirme para recordarme quién era. Tenía todas
las enseñanzas de mi padre, pero tenía también las de mi abuelo materno, debía pues
llamarme Oso Rápido (Quick Bear) y no Ciervo Paticojo. Necesité un año para aceptarlo.
Cuando volví a mi hogar todos los miembros de mi familia vinieron a saludarme, lloraban y
me llamaban Tahca Ushte. Por todas partes se me reconocía como Tahca Ushte. Yo era mi
padre; mis actos, mi comportamiento eran los de mi padre. No podía imaginarme como ese
viejo buenazo de andares de apoyo, ese payaso de rodeo. Pero mi padre había dicho: “tu
eres Ciervo Paticojo. El mundo no puede existir sin Ciervo Paticojo”. fue muy difícil para
mi comprender quién era yo, quién debía ser y qué vida debía llevar.
QUIERO HABLAR…
Cada parte de nuestro cuerpo, hoy en día, viene de los favores de nuestra Madre la
Tierra. Esta mañana, al desayunar, nos hemos nutrido de nuestra Madre a fin de vivir cada
día de nuestra vida.
Pero, ¿le damos las gracias a nuestra Madre la Tierra, la que nos de la vida? El indio
del pasado lo hacía. Cuando cazaba al bisonte a través de la pradera le decía: “perdóname
hermano, pero mi pueblo tiene que vivir”. Tras haberlo matado y despedazado tomaba el
cráneo del animal y lo colocaba hacia el Sur, en ofrenda. Sabía que todo viene de nuestra
Madre la Tierra. Nunca tomaba más de lo que necesitaba. Hoy en día estas enseñanzas han
desaparecido.
La Tierra es nuestra verdadera Madre, pues todo nos viene de Ella. Ella cuida de
nosotros cada día. Es tarde, pero todavía es tiempo de redescubrir y hacer revivir los
antiguos valores de respeto por nuestra Madre.
Habláis de ecología. Pensamos que la Tierra nuestra Madre merece un término más
profundo. Si queremos sobrevivir debemos respetarla. Ellas es muy bella, pero ya nos
muestra a través de ciertos signos que nos castigará si no la respetamos más. Debemos
recordar que Ella fue colocada en este universo por Aquél que es todopoderoso, el Gran
Espíritu, Wakan Tanka, Aquél al que llamáis Dios.
Hace algunos cientos de años vivía sobre la tierra de América el pueblo indio, que
respetaba este sistema de valores. Ello le permitió vivir sin tener que emigrar; a la inversa,
su hermano el hombre blanco tuvo que abandonar Europa, pues había desarrollado un
sistema completamente diferente al de los indios.
Las medidas por el “carbono 14” dicen que estábamos allí hace más de 50 000 años.
Se hemos emigrado, fue a causa de un fenómeno natural, y no por culpa de un sistema
social que propició que algunos ricos, que controlaban la sociedad. Obligaron a los más
pobres de Europa a emigrar a América desde comienzos del siglo XVI.
Nosotros, los indios de Norteamérica, teníamos una forma de vida que nos permitía
existir simplemente con la belleza de un entorno natural. Las tribus indias tenían en común
su sistema de valores y su espiritualidad. Esta ausencia de animosidad preserva la belleza
natural de la que el hombre tiene tanta necesidad en la hora actual.
Nuestros cuatro mandamientos sagrados dados por el Gran Espíritu son: respeto a
nuestra Madre la Tierra, respeto al Gran Espíritu, respeto al hombre (somos y
continuaremos siendo un pueblo sin prejuicios), respeto a la libertad individual en tanto que
no amenace al pueblo a la tribu de nuestra Madre Tierra,
El rojo simboliza el Norte. Del Norte vendrá el viento cambiante, vendrá el invierno
con la nieve que purificará a nuestra Madre la Tierra, y que la dormirá con el propósito de
que repose y tenga energía para dar la belleza y los dones de la primavera. Durante las
largas tardes de invierno, creamos nuestro arte. El Águila Manchada observa.
El amarillo simboliza el Este. Del Este vendrá un día nuevo de conocimiento, una
nueva comprensión para mejorar el futuro. El Picamaderos de cabeza roja observa.
El blanco simboliza el Sur. Del Sur vienen los vientos calientes que hacen que nuestra
Madre la Tierra dé sus frutos, las plantas, a fin de que sobrevivamos. Damos las gracias al
mundo de los Espíritus. El Águila Dorada observa.
Todo lo bueno viene de estas cuatro direcciones sagradas. Los cuatro colores sagrados
representan también las cuatro razas de hombres. No podemos ser un pueblo con prejuicios,
pues todos los hombres son iguales, tienen la misma Madre, la Tierra, eres mi hermano
Negro, eres mi hermana Blanca. Sois mis hermanos y hermanas Amarillos. Sois mi
hermano y mi hermana Blancos.
El que esté llenó de prejuicios y odie a otro a causa del color de su piel detesta lo que
el Gran Espíritu ha creado. Odia lo que es sagrado y será castigado, incluso en esta vida.
Creemos que el hombre rojo fue colocado en América por el Gran Espíritu y el
hombre blanco en Europa, el hombre negro en África, el hombre amarillo en Asia. ¿Y el
hombre marrón? Nace de los cuatro colores sagrados entremezclados. Observad vuestra
Madre la Tierra. También ella es marrón, pues las cuatro direcciones se reunieron cuando
su creación.
No creemos que controléis los caminos que conducen al mundo espiritual. Creemos
que el Gran Espíritu ama a todos sus hijos por igual, aunque a veces sea importunado por
quienes violan a su Madre la Tierra, tienen como divinidad a su posición material, y
esclavizan a sus hermanos a fin de poseer sus riquezas.
Pienso que el hombre blanco se ha vuelto tan ávido que ha destruido enormemente.
Creo también que el hombre blanco es bueno en este mundo. Tiene su lado bueno y su lado
malo. Los buenos valores del camino del hombre blanco los guardaré. El hecho de que
podamos encontrarnos en cualquier lugar del mundo e intercambiar ideas, el hecho de que
no tengamos hambre o sed, el hecho de que podamos hablar la misma lengua, el hecho de
que podamos oírnos a millares de kilómetros, me muestra la sabiduría de mi hermano
blanco. Guardaré este lado. Pero, mi hermano blanco, debes dejar de vivir en este
materialismo excesivo. Guarda los objetos de los que tienes necesidad para vivir. Sé
alguien que comparte. Sé generoso. Ten más respeto por las tradiciones familiares, por la
familia, que no se reduce al padre y la madre, los hijos y las hijas, sino que se extiende a los
abuelos, los tíos y tías, y hasta al mundo de los animales, tus hermanos, hasta nuestra
Madre la Tierra y nuestro Padre el Cielo, y a los que están por encima, Tunkasila, el
Abuelo, Wakan Tanka, el Gran Espíritu. Son los mismos. Cuando oramos directamente a
Dios decimos Tunkasila, pues nos consideramos como sus nietos. La Tierra es nuestra
Madre, tal fue la intención del Creador. Es por ello que hemos respetado y preservado
nuestro entorno durante tanto tiempo, siempre con el pensamiento de que la Tierra es un ser
sagrado, que todo en este mundo es sagrado y no debe ser violado, que debemos compartir
y ser generosos unos con los otros.
Cuando enseñamos las viejas tradiciones debemos respetar y comprendernos los unos
a los otros. No estamos para controlar los caminos que conducen al mundo espiritual, sino
sólo para haceros saber que vuestra Madre la Tierra debe ser la primera en vuestros
pensamientos.
Cuando un indio ora lo hace por quienes aún no han nacido, las generaciones futuras,
a fin de que el pueblo viva. Ora por los jóvenes, a fin de que escuchen a los antiguos, los
respeten y aprendan a amar a los demás. Oran por los viejos, a fin de que recuerden y lo
jóvenes sepan; sus sueños y visiones deben ser transmitidas a sus hijos y nietos. Oran por el
mundo animal, por nuestros hermanos de cuatro patas, los de dos patas, los pájaros, los que
reptan, los que nadan. Ora por el fuego, el sol, a fin dé que su energía a la Tierra, para un
mejor futuro. Ora por el agua, para que no se vea ensuciada. Ora por el aire, para que se vea
polucionado. Ora finalmente por la Tierra.
Si aprendemos a respetar a nuestra Madre la Tierra, controlando las técnicas que
hemos inventado, viviremos mejor.
A causa de todo ello, tenemos el sentimiento de que la tierra de Europa es una tierra
virgen que no ha sido utilizada como debería haberlo sido desde hace 2 000 años. Ha sido
utilizada mal a sabiendas, despreciada. Los hombres han luchado, se ha vertido sangre, y ha
vuelto a devenir virgen, una tierra donde debemos reavivar las enseñanzas espirituales, que
no son las enseñanzas religiosas, y enseñar de nuevo a los hombres el sentido de la oración
con el fin de que puedan orar como deseen. Para el indio el “hombre médico” no controla el
comino que conduce al mundo espiritual. Es únicamente el hombre quien por la oración
encontrará su propio camino. Ningún sacerdote, ningún lama, ningún “hombre médico”
controla el camino. He ahí el trabajo que os proponemos: enseñaros para que podáis de
nuevo identificaros con la Tierra de la que habéis salido. No tenéis necesidad de atravesar
fronteras, no de correr al otro extremo del mundo. Observad aquí, sobre vuestra propia
tierra; esta Tierra es sagrada. Sin embargo, es verdad que para que vosotros, los europeos,
podáis llevar acabo este trabajo re reconexión con vuestra Tierra debéis escuchar todas las
enseñanzas del mundo entero. Cuando hayáis reunido toda esta información podréis
colocaros en el camino y retornar a la Tierra.
Hace algunos años, cuando íbamos a orar bajo las tipi, oímos rascar sobre la tela. Eran
jóvenes europeos. Les invitamos a unirse a nuestra oración, lo que hicieron. Buscaban su
vía, pues mamá y papá, ocupados en trabajar uno en la fábrica, el otro en la escuela, habían
olvidado enseñarles el camino espiritual. Los habían confiado al catequista, que los había
adoctrinado. Ahora bien, la enseñanza es a menudo negativa. Por ejemplo, se os dice que
Dios ha creado la Tierra en seis días y que ha descansado el séptimo. Es un punto de vista
muy negativo, y si verdaderamente es así pensamos que nuestro Dios descansa todavía y es
muy perezoso. Nuestra enseñanza nos dice que el Creador no descansa nunca, y que enseña
cada día. Es tiempo de que despertéis a vuestro Dios para que os enseñe de nuevo.
El pueblo celta, que conocía las enseñanzas de las plantas, de las piedras y de la
astrología, fue el primero en sufrir la opresión de la religión. Las religiones del mundo han
llegado incluso a abusar de los solsticios de invierno y verano, y de los equinoccios de
primavera y otoño. La religión cristiana ha situado el nacimiento de Jesucristo en el
solsticio de invierno, constituyendo la fiesta de Navidad. Muchos de entre nosotros saben y
comprenden que Jesucristo nació en primavera, y que la navidad es una tergiversación de la
enseñanza de este hombre. Esto constituye un perfecto abuso del solsticio de invierno, que
era sagrado para los celtas en los tiempos antiguos, y que muchos continúan celebrando
como tal hoy en día. Para nosotros este día es uno de los más espirituales del año;
celebramos el solsticio durante cuatro días. Ayunamos los tres primeros días; el cuarto, el
24 de diciembre, es día de fiesta. El alimento que ingerimos ese día está consagrado a todo
lo que ha sucedido durante el año. La fiesta cristiana esta deformada, pues ya no comprende
esto y los niños mueren de hambre y de sed, los ancianos son enviados a los hospitales y
otros a los hospitales psiquiátricos. Entre nosotros no hay hospitales psiquiátricos, mientras
que en Europa los hay por todas partes. Cuando, en vuestro sistema, un hombre se agarra a
un árbol y ora le colocáis en un hospital psiquiátrico, considerando que los únicos lugares
de oración son las iglesias. Ahora también nosotros tenemos que vivir en este sistema. Para
cambiarlo hay que cambiar a los psiquiatras, los psicólogos, los analistas. Han estudiado en
los libros, de Platón a Jung y, saturados de lo que dicen, controlan muchos
comportamientos considerándolos como desórdenes, mientras que no son sino
manifestaciones naturales del orden humano. En tanto que hombres médico indios nos
sentimos concernidos, y vamos a compartir nuestras enseñanzas con vosotros a fin de que
el sistema se pueda transformar.
Debéis igualmente comprender que ahora estamos tan educados como vosotros.
Tenemos la misma vida que la vuestra. Poseo una bella casa, una televisión, una cafetera
eléctrica. Tengo todo lo moderno, pero la diferencia entre vosotros y yo es que puedo partir
a la montaña y sobrevivir solo. Sé matar una vaca, despedazarla, orar y utilizar su carne,
mientras que vosotros vais al supermercado a comprar una carne que a veces tiene varios
años y que ha sido coloreada de rojo a fin de poderla vender. La coméis y os hace daño en
el estómago. Ya no sabéis comprar vuestro alimento, vuestras legumbres, y consumís
alimentos artificiales. Si no tenéis cuidad vuestros nietos se alimentarán con dos píldoras
por la mañana, y la industria química tomará el lugar de la agricultura. Vivimos hoy en día
en una situación muy peligrosa. En otro plano, aquí en Europa, la situación del ser humano
se halla además agravada por la amenaza nuclear permanente.
Es preciso volver a la realidad, y ver que el indio de hoy en día vive como el hombre
occidental. Vivís en el mundo de Mickey Mouse, por eso os gustaría ver al indio viviendo
todavía bajo la tipi, recogiendo su leña en el bosque. Veis al indio a través de vuestra
imaginación, el indio glorioso, cabalgando en su caballo blanco, enarbolando un suntuoso
penacho de plumas de águila. En América mi pueblo fue grande en una cierta época, pero
este pueblo ya no existe, forma ahora parte de la sociedad dominante. Como el nuestro,
vuestro pueblo morirá un día, pues el Creador así lo ha previsto. Algún otro tomará vuestro
lugar, esperamos que estas gentes no sean humanos. Me gustaría bastante que estos seres
vinieran de otro planeta, hombres verdes quizá. Me agradaría mucho eso, pues entonces el
Creador estaría en condiciones de hacer alguna cosa extraordinaria. Pero los hombres
continúan luchando, y ello prueba que esta Tierra está habitada por seres primitivos. Ello no
nos deja ninguna oportunidad de recibir la vivita de seres de las otras dimensiones, y de
poder hablar con ellos a un mismo nivel de comprensión, de nuestras ciencias y de nuestros
sistemas de educación respectivos. Estos seres de las otras dimensiones vienen, constatan
que todavía nos matamos entre nosotros y nos consideran como seres primitivos. Esta es la
forma en que nosotros, los indios, consideramos a los occidentales. El occidental ha perdido
el control de su propia invención: la civilización. Es ahora su invención quien le controla,
de la misma manera que deja a su gobierno controlar y dirigir su vida de ser humano. El
amor por los demás, el amor por vuestros hijos, significan mucho más que todas las
tecnologías, todas las ciencias y todas las religiones. La libertad reside en el hecho de
poder orar a vuestra propia manera. El simple hecho de ver el amor que tenéis a vuestros
hijos me muestra que las enseñanzas espirituales vuelven. Del mismo modo. El hecho de
me escuchéis, no porque yo sea indio sino porque buscáis vuestro camino, me muestra que
la situación actual os preocupa.
Cuando vamos al bosque con nuestros hijos no les enseñamos a contar los árboles,
sino a sentirlos, a reconocer las diferentes esencias que brotan en este lugar, a ver si los
árboles han sido plantados por el hombre. Observad los árboles de los Vasgos, de Colmar al
Rhin, todos están en hilera, pues han sido plantados por el hombre. Han sido aserrados de
tal forma que se han vuelto enclenques y no crecen sino en altura. Nos darían buenas
perchas para las tipi; es el único provecho que se podría sacar de ellos. Lo plantamos todo
de la forma más rápida y práctica para nosotros, pues ya no tenemos paciencia. Es preciso
comprender que la Tierra nos destruirá antes que nosotros la destruyamos a ella. La Tierra
tiene mucho poder.
La mayor parte de los especialistas del entorno, los biólogos, se imaginan que
conocen a las plantas, pero en verdad no tienen esta conciencia de la planta en cuanto que
ser vivo. Lo mismo ocurre con toda cosa creada por el Creador. Toda cosa es un ser vivo.
El hombre occidental yo no tiene en sentido de la Tierra, ya no sabe plantar sus legumbres;
ya no sabe cómo sobrevivir sobre la Tierra, a la que ha polucionado completamente,
mientras despliega grandes esfuerzos por conquistar los otros planetas. Cuando el hombre
ya no sabe cómo sobrevivir en algún lugar busca marcharse a otro sitio. Que la Tierra
vuelva a los indios; sabrán cuidar de ella.
No busquéis en otra parte. Ved lo que ha pasado en América; han llegado los
europeos y han debido adaptarse a otra vida; al hacer esto han olvidado completamente sus
raíces y su identidad.
Cuando busquéis una planta como medicina debéis orar delante de ella para darle su
vida. Si no recibís respuesta, si no pasa alguna corriente, di a otra, orad, y si sentís una
aquiescencia, si os sentís bien, ello significa que esta planta quiere dar su vida para
ayudaros. Entonces podéis utilizarla.
Las plantas están vivas. Todo lo que ha sido creado está vivo: las piedras, el viento,
los árboles, los peces, los animales… Cuando un indio mataba un bisonte le decía:
“perdóname, hermano, pero mi pueblo debe vivir”. Tras haberlo matado tomaba el cráneo
del bisonte, lo colocaba de cara al sur, cara al mundo espiritual, para agradecerle que
hubiera dado su vida. Actuamos así con las plantas.
El mundo, la Tierra, ha dado a cada uno un objetivo en su vida. No toméis las plantas
cuando ellas dan sus granos. Hay siempre un macho y una hembra en cada especie. No hay
excepción. La hembra es siempre la que da los granos. Respetad a la que dan las simientes,
a las que dan su vida.
Los indios actuaban así con los bisontes, escogían a los más viejos, los que ya no
servían al grupo, y los más jóvenes ocupaban su lugar. Lo mismo ocurre con el águila.
Cuando sus plumas caen otras nuevas le brotan. Igual pasa con el árbol cuando pierde sus
hojas; cuando las da, otras nuevas crecen.
¿Sabéis que el 70% de vuestra alimentación proviene del pueblo indio: el tomate, el
maíz, la calabaza, la grosella, la alubia, el girasol…? Nosotros éramos sus guardianes y
esperábamos ofreciéndolos el día en que llegaseis a nosotros hambrientos. Vosotros sois
igualmente sus guardianes en el presente. Aprended a respetar esta alimentación, a rezar
con ella, y dad gracias a nuestra Madre la Tierra.
Nuestra lengua es una lengua sagrada que carece de términos para el indio y el
prejuicio. ¿Cómo podríamos ser racistas si el término racismo no existe en nuestra lengua?
No tenemos ningún discurso guerrero, pese a que la televisión y el cine presenten siempre
al pueblo lakota como un pueblo guerrero. También vosotros os volveríais sin duda
guerreros para defender la vida de vuestros hijos, si no os quedase ya otra solución.
Cuando un Lakota entra en combate hace todo lo posible por ganar; o vence o muere. Lo
mismo ha sucedido con todas las acciones que hemos llevado hasta la justicia; las hemos
ganado todas, fueran éstas para defender nuestras tierras o nuestro modo de educación. En
1979 fue mi pueblo el que negoció la ley de libertad de las religiones amerindias. Se trata
de la ley 95.341, aprobada unánimemente por el Consejo, esta ley significa que sólo las
religiones amerindias son reconocidas en los Estados Unidos en tanto que religiones u
organizaciones espirituales. Todas las otras iglesias, Católica, Protestante, Mormona,
Luterana, Metodista, etc., son únicamente reconocidas como organizaciones de fines no
lucrativos. Estas organizaciones no pagan impuestos; es por ello sin duda que se cuentan
500 iglesias diferentes en Estados Unidos. Es un modo rápido y eficaz de ganar mucho
dinero.
En las reservas, cada tribu tiene su propia organización de fines no lucrativos, los que
nos permite hacer la petición a importantes sociedades europeas para que vengan a
instalarse con nosotros, garantizándolas una total exención de impuestos durante un período
de sesenta años. Numerosas son las críticas negativas que a menudo se emiten contra el
gobierno americano, pero hay que reconocer los progresos, como el de dejar a estas
sociedades venir a las reservas, lo que ofrece empleos a mi pueblo. Como representante de
mi tribu y de los Sioux de Rosebud, busco compañías industriales no polucionantes y no
químicas que puedan sentirse interesadas por esta proposición.
Para ser un hombre espiritual es preciso pertenecer a un linaje, lo que significa que
vuestro abuelo y todos vuestros ancestros eran hombres espirituales. El niño nace en una
familia de hombres médico reconocidos y respetados por la tribu. A veces el linaje no es
perpetuado, pues la enseñanza no es transmitida de un abuelo a su nieto. Tras algunas
generaciones toda traza exterior de este linaje ha desaparecido. Sin embargo, aún existe y
permanece visible a los ojos de los otros hombres espirituales. Un hombre espiritual de un
mundo completamente diferente se presenta, comprende que tal persona desciende de un
antiguo linaje; lo conduce a la Tienda, le enseña lo que está en su poder y lo deja entregado
a su trabajo que es el de enseñar a su vez. La electricidad circula de nuevo a lo largo de este
linaje. Es un resurgir. La comprensión espiritual de un linaje no desaparece nunca. Cuando
el linaje es perpetuado, son los abuelos quienes escogerán a los niños. Los hacen en
función de sus sentimientos, no es una cuestión de edad. El niño es entonces criado para ser
hombre médico. Aprende a respetar, aprende las ceremonias. A las 4h 30m de cada mañana
el abuelo sale y ofrece un canto al Creador a la intención de su nieto, a fin de que el poder
le sea transmitido. La abuela se asocia a esta ofrenda a su manera, con hierbas y plantas.
Durante los años de formación, el abuelo enseña a su nieto la oración y el respeto, y le
prepara para su Búsqueda de la Visión. A la edad de doce años o trece años, a medio
camino de convertirse en hombre, el joven es conducido a una montaña.
Durante los cuatro meses que siguen a su Búsqueda, el joven guarda su Visión en su
corazón, y se le ve vivir conforme a esta visión. A la cuarta Luna relata sus sueños y su
Visión al Waayatan. Waayatan es el hombre de las visiones y de los sueños, que es lo que
soy yo.
Puedo decir vuestro futuro escuchando vuestros sueños y vuestras visiones. Puedo
igualmente ver cuánto tiempo os queda de vida, pero no puedo decírselo, pues sería
infringir una ley natural. Cuando mi padre todavía vivía yo quería enseñar, pues no podía
mirar a la gente. Era demasiado duro ver que ala mañana siguiente tal o cual persona iba a
morir. Pues, efectivamente, la persona moría, y yo no podía dejar de preguntarme si no
tendría alguna parte de responsabilidad por su muerte.
Se convierte uno en hombre médico, por tanto, a los trece o catorce años, gracias a un
poder otorgado por el Creador. Moisés habría sido buen indio, un hombre médico. Fue a
una montaña para recibir los mandamientos del Creador, de los que esta civilización ha
abusado. Estos mandamientos han venido en su momento adecuado. Nada ha cambiado en
su definición de la Tierra. Sin embargo, ya no vivimos en tiempos de Moisés. Los Diez
Mandamientos son una base, otras enseñanzas han venido posteriormente. Cada profeta
viene en su momento adecuado. Para cada generación existe un profeta. Ello significa que
hoy en día hay un profeta que vive entre nosotros. Este profeta no sabe todavía quién es él
mismo o ella misma. El o ella tendrá su revelación a finales de los años 80. el Creador le
llamará. Todas las enseñanzas de la Tierra se reunirán, los jefes espirituales, si son
espirituales, irán y le escucharán.
Aguardo con impaciencia a que el Creador dé esta revelación, pues podría volver con
los míos, vivir tranquilamente y no tener ya que enseñar, pues habrá un profeta. Es duro
enseñar la espiritualidad, es un trabajo de todos los días...
Volvamos al joven que se convierte en hombre médico y que debe vivir conforme a
su visión. Algunos hombres médico están contentos con su suerte y no desean ya volver a
una montaña. No quieren ir más lejos. Son muchos los que no desean convertirse en
Winkte, un travestí. No se trata de un homosexual o una lesbiana. Es un hombre al que le
gusta vestir ropa femenina, o una mujer a la que le gusta vestir ropa masculina. Del mismo
modo, son muchos los que no quieren convertirse en Heyoka, el payaso sagrado. Los
Heyoka o Contrarios hacen de idiotas durante las ceremonias, pero tienen un gran poder.
Son capaces de actuar sobre el clima.
En 1970 hubo una Danza del Sol en Pine Ridge (Dakota del Sur). Durante esta Danza
mi abuelo, Cuervo Loco (Fool Crow), pidió a mi padre: “hijo mío, haz algo, pues los
Bailarines sufren”. Mi padre me miró y se encaminó al centro del área de Danza, hacia el
Árbol de la Vida, el árbol sagrado. Pidió a los Bailarines que se pusieran en círculo. Una
vez el círculo formado, mi padre comenzó a orar. Una pequeña nube negra se formó y se
volvió más y más grande cada vez. Al mismo tiempo, un hombre vino del Oeste, portaba un
cesto lleno de piedras que lanzaba hacia la gente, y recorría el área de Danza en sentido
contrario a las agujas del reloj. Después salió del área sagrada y entró en una tipi. La gente
le siguió, pero no había nadie en el interior. En el mismo instante comenzó a granizar, salvo
sobre el árbol sagrado, el Árbol de la Vida, bajo el cual oraba mi padre. El suelo se volvió
blanco, tanto era el granizo que caía. La nube desapareció, y después el granizo, pero el
suelo estaba húmedo y fresco. Ello ayudó a los Bailarines, que sufrieron menos por causa
del calor. Mi padre dijo a mi abuelo: “¿es eso lo que deseabas?” Después salió del área de
Danza, entró en su tipi y no se le volvió a ver en todo el día.
Un tornado venía de Winner (Dakota del Sur) y salí de la casa, pues algo me
impulsaba hacia fuera. Mi padre se encontraba en el jardín y no me vio. Permanecía detrás
de él y comencé a orar. De hecho, era él quien me había empujado al exterior. El tornado lo
destruyó todo menos la ciudad donde vivíamos. He ahí el poder del Heyoka.
Es también un hombre capaz de hacer cosas extrañas y chistosas. Os dirá que hace
frío afuera cuando hace calor. Puede helar en el exterior y le veréis pasearse en camiseta.
Para él hace calor. Su organismo cambia completamente cuando se vuelve un Heyoka.
Hace ya algún tiempo, antes de venir a Europa, un amigo me había pedido hacer una
Tienda de Sudación (Sweat Lodge). Éramos cuarenta. Este hombre es un Bailarín del Sol y
pude soportar un calor infernal. Nadie puede resistir en las Tiendas de Sudación que él
dirige. Yo dirigí la primera con mi hijo John y después salimos. Pedí a mi amigo que
dirigiera la Tienda de Sudación siguiente, y mi hijo quiso participar en ella. Era la primera
vez que veía a John entrar a una Tienda de Sudación con otro que no fuera yo. La puerta se
cerró de nuevo, debía hacer mucho calor en el interior. Después oí que mi amigo le decía a
John: “ora, ora por nosotros”. Era la primera vez que oía a mi hijo orar en voz alta, primero
en inglés y después en lakota. Se puso a cantar... la puerta se abrió, un hombre salió, hacía
demasiado calor. Al final, sólo John y mi amigo permanecían en el interior. Oí a John
preguntar: “¿puedo verter agua sobre las piedras?”. No obtuvo respuesta, así que comenzó a
verter agua. Cuando la puerta se abrió mi amigo estaba acostado sobre el suelo. Mi hijo
salió, se le veía muy dichoso. En cuanto a mi amigo, salía arrastrándose, y le preguntó a
John: “¿por qué no saliste antes?” John le miró y dijo: “no hacía bastante calor”.
No quiero decir que mi hijo sea un Heyoka, simplemente que el poder se encuentra
siempre en mi familia.
Actualmente sólo tenemos ocho Heyoka. Estos ocho Heyoka nunca viajan más allá de
las fronteras de Dakota del Sur. Los Heyoka obtienen u poder de los Seres del Trueno.
Mi abuelo, el que me educó, era un Pejuta Wicasa. Sanaba por medio de las plantas.
He hecho andar a paralíticos, pero debía tener el poder espiritual para utilizar las plantas.
Este sistema en el que vivimos todo lo separa: el biólogo del sacerdote, el astrólogo
del médico... El hombre médico reúne a todos estos personajes en uno solo. Puede hacerlo
todo y nadie es capaz de detenerlo, ni siquiera su propia tribu. No necesita soporte, trabaja
en sí mismo. Es manipulado por el Creador, y no puede nada contra ello. He de actuar
conforme a la voluntad del Creador.
Este sistema que habéis creado os vuelve ciegos y sin comprensión. Ni siquiera
podéis ver lo que os rodea. Eso explica por qué los hombres abusan de la Tierra. Las
plantas, los animales se van de ella... No veis más que con los ojos de la técnica y ya no
como hombres espirituales.
El que habrá de ser hombre médico es educado por su abuelo, que, cada día, le da una
enseñanza: lengua, cultura, espiritualidad... Ningún hombre médico puede decir: “soy
hombre médico pues he aprendido en los libros”. Eso no existe entre nosotros. Eso sucede
entre vosotros porque tenéis escuelas. Vuestros sacerdotes aprenden en las escuelas. Si
Jesucristo volviera diría que nunca quiso decir lo que se halla escrito en la Biblia. Puede
que la tuviese que escribir de nuevo.
A veces, el hombre espiritual posee una Pipa, pues ésta forma parte de los jefes. La
vida es muy compleja cuando debéis tomar decisiones a cada lado; es preciso reajustar sin
cesar el equilibrio entre la vida política y la vida espiritual. A veces, lo que es sagrado se
convierte en una historia política;: otras veces, es la política la que se vuelve sagrada. Es
preciso entonces aislarse y orar para tomar la decisión justa. Algunos miembros del
Consejo de Ancianos conocían igualmente este problema, pues son también hombres
espirituales, sabios, videntes. Pero envejecer no significa volverse sabio.
También yo ocupo un puesto, en tanto que jefe y en tanto que hombre espiritual. Es
una vida muy dura. Siempre he pedido a mi padre que dejase la dignidad a mi hermano y le
diese el penacho de plumas. Yo me contentaría con ser un Heyoka u otro hombre espiritual.
Nosotros decimos que vosotros mismos podéis curaros el 50% de las enfermedades
que vosotros mismos creáis. No siguiendo un tratamiento químico, sino comprendiendo
vuestro cuerpo. Para ello no habéis de seguir un régimen totalmente vegetariano o
totalmente cárnico. Basta simplemente con comprender las necesidades de vuestro cuerpo.
¡Si necesitáis “Seven Up” y queréis llegar a viejos, os interesa continuar bebiendo “Seven
Up”! Todo eso depende de cada uno, cada persona es diferente, es así como os
consideramos. No hay dos hojas idénticas sobre el árbol, incluso si provienen de la misma
raíz. Vuestro hijo nunca se os parecerá, y sobre todo no tratéis de hacer de él lo que
vosotros sois. Es de una generación diferente, es una vida diferente. Vuestro único papel en
cuanto padres es el de enseñarle la verdad y las cosas justas, enseñarle a orar, a vivir
respetando a los demás; no dejéis que el maestro de escuela críe a vuestro hijo. Estáis ya
suficientemente adoctrinados, hay suficiente adoctrinamiento en el mundo, no dejéis que
el sistema escolar adoctrine a vuestro hijo hoy en día muchos niños de todo el mundo
buscan la verdad, la espiritualidad. Para nosotros una persona espiritual es una persona que
trabaja con el Creador. En consecuencia, debe llevar una vida justa. El poder espiritual
puede, por ejemplo, ser un sentimiento profundo, una comunicación profundo con las
plantas. En tal caso, la persona espiritual no utiliza solamente el poder que emana de ella
misma, sino también el de la planta. Una persona espiritual no se forma en la escuela,
detenta el poder de su linaje paterno o materno, de su abuelo o de su abuela. Por ejemplo,
una de sus abuelas podría ser Pejuta.
La esposa de un hombre espiritual no se vuelve por ello una mujer espiritual. Ella
adquiere solamente un cierto conocimiento y puede comprender muchas cosas. Poseer un
conocimiento no significa ser espiritual.
Hace ya algún tiempo me ha sido confiada la tarea de parlamentar con todas estas
gentes que se sientan con Pipas Sagradas y que enseñan a los demás los ritos y costumbres
del pueblo lakota. Ni saben ni comprenden. He empezado a hacerlo, pues ciertas personas
han sufrido ya las consecuencias de estas enseñanzas. Debemos deciros la verdad, de
donde venimos, quiénes somos, lo que somos. Yo vengo de la Pipa Sagrada, he recibido las
enseñanzas de los ancianos de la tribu, de los jefes, de los hombres espirituales. Debemos
enseñaros el verdadero camino de la Pipa Sagrada.
Cada hombre espiritual que recibe las enseñanzas de su linaje debe hablar la lengua
lakota. Nuestra enseñanza espiritual está en la lengua. No podemos ser una persona
espiritual si sólo hablamos el inglés. Del mismo modo, el guardián de la Pipa, los ancianos,
las personas espirituales, los jefes de la Danza del Sol, deben tener un 100% de sangre
lakota. Nuestra tradición no puede aceptar a un jefe o a una persona espiritual con sangre
mezclada. Es el momento de dejar de jugar a indios y vaqueros con nuestra enseñanza
espiritual, de volvernos otra vez serios y retornar a la tradición original.
Hoy en día podéis encontrar hombres espirituales por todas partes; no los conocemos.
Hay un medio seguro, al menos en verano, de saber si son verdaderos hombres espirituales,
pues ningún lakota debe abandonar la reserva en Julio y Agosto. En ese momento tenemos
nuestras ceremonias de la Danza del Sol. Recibimos entonces a muchos europeos y les
indicamos quiénes son los hombres espirituales. Algunos no son conocidos en absoluto,
pues no viajan nunca, están demasiado ocupados en ayudar a la gente de las reservas.
Algunos, yo entre ellos, han comenzado a viajar después de que estos jóvenes europeos
viniesen a decirnos que estaban preocupados por la polución del aire y del agua. Hemos
venido a ver, y la polución era evidente en todas partes.
Yo dirigía una Tienda de Sudación no lejos de Tehernobyl cuando hubo esa polución
radioactiva. Dirigía una Tienda de Sudación cerca de Basilea cuando las aguas del Rhin se
volvieron completamente rojas. La fauna ha quedado destruida por una decena de años. Me
encontraba en el momento justo en el lugar adecuado, o en el mal momento en el lugar
equivocado, para hacer estas tristes experiencias. Pero la naturaleza es más fuerte que el
hombre. Si el hombre quiere volverse tan fuerte como la Tierra nuestra Madre debe
comprenderla. Debe respetarla porque es viviente. Si no, la Tierra destruirá a la humanidad
antes de que la humanidad la destruya a ella.
Nuestro objetivo es, asimismo, el de poner de acuerdo el trabajo del hombre espiritual
con el del doctor de medicina, enseñar al médico a orar y a convencer a su paciente de que
el deseo de vivir, el amor a la vida, la voluntad de vivir, son el tratamiento de numerosas
enfermedades. Empezamos a trabajar con los médicos.
Pero os lo repito: las enseñanzas espirituales sólo son enseñanzas; no poseen la clave
espiritual. Sólo vosotros poseéis la clave. Utilizadla, respetad, amad y honrad vuestra vida.
Sed humildes.
Para ser espirituales debéis permanecer al mismo nivel que los demás; no podéis
pensar que sois mejores. Este pensamiento es una manifestación del ego. El ego el que os
empuja a colocaros por encima de los demás. Sois mis hermanos y mis hermanas, y
marchamos unos al lado de los otros. Lo que os digo no es una amenaza, es una enseñanza
proveniente del fondo de las edades, y que teníais hace dos mil años, antes de la llagada de
los Romanos.
El Yuwipi trabaja con las piedras sagradas con la intención de buscar a alguien o de
curar. Trabaja en el futuro, el pasado y el presente, curando todas las enfermedades con las
piedras sagradas. Hoy en día los Yuwipi son numerosos entre mi pueblo, el menos seis o
siete. Uno de ellos comienza a ser conocido, su nombre es Antílope Cuerno Hueco (Hollow
Horn Antelope) y es mi tío: su padre y mi abuelo son primos hermanos y se sienten muy
próximos el uno al otro. Son ellos quienes me han educado y ayudado en los caminos del
mundo espiritual. Hace mucho tiempo, cuando yo era joven, tuvimos una ceremonia para
este hombre que partía a la guerra (segunda guerra mundial). Queríamos saber cómo le iría.
Un mes más tarde tuvimos otra ceremonia, durante todo la noche, hasta la salida del Sol.
Mientras comíamos mi tío entró en la casa: “he vuelto en un barco hospital. Iba a morir,
pero las piedras Yuwipi han venido en mi ayuda...” dijo. Lo llevamos a la montaña para una
búsqueda de Visión a fin de dar gracias al Creador. En Agosto de 1983 volvió a partir hacia
la montaña para su segunda búsqueda de Visión, y volvió como Yuwipi. El Yuwipi tiene el
poder de comunicarse por telepatía con una persona a miles de kilómetros.
Mi último tío-abuelo, Zorro Bueno (Good Fox), era Wapiya. El día de mi nacimiento
vino y dijo a mi abuelo: “este hombre corregirá todas mis faltas”. Debo vivir para corregir
lo que él ha hecho. No debo dejar de enseñar. No puedo escapar de ello. Ya lo he intentado,
pero no funcionó. Se cuenta que un día Zorro Bueno curó a un tuberculoso. Cogió un
pañuelo negro, lo ató al muro y se puso a rezar y cantar. Una pluma de águila abandonó su
mano, atravesó la espalda del hombre enfermo, salió por el pecho y fue a fijarse en la tela
negra sobre el muro. La enfermedad se enganchó a la pluma. Los otros hombre médico
presentes no podían creerlo, pero para él resultaba muy simple. Siempre actuaba así para
que la enfermedad huyera. Actualmente, ciertos hombres médico actúan también siempre
de forma misteriosa.
El Heyoka lo hace todo al revés. Alce Negro (Black Elk) era un Heyoka. En su libro
“Los ritos secretos de los Indios Sioux” dice que la Tienda de Sudación está orientada al
Este. Incluso los líderes del AIM (Movimiento Indio Americano) han seguido a Alce
Negro. El libro se ha extendido por el mundo entero y tenemos que ir por todas partes
corrigiendo sus errores. Mi padre también escribió uno, opuesto al de Alce Negro, en el que
nuestras tradiciones son bien descritas. Años más tarde de estos hechos otro hombre decidió
escribir un libro sobre Alce Negro. John Epes Brown ignoraba que Alce Negro era Heyoka.
Escribió este libro mezclándolo todo un poco. “los ritos secretes de los Indios Sioux” es la
obra de un antropólogo, lleno de los fantasmas del autor. Por comparación, el libro “Alce
Negro habla” es más verídico. Debemos reparar estos errores. Existen muy pocas buenas
obras sobre la espiritualidad india.
El Winkte tiene el poder de dar un nombre a los niños, a los bebés. Pero si un adulto le
pide un nombre lo lamentará, pues seguramente no le ha de gustar el nombre que recibirá,
del estilo de “Cabeza Mierdosa”... Y si uno de sus amigos le pide su nombre indio nunca
podrá decirlo, de tan ridículo que se sentirá. El Winkte siempre tiene tendencia a dar
nombres ridículos.
Cuando os habéis convertido en estos seis hombres médico sois un hombre sagrado,
un Wicasa Wakan. En esta etapa las plumas de águila ya no significan gran cosa para él. A
menos que no sea también un jefe. Todos los jefes de mi tribu portan plumas de águila. Ello
forma parte de las enseñanzas de la Mujer Bisonte Blanca.
Todos los hombres médico de los que acabo de hablar son Lakota. Los Crow, los
Pawnee, los Osage tienen la misma enseñanza. Una parte de los Navajo, los Kiowa, los
Apache la tienen, pero es porque vienen de Athapascan (Canadá). Hoy en día vienen a las
Danzas del Sol pues están más cerca de nosotros que de los ritos Kachina. Reaprenden su
historia, ya que vienen de Canadá. Comienzan a olvidar la “historia” creada por los
historiadores, los antropólogos, los sacerdotes. Son numerosos los que has escrito sobre
nosotros sin saber nada, para comprendernos, debéis hablar nuestra lengua.
Por debajo de estos hombres médico tenemos otros hombres médico que obtienen su
poder de diferentes animales o de diferentes plantas. Son hombres médico menores, que un
día se elevarán al rango de hombres médico mayores. Y tras estos hombres médico
menores vienen los Bailarines del Sol. Sólo un Bailarín del Sol perteneciente a un linaje
deviene más tarde hombre médico. Pero antes de realizarse en tanto que hombre médico no
es sino un Bailarín del Sol, y la única tarea que puede llevar a cabo es la de dirigir las
Tiendas de Sudación.
Sabed también que muchas personas no tienen una percepción espiritual real, y éstas
os puedan herir más profundamente que un hombre de poder si tenéis esa predisposición.
Tal puede ser el caso de un personaje empeñado en el proceso de aprendizaje de un camino
espiritual (la Tienda de Sudación por ejemplo), y que todavía no ha comprendido lo que es
la enseñanza espiritual. Una enseñanza espiritual está de acuerdo con las leyes naturales, las
del Creado, y una de las leyes naturales es la de no herir a los demás. La enseñanza
espiritual no puede existir sino para los otros. Rehusad categóricamente la enseñanza de
estos personajes ignorantes y vuestro rechazo se convertirá en un escudo que os protegerá.
Todo lo que esta persona diga será reenviado como si fuera un boomerang. Vuestro escudo
actuará como espejo para esta persona, y ello la conducirá a interrogarse sobre sí misma.
Algún tiempo más tarde os enteraréis de que esta enferma.
La magia negra, el vudú, no tienen mas realidad que la que queráis darle. Quienes
pretenden practicarla, no detentan de hecho poder alguno, y no entienden que el trabajo
espiritual debe ser un bien dirigido a los otros. Solamente porque vuestro espíritu está
abierto y no tenéis todavía ningún conocimiento espiritual real, o porque en alguna parte
habéis recibido malas enseñanzas, creéis ser víctimas de la magia negro. No hay ninguna
medicina maligna en vosotros, solamente un sentimiento falso.
LA ORACIÓN
Hay que orar por los niños que aún no han nacido, las generaciones futuras. Por los
niños a fin de que su espíritu se despierte; por los ancianos, generadores de los sueños y de
las visiones del mañana, a fin de que sean buenos instructores para la joven generación; por
los animales: el hombre ha sido creado también para cuidar de los animales. Aquí en
Europa he podido observar que habéis olvidado este trabajo vuestro. Habéis creado
vuestros propios animales. Habéis transformado en vacas los seres de mi familia de cuatro
patas. Habéis tomado a mi hermano el corzo para hacer de él una cabra, a mi hermano el
jabalí para hacer de él un cochino que vive en la inmundicia, a mi hermano el faisán para
hacer de él un pollo que ni siquiera sabe volar. Todo ello porque habéis tenido miedo de los
otros animales que se defienden cuando los cazáis para alimentaros. Algunas religiones
pretenden que los animales carecen de alma, que por tanto no es necesario orar por ellos.
Sin embargo, cuando estáis en contacto con un animal respiráis el mismo aire que él, el aire
que circula por sus pulmones y penetra en lo vuestros a continuación; ello os hace
semejantes. La única diferencia es que vosotros poseéis una inteligencia, o que se os
considera poseedores de una.
Debéis siempre acordaros de estas ocho entidades: los aún no nacidos, los jóvenes, los
viejos, el mundo animal, el fuego, el agua, el aire y nuestra Madre la Tierra. Vuestras
oraciones deben ser cortas, tendrán entonces mucha mayor significación. Decid “todo es
mío”, o Mitakuye Oyasin, que significa “doy las gracias a todos los míos, toda la
Creación”. Es muy corto, muy conciso. El Creador no tiene tiempo para escuchar a quienes
rezan durante horas.
Preparándose mal para una Búsqueda de Visión uno se expone a las alucinaciones.
Todo el mundo se burló de este superindio. Si hubiese permanecido habría tenido la mayor
visión de su vida. El peñasco nunca le habría aplastado.
No entra en las intenciones del Creador arrebatar la vida. Os toma cuando habéis
terminado vuestro trabajado sobre la Tierra, cuando habéis cumplido el círculo de la vida.
Los que ayudan son también ayudados espiritual y físicamente. Comprender esto es
difícil para quienes viven en un mundo material. ¿Os llevaréis todos vuestros bienes cuando
vayáis al mundo espiritual? Si lo conseguís seréis los primeros, los primeros en llevaros
vuestro Cadillac al mundo espiritual. Podéis hacer que os entierren en vuestro Rolls Royce,
y un día los arqueólogos os descubrirán y se preguntarán quién era este hombre que creció,
vivió y murió en su Rolls. Hablo de ello porque una mujer de Texas se hizo en su enterrar
en su Rolls.
No hay por qué apegarse a los bienes materiales. En el mundo espiritual el Creador no
os dirá: “¡eh! ¿dónde está tu Mercedes? ¡tráelo! ¿y tu magnetofón?...” Dad... ¡Siempre!
En las pow pow, en las Danzas del Sol, hay una familia que no tiene nada pero que lo
da todo. Ella pasa su invierno cosiendo y adornando los Edredones para la Danza del Sol,
pues uno de sus miembros participa en la Danza. Da a quienes no tienen nada. Un hombre
médico actúa así: “te curaré si me das diez mil dólares”. Cura y se va. Todo depende de
vosotros, de cuánto estiméis vuestra vida.
Debéis saber cómo abordar a un hombre médico si queréis que os curen. Dadle
tabaco, un paquete de tabaco, y así sabrá que comprendéis su forma de ser. Si él no puede
ayudaros os enviará a otro hombre médico, si es verdadero hombre médico. No podemos
curarlo todo, pero tenemos el suficiente valor como para reconocerlo. Es nuestra forma de
ser, la de las plantas, la de las hierbas, la del mundo espiritual. El hombre médico puede
transmitiros la voluntad de vivir, pues vuestra vida no os pertenece, pertenece al Creador.
Debéis cumplir el círculo de la vida, incluso si es miserable. Si os suicidáis no habéis
cumplido el círculo de la vida. No iréis de inmediato al mundo espiritual, sino a un mundo
intermedio. Os volveréis un fantasma, lo que es muy diferente del espíritu. El fantasma se
vuelve hacia el mundo físico para recibir las oraciones, pero los humanos tienen miedo,
miedo de los ruidos de pasos en una escalera, miedo de una aparición. Si veis un fantasma
deteneos y orad. Así esta persona podrá ir al mundo espiritual.
No es necesario orar por aquello que no tenéis. La intención del Creador es la de que
tengáis precisamente aquello que tenéis. ¡Sentios contentos! Si vuestro marido o vuestra
esposa no es tan bello o bella como los de otros, no miréis a otro lado, pues la belleza puede
ser engañosos. Lo lamentaréis y deberéis luchar el resto de vuestra vida. ¡Sentios contentos!
No oréis pidiendo riqueza. Algunos siempre buscan más allá de la colina, creyendo que la
vida puede ser más dulce sobre la otra vertiente. Pero en la cima verán otra colina... Nunca
alcanzarán la dicha. Sentios contentos con lo que tenéis.
Cuando oramos fumando tabaco cada bocanada es una acción de gracias, una oración
por el mundo vegetal, el mundo animal, el agua, el fuego, el aire, la Tierra y las piedras, los
aún no nacidos, los niños y los viejos. No necesitáis decir: “alcémonos y oremos”. Esto es
una forma de adoctrinamiento. Orad a vuestra manera, en silencio pero no os olvidéis de
orar por estos ocho. No oréis por vosotros, ni para obtener lo que no tenéis. Es nuestra
forma de orar, la misma que la del Creador. Él es Dios y no le oís decir: “Dios mío,
hacedme más santo de lo que soy”. Debemos razonar de la misma manera. Orad por los
demás y alguno orará por vosotros.
El hombre es conexión entre el Creador y la Tierra. Sois como el tubo de la Pipa, sois
la conexión. Sois como el Árbol. Sois las raíces de lo sagrado. Los niños preguntan:
“abuelo, ¿dónde está Dios?”, y yo les respondo “¡sois Dios!”
Examinaremos juntos diferentes elementos del Creador. El Creador está por todas
partes, en cada hoja del árbol, en cada bocanada de aire que nuestros pulmones reciben.
Está en nosotros. Es la fuerza de la vida negativa y positiva. El aire está por todas partes.
Este aire que respiramos ha sido utilizado y reciclado por algún otro; puede ser que por una
mosca, un pez o una planta. Cada bocanada de aire que tomamos surge de alguna fuente de
la creación. Es real. Es muy simple. Por ahí comienzan las enseñanzas indias. El aire que
respiramos es el alma del hombre, la esencia de nuestro espíritu, el alma de la humanidad.
Si lo destruís, destruís vuestro espíritu y a nuestro Abuelo, el Creador.
Es bueno orar con las piedras sagradas. Podéis llevarlas a la Tienda de Sudación.
Muchos se preguntan dónde está el alma. Algunos dirán que debéis tener un alma
pura, tan blanca como la nieve, después volverán a sus casas y verterán productos químicos
en el aire. Polucionan el aire sin darse cuenta de que el aire es el alma del hombre. Así,
cuando polucionamos el aire transgredimos la más importante de las leyes del Creador. Es
una ley natural: utilizamos este aire continuamente reciclado que los dinosaurios y las
serpientes han utilizado, y debemos guardarlo puro.
Los cuatro colores, negro, rojo, amarillo y blanco representan las cuatro direcciones.
Cada uno de estos colores marca un punto cardinal.
Para ciertas tribus el búho es el mensajero de la muerte. Para nosotros, los Lakota, es
el mensajero del Creador durante la noche, y el águila es el mensajero del Creador durante
el día.
Para que vuestras oraciones sean acogidas debemos primero hacer el círculo y orar
por los acho en cada una de las direcciones, hacia el Creador, y posteriormente hacia la
Tierra.
Muchas religiones que no se dirigen más que al Creador se preguntan por qué sus
oraciones no son acogidas...
En lengua lajota se dice Inipi, es decir, “debéis purificaros”. Puede también decirse
“Iniunkajaktelo”, es decir, “vamos a orar a ala Tienda de Sudación”.
Antes de la Danza del Sol hay que purificarse en la Tienda de Sudación, al igual que
antes de la ceremonia Yuwipi. De hecho, antes de cada uno de los ritos sagrados de nuestro
pueblo hay que purificarse. Cualquiera puede ir a un hombre médico y decirle: “¿puedes
ayudarme?” El hombre médico conducirá entonces a esta persona a una Tienda de
Sudación; ya no será un rito de purificación, sino una ceremonia en sí misma. Durará más
de una hora.
Esto va, por tanto, contra la creencia de que no estamos en relación con los animales.
El hombre es un animal, pero le ha sido dado el intelecto para que sea el guardián de las
criaturas del Gran Espíritu. Estas palabras ayudaron mucho al hombre que dio su vida para
que yo enseñe la espiritualidad. Hablo de los saquitos de tabaco, pues debemos preparar
cinto cuatro de ellos para la Tienda de Sudación. El número cinto cuatro representa las
hierbas curativas; cuatro de ellas son utilizadas en la Tienda de Sudación. La mayor parte
son muy importantes. Conocer estas ciento cuatro plantas es difícil. Para lagunas no
conozco su nombre en inglés. Por otra parte, no pienso que tengan un nombre, pues las
utilizamos mezcladas, y esta mezcla tiene un nombre que no existe en inglés.
En este mundo moderno, os enseñan la química para que abuséis de las plantas, pero
no se os enseña a utilizarlas para las ceremonias espirituales. Se os enseña a curar, no a
orar.
Aprendemos a abrir nuestro espíritu, a ser pacientes y a ayudarnos unos a otros. Esa
es la enseñanza de la Tienda de Sudación, el camino de la reunificación, reunir a las gentes,
reflexionar sobre lo que podemos hacer por la Tierra y no sacar todavía más de la Tierra.
Génesis
La Tienda de Sudación ha sido el primer rito que no fue aportado hace centenares de
años. La Tienda de Sudación se hace siempre al comienzo de cada ceremonia. Como todos
nuestros ritos, fue aportado por una mujer. La mayor parte de nuestras enseñanzas
espirituales nos han sido dadas por las mujeres. Todos nacemos de un mujer y todo lo
creado viene de la Tierra.
Ahora la llamáis “sauna”, no oráis, sólo cuidáis vuestro cuerpo, habéis perdido el
contacto con la parte espiritual de la Tienda de Sudación. El hombre se puede purificar por
sí mismo, mientras que la mujer se purifica cada mes, durante todo su período de fertilidad.
Antes de la pubertad y tras la menopausia se la anima a que entre en la Tienda de Sudación.
A menudo las mujeres no devienen mujeres médico hasta después de la menopausia.
La Inipi ha sido dada a los hombres para que se purifiquen espiritual, física, mental y
emocionalmente.
Al principio la Tienda de Sudación nos fue enseñada de cierta manera. Como las
religiones de hoy en día, se extendió. Se transformó según los lugares, pues quienes lo
utilizaron perdieron su significado.
En los años 70 ser indio fue nuevamente bueno. Gentes que jamás se habían
considerado como indios volvieron y comenzaron a decir: soy un indio.
Para comprender cómo nuestra religión volvió a las colinas, a las reservas, debéis
saber lo que pasó en los años 40-50. En esa época ocultamos nuestra religión para que el
Negociado de Asuntos Indios no la destruyese, pues intentó suprimir nuestra espiritualidad.
Por otra parte, todavía busca dañarnos. Pero nuestra religión se vuelve cada vez más fuerte.
La Tienda de Sudación es su base. Debéis conocer su buen aprovechamiento. Cuando
vuelva con los míos, con mi pueblo, el Guardián de la Pipa Sagrada me preguntará si he
enseñado correctamente la Tienda de Sudación, y quiero poder decirle: “¡sí, en efecto!”
Al principio todo se construyó de la misma manera, hasta que las gentes encontraron
otra forma, adaptada a su vida, a su religión. En América del Norte los Hopi tienen una
Tienda de Sudación construida de forma diferente, igual que los Séminola. Lo que voy a
enseñaros es Lakota. Nuestra Tienda de Sudación está en relación con la astrología, la
creación, la purificación espiritual, física, mental y emocional.
Nadie he recibido el poder de confesar los pecados de otro, pues no era ésa la
intención del Creador. El Creador quiere que cada uno de vosotros sea su propio guía hacia
el mundo espiritual, el mundo del más allá. Cada uno de vosotros es un ser sagrado. Cuanto
más rápido lo asimiléis, más rápidamente avanzaréis. Sois sagrados. Respetaos. Sólo si os
respetáis a vosotros mismos os respetarán los demás. Si no, no esperéis el respeto de nadie.
En 1942 “el hombre peludo” vino del Este. Vino porque estaba deprimido. Había
perdido la mayor parte de sus enseñanzas. Vino y fue acogido por su hermano rojo que le
dijo: “te enseñaré a vivir con tus hermanos los árboles, los animales. Te enseñaré a cultivar.
Te enseñaré las ceremonias”. Y el hombre peludo del Este ha aprendido. Pero detrás de él
venía el opresor con la cruz desequilibrada, la cruz cristiana demasiado pesada de un lado.
Nuestra cruz es diferenta, es equilibrada; representa las cuatro direcciones del viento. Tiene
un círculo a su alrededor, pues todo va de izquierda a derecha, siempre en este sentido.
Algunos la asocian con las cuatro razas de la Tierra. Sí, pero ¿y los hombres marrón? Los
hombres marrón representan los cuatro colores mezclados entre ellos. Observad a nuestra
Madre la Tierra, ella es marrón, pues los cuatro colores se mezclan en ella. El mundo se ha
formado a partir de los colores negro, rojo, amarillo y blanco. Si los mezcláis el color que
resulta es el marrón. El color de las razas futuras es marrón, no hay posibilidad de escapar a
ello. Observad que este fenómeno de mezcla de razas está en camino de producirse por todo
el mundo. Sucede igualmente en Rusia, donde los asiáticos se están haciendo dominantes.
Una raza marrón está en vías de nacer, y puede que en un centenar de años la Rusia blanca
pertenezca al pasado. Es algo que está sucediendo muy rápidamente por todas partes.
Nuestra tarea es la de asegurarnos que nuestros hijos conozcan su lengua y comprendan la
necesidad de transmitirla, que comprendan la Tierra, las plantas, los árboles, su sustancia y
su poder de curación.
Preparación de la Tierra de Sudación
Vais a un bosque o a un río para cortar su sauce blanco. Hay que utilizar este árbol,
pues contiene el producto que llamáis aspirina. En verano arrancáis la corteza del sauce en
largas tiras. Se retira entonces más fácilmente gracias a la savia. La utilizaréis para unir las
ramas de sauce. En invierno toda la savia vuelve a descender, las hojas caen y no podéis ya
arrancar la corteza tan fácilmente. Hay, pues, dos Tiendas de Sudación, una de verano sin la
corteza y una de invierno con ella. Podréis así siempre cuándo ha sido construida un Tienda
de Sudación. El sauce puede volver a brotar en una Tienda de Sudación de invierno, pues
ha conservado su corteza. Tenemos una Tienda de Sudación en California construida hace
cinco años; se ha transformado en un árbol y ofrece un abrigo natural. El vapor venido de
las piedras en el interior de la Tienda de Sudación humedece las ramas del sauce y hace que
se desprenda la aspirina. Ello clarifica el espíritu y elimina todos los males de la cabeza.
Tiene pues una utilización médica.
Antes de cortar el primer sauce el hombre médico ofrece tabaco a las cuatro
direcciones del viento: al Oeste, al Norte, al Este, al Sur, al Creador y a nuestra Madre
Tierra. Le dice al sauce: “perdóname, hermano, pero te necesito”. Sabemos que las plantas
están vivas y que no hay que abusar de ellas. El hombre médico corta el primer sauce.
Cortará treinta ramas, ni una más. Se necesitan una veintiséis par ala Tienda de Sudación,
de las que dieciséis son para los sauces en pie. Cortamos cuatro más, por si algunas ramas
se rompen durante la edificación. Las no utilizadas deben ser cortadas en trozos y
quemadas. Después nos ocupamos del lugar donde serán edificados la Tienda de Sudación
y el hogar. Es preciso limpiar cuidadosamente este lugar y allanarlo.
El hombre médico comienza a señalar los hoyos donde serán plantados los sauces. La
puerta siempre queda cara al Oeste entre los indios de las llanuras. El único hombre que
puede construirla de cara al Este es el Heyoka, el Payaso Sagrado, el que lo hace todo al
revés. Muchas personas en Europa han leído el libro del Alce Negro y han decidido
construir una Tienda de Sudación según sus indicaciones. Tenemos que destruirlas para
posteriormente reconstruirlas según las reglas.
Construcción
El hombre médico hace primero dos hoyos en el Oeste para la puerta, después otros
dos hoyos en el Este frente a los dos primeros. Estos hoyos tienen cinco centímetros de
diámetro y veinticinco de profundidad. Cava otros dos al Sur, y después dos al Norte. Es
decir, un total de ocho para empezar. Según el tipo de Tienda de Sudación, se añadirán
cuatro u ocho hoyos. Hay dos tipos de Choza entre los Lakota, una de doce hoyos,
destinada únicamente a al familia, muy pequeña por tanto, y una de dieciséis hoyos,
destinada a los hombres médico y que permite las curaciones.
Cada una de las posiciones de los hoyos tiene un significado. Se puede también llamar
a la Tienda de Sudación de dieciséis hoyos la Tienda de Sudación de las cuatro direcciones
del viento, pues en lo alto de la Choza puede verse cómo se dibuja un cuadrado. Es por otra
parte el único que se encuentra en la tradición lakota, y no es un verdadero cuadrado. En
cuanto a la Tienda de Sudación de doce perchas, se la llama la Tienda de Sudación de las
doce lunas en recuerdo de la luna llena de los doce meses del año. Es por ello que está
destinada a la familia. Ella ve la vida transcurrir cada mes.
Tras haber cavado los ocho primeros hoyos los completamos añadiendo dos hoyos en
cada intervalo dejado entre los hoyos de las cuatro direcciones. El diámetro de la Choza es
de dos metros cuarenta. Es bastante grande y cómoda. No pudráis hacer entrar dieciséis
personas en la Tienda de Sudación de la familia a menos que fueran muy delgadas; pero si
la gente es de mi talla sólo podrán entrar cinco.
Hay que ocuparse ahora del hogar donde se calentarán las piedras. El camino que va
de la Choza al hogar tiene unos cinco metros de largo, y se excava un gran hoyo de un
metro ochenta de diámetro. Toda la tierra que se retira es colocada alrededor del hogar con
el fin de trazar una plataforma de treinta centímetros de ancho que permitirá marchar
alrededor del fuego. Si se ha arrancado hierba habrá de desplegarla sobre esta plataforma
para que nada tenga un aspecto descuidado. Si tenéis que descubrir la Choza podréis así
volver a poner la tierra en su lugar, y nadie verá que la tierra ha sido utilizada y excavada.
La naturaleza permanecerá intacta. Al Oeste el hogar tendrá una profundidad de sesenta
centímetros, y al Este de treinta centímetros.
Una vez terminado el hogar hay que empezar a construir el fuego. El primer leño se
coloca al Oeste, el segundo al Este, el tercero al Norte y el cuarto al Sur. Este cuadrado
recuerda al de la Choza, el de las cuatro direcciones del viento. Por debajo de los cuatro
primeros leños se pone paja, trocitos de madera seca o corteza, que ayudarán a encender el
fuego. Se forma un estrado, y después las piedras son puestas sobre los leños. Primero se
colocan siete piedras en forma de rostro: la primera al Oeste, la segunda al Norte, la tercera
al Este, al cuarta al Sur, la quinta al Creador, la sexta a nuestra Madre Tierra y la séptima
por la conservación de nuestras tradiciones.
Se apilan las otras piedras, treinta y dos en total para una choza de purificación,
sesenta y cuatro para una Choza de curación. Se levantan leños un poco más largos todo
alrededor, a fin de que el fuego tome la forma de un tipi. De esta manera el fuego arde bien,
incluso con viento y lluvia. De hacho, las piedras calientan más cuando llueve, pues el
vapor desprendido por las gotas de lluvia las ayudan a calentarse. Por otra parte, ello
expulsa todas las vibraciones negativas. Se requieren al menos tres horas para que el fuego
caliente bien las piedras. Sólo necesitáis una cerilla para hacer que este fuego se ponga en
marcha, si sabéis lo que hacéis. Si no, vuestro fuego nunca se pondrá en marcha. Debéis
aprender a prepararlo. Sobre todo no hay que rociar la madera con gasolina, como se lo he
visto hacer a hombres médico. Me he burlado de ellos: “¿quién os ha enseñado eso?” Un
viejo de setenta años se encolerizó conmigo. No sabía preparar un fuego. Estuve largo
tiempo observándole, y después le pregunté: “¿Qué haces?” “Joven, sé lo que hago”,
respondió. Cuando terminó, roció la madera con gasolina y lanzó la cerilla. “Así es como
ha de hacerse”, dijo el hombre. Le advertí: “antaño, ¿tenían gasolina?” “¡No!” “¿tenían gas-
oil?” “¡No!” “Entonces, ¿qué utilizaban?” Permaneció silencioso un largo momento y
después añadió: “pero se necesita mucho tiempo para encender un fuego así”. “No, si sabéis
construir un fuego es rápido, incluso más que con gasolina”. Si sabéis lo que hacéis y cómo
hacerlo, podéis encender un fuego tal que el calor enrojecerá las piedras. Estarán tan
calientes que el agua chirriará al tocarlas. Así es como deben estar las piedras.
Cuando las piedras ardientes son llevadas bajo la Choza muchas vibraciones negativas
se escapan de las gentes a causa del temor al calor y el temor al negro.
El encuentro del agua y el calor va a crear el vapor. Los científicos os darán una
explicación sensata de este fenómeno, pero para nosotros el vapor que nace del agua y de
un calor intenso se llama el soplo del Abuelo, el soplo del Creador. Si utilizáis la tisana de
menta en lugar de agua, el olor será maravilloso en la Tienda de Sudación, y arrebatará
todos vuestros males de cabeza. Si la reemplazáis por salvia curaréis todos vuestros
problemas respiratorios, vuestros resfriados... Es el poder de la salvia cuando entra en
contacto con las piedras calientes. Pero no se necesitan todas estas plantas para purificarse,
puede utilizarse simplemente agua.
El hogar representa al Sol: Wi. En la Danza del Sol podéis ver que el hogar exterior
de la Tienda de Sudación tiene la misma forma que éste. Recuerda al emblema de mi
familia, el emblema de mi padre.
El hogar debe siempre tener este aspecto. Representa el mundo espiritual. Nuestro
poder viene de este medallón que representa un rostro con cuatro cuernos.
El primero representa el Bisonte, el segundo el Ciervo de cola negra, el tercero el
Águila, el cuarto el mundo espiritual.
Una vez el fuego en marcha, comenzáis a edificar la Tienda de Sudación, que será
relativamente alta. Muchos ignoran cómo hacerlo, y al final su Tienda de Sudación se
parece a un misil. Tienen miedo de curvar los sauces. De hecho, antes de arrancar la corteza
hay que curvar los sauces, los que evitará romperlos. En fin, los cuatro primeros sauces
darán la forma de la Choza. Habrá pues que deslizar las otras ramas por debajo de las
primeras.
Durante la Danza del Sol los Bailarines entrarán en la Tienda de Sudación cuando
aparezca la estrella de la mañana. Siempre hay ahí un guardián del fuego para preparar la
Choza a tiempo.
Ahora que los dieciséis sauces han sido atados juntos y forman una cúpula hay que
fijar sobre la Tienda de Sudación las sauces que simbolizarán las cuatro fases de la creación
del mundo. La Tienda de Sudación está rodeada por cuatro círculos. El primero está puesto
a un pie del suelo. Deja libre la puerta de Tienda de Sudación. Se necesitará un trozo de
sauce blanco para acabar este círculo y formar el arco de la puerta. Se coloca el segundo,
después el tercero, y finalmente el cuarto, que se situará en la cima. No se pondrá sobre la
Tienda de Sudación hasta que los ciento cuatro saquitos de tabaco sean fijados en ella.
El primer círculo simboliza la primera fase de la creación, y representa las Espíritus
Superiores. Es un círculo sin fin. El segundo simboliza los Espíritus Asociados y
Superiores y evoca la segunda fase de la creación. El mundo no fue creado en siete días. Se
necesitaron millones de años para que se formase la Tierra. Al nivel del Gran Espíritu el
tiempo carece de final, se desplaza en un círculo. Nacemos, vivimos y volvemos a nuestra
posición original. La tercera fase de la creación es representada por el tercer círculo, y ve la
creación de los Espíritus Subordinados. Finalmente, el último círculo recuerda la cuarta
fase de la creación y el nacimiento de los Espíritus Inferiores. Ahora nos encontramos en
esta cuarta fase.
Si tenéis musgo, salvia y menta, esparcid estas plantas sobre el suelo de la Tienda de
Sudación y sentaos sobre ella. Pero cuando con las hormigas y arañas que viven en el
musgo, podrían picaros. Debéis respetar su casa. Estos insectos se vengarán de vosotros o
vuestros vecinos si no les tenéis ningún respeto. Os picarán, no porque seáis malos sino
porque destruís su casa. Yo haría lo mismo.
El túmulo sagrado
La tierra que viene del hogar central de la Tienda de Sudación se coloca, pues, a la
derecha de la puerta de la Choza, a un pie de distancia. Alrededor de este túmulo se plantan
veinticuatro trocitos de sauce blanco. Hay dos por cada mes del año para recordar los lados
positivo y negativo de todas las cosas. Se aplana la tierra del túmulo y la que quede
delimitará el camino que conduce al fuego, llamado Abuela Unci. Una vez dibujado este
camino está prohibido atravesarlo. Si queremos ir al otro lado de la Tienda de Sudación es
preciso dar la vuelta yendo del Oeste al Norte. Sólo lo atravesaréis cuando entréis o salgáis
de la Tienda de Sudación.
Sobre el túmulo sagrado dispondréis la Pipa sagrada sostenida por dos trozos de
madera ahorquillados. La Pipa será orientada con su hogar hacia el Oeste. A veces puede
instalarse el cráneo de un bisonte de cara al Sur. Finalmente, se planta un estandarte, cuya
extremidad inferior está pintada de negro y la superior de rojo. Hacia su mitad se le unirá
un rabo de ciervo, y una pluma de águila lo coronará en su cima. El estandarte será de un
metro ochenta de altura y estará dividido por el extremo. A veces está rematado por cuatro
cuernos, cada uno dirigido hacia una dirección den viento. Utilizamos a veces el último, el
cráneo de bisonte; la pluma de águila y la cola de ciervo reunidos para una Tienda de
Sudación. Estos cuatro elementos recuerdan el canto profético: “mi vida es la de las hiervas
y las plantas...” Al principio, no teníamos más que el túmulo sagrado, pues sólo había la
Tierra: “Sobre la Tierra brotarán las hierbas. Mi vida es la de las plantas y las hierbas. He
vivido de las plantas y de las hierbas, pero esta vida ha terminado...”
“Mi vida es la del hombre blanco. Hablo, actúo como el hombre blanco, pero todo
ello se ha desvanecido en el pasado...”
Se abre una nueva puerta: “mi vida es la del Ciervo de cola negra...” El estandarte que
lleva este emblema simboliza la supervivencia del género humano con el propósito de
volver a enseñar a los hombres a sobrevivir por medio de las plantas y a respetarlas. “Mi
vida es la del Ciervo de cola negra, volveré a la cima de la montaña, aprenderé de nuevo a
respetar a la Tierra, las plantas, los árboles, el agua, el aire para que nuestro pueblo, nuestra
nación, viva”. Este canto es muy antiguo, profetizaba la venida del hombre blanco mucho
antes de que sucedieran tales cosas.
Tratamos de enseñar que ser indio es una forma de vivir y no una cuestión de sangre.
Podéis objetar que estas enseñanzas no os convienen, pues no sois indios. De hecho,
vuestro espíritu está lleno de clichés. Si un día venís a preguntarme: “¿qué pensáis de
nosotros en tanto que hombres blancos?” os responderé: “hablad con otro”. Por el contrario,
el día en que vengáis a decir: “¿qué pensáis de nosotros en tanto que seres humanos?”
Entonces os hablaré.
Debéis sobrepasar este sentimiento de ser blanco. Ser blanco no tiene relación alguna
con el color de la piel. Un hombre Wicasa Ska puede ser indio, blanco o negro. Es un
individuo que hace el bien, que ayuda a los demás. Es difícil hablar del color de la piel en
Europa, pues las razas están mezcladas. En los Estados Unidos las cuatro razas se fusionan
ahora para no formar más que una.
En el origen todos los seres eran enseñados a partir del Árbol de la Vida. De este
árbol han nacido las cuatro direcciones del viento. De este árbol fueron enviados los
profetas en las cuatro direcciones del viento con el propósito de enseñarnos el respeto a
toda vida, a nuestra Madre Tierra. “Al final volveréis al Árbol de la Vida y me diréis lo que
habéis hecho”.
Al hombre del Oeste le fue dado el poder de invención. Era la raza Europea. Pero
habéis perdido el control de las máquinas que habéis inventado. Por eso tenemos que
volver. El hombre del Norte vuelve para enseñaros cómo debería ser vuestra existencia: una
vida de amor, de respeto y de comprensión. Son las mismas enseñanzas que las de
Jesucristo, un profeta de su tiempo. Le necesitabais cuando vino hablar de la Tierra. Sólo
nos acordamos de Jesucristo, olvidando los otros profetas que vinieron más tarde. Hubo
numerosos, de todas las razas. El color no tiene importancia. En el mundo del Creador, en
el mundo de los Espíritus, no hay colores. Sólo hay colores en vuestro mundo, un vuestros
cerebros adoctrinados por vuestra educación. Los animales no los conocen. Si una perra
negra tiene cachorrillos blancos no los rechazará a causa de su color. Sólo el ser humano
puede actuar así. Si un hombre y una mujer blancos tienen accidentalmente un bebé negro
el hombre acusará a su mujer: “vete de aquí, me has engañado con un negro”. Ni siquiera
comprende que quizá la familia de su mujer, o la suya propia, tiene sangre negra desde hace
generaciones. Los prejuicios raciales son muy fuertes en este mundo.
Al hombre del Norte le fue dada, por tanto, la tarea de cuidar de la Tierra, de las
plantas, de los animales.
Al hombre del Este le fue dado el poder de la electricidad. Es al Oriental el que tuvo
éxito en este dominio.
Al hombre del Sur se le asignó la tarea de cuidar del agua y de los peces. Hoy en día
se le conoce como hombre negro.
A cada hombre de las cuatro direcciones le fue dado en poder. Cuando uno de los
cuatro pierde su control es momento de que los otros tres intervengan.
“Mi vida es la del hombre blanco” se termina. Tenemos que retornar a las enseñanzas
del origen para poder sobrevivir. Ello no significa que volvamos a la edad de las cavernas.
Si no tenemos cuidado ello sucederá con toda seguridad. Nosotros nos destruiremos, pero la
Tierra siempre vivirá. Tras millones de años nacerá una nueva raza de hombres. Debemos
controlar aquello que creamos, sobre todo las bombas atómicas y de neutrones. Los indios
hablan de la paz con la Pipa Sagrada. El hombre blanco habla de guerra con la Biblia.
¿Cuál tiene la razón: la paz o la guerra?¿Vivir en armonía, como hermanos, o vivir como
enemigos y combatirse los unos a los otros? ¿Cuál de los dos es más primitivo? Yo diría
que el hombre blanco, que quiere combatir por el placer de la guerra.
El Creador no deseaba que nos volviéramos así, puede destruirnos muy fácilmente, en
cuestión de segundos. Deseamos evitar esta catástrofe.
La Ceremonia
Al entrar a al Tienda de Sudación pasaréis entre el túmulo sagrado y la Choza. No
atravesaréis el camino Unci. Os sentaréis a derecha del hombre médico que es el primero en
penetrar en el interior. Al entrar, olvidaréis todo lo que se os ha enseñado, sólo pensaréis en
el calor, que os quemará los ojos. Os preguntaréis qué estáis haciendo allí. “Déjeme salir,
yo no forma parte de esta enseñanza, aún no estoy preparado”. Deberéis concentraros
entonces en vuestro lado espiritual, la parte derecha vuestro cerebro, que los dogmas
religiosos han atrofiado. Sólo veis la parte izquierda, que os permite memorizar oraciones.
Es así que os sentiréis aturdidos por la oscuridad. Nunca la tengáis miedo; la noche es el
tiempo de las ceremonias. Es el tiempo en que viajan los espíritus, los fantasmas. El día es
mucho más peligroso, pues entonces el hombre ve claro. En la oscuridad no puede nada
contra vosotros.
Nos sentamos entre cada sauce, correspondiendo cada lugar a cada uno de los
dieciséis problemas humanos. Estos problemas son dieciséis, ni uno más ni uno menos.
Hemos de advertir que la mayor parte de las veces estos lugares no son observados más que
durante las curaciones. El único lugar en el que nadie se sienta se sitúa entre el uno y el
dieciséis. Es el lugar donde el agua, el aire y el fuego se unen a la Tierra. Los cuatro
elementos naturales se combinan a la entrada de la Choza. Sólo el agua ocupa ese lugar.
Para lagunas personas que han estudiado mucho durante su vida, y por eso aprenden
bien la espiritualidad de la Tierra y comprenden las enseñanzas espirituales, su espíritu está
en las estrellas y todo esta fuerza cósmica exterior. Entonces su lugar se sitúa en el círculo
interior, más cerca de las piedras. Ahí se sientan todas las personas que tienen problemas
con las plantas. Inmediatamente, muchos que se sienten llamados así se preguntan si vienen
de otro planeta: de Marte o de Venus o del centro de la Tierra.
Es interesante señalar que este razonamiento testimonia el deseo de ser más que los
demás. Una persona de la que se dice que forma parte del pueblo de las estrellas es
simplemente una persona que tiene una comprensión espiritual de las estrellas, pues no hay
nadie sobre Marte ni sobre ninguna de las ocho estrellas de la mañana. Están desiertas, lo
único que hacen es girar. Hay otros seres en otras dimensiones, en l energía creadora, pero
no en la energía física de las estrellas, de la Luna y del Sol.
Una vez que han entrado todos, el guardián del fuego aporta las piedras con un bieldo;
antaño utilizábamos cuernos de alce, pero con ello desaparecían nuestros hermanos los
animales. La primera de todas sirve para cargar la Pipa cuando se fuma, y luego para
quemar el cálamo aromático, el cedro y la salvia. A continuación se la saca de la Choza y es
llevada por la izquierda del camino Unci, hasta la extremidad Oeste del círculo que rodea el
fuego. Ahí es depositada sobre el terraplén y simboliza a Wakinyan, uno de los Espíritus
asociados. El guardián debe girar sobre sí mismo cuatro veces hacia la izquierda, llevando
la primera piedra del hogar, el hombre médico sentado en el interior le guía para que la
deslice en el centro.
Esta piedra simbolizará la Tierra, cuyo color sagrado es el verde. Se trae la segunda,
el guardián del fuego debe girar sobre sí mismo cuatro veces hacia la derecha, avanzando
por el camino Unci. Es depositada en el Oeste, cuyo color sagrado es el negro. La tercera
piedra es tirada de la misma manera, pero girando sobre la izquierda cuatro veces; será
depositada al Norte, cuyo color sagrado es el rojo. En cuanto a la cuarta, depositada al Este,
cuyo color sagrado es el amarillo, el guardián del fuego deberá también girar cuatro veces
sobre su derecha mientras la lleva.
La quinta será colocada al Sur, cuyo color sagrado es el blanco, dirección del mundo
espiritual. La sexta estará encima de la primera y simboliza al Creador, su color es el azul.
Tras estas seis primeras piedras se pueden entrar en cualquier número, ello depende de la
persona que dirige la Choza.
El vapor dilata los poros de la piel y expulsa todas las enfermedades fuera del cuerpo
por medio de la transpiración. Al salir es necesario enjuagar bien el cuerpo con agua fría
para eliminar bien toda traza de estas enfermedades.
Se darán cuatro vueltas, es decir, la puerta se abrirá cuatro veces. Al primera vuelta el
que conduce la Tienda de Sudación puede preguntar si alguien desea orar. El que vaya a
orar en silencio deberá decir: “todo es mío” o “toda mi familia”, o “Mitakuye Oyasin”, al
final de su oración, a fin de que quien esté a su lado pueda a su vez orar. El que conduce la
Tienda de Sudación puede verter agua sobre las piedras durante estas oraciones silenciosas.
Para abrir la puerta hay que gritar “Mitakuye Oyasin”, en dirección al guardián del fuego.
Se saca el agua. Pedís al guardián un cierto número de piedras y hacéis de nuevo el balde
de agua. La segunda vuelta comienza una vez cerrada la puerta. Se le concede plena
libertad a la persona directora. Si la Choza esta demasiado cliente para vuestro gusto debéis
decir “Mitakuye Oyasin”, y podréis salir al final de una vuelta, pero una vez fuera no
podréis entrar de nuevo, ya que romperíais el círculo de las oraciones.
Orad por las generaciones futuras, los niños, los ancianos, los animales, el fuego, el
aire, el agua, la Tierra, y orad por los demás. Cuando la puerta de la Choza se abre los
sentimientos positivos, el aire, las oraciones, escapan al exterior con el vapor. Es el soplo
del Abuelo. Y el viento dispersa estas oraciones en cada una de las cuatro direcciones de la
Tierra. No veréis todo esto, pero es real.
Nadie se ha enfriado en la Tienda de Sudación. Vuestra concentración en la oración
os hace olvidar el frío y el calor. Estáis unidos a la Tierra, os convertís en parte integrante
de la Tierra. En Inipi nos concentramos sobre la purificación del físico, de la mente, de las
emociones, del espíritu. No hemos fumado la Pipa, pues vuestra enseñanza está ahí, en
vuestra Tierra. No tenéis necesidad de la Pipa. Los griegos utilizaban hace más de mil años,
igual que nosotros ahora, la salvia y el cálamo aromático para las purificaciones y las
curaciones. Hay mucha semejanza entre las enseñanzas de las tradición lakota y las de la
Iglesia Ortodoxa, griega y rusa. Sus símbolos son idénticos a los nuestros.
Podéis, asimismo, desear subir a la colina porque tenéis sueños, visiones y buscáis
vuestro camino. Os dirigís al hombre espiritual y él os promete su ayuda en vuestra
búsqueda. Sobre la colina podéis tener una visión o un sueño. Cuando descendéis entráis
bajo la Tienda de Sudación y relatáis vuestra visión. El hombre espiritual os ayuda a
comprenderla. A partir de este momento vuestra visión, cualquiera que sea, debe dirigir
vuestra vida. Tal vez hayáis recibido un poder de curación o de videncia, o vais a trabajar
con las piedras... Ya hemos enumerado los diferentes dominios en los que puede trabajar
una persona espiritual.
El último día, una vez terminada vuestra Búsqueda, no olvidéis reunir a todos
vuestros amigos, orad con ellos bajo la Tienda de Sudación, ofrecedles un almuerza de
fiesta y distribuid regalos a cada uno de ellos. Sabed dar vuestros amigos aquello de que
tienen necesidad. Esta es una manera de practicar la humildad. Los indios no esperan hasta
Navidad o un aniversario para hacer regalos, también los dan en las ceremonias, es por eso
que nunca poseen nada. Cuanto más días más recibís. ¡Una vez que dí un caballo, a la
Danza del Sol siguiente recibí cuatro! Lo mismo sucede con la oración: orad por una
persona y dos personas orarán por ti. El regalo os procura un sentimiento muy positivo.
Desgraciadamente, el sistema capitalista en el que vivís no os incita apenas a regalar. El
verdadero significado del regalo no es bien comprendido, algunos sólo dan con el fin de
obtener deducciones sus impuestos.
Actualmente la Danza del Sol sólo está adaptada a los indios. Entre los Bailarines más
viejos algunos se han preparado durante veinte a treinta años. ¿Cómo una raza joven que no
sabe nada de la Danza puede conocerlo todo en tres años de enseñanza y querer participar
en la ceremonia al cuarto año, mientras que un hombre sabio se prepara quizá durante
treinta años?... Hay que ser pacientes para prepararse para las ceremonias. He hablado de
Antílope Cuerno Hueco, que aguardó cuarenta años entre sus dos Búsquedas de Visión.
Durante estos cuarenta años acumuló bienes materiales, pero un día un viento nuevo sopló
sobre él, y se deshizo de sus bienes. Volvió a la espiritualidad. Así pues, la esperanza nunca
se pierde... para nadie.
La Danza del Sol, hoy en día, se hace principalmente para los indios. Debemos ante
todo enseñar a nuestro pueblo, pues hemos sido denigrados de tal modo que debemos
conservar nuestras enseñanzas en nuestro pueblo. Bailarines de tribus diferentes vienen
cada año. Este verano de la Danza de Leonard Crow Dof (Perro Cuervo) habrás más ciento
cincuenta Bailarines. Así pues, nos daremos a conocer el primer día. Si venís a las Danzas
quizá os irritéis y enervéis con los niños que gritan. Familias enteras vienen a las Danzas,
pero el ruido de los niños es uno de los más bellos que existen. Perder el sonido de su voz
es la cosa más triste. Morir de hambre es el más terrible de las muertes, y cuando los niños
pueden hablar respetamos este ruido. En la Danza del Sol los niños corren, gritan, pero ello
no nos molesta, pues estamos ahí para rezar. En vuestro sistema se os enseña a no soportar
este ruido.
En la Danza del Sol alimentamos a todos los que vienen. Todo el alimento es gratuito.
Cuando se organiza una Danza se necesitan unos cinco mil dólares, pues se alimentan a mil
quinientas o dos mil personas cada día, durante cuatro días. Muchas tribus que no conocen
las costumbres del pueblo lakota nos critican, pues gastamos mucho dinero. Sólo los
Bailarines no comen.
Para mi pueblo, mi familia, Wiwang Wacipi es una ceremonia muy sagrada. En la
Danza de Perro Cuervo cantan la canción de Ciervo Paticojo, “Tahca Ushte wiwang
wacielo”. Dura dos horas. Cuenta la historia de mi familia y habla de la Danza. Hace
generaciones que realizamos esta ceremonia.
Tiene origen en el hecho de que los hombres no sufren durante la vida, mientras que
nuestras hermanas sufren durante sus años de fertilidad. Los hombres no sufren, a menos
que se hagan daño por su propia estupidez. La Danza del Sol fue dedicada a las mujeres.
Un hombre comprende que no tiene dolor, y es así que regala a la mujer sus sufrimiento
físico cuando su piel es atravesada. Los hombres danzan para ellas. Un hombre que soporta
las llagas de la Danza del Sol comprende el dolor experimentado por la mujer durante el
alumbramiento. Las llagas son sobre el pecho, en la espalda y a veces en el brazo. La Danza
del Sol ha sido a menudo mal interpretada por nuestras mismas tribus. Cuando los católicos
la descubrieron calificaron inmediatamente a los indios como paganos adoradores del Sol.
Pensaron que nuestro Dios era el Sol. Hoy en día los católicos se unen a nosotros y
participan en nuestra Danza. Comprenden que hay mucha espiritualidad en las enseñanzas
de los indios y que ellos no poseen la clave del mundo espiritual. Hemos debido luchar y
sacrificarnos por centenares para guardar nuestras tradiciones; la recompensa llega
finalmente, y somos dichosos por ello.
La Danza del Sol no puede llevarla a cabo una persona de ojos azules, ello revela el
buen sentido, pues el Bailarín fija su mirada en el Sol del amanecer a la puesta. Una
persona de ojos negros tiene un filtro ocular natural. Las diferencias de colores de rojo y de
piel se remontan a una época en la que hubo falta de Sol en ciertas regiones del mundo, el
Sol no era suficiente para imprimir el color.
Esta ceremonia no se dirige ya a las mujeres, salvo en un caso muy preciso. Si una
mujer tiene a su cargo toda la educación de sus niños, porque se encuentra sin marido,
puede, si lo quiere, participar en la Danza del Sol. En este caso sólo atraviesa la carne de
sus brazos.
Hace cuatro años un europeo que seguía nuestras tradiciones desde hacía tres años
pidió hacer una Búsqueda de Visión. El guardián de la Pipa le aconsejó aprender el lakota
antes de subir a la colina donde se guarda la Pipa. Se atrevió a ascender pese a todo.
Cuando descendió sollozaba como niño. Relató que había venido una mujer, que le había
hablado, pero que no había comprendido una palabra de lo que le había dicho, pues hablaba
en lakota. Decidió volver y aprender el lakota con la esperanza del que el día en que
volviera a subir a la colina esta mujer vendría de nuevo a aportarle un mensaje.
Muchas personas vienen a orar con nosotros. Si venís necesitaréis ignorar todas las
cosas de plástico que podáis ver. No os asombre si nuestros niños beben Coca-Cola o
tenemos televisión. Los indios viven con la modernidad. También nosotros debemos
simplificar nuestra vida. No deseamos vivir como nuestros abuelos, igual que a vosotros no
os gustaría volver a vivir en una gruta. La tecnología moderna forma también parte de la
comprensión espiritual. Y detrás de esta modernización las enseñanzas todavía están ahí.
La primera Danza tuvo lugar hace más de dos mil años. El primer hombre en danzar
tiraba de cráneos de bisonte cosidos a su espalda por correas de piel de bisonte. Daba la
cara hacia . Había tenido una visión que le ordenaba danzar así. Marchaba, marchaba,
y no había río, lago, océano, montaña que pudieran detenerle. Era un poco como el viejo
bisonte de que he hablado, corría hasta morir de agotamiento. Todo lo que obstruía su paso
era eliminado. Este hombre marchó y marchó hasta arrancarse las ataduras que le retenían a
los cráneos de bisonte. Si quedaba pillado entre las raíces de un árbol debía tirar hasta
romperlas.
Existen diferentes Danzas conocidas de modos diferentes, pero son fieles a las
enseñanzas de mi padre.
Hace ya algún tiempo uno de mis sobrinos conducía la Danza de Selo Cuervo Negro;
sólo hace veinticuatro años esto. El segundo día de la Danza vinieron varios hombres
médico, seis exactamente. Perro Cuervo estaba entre ellos. Llamó a mis sobrino y le dijo:
“sobrino, ¿puedo ir al centro, bajo el Árbol, y Orar?” Mi sobrino contempló el área de
Danza, a cuyo alrededor se habían colocado cuatrocientos cuatro saquitos de tabaco, y se
volvió hacia Perro Cuervo: “¿sabes lo que significan estos sacos?” “Claro, sobrino, soy yo
quien te ha enseñado su significado”. “¿Te acuerdas de lo que dijo mi tío Ciervo Paticojo?
Yo conduzco esta Danza del Sol este año. Puede que seas tú, Perro Cuervo, quien la
conduzca el año próximo, pero mientras que yo esté aquí no entrarás en área sagrada”.
Para un hombre médico es un gran honor que un Bailarín del Sol le hable así. Pues es
un honor para un profesor ver que su discípulo sabe utilizar sus enseñanzas contra él
mismo. Perro Cuervo no podía decir: “soy hombre médico, puedo entrar”, pues ello habría
estado en desacuerdo con sus propias enseñanzas. Tras un instante se volvió hacia mí y
dijo: “tenemos a un hombre médico muy fuerte para el futuro”. “Sí, es verdad”. No se
puede entrar en círculo cuando las ofrendas de tabaco están instaladas.
Este mismo segundo día, al atardecer, sucedió algo extraño. Una nube venía del
Oeste, una nube muy grande. Tenía relámpagos en el interior, el trueno aumentaba. Eran las
cuatro de la tarde. Perro Cuervo, Campamento de Pasos (Moves Camp) y otros hombres
médico saltaron de su silla y huyeron lejos. Campamento de Pasos fue para un lado y Perro
Cuervo al otro. En ese momento la Danza había terminado por este día, y mi sobrino vino
hacia mí: “Esta nube que llega es muy grande; ¿Qué puedo hacer?” “Continúa Danzando,
pero antes voy a entrar en círculo sagrado, conducido por esta muchacha que porta la Pipa.
No quiero entrar solo en el área sagrada”. La muchacha tomó su Pipa, vino hacia mí y me
condujo al centro, cerca del Árbol de la Vida. Conduje una ceremonia de la Pipa, y la nube
se dividió en dos. Les dije: “Terminad la Danza y luego id a purificaros a las Tiendas de
Sudación. Pero una vez que hayáis terminado, cerrad vuestras tipi y prepararos para una
enorme tempestad. Después la noche será calma y el tiempo mejor”. Terminaron la Danza,
conduje dos o tres Tiendas de Sudación y volvimos a las tipi. Uno de los Bailarines se
volvió hacia mí y me dijo: “gracias, tío, por haber dividido esta nube para que no lloviera
sobre nosotros”. Le respondí: “estad preparados, pues dentro de quince minutos no podréis
ver nada de tanto que lloverá. Si debéis ir a los servicios, despachaos, pues no podréis
volver a salir en las próximas horas. Pero no he sido yo quien ha dividido esta nube; había
aquí dos hombre médico, Perro Cuervo y Campamento de Pasos, han partido tan rápido que
han arrastrado a las nubes con ellos”. Todos se echaron a reír. Aguardamos la tempestad.
Acabado todo no quedaba ya una sola nube, el cielo estaba azul. Todos los mosquitos
estaban muertos, ahogados. Fue una noche magnífica.
Todos los hombres médico que huyeron habían pensado que llovería los días tercero y
cuarto. Creo que se apercibieron en su error, pues al cuarto volvieron.
Lo acostumbrado es que nunca llueva durante una Danza del Sol. Esta vez llovió,
pero los Bailarines no fueron tocados. Llovió para purificar. Tenía la impresión de que
alguien hablaba espiritualmente de este modo.
El tercer día fue el más bello de esta Danza del Sol. Al cuarto día mi sobrino Richard
Camp volvió y dijo a mi otro sobrino: “quiero ser atravesado hoy”. “Sí, de acuerdo”,
respondió él, “pero no lo serás bajo el Árbol Sagrado, lo serás fuera del círculo”.
Normalmente los Bailarines son todos atravesados bajo el Árbol Sagrado, en el centro; pero
mi sobrino no quiso que Richard entrase en el círculo sagrado.
Los jóvenes a los que enseñamos hoy en día serán hombres médico muy poderosos.
Siguen nuestras enseñanzas a su manera, pero respetando nuestras leyes.
La Danza del Sol de Crow Dog es diferente de las otras. Danzamos como nuestro
pueblo danza hace doscientos años. Los Bailarines pueden ser colocados de diferentes
maneras, según el hombre médico que conduce la ceremonia. Las mujeres están detrás de
los hombres para sostenerles, pues comprenden por qué un hombre sufre durante la Danza
del Sol. Los bailarines siguen al Sol y le dan la cara durante la Danza. Antes de que
cambien de lugar les hago efectuar grandes círculos. Es algo magnífico de ver.
Esta ceremonia forma parte de los ritos familiares. Cuando un niño muere a corta
edad el padre y la madre conservan un mechón de sus cabellos durante un año. Así
guardamos la memoria, el espíritu de aquellos a los que amamos. Un año más tarde los
cabellos son quemados, liberando al espíritu en el mundo espiritual. Hacemos esta
ceremonia para asegurarnos de que el ser amado parte hacia el mundo espiritual. Antaño
numerosas familias seguían este rito, pero ahora sólo los tradicionalistas comprenden
todavía el significado de esta antigua ceremonia.
Tenemos tres círculos de vida: el círculo físico, el círculo del fantasma y el círculo del
espíritu. Una persona que se suicida entra en círculo del fantasma, no puede acceder al
círculo del espíritu salvo que se digan oraciones por él. Eso no tiene nada que ver con el
fuego del infierno de los cristianos, donde se precipitan todos los malvados. No tenemos un
diablo con cuernos y pies de macho cabrío. Eso constituye un abuso del animal y del
elemento fuego. Una persona pone fin a sus días porque ha recibido una educación
demasiada intelectual que le ha supuesto una deficiencia mental. Tenemos un ejemplo de
este género de persona instalada en Washington en este momento; es una situación muy
peligrosa. En tanto que indios debemos vigilar y refrenar este sistema educativo para que
no nos destruya. Los que no nos comprenden no llaman paganos. A menudo son indios que
han sido educados como blancos y que por tanto no saben de la espiritualidad india. Sus
abuelos, sus padres no les han enseñado nada. El saber de un pueblo debe ser transmitido de
generación en generación. La lengua, la cultura, la espiritualidad no morirán mientras la
Tierra viva.
Esta ceremonia se hace para las muchachas, y las familias deben organizar una gran
fiesta y regalar en honor de sus hijas.
En ese momento se enseña a la muchacha lo que sucede durante las reglas, los que
debe hacer, cómo debe conducir su vida.
Esta ceremonia sólo tiene una canción. Todas las demás tienen varias. Esta ceremonia
es muy antigua. Es la alianza entre dos hombres. Ser hermanos, he ahí el camino.
Establecer un parentesco, hacerse un amigo, ligarse con un ser amado, aceptarlo en tanto
que parte de sí mismo, devenir uno con él. Hunka es una ceremonia muy espiritual. Llegará
un día en que todos los hombres no serán más que uno, en que todos los hombres
comprenderán que el color de su sangre es el mismo. Todos somos semejantes cualquiera
que sea el color de nuestra piel.
En el origen existía una lucha entre dos tribus: los Pawnee y los Lakota. Los Pawnee
estaban disgustados pues los Lakota les habían arrebatado su liebre sagrada. Esta lucha
duró largo tiempo. Los Pawnee se morían, ya no tenían su liebre sagrada. Un día un hombre
médico pawnee llegó accidentalmente a la aldea lakota durante una tempestad. Se encontró
ante la tipi del hombre médico lakota. Entró. Ambos eran jóvenes, ambos eran hombres
médico. En lugar de combatirse se sentaron y oraron juntos. Un anciano de la tribu vino y
dijo: “he tenido una visión que anunciaba este suceso. En mi visión se me han dado los ritos
de una ceremonia que debemos celebrar”. El joven pawnee volvió a su casa. A la primavera
siguiente toda la tribu pawnee fue a donde los lakota. Delante marchaba el hombre médico,
que llevaba maíz para el pueblo lakota... por primera vez. Era la primera vez que se les
daba maíz. Los lakota les ofrecieron arroz... por primera vez. Por primera vez les daban
arroz.
Hubo una ceremonia entre las dos tribus en la que los dos jefes fueron y cantaron esta
canción. Puede cambiar según el hombre médico. Dos hombres que vienen uno hacia el
otro y se alían por esta ceremonia para convertirse en hermanos están unidos por los lazos
más fuertes que la sangre. Morirán uno por el otro. No podéis matar a uno sin matar al otro.
Si matáis a unos de los dos el otro hará cualquier cosa por mataros. Cada una de las
familias debe aceptar a este hijo que le es así dado.
En el momento actual sólo hay un hombre que tenga un Hunka: Leonard Crow Dog.
Su hermano es Sy Crow Dog Griffin, un hombre blanco de cabellos y barba rojos. No
podéis burlaros de él porque es el hermano de Leonard Crow Dog. Tiene derecho a llevar el
nombre Crow Dog. Sy moriría por Leonard y Leonard moriría por Sy. Os padres de
Leonard han aceptado a Sy como su propio hijo.
Esta canción puede también ser cantada durante la ceremonia de matrimonio. A veces
pido a los futuros esposos que la canten, sólo si la conocen.
Desde hace algunos años hacemos Chozas para las parejas casadas con el fin de
reforzar su lazo matrimonial.
Estas enseñanzas espirituales poseen todas el mismo poder espiritual. Pero Inipi es la
primera. Inipi, la ceremonia de la Choza de Sudación, existía mucho antes que la Pipa. Esta
ceremonia de purificación y curación es muy antigua. La técnica de datación por el carbono
14 ha permitido evaluar la edad de algunas Tiendas de Sudación entre cincuenta y ochenta
mil años, es decir, cuarenta y ocho mil años antes del cristianismo y antes de las religiones
orientales. Estas Tiendas de Sudación eran idénticas a la nuestra y el ritual era el mismo.
Es preciso comprender bien este ritual antes de abordar los otros. No tengáis prisa.
Implicaos totalmente en esta ceremonia de la Choza de Sudación, y aceptad que estáis en
una fase de investigación. Todos buscamos. Yo también busco: para profundizar mi
conocimiento sobre vuestra evolución. Vuestras ciudades, vuestra política no me interesan,
sólo vuestra Tierra me interesa, pues es mi Madre y hago lo que puedo por protegerla,
enseñándoos la verdad.
En la Tienda de Sudación hay dieciséis sauces erguidos que forman una cúpula. El
número dieciséis recuerda los dieciséis misterios.
Muchos libros os han contado cómo fue creada la Tierra. Numerosos autores han
escrito sobre este tema sin haber seguido el amino espiritual, ni haber comprendido lo que
era la espiritualidad. La mayoría de vosotros sólo conoce la versión del Antiguo
Testamento, que dice que la Tierra fue creada rápidamente, en seis días. Para nosotros, la
creación de la Tierra se sitúa millones de años antes de la relatada por el Antiguo
Testamento. La Tierra ha involucionado, ha hacho su revolución y se ha vuelto a crear. La
ciencia moderna se ha unido a nuestra comprensión de la creación de la Tierra. En lo que
nos concierne, nunca hemos sido científicos, nunca hemos aprendido eso en la escuela.
La espiritualidad india habla de dieciséis grandes misterios. Así los llamamos, pues
datan de millones y millones de años. Son tan viejos que hemos perdido su origen; y su
relación con nosotros, con la Tierra, con los astros y los planetas permanece presa del
misterio.
Wi, el Sol, fue el primer creado. El segundo fue Skan, el Movimiento, todo lo que da
vueltas en el universo. Todo es movimiento, vayáis donde vayáis: vuestro aliento, vuestros
ojos, vuestra sangre, vuestros pies, los árboles, los peces... Nada es móvil. Ninguna piedra
carece de movimiento. Después creó Maka, la Tierra, que millones de años más tarde
tomaría la forma física con que la conocéis. Las Piedras, Inyan, fueron creadas en último
lugar.
En los dieciséis grandes misterios, Inyan, el peñasco, es uno de los cuatro Espíritus
Superiores. Inyan es Tunkasila, vuestro abuelo, Dios, el Gran Espíritu Wakan Tanka,. El
peñasco está vivo, todas las piedras están vivas. Ciertas piedras pueden penetrar en las
ondas de vuestro cerebro, de vuestro pensamiento. La amatista penetra en el lado de vuestro
cerebro. El cristal transparente penetra en el otro lado, que corresponde a la tecnología, la
ciencia, la educación, la religión. Como sois religiosos vuestro cerebro se deja penetrar por
el cristal, y lo preferís. Os sentís menos interesados por la amatista, pues no sabéis nada de
esta piedra. Menos atención aún le prestáis a las piedras del camino, y sin embargo ellas
están vivas, forman parte de vuestro parentesco.
Al comienzo de todo los cuatro Espíritus Superiores sólo eran espíritus, cosas
invisibles como el Creador, y no cosas materiales.
Skan, el Movimiento, se volvió hacia Unk, la Piedra, que era la recreación, la otra
mitas de Maka, la Tierra. Tuvo lugar un consejo entre los ocho espíritus. El Creador Wakan
Tanka comprendió inmediatamente el problema y decidió que no funcionarían ni se
reproducirían más como espíritus, sino que tomarían una forma material. Wi fue por tanto
transformado en Sol, el manantial de la energía, Hanwi se convirtió en la Luna. Skan fue
utilizado para imprimir al Sol y a la Luna un movimiento de rotación del uno alrededor del
otro. El Viento se colocó en este movimiento para atravesar al universo. Aquí consideramos
la creación universal. El Viento fue tan fuerte que representó un problema para las estrellas
y las lunas. Maka tomó la forma de la Tierra. Carecía del agua que había sobre el planeta
Tierra. Tierra era un planeta de agua. El Viento insufló el agua sobre la Tierra, y fueron
creados Océanos y mares. Esta vez había tanta agua que se necesitaba una forma sólida
para que la Tierra se pudiese sostener. Entonces Inyan te convirtió el peñasco y después,
asociados a las fuerzas naturales de equilibrio, sostuvo a la Tierra sólidamente. Wakinya,
que habita en la piedra, se convirtió en la fuerza eléctrica. Es el espíritu que controla la
esencia de las nubes, el movimiento de los huracanes, de los tornados, de las tempestades.
Cada fricción de Wakinya sobre el océano provoca una ola. De cada una estas fricciones se
desprende tal potencia que una sola ola representa la cantidad de energía suficiente para
alimentar todas las bombillas del mundo durante una semana. Simplemente, no estamos lo
bastante civilizados para saber cómo recuperar esta energía. Maka, la Tierra, dijo al
Creador: “me has dado una forma, pero tengo frío”. Entonces el Creador le envió una
fuerza que le dio calor y luz, atribuyendo al Sol este poder de explayarse en energía solar.
Pero Maka no estaba suficientemente satisfecho: “tengo calor por un lado y frío por el
otro”. Entonces el Creador colocó la Luna al otro lado para que el Sol pudiera reflejarse en
ella y calentar el otro lado de latiera. A continuación le dio movimiento a la Tierra, y ésta
comenzó a girar de izquierda a derecha. Todo lo que el Creador ha creado va así, en
círculos, en un movimiento de rotación de izquierda a derecha. Observamos continuamente
este sentido de rotación. Al igual que otras fuerzas astrológicas el planeta Urano tiene
espirales de energía que van de izquierda a derecha alrededor suyo.
Antes de que fuera creado el hombre, e incluso antes de que fuera creado el animal,
habían pues ocho Espíritus. Cada Espíritu ocupó su lugar sobre la Tierra. En la cima de la
montaña, donde ya no hay vegetación, vive Wakinya, el asociado del Inyan, los espíritus
trueno. El hombre no va a orar a la cima de la montaña, no sobrepasa la línea de
vegetación, pues más allá está Inyan, el peñasco, la morada de Wakinya. Los indios llaman
a Wakinya el pájaro trueno invisible. Tiene ojos enormes, pero no ve; cuando los abre se
ven inmensos relámpagos. Carece de boca, pero tiene una voz terrible: el trueno que
escucháis tras el relámpago. También estaba Skan, el Movimiento, que con la ayuda de
Tate, el Viento, creó cinco hijos por día. Maka, la Tierra, y Hanwi, la Luna, se convirtieron
en los polos femeninos. Por eso decimos Abuelas cuando nos dirigimos a la Tierra y a la
Luna. Cada día cuatro de los muchachos recorrían la Tierra a lo largo y a lo ancho. El
anciano, el espíritu abuelo, permanecería en casa. Los hijos recorrían la Tierra para ayudar
a la Creación, creaban los árboles, las plantas... Cada día creaban alguna cosa sobre algún
lugar de la Tierra, y cada tarde volvían a su casa, a la casa de Skan.
Fue entonces cuando el Movimiento tuvo el capricho de divertirse con los vivos celos
que habían entre la Tierra y la Luna, creando Ywn, cuya belleza sobrepasaba de lejos la de
aquellas. Ywn se convirtió en la servidora de otros espíritus, pues sabía hacerlo todo. Un
día que los cinco muchachos estaban en la casa Ywn se presentó para proponerle a Skan su
ayuda. Los hijos de Skan nunca habían visto a una mujer, y Twn era muy bella, con largos
cabellos y un rostro muy fino. Ella no se les parecía, y comprendieron que rea la mitad
dulce de ellos mismos. Cada hombre, cada mujer tiene un polo femenino y otro masculino.
Ywn abrió el saco que portaba y les ofreció lo que poseía. Había de todo en este saco. Se
puso a preparar la comida para Skan y sus hijos, y se ocupó de todo por ellos. No prestaba
más atención a uno que a otro de los hijos, aunque sus preferencias eran para el más joven.
Cada día el primogénito pedía a su padre permiso para tomas una mujer. Quería desposarse
con Yum, pero eso era imposible, pues Yum era un Espíritu, era la diosa del amor, del
juego, de los deportes y del agua al mismo tiempo. Yun era un Espíritu Superior, mientras
que los hijos de Skan eran Espíritus Inferiores. Al primogénito le gustaba mucho tocar la
flauta, con lo que esperaba ganar su amor, Yun seguía prestando la misma atención a uno
que a otro. Un día, Skan llamó a sus cuatro hijos y les dijo: “ha llegado el momento de
crear al ser humano, pero antes es preciso crear la lluvia, la nieve, el granizo, el aguanieve
para que los vegetales que plantemos puedan brotar y el hombre pueda nutrirse de ellos”.
Los otros tres hermanos decidieron volver inmediatamente con su padre, aunque se
encontraban todavía a miles de kilómetros. Yun, la diosa del agua, los oyó aproximarse.
Mientras esperaban Skan y Yun prepararon al hijo joven para que reemplazase al
primogénito, y le dieron el nombre de su hermano mayor Ya. Desde ese día el Oeste se
llama Wiyohpetakiyahe. El segundo hijo, que marchaba hacia el Norte, se llamaba Wazi; es
así que el Norte es Waziyatakiyahe. Yanpa partió hacia el Este tomó el nombre de
Iwiyohiyanpatakiyahe. El cuarto era Okaha, y es así que el Sur se llama Itokahatakiyahe.
Los cuatro hijos de Skan fueron, pues, colocados en los cuatro puntos cardinales. Son los
cuatro vientos, que forman una cruz de proporciones perfectamente equilibradas. Vuestros
ancestros celtas utilizaban la misma cruz que la nuestra. Esta es la cruz original. Entre las
cuatro direcciones se sitúan las fuerzas negativas.
Estas fuerzas negativas son los vientos negativos que arrastran las tormentas. Esta
misma enseñanza se encuentra también en la astrología. La enseñanza espiritual india
contiene todo lo que vuestro sistema de educación sólo os ha enseñado a medias,
comprendidos los dominios de la biología, la electricidad y la meteorología. Nuestro
conocimiento es una forma de comprensión superior.
Esta la razón por la que dirigimos siempre nuestras oraciones a los cuatro puntos
cardinales en primer lugar, y después a la Tierra y a Wakan Tanka, el Creador. El Creador
está en todas partes por encima de nosotros, y la Tierra es nuestra Abuela; en su centro
tienen lugar las oraciones y los cantos.
A causa de toda la perturbación que Yun, esta bella joven, había engendrado, los
espíritus se reunieron en consejo. Celosa, la Tierra y la Luna quisieron expulsar a Yun para
siempre. Entonces intervino el Gran Espíritu e hizo de Yun la diosa del mar. En tanto que
diosa del mar, Yun se transformó en otra mujer, que fue denominada Ksa. Desde entonces
estas dos mujeres viven en el fondo del agua, siendo una positiva y la otra negativa.
Por aquella época el hombre podía hablarle a los animales, los árboles, las plantas.
Cuento a menudo a mis niños una historia a este respecto: “Hace muchos años una mujer
debió abandonar a su tribu, pues nadie sabía quién era el padre de su hijo. Esta mujer
ignoraba cómo cazar, cómo sobrevivir. Tomó asiento en una roca, llorando; un cazador
apareció. También él había sido expulsado de su tribu. Fue hacia donde se encontraba esta
mujer y le preguntó: “¿por qué lloras? “Porque tengo hambre, mi bebé tiene hambre”. Él le
dijo: “yo no tengo nada, pero te ayudaré”. Se volvió hacia un ciervo y le dijo: “¿querrías
dar tu vida para que esta mujer y su bebé vivan?” El ciervo se mofó de él: “no daré mi vida.
No puedes sobrevivir por ti mismo, no sabes cómo...” El Creador decidió intervenir y dijo a
los animales: “vosotros, los de cuatro patas, se os ha pedido que deis vuestra vida para que
esta mujer sobreviva, pero habéis rehusado. Ya no podréis comunicaros con los seres
humanos. Os cazarán hasta el fin de los tiempos para alimentarse. Seréis considerados
salvajes a los ojos de los hombres”. Después el Creador miró al hombre y dijo: “te daré un
intelecto Sicun, una inteligencia, a fin de que te encuentres por encima de todo lo que ha
sido creado sobre esta Tierra y comprendas”. El tercer Espíritu Inferior dado por el Creador
fue le Intelecto Sicun, cuyo objeto es que la vida tenga un sentido para el hombre.
El doceavo gran misterio fue Yumi. El Bisonte, el Oso, los Vientos y la Diosa del
Amor representan los Subordinados de los Asociados. Recordemos que los Asociados se
denominan así en relación a los Superiores. El Gran Espíritu creó entonces el decimotercero
gran misterio: el Espíritu del hombre, cuyo objeto es que tenga una sabiduría que él permita
vivir después de su muerte. El decimocuarto fue el fantasma. El decimoquinto gran misterio
es el Intelecto. A menudo me pregunto si el Gran Espíritu no ha cometido un error al darle
al hombre el intelecto. Un día un sabio me dijo: “el ha recibido el intelecto para destruirse a
sí mismo”. Rehusé creerle, pero cuanto más observo a la humanidad más caigo cuenta de
que casi es verdad. Los hombres educados se creen mucho más inteligentes que todos los
demás, pero a los ojos del hombre primitivo son estúpidos y totalmente ignorantes. Es en
ese momento que nos separamos de nuestros hermanos los animales de cuatro patas, de los
pájaros, de los peces, de los animales que reptan, de los insectos... Nos hemos disociado de
ellos y nos hemos convertido en los Amos del mundo animal. No nos hemos detenido ahí,
sino que hace 2600 años un hombre dijo que había que convertir a la mujer en sierva. Esta
opresión de la mujer proviene de la religión oriental, de las enseñanzas chinas. Y el
combate por la libertad comenzó. Esta opresión no existe en nuestras enseñanzas. El
decimosexto y último gran misterio concierne a lo material. Es una enseñanza que nos fue
aportada con la Pipa Sagrada por la Mujer Bisonte Blanca. Nunca os apeguéis a las cosas
materiales. El día en que caéis presos en la trampa de esta forma de apego, corréis hacia la
catástrofe. Es esto lo que nos ha permitido ser todavía hoy en día lo que siempre hemos
sido, y que nos ha impedido volvernos capitalistas o comunistas.
Antes de hacer una Búsqueda de Visión este amigo vino a verme y me dijo: “hermano
mío, me has enseñado durante seis años, me has enseñado todo lo que puede conocerse. Las
tradiciones de mi pueblo me son en adelante familiares, pero me falta una cosa. Querría
saber lo que les sucede a quienes ponen fin a sus días. Los cristianos hablan de infierno, de
pecado, pero los indios no hacen alusión a ello, ¿por qué?” Sólo pude responder con estas
palabras: “no puedo decírtelo, pues lo ignoro. Debemos ir a orar para descubrirlo”.
Entramos en la Tienda de Sudación y celebramos una ceremonia. Mientras orábamos una
imagen salió de la oscuridad. Me vi entrando en un desierto sin fin. Hacía calor, al arena
quemaba. A lo lejos alguien venía, y a medida que se aproximaba advertí que tenía vuestro
rostro, el mío, el de mi amigo, el rostro de la humanidad. Me dijo: “eres bienvenido al
desierto sin fin. Aquí no hay ni hambre ni sed, solamente la soledad y una marcha sin fin.
Aquí somos numerosos, marchamos por el mismo camino. ¿Qué quieres de mí?”. “he
venido para ver”, le dije. Tomó entonces el saco que levaba sobre su espalda, lo depositó en
el suelo y me preguntó: “¿deseas esto? En este saco se encuentran todas las riquezas del
mundo físico”. Se agachó, tomó un puñado de arena y lo lanzó. Todas las riquezas del
mundo aparecieron. “¿Deseas esto?” Si así es, toma este saco contigo y te convertirás en el
hombre más rico del mundo del que vienes. Sólo una cosa pido a cambio: que ocupes mi
lugar cuando el círculo de tu vida se haya acabado. Deberás marchar con este saco sobre tus
espaldas. Marcharás por esta ruta sin fin”. Puede que algunos hubiesen hecho esa elección,
pero no era tal mi intención. “Debes orar por quienes marchan por esta ruta sin fin para que
vayan al mundo espiritual. Díselo a los hombres para que oren por ellos. Estamos aquí
porque hemos aceptado el mundo físico tal como es y hemos hecho sufrir. Díselo a los
hombres”. Volví a la Tienda de Sudación y la luz desapareció. Observé a mi amigo en la
oscuridad. “Sé que me miras”, me dijo, “no necesitas decirme nada. He visto lo que has
hecho. Ahora debo partir para una Búsqueda de Visión”. Le objeté: “es imposible, eres
diabético. No puedes pasar de la insulina”. “Hermano, parto, lo quieras o no, pero
agradecería que me llevases”, arguyó. Salimos de la Tienda de Sudación. Hizo sus saquitos
de tabaco y le conduje con mis hijos a la montaña. Yo sabía que este hombre no volvería.
Sabía que moriría sobre esta montaña. Mas, ¿quién soy yo para entrometerme entre este
hombre y el Creador? Si yo supiese que uno de vosotros debía morir mañana no
intervendría. No podría hacerlo, pues iría contra las enseñanzas del Creador. ¿Quiénes
somos nosotros para interponeros?
Conduje a este hombre. Mi hijo tenía tres años. Él quiso llevarle hasta la cima con la
Pipa Sagrada y la túnica de bisonte. Cavó la fosa de Visión. De vez en cuando se detenía y
me decía: “¿no es gracioso que esté aquí para orar y cave mi propia tumba?” Decidí reírme,
y continué cavando junto a él. Tomé la insulina que necesitaba y la deposité en un lugar
fresco. “¿Es absolutamente necesario que la tome?”, me dijo. “Sabes que debes hacerlo”, le
respondí. Añadió: “puedo permanecer seis días sin comer ni beber, pero sé que no puedo
pasarme sin ella”. Partimos, sentí ganas de dar media vuelta, de volver junto a él, pero una
fuerza me obligó de descender.
Los días pasaron y al cuarto volví. Al pie de la montaña alcé los ojos y le vi. Erguido
en medio de la maleza. Sus cabellos revoloteaban a su alrededor. Me dije: “Ron, sabes que
llego, harías mejor en volver a la fosa de visión”. Llegado a la cima tomé los frutos de una
cesta, pero algo me dijo que no los necesitaría. Los volví a dejar. Tomé agua, pero de nuevo
me dijo que no la necesitaría. Me acerqué y vi a mi amigo extendido en la fosa de visión.
Tenía la túnica alrededor de sus hombros. Apuntaba con un dedo hacia sí mismo y con otro
hacia el Cielo, sonriendo. Sus ojos estaban abiertos. Los contemplé, sus ojos todavía
estaban húmedos. “Ron, no me digas que has partido”. De nuevo le contemplé, y vi
lágrimas caer de sus ojos. Se los cerré. Estaba muerto, había partido hacia el mundo
espiritual.
A veces, una persona da su vida para que podamos seguir enseñando. Esto ocurrió en
1977. todos debemos completar el círculo de la vida para poder ir al mundo espiritual. No
tenemos derecho a suicidarnos, a abusar de nuestro cuerpo y morir.
El Cuarto Espíritu Inferior dado por el Creador fue el Material, Yumni, es decir, la
capacidad de vivir sin atesorar, tener lo necesario para sobrevivir.
• La Anciana de dos Caras, Anogete. Es bella por una lado de su cara, y horrible
por el otro.
• La Araña, Iktomi. La que engaña a todo el mundo. Se trata de la araña en tanto
que Espíritu, y no del insecto que conocéis.
La araña es muy bella, pero las gentes la tienen miedo, pues no pueden verla. El
animal más peligroso sobre latiera es el que camina erguido, pues es inteligente.
• La Vieja Bruja, Kanka. No es la bruja que conocéis, que camina sobre una
escoba. Esa creencia surge de los cuentos de hadas. Habéis conservado la idea de estos
seres, pero los conocimientos que os quedan están disfrazados. Quienes han escrito esos
cuentos han visto a estos seres en sus sueños y visiones.
• La Diosa del Agua, Ksa.
• El Anciano, el Brujo del Norte, Wazi. Lo veis bajo la forma de un mago que
sopla el viento que trae la nieve y la lluvia. Es el guardián de un espíritu que aún no se ha
mostrado sobre la Tierra: el Viento Tate, que fue creado por el Movimiento. Este Espíritu
no se ha revelado, y cuando venga aportará el conocimiento del sonido, el sonido de las
oraciones de los hombres, de las hierbas, de los árboles, de los animales...
• Las Cuatro Direcciones del Viento, Tob Tob. Cuando un hombre médico va a
una montaña buscando un sitio para una Búsqueda de Visión nunca irá a la cima. Tratará de
encontrar un lugar donde el viento no pueda alcanzarle. Es por ello que juega con el viento,
tratando de escapar a éste. Cuando hablaba del superindio las fuerzas que lo hicieron huir
venían de Tob Tob.
• El Viento, Tate. El lado negativo. Siempre viene para sembrar el desorden.
Crea los huracanes, las tornados, las tempestades. El lado positivo de Tate aún no se ha
revelado. Hoy en día decimos que será el Profeta. Lo reconoceréis por la fuerza de sus
enseñanzas. Tiene el poder de destruirlo todo. Su enseñanza será el sonido. Mejor será que
subáis a una colina, gritéis y volváis a bajar a que os paséis horas rezando. Es él quien os
dirá: “subid a gritar y libertad vuestra ansiedad por medio de la voz”.
• El Viento Arremolinado, Yumi. Viaja en todas direcciones.
Estos ocho Espíritus Sobrenaturales están en relación con las ocho estrellas de la
mañana, simbolizadas por las ramas de las estrellas de la Tienda de Sudación. Algunos
hombres médico pueden utilizar estos seres, controlándolos de cierta manera. Observando
la cima de la Choza advertiréis que de hecho hay dos estrellas de la mañana, una sobre la
otra, pues siempre hay un lado positivo y un lado negativo en todas las cosas. Veréis
también cuatro mariposas, que simbolizan el poder de la mujer. Se siguen, una positiva y
otra negativa. Siempre se atan juntas. Estas mariposas os recuerdan que la mujer nos aportó
un día esta ceremonia. La Tienda de Sudación es tan sagrada como la Pipa. La mujer
Bisonte Blanca nos ha dicho: “la Pipa Sagrada es fuerte, pero debéis purificaros y orar ante
Ella”.
No encontraréis este relato de los dieciséis grandes misterios en libro alguno. Sólo lo
escucharéis de un hombre espiritual. Hoy lo escucháis de mí; es como si lo escuchaseis de
mi abuelo y de todos sus ancestros antes que él. Y quién sabe, puede que en el origen del
linaje mi abuelo y tu abuelo fueran hermanos. En cualquier caso, hoy en día va a depender
de los hombres, de su aceptación o no de lo que son, de quiénes son. No somos mejores que
los demás, somos diferentes.
Cuando una mujer tiene sus reglas no duerme cerca de su marido y todos los objetos
sagrados son colocados al exterior de la casa. Esta enseñanza no viene de un hombre, sino
de la Mujer Bisonte Blanca. Somos el único pueblo del mundo cuyas enseñanzas
fundamentalmente vienen de una mujer, quizá porque siempre hemos respetado a la mujer
por lo que representa. Volveremos sobre esta enseñanza más tarde.
LA MUJER BISONTE BLANCA
La Mujer Bisonte Blanca dio la Pipa Sagrada a los jefes y no a los hombres
espirituales, pues estos últimos no la necesitaban. Los jefes recibieron la Pipa y las
enseñanzas de la Pipa Sagrada; son los instructores espirituales. Sucedió así porque hace
tres mil años, los jefes de tribu empezaron a comportarse como reyes y a enriquecerse a
expensas de los miembros de la tribu. El poder del jefe se convirtió en un poder opresor.
Entonces vino la Mujer Bisonte Blanca.
En aquel tiempo el hambre reinaba. El jefe Cuerno Hueco Alzado (Standing Hollow
Horn) reunió a sus guerreros, y dos de sus bravos fueron enviados a la caza. Se encontraban
cazando bastante lejos del campamento cuando vieron un bisonte que marchaba en
dirección hacia ellos. Conforme se aproximaba cayeron en la cuenta de que era una mujer.
Iba revestida de piel de ciervo, toda de blanco. Uno de los guerreros dijo a su amigo: “está
sola y es la mujer más bella que yo haya visto nunca, voy a hacerle proposiciones”. Su
amigo le hizo observar que ella caminaba por encima del suelo y que debía de ser una
mujer sagrada. Llegada a su lado la mujer habló: “aquel de vosotros que en este momento
tenga ciertos pensamientos venga a mí”. El hombre que tenía pensamientos negativos
avanzó, una nube descendió sobre él y le elevó por los aires, y sobre el suelo no quedaron
más que los huesos. Ella se dirigió al otro hombre: “ve y di a tu pueblo que vendré mañana
al salir el Sol. Que lo que acabas de ver sea una lección para todos aquellos que piensan y
actúan como este guerrero. Pues cuando un hombre toma a una mujer por esposa él y su
mujer vuelan juntos como dos águilas por todo la eternidad. Ni uno ni otro deben ser
infieles”.
Al día siguiente ella llegó del Este, son el Sol. El jefe de la tribu había hecho levantar
numerosas tipi en círculo y el suelo de este círculo formado por las tipi estaba enteramente
recubierto de salvia; la Mujer Bisonte Blanca penetró en él, descendió sobre la Tierra y
caminó sobre la salvia. Portaba un ramo de salvia en el interior del cual se encontraba la
Pipa Sagrada. Había sido tallada en la tibia de un bebé bisonte blanco por el Creador y no
por un hombre; está siempre sellada con kinnikinnik y colocada en su saco. Nunca ha sido
utilizada, ni fumada, pues tal fue el deseo de esta mujer que la trajo. Esto mismo le confiere
a la Pipa un gran significado fabricada por el Creador, es sagrada, como todas las otras
cosas creadas por el Creador.
Junto con la Pipa Sagrada se guarda otra Pipa; una Pipa fabricada por el hombre,
idéntica a las que utilizamos hoy en día, que no son sino reproducciones de esta Pipa. La
santidad de la Pipa Sagrada nunca ha sido vista, no puede por tanto tener réplica. Los
objetos fabricados por el hombre no se convierten en sagrados más que cuando son
utilizados durante los rituales y las ceremonias. Ello le da derecho a un fabricante de pipas
a venderlas. A menudo vienen a decirme que alguien vende una pipa. Quien viene a
contarme esto no ha comprendido que la pipa no se hace sagrada sino cuando es reconocida
y consagrada por un hombre sagrado en una Danza del Sol, por ejemplo. Por el contrario,
una Pipa consagrada no se vende. El vendedor cometería en tal caso uno de los abusos más
grandes del orden natural, pues la Pipa no tiene entonces precio y no puede ser vendida.
Vuestra educación os confunde acerca de lo que es espiritual y lo que es material. Sobre el
dólar americano aparece escrito: “In God we trust” (En Dios creemos). ¿Cómo puede
asociarse a Dios con el dinero? Es otro de los abusos cometidos por el hombre, de una parte
que utiliza a Dios, de otra porque lo asocia con el dinero. Mi padre decía “la piel de rana
verde” hablando de este billete de un dólar. El hombre mataría a su padre y a su madre por
oro. Podría conduciros a un lugar repleto de oro. Podría ir a buscarlo para mí, pero el
Creador ha situado el oro en este lugar por una razón precisa. Todo tiene su razón sobre la
Tierra, y este oro, la piedra, el peñasco forman parte de nuestra familia.
La Mujer Bisonte Blanca partió hacia el Este. Anduvo un momento, después se volvió
hacia la tribu, y dijo: “cuando esté sobre esa colina seguidme, y ya no tendréis hambre”.
Continuó su marcha, después se acostó sobre el suelo, rodó hacia la derecha y se
transformó en un joven bisonte marrón. Se puso a caminar, se acostó sobre el suelo y rodó
hacia la izquierda; un bisonte marrón se alzó. Se puso a caminar, después se acostó
nuevamente sobre el suelo, y rodó hacia la derecha, y se convirtió en un bisonte blanco.
Este avanzó, después rodó hacia la izquierda y se transformó en un poderoso bisonte que
sobrepasó la colina. La tribu le siguió, y cuando los hombres llegaron a la cima de la colina
vieron una manada de bisontes muertos, acostados sobre la tierra. Antes de despedazarlos y
comerlos las ancianas cantaron: “con la ayuda del Creador se nos ha dado alimento y
debemos agradecerlo. Hacemos una ofrenda al Sur, donde se encuentra al mundo espiritual,
adonde han marchado nuestros ancestros. Debemos darles las gracias, pues es gracias a
ellos que podemos vivir hoy en día”.
Desde ese día los Lakota conocen a esta tribu bajo el nombre de “Sin Arcos”, los que
no portan armas sino que oran con la Pipa Sagrada.
Este verano tendremos una Danza del Sol cerca de la Pipa Sagrada, en Green Grass.
Estaremos allí, y el Guardián de la Pipa estará allí. Podéis sentir el poder de la Pipa Sagrada
estando justo al lado de Ella. Puede ser que nunca La veáis, puede que nadie la vea nunca,
pero Ella esta ahí y La sentís. No veis más que un paquete hecho de pieles de bisonte. Ocho
pieles rodean la Pipa Sagrada, la cual se nos entregó hace cientos de años. Es con estas
enseñanzas que marchamos todavía hoy en día. Nosotros, el pueblo Lakota, decimos que
fueron las últimas enseñanzas dadas por el Creador sobre esta Tierra. Hablaban de profetas,
de visiones que anunciaban la venido del hombre blanco, de los años anteriores a este
acontecimiento.
Esta canción es una profecía que nos fue dada hace más de mil años. También se nos
dijo: “vuestro pueblo sufrirá y moriréis por centenares. Un pueblo vendrá del Este con
buenas intenciones, pero se volverán malvados. Vuestro pueblo morirá. Rezad con la pipa
Sagrada, con los objetos sagrados, y yo volveré al final con nuevas enseñanzas”.
Nuestras tradiciones son para nosotros, el pueblo lakota, muy importantes y muy
sagradas. Así, a quienes tratan de cambiarnos y conducirnos a su forma de pensar y a su
espiritualidad les decimos: “civilización occidental, cristianismo, hinduismo... no los únicos
en controlar el camino que conduce al mundo espiritual”. Nos acordamos siempre de
nuestras tradiciones y tratamos de conservarlas en nosotros. Pero ahora mi pueblo se muere
y desaparece poco a poco. Es como un grano de arena en el océano, que se mezcla con los
otros y se vuelve del mismo color. Nuestras tradiciones deben vivir si queremos sobrevivir
con nuestra Madre Tierra.
Toda esta mañana habéis oído a los pájaros cantar; puede incluso que nunca los
hubierais escuchado. ¡Es magnífico! No están ansiosos, pues saben por qué se encuentran
sobre esta Tierra. Las hormigas a las que veis afanarse os dicen que el invierno será crudo.
Los insectos os previenen de que hará frío, que tendréis hambre y sed. Debéis prepararos
espiritualmente. El mundo de los insectos trata de deciros: “estate preparado, hermano mío,
sé fuerte, pues llegan tiempos difíciles”.
Falsos profetas vendrán de todos los rincones del mundo, y os dirán que el hombre
debe esclavizar a los animales, deben abusar de las plantas y de las mujeres. Debéis
prepararos. En tanto que hombre médico, hombre espiritual, en tanto que jefe, ya me ha
preparado para marchar al mundo espiritual. La única cosa que me retiene aquí son mis
hijos, mis hijos de todos los colores: algunos son negros, algunos rojos, algunos amarillos,
algunos son blancos. Quienes comienzan a comprender las antiguas enseñanzas, las
antiguas profecías que nos han permitido estar aquí hoy en día, caen en la cuenta de que
nuestras tradiciones son profundas y van al corazón de nuestra Madre la Tierra. Y el Árbol
de la Vida vivirá. Debemos nutrirlo para que las generaciones futuras nazcan en un mundo
magnífico, para que vivan en armonía con la Tierra. Hoy en día. Cuanto más progresa la
ciencia más comprende estas antiguas enseñanzas que nos fueron aportadas por la Mujer
Bisonte Blanca. Esta mujer se vuelve a aparecer constantemente a algunos de nosotros para
que no olvidemos. Se me apareció por primera vez cuando mi suegra murió. En la
habitación oscura un pequeño fulgor se manifestó. Este fulgor aumentó rápidamente y se
transformó en una luz viva. Una mujer se acercó, se detuvo y me dijo: “hijo mío, mira
aquí”. Extendió el brazo y dos Tiendas de Sudación aparecieron ante ella. “Acuérdate, más
adelante te enseñaremos más”. Se volvió y desapareció. Olvidé esta Visión y comencé a
dirigir las Danzas del Sol. Un día que Danzábamos de cara al Sol, tirando de los cráneos de
bisonte unidos a tirantes fijos en la carne de mi espalda, ella volvió y me habló así:
“pensaba que te habíamos hablado de esto”. Y dos Tiendas de Sudación aparecieron de
nuevo. “No olvides. Vas demasiado rápido”. Me costaba creer en la realidad de esta mujer
que se hallaba de pie ante mí. Percibiendo mi duda me dijo: “el último día de la Danza del
Sol mira hacia el Norte; verás un fuego y sabrás que yo he venido”. Durante los dos días
siguientes permanecí muy silencioso; mi duda persistía. El último día, mientras servía el
alimento sagrado, una de las siete Tiendas de Sudación colocadas en círculo, la situada al
Norte, se incendió. No se había encendido ningún fuego en la proximidad, pues nadie
participaba Inipi en aquel día. La Choza quedó reducida a cenizas. Todos se precipitaron
para ver si alguien había resultado herido. El lugar estaba desierto. Sobre el suelo había una
pequeña piedra. Sobre la piedra estaba grabado un rostro, como una máscara. Había
necesitado demasiadas pruebas para creer, y comprendí que era bien triste el mundo que
alguien con una cabeza tan dura como la mía pudiese existir. Para tener una mejor
comprensión espiritual el hombre debe saber escuchar con su corazón y no con su cabeza.
LAS MUJERES
En mi pueblo nada hay más respetado, colocado en más allá posición, que una mujer.
Además, quienes se convertirán en hombres médico son también educados por sus abuelas.
Debemos conocer ciertas cosas de las mujeres, que enseñaremos más tarde. Nuestras
abuelas nos hablan de Isnati Winyan, la mujer que vive sola. Es el momento de la regla
para una mujer, el tiempo de la Luna, que dura por término medio cuatro días. Antaño, una
mujer que tenía se regla era conducida a una tipi especial, Isntipi, situada a sotavento, la
ancianas de la tribu iban a esta tipi para educarlas durante este tiempo de oraciones y de
meditación. Les hablaban de la manera de orar. Cuando una mujer tenía su regla no tenía
derecho a tocar a sus hijos, a hacer la cocina o a tocar el alimento. Así es que iba a rezar,
pues nos damos cuenta de que el tiempo de la Luna es un momento espiritual, el más
espiritual de la vida de una mujer. Es momento en que ora, medita o puede recibir visiones
o sueños.
Durante sus años de fertilidad una mujer no necesita ir a una montaña para una
Búsqueda de Visión. La regla le ha sido otorgada para purificarse y rezar.
En cada ser humano hay un lado positivo y otro negativo. En vuestro mundo se llama
pecado al negativo y todo el mundo va al infierno. Los indios consideran esto de modo
diferente. Vemos un lado positivo y otro negativo en cada ser humano. El positivo puede
devenir negativo y a la inversa. A cada uno se le da un momento. Es un poco como el
Wapiya. Las mujeres son la únicas afectadas espiritual, física, mental y emocionalmente
por la posición de la Luna, siendo en esto iguales a la Tierra.
Si elimináis el lado espiritual, obtenéis los dogmas. Los hombres de religión han
eliminado a las mujeres de su vida, pero el hombre ha venido a la Tierra para multiplicarse
y cumplir de este modo el círculo de la vida.
Durante la regla se opera un cambio en las fuerzas positivas y negativas. Para
comprender lo que sucede hay que recordar que el ciclo de las energías se hace en círculo,
en el sentido de las agujas de un reloj. Es por esto que entramos por la izquierda en la
Tienda de Sudación y salimos de ella por la derecha; el círculo debe siempre ser recorrido.
En todo circuito eléctrico la energía circula del negativo al positivo. En cada hombre, en
cada mujer la energía circula lentamente, del negativo al positivo, estas fuerzas evolucionan
en espiral. La mujer no se apercibe de ello. Encontrándose el marido al lado de su esposa
un elemento negativo, en razón del movimiento en espiral, puede tocarla durante un breve
segundo. Durante este breve segundo el hombre será negativo, siendo éste uno de esos
momentos en los que el hombre va a su trabajo silbando y se encuentra con la horma de su
zapato. Lo hemos dicho, el ciclo femenino está en correspondencia con el ciclo lunar. Cada
mujer nace en relación estrecha con una de las fases de la Luna; toma conocimiento de ello
cuando su primera regla, cuyo momento depende por tanto del momento de nacimiento, de
la posición de la Luna y del ciclo lunar. Durante la regla la Luna acelera el ritmo del
cuerpo.
Durante la regla las mujeres reciben mucho. Las mujeres son más fuertes
espiritualmente que los hombres. Siempre ha sido así, incluso si se os ha enseñado lo
contrario.
Si una mujer vive con un hombre médico todos sus objetos sagrados deben salir de la
casa: el cerrillo oloroso, el cedro, la Pipa Sagrada... Todo lo que se utiliza para orar. Esas
son las enseñanzas de la Mujer Bisonte Blanca: “una mujer no podrá nunca acercarse a la
Pipa Sagrada en el momento de su regla”. Si los esposos están en la misma casa el marido
debe dormir sobre el diván. En el momento actual las mujeres de nuestra tribu hacen su
equipaje y abandonan la casa durante algunos días. Esta comprensión mutua vuelve a la
familia muy fuerte. Una mujer puede recibir un sueño o una visión que ayudará a su familia
en el futuro. En cuanto al hombre, permanece en la casa, cocina, cambia las camas... Ello le
vuelve más humilde, y puede comprender mejor a sus hijos durante estos días. Si la esposa
no puede abandonar la casa hará oraciones especiales por la mañana y por la tarde. El
hombre y la mujer oran con el fin de evitar el movimiento de las fuerzas positivas y
negativas. Las oraciones son más fuertes que lo físico, lo mental y la emoción.
Durante la Danza del Sol exigimos hoy en día a las mujeres que tienen su regla que
abandonen el campamento. Si una mujer lo oculta pedimos a las abuelas que vigilen. A
éstas les basta con un simple golpe de vista para descubrir a las que engañan. Las mujeres
que se preparan para la Danza del Sol a menudo desean ocultar su regla, pero sólo se
engañan a sí mismas. Las ancianas se encuentran allí y lo saben.
Del mismo modo, cuando los objetos sagrados son colocados sobre el túmulo de la
Tienda de Sudación las mujeres con la regla y los hombres que hayan matado a otro
hombre no pueden entrar en el recinto sagrado formado por las banderas. Las cuatro
banderas representan los cuatro vientos, pero hay también cuatro banderas invisibles, que
simbolizan las cuatro direcciones del viento: Suroeste, Noroeste, Noreste y Sureste. Estos
ocho elementos recuerdan a las ocho estrellas de la mañana.
Este cuadrado invisible formado por estas banderas es un lugar peligroso. Si una
mujer no tiene su regla desea orar cerca de la Tienda de Sudación debe colocarse en un
lugar preciso: al nivel de las cuatro direcciones del viento, simbolizadas por los Círculos
invisibles, formados por saquitos de tabaco. Estos círculos están abiertos y su puerta se
vuelve siempre hacia el Este. Ella debe colocarse en el círculo cuya dirección es opuesta al
viento dominante.
Antaño todos vivíamos de esta manera. Ello proporcionaba una mejor comprensión,
un mayor respeto entre el hombre y la mujer. Esto siempre da ocasión a un debate difícil,
pues es un tema muy profundo y muy sensible para la mujer. Pero en el momento presente
podéis comprender por qué no debéis participar en una ceremonia durante vuestra regla. He
conocido mujeres que habían sido prevenidas y que han ido para verificar si yo tenía razón.
Se han hecho mucho daño. Son enseñanzas muy sagradas.
Cada hombre nace de una mujer. Los maestros espirituales nos dicen que hoy en día
tres hombres no nacidos de mujer recorren el mundo; vienen de otra parte, de otra
dimensión. Pero sólo son tres, y nadie sabe quiénes son, es un misterio.
Una de las antiguas enseñanzas de las religiones orientales dice que va a venir un
profeta, y que tiene un ramo de salvia en las manos. Para nosotros, Lakota, nuestra
impresión es que este profeta es una mujer.
Mi madre partió al mundo de los espíritus cuando yo tenía cinco años. Me quedé sin
madre de carne, pero con el mayor de los reglaos, mi Madre la Tierra. Hace una quincena
de años vino una mujer con piel de ciervo blanco, la conocemos bajo el nombre de Mujer
Bisonte Blanca. Ella me dio esta enseñanza de la Pipa Sagrada y de la Tienda de Sudación
para que a mi vez la enseñara. Vino una segunda vez para recordarme que debía continuar
transmitiendo esta enseñanza por todo el mundo. Me apetezca o no, esté mi tribu de
acuerdo o no, debo proseguir este camino. Mi madre material me guía por este camino. su
nombre era Estrella Saliente de la Mañana. La noche última no he tenido ningún sueño,
cosa inhabitual para mí. A las cuatro y media fui despertado por un pequeño fulgor sobre
mi rostro. Era la estrella de la mañana. El recuerdo de mi madre me procuró un gran
sentimiento de dicha.
Cuando mi madre partió mi padre me dijo: “tu madre ya no está, pero te queda tu
casa, es tu segunda madre. Cuando esta segunda madre ya no esté recuerda que la Tierra es
tu Madre para siempre. Si te sientes triste y solo en alguna parte del mundo estírate sobre la
hierba y te volverá la energía, la energía espiritual que el Sol de la Tierra desde hace
millones de años”. Cuido de la Tierra porque es mi madre, y trato de hacer comprender a
los pueblos del mundo entero la necesidad de cuidar de su Madre, la Tierra, de no
polucionarla ni herirla, de darle gracias día por la sustancia que nos da, pues ella quien nos
alimenta.
Un día vuestra vida se detendrá, se escapará de vuestro cuerpo, y como la espiga de
maíz madura vuestro cuerpo irá a la tierra, se descompondrá y la hierba crecerá sobre este
estiércol. Es simple, muy simple, tan simple que el hombre educado no puede entenderlo.
Las cosas simples están hechas para los grandes espíritus. Nuestro modo de vida es muy
simple, pero lo engloba todo porque es un mundo de vida que aprehende y respeta lo
sagrado. Os enseñamos las leyes que nos rigen, las de los dieciséis misterios, las del
Universo. Nuestra vida se inserta en estas grandes leyes universales. Las leyes por los
hombres quieren impedirnos vivir esta vida, pues no comprenderlas leyes naturales; no
saben que nosotros, los indios, en tanto que guardianes de la Tierra del planeta,
comprendemos estas leyes naturales. Los hombres abusan, hacen un mal uso de la Tierra, y
de todo lo que el Gran Espíritu ha creado. La ley del hombre no les castigará, pero la ley
natural les tratará algún día, ciertamente, igual que ellos tratan a la Tierra. Las leyes
naturales deben ser respetadas como deben ser respetados los animales, las plantas, los
árboles, la vida...
Tenéis una hija, la respetáis y deseáis que se case con un hombre que la respete; le
dais una buena educación, le enviáis a la universidad... Se hace médico, abogado... Pero se
casa con un “macho”, y vuestra hija permanece toda su vida en casa. He visto suceder esto
un poco por todas partes, la opresión del hombre sobre la mujer. El hombre ha construido
siempre casas cuadradas, pues ha negado durante largo tiempo a las mujeres la libertad y el
derecho de ser arquitectos. Ellas habrían construido casas en domo, forma mucho más
natural. Todo es cuadrado en este mundo de hombres, ya no hay círculos. Todo es
cuadrado, podéis así clasificar mejor, comprimir mejor. Los espíritus, si vienen a una casa,
quedan a veces “anclados” en las esquinas. No es verdad en realidad, es sólo para ilustrar
los sentimientos que se experimentan en una casa cuadrada.
He crecido sin madre, pero siempre ha tenido una madre. Camináis sobre ella todos
los días.
Tenía yo ocho meses cuando mis padres escogieron una mujer para mí; la habían
escogido porque su padre era un jefe y un hombre espiritual. Me enrolé en el ejército para
escapar de este matrimonio. Es un problema al que nos enfrentamos en tanto que indios. Es
demasiado duro casarse con alguien a quien no amas, pues cuando se coge una mujer es
para siempre.
Las cosas han cambiado un poco hoy en día. En el curso de los seis últimos años
hemos sido invadidos, sobre todo en mi reserva, por mujeres alemanas que se han
desposado con nuestros jóvenes. Ello ha enfurecido a nuestras mujeres indias y ha creado
un verdadero problema. Hay por término medio tres matrimonios al año entre indios y
alemanes. Este fenómeno se ha producido tan súbitamente que no hemos sabido cómo
hacerle frente. Tanto más cuanto que en los seis últimos años también siete franceses han
venido a casarse en la reserva. ¡Pronto la naciones unidas estarán en nuestras reservas! Yo
sabía que esto sucedería algún día, pero no pensaba que sería tan pronto y que estaría vivo
para verlo. Es bastante chusco, pues ante la cólera de las indias los indios responden: “¿por
qué no hemos de hacerlo? ¡Nuestras abuelas lo han hecho!”
Sin embargo, hemos de considerar ahora a nuestros niños. Algunos ya no son indios,
tienen nacionalidades diferentes y debemos aceptarlo. Debemos aceptarlos como son,
incluso si son de otro color. Nuestra raza está en el camino de desaparecer muy
rápidamente. Hay menos de un millón de indios pura sangre, hoy en día, en Estados
Unidos. Por el contrario, se habla de treinta y dos millones de personas con la identidad
india. Hay que mirar a las cosas de frente; puede que dentro de cien años la raza india pura
esté totalmente extinguida, como el bisonte
Este fenómeno se ha producido también aquí en Europa. Los celtas se mezclaron con
las razas oscuras provenientes de África, de Libia, hubo igualmente mezclas con los
romanos y anglosajones, y los celtas desaparecieron en tanto que pueblo. Es lo que nos
sucede hoy en día. La raza india se mezcla con las razas negras, orientales y blancas. No
hacemos distinción entre los diferentes pueblos blancos, pues su sangre está mezclada de tal
modo que ya no saben verdaderamente quiénes son.
Para nosotros el sexo es una cosa muy bella que debe permanecer privada y de la que
no hay que abusar. Por todo el mundo se preconiza el placer sexual; no tiene nada de
sorprendente que hayáis desarrollado toda una colección de enfermedades.
En tanto que hombre espiritual que practica curaciones no debo olvidar que los
remedios pertenecen al Creador y que no deben ser objeto de remuneración. No puedo, por
tanto, utilizar el don de curación dado por el Creador más que para el bien de la humanidad,
es decir, jamás contra el equilibrio natural dela Tierra.
Existen dos tipos de menta, una femenina y la otra masculina. La planta masculina es
siempre muy pequeña, la femenina es muy grande. Esta última es utilizada para curar, para
purgar, la otra más bien relaja.
Hoy en día ya no sabe recoger las plantas; se recoge todo, no importa qué. Tomad las
pequeñas mentas para relajarnos y dejad tranquila al menta femenina, que os ayudará
también si tenéis problemas pulmonares en general y asma en particular. A veces la mentas
femeninas llevan flores y semillas; prestadles pues atención. En lugar de aprovecharos de
vuestra infusión relajante vais a purgaros durante toda la noche.
A veces hay que mezclar las plantas entre ellas para obtener efectos. Una mala mezcla
puede ser alucinógena. No hay que divertirse con las plantas cuando no se las conoce ni
comprende. Puede uno morir a causa de ello. Jugad con las que conocéis.
Para utilizar el cerrillo oloroso (sweet grass) hay que trenzar una estera de setenta y
dos hebras, es decir: 24 x 24 x 24, y después dejarla secar al sol. Cuanto más seca esté más
fuerte será. Antes de la venida de las reglas es preciso colgar la estera de cerrillo oloroso en
el exterior de la casa. Se utiliza para purifica, igual que la salvia; forma parte de los objetos
sagrados.
Cuando se poseen piedras sagradas es preciso tener consigo el cerrillo oloroso. Hay
dos tipos de piedras: las blancas (los cristales) y las naturales (las piedras Yuwipi).
Cuando nos sentimos mal podemos utilizar el cristal para curarnos, pero hay que
purificarlo con el cerrillo oloroso. Durante sus reglas una mujer no toca estas piedras ni el
cerrillo oloroso.
Los hombres médico conocen una planta, un filtro destinado a las mujeres que no
pueden encontrar marido. Cuando ellas lo utilizan todos los hombres son atraídos, estén
casados o sean sacerdotes...
Hace algún tiempo encontré a una persona que practicaba la curación espiritual hacía
veinte años; estaba afectada de cáncer y no podía curarse. ¿Por qué? Porque el ego tomó el
mundo. El Creador os da esta sensibilidad de poder curar a los demás, pero cuidado, no
dejéis que vuestro ego se entrometa. Pues entonces, ¿qué sucederá? Os creeréis que sois
Jesús o Dios. Y en tal caso sólo seréis una persona completamente estúpida que no ha
comprendido en absoluto la enseñanza del Creador. Curáis a quinientas, a mil personas en
un día, la enfermedad llega, ya no podéis curaros y cogéis miedo, no sabéis ya a qué santo
encomendaros. Hablé con este hombre acerca de la muerte, de la guerra, del sufrimiento
humano causado por los humanos, por el ego de los hombres. Le dije: “Aceptas la vida,
debes aceptar la muerte. Eres sanador, debes saber lo que es la muerte y prepararte para
ella”. Hay que comprender que el hombre es responsable en un cincuenta por ciento de sus
enfermedades, y que posee en él, por tanto, el cincuenta por ciento de los remedios para
curarlas. La voluntad de vivir está en vuestro espíritu, y podéis superar vuestra enfermedad
con la fuerza de la oración. Si utilizáis una planta tenéis el setenta por ciento del
tratamiento, y ello representa mucho más que cualquier medicamento. La oración y la
comprensión de la planta os ayudarán. Tomad cualquier planta, no importa cuál, rezad con
ella utilizadla, ella os ayudará a estar mejor y podréis curar vuestra enfermedad. Pero no
vayáis contando que tal o cual planta ha curado vuestro cáncer. No corráis al departamento
de investigación contra el cáncer pensando que os van a dar mucho dinero por este
descubrimiento. La planta será analizada y no encontrarán nada en ella. La curación se
encuentra en la comprensión de vosotros mismos y de todas las cosas. Ahora esta persona
volvió a sus curaciones. Acepta su cáncer, tiene los medios de curarlo, y eso está bien, pues
al curarlo ayuda a los demás.
La educación que mis abuelos han dado se ha hecho a través de los animales: de las
lombrices de tierra, de los insectos, de los peces, de los ciervos... Mis animales familiares
eran los búhos, los corzos, las vulpejas... Los tenía desde muy pequeño y crecían conmigo.
Mi perro se entendía muy bien con el ratoncillo.
He aquí cómo he aprendido a respetar a los animales: todos los días mi abuelo me
contaba historias. Hace miles años, decía los animales se comunicaban constantemente con
el hombre.
Existen numerosas historias de animales. De todas las historias sioux las del coyote, la
araña y la serpiente predominan en la vida de los niños. El coyote y la araña son animales
muy astutos, pueden transformarse en hombre. La serpiente tiene mucha sabiduría y puede
igualmente transformarse en hombre, mientras que el ciervo toma la apariencia de una
mujer bellísima. Mi abuelo me advertía: “si paseas por el bosque y ves una mujer muy bella
sentada bajo un árbol acércate y siéntate a su lado, te contará muchas historias, pero ten
cuidado con su sombra, pues si el ciervo puede transformarse en mujer sus huellas sobre la
tierra siguen siendo las de un ciervo”. ¿Conocéis al ciervo de cola negra, el que tiene una
línea sobre la cabeza? Hay uno entre un millón. Este ciervo vive en lo alto de las montañas.
Cada día, cuando la estrella de la mañana se eleva, desciende de la montaña para ir a beber
del agua del torrente. Bendice el agua, la purifica y retorna a las cimas. Es su trabajo. A
quienes se lo encuentran por azar se les presenta bajo el aspecto de una mujer. Es un ciervo
muy sagrado para nosotros, es el guardián del agua, la cuida bendiciéndola cada mañana.
Entre el niño que escucha y el ciervo se crea una conexión, y el niño ya no puede
olvidar. Si os interesáis por nuestra mitología comprenderéis el respeto que tenemos a los
animales.
Son muchas las lecciones que nos da este cuento: no intervengáis antes de acabar la
historia, no toméis la palabra si no queréis tener problemas, abrid la boca sólo cuando se os
dirija la palabra, pues a veces dais demasiada información y os encontráis pillados en
vuestra propia trampa. Eso es lo que le sucedió a la araña.
He aquí lo que sucede... Veis a un hombre médico hacer algo y pensáis que le podéis
imitar, pues habéis visto como lo hacía. El hombre médico he recibido el poder para hacer
todo eso. Abusar es destruirse.
¡Pobre hombre-araña! Su mujer tuvo que llevarle de vuelta a su tipi. Estaba ciego y
muy triste. “Es preciso que encuentre de nuevo a este hombre médico”, se decía. Pidió
entonces a su mujer que le condujera lejos en la pradera y le dejara solo. Se puso a
caminar... de repente escuchó una voz. Se detuvo y acercó la cabeza al suelo. Era un
pequeño ratón el que le hablaba: “¿qué es lo que va mal, araña?” “Estoy ciego, ya no tengo
ojos”. “¿Ya no tienes ojos?”. “No, estoy ciego. ¿Podrías darme uno de tus ojos?”. “Oh, si”,
dijo el ratón, cogiendo uno de sus ojos y colocándolo en la órbita de la araña. He aquí a
nuestro hombre-araña con un pequeño ojo de ratón. Todo lo que veía con este pequeño ojo
le parecía enorme. Pero más vale un ojo que ninguno. Continuó su camino. su ojo le daba
una percepción tan enorme de la realidad que no vio un bisonte delante suyo y tropezó con
él. “Oh, señor bisonte, ¿podrías darme uno de tus ojos?” “Eso es imposible”, dijo el bisonte,
“mis ojos son demasiado grandes para tus órbitas, pero... ¿qué es ese ojo que tienes ahí?”
“me lo ha dado un ratón” “tendrás un aire ridículo con un ojo de ratón por un lado y un ojo
de bisonte por el otro”. Pero finalmente el bisonte se avino: “voy a darte uno”. Tomó uno
de sus ojos y lo colocó en la órbita del hombre-araña. Y he ahí a nuestro hombre con un
pequeño ojo de ratón, un gran ojo de bisonte y una gran confusión en la cabeza.
Prosiguió su camino. al poco rato escuchó un tambor. Prestó oídos y, bajando los
ojos, descubrió un cráneo de bisonte sobre el suelo. Lo miró más de cerca y recordó que el
hombre médico le había enseñado a hacerse diminuto. Le resultaba difícil recordar la
palabras del canto correspondiente a este trabajo, así que se puso a cantar, a cantar... Pronto
se acordó de la primera parte del canto y su cabeza se redujo; pudo así pasarla por al ojo del
cráneo del bisonte... En el interior tenía lugar una gran ceremonia india. Era unos ratones
quienes llevaban a cabo la celebración. En medio se encontraba una enorme rana recostada
sobre su espalda; los ratones utilizaban su vientre como tambor y cantaban. “¿Cómo podría
reducir el resto de mi cuerpo para poder entrar en este cráneo?”, se preguntaba el hombre-
araña. “Quiero participar en la ceremonia, puesto que tengo un ojo de ratón”. No podía
acordarse de todo el canto, y cuanto más pensaba en ello más perdía su poder mágico.
Pronto su cabeza había vuelto a sus dimensiones normales y se encontró atrapado en el
cráneo del bisonte. Los pequeños ratones se atemorizaron de semejante monstruo y
buscaron su salvación. La rana brincó al exterior y huyó. Y el hombre-araña, con este
cráneo de bisonte sobre la cabeza, zarandeaba su cabeza y tiraba sin conseguir nada.
Decidió volver a casa. Al llegar a lo alto de la colina, llamó a su mujer: “ve a buscar un
grueso bastón y golpea en el cráneo para romperlo”. La mujer fue a buscar el bastón y se
acordó de cuando él la golpeaba fuerte y repetidamente. Así, al volver, no se contentó con
dar un golpe sobre el cráneo de bisonte, sino que se puso a moler a palos a su marido. Si les
hubieseis visto correr por montes y valles... He aquí lo que les sucede a los hombres que
pegan a su mujer;: un día son ellos los golpeados.
Cuatro historias en una, en las que el animal no hace reflejar una expresión de la
naturaleza humana. Los niños crecen con estos cuentos, aprender a reconocer la vida de los
animales y a respetarlos. Querámoslo o no, los animales tienen un papel preponderante en
nuestra vida.
Historia de la serpiente
Hace mucho tiempo tres hermanos partieron de caza. De lo alto de una colina un
bisonte y se dispusieron a matarlo son una cierta inquietud. Tensaron su arco, apuntaron su
flecha y el bisonte se desplomó. Los dos mayores estaban satisfechos: “ahora tenemos
mucha carne para llevar”, pero lemas joven les hizo ver que quizá no era necesario tomar la
piel, el cráneo y toda la carne. En su opinión se debería hacer una ofrenda. Decidió orar por
el bisonte, y colocó el cráneo y la piel en dirección al Sur.
Por cada cosa que recibimos hay que devolver lago. Si le cogéis una rama al árbol,
ofreced tabaco.
Una vez que el más joven se hubo dominado los dos hermanos mayores fueron a
buscar el cráneo y la piel del bisonte, que empaquetaron junto con la carne. El más joven
les había advertido: “debéis hacer una ofrenda al Creador por todo lo que él ha creado”. Los
dos mayores pensaban que su hermano era demasiado joven para conocer algo de la vida.
“Lo que el Creador no sabe no puede agraviarlo”, decían ellos. Después se durmieron.
Pronto , al amanecer, el más joven se despertó y descubrió que el bisonte había vuelto a la
vida. Puesto delante de él le agradecía: “tus dos hermanos me han traído aquí mientras
dormías, pero voy a darles una buena lección de la que se acordarán siempre”. Después
partió. El más joven escuchó entonces a uno de sus hermanos que decía: “no puedo
levantarme”. Se dio cuenta de que los cuerpos de sus hermanos se transformaban, ya sólo
tenían una pierna; los brazos ya no se disociaban el uno del otro. Se cambiaban en enormes
serpientes. “No te hemos escuchado”, gemían, “hemos tomado sin saber dar. Hay que hacer
siempre una ofrenda por lo que ha sido dado. Si un animal nos es dado es preciso ofrecer un
trozo de carne al Creador, si no creamos un sufrimiento para nosotros, para la tribu, y para
el mundo entero”, reconocieron. El hermano menor condujo a sus hermanos serpientes a
una inmensa gruta. “cada vez que partas de caza pasa avernos y te daremos una medicina
que te permitirá encontrar todas las presas que desees”, dijeron. El joven les dio las gracias
y volvió a su casa. Cuando relató lo sucedido a sus hermanos nadie en la tribu quiso creerle,
así que fueron todos a la gruta. Las serpientes salieron, se dirigieron hacia el joven hermano
y le dieron una pequeña piedra redonda. “Con esta piedra obtendrás todo lo que desees”, le
dijeron, “cada vez que vengas te ofreceremos alguna cosa para que todo lo que deseas te
sea concedido. Somos en ejemplo de lo que sucede cuando no se quiere escuchar nada.
Ahora somos serpientes, vivimos en esta gruta y nuestro olor hace huir a todo el mundo”.
Así, cada día el joven iba a visitar a sus hermanos serpientes, hasta el momento en que sólo
uno de los hermanos salió de la gruta para decirle: “nuestro hermano ha partido hacia el
mundo de los espíritus. Sólo quedo yo, pero estaré siempre para darte aquello que te
permita obtener todo lo deseas”.
He aquí la enseñanza de esta historia; crear la conexión entre los animales que reptan
y el hombre, aprender a respetarlos a fin de que no engendrar a continuación situaciones
difíciles.
Amad a los animales. En tanto que seres humanos somos los guardianes de los
animales. Los Lakota utilizamos a los animales, pero para hacer comprender a los niños que
formamos parte de los animales.
No hemos creado nuestros cantos; son tan antiguos como el tiempo mismo. Por ello
deben ser respetados y comprendidos. Cada canto se refiere a algo fundamental, e incluso
cuando esto a lo que se refiere es definido de diferentes maneras según los individuos y los
pueblos, la enseñanza original no varía. La base de la enseñanza espiritual lakota es el
amor, el respeto a los demás y a uno mismo, la humildad y la paciencia. Nuestros antiguos
cantos son de tal modo sagrados que sólo nos han sido dados en la cima de la colina; todos
hacen referencia a nuestra Madre la Tierra. Tenemos ahora más de ciento cuatro
ceremoniales que datan de muchos miles de años. En el pasado un nuevo canto era dado
cada treinta años. Ahora es cada cien años. Un canto nos llega (es una nueva creación que
forma sobre la Tierra) en el momento mismo en que otros desaparecen, sea en el reino
animal, sea en reino vegetal o en el reino humano. Una nueva forma aparece y ocupa el
lugar de otra. Una forma que surge, microscópica, del fondo de las aguas, bajo la Tierra,
entre las plantas o la simiente del hombre. La creación se renueva cada millón de años. La
vida se perpetúa sin cesar. Otro tiempo, otra generación, y cada generación jubila el aire
utilizado por las generaciones desaparecidas. Este aire que respiramos será reciclado en
otro tiempo, en otra era, por otra generación, en otro lugar. Así se reproduce la vida.
Son enseñanzas sobre la esencia de la vida referidos a los que ésta tiene de negativo y
de positivo. Nadie es totalmente positivo ni totalmente negativo. Si habéis escogido esta
forma de vida deberéis aceptar vuestra ambivalencia. Para quienes escogen el monasterio o
el convento su concentración debe permanecer constantemente fija en la oración; en el
momento en que la oración cesa la negatividad se infiltra. Ser espiritual, desarrollar la
espiritualidad en lo más profundo de nuestro corazón, es dejar que lo negativo y lo positivo
vayan a la par, es la esencia misma de la vida. A fin de ser lo que somos en tanto que
instructores espirituales no podemos considerarnos cien por cien positivos ni dejarnos
desbordar por la negatividad. Debemos combinar los dos aspectos, reajustar y renegociar
siempre este equilibrio entre positivo y negativo. Sólo entonces estaremos en condiciones
de encontrar la verdadera espiritualidad que todos buscamos.
ANPO: es el momento justo antes de salir el Sol. Está formada por AN y PO.
AN: es el momento entre la salida de la estrella de la mañana y el alba. Hacia las tres
y media horas de la mañana la Tierra tiembla ligeramente, y también vuestro cuerpo se
revuelve. Los antiguos habían advertido que el cuerpo emitía en este momento un sonido:
AN. Lo han asociado con PO para formar ANPO. Nuestra lengua es espiritual y cada
palabra tiene una historia. Es lenguaje salido de la naturaleza.
La estrella de la mañana está pues relacionada con la energía del Sol y de la Luna.
Un canto no es una serie de palabras cantadas con la voz de la cabeza, pues entonces
careceríamos de sentimiento. Para poner sentimiento en un canto hay que sacar la voz del
vientre para que haga vibrar nuestro corazón, todo nuestro cuerpo, y haga afluir las
lágrimas. Si cantáis con la voz de la cabeza sólo hacéis trabajar un lado de vuestro cerebro,
el de vuestra memoria. El sentimiento sale de la más profundo de vuestro cuerpo, atraviesa
vuestros pulmones, vuestra cabeza, vuestro cerebro, vuestros ojos, y las lágrimas corren, la
emoción sale. Vuestra cultura os ha enseñado, sin embargo, a no llorar. Un hombre que
llora es un hombre débil, se os ha repetido siempre. Como habéis aprendido a retener
vuestras lágrimas, vuestras emociones, os volvéis coléricos y violentos, algunos llegan
incluso a matar. Impedir a alguien llorar es una forma de violencia. Para afirmarse un
hombre debe aprender a llorar. En lugar de pelearse responderá serenamente a su agresor:
“no gracias, eres un tipo bravo, no quiero pelearme contigo”. Mientras que un hombre débil
responderá a la agresividad con la agresividad.
Las mujeres siempre han sabido llorar; a decir verdad, ellas utilizan a menudo este
saber como un arma, pero no es un arma, es un sentimiento, una emoción. Ellas no han
podido olvidar este saber, pues conocen el dolor del parto; el sufrimiento trae las lágrimas.
Es por ello que tenemos rituales como lo de la Danza del Sol destinados a los hombres. Los
rituales no son una forma religiosa. La práctica de los antiguos rituales conduce a una
comprensión fundamental de la vida. Así considera, la Danza del Sol es una forma de arte
que procura la experiencia y la comprensión del sufrimiento. El hombre se atraviesa la
carne y dedica su dolor a la mujer que soporta el parto. Si los hombres pudieran llorar ya no
habría guerra, la paz reinaría en el mundo entero. Es por ello que estos cantos nos enseñan a
llorar.
CE´KIYAYO significa: ora siempre. Ce´kiyayo significa: ve, ora. Las lágrimas deben
formar parte de nuestras oraciones y, para vivir realmente, debemos saber cómo orar. No
hay que guardad a estar en el umbral de la muerte para verte lágrimas. El sufrimiento, las
lágrimas, la emoción, el amor no son sino un juego que nosotros, los seres humanos,
jugamos. También los deportes son un juego. El juego, los deportes, el amor, todo ello no
constituye sino uno solo. Todo ello no es sino una forma de amor. Nunca nos han enseñado
eso, y es por lo que necesitamos cantos para comprender quiénes somos. Cada canto
encierra la más antigua de las enseñanzas. Esta primera enseñanza está igualmente en la
piedras, en las hojas, en los árboles. Miremos a través de cada canto: comprendamos lo que
cantamos y por qué vertemos lágrimas. Un niño llora para atraer la atención de sus padres,
pero éstos no comprenden siempre su lenguaje. Una planta llora cuando la arrancáis, cada
legumbre llora cuando la separáis de su pie. Cada animal, cada planta, cada árbol, el agua,
el aire, todo tiene una vida, un lado negativo, un lado positivo. Orad, ofreced tabaco, dad
gracias a la planta antes de recogerla y utilizarla.
Los Druidas tenían esta misma comprensión: toda cosa nos de su vida, su poder. El
roble tenía gran importancia en su tradición, pues representaba la supervivencia. Utilizaban
las bellotas para hacer gachas y zumos para beber... Mi pueblo utiliza también, y hoy en
día, el roble. Hacemos pan a base de harina de bellotas, puddings, zumos...
las palabras que acaban en O, las mujeres las pronuncian acabadas en E, por
ejemplo: ce´kiyayo se convierte en ce’kiyaye, yankelo se convierte en yankelé.
La Pipa es sagrada...
Mira...
La nación Bisonte avanza
Tu Abuelo ha dicho:
te doy esta Tierra
magnífica sobre la que Tatanka wa ma’niye
vivirás y te multiplicarás Ate heyelo, Ate heyelo
y la respetarás. Mako’ce wan waste ci cupi ca
La sombra de la sabiduría
Soy la sabiduría de
todo lo que ha sido creado.
Escucha, escucha,
Oigo una voz.
¿Son éstos nuestros Tuatoke ce an mani uwelo
Abuelos? Wanagi wan ceyomaniyee
¿O es un Espíritu Tuatoke ce an maniyee
que viene hacia nosotros?
Mira de arriba abajo, Tuatoke ce an mani uwelo
veo que son los ni Tunkasila kiyan uwelo hee.
Abuelos que vuelan Tuatoke ce an maniyee
a través del Cielo
viniendo hacia nosotros.
Hijo mío,
no dirijas la Pipa Sagrada
en la mala dirección Oksila canunpako
Hijo mío, ahepaweh luselo
no abuses de los objetos
sagrados Oksila canunpako
ahepaweh luselo
Estos objetos sagrados y estas aheyeee wanka
enseñanzas han sido transmitidas wokonseko epaweh luselo
a través de las edades aheyeee wanka
por el pueblo antiguo. Aheyeee yohwate
no pueden cambiar, wahte sin ko
deben ser los mismos,
no pueden ser nuevos,
no pueden cambiar.
Los Lakota son una de las tres ramas del pueblo teton. Te significa: vivo aquí, en este
lugar. Ton significa: de manera sagrada. Las otras dos ramas se caracterizan por una
variante lingüística, los Dakota y los Nakota. Hace mil años existían los Jakota, pero
han desaparecido, nadie sabe cómo ni donde. Cada comunidad lingüística se
subdivide en Fuegos del Consejo. Los Lakota representan la tribu más importante,
con siete Fuegos del Consejos y doscientos cincuenta mil miembros. Hoy en día
muchos Lakota tienen sangre crow. Los Crow son nuestros supuestos enemigos. No
sé por qué los americanos han querido hacernos enemigos. Tenemos también sangre
cheyenne.
Los Cheyenne y los Crow están en vías de rápida desaparición; se vuelven Lakota.
Un cuarto de los Crow y la mitad de los Cheyenne tienen sangre lakota. Decimos de
un niño que tiene sangre mezclada si su madre es cien por cien Lakota y su padre cien
por cien Dené. En realidad, su sangre es cien por cien india, de hecho no se trata de
una diferencia de sangre, sino de una diferencia cultural. Las enseñanzas espirituales
originales son diferentes.
Los Lakota tienen siete Fuegos del Consejo. Cada subdivisión posee sus jefes.
Después de los jefes viene el subjefe, el director, cuya función es la de mediar entre
los miembros de la tribu y los otros jefes. Después los Ancianos, los consejeros
públicos. Finalmente, los jefes hereditarios, que son los hijos de las viejas familias de
la tribu escogidos para ser los futuros jefes. Entonces son tomados y educados por
diferentes familias. Cuando era un niño fui colocado en treinta familias sucesivas. Yo
no comprendía por qué mi abuelo no me retenía junto a él y me colocaba siempre en
otra parte. Ahora sé que fue para que yo tuviese ocasión de aprender un máximo de
cosas; además que ayudar a criar un futuro jefe daba a cada familia el sentido de sus
responsabilidades en el seno de la tribu.
Hace mucho tiempo teníamos más de siete Fuegos de Consejo, había trece. Hace
centenares de años eliminamos seis Fuegos a causa de sus malas acciones.
Los Oglala tienen el territorio más grande: Pine Ridge, con dos millones de acres,
cerca de doscientas millas de largo por doscientas millas de ancho. A continuación
vienen los Quemados, cuyo territorio es de un millón de acres. Los Sin Arco, nobles,
los que no portan armas, están en Cheyenne Eagle Butte. Son los guardines de la Pipa
Sagrada. Los Hunkpapa en Standing Rock, los Dos Teteras en Rosebud y los Pies
Negros en Rosebud y Pine Ridge. Los Minneconjou, de los que formo parte y que son
la mayor de las tribus lakota, están dispersos por tres reservas: Pine Ridge, Rosebud y
Cheyenne Eagle Butte. Si quitáis los Minneconjou de Pine Ridge, la población
desciende de dieciocho a ocho mil. Nuestro número representa una amenaza para el
gobierno americano, y es por ello que nos han colocado en tres reservas diferentes
para que no pudiésemos unirnos en un mismo combate. Dividir para reinar mejor...
Ahora el pueblo lakota es solidario, y por ello esta separación ya no tiene efecto
alguno. Los pueblos indios se hacen cada vez más solidarios: las grandes tribus se
unen para hacer escuchar y cambiar las cosas.
Los indios Sioux pura sangre son aproximadamente ciento cuarenta y tres mil, y viven
en los Estados de Nebraska, Montana, Dakota del Sur, Dakota del Norte, Minnesota
y en Canadá. En total hay doscientos setenta y cinco mil indios Sioux. Los mestizos,
por tanto, son ya más numerosos que los indios pura sangre.
Los Sicangu: se les llama también los Quemados. Viven en la reserva de Rosebud, y
los hay en número de seis mil. Su jefe reconocido es Oso Rápido (Quick Bear). Yo
soy ahora, pues mi madre era una Oso Rápido.
Los Oglala: viven en la reserva de Pine Ridge y son trece mil. Normalmente son más
numerosos, pero se excluye a los indios provenientes de las reservas de Rosebud y de
Cheyenne River. Su jefe reconocido es William Red Cloud (Nube Roja).
Los Sin Arco: son cuatro mil y viven en la reserva de Cheyenne River Eagle Butte.
Se les llama a veces los Sioux Cheyenne. Su jefe reconocido es Enemigo de Matar
(Kills Enemy).
Los Hankpapa: viven en la reserva de Standing Rock y son todavía dieciocho mil. Es
el pueblo de Toro Sentado (Sitting Bull). Esta reserva llega también a Dakota del
Norte, pero la cifra de dieciocho mil sólo representa a los Lakota de Dakota del Sur.
No hay jefe reconocido en el momento actual.
Los Dos Teteras: viven en la reserva de Rosebud y son dos mil. Sus jefes reconocidos
son Caparazón de Hierro (iron Shell) y Oso Cuerno Hueco (Hollow Horn Bear).
Los Pies Negros: en mi lengua son los Siha Sapa. Viven en las reservas de Robebud y
de Pine Ridge, en las aldeas de Wanblee, Corn Creek y Red Leaf. Ya no son más de
tres mil. Sus jefes reconocidos son Antílope Cuerno Hueco (Hollow Horn Antelope) y
Selo Black Crow (Cuerno Negro).
Los Minneconjou: son los “Plantadores al Borde del Agua”, o más exactamente los
Minkayelawoju. Viven en las reservas de Rosebud, Pine Ridge y Cheyenne River
Eagle UVT. Son doce mil. Su jefe reconocido es Ciervo Paticojo (Lame Deer). Había
otros, pero están todos muertos. Pie Grande (Big Foot) fue uno de los últimos jefes de
esta banda. Fue asesinado en Wounded Knee (Rodilla Herida), en diciembre de 1890.
soy pues, el jefe de los Quemados y de los Minneconjou.
Las reservas de las que he hablado se sitúan en Dakota del Sur. Y las cifras
proporcionadas no conciernen más que a los indios Lakota pura sangre. Hay, pues,
sesenta mil Lakota en Dakota del Sur. Hoy en día, entre estas sesenta mil personas
cincuenta y cinco mil hablan su lengua y cinco mil no hablan más que el inglés,
aunque sean pura sangre. Son jóvenes de quince a treinta años. Tratamos de animar a
los jóvenes a hablar su lengua. Se enseña el lakota en la escuela. Igualmente, la
religión vuelve, más fuerte, entre mi pueblo.
Antaño las bandas tenían un papel: los Oglala y los Quemados eran los guardianes de
los demás, eran los guerreros. Los Sin Arco nunca han combatido, eran los pacíficos
de nuestro pueblo. Los Minneconjou y los Dos Teteras eran los granjeros.
Muchos otros indios Sioux no son contados. No se sabe dónde viven, o rehúsan
incluso ser considerados como indios.
No he contado los indios de las otras reservas de Dakota del Sur que no forman parte
de los siete Fuegos del Consejo. Ello tienen sus propios Fuegos del Consejo. Son las
reservas de Yankton, Siseton, Lower Brule, Green Wood, Wahpeton. Hablan el dialecto D.
En efecto, los Sioux hablan tres dialectos: el L, el D y el N. Para pasar del uno al otro basta
con cambiar una letra. Así, para pasar del dialecto L al D se sustituye toda la L por una D.
Las letras L y D no existen en el dialecto N. Los Lakota siempre se ríen de quienes hablan
el dialecto D o N. Es por ero que estos últimos no hablan más que el inglés cuando están
con los Lakota, por miedo a provocar risa. Pues las sonoridades son muy divertidas y
extrañas. Los Dakota y los Nakota son muy diferentes de los Lakota. Los Dakota que viven
en las reservas Yankton, Sisseton, Lower Brule, Green Wood y Wahpeton, han tenido más
contacto con los blancos. Han comerciado con traperos franceses que venían del Canadá.
Es por eso que encontraréis en estas cinco reservas numerosos hombres franceses: Ledoux,
Lebeau, Bordeaus, Roubideaux... Los Nakota se han mezclado con los blancos. Pueden
decirse que van cincuenta años por delante de los Lakota. Están educados, son granjeros. Se
han fundido en la civilización americana.
Ahora, cuando se habla de los Sioux se hace alusión a los Lakota. Incluso en el
pasado sólo oiréis hablar de ellos. Así, la batalla de Little Big Horn, en junio de 1876, fue
ganada por los Lakota. No habréis yodo hablar de los Nakota y los Dakota. La mayor parte
de las ceremonias tienen lugar donde los Lakota. Las tradiciones han sido conservadas.
Pocas gentes lo advirtieron, pero cuando se dice Sioux se habla de los Lakota: y uno se
acuerda de Toro Sentado (Sitting Bull), Caballo Loco (Crazy Horse), Agalla (Gall), Lluvia
en el Rostro (Rain in the Face), Nube Roja (Red Cloud). La Pipa Sagrada es guardada por
el pueblo lakota. Sólo los Lakota dicen: “Soy Lakota”, los Nakota y Dakota dicen: “soy un
Sioux”.
Nosotros, pueblo lakota, decimos que venimos de la tierra de donde los árboles crecen
pequeños; es decir, del Norte de Canadá. En la era glacial descendimos. Nosotros, los
Minikayelawoju, estábamos en la región que ahora se denomina Minnesota. Nuestra
historia es muy antigua. Contrariamente a lo que dicen los antropólogos, jamás hemos
atravesado el estrecho de Behring. Ahora tenemos nuestros propios antropólogos y
arqueólogos. Estamos empezando a probar que fue el hombre blanco el que abandonó estas
tierras y atravesó el estrecho de Behring camino de Europa, hace miles de años.
La tasa de desempleo es del noventa y cinco por ciento. El gobierno americano trata
de decir que el dinero distribuido a las tribus viene de los tratados, pero esto sólo es cierto
sobre el papel. La reserva de Rosebud recibe cinco millones de dólares por año, pero este
dinero va primero al ministerio del Interior, después al BIA (Negociado de Asuntos Indios)
en Washingtos, a continuación al BIA de las reservas, después al presidente tribunal, a sus
consejeros, y finalmente a cada familia india. Normalmente, cada familia debería recibir
catorce o quince mil dólares por año, ¡pero hay numerosas deducciones y el indio tiene la
oportunidad de recibir catorce dólares! Este es el modo de robar dinero de manera legal.
Conforme a los tratados el gobierno nos debe entregar dinero. En lugar de ello, distribuye
alimento, los excedentes dados a los pobres de las aldeas. Nunca se habla del dinero que se
desvía. Si se suprimiese el BIA y recibiésemos el dinero directamente del ministerio del
Interior nuestra situación sería mucho mejor.
Hemos perdido muchas tierras. Teníamos todo Dakota del Sur, Dakota del Norte,
Montana, Nebraska... Los tratados del 1852, 1858, 1868 y 1876 comprometieron a los
Estados Unidos de América a entregar dinero a nuestra tribu por las tierras perdidas. Han
sido todos violados.
BUSCAMOS
La comprensión espiritual se sitúa más allá de toda religión, más allá de toda Biblia,
más allá de toda enseñanza escrita. La espiritualidad penetra en el corazón y el espíritu de
cada persona que busca un nuevo camino, una nueva vida. Muchas enseñanzas espirituales
os son ofrecidas, algunas pueden no ayudaros en esta vida, aceptad por tanto otra. Hay
muchas enseñanzas.
Cada instructor espiritual, cada nacionalidad, cada raza, cada ser humano ha salido del
Árbol de la Vida, la esencia misma de todo conocimiento espiritual. El tronco hace las
ramas y luego las ramas hacen las hojas. El hombre es la hoja, alcanza una cierta madurez y
le llega el tiempo para partir al mundo de los espíritus, su cuerpo cae a Tierra como la hoja
del árbol. Así se fertiliza la Tierra.
Los instructores espirituales son las ramas maestras del Árbol, y están profundamente
unidos al corazón de nuestra Madre la Tierra. Las antiguas enseñanzas de los profetas y de
las profecías son así transmitidas desde hace miles de años. La vida continúa... Cada uno de
nosotros está a la búsqueda de la realidad, de la verdadera espiritualidad a todo lo largo de
su camino, sobre esta Tierra, nuestra Madre, a todo lo largo de su vida como ser humano.
Caminamos sobre la Tierra, la hierba es alta, las flores se abren y el dulce perfume de
un jardín nos atrae. Cambiamos de dirección para seguir este perfume. Llegamos a un río,
estamos fatigados y nos sentamos, nos descalzamos para bañar nuestros pies en el agua
fresca. Nos abandonamos al bienestar y a la dicha de este instante. Estamos en el mundo
del materialismo. Entonces el viento cambia y el perfume se desvanece. Para las gentes sin
paciencia la vida se detiene ahí.
Las gentes pacientes se sientan y oran. El viento gira de nuevo y el perfume vuelve
para guiarles hasta este jardín de la espiritualidad, del equilibrio que buscamos en el fondo
de nuestro corazón. Una vez en este jardín, debemos aceptar la realidad de lo que hemos
encontrado. Si desequilibramos esta realidad volvemos al comienzo mismo de nuestra
búsqueda para recomenzar, buscar de nuevo. (Siempre sin final, siempre hacia delante).
Así, sobre esta Tierra, se enrolla y desarrolla la espiritualidad alrededor de cada ser
humano.
GLOSARIO
CANUNPA Pipa
HANWI Luna
IKTOMI Araña
INIPI Choza de Sudación
INYAN Moverse
ISNATI Menstruaciones
ISNATIPI Residencia durante las menstruaciones
MAKA Tierra
MITAKUYE OYASIN Todo es mi familia
NAGI Espíritu
NAYI Fantasma
OKSILA Hijo
OLOWAMPI Canto
OYATE Nación
TAHCA USHTE Ciervo Paticojo (Lame Deer)
TATE Viento
TOB TOB Que marcha a cuatro patas
TUNKALIA El abuelo de los Abuelo
UNCI Abuela
WAKAN Sagrado
WAKAN TANKA Gran Espíritu
WAMIBLI GLESKA Águila Manchada
WICASA Hombre
WINYAN Dama
TABLA DE MATERIAS
INTRODUCCIÓN.................................................... 9
GLOSARIO............................................................. 229