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VOL. 31 - 2010 REVISTA DEL CONSEJO GENERAL DE COLEGIOS OFICIALES DE PSICÓLOGOS


SEPTIEMBRE - DICIEMBRE ISSN 0214 - 7823

PAPELES DEL
PSICÓLOGO
PSICOLOGÍA DEL DEPORTE

EVALUACIÓN PSICOLÓGICA Y APLICACIONES DE LA PSICOLOGÍA AL DEPORTE


PSICOLOGÍA Y LESIONES DEPORTIVAS - FUNCIONES PSICÓLOGO DEL DEPORTE
VOLUMEN 31
Septiembre - Diciembre
3
Sumario 2010

REVISTA DEL CONSEJO GENERAL DE COLEGIOS OFICIALES DE PSICÓLOGOS


Contents
Sección monográfica Articles
234. Presentación:Psicología del Deporte 234. Introduction: Sport Psychology
Enrique Cantón Chirivella Enrique Cantón Chirivella
237. La Psicología del Deporte como profesión especializada 237. Sport Psychology as a specialized occupation
Enrique Cantón Chirivella Enrique Cantón Chirivella
246. Funciones, tareas y perfil profesional del psicólogo del deporte en las 246. Functions, tasks and professional profile of sport psychology in sports
organizaciones deportivas organizations
M. Carmen Sánchez Gombau y Francisco Javier Sánchez Eizaguirre M. Carmen Sánchez Gombau and Francisco Javier Sánchez Eizaguirre
250. Evaluación psicológica en el deporte: Aspectos metodológicos y prácticos 250. Psychological evaluation in sport: Methodological and practical aspects
Mª Dolores González Fernández Mª Dolores González Fernández
259. El psicólogo del deporte en el alto rendimiento: aportaciones y retos futuros 259. High- performance sport psycologist: inputs and future challenges
Alejo García-Naveira Alejo García-Naveira
269. Aplicaciones de los conocimientos psicológicos en la iniciación deportiva 269. Applications of psychological knowledge in sport initiation
Eugenio A. Pérez Córdoba y Rosana Llames Lavandera Eugenio A. Pérez Córdoba and Rosana Llames Lavandera
281. Influencia de los factores psicológicos en las lesiones deportivas 281. The influence of psychological factors in sports injuries
Francisco J. Ortín Montero, Enrique J. Garcés de los Fayos Ruiz, Aurelio Francisco J. Ortín Montero, Enrique J. Garcés de los Fayos Ruiz and Aurelio
Olmedilla Zafra Olmedilla Zafra

Otras aportaciones Regular articles


289. Estrategias para la captación de familias acogedoras 289. Strategies for recruiting foster families
Mónica López López, Jorge F. Del Valle y Amaia Bravo Arteaga Mónica López López, Jorge F. Del Valle and Amaia Bravo Arteaga
296. Panorama general de la producción académica en la Psicología Iberoamericana, 296. General overview of academic production in Iberoamerican Psychology, 2005-
2005-2007 2007
Wilson López López, María Caridad García-Cepero, María Constanza Aguilar Wilson López López, María Caridad García-Cepero, María Constanza Aguilar
Bustamante, Luis Manuel Silva y Eduardo Aguado López Bustamante, Luis Manuel Silva and Eduardo Aguado López

María Ángeles Pablo Irache Francisco Ramos, Jesús Rodríguez Marín, Carlos
PAPELES DEL Rodolfo Ramos Álvarez Rodríguez Sutil, José Ignacio Rubio, Carlos Samaniego,
Rosa Mª Redondo Granado Aurelia Sánchez Navarro, Javier Urra, Miguel Angel
PSICÓLOGO Francisco Sánchez Eizaguirre Vallejo y Jaime Vila.
Francisco Javier Torres Ailhaud
Diseño y Maquetación
Ramón Jesús Vilalta Suárez
Edita Juan Antonio Pez Martínez
Consejo General de Colegios Oficiales de Redacción, administración y publicidad
Consejo Asesor
Psicólogos, España Juan Antonio Pez Martínez
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Director Consejo General de Colegios Oficiales de Psicólogos
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Francisco Santolaya Ochando
Eduardo Montes Velasco Cueto, Fernando Díaz Albo, María José Díaz-Aguado, Depósito Legal
Manuel Berdullas Termes Jesús A. De Diego, Raúl De Diego, Andrés Duarte López, M-27453-1981 / ISSN 0214-7823
Manuel Mariano Vera Martínez Rocío Fernández Ballesteros, Nicolás Fernández Losa,
De este número 3 del Vol. 31 de Papeles del Psicólogo
Fernando Chacón Fuertes Jorge Fernández Del Valle, Concepción Fernández se han editado 54.400 ejemplares.
Juan Manuel Egurtza Muniain Rodríguez, Alfredo Fornos, Enrique García Huete, Miguel
Jaume Almenara i Aloy Anxo García Álvarez, César Gilolmo, Jesús Gómez Amor, Los editores no se hacen responsables de las opiniones
Rosa Álvarez Prada Jorge L. González Fernández, Julio Antonio González vertidas en los artículos publicados.
Javier Bernal Oteiza García, José Gutiérrez Terrazas, Adolfo Hernández
Rosario Carcas Castillo Gordillo, Florencio Jiménez Burillo, Cristóbal Jiménez
Mª José Catalán Frias Jiménez, Annette T.Kreuz, Francisco Javier Labrador, José
Juan Delgado Muñoz Papeles del Psicólogo está incluida en las bases de
Carlos León Jarriego, Jesús Ramón Loitegui, Roberto
José Ramón Fernández Hermida datos PsycINFO, Psicodoc y del ISOC (Psedisoc),
Longhi, Aquilino Lousa, Araceli Maciá, Emiliano Martín,
Alfredo Fernández Herrero del DOAJ (Directory of Open Access Journals),
Aurora Gil Álvarez María Angeles Martínez Esteban, José Joaquín Mira, Luis
Montoro, José Muñiz, Nicomedes Naranjo, Conrado Elsevier Bibliographic Database: SCOPUS,
Lorenzo Gil Hernández
Navalón, José Ignacio Navarro Guzmán, Luis De Nicolás, Redalyc y en IBECS; y también se puede consultar
Dolores Gómez Castillo
Soledad Ortega Cuenca, Pedro Pérez García, Marino Pérez en la página WEB del Consejo General de
Margarita Laviana Cuetos
Jesús Ramón Loitegui Aldaz Álvarez, Félix Pérez Quintana, José Luis Pinillos, José Colegios Oficiales de Psicólogos:
María Isabel Martínez Díaz de Zugazua Antonio Portellano, José María Prieto, Ismael Quintanilla, http://www.cop.es
Papeles del Psicólogo, 2010. Vol. 31(3), pp. 259-268 Sección Monográfica
http://www.cop.es/papeles

EL PSICÓLOGO DEL DEPORTE EN EL ALTO RENDIMIENTO:


APORTACIONES Y RETOS FUTUROS
Alejo García-Naveira
Centros de Estudios e Investigación (CEI). Club Atlético de Madrid

El objetivo del presente artículo es el de exponer algunas aportaciones y retos futuros de la labor del psicólogo del deporte en el alto
rendimiento. Las acciones del psicólogo del deporte (evaluación, asesoramiento, formación, desarrollo personal y del talento deporti-
vo, entre otras) van dirigidas hacia el amplio colectivo que integra el contexto deportivo: los deportistas, el equipo, el entrenador, la
familia, el área médica, la dirección deportiva y los árbitros. Por otra parte, se realiza una reflexión sobre la necesidad de crear una
División Estatal de Psicología del Deporte, recibir una buena formación en Psicología del Deporte, crear una acreditación profesio-
nal para el psicólogo del deporte, incorporar nuevos conocimientos y técnicas psicológicas provenientes de otras especialidades de
Psicología y áreas de conocimiento, y valorar determinados aspectos éticos-deontológicos en la práctica profesional.
Palabras claves: Alto rendimiento, Necesidades psicológicas, Preparación psicológica.

The aim of the present article is to discuss some of the contributions and future challenges in the profession of the high-performance
sport psychologist. The actions of sport psychologists (assessment, guidance, training, personal and skills development, among others)
are directed toward the broad group that integrates the sports context: the team, the family, the coach, medical assistance, sports ma-
nagement and the referees. On the other hand, the following considerations are made: the necessity of creating a State Division of
Sport Psychology, the importance of adequate training in Sport Psychology, the creation of a professional accreditation for sport psy-
chologists, the incorporation of new knowledge and psychological techniques and assessment from other disciplines and the value of
certain ethical and deontological aspects in professional practice.
Key words: High-performance, Psychological needs, Psychological preparation.

o cabe la menor duda que el deporte constituye, riables ajenas del mismo (árbitro, terreno de juego, ri-
N hoy en día, el fenómeno social de mayor relevan-
cia y trascendencia en nuestra sociedad (Cox,
val…). En este sentido, se considera al deportista como
una unidad funcional (emocional, cognitiva, social, fisio-
2008). La prensa deportiva ocupa los primeros lugares lógica y comportamental) que necesita de una atención y
en la lista de periódicos más leídos; los padres sueñan entrenamiento global para obtener su máximo rendi-
con que sus hijos alcancen un día el “éxito” en el depor- miento (Morilla et al. 2003).
te; algunos clubes y entidades deportivas son considera- Desde esta perspectiva, surge el Psicólogo del Deporte
das como empresas generadoras de dinero; contratos (PD) como especialista de los “aspectos psicológicos”
multimillonarios de algunos deportistas… aunque, ¿qué (bienestar, personalidad, motivación, concentración,
requiere el deportista para alcanzar su máximo rendi- confianza…) que intervienen en el rendimiento deportivo
miento? (Cox, 2008). El rol del Psicólogo del Deporte (PD) se
Williams y James (2001) señalan que el rendimiento y comprende como un técnico en Psicología al servicio del
resultado deportivo de un deportista es multifactorial. cuerpo técnico (entrenador, preparador físico…) y de-
Tanto el éxito como el fracaso de un deportista o equipo más profesionales del área – director y coordinador de-
proceden de una combinación de capacidades condicio- portivo…- (Vives y Garcés de Los Fayos, 2003), aunque
nales físicas (fuerza, velocidad, resistencia…), técnicas el entrenador es el principal gestor (responsable) psicoló-
(la ejecución del drive en tenis, el golpeo del balón en
gico del deportista y/o equipo. Como tal, el PD debe
fútbol…), tácticas (defensa en zona en baloncesto, ir jun-
participar en la preparación general del deportista, con-
to al pelotón en ciclismo…) y psicológicas (personalidad,
juntamente con los demás técnicos y especialistas (médi-
habilidades de afrontamiento…), así como de otras va-
co, nutricionista…).
El trabajo de investigación y la práctica profesional nos
Correspondencia: Alejo García-Naveira. C/ Jordán, 15. 28200 sitúa ante una disciplina científica y aplicada (Psicología
San Lorenzo de El Escorial, Madrid. España. del Deporte) que está ampliamente desarrollada, que ca-
E-mail: alejopsico@europe.com da día es más reconocida por parte de los técnicos de-

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Sección Monográfica EL PSICÓLOGO DEL DEPORTE EN EL ALTO RENDIMIENTO

portivos, deportistas y demás profesionales del área, y, va (Ruiz, Sánchez, Durán y Jiménez, 2006). La labor del
sobre todo, que empieza a ser respetada por parte del PD vendrá marcada en función de la edad y nivel de
conjunto de psicólogos que no desarrollan su trabajo en competición de los deportistas, ya que cada “momento
el ámbito del deporte (Weinberg y Gould, 1996). A pe- evolutivo” y “situación deportiva” requerirá cubrir unos
sar de este aspecto, se considera oportuno analizar la objetivos concretos en un tiempo determinado.
labor que realiza el PD en el alto rendimiento para su Por una parte, en el deporte base, el fin último es que
mejora. los jóvenes lleguen (preparados) al deporte profesional.
El presente artículo no pretende ser una revisión ex- En estas etapas de formación de deportistas, resulta fun-
haustiva de la literatura de la labor del PD que trabaja damental el desarrollo de todas las cualidades necesa-
en la mejora del desempeño deportivo. El objetivo es el rias (física, técnico-táctica y psicológica) para la futura
de presentar al lector una visión personal, fruto de mi ex- alta competición (Morilla et al., 2003). Esto debe de su-
periencia profesional y de la reflexión de otros psicólo- poner una minuciosa planificación de este trabajo, a la
gos que trabajan en el ámbito deportivo tanto de la vez que una continuidad en el tiempo. Esta práctica ra-
vertiente práctica como de la investigación. cional y coherente, junto con el seguimiento de los as-
En los próximos apartados, se abordarán, en primer lu- pectos psicológicos que acompañan e inciden en un
gar, algunas consideraciones previas que facilitarán la correcto desarrollo del deportista (personalidad, habili-
comprensión del texto, como son los posibles grupos de dades psicológicas, hábitos saludables…) contemplan el
deportistas que integran el alto rendimiento, algunas va- fomento de la salud y la calidad de vida del joven, y el
loraciones sobre la Psicología Clínica Deportiva, las dife- análisis, estudio y valoración de acontecimientos que son
rentes situaciones laborales en las que el PD puede relevantes en el deporte (colegio, familia, amistades…) y
ejercer y la necesidad de planificar el trabajo psicológi- que obviamente, aportan tanto en su vertiente deportiva
co que se realiza con los deportistas o equipos. En se- como humana (Roffé y Bracco, 2003).
gundo lugar, se expondrá algunas de las acciones que Desde un punto de vista de incursión del PD en el mun-
realiza el PD en el alto rendimiento en función de los co- do laboral, cabe destacar lo que se ha denominado
lectivos que integran el ámbito deportivo (deportistas, “efecto base”. Esto es, el excelente desempeño y acepta-
entrenadores, familiares, servicios médicos, árbitros y di- ción del rol del PD en el deporte base, posibilita o facilita
rección deportiva). Y por último, se plantean algunas la integración del PD en el deporte profesional. Además,
perspectivas futuras. es de señalar el llamado “efecto dominó”, en el que el
PD tras realizar un buen trabajo con un deportista o
1. ALGUNAS CONSIDERACIONES PREVIAS equipo de una institución, se extiende a otros deportistas
Deportistas de alto rendimiento o equipos para realizar una preparación psicológica. El
Una posible clasificación reducida de deportista del alto trabajo del PD en el deporte base, por lo general, suele
rendimiento, está centrada en las clasificaciones oficiales tener una mayor estabilidad laboral (proyectos a me-
que otorgan el Comité Olímpico Español (deportistas con dio/largo plazo) que el deporte profesional para cola-
Ayudas al Deporte Olímpico –ADO-) y Consejo Superior borar en el desarrollo de los aspectos anteriormente
de Deportes (deportistas de alto nivel). Algunos ejemplos citados.
son, haber sido campeón o subcampeón de Europa, te- Por otra parte, en el deporte profesional y semi-profe-
ner una determinada clasificación en el ranking nacional sional, la meta inmediata es la obtención de resultados y
e internacional, etc. Otra posibilidad más amplia (no ofi- lograr vencer a otros. Para ello, los objetivos se centran
cial), es la que podemos integrar tanto al deportista pro- en el bienestar psicológico del deportista y el aumento
fesional (que vive económicamente de la práctica del rendimiento deportivo, partiendo de la premisa bási-
deportiva), semi-profesional (que parcialmente vive eco- ca de que el aspecto psicológico debe de ser considera-
nómicamente de la práctica deportiva) y el deporte base do definitivamente como “parte constitutiva de la
(jóvenes en etapa de desarrollo con proyección profesio- preparación global del deportista, como un elemento
nal). Una característica común a estos grupos de depor- más que tiene que interactuar apropiadamente con el as-
tistas es la alta práctica deliberada (aproximadamente, pecto físico, técnico y táctico” (Buceta, 1998).
de 2 a 6 horas diarias y de 5 a 7 días a la semana en En este contexto deportivo, el PD vive a la orden de los
función del deporte) que dedican a su actividad deporti- resultados, en el que suele haber un período menor de ac-

260
ALEJO GARCÍA-NAVEIRA Sección Monográfica

tuación (corto/medio plazo) en comparación con el de- dependiente dentro del organigrama, consultor externo
porte base. El PD debe asumir la continua exigencia de la (contratado para trabajos concretos) o profesional inde-
competitividad asociada a la consecución del éxito, y pro- pendiente (consulta privada). Sea de una forma u otra,
porcionar un apoyo personal y estrategias psicológicas al es importante que el PD tenga un espacio físico en el que
deportista para que mejore su potencial deportivo. pueda intervenir con los deportistas y demás profesiona-
les que soliciten sus servicios, y que trace las redes y
Psicología Clínica aplicada al deporte apoyos profesionales (médicos, entrenadores, prepara-
Caracuel y Pérez (1996) destacan la evolución histórica dores físicos) e institucionales (directivos, coordinado-
del rol del PD desde una perspectiva casi exclusivamente res…) necesarios para obtener una óptima estabilidad y
clínica hasta un desempeño de funciones más amplio e in- desempeño laboral.
tegrador. Este origen desde la Psicología Clínica, ha deja-
do al PD con dos vertientes en la actualidad: la Plan psicológico de actuación
funcionalidad y la valoración profesional. Por un lado, La improvisación y el centrarse en solucionar problemas
ciertos trastornos (ansiedad-estrés, trastorno obsesivo- (psicólogo “apaga fuegos”), ha marcado algunas de las
compulsivo…) pueden ir asociados a las demandas de- primeras intervenciones del psicólogo en el ámbito de-
portivas en el alto rendimiento (máxima exigencia, estricta portivo (Dosil, 2008). Esta arriesgada exposición, ha
disciplina deportiva…), y la solución requiere conocer en contribuido a la falta de credibilidad del desempeño
profundidad el contexto en que se desenvuelve, estar pre- profesional y a asociar a la figura del PD a “tener pro-
sente en ese momento de la temporada en el que se pro- blemas” o a solicitarlo cuando “sólo hay problemas”.
duce (inmediatez), valorar si interfiere o no en la actividad La labor del PD debería de cumplir al menos tres as-
y en su vida personal, y realizar una evaluación tanto des- pectos básicos: planificar, informar y coordinar. En pri-
de la dimensión psicológica como en su dimensión depor- mer lugar, el desempeño del PD debe de suponer una
tiva (Ezquerro, 2002). En este sentido, es recomendable minuciosa planificación a lo largo de una temporada del
que el PD tenga además formación en Psicología Clínica trabajo psicológico a realizar. Para ello, se requiere una
debido a su utilidad en el campo aplicado. De lo contra- planificación general (lo que habitualmente se debe
rio, o en los casos que el psicólogo no domine o conozca abordar), un análisis de la situación concreta (qué nece-
la temática, se recomienda derivar a otro profesional es- sidades tiene el deportista o equipo en este momento) y
pecializado (p.ej., ante problemas sexuales de pareja de una adaptación al deporte e institución deportiva en
un deportista). cuestión (filosofía, tradición, idiosincrasia…).
Por otro lado, la aproximación al ámbito deportivo des- En segundo lugar, la comunicación fluida con el resto de
de una perspectiva clínica, ha dejado una connotación compañeros de trabajo (y con el propio deportista) es un
negativa sobre la figura del PD. Las etiquetas de “loque- prerrequisito básico para la aceptación (como profesio-
ro” o “come cocos” son ejemplos de esta problemática. nal), intervención y el trabajo interdisciplinar. Y en tercer
Sin perder la posible función clínica del PD, sería positi- lugar, el plan psicológico debe de estar integrado dentro
vo difundir y concienciar a la sociedad y distintos profe- de la programación general de actuación. Se requiere co-
sionales del ámbito deportivo del rol y funciones del PD, ordinar los objetivos (p.ej., formación o mejora del rendi-
y crear una imagen más aceptada (o atractiva) del mis- miento), tiempos (p.ej., pre-temporada, períodos de más
mo. Por ejemplo, considerar al PD como un técnico de- trabajo físico…) y las acciones, con el resto de profesiona-
portivo (Morilla et. al, 2003) pude facilitar este “cambio les que trabajan con el deportista o equipo.
de imagen”. No creo que sea una cuestión de dejarnos A pesar de estos aspectos, el PD también debe de estar
de llamar PD, si de informar y “saber vender”. A veces preparado para situaciones no esperadas (p.ej., cambio
el “marketing” es tan importante como el “producto”. de entrenador, lesiones…), que requieran una “cierta
improvisación” dentro de la programación.
Localización del PD Otro aspecto a tener presente dentro de la planificación
Otro aspecto a tener presente es la situación física-labo- psicológica es el de cuantificar la mayoría de los datos
ral del PD. Buceta (1998) señala la posibilidad de que el que se gestionan desde esta área. Por ejemplo, se puede
PD esté integrado dentro del grupo de trabajo del área registrar el rendimiento y/o resultado del deportista an-
médica de la entidad deportiva, como departamento in- tes y después de la intervención psicológica, realizar es-

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Sección Monográfica EL PSICÓLOGO DEL DEPORTE EN EL ALTO RENDIMIENTO

tadísticas a nivel académico de los deportistas, etc. El los fracasos deportivos) puede influir en la vida personal
objetivo es hacer “visible” lo que a veces parece ser una del deportista (p.ej., estado anímico negativo), mientras
labor “en la sombra” del PD, desde el cumplimiento del que ésta (p.ej., conflictos de pareja), también puede in-
código deontológico. terferir sobre el rendimiento del deportista (p.ej., exceso
Una vez valorados estos aspectos, se presentan algu- de tensión muscular). Para llevar a cabo este cometido,
nas acciones que realiza el PD en el alto rendimiento de- una posibilidad es contemplar en la evaluación dos
portivo. Como se ha comentado con anterioridad, la grandes conjuntos de variables: personales y ambienta-
labor profesional va encaminada hacia el colectivo que les, subdivididas a su vez, como se muestra en la tabla 1
engloba el ámbito deportivo: deportistas, equipo, entre- (Ezquerro, 2008).
nadores, técnicos deportivos, padres de deportistas, ár-
bitros y jueces deportivos y directivos. 2.1.2. Intervención
Al recibir a un deportista, se busca atender las diferentes
2. ACCIONES DEL PD EN EL ALTO RENDIMIENTO demandas que pueda tener, tanto en su vertiente perso-
2.1. Actividades dirigidas al deportista: nal (bienestar, problemas personales, familiares…) como
Las acciones del PD se centran básicamente en la eva- deportiva (mejora del rendimiento, lesión, conflictos in-
luación y realización de informes a nivel psicológico, la terpersonales…). En este sentido, se ofrece un servicio de
intervención y la formación del deportista. desarrollo personal y del talento deportivo.
Respecto a la mejora del rendimiento deportivo, un im-
2.1.1. Evaluación psicológica portante número de psicólogos realizan en la actualidad
Se trata de aportar una serie de datos sobre distintas fa- un entrenamiento psicológico con deportistas de diversa
cetas psicológicas del deportista para que, en caso nece- índole y distinta modalidad como es el caso del fútbol,
sario, sirva de punto de partida para una óptima atletismo, natación, etc. (Garcés de los Fayos y Vives,
intervención o valoración del mismo. El referente de este 2005; Gimeno, Buceta y Pérez-Llantada, 2007). El pro-
apartado es el cumplimiento del código deontológico. pósito general de este tipo de intervención es crear un
Al abordar a un deportista, se requiere hacerlo desde estado de rendimiento ideal, a través del autocontrol de
una perspectiva global, no centrada sólo en el rendi- procesos internos como la confianza, la atención, las
miento. A veces puede haber otras prioridades que inter- emociones, la cognición o los estados corporales, como
fieren con éste, sin cuya solución el deportista no señalan Hardy, Jones y Gould (1996). A pesar de esto,
progresaría. Por ejemplo, la actividad deportiva (p.ej., se recomienda empezar a centrar los esfuerzos en el
análisis de la eficacia de la intervención psicológica so-
TABLA 1 bre el rendimiento del deportista (Ezquerro, 2008). Por
VARIABLES IMPLICADAS EN LA EVALUACIÓN DEL DEPORTISTA
un lado, el establecimiento de objetivos, imaginar en po-
(EZQUERRO, 2008)
sitivo, controlar la activación, mantener un auto-diálogo
PERSONALES Psicológicas Cognitivas, emociona- positivo, establecer rutinas pre-competitivas, etc., tienen
les, conductuales…
que seguir demostrado su eficacia con un mayor rigor
Deportivas Situación deportiva, re- metodológico. Por otro, no siempre los procesos internos
cursos técnicos, tácticos, negativos (pensamientos, emociones y comportamientos)
condición física…
tienen efectos limitantes sobre el rendimiento (autorregu-
Orgánicas Salud, descanso, ali- lación).
mentación, historia de
También es de destacar el estudio de los aspectos per-
lesiones…
ceptivo-cognitivos (reconocimiento de los patrones de
AMBIENTALES Deportivas Clima del equipo, am- juego, detección de información relevante, conocimiento
biente de trabajo, rela-
ción con entrenador,
meta-cognitivo…) que diferencian a los deportistas ex-
compañeros… pertos y excelentes de quienes lo son menos (Ruiz, Sán-
chez, Durán y Jiménez, 2006). El desarrollo de
Extradeportivas Relaciones interpersona-
les, estudios-trabajo, si- programas que potencien estos aspectos es un reto de
tuación económica, futuro por parte del PD.
otros intereses…
Dentro de este apartado, otros aspectos a valorar del

262
ALEJO GARCÍA-NAVEIRA Sección Monográfica

trabajo con los deportistas son: la presencia del PD en guir una mejor y más rápida adaptación. En estos casos,
los entrenamientos y competiciones, las diferencias de la figura del PD que tutela, gestiona o asesora al depor-
género y la atención a deportistas foráneos. tista, cobra un especial interés para hacer frente al cam-
bio. Un cuidado de la importante inversión económica y
Presenciar los entrenamientos y competiciones humana realizada por el club.
Esta actividad laboral requiere de más psicólogos de
“chándal” (Roffé, 2007). Por un lado, una indumentaria 2.1.3. Formación
deportiva (frente a una bata blanca o traje proveniente La formación es uno de los pilares básicos del éxito per-
del ámbito clínico o de la empresa, respectivamente) sonal y deportivo. El desarrollo cognitivo, el aprendizaje
puede acercar a la figura del PD a los deportistas, facili- de habilidades psicológicas para hacer frente a la com-
tando la aceptación personal y profesional. Por otro la- petición, el estructurar el día y la semana con activida-
do, la presencia del PD en los entrenamientos y des, relacionarse con otras personas fuera del ambiente
competiciones proporciona información “real” del rendi- deportivo, llevar una vida equilibrada en cuanto a hábi-
miento del deportista. Por ejemplo, el análisis de la com- tos, etc., son sinónimos de “bienestar psicológico” y
petición puede ofrecer información relevante de aquellos “preparación mental” para la competición.
aspectos que el deportista debe de mejorar, siendo el Algunas de las actividades en las que el PD tiene parti-
entrenamiento un lugar idóneo para la organización de cipación son: colaboración en el área académica (aseso-
tareas con contenido psicológico (concentración, manejo ramiento, orientación y seguimiento), búsqueda de
de presiones…) para su mejora (Ortega, Cárdenas, trabajo (crear un currículum, afrontar una entrevista…),
Puigcerver y Méndez, 2005). desarrollo de talleres formativos (valores, consumo de
drogas, educación sexual…) y formación psicológica
Diferencias de género para la competición (técnicas de motivación, control de
Existe un aumento de participación de la mujer en el de- la ansiedad, concentración…).
porte del alto rendimiento (Martín, 2003). Para realizar Contrario a lo que se podría pensar, no sólo es impor-
intervenciones más eficaces, es importante que el PD ten- tante la formación en el deporte base, también, el depor-
ga conocimiento de las posibles diferencias de género tista profesional requiere incorporar conocimientos y
en el ámbito deportivo. Por ejemplo, Ruiz (2005) señala competencias que le sirvan para abordar con mayores
que las mujeres judokas de competición de nivel nacio- garantías su actividad deportiva y su vida en general
nal son más afables y cooperadoras que los hombres. (ambas suelen estar relacionadas). El PD debe de prestar
Por tanto, se recomienda una formación específica en es- especial atención a los deportistas profesionales, debido
ta área (p.ej., en los programas de los Masters en Psico- a que es posible que sean un colectivo de riesgo en ma-
logía del Deporte), en el que el PD debe de seguir teria de formación. La falta de hábitos, el tener poco
profundizando y tener presente en su desempeño profe- tiempo para otras actividades debido a los entrenamien-
sional. tos, el pensar que tienen la vida resuelta a nivel econó-
mico, el tener otras motivaciones (p.ej., progresar
Atención a deportistas foráneos deportivamente), etc., hacen que muchos deportistas
Es necesaria la atención especial de los deportistas que puedan descuidar esta parcela.
provienen de otros países (Morilla, et. al., 2003). Dife- Otros aspectos en los que el PD debe de profundiza y
rentes idiomas y culturas, nuevo lugar de estancia y en- consolidar en sus acciones dentro del deporte del alto
trenamiento, nuevos compañeros y técnicos de trabajo, rendimiento son el retiro deportivo, la agresión y la edu-
la propia personalidad del deportista, etc., son algunos cación en valores.
aspectos a tener presente, ya que pueden dificultar la
adaptación y el rendimiento del deportista. Por tanto, es El retiro del deportista
importante hacer hincapié en la atención y formación El fenómeno de la retirada deportiva implica numerosas
deportiva y personal de los deportistas foráneos. variables de enorme importancia y a la que, al menos
En ocasiones, por ejemplo, en el fútbol, se invierte mu- desde un punto de vista práctico no siempre se le ha
cho dinero en fichar a un jugador foráneo, sin tener en prestado la debida atención (González y Bedoya,
cuenta las necesidades que este pueda tener para conse- 2008). La retirada deportiva es un proceso transitorio

263
Sección Monográfica EL PSICÓLOGO DEL DEPORTE EN EL ALTO RENDIMIENTO

que, con frecuencia se inicia con un sentimiento de pér- ocio. Es en el ámbito del alto rendimiento dónde el PD
dida y que, posteriormente, va hacia un crecimiento per- debe prestar una atención especial. La excesiva búsque-
sonal y adaptación. El deportista debe de adaptarse a da del resultado deportivo (ganar, triunfar, destacar…)
una nueva situación para la que, en la mayoría de los puede interferir con esta labor (Cecchini, González y
casos, no estaba preparado. Montero, 2007). Por tanto, es necesario que el PD tenga
Ante este panorama se requiere al menos dos líneas de en cuenta esta peculiaridad e identifique los obstáculos
trabajo por parte del PD: a) preventiva: contribuir a la que limitan su desempeño y busque los apoyos (directi-
formación y planificación del futuro personal y profesio- va, presidente, entrenadores…) necesarios para llevarlo
nal durante el período activo del deportista; b) afronta- acabo. Un ejemplo de esta propuesta, es el proyecto
miento: las entidades vinculadas al deporte de alto “MÁS QUE FÚTBOL” desarrollado por el Club Atlético
rendimiento, deberían establecer programas de asesora- de Madrid, Comunidad de Madrid, Federación Madrile-
miento e intervención que faciliten el período de ajuste a ña de Fútbol, Fundación de Ayuda a la Drogadicción y
la nueva situación de los deportistas. el Colegio de Psicólogos de Madrid con jugadores de
fútbol de competición de las categorías infantiles y cade-
Agresión en el deporte tes (para más información: www.+kf.es), aunque el ma-
Determinados factores pueden estar incidiendo en el yor reto se centra en conseguirlo con deportistas adultos.
comportamiento agresivo de los deportistas y los aficio-
nados -predisposición fisiológica, bajo nivel de razona- 2.2. Actividades dirigidas al equipo
miento moral, falta de autocontrol, rasgo agresivo, Atención específica requiere el trabajo dirigido a equi-
determinadas acciones del juego...- (Pelegrín, 2002). Es- pos o plantillas, entendidos estos como grupos con diná-
to puede representar un juego violento, lesiones de los micas propias, con configuraciones concretas y con
deportistas por agresión de un rival, violencia en las objetivos particulares (Gil, 1999). La metodología aquí
gradas, etc. Además de intervenir directamente con el empleada se especializa, dirigiéndose básicamente a la
deportista (p.ej., mediante el aprendizaje de técnicas de construcción de equipo (cohesión, mentalización…) y a
autocontrol), el PD puede trabajar en el desarrollo y apli- fortalecer las cualidades válidas para la dirección (lide-
cación de programas de educación a través del deporte, razgo) y el trabajo en equipo (sacrificio, distribución de
y de esta forma, colaborar en la reducción de actos vio- las tareas, aceptación de roles, sentimiento de club, etc.).
lentos. También, un reto importante como futura línea de Por ejemplo, García-Mas y Rivas Garza (2001) señalan
investigación e intervención es el trabajo con los aficio- la importancia del trabajo del entrenador (o con el psi-
nados. cólogo que colabora con el entrenador) para la mejora
de la motivación del equipo. En este sentido, se aborda
Educación en valores el trabajo psicológico con variables relacionadas con la
Es común considerar el deporte como una actividad que motivación, como son la concentración, confianza, cohe-
contribuye a la mejora de los individuos, como formador sión, establecimiento de objetivos y el trabajo ante la vic-
de actitudes útiles para la vida en general (Palou et al., toria y la derrota.
2003). En contextos educativos adecuados, posibilita a
los deportistas, comprometer y movilizar sus capacida- 2.3. Actividades dirigidas a entrenadores
des de tal manera que esta experiencia organice y confi- A la hora de trabajar con el entrenador, es necesario te-
gure su propio yo, logre su auto-estructuración, ner presente las características psicológicas del entrena-
capacidad de trabajar en equipo y deportividad. dor del alto rendimiento frente a otros niveles de
El deporte, como cualquier actividad de la vida, puede competición (Mendoza, Izquierdo, Rodriguez y Ruiz,
transmitir tanto valores deseables como no deseables 2007). Sin entrar en los estudios y modelos que buscan
(Lee, 1990). La simple participación deportiva no puede definir los rasgos, habilidades psicológicas o estilos de
considerarse como educación moral y esto exige de los liderazgo eficaces del entrenador, podríamos definirlo
formadores (entrenadores, padres…) una clara concien- como “una persona que tiene un conocimiento en pro-
cia de los valores que transmiten. fundidad del deporte de su especialidad, además de una
Habitualmente, los trabajos en educación en valores, se alta motivación hacia la práctica de su profesión, y que
han realizado dentro de un contexto de recreación o de sabe organizar, planificar e integrar de forma creativa

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ALEJO GARCÍA-NAVEIRA Sección Monográfica

la estrategia, táctica y técnica deportivas para conseguir rrollo de la excelencia en el deporte base. Podríamos de-
el máximo rendimiento de los deportistas” (Pérez, 2002). cir que “detrás de un gran deportista, hay una gran fa-
El trabajo del PD con el entrenador puede depender de milia”. El objetivo principal es que los padres
varios factores: vínculo personal, formación del entrena- contribuyan de forma positiva a la formación integral de
dor, cultura deportiva, metodología de trabajo, etc., as- sus hijos, y que sus acciones se integren dentro del mar-
pectos que el PD debe de tener presente y desarrollar. El co de actuaciones del programa establecido por la insti-
PD trabaja con el entrenador con el objetivo de contri- tución deportiva. En general, el PD debe realizar una
buir a su desarrollo personal y profesional. Por un lado, labor de Formación, Orientación y Asesoramiento (FOA)
el entrenador también es persona, y diferentes situacio- con los padres, en cuanto a las relaciones con sus hijos,
nes (personal, familiar, deportiva…) pueden afectar a su entrenadores y directivos, el comportamiento en las com-
bienestar personal y labor profesional. Por otro, la for- peticiones, y su “papel” en la formación académica de
mación, el asesoramiento y aprendizaje de competen- su hijo.
cias psicológicas (liderazgo, comunicación…) forman Dentro del deporte profesional, el PD debe de tener
parte del trabajo del PD para que el entrenador gestione presente y “velar” por la situación familiar del deportis-
de manera más eficaz al deportista y/o equipo. ta. Aspectos como conflictos de pareja, marcha acadé-
En este sentido, el trabajo psicológico a realizar direc- mica de sus hijos o necesidad de cambio de colegios,
tamente con el entrenador o indirectamente con el de- situación particular de un miembro de la familia, etc.,
portista, a través de dicho entrenador, sería una puede afectar negativamente al deportista.
propuesta de investigación de futuro (Garcés de Los Fa-
yos, Vives y Dosil, 2004). También señalar que, además 2.5. Colaboración con el Área de Medicina
del entrenador, existen otras figuras representativas Es sabido que determinados factores psicológicos (p.ej.,
(p.ej., preparador físico y 2º entrenador) en las que el el estrés) pueden facilitar que se produzcan lesiones, re-
PD debería centrar sus acciones, debido a la importante trasar los períodos de recuperación y hacer más incierta
labor que realizan con los deportistas. la vuelta a la actividad deportiva (Buceta, 1998). El PD
Un aspecto relevante que se está fomentando en deter- tiene una valiosa labor de colaboración con los médicos
minadas instituciones deportivas, es la evaluación psico- y demás profesionales de la salud en materia de preven-
lógica del entrenador (comunicación, relaciones ción, recuperación y evitación de recaídas en lesiones
interpersonales…), con el objetivo de valorar la cercanía deportivas (Olmedilla, 2005).
o no entre sus competencias psicológicas y el perfil ópti- Otro aspecto importante es la alimentación de los de-
mo del entrenador (desarrollado por la propia entidad). portistas. La dieta es uno de los aspectos básicos en el
Dicha información serviría como punto de partida (feed- rendimiento y desarrollo físico y psicológico del deportis-
back) para reforzar los puntos fuertes y potenciar los ta. La propia exigencia deportiva, el estilo de comunica-
puntos débiles detectados de cada entrenador o como ción del entrenador (punitivo), el excesivo control del
referente para valorar la labor del mismo. peso del deportista, etc., puede influir en el desarrollo de
Otra línea interesante de trabajo del PD es la integra- un trastorno de la conducta alimentaria (Sánchez, Vila,
ción de aspectos “psicológicos” en la propia estructura y García-Buades y Domínguez, 2005). El PD puede cola-
contenidos de los entrenamientos, con el objetivo de for- borar con otros profesionales (médicos, nutricionistas...)
talecer psicológicamente al deportista. Para ello, es ne- en la creación de hábitos saludables de alimentación en
cesario el trabajo interdisciplinar con el entrenador y el deportista (Olmedilla y Andreu, 2002). Formación,
demás técnicos deportivos, para integrar y coordinar as- asesoramiento y orientación de la familia, del deportista
pectos como el trabajo en concentración (p.ej., realizar y entrenador, la aplicación de técnicas como el control
ejercicios con refuerzos y castigos en función de la eje- estimular, el establecimiento de objetivos, etc., son algu-
cución), situaciones de estrés (p.ej., rendir ante condicio- nas cuestiones en las que el PD debe incidir para crear
nes de desventaja o adversas), etc. una adecuada conducta alimentaria en el deportista (Dí-
az, 2005).
2.4. Trabajo con la familia
El papel de los padres y de los otros significativos (tuto- 2.6. Colaboración con la dirección deportiva
res, familiares…), es un elemento capital para el desa- Los objetivos básicos son colaborar en el desarrollo or-

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ALEJO GARCÍA-NAVEIRA Sección Monográfica

dría integrar en las asignaturas de Licenciatura, nal. Revista de Psicología del Deporte, 10 (1), 85-87.
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✔ Aspectos éticos-deontológicos en la práctica profe- Evolución histórica y perspectivas de futuro de la Psi-
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ción especial debido a las características propias del gía del Deporte, 1 (1), 9-16.
contexto deportivo (Ojea y Calo, 2005). Así, situa- Garcés de Los Fayos, E., Vives Benedicto, L. y Dosil, J.
ciones que pueden surgir en el contexto de la ense- (2004). Nuevas aportaciones en Psicología del Depor-
ñanza de las habilidades mentales en el marco de un te. Una mirada crítica sobre la última década de
trabajo grupal o intervenciones del PD llevadas a ca- nuestra disciplina. Cuadernos de Psicología del De-
bo en espacios semi-públicos, como por ejemplo ves- porte, 4 (1 y 2), 7-16.
tuarios, campos de juego y hasta hoteles, resultan Garcés de Los Fayos, E. y Vives Benedicto, L. (2005). Los
atípicas si se la compara con los espacios reservados límites del entrenamiento psicológico aplicado al de-
en que se despliegan más tradicionales, como, por porte. Cuadernos de Psicología del Deporte, 5 (1 y
caso, la asistencia terapéutica individual en el ámbito 2), 271-284.
restringido de la consulta de un psicólogo clínico. García-Mas, A. (1997). La psicología del deporte y sus
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