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ACTUALIZACIÓN

Complicaciones hiperglucémicas
agudas de la diabetes mellitus:
cetoacidosis diabética y estado
hiperosmolar hiperglucémico
J.J. Alfaro Martíneza, R.P. Quílez Tobosoa, A.B. Martínez Motosb y C. Gonzalvo Díaza
Servicios de aEndocrinología y Nutrición y bMedicina Interna. Complejo Hospitalario Universitario de Albacete.
Albacete. España.

Palabras Clave: Resumen


- Complicaciones de la La cetoacidosis diabética y el estado hiperosmolar hiperglucémico son complicaciones agudas de
diabetes la diabetes mellitus que pueden poner en peligro la vida si no se tratan correctamente. El mecanis-
- Cetoacidosis diabética mo subyacente a la cetoacidosis diabética es la deficiencia de insulina, junto con un aumento de
- Estado hiperosmolar hormonas contrarreguladoras como el glucagón, cortisol, las catecolaminas y la hormona de cre-
diabético cimiento. El estado hiperosmolar hiperglucémico se caracteriza por deficiencia de insulina y deshi-
dratación. Ambas complicaciones pueden ser la forma de comienzo de la diabetes o aparecer en
- Hiperglucemia
diabéticos conocidos por muchas causas, siendo la más frecuente la infección. El tratamiento de
- Cuerpos cetónicos estas entidades incluye la evaluación clínica, corrección de la deshidratación y de los trastornos
metabólicos, la identificación y el tratamiento de los factores precipitantes y comorbilidades, el
apropiado tratamiento crónico de la diabetes y la planificación para evitar nuevas complicaciones
agudas. Muchos casos pueden ser prevenidos por una adecuada educación diabetológica.

Keywords: Abstract
- Diabetes complications
Acute complications of diabetes mellitus: diabetic ketoacidosis and hyperosmolar
- Diabetic ketoacidosis hiyperglycemic state
- Diabetic hyperosmolar state
Diabetic ketoacidosis and hyperosmolar hyperglycaemic syndrome are acute complications of
- Hyperglycemia diabetes mellitus that can be life-threatening if not treated properly. The basic underlying
- Ketones mechanism for diabetic ketoacidosis is insulin deficiency coupled with elevated levels of
counterregulatory hormones, such as glucagon, cortisol, catecholamines, and growth hormone.
Hyperosmolar hyperglycaemic syndrome is characterized by insulin deficiency and dehydration.
Both complications can be the initial presentation of diabetes mellitus or precipitated in known
patients with diabetes mellitus by many factors, most commonly infection. The management
involves careful clinical evaluation, correction of dehydration and metabolic abnormalities,
identification and treatment of precipitating and co-morbid conditions, appropriate long-term
treatment of diabetes, and plans to prevent recurrence. Many cases can be prevented by proper
education to diabetic patients.

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ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS

Concepto TABLA 1
Factores predisponentes o precipitantes de la cetoacidosis diabética
y el estado hiperosmolar hiperglucémico
La cetoacidosis diabética (CAD) y el estado hiperosmolar Infección
hiperglucémico (EHH) representan dos desequilibrios meta- Comienzo de la diabetes mellitus tipo 1 (y en algunos casos de diabetes mellitus
bólicos diferentes que se manifiestan por deficiencia de insu- tipo 2)
lina e hiperglucemia intensa. El EHH aparece como conse- Suspensión de la administración de insulina o tratamiento insulínico inadecuado
cuencia de una carencia de insulina que no es capaz de cubrir Trastorno de la conducta alimentaria
las necesidades del paciente, produciéndose una intensa hi- Pancreatitis

perglucemia, que a su vez da lugar a deshidratación, mientras Infarto agudo de miocardio

que la CAD surge como consecuencia de una deficiencia de Accidente cerebrovascular


Fármacos: corticoides, tiacidas, agentes simpático-miméticos, pentamidina,
insulina más intensa, en la que además está incrementada la antipsicóticos
producción de cuerpos cetónicos y aparece acidosis1. Adaptada de: Kitabchi AE, et al3.

Epidemiología en el hígado, además de aumentar el suministro al hígado de


sustratos procedentes de la grasa y el músculo (ácidos grasos
La CAD se asocia característicamente con la diabetes tipo 1.
libres, aminoácidos).
También ocurre en pacientes con diabetes tipo 2 bajo condi-
Cuando la glucemia supera el límite renal para su reab-
ciones de estrés extremo como infecciones graves, traumatis-
sorción (sobre los 180 mg/dl) se acompañará de glucosuria,
mos, emergencias cardiovasculares y menos frecuentemente
tanto mayor cuanto más elevados sean los niveles de gluce-
como comienzo de la diabetes tipo 2.
mia, y de diuresis osmótica, con poliuria, pérdida de electro-
La CAD es más común en pacientes menores de 65 años
litos, fundamentalmente sodio y potasio, así como magnesio,
y en mujeres2,3. En Estados Unidos, en el año 2005, se estima
cloro y fosfatos, que llevará a un estado de deshidratación
que alrededor de 120.000 altas hospitalarias contaban con el
progresivo, que será más intenso cuanto mayor sea el tiempo
diagnóstico de CAD, en comparación con 62.000 en el año
de evolución6.
1980. Por otra parte, la mortalidad debida a CAD por
La cetosis es el resultado de un notable incremento de los
100.000 diabéticos se redujo entre 1985 y 2005, con mayor
ácidos grasos libres procedentes de los adipocitos, con el re-
reducción de la mortalidad entre pacientes de 65 años o ma-
sultado de un desplazamiento hacia la síntesis hepática de los
yores4. La mortalidad en la CAD se debe principalmente a la
cuerpos cetónicos. El descenso de los niveles de insulina,
patología subyacente que la precipita, y sólo rara vez a com-
combinado con la elevación de catecolaminas y hormona de
plicaciones metabólicas de la hiperglucemia o de la cetoaci-
crecimiento, aumenta la lipólisis y la liberación de ácidos
dosis2,3.
grasos libres. En condiciones normales, los cuerpos cetóni-
El pronóstico de esta entidad es peor en los extremos de
cos aumentan la liberación de insulina por el páncreas; la
la vida y ante la presencia de coma e hipotensión.
insulina suprime a su vez la cetogénesis. En el estado de de-
No existen datos poblacionales sobre EHH. Se estima
ficiencia de insulina las células beta pancreáticas son incapa-
que la proporción de ingresos hospitalarios por EHH es me-
ces de responder y la cetogénesis ocurre sin limitaciones1. En
nor que en el caso de la CAD, y que suponen menos del 1%
un pH fisiológico, los cuerpos cetónicos existen en forma de
de todos los ingresos en pacientes diabéticos3,5.
cetoácidos, que son neutralizados por el bicarbonato. Al ago-
El EHH es más frecuente en pacientes mayores de
tarse los depósitos de bicarbonato sobreviene la acidosis me-
65 años con diabetes tipo 2. La mortalidad atribuida a esta
tabólica.
entidad es mayor que en el caso de la CAD, con tasas que van
El desencadenante de la CAD es un valor insuficiente de
del 5 al 20%. Al igual que en la CAD, la mortalidad en el
insulina plasmática. Más a menudo es precipitada por un au-
EHH suele deberse a la enfermedad subyacente o la comor-
mento de las necesidades de esta hormona, como sucede en
bilidad del paciente3.
el caso de las enfermedades intercurrentes, problema que se
acentúa cuando el paciente o el personal sanitario no aumen-
tan adecuadamente las dosis de insulina1.
Etiopatogenia En el caso del EHH, el déficit relativo de insulina y el
aporte insuficiente de líquidos son las causas que subyacen
La CAD es el resultado de un déficit de insulina combinado en esta entidad clínica. En las situaciones de diabetes mal
con un exceso de hormonas contrainsulares (glucagón, cate- controlada se genera hipertonicidad extracelular por pérdida
colaminas, cortisol y hormona del crecimiento)1. La tabla 1 de líquidos secundaria a diuresis osmótica, y por acumula-
resume los factores predisponentes y precipitantes de la ción extracelular de glucosa que no entra en las células por
CAD y el EHH. Hay que tener en cuenta que el simple dé- falta de insulina. El déficit de insulina aumenta la producción
ficit de insulina no es suficiente para explicar la hipergluce- hepática de glucosa, mientras que este déficit junto a las altas
mia tan importante que se produce en esta situación metabó- concentraciones de catecolaminas disminuye la captación de
lica1,6. El descenso de la proporción entre insulina y glucagón glucosa por el músculo esquelético. La hiperglucemia induce
y otras hormonas contrainsulares incrementa la gluconeogé- glucosuria y diuresis osmótica que provocan la disminución
nesis, la glucogenolisis y la formación de cuerpos cetónicos del volumen intravascular (que se exacerba todavía más por

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COMPLICACIONES HIPERGLUCÉMICAS AGUDAS DE LA DIABETES MELLITUS: CETOACIDOSIS DIABÉTICA


Y ESTADO HIPEROSMOLAR HIPERGLUCÉMICO

el aporte insuficiente de líquidos); la hipoperfusión renal se- TABLA 2


Criterios diagnósticos de la cetoacidosis diabética y el estado
cundaria conduce a una disminución del aclaramiento de hiperosmolar hiperglucémico
glucosa que a su vez empeora la hiperglucemia7.
La ausencia de cetonuria ha sido muy estudiada y no de- Cetoacidosis diabética
finitivamente aclarada. Probablemente, en la ausencia de ce- 3-beta-OH-butirato > 3 mMol/l o cetonuria significativa

toacidosis influya que el déficit de insulina es sólo relativo y Glucemia > 250 mg/dl o diabetes mellitus conocida

menos grave que en el caso de la CAD. Bicarbonato < 15 mMol/l y/o pH menor de 7,3

Estado hiperosmolar hiperglucémico


Glucemia > 600 mg/dl
Manifestaciones clínicas Bicarbonato plasmático > 15 mMol/l y pH > 7,3
Osmolalidad plasmática > 320 mOsm/kg
La CAD y el EHH presentan algunas manifestaciones clíni- Adaptada de Savage MW, et al2 y Kitabchi AE, et al3.
cas comunes y también datos diferenciales. La evolución de
los síntomas suele ser más lenta en el EHH que en la CAD,
pues esta última con frecuencia evoluciona en menos de 24 TABLA 3
horas, mientras que el EHH lo suele hacer a lo largo de días3, Fórmulas útiles en el manejo de la cetoacidosis diabética y el estado
hiperosmolar hiperglucémico
pudiendo haber en ambos casos previamente sintomatología
cardinal de diabetes. Na corregido = Na medido + 1,6 × [(glucosa en mg/dl) -100]/100
Los pacientes con CAD o EHH refieren poliuria y poli- Osmolalidad calculada = 2[Na + K] + (glucosa en mg/dl/18) + (urea en mg/dl /6)
dipsia progresivas, pérdida de peso (en el caso de comienzo Anion gap = [Na] – ([Cl] + [HCO3])
de diabetes mellitus tipo 1, fundamentalmente), náuseas, vó-
mitos y síntomas de deshidratación, más intensos en pacien-
tes con EHH. El sodio plasmático puede ser bajo, normal o incluso ele-
La CAD puede cursar con dolor abdominal, causado por vado en pacientes con intensa deshidratación en EHH. Es
la propia cetosis; pero hay que tener presente que una pato- imprescindible calcular el sodio corregido y comprobar la
logía abdominal puede ser la causa de la CAD3, por lo que si, evolución de la natremia utilizando este parámetro y no el
tras rehidratar al paciente y corregir la CAD, no mejora el dolor sodio medido. La tabla 3 muestra algunas fórmulas útiles a la
es preciso descartar un proceso abdominal como causa del dolor y hora de valorar los electrólitos en el paciente con CAD o
factor desencadenante de la CAD. Los mecanismos por los que EHH. El potasio plasmático puede estar al inicio normal
aparece dolor abdominal en la CAD no son bien conocidos, o elevado, incluso cuando exista depleción corporal de pota-
pero pueden estar implicados el retraso del vaciamiento gás- sio. La creatinina y la urea suelen estar elevadas en relación
trico, el íleo, esofagitis con ulceración, pancreatitis subaguda, con un fracaso renal agudo prerrenal y/o insuficiencia renal
expansión de la cápsula hepática o isquemia intestinal8. crónica en diabéticos de larga evolución. El anion gap está
En la exploración física destacan los signos de deshidra- elevado en la CAD porque los cuerpos cetónicos son anio-
tación, presentes tanto en la CAD como en el EHH, aunque nes. La amilasa y lipasa pueden estar moderadamente eleva-
mucho más marcados en la segunda. Puede aparecer hipo- das en la CAD, sin que ello indique pancreatitis. En cuanto
tensión (que en decúbito supino es signo de déficit grave de al hemograma, habrá elevación del hematocrito por hemo-
volumen o de sepsis), también puede haber fiebre, pero su concentración en el EHH, mientras que en la CAD puede
ausencia no descarta infección. La hiperventilación, con res- haber leucocitosis en ausencia de patología infecciosa, aun-
piración de Kussmaul es característica de la CAD y se debe que una cifra de leucocitos superior a 25.000 por mm3 es
al intento de compensar la acidosis metabólica. Además, es sugestiva de infección8.
típico el fetor cetósico producido por la excreción de acetona No cualquier situación de cetosis y acidosis en un diabé-
por el pulmón. El nivel de consciencia puede variar desde tico es una CAD, por lo que habrá que establecer un diag-
alerta a coma, en relación fundamentalmente con la osmola- nóstico diferencial con otras entidades. En el ayuno, la ce-
lidad plasmática. Asimismo, en la exploración física pueden tosis gravídica y la cetoacidosis alcohólica puede haber
hallarse los signos propios del proceso desencadenante. cetonemia, habitualmente ligera1. En los tres casos la gluce-
mia habitualmente será menor de 250 mg/dl, aunque el pa-
ciente sea diabético conocido. Además, la determinación de
Diagnóstico 3-beta-OH-butirato en sangre capilar será normal o sólo li-
geramente elevada, si bien puede estar elevada en la cetoaci-
El diagnóstico de sospecha de CAD y de EHH se realiza dosis alcohólica1, en la cual podemos conocer el antecedente
mediante la anamnesis y la exploración física, basándose en de ingesta de alcohol o medir alcoholemia. En la acidosis
los signos y síntomas descritos en el apartado anterior, y se láctica los niveles de cuerpos cetónicos son normales o lige-
confirma mediante pruebas complementarias. La tabla 2 ramente aumentados, mientras que las cifras de lactato están
muestra los criterios diagnósticos de CAD y EHH. La posi- incrementadas. Ante la sospecha de intoxicación por salicila-
bilidad de determinar 3-beta-OH-butirato de forma rápida y tos o metanol puede ser útil la determinación de los mismos,
sencilla, a pie de cama, mediante un glucómetro capilar uti- y en el caso de la intoxicación por etilenglicol la presencia de
lizando las tiras adecuadas, ha supuesto un avance en el diag- cristales de oxalato e hipurato en orina puede dar el diagnós-
nóstico y manejo de la CAD en los últimos años2,9,10. tico3.

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ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS

Tratamiento Objetivos del tratamiento. Monitorización

En la fisiopatología de la CAD, el factor fundamental es el Los objetivos del tratamiento son suprimir la producción de
déficit de insulina. Por otra parte, la diuresis osmótica cuerpos cetónicos, corrigiendo la acidosis metabólica, reducir
producida por la hiperglucemia y la cetosis hacen que la la hiperglucemia y restaurar el equilibrio hidroelectrolítico. La
deshidratación sea una constante en estos pacientes. Por tabla 5 muestra el ritmo recomendado para la corrección de
ello, el tratamiento de la CAD se basa en la administración de cada una de estas alteraciones. Para monitorizar la situación
fluidos intravenosos e insulina. El déficit de agua de un pa- de CAD durante su tratamiento se controlará periódicamente
ciente con CAD llega al 10% de su peso corporal, además la glucemia capilar (cada hora), el 3-beta-OH-butirato en san-
presenta un déficit de unos 7-10 mMol de sodio por kilo- gre capilar, si se dispone del medidor (cada hora), y el pH,
gramo de peso y es constante el déficit de potasio, unos bicarbonato y electrolitos, fundamentalmente potasio, en san-
3-5 mMol/kg2. En consecuencia, es imprescindible admi- gre venosa (cada hora en las primeras dos horas, cada dos ho-
nistrar desde el inicio fluidos que aporten agua, sodio y ras hasta la sexta hora, pudiendo disminuir posteriormente la
potasio. La insulina suprime la producción de cetonas, frecuencia en función de la evolución del paciente)2.
principal objetivo del tratamiento de la CAD, reduce la
hiperglucemia y corrige la alteración del equilibrio ácido-
base existente en la CAD. Reposición hídrica
En primer lugar, al atender a un paciente con CAD se
hará una valoración clínica inicial que incluya estado de la vía
Como hemos dicho, los pacientes con CAD están intensa-
aérea, respiración y circulación (frecuencia cardíaca y respi-
mente deshidratados, por lo que inicialmente la fluidoterapia
ratoria), presión arterial, saturación de oxígeno y nivel de
debe ser agresiva, salvo que la situación cardiológica lo des-
consciencia; simultáneamente se debe coger una vía periféri-
aconseje. En la primera hora debe administrarse, a un paciente de
ca e iniciar la administración de fluidos. A continuación se
peso medio, 1 litro de solución de cloruro sódico al 0,9%. Si pre-
solicitarán las exploraciones complementarias descritas en la
senta hipotensión (tensión arterial sistólica menor de 90
tabla 4 y se procederá a monitorizar al paciente (electrocar-
mmHg) es preciso administrar los primeros 500 ml en 10-15
diograma [ECG] y pulsioximetría). La historia clínica se
minutos y otros 1.000 ml en la siguiente hora, teniendo en
complementará interrogando sobre el tratamiento antidiabé-
cuenta que la causa desencadenante de la CAD puede estar
tico que sigue habitualmente el paciente e investigando las
provocando hipotensión por un mecanismo distinto de la
posibles causas precipitantes de la CAD.
deshidratación (sepsis o shock cardiogénico, por ejemplo)2.
Los profesionales especialmente dedicados a la aten-
El ritmo de infusión en las horas siguientes se irá ajustando
ción de la diabetes mellitus deben participar en el trata-
(en general disminuyendo) en función del estado de hidrata-
miento de la CAD desde el primer momento en que sea
ción, la diuresis y la presión arterial. Guías recientes reco-
posible, idealmente en las primeras 24 horas2, hasta el alta
miendan seguir rehidratando con solución de cloruro sódico
del paciente.
al 0,9%2. Según estas guías, tras los primeros 1.000 ml admi-
nistrados en la primera hora se perfundirán otros 2 litros en
las siguientes 4 horas, a continuación 2 litros en 8 horas y
luego 1 litro en 6 horas. Otras guías de amplia difusión, aun-
TABLA 4
que algo más antiguas, recomiendan utilizar solución de clo-
Exploraciones complementarias iniciales en la cetoacidosis diabética
ruro sódico al 0,45%, salvo que el sodio corregido sea bajo8.
Glucemia capilar y plasmática
3-beta-OH-butirato capilar
Urea, creatinina, electrolitos Insulina
Gasometría venosa
Hemograma Todos los pacientes con CAD precisan recibir insulina desde
Anormales y sedimento urinario el inicio (con la excepción, que más adelante se expondrá, de
Radiografía de tórax los raros casos que presentan hipopotasemia inicialmente).
Electrocardiograma
La vía de elección es la endovenosa2. Aunque se ha descrito
Hemocultivos (si las características clínicas así lo aconsejan)
que en la CAD leve la vía subcutánea o intramuscular puede
Adaptada de Savage MW, et al.2
ser tan efectiva como la endovenosa3, no nos parece que
aporte ventajas en un paciente atendido en medio hospitala-
rio al que se están administrando fluidos por vía intravenosa;
TABLA 5
Objetivos metabólicos en el tratamiento de la cetoacidosis diabética
sin embargo podría considerarse en el medio extrahospitala-
rio cuando no haya posibilidad de utilizar la vía endovenosa
Reducción del 3-beta-hidroxi-butirato 0,5 mMol/l por hora ni de remitir urgentemente a un hospital.
Aumento del bicarbonato 3 mMol/l por hora Debe administrarse inicialmente la insulina en perfusión
Reducción de la glucemia capilar 50 mg/dl por hora endovenosa continua a un ritmo de 0,1 UI/kg/hora2,3. Si no se
Mantenimiento del potasio entre 4 y 5 mMol/l conoce el peso del paciente se estimará. Aunque tradicional-
Adaptada de Savage MW, et al.2 mente se recomendaba administrar un bolo inicial de 0,15

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COMPLICACIONES HIPERGLUCÉMICAS AGUDAS DE LA DIABETES MELLITUS: CETOACIDOSIS DIABÉTICA


Y ESTADO HIPEROSMOLAR HIPERGLUCÉMICO

UI/kg11, no se ha encontrado que tenga ventaja sobre el no salvo que la potasemia sea superior a 5,5 mEq/l o haya oligoanuria.
administrarlo12, y guías recientes no recomiendan su uso si se Incluso si inicialmente hay hipopotasemia debe suspenderse
inicia rápidamente la perfusión continua de insulina al ritmo la perfusión de insulina hasta que se corrija esta circunstan-
antes indicado2. En el supuesto de un paciente de 60 kg, de- cia3. Habitualmente se administrarán 20-40 mEq de potasio
pendiendo de los medios con los que se cuente, administrar dentro de cada litro de solución salina, ajustando la cantidad
una perfusión de insulina de 6 UI/hora puede hacerse aña- en función de los cambios de potasio sérico y de la velocidad
diendo 50 UI de insulina regular a 500 ml de solución salina de perfusión para lograr una potasemia de 4-5 mEq/l2. Debe
al 0,9% administrándola a 60 ml/hora, o añadiendo 100 UI monitorizarse el potasio plasmático al menos cada dos horas
de insulina en 100 ml de solución salina al 0,9% adminis- para evitar tanto la hipo como la hiperpotasemia.
trándola a 6 ml/hora o, incluso, si no se dispone de bombas
de perfusión endovenosa, diluyendo la insulina regular den-
tro de la solución de rehidratación endovenosa, en la canti- Bicarbonato y fosfato
dad precisa para que, teniendo en cuenta el ritmo de perfu-
sión de esa solución, se administren 6 UI por hora. Por La acidosis metabólica de la CAD se debe fundamentalmente
ejemplo, si se está administrando 1.000 ml en una hora, se a la producción de cuerpos cetónicos, la cual se ve rápidamen-
añadirán 3 UI de insulina regular a cada 500 ml. te frenada por la administración de insulina, mejorando la
Si la resolución de las alteraciones metabólicas propias situación de acidosis metabólica en un tiempo relativamente
de la CAD no ocurre al ritmo adecuado (tabla 5) debe au- corto, a diferencia de otras situaciones que pueden producir
mentarse el ritmo de perfusión de insulina endovenosa, acidosis metabólica grave, como la sepsis o la insuficiencia
aumentando 1 UI/hora la cantidad administrada2. El paráme- renal. Tradicionalmente, aunque no había evidencia que lo
tro más importante para la monitorización del tratamiento es el respaldara13, se recomendaba la administración de bicarbona-
3-beta-OH-butirato en sangre capilar2, o en su defecto el bicarbo- to sódico cuando el pH es menor de 6,9 o 73,8,11; sin embargo,
nato venoso, pudiendo emplearse la glucemia capilar si no se guías clínicas más recientes no recomiendan su utilización, pues la
dispone de los otros dos, pero hay que tener en cuenta que el administración de bicarbonato, que conlleva un aumento de
objetivo fundamental del tratamiento es detener la síntesis producción de CO2 puede, paradójicamente, empeorar la aci-
de cuerpos cetónicos y corregir la acidosis metabólica, no la dosis del sistema nervioso central, retrasar el descenso del
hiperglucemia, y que puede haber situaciones de CAD con lactato y de cuerpos cetónicos, y se ha relacionado con mayor
normoglucemia en los que la glucemia no nos permite mo- riesgo de edema cerebral en niños y adultos jóvenes2.
nitorizar el tratamiento. Hay que tener en cuenta que si el Aunque los pacientes con CAD suelen tener déficit cor-
paciente está muy deshidratado puede responder menos de poral de fosfato, no se han encontrado beneficios al suple-
lo esperado a la perfusión de insulina, y que en pacientes con mentar rutinariamente con fosfato. Sí debería medirse, y en
alta resistencia a la insulina, en los que se estén administran- caso de déficit reponerse, cuando exista debilidad muscular o
do cantidades de insulina muy superiores a 0,1 UI/kg/hora, alteración de la musculatura respiratoria, ya que estos sínto-
puede ser preciso aumentar más de 1 UI/hora la perfusión de mas pueden ser debidos a la hipofosfatemia2.
insulina si la CAD no se va corrigiendo al ritmo deseado (el
efecto esperado al aumentar 1 UI/hora la perfusión de insu-
lina en un paciente que está recibiendo 5 UI/hora será el Manejo del estado hiperosmolar
doble que el de aumentar 1 UI/hora en un paciente que está hiperglucémico
recibiendo 10 UI/hora).
Una vez que la glucemia baje de 250 mg/dl se empezará a El manejo del EHH es similar al de la CAD. Hay que tener
administrar una perfusión de dextrosa al 10% a 125 ml/hora jun- en cuenta que en el EHH el grado de deshidratación es ma-
to con la solución salina de rehidratación2, o bien se sustituirá yor y la acidosis metabólica se debe más al fracaso renal agu-
esta por solución glucosalina (dextrosa al 5% y cloruro sódi- do y producción de lactato por hipoperfusión que a la pro-
co al 0,45-0,75%, teniendo en cuenta que puede ser necesa- ducción de cuerpos cetónicos que, o no existe o es mucho
rio a veces que la concentración de dextrosa sea del 10%)3. menor que en la CAD.
La perfusión de insulina se debe mantener hasta que la
CAD esté resuelta, el paciente tolere dieta oral y pueda reci-
bir insulina subcutánea. Transición a insulina subcutánea
El momento apropiado para iniciar el tratamiento con insu-
Potasio lina subcutánea es cuando el paciente esté listo para la inges-
ta oral y se haya resuelto la situación de CAD (tabla 6). Ideal-
La mayoría de los pacientes con CAD tienen una depleción mente, el paso a insulina subcutánea debería ser realizado
intensa de potasio corporal, aunque la analítica inicial indique por profesionales especializados en la atención de la diabetes
normocaliemia. La corrección de la acidosis metabólica con- mellitus2.
lleva un retorno de potasio desde el medio extracelular al in- Dada la corta vida media de la insulina intravenosa
tracelular, y además la insulina tiene por sí misma un efecto (5 minutos), ésta debe mantenerse hasta 30-60 minutos des-
de introducción de potasio en el interior de la célula. Por pués de la primera inyección de insulina subcutánea (que es
todo ello es imprescindible administrar potasio desde el inicio, el tiempo que tarda ésta última en hacer efecto), pues la dis-

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ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS

TABLA 6 También se pueden calcular los requerimientos de insulina


Criterios de resolución de la cetoacidosis diabética
subcutánea teniendo en cuenta la cantidad de insulina que ha
pH venoso > 7,30 precisado el paciente en las últimas 6 horas de tratamiento,
3-beta-OH-butirato en sangre < 0,3 mMol/l siempre y cuando haya permanecido durante este tiempo con
Bicarbonato sérico >18 mEq/l glucemias adecuadas y estables. Una vez calculada la dosis to-
Anion gap < 12 mEq/l tal de insulina, se dividirá para administrarse una parte en for-
Glucemia < 200 mg/dl ma de insulina basal, y la otra en forma de insulina prandial
En el caso de la situación hiperosmolar, los criterios de resolución del cuadro son mantener o rápida. Si se opta por la opción basal-bolus se dividirá en
una osmolalidad sanguínea dentro de los rangos de la normalidad, y la recuperación a nivel
neurológico. 50-50% o 60-40%, correspondiendo el primero de estos por-
centajes a la cantidad de insulina basal o insulina lenta (glargi-
na o detemir) y el segundo a la insulina prandial o rápida (as-
continuación brusca de la insulina intravenosa sin el solapa- part, lispro o glulisina). Esta última se dividirá en tres dosis,
miento con la insulina subcutánea puede dar lugar a una que se administrarán previamente con el desayuno, la comida
caída de sus niveles en sangre, con la consecuente hiperglu- y la cena18,19. Las dosis se irán ajustando posteriormente. Por
cemia y/o desarrollo de nueva cetoacidosis2,3. En los pacien- ejemplo, para un paciente de 60 kg: opción 1 (utilizando la del
tes en los que la ingesta oral no sea posible, es preferible peso multiplicado por 0,5-0,75); multiplicamos por 0,7 = 42
continuar con la perfusión de insulina intravenosa y la admi- unidades, en total 22 unidades de glargina o detemir a las
nistración de sueros intravenosos. 23 horas y 6-7 unidades de aspart, lispro o glulisina previas a
La elección del tipo de insulina dependerá de si el paciente desayuno, comida y cena. Opción 2 (utilizando las unidades de
era previamente diabético o no. En general, en los pacientes insulina intravenosa que ha precisado en las últimas horas). Si
diabéticos antes de la descompensación se reiniciará su régi- en las últimas 6 horas el paciente ha precisado 2 unidades a la
men previo de insulina. En los pacientes diabéticos tipo 1 de hora: 2 unidades por 24 horas = 48 unidades, en total 24 uni-
reciente diagnóstico, lo más común es utilizar el esquema dades de glargina o detemir a las 23 horas y 8 unidades de
basal-bolus3,14 que consiste en la administración de una do- aspart, lispro o glulisina previas al desayuno, comida y cena. Si
sis de insulina basal o de acción lenta (glargina o detemir) y se opta por el régimen de dos dosis de insulina premezclada
bolus de insulina prandial o de acción ultrarrápida previos a administraremos las dos terceras partes del total calculado an-
las comidas (aspart, lispro o glulisina) para evitar así las hi- tes del desayuno y un tercio antes de la cena20,21.
perglucemias postprandiales15-17. Se pueden utilizar otros
esquemas, como por ejemplo dos o tres dosis de insulinas
premezcladas (NPL + análogos de acción ultrarrápida), dos Complicaciones
dosis de insulina NPH/NPL y 3 dosis de insulina regu-
lar, etc. Estos esquemas quizá sean más recomendables en Las complicaciones de la CAD y el EHH se recogen en la
casos de pacientes diabéticos tipo 2. En los pacientes porta- tabla 7.
dores previamente de infusión continua subcutánea de insu-
lina (ICSI) se reiniciará la bomba con insulina basal en las
dosis previas, o ajustadas si es necesario y se continuará con Prevención de la cetoacidosis diabética y
la insulina intravenosa hasta el momento de la comida acom- el estado hiperosmolar hiperglucémico
pañada del bolus correspondiente. No es recomendable reini-
ciar la bomba de insulina durante la noche2, ya que al quedar Muchos casos de CAD o EHH pueden prevenirse mediante
el paciente dormido en caso de que existiese algún fallo en la la adecuada educación de los pacientes, dándoles la informa-
bomba podría pasar inadvertido y desencadenar una nueva ción necesaria sobre qué hacer en situaciones de enfermedad.
hiperglucemia y CAD. Además si fuera preciso hacer alguna Se les debe por tanto explicar lo siguiente3,11.
modificación de las dosis sería más dificultoso. 1. Ante una situación de enfermedad contactar de mane-
Respecto a la dosis de insulina subcutánea a administrar, en ra precoz con su médico.
los pacientes previamente diabéticos puede ser necesario mo- 2. Hacer hincapié en la importancia que tiene no inte-
dificar la dosis respecto a la previa. Esta modificación se hará rrumpir el tratamiento insulínico, máxime si se está enfermo,
en función de diversos factores: en primer lugar, en función de a no ser que un médico así se lo indique.
las unidades de insulina que haya necesitado durante las últi- 3. Revisar cuáles son los objetivos de glucosa en sangre y
mas 4-6 horas con la perfusión de insulina (si durante las úl- el uso de suplementos de insulina de acción ultrarrápida en
timas horas ha necesitado mucha insulina, quizá sea necesario caso necesario.
aumentar las dosis de insulina subcutánea en relación con el 4. En caso de que el paciente tenga náuseas se recomien-
tratamiento previo); en segundo lugar, en función del nivel de da la ingestión de pequeñas dosis de manera frecuente de
control previo de la diabetes del paciente (lo cual se compro- líquidos isotónicos que contengan hidratos de carbono. En
bará con la determinación de HbA1c y con los controles de caso de vómitos e intolerancia digestiva deberá contactar con
glucemia capilar que nos aporte el paciente de las semanas o su médico.
días previos), o en función de las hipoglucemias. En los pacien- 5. Realizar mediciones de cuerpos cetónicos en sangre u
tes de reciente diagnóstico la dosis de insulina variará entre 0,5-0,75 orina en caso de hiperglucemia superior a 250 mg/dl en el
unidades de insulina por kilo de peso3,14. Esta variabilidad depende paciente diabético tipo 1. En caso positivo contactar con su
de la resistencia a la insulina que se prevea en el paciente. médico10.

1066 Medicine. 2012;11(18):1061-7

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COMPLICACIONES HIPERGLUCÉMICAS AGUDAS DE LA DIABETES MELLITUS: CETOACIDOSIS DIABÉTICA


Y ESTADO HIPEROSMOLAR HIPERGLUCÉMICO

TABLA 7
Complicaciones del tratamiento de la diabetes

Hipoglucemia
Producida por una administración excesiva de insulina. Para evitarla hay que monitorizar frecuentemente la glucemia, administrar, junto con la solución salina una solución de dextrosa al
5 o al 10% una vez que la glucemia baje de 250 mg/dl, y ajustar el ritmo de administración, si es necesario, para lograr un descenso de glucemia de 50-75 mg/dl por hora

Hiperglucemia
Originada por la detención inadvertida de la administración de insulina, dosis inadecuada o hidratación insuficiente

Hipopotasemia
Se debe a la corrección de la acidosis metabólica y el tratamiento con insulina, en una situación de depleción de potasio corporal total. Para evitarla hay que administrar suficiente
potasio junto con la fluidoterapia y monitorizar niveles cada 2 horas

Edema cerebral
Es una complicación muy grave de la cetoacidosis diabética en niños. En adultos es más frecuente en el estado hiperosmolar hiperglucémico, y se debe a un descenso demasiado rápido
de la osmolalidad plasmática que ocasiona un paso de agua hacia el sistema nervioso central. Los síntomas son disminución del nivel de conciencia, cefalea, crisis comicial, cambios
pupilares, bradicardia y parada respiratoria, llegando finalmente la muerte si no se trata por herniación cerebral. Se previene, sobre todo, en pacientes de alto riesgo, evitando corregir la
osmolalidad más de 3 mOsm/kg cada hora y administrando fluidos con glucosa una vez que la glucemia baja de 250-300 mg/dl

Acidosis hiperclorémica
Producida por la administración de grandes cantidades de cloruro sódico y potásico. Suele ser transitoria y no tener repercusión clínica. Puede hacer que el bicarbonato plasmático sea
bajo una vez resuelta la acidosis, por lo que es preferible controlar los niveles de 3-beta-OH-butirato que los de bicarbonato

Hipoxia y edema agudo de pulmón


Por el descenso de la presión osmótica con el tratamiento de la CAD y EHH, que puede favorecer el paso de agua al intersticio o al alveolo. Debe monitorizarse la saturación de oxígeno
en pacientes de riesgo y administrar oxigenoterapia cuando esté indicado, así como ser juicioso con la cantidad de fluidos administrada

Trombosis venosa
Se ve favorecida por la situación de hiperviscosidad sanguínea. Pautar profilaxis de enfermedad tromboembólica, especialmente en el estado de hiperosmolaridad hiperglucémico

6. Educación de los miembros de la familia sobre cómo ✔


6. Weyer C, Bogardus C, Mott DM, Pratley RE. The natural history of insulin
secretory dysfunction and insulin resistance in the pathogenesis of type 2
actuar en caso de enfermedad, incluyendo registros sobre la diabetes mellitus. The Journal of clinical investigation. 1999;104(6):787-94.
temperatura, la glucosa en sangre, cuerpos cetónicos en ori- ✔
7. Chiasson JL, Aris-Jilwan N, Bélanger R, Bertrand S, Beauregard H, Ekoé
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na o sangre, así como de la administración de insulina y de la glycemic hyperosmolar state. CMAJ. 2003;168(7):859-66.
ingesta oral del paciente. De manera similar habrá que hacer ✔
8 Kearney T, Dang C. Diabetic and endocrine emergencies. Postgraduate
medical journal. 2007;83(976):79-86.
una adecuada supervisión para prevenir el EHH, haciendo
sobre todo hincapié en el adecuado estado de hidratación en ✔
9. Rodríguez-Merchán B, Casteràs A, Domingo E, Nóvoa FJ, López Y,
Cabezas-Agricola JM, et al. Capillary beta-hydroxybutyrate determina-
personas de edad avanzada. tion for monitoring diabetic ketoacidosis. Endocrinol Nutr. 2011;58(7):
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10. Sheikh-Ali M, Karon BS, Basu A, Kudva YC, Muller LA, Xu J, et al. Can
serum beta-hydroxybutyrate be used to diagnose diabetic ketoacidosis?
Diabetes Care. 2008;31(4):643-7.
Conflicto de intereses ✔
11. Kitabchi A, Umpierrez GE, Murphy M, Barrett E, Kreisberg R,
Malone J, et al. Hyperglycemic crises in diabetes. Diabetes Care. 2004;
27(90001):94S-102.
Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

12. Goyal N, Miller JB, Sankey SS, Mossallam U. Utility of initial bolus in-
sulin in the treatment of diabetic ketoacidosis. Journal Emerg Medicine.
2010;38(4):422-7.

Bibliografía ✔
13. Viallon A, Zeni F, Lafond P, Venet C, Tardy B, Page Y, et al. Does bicar-
bonate therapy improve the management of severe diabetic ketoacidosis?
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• Importante •• Muy importante ✔


14. Kitabchi AE, Umpierrez GE, Fisher JN, Murphy MB, Stentz FB. Thirty
years of personal experience in hyperglycemic crises: diabetic ketoacido-
sis and hyperglycemic hyperosmolar state. The Journal of clinical endo-
✔ Metaanálisis ✔ Artículo de revisión crinology and metabolism. 2008;93(5):1541-52.

✔ Ensayo clínico controlado ✔ Guía de práctica clínica ✔


15. ADA. Insulin administration. Diabetes Care. 2004;27Suppl1:S106-9.

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