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1ra. Semana: Política, Política Criminal y Derecho Penal.

1.1 Definición de política criminal.

El punto de partida de la definición de la política criminal es la persecución penal ya


que es precisamente una visión integral del sistema penal, pues si bien es cierto que el
poder coercitivo o punitivo pertenece al Estado, éste se fragmenta en una serie de
instituciones u órganos que realizan funciones estratégicas para materializar una buena
persecución penal. De esa cuenta, la persecución penal no es más que un eslabón dentro
del ciclo definido por el estado para el uso del poder penal que le ha sido delegado y, en
consecuencia, se encuentra influido y a su vez influye en el resto de eslabones que
complementan dicho ciclo que, en suma, constituyen la política criminal del Estado. La
política criminal es el instrumento de acción que el Estado adecua en el campo de la
prevención del delito y la justicia penal. Este modelo de fragmentación en las funciones
del ejercicio del poder punitivo del Estado se fundamenta principalmente en la
necesidad de no subordinar ning 2 mantenga un equilibrio de fuerzas internas y al
mismo tiempo que el sistema penal cumpla su finalidad externa prevista, es decir,
disminuir los niveles de conflictividad y violencia social.1 Por ello, partimos de la idea
que la política criminal se integra de varios ejes fundamentales, siendo éstos:2 1) La
política penal. Es el conjunto de principios y decisiones que adopta el Estado, dirigidos
a determinar qué conflictos de la realidad han de ser elevados a categoría de delitos o
faltas penales (política criminal en sentido estricto) y a la vez qué tipo de respuestas
penales ha de darse a dichos conflictos. (política penal, en sentido estricto). 2) La
política de persecución penal. Es el conjunto de principios, estrategias y decisiones que
adopta el Estado con el fin de definir los criterios generales que deben orientar al
aparato estatal para perseguir racionalmente los delitos cometidos en un determinado
contexto social. 3) La política de investigación criminal. Es el conjunto de principios,
métodos, estrategias y decisiones que adopta el Estado para organizar y desarrollar
eficientemente la actividad de investigación criminal para la consecuente efectividad en
la persecución penal. 4) Política judicial. Es el conjunto de principios, estrategias y
decisiones que adopta el estado para organizar y desarrollar los componentes básicos de
justicia criminal establecidos por el Estado en el marco legal, mediante el conocimiento
y juzgamiento penal de los casos sometidos a la jurisdicción penal. 5) Política
penitenciaria. Es el conjunto de principios, estrategias y decisiones que adopta el Estado
para organizar y desarrollar las actividades propias que conlleva la ejecución de la
sentencia penal con el fin de garantizar el objetivo político que el Estado ha formulado
para la sanción penal. 1 Ramírez, Luis. Manual de derecho procesal penal. T I. Pág. 6. 2
Plan de política de persecución penal del Ministerio Público. Guatemala 2005. 3 Cómo
puede verse, la política de persecución penal es uno de los grandes ejes que conforman
el marco de la política criminal del Estado y, en consecuencia, debe guardar relación y
coherencia con los restantes ejes que en suma conforman la política criminal del Estado.
Uno de los obstáculos iniciales con los que nos encontramos al abordar el análisis de la
política criminal es el de la diversidad de opiniones sobre lo que es y lo que comprende
dicha disciplina. No pretendemos en este documento hacer un análisis académico del
tema, ni mucho menos crear doctrinas nuevas al respecto; el objetivo de abordar este
punto dentro de la presente propuesta, es más bien construir un marco teórico concreto
para poder analizar y definir la política criminal que ha utilizado el estado en la década
de 1994 – 2004. Desde 1803, cuando por primera vez Feuerbach definiera la política
criminal como “el conjunto de métodos represivos con los que el estado reacciona
contra el crimen”, hasta nuestros días, existen diversas interpretaciones sobre la
extensión de este término. Por un lado encontramos quienes definen la política criminal
en un sentido amplio. La consideran como “el conjunto de métodos con los que el
cuerpo social organiza las respuestas al fenómeno criminal”3 . Para este enfoque,
constituyen la política criminal, las decisiones adoptadas por el Estado para responder al
crimen, como las respuestas de la sociedad en general, tales como las que se brindan
desde la familia, el vecindario, la comunidad, los medios de comunicación y otros. Por
el otro lado encontramos quienes definen la política criminal como “las decisiones y
métodos con los que el estado se organiza para ejercitar la justicia criminal.”4 3 Delmas
Marty, Marc Ancel y Paz y Paz, Claudia. Manual de derecho procesal penal. T. I. Pág.
38. 4 Zuñiga Rodríguez, Laura. Política criminal. Pág. 22. 4 Bajo este último enfoque se
delimita el contenido de la política criminal únicamente a las decisiones o estrategias
adoptadas por el Estado y no por la sociedad. Por ejemplo, desde una definición amplia,
podría entenderse que los linchamientos o la venganza privada, forman parte de la
política criminal: se trata de “respuestas del cuerpo social al fenómeno criminal” o de
respuestas al fenómeno criminal en el segundo de los casos. Por el contrario, una
definición restrictiva exigirá que los linchamientos sean admitidos por el Estado como
respuestas al fenómeno criminal. Si no lo son, son delitos como los hurtos o la violación
sexual.5 Para el abordaje de la propuesta de política criminal de Guatemala, definimos
nuestro marco conceptual de la política criminal bajo el sentido restringido, dado que en
este enfoque, como apunta Binder,6 se permite distinguir con claridad qué respuestas al
fenómeno criminal se integran dentro de la política criminal y cuáles, a pesar de ser
“respuestas”, por no provenir del estado y por ser violentas o por restringir derechos
fundamentales, constituyen parte del propio fenómeno criminal, y son simple y
llanamente violencia. De esta manera desvirtuamos que las respuestas violentas que
ejerce la sociedad, fuera del ámbito de la decisión del Estado, sean parte de la política
criminal. Acá nos referimos a cualquier tipo de respuesta que de manera violenta pueda
ejercer la sociedad, como los casos de venganza privada: linchamientos, protestas
violentas o coacciones, entre otras, las cuales no pueden ser consideradas como
respuestas integrantes de la política criminal sino como un fenómeno criminal más al
que el Estado debe brindar atención y respuesta.7 5 Paz y Paz, Claudia. Ob. Cit; Pág.
39. 6 Binder, Alberto. 5 Por otra parte, la definición en sentido restringido que
adoptamos, nos permite diferenciar entre la política criminal y los métodos de
organización que la sociedad utiliza para responder al fenómeno criminal derivado de la
deficiencia de los métodos organizados por el estado dentro de su política criminal. Así,
por ejemplo, el hecho que en una comunidad determinada los vecinos se organicen para
salir a patrullar su vecindario y capturar a los “delincuentes”, no pueden considerarse
como métodos integrantes de la política criminal del Estado, sino como una
manifestación de que la política criminal del estado ha sido deficiente para atender sus
necesidades de seguridad frente al fenómeno criminal. En conclusión podemos indicar
que el marco conceptual sobre el que el trabajaré estará desarrollando una actividad
constante de formulación y configuración de la política criminal ya que se considera
que: “política criminal no es más que el conjunto de decisiones, estrategias y métodos
que adoptan los órganos correspondientes del Estado, para orientar el uso del poder
coercitivo al alcance de determinados objetivos”. Con ello, claramente estamos
reconociendo que la política criminal no es una competencia exclusiva de determinada
institución, sino que cada uno de los órganos del Estado colabora en la construcción de
la política criminal del Estado mediante la definición de estrategias y decisiones que
permitirán brindar cierta clase de respuestas al fenómeno criminal; pero en suma, la
efectividad de la política criminal del Estado es una responsabilidad de la totalidad de
sus órganos que intervienen en el tratamiento del fenómeno criminal.
1.2 Proceso de definición de la política criminal.

Entre los elementos básicos de política criminal encontramos el conflicto, Estado, poder
y violencia. El poder penal el cual Alberto Binder define como “la 6 fuerza de que
dispone el Estado para imponer sus decisiones al ciudadano en materias que afectan
derechos fundamentales”. El poder penal se proyecta a través del sistema penal,
entendiendo a éste como el conjunto de instituciones que ejecutan la respuesta del
estado hacia el fenómeno criminal. Estas instituciones se organizan en tres subsistemas:
subsistema penal, encargado de determinar los delitos y las penas; subsistema procesal
penal, el que indica el procedimiento para establecer si se cometió un delito e imponer
una respuesta; subsistema penitenciario, responsable de la ejecución directa de la
respuesta estatal. Cada uno de ellos genera doctrina, leyes y procedimientos respecto a
su ámbito particular de acción.8 Para que el sistema penal funcione los subsistemas que
lo conforman deben guardar coherencia entre si, en otras palabras, el derecho que los
regula, así como la estructura y funcionamiento deben estar bajo una determinada
orientación respecto al fenómeno criminal. Dicha orientación constituye lo que se
conoce como política criminal. El conflicto es un componente natural de toda sociedad,
organizada bajo un orden jurídico de un Estado, al que le es delegado el poder de
regular la conflictividad y violencia social. Dicho poder implica la posibilidad de
imponer a través de la fuerza sus decisiones frente al conflicto. Estas decisiones serán
orientadas a través de la política criminal que se formule, la cual ordena estos elementos
de la realidad a partir de definir el fenómeno criminal y las respuestas al fenómeno
criminal. A su vez estos dos aspectos los trabaja en dos niveles: Formulación y
configuración. La formulación se refiere a la definición racional y política de lo que se
entenderá como fenómeno criminal y las respuestas al mismo, teniendo su 8 Prored,
Enfoque político criminal del conflicto. Pág. 2. 7 concreción más clara en la
promulgación de leyes. La configuración consiste en la ejecución o puesta en práctica
de lo formulado, o sea el plano de lo real. En resumen se puede decir que la política
criminal regula el poder penal del estado en su intervención frente al conflicto y
violencia social, a partir de formular y configurar el fenómeno criminal y su respuesta
estatal, con el fin de proteger derechos considerados fundamentales y mantener el orden
establecido. Para poder obtener una clara y amplia definición de lo que hoy en día es
una política criminal, se debe tomar en cuenta el surgimiento de un derecho criminal,
como una rama del derecho penal que con sus principios y doctrinas trata de estudiar
todo lo relativo al fenómeno criminal. A la criminología le interesan los factores de la
criminalidad y de la criminalización. Al derecho penal, su imputación a un individuo a
efecto de hacerlo responsable conforme a un esquema o estructura de responsabilidad
cuyos presupuestos establece la ley penal positiva. A la política criminal, los criterios
del derecho penal. A la política criminal le corresponde la elaboración de los criterios a
tener en cuenta a la hora de adoptar decisiones en el ámbito del derecho penal.9 Son
varios los factores que ayudan al legislador a tomar una decisión sobre el merecimiento
de pena de una conducta, así como los factores normativos o de justicia y otros factores
empíricos o de utilidad, que suministran las diversas teorías criminológicas que pueden
servir para perfilar el criterio de utilidad a la hora de decidir que conductas de todas las
que aparecen como desviadas socialmente, merecen el calificativo de punibles. La unión
de todos estos aspectos constituyen lo que conocemos como política criminal. 9 Muñoz
Conde, Francisco. La política criminal. Pág. 30. 8 Como Alejandro Rodríguez dice que
“la política criminal es un conjunto de principios fundados en la investigación científica
del delito y de la eficacia de la pena, por medio de los cuales se lucha contra el crimen,
valiéndose, no solo de los medios penales, sino también de los de carácter asegurativo”.
Jiménez de Asúa, determina los caracteres comunes de la política criminal tomando
como base los postulados de la escuela clásica, la Escuela positiva y la escuela de Liszt,
los cuales son los siguientes: 1. La política criminal emplea un método jurídico para
conocer el derecho positivo y el método experimental para el trabajo criminológico. 2.
La política criminal exige que hay que considerar un nexo subjetivo en la
responsabilidad, independizándolo de la libertad moral. 3. Para la política criminal, el
delito es un concepto jurídico y también un fenómeno natural, que surge a la vida por
factores. 4. La política criminal exige que la pena tenga un fin, pero la pena solo se
aplica a delincuentes imputables y los peligrosos son corregidos por medidas de
seguridad. Por lo tanto Jiménez de Asúa dice que la política criminal que lo que importa
es esclarecer el arte de legislar, previa una critica científica de las leyes y la indagación
causal de la delincuencia. Para Von Listz, la política criminal era: “la idea fundamental
es la de los principios sobre la lucha contra el delito en la persona del delincuente
llevada a cabo, mediante la pena y medidas análogas.” En la actualidad existe una gran
confusión en delimitar los campos en la política criminal. Ya que para algunos autores
es una disciplina separada, mientras que para la mayoría de autores la política criminal
está unida al derecho penal y a la dogmática. Lo cierto es que si la política criminal se
basa en el estudio de las condiciones que pueden hacer eficaz la actuación del derecho 9
penal, propondrá reformas del derecho penal vigente, tanto partiendo del conocimiento
y adecuación de las normas, como de los posibles resultados de su aplicación.10

1.3 Fines de la política criminal.

La determinación de los fines u objetivos de la política criminal es un tema


condicionado por la manera en que se comprende el fenómeno de la criminalidad, el
sistema penal y la conexión que hay entre éste último y los demás medios de control
social. Históricamente se puede observar que, en un primer momento, el fin de la
política criminal era la mera represión del delito. Bajo esta concepción antigua o clásica,
se 10 consecuencias que el delito genera, como por ejemplo, los costes sociales y
económicos del delito y de la sanción, las consecuencias personales respecto a la
víctima, el autor, la sociedad y a los propios aparatos de intervención. Con esta
tendencia moderna claramente aparece entonces, que la finalidad que persigue la
política criminal, es decir las decisiones, estrategias y métodos que adopta el Estado en
materia de justicia criminal, es la realización de los derechos fundamentales de las
personas, incluyendo los de la víctima, los autores o presuntos autores del delito y, la
sociedad en general. De tal modo que la actuación de la política criminal no puede
descuidar o mucho menos violentar alguno de los derechos fundamentales de éstos pues
su fin último es la realización de tales derechos.14 Aunque algunos estudiosos han
incluido como materia o competencia de la política criminal las estrategias del Estado
para prevenir el delito, la tendencia más fuerte es a separar claramente el campo de la
prevención del delito (predelictum) del campo del tratamiento del delito y sus
consecuencias, dejando el primer ámbito a la política de seguridad y, el segundo a la
política criminal. Este enfoque permite diferenciar los roles y responsabilidades de cada
uno de los órganos del Estado en el abordaje del fenómeno criminal y, a la vez,
diferenciar las finalidades específicas de las estrategias y métodos que cada uno de los
órganos del Estado implementa para afrontar el mismo. Esto significa que los métodos
de prevención del delito (predelictuales) deben ser claramente distintos de los métodos
que reaccionan ante el delito ya cometido y no deben confundirse o entremezclarse. 14
Plan de política de persecución penal del ministerio público. Guatemala 2005. 11
Evidentemente que la celeridad y eficacia de la respuesta penal o alternativa, según la
ley lo permita, inciden en alguna forma en la prevención secundaria del delito,15 pero
esto no significa que esta finalidad se superponga a la finalidad de realización de los
derechos de la víctima, del autor del delito y de la sociedad en general, vulnerados o en
riesgo a raíz de la comisión de un delito; pues la prevención secundaria que genera la
aplicación pronta y certera de la ley penal no debe ni puede suplir la utilización de
estrategias y métodos de prevención primaria para la efectiva prevención del delito en
nuestro país. En conclusión, podemos indicar que el ámbito de definición de la política
criminal implementada por el estado de Guatemala se debe centrar en la adopción de
decisiones, estrategias y métodos para materializar acciones tendientes a prevenir la
delincuencia, así como ha responder ante la comisión de actos delictivos, con el fin de
lograr la efectiva realización de los derechos fundamentales que se han vulnerado o
estén en riesgo, tanto de la víctima, del autor del delito, como de la sociedad en general;
y no así, a la prevención de la delincuencia, situación que debe ser abordada
específicamente dentro de otros ámbitos de actuación del Estado.

1.4 Manifestaciones de la política criminal.

La política criminal se manifiesta a través del uso del poder penal del Estado, es decir
que el poder penal constituye el vehículo por el cual se manifiesta o concretiza la
política criminal dentro de una sociedad. Dos niveles de decisión para el uso del poder
penal.16 Para hacer uso del poder penal el Estado requiere de al menos dos grandes
niveles de decisión: la organización de las instituciones a través de las 15 Beccaria
Tratado de los delitos y de las penas. Pág. 104 16 Plan de política de persecución penal
del Ministerio Público. Guatemala 2005. 12 cuales ejercerá el poder penal y, la
definición de las estrategias, métodos o mecanismos de ejercicio del poder penal.

1.4.1. La organización.

Este nivel de decisiones que integran la política criminal del Estado está referido al
establecimiento de la institucionalidad del ejercicio del poder penal. Así, el estado
adopta decisiones político – criminales, cuando decide crear un órgano encargado de la
prevención policial del delito, otro que se encarga de la persecución penal pública, otro
que se encarga de ejecutar la investigación criminal, otro que se encarga de verificar la
legalidad del proceso de investigación criminal, otro que se encarga de verificar la
procedencia de sometimiento de una persona acusada a un juicio penal, otro que se
encarga de juzgar y decidir la aplicación de una sanción penal, otros que se encargan de
conocer los agravios alegados por los actores del juicio penal, otro órgano que se
encarga de verificar la ejecución de lo decidido en juicio, otro órgano que se encarga de
aplicar el régimen de sanción impuesta en un juicio penal, etc. La forma en que se
define la institucionalidad para el ejercicio del poder penal es muy importante para
medir el modelo de política criminal del Estado. Por ejemplo, el hecho de decidir que un
órgano distinto al judicial se encargue de dirigir la investigación criminal refleja un
modelo de política criminal democrático o respetuoso de los derechos de las personas,
como lo es también el hecho de decidir que un órgano judicial distinto al que controló la
legalidad del proceso de investigación criminal sea quien conozca del juicio. En el plano
específico, cada uno de los órganos que el Estado ha creado para el ejercicio del poder
penal, contribuyen a la manifestación de la política criminal al definir, bajo lineamientos
formulados en el marco legal propio, los niveles organizativos de su institución, lo cual
incidirá positiva o negativamente 13 en la efectividad que le ha sido asignado por el
Estado dentro de la lógica del sistema penal. En consecuencia, dentro del ciclo del
presente trabajo de la definición de la política de criminal, se analizarán constantemente
los niveles de incidencia así como la parte organizativa del estado utilizada para dar
resultados de eficacia y combatir el fenómeno criminal, a efecto de brindar propuestas
necesarias que mejoren la política criminal que el Estado ha utilizado en la última
década.

1.4.2. Las estrategias, métodos o mecanismos de ejercicio del poder penal.

Constituyen el segundo nivel de decisiones a través de las cuales se manifestará el poder


penal del Estado, y por ende la política criminal de éste, relativas a cómo se enfrenta,
desde el rol asignado a cada órgano del sistema penal, la respuesta al fenómeno
criminal. Este nivel de decisiones no ocupa una línea jerárquica con relación al nivel
anteriormente abordado, sino que ambos están o deben estar claramente vinculados. Así,
no puede sostenerse un nivel organizativo que sea insuficiente para desarrollar
estrategias o métodos de trabajo que se requieran implementar para mejorar el
desarrollo de la persecución penal pública, ni tampoco pueden diseñarse estrategias o
métodos de trabajo a partir de lo que el nivel organizativo ha definido. Ambos niveles
requieren de una vinculación específica y se influyen mutuamente. La definición de las
estrategias, métodos o mecanismos de ejercicio de la persecución penal, constituye un
reto importante que no puede agotarse en una propuesta inicial, más bien, es un reto que
debe asumirse mediante una 14 actividad constante de investigación, observación,
análisis y reflexión de la realidad
POLITICA CRIMINAL Y DERECHO PENAL

Las relaciones entre ellas deben verse de forma integradora donde cada una de ellas
tiene una función que cumplir y donde las tres están fuertemente interrelacionadas:

La Criminología investiga el fenómeno criminal bajo todos sus aspectos, elige sus
objetivos de estudio por si misma, autónomamente, aunque tomando en consideración
los asuntos actuales que tienen que ver con el tema de la delincuencia, su prevención y
los problemas del funcionamiento de los órganos que componen el sistema penal.

Los resultados quedarán a disposición de las instancias políticas- criminales; en este


sentido es misión de la Política Criminal el adoptar decisiones político-criminales con
base al material criminólogo, sin embargo la decisión política-criminal nunca es
resultado inmediato del resultado empírico de investigación, sino que necesita para la
realización político criminal una decisión generalmente de las instancias políticas entre
diversas alternativas.

Aunque la Política Criminal no puede ser ajena a las aportaciones de las ciencias
sociales, es ineludible para una Política Criminal que, a la hora de decidir sobre la
reforma de las leyes, debe tenerse en cuenta los efectos reales del sistema de Derecho
Penal sobre la realidad.

Son las normas de orden público por las cuales se califican las acciones antijurídicas de
los ciudadanos de acuerdo con los principios de protección a la sociedad, estableciendo
las reglas de punición, en cada caso. Cualquier definición, dentro de cada teoría o
sistema social, debe comprender las condiciones determinantes de su formación, así
como los fundamentos y objetivos que justifican su existencia, reglamentadora de la
vida social y de la actividad del hombre en sociedad.

La definición del concepto no puede quedar limitada al análisis descriptivo de la parcela


normativa del Derecho penal, sino que demanda la explicación exhaustiva de ese
derecho positivo insertado como una necesidad histórica en la realidad material,
objetiva, concreta, que lo instituyó y en la que actúa transformadoramente. El Derecho
penal es sancionador, pero al mismo tiempo precisa la ética social y la antijuricidad.
"Los idílicos tiempos en que lo único que aparentemente importaba era si el
dolo pertenecía al tipo o a la culpabilidad se han ido para siempre. Estamos en
una nueva época en que la tarea fundamental va a consistir en levantar el telón
del Derecho Penal para ver qué es lo que verdaderamente ha estado escondido detrás
de él"1. Con esta diciente frase dio por terminado el profesor ENRIQUE GIM·
BERNAT ÜRDEIG2 el primer Coloquio Regional Espaftol, que sobre política criminal
y derecho penal, se realizó en la Facultad de Derecho de la Universidad de
Madrid y en la Casa de la Cultura de Plasencia. Motivo por el cual la Association
Internationale de Droit Péna! emitió, por primera vez en la historia de dicha Asociación,
un número de la Revue lnternationak de Droit Pénal en espaftol. Dicho
coloquio tuvo como presidentes a los catedráticos y juristas HANS-HEINRICH
JESCHECK3 y JOSÉ ANTÓN ÜNECA.
Este encuentro jurídico ha sido considerado como el más completo celebrado
en los últimos años en el Continente europeo. En primer lugar por lo que
a sus participantes se refiere, y en segundo término por la materia escogida
para servir de norte en dicho diálogo. En lo atinente a sus participantes se dieron
cita los mejores juristas de Europa y Sur América. Del Continente americano
participaron, entre otros: ROBERTO BERGALLI, JUAN BUSTOS RAMÍREZ,
ENRIQUE BACIGALUPO, EDUARDO NOVOA MONREAL, ISIDRO DE MIGUEL
PÉ·
REZ y GLADYSROMERO; del viejo continente se contó con la valiosa participación
de DIETRICH ÜHLER, ERICK HARREMOES, GEORGES LAVASSEUR, ...
ALESSANDRO
BARATTA, FRANCO BRICOLA, GIACOMO BARLETTA CALDERARA, Gru.
LIANO V ASALLI; del país anfitrión (Espafta) acudieron: MARINO BARBERO
SANTOS, ENRIQUE GIMBERNAT ÜRDEIG, LUIS ARROYO ZAPATERO, JUAN
TERRADILLAS BASOCO, JUAN CÓRDOBA RODA, FRANCISCO MUÑOZ
CONDE, etc.
* El autor es abogado de la Universidad de Medellín y desde hace algún tiempo se
encuentra
en Europa realizando estudios de criminología. En la Universidad de Barcelona ha
estado siguiendo
las orientaciones de los profesores Juan Bustos Ramírez y Roberto Bergalli, y en la
actualidad
se encuentra en la ciudad de Bolonia, Italia, bajo la dirección de ALEssANDRo
BARA'ITA y MASSIMO
PA VARINI, de las más importantes figuras en las nuevas orientaciones de la
criminología.
1 Revista Internacional de Derecho, Polttica criminal y derecho pena4 Madrid, 1978,
núm. l,
pág. XI. Perteneciente a la Association Intemationale de Droit Pénal.
2 Catedrático de derecho penal de la Universidad de Salamanca (España).
3 Vicepresidente de la Association Internationale de Droit Pénal. Director del Instituto
Max
Planck de Derecho Penal extranjero e internacional.
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E t al t a se refiere ninguno más notable que el seleccionado para ser
n cuan o em ' . . . l de h --' A r
t t d n tan memorable encuentro: Política cnmma y rec o pemu. p er
· a a"ó o e aledera siempre y cuando se tenga conci. encºiad el a evol u"c1ó n e1aci n
que es v d
1 al debe pasar el derecho penal. Avance este, que debe respon er a un
por a cu¡¡ t te de nuestra sociedad y al que la política criminal trata en
desarro o cons an d 1 · , d ser
forma afanosa de ponerse a la par, proponien o so uc10nes que a mas e
actuales linden con un futuro inmediato. Fenómeno que n~ ~e presenta en el
derecho penal, pues este reposa sob~e unos parámetros tradic10nales y dogmáticos
allende las vivencias y necesidades actuale_s. . . . ,
Por la finalidad (dar información) y lo didáctico ~el Coloqmo, me limitare
a dar unas ideas lo más sustantivas e imparciales posible ~e los temas más relevantes
del simposio; dejando para publicacione~ poster10res temas que, por
· t y fm" alidad permitan un aporte de tipo personal.
su carac er , · b" t d t di
Por motivos de extensión y complejidad de la materia o J~ ? e es, u o,
me veo en la necesidad de elaborar un derrot_ero que nos servira de gu'.a y a
la vez nos ayudará a tener una visión de conJunto. En aras de lo antenor, el
orden debe ser el siguiente:
I. La política criminal frente al derecho penal
a) la formación y aplícación de la política crimina_l frente al _derecho penal
en sus acepciones propias: penal general, penal espee1al, procedinuento penal,
ciencias penitenciarias y ejecución penal. , . . .
b) "otros medios", aparte del derecho penal, a los cuales la política cr1nunal
debe recurrir.
c) derecho penal frente a la realidad social.
II., Política criminal actual
a) Injerencia de la politica crimina l en o t ras a· reas, a saber: movimiento
obrero, órganos locales y medio ambiente. . . .
b) objetivos de la politica criminal frente al mdividuo.
III. Política criminal y pena
a) fundamentos de la pena (¿retributiva o preventiva?) . .
b) clases de penas (¿Pena privativa de la libertad, pena pecumaria, pena
a prueba, trabajo colectivo, etc.?).
I. LA POLÍTICA CRIMINAL FRENTE AL DERECHO PENAL
A) Según opiniones del profesor GEORGES LEVASSEUR4 la noción más com~
de poli ti ca criminal hace relación a "todos los medios puestos en práctica
4 Catedrático de derecho penal de la Universidad de ~ere~o.' Economía Y Ciencias
Sociales
de París (Paris II) y director del Laboratorio de Sociologia Cnmmal.
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para prevenir la génesis y desarrollo de la criminalidad". Tampoco concibe


el derecho penal aislado de un derecho penal general, penal especial, procedimiento
penal e incluso las ciencias penitenciarias y todas las modalidades de ejecución
penal. La relación existente entre política criminal y derecho penal es
más estrecha y directa que lo que parece. Esta conexión solo es permitido verla
si hacemos un estudio de estas dos ciencias desde un doble punto de vista:
la política criminal con la formulación del derecho penal y sus relaciones con
la aplicación del derecho penal.
En lo referente a la formulación del derecho penal general, la política desarrolla
una influencia directa sobre él, pues el legislador, que es quien lo genera,
tiene para ello que nutrirse de la realidad social. Con base en esas necesidades
actuales sociales, le es permitido regular figuras jurídicas como: 1) el principio
de legalidad, o, en su defecto, la costumbre; 2) la responsabilidad, la que nos
permite responder preguntas como estas:5 ¿ Todos somos iguales ante la ley?
¿Se limitará la "capacidad penal" de ciertos individuos?; 3) la justificación, con
sus causales
6
, nos permitirá legislar sobre temas como el de la legitima defensa,
el estado de necesidad, etc.; 4) la responsabilidad y la represión nos ayudarán
a comprender temas de tan capital importancia como la coautoría, la complicidad,
coinductores, autor mediador, encubrimiento, etc.; 5) finalmente, el
sistema represivo de un país es deducible luego de un estudio a fondo de su·
penologia, y es donde hace su aparición la pena en sus diferentes acepciones:
intimidativa, retributiva y readaptadora y las medidas de seguridad. En la vida
moderna tenemos ejemplos de las tendencias de la pena, que por el hecho
de ser actuales no dejan de ser un poco extremas; en Francia 7, Alemania, Italia,
Espafta, etc .• se aboga por suprimir las penas privativas de libertad y en
paises de Oriente se trata de volver en materia penal a las reglas del Corán.
La política criminal influye en forma determinante en el derecho penal especial,
cuando el general ha cumplido su misión, y es cuando se tiene que entrar
a regular comportamientos que tienen trascendencia en el campo penal;
en este momento hay que tipificar o desacriminar. Es aquí donde se inicia el
juego de las fronteras de la represiónª. El legislador se plantea la alternativa
de penalizar la pornografía, accidentes de trabajo, actos de peligrosidad,
comportamientos
que representen atentados contra la ecología, contra la tranquilidad
social, etc.
Y en la justa medida se deben ir desacriminando actos como el aborto, el
consumo de drogas (penas privativas de libertad menores de seis meses).
5
ÜEORGES LEVASSEUR, Artículo en las "Mélanges Constants", núm. 6, pág. 182. 6
Algunos hablarán a este respecto de "elementos del injusto", otros alegarán la falta de
antijuridicidad
en las conductas del autor, y otros explicarán el mecanismo justificativo por una
desaparición
excepcional de elemento legal en los casos examinados.
7
Véase sobre este tema la ley francesa del 11 de julio de 1975 (art. 43-3), ampliamente
inspirada8
en múltiples trabajos llevados a cabo en el plano nacional, internacional y comparado.
Véase el coloquio organizado bajo este título por el profesor LEGRos en el Centro de
Crimivnoollúomgíean
dese) .l a Universidad Libre de Bruselas en 1972. (Los trabajos han sido publicados en
dos
-782-
etc. 9. E n cuan t o a la l. ilfluencia de la política criminal en el proceso penal, apenas
hay aspectos en los que no se nota: . , , . ál
a)e s1 aeb rcua , ndo se debe poner en marcha l.a, ac·c·io¡n publica,· ante cut
autoridad y con qué procedimiento; cuándo la aceran crv1 ' y en. que mamen ?
es susceptible de acumulación; ello es determinado en gran medida por la política
criminal; 1 ¡ · d t s
b) en ¡0 atinente a la práctica de las pruebas y todo e c??'P eJo e _ac o
· , di giran en torno a la prueba, a saber: investigac10n, detenciones,
~::;ar::ó~uJe testigos, clases de audiencia 10, interrogatoria d;l enc;;.:;tado, ,té<;nicas
modernas de investigaciónll; variarán de acuerdo con_ a~~ rea crrnnal
I alm te desde el momento en que se inicia la investigacion penal por
n .,;te ~el E:;,.d~ seguido de la facultad que tiene el juez para ?ec:~t~/: dep
. , t";a o medidas menos coercitivas como "control Judicial 'pa-
~:~:~~;:~::j~iciamiento en el que intervienen la org~izacif n Y el !:to;amiento
de lo~ órganos de defensa, las partes, las recusaciones, as ~o a . es
de liberación, etc.13. Para finalizar, la fijación de la pena, don?': el JU~z '."':za
todo el proceso, en el cual juega un pap':I i:relevante la política ~mm~ . -
En lo relativo a las ciencias penitenciarias y a las reglas ~e ':Jecu~on fe
al I Estado de acuerdo con una política criminal preconstitm~a: ,e ge as
n ·t s que se.han de seguir en estas áreas. Ej.: elegir entre la pnsion en compau~
n ao e1 re,g :·i men filade'lfi"co • de Auburn o de Pensilvania; tra1b aja' r d¡u raanl te·
el
tiempo de la condena O Ja dispensa; la ej ecu_ción de la ~ena en La cru;ce. ? d ~e
líb e en establecimientos cerrados, semiabiertos o abiertos. a re acion e a ~t" . "na! con
la aplicación del derecho penal es evidente cuando nos p':rcpaot
amicoas c qrnureu l a pol íti"ca criminal de un país democrático la e-jerce el poder
leg:is6
d · eclativo
Que el plan de profilaxia social con la reglamentac1 n . e vano~ a_sp
t · esponde al gobierno y a sus representantes en las crrcunscnpci?nes
t;:n~:~ales O en la cabecera de algunas administraciones, o sea, al poder ~Je'.'11-
ti E el extremo del abanico de este se encuentra el presidente de la Repub~ca
y v:~e :n paises como Francia goza del derecho de gracia, que lo puede eJer-
9 1 LEVASSEUR, Le pouvoir, les juges et les bourreaux, Hachette, 1972.. .
MBERT Y . t reguntas con o sm Juramen-
10 Públicamente o en secreto, por narrac16~ o por respuaessdi~fse,ªenptes para cada
uno) o por vía
· · t ainterrogatono (con norm
to, por mterrogatono o por con r. . d . t nso
O
de preguntas, anteriores declarac10nes consigna as in ex e resumidas, uso de
magnetófonos,
detectores de mentir~, etc¡. b d Abid¡· an en 1972 por las grandes asociaciones de
derecho pe-
11 Véase el coloqUio ce e r~
0
en . . . d d" R Jnternat. Dr. Pen., 1972,
nal sobre ''Los métodos cientif1cos.de ~nvest~g~n de la ¿e~3~· Sus;~· pág. 225;
LEVASSEUR, pág.
n3ú1m9 s. l3a- 4c,o emspuemt?cRamc1?eónnt ede l s~m c toe~s1ursu dcea Rc1·o
~~E;HOFUYE' páR,g. ~7, 9. T~bién, G. VASALLI, pág. 353; LE·
J!Nzpág. 431: BARLEITA CALDERARA y VAN BEMMEN, pag .. 5~:~éo Al r 1974
4 vols. Sobre la
12 SALAH-BEY, La détention préaJ:ble Sen g;:: ~~'!ff.ª:~· Austria, D~~ISCH,
'ibídem, 1975; en
situación en Alemania, cfr. GRABING: ~;75 c.pág 995. e~ Suiza F. CERO, ibídem,
1975, pág. 6.
Luxemburgo, Mme. SACOTI'E, op. cit., ' · '1 Tr.b nai de lo Criminal Francés, integra-
13 Desde el Code de Procedure P1nal (l;59J analte e ~e~e jurados) las decisiones
desfavoradbole
ps oarl daoccues amdioe mnob rpouse d(ternes s mera tgoismtrad a aos ss ipnroo
peosiro :Ch~\,~:os como míni~o (siete votos de los doce
arrastran una sentencia favorable).
-783-

cer de acuerdo con la política criminal y en la medida que las características


individuales del condenado lo permitan.
B) "La política criminal, que es un sector particular (mejor dicho un aspecto)
de la política (no solo de la política legislativa), no consiste únicamente
en recurrir al derecho penal según esta o aquella dirección, sino también en acu,
dir a «otras vías» posibles y útiles para la prevención de la criminalidad"l4,
según palabras del profesor G IULIANO V ASALLI 15. Queriendo decir con lo
anterior
que la política criminal debe acogerse a:
1 º) Amplias y profundas obras de profilaxia criminal, social e individual.
2°) Organizaciones políticas, económicas y sociales que tengan como finalidad
erradicar la criminalidad.
3º) Y, por último, a "una renuncia al derecho penal", entendido este en su
significado estricto y tradicional como un conjunto de normas elaboradas de
conductas delictivas a las que corresponde una serie de sanciones, bien sean
penas o medidas de seguridad.
Al abordar este tema hay una pregunta que no podemos omitir: ¿Frente
a un comportamiento considerado socialmente daí\ino y peligroso debe existir
una pena? A este planteamiento se ha contestado en forma negativa. Pues a
pesar de que la pena -en el supuesto caso- cumpliera con los fines para los
que ha sido creada, a saber: que en sí misma tenga fuerza persuasiva frente
a la prevención general, en igual medida tengan suficiente carácter frente a la
prevención especial y resocializadora, e incluso si se supiera que cumpliría juntamente
esos fines, aun así, sería demasiado ''oneroso''. Frente al individuo no
dejaría de cumplir un papel estigmatizador y con respecto al Estado representaría
un gran peso bajo varios aspectos.
En lugar de estas sanciones penales se debe hacer uso de "intervenciones
preventivas", como aquellas de orden médico-sico-pedagógicas que se llevan
a cabo en muchos países con óptimos resultados. Sometiendo a tratamiento
a nna serie de personas que precisan de estos servicios como son: los menores
inadaptados, los sicópatas, los cleptómanos y toda clase de enfermos mentales.
Igualmente se deben tener muy presentes las medidas de prevención ante
delictum. Figura de la cual se ha hecho mal uso en países donde no está afianzado
el proceso democrático. Un ejemplo claro nos lo presenta la ley sustancialmente
regresiva de vagos y maleantes, de 1933, y posteriormente la de peligrosidad
y rehabilitación social de 1970, sancionadas en España y en Italia;
luego de haber sido declarada inconstitucional la ley fascista de seguridad pública,
fue promulgada nuevamente en 1956 con efectos para determinadas personas
que se presume (según la ley de 1965) pertenecen la mafia.
Con miras a que esta prevención ante delictum sea aplicada sin que sea
atentatoria de los derechos humanos, se recomienda que al elaborar y al llevar
a la práctica tales medidas se tengan en cuenta los siguientes puntos:
14
379 y SRS.e vista Internacional de Derecho Penal, Politica criminal y derecho
pena~ cit., págs.
15
Catedrático de derecho penal de la Universidad de Roma (Italia).
-784-
¡o) Que estas medidas sean aplicadas con criterio ª~?litic?, es de~U:· que
· fl an para nada las creencias, organizaciones y militancias partidistas.
no ~ º ~~ue en ningún momento sean privativas de libertad, esto es, que no
se asemejen a la pena criminal. . . al d
3 º) Que el procedimiento esté dotado de garantías constituc10n es y e
defensas análogas a las del derecho penal. . . ,
4 º) Que las decisiones las tome un órgano judicial ordinar10, Y en mngun
caso instituciones especiales c1. v ile s o milit ares 16 · . "L
Podemos concluir lo expuesto con una frase del p~ofesor V ASALLI. o
esencial es que tales medidas no representen ui:',ª especie de derecho penal de
Za sos echa en vez de derecho penal del hecho · e[ Este tercer apartado de la primera
parte nos habla de derec~o p~nal
frente a una realidad social; en otras palabras, el derec~i ~enal ~º';;º ~m~~~
de "i aldad" y la realidad social en un plano -como es gico-: e esigu · f¡' profesor
ALESSANDRO _BARA TT A 17 aborda el_ tema partiendo de los tres
mecanismos dinámicos que tiene el derecho penal. . . . . . .
1) El mecanismo de producción de las normas (crimmalización pri~:'·ria).
2¡ El mecanismo de aplicación de las normas, que va desd~ la acc10n de
los órganos inquisitorios hasta el juicio (criminalidad _secundaria). "d d
3) El mecanismo ejecutor de las penas y las medidas de segur, a . d
El derecho penal como filosofía igualitaria del derecho se expresa en os
proposiciones: . · al fr te los
¡a) El derecho penal protege a todos los cmdadanos por 1gu : , e': ~
ataques contra los bienes esenciales respecto a los que tienen un identico mterés
todos y cada uno de los ciudadanos. . .
2ª) La ley penal es igual para todos. Quiere esto decir que l~s .''.1oladores
de normas tutelares de la paz ciudadana tienen las misma_s posibilidades de
ser sujetos del proceso criminal con todas sus consecuencias. , .
Pero frente a los tres mecanismos dinámicos y a las dos teor~a~ de i~aldad
·urídica anteriores, la crítica de derecho penal, luego _de anális~s _te%icos
d/una innumerable secuencia de investigaciones de caracter empmco , ha
hegado a conclusiones opuestas, a saber:
16 Revista Internacional de Derecho Penal, ob. cit., págs. 382 Y ss.
17 Director del Instituto de Criminología de la Universidad de Saarland,
Saarbrucken
(Alemania). f h p l e d · a Public Defen- IB Cfr D SUDNOW Normal crime:
Sociological features o t e ena o e in . lo f
· · · .. ocia! Problema", 12, 1965, págs. 255 y ss.; R. Qu1NNEY, Towards a socio g~
o
de: or:i en . s R QUINNEY (ed.) Crime and justice in society, Boston, .1.969, págs. 1 i:
SS., pci
cnmin w, m · d de T d ( r away from) an empine theory of crnne an
M~CNAUGHTON-~MITH, !hef s~on e~ m: ~ ~e~quency", 5, 1968, págs. 189 y ss.;
F. SACK,
delinquency, en Journ ° .s~arc . . á 384 88
. H STEINER (ed.), Der Prozess
Selektion und Kriminalitdt, Kntische1ustiz, ~97_1,J Sgs .. lo ! M~c-hen 1973· A.
BARA'ITA, Sisder
Kriminalisierung. Untersuchungen zur KnQmin : oziCo .!Jl~, al " 1976, pa'g; 237 y
ss. A BAtema
penale e d emargi·n azw· ne soci ale, en "La uest1one ruru.n e , f ,c h · . ekt ·"• So·z
iale
E kl ·· ammenhange und Hypothesen zum ors ungsproJ ~A'1t·Y G.
~Mi~:ic{en:z::"-f.:t:lten mit besonderer Berucksichtigung des _nicht-instituti:;;:llen
B:~ei~i; •• ~~C::,umento de trabajo _inédito rel~tivo a la inv:~;ctn ;;:ó~a s'!:1:u~~
~eaarb':.:i
la Universidad de Sar?ruckt~n, b.a6J
0
ken, 1975. Sobre esta mves 1gac1 n, ~fr·r u:-::c~~~i:ep!b!:da en :.L~ QuesJ00;
Criminale", 1975,
págs. 196 y SS.

l_º) El derec~o penal no protege todos los bienes en los cuales tiene igual
mteres la comumdad; y cuando castiga lo hace con intensidad desigual y de
modo fragmentario.
2 º) La ley penal no es igual para todos. La ley sanciona al individuo
independientemente
del daño social por él producido con su acto criminal.
_Con lo anterior s~ concluye que el carácter igualitario del derecho penal
es simplemente un rmto y que, en contra de las apariencias, es más bien el derecho
desigual por excelencia.
II. POLÍTICA CRIMINAL ACTUAL
Se aleja de mi objetivo al realizar este pequeño informe de política criminal
Y derecho penal en lo relativo a las corrientes más modernas de la política criminal,
repetir en forma textual lo que dijeron los participantes de dicho Coloquio.
Creo, en cambio, más productivo y eficaz el hacer mención de los nuevos logros
alcanzados por esta materia en diferentes frentes, que van desde movimientos obreros
hasta normas relativas al medio ambiente. Finalmente un apartado donde ha~
_referencia a la política criminal proyectada al individuo, donde se plantean posicrones
que por el hecho de ser diametralmente opuestas no pierden su vital interés
para aquellos a quienes que de alguna forma nos preocupa el futuro del derecho
penal.
En la dialéctica criminal italiana, según criterio del profesor FRANCO
BRI~O~A 19
, en los últimos años se ha venido hablando de "política criminal del
movllillento obrero" y de "política criminal de organismos locales". La primera
locución hace referencia a un movimiento social-económico originado en las
b~es. obreras italianas y cuyo fin principal ha sido la lucha por reducir la cri·
mmalídad, alcanzar lo que ellos llaman "inmunidad" respecto de la "otra crimin~~
ad" (la crim!"~dad económica). De donde se concluye que es una política
~al de movnmento obrero y no ya en interés de la clase dominante. La
cuestión, que ha generado muchas opiniones encontradas, es la de saber hasta
~ónde una política de este orden (obrera) puede ser separada de los marcos ordinanos
del poder.
. "L~ P?lítica de los organismos locales", es una parte más que tiene el go·
biern? i_tali~o ~ favor de la lucha contra la criminalidad, pero siempre que est~
política cr'-":"?al sea equiparada a política social y no a política penal, es decir,
aquella política que no recurre sino a las sanciones penales. Solo así estos
org~smos podr_án desempeñar una misión positiva frente a los medios de prevención
_ante delictum, por medio de asistencia social, reservando a la política
las medidas represivas20.
"Aproximaciones a la política criminal desde la protección del medio ambiente",
es el título con que el profesor LUIS RODRÍGUEZ RAMos21 participó
19
Catedrático de derecho penal de la Universidad de Bolonia (Italia).
20
Revista Internacional de Derecho Penal, oh. cit., págs. 105 y ss.
21
Cat~ático agregado de derecho penal, de la Universidad Complutense de Madrid,
Revista
Internac1onal de Derecho Penal, cit., págs. 279 y ss.
-786-
en el Coloquio objeto de este estudio, del cual extraeré las ideas más relevan·
tes de la política criminal frente a un problema de radiante actualidad: la protección
del medio ambiente22.
En España no existe una regulación penal del medio ambiente, y en su defecto
aparece una serie de normas desarticuladas de carácter administrativo
y civiJ23. En cambio en países como Francia, Italia, Bélgica y Alemania existen
legislaciones penales especialmente protectoras.
A los planteamientos anteriores se llega cuando se piensa en un pasado
no lejano, cuando la protección del medio ambiente nos tenia sin cuidado por
ser la naturaleza la propia artífice de su evolución, lejos de la acción criminal
del ser humano. Ahora no nos contentamos con destruirnos directamente como
ocurre con las guerras, sino que recurrimos a medios más indirectos y sofisticados,
tomando como medio el exterminio de los recursos naturales y en
esta forma ir lenta y eficazmente contra nuestros semejantes.
Ante esta realidad llegamos a afirmaciones tales como: debe haber una regulación
directa de la política criminal que intervenga en las conductas reguladoras
del medio ambiente; se debe elaborar unos objetivos acompañados de unidad
en el orden jurídico, con lo que se logre una organización capaz de acudir
a medios preventivos o retributivos, que permitan un equilibrio ecológico.
22 Revista Internacional de Derecho Penal, ob. cit., págs. 289 y ss.
23 Un índice de las disposiciones vigentes en los países de la CEE, puede verse en
Inquinaménto
atmosferico, Milano, 1975, 1975, págs.181 y ss.; respecto a Alemania Federal, una
referencia más
.amplia en Umweltschutz, cit., y a Suiza en el aspecto penal, Die Verletzunge des
biologischen Lebensraume
als strafrechtliche Tatbestande, Dissertattion de R. KUNZ, Zurich, 1973.
Como testimonios de algunas tipificaciones penales específicamente relativas al medio
ambiente,
en algunos países europeos, basta con los siguientes:
Francia: La ley del 16 de diciembre de 1964, conocida como "Charte" del agua, castiga
con
multa de 2.000 a 100.000 francos determinadas desobediencias a la autoridad
administrativa, elevándose
la pena a multas de 10.000 a 100.000 francos y prisión de dos a seis meses, si se pone
en funcionamiento una instalación clausurada; por su parte, el art. 434 del Código
Rural, también
respecto a la polución de las aguas, castiga con multas de 50.000 a 500.000 francos y/o
prisión de
10 dias a un año, al que arroja sustancias que perjudiquen la fauna o la flora acuática. El
incumplimiento
de lo dispuesto para aparatos o combustibles de calefacción merece, en algunos
supuestos,
penas de multa de 100 a 2.000 francos, en virtud de la ley del 19 de diciembre de 1917
modificada
por la del 2 de agosto de 1961; por último, ciertas evacuaciones ilegales de desechos,
con base en
el decreto de 9 de julio de 1968, merecen la pena de multa de 60 a 600 francos y prisión
de 8 días.
Italia: El art. 674 del Código Penal castiga con penas de un mes de arresto o multas de
hasta
80.000 liras a quien, sin consentirlo la ley, provoque emisiones de gases, vapores o
humos capaces
de perturbar a las personas; y el 734 del mismo texto legal, con multas de 400.000 a
2.400.000 liras
(aumentables hasta el triple), la destrucción o el menoscabo de bellezas naturales sujetas
a especial
protección.
Bélgica: Una ley de 26 de marzo de 1971, en su art. 41, castiga con ocho a seis meses
de privación
de libertad y/o multa de 26 a 5.000 francos (si en el plazo de dos años hay reincidencia,
se elevará al
doble la pena), pudiéndose también prohibir la utilización de las plantas, a quien vierta
residuos sin autorización,
se oponga a la vigencia o controles, destruya o dañe las plantas de depuración.
Alemania: La ''Wasserhaushaltsgesetz'' del 27 de julio de 1957, castiga supuestos de
contaminación
de las aguas con dos años de privación de libertad y/o multa•y seis meses en las
versiones
culposas, Y en el supuesto de existir peligro para la vida de las personas o para la salud
pública,
con cinco años de privación de libertad y tres años en la versión culposa. También cabe
hacer referencia
a la Bundes-Inmissionss Chutzgesetz del 15 de marzo de 1974 que castiga con pena
privativa
de libertad y multas conductas contrarias a sus prescripciones.
-787-

Estos logros pueden alcanzarse si tenemos en cuenta:


1 º) .~ijar un~s ~antas de tipo político y técnico, en las cuales haya una in·
terrelac10n de O~Je~1vos donde se decidan aspectos de carácter político y los
modelos de crecnmento y degradación del medio ambiente.
. 2º) Traducir a normas jurídicas las consiguientes políticas y medidas
mstrumentales24.
3 º) _Des?,ués de lograr la unidad objetiva y política, se pasa al campo de
la organ1zac10n, creando para ello diversos órganos políticos y administrativos
enc~gados d~ i':'puls";, gestionar y controlar las normas tendientes a la pro·
tecc10n del med10 ambiente25.
4 º) Posterior~~nte se crean los medios de prevención, fijados en diversos
s~cto;es. de la act1v1dad administrativa, a saber, polícía26, fomento27 y servi·
c10 publíco28.
. 5 º) Fin~mente, como acontece casi siempre, estas normas de tipo educativo,.
preventi;º• etc., no son suficientes, lo cual da lugar al nacimiento de los
me~o~ repr~s1vos, que se resumen en tres categorias: de responsabilidad civil,
adnumstrativas y penales.
Como se puede observar, en el plano del medio ambiente, como en todas
aquellas normas que velan por la seguridad del ciudadano, a la política crimi·
na! se recurre c~mo medio catalizador de la realídad social, haciendo un balance
del proceso soc1~ en su pasado y en su presente, para de allí fijar las pautas
que han de seguirse en el futuro, asignándole el área civil, administrativa,
d1~
4
Lah Cons
1
titu~ió~ como tronco común de las diversas ramas jurídicas y una teoría general
e erec o en a cusp1de de las distintas ramas jurídicas.
h La gen~ralización de sectores jurídicos interdisciplina como el dbrecho de la
circulación el derec
O -~gr~i~ctfl d~recho amb~ental, el derecho de la empresa, etc., pone de manifiesto
que¡¡ confifraci
bn Ju~ ~a .J una realidad económica social es la resultante de todas las normas jurídicas
ue so re e .ª mci an, s~a ~ual fuere la denominación disciplinaria de cada sector;
consecuenteme~
te, el legislador Y el interprete deben armonizar todo lo posible los distintos elementos
O subfi::~
to que ~º1?1-~onen este conj1;1nt~ _normativo total. El legislador es soberano, pero
dentro de
lid d argene~Jur!dicos de la Constitucion y, por otra parte, sin extravasar los límites de
la raciona- ª o, en rn:unos de WELZEL, las estructuras lógicas positivas.
ció Esta exigencia de_raci_onali~ad ~ue recae sob:e el legislador, también significa una
considera.
~or ~artr de l~ ciencia O c1enc1as que estudien la realidad que se intenta someter a
control
~~1 co. n e ám~1to pe~al al legislador deben exigírsele claros planteamientos de
política crimi.
rea.i./dº qdue s1;1pboilin_edmdeldudi~lemen'U; ~oda una serie de estudios
criminológicos que fundamentan la
a Y via a e dicha política.
trale: ~n.es: pu~to incide. esp.eci8;1mente la distribución de competencia entre los
órganos cene
' egion es, ocales e 1nstituc1onales. Como muestra, respecto a Italia véase a
BRACANSI
d~~PA~I [ M;~~GLIA, _In:ervento pUbblico perla tutela dell ambiente-ricognÍzione
delle funzioni
0
26
8 a O e. e ~ regioni a statuto ordinario, Milano, 1975.
1. , Autonzac10n~s, aprobaciones, licencias, etc.; también podían incluirse en la
actividad de poicia
aspectos represivos, pero se reservan para el siguiente epígrafe.
27 Sub . 'di
28
venci~nes, ere tos, asesoramientos, desgravaciones fiscales, etc.
• Irteedrvenci_o
6
nes públicas de todo tipo. Especial cabida en este ámbito pueden tener la ensen~
a Y ª ucaci n_a todos los nive~es {Le mo:,uie rnralguardian de la nature, CENECA
Paris 1970 r;~;: i,~1 Y s_s. Enseignement et environnement, coloquio internacional en
Aix-en-Pro~ence 'Paris'
ris, i.91;tsetgnement de l'environnement au niveau universitaire: Réfiexions e données,
OC;E, Pa:
-788-
conductas sancionadoras para cubrir ciertos comportamientos atentatorios de
dichos fines, y dejando al derecho penal como ultima ratio. En igual sentido
se pronuncia JUAN BUSTOS RAMÍREZ29.
En cuanto a los fines de la política criminal frente al individuo, en pensa·
miento de BAIGúNªº· BARBERoª1, LÓPEZ REy32, NovoAªª· ROMERo34,
SCHIFFRIN35 y V ASALLI, son los de readaptarlo dentro de unos parámetros pre·
constituidos por la sociedad dentro de la que el individuo se encuentra. La an·
terior afirmación se fundamenta en la aceptación total o parcial de la sociedad
industrializada en Occidente.
En este sentido existe una gran diferencia en el pensar jurídico de ALES·
SANDRO BARATTA y ROBERTO BERGALLI36, quienes afirman (luego de hacer
unos planteamientos de orden social, jurídico y político a los que haré mención
más adelante) que es la sociedad a la que hay que socialízar.
En el último sentido se dice37 que la criminología no parte de cualídades
ontológícas de determinados comportamientos y personas, sino que es algo que
se asigna a ciertas personas obedeciendo a una doble selección. En primer tér·
mino la selección de los bienes protegídos, y en segundo lugar en un "bien
negativo"38, distribuido desigualmente de acuerdo con los intereses económi·
cos y sociales existentes.
El escogimiento de los bienes obedece siempre a una política capitalísta
que no consulta las necesidades del pueblo, y la selección de comportamientos
se basa en la diferente intensidad de la amenaza penal, que normalmente está
en relación inversa con el daño ocasionado. Razón por la que se dirige contra
comportamientos típicos del individuo perteneciente a las clases subalternas
que contradicen la relación de distribución y producción de la clase dominante.
De esta forma se acentúa más el carácter fragmentario del derecho penal.
El carácter selectivo del derecho penal se pone de manifiesto cuando estu·
<liamos la escogencia de los sujetos, pues siempre depende de la posición
29 Catedrático de derecho penal de la Universidad de Chile, actualmente en la Facultad
de Derecho
de la Universidad Central de Barcelona (España).
3° Catedrático de la Universidad de Buenos Aires (Argentina). Revista Internacional de
Derecho
Penal, ob. cit., págs. 31 y ss.
31 Presidente de la Sección Nacional de España y miembro del Consejo de Dirección de
la Asociación
Internacional de Derecho Penal, presidente del comité organizador del Coloquio.
32 Catedrático de la Universidad de Cambridge, jefe de la Sección de Defensa Social de
las
Naciones Unidas.
33 Catedrático de la Universidad de Chile (Santiago de Chile). Ob. cit., págs. 239 y ss.
34 De la carrera judicia4 Buenos Aires, Ob. cit., págs. 295 y ss.
35 Catedrático de la Universidad de Buenos Aires, actualmente en Bonn.
36 Catedrático de la Universidad de Buenos Aires, actualmente en la Universidad de
Barcelona
(España); ob. cit., págs. 71 y ss. El profesor BERGALLI participó en el ya citado
Coloquio, con
el tema: "Ejecución Penal y Política Criminal en América Latina", pero, por lo extenso
y COD}plejo
del problema, he dejado para comentarlo en artículos posteriores que dedicaré a la
problemática
jurídica de América Latina. Por lo demás reconociendo del mismo autor:
''¿Readaptación social por
medio de la ejecución penal?", cuaderno número 9, del Instituto de Criminología,
Madrid, 1976.
37 Revista Internacional de Derecho Penal, cit., págs. 46 y ss.
38 Cfr. F. SACK, Neue Perspektiven in der Kriminologie, cit., pág. 469.
-789-

2da. Semana: Evolución del Estado, y evolución de la Política Criminal

1. Evolución de la Política Criminal

1.1. Antecedentes Históricos de la Política Criminal

La Política Criminal es la ciencia que estudia la actividad que debe desarrollar el estado
para los fines de prevención y represión de los delitos, sus valores, una propuesta
legislativa, la cual implica comprender que dé lugar a una determinada propuesta
analítica donde existan mejores formas de evitar el crecimiento criminal en nuestro
entorno social, o su vez proponer alternativas que disminuyan esta formas agresivas de
combatir dentro de cualquier desarrollo humano en un mundo globalizado por el avance
tecnológico y científico de este siglo, para algunos autores definen a la política criminal
de acuerdo a su evolución: La política criminal tuvo su origen según la dogmática penal
a finales del siglo XVII y comienzos del siglo XIX en Alemania no se podido precisar
cuál es la fuente doctrinaria autorizada para definirla, el punto inicial fue utilizado por el
maestro Cesar de Baccaria, en los años 1738 y 1774 quien diagnostico esta
problemática social en su obra de los delitos y penas condicha obra se propuso encontrar
la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley. Según Von lizt La política criminal es el
conjunto sistemáticos de principios garantizados por la investigación científica de las
causas del delito y la eficacia de la pena y sus formas de ejecución. 5 Para Heinz Zipl es
la obtención y evolución de criterios en el ámbito de justicia criminal destacando así la
influencia de la política criminal en la dogmática, podrá ser definida como el conjunto
de medidas y criterios de carácter jurídico social educativo, económico, por los poderes
para prevenir y reaccionar frente al fenómeno criminal con el fin de reducir los índices
de la criminalidad en una determinada sociedad. (BINDER, 2004)p 34, “Cada forma de
gobierno del Estado, cada revolución, cada modificación de las reglas básicas de la
convivencia social, se ha reflejado nítidamente en una específica concepción
políticocriminal que ha quedado representada en un diferente texto punitivo, o al menos
eso dice la teoría. Para ello estudiaremos diversos modelos históricos. Cómo surge el
modelo del Estado liberal de derecho frente a las monarquías absolutas y se postula un
sistema en el que los súbditos son ciudadanos cuyas libertades no pueden ser
avasalladas por el poder. Cuando fracasa este modelo entra el estado social de derecho,
un sistema intervencionista que dará lugar a un nuevo modelo de estado. Ya en el año
1982, la figura que destaca es el Alemán Von Liszt refirió que se refiero al libro
“Tratado del Derecho Penal” este autor incluyo el Kriminal Politik (Política Criminal)
en donde inicio el estudio efectivo sobre los medios estatales en la lucha contra el
crimen en todas sus causales. Los defectos de la personalidad del delincuente
(psicopatología que influye directamente en el crecimiento del crimen y la reincidencia,
siendo este un fenómeno social que está contemplado en las normas jurídicas. Este
Alemán se adjudica a haber utilizado por primera vez el término de 6 política criminal,
la creación de la ciencia de derecho penal, en donde la política criminal tiene un papel
preponderante. Critica a la Legislación Penal y la reforma del Derecho Penal,
Programas estatales de prevención de delitos. Ya en la escuela socialista nace de la
concepción marxista donde hace un estudio de la delincuencia de las distintas
perspectivas, las causas y condiciones del delito, la personalidad de los condenados, de
la prevención de brotes de la criminalidad. Su sistema jurídico busca una justicia social,
en donde introducen ya el concepto de “Función Social de Derecho”, esta ley aparece
con el mejor mecanismo para lograr una justa composición y un equitativo del
desarrollo de la sociedad donde se le adjudica el cumplimiento de la política criminal en
un compromiso de la sociedad en conjunto, la pena resocializa y rehabilita al
delincuente. Un Control Social que influye para prevención del delito, la política de la
criminalización de conductas este adherida a una institución gubernamental creada para
su desempeño Los principales objetos de la Política Criminal según Liszt eran: La
máxima eliminación de las penas cortas de prisión y el frecuente uso de la multa; La
aplicación de la condena condicional donde fuere practicable; La ejecución de medidas
educativas para jóvenes delincuentes; La atención primordial a la naturaleza del
criminal y de sus motivaciones; La consideración del Estado Peligroso; La profilaxis de
la inclinación criminal 7 en desarrollo (habitualidad y aprendizaje criminal); Formación
profesional del personal penitenciario y de la administración del Derecho Penal; La
recepción de medidas de seguridad para aquéllos supuestos en que lo aconsejaba el
estado mental o la posibilidad de readaptación o corrección del delincuente. La
evolución política criminal nos permite analizar el nacimiento de las políticas criminales
a nivel mundial, y así de esta manera conseguir el desarrollo armónico de nuestras
naciones, la capacidad de los estados para determinar lineamientos que deberán seguirse
a fin de lograr una mayor eficacia en la lucha contra la delincuencia común y
organizada, y establecer mecanismos de prevención que permita erradicar la
criminalidad, con una buena estructura jurídica que acceda garantizar los derechos
humanos y la inserción del delincuente hacia la sociedad con programas preventivos a
fin de erradicar los diferentes aspectos delincuenciales que aquejan a nuestra sociedad.

Al hablar de política criminal es la misión pública que adoptan los Estados dirigida a
prevenir, proteger y a reducir la criminalidad y los fenómenos sociales delictivos que
aquejan a nuestras sociedades dentro de un marco internacional y nacional, merece una
adecuada atención donde el mundo presenta constantes cambios conforme a los avances
tecnológicos, científicos que obligan a pensar y actuar en función de la globalización
moderna del entorno social como hemos podido establecer la problemática en países
desarrollados se debe dar un tratamiento diferente ya q los delitos provienen con la
utilización de medios electrónicos(pornografía, genética, y el abuzo de la informática)
Los gobiernos estatales deberán presentar programas, acciones y normas adecuadas e
instrumentos legales tanto nacionales e internacionales aplicables en materia de
prevención y la descriminalización teniendo como base un modelo plan preventivo de la
criminalidad y una adecuada estructura jurídica garantista de derechos humanos. El
presente trabajo tiene el objetivo de analizar cómo ha evolucionado la criminalidad a
nivel mundial, latinoamericano y su incidencia a nivel nacional que acciones han
realizado el poder ejecutivo en nuestro país en cuanto a establecer una política criminal
y sobretodo saber qué es lo 2 que se está haciendo para evitar su crecimiento, donde las
autoridades o a los que corresponde presenten propuestas coordinadas en beneficio de la
sociedad, y así evitar brotes de violencia y crimen.

La Política Criminal Durante la Última Década (ZUÑIGA RODRIGUEZ, 2001)p 156,


nos dice; “En este sentido, las Naciones Unidas en su resolución 36/21, de 1981, sobre
justicia penal, le pide a los gobiernos que se lleven a cabo los necesarios esfuerzos para
establecer sobre tal base, una justicia penal teniendo en cuenta factores políticos,
económicos, culturales, sociales y otros a fin de establecer una justicia penal basada en
los principios de una justicia social. Bajo este prisma el Comité de Prevención y Control
del Crimen de las Naciones Unidas, en marzo de 1984 adoptó los Principios Rectores en
Materia de Prevención del Crimen y Justicia Penal en el contexto del desarrollo y de un
nuevo orden internacional, en los que sumariamente resume lo hasta aquí expuesto y en
especial la correlación planteada sosteniéndose al respecto que:

 Los cambios en la estructura social y económica deben ir aparejados con reformas


pertinentes de la Justicia Penal a nivel nacional e internacional.

 Deben erradicarse las injusticias socioeconomicas.

 La prevención del crimen debe estimarse como instrumento de Política Social..

 Debe establecerse acceso ilimitado a la justicia penal, así como asegurar en ésta la
participación de la comunidad, tener debidamente en cuenta los derechos humanos,
crear una justicia social penal.

 La prevención del crimen sea eficaz en la formulación del sistema penal y en su


funcionamiento han de tenerse muy presente el estudio cuidadoso de los costos directos
e indirectos del crimen, así como las consecuencias sociales que entrañan su aumento.

 La tecnología debe utilizarse, pero no hacer uso indebido de ella. Es preciso una
mayor cooperación internacional, nacional y regional. En las últimas dos décadas,
Latinoamérica y el Caribe han pasado por una tremenda agitación. Si bien la región se
ha alejado de las guerras civiles hacia democracias representativas, y ha experimentado
un crecimiento en el tamaño de su clase media, así como un importante crecimiento
económico, incluso en medio de una recesión mundial, también se ha convertido en el
lugar más violento del planeta. Las cinco principales naciones más homicidas en el
mundo están en América, cuatro de ellas en Centroamérica. Parte de la explicación de
esta dicotomía se encuentra mirando a los mercados criminales en sí. Nuevos mercados
de drogas, en particular de cocaína, en Europa, Asia y África, han llevado a los grupos
criminales a 19 cambiar sus rutas, socios y medios de transporte. Los cambios
resultantes han coincidido con una mejor aplicación de la ley y con leyes más estrictas
que regulan, por ejemplo, el movimiento de dinero. Las organizaciones criminales más
grandes han respondido al cambiar su ubicación y modus operandi, dando así más poder
a los grupos criminales de menor nivel, en países de todo el continente americano. Estos
grupos criminales de menor nivel han aumentado su tamaño y sofisticación, y han
ayudado a los mercados criminales locales desarrollados, en particular alrededor del
tráfico de drogas. El resultado es un panorama criminal en Latinoamérica y el Caribe
que se ha vuelto más fragmentado, violento y diversificado en los últimos años”. Como
podemos analizar la política criminal en la última década se a constituido en un gran
debate para poder erradicar la criminalidad en las naciones, las cuales no deberían
quedar en programas o estrategias planteadas sino se debería atacar en una forma directa
este fenómeno social con una buena estructura judicial, especialmente en el ámbito
penal que los gobiernos deberán destinar recursos para asegurar y enfrentar la política
criminal, con un buen tratamiento preventivo a los sistemas carcelarios a fin de que no
se organicen o se perfeccionen en actos delictivos haciendo mal uso de la tecnología y
más métodos electrónicos que a través de ellos se prolifera más crimines, secuestros,
extorción, explotación sexual y el comercio discriminado de todo tipo de droga que con
lleva a que nuestra sociedad caiga en decadencia por la falta de 20 concienciación por
parte de los organismos estatales de velar por la seguridad e integridad de nuestra
ciudadanía en general.

3ra. Semana: Política Criminal, Criminología y Sistema Penal

1.1 Generalidades

Para definir lo que es la Política Criminal es menester desarrollar en forma concreta a


qué se refieren los conceptos “Política” en su aspecto general, y “Criminal” y así formar
una definición a base de ambas ideas. Se inicia indicando que la Política es la ciencia
encargada de crear las directrices básicas que debe seguir un Estado para cumplir los
fines que tiene hacia la sociedad, principalmente el bien común y es por ello que se vale
de la fuerza pública para que haya un orden dentro del conglomerado social, siendo esta
una de las principales características de la Política. Ahora bien, en relación al término
Criminal se engloba dentro del campo meramente penal, dentro de lo punitivo, lo que
conlleva una pena por haber quebrantado el ordenamiento jurídico de una sociedad. El
aspecto criminal dentro de una sociedad es un hecho normal en virtud que los
individuos pertenecientes al núcleo social cuentan con diferentes personalidades e
intereses y que en algún momento las mismas pueden entrar en conflicto llegando a
causar daño que debe ser castigado por quien corresponda. Unir los términos descritos
anteriormente lleva a concretizar un área específica que puede tener la Política tal y
como lo es la Política Criminal la cual se enfoca principalmente en los mecanismos y
medidas de represión y prevención del delito y de la criminalidad que se da en la
sociedad. Aunado a lo anterior, existe la necesidad de desarrollar ciertos conceptos que
son de vital importancia dentro del presente tema para poder comprender qué es la
Política Criminal. 5 En primer lugar, es necesario definir que el crimen es toda conducta
antisocial que, aún sin estar tipificado en una ley penal emanada del órgano dotado de
capacidad constitucional para hacerlo, infringe el orden impuesto por la sociedad y
puede ser un primer paso a cometer un delito, por ejemplo el alcoholismo que es una
conducta que no está tipificada en el Código Penal pero que irrumpe dentro del orden
social y moral establecido previamente. En ese orden de ideas se entiende que criminal
es el autor directo de un crimen, evidentemente será un ser humano toda vez que es
quien integra el grupo social, no así los animales ni los objetos. Ahora bien, se hace una
distinción de términos al indicarse entre los doctrinarios que el término “criminal”
puede ser estigmatizante y por lo tanto inadecuado, se ha utilizado también el término
“antisocial” pero el problema de éste radica en que es demasiado amplio, por lo que se
opta por utilizar el término “desviado” que según la doctrina puede ser más
descriptivo.1 Por criminalidad se entiende entonces, el conjunto de conductas
antisociales que se manifiestan en una sociedad determinada y en una época o tiempo
específico. Es un hecho normal que se suscita en las sociedades y debe ser tratado como
tal. El delito es una conducta típica, antijurídica, culpable y punible y se diferencia del
crimen en el sentido que son conductas que han sido previstas por los diputados al
Congreso de la República como lesivas al bien común, al orden social y que ponen en
peligro o violentan bienes jurídicamente tutelados y que están descritos en una ley
penal. Por ende el delincuente es quien tipifica su actuar dentro de un tipo penal descrito
por la ley. Una vez cauterizados los términos anteriores, se puede definir la Política
Criminal.

1.2 Definición

La Política Criminal puede definirse como una ciencia con una serie de principios que
se encarga de crear los mecanismos, instituciones, autoridades y métodos 1 Rodríguez
Manzanera, Luis, “Criminología”, México, Editorial Porrúa, 2011, páginas 27 y 28. 6
empleados por el Estado para llegar a una reducción de la criminalidad y la delincuencia
que radica en su medio a través de penas y sanciones adecuadas capaces de reducir los
índices de criminalidad y prevenir la comisión de futuros delitos con la finalidad de
proteger los bienes jurídicamente tutelados. A través de la Política Criminal el Estado
debiera cumplir los fines que tiene establecidos en la Constitución Política de la
República de Guatemala, precisamente en su artículo 2: “Deberes del Estado: Es deber
del Estado garantizarle a los habitantes de la República la vida, la libertad, la justicia, la
seguridad, la paz y el desarrollo integral de la persona.” Para ello debe crear medios que
sean capaces de cumplir con los mismos sin dejar de lado los aspectos materiales o
externos, y los aspectos intrínsecos o internos de la sociedad, y respetando el Estado de
Derecho que debe prevalecer en todo momento. Se desprende entonces que la Política
Criminal es una herramienta utilizada por el Estado para prevenir la comisión de hechos
delictivos en su seno social, sin embargo, llama la atención que ciertos doctrinarios no
le dan la calidad de ciencia a la Política Criminal e indican que sólo son mecanismos
utilizados por el Estado restándole de cualquier forma que la misma pueda tener un
método, principios y elementos propios de una ciencia. Franz Von Liszt citado por
Roberto Reynoso Dávila indica que la Política Criminal es “el conjunto sistemático de
principios conforme los cuales debe el Estado conducir la lucha contra el delito por
medio de la pena e instituciones afines y de los efectos de la pena y de sus medidas
afines”.2 Aquí claramente el autor citado se refiere a la Política Criminal como un
conjunto de principios y no como una ciencia pues continua manifestando que no es una
ciencia 2 Reynoso Dávila, Roberto, “Nociones de Criminología”, México, Editorial
Porrúa, 2010, página 51. 7 sino que es un “criterio directivo de la reforma penal”.
Además indica que la Política Criminal es parte de la Política general de Estado,
entendida como una obligación a actuar en contra del crimen y la delincuencia en
nombre de la sociedad. La Corte Constitucional de Colombia define en su sentencia
número C-936/10 la Política Criminal como: “el conjunto de respuestas que un Estado
estima necesario adoptar para hacerle frente a conductas consideradas reprochables o
causantes de perjuicio social con el fin de garantizar la protección de los intereses
esenciales del Estado y de los derechos de los residentes en el territorio bajo su
jurisdicción.”3 Penalistas como Francisco Pavón Vasconcelos indican que la Política
Criminal es una disciplina y tratadistas como José Arturo Gonzales Quintanilla
manifiestan que sí es una ciencia. Hay quienes consideran a la Política Criminal como
un arte, específicamente el arte de legislar en materia penal y en este caso ese don le
corresponde al Congreso de la República quien es el único facultado por la Constitución
Política de la República de Guatemala, ningún otro ente, institución o autoridad se
puede arrogar la función de crear, reformar o derogar leyes, sin embargo la Política
Criminal no es sólo un arte. Otro tratadista como Zaffaroni indica que no es importante
determinar si es una ciencia o no, sino que lo más importante radica en saber quién
ostenta el poder punitivo y si es bien empleado para los fines para los cuales fue creado.
Para que una ciencia sea considerada como tal es necesario que tenga un método de
estudio, características y principios bien definidos, aspectos con los que la Política
Criminal cuenta a cabalidad y que serán expuestos a lo largo del presente trabajo de 3
Corte Constitucional de Colombia, “Sentencia C-936/10 APLICACION DEL
PRINCIPIO DE OPORTUNIDAD AL DESMOVILIZADO DE UN GRUPO
ARMADO AL MARGEN DE LA LEYDesconoce el principio de legalidad, los límites
constitucionales para su aplicación y los derechos de las víctimas a la verdad, la justicia
y la reparación/APLICACION DEL PRINCIPIO DE OPORTUNIDAD AL
DESMOVILIZADO DE UN GRUPO ARMADO AL MARGEN DE LA LEY-Se
incurre en una omisión legislativa al no excluirlo en los casos de graves violaciones de
derechos humanos”, Colombia, 2010, disponible en la página web:
http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/2010/c-936-10.htm consulta realizada el
06 de julio de 2014. 8 tesis, por ende se concluye que la Política Criminal es una ciencia
que reúne todos los elementos para serlo. La Política Criminal también es conocida
como Política Penal, nombre que se considera más apropiado ya que el primero podría
entenderse como directrices que utilizan los propios criminales para desarrollar sus
conductas antisociales. La Política Penal debiera ser el nombre que adopte la Política
Criminal en cada Estado.

1.3 Objeto

El objeto de la Política Criminal consiste en proponer cambios y modificaciones a la


legislación para que haya una reducción y control de los índices de criminalidad. No
solo se limita a las leyes en materia penal sino que busca integrar todos los sectores que
incumben dentro de la esfera social como lo es la educación, el ámbito laboral, la salud,
la cultura, el deporte, la religión, entre otros. La Política Criminal debe tener respuestas
concretas y eficaces en contra de la criminalidad, buscar alternativas para prevenir que
los bienes jurídicamente tutelados por la sociedad sean violentados o puestos en peligro
por personas cuya conducta debe ser analizada por profesionales. Una buena Política
Criminal debe unificar sus esfuerzos para la prevención y reducción del crimen como
fenómeno natural dentro de una sociedad y de esa cuenta fomentar el desarrollo de un
Estado de Derecho en donde los individuos de la sociedad puedan alcanzar un pleno
desarrollo de su humanidad, por ende la Política Criminal juega un papel muy
importante en relación a la protección de los derechos humanos. La Política Criminal no
eliminará en su totalidad el fenómeno criminal toda vez que es un hecho normal dentro
de un grupo social y que necesariamente existirá mientras haya dos o más personas. 9

1.4 Finalidad

Dentro del objeto de la Política Criminal se hace referencia principalmente a la


prevención del delito, entendida ésta como la eficaz disuasión que tiene la amenaza de
ser acreedor de una sanción o una pena que el Estado ha establecido a través de las leyes
penales correspondientes, en tal virtud con la amenaza de la sanción claramente
determinada se pretende que el criminal en potencia se abstenga de realizar la conducta
antisocial que afecte a la sociedad o algún elemento de ella. Otra forma de prevención,
es cuando hay un sistema de administración de justicia rápido y eficiente, capaz de
asegurarle a la población justicia y certeza jurídica en cada resolución emitida, lo cual le
indica a los criminales que si cometen un hecho delictuoso sabrán y reconocerán que
existe un sistema de justicia íntegro y seguro donde no la acción u omisión punibles no
quedarán impunes. La prevención no es tarea única y exclusivamente del Estado a
través de sus poderes públicos sino que es una tarea en donde varios sectores sociales se
ven inmiscuidos, tales como el sector civil, tomando en cuenta que el crimen y el delito
son males que se originan dentro de la misma sociedad por lo que ésta debe tomar todos
los medios de prevención que crea convenientes sin dejar de lado la tarea que tienen los
entes estatales de cumplir con los deberes ya indicados anteriormente. Entonces, se
deduce que el principal fin que tiene la Política Criminal es la prevención y reducción
de la criminalidad a través de medidas tomadas por el Estado que en su mayoría van de
la mano con la ideología que éste maneja y que su principal búsqueda va encaminada
hacia el valor justicia. Cabe destacar asimismo que la doctrina ha establecido tres clases
de prevención4 que utiliza la Política Criminal para lograr su cometido y que varían en
cuando a sus niveles de eficacia dentro de la persuasión del criminal o delincuente, a
saber: 4 García-Pablos De Molina, Antonio, “Tratado de Criminología”, Tomo II,
Argentina, Rubinzal – Culzoni Editores, 2009, páginas 586 y siguientes. 10
1.4.1 Prevención primaria:

Ésta prevención es la que mayor eficacia tiene porque ataca las principales causas de la
criminalidad, sin embargo los resultados se observan a largo o mediano plazo y que
exigen la existencia de un presupuesto que se preste para ofrecer programas sociales a
todos los ciudadanos. Busca mejorar la educación, vivienda, salud, infraestructura,
justicia, seguridad, trabajo entre otros, para que todos los ciudadanos tengan acceso en
igualdad de derechos. Lo que sucede en este tipo de prevención es que todos los
sectores de la sociedad se involucran de manera integral y no se limita únicamente a
persuadir al criminal o delincuente sino que ataca las principales causas por las cuales se
dan los fenómenos criminales. Por parte del Estado es menester que cumpla con las
garantías que establece la Carta Magna y tratados y convenios que Guatemala ha
ratificado atendiendo a las posibilidades económicas con las que cuenta el país. El
problema radica en que, generalmente los gobiernos no están capacitados para poder
invertir a mediano y largo plazo pues es una gran cantidad de recursos, tanto humanos
como materiales, y que no se verán resultados de manera inmediata sino como mínimo
de diez años. Otro aspecto que llama la atención es que los políticos no tienen en sus
planes invertir parte del presupuesto en proyectos sociales que mejoren la calidad de
vida de los habitantes del territorio pues no aceptan que un gobierno futuro goce de lo
que ellos van a sembrar en el presente, es decir que se manejan intereses políticos que
buscan beneficios para una cierta minoría que domina a la generalidad. La población
exige resultados inmediatos sin importar si los mismos son adecuados y eficaces y exige
la penalización de las conductas que considera antisociales y que las penas sean
demasiado elevadas con la creencia que eso evitara que de una vez por todas se sigan
cometiendo delitos.

1.4.2 Prevención secundaria:

Ésta se da en donde la criminalidad se está manifestando, es decir, se enfoca en el


presente del fenómeno criminal 11 específicamente en áreas donde hay una fuerte
exposición a cometer delitos y es el punto de ataque de los programas de prevención
policial y programas de reinserción y readaptación social a grupos concretos y más
determinados, como lo ejemplifica el tratadista García-Pablos de Molina, esta
prevención va orientada a barrios bajos que han sido disgregados de la generalidad y eso
hace que sean más susceptibles a rebelarse contra el sistema. La prevención secundaria
produce sus efectos a mediano y corto plazo y es donde la población exige,
principalmente, penas más severas para los infractores del orden social esperando a que
se reduzca la criminalidad, o mejor aún, que ésta desaparezca. La población, además, al
ver la deficiencia que presentan los agentes de seguridad del país prefiere actuar por sí
misma y plantea varias opciones entre las cuales se puede mencionar la justicia de
propia mano, que consiste principalmente actos de violencia como lo son los
linchamientos que hoy en día en Guatemala son cometidos en gran número, sin ser la
solución adecuada para reducir los índices de criminalidad. Otra incidencia que se ha
estado manifestando en los últimos años es el incremento de “seguridad privada” que
consiste en contratar personal capacitado para prestar seguridad sin perseguir fines de
justicia como lo debiera hacer la seguridad pública y esto se ha debido básicamente al
deficiente desempeño de los guardias de seguridad obligados según la ley, pues la
población no se siente confiada con los agentes de la Policía Nacional Civil ni con las
fuerzas militares armadas que se han desplegado en apoyo a dicha entidad, conocido en
Guatemala como fuerzas mixtas o combinadas. A pesar de lo anterior, la seguridad
privada que prestan ciertas empresas no está del todo capacitada pues en la mayoría de
casos no cumple con los requisitos 12 establecidos por la ley, mayormente con el de
licencia para portar armas dando pauta a la comisión de más hechos delictuosos.

1.4.3 Prevención terciaria:

Ésta prevención es la que se da de manera específica hacia la población reclusa, es


decir, de las personas que han infringido una ley penal que han sido condenadas por
algún órgano jurisdiccional y que se encuentran purgando la pena que les ha sido
otorgada en virtud de su comportamiento lesivo para la sociedad. Esta prevención
pretende la reinserción del criminal o delincuente dentro del conglomerado social, que
el infractor ingrese a la sociedad como un nuevo ciudadano capaz de generar
producción y beneficio para sí mismo y para los demás, tratando de alejar su mente de
la reincidencia de comisión de delitos. En esta prevención, el sistema penitenciario
juega un papel demasiado importante para el Estado pues en él radica que las personas
reclusas y a su cargo sean reinsertadas en el seno social y reeducadas, tal y como lo
establece el artículo 19 de la Constitución Política de la República de Guatemala. Los
reclusos, según el cuerpo legal citado, tienen derechos fundamentales que deben ser
respetados porque el hecho de que sean reclusos no dejan de ser personas, sin embargo
cuentan con prerrogativas que a veces dificulta los fines que tiene el sistema
penitenciario guatemalteco. La prevención terciaria va íntimamente ligada a lo que
respecta a la Política Penitenciaria de la cual se tratará más adelante y que es de suma
importancia dentro del campo del Derecho Penal.

1.5 Principios

Los principios son una parte importante del Derecho pues son las guías y fundamentos
básicos que dan sustento a la normativa jurídica y forman parte de las fuentes que da
origen al mismo. 13 Al hablar de Política Criminal, se establece que es una ciencia que
reúne los principales elementos tales como los principios que son los pilares que
orientan el trabajo que tiene la misma como parte de las ciencias penales por lo cual se
hace necesaria una enumeración de los principios que sirven de directriz a la Política
Criminal y que buscan cumplir con la finalidad que la misma tiene para con la sociedad
a través de la propuesta de mejoras en la legislación, entre los cuales se puede hacer
mención de los siguientes5 :

1.5.1 Principio de lo posible:

En un Estado de Derecho generalmente se manifiestan tres organismos a los cuales se


les atribuye las principales funciones, administrativa, judicial y legislativa. La función
administrativa es encomendada al Organismo Ejecutivo; la función de juzgar y
promover la ejecución de lo juzgado es atribuida al Organismo Judicial y la función
puramente legislativa le es encomendada al Organismo Legislativo, precisamente el
Congreso de la República. El Congreso de la República está integrado por diputados
electos libremente por el pueblo y que representan la democracia como forma de
gobierno. Actualmente el pleno del Congreso cuenta con 158 legisladores los cuales, en
base al principio de representatividad, proceden de diferentes partes del país quienes
conocen el aspecto social de lugar de donde son oriundos, asimismo hay una inmensa
lista de partidos políticos en los cuales los mismos están afiliados. El problema que
comúnmente se presenta en el Pleno del Congreso es la dificultad de unir en una sola
ley la voluntad, los intereses, las necesidades y las herramientas con las que se cuenta,
por lo cual, se recalca que la tarea de legislar no es nada fácil pues la ley debe ser
aplicable en cada lugar del país, cumpliendo los fines hacia los cuales va enfocada y no
crear a diestra y siniestra leyes que serán vigentes más no positivas. 5 Orellana Wiarco,
Octavio Alberto, “Criminología, moderna y contemporánea”, México, Editorial Porrúa,
2012, página 235 y siguientes. 14 Los legisladores deben velar porque la ley que se
cree, reforme o derogue cumpla con los fines para los cuales se ha realizado tomando en
consideración que el principal fin del Estado es el bienestar común.

1.5.2 Principio de culpabilidad:

La culpabilidad es uno de los elementos positivos que integran la teoría del delito y
consiste en la reprochabilidad que tendrá la conducta de un individuo que violentó el
ordenamiento jurídico y social cuando podía decidir y optar por abstenerse de
quebrantarlo y que, como consecuencia, debe recibir una sanción o una pena, sin
embargo, este principio establece que la magnitud de la pena no va equiparada al grado
de daño que se causó por el hecho delictivo sino que va de la mano con la intención que
tuvo el infractor de la ley penal para realizar el ilícito. Como bien indica el jurista
Orellana Wiarco, la culpabilidad no debe ser penada en base a la conocida “Ley del
Talión” porque se estaría retrocediendo a tiempos de antaño regulada inclusive en la
Santa Biblia en el libro de Éxodo capítulo 21 versículo 24: “ojo por ojo, diente por
diente; mano por mano, pie por pie; quemadura por quemadura, herida por herida, golpe
por golpe.”6 Tampoco debe la pena enfocarse en la persona del delincuente, es decir,
buscar la responsabilidad del autor del delito sino ver la acción que éste cometió. En la
sanción no se debe atender los antecedentes que tenga la persona, si fue un buen
samaritano que ayudaba a todo el que se lo pedía o si fue un malhechor que rondaba por
las calles planeando dañar a alguien, ni tampoco en lo que pueda hacer en el futuro y
castigársele por parecer un sospechoso de reincidir en la comisión de delitos, o en la
“peligrosidad” que pudiera manifestar. Lo que se debe sancionar es el mal actuar que
tuvo en contra de la sociedad, ya sea poniendo en peligro bienes jurídicamente tutelados
o violando los mismos de manera irreparable. 6 Santa Biblia, Nueva Biblia al Día, 2008
por la Sociedad Bíblica Internacional. Grupo Nelson, Inc., página 47. 15 Los
legisladores deben de tomar en consideración aspectos como éstos que son de suma
importancia al momento de la aplicación de leyes en tiempo y espacio por parte de los
juzgadores. Asimismo la Política Criminal debe crear los parámetros adecuados para
poder sancionar las conductas antisociales y delictivas de manera proporcional creando
penas acordes al delito o crimen, incluyendo las circunstancias en que se cometió,
además indicar qué sanciones son las adecuadas para determinados delitos, pues en
algunos casos será preferible una sanción de multa a una sanción privativa de libertad,
qué circunstancias son agravantes y cuáles atenuantes.
1.5.3 Principio del Estado de Derecho:

Este principio indica que la Política Criminal debe de ir de la mano con lo establecido
por el Derecho Constitucional, referente principalmente a las garantías y derechos
relacionados a la materia penal, como los mencionados por Orellana Wiarco: a) La
irretroactividad de la ley penal: La irretroactividad consiste en que la ley regirá todos los
actos u omisiones que se susciten bajo su imperio, desde su creación hasta su
derogación. En principio, la ley no tiene efectos retroactivos sin embargo, tiene como
excepción la extractividad que puede manifestarse de dos formas: la ultractividad y la
retroactividad. En materia penal, ambas están permitidas en lo que favorezca al reo. b)
Prohibición de la analogía: consiste en que los actos delictivos deben encuadrar
perfectamente en la ley penal, es decir que no deben “parecerse” o ser similares sino que
debe haber un una tipificación correcta de cada elemento del delito y que el juez o
tribunal no puede crear figuras delictivas o penas por analogía, sin embargo si se
permite la interpretación analógica. c) Exclusividad judicial: consiste en que los jueces
son los únicos facultados para poder aplicar las sanciones a través de las normas penales
y por ende son quienes están obligados a buscar la justicia como un principio
fundamental y anhelado por 16 cualquier sociedad. El artículo 12 de la Carta Magna
guatemalteca hace referencia al derecho de defensa y específicamente a que antes de
que una persona sea privada de sus derechos debe ser citada, oída y vencida ante un juez
competente y preestablecido, es decir, una autoridad que haya reunido los requisitos
establecidos por ley para poder ejercer dicho cargo y que por inherencia a su investidura
debe ser probo, justo, recto y capaz de emitir un juicio basado en pruebas y argumentos
creíbles. Es por ello que Guatemala, al ser un Estado de Derecho establece que uno de
sus organismos se encargará de administrar justicia, garantizando la independencia del
mismo evitando toda injerencia en la decisión judicial.

1.5.4 Principio de humanidad:

Éste principio plantea que las penas deben ser más humanas y que deben ser
proporcionales al daño causado. Además indica que si la pena de muerte está regulada
en el ordenamiento jurídico se debe proponer su abolición, eliminarla del sistema legal y
proponer otras formas de solucionar el conflicto. En base a este principio tampoco está a
favor de las penas corporales como la esterilización de los violadores ni las torturas pues
según dicho principio se pretende el respeto de la humanidad del delincuente, además de
que existen diversos instrumentos jurídicos internacionales que promueven el respeto de
los derechos humanos, por ejemplo Guatemala ha ratificado una serie de instrumentos
de derechos humanos de carácter universal y que es obligada a cumplir los mismos, ya
que el claro ejemplo que se tiene es la regulación de la pena de muerte en el artículo 18
de la Constitución guatemalteca sin embargo se tiene también en cuenta lo establecido
en el artículo 4 de la Convención Americana de Derechos Humanos en donde se limita
la aplicación de la pena capital. Lo que se deduce de lo anterior es que se respetan de
manera minuciosa los derechos del agresor como ser humano que es, sin embargo cabe
preguntarse ¿y los derechos de la víctima? ¿Por qué no se respetan de la misma manera
que los derechos del agresor? 17 La sociedad exige que los derechos humanos sean
aplicados de manera justa y que dejen de proteger a los delincuentes y criminales
porque mayormente los mismos siempre salen invictos de las sanciones que ameritan
porque les ha sido violentada alguna garantía constitucional que ata de manos a la
justicia para poder imponer una pena, sin embargo lo que la Política Criminal pretende
es ser preventiva y no represiva.

1.6 Funciones

Según los coautores Sergio y Danilo Madrazo Mazariegos las funciones que tiene la
Política Criminal son las siguientes7 :

1.6.1 Estudio de la realidad del delito:

Para poder entender un fenómeno o problema determinado es menester hacer un estudio


a profundidad de toda la etiología, circunstancias, elementos, características,
propiedades, sujetos, objeto y naturaleza del mismo pues de esa manera se podrán
obtener conclusiones que ayudarán a establecer medios para evitar que se siga
suscitando dentro del seno social. El delito y el crimen son problemas, que como
anteriormente se mencionó, son normales dentro de una sociedad sin embargo necesitan
un tratamiento adecuado para evitar que aumente el número en las estadísticas, por ello
el estudio científico ayudará a entender por qué surge el delito y el crimen, qué es lo que
genera que haya inconformidad por parte de los infractores hacia la sociedad para que
infrinjan el orden social y de esa cuenta poder determinar las medidas que se pueden
adoptar para prevenir y reducir la criminalidad. La Política Criminal estudiará al delito
en todas sus facetas desde su origen, su comisión y qué sucede posteriormente a la
infracción del orden social, esto con el fin de poder elaborar un plan antedelictum y
postdelictum que realmente sea eficaz y no 7 Madrazo Danilo y Sergio Madrazo,
“Constelación de Ciencias Penales”, Tomo I, Guatemala, Magna Terra Editores, 2006,
páginas 83 y siguientes. 18 sea una copia de otros países con una Política Criminal,
generalmente, más desarrollada que la de Guatemala.

1.6.2 Estudio de los mecanismos de prevención del delito:

En relación a esta función, la Política Criminal trata de buscar los medios más
adecuados para lograr una prevención eficaz del delito y la criminalidad, ahora bien
para poder encontrar mecanismos que cumplan con el objeto de la Política Criminal es
necesario que se haya hecho un sondeo sobre los delitos y crímenes que se cometen en
la sociedad y no simplemente crear mecanismos que a primera vista se nota que no
serán útiles para prevenir la criminalidad. El estudio que debe hacerse es de carácter
científico, debe reunir criterios de varias ciencias entre las cuales se puede mencionar a
la Criminología, Psicología y Sociología que brindarán elementos importantes para
poder tener una idea globalizada acerca del tema. El error que suele cometerse por parte
de las autoridades a cargo de la Política Criminal de un país es que crean la misma a
base de intereses político-partidistas que benefician a unos pocos dejando a la
intemperie la seguridad nacional. No hay voluntad política para mejorar la seguridad de
los ciudadanos, no es un tema de primacía en la agenda de las autoridades
guatemaltecas ni tampoco es un tema en el que la sociedad, en todos sus sectores, esté
muy involucrada pues se sabe que hay criminalidad y que se origina en primera
instancia dentro de la misma sociedad, y se sabe cuáles son las principales causas, pero
lamentablemente no se hace nada. El principal motivo por el cual se crean las leyes
penales es que sucede algún hecho en el que la sociedad siente que debería regularse a
través de la punición de la conducta y empieza a hacer críticas en contra del sistema de
justicia, exigiendo la creación de leyes penales con sanciones severas, aunado a ello los
medios de comunicación masivos también tienden a exagerar las condiciones en las
cuales suceden los hechos, presumiendo de un amarillismo que hace que la euforia e
inconformismo de la población aumente y exija en gran medida el actuar de las 19
autoridades quienes al verse “entre la espada y la pared” prefieren crear una ley penal
que tienda a criminalizar cualquier conducta y con penas exageradas y
desproporcionales, sin hacer un estudio criminológico previo que permita establecer las
principales causas del actuar de los criminales o delincuentes. El efecto inmediato de
ello es la carga excesiva de trabajo en los órganos jurisdiccionales y por ende, que haya
más reclusos en los centros preventivos y centros de cumplimiento de condena del país.
El Organismo Judicial como el Sistema Penitenciario están al borde del colapso al no
contar con mecanismos adecuados para controlar la población que tiene a su cargo,
tanto de quienes se presume la comisión de un delito como por quienes han sido
condenados y que necesitan ser rehabilitados y readaptados socialmente. Algo
interesante que señalan los coautores Madrazo Mazariegos es la carencia de una
Licenciatura en Criminología, que a criterio personal debiera de impulsarse más en las
universidades del país porque habría más especialistas en la materia que pudieran
asesorar de mejor manera a quienes tienen el poder y la facultad de crear y aplicar la
Política Criminal del país. Además se determinado que en las universidades del país no
existe un curso de Política Criminal o una carrera independiente que aporte especialistas
en la materia que puedan dominar con facilidad dichos temas.

1.6.3 Crítica de la legislación penal:

Al crearse una ley penal en el Congreso de la República se espera que la misma pueda
cumplir con los fines de prevención del delito y proteger el bien jurídicamente tutelado.
Por bien jurídico tutelado se entiende que engloba aquellos valores, bienes y creencias
que son protegidos por las leyes penales, pues han adquirido relevancia para la sociedad
y que merecen una atención especial por parte de las autoridades 20 en cuanto a su
protección y cuidado pues son una base esencial para que las personas puedan
desarrollarse de forma integral dentro del conglomerado social. A través de la Política
Criminal se puede hacer un estudio minucioso si determinada ley penal está realmente
cumpliendo con los fines para los cuales fue creada, analiza la eficacia de la misma a
través de las estadísticas de delitos que han sido cometidos desde su creación o reforma,
es decir que la Política Criminal hace una revisión del ordenamiento jurídico vigente y
busca proponer nuevas medidas y mecanismos que se ajusten a las necesidades de la
población y que vayan de la mano con los derechos y garantías constitucionales. La
Política Criminal también permite que se analicen los tipos penales que están descritos
en las leyes penales, de los cuales puede que estén vigentes más no todos son positivos
por diversas razones como los factores sociales que han ido variando fueron dejando de
ser aplicables en la actualidad para que se regulen nuevas relaciones jurídicas y esos
aspectos son los que deben ser tomados en cuenta por los legisladores para realizar una
modernización completa de las leyes penales que están vigentes.
CRIMINOLOGÍA Y POLÍTICA CRIMINOLÓGICA

2.1 Criminología

La Criminología es una importante ciencia que ha sido difícil definirla a lo largo de la


historia ya que puede ser multidisciplinaria y que reúne criterios de diferentes
profesionales en diferentes ciencias por lo cual ha sido difícil que se haga una definición
en donde todos estén de acuerdo.

2.1.1 Definición

Para definir la Criminología se han presentado tantas como autores quieran llegar a una
definición que reúna todos los elementos necesarios para comprender a cabalidad en qué
consiste la misma. La primera definición que se indica es la manifestada por el
destacado Rafael Garófalo citado por Luis Rodríguez Manzanera define a la
Criminología como “la ciencia del delito”.19 Esta definición es lacónica pues tiene un
fondo filosófico que en pocas palabras dice un trasfondo de lo que realmente estudia la
Criminología, sin embargo por su amplitud no reúne todos los elementos que debería
tener la definición para comprender en qué consiste la misma. Sin embargo dicho autor
indica que existen dos clases de delitos, el delito jurídico y el delito social. El delito
jurídico es el que está regulado en las leyes penales que ha sido tipificado por el Código
como una conducta antijurídica y que si alguna se encuadra perfectamente deberá ser
sancionada conforme a la ley. 19 Rodríguez Manzanera, Luis. Op. cit., página 7. 40 El
delito social es cuando se afecta los valores morales de la sociedad y que dependerá de
la sociedad dentro de la cual se violente el bien jurídico. Quintiliano Saldaña indica en
su obra “Nueva Criminología” que la Criminología es “la ciencia del crimen o estudio
científico de la criminalidad, sus causas y medios para combatirla”.20 La definición
anterior incluye elementos de estudio de la Criminología y ve a esta como un medio
para combatir a la criminalidad, buscando la prevención de la misma a través de medios
adecuados para lograrlo. Don Constancio Bernaldo De Quirós define a la Criminología
como una ciencia, porque reúne todos los elementos como principios, método, objeto de
estudio y fin que debe tener toda ciencia y al mismo tiempo incluye en su definición que
dicha ciencia se encarga de tres elementos importantes, en primer lugar se tiene al
delincuente en todos sus aspectos y como sujeto activo del acto delictivo; en segundo
lugar hace alusión a que son ciencias de relevancia las que intervienen dentro del
estudio del fenómeno criminal: el Derecho Penal como ciencia del delito; la ciencia del
delincuente, que es la Criminología por ser sujeto activo del delito; y la Penología como
ciencia de la pena, por ser el efecto inmediato que conlleva el actuar de una persona.21
Lo que se deduce de la definición anterior es que hay una integralidad en el estudio de
la Criminología y no sólo se limita a estudiar el acto delictivo aisladamente pues el
delito conlleva una serie de fenómenos que provocan el mismo, desde aspectos sociales,
psicológicos, económicos y políticos hasta fenómenos biológicos de la persona. 20 Loc.
cit. 21 Loc. cit. 41 Göppinger citado por Luis Rodríguez Manzanera indica que la
Criminología “es una ciencia empírica e interdisciplinar. Se ocupa de las circunstancias
de la esfera humana y social, relacionadas con el surgimiento, la comisión y la evitación
del crimen, así como del tratamiento de los violadores de la ley.”22 El enfoque de
Göppinger era que el estudio de la Criminología recaía tanto en la persona criminal
como en el ambiente en donde se desenvolvía y es ahí donde la sociedad también
influye como entorno propicio para la comisión de delitos. Además indicaba que dentro
de la Criminología se incluía la evitación del crimen, es decir que le da un enfoque
meramente preventivo y no represivo, y como iban a ser tratados los infractores de la
ley, y en este caso se pretendía que el mismo fuera adecuado a cada persona según el
delito o crimen que haya cometido. Se tiene asimismo la definición del argentino José
Ingenieros quien indica que la Criminología es la “ciencia multidisciplinaria que estudia
la conducta humana peligrosa, constituya delito o no, tanto de los casos en forma
individual como de los fenómenos de masa”.23 José Ingenieros manifestaba la
importancia de que la Criminología se integrara con otros conocimientos que las
ciencias aportan pues para estudiar el actuar del ser humano se presentan diferentes
elementos que hacen un estudio complejo y minucioso del comportamiento humano.
Además mencionaba algo interesante, la conducta a estudiar por la Criminología debía
tener como característica la peligrosidad, aun si estuviera o no constituida como delito
dentro de la legislación penal, es decir que para dicho autor la peligrosidad formaba un
aspecto importante de estudio y asimismo de cómo debía ser tratada y prevenida, y si
esa conducta era cometida por un sólo individuo o bien sea por un grupo de individuos
y los efectos que dicha conducta conllevaría dentro de la esfera social. 22 Ibíd., Pág. 9
23 Estudio Criminal, “Criminología – Definición”, no consta el autor ni el año,
Argentina, disponible en página web:
http://www.estudiocriminal.com.ar/criminologia.htm consultada el 15 de agosto de
2014 42 Para concluir en el tema de definiciones, una de la más completas es la
proporcionada por Antonio García-Pablos de Molina quien indica en términos concisos
y concretos lo siguiente: “ciencia empírica e interdisciplinaria que tiene por objeto el
crimen, el delincuente, la víctima y el control social del comportamiento delictivo; y
que aporta una definición válida, contrastada y fiable sobre la génesis dinámica y
variables del crimen – contemplado este como fenómeno individual y como problema
social, comunitario-; así como sobre su prevención eficaz, las formas y estrategias de
reacción al mismo y las técnicas de intervención positiva en el infractor.”24 Esta
definición reúne una serie de elementos que completan en su mayoría el estudio que
realiza la Criminología, desde sus causas hasta su forma de prevención e indica que es
un fenómeno que afecta meramente a la persona criminal como a la sociedad o
comunidad en donde se origina el mismo. Dicho autor manifiesta que es menester que
haya formas de prevenir el delito pero que sean eficaces y capaces de entrar en la mente
de las personas para que sepan que su actuar no es adecuado y que podría ser castigado.
Establece que las medidas que se utilizarán deben ser utilizadas para reaccionar en
contra del delito o el crimen y qué técnicas positivas serán empleadas sobre el infractor.
Dichas técnicas se interpretan como medidas de tratamiento que integren al infractor
nuevamente a la sociedad y no sea estigmatizado por la misma a fin de evitar la
reincidencia criminal. De forma deductiva se establece que la Criminología es la ciencia
empírica y multidisciplinar que enfoca su estudio en el criminal y el entorno en el cual
se desenvuelve, desde su interior hasta su exterior, y la forma en cómo se manifiesta en
su entorno social; ve el crimen como hecho normal que sucede en las sociedades y
busca y propone las formas y mecanismos para prevenir la criminalidad a través de un
tratamiento positivo del criminal o delincuente. 24 García-Pablos de Molina, Antonio,
“Tratado de Criminología”, Tomo I, Argentina, Editorial RubinzalCulzoni, 2009,
página 35. 43 2.1.2 Objeto El objeto de estudio de una ciencia debe ser claramente
determinado para que de esa manera se especifique qué método se empleará para
analizar todos sus aspectos, sin embargo, hoy en día se ha concluido que hay varias
ciencias que pueden estudiar un mismo objeto y eso no les hace perder su calidad de
ciencia toda vez que los estudios que de ellas deriven darán un aporte que
complementará a las otras. Ahora bien, determinar cuál es el objeto de estudio de la
Criminología ha causado diversidad de puntos de vista lo que ha creado controversia a
lo largo del tiempo. Se tiene por parte de Stanciu y Lavastigne que el objeto de la
Criminología es “sencillamente el hombre”. 25 En este sentido se hace referencia a un
objeto que puede sonar sencillo, sin embargo, el estudio del hombre requiere de tantas
ciencias como respuestas se deseen saber del mismo, además que este no debe ser
tratado como objeto sino como sujeto de estudio que interviene dentro del fenómeno
criminal. El hombre es el único que puede cometer hechos delictivos por tener
capacidad de raciocinio al momento de actuar, a diferencia de los animales que actúan
por simple instinto, y es por ello que el sistema legal se crea por el hombre y para el
hombre. Para José Ingenieros el objeto de la Criminología consiste en “el estudio de las
causas determinantes de los delitos, los actos en que se manifiestan, los caracteres
fisiopsíquicos de los delincuentes y las medidas sociales o individualizadas de profilaxia
o de represión del delito.”26 El connotado argentino indica que lo principal a estudiar
por parte de la Criminología son las causas que originan la comisión de delitos, cómo se
manifestarán los delitos, 25 Rodríguez Manzanera, Luis. Op. cit., Pág. 18. 26 Locus. cit.
44 es decir los hechos condicionantes para su comisión; estudia también los aspectos
físicos y psicológicos del delincuente, como anteriormente se mencionaba, a nivel
interno y externo. La profilaxis es definida por el Diccionario de la Real Academia
Española en términos médicos como “Preservación de la enfermedad”.27 Como se
deduce de lo anterior, José Ingenieros ve la criminalidad como una enfermedad que
debe ser prevenida, de forma social e individual y que el delito debe ser castigado o
reprimido, es decir que para él la Criminología debe tener dos enfoques: la prevención y
la represión. Para Octavio Alberto Orellana Wiarco el objeto de la Criminología es “el
hecho antisocial, o sea el ente antisocial, sea tanto desde el punto de vista individual,
como colectivo o general, así como el control social de ese hecho.”28 Como hecho
antisocial se tomarán aquellas conductas que, siendo o no delito, afectan a la sociedad.
Estas conductas serán analizadas desde diferentes ámbitos a través de métodos que cada
ciencia establece, por ejemplo la Psicología, la Sociología, la Política, entre otras. El
control social es un mecanismo que se utiliza para que las personas adecuen su actuar
dentro de los intereses generales que persigue la sociedad en su conjunto. Todos los
conocimientos aportados por las diferentes ciencias serán interpretados y relacionados
entre sí con la finalidad de estudiar al ser humano pero no en su generalidad, sino todo
lo referido a su aspecto criminal, sus causas, y sus formas de prevención. 27 Profilaxis,
Diccionario de la Lengua Española, Real Academia Española, tomo 8, España, Editorial
Espasa, 2001, Vigésima primera edición, página 1249. 28 Orellana Wiarco, Octavio
Alberto. Op. cit., Pág. 6. 45 Continúa indicando Orellana Wiarco que una conducta es
considerada antisocial por los efectos que produce dentro de la esfera social y que ha
sido ocasionada por un miembro que convive dentro del conglomerado social y que por
ende debe establecerse sobre el mismo un control capaz de adecuar su actuar conforme
lo exige el grupo social.29 Se deduce de lo anteriormente consignado que el objeto de la
Criminología es el estudio de las conductas antisociales, como aquellas que son
consideradas negativamente por la sociedad y que ocasionan un daño directo o indirecto
que deben ser tratadas y prevenirlas por medio de mecanismos eficaces. 2.1.3 Método
Según el diccionario electrónico “Definición de” el método es una palabra que proviene
del termino griego methodos (“camino” o “vías”) y que se refiere al medio utilizado
para llegar a un fin. Su significado original señala el camino que conduce a un lugar.”30
Es decir, que el método es el camino que lleva a un determinado fin para lograr algo.
Cada ciencia maneja su propio método y la Criminología por ser una ciencia también
cuenta con su propio método que proporciona teorías. Vodopivec citado por Orellana
Wiarco define la teoría como “un conjunto coherente de concepto generales, que
explican un fenómeno particular, en este caso criminalidad o desvío, es decir, qué es y
cómo existe. A nivel de conocimiento adquirido, estos conceptos generales bien pueden
ser hipótesis que más adelante necesiten verificación.” 31 29 Loc. cit. 30 Método,
Definición de, disponible en página web http://definicion.de/metodo/ consultada el 17
de agosto de 2014 31 Orellana Wiarco, Octavio Alberto. Op. cit., Pág., 8. 46 Cada
ciencia necesita tener sus propias teorías y principios, su objeto y en ese orden de ideas,
su método. Ahora bien, al hablar de Criminología no se puede hablar de un sólo método
ya que por ser una ciencia en la que concurren varias ciencias, es interdisciplinar.
Antonio García-Pablos de Molina indica que “no existe un método criminológico, sino
diversos métodos o “técnicas” de investigación. La naturaleza de objeto determinado y
las finalidades de la investigación misma determinarán, en cada caso, cuál es el más
indicado”.32 Para el caso de la Criminología puede hacerse uso de diferentes métodos,
entre ellos el científico y empírico en virtud de que esta ciencia reúne aspectos teóricos
y aspectos prácticos. Esto también ha causado mucha polémica entre las diferentes
escuelas, sin embargo se considera a criterio personal que determinar el objeto de dicha
ciencia es verdaderamente complejo toda vez que estudia al hombre la mayor parte de
sus aspectos para saber, principalmente, el por qué de su “mal actuar” pero se deduce
que el principal método que emplea es el teórico pues hace estudios complejos sobre el
criminal y la criminalidad. 2.1.4 Fin Como fin se entenderá lo que se persigue, a la meta
que se pretende llegar y es el punto al cual se anhela llegar. Para una ciencia el fin es
indicar por qué existe dicha ciencia, que pretende alcanzar. Concretamente al hacer
referencia a la Criminología Octavio Alberto Orellana Wiarco indica: “Dentro del tema
de los fines de la Criminología podemos mencionar el que atañe al papel que se le debe
asignar a esta ciencia en cuanto a la contribución al desarrollo de cada sociedad, es decir
para algunos la criminología y los métodos que se aplican al conocimiento del objeto de
esta materia no debe limitarse a investigar la génesis, efectos e impactos que la
criminalidad produce en cada sociedad, sino que 32 García-Pablos de Molina, Antonio.
Op. cit., Pág. 280. 47 la metodología que se emplee permita entender el significado de
los fenómenos con el fin de trascender su explicación causal e identificar el papel que
desempeñan dentro de la estructura social compleja que forma el todo, no solo en un
momento determinado, sino en los estudio sucesivos de su desarrollo temporal.” 33
Como bien dice el autor, la Criminología ayudará al desarrollo de la sociedad siempre y
cuando sea bien aplicada pues si no se hace uso ella será en vano su existencia, es como
que si una persona se encuentra enferma y hay doctores que pueden estudiar su
enfermedad, dar un diagnóstico y recetar ciertos medicamentos, pero no acude a ellos,
será en vano los estudios avanzados de medicina que se hayan realizado acerca de su
enfermedad. Lo mismo, los criminólogos y las diferentes escuelas de todo el mundo se
esmeran elaborando estudios avanzados para determinar las causas de la criminalidad
pero si no se hace uso de estos estudios, es en vano tanto esfuerzo y por ende las
sociedades seguirán igual, con ese mal que las subyuga. La Criminología no se limita a
estudiar el núcleo del delito sino que va más allá de eso y hace un estudio de cómo se
estructuran las causas dentro de la sociedad, cómo están arraigadas, y les da un
seguimiento constante. Según Luis Rodríguez Manzanera la Criminología “es una
ciencia de aplicación práctica. Busca antes que nada el conocer las conductas
antisociales y sus factores causales para evitarlos, para combatirlos, no se completa en
la comprensión de las conductas antisociales mismas, sino que trata de prevenirlas. No
busca la represión, sino la prevención.” 34 Según el referido autor, el fin de la
Criminología no es reprimir sino prevenir las conductas antisociales que se enraízan en
una sociedad no pretende castigar o reprimir a diferencia de la Política Criminal. 33
Orellana Wiarco, Octavio Alberto. Op. cit., Págs. 13 y 14. 34 Rodríguez Manzanera,
Luis. Op. cit., Pág. 31. 48 Por prevención se entiende cómo evitar u organizarse en
contra de algo que se prevé pueda suceder y con ello evitar que sucedan otras
situaciones ulteriores y esto es lo que acusa a la sociedad guatemalteca pues se espera
que las cosas sucedan para poder actuar, es una sociedad reactiva y no proactiva y ese es
el error que cometen muchas sociedades en relación a su forma de actuar en contra de la
criminalidad. 2.1.5 Clases Los estudiosos han elaborado un listado concreto acerca de
las clases de Criminología que se pueden manifestar, y para ello se hace relación a lo
indicado por Manuel López Rey quien indica que la Criminología tiene cuatro tipos o
clases y que se diferencian en cuanto al contenido y función que cada una tiene, a
saber:35 a) Criminología Científica: Según López Rey, es un “conjunto de
conocimientos, teorías, resultados y métodos que se refieren a la criminalidad como
fenómeno individual y social, al delincuente, a la víctima, a la sociedad en parte y, en
cierta medida, al sistema penal.”36 Esta criminología es la que estudia todos los
elementos que se refieren al crimen, desde la persona autora del crimen hasta quien
sufre el mismo (víctima), también hace referencia a la criminalidad como conjunto de
actos antisociales que se cometen en un lugar y tiempo concretos. Indica Rodríguez
Manzanera que también podría llamársele a esta Criminología como teórica37 a lo cual
se le da la razón porque al decir “Criminología científica” es como quitarle su aspecto
de ciencia y ya ha quedado expuesto en páginas anteriores que la Criminología es una
ciencia por lo cual se hace un pleonasmo en dicha terminología y se considera más
acertada la denominación hecha por el doctrinario Rodríguez Manzanera ya que hace
aportes doctrinarios principalmente. 35 Ibid., Pág. 12. 36 Loc. cit. 37 Loc. cit. 49 b)
Criminología Aplicada: Según López Rey “está constituida por las aportaciones de la
Criminología científica y de la “empírica”, creada por aquellos que forman parte del
sistema penal”.38 La Criminología aplicada es una combinación de lo teórico con lo
empírico, considerado aquello como lo que se conoce de Criminología por parte del
sector social, de justicia y de aquellos medios masivos que no tienen conocimientos
científicos de la Criminología pero que viven de cerca lo que sucede en la realidad
social haciéndola sin fundamento científico sino más bien práctico. Entre ellos se puede
mencionar a los jueces, fiscales, policías, legisladores, entre otros. A criterio personal se
puede relacionar con lo manifestado por el respetable argentino Eugenio Zaffaroni sobre
la criminología mediática frente a la criminología académica. Indica dicho autor lo
siguiente: “La criminología del común de las personas. En tanto que la criminología
procura acercarse a la realidad social por vía de un saber más depurado (lo que en
verdad no siempre consigue), la criminología mediática construye la realidad por lo
general desentendiéndose de esos esfuerzos y a ella es a la que accede el gran público,
aunque quizá sería más exacto decir que es la que se le inyecta al común de las
personas. Por otra parte es la criminología que el discurso único de medios impone a los
políticos”.39 Es lo que sucede en la realidad, que ambas criminologías es difícil que
estén de acuerdo pero no es una tarea imposible, lo que se debe realizar es conjugarse
para que puedan cumplir su función de prevención del crimen, pues separadas lo único
que harán es contradecirse y criticarse mutuamente. Concretamente los criminólogos
deben tomar en cuenta lo que sucede en la realidad al momento de estudiar las
diferentes teorías y asimismo los creadores y aplicadores de las leyes deben de tomar en
consideración para poder prevenir eficazmente la criminalidad. 38 Loc. cit. 39
Zaffaroni, Eugenio Raúl, “La palabra de los muertos, conferencias de criminología
cautelar”, Argentina, Editorial Ediar, 2011, página 4. 50 Rodríguez Manzanera indica
“que la Criminología aplicada alcanza su más alto nivel en el momento en que pasa a
integrar, junto con otras disciplinas, la Política Criminológica.”40 c) Criminología
Académica: Está constituida por las obras y estudios que se realizan y que son para
difundir el conocimiento entre la sociedad acerca de la importancia que la Criminología
tiene dentro del control social. Su finalidad consiste en enseñar académicamente todo lo
relativo a la ciencia de la Criminología. También puede considerarse aquí lo relativo a
las carreras universitarias donde se puede obtener un técnico y/o una licenciatura en
Criminología. En Guatemala son pocas las universidades que ofrecen una carrera de
Criminología, tal y como se mencionaba anteriormente por los autores Madrazo
Mazariegos, sin embargo actualmente se ha estado integrando el curso de Criminología
en algunas carreras. Además otro aspecto a evaluar es que los políticos no toman en
cuenta los conocimientos que ofrece dicha ciencia y es aplicada en otros países como
Estados Unidos de Norteamérica donde sí está desarrollada y es tomada en
consideración por quienes crean las leyes y por quienes la aplican, que en ese caso
serían los juzgadores. Éste tipo de criminología es meramente descriptiva en virtud que
busca desentrañar el sentido que tiene dicha ciencia en la vida cotidiana y los efectos
que la misma conlleva, por lo que debe utilizarse un método adecuado para su
enseñanza hacia diferentes sectores. d) Criminología Analítica: Ésta Criminología es la
que se encarga de velar y fiscalizar que las otras clases de criminología estén
cumpliendo su cometido. Al respecto dice López Rey: “Su existencia se halla justificada
por razones científicas y políticas a fin de evitar las frecuentes desmedidas pretensiones
de la criminología 40 Rodríguez Manzanera, Luis. Op. cit., Pág. 12. 51 científica, la
conocida insuficiencia de la aplicada, la frecuente superficialidad de la académica y los
errores de la política criminal.”41 De lo anterior se deduce que ésta Criminología no
solo determinará si las otras cumplen su función, sino que también incluye a la Política
Criminal la cual se conjuga dentro de un buen sistema de justicia. Examina cada detalle
de la Criminología, desde lo que se hace hasta lo que se deja de hacer para así poder
construir una buena base criminológica y los cambios que ocurren cuando se modifica
algún aspecto.

4ta. Semana: Modernas tendencias y proyecciones de la Política Criminal

Globalizació ! Pol"#ica C$i%i al.&. Pol"#ica C$i%i al ! D'$'c(o P' al


)* cio ali+#a.,. Pol"#ica C$i%i al ! D'$'c(o P' al +i%bólico.4. Pol"#ica
C$i%i al ! D'$'c(o P' al -'l ' '%i o.
Los procesos de globalización se han extendido a nivel global en el ámbito económico, político, cultural
y tecnológico.Como en anteriores revoluciones industriales, han impuesto su modelo económico
apoyándose en la ideología delpensamiento neoliberal de la eficacia tecnocrática y del beneficio.La
globalización ha influido en la criminalidad, el sistema penal ha tenido que adaptarse a los nuevos
tiempos influyendo en la concepción teórica del !erecho "enal. #$. el !erecho "enal simbólico o en el
!erecho "enal delenemigo. #n este tema estudiaremos las %ltimas corrientes que se están extendiendo
universalmente, así como elmodelo económico, cultural e ideológico que las inspira.
1. GLOBALIZACI/N Y POLÍTICA CRIMINAL
E la 0$i%'$a $' ol*ció
industrial tiene como paradigma la máquina de vapor y la sustitución de la traba$o manualpor la
maquina industrial &'ábricas de te$idos(. )e desarrolla en la *poca del estado liberal, hasta el nacimiento
delestado de democrático+ se caracteriza por la migración del ámbito rural al urbano. #sclavizados y
ni os explotados.
E la +' * -a $' ol*ció
el paradigma es la cadena de producción el*ctrico, el prototipo es la fábrica deautomóviles &'ord(.
Clases sociales donde no hay explotación, sino que son clases traba$adoras con sus
condicioneslaborales &vacaciones, horas marcadas(. Constituye el desarrollo del estado social. )on
sociedades de pleno empleo.
La #'$c'$a $' ol*ció
apareció con la revolución tecnológica en el ámbito de la comunicación. )e reducen lasdistancias por los
transportes y la comunicación. &tel*fono, antenas, tv, fax-( ambi*n aparece unainternacionalización
de la economía.
D')i ició lobalizació 2
#s una transformación del mundo en ámbitos de la economía, política, tecnología y cultura. )e produce
un efectofundamental de dependencia, que comienza por el económico y acaba en el político. odo
movimiento económicotiene unos su$etos que están detrás y siempre se crea una ideología que
políticamente favorezca a la revolución.Los beneficiados de la globalización son las grandes
multinacionales. Con mayor poder económico que las peque asfamilias burguesas de la primera
revolución industrial. /ecesitan extender su mercado fuera de su frontera, creandoproductos consumidos
en todos los países, apoyándose para esto en las telecomunicaciones y la información
3Có%o i ci-' la lobalizació ' la 0ol"#ica
La ideología de la globalización necesita que las multinacionales abran los mercados al exterior para
obtener másbeneficios, implantar su modelo económico y ser más competitivas las multinacionales
necesitan una ideología quedetermine la libre competencia, menos restricciones &los tributos,
medioambiente y la mano de obra(,desregularización o eliminando la legislación que suponga aumentar
las costos de sus productos &a nivel impositivo,0yo no pago tributos al montar la empresa y a cambio te
doy riqueza1(.#s la ideología neoliberal económico incide en

La libre competencia

#liminación de la legislación no beneficiosa.

"refieren democracia.

2egulan el intervencionismo del estado, como por e$emplo en mayor seguridad ciudadana.#s una
ideología se basa en la eficacia científica, ya no son necesarios los políticos, sino tecnócratas que
decidiránsobre la capacidad científica de crear riqueza y organizar a la sociedad, todo basado en un
mayor beneficio. )eprefiere la privatización de todos los servicios, cada uno que pague lo suyo.
Poco a 0oco +' -'bili#a 'l '+#a-o 0o$


#fecto del poder de las multinacionales reduce el poder de intervención de los estados.

3rganizaciones internacionales como el 4#, bancos- tambi*n restringen el poder del estado.La
globalización tambi*n afecta la cultura, las 5C provoca una homogenización del mundo y los poderes
políticos.La criminalidad tambi*n ha adquirido una perspectiva global. La ideología de la globalización
'+#5 i )l*!' -o ' la'labo$ació la+ o$%a+ 0' al'+
, en la construcción del sistema penal desde un punto de vista práctico y teórico

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