Las regiones y la globalizacién:
reflexiones desde la antropologia mexicana
Guillerma de la Pefia
Resumen
Ni la globatizacidn tiene un significado univoco, ni sus efectos son nedenarta-
mente let homogeneizacion @ muttiplicacion de diversidades. Desde tal perspec
fiva, se examinan las efectos del establecimiento de una economia miandiiad ¥
una cultura tnformetizade y ubicwa sobre tos estudios regionales en Méaico, en
particuler en fas disciplinas antropaidgicas. Se revisan los estudias
anirapaldgicos de la regidn que parten de cuatro dagulox: productive, distribu-
tivo, politica ¥ cultural,
Alamemoria de [Leriberto Moreno, estudioso de regiones agrarias
EL FUTURO ZINCHtIO? DE LOS ESTUDIOS REGIONALE
‘fal vez la palabra mas usada en los articules y libros publicados por los
antropdélagos soeiccullurales en los tiltimos diez aiios sca globaligacién.
Noes sorprendente: el proceso al que se alude con (al (6rmino esté obligan-
do a muchos estudiosos a replantear sus perspectivas y objetos de investi-
gacidn, Es diffcil, hoy, “recortar™ una localidad o una regi6n para examinar
con intensidad lo que ahi “dentro” pasa. Parecerfa, mds bien, que nuestros
objetos de estudio, de manera creeicnte, serdn las “zonas de contacta” so-
‘re las que escribe Mary Louise Pratts:' los encuentros multidimensionales
entre actores heterogéneos y culluras disimbolas. En ellos, paraddjicamen-
* Mary Louise Pats, Pmpevind epee. Travel wrvaing ane transculturitirm, Landres, Routledge, 199238 ESCUDINS BEL HOMBRE
te, convive junto a la diversidad ruidosa una tendenciaa la homogeneizacién:
vemos, aqut y alld, los mismos diseftos de playeras, los mismos relojes
desechubles, la misma comida chatarra, la misma parafernalia informatica“
El propio conceplo de globalizacién acarrea una caravana de significa-
dos. Si bien, como lo ensefian Wallerstein o Palerm,? el fenGmeno comensd
desde la constilucion del “sistema mundial”, hoy adquiere caracterfsticas
superlativas. La tecnologfa de la informavion y la comunicacién permite un
cambio sin preecdentes en la eseala de Ja inlterdependencia econdémica. La
olerta y la demanda operan a velocidades vertiginosas: mediante la Internet
se ercan o destruyen mereados, ingluso se forlulecen o subvierlen gobier-
nos. (En Méxiou, en 1994_ cl prt gund en las urnas; pero los inversionistas,
al sacar su dinero del pats, volaron cn contra de G1 y suscitaron la magna
crisis de diciembre de ese mismo afie.) Al desplazamiento de valor
s, mer
cancfas y personas corresponde el desplazamiento de la releyancia politica,
Ja dehilidad —y nueva conflictividad— de las tronteras, la fragilidad del
Estado nacional. Se construyen nuevos contextos hegemGnicos, en niveles
insospechados, que subyierten las territorialidades bistéricas. En Europa,
el surgimiento de un bloque politico-econdmice de dimensién continental
vuelve viable la disputa “‘razonable™ por Ja soberanfa dentro de los estados
(piénsese en las demundas de Eseocia frente a Gran Bretafa, 0 de Catalufia
frente a Espafia). En América Latina, la vinculacidn entre la legitimidad
estatal y el discurso sobre “Io nacional- popular” parece haherse roto en mil
pedazos. ¥ “lo papular” pierde sus connotaciones de “autenticidad” y “pro-
fundidad” para disolverse en las (jlamentables? jregoeijantes?) “culturas
hibridas’ que analiza Néstor Garefa Canclini*
No abundemos en lo conocido. Bs pertinente pregumtarnos cémo nues-
iros esquemas de investigacion se ven alectados por los desuaffos que impo-
ne el “pensar globalmente”. En particular, me interesa preguntarme qué
estd pasando y puede pasar con Jos estudios regionales en México, sobre
todo los de antropologia regional. La cuesti6n no es menor: e] concepta de
# Jonathan Fuednan, “Being inthe workl; Globalization and Kecabzauon”, Theory Citare & Society, vel,
7.1000, pp. M11 328
*Tiumanuc! Wallerstein, The modem world xystem, Nueva York, Acatemic Press: 1974; Angel Palerm,
Autrapotagta ysnansiema, Mésico, erin aal
“Nini Gin fa Canin, Cudtirias ear ba
jueva Irnagen, [!40.
gladeatizarider, CaLAS RECIONES ¥ EA GLIAL FEARS: ay.
regién nu sélo “es bueno para pensar”, como dice Eric Yan Young? sino
ademas ha sido tal vez clave en Ja historia de la antropologia sociocultural
mexicana.* Desde sus inicias, Ja disciplina ha buseada trascender los estu-
dios. puramenty localiglas, “de comunidad”, para situar los fendmenas ob-
servables cn un contexto amplio de organizacién del espacio, lo que ha
permitido entender la diversidad y el dinumismo del conjunto nacional.
Asi, lejos de concebirse como estiticas, lus regiones se constituyen en ob-
jetos cambiantes, cuya natoraleza se define por el problema cuyas dimen-
siones espaciales quicren invesligarse,
Podemos, entonces, relerirnos a cualre tipos de estudio regional en
nuestro pais, qué corresponden a igual mimero de probleméticas acotadas,
aunque interdependicates. El primer tipo se centr en los sistemas produe-
tives regionales; cl segundo, cn los mercados regienales de productos y de
trahajo; el tarcero se refiore a los sistemas de dominacién regionals y el
cuarto a los patrones regionales de cultura, {Las cuatro problemiticas de-
ben refornyularse en términos de Ja globalizacidn? De ser as
de los estudios regionales? Mi hipdtesis es que continuaran siendo una he=
rramienta privilegiada en la comprensién del cambio social, mientras no se.
caiga en Convepciones reificadas y se mantenga el interés por la historicidad
y la contingencia de las formas de organizacidn espacial.
ud quedard
CAMBIOS EN LOS HSPACIOS PRODLICTIVOS
Bryan Roberts? definié de manera sucinta los espacios productives como
encadenamientos horizentales de instituciones, avtividudes y relaciones
sociales. A partir del siglo xvi se consalidé oh México Cy on Otros pafses de
América Latina) un pawén o modelo formalizado de tales encadenamien-
tos, que mostraria una sorprendente persistencia. Los com ponentes
* Ene Van Young, “Intradtaction: Are regions g bel to think™
1 lla, Center fin GS Meaican Suulies, ues, 194
erino Ue la Peila, "Lis estatline epinnales ¥ a antiop en MMinica”. Reteciawes. Lomas
de Hsin y Sacieuie, nian, & 2 LColewiode Michoueda, 1981, pp. 43-9 mienia autre, "Poker Loe
povier i egal scion 11 Jorge Paahoa y Alnin Vannepl feomnps.), Peder tact, poder
regional, México, [] Colegio de Méxicofcmica, INR
"Bryan Roberts, “Estado y regimen Anérica Latina”, Refactones, Extafios de Historia y Socieubad, win 4,
Zowiona, Bl Calegia ile Michensin, 188, pp. 2-40
cn Mexico's negiona. Coiponnatiee histoey toned
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