Cambios cognitivos
Confusión y desorientación
Cambios psicológicos
Cambios en la personalidad
Depresión
Ansiedad
Comportamiento inadecuado
Paranoia
Agitación
Alucinaciones
Causas
La demencia implica el daño de neuronas del cerebro, que puede ocurrir en distintas áreas. Por
esto, afecta de manera diferente a cada persona según la zona cerebral dañada.
Las demencias a menudo se agrupan por lo que tienen en común, como la parte del cerebro
afectada o si empeoran con el tiempo (demencias progresivas). Algunas demencias, como las
causadas por una reacción a medicamentos o a una deficiencia de vitaminas, pueden mejorar
con tratamiento.
Demencias progresivas
Los tipos de demencias que son progresivas y que no son reversibles comprenden los
siguientes:
Algunos factores genéticos pueden hacer que algunas personas tengan más probabilidades de
padecer la enfermedad de Alzheimer.
Demencia vascular. Este es el segundo tipo de demencia más frecuente y ocurre como
resultado del daño de los vasos que irrigan al cerebro. Los problemas de los vasos sanguíneos
pueden ser consecuencia de un accidente cerebrovascular o de otras enfermedades de los
vasos sanguíneos.
Demencia con cuerpos de Lewy. Los cuerpos de Lewy son depósitos anormales de proteína
que se han hallado en el cerebro de las personas con demencia con cuerpos de Lewy,
enfermedad de Alzheimer y enfermedad de Parkinson. Este es uno de los tipos de demencia
progresiva más frecuentes.
Enfermedad de Huntington. Esta enfermedad que ocurre por una mutación genética hace que
se pierdan ciertas células nerviosas del cerebro y de la médula espinal. Los signos y síntomas,
que comprenden un deterioro considerable de las habilidades cognitivas (del pensamiento),
suelen aparecer entre los 30 y 40 años.
Según la parte del cerebro lesionada, este trastorno puede causar signos y síntomas de
demencia, como depresión, carácter explosivo, pérdida de la memoria, movimientos sin
coordinación y alteración del lenguaje, así como movimientos lentos, temblores y rigidez
(parkinsonismo). Los síntomas tal vez no aparezcan hasta muchos años después del
traumatismo sufrido.
Los signos y síntomas de esta enfermedad mortal suelen aparecer cerca de los 60 años.