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La inestabilidad de lo real en la ciencia de la historia: gargumentativa ylo narrativa? ALFONSO MeNDIOUA Departamento de Historia/u RESUMEN Ese ensayo forma parce de una investgacin sobre el giro historiogréfico, momento en que el historiador, en canto que productor de textos de Ja operacisn historiogéfica del siglo x, pues muestra que Ia investigacién histérica no existe en sf mis medio de un Iimive (0 fionvera) que se consttuye con el 1a racionalidad de la sociedad actual Tae Unsraste Reas w Te Sciecr oF HsTOR? Arcumencarrie aor Naxaartve ‘This ey i a part ofan investigation of the historiographic turn of events, there the hitrian, asa producer of bstrical tec. conceives bimselfas a cori y Gralla, UA, nim. 24,2005, ‘irial being. In ther words, when history. as knowledge, Becomes eware ‘that is aio apart of history: the history of writing abou bitory The 1970s dicussion around this fact indicated a change in the self-dsriptive ‘quali ofthe 19 Century: histringraphie operation, given shat the pase conaraced by histori invetgason it does not exis in and of itelf bug within he Kmits or boundries) ofthe present. The application ofa theo. reid model revels thee limits which give rise tothe past. Therefore, che as appear as past ~in history only when the theaesical model (or ratio. nal) jefe is limit: the past i thas which cannot be explained from ‘epreemt. Since the histiographic burn of events, history ceased being the -udy ofthe paso become the erisciom ofthe rationality of today society ‘Una de estas experiencias afirma que inicamente las teo- las socioldgicas muy abscractas y de construccién muy compleja pueden hacer hablar al material histérico, El camino que conduce hacia lo concreto exige desviarse hacia la abstracci6n. Nildas Luhmann ‘Das Tiras De NARRACION: DE LA MORALEJA A LA CIENCIA la medida en que nuestra reflexi6n se sitda en Ia historia 0, tin mejor, desde la historia como un saber espectfico (y por «x0 distintoa ots), estamos obligados a regimnos por sus propios procedimmientos de investigacién. El primero y central es el que ‘guia, y podriamos decir también que limita, nuestro ensayo. Esa ‘operacién espectica, que permite diferenciar a la historia de orros saberes, es la de construir conceptos cuya pertinencia esté derer- ‘minada por dos factors: lo geogrdfico (lo espacial cualiativ) y lo ‘temporal (las cxperiencias sociales del tiempo). Los conceptos de Ja disciplina moderna de la historia s6lo son vilidos cuando se circunsctiben a una época y un lugar espectficos.' Por esto es in- * ara profundinar en lon coneeptosndexicales dela historia se puede const 98 / Alfonso Mendiola (pues de otra manera seria imposible conscruir conceptos histéri- ‘cos de nacrar): narrar-y lo mismo se podria decir de argumentar~ cs realizar una comunicacién y no una percepcién, La narracién 0 argumentacién contienen elementos empi tanto que estin contenidos en comunicaci aque cada sociedad hace expresable lo e en sus recnologlas de la palabra. De estas dos premisas se infere la tercera, probable- mente la que caracteriza de m: historia: silos conceptos histéricos son validos de manera limita- da, y ademés se presentan en comunicaciones, podemos afirmar que la historia construye una realidad que sélo es tal para un ob- servador, es decir, que el historiador habla de realidades que sélo son tales para una sociedad determinada. Al penser, desde la perspectiva de un oficio, la operacin his- toriogrdfica actual, debemos precisar dos cosas: primera, el tipo de régimen de historicidad a que nos referimos al preguntar por el estilo cognitivo de a historia y, segunda, cudl ¢s la intencionalidad de narrar en el régimen de historicidad moderno.? 1a posibilidad de contest del estilo cognitivo de la antemano, una serie de cé:minas. Primero es necesario del lo que se entiende por conocimiento de la ciencia histé discurso histérico occidental ha existido basica, mas no exclusiva- ra mas clara a la ciencia de la {Jean-Claude Passeon, Le ezonnementsocilogique. Lespace non poppérien dt ‘asonnementnaverd, Pats, Nathan, 1991 7 Para profundizaren el concepte de regimenes de historcidad se puede con- sulkar el excelente libre de Frangais Hattog, Régimes dhisorcsé. Prévntiome et exptriences da temps, Pars, Sel, 2003. ‘a inestabildad de loreal en la ciencia de fa historia. 99 mente, en dos registros dstintos: la historia en su forma de macs. tra de vida y la historia como ciencia. La primera describe los acontecimientos como eventos “genéricos” 0 “ejemplares’, pues ‘en ningtin momento pretende dar cuenta de ellos en su contin- .gencia y particularidad.} Aquello que se catacteriza como historia, de la Ancigiiedad clésia a principios del siglo xvi, comprende discursivamente los hechos l subsumirlosen relatos ya conocidos por la comunidad de sus lectores u oidores. No debe entenderse que; por estar enmarcados en esquernasnarrativos previamente exs- tentes, el contenido histérico sobreviva en el sentido actual de lo histérico, pues la forma del relato que se cuenta constituye otra nocién de hecho histérico. Para la historiografia premoderna, na- trar més s{ es comprender mejor, pues lo que se persigue no es ‘comunicar informacién’ sino subsumirla en un saber compartido socialmente. Este tipo de historia tiene la finalidad de transmitir “experiencias de vida" (un saber moral) y no “informacién” (un saber cientifico) del evento.’ Debido a ello, los elementos singula- 2 Silos atbutos de contingency parscuaridad soe los que convierten a os aconteiintas en eventos hing para la cienciahisetiea moderna, polo tanto ee tipo de deur histo, propia dea sociedad europea premoderna,

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