El sitio (Business School, s/f) nos brinde la siguiente definición “Fue inventado en
Japón, como parte de la evolución de los códigos de barras dentro de los almacenes. Se
deseaba que en un único código contuviera toda la información necesaria. Su llegada a los
lineales fue provocada por aprovechar aquel código fuera del ámbito del almacén y
empresa.”
Con la llegada de los smartphones y sus cámaras incorporadas pronto tuvieron solución
y el consumidor aprovechaba esa información para decidirse por la adquisición del
producto. Con una aplicación de escaneo para códigos se le daba la facilidad al consumidor
de conocer más el producto.
Como nos indica el sitio (Geupe.com, s/f) “Los códigos 2D o QR son códigos de
imágenes que pueden ser in-terpretados por los Smartphone mediante aplicaciones diseñado
para ello. Gracias a ellos se obtiene y guarda información de muy distinta índole, desde url,
números de teléfono y direcciones, ofertas, cupones, etc.”
Fuente: https://www.ceupe.com/images/easyblog_images/130/bidi.jpg
El cliente conoce las ventajas del código QR, conoce que al leer este código se
encontrará con algo más, y la curiosidad de saber lo que se esconde detrás de este dibujo
extraño es suficiente motivo para pasar el lector sobre él y adentrarse en la campaña.
Los códigos QR se pueden modificar. Esto quiere decir que se les puede
quitar o añadir información en cualquier momento.
Los resultados que ofrecen estos códigos son medibles al cien por cien de
forma inmediata, por lo que es posible tomar medidas en el caso de que sea
necesario. Esto permite optimizar la campaña que se esté realizando en cualquier
momento para obtener los mejores resultados.
Puedes fomentar que los clientes escaneen el código en el punto de venta para obtener
un descuento o a través de elementos publicitarios (cartelería, anuncios en revistas,
periódicos, etc).
Cómo ejemplo, Starbucks entregaba folletos a gente que paseaba por la calle ofreciendo
un descuento en sus establecimientos a través del código QR.