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Metodología Científica Aplicada

a la Investigación Criminal
(Edición 2018)
Instituto Universitario de la Policía Federal Argentina
Rosario 532
Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Argentina
http://www.iupfa.edu.ar

Autor:
Dra. Alejandra Hentschel

Coordinador Pedagógico:
Zubiaurre, Claudia

Diseño y edición
Gastou, Daniela
El proceso en la investigación criminal
Introducción..................................................................................................4
1. Sujeto y objeto............................................................................................4
2. Objetivo......................................................................................................5
3. La metodología científica en la investigación criminal...................................5
4. La investigación criminal como proceso..........................................................6
5. La hipótesis y la formulación.........................................................................8
6. El proceso de razonamiento en la investigación criminal: la inducción, la
deducción y la abducción................................................................................10
7. La lógica en la investigación criminal...........................................................13
8. Los indicios................................................................................................16
9. La investigación criminal en el sistema penal acusatorio. La acción del ministerio
público fiscal o el rol del fiscal...........................................................................18
10. Mirada institucional sobre el éxito en la investigación................................21
11. La hipótesis policial y la teoría del caso en el proceso de investigación criminal...........22
12. El principio de economía de esfuerzos o el dispendio de esfuerzos policiales.......25
13. La investigación criminal en el marco del derecho procesal penal y las garantías
constitucionales............................................................................................26

página 3
Introducción
2
núcleo
temático
dos
En este Núcleo Temático desarrollaremos a la Investigación Criminal como un proceso por ende
comprenderemos que el sujeto es el Policía o equipo de Policías en funciones investigativas,
por lo tanto, el objeto de la investigación no es otra cosa que el delito, entendido como una
actividad, un comportamiento humano, una conducta criminal determinada.

Si la investigación es la búsqueda de un conocimiento o informa- ción, se hace necesario seguir


determinados procedimientos para al- canzar tal fin. Sólo es posible lograr un conocimiento
que sea racional, sistemático y organizado, si se sigue un método, es decir un camino que se
acerva a esa meta.

La investigación es un proceso sistemático y organizado por me- dio del cual se busca descubrir,
interpretar o revisar ciertos hechos y cuyo producto será un mayor conocimiento de estos. Como
toda in- vestigación una hipótesis no se elabora o formula intuitivamente sino respondiendo a
un proceso lógico de razonamiento.

En el proceso de Investigación penal enfocada desde otra óptica encontraremos las llamadas
hipótesis policiales y en la teoría del caso, que se apoya fuertemente en la metodología científica
de la investiga- ción. Cuando hablamos de Investigación Penal inmediatamente nos remitimos
al marco legal en el cual se encuadran tanto los delitos como el procedimiento investigativo a
seguir por consiguiente considerar la importancia de la función del derecho como así también
y en el inclui- das las garantías constitucionales para un buen desarrollo desempeña de la tarea
de investigación criminal.

1. Sujeto y objeto
Si entendemos a la investigación criminal como un proceso de obtención de conocimiento,
podemos decir entonces que sujeto de ese proceso es el Policía o equipo de Policías en
funciones investi- gativas. En el otro extremo de la ecuación, encontramos el objeto
de investigación que no es otra cosa que el delito, entendido como una actividad, un
comportamiento humano, una conducta criminal de- terminada. Entonces el sujeto debe
ir hacia el objeto, acercarse al mismo para tratar de captar o asimilar su realidad. Por cierto
que la objetividad es la clave y se torna una tarea compleja cuando la investigación se
desenvuelve dentro de las ciencias sociales y más precisamente en la conducta.

“Objetividad”, significa por lo tanto la intención de obtener un conocimiento que concuerde


con la realidad del objeto, que lo explique o describa tal cual es y no como nosotros
desearíamos que fuese. Ahora bien, no podemos despojarnos totalmente de nuestra
condición humana, quitarnos nuestra carga de valores, deseos e intereses; concluiremos
entonces que es inevitable cierta dosis de subjetividad, porque para querer llegar a la verdad
es necesaria la voluntad, que se manifiesta a través de la preocupación por alcanzarla y
esclarecer lo sucedido.

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2. Objetivo
núcleo
temático
dos 2
Descriptos sujeto y objeto de la investigación criminal, nos pre- guntamos, ¿cuál es su
objetivo? Al igual que otro tipo de investiga- ciones, la investigación penal tiene como
objetivo obtener información destinada a:
• La comprobación de la existencia de un delito.
• Calificar el mismo, es decir conocer las circunstancias que lo agraven, atenúen o
justifiquen o puedan influir en la punibilidad.
• Lograr la identidad de quien o quienes participaron en la acción delictiva
• Establecer las condiciones personales de quien o quienes resulten im- putados
• Determinar el alcance del daño infringido al bien tutelado por el delito.

Vale aclarar que el Código Procesal Penal de la Nación recien- temente dictado, -el anterior
ordenamiento procesal hablaba de finalidad- nos habla de objeto1 a la hora de establecer
los fines que persigue la Etapa Preparatoria, que es determinar si resulta procedente abrir
un juicio penal sobre una o más conductas con relevancia jurídico penal. Entendemos
que existe cierta confusión entre los términos objeto y objetivo; reafirmamos nuestra idea
que, la investigación penal tiene como objeto un delito determinado sometido a estudio,
que persigue el objetivo de obtener de esa conducta toda información que ensaye su
reconstrucción como hecho histórico o sea, conocer de la mejor manera posible como sucedió.

3. La metodología científica en la investigación criminal


Dice Mancuso2: “Y siempre que el ser humano investigó, lo hizo con un método, es decir
ordenadamente, aprendiendo y rectificando de sus experiencias anteriores, remotas o recientes”. 1
Art. 195 del C.P.M.P. Ley 27.063
Si la investigación es la búsqueda de un conocimiento o información, se hace necesario seguir titulado “Objeto”.
determinados procedimientos para alcanzar tal fin. Solo es posible lograr un conocimiento 2
MANCUSO, Hugo R. “Metodología
que sea racional, sistemático y organizado, si se sigue un método3, es decir un camino que nos de la investigación en ciencias
acerque a esa meta. La metodología no es para el investigador una llave mágica, sino una simple sociales”
guía a la cual apelar cuando surge la duda o el desconcierto. Por ello, la investigación penal se -Lineamientos teóricos y prácticos
de la semioepis- temología- 1ra
debe guiar por el método científico, pues hay una manera de hacer las cosas, de plantearse las
Edic. 4ta reimp. Editorial Paidós,
preguntas y de formular las correspondientes respuestas; así quien investiga debe desarrollar Buenos Aires, año 2008.
su trabajo con orden y en forma racional; en pocas palabras, toda investigación, incluyendo la 3
Método significa: procedimiento
criminal requerirá de una sólida disciplina de trabajo.
seguido en las ciencias para
encontrar la verdad y enseñarla,
Esclarecedoras resultan las palabras de Sabino4 cuando nos dice: “La investigación es puede ser de dos maneras:
un proceso creativo, plagado de dificultades imprevistas y de acechanzas paradójicas, de analítico o sintético. Enciclopedia
prejuicios invisibles y de obstáculos de todo tipo”. Ilustrada de la Lengua Castellana,
Tomo III, Edit. Sopena, Buenos
Durante la investigación, debemos tener en cuenta dos con- ceptos que resultan primordiales. Aires, año 1967.-
El primero de ellos es la verificación, es decir la posibilidad que comprobar o rechazar por la 4
SABINO, Carlos A. “El proceso
prueba de los hechos aquellas proposiciones que se formulen. Por ejemplo si proponemos de investigación”, 2da Edic. Edit.
que el homicidio del presidente John F. Kennedy, fue ideado y ejecutado por la mafia Lumen Hu- manitas, Buenos Aires,
norteamericana, no estaremos idealizando algo que pueda ser verificado en la práctica y año 1996.-
página 5
en consecuencia afirmado o rechazado, es decir no será una proposición verificable. Una
núcleo
temático
dos 2
proposición entonces resultará verificable cuando sea posible encontrar un conjunto de
hechos que sean capaces de determinar si esta es verdadera o falsa.

El otro concepto es la inferencia o razonamiento deductivo; inferir significa sacar


consecuencias de un principio o supuesto, esas conclusiones serán válidas si el principio
también lo es. Con mayor simpleza “inferir” significa deducir. Dice Sabino5: “la inferencia
opera durante la investigación, por lo general, de la siguiente manera: una vez formulada
una hipótesis…se deducen de ella posibles consecuencias prácticas que son luego, a su vez,
sometidas a verificación”. Sirva como ejemplo el siguiente caso teórico: en un apartamento
de un edificio y cerca de un ventanal, se halla el cuerpo sin vida de una persona con una
herida de bala en la cabeza, uno de los cristales del ventanal está totalmente destruido. La
única evidencia balística halla- da en la escena del crimen es el proyectil de pistola 9 mm.
extraído del cráneo del occiso durante la autopsia. El médico legista que concurrió al lugar
informó que el OEPAF (orificio de entrada por proyectil de arma de fuego) muestra claros
signos de tatuaje y ahumamiento. Inferimos que el autor del disparo se encontraba muy
próximo a la víctima, recogió la vaina del proyectil disparado y destruyo la ventana para
simular que el ataque armado provino del exterior del apartamento. Para concluir diremos
que a este tipo de razonamiento se lo llama “modelo hipotético deductivo”.

4. La investigación criminal como proceso


Comencemos por definir a “la investigación” como un proceso sistemático y organizado por
medio del cual se busca descubrir, inter- pretar o revisar ciertos hechos y cuyo producto será
un mayor conoci- miento de éstos. La investigación criminal es una investigación cien- tífica
pues se procura que los conocimientos, datos o informaciones alcanzadas sean objetivos,
sistemáticos, claros, organizados y verifica- bles; es entonces la investigación un “proceso”
en el cual, a grandes rasgos se distinguen distintos momentos o fases que el investigador va
desarrollando a saber:
1. Momento lógico o el planteamiento del problema: El investigador procura definir que
quiere saber y respecto a que hechos; ordena y sistematiza sus inquietudes y formula
sus preguntas. Dicho de otro modo, tenemos un problema de conocimiento, precisamos
que es lo que no sabemos y debemos indagar sobre ello. Esto es el “planteamiento del
problema”. Aquí de cierta manera la investigación criminal se distingue de cualquier
otro tipo de investigación científica puesto que el sujeto de la pesquisa no cuenta con
mucho margen para la elección del objeto y su campo se muestra más acotado: es
decir no puede elegir cuál es el delito o hecho que reviste carácter de tal que va a ser
investigado. Suele suceder si, que algunos interrogantes ya estén develados y entonces
quedaran pre- guntas por formularse en torno a lo desconocido del hecho. A este mo-
mento también se lo conoce como “problematización” puesto que es la oportunidad en
que intentaremos buscar una respuesta al “problema” -en tanto acción criminal- que
será transitoria, pasajera y parcial; nos estare- mos refiriendo entonces a “la hipótesis”. 5
Ahora bien, ¿Qué se entiende por hipótesis?; clara pero sencillamente diremos que la SABINO, Carlos A. Op. Cit. sup
página 6
hipótesis es una “respuesta tentativa a un problema planteado”. Concluimos diciendo
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núcleo
temático
dos
que el éxito de una investigación se medirá por la claridad, pertinencia y precisión de
la o las respuestas alcanzadas.
2. Momento metodológico: Es el momento en que debemos fijar la estra- tegia a seguir
o mejor dicho formular un modelo operativo que nos per- mita acercarnos al objeto de
estudio y ejecutar nuestro trabajo: es decir elaborar sistemas de comprobación para
confrontar la hipótesis con los hechos. Dicho de otra manera es el momento en que
estableceremos la forma en que el problema habrá de ser verificado o comprobado. La
ela- boración de la estrategia requiere celeridad y prontitud pues el paso del tiempo
afecta inexorablemente a la investigación. No nos cansaremos de repetir las palabras de
E. Locard: “el tiempo que pasa es la verdad que huye”. Sabemos que la autoridad fiscal
es la que dirige la investigación, pero en numerosas oportunidades, el principio de
especificidad con que nos regimos en la Institución Policial nos coloca en inmejorables
condiciones para sugerir y hasta solicitar la realización de determinadas medi- das
o diligencias judiciales que en definitiva en forma implícita, trazan la estrategia que
creemos adecuadas para la resolución del caso.
3. Momento técnico: A primera vista, no parecería existir diferencias entre este momento
y el anteriormente citado, puesto que en esta etapa se abordan los procedimientos
concretos o técnicas de recolección de datos que nos permitan recolectarlos y el
procesamiento de datos que colabora en organizar las informaciones obtenidas;
no obstante son tra- bajos diferentes en la práctica de la investigación. Trataremos
a través de un ejemplo de mostrar las diferencias entre uno y otro momento, teori-
zando sobre un delito grave cualquiera que investigamos y sospechamos a una
persona determinada de su autoría. Trazamos como estrategia monitorear todos
sus movimientos; estaríamos hablando del momento metodológico.; mientras que
las técnicas usadas para llevar adelante esa estrategia, el seguimiento personal y la
vigilancia o el monitoreo a través de cámaras o la utilización de rastreadores satelitales,
ocupan el momento técnico.
4. La interpretación de los datos o síntesis: Los datos o informaciones has- ta aquí
reunidas deben ser analizadas e interpretadas adecuadamente, pues muchas veces
pueden resultar equívocas, tras lo cual arribamos entonces a las conclusiones. Podría
cerrarse aquí el ciclo del conoci- miento en el marco procesal del llamado “Legajo de
Investigación”, donde en primera instancia concluiría la investigación policial bajo
control ministerial. El Ministerio Público Fiscal seguirá con la formalización de la
investigación para concluir con la Acusación que finalmente desembocará en la teoría
del caso.

Ahora bien, puede ocurrir que el ciclo del conocimiento no haya concluido en forma
definitiva porque la información hasta aquí lograda nos puede llevar a fijar una nueva teoría
o rediseñar la hipótesis original. -que como oportunamente dijéramos es: una respuesta
tentativa a un problema planteado-. Entonces el proceso que no resulta lineal se convierte
en un ciclo que vuelve al segundo elemento reformulan- do o replanteando el problema.
página 7
Sintéticamente, el caso no ha sido resuelto o solo lo ha sido en forma parcial, no conocemos
núcleo
temático
dos 2
la identidad del imputado o solo conocemos la de algunos de ellos.

La conclusión de la investigación criminal es la transitoria resolución del problema que se


nos planteara; nos acercaremos a la verdad histórica pero nunca lograremos reproducir
la verdad íntegra de lo sucedido. Entonces la conclusión nunca podrá ser definitiva sino
hasta cierto punto será conjetural, hipotética pero lo suficientemente verosímil como para
lograr impulsar la imputación. Así ayudaremos a construir la versión de los hechos que el
representante del Ministerio Público Fiscal planteará ante el Tribunal. En cierta manera
habremos superado la duda implícita en la problematización.

Debemos tener presente que el proceso de investigación criminal se desarrolla en el interior de


la denominada etapa preparatoria, donde el Fiscal forma un legajo de investigación y al igual
que la prevención policial tienen forma escrita. En la redacción de las actas que las integren
particularmente el sumario de la prevención se utilizará un lenguaje propio de la investigación
penal pero que a la vez permita una fácil comprensión. La exposición de la investigación se debe
realizar en un estilo de lengua claro, conciso, ordenado y sobre todo mínimamente ambiguo.
Aún la retórica más eximia no podrá aclarar lo que es confuso o contradictorio.

González de la Vega6 nos aporta otro punto de vista al decir que la Investigación Criminal
es un “instrumento técnico” cuyo ingrediente fundamental es la “información” -ergo
“conocimiento- . La obtención de información estará compuesta por diversas fases a saber:
Recopilación, ordenación, clasificación, sistematización y discriminación, para cerrar con
las conclusiones. El desarrollo de estas etapas o fases resulta la tarea fundamental del
investigador. Como vemos la descripción de este “instrumento técnico” muestra enormes
similitudes con la que hiciéramos del “proceso de investigación”.

Hecha esta descripción somera del “proceso de investigación” diremos que no hay una receta
que garantice el resultado positivo para nuestro trabajo, ello es así por cuanto las dificultades
y los imprevistos son tantos que impiden alcanzar una planificación completa del proceso.
En consecuencia la labor investigativa es un trabajo donde la libertad y la creación cumplen
un rol central. Puede un investigador tener mayores dotes naturales pero no podrá escapar a
la necesidad de trabajar con paciencia, sistemáticamente, con perseverancia y continuidad;
sin ello no será posible llegar a un resultado provechoso. Las investigaciones criminales
suelen ser lentas y dificultosas, plagadas de tareas tediosas y de inconvenientes que pueden
producir desánimo. Una firme determinación por el conocimiento de la verdad -aunque
sepamos que no será absoluta- y exponerla y una voluntad orientada hacia ese fin, nos
convertirá en verdaderos investigadores.

5. La hipótesis y su formulación 6
GONZALEZ DE LA VEGA, R y otros
Etimológicamente, la palabra “hipótesis” proviene de los tér- minos griegos thesis e hipo. El op. Cit. sup
primero significa “lo que se pone”, mientras que el segundo es un prefijo que indica “abajo”.
página 8
Entonces una hipótesis será “lo que se pone abajo o se supone”. Buscando una definición
2
núcleo
temático
dos
diremos simplemente que la hipótesis es una proposición que trata de constituirse en la
respuesta tentativa al problema; decimos “tentativa” porque nada indica que ella sea la
única capaz de explicar un hecho -en tanto delito-. Una hipótesis no es una afirmación sino
proposiciones tentativas acerca de las relaciones entre distintos términos de un problema;
en el campo que nos ocupa concretamente la relación existente entre el hecho criminal y su
autor o autores.

Puede ocurrir que el investigador criminal al dar sus primeros pasos en el problema -en
tanto investigación- no formule explícitamente una hipó- tesis. Ello es posible puesto que
aún es poco claro su objeto de estudio y considera oportuno una investigación exploratoria.
Aun así debemos decir que todo movimiento en una investigación se lleva adelante bajo
la guía más o menos consiente o manifiesta de una hipótesis. Por ejemplo, al abor- dar un
evento cualquiera, no nos queda claro aún si se ha cometido un delito o si las conductas
desplegadas se corresponden con tal o cual tipo penal.

La respuesta tentativa que elaboremos funcionará como nexo entre la teoría y lo real y -para
nosotros lo más relevante- como guía de la investigación que justamente busca contrastar
empíricamente nuestros asertos -nuestra hipótesis será refutada o verificada-; caso contrario
se tratará de pura especulación. Sabino7 se hace eco de las palabras de W.I.B. Beveridge
que dice “La hipótesis es la técnica men- tal más importante del investigador y su función
principal es sugerir nuevos experimentos o nuevas observaciones”.

Siempre se puede volver a replantear o a formular otra hipótesis alternativa, que en el


contexto dado resulte más conveniente, más convincente, práctica o simple. Por ello
afirmamos que el investigador criminal tiene que estar dispuesto a dudar o a modificar
su propia hipótesis. No existen reglas mágicas para su formulación, pero la exigencia de
mínima es que la hipótesis sea: formalmente correcta; es decir no contradictoria entre los
elementos de sus términos o entre las mismas hipótesis derivadas entre si y, fundada en
conocimientos previos y empíricamente contrastables. Cabe acotar que la contrastación
ocurre por indicadores empíricos o datos empíricos contrastados, tales como un documento,
un testimonio, una pericia o una norma legal.

El problema, el marco teórico y las hipótesis de investigación resultan inseparables, por


ello hemos de dedicar algunos párrafos al segundo de estos términos. El marco teórico,
también llamado “marco referencial” o “marco conceptual” tiene como propósito ubicar el
problema dentro de un conjunto de conocimientos que debieran ser los más sólidos posibles
y que permitan orientarnos en nuestra búsqueda. Dicho de otra manera: es el acopio de
información teórica sobre temas relacionados con el delito objeto de investigación. Por
ejemplo, si nues- tra pesquisa está dirigida al esclarecimiento de un secuestro con fines
extorsivos, debemos conocer no solo las normas penales y procesales que especialmente
rigen respecto al mismo, el método seguido para la resolución de otros casos similares en lo
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que hace a la negociación, el aporte que a la investigación puedan realizar conocimientos
núcleo
temático
dos 2
científicos en el campo de la criminalística como “la identificación por la voz o voiceprint”,
las técnicas de análisis de las telecomunicaciones, etc. Sobre este concepto Bertone8 dice:
“El marco teórico es una gran estructura de contención, que recaba y aporta conocimientos ya
existentes para dilucidar hechos o fenómenos desconocidos”.
Regresamos al campo del término “hipótesis”; en función de sus objetivos y en el marco de
la investigación criminal, estas pueden ser:
a. Descriptivas, pues describen o señalan hechos, refiriéndose a sus carac- terísticas y
clasificándolos.
b. Explicativas, en este caso aluden a las causales del delito, el porqué, en este caso la
formulación debe ser lo más clara posible. Recordemos aquí el aporte inestimable a la
investigación que hace la Criminología cuando tratamos de develar el móvil del crimen.

6. El proceso de razonamiento en la investigación criminal. La inducción, la deducción


y la abducción
En el marco de una investigación, una hipótesis no se elabora o formula intuitivamente sino
respondiendo a un proceso lógico de razo- namiento. De esa forma una hipótesis puede
surgir partiendo de:

LA INDUCCION: Proceso este basado en un conjunto de experiencias u observaciones de


la cual surge una conclusión o generalización. Comienza con lo particular y va hacia lo
general. Debemos tener cuidado pues este tipo de razonamiento ha recibido críticas por
cuanto su validez depende de un numero suficientemente amplio y representativo de casos
observa- dos. Entonces la conclusión solo será “probable” y verdadera cuando sus premisas
son verdaderas. Trataremos de ilustrar con el siguiente ejemplo. Tomamos las últimas 20
sustracciones de automóviles de alta gama ocu- rridas en un área determinada de la ciudad,
en todos los casos sus con- ductores fueron desapoderados del vehículo mediante el uso
de armas de fuego por parte de los delincuentes. Concluimos que los automóviles de alta
gama solo pueden ser sustraídos mediante el uso de armas de fuego, dado sus modernos
sistemas de cierre centralizado y seguridad. Ahora bien, si ampliamos los números de casos
estudiados a 50, encontraremos que en un caso, la sustracción se efectuó desde la vía pública
mediante el sistema de remolque; entonces la conclusión se altera y debemos decir que
“muy probablemente” la sustracción de automóviles de alta gama se concreta mediante el
uso de armas de fuego.

LA DEDUCCION: A la inversa que en la inducción, el razonamiento de- ductivo es el que


partiendo de reglas o afirmaciones generales, permite hacer afirmaciones sobre casos 8
BERTONE, Fernando M y FENOLL,
particulares. Así la denominada “premisa mayor” contiene la proposición universal o regla; Alejandro M. (coordinadores)
“la premisa menor” es la que contiene el caso sometido a la regla o también llamada “Criminalística y Criminología”
proposición particular, de ellas dos se arriba a la conclusión. Mediante la deducción las implicancias prácticas de la
investigación penal Edit. Advocatus,
hipótesis se enuncian por derivación lógica de proposiciones más fuer- tes y aceptadas.
1ra Ed. Córdoba, año 2012.
Tengamos en cuenta que esta forma de razonamiento al- canza el grado de certeza y no
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de probabilidad, por cuanto si las premisas son verdaderas y se respetan las reglas de su
núcleo
temático
dos 2
derivación, la conclusión es necesariamente verdadera. Ahora bien, en la investigación
criminal la generalización no puede ser formulada tan precisamente como para con-
siderarla siempre válida.

Trataremos a través de un ejemplo muy simple arrojar luz sobre lo an- tes expuesto. Los
Cadetes de la Escuela de Policía “Crio. Gral. A. Pirker” deben tener estudios secundarios
completos. Carlos A. es Cadete del 1er Año de la Escuela “Crio Gral. A. Pirker”. Carlos A. tiene
estudios secunda- rios completos.

Agregaremos otro ejemplo, más complejo pero que nos atañe como in- vestigadores
policiales. Los disparos de arma de fuego realizados a muy corta distancia de la piel,
producen en su plano el signo denominado “Anillo o Halo de Fisch”. El cuerpo del occiso R.P.
presenta una herida por proyectil de arma de fuego rodeada del signo del “Halo de Fisch”.
Entonces el victimario de R.P. le efectuó un disparo de arma de fuego a muy corta distancia
o a quemarropa.

LA ABDUCCION: Rinaldi9 nos recuerda que para el semiólogo Umberto Eco, la abducción
es la forma de razonar del detective. En este tipo de razonamiento, la premisa mayor es
considerada cierta, mientras que la premisa menor es solo probable y la conclusión a la que
se llegue tiene el mismo grado de probabilidad que la premisa menor. A través de este razo-
namiento se trata de explicar un hecho siguiendo estos pasos:
• Se observa un hecho novedoso que debe ser explicado.
• Se busca una regla que cuando menos en forma hipotética lo explique en forma
ciertamente satisfactoria.
• Se obtienen las conclusiones que se derivarían de ello.

Trataremos a través de un ejemplo, explicitar adecuadamente este tipo de razonamiento.


En los asaltos a entidades bancarias, los delincuentes armados utilizan armas de fuego, que
pueden estar cargadas, descargadas, no ser aptas para el disparo o tratarse de réplicas; hasta
aquí la primera premisa. La segunda premisa nos dice -fruto de la experiencia- que si se
utilizan armas de fuego, es- tas se llevan cargadas. Como conclusión, habiéndose cometido
el asalto a una entidad bancaria, los asaltantes debieron usar armas de fuego cargadas.

Concluiremos este capítulo hablando del “diseño de la inves- tigación”, considerado por
algunos autores como una etapa más en el proceso de investigación, mientras que otros 9
BERTONE, F y FENOLL
lo asimilan a este. Al respecto Sabino10 nos dice: “…su objeto es proporcionar un modelo a. “Criminalística y Cri- minología”
de verificación que permita contrastar hechos con teorías, y su forma es la de una estrategia o -Implicancias prácticas de la
plan general que determina las operaciones nece- sarias para hacerlo”. Dedicarnos al diseño investiga- ción penal.- Cap. 3
de la investigación procede luego de abordar otros aspectos básicos de la pesquisa, como Lógica RINALDI, M. J. Edit. Advo-
catus 1ra Edic. Córdoba, año 2012.-
marco teórico o conceptual, hipótesis, etapas de la investigación, etc. ¿Qué significa diseñar 10
la investigación criminal? Es hacer el bosquejo de una estrategia de actividades conducentes SABINO, Carlos op. cit. sup
página 11
a la producción de evidencias, y la extracción de conclusiones que sean adecuadas desde
2
núcleo
temático
dos
el punto de vista jurídico, debiendo corroborar o refutar hipótesis. Elaborar un dise- ño de
investigación consiste en definir que pruebas de laboratorio, que observaciones y que datos
son los adecuados para llegar a la comprobación o refutación de una hipótesis. En definitiva
a través de: ¿cómo vamos a hacerlo?, se busca así alcanzar determinada certeza jurídica en
la reconstrucción del crimen investigado.

En la investigación criminal es aplicable el llamado diseño de investigación emergente; dado


que las decisiones que harán posible la investigación irán emergiendo durante el proceso,
siguiendo un ida y vuelta a partir de los dictados que surjan del trabajo observacional de campo.

Una investigación ya lo dijimos busca producir conocimiento, que equivale a información o


dato; es en función de ello que nos será útil el diseño de campo, pues los datos de interés se
recogen en forma directa de la realidad, son los llamados “datos primarios” o de primera
mano. Ahora bien, ¿Qué entendemos por dato? Dato es cada uno de los elementos de
información que se recoge durante el desarrollo de una investigación y en base a los cuales,
luego de sintetizados, podremos extraer conclusiones de relevancia en relación con el
problema inicial planteado.

El dato será colectado mediante los “instrumentos de recolección de datos”, esto es


cualquier recurso del que se valdrá el investigador para acercarse a los fenómenos y extraer
de ellos información; valga este ejemplo: indagamos sobre un delito cualquiera sucedido en
la vía pública que no fue percibido por nuestros sentidos; nos acercaremos a él a través del o
los testigos y sus testimonios. Este mismo hecho fue captado por una cámara de seguridad;
a través del análisis de las imágenes registradas por esta, conoceremos sobre su comisión.

Otro instrumento valioso es “la observación” entendida como el uso sistemático de


nuestros sentidos en la búsqueda de los datos que se necesitan para resolver un problema
de investigación. No nos referimos a la observación cotidiana, sino a la científica, es decir
orientada hacia objetos precisos de estudio, hecha en forma sistemática y con controles que
eviten errores que podemos cometer cuando la realizamos. El principal inconveniente que
presenta la observación y particularmente en la investigación criminal es que detectada
la presencia del observador, se puede provocar una alteración en la conducta de los seres
observados. En síntesis, debemos tratar de pasar lo mas desapercibidos posibles, con un
comportamiento discreto y cuidadoso. La descripta es conocida como observación simple,
y será útil y viable cuando se quiera conocer sobre hechos o situaciones que de algún modo
tienen carácter público. En forma muy sucinta nos referiremos a la observación participante,
que implica la integración al grupo o sujeto observado del observador, que así resultará
testigo de los hechos desde adentro. Una de las desventajas es el excesivo compromiso que
adopta el observador ante el objeto de estudio que puede hacer que pierda objetividad o
distorsione su percepción. Como podremos inferir, estamos hablando de aquellas actividades
que pueden desarrollar los agentes encubiertos.
página 12
La tarea de observación es una percepción activa donde debe- mos seleccionar, organizar
núcleo
temático
dos 2
y relacionar los datos referentes a nuestro problema, pues no todo tiene importancia.
Resultará inevitable re- gistrar las observaciones a través de notas, apuntes o otros medios
tecnológicos, como la fotografía o la filmación; bajo ningún concepto confiemos en nuestra
memoria y recordemos siempre que los actos en el marco de una investigación criminal se
guían por un código procesal también llamado “de rito”; por ello nuestras observaciones
deben ser debidamente formalizadas11.

Otro importante instrumento en la recolección de datos en el marco de una investigación


penal, lo constituye “la entrevista”, y consiste básicamente en la indagación hecha por
el investigador a terceras personas. Su inconveniente de mayor peso es que la persona
entre- vistada nos dará la imagen que ella tiene de las cosas, es decir “lo que cree que son”,
con una carga subjetiva de intereses, prejuicios y estereotipos. Es por ello que no resulta
el procedimiento más confiable, pero no podremos obviarlo, principalmente cuando se
trata de la propia víctima del delito. Su aplicación requiere de una especial formación del
investigador en esta técnica. Según su clasificación, en la investigación criminal se utiliza
la entrevista focalizada, pues se busca explorar a fondo la experiencia vivida por el
entrevistado o cuando el mismo resul- tó testigo presencial del hecho criminal.

Los datos ya obtenidos constituyen una masa que por sí sola difícilmente pueda esclarecer
el problema, para ello debemos organizarlos a través del “procesamiento de datos”.
Comenzaremos por una revisión detallada de los mismos para determinar su coherencia;
así buscaremos sus incongruencias, omisiones o errores y procedere- mos a enmendarnos
si ellos nos es posible; estableceremos su calidad y su grado de confianza -particularmente
aquellos obtenidos de las en- trevistas-. De esa forma estableceremos cual es el valor de
cada uno de ellos a la hora de conformar el denominado “plexo probatorio”. Volveremos
a referirnos a este tema cuando definamos términos tales como: evidencia, indicio, prueba,
medios de prueba, instrumentos de prueba, elementos de prueba.

Quedan como últimas y necesarias etapas del trabajo de inves- tigación, el “análisis de los
datos” es decir descomponer un todo en sus partes constitutivas para su más pormenorizado
estudio y la “síntesis de los datos” que es el trabajo opuesto, es decir recomponer lo que el
análisis ha separado. Este paso constituye la conclusión final, la elucidación del caso.

7. La lógica en la investigación criminal


En el desarrollo de este capítulo nos apoyaremos fuertemente en el trabajo publicado por
Rinaldi en la obra “Criminalística y Crimino- logía”, ya citada. La Lógica es la ciencia que
expone las leyes, maneras y formas del conocimiento científico. ¿Cómo puede auxiliar la
Lógica como ciencia a la Investigación Criminal?, pues bien nos permite la elaboración y
11
expresión de conceptos, hipótesis o juicios que resulten claros y coherentes en relación con Ver arts. 103 y 104 del Código
el hecho criminal que investiga- mos. También nos facilita la construcción adecuada de Procesal Penal de la Nación, Ley
27.063.
argumentos y llevar adelante un análisis crítico de la investigación.
página 13
Si consideramos a la Lógica un instrumento, entenderemos su utilidad a la hora de la
núcleo
temático
dos 2
valoración de la prueba reunida durante el pro- ceso de investigación a través de la “sana
crítica racional”12.

Para un abordaje de esta ciencia que nos resulte útil, debemos conocer la distinción existente
entre los primeros principios y las re- glas de la Lógica; justamente de los primeros surgen
las reglas nece- sarias para realizar un razonamiento. Nos detendremos entonces en los
primeros principios que son:
1. El principio de identidad: básicamente nos dice que “todo objeto es idén- tico a sí
mismo y no lo es con respecto a otro”. Dicho de otra manera es así “lo que es, es; lo que
no es, no es”. Este principio de identidad tiene diversas variantes, a saber:
principio de identidad de la verdad, que afirma como verdadero algo que es efectivamente
verdadero.
• principio de no identidad de la falsedad, que afirma como verdadero algo que es falso.
• principio de la no identidad de la verdad, que afirma como falso algo que no es verdadero.
• principio de identidad de la falsedad, afirma que es falso algo que efectivamente es falso.

Trataremos de demostrar la importancia de la aplicación de este principio a la hora de valorar


por ejemplo una prueba testimonial. En su testimonio, el Sr. Z afirma que observo el ingreso
al garaje de un edificio donde se cometió un crimen, de un vehículo A, conducido por B.
Por medio de otro testigo o de las cámaras de seguridad, comprobamos que lo descripto
efectivamente sucedió, entonces el testimonio de Z es verdadero (principio de identidad de
la verdad).

Ahora, en su testimonio el Sr. Z afirma que ingreso al garaje del edificio el automóvil A,
conducido por B, pero las cámaras de seguridad no registraron el ingreso del automóvil,
concluiremos que el testimonio de Z es falso (principio de no identidad de la falsedad).

Igualmente, si en su testimonio, el Sr. Z declara que ingreso al garaje el edificio el automóvil 12


J. CAFFARATA NORES, dice
A, pero conducido por C, pero las cámaras de seguridad captan claramente el rostro de B ”la sana critica ra- cional se
ingresando al volante del auto A, concluiremos que el testimonio de Z también es falso caracteriza… por la posibilidad
(principio de no identidad de la verdad). que el Magistrado logre sus
con- clusiones sobre los hechos
de la causa valorando la eficacia
Pero si el testigo Z, afirma que no observo el ingreso al garaje del edificio del automóvil A,
conviccional de la prueba con total
conducido por B y las cámaras de seguridad no registraron ese ingreso y otro testigo afirma libertad pero respetando al hacerlo
que efectivamente no ingreso el automóvil, concluiremos que el testimonio es verdadero los principios de la recta razón,
(principio de identidad de la falsedad). es decir las normas de la lógica...
los principios incontrastables de la
¿Por qué aplicamos este principio de identidad justamente en el análisis de la prueba cien- cia y la experiencia común; es
testimonial?, porque gran parte de la carga proba- toria en la investigación penal descansa insuficiente la intuición. CAFFERATA
sobre los testimonios, tanto de las víctimas como los testigos de los hechos sometidos a NORES, J. “La Prueba en el Proceso
Penal” 3ra Edic. De Palma, Buenos
estudio.
Aires, año 1998.
página 14
2. Principio de no contradicción. Básicamente se enuncia así: “nada puede ser y no ser al
2
núcleo
temático
dos
mismo tiempo y bajo la misma relación; es decir un enun- ciado no puede ser negado
y afirmado al mismo tiempo. Volviendo a la prueba testimonial, es frecuente que
debamos aplicar este principio. Va- mos con un ejemplo, se produce un hecho delictivo
cualquiera e interro- gamos a las personas próximas al lugar, una de ellas, el testigo “A”
nos relata -y luego testifica- que observó el ingreso al sitio de “X” portando un arma
de fuego en su mano derecha, para segundos después escu- char una detonación y
acto seguido ver como egresa corriendo al mismo sujeto “X”. Ya en el debate oral el
mismo testigo afirma que recuerda a “X” ingresar al lugar del hecho con las manos
en los bolsillos es decir no portando un arma de puño, escuchó luego una detonación
y “X” egresa corriendo de la escena del crimen. Los términos “portando un arma en
su mano derecha” y “con las manos en su bolsillo, sin portar ningún arma”, resultan
contradictorios, por lo que el valor de este testigo pierde fuerza y la hipótesis según la
cual “X” fue autor del disparo, se desvanece si no obtenemos otra evidencia.
3. Principio de tercero excluido. Expresado en el término “todo objeto es no es” o en
términos lógicos “de dos juicios contradictorios, necesariamente uno es verdadero y el
otro es falso -no se admite un término medio-. Para su mejor comprensión volvamos
al testimonio de “A”, que en la etapa de investigación declaró que “X” ingreso al lugar
del hecho portando un arma de fuego; luego en el debate oral, afirma que “X” ingreso
con las manos en el bolsillo, es decir sin empuñar un arma. Claramente estos términos
resultan contradictorios y es de aplicación el principio del tercero exclui- do, que nos
dice que solo puede ser uno de los testimonios válidos y no ambos. Las características
de este principio es que es “”limitativo”, es decir, solo uno de los términos es legítimo
y además es “falto de indi- vidualización”, porque no nos permite indicar cuál de los
dos juicios o testimonios es el verdadero. El testigo ¿mintió ante la prevención y dijo la
verdad ante el Tribunal Oral? ¿o fue sincero ante los investigadores pero mendaz ante
las partes en el debate oral? En este caso teórico solo nos queda pedir explicaciones al
testigo sobre esta contradicción, buscando establecer cual testimonio es verdadero y
cual resulta falso.
4. Principio de razón suficiente Este principio fue enunciado por Leucipio de la siguiente
manera: “nada sucede por azar, sino por una razón y por obra de la necesidad”; es decir
nada surge arbitrariamente o todas las cosas tienen su razón de ser, de por qué son así
y no pueden ser de otro modo. En sentido lógico este principio afirma que “todo juicio,
para ser verdadero debe tener una razón suficiente”. En otras palabras, todo enunciado
para que tenga validez debe tener una razón que lo justifique de porque es así y no de
otro modo.

La principal aplicación que haremos de este principio lógico de razón suficiente en el


proceso de investigación criminal, será si la conclusión que alcanzamos por el razonamiento
inductivo, deductivo o por la abducción, es falsa o verdadera si también lo es una de sus
premisas. Para ilustrar lo mejor posible el uso de este principio, regresemos por un momento
al ejemplo utilizado en el capitulo anterior cuando nos referíamos a la Deduc- ción. Si Carlos
página 15
no es Cadete de 1er Año de la Escuela de Policía “Crio Gral. Pirker”, no hay razón suficiente
núcleo
temático
dos 2
que nos permita afirmar que tenga estudios secundarios completos.

Ahora ingresaremos en un terreno más abrupto. Hay autores de la Lógica clásica que afirman
que el principio de razón suficiente está com- prendido por otros principios a saber:
Principio de causalidad. Podemos expresarlo -particularmente en sentido lógico a través
de un enunciado: si HCP entonces siempre AB, o su equivalente para todos los HCP, si HCP
entonces AB. A través del siguiente ejemplo podremos comprender lo hasta aquí ex- plicado.
Las armas blancas -AB- producen sobre el cuerpo heridas de carácter “corto-punzante” HCP;
entonces si el cadáver de “Z” hallado en la escena del crimen, presentaba varias heridas
“corto-pun- zante” en su torso, las mismas fueron causadas por un arma blanca. Tengamos
presentes que en el marco investigativo, los indicios son generalmente fundamentados
haciendo uso de este principio.

Principio de finalidad. Se expresa a través del término: “todo está hecho con relación a un
fin”. En Psicología este principio es conoci- do como “ley del interés” que se expresa a través
del término “todo agente que obra, lo hace por un interés” o mejor “todo agente que obra,
obra por un fin”. Es decir si cometió un delito fue motivado por algo, o porque tenía algún
interés o se beneficiaba con los resultados. Particular aplicación tiene este principio a la hora
de responder el interrogante ¿Por qué? o ¿para qué? El autor del delito llevo adelante tal o
cual acción, como por ejemplo, ¿para que se alejaba presuroso del lugar?, ¿Por qué ocultó el
cadáver en determinado sitio?, ¿Por qué arrojó el cuerpo en ese sitio de la ruta?, etc.

Principio de legalidad. Basado en la teoría que afirma que la naturaleza toda evoluciona
siguiendo determinados principios y leyes preestablecidas o determinadas, razón esta por
la cual también se lo denomina “determinismo”; contrario a todo postulado según el cual el
azar y el futuro son impredecibles y aleatorios. Así hablaremos de determinismo genético o 13
DESIMONI, Luís M. “Prevención
biológico y según la postura que tomemos, el hombre decide libremente (el libre albedrío)
Policial y Prueba en Materia Penal”,
u obra por factores determinados. Desde el punto de vista lógico este principio también es Edit. Policial 1ra Ed. Buenos Ai- res,
conocido como “ley de la bivalencia”, según la cual todo enunciado es verdadero o es falso, año 1995.
sine existir término medio.
14
CAFFERATA NORES, Op. cit. Sup.
8. Los indicios
En el marco del Derecho Procesal, Desimoni13 dice: “el indi- cio expresa la cosa que sirve de 15
GUZMAN, Carlos A. op. cit. Sup.
signo”; mientras Cafferata Nores14, apoyándose en Mittermaier, define al indicio como “hecho
o circuns- tancia del cual se puede, mediante una operación lógica, inferir la existencia de 16
Sobre la presunción, el Dr.
otro” -negrita del autor- Por su parte, Guzmán15 nos da una definición más amplia y con DESIMONI dice textualmente “la
sentido criminalístico al afirmar que es: “Todo objeto, instrumento, huella, marca, rastro, señal presunción se refiere a la relación
o vestigio, que se usa y se produce respectivamente en la comisión de un hecho, sin importar lógi- ca existente entre los indi-
cuán pequeño sea”. No pocas veces se utiliza el término presunción16 con equivalente al de cios entre sí o en relación a las
indicio; pero en verdad este es la causa de la presunción, o bien esta es el efecto de aquel. circunstancias del caso particular.
En: DESIMONI, Luis M. op. cit. Sup.
En cuanto al concepto de “circunstancia”, podemos decir que se trata del he- cho en que se
página 16
basa la inferencia.
núcleo
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Desde el punto de vista de la lógica, un indicio nos permitirá hacer una inferencia válida que a
partir de lo conocido, nos permite conjeturar hipotéticamente sobre sus causas. Por ejemplo:
un vidrio que presenta una pequeña perforación de bordes limpios y fracturas radiales que
parten de él y concéntricas que la rodean, es indicio de haber recibido un disparo de arma
de fuego.

A través de los indicios podremos formar la llamada “prueba in- diciaria” que nos acercará a
la verdad sobre lo sucedido. Esta prueba estará basada sobre la inferencia y el razonamiento
y tendrá como punto de partida los hechos y circunstancias demostrados, de los cuales
trataremos de de extraer la relación existente justamente con aquel hecho desconocido.
Dicho de otro modo, la fuerza probatoria de la prueba indiciaria estará basada en la relación
demostrada entre aquel hecho conocido al que llamaremos “el indiciario” y otro desconocido
al que denominaremos “el indicado”. Recordemos los procesos de razonamiento: el hecho
indiciario es la premisa menor, una enunciación basada en la experiencia funcionará como la
premisa mayor, así llegaremos a una conclusión que será la fuerza probatoria del indicio. La
convicción así tendrá fundamento en la inferencia y el razonamiento, deduciendo de hechos
conocidos -indicios- los hechos desconocidos o discutidos. De esa forma arribaremos a lo que
se conoce como “la prueba indirecta” o “prueba por indicios”; la normativa procesal actual
no se refiere a este tipo de prueba, pero es plenamente aceptada por la jurisprudencia. En
otras palabras, la prueba indiciaria es una reunión e interpretación de una serie de hechos
y circunstancias relativas a un delito que investigamos, para intentar llegar a la verdad de
lo sucedido pero por “vía indirecta”. Para afirmar lo antes expuesto, utilizamos conceptos
de Ellero17 que dice “Una circunstancia indica tanto mejor un hecho cuanto menos pueda
evidenciar otros hechos diferentes”. El indicio puede ser “necesario” cuando un efecto no
puede ser atribuido sino a una causa exclusiva, mientras que será “probable” cuando el
efecto puede derivar de diferentes causas.

Llamaremos indicios unívocos a aquellos que partiendo de hechos conocidos, se infiere


una relación necesaria con un solo término, siendo este la causa o las condiciones necesarias
o suficientes que lo produjeron, excluyéndose toda otra posibilidad en contrario. Un ejemplo
que ya hemos utilizado, los restos de deflagración de pólvora muy próximos al orificio de
entrada de proyectil de arma de fuego, unívocamente nos indica un disparo a muy corta
distancia. Solo este tipo de indicio producirá certeza. Este tipo de indicios también puede ser
llamado indicio necesario.

Indicios equívocos o anfibológicos, será la denominación que daremos a aquellos que


partiendo de un objeto conocido, se infiere una relación lógica alternativa entre dos o más 17
ELLERO, Pietro “Tratado de la
términos posibles y distintos entre sí, siendo válido solo uno de ellos. Por ejemplo: el Sr. “A” es Prueba en Materia Penal”, Edit. El
sor- prendido al volante de un automóvil robado; puede haber participado en la sustracción Foro, 1ra Edic. Buenos Aires, año
“S”, puede haberlo recibido de manos de los autores del hecho para su ocultamiento “O”, o 1994.
página 17
ser un mecánico, a quien “O” o “S” le encargó su reparación. Este tipo de indicio hace al hecho
2
núcleo
temático
dos
desconocido verosímil o probable.

Respondiendo a otro tipo de clasificación, los indicios pueden ser denominados:


• Indicios de delitos en potencia, basados en la capacidad del sospechoso para delinquir,
por ejemplo por poseer condenas anteriores sobre ese especie o tipo de delito. O en la
capacidad subjetiva o de compatibilidad física y moral. Siguiendo el móvil entendido
como la motivación para la comisión del delito, por ejemplo, por venganza o codicia. Por
oportunidad o de circunstancia apropiada que al sospechado se le presentó al momento de
cometer el ilícito; este tipo de indicio también puede ser considerado de presencia.
• Indicios de delito en acto: es el caso de las huellas materiales, como por ejemplo restos
de sangre de la víctima en las prendas del sospechado. También por las manifestaciones
anteriores o posteriores a la ocurrencia del delito por parte del sospechoso, como por
ejemplo hacer anuncio de amenazas hacia quien resultó luego víctima; o posteriores,
como la fuga sin motivo. Estos indicios también se los conoce como indi- cios sobre
hechos ante y post facto.

Concluiremos diciendo que un solo indicio puede resultar una indicación o una sospecha,
pero solo a través de una serie de indicios convergentes y concordantes puede nacer la
prueba. Un indicio cons- tituirá un elemento de prueba fragmentario, dado que son muy
pocos aquellos suficientemente demostrativos para probar por si solos la culpabilidad de
un sujeto. Para tener por reunido un plexo o cuerpo probatorio, es necesario contar con una
concurrencia de indicios determinadas. Es así que a la prueba indiciaria la debemos valorar
en forma general y no en forma aislada; si utilizáramos solo una o algu- nas que sirvan a
nuestro convencimiento, perderíamos la objetividad necesaria. Para eliminar la posibilidad
de un error, debemos conside- rar todos los hechos indiciarios tanto de cargo, como de
descargo, así como los convergentes y los divergentes. Hay procesalistas que opi- nan que
si se realiza un adecuado uso de la prueba indiciaria, puede resultar en algunos casos, más
efectiva que la prueba testimonial. Es preciso poder distinguirlos, apreciarlos y utilizarlos,
debiendo evitar a su vez contarlos mecánicamente. Reiteramos este concepto: su fuerza
nace de la concurrencia de los mismos. La prueba de indicios exige un trabajo mental que
consiste en enlazar, de manera lógica, inferencias y razonamientos. Para ello debemos
tener grandes cono- cimientos sobre el tema investigado, mucha experiencia en la vida y
cualidades intelectuales, racionales e intuitivas.

9. La investigación criminal en el sistema penal acusatorio. La acción del ministerio


público fiscal o el rol del fiscal
Recordemos que en el año 1991 y mediante la ley 23.984, se dictó el Código Procesal Penal
de la Nación; este código ritual basa el proceso penal en un modelo acusatorio mixto, pues la
dirección de la investigación debe realizarla directamente el Juez de Instrucción. Sin perjuicio
de ello tiene la facultad de delegar esa dirección en el agente fiscal. Una posterior reforma
introducida a este código de rito, estableció que la dirección de la pesquisa se encontrará
página 18
delegada en el agente fiscal en los casos de sumarios por hechos ilícitos de competencia
núcleo
temático
dos 2
criminal que no tengan autor individualizado, comúnmente conocido como “autor N.N.”.

La reforma de la Constitución Nacional del año 1994, le dio rango constitucional al Ministerio
Público y lo erigió en un órgano independiente de los otros poderes, al darle autonomía
funcional y autarquía financiera18. En otras palabras se constituyó en un órgano del Estado
encargado de la persecución penal que no responde a ninguno de los otros tres poderes.

En el año 2014, mediante ley 27.063, se aprobó un nuevo Código Procesal de la Nación que
viene a reemplazar al dictado en el año 1991 e introduce un nuevo diseño del proceso penal,
consagrando ya definitivamente el modelo que responde al principio acusatorio formal.

En este sistema de enjuiciamiento el representante del Ministerio Público Fiscal es quien


ejerce la acción pública, promueve la acción penal pública contra autores y partícipes de
una acción penal y asume en forma definitiva la dirección de las investigaciones penales o
crimi- nales; quedando en manos de los jueces el control de las garantías del debido proceso.
Este principio acusatorio es garantía de imparcialidad del juzgador, al establecer una clara
división entre las funciones requirentes -en manos del fiscal- y las decisorias -en manos del
Juez, del Tribunal o del Jurado.

El Ministerio Público Fiscal, siguiendo el “principio de oficialidad”, -es decir el carácter público
de la persecución penal-, debe promover y sostener la acción penal pública, procurando
el hallazgo de la verdad objetiva, o dicho de otro modo, conociendo la verdad acerca de
la hipótesis delictiva dirigida a una persona. Entiende Cafferata Nores que esta actividad
probatoria está dirigida a destruir el estado jurídico de inocencia, también conocido como
“principio constitucional de inocencia”.
18
Ver Constitución de la Nación
En el marco de la ahora denominada “etapa preparatoria” o también llamada Argentina, Segunda Parte, Titulo I,
“investigación previa a la formalización”19 dirigida por el representante del Ministerio Sección IV, del Ministerio Público,
Público Fiscal20, este debe recoger los elementos de cargo o descargo para averiguar la art. 120.
verdad, con el objeto de establecer la existencia del mérito suficiente para la apertura de
juicio ante la existencia de una o más conductas delictivas. Más adelante volveremos a tratar 19
Art. 220 del Código Pro- cesal
el concepto de verdad. Penal de la Nación -Ley 27.063-

La investigación de un hecho que reviste carácter delictivo, puede iniciarse21: 20


Art. 196 del Código Procesal Penal
1. De Oficio, por el representante del Ministerio Público Fiscal de la Nación -Ley 27.063-
2. Por denuncia.
3. Por querella. 21
Art. 202 del Código Procesal Penal
4. Por la prevención de una fuerza policial o de seguridad. de la Nación -Ley 27.063-

22
El Ministerio Público Fiscal o su representante están facultados para llevar adelante la Art. 213 del Código Procesal Penal
denominada “investigación genérica”22 ante la necesidad de esclarecer alguna actividad de la Nación -Ley 27.063-
página 19
delictiva especial donde su autor o autores aún no se encuentran identificados, como por
núcleo
temático
dos 2
ejemplo las actividades de una organización criminal dedicada al robo de automóviles a
gran escala u otra dedicada al tráfico internacional de estupefacientes. También puede llevar
adelante la denominada “investigación preliminar de oficio”23, en el caso de existir
indicios sobre la presunta comisión de un delito de acción pública, destinadas a establecer la
real existencia de este y la identidad de su autor o autores.

En todos los casos estas pesquisas se volcaran por escrito en el llamado “legajo de
investigación”24 que deberá contener: los documentos y aquellos elementos de convicción
recogidos, las diligencias efectuadas y los datos obtenidos a través de ellas, con fecha y hora
de realización, además de constar la identidad de quienes intervinieron en las mismas y de
las personas que resultaron entrevistadas.

Si la denuncia sobre la comisión de un delito fue realizada ante las fuerzas de seguridad
o policiales, o ante el representante del Ministerio Público Fiscal, la consiguiente
investigación siempre bajo la conducción de este, será realizada con: “...el auxilio de la
policía de investigaciones u otra fuerza de seguridad” 25. Es aquí donde las acciones
del representante del Ministerio Público Fiscal y los investigadores criminales confluyen,
reafirmando el concepto de unidad funcional según la cual, la Institución Policial, además
de funciones de seguridad, cumple con las atinentes a la Policía Judicial.

Si durante la investigación preparatoria, surgieron elementos suficientes demostrativos de


la comisión de una conducta descripta por la normativa penal como delito y de la identidad
de el o los responsables del mismo, es hora de avanzar hacia la etapa siguiente, es decir
pro- ceder a la “formalización de la investigación preparatoria”26. Básicamente se trata de
una audiencia durante la cual, al imputado y en presencia del Juez se le informa sobre el
delito que se enrostra, cual es la calificación legal de esa conducta, que participación tuvo
en ella y los elementos de prueba obtenidos. Ahora bien, esta audiencia exige un paso
previo, consistente en solicitar la misma al Juez27 y en esta solicitud informar al mismo la
identidad del imputado -quien-, el hecho delictivo atribuido a este -que-, la fecha -cuando- 23
Art. 214 del Código Procesal Penal
y el lugar de ocurrencia -donde- su calificación jurídica y el grado de participación criminal de la Nación -ley 27.063-
-como-. Hemos así respondido a casi todas las formas problemáticas o mejor dicho a los 24
Art. 197 del Código Procesal Penal
pronombres interrogativos que nos formulamos al realizar nuestro diseño de investigación. de la Nación -ley 27.063-
Es oportuno aclarar que las normas procesales no piden respuesta al móvil delictivo o dicho 25
1er y 2do párrafo del Art. 207 del
más simplemente, al porque o para qué, pero la Criminología nos enseña cuan relevante es Código Procesal Penal de la Nación
en una adecuada investigación criminal, responder este interrogante. Reafirmamos nuestra -ley 27.063-
idea sobre lo esencial que resulta conocer el móvil que ha inspirado al autor de un delito a 26
Arts. 221 y 222 del Có- digo
cometerlo y la búsqueda de indicios que relacionen al autor con su crimen, tales como los Procesal Penal de la Nación -ley
relativos a capacidad de delinquir. 27.063-
27
Art. 224 del Código Procesal Penal
Volviendo al concepto de verdad, el modelo de enjuiciamiento acusatorio de tipo adversarial de la Nación
o contradictorio permite que al juicio ingrese aquella información obtenida durante el -ley 27.063-
página 20
proceso inves- tigativo, siendo objeto de un control horizontal. Así la verdad hacia el interior
núcleo
temático
dos 2
del juicio se construye por el debate contradictorio de las partes mencionadas y no será esta
una verdad histórica. Lograr acercarnos a la verdad histórica es lo máximo que podemos
hacer; ello es así dado que en un juicio no nos será posible reproducir la verdad integra
de lo ocurrido, porque es materialmente imposible repetir los hechos o sucesos objeto de
investigación o rara vez podremos demostrar lo que sucedió realmente. Estos hechos al decir
de Mancuso28, son inferibles pero “no observables”, ¿qué significa ello? Que no han sido
aún directamente observados, verificados, experimentados o muy probablemente nunca
lo serán, es decir se constituyen en entidades altamente hipotéticas. En otros términos
podremos lograr una aproximación razonable al conocimiento de la verdad29.

Resultan muy interesantes los conceptos de Ferrajoli30 cuando describe a la verdad procesal
a la que arriba el tribunal de juicio, como una proposición que puede ser descompuesta en
otras dos, una fácti- ca y otra jurídica. La proposición fáctica da lugar a una verdad fáctica
verificable a través de la prueba de ocurrencia del hecho y su impu- tación a quien o quienes
resultaren incriminados. Esta proposición es comprobable por vía inductiva o razonamiento
inductivo. En cuanto a la segunda -la proposición jurídica- genera una verdad jurídica puesto
que es comprobable a través de interpretar los enunciados normativos que califican al hecho
como delito a través del razonamiento deductivo siguiendo el significado de las palabras
empleadas por la ley.

10. Mirada institucional sobre el éxito en la investigación


Las sociedades en general tienen ideas simples pero claras sobre las acciones del Estado
28
ante la comisión de un delito cualquiera, particularmente si el crimen es violento o por MANCUSO, Hugo R. op. Ob. Cit.
sus características particulares, causa conmoción social. También en forma simple se 29
SANCHEZ LUGO, Carlos F. “La
exigen respuestas inmediatas y concluyentes; esto es que los hechos sean aclarados y sus Teoría del Caso”, Imprenta Nacional
responsables rindan cuentas ante la Justicia. Lamentablemente ninguna sociedad, ni aún de Colombia, Bogotá, año 2003.
30
la más avanzada, podrán resolver la totalidad de los crímenes cometidos en su seno. Esta FERRAJOLI, Luigi “La Teoría del
sola idea puede resultar suficiente para hacernos caer en un escepticismo tal que lleguemos caso”. Edit. Trotta Madrid, 1er Edic.
a considerar que nuestra misión como investigadores criminales estará signada en una año 2009.
31
gran mayoría de casos por el fracaso o aún peor, que el éxito solo deviene de alguna razón Se trata de ataques a bienes
azarosa en la que poco pudimos intervenir, devaluando aún más nuestra misión de cara a la jurídicos protegidos de mínima
sociedad. Muy por el contrario nuestro axioma debe ser: el delito que no fue prevenido, no incidencia que no ponen en
peligro la paz social. Se les otorga
puede quedar impune.
una solución procesal por medio
del “principio de oportunidad”
Nuestra experiencia nos dice que resulta poco probable que seamos convocados para la consagrado en el Código Procesal
investigación de los “delitos de bagatela”31 o de poca monta. Hoy la persecución penal que Penal de la Nación. Para más
responde al principio acusatorio, entiende a la pena privativa de la libertad como la “ultima información recomendamos acudir
ratio penal”, siguiendo el principio de subsidiariedad. En consecuencia seremos requeridos a CREUS, C. “Derecho Penal” -parte
para -bajo la guía del Fiscal- pesquisar aquellos hechos delictivos de cierta gravedad, que será general- págs. 197/8. Edit. Astrea,
dada por el alcance -tanto cuantitativo como cualitativo- de los daños causados, el carácter o el 4ta Ed. Actualizada. Buenos Aires
número de víctimas, la peligrosidad del o los autores o la conmoción social generada. 1996.
página 21
Más aún, en numerosas oportunidades al comienzo de la investigación preparatoria, ya se
2
núcleo
temático
dos
han reunido elementos suficientes para entender que se ha cometido una o más conductas
jurídicamente reprochables; solo queda conocer la identidad del autor o autores, partícipes
y auxiliadores.

Si no hemos aclarado un crimen, no podremos decir “prima facie” que hemos fracasado, aun
cuando nos quede un gusto amargo. Solo debemos autoevaluarnos o diseñar dispositivos de
auditoría para saber si actuamos profesional y diligentemente, agotamos todos los medios
técnicos y científicos a nuestro alcance para identificar al criminal y no cometimos errores y
si se cometieron, no pudieron ser corregidos a tiempo.

El actual diseño del proceso penal puede hacernos creer que nuestra acción investigativa
dirigida por el Fiscal concluye cuando este solicita al Juez la audiencia de formalización
de la investigación preparatoria; en la que una sola hipótesis o versión definitiva de
los hechos construye la teoría de caso. Pues no es así, no pocas excelen- tes -en apariencia-
investigaciones preliminares naufragaron durante las audiencias del juicio oral, en cuyas
sesiones generalmente deben declarar los investigadores policiales, sobre lo hecho o sobre
lo visto. Estos llevaron adelante una pobre exposición oral, se mostraron du- bitativos o
contrariaron -quizás en forma inconsciente- la tarea desa- rrollada por otros investigadores
criminales, sembrando dudas sobre la acción investigativa en su conjunto y abriendo las
puertas para una absolución del o los acusados, aun cuando nos encontrábamos íntima-
mente convencidos de su culpabilidad.

Como corolario diremos entonces que nuestra acción acompaña todo el proceso, hasta el
dictado de una condena, consecuencia directa de resultar probada la responsabilidad penal
del inculpado. Si el impu- tado resultó absuelto es porque nuestra versión de los hechos
-dado el carácter adversarial del proceso- no estaba adecuadamente elaborada, era pobre o
no fue suficientemente convincente a los ojos de los juzgadores, surgiendo en estos dudas
razonables. Recordemos siempre que los argumentos del fiscal en la etapa de debate,
descan- saran fuertemente en nuestra tarea investigativa y si esta es endeble, los primeros
se derrumbaran como un castillo de naipes.

Por último, no debemos caer en la falsa dicotomía, considerando eficiente una investigación,
donde un sospechoso resulta condenado, mientras tildamos de investigación deficiente,
con un hecho desconocido y un responsable impune. La evaluación de eficiencia de una
investigación no estará dada por el resultado, sino por la aplicación de métodos científicos.

11. La hipótesis policial y la teoría del caso en el proceso de investigación criminal


Analizaremos ahora el proceso de investigación penal desde otra óptica, aquella que pone
foco en las llamadas “Hipótesis Policial” y en la “Teoría del Caso” que como veremos
en el desarrollo de este trabajo, se apoya fuertemente en la metodología científica de la
investigación, extensamente desarrollada en el Capítulo III. En primer término debemos
página 22
decir que “la teoría del caso” es una construcción teórica no prevista en el ordenamiento
núcleo
temático
dos 2
procesal argentino. Analizados otros sistemas penales acusatorios, solo encontramos el
concepto introducido en el Código Procesal Penal de la República de Colombia. Ya en el
campo de las definiciones, Moreno Holman nos dice que la teoría del caso se trata: “del
conjunto de actividades estratégicas que debe desarrollar un litigante frente a un caso, que
le permitirán determinar la versión de los hechos que sostendrá en juicio, y la manera más
eficiente y eficaz de presentar persuasivamente, las argumentaciones y evidencias que la
acreditan en un juicio oral”32. Al analizar esta definición comprendemos que no contempla ni
menciona al propio proceso de investigación y mucho menos a la actividad policial. Creemos
que se trata de una mirada sesgada porque el sistema acusatorio y de corte adversarial no se
centra en las técnicas de litigio que se llevarán adelante durante el debate o juicio, sino en
todo el proceso de investigación. Además al confundir la “teoría del caso” con la estrategia
en juicio, se ignora que la determinación del hecho ilícito es producto de la investigación
criminal. Luego, el mismo autor se corrige parcialmente y nos dice que la “teoría del caso”
comienza a elaborarse desde el primer contacto que el fiscal o la defensa técnica -abogado
defensor- tienen con la causa penal o los hechos del caso.

El jurista mexicano Hidalgo Murillo33 tiene un punto de vista más amplio y es al que nosotros
adherimos. Con abundantes y sólidos argumentos, afirma que los verdaderos autores de la
“teoría del caso” son los órganos de la Policía de investigación, bajo la dirección y control del
Ministerio Público Fiscal; entonces “la teoría del caso” nace en la etapa de investigación
o etapa preparatoria según nuestras normas procesales. Si es considerada una técnica
procesal, comprende todas las aristas del sistema acusatorio que lógicamente nos centra
en la investigación policial por delito, en la investigación del representante del Ministerio
Público Fiscal y en la aplicación por parte de este de criterios de oportunidad, sin olvidar a
los principios alternativos.

Para Hidalgo Murillo no hay dudas sobre la importancia de la acción policial, la naturaleza
procesal de la investigación policial por delito, la necesidad estratégica de contar con policías
en la investiga- ción, sin necesidad que el representante del Ministerio Público Fiscal deba
estar presente, para evitar así dos órganos que a la vez que coadyuvan, se estorban. Entonces
la “teoría del caso” se integra con la etapa policial como “hipótesis delictiva” y/o a lo
sumo en la etapa de investigación ministerial como “hipótesis de caso”, no así en la etapa
de juicio. El debate en el juicio oral no es el momento procesal para la “averiguación de la 32
MORENO HOLMAN,
verdad”, sino la estrategia de las partes para convencer sobre esa historia que desacredite Leonardo “Teoría del Caso”, 1ª Edic.
la contraria. Es responsabilidad del Ministerio Público Fiscal comprobar su “teoría del caso”, 3era re- emp. Buenos Aires, Edicio-
pues la carga de la prueba para demostrar la culpabilidad del imputado corresponde a la nes Didot, año 2013.
parte acusadora. Como conclusión, Hidalgo Murillo divide la “teoría del caso” en tres 33
HIDALGO MURILLO,
fases de una sola etapa procesal, “la hipótesis delictiva”, “hipótesis del caso” y “teoría José D. “Investigación Po- licial y
del caso”, sin que esta última sea la más relevante y sin que la primera concluya en la Teoría del Caso”, 1era Edic. Flores
investigación preliminar. Editor y Distribuidor, México D.F.
2011.
página 23
Queda claro entonces que la “teoría del caso” tendrá su basamento en la etapa de
núcleo
temático
dos 2
investigación policial, donde la mejor técnica procedimental se encuentra en la mejor
técnica policial de acopio de prueba a la luz de los principios de: transferencia, relación y
causalidad y primordialmente en considerar al imputado, a la víctima, al objeto del delito
y al lugar como “escenas del crimen”. La fase prioritaria de prueba es la fase de acción
policial; si la escena del crimen no se trabaja bajo una “teoría del caso”, se habrá perdido el
90 % del hallazgo probatorio necesario para demostrar el hecho y su probable autor.

Por su parte Benavente Chorres34 señala que la “teoría del caso” está compuesta de una fase
constructiva, una fase recolectiva, otra depurativa y una fase expositiva; es decir una etapa
de investiga- ción, una etapa intermedia y una etapa de juicio, siendo así similar a nuestro
ordenamiento procesal.

Siguiendo a Hidalgo Murillo, definiremos a la “hipótesis delictiva”, como aquella fase de


la investigación policial donde la conducta o acción objeto aun no puede ser encasillada
en un tipo penal determinado, en otras palabras si el hecho constituye o no delito. No toda
denuncia ni intervención policial arriba a la existencia de un delito y en consecuencia, no todo
hecho aparentemente ilícito nos dice quien fue su autor o responsable penal. Trataremos de
aclarar a través del siguiente ejemplo. Como investigadores nos convocan a una escena del
crimen; es un ámbito cerrado -una habitación- donde se encuentra el cuerpo sin vida de
una persona que externamente no presenta lesiones, llama si la atención cierto desorden,
con algunos cajones del mobiliario revueltos. ¿Nos encontramos ante un homicidio en
ocasión de robo?, ¿el deceso se produjo por causas naturales o fruto de violencia? Es decir no
sabemos aún si nos hallamos ante un delito y en consecuencia no podremos trabajar sobre
la identidad del o los autores del mismo. Damos un ejemplo aún más simple. Es denunciada
la desaparición de una persona, ¿Se trata de un secuestro extorsivo?, el cuerpo sin vida de la
persona es hallado: ¿Murió en forma natural o fue víctima de un homicidio? ¿Se ausentó de
su lugar de residencia por propia voluntad para ir a convivir con otra persona?
34
BENAVENTE CHORRES, Hesbert
También hablaremos de “hipótesis delictiva”, cuando los órganos de investigación “Estrategias para el desahogo de
establecen que el hecho denunciado o conocido es un delito, en qué fase del “iter criminis”35 la prueba en el juicio oral”, Editorial
Flores Editor y Distribuidor, 1er Edic.
se encuentra y cuando es conveniente impedir que los hechos arriben a consecuencias
México D.F. año 2010.
ulteriores, impidiendo la etapa de ejecución o más aún, permitir que los hechos sean 35
ejecutados para identificar a los responsables penales. Ejemplo de ello es el tráfico de El “iter criminis”, es un término
en latín con el cual en derecho
estupefacientes y la aplicación del procedimiento conocido como “entrega vigilada”, técnica
se conoce a las etapas del delito,
policial y proce- sal ya descripta anteriormente. comprendidas por: la idea y decisión
de realización (etapa interna),
La hipótesis delictiva da paso a la “hipótesis de caso”, toda vez que el hecho se adecua a un luego poner en obra aquella (etapa
tipo penal. Es decir se ha determinado la existencia de un hecho delictivo sin individualizar externa), para pasar a los actos
al autor del mismo. En este caso recordemos nuestra obligación de informar al agente preparatorios, luego la ejecución,
fiscal de forma inmediata, el conocimiento que tengamos de la comisión de un delito de tras lo cual llega la consumación y
acción pública. Puede suceder que en esta fase la utilización de muchos medios de prueba su agotamiento. (N. del A.).
página 24
enfrente a la acción punitiva del Estado con los derechos constitucionales de las personas,
núcleo
temático
dos 2
como por ejemplo la interceptación de las comunicaciones36; la protección de los derechos
fundamentales del imputado obliga una investigación jurisdiccionalizada. Al igual que en
la anterior fase, entendemos que los investigadores criminales deben llevar la iniciativa,
procurando confor- mar una “teoría del caso”, con control del Ministerio Público Fiscal.

A partir de lo expuesto, “la teoría del caso” puede admitirse dentro de esa tercera fase,
es decir cuando la “hipótesis del caso” permite descubrir al autor o autores penalmente
responsables del mismo. Es decir que concluye cuando la investigación determina que el
hecho es delito y descubre en ese hecho al probable autor de ese delito. Se llega a la teoría
cuando se ha partido de una hipótesis y así arriba mos a la definición de “teoría del caso”
dada por Hidalgo Murillo: “… como el resultado procesal de una investigación policial por
delito que, partiendo de una hipótesis delictiva y/o hipótesis del caso -hipótesis fáctica-, bajo la
conducción y el mando del ministerio público, ha sido realizada por la policía de investigación,
tendiente a la comprobación de un hecho delictivo conforme a un tipo penal y, los datos o medios
de prueba que pueden demostrar, dentro del proceso penal, el autor penalmente responsable
del mismo”37.

Desde el punto de vista de la metodología de la investigación, la teoría debe ser vista como
el “momento sintético” de toda pesquisa criminal, entendida como la síntesis lógica de las
hipótesis que fueron contrastadas o verificadas por la prueba de los hechos.

12. El principio de economía de esfuerzos o el dispendio de esfuerzos policiales


El nuevo Código Procesal Penal establece en el marco de las reglas de disponibilidad, los
llamados criterios de oportunidad, por los cuales el representante del Ministerio Público
Fiscal, puede prescindir en forma total o parcial del ejercicio de la acción penal en los supues-
tos enumerados en el Artículo 31 del ya mencionado ordenamien- to procesal. Como
ejemplo podemos citar el caso en que se hallare frente a hechos que dada su insignificancia,
no afectare gravemente el interés público. Estas reglas tienen como objetivo descomprimir
el flujo de casos y racionalizar la respuesta estatal ante el delito. Por ello que insistimos
en un concepto ya desarrollado, cual es que solo seremos convocados a investigar hechos
delictivos de cierta relevan- cia y los procesos denominados “complejos”, sobre estos últimos
nos ocuparemos más adelante.

En todas las actividades, bien sea en la esfera pública como en la privada, los recursos
materiales y humanos no son infini- tos; por lo contrario, estos recursos y particularmente los 36
Es una medida procesal
humanos suelen ser escasos. En las organizaciones policiales lograr la ade- cuada formación contemplada en el Art. 143 del
profesional de un investigador criminal conlleva ingentes esfuerzos económicos y tiempo. Código Procesal Penal de la Nación,
Por ello, quien resulte responsable de llevar adelante una determinada investigación cri- que debe ser ordenada por el Juez
minal, debe administrar en forma eficiente tanto los medios mate- riales -sean estos medios de Garantías.
37
técnicos o materiales de cualquier tipo-, como los recursos humanos, guiado siempre por HIDALGO MURILLO, José D. op. Ob.
el principio de economía de esfuerzos. Basados en la experiencia creemos que la Cit.
página 25
racionalidad en el uso de los recursos humanos y materiales en el marco de una investigación
núcleo
temático
dos 2
criminal se logra cuando se traza una estrategia minuciosamente consensuada con el Agente
Fiscal. Es él quien debe comprender y conocer nuestras limitaciones en capital humano y
en medios técnicos, a la hora de disponer la rea- lización de diversas y variadas diligencias
procesales. No se trata de llevar adelante un sinnúmero de tareas que no respondan a un
diseño de la investigación oportunamente realizado en pos del esclarecimiento de un hecho.
Debemos tener en claro que objetivo se persigue en la realización de cada diligencia, tarea
de campo o en la aplicación de mecanismos de obtención de información o datos, como ser
una interceptación telefónica o una vigilancia y fundamentalmente si ese objetivo puede ser
alcanzado realizando tales medidas procesales.

Trataremos a través dos hipotéticos casos, explicitar lo hasta aquí expuesto:


Caso “A”: En la Ciudad de Buenos Aires, diariamente son sustraídos una decena de
automóviles. ¿Tenemos capacidad humana para investigar cada uno de estos hechos?,
rápidamente advertiríamos que no es posible hacerlo; entonces debemos focalizarnos en
las acciones delictivas que más violencia mostraron -la utilización de armas de fuego-,
o los rodados que por sus características especiales tengan un mercado muy específico
o acotado, o confrontar, mediante un mapa del delito, los lugares de ocurrencia de los
hechos con los sitios donde se encuentren cámaras de seguridad públicas; estas cámaras
podrían contener imágenes del instante en que se consumó la sustracción del vehículo
en cuestión.

Ejemplo “B”: En el marco de la investigación de un delito ya consumado, del cual


aún no se acreditó la culpabilidad del autor del mismo, el representante del Ministerio
Público Fiscal solicita y obtiene del Juez de Garantías la interceptación de varios aparatos
telefónicos, debiendo realizarse sobre los mismos “escuchas directas”. Ello significa que
tales líneas telefónicas deben ser analizadas en tiempo real las 24 horas del día, durante
el plazo de intercepción. Para ello deberemos destinar un buen número de inves tigadores
policiales que exclusivamente se dediquen a ello. ¿Es necesaria y conducente a la pesquisa
la medida de “escucha directa”? ¿Podría analizarse y desgrabar ese material de audio en
forma diferida sin por ello perjudicar la investigación, con la consiguiente economía de
esfuerzo humano en la tarea? ¿Esta medida procesal fue convenida con el Fiscal o fijada
en el diseño de investigación? Queda claro que no habiendo una razón debidamente
fundada para llevar adelante varias “escuchas directas”, estaríamos sometiendo a los
investigadores a un esfuerzo absolutamente innecesario e inconducente. 38
Leonardo MORENO HOLMAN.
Talleres de capacitación Nuevo
13. La investigación criminal en el marco del derecho procesal penal y las garantías proceso Penal acusatorio, Teoría del
constitucionales caso y mecanismos de investigación
La Investigación Criminal,“se define como aquella actividad científica, técnica y legal que se orienta Criminal, Ministerio Publico, Fiscalía
a determinar la verdad de un hecho que amerita una investigación y que se presume delito”38. de la Nación de Perú y la oficina
contra la Droga y el Delito de
Naciones Unidas, Lima, 2008
Ya hemos narrado en capítulos anteriores la tarea propia del investigador criminal, lo
página 26
relevante en esta parte del texto es focalizarnos en el saber sobre diferentes Ciencias
núcleo
temático
dos 2
Jurídicas que comprenden a la Investigación Criminal o al investigador criminal propiamente
dicho, es momento de ingresar en el marco de estas ciencias a fin de lograr interpretar a
través de ellas, el porqué de la relevancia del conocimiento de la verdad, representándonos
en lograr que el enjuiciamiento penal satisfaga con ella, los fines establecidos por nuestro
ordenamiento normativo y social.

La función del derecho es clara, cuando realizamos el estudio de la conducta humana


a lo largo de los tiempos, si bien existen autores que manifiestan que constituye un mal
generalizado pensar que el hombre ha pasado de una situación original de absoluto
aislamiento a otra de mutua colaboración, estos autores apuntalan su idea refiriendo a
que el hombre no pudo haber estado desligado de todo vínculo de asociación ni aun en
tiempos primitivos. Dicho esto es concreto que estos vínculos, sociales, afectivos se fueron
complejizando a lo largo de la historia, hasta llegar a la actualidad que nos integra.

La convivencia de los hombres en sociedad, exige al decir de Borda, la vigencia inexcusable


de normas claras a las cuales estos deban ajustar su conducta, porque de lo contrario,
reinaría el caos y la vida en común sería imposible. También acierta Nino, cuando destaca
que el derecho, es para el hombre algo tan especial como el aire respirable”

Dice Soler, “que cuando no hay acción humana eficaz sin calculo jurídico, porque es
indispensable saber, además del comportamiento de las cosas, el de los hombres”39.

“El ordenamiento jurídico sirve para hacer posible este cálculo del cual dependen todas las
acciones humanas. El grado de certeza al que se arriba en una sociedad determinada es lo
que en derecho se conoce bajo el nombre de seguridad jurídica”40.

Desde este momento realizaremos un breve repaso sobre definiciones de tipo jurídico,
relevantes para nuestro tema principal que es su relación de ellas con la Investigación Criminal.

El Derecho Penal custodia el último tramo del eslabón de la seguridad jurídica: interviene en
la última ratio. Tiende a la protección de los bienes jurídicos más importantes (vida, libertad,
propiedad, etc.) frente a los ataques más intolerables (homicidios, secuestros, robos, etc.).

El sistema penal inicia su actividad cuando ya no es posible dar una respuesta efectiva desde
el ángulo de las otras ramas del derecho.
39
Javier I. BAÑOS, Fernando BUJAN.
“En la parte general, se determina que requisitos tiene que tener una conducta para ser un Garantías Constitucionales en el
delito (teoría del delito) y cuál es el fundamento y el fin de la imposición de la pena (teoría Proceso Penal
40
de la pena). Javier I. BAÑOS, Fernando BUJAN.
Garantías Constitucionales en el
A través de la parte especial, se regulan una serie cerradas de estructuras (tipos) que Proceso Penal.
página 27
describen las diferentes figuras delictivas”41.
núcleo
temático
dos 2
Es de gran importancia referenciar sobre el concepto de Derecho Procesal, respecto de este
se manifiesta que “es la disciplina que estudia la actividad que tiene lugar en los tribunales
judiciales y arbitrales cuando ellos ejercen funciones, así como las normas referidas a la
organización de dichos tribunales”42.

Respecto del derecho procesal penal Claria Olmedo lo define como la disciplina jurídica
reguladora de la efectiva realización del derecho penal: establece los principios que
gobiernan esa realización y determina los órganos, la actividad y el procedimiento para
actuar la ley penal sustantiva.

Tiene un carácter primordial como un estudio de una justa e imparcial administración de


justicia, posee contenido técnico jurídico, donde se determinan las reglas para poder llegar
a la verdad discutida y dictar un derecho justamente. Es el camino que hay que seguir, un
or- denamiento preestablecido de carácter técnico. Garantiza, además la defensa contra las
demás personas e inclusive contra el propio Estado.

El profesor argentino Julio Maier la define como la “rama del orden jurídico interno del
estado, cuyas normas instituyen y organizan los órganos públicos que cumplen la función
judicial penal del Estado y disciplinan los actos que integran el procedimiento necesario para
imponer y actuar una sanción o medida de seguridad”43.

El derecho procesal penal contiene dos aspectos fundamentales: uno relativo a la parte
dogmática, que comprende el análisis, sistematización y crítica de los principios y categorías
procesales, y otro relativo al conjunto normativo que regula el proceso penal. El primero
tiene una perspectiva científica y el segundo una perspectiva normativa.

El Derecho Procesal es un conjunto de normas que regulan los tres pilares del debido proceso,
con la única finalidad de la aplicación de las leyes de fondo, o derecho sustancial.

El Derecho Procesal se ocupa también de la competencia, y la regula; así como la actividad


de los jueces. Asimismo, materializa la ley de fondo en la sentencia.

En el Derecho Procesal Penal también existe un conjunto de normas que regulan el proceso
41
desde el inicio hasta la finalización del proceso. Tiene la función de investigar, identificar, Javier I. BAÑOS, Fernando BUJAN,
y sancionar (si fuese necesario) las conductas que constituyen delitos, evaluando las Garantías Constitucionales en el
circunstancias particulares de cada caso concreto. Proceso Penal.
42
Roland ARAZI. Elementos de
El fin del Derecho Procesal Penal está orientado a comprobar o desvirtuar la existencia de un derecho procesal.
43
delito, siempre que la acción penal no haya prescrito. Maier Julio .Derecho Procesal
Penal. Tomo I
página 28
Así como, a esclarecer o determinar la responsabilidad penal del procesado, condenándolo o
núcleo
temático
dos 2
absolviéndolo de la acusación, archivando el Proceso cuando no se pruebe su responsabilidad
durante la investigación.

En resumen, el fin esencial del procedimiento penal es la averiguación de la verdad y la


verificación de la justicia.

Por su parte, el fin general mediato del proceso penal es la defensa social; mientras que el fin
general inmediato consiste en la aplicación de la ley penal en el caso concreto.

El derecho procesal traduce a la realidad la protección abstracta del derecho penal, esto
lo logra interviniendo en concreto cuando los bienes jurídicos más importantes resultan
afectados por las acciones más intolerables (última ratio)44.
44
Se traduce literalmente por,
Como manifestamos en líneas anteriores la averiguación de la verdad es una de las funciones ultima razón o último argumento,
primordiales de esta rama del derecho para ello, y como principal figura se refleja a la lo que puede interpretarse como
Investigación Criminal, en forma concreta para la investigación del delito y del delincuente, que es el último argumento
esta orienta su esfuerzo a establecer la verdad de los hechos y la responsabilidad de los mismos, posible en el tiempo o bien que es
es aquí cuando se refleja como ayudante fundamental en la acción policial, fiscal y judicial. el argumento definitivo que hace
innecesario seguir argumentando
en el mismo sentido y que es muy
Una vez conocido el hecho, “notitia criminis”45, y comprobado, se realizaran las diligencias
superior a todo argumento en
preliminares básicamente en la escena. En el planeamiento, una vez identificado, delimitado sentido contrario.
y definido el problema, se formularán las hipótesis correspondientes sobre el hecho, la 45
GARRONE, José A., Diccionario
víctima y el autor; así mismo se planificarán las acciones y diligencias pertinentes. En la fase Jurídico - Éste es el nombre genérico
ejecutiva se procederá al acopio de la información según es planificado para verificar las bajo el cual, tradicionalmente, se
hipótesis, a su análisis y al recaudo de pruebas. han reunido los distintos medios
por los cuales podía iniciarse la
La investigación es el instrumento técnico por el cual, el responsable de la misma el actividad de la justicia penal,
investigador puede descubrir los hechos necesarios y suficientes para poder seguir los delitos mediante la promoción del proceso.
y a sus autores con eficacia y conforme a la ley. Así, ya sea por la denuncia, ya por
la querella, o por la prevención
policial o de oficio, se lleva ante la
“El sistema procesal tiene que lograr un sano equilibrio entre la búsqueda de la verdad para
jurisdicción una noticia sobre la
poder realizar la ley penal en concreto, y las garantías fundamentales de todo ser humano, comisión de un delito, que opera
que los textos supremos consagran y bajo ningún pretexto pueden ser soslayadas”46. como “información institucional”,
sujeta a recaudos específicos
El proceso judicial, se puede resumirse a dos aspectos fundamentales. En primer momento impuesto por la ley procesal,
el juzgador debe analizar los hechos que una parte alega y la otra niega. En el segundo capaz de producir efectos jurídicos
momento ya afirmados los hechos a través de la prueba ofrecida, debe aplicarse el derecho. previamente previstos por la ley.
Al procedimiento le toca verificar si en realidad se ha producido un hecho semejante y si este Supera a la mera información.
46
puede reprochársele al autor, todo esto cuando la ley penal establezca sanción para quien Javier I. BAÑOS, Fernando BUJAN.
sea declarado cul- pable de cometer hechos que se describen en abstracto. Garantías Constitucionales en el
Proceso Penal
página 29
“Siendo que el Derecho Procesal debe realizar el valor justicia tutelando al mismo tiempo
núcleo
temático
dos 2
los dos intereses en juego: a) la aplicación de la ley penal, y b) las garantías del individuo,
la búsqueda de la ver- dad como meta del procedimiento no puede ser un fin absoluto,
alcanzable a cualquier costo”47.

He aquí la gran importancia de hacer una referencia sobre la tan conocida “Teoría del fruto del
árbol venenoso”, de gran relevancia en la búsqueda de la verdad, relacionada principalmente
en la Investigación Criminal como fin del procedimiento judicial.

La Teoría del fruto del árbol venenoso, “esta doctrina se relaciona en forma genérica, con la
imposibilidad de utilizar como prueba en un proceso penal, elementos convictivos obtenidos
mediante la violación de garantías fundamentales.

Más precisamente entendemos que se vincula con la invalidez del uso procesal de datos
probatorios que, sin ser constitutivos del “corpus de la violación constitucional” (como por
ejemplo una confesión obtenida mediante tormento) se ha podido conocer y ubicar gracias a
la actividad prevención ilegal (obtención de elementos provenientes del delito, instrumentos
utilizados para perpetrarlo etc.).

En suma, el tema en cuestión se centraría en la imposibilidad de reunir en forma validad,


elementos convictivos que acrediten el corpus delicti en base a actividades que resulten
violatorias de las garantías constitucionales que contiene un determinado Estado”48.

De la misma manera referencia José HIDALGO MURILLO, “que debe anularse -por ilegal-y
rechazarse como prueba-por ilícita-todo medio de prueba que viole derechos fundamentales
de los imputados y/o terceras personas relacionadas con él en razón, principalmente, de
parentesco. Como derecho a la defensa técnica se debe exigir-y por ende, proteger, la
participación del imputado y/o de su abogado defensor, en todas las actuaciones de la
policía de investigación y/o del Ministerio Publico Fiscal”49.

Ya referenciada esta importante teoría en con su relación con el procedimiento judicial, y ya


que en la misma se incluye la protección a las garantías fundamentales de la Carta Magna, 47
Javier I. BAÑOS, Fernando BUJAN.
incluiremos en este capítulo, la definición de las mismas, su clasificación, su importancia Garantías Constitucionales en el
dentro de la Constitución Nacional vigente como así también su relación con las garantías y Proceso Penal
principios procesales. 48
Luis M. DESIMONI, Ricardo S.
TARANTINI. Las nulidades en el
Las garantías constitucionales “son las que ofrece la Constitución en el sentido de que se Proceso Penal.
49
cumplirán y respetaran los derechos que ella consagra, tanto en lo se refiere al ejercicio de José Daniel HIDALGO MURILLO.
los de carácter priva- do como al de los de índole pública”50. Investigación Policial y Teoría del Caso.
50
Manuel Ossorio. Diccionario
“Las garantías procuran aseguran que ninguna persona pueda ser privada de defender su de Ciencias Jurídicas, Políticas y
derecho vulnerado (por el delito) y reclamar su reparación (incluso penal) ante los tribunales Sociales.
página 30
de justicia, como así también que ninguna persona pueda ser sometida por el Estado, y en 51
núcleo
temático
dos 2
CONVENCION AMERICANA SOBRE
especial por los tribunales, a un procedimiento ni a una pena arbitraria... O sea que, en el DERE- CHOS HUMANOS (Pacto
proceso penal, las garantías se relacionan con quien ha resultado víctima de la comisión de de San José) Artículo 1. Obligación
un delito, a quien se considera con derecho a la ‘tutela judicial’ (arts. 1.1, 8.1 y 25, CADH)51 de Respetar los Derechos 1.Los
Estados Partes en esta Convención
del interés (o de derecho).
se comprometen a respetar los
derechos y libertades reconocidos
La interpretación que los organismos regionales de protección de los derechos humanos han en ella y a garantizar su libre y
realizado de la normativa supranacio- nal incorporada a nivel constitucional ( art. 75, inc. 22, pleno ejercicio a toda persona que
CN) parte de la base de que ‘está más allá de toda duda que el Estado tiene el de- recho y el esté sujeta a su jurisdicción, sin
deber de garantizar su propia seguridad’ y que la ‘sociedad padece por las infracciones a su discriminación alguna por motivos
orden jurídico’, circunstancias que legitiman el ‘interés del estado en resolver presuntos casos de raza, color, sexo, idioma, religión,
persona- les’ a través del ejercicio de una ‘función pública’; y que lo expuesto tratándose opiniones políticas o de cualquier
de... ‘delitos de acción pública... perseguibles de oficio ‘... genera al Estado una ‘obligación otra índole, origen nacional o social,
posición económica, nacimiento
legal indelegable e irrenunciable de investigarlos ‘... ’identificando a los responsables e
o cualquier otra condición social.
‘imponiéndoles las sanciones pertinentes’52. que ha sido lesionado por el hecho
criminal, y por lo tanto con derecho
Existe una clasificación primaria sobre estas garantías: a reclamarla ante los tribunales
• Garantías Genéricas: aquellas que tienden a proteger toda clase de derechos, en ellas por (art. 8.1, CADH) penales, actuando
ejemplo encontramos consagrado el debido proceso entre otros. como acusador, aun exclusivo.
• Garantías Especificas: aquellas que protegen exclusivamente determinados derechos, se Artículo 8. Garantías Judiciales
incluye entre ellas el habeas corpus, que protege exclusivamente el derecho a la libertad 1.Toda persona tiene derecho a ser
física, también incluimos, la prohibición de la pena de muerte por causas políticas, etc. oída, con las debidas garantías y
dentro de un plazo razonable, por
un juez o tribunal competente,
Las principales garantías se encuentran consagradas en el artículo 18 de la Constitución independiente e imparcial,
Nacional, una de las más relevantes y significativas es la del debido proceso53. En su primera establecido con anterioridad por la
parte el art.18 de la Constitución Nacional “Ningún habitante de la Nación puede ser penado ley, en la sustanciación de cualquier
sin juicio previo fundado en ley anterior al hecho del proceso, ni juzgado por comisiones acusación penal formulada contra
especiales o sacado de los jueces desinados por ley antes del hecho de la causa. Nadie puede ella, o para la determinación de sus
ser obligado a declarar contra sí mismo... Es inviolable la defensa en juicio de la persona y derechos y obligaciones de orden
de los derechos”. civil, laboral, fiscal o de cualquier.
Artículo 25. Protección Judicial
1. Toda persona tiene derecho a
De lo mencionado en el texto constitucional dentro de la garantías procesales consagradas,
un recurso sencillo y rápido o a
surgen los siguientes principios: Juicio Previo, Intervención del Juez natural, Ley anterior cualquier otro recurso efectivo ante
también conocido como irretroactividad de la ley penal, Inviolabilidad de la defensa en los jueces o tribunales competentes,
juicio, Declaración contra sí mismo. que la ampare contra actos que
violen sus derechos fundamentales
Las garantías procesales podríamos considerarlas como lineamientos estructurales, reconocidos por la Constitución,
características referenciales que tienen sus propias particularidades y funciones, y que la ley o la presente Convención,
informan el procedimiento penal. Estos principios dan forma al sistema de enjuiciamiento y aun cuando tal violación sea
determinan su estructura y funcionamiento. “Maier señala que son “las máximas que, junto cometida por personas que actúen
en ejercicio de sus funciones
a las reglas constitucionales de principio, gobiernan el enjuiciamiento penal del país”54.
oficiales. 2. Los Estados Partes se
página 31
Siguiendo a Maier, debemos destacar que estos principios: “... configuran la base de
núcleo
temático
dos 2
comprensión de la persecución y del enjuiciamiento penal positivos. Ellos fundamentalmente,
están referidos, por una parte, al sistema de persecución penal (publica, por regla con
escasas excepciones) y, por la otra, al objetivo inmediato que pretende lograr la realización
del procedimiento (averiguar la verdad acerca de una hipótesis histórica)”

Dentro de estos principios encontramos: a) principio de oficiali dad; b) principio de legalidad;


c) principio de oportunidad; d) principio acusatorio; e) principio de la verdad real; f) principio
de publicidad; g) principio de oralidad; h) principio de inmediación; principio de identidad
física del juzgador; j) principio de libre convicción; y k) principio de autonomía de la víctima.

Generalmente los mencionados son principios políticos que como regla, no representan
exigencias constitucionales, pero dan forma y estructuran al sistema de enjuiciamiento
penal del Estado.

comprometen: a) a garantizar que


la autoridad competente prevista
por el sistema legal del Estado
decidirá sobre los derechos de toda
persona que interponga tal recurso;
b) a desarrollar las posibilidades de
recurso judicial, y
c) a garantizar el cumplimiento,
por las autoridades competentes,
de toda decisión en que se haya
estimado procedente el recurso.
otro carácter.
52
Cafferata Nores. Proceso penal y
derechos humanos.
53
Entendido como un conjunto de
garantías procesales que tienen
por objeto asistir a los individuos
durante el desarrollo del proceso,
y así protegerlos de los abusos de
autoridades y permitirles la defensa
de sus derechos.
54
Maier. Derecho Procesal Penal.
página 32
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