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Universidad Católica Del Cibao

Presentado por:
Emmanuel De Los Santos 2005-0763

Asignatura:
Derecho Romano I

Facilitador:
Licda. Mariana Rosario

Tema:
Libro Segundo De las cosas

Fecha de entrega:
Martes 26 de febrero del 2019
Libro Segundo
De las cosas

La palabra res tiene un sentido tan amplio como el correspondiente a la palabra cosa
en nuestro idioma. Abarca todo cuanto puede proporcionar a las personas una utilidad
cualquiera. Estas relaciones se llaman derechos y tienen más o menos fuerza. La
persona que puede disponer de una cosa a su arbitrio, enajenarla y aun destruirla, tiene
el derecho más pleno, que es el derecho de propiedad.
De las cosas en el patrimonio y de las cosas Juera del patrimonio de los particulares.
Según los Institutos de Justiniano, todas las cosas están divididas en dos categorías.
Las que se encuentran colocadas fuera del patrimonio de los particulares son las cosas
cuya naturaleza no las hace susceptibles de apropiación individual, y ciertas cosas que
pueden ser apropiadas, pero de las cuales nadie se ha apoderado todavía.
Las otras, por el contrario, forman parte del patrimonio de los particulares. Esto es
una comprobación de hecho que se sobrepone a la materia, puesto que se aplica a
todas las cosas sin excepción. Pero no constituye una verdadera división, porque
carece de alcance jurídico.

De las cosas “divíni juris” y de las cosas “humani juris”


Las cosas se dividen en res diuini juris y res humani juris. Las cosas de derecho divino
están consagradas a los dioses y sometidas a la autoridad de los pontífices. Las cosas
de derecho humano escapan a esta consagración.
Cosas diuini juris. - Las cosas divini juris se consideran como pertenecientes a los
dioses y son colocadas bajo su protección. Comprenden las res sacrae, las res
religiosae y, por extensión, las res sanctae.
Res sacrae; Para el paganismo, las cosas sagradas son los terrenos, los edificios y los
objetos consagrados a los dioses superiores, por una ley, un senadoconsulto o una
constitución.
Res religiosae; Los romanos llamaban res religiosae a los terrenos y a los
monumentos destinados a las sepulturas.
Res sanctae; Estas expresiones están imperfectamente traducidas por cosas santas.
Se trata, en realidad, de cosas que están protegidas contra las depredaciones por una
sanción penal.
Res publicae; Las cosas públicas son aquellas cuyo uso es igualmente común a todos,
pero que, al contrario de lo que ocurre con las cosas comunes, se las considera como
propiedad del pueblo romano, con exclusión de las demás naciones.
Res universitatis; Las universitates son las personas morales, tales como las
ciudades, las corporaciones. Pueden tener cosas de su pertenencia, pero no destinadas
a ser objeto de propiedad individual, pues se aplican al uso común.
Res privatae; Fuera de las categorías precedentes, las cosas son res privatae o
singuloncny es decir, que componen el patrimonio de los particulares, los cuales
pueden adquirirlas y transferir a otros la propiedad.

De las cosas “mancipi” y de las cosas “nec mancipi”


Esta división se aplica sólo a las cosas que pueden ser de propiedad privada,
consideradas según sean o no adquiridas por la mancipación.
Ulpiano nos da la enumeración de las cosas mancipi. Éstas eran:
 Los fundos y las casas situadas en Italia y en las regiones investidas del jus
italicum;
 Las servidumbres rurales sobre los mismos fundos;
 Los esclavos;
 Las bestias de carga y de tiro, es decir, los bueyes, caballos, muías y asnos,
aunque no los elefantes y los camellos, desconocidos por los romanos en la
época de la determinación de las cosas mancipi.
De las cosas corporales y de las cosas incorporales
Las cosas, consideradas tal como la naturaleza las ha producido, tienen una existencia
material, un cuerpo; son las cosas corporales que caen bajo los sentidos. Pero, por una
especie de abstracción, se da también el nombre de cosas a los beneficios que el
hombre obtiene de las cosas corporales, es decir, a los derechos que pueda tener sobre
ellas. Estas cosas se llaman incorporales, porque no caen bajo los sentidos y sólo son
concepciones del espíritu.
Cosas corporales Muebles e inmuebles. — No es posible enumerar las cosas
corporales, puesto que comprenden todo lo que materialmente existe, fuera del
hombre libre.
Cosas incorporales Derechos. -Los jurisconsultos limitan las cosas incorporales a
los derechos susceptibles de estimación y que representan un valor pecuniario en la
fortuna de los particulares.
De los derechos reales y de los derechos de crédito. - Los derechos que se cuentan en
el patrimonio se dividen en dos clases: los derechos reales y los derechos de crédito u
obligaciones.
Esta distinción tiene para la ciencia del derecho una importancia capital y ninguna
legislación los ha separado más netamente que el derecho romano, no solamente en la
observación exacta de sus caracteres diversos, sino también por las maneras de
constituirlos, y las acciones destinadas a sancionarlos.
El derecho reales la relación directa de una persona con una cosa determinada, de la
cual aquélla obtiene un cierto y exclusivo beneficio. Tal el derecho de usar un campo
y percibir los frutos, es decir, el derecho de usufructo.
El derecho de crédito es una relación de persona a persona, que permite a una de ellas,
llamada acreedor, exigir de la otra, llamada deudor, determinada prestación.
De esta diversidad en su naturaleza, resultan entre estos derechos las diferencias
siguientes:
El derecho real, siendo un derecho sobre una cosa, existe en beneficio de una sola
persona, respecto a y en contra de todas, sin imponer a nadie otra necesidad que la de
respetarlo y no impedir su ejercicio; o sea, una pura abstención
La persona que adquiere un derecho real sobre una cosa nada tiene que temer, aunque
se hayan constituido después otros derechos iguales sobre la misma cosa, en beneficio
de otras personas, o bien si el propietario de la cosa llegara a hacerse insolvente, pues
su derecho queda siempre intacto.
El dominio de los derechos reales es menos amplio que el de los derechos de crédito.
El derecho romano ha sostenido con firmeza la separación de los derechos reales y de
los derechos de crédito, desde el punto de vista de su creación y de su transmisión.
Finalmente, la distinta naturaleza de estos derechos se manifiesta desde el punto de
vista de las acciones que los sancionan.
Siendo los derechos reales y los derechos de crédito los elementos de que se compone
la fortuna privada, el estudio del patrimonio consiste en averiguar cuáles son estos
derechos, cómo se establecen y cómo terminan.
Primera Parte
De Los Derechos Reales
Los derechos reales, consistentes en los diversos beneficios que el hombre puede
obtener de una cosa, son en corto número.
Unos fueron organizados por el derecho civil y los otros fueron admitidos y
sancionados por el derecho pretoriano;
El derecho civil reconoce, por un lado, e implícitamente, la propiedad, que es el más
completo de todos los derechos reales, por cuya razón los romanos la confunden
frecuentemente con su objeto.
Más adelante, el pretor otorgó en determinados casos a personas cuya situación le
parecía merecedora de este favor, el amparo de una acción in rem, por la cual podían
hacer valer contra todos, sus derechos sobre una cosa.

CAPÍTULO I.
DE LA PROPIEDAD
Elementos y caracteres del derecho de propiedad. - Los jurisconsultos romanos no
definen el derecho de propiedad, que escapa a toda definición por su sencillez y
extensión, pues es el derecho más completo que se pueda tener sobre una cosa
corporal. Según un análisis que está en germen en los textos, pero que ha sido
precisado y desarrollado por nuestros autores antiguos, tales beneficios se resumen en
el usus, el fiuctus, y el abusus:
a) El Jus utendi o usus, que es la facultad de servirse de la cosa y de obtener todas las
ventajas que pueda rendir fuera de sus frutos;
b) El Jus fruendi o Jructus, derecho de recoger todos los productos;
c) El jus abiuntendio abusus, es decir, el poder de consumir la cosa,
Organización de la propiedad romana. Desde los primeros siglos de Roma, la
propiedad estuvo organizada por el derecho civil siguiendo reglas precisas.
El derecho civil sanciona el derecho del propietario con una acción in rem, la rei
inndicatio. Todo propietario desposeído de su cosa puede reivindicarla contra aquel
que la retiene, para hacer reconocer su derecho y obtener restitución.
Las ventajas concedidas al bonitario, mientras no hubiese adquirido por la usucapión
el dominium exutroque jure, eran las siguientes:
a) Si el propietario quiritario, haciendo prevalecer su título, quisiera ejercer contra él
la rei vindicado, el pretor concede al bonitario para rechazarla una excepción basada
sobre su tituo de adquisición,
b) Si la cosa ha sido quitada al propietario bonitario, quien pierde así su posesión, el
pretor le concede una acción in rem especial, la acción publiciana, gracias a la cual
triunfa hasta contra el propietario quiritario
c) Y, por último, el propietario bonitario gana los frutos de la cosa, y si es un esclavo,
disfruta in bortis de todas sus adquisiciones
Origen y desarrollo de la propiedad inmueble. - Hemos citado ya las cosas que no eran
susceptibles de propiedad privada. Todas las otras pueden, en principio, figurar en el
patrimonio de los particulares y ser el objeto, en el último estado del derecho romano,
de una verdadera propiedad.
Pero se hizo de las tierras un empleo diferente, conforme a su naturaleza. Una parte
se destinó al aumento de la propiedad privada, el agerprivatus. Débese distinguir a
este respecto las tierras cultivadas y las tierras incultas.
Las tierras cultivadas se enajenaron en beneficio de los particulares, poniéndose en
práctica, según parece, tres procedimientos.
Bajo Tulio Hostilio y sus sucesores hubo repartos gratuitos entre los ciudadanos
pobres.
Posteriormente, bajo la República y bajo el Imperio, hubo ventas efectuadas por
ministerio de los cuestores. En fin, algunas veces, las tierras fueron asignadas a
veteranos en recompensa de sus servicios al Estado o a ciudadanos que se enviaban
para fundar alguna colonia: éstos eran los agri assignati.
Para las tierras incultas, el Estado procedió distintamente. Se permitió a los
ciudadanos tomar de estas tierras cuanto quisieran para cultivarlas, obligándose a
pagar al Estado un tributo que atestiguaba su derecho de propiedad; los territorios así
ocupados, agri ocupatorii9, seguíar formando parte del agerpublicas.
De la extinción de la propiedad. La propiedad se extingue: Cuando la cosa de que
es objeto deja de existir, por hallarse materialmente destruida Si esta destrucción no
es completa, la propiedad subsiste sobre sus restos.
De la transmisión de la propiedad ad tempus. - De la perpetuidad del derecho de
propiedad los romanos sacaron la consecuencia de que no podía transferirse ad
tempus, o sea, con carácter temporal y revocable
De la posesión
La posesión, tal cual era entendida por los romanos, puede ser definida como el hecho
de tener en su poder una cosa corporal, reteniéndola materialmente, con la voluntad
de guardarla para sí y disponer de ella como lo haría un propietario.
La posesión acompaña a la propiedad, puesto que el hombre no puede utilizar la cosa
que le pertenece si no la tiene a su disposición. Pero pueden estar separadas de modo
que el propietario no la posea y que el poseedor no sea propietario.
Elementos de la posesión. — Para poseer, es necesario el hecho y la intención. Se
posee corpore y ánimo,
a) Corpore: es el elemento material; significa, para el poseedor, el hecho de tener la
cosa físicamente en su poder,
b) Ánimo: es el elemento intencional, la voluntad en el poseedor de conducirse como
amo, con respecto a la cosa; es lo que los comentadores llamaban el animus domini
Protección y ventajas de la posesión. Un poseedor puede serlo de buena o de mala
fe 165 m. Es de buena fe si se cree propietario, es de mala fe si toma posesión de
alguna cosa sabiendo que pertenece a otro.
De las cosas que pueden ser poseídas. — Del análisis de los elementos que
componen la posesión, dedujeron los jurisconsultos que sólo pueden tener por objeto
cosas susceptibles de propiedad privada y corporal.
Cómo se adquiere la posesión. - Para adquirir la posesión es necesario reunir los dos
elementos que la integran: la detención material de la cosa y la voluntad de disponer
como dueño. La posesión se adquiere, pues, por el hecho y por la intención: corpore
et animo
Cómo se pierde la posesión. - Es evidente que se cesa de poseer cuando se pierden a
la vez los dos elementos que forman la posesión
Pero como la posesión implica el hecho y la intención reunidos, se pierde también
desde el momento en que el poseedor cesa de tener lo uno o la otra.
Así, pues:
La posesión se pierde ánimo soto; lo cual no quiere decir cuando el poseedor no
piense ya en la cosa que posee, sino cuando tiene firme decisión de renunciar a ella
La posesión se pierde corpore solo cuando sobreviene un obstáculo que impide al
poseedor disponer de la cosa a su voluntad.
Las reglas que dejamos expuestas sobre la conservación y la pérdida de la posesión
han seguido teniendo vigor sobre las cosas muebles; pero con respecto a los
inmuebles han venido a prevalecer principios más amplios.
De la adquisición de la propiedad. Divisiones de los modos de adquirir
Cuando un patrimonio pasa íntegramente de una persona a otra, con todo su
contenido de obligaciones y derechos reales, entonces existe adquisición per
universitatem.
En la época clásica, estos modos de adquisición se dividían en dos grupos:
a) los establecidos por el derecho civil eran: la mancipado, la in jure cessio, la
usucapió, la adjudicado y la lex;
b) las que procedían del derecho natural o del derecho de gentes eran: la occupatio,
la traditioy determinada cantidad de causas especiales que enumeran los textos sin
plicarlas a un principio común
Tal división de los modos de adquirir importaba grandemente desde el punto de
vista de las personas que podían llegar a ser propietarias.
Desde el tiempo de Antonino Caracalla, la concesión del derecho de ciudadanía hizo
cada vez más rara la condición de los peregrinos desprovisto; del commerdum,
perdiéndose paulatinamente el interés de esta división hasta desaparecer del todo en
la época de Justiniano, en que también caye ron en desuso la mandpatio y la in jure
cessio; la usucapión fue transfor mada y la distinción de las res mandpi y nec
mandpi dejó de existir.
De los modos de adquisición del derecho natural
La ocupación es la toma de posesión, animo domini, de una cosa susceptible de ser
propiedad privada y que no pertenezca a nadie.
Las principales cosas que bajo Justiniano y en la época clásica podían ser adquiridas
por ocupación:
 Los animales salvajes, la caza y la pesca
 El botín lomado al enemigo
 Las piedras preciosas, las perlas y el coral hallados en el mar o en sus orillas
 El tesoro (Llámase así a una suma de dinero o a un objeto precioso escondido
desde hace tanto tiempo que todos ignoran ya quién fue el último
propietario.)
De La Tradición
La tradición es el más importante de los modos de adquirir del derecho de gentes.
Elementos de la tradición. - La tradición se compone de dos elementos:
La intención de enajenar y de adquirir.
1. De la intención de enajenar y de adquirir:
Es el elemento esencial sin el que la tradición no transfiere la propiedad. Consiste en
la voluntad de las dos partes: el tradens tiene la de ceder la propiedad y el accipiens
tiene la de adquirirla
2. La remisión de la posesión
En derecho romano, la voluntad de las partes no es siempre suficiente para transferir
la propiedad. Es preciso que se manifieste por algún signo exterior; y éste es la entrega
de la posesión, que es una señal de propiedad.
Efectos de la tradición. - En la época clásica, la tradición de una res nec mancipi
transfiere inmediatamente la propiedad absolutamente íntegra al accipiens
Modalidades. - Siendo la voluntad lo dominante en la tradición, pueden las partes
demorar los efectos de este modo de adquirir, posponiéndolos a la llegada de un
término o a la realización de una condición.
De la tradición en las ventas. - El efecto de la tradición sufre todavía una
modificación de importancia en materia de venta.
De la tradición incertaepersonae. - Nosotros unimos a la adquisición por tradición
dos hipótesis anómalas, en que el tradens no sabe quién será el adquirente y en que la
tradición ha sido hecha a una persona desconocida.
Otros casos de adquisición segün el derecho natural.
Tocante a la ocupación y a la tradición, citan los jurisconsultos romanos cierto número
de casos en los que existe también adquisición de la propiedad, según el derecho
natural. Nuestros antiguos intérpretes del derecho romano unían todas estas hipótesis
a un principio común de adquisición: a la accesión. Se la puede definir como ellos la
concebían: un modo natural de adquirir, que daba derecho al propietario de una cosa
sobre todo lo que a ella se incorpora, como parte integrante de ella; y sobre todo los
que se desprende de la misma para formar un nuevo cuerpo.
Adquisición resultante de la accesión. - Hay adquisición por accesión cuando alguna
cosa accesoria está unida o incorporada a una cosa principal. Una vez practicada la
unión, la cosa accesoria pierde su propia existencia y queda anulada su individualidad,
siendo absorbida por la cosa principal, de la que formará parte integrante.
1. Principales casos de adquisición.
Adjunción. Un objeto mueble ha sido incorporado a otro como accesorio; por ejemplo,
una rueda añadida a un carro, un brazo a una estatua o una banda de púrpura a una
túnica.
Escritura; pintura Si se ha escrito en el pergamino de otro poema o am discurso, el
manuscrito pertenece al propietario del pergamino, puesto que la escritura es cosa
accesoria que no puede existir por sí sola
Construcción. Habiéndose erigido una construcción sobre algún terreno con
materiales no pertenecientes al propietario del terreno, es éste el propietario del
edifìcio, puesto que la tierra es cosa principal con relación a lo que está en la superficie
Plantación. Si un árbol que se haya plantado en el terreno de otro pertenece al
propietario del terreno, por ser cosa principal; pero esta adquisición no tiene efecto
hasta que el árbol eche ralees 4, pues hasta entonces no cambia de dueño, siendo
únicamente después de echar las raíces en el terreno cuando el dueño de éste se hace
también dueño del árbol.
Reglamento de la indemnización. -En principio, el propietario de la cosa principal
cuyo valor aumentó por el aditamento de la accesoria se enriquece a expensas de otro,
de manera que en la mayoría de las veces es justo conceder una indemnización a quien
era propietario de lo accesorio, cuya indemnización debe estar regulada por el juez de
una manera equitativa, y por eso, tratándose de indemnizar a quien ha construido,
plantado o sembrado en terreno ajeno, no debe sobrepasar la indemnización del
excedente inferior del gasto ni el gasto inferior al excedente.
 La unión ha sido hecha por el dueño de lo accesorio, que está en posesión de la
cosa principal.
 La unión ha sido hecha por el dueño de la cosa principal, que está en posesión de
todo.
 La separación es posible. Tratándose, en este caso el propietario despojado ejerce
contra el poseedor la acción ad exhibendum para forzarlo a separar la cosa
accesoria y a exhibírsela; entonces puede reivindicarla, lo cual le da completa
satisfacción.
 La separación no puede efectuarse. Los romanos creían que sucedía así por
consecuencia de imposibilidad material para la pintura y escritura, y también
cuando la unión resulta de una soldadura hecha en caliente e incorporando juntas
dos partes de un mismo metal, ferruminatio
De las adquisiciones resultantes para los propietarios ribereños de la vecindad de un
curso de agua. –
El aluvión, el cauce abandonado y la isla que se forma en medio de un río
pertenecen a los propietarios ribereños.
Del cauce abandonado. Ya hemos dicho que el cauce de un rio no es más que la
continuación de las propiedades ribereñas
De la isla. Una isla puede nacer en un río de diferentes maneras.
De la especificación. - Los glosadores han dado el nombre de especificación a un
caso especial de adquisición que se presenta cuando un obrero o un artista elaboran
un objeto nuevo, species nova, con una materia que transforman;
De la confusión y de la mezcla. - Hay confusión cuando los líquidos o metales en
fusión, perteneciendo a propietarios diferentes, son mezclados juntos; y hay mezcla
si se trata de cuerpos sólidos, como dos medidas de trigo o dos rebaños de cameros.
De la adquisición de los frutos.
Noción y atribución de los frutos. - Entre los productos de las cosas, hay algunos a
los que se les da particularmente el nombre de frutos, fructus; éstos son los productos
conformes al destino de la cosa productiva y que renacen periódicamente, de suerte
que vienen a constituir una renta.
De los modos de adquisición del derecho civil
Entre los modos de adquirir la propiedad, organizados por el derecho civil, hallase
los que suponen el acuerdo previo de las partes, queriendo efectuar la una a la otra
transferencia de propiedad y realizarla al amparo de las formas civiles.

De la “Mancipation”
La "mancipatio" o mancipación, era un modo de adquirir solemne, del Derecho Civil,
que exigía la presencia del enajenante, del adquiriente, de cinco testigos ciudadanos
púberes y de un libri pens o porta balanza. La cosa objeto de la venta debía estar
presente al momento de la venta salvo que fuera inmueble.
El efecto que produce este procedimiento es el de transferir inmediatamente la
propiedad del objeto, pero no su posesión la que solo se adquiere cuando el objeto es
entrega al adquirente. Si el enajenante se niega a transferir el objeto, el adquirente
puede ejercer la actio rei vindicatio.
El vendedor debía garantizarle al comprador la propiedad de la cosa vendida, estando
obligado a pagar el doble del precio obtenido, en caso de que la cosa no estuviera
sometida a su dominio y el adquirente fuera privado de ella por la actio rei
vindicatio intentada contra el por el auténtico propietario; pues el adquirente tenía una
accion penal contra el vendedor: "la actio auctoritatis", para obligarlo a realizar el
pago.
Como era un medio de adquirir del Derecho Civil, se necesitaba que ambas parte
gozaran del ius commerci y solo se aplicaba a las cosas res mancipi, siendo nulos sus
efectos si las cosas era nec mancipi.
De la “in jure cessio”
"era el modo de adquirir el dominio que consistía en un juicio simulado y que
empleaba lo mismo que la mancipatio, para contraer toda clase de obligaciones y para
crear toda clase de derechos. El adquiriente recurría ante el pretor y reclamaba como
suya la cosa. El enajenante aceptaba la demanda o no concurría a contestarla, por lo
cual se le obligaba a entregarla.
Se diferencia de la mancipatio, en que debía realizarse ante un magistrado, es decir, in
jure - de Derecho - (el pretor en Roma), y su objeto podía estar constituido por
cosas Mancipi o Nec Mancipi. Se asemejan, en que ambas representan modos
primitivos de adquirir propiedad (en la época del Derecho antiguo, Anterior a la ley
de las XII tablas). Posteriormente a partir de Justiniano, cayeron en desuso, pues no
había lugar a distinguir entre las cosas Res Mancipi y Res Nec Mancipi.

Usucapión
Usucapión es un medio de adquirir la propiedad por medio de la posesión continua de
una cosa, durante el tiempo fijado por la ley.
Esta institución la define la doctrina romanista así: "La usucapión es la agregación del
dominio mediante la continua posesión, por el tiempo determinado por la ley".
El propietario in bonis, puede adquirir la propiedad quiritaria por usucapión,
quedando consolidado su Derecho, como si la adquisición se hubiese producido por
la mancipatio o la in jure cessio.
Igualmente, puede adquirir la propiedad por usucapión el poseedor de buena fe, que
hubiese obtenido la cosa de una persona que no es su propietario. En ambos casos, el
adquirente pasa a tener la propiedad, que se defiende mediante la actio reivindicatio y
otras, como la negatoria, procediendo la primera, cuando el propietario es despojado
de su Derecho y la segunda por perturbación.
Praescriptio longi temporis: Es un medio de defensa otorgado a poseedores de
fundos provinciales, a objeto de que rechacen las acciones intentadas contra ellos. Por
tanto mediante ella, no se adquiere propiedad.
En sus comienzos, solo tuvo por objeto los inmuebles, posteriormente con Caracalla,
se concedió a los poseedores de bienes muebles. Entre la praescriptio y la usucapión
hay pocas variantes ya que ambas exigen las mismas condiciones, sin embargo a
ambas las separa es el tiempo de duración, que se eleva a 10 años entre presentes, y
20 años entre ausentes.
No obstante, el poseedor que ha perdido la posesión de la cosa, tiene la acción real
para reclamar la restitución de la cosa.
Existen pues, diferencias entre la usucapión y la praescriptio longi temporis:
La usucapión se aplica a los ciudadanos Romanos, y lapraescriptio a los extranjeros,
a fundos itálicos y fundos provinciales, respectivamente; adquirida la cosa
por usucapión subsiste la prenda y la hipoteca, en la praescriptio longi temporis no.
Praescriptio longissimi temporis: cuando el poseedor de un inmueble no tenía ni
título ni buena fe, no llegaba a ser propietario del inmueble, pero no podía ejercerse
acción.
Reivindicatoria en contra de él; pues, el verdadero propietario perdía su acción por el
tiempo transcurrido. Se decía entonces que se había operado una "praescriptio
longissimi temporis", de muy largo tiempo, que no era adquisitiva, sino puramente
extintiva. Era la aplicación de la regla establecida por Teodosio II, segunda cual todas
las acciones, tanto reales como personales, se extinguían en un lapso determinado,
especificado líneas abajo.
Época Justinianea
La concesión de la ciudadanía a los súbditos del imperio, por el edicto de Caracalla,
y la eliminación de las diferencias entre las cosas res mancipi y res nec mancipi y
entre fundos itálicos y provinciales llevo a Justiniano en el año 531, a fundir, en una
sola reglamentación, las disposiciones o normasreferentes a la usucapión y a
la praescriptio longi temporis. Por tanto en su época solo se habla de la usucapión.
Extendió el término de la usucapión, fijando 10 años entre presentes y 20 años entre
ausentes, sean las cosas muebles o inmuebles.
Praescriptio longisimi temporis
Es la llamada prescripción de 30 años y de allí su determinación. El emperador
Teodosio II la estableció en una constitución, al disponer que todas las acciones reales
o personales quedasen extendidas por el transcurso de 30 años.
Requisitos para la usucapión
Para que se configure la usucapión, es necesario el cumplimiento de ciertos requisitos:
a) Vigente el derecho quiritario (antiguo), para usucapir, sólo se requería el transcurso
de tiempo.
Por tanto, era suficiente, para que la usucapión produjese los efectos de adquisición
de la propiedad:
1) apoderarse de una cosa.
2) hacer uso de ella. Precisamente, por los inconvenientes de este modo de
adquirir la propiedad, se prohibió usucapir tanto cosas robas (ley de las XII
Tablas y lex Antinia), como cosas poseídas por violencia (leyes Julia y
Plautia).
Con las condiciones anotadas, solo constituyen ejemplos de usucapión, la
usucapión pro-herede y la usureceptio. La usucapión pro-herede, permitía al primero
que se presentara a la sucesión de un ciudadano, cuyos bienes hubieren quedado sin
dueño, adquirir los bienes de la posesión continua de un año, aunque esta posesión
fuera de mala fe. La usureceptio (recibir por uso) consiste en readquirir por el uso, la
cosa cuya propiedad se había perdido (se requería el transcurso de una año).
b) En la época clásica: Se perfila la usucapión como una verdadera institución,
cuando se exige como requisitos:
1) Objetivo: consiste en que la posesión descanse sobre un justo título o una justa
causa.
Justo título o Justa causa: Se entiende, el acto jurídico que sirve de base para la
adquisición del dominio.
Los títulos son tantos como las causa, en cuya virtud, se puede adquirir la propiedad
y así, pueden mencionarse: pro-emptore, por compra, pro Donato, por donación, pro
dote, por constitución de dote, pro soluto, por solución o pago, pro alegato, por
legado.
2) Subjetivo: La buena fe del poseedor que pretende adquirir por usucapión.
Buena fe es el convencimiento de haber adquirido la cosa, sin lesionar el Derecho
ajeno. Que se sienta como si fuese el propietario, quien transmitió la propiedad de la
cosa.
La buena fe se presume, por eso quien alegue la mala fe, debe probarla. Por tanto,
quien objeta la adquisición por prescripción, deberá probar los hechos constitutivos
de la mala fe.
Transcurso del tiempo: El tiempo necesario para adquirir la propiedad por
prescripción ha variado, como hemos visto al analizar la institución en el devenir
histórico de Roma. Se ha dicho, que Justiniano lo fijó en 10 años entre presentes, y
20 años entre ausentes.
La posesión continua: Se requiere la posesión continua de la cosa, o sea, que no
fuese interrumpida la posesión por un tercero, mediante la ejecución de actos de
desposesión, porque la interrupción natural, por circunstancial que fuese, impedía la
adquisición de la propiedad y hacía necesario el inicio de una nueva usucapión
1) Por hechos naturales, que es la que opera materialmente cuando llega el verdadero
propietario y priva de la posesión al que la tenía.
2) Por los hechos civiles, o sea, mediante el ejercicio de la acción reivindicatoria.
e) Prescriptibilidad de la cosa: La regla general es que todas las cosas
son prescriptibles, pero, hay algunas que no lo son. En tal situación se encuentran los
bienes del Estado o del Príncipe, los bienes de la Iglesia, los bienes de las
Fundaciones, piae causa y las cosas que la ley prohíbe enajenar.
f) Tiempos que se computan: el poseedor puede hacer contar el tiempo, desde el
momento en que haya comenzado a poseer, pero puede agregar el tiempo de sus
predecesores, cuando su adquisición haya sido derivativa, por ejemplo:
El heredero puede agregar el tiempo de su causante, pero señalemos, que la posesión
transmitida al heredero, reúne los mismos caracteres que tenía en la persona del cujus.
Si es justa y de buena fe, la obtenía en esa misma forma el sucesor o el heredero.
De la “adjudicatio”
Mientras que en la in jure cessio la propiedad es transferida por el magistrado, es el
juez quien opera esta traslación por la adjudicado en los procesos de partición y
deslinde. En efecto, sólo hay tres acciones en que la fórmula le confiere este poder: la
acción familiae erciscundae, para la partición de una sucesión entre coherederos; la
acción commun dividundo, para la partición de cosas indivisas entre copropietarios;
y la acción finium regundorum, para regular los límites de las propieda des contiguas.
De la“lex”
- Había adquisición lege cuando la propiedad era atribuida a ur persona por el solo
efecto de la ley.
Son derechos reales establecidos sobre una cosa en provecho de una persona o de un
fundo perteneciente a un propietario distinto.
Clasificación de las Servidumbres
1 Las Servidumbres Personales: Cuando el derecho de retirar la utilidad de la cosa
de otro se ha establecido a favor de una persona y no puede durar como máximo,
sino el tiempo que esa persona viva.
2 Las Servidumbres Real o Predial: Cuando la utilidad se ha establecido favor de
un inmueble, que toma el nombre de un fundo dominante, reservándose el nombre
del fundo sirviente para designar el inmueble que está gravado con la servidumbre.
De las servidumbres reales o prediales
El estado ordinario de la propiedad es el de ser libre, es decir, el de procurar al
propietario solo todas las ventajas que ella proporciona. Pero mientras que el jus
abutendi no puede pertenecer más que al propietario, otros derechos, tales como el
jus utendi, le jus fruendi, están algunas veces, en todo o en parte, separ
ados de la propiedad, que de este modo está disminuida y aminorada: entonces se
dice que está gravada con una servidumbre.
La servidumbre es, por consiguiente, una restricción a la propiedad de una parte, y
de otra parte un derecho sobre la cosa de otro, un jus in rem aliena. Se distinguen
dos especies:
1) la servidumbre personal, serviture personarum, que están establecidas sobre una
cosa mobiliaria o inmobiliaria en beneficio de una persona determinada, sin pasar a
sus herederos,
2) las servidumbres reales o prediales, servirunren rerum o prediorum, que sólo
pueden existir en provecho de un fundo sobre otro fundo: es un derecho vinculado a
un fundo y que beneficia a los propietarios sucesivos de este fundo.
Las servidumbres reales o prediales es un derecho real inmobiliario que produce una
carga que afecta a un inmueble, denominado predio sirviente, en beneficio de otro,
llamado predio dominado. "La servidumbre es una carga impuesta sobre una
heredad, para el uso y utilidad de una finca perteneciente otro propietario".
El derecho de servidumbre puede surgir de tres formas: por situación propia de los
predios o terrenos a los cuales se le aplica, por obligaciones impuestas por la Ley o
por contratos suscritos entre los propietarios. La servidumbre establecida por la Ley
tiene un carácter de orden público, porque persiguen beneficiar a la comunidad.
Todos los propietarios tienen derecho de establecer servidumbres según sus
conveniencias y voluntades. La Ley no les pone límites, más que los que
corresponden al orden público y las buenas costumbres
Los procedimientos que permitían establecer una servidumbre de una u otra manera
han variado según las épocas.
Antiguo derecho civil. - Una servidumbre rural o urbana podía ser directamente
creada:
a) por in jure cessio; era el modo ordinario de constitución entre vivos;
b) por adjudicatio, pronunciada por el juez entre dos fundos comprendidos en un
proceso de partición o de deslinde;
c) por testamento en virtud de un legado por vindicationem. Los mismos
procedimientos permitían también establecer una servidumbre per deductionem.
Derecho Pretoriani: Los jurisconsultosadmiten que el ejercicio del derecho equivale,
para las servidumbres, la posesión para cosas corporales.
Derecho de Justiniano: Durante el derecho romano cayeron en desuso ciertos modos
de constitución: estos eran la mancipati y la in jure cesio.
Extinción: la extinción de una servidumbre predial hace desaparecer la restricción
impuesta a la propiedad del fundo sometido, que recobra su libertad natural.
Causas que conducen a este resultado:
- el no uso.
- La pérdida de uno de los fundo.
- La confusión
- La renuncia del propietario del fundo dominante.
De las servidumbres personales: son derechos separados de la propiedad de una
cosa mobiliaria o inmobiliaria, en beneficio de una persona determinada.
Del Usufructu: es el derecho de usar de la cosa de otro y de percibir los frutos, sin
alterar su substancia. Es la más importante de las servidumbres personales, puesto que
comprende el jus utendi y el jus fruendi.
Los derechos del usufructuario: se resumen en el jus utendi y el jus fruendi
El jus utendi: es el derecho de retirar toda utilidad de la cosa y de sus accesorias fuera
de los frutos.
Jus fruendi: es el derecho de percibir los frutos de la cosa.
Obligaciones del usufructuario: según el derecho civil, siendo el usufructo un
derecho real, no crea lazo alguno de obligación entre el nudo-propietario y el
usufructuario.
Constitución del usufructo: se establece por los mismos procedimientos que las
servidumbres preiales.
Extinción del usufructo: el derecho romano ve favorablemente la extinción de las
servidumbres personales, pues ellas no más perjudiciales que útiles.
La muerte del usufructuario: el usufructo es un derecho unido a la persona y
esencialmente vitalicio; no pasa jamás a los herederos del usufructuario.
La capitis deminutio del usufructuario: la extinción de la persona civil que de
aquella resulta produce sobre el usufructo el mismo efecto que la muerte natural.
El no uso: el usufructo se extingue por el no uso, es decir, cuando ni el usufructuario
ni nadie en su nombre, ejerce los actos de uso y goce concernientes a este derecho
real, y esta falta de ejercicio se ha prolongado en el derecho clásico, un año para los
muebles y dos para los inmuebles.
La pérdida de la cosa sometida al usufructo: no es necesario que la cosa esta
completamente aniquilada para que el usufructo se extinga; es suficiente que este
transformada o modificada de manera que sus cualidades esenciales hayan
desaparecido, y que ya no sea susceptible del mismo destino;
La renuncia del usufructuario en beneficio del propietario: si el usufructuario no
puede, en principio, ceder su derecho a un tercero, puede hacer abandonado de el al
nudo-propietario, que recobra así la plenitud de su propiedad.
La consolidación: es decir, la adquisición por el usufructuario de la propiedad de la
cosa sometida al usufructo.
La expiración del tiempo fijado: el usufructo es esencialmente temporal, por estar
unido a una persona cuya existencia es limitada.
Del cuasi usufructo: de la naturaleza misma del derecho de usufructo resulta que no
puede establecerse sobre cosas que se consumen por el uso, tales como el dinero, el
vino, el trigo y los víveres en general, porque no se puede disfrutar sin alterar la
sustancia.
De las otras servidumbres personales:
Del uso: según nuestros antiguos intérpretes, el uso sería un usufructo limitado y
reducido a las necesidades de la persona que a él tiene derecho. El usus no es otra cosa
todo el uso de que pueda ser susceptible, pero sin percibir fruto alguno.
De la habitación: cuando se había legado a una persona la habitación de una casa,
era una simple ventaja de hecho, adquirida por el legatario, día por día, y sin que
pudiera extinguirse ni por la capitis deminutio ni por el uso.
De los trabajos de los esclavos: en la época clásica, el legado que tenía por objeto
los trabajos de un esclavo confería al legatario el derecho de aprovechar sus servicios
y también de alquilarlos, como lo hubiese hecho un usufructuario.
Del ´´jus in agro vectigali´´ y de la efiteusis
Del jus in agro vectigali: el origen de este derecho es muy antiguo. Los municipios
tenían costumbre de arrendar sus tierras a perpetuidad, mediante un censo o vectigal.
El jus in agro vectigali procura, poco más o menos, las mismas ventajas que el
usufructo, pero se diferencia en varios puntos:
a) El colono que del disfruta adquiere los frutos separatoine, como el poseedor de
buena
b) Tiene la posesión protegida por los interdictos y esta dispensado de suministrar
la caucion exigida al usufructuario.
De la Hipoteca:
La hipoteca se diferencia de los demás derechos reales en que es necesariamente el
accesorio de una obligación y constituye una segurida real.
Pero contra este peligro, puede un acreedor hallar protección más o menos eficaz,
obteniendo garantías especiales, se distinguen dos clases:
a) La garantía personal, es decir, el compromiso de una o varias personas que se
obligan con el principal deudor ante el acreedor de manera que este pueda
dirigirse al más solvente requeriendo el pago.
b) La garantía real, que es la afectación de una cosa al pago de una deuda.
De la enajenación con finalidad: al exigir el acreedor una seguridad real, el dador le
transfiere, por mancipación o in jure cesio.
Del pignus: en una fecha imprecisa, el derecho civil admitió un procedimiento más
simple y más favorable al deudor: el contrato de pignus.
De la hipoteca: origen y desenvolvimiento: los inconvenientes de la enjenacion
fiduciaria y del pignus se dejaban sentir, sobre todo en las relaciones entre el colono
y el arrendador de un fundo rural.

Estos principios nuevos reaccionaron sobre el contrato de pignus y modificaron la


situación del acreedor prendario.
La hipoteca, en su concepción primitiva, no confería al acreedor otro derecho que el
de reclamar y obtener la posesión de la cosa si no se le había pagado, y de guardarla
hasta que hubiese recibido satisfacción del deudor.
Por la lex commissoria, las partes convenían en que el acreedor no pagado se haría
propietario de la cosa dada en prenda. Este pacto era muy peligroso para el deudor
que, apremiado por la necesidad, podía empeñar una cosa superior al valor de su
deuda.
Caracteres del derecho de hipoteca:
a) Es un derecho real accesorio. Supone una deuda cuyo pago asegura.
b) Es un derecho indivisible. Esta indivisibilidad no tiene el mismo sentido que
la de las servidumbres prediales, resultante de su naturaleza.
De las cosas susceptibles de la hipoteca: todas las cosas susceptibles de ser
vendidas pueden ser hipotecadas, sean ellas muebles o inmuebles.
De la constitución de la hipoteca: la hipoteca puede ser convencional,
testamentaria o tacita.
a) El pacto es decir el acuerdo establecido entre las partes, basta para crear el
derecho real de hipoteca.
b) La hipoteca puede ser establecida por testamento. Limitada en un principio al
caso en que el testador quería dar una garantía.
c) La hipoteca se establecía a veces tácticamente en provecho de ciertos
acreedores

Derechos del acreedor hipotecario: el acreedor que no ha sido pagado a su


vencimiento puede prevalerse de la seguridad que le confiere hipoteca.
Ejercicios de la acción hipotecaria o derecho de la persecución: el acreedor no
pagado al vencimiento puede ejercer la acción hipotecaria no solamente contra el
deudor que tiene en manos la cosa hipotecada, sino también contra cualquier otro
detentador.
Derecho de venta: el acreedor no pagado al vencimiento, y teniendo la posesión o
habiéndola obtenido por ejercicio de la acción hipotecaria tiene derecho a vender la
cosa hipotecada.
Derecho de preferencia: después de la venta, el acreedor hipotecario tiene el derecho
de pagarse sobre el precio de aquella con su preferencia a todos los demás acreedores.
Conflicto entre varios acreedores hipotecarios: se pueden habler establecido
sucesivamente varias hipotecas sobre un mismo bien en beneficio de diversos
acreedores. Estas hipotecas coexisten e importa, desde luego, regular el conflicto entre
los acreedores.
De las hipotecas privilegiadas: la regla según la cual las hipotecas que pesan sobre un
mismo bien se clasifican por orden de fechas tenían algunas excepciones.

De la extinción de la hipoteca: siendo la hipoteca un derecho accesorio, se extingue


por vía de consecuencia, al mismo tiempo que el crédito que garantiza.
Capitulo IV. Del poder de enajenar y de adquirí
Del poder de enajenar
No se puede transferir a otro más derecho que el que tiene uno mismo. De esta regla
evidente resulta que, para enajenar, es preciso ser propietario, y que todo propietario
puede, en general, enajenar.
Ciertas personas pueden enajenar sin ser propietarias
 Los autores de los impúberes y los curadores pueden enajenar, pero solo a título
oneroso, los bienes de los incapaces cuyo patrimonio tienen la misión de
administrar.
 El mandatario puede enajenar un bien que pertenezca a otro cuando esto se le
ha encargado expresamente por el propietario.
 El acreedor prendario o hipotecario puede, en la época clásica, vender la cosa
objeto del préstamo.

Ciertos propietarios no pueden enajenar:


 Conocemos ya la mayor parte de las personas para quienes rige esta excepción,
por ser incapaces.
 El pupilo no puede enajenar sus bienes sin la auctoritas tutoris: porque no
puede por sí solo, empeorar su condición.
 El loco no puede proceder por sí mismo a enajenar válidamente mientras este
en estado de locura,
 El menor de 25 años, en curatela, es tratado como el pupilo, en el último estado
del derecho.
 El marido, propietario de los bienes que le han sido dados en dote, ha perdido
por completo, bajo Justiniano, el derecho de enajenar o de hipotecar los
inmuebles dotales.

Por quienes se adquiere


Según el antiguo derecho civil, un ciudadano sui juris puede adquirir la propiedad y
los derechos reales no solamente por sí mismo sin también por la intervención de las
personas que tiene bajo su potestad, es decir, los clavos, los hijos e hijas de familiar,
las mujeres in manu y las personas in mancipio, pues la personalidad de estos se
confunde con la suya.
De la adquisición por los esclavos: sabemos que el esclavo no puede tener nada
propio. Todo lo que adquiere pertenece a su dueño y el regala subsistido en todas las
épocas del derecho romano.
Adquisición de la propiedad: cuando el esclavo recibe tradición o mancipación de
una cosa, de manera que hubiese llegado a ser propietario si fuera libre y sui juris, la
propiedad la adquiere el dueño sin saberlo y a su pesar.
Adquisición de la posesión: por intermedio del esclavo el amo adquiere también la
posesión. Pero esta adquisición no se efectúa sin su voluntad, como la de la propiedad.
De la adquisición por los hijos de familia: de los peculos: el jefe de familia adquiere
por la intervención de los hijos sometidos a su potestad, como por los esclavos, y
según las mismas reglas.
Veamos de qué se componían los peculios castrenses y quasi-castrense y los bienes
adventicios:
 Peculio castrense: creado por augusto, figura entre los numerosos privilegios
que los primeros emperadores han concedido a los militares.
 Peculio quasi-castrense: es Constantino quien organiza este peculio en el año
320 de nuestra era. Considera que debe tratarse con tanto favor a los hijos de
la familia que desempeñan funciones en el palacio del emperador como a los
que están en los campamentos.
 Bienes adventicios: los peculios castrense y quasi-castrense no estaban
reservado sino a ciertos hijos de familia: los soldados y los funcionarios.

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