Esta actividad se propone como el inicio de una investigación sobre el paisaje. Asimismo
abordaremos una investigación sobre el color, de modo de enriquecer la paleta con que se trabaja.
Sugerimos que este sea un trabajo práctico individual, luego de haber incorporado los aspectos
teóricos y técnicos en forma grupal. Esta actividad podría realizarse en diálogo con un trabajo para
Geografía o Ciencias Naturales, en el que se aborde la región del Noroeste argentino.
El espacio, una vez recorrido, puede capturarse. En las artes plásticas es un género que tiene una
larga tradición y diversos modos de ser encarado. Hubo artistas que salieron a observar el espacio
geográfico y luego lo reprodujeron en su estudio; otros decidieron pintar directamente en el sitio
que observaban.
Actividad 2: El color
Junto a tus alumnos te proponemos mirar el siguiente fragmento del programa Geografías,
dedicado a la Quebrada de Humahuaca.
(Ver capítulo completo)
Este paisaje tiene ciertas características de color: sin dudas, hay algunos
colores que prevalecen sobre otros. ¿Cuáles son?
Los colores que tiene la tierra son llamados en las artes visuales exactamente así: tierras (los
conocidos generalmente como ?marrón?). ¿Cómo se preparan esos colores? ¿Son iguales todos
los ?marrones??
A partir de estas observaciones y comentarios podrás trabajar junto con los alumnos sobre las
características del círculo cromático, y la relación que existe entre los colores
opuestos/complementarios: esta cualidad de rechazarse y necesitarse compositivamente.
La práctica comienza cuando cada alumno realiza tres escalas, de siete escalones cada una, de
neutralización de complementarios. Que irán:
Utilizaremos acrílicos o témperas, buscando que los colores que elijamos correspondan a los
colores del círculo cromático.
Para hacer las escalas es conveniente recortar papel blanco en porciones rectangulares de igual
tamaño para cada escalón, por ejemplo de 3 x 7 cm, que luego de pintados y una vez secos se
pegarán en una hoja blanca, uno al lado del otro.
En el extremo superior se colocará puro uno de los pares del complementario, por ejemplo el
amarillo; en el extremo bajo se colocará el violeta, ambos puros.
En la huevera se prepararán los colores intermedios, mezclando bien para que el color sea
homogéneo. La idea de las escalas es que la diferencia que exista entre cada color sea similar
(que no haya saltos abruptos). Por ejemplo: en el escalón 2 el amarillo tendrá que tener muy
poquito violeta, para que paulatinamente en los siguientes vaya teniendo más proporción de violeta
y finalmente en el 6 tenga muy poquito amarillo y mucho más violeta.
Es importante, para lograr los matices de color, limpiar siempre bien los pinceles que utilicemos.
Este trabajo permite que los alumnos puedan experimentar y descubrir una amplia gama de
colores.
Se propondrá abordar un determinado paisaje para lo cual cada alumno elegirá un espacio
geográfico. Sugerimos que el docente guíe una observación del entorno real.
Luego, se realizará un dibujo a lápiz o se pintará directamente. Para pintar el paisaje cada alumno
realizará las mezclas necesarias para obtener los distintos tierras.
Materiales de trabajo
Este trabajo puede encararse como un proyecto a largo plazo, investigando nuevas formas de usar
el color. Además, podría encararse como un juego grupal en el que se identifiquen en los trabajos
de los compañeros los diferentes tierras (la cantidad de distintos colores que cada uno logró formar
y usar en su trabajo).