POR DIVORCIO. Expediente 320, Registro Oficial 201, 10 de noviembre del 2000.
Dentro del juicio verbal sumario No. 32-2000, por divorcio que sigue María Augusta Gallegos Gordón
en contra de César Estuardo Melo Moreno se ha dictado lo siguiente:
VISTOS: María Augusta Gallegos Gordón deduce recurso de casación en contra de la sentencia
pronunciada por la Sexta Sala de la Corte Superior de Quito, en el juicio de divorcio seguido por la
recurrente en contra de su marido César Estuardo Melo Moreno, porque estima que en dicha
sentencia se ha transgredido el artículo 109, causal 3era. del Código Civil, así como también los
artículos 117, 118 y 198, numeral 4to. del Código de Procedimiento Civil. Transgresiones que las
ubica en las causales primera y tercera del artículo 3 de la Ley de Casación.- Concedido el recurso
sube a la Corte Suprema de Justicia y, por el sorteo de ley, se radica la competencia en esta Primera
Sala de lo Civil y Mercantil, la que en providencia de 17 de febrero del 2000 acepta a trámite el
recurso.- Concluida la sustanciación, atento el estado de la causa, para resolver se considera:
SEGUNDO.- Anteriormente, el artículo 109 del Código Civil, decía: "Son causas de divorcio: ... 3a)
injurias graves y actitud hostil que manifieste claramente un estado habitual de falta de armonía de
las dos voluntades en la vida matrimonial". Mediante Ley Reformatoria al Código Civil, publicada en
el Suplemento del R.O. No. 256 del 18 de agosto del 1989, se sustituyó el texto del numeral
transcrito por el siguiente: "3era.- Injurias graves o actitud hostil que manifieste claramente un estado
TERCERO.- La ley no define en qué consiste la actitud hostil, de ahí, que corresponde a las salas
especializadas de lo Civil y Mercantil de la Corte Suprema de Justicia, sentar precedentes
jurisprudenciales para la interpretación y aplicación de la causal tercera del artículo 109 del Código
Civil, reformado.- Para el criterio de esta Sala, la actitud hostil de un cónyuge está representada por
todo hecho enemistoso que lesione la justa susceptibilidad del otro y que por su gravedad calificada
de acuerdo con la educación y posición social de los cónyuges, y el medio ambiente en que se
desenvuelven manifiestan claramente un estado habitual de falta de armonía de las dos voluntades
en la vida matrimonial.
CUARTO.- En vista de que la actitud hostil de uno de los cónyuges, y la reacción temperamental que
ésta provoque en el otro, presenta matices y peculiaridades distintos en cada caso, el juzgado debe
tomar en cuenta todas las circunstancias y detalles para valorar la prueba en su conjunto, de
acuerdo con las reglas de la sana crítica. La vida privada de los cónyuges no está en vitrina para que
pueda ser presenciada por todos, por esto, en el juicio de divorcio son admisibles las declaraciones
testimoniales de empleados domésticos, de familiares y de amigos comunes, que están en
posibilidad de conocer hechos íntimos que no trascienden fuera del hogar, aunque no reúnan las
condiciones de idoneidad, cuando el juzgador tenga el convencimiento de que el testigo ha
declarado la verdad, como disponen los artículos 211 y 212 del Código de Procedimiento Civil.
QUINTO.- Del análisis de las declaraciones rendidas por los testigos Rosa Ligia Villacís (fojas 19 vta.
del cuaderno de primer nivel), Beatriz del Pozo Cabrera (fojas 20), María Piedad Pila Ronquillo (fojas
SEXTO.- Dentro del término de prueba para determinar la situación en que deben quedar los
menores habidos en el matrimonio, se han presentado copias de escrituras públicas que justifican
que el Arq. César Estuardo Melo Moreno es propietario de varios inmuebles, pero no se ha
acreditado que perciba rentas periódicas y fijas: lo que se ha demostrado es que es un distinguido
arquitecto que ejerce libremente su profesión; sus ingresos, por tanto, están sujetos a los honorarios
contratados con sus clientes lo que depende de factores cambiantes del quehacer profesional, y es
notorio que actualmente el país atraviesa una época de depresión en las actividades profesionales
de la arquitectura. Por las consideraciones expuestas, la Primera Sala de lo Civil Mercantil de la
Corte Suprema de Justicia, ADMINISTRANDO JUSTICIA EN NOMBRE DE LA REPUBLICA Y POR
AUTORIDAD DE LA LEY, casa la sentencia pronunciada por la Sexta Sala de la Corte Superior de
Quito, y, en su reemplazo, acepta la demanda y, por tanto, declara disuelto el vinculo matrimonial y
la sociedad conyugal, por divorcio entre María Augusta Gallegos Gordón y Arq. César Estuardo Melo
Moreno. Se dispone que las hijas comunes, menores de edad Estefanía Andrea y María Augusta
Melo Gallegos, queden bajo el cuidado de su madre, debiendo ambos padres sufragar los alimentos
congruos. El Arq. César Estuardo Melo Moreno para ello aportará la pensión mensual de cien
dólares para cada una, más las pensiones adicionales establecidas por la ley. Ejecutoriada esta
sentencia de conformidad con el artículo 128 del Código Civil, en armonía con el 172 de la Ley de
Registro Civil e Identificación y Cedulación del Registro Civil, subinscríbase en la respectiva
inscripción del matrimonio. Sin costas. Notifíquese y devuélvase.
Fdo.) Dres. Santiago Andrade Ubidia, Galo Galarza Paz, Ministros Jueces y Alberto Wray Espinosa.
Conjuez Permanente..