5: Primeros Auxilios.
1. Introducción.
No debemos olvidar que prestar ayuda a un accidentado además de ser una obligación
moral, es también una obligación legal, cuyo incumplimiento esta reconocido como
“delito por omisión de socorro” en el código penal, para la persona que no prestara
auxilio, incrementándose la sanción si además de omitir el deber de socorro fuera
causante de los daños.
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 1
Antes de actuar, tenemos que tener la seguridad de que tanto el
accidentado como nosotros mismos estamos fuera de todo peligro.
Por ejemplo, no atenderemos a un electrocutado sin antes
PROTEGER
desconectar la corriente causante del accidente, pues de lo contrario
nos accidentaríamos nosotros también.
3. Soporte vital básico.
La parada cardiorrespiratoria es una situación de máxima emergencia de la que depende
la vida del accidentado. La falta de oxígeno en el cerebro puede ocasionar lesiones
irreversibles y pasados unos minutos, la muerte. Para evitar la parada cardiorrespiratoria
hay que aplicar la RCP o reanimación cardiopulmonar, y así recuperar la normalidad
en la respiración y el pulso.
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 2
1ª Fase: Observar si está consciente.
Para hacerlo, nos colocamos de rodillas y a la altura de los hombros del accidentado.
Luego moveremos levemente al herido y le preguntaremos si se encuentra bien:
2ª Fase: Abrir la vía respiratoria.
En ocasiones, la simple inclinación de la cabeza hacia atrás es suficiente para que una
persona vuelva a respirar, pero puede suceder que las vías respiratorias estén obstruidas
por la lengua en pacientes inconscientes o por cuerpos extraños.
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 3
3ª Fase: Comprobar la respiración.
Para comprobar si respira el accidentado deberemos aplicar la técnica del “ver, oír,
sentir” pero de forma rápida, no pudiendo dura más de 10 segundos.
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 4
b) Si no respira o no lo hace con normalidad, es decir, solo jadea o boquea, se
llevarán a cabo las siguientes acciones:
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 5
5ª Fase: Ventilaciones boca a boca.
Junto con el masaje cardiaco deben realizarse ventilaciones boca a boca en una
secuencia de 30 compresiones, 2 ventilaciones boca a boca. El boca a boca
también debe realizarse en el caso de que comprobemos que sí tiene pulso pero no
respira.
4. Hemorragias.
Las hemorragias son causa de emergencia médica, por lo que la actuación del socorrista
debe ser rápida y decidida, de lo contrario la oxigenación de los tejidos se verá reducida
o eliminada, produciendo la muerte de los mismos. El objetivo del socorrista es evitar la
pérdida de sangre del accidentado, siempre que ello sea posible.
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 6
B. Atendiendo al tipo de vaso que se ha roto:
Hemorragias Arteriales: Cuando la sangre es de color "rojo vivo", ya que es muy rica en
02, y sale a borbotones o a golpes (por efecto del latido cardiaco).
Hemorragias Venosas: Aquí la sangre es de color 'rojo oscuro", ya que transporta CO2, y
la sangre sale de forma continua y sin presión.
Hemorragias Capilares: En este tipo la sangre también es de color "rojo vivo" y sale de
forma abundante pero sin presión, es lo que se denomina en sábana.
HEMORRAGIAS INTERNAS
Son aquellas que se producen en el interior del organismo, sin salir al exterior, por lo
tanto la sangre no se ve, pero sí que se puede detectar porque el paciente presenta
signos y síntomas de shock.
Signos y síntomas: Alteración de la conciencia (no pérdida), estado ansioso, nervioso,
pulso rápido y débil, respiración rápida y superficial, palidez de mucosas, sudoración fría
y pegajosa, generalmente en manos, pies, cara y pecho.
Actuación en caso de hemorragia interna
Ø Evitar que el herido se mueva
Ø No darle nada de comer ni de beber.
Ø Control de signos vitales.
Ø Aflojar todo aquello que comprima al accidentado, a fin de facilitar la circulación
sanguínea.
Ø Tranquilizar al herido.
Ø Evitar la pérdida de calor corporal.
Ø Colocar al accidentado estirado con la cabeza más baja que los pies.
Ø Evacuarlo urgentemente, ya que la tendencia del shock siempre es a empeorar.
HEMORRAGIAS EXTERNAS
Son aquellas en las que la sangre sale al exterior a través de una herida. Actuaremos
rápidamente para impedir o reducir al máximo posible el sangrado.
COMPRESIÓN DIRECTA DE LA HERIDA Y ELEVACIÓN DEL MIEMBRO AFECTADO.
Actuación en caso de hemorragia externa
Ø Tumbar a la víctima para evitar desmayos.
Ø Efectuar una presión en el punto de sangrado.
Ø Efectuar la presión durante un tiempo mínimo de 10 minutos, con un apósito
(gasas, pañuelo, etc.) lo más limpio posible.
Ø Si con el primer apósito no fuera suficiente, añadir más apósitos encima, pero
nunca quitar el anterior.
Ø Elevar la extremidad afectada a una altura superior a la del corazón del
accidentado.
Ø Transcurrido los 10 minutos, se aliviará la presión, pero NUNCA se quitará el
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 7
apósito.
Ø En caso de éxito se procederá a vendar la herida, por encima de los apósitos, y se
trasladará al Hospital.
Torniquete: Se emplea cuando los otros medios para parar una hemorragia no han sido
eficaces, y solo en caso de que la vida corra peligro y el socorrista esté entrenado:
5. Traumatismos.
En condiciones normales, nuestro huesos son muy resistente pero en ocasiones, como
consecuencia de determinadas enfermedades o después de sufrir un traumatismo,
pueden llegar a romperse. Entonces decimos que se ha producido una fractura.
FRACTURAS INCOMPLETAS.
FRACTURAS COMPLETAS.
Síntomas:
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 8
• Inmovilizar la fractura en la misma posición que nos la encontremos, para ello se
utilizarán férulas rígidas o tablillas, debiendo quedar inmovilizadas las articulaciones por
encima y por debajo de la zona afectada por la fractura.
• Si la fractura es abierta, antes de inmovilizar la zona debe cubrirse la herida con
apósitos estériles y proceder al control de la hemorragia.
• Conseguir ayuda médica y trasladar al accidentado a un centro sanitario para que se le
realice el diagnóstico y tratamiento adecuados.
• Quitar objetos que puedan molestar como anillos, joyas o relojes.,
• En caso de traumatismos en la columna vertebral, no mover al paciente salvo que
exista riesgo para su vida (por ejemplo, en un incendio) y en ese caso moverlo en
bloque
Heridas.
• Corte limpio en la piel, con lesión superficial que no afecta a los tejidos internos.
• Contusiones o golpes que, además de romper la piel, provocan un hematoma.
Tienen riesgo de infección, al desaparecer la función de la barrera protectora de la
piel.
• Objetos punzantes que se introducen en los tejidos (como los clavos) son heridas
más profundas y con gran peligro de hemorragia y lesiones en órganos vitales
internos.
6. Quemaduras.
Las quemaduras son lesiones que se producen en los tejidos por contacto con
elementos calientes, como el fuego, materiales calientes, sustancias químicas o
electricidad.
Los factores que van a condicionar la gravedad de una quemadura, van a ser:
A. Profundidad
Primer grado: Son poco profundas, afectando solo a la capa superficial de la piel o
epidermis. La piel es muy sensible al tacto, "molesta" pero no "duele". Presentan
enrojecimiento y escozor, sin ampollas, por ejemplo una quemadura solar. La curación
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 9
es espontánea en tres o cuatro días.
Segundo grado: Son algo más profundas, afectan a la epidermis y a la capa inferior o
dermis, dando lugar a la aparición de ampollas, que nunca hay que reventar. La curación
sucede, con métodos adecuados, entre 5 y 7 día.
Tercer grado: Son muy profundas, afectando a todas las capas de la piel. Producen
una alteración de todas las estructuras cutáneas y de las terminaciones nerviosas,
dando lugar a una piel quemada y acartonada que se denomina necrosis o escara. No
son dolorosas.
B. Extensión.
Es el factor clave que determina la gravedad por su estrecha relación con la pérdida de
líquidos y el shock. Su valoración es muy importante ya que el pronóstico de un
quemado, es directamente proporcional a la superficie de la quemadura. Aquellas
quemaduras que afecten a una superficie corporal superior al 30% deben considerarse
como muy graves. De igual forma, aquellas quemaduras que aunque tengan una
extensión menor, afecten a personas mayores, niños o enfermos, o bien se localicen a
nivel de la cara, manos o el área genital, deben considerarse también muy graves.
Esta actividad suele ser mal interpretada, ya que la gente bien intencionada pretendería
introducir a la víctima de cualquier forma, en un vehículo y realizar el transporte, pues
desconocen las nefastas consecuencias de un transporte inadecuado.
Cuando el accidentado haya sufrido una caída y pueda tener afectada la columna
vertebral; deberemos actuar sin mover en absoluto al accidentado, avisar al servicio
médico para que lo transporte al centro médico de la forma adecuada, colocando un
collarín cervical, utilizando una camilla apropiada.
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 10
Métodos para trasladar a una persona:
• Arrastre, cuando es necesario retirar a una víctima del área del peligro, a una
distancia no mayor de 10 metros y cuando el socorrista está solo.
• Cargue de brazos, cuando la persona es de poco peso.
• Cargue de brazos entre dos personas (sillita la reina).
• Transporte en camilla.
Cuando son varios los socorristas que realizan el transporte, resulta fundamental la
coordinación, por lo que es muy importante que uno de los socorristas de las órdenes al
resto a la hora de realizar los movimientos y el traslado.
Ramón Flores Ortega. Departamento de FOL. IES Juan Bosco. Curso 2018/19. 11