CENTRO DE ESTUDIOS SUPERIORES “GUILLERMO NICOLÁS”

LICENCIATURA EN FILOSOFÍA

ÉTICA NICÓMACO

El primer capítulo presenta al bien como fin de toda actividad y toda arte, pues busca
una cierta realización que se busca de acuerdo a su directiva, y no subordinada alguna otra
actividad. En cuanto a los fines hay uno que se desea por sí mismo y no depende de otros, es
más, los demás tienden a este que es el bien o como se menciona en la obra el Supremo Bien1,
que obviamente se debe tener conciencia de este.

En la búsqueda de este fin se le hace una pertenencia a la política, pues de ella se

ordenan otras ciencias, se sirve de ellas y establece normas, para el bien del hombre. Sin
embargo, al realizar una descripción de esta se torna un poco difícil, ya que presenta cierta
incertidumbre; por esta razón la materia de la política, más que teórica es practica basada en
la experiencia.

En el capítulo cuatro se desarrolla la idea del bien como finalidad del hombre.
Obviamente se hace una indagación de esta concepción y parte de diversos puntos de vista,
señalando también la concepción platónica del bien que subsiste por si mismo. También se
señala tres estilos de vida que conducen a una cierta felicidad: una del pacer o goce (que lleva
una vida sencilla), la política (busca honores y demostrarse a si misma) y la contemplación.

En el siguiente capítulo se trata de esclarecer el sentido del bien, pues se dice en estos
sentidos: “lo-que-es -pues se dice tanto en el qué-cosa (así, dios y el pensamiento) como en
la cualidad (las virtudes), en la cantidad (lo mesurado), en lo con-relación-a algo (lo útil), en
el tiempo (la oportunidad), en el lugar (la residencia)”2; ahora es conveniente encontrar una
ciencia que le caracterice, en cuanto sea en sí misma.

Posteriormente se habla de la finalidad de las cosas y se hace mención a la técnica o

acción de una ciencia, de modo que es lo que se persigue es un bien completo y
autosuficiente, no aislado sino en un ambiente político. Y como dice en el texto “felicidad

1
Aristóteles; ÉTICA A NICÓMACO; Alianza Editorial; Madrid; 2001; P. 48.
2
Ibídem; p. 54.

Juan Pablo Sánchez Limón

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es una cosa completa e independiente ya que es el fin de la acción3”. El bien, entonces, en el
hombre se da como una acción del alma conforme a la virtud.

Consecutivamente se habla de la felicidad como una virtud, la cual está en cierta

forma otorgada por la divinidad: esto implica que no deja a la felicidad como un azar “Y si
es mejor ser feliz de esta manera que serlo por azar, es razonable pensar que es así, ya que
las cosas por naturaleza son de la mejor manera en que es posible que sean4”. También señala
que le felicidad es un estado de conciencia, pues los animales por no participar de actividades
humanas no se les puede decir feliz, tampoco a los niños pues no son conscientes de esta
felicidad plena y completa.

Siguiendo se cuestiona si la felicidad es posible en la vida actual, sacando una

reflexión de que la felicidad se da en el hombre que, de cierta forma, sobrelleva las
situaciones de fortuna e infortunio será feliz, pues no será desdichado. En cuanto a los
difuntos se reflexiona la felicidad como algo que se desconoce, sin embargo, se presenta no
producen felicidad a sus familiares.

El ultimo capitulo expresa la felicidad como facultad del alma, y de esta se refiere a
la parte irracional (vegetativa) que es común a los hombres y que influye en la parte racional.
Por último, se desarrolla la definición de las virtudes intelectuales a la sabiduría
(comprensión e inteligencia) y morales (generosidad y templanza).

Concluyendo considero que la forma de desarrollar el concepto de felicidad o bien

último está bien reflexionado. Me llama la atención el capítulo diez que habla sobre el azar
como algo ilógico, lo comparaba con el mejor de los mundos posibles Gottfried Wilhelm ya
que, en cierta forma, se considera las cosas están hechas de la mejor manera posible. Pues
hace referencia a un creador, alguien que hizo las cosas y no fue un azar. Con lo que respecta
a todo lo demás de la lectura me parce una lectura con varias referencias, en especial al
platonismo con la idea del fin último

3
Ibídem; p. 58.
4
Ibídem; p. 65.

Juan Pablo Sánchez Limón