Artículo: El Tiempo
Según la encuesta Nacional de Hogares del DANE, mientras que en 1991 los
trabajadores independientes representaban el 25.3% de la población trabajadora,
en el 200 la cifra llegó al 33.6%.
El fenómeno no era nuevo pero, desde el 2000, año en que la crisis económica en
Colombia tocó límites, muchos optaron por confiarse en las cifras que llegaban del
otro lado del océano. En efecto. Mientras que en los Estados Unidos hay 6,6
millones de trabajadores virtuales, en la Unión Europea el bloque de los
independientes supera los 10 millones de personas.
¿Y en Colombia, cómo se sienten los que dieron el paso, qué dicen los expertos?
“La mayoría de los trabajos caen en una rutina que aburre a la gente”.”En las
empresas se asciende sólo hasta un cierto punto”, explica el psicólogo José
Manuel Angarita. “En las empresas hay que cumplir horarios, ponerse una corbata,
“acatar las órdenes de un jefe que no siempre es el más idóneo”.
Tírese al charco
Trabajar por cuenta propia, y en eso son coinciden los sicólogos, es tal vez más
complejo y exigente que hacerlo como dependiente de una empresa. Hay que
tener autonomía para elegir las metas, constancia para alcanzarlas y una alta
dosis de tolerancia a las mil y una frustraciones que se presentan.
Para la psicóloga Adriana Miller “el trabajo independiente antes era una opción y
ahora una imposición”, pues según lo ha podido confirmar, cada vez son menos
las organizaciones que vinculan a sus empleados a termino indefinido. En su
opinión, “los colombianos tenemos que pensar en que cada uno es su propia
empresa, desarrollar esa propia empresa y redefinir el concepto empleo y más
bien pensar en trabajo”.
El futuro