En una ciudad fue importante una adecuada administración de recursos escasos para
lograr la comodidad de las familias y nace la palabra de origen griego οικονομία
(administración de la casa) en primera instancia para referirse a esta actividad. Los recursos
están en la naturaleza, la dificultad de tenerlos radica en la dificultad o en el esfuerzo que
implica cada uno, el arte de obtener estos recursos por el trabajo de uno mismo fue la
economía; sin embargo había otra actividad muy parecida de origen artificial χρηματιστική
(crematística), consistía en la obtención y acumulación de dinero de los mercaderes
“Porque el arte de los mercaderes es arte de sacar dineros” (Aristóteles, Siglo IV a. C, p.
35), dicho arte iba en contra de la naturaleza de la economía y Aristóteles condenaba esta
actividad por la razón de enriquecer a unos cuantos de una forma antinatural evitando la
circulación libre de la moneda por la polis impidiendo la llegada de esta moneda a alguien
más, el acumular sería quitar la posibilidad a alguien de poseerla. La moneda se hizo para
facilitar un intercambio por ende es natural que se gaste no para acumularse porque ese no
fue el fin de su elaboración.
La usura también fue criticada por Aristóteles por lucrar con el dinero, éste se hizo
para poder acceder a bienes, no obstante, el querer lucrar con los préstamos es
contradictorio. Este problema fue atendido más adelante por Santo Tomás de Aquino en su
obra La Suma Teológica en la prima secundae. La compra-venta no es una tarea natural,
pero es necesaria y conlleva vender más barato o más caro un producto de lo que vale, esto
la vuelve ilícita “Utilizar el fraude para vender algo en más del precio justo es
absolutamente un pecado…” (Aquino, Siglo XII, Cuestión 77, Art. 1), la venta se efectúa
exitosamente cuando se logra intercambiar un objeto con la misma equivalencia o es
pagado al precio de equivalencia en caso de no tener un objeto del mismo valor “…para lo
cual se ha inventado la moneda…” (Aquino, Siglo XII, Cuestión 77, Art. 1), ahora bien el
producto que se suele vender tiene algún defecto y no del todo es necesario mencionar su
detalle, el comprador revisará minuciosamente el artículo, si al final lo compra es porque lo
aceptó con todo y sus defectos “…por un defecto en la sustancia específica de la cosa no
parece hacerse ilícita su venta…” (Aquino, Siglo XII, Cuestión 77, Art. 2) esto pasó
desapercibido por los pobladores mas no por los mercaderes que sabían de las fallas del
producto dando Aquino un argumento en contra “… si el vendedor conoce este defecto de
la cosa que vende, comete fraude en la venta, y ésta, por esa misma razón, se vuelve ilícita”
(Aquino, Siglo XII, Cuestión 77, Art. 2).
Pasado a los usureros, el fraile también tenía objeciones hacia ellos puesto que bajo
su perspectiva y forma de interpretar la religión imponía sus ideales diciendo “Recibir
interés por un préstamo monetario es injusto en sí mismo, porque implica la venta de lo que
no existe…” (Aquino, Siglo XII, Cuestión 78, Art. 1). No la renta es otra forma de hacer
riqueza; consiste en usar un objeto de utilidad con características de depreciación, es decir,
entre más uso se le dé se desgastará más por ende puede ser remunerado lícitamente “De
ahí que pueda lícitamente recibir un pago por el uso de un inmueble…” (Aquino, Siglo XII,
Cuestión 78, Art. 1).
Cuando aparece el excesivo aumento de los precios, en España sobre todo, Europa
empieza a tener una crisis económica debida a la circulación de más moneda, consecuencia
de la gran cantidad de oro y plata introducida a a partir del siglo XVI “…ha fluido una gran
cantidad de oro y plata del Nuevo Mundo, en especial de Perú, y que, como consecuencia,
todas las cosas son diez veces más caras que entonces…” (Bodin, 1576, p.273). Cabe
mencionar el descubrimiento de América como uno de los más importantes que por el
contexto mercantilista fue causa de una acumulación de metal, mismo que circuló en toda
Europa dando origen a la inflación. La moneda debía tener una forma, una que no fuera
estorbosa y de difícil falsificación recomendando Bodin hacerla circular con una acuñación
duradera “Sería recomendable acuñar la moneda en forma de medallas esculpidas…”
(Bodin, 1576, p.279).
Una vez la moneda empezó a circular con más frecuencia ya no se paga tributo sino
un impuesto, no obstante a los ojos de la población es injusto el trabajar y después dar una
parte al gobierno para los servicios, pero es bueno; en un país con impuestos exigentes y
bien invertidos por lo general lleva a tener mayor comodidad a su gente que es el principal
objetivo de la economía y no caer en la crematística “Todos los antiguos monarcas y
legisladores destinaban, además de las calles, templos y teatros , un cierto número de bienes
en propiedad a la república, para uso común de todos…” (Bodin, 1576, p.267), entonces
para lograr su bienestar, la sociedad tiene la responsabilidad de pagar impuestos para bienes
y servicios de uso común así como prevenir su acumulación.
El acumular riqueza es criticada porque sólo es dinero estéril que no produce alguna
riqueza, por este motivo Quesnay expresa su desacuerdo en la entrada de mucho dinero en
una nación “…pues a menudo quien pierde es la nación que recibe demasiado dinero, y
esta pérdida recae en prejuicio de la distribución de las rentas…” (Kuczynski, 1965, p. 53),
para el beneficio del bien común, ya mencionado por Bodin, también está a favor de los
impuestos “Que el impuesto no es destructivo ni desproporcionado al total de la renta de la
nación…” (Kuczynski, 1965, p. 54), otro punto a rescatar es su oposición a no
comercializar con el exterior, (a causa de los mercantilistas y sus ideas acumulativas
impedían el comercio exterior por la sospecha de la fuga de los metales) pero esta vez lo
apoyaba iniciando un periodo de libre mercado “Que no se impide el comercio exterior de
productos agrícolas: Pues como es su venta es su producción” (Kuczynski, 1965, p. 54).
Si recordamos, todavía queda sujeto una cuestión: El cómo medir el valor de las
cosas.