realizan a la programación para un alumno o alumna concreta y que suponen una ampliación
horizontal del currículum, sin avanzar objetivos y contenidos de niveles superiores. Estas
adaptaciones se realizarán en aquellas áreas o materias para las que el alumno o alumna presenta
mayores aptitudes, así como en las que están más relacionadas con sus motivaciones e intereses.
METODOLOGÍA.
Pautas generales:
La metodología debe ser flexible y abierta y estar basada en: El aprendizaje por
descubrimiento, las técnicas de aprendizaje cooperativo, el trabajo autónomo (investigación)
proporcionando estrategias de búsqueda de información, resolución creativa de problemas y el
proceso de enseñanza-aprendizaje con el profesor mediador y guía en este proceso, tutorías entre
iguales y el uso de metodologías innovadoras (uso de las TIC), entre otras... Así mismo, es
necesario flexibilizar el tiempo tanto del aula como del centro para permitir la utilización de los
espacios comunes y coordinar los horarios para el desarrollo de las actividades programadas. Del
mismo modo, los espacios deben estar en función de los diferentes intereses y ritmos de trabajo del
alumnado: Rincones de trabajo dentro del aula o inter aulas en un mismo nivel, el uso de
bibliotecas, aulas inteligentes, aula de música, etc disponibles en los centros.
EVALUACIÓN
Con respecto a los procesos de evaluación, debemos considerar qué evaluar, cómo evaluar,
quien evalúa y cuándo evaluar. Siempre, con este alumnado, debemos partir de una valoración
inicial pues será el referente de su progreso y luego establecer sus propios criterios de evaluación.
El cómo no debe centrarse exclusivamente en exámenes, también a través del análisis de sus
trabajos, exposiciones orales y de la propia valoración que el alumnado hace de su progreso después
de reflexionar y analizar sus producciones, las metas alcanzadas, las dificultades surgidas y
proponer mejoras.