OBTENCION Y MANEJO DE TESTIGOS EN BOCA DE POZO

Con el fin de uniformar el manejo y cuidado de los testigos en boca de pozo y facilitar el
ulterior manejo de éstos, cuando sean examinados en el laboratorio, deben seguirse
las siguientes especificaciones:

PLANEAMIENTO EN LA OBTENCIÓN DEL TESTIGO.

Un programa de testigos, generalmente tiene que estar planificado antes de iniciar la

perforación de un pozo. Estos programas deben ser discutidos y modificados, si es
necesario, de acuerdo al progreso de la perforación. Problemas teóricos tales como:
longitud del testigo, examen, perforación o encabezamiento, también deben ser
tornados en cuenta antes de la obtención del testigo. El pozo en perforación
“esperando la llegada del geólogo” o “esperando instrucciones”, debe reducirse a un
mínimo.

La pérdida del testigo en un 100% es rara, pero cuando ello ocurre, es usual mente en
una zona importante. Fallas mecánicas tales como: aprisionamiento del barril, rotación,
etc., pueden llevar al eventual abandono del pozo. Los testigos obtenidos por saca-
testigos de diamante, son muy delicados, pero con cierta experiencia, también pueden
ser obtenidos en un 100%.

El equipo necesario para el manejo de los testigos, debe ser cuidadosamente revisado
y probado antes de la obtención. La siguiente, es una lista de materiales que se sugiere
para el geólogo de pozo:

1.- Martillo cateador.

2.- Brújula Brunton.

3.- Wincha metálica, dividida en cm. y mm.

4.- Trapos limpiadores.

5.- Papel estañado, cinta adhesiva, lápiz marcador, cajas para

embalaje de testigos, lámpara fluorescente, tetracloruro de carbono, ácido clorhídrico
(HCL al 10% o 20%), cuchillo, bolsas de tela para fragmentos, planillas de descripción
de testigos.

6.- Luz con cordón de extensión para ajustar al vehículo del geólogo.
El geólogo debe ponerse de acuerdo con el tool-pusher, ingeniero petrolero, o el
perforista, antes de dar la orden de sacar el testigo. Asimismo, haber suficiente luz,
fuente eléctrica y agua en las cercanías.
EN POZOS DE EXPLORACIÓN, LOS TESTIGOS DEBEN SER OBTENIDOS.

 En cada cambio de formación.

 En zonas de: lutitas, arcilitas, limolitas y aún areniscas finas, debe

obtenerse testigo con fines palinológicos.

 En caso de duda sobre la identificación de la formación.

 En areniscas de interés petrolífero.

 En formaciones de más de 100 m. de espesor, conviene tomarlos en el

tope, medio y fondo.

 Para obtener información de buzamiento.

 Otros testigos pueden ser tomados de acuerdo al criterio del geólogo de

pozo.

En pozos de desarrollo se obtiene testigos, además de los anteriores, para análi-

sis físicos (porosidad, permeabilidad, saturación, dureza, etc.)

EXTRACCIÓN DEL TESTIGO DEL BARRIL.

El geólogo es quién debe sacar el testigo del barril. La extracción debe tomar un tiempo
suficiente, a fin de obtenerlo propiamente.

Cuando el testigo sale del barril tiene, por lo general, algunas rupturas mecánicas. Si
no ocurre ello, fragméntese el testigo en longitudes manuables, entre 30 cm. y 1 metro.

Luego colóquese el fondo del testigo en el fondo del cajón porta-testigos, continúese la
extracción hasta dejar vacío el barril, es conveniente revisar cuidadosamente el barril,
para estar seguro que éste está vacío.

Aunque el proceso de vaciado es rápido, algunas observaciones pueden hacerse

conforme se realiza la operación.

La “temperatura” del testigo y el lodo, algunas veces indican la presencia de porosidad

e hidrocarburos. Algunos testigos son lo bastante calientes como para levantar
ampollas en los dedos. En este caso, el testigo probablemente, proviene de una
considerable profundidad y no podrá contener hidrocarburos o porosidad, o bien
proviene de una zona cercana a una falla en relación al basamento o bien
simplemente, ser un testigo de las cercanías del basamento.
El percibir el olor rápidamente en una fractura es también útil. Después que el barril ha
sido vaciado, debe indicarse al perforador o ingeniero petrolero, la recuperación
aproximada e informar que se dará posteriormente la cifra exacta de recuperación. El
dato de recuperación aproximada, ayudará en la determinación de que el barril esté
vacío; la medida en el kelly ha sido correcta y permitirá al perforador tratar de recuperar
el pedazo de testigo que falta; asimismo, ayudará a determinar la longitud del probador
de formación que se podría emplear en caso de una prueba.

OBSERVACIÓN DEL TESTIGO.

El vaciado de un barril de 5 mts., toma aproximadamente de 2 a 5 minutos; los

siguientes 10 a 20 minutos deben emplearse en la observación del testigo. Durante
este tiempo, no se quite el lodo que está en el testigo; si es necesario, puede aplicarse
lodo fresco en ciertas áreas del testigo. Los siguientes puntos merecen especial
atención:

GAS. — Burbujeo de gas en el lodo. (Algunas veces el lodo está “aereado”, pero
la experiencia indicará la diferencia).

Debe registrarse el tiempo transcurrido entre la formación de la burbuja y su “estallido”,

distribución de burbujas, densidad en espacio, extensión areal de las burbujas y sobre
todo el tiempo total del estallido.

PETROLEO. — Escurrimiento (y estallido si está asociada con gas), a través del

lodo. Generalmente un testigo ha “producido” muchos de sus fluidos antes de ser
extraído del barril. Ello se debe a la diferencia entre la presión de fondo y la presión
atmosférica o presión de superficie. La cantidad de fluido remanente en la superficie del
testigo, está controlada por la calidad del testigo y propiedades físicas del fluido
(siempre que el barril usado sea el de rutina).

AGUA. — Fluencia de agua a través del lodo. En relación a las observaciones

debe intentarse determinar si el agua es fresca, sulfurosa o salada. Cristales de sal que
se han precipitado en la superficie seca de un testigo, no necesariamente indican
producción de agua.

TIEMPO DE SECADO DEL LODO. — Debe registrarse el tiempo necesario para

que seque el lodo del testigo. En zonas porosas, seca lentamente (20 a 30 min.). En
zonas no porosas lo hace más rápidamente (5 a 10 min.). La investigación de
hidrocarburos, debe realizarse durante estos tiempos. Ello incluye el examen olfatorio
de fracturas frescas, fluoroscópico, macroscópico y otros.

MUESTRAS DE SATURACIÓN.

Los primeros pocos minutos de observación, deben determinar si son necesarias o no

muestras de saturación. En caso de duda deben tomarse dichas muestras.
Las muestras de saturación son tomadas para el laboratorio de producción.
Sus datos pueden indicar zonas de gas, petróleo y agua, o bien, sus contactos. La
calidad de estos datos depende de las operaciones siguientes, que están bajo el
control directo del geólogo de pozo: (Ello se relaciona a todos los testigos de una
formación, en un pozo o varios y especialmente en el caso de pozos de desarrollo).

TIEMPO. — Se empieza seleccionando las muestras de saturación,

aproximadamente al mismo tiempo que el barril ha sido vaciado para cada testigo.

RECIPIENTE DE MUESTRAS. — Las muestras de saturación deben ser en-

vueltas en papel de aluminio en dos direcciones, luego en tela. (debe cuidarse de
expulsar todo el exceso de aire al envolverlas). Se debe cubrir la tela con cera
parafínica. En el caso que el testigo deba ser enviado a una gran distancia, ade más de
empaquetarse como se indica antes, el testigo debe estar envuelto en cera parafínica
dentro de la caja en que será remitido. Para los casos de testigos laterales de pared,
éstos deberán ser recolectados aproximadamente cada 30 cm. y su envoltura y
empaquetamiento, están a cargo de la Compañía de Operaciones que realiza el
servicio, pero el geólogo oportunamente deberá comunicar el objetivo que se trata de
conseguir con las muestras al operador contratista.

SELECCION DE MUESTRAS. — La selección de muestras debe hacerse al

mismo tiempo, fraccionándose en aproximadamente 10 cm. de longitud y parándolas
por un extremo. (otra persona puede ayudar envolviendo y cerrando con cinta). Se
selecciona una muestra cada 30 a 45 cm. dependiendo ello de la calidad y cantidad de
saturación (los mejores tramos). Deben seleccionarse las muestras donde la litología,
grado de saturación y propiedades físicas son las más uniformes. Debe limpiarse y
rasparse todo el lodo de la muestra. (Nunca se lave una muestra de saturación).

LIMPIEZA DEL TESTIGO.

Innecesario es decir la importancia que tiene la limpieza del testigo para los fines de la
descripción del mismo, sino también para los procesos de laboratorio del testigo.

Diferentes testigos, requieren diferentes técnicas de manejo. En una arenisca de un

pozo de desarrollo de reservorio, es probablemente mejor limpiarla con un trapo,
inmediatamente salida del barril, marcarla y envolverla entre las muestras de saturación
si así se desea.

Testigos de pozos exploratorios en rocas calcáreas deben ser observados antes de

quitarse el lodo.

MARCADO DEL TESTIGO.

El único proceso que puede ser consistente para todos los testigos, es el marcado. La
limpieza y buena presentación son importantes.
Se debe empezar desde el tope del testigo, acomodar cada fragmento unido como
originalmente estaba en el reservorio. Se debe dibujar la “LINEA CENTRAL” y medir
“marcas de profundidad”, cuando se llega a la profundidad de una muestra de
saturación, se la desenvuelve y ubica en su posición, marcando sobre ella la Línea
Central, midiendo a través de ella su profundidad y marcándola sobre su línea central;
se la vuelve a empaquetar cerrando la muestra en una nueva bolsa; marcando su
profundidad en ésta se sigue marcando el testigo hasta terminarlo.

Una muestra de saturación no deberá exponerse al aire por más de 15 a 20

segundos.

La “Línea Central” es muy útil para ciertos fines. Rápidamente orienta el testigo para el
geólogo de pozo y para el laboratorista. Medidas como de relación arena/arcilla,
espesor neto de producción (net pay), porcentaje de porosidad total, etc., son
realizadas sobre esta línea. Por ello, todos los análisis deben seleccionarse sobre la
misma.

La Línea Central deberá ser recta y continua sobre toda la longitud del testigo (porta-
testigos puede ser adaptado para este propósito).

Un lápiz especial debe usarse para marcar testigos. La tinta deberá ser negra. Para
mejorar los resultados, la superficie a marcar deberá estar razonablemente seca.

RECUPERACIÓN DEL TESTIGO.

La recuperación del testigo debe medirse lo más exactamente posible al centímetro. El

informe de la recuperación neta, es de conveniencia para el geólogo, la compañía de
trépanos, el perforador e ingeniero petrolero.

Ocasionalmente puede recuperarse más testigos del que fue coroneado. Esta es una
situación muy anormal, pero puede ser posible. Las causas pueden ser:

 Usar diferente peso en el trépano al iniciar y terminar el

proceso.
 Incorrección en el Geolograph.
 Inseguridad en la medida de las barras o en el Nelly.
 Recuperación de una porción de un testigo antes perdido.

Pérdida de testigo, generalmente ocurre en el fondo del testigo que se está cortando.
Esto es cierto, si las huellas del trépano, en el tope del testigo, están marcadas. Si no
se hallan presentes, la pérdida puede ser tanto de arriba como de abajo. La no
recuperación de la parte inferior del testigo, ocurre siempre por hallarse los cuchillos
por encima de la punta de corona.
Algunas veces butitas “alteradas” pueden estar en el testigo tan fracturadas que la
seguridad en la medida es imposible. En ese caso la recuperación debe ser solamente
estimada.
El testigo perdido puede ser recuperado en un siguiente coroneo. Este se marca como:
“Testigo Nº 1 etc.”, “Perdido”, en vez de “Testigo Nº 2 etc.”. El testigo perdido es difícil
de precisar, a menos que una recuperación extra se haya medido. Algunos indicios son
la presencia de superficies “doblemente coroneadas”. Ocasionalmente esto involucra el
remarcar las profundidades en el testigo.

En casos raros, fragmentos de cavernas, recortes o trozos, pueden ser “coroneadas”

mientras se corta un testigo. Estos pedazos son obvios, pero en algunos casos estos
“pseudo-testigos” han sido descritos como parte integral de un testigo verdadero.

FRAGMENTOS DEL TESTIGO.

Los fragmentos del testigo pueden representar litología, saturación, propiedades físicas
y fracturas. Por lo menos un fragmento deberá tomarse y embolsarse por cada metro
perforado de testigos, (en casos excepcionales, intervalos más largos pueden usarse).
Es conveniente el preparar las bolsas para fragmentos, antes de iniciar la operación.

No se fracture el testigo innecesariamente o estropee una parte del testigo para los
análisis.

Todos los fragmentos deben incluir una parte de la superficie externa del testigo y por lo
menos una cara de alguna fractura (si hay fractura presente). Para fracturar debe
hacerse donde se desee fracturar y no donde el testigo quiera romperse. Es más fácil
romper un fragmento si se sostiene el testigo en la mano y se golpea con el martillo, en
vez de golpearlo contra el suelo.

DESCRIPCIÓN DE LOS FRAGMENTOS DEL TESTIGO.

Siempre refiera la descripción al testigo total, mientras se examina microscópicamente

y describe los trozos del testigo. Esto es especialmente importante cuando se analiza
fracturas.

Es necesario realizar un borrador de las descripciones, antes del examen final y es

mejor obtenerlo inmediatamente después de que se ha hecho la recuperación.

EMPAQUE DEL TESTIGO.

El geólogo debe empacar por sí mismo, el testigo o supervisarlo, teniendo cuidado en

la correcta orientación de los testigos en la caja, así como los correctos intervalos.

Muchas de las cajas de testigos, pueden ser nominadas o marcadas antes de la

obtención del testigo. Todos los lugares que se ha dejado en blanco deben ser llenados
antes del empaque.
Las cajas deben ser enumeradas a partir del tope del testigo hacia el fondo. En el
extremo de la caja que contiene el tope debe anotarse.
Cada caja debe llenarse lo más posible. Para embalar el testigo y evitar que se mueva,
puede usarse trapos viejos, etc. La totalidad del testigo debe ser encajonada,
incluyendo “lutitas sin valor”, anhidritas, etc.

Sacatestigos

Siempre que se requiera tomar muestras a profundidad, se recomienda el uso de un

sacatestigos.

Los sacatestigos se utilizan para recoger perfiles de sedimentos (distribución vertical);

como es el método que menos perturba a la muestra, suele preferirse su uso en los
casos en los que es esencial mantener la integridad del perfil de sedimentos. Para el
análisis, los testigos pueden segmentarse siguiendo los horizontes sedimentarios.
La cantidad de material que recoge el sacatestigos depende de la sección y la
profundidad del sacamuestras.

Los sacatestigos suelen tener un diámetro de entre 3,5 y 10 cm.

Los muestreadores de caja pueden tener una superficie de muestreo de 0,025 m 2 a 1
m2. La profundidad de penetración varía de 1 a 2 m en el caso de los sacatestigos que
penetran por gravedad y de 2 a 20 m en el caso de los sacatestigos accionados por
percusión, pistón o vibraciones.

Los sacatestigos accionados por vibraciones (vibrocores, también conocidos en

algunas partes con el nombre de vibracores) son dispositivos de toma de muestras muy
utilizados, dado que pueden tomar muestras en la mayoría de los tipos de sedimentos
con una excelente integridad de la muestra. Suelen utilizarse en sustratos duros. En los
vibrocores, la muestra se obtiene haciendo vibrar un cilindro de gran diámetro que se
entierra en la columna de sedimentos; permite recoger de manera fiable muestras de
sedimentos de gran espesor. La mayoría tienen una profundidad máxima de
penetración de hasta 5 m, pero algunos alcanzan los 10 m o hasta más. Cabe notar
que la profundidad de recuperación se ve muy limitada en depósitos densos de arena
Los sacatestigos por tubos de succión son otro tipo de dispositivo de toma de muestras
y se utilizan especialmente para recoger muestras de hasta 2 m de profundidad en
materiales blandos. Permiten recoger el estrato superior blando, en el cual suelen
encontrarse los agentes contaminantes.

Una de las desventajas del sacatestigos por gravedad es su limitada aplicación en

lechos de sustrato duro. Si el testigo contiene varias capas distintas de sedimentos, es
posible que sea necesario tomar muestras estratificadas. En estos casos puede
recurrirse a sacatestigos de mayores dimensiones o a muestreadores de caja más
grandes, pero como éstos suelen ser relativamente grandes y pesados, también
requieren ciertas prestaciones del buque de reconocimiento. La elección de
sacatestigos depende de los objetivos del programa de muestreo, del tipo de
sedimento, de la profundidad del agua y de las corrientes. La profundidad de
penetración debería ser igual a la profundidad de dragado prevista.
SACATESTIGOS DE GRAVEDAD

Sacatestigos muestreador de caja y pala Sacatestigos muestreador de caja

Gray-O.Hara