Negrita y cursiva en las citas de la Escritura indica que es énfasis del autor.
Cómo Orar
(Publicado originalmente en inglés bajo el título: How to Pray)
ISBN: 978-1-60374-709-7
eBook ISBN: 978-1-60374-710-3
Impreso en los Estados Unidos de América
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Contenido
1. La importancia de la oración.............................7
2. Orar a Dios........................................................31
3. Orar y obedecer............................................... 40
4. Orar en el nombre de Cristo........................... 48
5. Orar en el Espíritu........................................... 60
6. Orar siempre y no desmayar........................... 66
7. Permanecer en Cristo...................................... 72
8. Orar con acción de gracias.............................. 79
9. Obstáculos en la oración................................. 83
10. Cuándo orar..................................................... 98
11. La necesidad de un avivamiento general..... 108
12. La oración antes y durante el avivamiento.... 125
Acerca del autor......................................................143
1
La importancia
de la or ación
El ministerio de la intercesión
La oración ocupaba un lugar muy importante
en la vida terrenal de nuestro Señor. Veamos, por
ejemplo, Marcos 1:35: “Levantándose muy de maña-
na, siendo aún muy oscuro, salió y se fue a un lugar
desierto, y allí oraba”. El día anterior había sido muy
ajetreado y emocionante, pero Jesús acortó las horas
de sueño necesario para poder levantarse temprano
y volcarse en la necesitada oración.
Vayamos a Lucas 6:12, donde leemos: “En
aquellos días él fue al monte a orar, y pasó la noche
orando a Dios”. Nuestro Salvador ocasionalmente
encontraba necesario permanecer una noche entera
en oración.
La palabra orar y oración se usan al menos vein-
ticinco veces en conexión con nuestro Señor en el
breve registro de su vida en los cuatro Evangelios,
y que Él oraba se menciona en lugares donde no se
usan estas palabras concretas. Evidentemente, la
La importancia de la oración 13
Libertad de la ansiedad
En cada preocupación, ansiedad y necesidad de
la vida, la oración de acción de gracias es el medio
que Dios ha dispuesto para ser libre de toda ansie-
dad y obtener la paz de Dios que sobrepasa todo
entendimiento.
Pablo dijo:
Necesitamos orar
La oración es necesaria debido a lo que consi-
gue. Se ha dicho mucho acerca de eso ya, pero se
debería añadir más. La oración promueve nuestro
crecimiento espiritual como casi nada más; de he-
cho, como nada excepto el estudio de la Biblia. La
oración y el estudio de la Biblia van de la mano.
La importancia de la oración 25
Or ar a Dios
La oración y el ayuno
¿Cómo alcanzaremos esta sinceridad en la
oración?
No será intentando llegar nosotros a ella. El
verdadero método se explica en Romanos 8:26: “Y
de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra de-
bilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo
sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por noso-
tros con gemidos indecibles”. La sinceridad que con-
seguimos con los esfuerzos de la carne es una cosa
repulsiva. La sinceridad creada en nuestro ser por
el Espíritu Santo es agradable a Dios. Repito: si
deseamos orar correctamente, debemos recurrir al
Espíritu de Dios para que nos enseñe cómo orar.
Es aquí, en esta conexión, donde entra el ayuno.
En Daniel 9:3 leemos que Daniel volvió su rostro “a
Dios el Señor, buscándole en oración y ruego, en ayu-
no, cilicio y ceniza”. Hay algunas personas que pien-
san que el ayuno pertenece a la antigua dispensación,
Orar a Dios 37
Unidad en la oración
Otro secreto de la forma apropiada de orar se
encuentra en Hechos 12:5. Aparece con estas dos
palabras: “la iglesia”. La oración unida tiene poder.
Por supuesto, hay poder en la oración de un indivi-
duo, pero hay mucho más poder en la oración uni-
da. Dios se deleita en la unidad de su pueblo y busca
enfatizarla de todas las formas posibles. Por eso, Él
pronuncia una bendición especial sobre la oración
colectiva. En Mateo 18:19, leemos: “Otra vez os digo,
que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra
acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho
por mi Padre que está en los cielos”. Esta unidad, sin
embargo, debe ser real. El pasaje que se acaba de
citar no dice que si dos se ponen de acuerdo para
pedir, sino que si dos se ponen de acuerdo “acerca de
cualquiera cosa que pidieren”. Dos personas podrían
ponerse de acuerdo para pedir por la misma cosa,
y aun así puede no haber un acuerdo sobre la cosa
que pidieron. Uno podría pedirlo porque realmente
lo deseaba; el otro podría simplemente pedirlo para
complacer a su amigo. Pero donde hay acuerdo real,
donde el Espíritu de Dios lleva a creyentes a una
Orar a Dios 39
Or ar y obedecer
Orar de veras
El Salmo 145:18 enfoca un gran haz de luz ha-
cia la pregunta de cómo orar: “Cercano está Jehová a
todos los que le invocan, a todos los que le invocan de
veras”. Esa pequeña expresión “de veras” es digna de
un estudio más a fondo. Si toma su concordancia
Orar y obedecer 45
Or ar en el nombre
de Cristo
Perdón en nombre de Él
Hace años, cuando D. L. Moody era joven en el
trabajo cristiano, visitó un pueblo en Illinois, en el
cual había un juez que no era cristiano. La esposa de
este juez le pidió al Sr. Moody que hablara con su
marido, pero él respondió: “No puedo hablar con su
marido. Yo soy tan solo un joven cristiano sin edu-
cación formal, y su marido es un incrédulo erudito”.
Pero la esposa no aceptó un no como respues-
ta, así que el Sr. Moody decidió ir a hablar con el
juez. Los empleados en la oficina externa se burla-
ron cuando el joven hombre de negocios venido de
Chicago entró a hablar con el erudito juez.
52 Cómo Orar
Or ar en el Espíritu
Orar con fe
Si queremos orar con poder, debemos orar
con fe. En Marcos 11:24, Jesús dijo: “Por tanto,
os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que
lo recibiréis, y os vendrá”. Por muy positiva que sea
cualquier promesa de la Palabra de Dios, no la dis-
frutaremos a menos que confiadamente esperemos
su cumplimiento. Santiago dijo: “Y si alguno de vo-
sotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual
da a todos abundantemente y sin reproche, y le será
dada” (Santiago 1:5). Ahora bien, esa promesa es
tan positiva como puede ser una promesa. Los si-
guientes dos versículos añaden: “Pero pida con fe,
no dudando nada; porque el que duda es semejante
a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y
echada de una parte a otra. No piense, pues, quien tal
haga, que recibirá cosa alguna del Señor” (Santiago
1:6–7). Debe haber expectación confiada y firme.
Pero hay fe que va más allá de la expectación. Cree
que la oración se escucha y que la promesa se cum-
ple. Esto viene en Marcos 11:24: “Por tanto, os digo
que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibi-
réis, y os vendrá”.
64 Cómo Orar
Or ar siempre y
no desmayar
66
Orar siempre y no desmayar 67
Permanecer
en Cristo
72
Permanecer en Cristo 73
Or ar con acción
de gr acias
Obstáculos en
la or ación
Oraciones egoístas
El primer obstáculo en la oración se encuentra
en Santiago 4:3: “Pedís, y no recibís, porque pedís mal,
para gastar en vuestros deleites”.
Un propósito egoísta en la oración le quita poder
a la oración. Muchas oraciones son egoístas. Puede
83
84 Cómo Orar
¿Quién es primero?
El tercer obstáculo en la oración se encuentra
en Ezequiel 14:3: “Hijo de hombre, estos hombres han
puesto sus ídolos en su corazón, y han establecido el
tropiezo de su maldad delante de su rostro. ¿Acaso he
de ser yo en modo alguno consultado por ellos?”. Los
ídolos en el corazón hacen que Dios rehúse escuchar
nuestras oraciones.
¿Qué es un ídolo? Un ídolo es cualquier cosa
que toma el lugar de Dios, cualquier cosa que sea el
máximo objeto de nuestro afecto. Solo Dios tiene
derecho al puesto supremo en nuestros corazones.
Todo y todo lo demás debe estar subordinado a Él.
Imagínese que un hombre hace de su esposa un
ídolo. No que un hombre pueda amar demasiado a
su mujer, sino que puede ponerla en el lugar inco-
rrecto. Puede ponerla antes que a Dios. Cuando un
hombre considera el placer de su mujer antes que el
Obstáculos en la oración 91
Un espíritu no perdonador
El quinto obstáculo en la oración se encuentra
en Marcos 11:25: “Y cuando estéis orando, perdonad,
si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro
Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vues-
tras ofensas”.
Un espíritu no perdonador es uno de los obs-
táculos más comunes en la oración. La oración es
contestada sobre la misma base con la que son per-
donados nuestros pecados. Sin embargo, Dios no
puede tratarnos sobre una base de perdón mientras
nosotros albergamos cosas malas contra quienes
nos han ofendido. Cualquiera que esté albergando
rencor contra otro ha cerrado el oído de Dios ha-
cia sus propias peticiones. Muchos claman a Dios
por la conversión de su esposo, hijos, o amigos y se
preguntan por qué sus oraciones no son respondi-
das. El secreto de este dilema es algún rencor que
Obstáculos en la oración 95
Cuándo or ar
La oración en la mañana
Jesús escogió las primeras horas de la maña-
na para la oración. Muchos de los hombres más
98
Cuándo orar 99
Noches de oración
En Lucas, encontramos más luz acerca del
momento correcto para orar: “En aquellos días él
fue al monte a orar, y pasó la noche orando a Dios”
(Lucas 6:12). Aquí vemos a Jesús orando por la no-
che, pasando toda la noche en oración. Por supues-
to, no tenemos razón para suponer que esta era la
constante práctica de nuestro Señor, ni tampoco
sabemos cuán común era esta práctica. Pero había
ciertos momentos en que toda la noche era emplea-
da en oración. Aquí también, haríamos bien en se-
guir los pasos de nuestro Maestro.
Por supuesto, hay una forma de apartar noches
para la oración en la cual no hay beneficio. Es puro
legalismo. Pero el abuso de esta práctica no es la ra-
zón para desecharla por completo. Uno no debería
decir: “Voy a pasar una noche entera en oración”,
pensando que hay algún mérito que ganará el favor
de Dios en este ejercicio. Eso es legalismo. Pero a
menudo hacemos bien al decir: “Voy a apartar esta
noche para encontrarme con Dios y para obtener
sus bendiciones y su poder. Si es necesario y Él me
lleva a hacerlo, pasaré la noche completa en oración”.
Cuándo orar 101
La necesidad de un
avivamiento gener al
La or ación antes
y dur ante el
avivamiento
125
126 Cómo Orar
Iglesia, ¡despierta!
Fue un golpe maestro de Satanás conseguir
que la iglesia, generalmente, dejara a un lado esta
poderosa arma que es la oración. Satanás está per-
fectamente dispuesto a que la iglesia multiplique sus
organizaciones y maquinaria para la conquista del
mundo para Cristo si esto conlleva dejar la oración.
Se mofa al ver a la iglesia hoy y dice para sí: “Pueden
tener sus escuelas dominicales y sus reuniones de
La oración antes y durante el avivamiento 141
143
144 Cómo Orar