JORDAN MATEO PEDRAZA CALDERON

JUAN DAVID
HGCL-12
¿PABLO MORILLO TAN PACIFICADOR COMO LO PINTAN?

Pablo Morillo nació en Zamora en 1775 y vivió casi toda su vida en los cuarteles.
Indudablemente Morillo fue un valiente militar que ascendió por sus méritos en batalla y
se entregó por entero a su patria. Los españoles catalogan a Morillo como un ilustre
caudillo “tan rico en honores como pobre en hacienda, habiendo consumido toda su vida
a la grandeza e independencia de su patria y al servicio leal a su rey.
Morillo fue un “tropero” con gran don de mando y visión para el combate, pero fue un
oficial iletrado que pasó del arado a las trincheras y en el fragor de las batallas no tuvo
tiempo ni vocación para aprender cosa distinta a la guerra. A fines de 1814 el rey
Fernando VII designa a Morillo jefe de la expedición pacificadora que inicialmente tenía
como destino a Montevideo y como objetivo la reconquista de Rio de la Plata. La caída
de Montevideo en manos patriotas cambió el rumbo de la expedición y para nuestra
desgracia, ya no desembarcaría en playas uruguayas sino en las costas venezolanas
controladas por los realistas. La expedición conformada por 15.000 hombres en 75
buques. Morillo empezó su carnicería desde Cartagena y en Santa Fe completó la
macabra tarea con un Tribunal de Guerra, el Tribunal de Purificación y la Junta de
Secuestros, que condenó a muerte y a prisión, confiscó los bienes de los patriotas y
envió al exilio a todos aquellos que habían actuado contra las autoridades coloniales o
apoyado la insurgencia.
La crueldad de los “pacificadores” fue inaudita. Después de fusilar a sus víctimas,
colgaban sus cuerpos de la horca y a muchos les prendían fuego o los descuartizaban.
Obligaron a los hijos a azotar a sus padres y a otros los amarraban en parejas y los
despeñaban por precipicios.
Al final de todo Pablo Morillo no tenía nada que hacer en América, debido a eso renuncio
a la gobernación de capitanía de Venezuela y regreso a España, luego de unos años
Morillo se casó por poderes mientras adelantaba su pacificación en la Nueva Granada,
Fernando VII, finalmente, le retiro su protección y lo despojo de sus remuneraciones, el
general murió en el Balneario de Baréges, su muerte fue tortuosa, antes de morir sintió
que una fuerza desmesurada lo introducía en una suerte de costal, todo esto nadie lo
pudo observar. Después de sentir la fuerza desmesurada de olvido de todos sus
padecimientos, en algún momento en el fondo del costal empezó a surgir una luz, Morillo
creyó que así era la muerte, pero después la luz se fue convirtiendo en una lanza que
era sostenida por un hombre desnudo montado en un caballo.
A fin de cuentas, de Pablo morillo se puede decir sarcásticamente que fue un pacificador
para el pueblo de España, pero para nosotros Morillo fue un exterminador, debido a que
dejaba morir a todos los moribundos dejándolos agonizar y así exterminando nuestro
pueblo.