Anda di halaman 1dari 2

EL SUEÑO EN EL ADULTO MAYOR

Mucha gente cree que las personas adultas mayores necesitan dormir menos. Sin
embargo, lo que disminuye con la edad no es la necesidad de dormir, sino la capacidad
de dormir.

Dormir de noche permite que los centros nerviosos se carguen de fluidos vitales
favoreciendo la vida al hacerla más armónica y a la vez longeva porque retarda el
envejecimiento. Los ciclos sueño/ vigilia están controlados por nuestro reloj biológico o
ritmo circadiano y a medida que envejecemos nuestro reloj biológico se adelanta.

El sueño en la persona adulta mayor sufre cambios en la continuidad, duración y


profundidad, propios del envejecimiento, por lo cual generalmente el adulto mayor
considera su sueño poco satisfactorio. También una gran proporción de ellos sufren
enfermedades crónicas, consumen fármacos, enfrentan situaciones psicológicas y
sociales que pueden afectar su sueño. Así, se ha encontrado que entre la tercera parte y
la mitad de las personas mayores de 65 años tienen algún tipo de problema para
dormir e incluso una cuarta parte tiene serias dificultades, siendo el insomnio el mayor
problema.

Todos estos eventos afectan la calidad de vida, trastornan la relación y pueden alterar
el desempeño de las actividades cotidianas. Por lo tanto, el sueño adecuado por las
noches es una de las principales necesidades del adulto mayor para mantener una vida
activa y saludable.

CAMBIOS FISIOLÓGICOS DEL SUEÑO EN EL ADULTO MAYOR

Numerosos estudios han demostrado cambios relacionados con la edad con la


continuidad, duración y profundidad del sueño. Estos cambios ocurren en personas
sanas y no están relacionadas con las enfermedades. Sin embargo, existen diferencias
individuales en la calidad de sueño.

-Entre los principales cambios se encuentran:

-Disminución en la cantidad y duración de sueño.

-Las siestas diurnas aumentan

-Aumento de la cantidad de sueño ligero y una disminución de la cantidad de


sueño profundo.

-Se levantan temprano por las mañanas.

-Cambios frecuentes de un estado de sueño a otro.

-El adulto mayor es más sensible a los cambios de horario.

Dentro de sus repercusiones, la privación del sueño puede provocar varios síntomas y
enfermedades, como pérdida de la memoria a corto plazo, reducción de la capacidad
de atención, concentración, disminución de coordinación motora y la capacidad de
adaptación, irritabilidad, fatiga, intranquilidad, desorientación, confusión, depresión,
apatía y somnolencia.
En el proceso de envejecimiento existen factores que pueden influir en el sueño directa
o indirectamente. Las influencias directas afectan al sistema nervioso y los mecanismos
fisiológicos (ritmo cardiaco) relacionados con: la continuidad, duración y profundidad
del sueño que ocurren en la persona sana.

El uso indiscriminado de medicamentos también produce insomnio y vigilia excesiva,


todos estos factores estarían afectando la calidad del sueño del adulto mayor.

El insomnio es uno de los trastornos más frecuentes en los adultos mayores, el cual se
define como una disminución sostenida de la cantidad del sueño habitual, usualmente
es de etiología multifactorial y puede verse asociado a cambios en el horario de
acostarse, enfermedades crónicas y enfermedades mentales.

El sueño dificultoso o no reparador influye en la capacidad de concentración hay mayor


probabilidad de caídas, aumenta la somnolencia diurna, la irritabilidad y, por lo tanto,
afecta la convivencia de los adultos mayores y de su grupo familiar.

 Comer liviano en la noche y a más tardar dos horas antes de acostarse. Evitar
tomar estimulantes como el café, té, alcohol y coca cola.
 Evitar ver televisión cerca de la hora de dormir, en especial, programas de
violencia.
 Evitar las siestas.
 Evitar fumar antes de acostarse o ya en la cama.
 Respetar las horas de sueño, mantener un horario para acostarse y para
levantarse.
 Si se duerme mal y se despierta con cansancio durante un tiempo, consultar a
un médico para investigar las causas y encontrar soluciones.

Anda mungkin juga menyukai