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Ensayo - Colombia: espacio, tiempo y diferencia

Juan Diego Trujillo C. 201914685

Histórica dinámica reductora y discriminatoria en el territorio colombiano

Desde sus tiempos como un territorio gobernado por la corona española, en su proceso de
independencia, en su formación como Estado y aún hoy en día como uno ya establecido,
Colombia ha sufrido una dinámica provocada por distintos factores que la ha llevado a ser
una nación supremamente desigual e injusta con quienes fueron sus primeros pobladores y
algunos otros grupos que surgieron a través de la llegada de los españoles los cuales se han
convertido en minorías sistemáticamente reducidas y discriminadas con el paso del tiempo.

Es preciso hacer un recorrido histórico partiendo del momento de la conquista, la cual trajo
consigo una reducción de aproximadamente el 62.5% de los nativos que habitaban el
territorio, hecho que se dio en tan solo 60 años, según afirman Michael J. Larosa y Germán
R. Mejía en su libro “Historia concisa de Colombia”. Lo anterior, junto con la llegada de
hombres blancos, esclavos traídos del África y la posterior mezcla de los unos con los otros
en materia reproductiva, provocan que hoy en día Colombia sea un país en primer lugar
históricamente estratificado, y, en segundo lugar, ocupado en un 78% por población mestiza.

Llegando al largo proceso de colonización que duró un aproximado de 260 años, podemos
observar a través de mapas tales como las pinturas de tierras, pantanos y anegadizos de la
ciudad de Santa fe, el cual fue realizado por orden de la corona española en el año 1614 con
el objetivo de enterarse de los avances en este proceso, como ocurrió un cambio drástico en
el uso del territorio, el cual paso de ser uno netamente agrícola por sus excelentes condiciones
para este ámbito, a ser uno en su gran mayoría ganadero desde el momento en que los
españoles reemplazan los cultivos de los nativos por grandes manadas de animales,
especialmente de vacas, aunque también cerdos y caballos, hecho que ha trascendido y que
podemos observar en la actualidad ; también nace el sistema de haciendas, con el cual se da
oficial inicio a la concentración de la mayor parte de la tierra en manos de algunos pocos, los
cuales en primera instancia se la arrebataron a sus verdaderos dueños, y por otro lado la
imposición de algunas otras actividades económicas como la extracción de recursos
minerales, la siembra de productos típicos de Europa y el comercio de esclavos.
Es importante saber que durante este proceso los españoles fundaron pueblos tales como lo
fueron la Serrezuela o hasta el mismo pueblo de Bogotá con el objetivo de concentrar ahí a
la población nativa, evangelizarla y convertirla en mano de obra para las actividades
económicas de los nuevos pobladores. Se debe tener presente que no todas las comunidades
indígenas lograron ser sometidas debido a que generaron una resistencia cultural que les
permitió utilizar el sistema español en su propio beneficio, un ejemplo claro de esto, es el
régimen de resguardos que la corona interponen en 1542 como una medida para la protección
superficial de estas etnias. En este punto es claro que durante estos dos periodos no hubo
únicamente una reducción de los nativos en termino poblacionales, sino que fueron
moldeados y arrancados de sus raíces y culturas según los intereses de los españoles y que,
además, se da origen en Colombia a grupos poblacionales históricamente vulnerados como
los Afrocolombianos, que son aquellas generaciones descendientes de personas de raza negra
africana, en este caso, de los esclavos.

Arribando en el proceso de independencia, es de vital importancia dar a entender que esta no


fue de beneficio para todos y esto se ve reflejado en hechos puntuales: las poblaciones
indígenas que lograron resistirse al dominio de los españoles se sentían más seguros bajo el
mando de una corona lejana que de una u otra manera los protegía, que de una población de
mestizos y criollos que reclamaban sus tierras, pero no mostraban interés alguno por proteger
sus raíces. Por otro lado, la independencia no significo un verdadero cambio para los negros
y esclavos si se tiene en cuenta que en algunos casos se les ofrecía la libertad con la condición
de combatir en la guerra, y se puede decir con certeza que la mayoría de ellos murieron en el
intento (caso de los peninsulares y los patriotas). En 1821, con la constitución de Cúcuta, se
estableció la libertad de vientres que concedía la libertad a los esclavos nacidos en ese año,
pero esta solo sería otorgada cuando estos cumplieran 21 años. A los negros a los cuales se
les concedió la libertad no se les reconoció como ciudadanos, lo que implicaba que no eran
iguales a blancos o mestizos, los únicos que podían ser titulares de derechos en la nueva
república. Únicamente en 1851 se ordena la liberación de todos los esclavos en el territorio
nacional y se prohíbe en este cualquiera forma de esclavitud. Sin embargo, esto no los haría
exentos de discriminación y exclusión.
Cuando Colombia se independiza inicia un proyecto civilizador basado en un crecimiento de
la economía de mercado, suceso que da nacimiento al campesinado en Colombia al convertir
a ciertas poblaciones de raíces indígenas y afrodecendientes en sociedades rurales en
situación de pobreza, mientras que paralelamente iban naciendo las grandes ciudades. Ese
crecimiento suponía la puesta en marcha de proyectos agroindustriales, mineros y madereros
que provocaron la expulsión de cantidades significativas de campesinos de sus tierras,
quienes tuvieron que buscar nuevas en distintas zonas, entre ellas, algunas habitadas por
comunidades indígenas desde mucho tiempo antes de la llegada de los españoles. Esto
provocó que grandes masas de blancos y mestizos llegaran a explotar económicamente zonas
como la amazonia y la Orinoquia las cuales estaban habitadas por naturales en su gran
mayoría.

Este crecimiento económico enfocado en la explotación de estas zonas en específico, y las


grandes afectaciones que esto trajo como consecuencia para la supervivencia de estas
comunidades, se ve claramente reflejado en el texto “Reducción de salvajes” escrito por
Rafael Uribe Uribe, en donde el caudillo liberal manifiesta ser consciente de que la población
civilizada estaba concentrada en una parte mínima del territorio nacional y que por tanto más
de la mitad del suelo colombiano estaba poblado por “barbaros” o “salvajes” como él
denomina a los indígenas. El autor del texto insiste en que estos indígenas deben ser
utilizados como mano de obra para la explotación de las industrias viables para el país y pone
como ejemplo a las poblaciones indígenas del Putumayo o del Caquetá, las cuales tenían
cierto grado de experticia en la explotación del caucho, lo cual debía ser aprovechado por el
Estado antes que por clases extranjeras que vinieran a explotarlos. En ese sentido Uribe Uribe
hace un llamado a la comunidad religiosa para que brinde educación religiosa, mental e
industrial a esas poblaciones carentes de luces.

En contraposición a la posición de este político liberal, nos encontramos con el discurso de


Vicente Macuritofe, capitán de la comunidad witoto de Monochoa, pronunciado en 1973. En
este discurso este individuo expresa su inconformidad con cada uno de los aspectos
propuestos por Rafael Uribe en 1907; se refiere a los territorios que le fueron retirados a su
comunidad para su explotación económica, la educación que les era impuesta por parte del
Estado, y la explotación que recibían ellos mismos por parte de los comerciantes, producto
de la falta de protección estatal; este discurso se traduce como el inicio formal de la lucha de
los indígenas para el establecimiento de sus derechos. Lo que podemos observar mediante
estas dos fuentes primarias, es que la independencia para los indígenas no significo más que
una continuación de su explotación y reducción ya no por parte de los españoles, si no por
parte del mismo pueblo colombiano.

Continuando con la linealidad, es pertinente desarrollar el tema de los negros que desde 1851
son considerados como libertos. En un principio, estos individuos que habitaban en algunas
zonas del pacifico, pasaron a ser catalogados como campesinos y mineros en condiciones de
pobreza en el caso de las zonas rurales, o artesanos en las zonas urbanas. Sin embargo,
justamente por las condiciones de pobreza y violencia que hicieron parte fundamental de la
segunda parte del siglo XX, se han generado grandes olas de desplazamiento de estas
personas a las grandes ciudades del país, en las cuales se encuentra por lo menos el 29% de
su población hoy en día, en donde se ha demostrado por las máximas de la experiencia que
las condiciones de pobreza se agravan por la falta de oportunidades, lo que nos indica que
por más que ya no sea permitido considerarlos como esclavos, los afrocolombianos o las
personas de raza negra ,en su gran mayoría, hacen parte de la población considerada como
pobre en Colombia y esto se debe a que, según lo expone Peter Wade en su artículo
“etnicidad, multiculturalismo y políticas sociales en Latinoamérica: poblaciones afrolatinas
(e indígenas)”, hay patrones históricos que permiten la existencia de discriminación racial en
asuntos cotidianos como el trabajo.

Se debe resalta que lo que han conseguido las comunidades indígenas y negras en Colombia
se debe especial y únicamente por la lucha que estos mismos han disputado en materia de
derechos humanos para sus integrantes, lucha que, junto con el apoyo de algunas entidades
como el Banco interamericano de desarrollo, la Organización de los estados americanos o las
Naciones Unidas, ha logrado ejercer presión sobre un Estado que a lo largo de toda su historia
jamás se ha preocupado verdaderamente por el cuidado y conservación de las comunidades
que fueron injustamente convertidas en minorías y que hasta hoy en día se encuentran en
situación de vulnerabilidad.

El Estado Colombiano ha realizado distintas reformas legales, cuyo fin común es la


protección de estas comunidades. Tal y como lo podemos observar en la constitución política
de 1991, en sus artículos 7 y 8 en los cuales se reconoce la diversidad étnica y cultural de la
nación y se reconoce la obligación del Estado de proteger las riquezas culturales del territorio
nacional. Enunciados que se ven completamente nublados cuando analizamos hechos como
la toma de una estación de Ecopetrol en Toledo, Norte de Santander, lo que formo parte de
una protesta de la comunidad indígena Uwa, quienes reclaman el incumplimiento de los
acuerdos confirmados por el gobierno en el año 2014. Estos acuerdos estaban encaminados
a la protección de los derechos territoriales de los indígenas, pero dos años después, estos
estaban exigiendo la salida de una petrolera de sus tierras ancestrales, según nos informa
Mongabay Latam, una red de periodismo ambiental independiente.

Por otra parte, es importante ahondar en medidas tomadas a favor de la población


afrocolombiana, tal y como lo fue la ley 70 de 1993, mediante la cual se abre el camino para
que las comunidades negras del campo pudiesen acceder a títulos de tierras en la región del
pacifico, cuya población estaba en un 90% conformada por individuos de raza negra.
Introduciéndonos en la región del pacifico es menester traer a colación el denominado “plan
pacífico” llevado a cabo en el año 1992 con el apoyo del gobierno del expresidente Gaviria,
el cual tenía como uno de sus principales proyectos una apertura del Pacifico para la
economía colombiana según nos cuenta el periódico EL TIEMPO en un artículo publicado
en 1992. Este suceso da la oportunidad para introducir conceptos de autores como Gros
(1997), quien afirma en sus obras que los Estados adoptaron a la diferencia como nueva
forma de gobierno, lo que es entendido por Wade (2006) en el sentido de que Colombia tiene
cierto interés en formas de gobierno con rasgos neoliberales que le permitan de manera
indirecta tomar el control de zonas marginales creando un contacto directo con los habitantes
de estas zonas. Es una manera de aplicar lo dicho por Gros de manera muy asertiva en el
contexto colombiano si se tiene en cuenta que con el “plan pacífico” el Estado tenía el
principal interés de desarrollar y controlar una región en condiciones marginales y adaptarla
a las condiciones globales de comercio y producción a las que se vio sometida la economía
colombiana.

La pregunta que nos hacemos todos es ¿Por qué el Estado colombiano ha optado por tomar
las medidas anteriormente mencionadas? Hay ciertas teorías que indican que Colombia está
en un proceso de lucha contra la exclusión social, otras que dicen que desea mostrar una
faceta democrática e inclusiva al escenario internacional y por otro lado, hay quienes dicen
que se trata de intereses financieros, queriendo mostrarse como un Estado respetuoso de los
derechos humanos al estar estos más vigilados por las principales entidades de
financiamiento, las cuales a partir de los años 90 han mostrado un contundente interés por la
inclusión social de las poblaciones vulneradas. No es del todo relevante cuál de las anteriores
sea la correcta, o si la respuesta es un conjunto de todas, es importante concentrase en que es
empíricamente comprobable que, hasta el día de hoy, Colombia sigue siendo una nación
desangrada por la reducción sistemática de aquellos grupos que en algunos casos representan
nuestras raíces históricas, y en otros, simplemente grupos fundamentales para la subsistencia
del país y que desde sus orígenes han sido víctimas de la violencia, el desarraigo y la injusticia
social tal y como lo son nuestros indígenas quienes cada vez se encuentran más invadidos
por la industria y silenciados en su lucha por sus derechos, nuestros campesinos asesinados
y desplazados por ambos agentes del conflicto armado y nuestros líderes sociales quienes
son asesinados a diario como estrategia de conservación de un statu quo en el territorio
nacional. ¿Hasta cuándo Colombia?

Bibliografía

Fuentes primarias:

“Reducción de salvajes” – Rafael Uribe

“Pintura de las tierras, pantanos y anegadizos del pueblo de Bogotá” - Archivo General de
Indias (Sevilla)

“Las palabras del indio Macuritofe”- Vicente Macuritofe

Fuentes de contextualización:

“Las naciones colombianas”- Michael LaRosa y Germán Mejía.

“Etnicidad, multiculturalismo y políticas sociales en Latinoamérica: poblaciones afrolatinas


(e indígenas”- Peter Wade

Fuentes periodísticas:
Tiempo, R. E. (1992, April 23). LISTO PLAN PACÍFICO. Retrieved from
https://www.eltiempo.com/archivo/documento/MAM-106018

Comunidad U´wa: ¿Qué reclama y por qué tomó una estación de Ecopetrol en Colombia?
(2016, October 31). Retrieved from https://es.mongabay.com/2016/07/comunidad-uwa-
reclama-tomo-una-estacion-ecopetrol-colombia/

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