FACULTAD : Humanidades
ESCUELA : Psicología
TEMA : El Psicoanálisis
AUTORES :
DOCENTE :
CICLO : II
SECCION : 3
2018
Dedicatoria
AGRADECIMIENTOS
ÍNDICE
El psicoanálisis.........................................................................6
Principal
representante..........................................................................................................7
Biografía de Sigmund
Freud................................................................................................7
Teoría psicosexual de
Freud.................................................................................................7
Mecanismos de
defensa........................................................................................................9
Seguidores de
Freud..............................................................................................................12
Alfred
Adler.............................................................................................................................13
Biografía de
Adler....................................................................................................................13
Desarrollo de las
concepciones..............................................................................................13
La inferioridad
orgánica...........................................................................................................14
Factor
ambiental........................................................................................................................14
La protesta masculina
ego.........................................................................................................16
Lenguaje
orgánico.......................................................................................................................19
La
terapia..................................................................................................................................
....20
INTRODUCCIÓN
¿Qué es el psicoanálisis?
A partir de esos casos clínicos, Freud esboza los primeros lineamientos de su teoría:
plantea que todos los problemas estudiados en los pacientes se deben a impulsos sexuales
que han sido reprimidos por ser socialmente inaceptables.
Durante la terapia del psicoanálisis, lo que se busca es acceder al inconsciente del paciente
de manera de llegar al origen de los conflictos del individuo. El inconsciente es aquella
información que se encuentra dormida en nuestro interior, que no tenemos conciencia de
que está presente, pero que influye y determina nuestro actuar y comportamiento.
Esta búsqueda interna implica que el paciente revele su personalidad y es muy común que
salga con disgusto o rabia de las sesiones ya que deberá adentrarse en aspectos de sí
mismo que no le agraden. La forma de alcanzar este autoconocimiento es por medio de
las interpretaciones y conexiones que el terapeuta establezca de la conversación con el
paciente.
Existen diferentes maneras de que el terapeuta logre llegar a la raíz del problema de su
paciente. Puede hacerlo por medio de transferencia, de asociación libre, o por medio de
la interpretación del discurso del paciente. Para éste último, el médico pone especial
preocupación en la interpretación de los sueños y los actos fallidos, que son una especie
de descarga del inconsciente en el consciente que Freud considera muy importante.
Como mecanismo de tratamiento de enfermedades mentales, es un método criticado. Sus
detractores afirman que no tiene sustento científico y que desconoce las consideraciones
bioquímicas de las enfermedades. Además, son tratamientos que pueden durar años,
dependiendo de si se busca tratar un tema en específico o es un problema más general.
Este método tiene mayor vigencia en los países de habla hispana y en Europa, aunque su
influencia comenzó a disminuir a mediados del siglo XX. Actualmente, se le reconoce
por su valor de fomentar el autoconocimiento del individuo, más que por su capacidad de
mejorar las enfermedades mentales.
PRINCIPAL REPRESENTANTE
Segimund Freud
Hizo sus estudios médicos en Viena, su ciudad natal. Luego se orientó hacia la neurología,
que practicó hasta 1885. Obtuvo una beca en París, donde Charcot lo inició en el empleo
del método hipnótico. En 1891, después de haber abierto un consultorio en Viena, trabajó
con Breuer, quien le dio a conocer el método catártico o curación por la palabra, que
aplicó al análisis de las imágenes del sueño en 1895. En su libro Estudio sobre la histeria,
sentó su teoría sobre el inconsciente. Practicó sobre sí mismo un largo análisis en el
cursodel cual descubrió complejo de Edipo (1897-1902). Se unieron a Freud: Federns,
Stecker, Adler, lones, Jung, quienes extendieron el psicoanálisis por todo el mundo.
Continuó sus investigaciones ampliando el campo del psicoanálisis al arte y la historia de
las civilizaciones. Sus principales obras son: la interpretación de los sueños (1899),
Psicopatología de la vida cotidiana (1904), Tres ensayos sobre la teoría de la sexualidad
(1905), Tótem y tabú (1912), Metapsicología (1905), Mas allá del principio del placer
(1919), Mi vida y el psicoanálisis (1921) Introducción al psicoanálisis (1926), El
malestar en la civilización (1929).
Cuando están hambrientos o mojados, solo se quejan y lloran hasta que sus necesidades
son satisfechas; además no son conocidos por su paciencia.
Sin embargo, las soluciones prácticas a las necesidades no siempre son aceptables, como
puede descubrir pronto un niño de tres años hambriento que es atrapado hurtando galletas
entre comidas. El componente final de la personalidad, o superyó, es el asiento de la
conciencia. Surge entre los tres y seis años de edad a medida que los niños internalizan
(adoptan como propios), los valores y normas morales de sus padres. Una vez que surge
el superyó, los niños no necesitan un adulto que les diga que han hecho bien o mal, ya
que están conscientes de sus propias transgresiones y se sienten culpables o
avergonzados por su conducta poco ética. Por lo tanto el superyó es el censor interno.
Insiste en que el yo encuentre salidas socialmente aceptables para los impulsos
indeseables que genera el ello.
Mecanismos de defensa
Freud pensaba que el sexo era el instinto más importante porque las perturbaciones
mentales de sus pacientes a menudo giraban alrededor de conflictos sexuales infantiles
que habían reprimido.
Pero los niños pequeños, ¿son en verdad seres sexuales? Si, decía Freud cuya perspectiva
del sexo era muy amplia, ya que abarca actividades como chuparse el dedo y orinar. Freud
creía que a medida que maduraba el instinto sexual, su foco cambiaba de una parte del
cuerpo a otra y que cada cambio provocaba una nueva etapa de desarrollo psicosexual.
Freud creía que los padres deben caminar sobre una línea delgada con sus hijos en cada
etapa psicosexual. Pensaba que permitir demasiada o muy poca satisfacción en las
necesidades sexuales causaba que un niño se obsesionara con cualquier actividad que
fuera alentada o desalentada en forma intensa, en cuyo caso el niño podía fijarse en esa
actividad por ejemplo un bebe que fue castigado muy fuerte por chuparse el dedo, lo cual
genero un conflicto a ese respecto, podría expresar esta fijación oral a través de
actividades sustitutas como fumar cigarrillos uno tras otro o practicar sexo oral cuando es
adulto. En suma, Freud afirmaba que las primeras experiencias y conflictos infantiles
pueden influir en los intereses, actividades y personalidades adultos.
Etapa
Edad Descripción
Psicosexual
No obstante, no debemos rechazar todas las ideas de Freud tan solo porque algunas de
ellas pueden parecer ahora un poco extravagantes. Quizá la mayor contribución de Freud
fue su concepto de motivación inconsciente. Cuando surgió la psicología a mediados del
siglo XIX, los investigadores estaban preocupados por entender aspectos aislados de la
experiencia consiente como los procesos sensoriales y las ilusiones perceptuales. Fue
Freud quien proclamo por primera vez que la gran mayoría de la experiencia psíquica se
encuentra por debajo del nivel de conocimiento consiente. También merece un crédito
considerable por enfocar la atención en la influencia de la experiencia temprana sobre el
desarrollo posterior. Continúan los debates respecto a exactamente cuan criticas son las
experiencias, pero pocos estudiosos actuales del desarrollo dudan de que algunas
experiencias tempranas puedan tener efectos duraderos. Por último, podríamos agradecer
a Freud por estudiar el lado emocional del desarrollo humano: los amores, los temores,
ansiedades y otras emociones poderosas que desempeñan funciones importantes en
nuestras vidas. Estos aspectos de la vida a menudo han sido pasados por alto por
estudiosos del desarrollo que han tenido que concentrarse en comportamientos
observables o procesos de pensamiento racional. En suma, Freud fue en verdad un pionero
que se atrevió a navegar en aguas lóbregas e inexplorables que sus predecesores ni
siquiera habían considerado.
Seguidores de Freud
OTROS REPRESENTANTES
DEL PSICOANÁLISIS
ALFRED ADLER
BIOGRAFIA
Alfred Adler nació en 1870 y falleció en 1937. Fue el primero de los discípulos de Freud
que se reveló contra la afirmación postulada por éste, respecto a que "las neurosis tienen
siempre su núcleo en el libido".
En 1911 la disconformidad de Adler fue en aumento, así como sus críticas a la teoría
sexual de las neurosis, hasta que se produjo su separación del grupo psicoanalítico, en ese
mismo año, y con otros investigadores disidentes, formó en Viena, en 1912, la Sociedad
de Psicología Individual que, en breve tiempo, tuvo filiales en diversos puntos del mundo.
Las ideas de Adler está contenidas, principalmente, en las obras: Estudio de la inferioridad
de los órganos (1907); El carácter neurótico (1912); Los problemas de la homosexualidad
(1917); La Psicología Individual y la escuela (1920); Conocimiento del hombre (1927);
Niños difíciles (1927); Práctica y teoría de la Psicología del Individuo (1928); Problemas
de las neurosis (1929); El caso de Mrs. A. (1931); etc.
Como acabamos de decir, Adler rechazó la afirmación freudiana relativa a que las
neurosis tuvieran su núcleo en el libido, vale decir, impugnó la etiología sexual de las
mismas, punto neurótico, lo es debido a una inferioridad constitucional, inferioridad, ya
limitada a un órgano, ya extendida a un sistema de órganos.
Finalmente, llegó a la conclusión de que para que se produjeran los trastornos neuróticos
no era imprescindible la existencia de una inferioridad orgánica, "desde el momento que
los sentimientos de inferioridad son congénitos y universales en el hombre".
EL FACTOR AMBIENTAL
A la conclusión expuesta al final del parágrafo anterior, arribó Adler al observar que los
niños pueden reaccionar neuróticamente a un medio ambiente inadecuado. Así, por
ejemplo, la actitud neurótica de algunos adultos, de ser incapaces de reconocer el amor y
de hacer uso adecuado de él, se debe, en muchos casos, a que los padres de ese adulto
demostraron poco cariño hacia él, en su infancia.
El niño, sostuvo Adler, por el solo hecho de ser pequeño y desamparado, se siente inferior
ya de por sí. Advierte siempre personas que pueden satisfacer sus impulsos con una
facilidad mucho mayor. Así, pronto aprende a valorar la grandeza que capacita a abrir
una puerta, la fuerza que otros poseen para levantar un objeto, la actitud que hace posible
dar órdenes y exigir su cumplimiento. Ante todas esas observaciones, el infante va
conociendo su inferioridad.
Ahora bien, si el niño se siente inferior ya de por sí, cualquier cosa que acentúe dichos
sentimientos de inferioridad será un factor desencadenante de neurosis.
La vida humana es una lucha permanente por la subsistencia, entre las exigencias del
mundo y las posibilidades (deficiencias, insuficiencias y capacidades del individuo).
Como tanto las demandas del mundo externo como las posibilidades del ser (positivas y
negativas) son variables, los resultados de esta lucha son distintos en cada caso.
Siendo la diferencia entre el sano y el enfermo mental una cuestión de grado y no de clase,
cuando el sentimiento de inferioridad, sea debido a un defecto orgánico o a un ambiente
nefasto, es más pronunciado que lo normal, surgen -sostiene Adler- todas las
perturbaciones físicas, mentales y emocionales que caracterizan a las neurosis y a las
psicosis.
En medio de este panorama sombrío, Adler coloca una luz prometedora. Si por un lado,
dice, los sentimientos de inferioridad son causa de muchos males para el hombre, la
rebelión que los mismos provocan es, por otra parte, la causa fundamental del desarrollo
del mismo hacia sus mejores destinos.
Sin entrar a discutir el valor de las teorías adlerianas sobre la inferioridad, es evidente a
esta altura de la exposición de sus ideas, que Adler aporta a la psicología y a la psiquiatría
una contribución fundamental al poner de relieve la interacción entre el ser y el ambiente.
Él recalcó este descubrimiento y lo convirtió en uno de los postulados de la psicología
individual. "El conocimiento del hombre, decía, sólo se puede obtener comprendiendo la
posición del individuo frente a sus tareas dentro de la sociedad"; "considerando su
comportamiento con los demás".
Desde los primeros años, pues, el ser tiene una meta y, comprende que, para alcanzarla,
necesita elaborar un plan de vida. "La vida del alma humana está determinada por un
objeto" y "no hay persona alguna que piense, sienta y actúe, sin que esas actividades se
determinen, modifiquen y dirijan hacia un objetivo siempre presente" y ese objeto es,
como ya dijimos, el poder, la superioridad.
El plan que se traza el sujeto para lograr el objetivo señalado, determina su estilo de vida,
estilo que varía desde la utilización de todos los medios normales hasta todos los
neuróticos y que se remonta a la más tierna infancia, desde el momento que, desde ese
tiempo, el individuo, para superar los sentimientos de inferioridad y obtener poderío, ve
ante sí dos caminos: adquirir los elementos que dan poder a los mayores, o bien, mostrar
su debilidad. "Desde los primeros años de vida, pues, se inicia en el hombre la formación
del tipo: unos tratan de reunir fuerza y ponerla en acción y otros especulan con su propia
debilidad." Por lo tanto, el estilo de vida de un ser tiene patrón en la infancia. Según Alder,
entre los 5 y 6 años el niño desarrolla su personalidad y fija su estilo de vida.
LA FICCIÓN RECTORA
A la necesidad de ser un hombre completo, Alder la denominó "la ficción rectora". Ésta
puede conducir a la obtención de triunfos reales, como en el caso ya citado de Demóstenes
o el de tantos atletas afectados por alguna deficiencia física, o llevar a las neurosis cuando
los medios, las finalidades o ambas cosas a las vez, estás alejadas de los normal y lógico.
Actitudes neuróticas provocadas por la ficción rectora, se encuentran en aquellas personas
que adoptan actitudes anormales para imponerse o, en aquellos enfermos que "cuidan su
enfermedad", para, mediante ella, dominar el medio familiar.
LA PROTESTA MASCULINA
Lo expuesto hasta aquí sobre el pensamiento de Adler, puede resumirse así: en el ser
humano, ante los sentimientos de inferioridad, se desarrolla una voluntad de poder.
Teniendo en cuenta que, en virtud del desenvolvimiento de la cultura occidental y de
imposiciones basadas en la fuerza, se ha llegado a una sociedad en que predomina el sexo
masculino (los hombres se han transformado en un grupo privilegiado, se han asegurado
prerrogativas, han fijado arbitrariamente la posición de la mujer, etc.) y donde se
considera al valor como el símbolo del poder (recuérdense que: todas las instituciones, o
casi todas, son testimonios de la superioridad varonil; los padres, en general prefieren
tener hijos y no hijas; los niños rechazan todo lo que pueda significar afeminamiento en
ellos; para los pequeños el padre es la encarnación de la fuerza y el tipo ideal al cual
quieren parecerse; etc), Adler llamó masculinos o viriles a los intentos de cristalizar tal
voluntad de poderío y femeninos a los sentimientos de inferioridad.
Existe, según él, una tendencia general a perseguir un ideal masculino y a esa tendencia
la llamó protesta masculina que, lógicamente, es más fuerte en las mujeres y en los
débiles.
EL INSTINTO DE COMUNIDAD
Si los sentimientos de inferioridad y los impulsos de poderío fueran las únicas fuerzas
que actuasen en el ser humano, sería imposible la convivencia. Adler, completó las bases
de su psicología individual, con la incorporación a sus teorías de un nuevo factor: el
instinto de comunidad, que es el que suaviza los sentimientos de inferioridad y frena los
impulsos de poderío.
Ante los sentimientos de comunidad, el primitivo afán de dominio infantil sólo puede ser
asimilado por el pensamiento consciente en la medida en que dichos sentimientos de
comunidad se lo permiten y, el afán de poder, se desarrolla, entonces, en forma encubierta,
procurando imponerse secreta y astutamente, a través de los cauces que le permite el
sentido social.
En primer lugar, demostró que en el ser humano actúa otra fuerza, el impulso de poderío,
además del sexual indicado por Freud. Basado en este descubrimiento no sólo descartó la
idea de que los impulsos sexuales originaran neurosis, sino que sostuvo, en cambio, que
el deseo de poder actúa en el acto sexual, siendo éste nada más que una nueva expresión
de aquél. Por eso, concibe el acto sexual como la pugna entre dos personas por adquirir
cada un dominio sobre la otra y el complejo de Edipo como intentos del niño por
imponerse a la madre triunfando sobre el padre.
En segundo término elaboró una psiquiatría donde, las causas de los trastornos mentales
las colocó en el mundo externo (un sujeto se enfermaría porque no puede lograr vencer a
ese mundo o a sus exigencias), a diferencia de Freud que las ubicó en el interior del ser
(la lucha entre los instintos y el Súper yo).
Así, supóngase una mujer que, cuando su marido debe salir de noche, sufre ataques de
asma nerviosa. Para Freud, el nódulo de la cuestión está en lo sexual: la mujer se siente
defraudada y asocia, inconscientemente, la idea de no ser amada, con los sentimientos de
frustración derivados de la etapa correspondiente al complejo de Electra. Para Adler, la
mujer quiere imponerse y busca una forma neurótica para lograrlo. Estando bajo una crisis
asmática "el marido tiene que atenderla".
Si Freud fue determinista, en el sentido que creyó que toda acción humana está
determinada por factores inconscientes, Adler puede ser considerado como
intencionalitadesde el momento que afirmó que "es peculiaridad del mecanismo espiritual
perseguir siempre un objetivo". "El fundamento de la psicología individual es: todos los
fenómenos de la vida del alma deben entenderse como una preparación para una finalidad
de objetivo".
Ya hemos dicho que, para Adler, las neurosis son el resultado de la pugna existente entre
los impulsos de poderío del ser y las exigencias del mundo externo. Resumiremos ahora
los principales puntos que contempla la teoría de las neurosis:
Todos los individuos tienen una disposición a la neurosis (por aquello de que los
sentimientos de inferioridad son universales) y esta disposición, es ya neurosis, que sólo
espera el impulso de una situación actual para manifestarse.
Las neurosis son una forma mórbida de imponerse y adquirir poderío, puesto que,
mediante ellas, el sujeto logra que los que le rodean, contraigan obligaciones para con él.
Lo que acabamos de exponer, constituye para Adler "no es el sexo sino la procuración de
poder lo que determina la actividad humana".
Toda neurosis debe ser entendida como una tentativa cultural, equivocada, para liberarse
de un sentimiento de inferioridad y formarse uno de superioridad. La neurosis se revela
como una tentativa de sustraerse a toda compulsión social, mediante una compulsión
contraria, construida de manera que pueda oponerse eficazmente al ambiente y a sus
exigencias.
Cuando el hombre trata de resolver sus problemas buscando la forma de sentirse superior,
por lo general, agrava su situación.
EL EGO
Adler estudió, muy especialmente, la función del Ego y fue el primero en descubrir la
función defensiva inconsciente del mismo y el papel que desempeña en el
desencadenamiento de las neurosis. El mismo Freud reconoció "sus excelentes
aportaciones a la psicología del Yo".
EL LENGUAJE ORGÁNICO
Adler sostuvo que los síntomas tienen sentido, pero el sentido que él creyó ver en ellos es
muy diferente al que les dio Freud. Según Adler, los síntomas, sobre todos los somáticos,
constituyen un verdadero lenguaje orgánico (dialecto de los órganos). En el carácter
nervioso trató de demostrar que ciertas constelaciones de síntomas coinciden con precisos
rasgos caracterológicos para asegurar las protestas del o de la neurótica.
Adler partió del psicoanálisis. Al separarse de Freud trató de borrar o de ignorar todo
punto de contacto con los postulados de dicha escuela, a pesar de que algunos de esos
postulados le sirvieron como puntos de apoyo para desarrollar sus teorías. Así, por
ejemplo, pese a querer ignorar lo inconsciente y considerarlo como "lo desconocido", su
teoría de los sentimientos de inferioridad y de los impulsos del poderío, la afirmación
sobre las posibilidades de reacción caracterológica neurótica del individuo, la idea de que
los sueños son intentos para dominar los sentimientos de inferioridad, etc., no se explican
sin la existencia de procesos activos debajo de la conciencia. También, las observaciones
sobre el "estilo de vida", tanto sobre la época en que se forma como en la manera que
actúa no tienen gran diferencia con los conceptos freudianos sobre la transferencia.
Asimismo, admitió que los sueños son cumplimientos de deseos, aunque otros deseos que
los que supone Freud, etc.
Carl Jung
Pensó que su trabajo no era teórico sino queestaba basado en hechos observables
eidentificables que son evidentes para todos aquellosque se tomen el tiempo de
descubrirlos en elmundo actual y en lo que conocemos en el mundo de ayer. La teoría
jungiana abarca entre otros apartados importantes, los opuestos.
Por tanto el progreso, el movimiento, el cambio de posiciones solo son posibles bajo
condiciones de estrés. El desear eliminar el estrés del conflicto es un opuesto, hace que el
objeto original sea motivado para actuar. La posición, el conflicto, el estrés resultante y
quitar el estrés es el sine quanon del mundo donde vivimos. En una forma más bien
metafísica, Jung dijo que lo que existe tiene un evento opuesto es la falta de existencia de
la condición original: vida- no vida, hombre- no hombre, amor- no amor, etc. En la
mayoría de los casos lo que existe tiene una contraparte cuya existencia es igualmente
real, tanto como la primera entidad.
Jung sugirió un final feliz a la historia de los opuestos y una resolución en forma de
equilibrio. El equilibrio verdadero es de corta duración, pero es señal de progreso. No
todo es un “valle de lágrimas “para Jung. La oposición no solo mueve al objeto alejándolo
al punto muerto que se resuelve en una prolongación de la existencia, sino que también
se puede abrir en forma de progreso dentro de si miso por medio de tres acciones,
compensación, unión y oposición.
Cuando la personalidad siente que está en conflicto por que no puede lograr una meta
deseada, puede seguir con otra meta igualmente atractiva y al hacer esto desaparecerá el
conflicto. Esta forma de compensación mueve hacia delante a la personalidad, hacia una
nueva posición, aunque el punto logrado no está en dirección de la meta original. El factor
importante para Jung s que la personalidad ha hecho algo trasladarse de su posición
original. La acción simbólica no es tan importante como la acción física en un movimiento
compensatorio. El simple soñar en conquistar un objetivo, no es en realidad una acción
compensatoria. La compensación que surge del conflicto es, para este autor, un factor
favorable para la personalidad del hombre, lo ayuda a ir hacia delante. En el segundo tipo
de acción, las fuerzas opuestas se unen a fin de buscar una solución satisfactoria para
ambas. Es cierto que a veces la solución del conflicto puede no ser moralmente correcta.
La unión de fuerzas opuestas de acuerdo con Jung puede ser una forma de resolver la
oposición.
Principio de equivalencia
Principio de entropía
Dentro de la segunda ley de termo dinámica, el principio de entropía establece que las
propiedades de un cuerpo cuando es colocado en yuxtaposición a otro tipo de semejante,
pero diferente en grado, tenderán a asumir las características del cuerpo que posea la carga
mayor. Resulta importante hacer notar que los cuerpos deben ser de la misma especie o
tipo. Cuando los cuerpos están en contacto, el más cargado pierde algo de su carga, hasta
que los dos estén iguales respecto de la característica intercambiada. Dos cuerpos de agua
a diferentes niveles, cuando se conectan, eventualmente tendrán el mismo nivel. El estado
que resulte de este fenómeno es una pérdida de energía a medida que los dos cuerpos
llegan a un estado de equilibrio. Al tiempo que Jung aplicó esta ley de la física a la
dinámica de la personalidad, ciertas extensiones de la teoría también se aplicaban. Como
la personalidad no es un sistema cerrado, nunca es posible lograr un estado real de balance
o equilibrio entre dos personas o dentro de una persona respecto de dos actividades y los
cambios internos crean condiciones constantemente cambiantes y proporcionan energía a
la dinámica de la personalidad, todo lo cual tiende a mantener la conducta fuera de
balance mientras que continuamente trata de mantenerse a sí misma en equilibrio. Sin
embargo a pesar del hecho de que el hombre nunca puede ganar la batalla de balancear
sus conflictos, entre más se acerca a lograrlo, más se acerca a la paz y la tranquilidad. No
obstante, dicho estado de armonía real no necesariamente logra algo, como se trató en el
tema acerca del valor del conflicto.
Regresión y Progresión
Conceptos dinámicos
. La psique
Valor
La cantidad empleada de energía psíquica, en un elemento de la personalidad, se llama
valor de ese elemento. Valor es una medida de intensidad cuando hablamos de dar más
valor a una idea, sentimiento o acto específico, queremos decir que desarrollaremos la
idea con mucha energía o que expresaremos el sentimiento o desempeñaremos el acto.
Individuación
Función trascendental
Simbolización
El hombre vive en un mundo de símbolos que llegan a ser más ricos y más complejos a
medida que el individuo avanza en la vida. Un símbolo de la psicología Jungiana tiene
dos funciones principales: por un lado representa un intento de satisfacer un impulso
instintivo que ha sido frustrado, y por el otro, es la personificación de un arquetipo. Los
símbolos son representaciones de la psique, no sólo expresan la sabiduría de la humanidad
adquirida en forma racial e individual sino que también pueden representar niveles de
desarrollo que están más adelante de la posición actual del hombre. Para desarrollarse el
hombre necesita de símbolos.
Disposiciones generales
Las disposiciones o actitudes son tendencias innatas para percibiry actuar con el exterior
o ambiente (objeto); existen dos disposiciones: la extraversión y la introversión. En la
primera, el interés y la libido están dirigidos hacia el ambiente y en la segunda el interés
y la libido están orientados hacia el interior del individuo. Ambas tendencias se
encuentran en la persona, pero una se desarrolla y por lo tanto se expresa más que la otra,
pasando a dominar el lado consciente de la estructura psíquica; mientras que la otra
prevalece en menor grado, permaneciendo en el inconsciente, pudiéndose expresar en
ciertas conductas, como por ejemplo el caso de un extravertido que interesado por
socializar con sus amigos emite a la vez opiniones con falta de tacto que lo aleja de los
mismos.
Extraversión
El individuo extravertido piensa, siente y obra en relación al objeto o ambiente; toma sus
determinaciones de acuerdo a lo que viene desde fuera, tanto si se basa en objetos
materiales, como en el conocimiento externo común a su cultura; tiene una moral basada
en la convención social que más que una adaptación es una acomodación ya que no le
servirá si se cambia de cultura o si esta en una sub cultura errónea. En nuestra cultura el
extravertido es un individuo normal que elige su carrera en base a lo convencional y no
prueba con lo nuevo, tiene muchos amigos aunque a veces comete desatinos con ellos, le
interesa la realización económica y es relativamente influenciable dependiendo del grado
de su extraversión. Su debilidad es que al no preocuparse por lo subjetivo o interno
descuide sus salud en función del éxito labora, ya que tiende a pensar que pequeñas
molestias son ilusiones y aunque sus amigos se lo indiquen no hace caso a su cuerpo hasta
que desarrolla síntomas incapacitantes. El inconsciente del extravertido compensa la
excesiva represión de la subjetividad con el desarrollo de una tendencia egocéntrica e
infantil; mientras mayor sea la extraversión consciente mayor será el egoísmo
inconsciente.
Introversión
Son actividades mentales utilizadas por el individuo para adaptarse con respecto al medio.
Existen 4 funciones fundamentales: el pensar, el sentir, el percibir, y el intuir. A
continuación se definirán las cuatro funciones
El pensar
El sentir
El percibir
El intuir
Tipos psicológicos
Reflexivo extravertido
Este tipo se da más frecuentemente en los hombres, es un individuo que elabora sus
teorías sobre la base de datos objetivos, obtenidos por parte de las percepciones señoriales
o extraídas de la cultura, toma elementos irracionales que quedan relegados a un segundo
plano en el juicio. Dirige su conducta y pretende dirigir la de los demás con sus
postulados, ya que los considera universalmente válidos, por provenir de lo objetivo, esto
lo hace ser intolerante y tirano, sobre todo con su familia y círculo más interno; observado
desde fuera se percibe como una gran persona preocupada por los demás.
Reflexivo introvertido
También es más común en hombres que en mujeres; esta persona tiende a elaborar teorías
de origen subjetivo, sin prestar atención a los externos y considerando los hechos sólo
cuando le permiten controlar sus teorías. Es un individuo pobre en sentimiento e intuición;
es muy terco y tenaz para defender y llevar a cabo sus ideas, pero a la vez es influenciable
y explotable fácilmente porque no percibe las intenciones ajenas por la poca relevancia
que da lo externo; al contrario del tipo reflexivo extravertido es percibido externamente
como inadaptado, pero mientras más cerca de él se está, más se le aprecia.
Sentimental extravertido
Este tipo se da mayoritariamente en las mujeres que guían su accionar por el sentimiento
provocado por lo externo; su actividad intelectual está restringida a lo que siente, ya que
no pueden pensar sobre lo que no han sentido previamente, del mismo modo su forma de
pensar sobre un objeto, varía de acuerdo a como varia su sentir. Expresa abiertamente sus
sentimientos y se identifican fácilmente con las personas.
Sentimental introvertido
Perceptivo extravertido
Predomina la percepción sensorial centrada en el objeto, por lo que sólo se siente cómodo
en el campo de la realidad tangible, busca estar siempre bombardeado por estímulos
externos, pero se fastidia rápidamente, por lo que necesita que los estímulos cambien
constantemente. Manifiesta tendencial al gozo, es alegre y vivo, permite que abusen de
él, pero a la vez es vengativo. Atribuye valor mágico a los objetos de manera inconsciente.
Perceptivo introvertido
Intuitivo extravertido
Este tipo tiene la capacidad de generar una gran variedad de posibilidades en el mundo
objetivo, parece ser muy optimista; su interés por una cuestión permanece hasta que
consigue su objetivo, pero luego lo abandona y busca otras perspectivas, por esto es
considerado inestable y cambiante, además tiende a entusiasmar a otros en sus proyectos
y luego los abandona. Poseen una moral propia y escaso interés por el sentimiento ajeno,
así como por las convenciones y hábitos sociales. En este grupo figura la mayor parte de
los comerciantes, políticos y aventureros; por otro lado tiene una extraordinaria capacidad
para despertar entusiasmo en los demás hacia nuevas cosas.
Intuitivo extrovertido
En este tipo figuran los soñadores, los videntes, los fanáticos y artistas, estos últimos son
los normales; son fundamentalmente subjetivos, escasamente preocupados por las cosas
exteriores, incluida la moral; inestables poco dignos de confianza en las relaciones
interpersonales. Estas personas son consideradas un enigma por sus semejantes.
La teoría de Jung divide la psique en tres partes: La primera es el yo, el cual se identifica
con la mente consciente. Relacionado cercanamente se encuentra el inconsciente
personal, que incluye cualquier cosa que no está presente en la consciencia, pero que no
está excepto de estarlo. El inconsciente personal sería como lo que las personas entienden
por inconsciente, en tanto incluye ambas memorias, las que podemos atraer rápidamente
a nuestra consciencia y aquellos recuerdos que han sido reprimidos por cualquier razón.
La diferencia estriba en que no contiene a los instintos como Freud incluía.
Después de describir el inconsciente personal, Jung añade una parte al psiquismo que hará
que su teoría destaque de las demás, podríamos llamarle simplemente nuestra herencia
psíquica. Es el reservorio de nuestra experiencia como especie, un tipo de conocimiento
con el que todos nacemos y compartimos.
El Ego
El Arquetipo materno
Maná
Debemos saber, que estos arquetipos no son realmente cosas biológicas, sino demandas
puntuales. Es llamativo que en sociedades primitivas los símbolos fálicos no se referían
en absoluto al sexo, usualmente simbolizan el maná o poder espiritual. Estos símbolos
se exhiben cuando es necesario implorar a los espíritus para lograr una mejor cosecha de
maíz o aumentar la pesca o para ayudar a alguien. La relación entre el pene y la fuerza,
entre el semen y la semilla, entre la fertilidad y la fertilización, son parte de la mayoría
de las cultural.
Anima y animus
Una parte de la persona es el papel masculino o femenino que debemos interpretar. Para
la mayoría de los teóricos, este papel está determinado por el género físico, pero al igual
que Freud, Adler y otros, Jung pensaba que todos nosotros somos bisexuales por
naturaleza. Cuando empezamos nuestra vida como fetos, poseemos órganos sexuales
indiferenciados y es sólo gradualmente, bajo la influencia hormonal, cuando nos
volveremos machos o hembras. De la misma manera, cuando empezamos nuestra vida
social como infantes no somos masculinos ni femeninos en el sentido social, casi de
inmediato nos desarrollamos bajo influencia social, que gradualmente nos convierte en
hombres o mujeres. En todas las culturas, las expectativas que recaen sobre los hombres
y las mujeres difiere. Estas están basadas casi en su totalidad sobre nuestros diferentes
papeles en la reproducción y en otros detalles que son casi exclusivamente tradicionales.
En nuestra sociedad actual, todavía retenemos muchos remanentes de estas expectativas
tradicionales, todavía esperamos que las mujeres sean más cálidas y menos agresivas; que
los hombres sean fuertes y que ignoren los aspectos emocionales de la vida. Pero Jung
creía que estas expectativas significaban que sólo hemos desarrollado la mitad de nuestro
potencial.
La Persona
Sombra
El sueño
Para Jung, los sueños son la fuente primordial del inconsciente, y fuente del
conocimiento, ya que en ello se encontrarían los mismo conflictos y complejos que son
posibles de hallar en los experimentos de asociación; pero los sueños pueden entregar
aspectos mas profundos, tanto en lo referente a la casualidad de los procesos anímicos,
como a su tendencia. De esta manera los sueños representarían auto reproducciones de
los procesos inconscientes, es decir que éstos se proyectan en determinadas imágenes
simbólicas que se presentan a la mente del soñante como objetos o personas. En palabras
del propio Jung "el sueño describe la situación interior del que sueña, cuya verdad y
realidad no reconoce la consciencia o sólo reconoce a disgusto".
El lenguaje onírico
El lenguaje onírico presenta una gran cantidad de imágenes, por lo general no verbales,
cuya variedad y complejidad es incluso más variada de la que encontramos en la vida
consciente. Estas imágenes oníricas tienden a ser más coloreadas y vividas que las de la
conciencia ya que están asociadas a gran cantidad de procesos psíquicos, muchos de ellos
emocionales. El lenguaje onírico presenta una gran variedad de formas y características
entre las que podemos encontrar.
Lenguaje figurativo
Las imágenes representan otra cosa o elemento, en ocasiones firmes poéticas. Por
ejemplo, un hombre alado podría representar la libertad.
Los sueños que poseen una gran carga emocional suelen recordarse en colores
La exageración
Es común que en los sueños se exageren sus elementos, aparecen imágenes de personas,
cosas o animales en forma desproporcionada, o las situaciones son distorsionadas casi
hasta el ridículo
Lenguaje mitológico
En el sueño aparecerían "metáforas de hechos o seres que han existido hace mucho tiempo
atrás y que con el paso del tiempo se han ido modificando en su expresión, pero no en su
manejo central"
El sueño debe enfrentarse sin prejuicios teóricos, de manera que no se limite de antemano
doctrinariamente el sentido de un sueño. Además es importante considerar que el análisis
de un sueño aislado tiene poco valor ya que generalmente los sueños se representan en
una serie cuya interpretación permite corregir los errores cometidos en la interpretación
de los sueños.
El Self
La sincronicidad
El principio de la casualidad afirma que todo acontecimiento tiene causa. Jung formuló
otro principio científico llamado sincronicidad enunciándolo de la siguiente manera: "dos
eventos que se relacionen en significado puede tener lugar al mismo tiempo sin que uno
sea la causa del otro". Por ejemplo puede ser que se esté pensando en un amigo que ya no
se ha visto o de quien no se ha tenido noticias durante mucho tiempo y ene se momento
llegue el cartero con una carta de esa persona; también, puede soñar la muerte de un
pariente y después darse cuenta que ese pariente murió al mismo tiempo que lo había
soñado. La telepatía mental, la clarividencia, y otras formas de experiencias paranormales
deben explicarse por el principio de la sincronicidad según Jung.
CONCLUSIONES
Freud nos presenta la teoría del psicoanálisis, con lo cual pretende a través de diferentes
métodos llegar al inconsciente, para así poder solucionar diferentes males mentales, como
por ejemplo, la neurosis, la histeria, etc. Freud recurre al método conocido como hipnosis,
que pretende llevar al sujeto a un estado.
Freud hace una formulación topográfica del psiquismo e incluye en él tres sistemas: uno
consciente; otro preconsciente, y otro inconsciente, cuyos contenidos no tienen acceso a
la conciencia
Bibliografía:
David R. Shaffer (quinta edición)