Microfundamentos
Parte A:
Desarrollado por
Diciembre de 2016
2
Índice general
2.1. Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 89
2.2. La demanda . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 91
3
4 ÍNDICE GENERAL
LA DEMANDA TURÍSTICA
INDIVIDUAL
Nuestro objetivo principal es estudiar el comportamiento del consumidor y para eso nos
hace falta primero describir las posibilidades que tiene a su alcance. Supongamos que hay
dos bienes de consumo. Podemos pensar, por ejemplo, que el bien 1 corresponde a cenas en
un restaurante y que el bien 2 son entradas para un parque natural. El consumidor puede
comprar los bienes a precios observables y, concretamente, denominamos el precio del bien
tiene una cantidad fija de dinero a su disposición. Formalmente, sea m la renta disponible
del consumidor.
una cesta de consumo, una cantidad demandada x1 del bien 1 y una cantidad demandada
5
6 1.1. LA RESTRICCIÓN PRESUPUESTARIA
x2 del bien 2. La cesta de consumo x es factible si dados los precios p1 y p2 y dada la renta
p1 · x1 + p2 · x2 ≤ m. (1.1)
Ahora introducimos dos definiciones que van a ser importantes a lo largo del análisis.
Definición 2. La recta de balance es el conjunto de todas las cestas de consumo que sa-
tisfacen la restricción presupuestaria con igualdad; es decir, en las que el consumidor agota
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 7
Para ganar más intuición sobre las dos definiciones introducidas vamos a proceder con
un análisis gráfico.
x2 6
m
p2
-
m x1
p1
p1 m
x2 = − · x1 + . (1.2)
p2 p2
Por tanto, si el consumidor decide gastar toda su renta en el bien 2, se puede comprar
m/p2 unidades de este bien. Similarmente, el consumidor puede comprar hasta m/p1 del
la pendiente de la recta de balance es igual al ratio de los precios; es decir, p1 /p2 . Este
toda la renta disponible y decida reducir su consumo del bien 2 en 1 unidad, entonces
x2 6
m
p2
no factible
•x′′
factible •x
•x′
-
m x1
p1
la Figura 1.2, la cesta de consumo x está en la recta de balance. Por tanto, x es factible.
Como las cestas que se encuentran más cerca del origen (0, 0) del gráfico son más fáciles de
adquirir, observamos también que todas las cestas al suroeste de la recta de balance, por
ejemplo la cesta x′ , son factibles. Todas estas cestas de consumo, incluyendo las cestas que
lado, las cestas al noreste de la recta de balance, entre ellas la cesta x′′ , no son alcanzables
para el consumidor puesto que son demasiado caras. Entonces, no son factibles.
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 9
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
Supongamos que un consumidor puede comprar dos bienes. El precio del bien 1 es p1 = 3,
mientras que el precio del bien 2 es p2 = 2. También sabemos que la renta disponible del
consumidor es m = 30.
7. ¿La afirmación “La cesta x′′ = (6, 6) está en la recta de balance” es verdadera o falsa?
9. Añadir las cestas de consumo de los ejercicios 5-7 al dibujo del ejercicio 4.
10 1.1. LA RESTRICCIÓN PRESUPUESTARIA
SOLUCIONES
Supongamos que un consumidor puede comprar dos bienes. El precio del bien 1 es p1 = 3,
mientras que el precio del bien 2 es p2 = 2. También sabemos que la renta disponible del
consumidor es m = 30.
tiene que darse la situación que x2 = 0. Por tanto, podemos escribir la fórmula de la
tiene que darse la situación que x1 = 0. Por tanto, podemos escribir la fórmula de la
p1 m
x2 = − · x1 + .
p2 p2
3
x2 = − · x1 + 15.
2
x2 6
14
12
10
8
6
4
2
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
12 1.1. LA RESTRICCIÓN PRESUPUESTARIA
Solución: La cesta x es factible si y sólo si p1 ·x1 +p2 ·x2 ≤ m. Sustituimos los valores
Escribimos la ecuación anterior en la siguiente manera: 3·7+2·5 ≤ 30. Como 31 > 30,
la afirmación es falsa.
Solución: La cesta x′ es factible si y sólo si p1 ·x′1 +p2 ·x′2 ≤ m. Sustituimos los valores
la afirmación es verdadera.
7. ¿La afirmación “La cesta x′′ = (6, 6) está en la recta de balance” es verdadera o falsa?
Solución: Puesto que el consumidor gasta toda la renta, sabemos que p1 ·x1 +p2 ·x2 =
30−24
Por tanto, x2 = 2
= 3.
9. Añadir las cestas de consumo de los ejercicios 5-7 al dibujo del ejercicio 4.
x2 6
14
12
10
8
x′ • ′′
6 •x
•x
4
2
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
14 1.2. VARIACIONES EN LA RENTA
ponible del consumidor —por ejemplo, podrı́a darse la situación que el individuo ha visto
aumentar su salario— o si varı́a uno de los precios. Lo segundo ocurre si, por ejemplo,
el gobierno decide alterar los impuestos indirectos sobre algunos bienes o si la empresa
productora tiene cierto poder de mercado y decide variar el precio de venta del bien. Para
mos que el consumidor tiene una renta disponible inicial igual a m0 . La renta disponible
toma valores mayores o igual a -1) mide el cambio porcentual de la renta disponible. En
m1 150 6 1
τ= 0
−1= −1= −1= .
m 125 5 5
m1 115 23 2 8
τ= 0
−1= = −1=− =− .
m 125 25 25 100
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 15
Resulta intuitivo que el conjunto presupuestario se hace más grande cuando aumenta
la renta disponible. Pero, de hecho, es posible ser más exacto. Aplicando la Ecuación 1.2,
p1 m0
x2 = − · x1 + .
p2 p2
Por el otro lado, la recta de balance después del cambio de la renta disponible está dada
por la ecuación
p1 m1 p1 (1 + τ ) m0
x2 = − · x1 + = − · x1 + .
p2 p2 p2 p2
La segunda ecuación demuestra que el cambio de la renta disponible provoca una variación
x2 6 x2 6
m1
p2
m0 m0
p2 p2
=⇒
m1
p2
−p1 /p2 −p1 /p2
−p1 /p2 −p1 /p2
⇐=
- -
m0 m1 x1 m1 m0 x1
p1 p1 p1 p1
El panel izquierdo de la Figura 1.3 demuestra el caso cuando la renta disponible sube;
es decir, τ > 0. Inicialmente, el consumidor puede comprarse hasta m0 /p1 unidades del
16 1.2. VARIACIONES EN LA RENTA
bien 1 o hasta m0 /p2 unidades del bien 2. Y la pendiente inicial de la recta de balance
balance se desplaza parallelamente hacia la derecha. Por tanto, la nueva recta de balance
sigue teniendo la misma pendiente que antes pero el conjunto de las cestas factibles ha
aumentado.
derecho de la Figura 1.3. Las conclusiones principales son las mismas que en el primer caso,
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
Supongamos que un consumidor puede comprar dos bienes. El precio del bien 1 es p1 = 3,
mientras que el precio del bien 2 es p2 = 2. También sabemos que la renta inicial del
individuo es m0 = 30.
2. ¿Después del cambio, cuántas unidades del bien 1 se puede consumir como máximo?
3. ¿Después del cambio, cuántas unidades del bien 2 se puede consumir como máximo?
5. Partiendo de la situación inicial cuando m0 = 30, ¿en qué porcentaje tiene que
incrementarse, como mı́nimo, la renta disponible par que la cesta x x̃ = (7, 5) sea
factible?
6. Partiendo de la situación inicial cuando m0 = 30, ¿en qué porcentaje puede reducirse,
como máximo, la renta disponible para que la cesta x̄ = (5, 7) siga siendo factible?
7. Suponiendo que p1 = 3 y p2 = 2, dibujar las rectas de balance que pasan por los
SOLUCIONES
Supongamos que un consumidor puede comprar dos bienes. El precio del bien 1 p1 = 3,
mientras que el precio del bien 2 es p2 = 2. También sabemos que la renta inicial del
individuo es m0 = 30.
tuimos los valores indicados en el enunciado para ver que 20 = (1 + τ ) 30. Entonces,
20 1
τ= −1=− .
30 3
2. ¿Después del cambio, cuántas unidades del bien 1 se puede consumir como máximo?
3. ¿Después del cambio, cuántas unidades del bien 2 se puede consumir como máximo?
x2 6
14
12
10
8
6
4
2
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
5. Partiendo de la situación inicial cuando m0 = 30, ¿en qué porcentaje tiene que
incrementarse, como mı́nimo, la renta disponible par que la cesta x x̃ = (7, 5) sea
factible?
6. Partiendo de la situación inicial cuando m0 = 30, ¿en qué porcentaje puede reducirse,
como máximo, la renta disponible para que la cesta x̄ = (5, 7) siga siendo factible?
siendo factible siempre cuando m1 ≥ 29. Utilizando que la ecuación del cambio de la
7. Suponiendo que p1 = 3 y p2 = 2, dibujar las rectas de balance que pasan por los
x2 6
14
12
10
8
• x̃ = (5, 7)
6
• x̄ = (7, 5)
4
2
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 21
Ahora estudiamos el efecto de una variación en uno de los precios sobre el conjunto presu-
del bien 1 inicial (el precio que se verá modificado) por p01 . El precio nuevo después del
por uno del precio del bien 1. Para pasarlo a términos porcentuales, basta multiplicarlo
por 100. Normalmente t pertenece al intervalo (-1, 1) aunque nada impide que pueda estar
fuera del mismo. Según lo anterior, observamos que el precio aumenta si t > 0 y que el
y después de la variación. Entonces, las dos rectas de balance son dadas por las siguientes
ecuaciones:
(antes) p01 x1 + p2 x2 = m
Analizamos las dos ecuaciones anteriores con más detalle. En el caso de que el consumi-
dor sólo compra el bien 2 (es decir, x1 = 0), entonces podrá demandar m/p2 unidades de
bien 2 antes y después del cambio de p1 . Por tanto, el valor de las ordenadas en el origen
si el consumidor sólo demanda el bien 1 (es decir, x2 = 0). En este caso, el consumidor
22 1.3. VARIACIONES EN LOS PRECIOS
puede comprar m/p01 unidades del bien 1 antes de la variación del precio p1 y m/p11 unida-
Finalmente, vamos a mostrar que un cambio en los precios también afecta a la pendiente
de la recta de balance. La pendiente inicial de la recta de balance es −p01 /p2 , después del
cambio la pendiente es −p11 /p2 . Entonces, un cambio en los precios altera la capacidad del
x2 6 x2 6
m
p2 m
p12
m
⇒
p02
El panel izquierdo de la Figura 1.4 demuestra el caso cuando el precio del bien 1
incrementa. Inicialmente, el consumidor puede comprar hasta m/p01 unidades del bien 1,
después de la variación del precio puede demandar hasta m/p11 unidades. Como el precio
del bien 1 ha aumentado, entonces m/p11 < m/p01 . También observamos que el conjunto
presupuestario se contrae y que la recta de balance está ahora más inclinada. Esto refleja
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 23
mientras que el precio del otro no varı́a. Finalmente, vemos que el cambio en el precio del
bien 1 no tiene efectos sobre la capacidad de la compra del bien 2. El individuo puede
Visualizamos un segundo caso cuando el precio del bien 2 disminuye en el panel derecho
de la Figura 1.4. Las conclusiones principales son las mismas que antes, la diferencia crucial
es que el conjunto presupuestaria se hace ahora más grande; tenemos más capacidad de
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
Supongamos que un comprador puede demandar dos bienes. El precio inicial del bien 1
es p01 = 3, mientras que el precio del bien 2 es p2 = 2. También sabemos que la renta del
individuo es m = 30.
1. Si el precio del bien 1 aumenta a p11 = 4, calcular la tasa de variación t del precio del
bien 1.
2. ¿Cuántas unidades del bien 1 puede demandar el individuo después del cambio?
aumentar p1 como máximo para que la cesta x̃ = (5, 7) sea todavı́a factible?
m1 = 20, ¿en qué porcentaje tienen que reducirse los precios de ambos bienes para
SOLUCIONES
Supongamos que un comprador puede demandar dos bienes. El precio inicial del bien 1
es p01 = 3, mientras que el precio del bien 2 es p2 = 2. También sabemos que la renta del
individuo es m = 30.
1. Si el precio del bien 1 aumenta a p11 = 4, calcular la tasa de variación t del precio del
bien 1.
4 1
t= −1= .
3 3
2. ¿Cuántas unidades del bien 1 puede demandar el individuo después del cambio?
consumo del bien 1 si la demanda del bien 2 es nula, es decir x2 = 0, concluimos que
30
x1 = 4
= 7.5.
26 1.3. VARIACIONES EN LOS PRECIOS
Solución: La nueva recta del balance está indicada por la ecuación p11 x1 +p2 x2 = m.
p11 m 4 30
x2 = − x1 + = − x1 + .
p2 p2 2 2
x2 6
14
12
10
8
6
4
2
⇐=
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 27
aumentar p1 como máximo para que la cesta x̃ = (5, 7) sea todavı́a factible?
los valores indicados para ver que la cesta es factible si y sólo si p11 · 5 + 2 · 7 ≤ 30.
30 − 2 · 7 16
p11 ≤ = .
5 5
Por tanto, el precio máximo es p11 = 3.2. Es decir, el precio del bien 1 ha aumentado
en un 6.66 %.
x2 6
•
14
12
10 • x̃ = (5, 10)
8
6
4
2
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
Puesto que m = 30 y p2 = 2, la recta de balance tiene que pasar por el punto (0, 15).
El enunciado también indica que la recta pasa por el punto (5,10). Entonces, la recta
28 1.3. VARIACIONES EN LOS PRECIOS
m1 = 20, ¿en qué porcentaje tienen que reducirse los precios de ambos bienes para
Solución: Inicialmente, el individuo puede demandar hasta m0 /p2 unidades del bien
los precios, el consumidor continua a poder demandar las mismas unidades del bien
m0 m1
= .
p02 p12
⇔ 30
2 = 20
2(1+t)
⇔ (1 + t) = 20
2 · 2
30
⇔ 1+t= 2
3
⇔ t= 2
3 − 1 = − 13
netarias, ambos precios tienen que disminuir en un 33 % para que el conjunto pre-
supuestario no cambie. Por tanto, tiene que ser el caso de que p11 = 2
3
·3 = 2 y
p12 = 2
3
· 2 = 43 .
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 29
general. La estructura del conjunto presupuestario va a afectar la elección final del con-
que determina esta decisión. De hecho, es fácil ver que dos consumidores con el mismo
conjunto presupuestario van a demandar cantidades muy diferentes en el caso de que sus
gustos sean muy distintos. Por ejemplo, un consumidor que prefiere el bien 1 al bien 2 va
demandar cantidades muy diferentes que un consumidor que considera los dos bienes igual
de importantes. Por tanto, introducimos en este capı́tulo las herramientas teóricas que nos
Para modelar los gustos o las preferencias vamos a suponer que el consumidor es capaz
de ordenar todas las cestas de consumo. Para ser más concretos, asumimos que el consu-
midor asigna a cada cesta de consumo un grado de satisfacción llamada utilidad que refleja
su bienestar. Desde el punto de vista analı́tico la utilidad del consumidor es nada más que
ya indicamos antes, esta función asigna a cada cesta (x1 , x2 ) ∈ R2+ un nivel de utilidad
Dadas las cestas x y x′ , si u(x1 , x2 ) > u(x′1 , x′2 ), entonces decimos que el individuo
Dadas las cestas x y x′ , si u(x1 , x2 ) = u(x′1 , x′2 ), entonces decimos que el individuo
Una vez equipados con el concepto de la función de utilidad, nos podemos preguntar si
negativa, principalmente porque no todas las funciones son capaces de incorporar dos
no es que los niveles de utilidad sean números negativos (al final, el consumidor es capaz
de comparar cada par de cestas), este tipo de función no satisface el criterio de la desea-
bilidad puesto que niveles más altos de consumo reducen la utilidad. Por ejemplo, como
u(2, 2) = −4 y u(1, 1) = −2, resulta que el consumidor prefiere la cesta (1, 1) a la cesta
(2, 2). Y esta comparación es poco intuitiva si pensamos en bienes deseables. Para poder
quedará excluida. También cabe mencionar que muchas funciones que vamos a considerar
consumidor aumenta estrictamente en el caso de que el consumo de uno los bienes aumenta
Vamos a hacer una serie de comentarios sobre las condiciones de monotonı́a. Primero,
cada función de utilidad que satisface la monotonı́a fuerte también cumple el requisito de
existen funciones de utilidad que satisfacen la monotonı́a débil pero no son fuertemente
monótonas. El ejemplo más conocido de este tipo de preferencias es el caso de los bienes
complementarios que estudiamos con más detalle en la Sección 2.3 y que se puede repre-
32 1.4. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: PREFERENCIAS REGULARES
sentar mediante la función de utilidad u(x1 , x2 ) = mı́n{x1 , x2 }. Para ver este resultado,
consideramos las cestas x = (1, 1) y x′ = (2, 1). Se observa que u(1, 1) = mı́n{1, 1} = 1 y
u(2, 1) = mı́n{2, 1} = 1; es decir, la utilidad es la misma para las dos cestas. Puesto que la
monotonı́a fuerte pide que el bienestar del consumidor es mayor si incrementa el consumo
de uno de los bienes y el consumo del otro bien no disminuye, concluimos que la función
utilidad es diferenciable, un supuesto adicional que vamos a mantener durante gran parte
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 )
>0 y > 0. (1.3)
∂x1 ∂x2
Vemos que si las derivadas parciales son positivas, entonces la función de utilidad es
del bien i aumenta marginalmente (es decir, en una cantidad muy pequeña).
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 33
1/2 1/2
EJEMPLO: Sea u(x1 , x2 ) = x1 · x2 . Entonces,
entre visitar un parque natural e ir a cenar. A unas personas les gusta más la naturaleza y
a otras les agrada más ir a cenar, pero todos queremos consumir alguna cantidad positiva
ir a un restaurante será la opción más deseada. En otras palabras, hay mucha evidencia
Ahora consideramos la función u(x1 , x2 ) = x21 + x22 . Como niveles más altos de consumo
x = (2, 2) y x′ = (0, 4), vemos que u(2, 2) = 8 es menor que u(0, 4) = 16. Y esto contradice
tenemos que introducir otra condición que excluya las funciones de utilidad que no se
adhieren a este criterio. Con este motivo en la mente introducimos primero el concepto
gráficamente.
todas las cestas de consumo tales que la utilidad alcanzada es exactamente ū.
Como indica la definición, la curva de indiferencia conecta todas las cestas que pro-
eje de abscisas el consumo del bien 1 y en el eje de ordenadas el consumo del bien 2. Luego,
para cada nivel de consumo del bien 1, buscamos el nivel de consumo del bien 2 tal que la
x2
6
u3
u2
u1
u0
-
x1
Las curvas de indiferencia tienen tres propiedades generales que son observables en la
Figura 1.5. Primero, las curvas de indiferencia son decrecientes; es decir, si el consumidor
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 35
quiere demandar más unidades del bien 1, entonces tendrá que disminuir el consumo del
bien 2 para mantener la utilidad constante. Si no fuera ası́ y tuviéramos que aumentar
también el consumo del bien 2 para mantener el nivel de utilidad constante, entonces ob-
dos bienes, la utilidad sube necesariamente por la condición de la monotonı́a y, por tan-
to, la utilidad no puede ser constante (y eso es lo que pide la definición de la curva de
indiferencia). Segundo, las curvas de indiferencia más alejadas del origen corresponden a
niveles de utilidad más altos. Esta propiedad es también una consecuencia directa de la
caso contrario habrı́a como mı́nimo una cesta que forma parte de dos curvas de indiferencia
y que, por tanto, da dos niveles de utilidad diferentes. Y esto es imposible puesto que la
1/2 1/2
EJEMPLO: Sea u(x1 , x2 ) = x1 · x2 . Para calcular la curva de
indiferencia correspondiente al nivel ū despejamos x2 de la ecuación
1/2 1/2
x1 · x2 = ū. Entonces,
( )2
−1/2 −1/2
= ū2 · x−1
1/2
x2 = ū · x1 ⇔ x2 = ū · x1 1 .
x2 = 12 · x−1
1 = 1/x1 .
terio de diversificación muy natural que cualquier función de utilidad deberı́a satisfacer.
36 1.4. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: PREFERENCIAS REGULARES
Escogemos dos cestas x y x′ que pertenecen a la misma curva de indiferencia y que, por
tanto, dan la misma utilidad al consumidor. Supongamos que la utilidad de las dos cestas
es ū. Si ahora generamos de estas dos cestas una tercera cesta x′′ que es la cesta media
es obvio que la cesta media x′′ es una diversificación de las dos cesta originales. Como a
los individuos generalmente les gusta diversificar su consumo, necesitamos que la utilidad
asociada a la cesta media sea como mı́nimo tan alta como la utilidad de las cestas originales.
Convexidad (Estricta). Las preferencias del consumidor son convexas si para todos los
pares de cestas de consumo que forman parte de la misma curva de indiferencia, la utilidad
El requisito de la convexidad impone una estructura adicional sobre las curvas de in-
diferencias que se puede observar en un sencillo gráfico. Puesto que ya sabemos que las
curvas de indiferencias tienen que ser decrecientes por la condición de la monotonı́a, nos
Si conectamos estas dos cestas con una linea recta, obtenemos todas las combinaciones
lineales de las dos cestas originales. El requisito de la convexidad implica que la utilidad
de la cesta media x′′ , la cesta de consumo que se encuentra justo en el medio de la linea
Como la utilidad es más alta para cestas más alejadas del origen por la condición de la
x2 6 x2 6
•
x
• •
x x′′
x′′
• • x′
•
x′
- -
x1 x1
dibujada en el panel izquierdo. En el panel derecho, la cesta media x′′ está por debajo de la
media x′′ está más cerca del origen que la curva de indiferencia inicial, podemos concluir
que en el panel derecho, el nivel de utilidad de la cesta media x′′ es inferior al nivel de
decir, la segunda derivada de la curva de indiferencia tiene que ser positiva (estrictamente
∂ 2 x2
≥ 0. (1.4)
∂x21 u=ū
1/2 1/2
EJEMPLO: Sea u(x1 , x2 ) = x1 · x2 . Vimos anteriormente que la
curva de indiferencia correspondiente al nivel ū es
x2 = ū2 · x−1
1 .
Para ver si las preferencias son convexas hay que calcular la segunda
derivada de la curva de indiferencia. La primera derivada es
∂x2
= −1 · ū2 · x−2
1 .
∂x1 u=ū
Finalmente, decimos que las preferencias son regulares si son fuertemente monótonas y
estrictamente convexas. Por tanto, los ejemplos desarrollados a lo largo de la sección han
Definición 5. Las preferencias del consumidor son regulares si y sólo si son fuertemente
indiferencia — está ı́ntimamente relacionada con la elección óptima del consumidor. Por
x2
6
-
x′1 x′′1 x′′′
1
x1
res. Consideremos dos niveles distintos de consumo del bien 1, es decir x′1 y x′′′
1 . Después,
eso, si partimos del nivel de consumo inicialmente bajo, es decir x′1 , entonces un incremento
del consumo de dicho bien tiene que ser compensado con una reducción sustancial del con-
sumo del bien 2. La situación es completamente diferente para consumos altos de x1 , por
ejemplo x′′′
1 . Ahora, un incremento del consumo del primer bien en una cantidad igual a la
anterior, añade poca utilidad. Por tanto, en este caso bastará una reducción muy pequeña
del consumo del segundo bien para compensar el incremento del consumo del primer bien.
del primer bien en ∆x1 unidades, ¿cuál tiene que ser la reducción en el consumo del segun-
do bien, ∆x2 , para que el consumidor sea indiferente entre la cesta de consumo inicial y la
40 1.4. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: PREFERENCIAS REGULARES
final? El concepto que mide esta tasa de sustitución a lo largo de la curva de indiferencia
sumidor está dispuesto a sustituir un bien por el otro manteniendo inalterado su nivel de
cuando el incremento en el consumo del primer bien tiende a cero. Por tanto, para niveles
es alta y, por el contrario dicha pendiente es baja par niveles altos de consumo de x?1.
marginales. Para ver esto hallamos primero la derivada total de la función de utilidad:
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 )
∆u = ∆x1 + ∆x2 .
∂x1 ∂x2
La ecuación indica que el cambio en la utilidad, ∆u, es igual a la variación de las demandas,
∆x1 y ∆x2 , multiplicados por las utilidades marginales correspondientes. Como el objetivo
cambiar marginalmente el consumo de los dos bienes forma parte de la misma curva de
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 )
∆x1 + ∆x2 = 0.
∂x1 ∂x2
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 41
La ecuación final expresa que la RM S es igual a los ratios de las utilidades marginales.
Terminamos con un ejemplo que corrobora que la RM S es igual al valor absoluto de la pen-
diente de la curva de indiferencia si el aumento en el consumo del primer bien tiende a cero.
1/2 1/2
EJEMPLO: Sea u(x1 , x2 ) = x1 · x2 . Calculamos la pendiente de
1
la curva de indiferencia para ū = 1 y x1 = 2
de dos formas distintas.
1/2 1/2
1) Cálculo Directo: La curva de indiferencia es: x1 · x2 =1o
x2 = 1/x1 . Por tanto, la pendiente de la curva de indiferencia es
∂x2 1
= − 2.
∂x1 x1
2) Cálculo con la RM S:
/ −1/2 1/2
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 ) 1/2 · x1 · x2 x2
RM S = = 1/2 −1/2
= .
∂x1 ∂x2 1/2 · x1 · x2 x1
x2 2
RM S = = = 4.
x1 1/2
42 1.4. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: PREFERENCIAS REGULARES
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
1/2 1/2
Sea u(x1 , x2 ) = x1 · x2 la función de utilidad tipo Cobb-Douglas del consumidor.
verdadera o falsa?
SOLUCIONES
1/2 1/2
Sea u(x1 , x2 ) = x1 · x2 la función de utilidad tipo Cobb-Douglas del consumidor.
verdadera o falsa?
Solución: En el ejercicio anterior hemos mostrado que u(9, 1) = u(3, 3). Por tanto, el
consumidor es indiferente entre las dos cestas. Entonces, concluimos que la afirmación
es falsa.
44 1.4. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: PREFERENCIAS REGULARES
ción de utilidad:
∂u(x1 , x2 ) 1 −1/2 1/2
= · x1 · x2
x1 2
y
∂u(x1 , x2 ) 1 1/2 −1/2
= · x1 · x2 .
x2 2
y
∂u(x1 , x2 ) 1 1
= · 41/2 · 1−1/2 = · 2 · 1 = 1.
x2 (x1 ,x2 )=(4,1) 2 2
Por ejemplo, si el consumidor demanda 4 unidades del primer y 1 unidad del segundo
/
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 ) 1/4 1
RM S = = = .
x1 x1 1 4
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 45
x2 = 16 · x−1
1 .
Para dibujar la curva de indiferencia notamos que los puntos (1,16), (4,4) y (16,1)
x2 6•
14
12
10
8
6
4 •
2
•
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
46 1.4. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: PREFERENCIAS REGULARES
∂x2
= −16 · x−2
1 .
∂x1
/ −1/2 1/2
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 ) 1/2 · x1 · x2 x2
RM S = = 1/2 −1/2
= .
∂x1 ∂x2 1/2 · x1 · x2 x1
/
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 ) x2 8
RM S = = = = 4.
∂x1 ∂x2 x1 2
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 47
Ahora iniciamos el estudio de algunas preferencias especiales que podemos observar en mu-
chas situaciones pero que no forman parte de las preferencias regulares (por no satisfacer
El caso de los bienes sustitutivos ocurre si el consumidor está dispuesto a sustituir un bien
por otro a una tasa constante. El ejemplo más sencillo es cuando la tasa de sustitución es
igual a 1; es decir, si el consumidor cambia una unidad del primer bien por una unidad del
Definición 7. Dos bienes son sustitutivos si el consumidor está dispuesto a cambiar uno
gamos por ejemplo que el consumidor quiere escribir una carta a una amiga. Si el único
objetivo es que la amiga reciba la carta, entonces no importa si escribimos la carta con
un bolı́grafo negro o con un bolı́grafo azul. Podemos sustituir el bolı́grafo sin afectar la
utilidad. Otros ejemplos de bienes sustitutivos son Coca-Cola y Pepsi, margarina y mante-
La función de utilidad refleja que el consumidor está dispuesto a sustituir β unidades del
bien 1 por α unidades del bien 2. Para ver esta implicación supongamos por un momento
que el individuo consume β unidades del bien 1 y ninguna unidad del bien 2. Entonces,
consume α unidades del bien 2 y cero unidades del bien 1, la utilidad del consumidor es
u(0, α) = α·0+β ·α = α·β. Como la utilidad no varı́a entre las dos situaciones, reafirmamos
lo indicado anteriormente: el individuo está dispuesto a sustituir β unidades del bien 1 por
En la sección anterior vimos que se puede representar las preferencias del consumidor
con la ayuda de las curvas de indiferencia. Como la función de utilidad del consumidor
x2 = ū/β −α/β ·x1 . Por tanto, la curva de indiferencia es una recta cuyo valor de ordenadas
ū/β −α/β ·x1 , vemos que x2 = ū−x1 . Por tanto, la curva de indiferencia correspondiente al
son las funciones que juntan todas las cestas si la utilidad final del consumidor es igual a
10 y 15, respectivamente.
bilidad y de la diversificación. Para analizar estas dos cuestiones tenemos que determinar
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 49
x2
6
15
10
ū = 5 ū = 10 ū = 15
-
5 10 15 x1
las curvas de indiferencia (la segunda derivada de la curva de indiferencia). Las utilidades
marginales son
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 )
=α>0 y = β > 0.
∂x1 ∂x2
Como las utilidades marginales son estrictamente positivas para todos los niveles de
Como es fácil ver que la segunda derivada es cero, concluimos que las preferencias son
convexas pero no estrictamente convexas. Por tanto, los bienes sustitutivos satisfacen el
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
verdadera o falsa?
ū = 30 y ū = 36.
si x = (2, 2).
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 51
SOLUCIONES
u(2, 1) = 2 · 2 + 3 · 1 = 4 + 3 = 7
u(3, 0) = 3 · 2 + 3 · 0 = 6.
verdadera o falsa?
Solución: En el ejercicio anterior hemos mostrado que u(2, 1) > u(3, 0). Por tanto,
afirmación es verdadera.
52 1.5. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: BIENES SUSTITUTIVOS
de utilidad:
∂u(x1 , x2 )
=2
∂x1
y
∂u(x1 , x2 )
= 3.
∂x2
incremento del consumo del bien 2 en 1 unidad conlleva que la utilidad aumente en
3 unidades.
Solución: Como el consumidor es indiferente entre las cestas (3,0) y (0,2) —de hecho,
está dispuesto a sustituir 3 unidades del bien 1 por 2 unidades del bien 2 (o, que es
lo mismo, 1 unidad del bien 1 por 2/3 unidades del bien 2). Formalmente,
/
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 ) 2
RM S = − =− .
∂x1 ∂x2 3
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 53
ū = 30 y ū = 36.
ū 2
x2 = − x1 .
3 3
x2 6
14
12
10
8
6
4
2 ū = 18 ū = 30 ū = 36
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
ū 2 18 2
x2 = − x1 = − · 3 = 6 − 2 = 4.
3 3 3 3
54 1.5. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: BIENES SUSTITUTIVOS
si x = (2, 2).
∂x2 2
=− .
∂x1 3
demanda del bien 1 en 1 unidad, entonces tiene que reducir la demanda del bien 2
también el otro bien. Por ejemplo, podemos imaginar una persona que bebe el café siempre
con azúcar. Si el consumidor decide incrementar su demanda de café, entonces tendrá que
comprar necesariamente más azúcar (por el otro lado, para los consumidores a quienes
les gusta igualmente el té, éste se considera un bien sustitutivo del café). Por tanto, los
siempre en proporciones fijas (dos cucharas de azúcar por cada tasa de café). Un otro caso
de los bienes complementarios muy común consiste en los zapatos de pie izquierdo y los
zapatos de pie derecho. Acumular muchos zapatos de pie derecho sin tener zapatos de pie
izquierdo no tiene ningún sentido económico ni aporta utilidad al consumidor que los posee.
utilidad:
bien 1 conjuntamente con α unidades del bien 2. Para ver esta implicación analizamos
la cesta x = (β, α) con más detalle. Resulta que la utilidad asociada a esta cesta es
56 1.6. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: BIENES COMPLEMENTARIOS
primer bien por β unidades, de tal manera que la nueva cesta de consumo es x′ = (2 β, α),
haber comprado el doble del primer bien, entonces tendrá que doblar también el consumo
refleja que la persona quiere consumir los dos bienes en proporciones fijas.
u(x1 , x2 ) = mı́n{x1 ; x2 }.
análisis es similar para las otras curvas. Como u(5, 5) = mı́n{5; 5} = 5, vemos que la cesta
(5, 5) forma parte de esta curva de indiferencia. Si ahora incrementamos el consumo del
primer bien sin aumentar la demanda del segundo bien, entonces la utilidad se mantiene
constante. Lo mismo pasa si incrementamos el consumo del segundo bien sin aumentar la
demanda del primer bien. Por tanto, concluimos que la curva de indiferencia tiene la forma
x2
6
15 •
ū = 15
10 •
ū = 10
5 •
ū = 5
-
5 10 15 x1
monótona (si incrementamos el consumo de los dos bienes, entonces aumenta la utilidad),
primera sección de este capı́tulo, pero lo vamos a repetir aquı́. La definición de la monotonı́a
fuerte constata que la utilidad aumenta estrictamente en el caso de que el consumo de sólo
uno de los bienes incremente. Por ejemplo, tendrı́a que darse el caso de que u(6, 5) > u(5, 5).
Pero como u(6, 5) = mı́n{6; 5} = 5 y u(5, 5) = mı́n{5; 5} = 5 nos indica que la desigualdad
anterior no es cierta y, por tanto, la función de utilidad mı́n{x1 ; x2 } no cumple este criterio.
Algo similar ocurre con el requisito de la diversificación. Los bienes complementarios son
convexas pero no estrictamente convexas. Para ver esto notemos primero que las cestas
la cesta media x′′1 = 1/2 (x1 + x′1 ) = 5.5 y x′′2 = 1/2 (x2 + x′2 ) = 5. Las preferencias
fueran estrictamente convexas si se darı́a el caso de que u(x′′1 , x′′2 ) > u(5, 5). Pero como
58 1.6. LAS PREFERENCIAS DEL CONSUMIDOR: BIENES COMPLEMENTARIOS
u(5.5, 5) = u(5, 5) = 5 está implicación no se cumple. Por tanto, las preferencias son
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
1. ¿Cuál es el nivel de utilidad asociado a las cestas x = (2, 1), x′ = (3, 1) y x′′ = (2, 2)?
verdadera o falsa?
3. ¿La afirmación “El consumidor prefiere la cesta x′′ = (2, 2) a la cesta x = (2, 1) es
verdadera o falsa?
7. Supongamos que x1 = 6. ¿Cuál es el consumo mı́nimo del bien 2, x2 , tal que la cesta
SOLUCIONES
1. ¿Cuál es el nivel de utilidad asociado a las cestas x = (2, 1), x′ = (3, 1) y x′′ = (2, 2)?
Solución: Sustituimos las cestas de consumo x = (2, 1), x′ = (3, 1) y x′′2 = (2, 2) en
u(2, 1) = mı́n{2; 2 · 1} = 2,
u(3, 1) = mı́n{3; 2 · 1} = 2
u(2, 2) = mı́n{2; 2 · 2} = 2
verdadera o falsa?
Solución: En el ejercicio anterior hemos mostrado que u(2, 1) = u(3, 1). Por tanto, el
consumidor es indiferente entre las dos cestas. Entonces, concluimos que la afirmación
es falsa.
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 61
3. ¿La afirmación “El consumidor prefiere la cesta x′′ = (2, 2) a la cesta x = (2, 1) es
verdadera o falsa?
Solución: En el ejercicio 1 hemos mostrado que u(2, 2) = u(2, 1). Por tanto, el con-
sumidor es indiferente entre las dos cestas. Entonces, concluimos que la afirmación
es falsa.
sumo del primer bien a tres unidades, entonces su utilidad es u(3, 2) = mı́n{3; 2 ·2} =
consumo del segundo bien a tres unidades, entonces su utilidad es u(2, 3) = mı́n{2; 2 ·
x2 6
14
12
10
8
6
4 •
ū = 7
2 •
ū = 4
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
7. Supongamos que x1 = 6. ¿Cuál es el consumo mı́nimo del bien 2, x2 , tal que la cesta
ver que u(6, x2 ) = mı́n{6; 2 · x2 }. Por tanto, para que la utilidad del consumidor sea
ver que u(x1 , x2 ) = mı́n{x1 ; 12}. Por tanto, para que la utilidad del consumidor sea
En esta sección estudiamos la elección del consumidor. Supongamos que el motivo del con-
sumidor es maximizar su bienestar. Eso implica que el consumidor elegirá entre todas las
cestas factibles la que maximiza su utilidad. Si no fuera ası́ y el consumidor escogiese una
cesta diferente, entonces podrı́a aumentar su bienestar sin ocurrir en costes adicionales y
utilidad es más alta; es decir, u(x∗1 , x∗2 ) ≥ u(x1 , x2 ) para todas las cestas factibles x.
Para tener una buena intuición de la elección óptima es suficiente juntar los ingre-
dientes que introducimos en los capı́tulos anteriores en un gráfico. La Figura 2.4 muestra
indiferencias. Si analizamos la situación con detalle vemos que el consumidor estarı́a en-
cantado de adquirir la cesta x′′ , pero como x′′ no es factible —está fuera de su alcance
económico— quedará excluida esta opción. Por tanto, queda claro que tenemos que buscar
la cesta óptima entre todas las cestas que forman parte del conjunto presupuestario.
ambos bienes es más alto en x′ que en x. Entonces, por la condición de la monotonı́a débil, la
invalida que la cesta x sea una cesta maximizadora de la utilidad. Como podemos repetir
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 65
x2 6
′′
m •x
p2
•
x′
∗
•x
•x
-
m x1
p1
el mismo argumento con todas las cestas en el interior del conjunto presupuestario, resulta
que la cesta óptima tiene que estar por encima de la recta de balance.
Si nos fijamos ahora en la recta de balance, vemos que la cesta x′ tampoco es óptima.
del origen que la curva de indiferencia que pasa por x′ . De hecho, se observa que la recta
de balance es la tangente de la curva de indiferencia que pasa por x∗ . Por tanto, si nos
alejemos un poco de x∗ pero seguimos por encima de la recta de balance, la utilidad baja
decir, no existe ninguna otra cesta factible que da más utilidad al consumidor que x∗ .
El análisis gráfico ha mostrado que la elección óptima satisface dos condiciones que
única y se caracteriza por las siguientes condiciones: (1) en el punto x∗ , la recta de balance
con igualdad.
Expresamos ahora formalmente las dos condiciones que identifican la elección óptima
indiferencia, indica que la pendiente de la curva de indiferencia en x∗ tiene que ser igual
a la pendiente de la recta de balance (que es igual al ratio de los precios −p1 /p2 ). Como
/
∂u(x∗1 , x∗2 ) ∂u(x∗1 , x∗2 ) p1
Condición de Óptimo 1: = .
∂x1 ∂x2 p2
Condición de Óptimo 1:
Vemos que
/
∂u(x1 , x2 ) ∂u(x1 , x2 ) α · xα−1
1 · x1−α
2 α · x2
RM S = = −α = .
∂x1 ∂x2 (1 − α) · x1 · x2
α (1 − α) · x1
α · x2 p1
= .
(1 − α) · x1 p2
Despejamos x1 de esta ecuación para ver que la elección óptima del bien 1 en función
de la elección óptima del bien 2 (y en función de los parámetros α, p1 , p2 y m) es
α · p2
x1 = · x2 .
(1 − α) · p1
Condición de Óptimo 2:
Ahora sustituimos x1 en la recta de balance p1 · x1 + p2 · x2 = m. Obtenemos
α · p2
p1 · · x2 + p2 · x2 = m.
(1 − α) · p1
α · p2 1−α p2 1−α
· x2 + p2 · · x2 = · x2 = m ⇔ x∗2 = · m.
(1 − α) 1−α 1−α p2
α · p2 α · p2 1−α α
x∗1 = · x∗2 = · ·m= · m.
(1 − α) · p1 (1 − α) · p1 p2 p1
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
óptimas de los dos bienes, x∗1 y x∗2 , si los precios de los bienes son p1 = 3 y p2 = 2 y
2. Supongamos que un consumidor puede gastar su renta en dos bienes, turismo (la
¿cuál es la demanda óptima del turismo x∗1 y cuál es el ahorro óptimo x∗2 .
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 69
SOLUCIONES
óptimas de los dos bienes, x∗1 y x∗2 , si los precios de los bienes son p1 = 3 y p2 = 2 y
En nuestro caso,
p1 p2
RM S = x2 / x1 = ⇔ x1 = · x2 .
p2 p1
p2
p1 · · x2 + p2 · x2 = m.
p1
Entonces,
m
x∗2 =
2 p2
y
p2 p2 m m
x∗1 = · x2 = · = .
p1 p1 2 p2 2 p1
m 10 m 10
x∗2 = = = 5/2 y x∗1 = = = 5/3.
2 p2 2·2 2 p1 2·3
70 1.7. LA ELECCIÓN DEL CONSUMIDOR: PREFERENCIAS REGULARES
2. Supongamos que un consumidor puede gastar su renta en dos bienes, turismo (la
¿cuál es la demanda óptima del turismo x∗1 y cuál es el ahorro óptimo x∗2 ?
En nuestro caso,
/
1 p1 p22
RM S = · x1 −1/2 1= ⇔ x1 = .
2 p2 4p21
tituimos los parámetros en este paso puesto que la demanda óptima del bien 1 no
1
x∗1 = .
16
Entonces, como p1 = 2, p2 = 1 y m = 1,
4 · 1 · 2 − 12 7
x∗2 = = .
4·1·2 8
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 71
Sea el individuo i-ésimo, cuyas preferencias sobre los dos únicos bienes de consumo
ui (x1i , x2i ), donde x1i y x2i representan las cantidades bienes x1 y x2 de una cesta de
consumo genérica de dicho consumidor. La renta del consumidor viene dada por mi y los
de equilibrio x∗ = (x∗1i , x∗2i ), o lo que es lo mismo, encontrar la cesta de consumo que ma-
ximiza su función de utilidad de entre todas aquellas cestas que le son accesibles, es decir
de entre las cestas de consumo cuyo coste es inferior o igual a su renta monetaria disponi-
Dados los supuestos que se han hecho sobre las preferencias del consumidor, vamos a
suponer que la restricción se satisface con igualdad, es decir: p1 · x1i + p2 · x2i = mi . Según
Lagrangiana siguiente:
o
/
∂ui (x1i , x2i ) ∂ui (x1i , x2i ) p1
= [4].
∂x1i ∂x2i p2
Esta última expresión [4] indica que en el óptimo, la curva de indiferencia es tangente a
la recta presupuestaria. Si no fuera ası́, el individuo podrı́a elegir otro vector de consumo
factible que le aporta más utilidad. Para ver esto, recordamos que la pendiente de la curva
bienes en este punto. Formalmente, la relación marginal de sustitución entre los bienes x1
En ese caso, nos viene a decir que cada individuo se gasta toda su renta disponible en
utilidad es casi-cóncava.
74 1.8. LA ELECCIÓN DEL CONSUMIDOR: BIENES SUSTITUTIVOS
En esta sección analizamos la elección del consumidor en el caso de que los bienes son
β x2 , donde α y β son números estrictamente positivos. También hemos visto que las curvas
x2 6
Caso 1
x∗
m • x∗
p2
• x∗
• x∗
• x∗
• x∗
• x∗
• x∗
• x∗
• x∗
• x∗
• -
m x1
p1
x2 6 x2 6
Caso 2 Caso 3
∗
x
m • m
p2 p2
- x∗ -
m
•
m
p1
x1 p1
x1
El hecho de que las curvas de indiferencia son lineas rectas cambia el análisis de la
tramos ninguna cesta que satisface la primera condición de óptimo. Para ver esto notamos
son parámetros exógenos, el ratio α/β no suele ser igual al ratio p1 /p2 . Como consecuencia
diferencias son lineas rectas, tiene que existir una curva de indiferencia que coincide
con la recta de balance. Por tanto, todos las cestas que agotan los recursos monetarios
m p1 ∗ 1
x∗2 = − x1 = 2 − x∗1 .
p2 p2 2
Entonces,
( )
1 ∗
u(x∗1 , x∗2 ) = x∗1 + 2 2 − x1 = x∗1 + 4 − x∗1 = 4.
2
Vemos que todas las cestas que agotan los recursos del con-
sumidor dan la misma utilidad; es decir, todas las cestas que
satisfacen la restricción presupuestaria con igualdad son óptimas.
76 1.8. LA ELECCIÓN DEL CONSUMIDOR: BIENES SUSTITUTIVOS
2. Si α/β < p1 /p2 , la relación marginal de sustitución no es nunca igual al ratio de los
precios. Por tanto, el consumidor va a gastar toda la renta en uno de los dos bienes.
El segundo caso de la Figura 1.11 muestra que la curva de indiferencia que pasa
por la cesta x = (0, m/p2 ) —el consumidor sólo compra el segundo bien— está más
alejada del origen que la curva de indiferencia que pasa por la cesta x′ = (m/p1 , 0),
( )
m m α p2 β p1 m
u(m/p1 , 0) − u(0, m/p2 ) = α − β =m − = (α p2 − β p1 ).
p1 p2 p1 · p2 p1 · p2 p1 · p2
Como consideramos el caso α/β < p1 /p2 , resulta que esa diferencia es estrictamente
negativa (α p2 < β p1 ). Por tanto, concluimos que el consumidor sólo compra el se-
m p1 ∗
x∗2 = − x = 4 − x∗1 .
p2 p2 1
Entonces,
los precios. Por tanto, el consumidor va a gastar toda la renta en uno de los dos
bienes. El tercer caso de la Figura 1.11 muestra que la curva de indiferencia que pasa
por la cesta x = (0, m/p2 ) —el consumidor sólo compra el segundo bien— está más
cerca del origen que la curva de indiferencia que pasa por la cesta x′ = (m/p1 , 0), la
Como consideramos el caso α/β > p1 /p2 , resulta que esa diferencia es estrictamente
positiva (α p2 > β p1 ). Por tanto, concluimos que el consumidor sólo compra el primer
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
1. Sea u(x1 , x2 ) = 3·x1 +x2 la función de utilidad de un consumidor. Hallar las demandas
óptimas de los dos bienes, x∗1 y x∗2 , si los precios de los bienes son p1 = 3 y p2 = 2 y si
alcanza en el óptimo
y la renta del individuo es m = 24, ¿cuál es la demanda óptima de los dos bienes?
SOLUCIONES
1. Sea u(x1 , x2 ) = 3·x1 +x2 la función de utilidad de un consumidor. Hallar las demandas
óptimas de los dos bienes, x∗1 y x∗1 , si los precios de los bienes son p1 = 3 y p2 = 2 y si
alcanza en el óptimo?
de los dos bienes o es indiferente entre todas las cestas de consumo que agotan los
recursos. Por tanto, sólo tenemos que comparar la cesta de consumo x = (m/p1 , 0) —
el consumidor sólo compra el primer bien— con la cesta x′ = (0, m/p2 ), el consumidor
m 24
u(m/p1 , 0) = 3 · +0=3· + 0 = 24
p1 3
y
m 24
u(0, m/p2 ) = 3 · 0 + =0+ = 12.
p2 2
Como u(8, 0) > u(0, 12), concluimos que las demandas óptimas son x∗1 = 8 y x∗2 = 0.
Al mismo tiempo, la utilidad que el consumidor alcanza en el óptimo es u(x∗1 , x∗2 ) = 24.
80 1.8. LA ELECCIÓN DEL CONSUMIDOR: BIENES SUSTITUTIVOS
y la renta del individuo es m = 24, ¿cuál es la demanda óptima de los dos bienes?
de los dos bienes o es indiferente entre todas las cestas de consumo que agotan los
recursos. Por tanto, sólo tenemos que comparar la cesta de consumo x = (m/p1 , 0) —
el consumidor sólo compra el primer bien— con la cesta x′ = (0, m/p2 ), el consumidor
m 24
u(m/p1 , 0) = 3 · +2·0=3· + 0 = 24
p1 3
y
m 24
u(0, m/p2 ) = 3 · 0 + 2 · =0+2· = 24.
p2 2
Como u(8, 0) = u(0, 12), concluimos que todas las cestas que agotan los recursos del
x2 6
14
12
10
8
6
4
2
x∗
• -
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
x2 6
14
∗
12 • x
∗
•x
10 ∗
•x
∗
8 •x
∗
6 •x
∗
•x
4 ∗
•x ∗
2 x
•
x∗
• -
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
que las curvas de indiferencia tienen la forma de una L y que el punto de esquina de la
x2
6
α x1 = β x2
•
x∗
-
x1
La Figura 1.14 muestra la elección óptima. Igual que en los casos anteriores, la elección
óptima tiene que estar por encima de la recta de balance (la condición de óptimo 2). Si el
consumidor no gasta todos sus recursos monetarios, entonces podrı́a aumentar su utilidad
La primera condición de óptimo que desarrollamos con los bienes regulares (la relación
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 83
marginal de sustitución es igual al ratio de los precios) no aplica con los bienes complemen-
tarios porque la curva de indiferencia deja de ser diferenciable. No obstante, la Figura 1.14
indica claramente como la primera condición de óptimo cambia. Supongamos por un mo-
reduce su consumo del primer bien por una cantidad muy pequeña, entonces su utilidad no
cambia pero ha ahorrado una parte de su dinero. Y si gasta este ahorro en el consumo de
segundo bien, entonces incrementa la utilidad con respecto a la situación inicial. Por tanto,
o
m 5 5
x∗2 = = = .
p2 + 2 p1 2+2·1 4
Entonces,
5 5
x∗1 = 2 · x∗2 = 2 · =
4 2
84 1.9. LA ELECCIÓN DEL CONSUMIDOR: BIENES COMPLEMENTARIOS
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
demandas óptimas de los dos bienes, x∗1 y x∗2 , si los precios de los bienes son p1 = 3
y la renta del individuo es m = 24, ¿cuál es la demanda óptima de los dos bienes?
3. Dibujar la recta de balance, las curvas de indiferencia y las demandas óptimas de los
ejercicios anteriores.
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 85
SOLUCIONES
demandas óptimas de los dos bienes, x∗1 y x∗2 , si los precios de los bienes son p1 = 3
y obtenemos
p1 x1 + p2 (3 x1 ) = m
o
m 24 24
x∗1 = = = .
p1 + 3 p2 3+3·2 9
Entonces,
24 24
x∗2 = 3 · x∗1 = 3 · = = 8.
9 3
y la renta del individuo es m = 24, ¿cuál es la demanda óptima de los dos bienes?
p1 (3/2 · x2 ) + p2 x2 = m
o
m 24 24 48
x∗2 = = = = .
3/2 p1 + p2 3/2 · 3 + 2 9/2 + 4/2 13
Entonces,
48 72
x∗1 = 3/2 · x∗2 = 3/2 · = .
13 13
144/13.
CAPÍTULO 1. LA DEMANDA TURÍSTICA INDIVIDUAL 87
3. Dibujar la recta de balance, las curvas de indiferencia y las demandas óptimas de los
ejercicios anteriores.
x2 6
14
3 x1 = x2
12
10
8 •
x∗
6
4
2
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
x2 6
14
12
10
x1 = 3/2 x2
8
6
4 •
x∗
2
-
2 4 6 8 10 12 14 16 x1
LA DEMANDA TURÍSTICA
AGREGADA
2.1. Introducción
Hemos visto que dicho modelo nos permite caracterizar la elección por parte del consumi-
dor, de una cesta de consumo concreta que maximiza su utilidad dada su renta, los precios
de los bienes y las preferencias de dicho consumidor respecto al conjunto de cestas de con-
sumo sobre las que tiene que decidir. Básicamente, hemos caracterizado la elección de una
función de utilidad concreta. De esa forma, nos permite asociar una determinada cantidad
que el resto de elementos del vector anterior (precios de los otros bienes, renta y función de
lo que denominamos función de demanda individual y una vez hecho eso, podremos carac-
89
90 2.1. INTRODUCCIÓN
En ese sentido, también constituye un objetivo de este capı́tulo repasar ciertas ca-
tos de los agentes respecto a sus decisiones de consumo. Seguidamente, nos centraremos
rencia a cuestiones teóricas relevantes del función de demanda como son los conceptos de
Lo anterior, nos permitirá entender reacciones de los agentes económicos ante varia-
ciones en los niveles de los precios de bienes y servicios, renta, etc., y las interrelaciones
entre ellos. En ese sentido, es fácil explicar por qué, por ejemplo, durante las vacaciones de
Navidad y de Semana Santa los precios de los servicios de las estaciones de esquı́ suelen
ser más altos que en el resto de temporada. Por lo contrario, los hoteles de playa suelen
fijar sus precios más elevados durante los meses de verano. Los precios no sólo cambian
precios que resultan llamativas. Ası́, es frecuente que cuando una compañı́a aérea altera las
que actúen de forma similar. También los restaurantes cuando fijan sus precios tienen en
cuenta lo que hace la competencia y toman como referencia los precios de otros restaurantes
de caracterı́sticas similares.
Estos hechos y otros parecidos que podrı́amos citar tienen en común una serie de factores
CAPÍTULO 2. LA DEMANDA TURÍSTICA AGREGADA 91
cantidades y los precios de los distintos bienes y servicios. Este juego de las fuerzas que
cantidad y precio de los bienes y servicios creando las “señales” para la asignación de los
2.2. La demanda
Demandar significa estar dispuesto a comprar, mientras que comprar es efectuar realmente
la adquisición. La demanda refleja una intención, mientras que la compra constituya una
acción. Un agente demanda algo cuando lo desea y además posee los recursos necesarios
servicio que los consumidores deseen y puedan comprar, constituyen lo que denominamos
demanda de mercado de dicho bien. Dicha demanda de mercado, viene pues dada por la
suma de las decisiones de los consumidores a nivel individual, lo cual obliga a caracterizar
Economı́a.
Para caracterizar la demanda individual, tenemos que recordar algunas cuestiones expli-
vimos que la elección del consumidor viene caracterizada por la tangencia de la curva de
92 2.2. LA DEMANDA
x2 6
m
p2
∗ ∗ ∗
• x = (x1 , x2 )
-
m x1
p11
De esa forma, ya tenemos asociada unas cantidades óptimas x∗1 y x∗2 dados unos precios
p1 y p2 , dada la renta m del consumidor y dadas las preferencias del consumidor. Además,
podemos representar esa elección en el plano (x1 , p1 ) tal y como se ve en la siguiente figura:
En base a ello, en este capı́tulo vamos a dar un paso adicional, pues lo que planteamos
bien por parte del consumidor, a medida que varı́a únicamente su precio de mercado.
Esto no constituye una tarea difı́cil de entender, pues no supone otra cosa que buscar el
del consumidor derivada del cambio en el nivel del precio de mercado del bien que se
p1 6
p1 •
-
x∗1 x1
de la curva de indiferencia más alejada del origen con la nueva restricción presupuestaria.
Hecho eso, tendremos una nueva cantidad demanda asociada a un nivel de precios distinto
x2 6
m
p2
x∗ • ∗
• x̄
-
-
m m x1
p1 p̄1
Por ejemplo, en la figura anterior observamos que si se produce una disminución del
precio del bien p1 hasta el nivel p̄1 , el consumidor elegirá óptimamente una cantidad de
bien de x̄∗1 > x∗1 . Seguidamente podemos llevar esta nueva elección al plano (p1 , x1 ), junto
p1 6
p1 •
p̄1 •
-
x∗1 x̄∗1 x1
Procediendo de esa forma para todas las posibles variaciones del precio de mercado del
cuya expresión matemática dependerá del carácter de los bienes entre sı́
de ordenar las diferentes cestas de bienes. Sin embargo, lo que finalmente demande el
consumidor estará determinado tanto por su renta como por los precios de los bienes en
de entre las diferentes combinaciones de bienes que su presupuesto le permite, la que más
los precios p1 y p2 de los dos bienes, de la renta m del consumidor y, por supuesto, de sus
gustos o pref erencias. Dicha relación funcional es la que se representa en las siguientes
ecuaciones:
del bien de que se trate y, el lado derecho del igual es la función o expresión matemática que
relaciona dicha cantidad demandada con los precios y la renta disponible del consumidor.
del consumidor.
Una vez que conocemos la expresión matemática de la función de demanda, a medida que
vamos vamos dando valores a las variables que la caracterizan, podemos ir representando
96 2.2. LA DEMANDA
cantidad demandada es lo que se conoce por el nombre de curva de demanda, dada por la
expresión:
igual forma podemos caracterizar la curva de demanda del bien x∗2 como:
donde ahora se han supuesto constantes el precios del otro bien, p1 , la renta, m, y las
preferencias en la expresión x∗2 (p1 , p2 , m). Gráfcamente, para el bien 1, bajo el supuesto de
preferencias regulares, la curva de demanda tiene una forma similar a la siguiente expresión:
p1 6
-
x1
quiere decir que al aumentar el precio del bien, la cantidad demandada por el consumidor
CAPÍTULO 2. LA DEMANDA TURÍSTICA AGREGADA 97
disminuye. Esto es lo que habitualmente ocurre, aunque existen situaciones en las que
aumentos del precio del bien conducen a aumentos en la cantidad demandada del mismo.
negativa se dice que dicho bien es un bien ordinario para ese consumidor. Si, por el
contrario, la curva de demanda tiene pendiente positiva, el bien recibe el nombre de bien
Giffen.
niendo constantes una serie de variables. Esto es conocido como el supuesto de ceteris
paribus, el cual nos permite caracterizar dicha curva de forma única y sujeta a los valores
constantes altera su valor, tendremos otra curva de demanda distinta a la anterior. Esto
nos puede servir para comparar las situaciones de antes y después del cambio y, por ello,
inferir el tipo de efectos que introduce el cambio de una variable (supuesta inicialmente
Una vez definida la curva de demanda es importante poner de manifiesto cuáles son los
motivos por los cuales el consumidor pasa de un punto a otro de la misma curva de demanda
demanda).
98 2.2. LA DEMANDA
el precio del bien. Tal y como se muestra en la anterior Figura 1.4, el paso de x∗1 a x̄∗1
está ocasionado por el descenso del precio del bien x1 (desde p1 hasta p̄1 ) que ha dado
rimentará cuando se modifique alguno de los determinantes que hemos supuesto constantes
para el análisis (precio de los bienes relacionados, renta y gustos del consumidor). Como
veremos seguidamente, el efecto de una bajada del nivel de precios p2 , desde p02 hasta p12 , so-
bre la curva de demanda del bien x1 , bajo el supuesto de que ambos bienes son sustitutivos,
p1 6
x∗1 (p1 , p02 , m0 )
demanda por cada uno de estos factores manteniendo constantes todos los demás.
depende, en parte, de los precios de los bienes relacionados. Sin embargo, los efectos
Suponga que a un consumidor lo único que le interesa es viajar a una isla, siendo
sustituir el destino Canarias por el destino Baleares. Es decir, el descenso del precio
del bien objeto de estudio. Gráficamente, el descenso del precio de un bien sustitutivo
1.6).
serı́an los servicios de alojamiento hotelero y los servicios de transporte aéreo; los
complementario. Esto es, si disminuye el precio del transporte aéreo o del ferroviario
etc.). Este motivo puede explicar el hecho de que el descenso de los precios del
transporte aéreo en términos reales de los últimos años ha tenido como consecuencia
del precio del bien complementario 2, desde p02 hasta p12 , desplaza la curva de demanda
del bien objeto de estudio hacia la derecha, tal como se muestra en la siguiente figura:
p1 6
x∗1 (p1 , p12 , m0 )
cada precio, en algunas ocasiones sucede lo contrario. El que ocurra una cosa u otra,
Los bienes cuya demanda aumenta cuando aumenta la renta del consumidor reciben
los bienes cuya demanda disminuye al aumentar la renta del consumidor. Desde el
para quién o, incluso, dependiendo de para qué niveles de renta. Aún más, el mismo
bien puede comportarse como bien normal para niveles de renta bajos y una vez
alcanzado cierto nivel de renta puede empezar a ser considerado por el consumidor
como bien inferior. Por ejemplo, para determinados niveles de renta el alojamiento en
campings puede comportarse como un bien normal para un consumidor concreto (al
nivel de renta ha crecido lo suficiente como para que el consumidor empiece a sustituir
este tipo de alojamiento por otro más confortable como puede ser un apartamento
turı́stico o un hotel.
El efecto gráfico del desplazamiento de la curva de demanda del bien normal 1 ante
p1 6
x∗1 (p1 , p02 , m1 )
factores que determinan la cantidad demandada de cada bien. Dichos gustos son
configurados, en parte, por la sociedad, por los hábitos, por la educación, por la
publicidad y por la moda. Los hábitos y las convenciones suelen cambiar lentamente,
sin embargo las modas pueden cambiar muy deprisa. Cualquiera que sea la razón,
cuando cambian los gustos de los consumidores por un bien, la curva de demanda
demandada de un bien o servicio y su precio. Pero, dado que son los individuos quienes
demandan los bienes y servicios, la demanda de mercado se obtendrá a partir de las deman-
de las curvas de demanda individuales y se forma sumando las cantidades demandadas por
venir dada por la suma de cada una de las cantidades demandadas de ese bien por cada
consumidor para cada nivel de precios de dicho bien. Es decir, sea x∗1,i = x∗1,i (p1 , p2 , mi ) la
función de demanda del i-ésimo consumidor. Según eso, la función de demanda de mercado
∑
n ∑
n
X1∗ = X1∗ (p1 , p2 , m1 , m2 , . . . , mn ) = x∗1,i = x∗1,i (p1 , p2 , mi )
i=1 i=1
anterior para ellos dos y, como resultado, la función de demanda agregada o de mercado,
∑
2
X1∗ = X1∗ (p1 , p2 , m1 , m2 ) = x∗1,i = x∗1,1 (p1 , p2 , m1 ) + x∗1,2 (p1 , p2 , m2 )
i=1
Dado que la función de demanda de mercado para el bien X1∗ viene dada por la suma
horizontal de las funciones de demanda individuales para cada nivel de precios, representar-
104 2.2. LA DEMANDA
p1 p1 p1
6 6 6
p̄1
En el gráfico puede verse como para precios superiores a p̄1 la demanda del mercado coin-
cide con la demanda del consumidor 1 (debido a que a esos precios el consumidor 2 no
está dispuesto a demandar nada de dicho bien). Para precios comprendidos entre 0 y p̄1 la
p1 p1 p1
6 6 6
25
p̄1 = 5
mercado, se suele hacer una simplificación de la expresión agregada. Para ello, se define la
renta agregada de todos los consumidores M como la suma de las rentas individuales, es
∑n
decir, M = i=1 mi y, en ese sentido, la expresión de la función de demanda agregada o
De esa forma, la representación gráfica es idéntica a la que hemos visto en la Figura 1.5.
La simplificación anterior hay que verla con cuidado, pues, como sabemos, la función de
demanda del mercado del bien 1 dependerá del precio del propio bien, de los precios de
los demás bienes, de las rentas de los diferentes consumidores que conforman el mercado,
ası́ como de sus gustos. Sin embargo, en algunos análisis económicos es habitual referirse a
bien, este enfoque puede ser una simplificación engañosa, ya que el efecto que produzcan
variaciones de la renta entre los todos los consumidores que constituyen la demanda del
bien concreto.
Hemos estudiado de qué manera afectan a la cantidad demandada de un bien las variaciones
en cualquiera de sus factores determinantes. Sin embargo, hasta este momento nos hemos
referido básicamente al signo o sentido del cambio. Por ejemplo, hemos analizado que
mismo. O que, cuando el bien es normal, un aumento de la renta del consumidor hace
la variación que se produce sino también su magnitud. Aquı́ surge el concepto de elasticidad
determinado bien ante variaciones de cada uno de los factores que la determinan. En
elasticidad-precio cruzada.
2.3.1. La elasticidad-precio
dada y la variación porcentual en el precio del bien. Formalmente, vamos a suponer que
x(p) es la demanda agregada de un bien. Supongamos también que el precio inicial del
CAPÍTULO 2. LA DEMANDA TURÍSTICA AGREGADA 107
bien p0 cambia a p1 . Entonces, ∆p ≡ p1 − p0 indica el cambio total del precio del bien y
entonces está definida cómo el valor absoluto del ratio entre el cambio porcentual de la
Si el cambio en el precio tiende a cero, podemos calcular con la ayuda del cálculo diferencial
la elasticidad-precio en el punto p0 :
∂x(p) p0 ∂x(p) p 0
εx,p = · = · .
x(p0 ) ∂p ∂p p=p0 x(p0 )
porcentual del precio que lo ha producido, la elasticidad es menor que la unidad y la curva
precio, la elasticidad es mayor que la unidad (en valor absoluto) y la curva de demanda
misma curva de demanda. Por ejemplo, en el caso de una curva de demanda lineal, como
elasticidad-precio es la unidad.
108 2.3. LAS ELASTICIDADES
p 6
εx,p → ∞
A
B
•
εx,p = 1
A
2B
•
εx,p = 0
• -
0 A
A X(p)
2
A
a) Extremo superior: (X0 (p0 ), p0 ) = (0, B )
∂X(p) A
−A
p
= −B · = → ∞.
0
εx,p = · B
∂p p=p0 X0 (p0 ) 0 0
Continuamos con otro ejemplo, relacionado con la Figura 1.10, cuando hay dos o más
grupos en el mercado.
Terminamos esta sección con una discusión sobre los factores que afectan el valor de la
ponde a los bienes que tienen más y/o mejores sustitutivos. Esto se explica
corto plazo. Esto se explica porque cuanto mayor sea el perı́odo de tiempo
2.3.2. La elasticidad-renta
variación porcentual de la renta del consumidor. Formalmente, dado que vamos a calcular
por x(p, m), es decir en el argumento de la función aparece también la renta agregada de
los consumidores. Supongamos también que la renta agregada inicial de los consumidores
CAPÍTULO 2. LA DEMANDA TURÍSTICA AGREGADA 111
demandada. La elasticidad-renta entonces está definida cómo el valor del ratio entre el
∆x
%x(p, m) x(p,m 0) ∆x m 0
εx,m = = = · .
%m ∆m m 0 x(p, m0 ) ∆m
Si el cambio en la renta tiende a cero, podemos calcular con la ayuda del cálculo diferencial
la elasticidad-renta en el punto m0 :
∂x(p, m) m0 ∂x(p, m) m0
εx,m
= · = · .
x(p, m0 ) ∂m ∂m m=m0 x(p, m0 )
∂x(p,m)
En el caso de los bienes normales la derivada ∂m
es positiva, en el caso de los bienes
inferiores dicha derivada tiene signo negativo. Dentro de la categorı́a de bienes normales
Si ∂x(p,m)
∂m
> 0 ⇒ x es un bien normal.
Si ∂x(p,m)
∂m
> 0 y εx,m > 1 ⇒ x es un bien de lujo.
Si ∂x(p,m)
∂m
> 0 y εx,m ≤ 1 ⇒ x es un bien necesario.
Si ∂x(p,m)
∂m
< 0 ⇒ x es un bien inferior.
Para definir la elasticidad cruzada, vamos a suponer que la demanda agregada de los
consumidores está definida en un espacio donde sólo hay dos bienes 1 y 2. Según eso, la
de uno de los bienes por los consumidores ante variaciones en el precio del otro bien. Dicho
precio del otro bien. Formalmente, vamos a suponer que la función de demanda agregada
viene dada por x(p1 , p2 , m), es decir en el argumento de la función aparecen también los
precios de los dos bienes y la renta agregada de los consumidores. Supongamos también
que el precio del bien x2 dado por p02 cambia a p12 . Entonces, ∆p2 ≡ p12 − p02 indica el cambio
total del precio del bien bien x2 y ∆x = x(p01 , p12 m0 ) − x(p01 , p02 , m0 ) refleja el cambio del
valor absoluto del ratio entre el cambio porcentual de la demanda y cambio porcentual del
CAPÍTULO 2. LA DEMANDA TURÍSTICA AGREGADA 113
Si el cambio en el precio del bien x2 tiende a cero, podemos calcular con la ayuda del
El signo de la elasticidad cruzada permite saber si los bienes estudiados son comple-
mentarios o sustitutivos para ese consumidor: Si εx1 ,x2 > 0, entonces los bienes x1 y x2 son
sustitutivos entre sı́ (un aumento del precio del bien x2 genera un aumento de la cantidad
demandada de x1 ). Si εx1 ,x2 < 0, entonces los bienes x1 y x2 son complementarios entre
sı́ (un aumento del precio del bien x2 genera un descenso de la cantidad demandada de
El excedente del consumidor es una medida monetaria del grado en que beneficia al consu-
por la diferencia entre lo que el consumidor hubiera estado dispuesto a pagar por cada
unidad comprada y el precio que efectivamente paga. Dado que los puntos de la curva de
demanda se pueden interpretar como el precio máximo que el consumidor está dispuesto
a pagar por cada unidad del bien, su utilización nos va a permitir el cálculo del excedente
del consumidor.
p 6
100
60 •
-
40 100 x(p)
Supongamos una curva de demanda lineal como la representada en la Figura 1.12 y cuya
ecuación es x(p) = 100 − p. Esto quiere decir que el precio máximo que el consumidor
está dispuesto a pagar es p = 100 u.m. por una cantidad de bien muy pequeña de bien
x. Sin embargo, su pendiente negativa indica que la disposición a pagar del consumidor
CAPÍTULO 2. LA DEMANDA TURÍSTICA AGREGADA 115
disminuye a medida que aumenta el número de unidades de dicho bien. Esto es consecuen-
cia de lo que se conoce como ley de las utilidades marginales decrecientes según la cual
el consumidor obtiene más utilidad por el consumo de las primeras unidades del bien y
la utilidad que le reporta el consumo de sucesivas unidades es cada vez menor. Ası́, por
Imaginemos que el precio vigente en el mercado es p = 60. Eso significa que el consumidor
podrá adquirir todas las unidades que desee a ese precio. En este caso, al precio p = 60 la
cantidad demandada (deseada) serı́a x(60) = 40. Por otro lado, p = 60 es el precio máximo
que el consumidor estarı́a dispuesto a pagar por la cantidad x = 40, sin embargo, su dispo-
sición a pagar por todas las unidades anteriores es superior al precio que efectivamente va
a pagar. Esto quiere decir que la compra de la última unidad (la número 40) no le genera
excedente, pero sı́ lo harán todas las anteriores. Por tanto, para cada unidad adquirida, la
suma de la diferencia entre el precio al que estarı́a dispuesto a pagar y el que realmente
El concepto de excedente del consumidor es muy útil para valorar las consecuencias
plemente de calcular el excedente del consumidor antes y después del cambio de precio y
medir su diferencia.
CAPÍTULO 2. LA DEMANDA TURÍSTICA AGREGADA 117
De cara a su clasificación, el turismo es muy complejo, pues está formado por los bienes y
servicios que consume el turista durante el perı́odo de tiempo que está fuera de su hogar,
esto es, estancia en hoteles, servicios de restauración, viajes, servicios de ocio y cultura,
etc. Los deseos que los individuos tienen de consumir turismo conforman una parte de
afectada por multitud de factores, siendo el precio relacionado con dichos bienes y servicios
una serie de factores entre los que destacan el precio de los bien y servicios relacionados, la
disponibilidad de renta y las preferencias del consumidor. Sin embargo, el consumo de turis-
mo reúne una serie de caracterı́sticas que convierten la toma de decisiones del consumidor
etc.
El consumo de turismo:
realización. Esto suele ser ası́, especialmente en el caso de paquetes turı́sticos de ”sol
y playa .a los operadores turı́sticos británicos (la compra generalmente se hace antes
los precios a última hora, retrasándose ası́ la decisión de compra por parte del turista.
Las grandes pautas de cambio en este tipo de demanda se deben a los factores siguientes:
CAPÍTULO 2. LA DEMANDA TURÍSTICA AGREGADA 119
Estos factores, que afectan de forma directa a las decisiones de los consumidores en
curva de demanda orientada al turismo. Ası́, una mejora en variables como la renta o un
tipo de cambio más favorable en el paı́s de origen pueden acentuar los atractivos del paı́s
durante las décadas de los sesenta y los ochenta y es uno de los factores que contribuye a
Ello hace que la demanda de turismo se defina, cada vez más, en clave de personalización
y no de masificación, lo cual exige caracterizar cada vez con más precisión los distintos
Resumen
b) Su restricción presupuestaria.
mantienen constantes los demás factores, excepto el precio del bien, que
precio.
El bien denominado turismo es muy complejo, pues está formado por los
factores siguientes:
1) La evolución demográfico-social.
unidad.
unidad.
igual a la unidad.
de otro bien.
PREGUNTAS DE AUTOEVALUACIÓN
a la semana?
turismo de congresos, es más rı́gida que la del turismo de fines de semana, ¿qué tipo
de los turistas?
que se cobra el mismo precio a ambos tipos de clientes. Las cantidades demandadas
a) XR = 30 y XN = 100
b) XR = 100 y XN = 30
c) XR = 120 y XN = 220
d) XR = 220 y XN = 120
6. Con los datos del ejercicio anterior, calcule la elasticidad-precio εx,p de la demanda
el bien X es:
a) Inferior.
126 2.5. LA DEMANDA ORIENTADA HACIA EL TURISMO
b) Giffen.
d) Necesario.
a) Aumenta un 20 %
b) Disminuye un 2 %
c) Aumenta un 2 %.
d) Aumenta un 40 %
a) 400
b) 256
c) 128
d) 200
CAPÍTULO 2. LA DEMANDA TURÍSTICA AGREGADA 127
1. Las grandes pautas de cambio de la demanda turı́stica se deben a los factores siguien-
tes:
de 3 dı́as para realizar turismo, por ello, uno esperarı́a que la demanda turı́stica
derecha.
128 2.5. LA DEMANDA ORIENTADA HACIA EL TURISMO
3. El turismo del fin de semana, ya que estos consumidores tienen mayor sensibilidad a
que el turismo de familiares y amigos es un bien inferior. Esto es, si aumenta la renta
120 − 3(30) = 30. Para los turistas de negocios, su cantidad demandada al precio
0 si p ≥ 55
X(p) = 220 − 4 · p si 55 > p ≥ 40
340 − 7 · p si 40 > p ≥ 0
extremos son (120, 0) y (0, 40) representa la curva de demanda de los turistas de
recreo y la lı́nea que une los puntos (220, 0) y (0, 55) es la demanda de los turistas
p p p
6 6 6
55
40
∂X(p)
p 0 −4 · p0
εx,p = · =
∂p p=p0 X0 (p0 ) 220 − 4 · po
∂X(p)
p 0 −7 · p0
εx,p = · =
∂p p=p0 X0 (p0 ) 340 − 7 · po
ó 10 ó ∞. Por lo tanto, en este tramo tampoco son ciertas las alternativas, a),
b) y d).
c) Elasticidad en el punto: [X0 (p0 = 50), p0 = 50] = (220 − 4 · 50; 50) = (20; 50)
−a 1 −aP −3/2 1 −1 1
= ·P −3/2
· = · = = = 0, 5 < 1
2 aP −3/2 2 aP −3/2 2 2
la elasticidad-precio cruzada.
a) Cálculo de la elasticidad-renta:
∂X(PX , PY , m) m m
εx,m = · = 0, 6 · 2PX−0,6 m−0,4 PY2 · −0,6 0,6 2 =
∂m X(PX , PY , m) 2PX m PY
1
= 0, 6 · 2PX−0,6 m−0,4 PY2 · = 0, 6
2PX−0,6 m−0,4 PY2
∂X(PX , PY , m) PY PY
εX,Y = · = 2 · 2PX−0,6 m0,6 PY1 · −0,6 0,6 2 =
∂PY X(PX , PY , m) 2PX m PY
1
= 2 · 2PX−0,6 m0,4 PY1 · =2>0
2PX−0,6 m0,6 PY1
correcta es la d).
correcta es la d).
10. Representamos la curva de demanda cuyos extremos son (20, 0) y (0, 20). Al precio
un triángulo [(base*altura)/2] con: base (b) = 16 y altura (h) = 16. Ası́ pues, el
Gráficamente:
p 6
20
h
4 •
b
-
16 20 x(p)