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Universidad Nacional

Facultad de Ciencias Sociales

Escuela de Historia

Seminario de Graduación

¿De qué manera la percepción del estudiante privado de libertad influye en el


proceso de la educación como derecho de la modalidad de educación superior a
distancia en el CAI Reinaldo Villalobos de la provincia de Alajuela?

Aidan Acosta Villalobos

Bryan Herra Roa

Ronny Picado Pérez

Campus Omar Dengo, Heredia, 2018


Tabla de contenido

Eje problema de seminario 3

Vinculación del eje del seminario con la problemática seleccionada 4

Planteamiento de la problemática de estudio5

Componente pedagógico 9

Preguntas de investigación 14

Pregunta Central 14

Preguntas Secundarias 14

Estado de lo conocido 15

Bibliografía 45
Eje problema de seminario

Este diseño de investigación, se enmarca dentro de la propuesta de Seminario elegida


por los estudiantes de la carrera de Enseñanza de los Estudios Sociales y Educación Cívica
de la Universidad Nacional de Costa Rica en su promoción 2018-2019. El cual desarrolla el
eje temático titulado como “Educación inclusiva: análisis de los contextos educativos
vulnerabilizados en Costa Rica desde la perspectiva de los derechos humanos ”.

Por consiguiente, se puede destacar que la investigación educativa en esta modalidad


es de suma relevancia “se espera que los estudiantes y egresados produzcan nuevo
conocimiento a través de la producción investigativa, publicaciones científicas y dispositivos
tecnológicos.” Esto, debido a la interdisciplinariedad encaminada hacia todas las Ciencias
Sociales y de la Educación. Ofreciendo sólidas bases metodológicas y teóricas para la
elaboración de nuevo conocimiento, tanto para el personal docente y administrativo como
para las y los estudiantes. En este caso la investigación de aula se convierte en una técnica
importante que el o la docente puede llevar a cabo en su quehacer profesional.

El eje temático de investigación procura fortificar el humanismo, la sensibilidad


social, la criticidad y el respeto por los derechos de todas las personas. No solamente para
reducir desigualdades y problemas de exclusión, sino también para mejorar la calidad misma
de la educación y la consciencia sobre los desafíos que afrontamos como sociedad. Uno de
los objetivos es propiciar espacios, proyectos e iniciativas para el empoderamiento en materia
de Derechos Humanos e inclusión educativa, de manera que las y los profesores de
Enseñanza de los Estudios Sociales y Educación Cívica no solo puedan exigir sus derechos
sino también ser fieles impulsores y defensores de los mismos.

Resulta de suma importancia problematizar la relación entre Educación y Derechos


Humanos, para transformar la realidad de Costa Rica, a través del empoderamiento de los
grupos que han sido vulnerabilizados a lo largo de la historia. Actualmente están resurgiendo
en nuestro país y en el mundo, grupos sociales- políticos que pretenden amenazar los
Derechos Humanos, fomentando la discriminación y la exclusión de grupos humanos por
motivos étnicos, raciales, económicos, religiosos, preferencias sexuales, entre otros. Es por
tanto que surge una reacción y un interés por la problemática de la inclusividad en la
educación, ya que además son temas que se desarrollan en los contenidos de Estudios
Sociales y Cívica.

De manera conjunta, es menester reiterar la problemática a trabajar, haciendo énfasis


a su vez en distinguir como el sistema educativo en diversas situaciones ha sido
discriminatorio con diferentes poblaciones. Lo cual repercute negativamente a la sociedad.
Aspectos esenciales a considerar en esta línea de investigación. Por ende, se buscarán
desarrollar las propuestas necesarias para revertir muchos de los casos de discriminación o
desigualdad en la educación.

Vinculación del eje del seminario con la problemática seleccionada

El Eje del Seminario de Licenciatura promoción 2018-2019 brinda la oportunidad de


comprender las contradicciones presentes de poblaciones en situaciones de vulnerabilidad,
con respecto a los Derechos Humanos. De ahí, parte el interés de este diseño de investigación,
por adentrarse en el espacio educativo penitenciario. Esto, como necesidad de indagar en una
realidad nacional y un contexto educativo que ha sido poco estudiado.

El educando del centro carcelario no es ajeno a las políticas educativas del país..
Siendo esto, un gran sustento teórico y metodológico para trabajar en esta investigación. Es
necesario, entrever la condición que viven estos estudiantes presidiarios. Apreciando sus
percepciones, ideas, pensamientos e historias de vidas; con el objetivo de analizar la
problemática que lo afecta o invisibiliza.

El eje problematizador del seminario y su fundamento, mantienen una lógica cercana


de analizar la educación inclusiva con la finalidad de trabajar con poblaciones en situaciones
de vulnerabilidad. Cabe en agregar que la siguiente investigación valora las vivencias del
educando en el centro penitenciario, que sin duda afronta varias contradicciones en relación
a los Derechos Humanos.

Además, se pretende al igual que otras investigaciones de distintas disciplinas,


visibilizar a un sujeto que posee una educación sumida en un contexto de vulnerabilidad.
Pues le da oportunidad y espacio para que exprese su percepción propia del sentido de la
educación en la cárcel. En este caso, dicha labor se efectuará como ya se mencionó, desde
los Estudios Sociales y la Educación Cívica, basados en el eje problematizador del Seminario.
Planteamiento de la problemática de estudio

La formulación del problema de la presente investigación, devino de una


preocupación planteada desde el seminario de graduación de Estudios Sociales y Educación
Cívica, promoción del 2018-19. Cuyo, programa de estudio indica que es un proyecto
académico de formación docente comprometido con el mejoramiento cualitativo de los
procesos de enseñanza y aprendizaje, que a su vez se interesa por cuestionar las
contradicciones presentes en la instrucción y afectan a una población o un sujeto en
particular. Mediante la premisa anterior, se busca afianzar proyectos académicos que calen
de manera positiva en la sociedad. En ese sentido, dicha promoción escogió como eje
problematizador: “Educación inclusiva: análisis de los contextos educativos vulnerabilizados
en Costa Rica desde la perspectiva de los Derechos Humanos”. Visto como una excelente
oportunidad para trabajar en conjunto con un grupo seleccionado en un contexto de
vulnerabilidad.

De ahí parte la preocupación del presente trabajo, adentrarse en el espacio educativo


penitenciario para comprender que el educando presidiario de la modalidad de educación
superior, a pesar, de su condición no es ajeno a las políticas institucionales internas y estatales
del país. Para ello, el trabajo se estructuró bajo la pregunta principal: ¿De qué manera la
percepción del estudiante privado de libertad influye en el proceso de la educación como
derecho de la modalidad de educación superior a distancia en el CAI Reinaldo Villalobos de
la provincia de Alajuela? La cual se subdivide en seis preguntas secundarias, que serán
desarrolladas más adelante.

En relación al participante y su contexto, se recalca la idea de una sociedad


sumamente compleja. En la cual, los Estudios Sociales no se encuentran desapercibidos para
profundizar en las problemáticas y condiciones afronta este grupo social. En este caso, se
valora la situación del estudiante presidiario, viendo en este, la contradicción de poseer el
derecho a la educación. No obstante, se encuentra mediado por la visión del centro
penitenciario y sus normativas institucionales, de forma macro por las políticas fijadas desde
el Estado. Lo anterior, implica una gama de cuestionamientos, ya que, como refiere Leandro
Kouyoumdjian y Mariano Andres Poblet Machado, en contraposición a una noción clásica
de la educación en contexto presidiarios con fines terapéuticos y de pasatiempo, poder
adoptar la perspectiva como un derecho es un requisito fundamental para considerar a las
personas privadas de su libertad en tanto sujeto integral y no como mero objeto de
intervención penitenciaria.

La finalidad del presente proyecto es romper, con trabajos anteriores socioeducativos


preocupados por diseñar propuestas curriculares. Asimismo, unidades didácticas dentro del
contexto carcelario. Aprovechando la oportunidad y el apoyo teórico e investigativo del
Seminario. Para proponer un estudio que involucre al presidiario en el desarrollo de un
estudio más participativo. Donde se involucre activamente en la construcción de propuestas
o alternativas que afirme su condición humana. Por lo tanto, de acuerdo a la concepción de
educación que se asuma, la intervención en las instancias educativas, puede ser un punto de
partida para configurar un escenario que permita la construcción de nuevas formas de
subjetivación. .

Encontrarse en la condición de privado de liberta, implica una situación de


vulnerabilidad. La presente investigación no puede escapar de los resultados lanzados por el
Estado Justicia 2016, que alerta un aumento de la población en encierro. Además, este explica
la presencia de complicaciones institucionales que dificultan la atención de necesidades
básicas y servicios como la educación. Resultando necesario tratar desde los Estudios
Sociales, las contradicciones visibles en la prisión. Mediante un marco metodológico y
teórico que posibilite generar propuestas. Capaces de menguar la vulnerabilidad del
estudiante privado de libertad que retomé su percepción del contexto; dado que, este permite
un acercamiento entre el participante y su diario vivir. La importancia de la percepción podría
entreverse en la siguiente cita textual de Pages:

“(…) la investigación sobre las representaciones, las ideas previas, los conocimientos
espontáneos, los preconceptos, los estereotipos, etc. de los alumnos parte de la consideración
de que todo nuevo conocimiento se origina a partir de conocimientos anteriores, y
consecuencia del contexto sociocultural en el que vive, por lo que los significados que los
alumnos dan a los contenidos de la enseñanza dependen de las teorías construidas con
anterioridad. Las representaciones remiten a la manera en que persona concreta, en un
momento concreto y ante una situación concreta moviliza conocimientos adquiridos tanto a
través de su experiencia como de aprendizajes anteriores. ”
Tomando en cuenta la afirmación de Pagés, se plantea un diseño de investigación que
redima la percepción del educando y lo involucre a ser partícipe en la construcción de
propuestas de cambio con respecto a su educación como derecho. Sobre el análisis de
nociones subjetivas, según Alicia Gurdián en esta coyuntura se postula el rescate del sujeto
en la investigación socioeducativa y su importancia, la valorización de las prácticas
cotidianas particulares, la ética ambiental y la comprensión de lo humano desde la inter-
subjetividad y la interdisciplinariedad. En equivalencia, la labor fundamental del seminario
y el desarrollo de una propuesta conjunta con el grupo participante, radica en una educación
más inclusiva de estudiantes. Pues, se encuentran en contextos de vulnerabilidad. Es decir,
independientemente de su condición son seres humanos y estudiantes los cuales merecen una
verdadera educación de calidad.

Los estudiantes privados de libertad de la modalidad de educación superior,


experimentan procesos de educación formal brindada por el Estado, con la finalidad de
contribuir a la formación integral de los mismos, no obstante, ¿Que se ha estudiado del
proceso de educación como derecho?, ¿Qué estudios hay sobre las modalidades educativas
en el sistema penal costarricense?, ¿Cuáles han sido las por posturas y tendencias
investigativas de mayor producción? Estas surgen debido a la carencia de investigaciones
que partan desde la percepción del estudiante presidiario. Además no se toma en cuenta el
proceso de la educación. Sumado a esto, los estudios se han abocado a unidades didácticas
y estudios exploratorios sobre la condición de la educación en algunos centros penales. En
muchos de los casos, estos no se aplicaron, se limitaron al estudio y la descripción.

Partiendo desde el marco jurídico, es necesario visualizar a la cárcel como estructura


institucional destinada a la privación de libertad, encierra la libertad ambulatoria, más no su
libertad de ser educado, de pensar libremente, de desarrollo personal. La vulnerabilidad de
los privados de libertad está presente en su cotidianidad, cabe resaltar, la mayoría de
población en cárceles está constituida por adultos jóvenes con escolaridad básica. El
encarcelamiento no es una solución a la criminalidad. Vale mencionar, esta población es
vulnerable, no solo por su perfil criminal y a su entorno. La hostilidad de la privación de
libertad, el desprecio social. Inclusive, la depresión, desmotivación, el rechazo familiar.
Aspectos, que representan algunos de los retos afrontados por los estudiantes privados de
libertad.

La educación como derecho humano brinda oportunidades al estudiante privado de


libertad, la educación superior constituye un pilar de crecimiento integral, sin importar su
condición. A nivel nacional, en la investigación socioeducativa, se desconoce la experiencia
de los estudiantes privados de libertad respecto a su proceso de educación como derecho
dentro de los penales. En tanto, estas desconocen las particularidades de dicha población. Las
voces y demandas de estos, quedan enclaustradas en un marco vulnerable de violencia de
todo tipo a manera arbitraria. Por ello, este diseño de investigación, parte de las experiencias
subjetivas desde la percepción de los privados de libertad sobre su educación; para superar
la arbitraria generalización de los trabajos hasta ahora conocidos.

La investigación parte del enfoque cualitativo. Por ello, es visto desde la percepción
del estudiante, La pertinencia descansa sobre la asignatura de los Estudios Sociales. Lo
anterior, cobra relevancia en el sentido de la educación como derecho en un contexto
carcelario. Puesto que, se especializa en la formación de personas aptas para la vida en
sociedad, puesto en contraposición a lo planteado por las fuentes analizadas. Donde,
visualizan a la educación en los contextos de encierro, para la formación de mano de obra
calificada. En este sentido la Investigación Socioeducativa, contribuye a implementar un
proceso educativo integral distante a la transmisión de conocimientos verticalizados entre
profesor-estudiante.

La atinencia de la propuesta se enmarca en el Seminario de Graduación del plan de


estudio de la Licenciatura en la Enseñanza de los Estudios Sociales y Educación Cívica. La
construcción de los conocimientos está a disposición en una plataforma horizontal entre
estudiantes con la tutoría de los profesores a cargo de la presente promoción. Aunado al
propósito de realizar una praxis consecuente con la construcción de alternativas sociales
innovadoras y críticas. Se visualiza llevar a pensar en nuevas formas de investigación
socioeducativa en el área de los Estudios Sociales. Cuyo objetivo lo define la necesidad de
nuevos conocimientos en pro de un proceso de educación más inclusivo, menos
discriminatorio y de mayor hidalguía ante los Derechos Humanos.

Componente pedagógico
El tema de la educación en la cárcel ha sido poco estudiado en Costa Rica. A pesar,
de la abundante experiencia que puede brindar dicho contexto. Este diseño de investigación
se circunscribe en la Andragogía. Es innegable, que las modalidades educativas para
estudiantes privados de libertad atestiguan diferencias importantes en relación con la
educación formal. La educación impartida en la cárcel, en ocasiones, se requiere que sea
obligatoria, como parte de un tratamiento de resocialización del sujeto. Este tratamiento
desconoce que el estudiante privado de libertad, como adulto tiene la capacidad para
reflexionar e indicar una mejor forma de aprender y educarse. En ese sentido, la inquietud de
los sustentantes surge de la necesidad por conocer la percepción del estudiante presidiario y
su influencia en el proceso de educación como derecho.

Dada la naturaleza del presente diseño de investigación, la Andragogía es el


componente educativo de donde se acoge. El estudiante privado de libertad es una persona
adulta, su educación no es la de un niño o un adolescente. Sus experiencias de vida y
aprendizajes inciden en su manera de percibir la sociedad, la cultura, la educación. Por ello,
es necesario entender la percepción del estudiante privado de libertad desde la Andragogía.
“En el contexto penitenciario, la educación de adultos es más que adquirir habilidades
específicas; más que centrarse en la preparación para la vida después de la cárcel, es ayudar
a la gente a vivir con más éxito” .

El estudiante privado de libertad requiere una educación que le sirva a su


desenvolvimiento. Las relaciones entre semejantes y con el personal docente, institucional y
administrativo, esta mediado por su visión de mundo. “La educación tiene la capacidad de
cambiar la percepción del prisionero de sí mismo y los demás y son estas percepciones las
que determinan la actitud y el comportamiento” . La realidad es asumida de manera distinta
por cada estudiante dentro de la cárcel. En este sentido, las características que reúne el grupo
participante en el presente diseño de investigación: estudiante en condición vulnerable por
privación de su libertad ambulatoria, persona adulta responsable de sus decisiones y actos
cometidos; y estudiante universitario con criterio propio tanto con destrezas y habilidades
cognitivas desarrolladas. El estudiante privado de libertad, requiere de una educación
andragógica. No obstante, la educación de adultos es poco conocida en los contextos de
cárcel dentro del Sistema Penal Costarricense.
La relación vertical, profesor-alumno no tiene cabida en la Andragogía. La Educación
de Adultos, se propone desde una visión horizontal entre el docente facilitador y el discente.
Lo que permite educarse a conciencia. La transmisión de información o la enseñanza-
aprendizaje del experto hacia el aprendiz obstaculizan el desarrollo integral de la persona
adulta. El estudiante en la educación andragogíca decide, sí o no, qué aprender del mediador
docente. En tanto no se puede violentar el ritmo de aprendizaje de cada estudiante. El dialogo
en la práctica de la educación de adultos como indicó Freire en Pedagogía del oprimido,
permite la edificación nuevos conocimientos. En una relación respetuosa de las
subjetividades que moldean los distintos saberes. La siguiente cita de Sebastián Díaz recalca
la importancia de la Andragogía para la educación de adultos:

Siendo entonces la andragogía una actividad que produce cambios cualitativos de


conocimientos y actitudes en el adulto. El modelo andragógico se fundamenta en las
características del aprendizaje adulto, de donde la necesidad de rediseñar ciertos procesos
favorables al aprendizaje: el proceso perceptual, el proceso innovador (información-
pertinencia-ensayo), los procesos interpersonales de poder, aceptación y trabajo y
conocimientos adquiridos cuando el aprendiz relaciona la novedad con lo ya aprendido de
manera que tenga sentido para él y responda a algo, proponiendo así una organización del
aprendizaje válida para él. Su dinámica se expresa en una confrontación de conocimientos y
en un proceso heurístico

Como se puede comprender en la cita anterior, el modelo andragógico encuentra la


necesidad de inmiscuirse en el proceso perceptual. Con la finalidad de favorecer cambios
cualitativos de conocimiento y actitudes. En este punto la Andragogía compagina el interés
de conocer las percepciones del estudiante privado de libertad, propuesto en el presente
diseño de investigación. Además, el carácter cualitativo comparte con el modelo andragógico
sus fuentes en la investigación- acción. Esto, visto desde la Ciencia en Educación, la cual
establece sus características. Como indica Díaz Ruiz, “sus componentes son el aprendizaje
adulto, el educador, el grupo y el ambiente y se define por una combinación de recursos
humanos y materiales con miras a favorecer el aprendizaje del adulto” . Es decir, el proceso
perceptual del estudiante privado de libertad se ve influenciado por estos componentes.

El aprendizaje del adulto se desvincula de la pedagogía, “ya que los postulados


pedagógicos no colman las demandas del adulto como un ser capaz y con un cúmulo de
experiencias que rigen, en gran parte, el contexto educativo” . “El rol del educador
andragógico viene a ser diferente al del educador pedagógico en cuanto destaca su igualdad
con el aprendiz”. Sin embargo, “las personas en detención constituyen un grupo altamente
marginado”. El ambiente lo componen las relaciones de las micro-culturas propias de los
estudiantes privados de libertad. Estos cuatro componentes del modelo andragógico indican
al presente diseño de investigación, que se debe indagar en dichas aristas, para obtener un
marco perceptual objetivo del estudiante privado de libertad.

El presente diseño de investigación se enfoca en el desarrollo del pensamiento crítico.


La Andragogía introduce de forma explícita la autorreflexión crítica de los procesos
educativos. El estudiante adulto asume la responsabilidad de su propia educación. Por ser el
adulto un ser autodirigido y responsable de su propio proceso de aprendizaje, la educación
debe ser necesariamente personalizada. Es decir, favorece la capacidad de desarrollar y
utilizar el pensamiento crítico. Comprender el mundo, la realidad y a sí mismo como ser
humano es un proceso complejo, pero posible en la medida en que la autorreflexión de sus
habilidades, su avance y de los métodos que utiliza para el aprendizaje. Además se debe estar
abierto a la retroalimentación. Todo esto con el fin de optimizar su proceso de aprendizaje’’.

El pensamiento crítico tiene su centro en la experiencia. Esto da la mayor relevancia


a la experiencia del estudiante privado de libertad. La cual, como acción presente y
pertinente, implica reinterpretar y reapropiarse de lo vivido. Además de ‘’predecir efectos de
eventos actuales, para evitar la repetición de desaciertos cometidos en el pasado’’. Lo
anterior, demuestra que las acciones conscientes pueden proyectar intereses particulares
hacia metas de crecimiento personal y social. En este sentido, ‘’El autoaprendizaje implica
el principio de autorregulación del ser humano, en el sentido de que éste es capaz de asumir
sus responsabilidades hacia los demás, y para sí mismo, según sus propios valores y
convicciones’’.
Del mismo modo, el pensamiento crítico favorece la autorreflexión y el conocimiento
en el estudiante de sí mismo, de las propias fortalezas, debilidades y potencialidades. Sólo es
efectivo un proceso de construcción de conocimiento, en la medida que las personas se
conocen bien a sí mismas e intentan conocer a las demás. En consecuencia, ‘’La Andragogía
se centra en el aprendizaje, no en la enseñanza. Ello implica que la formación ha de ser un
proceso permanentemente creativo, significativo y vital, y las instituciones educativas tienen
que transformarse para que eso sea posible’’.

Sumado a lo anterior, el trato horizontal entre docente-discente, aprovecha las


características del estudiante privado de libertad en esta investigación. El cual comparte con
el docente ser estudiante universitario y adulto, factores que influyen en “las competencias
cognitivas, tales como el pensamiento comprensivo, el pensamiento crítico, el pensamiento
creativo, la toma de decisiones y la solución de problemas”. Esto facilita la sintonía entre
pares. El estudiante al estar en un nivel similar al docente, se encuentra facultado para las
operaciones mentales como el análisis, la síntesis, las habilidades críticas, la valoración de la
información y la generación de ideas. A su vez, el pensamiento comprensivo y el crítico, son
competencias necesarias que el estudiante privado de libertad de la modalidad UNED posee
para percibir su proceso de educación.

Preguntas de investigación

Pregunta Central

¿De qué manera la percepción del estudiante privado de libertad influye en el proceso
de la educación como derecho de la modalidad de educación superior a distancia en el CAI
Reinaldo Villalobos de la provincia de Alajuela?
Preguntas Secundarias

1- ¿Cuáles son las principales políticas y programas de educación en contextos


carcelarios en Costa Rica?

2- ¿Cuáles son los programas o iniciativas de educación generados en la Unidad de


Atención Integral CAI Reinaldo Villalobos de la provincia de Alajuela?

3- ¿Cómo se desarrolla la modalidad de educación superior en el contexto del CAI


Reinaldo Villalobos?

4- ¿Cómo es la situación educativa del estudiante en la modalidad de educación


superior en el contexto del CAI Reinaldo Villalobos de la provincia de Alajuela?

5- ¿Cuáles elementos inciden en la percepción del proceso educativo como derecho


humano en el CAI Reinaldo Villalobos?

6- ¿Cómo promover la participación de los estudiantes privados de libertad en la


formulación de una propuesta participativa en favor del proceso educativo como derecho de
la modalidad de educación superior en el CAI Reinaldo Villalobos?
Estado de lo conocido

En este diseño de investigación, fue necesario la indagación y el análisis


minucioso de fuentes que colaboraron en la investigación. Con la finalidad de comprender
los antecedentes y ciertos puntos de referencia en cuanto a la temática de estudio. Para ello,
se organizaron y sistematizaron las fuentes en ejes temáticos. Esto, para poder interpretar la
información de una manera más adecuada.

La revisión bibliográfica se estructuró a partir de cuatro ejes temáticos: El primer eje


temático se refiere a investigaciones que incorporan las percepciones de la población
estudiantil. El segundo eje aborda estudios vinculados con la población privada libertad desde
el fundamento jurídico y educativo. El tercero, se relaciona con la educación como derecho
humano. Y por último, los estudios acerca de la modalidad de la educación superior en la
cárcel.

El eje temático de la percepción estudiantil, demandó la búsqueda en trabajos de


Estudios Sociales y atinentes a la percepción de estudiantes en contextos penitenciarios. De
este modo, se tomaron aportes teóricos y metodológicos de interés para este diseño de
investigación. La percepción para estudiantes presidiarios, funge como un elemento central
en su proceso de educación como derecho. Además, es necesario agregar un sub eje de
Vulnerabilidad en este punto.

El artículo de Luz María Vargas Melgarejo Sobre el concepto de percepción, se


enlazó perfectamente a dicho eje temático. La antropóloga mexicana dialogó sobre las
múltiples valoraciones del concepto, tratadas desde las Ciencias Sociales y la Psicología. Esta
percepción, la mencionó como bicultural, señalando que existen estímulos físicos y
sensaciones que median en la apreciación. La autora afirmó, que las experiencias sensoriales
interpretan y adquieren significado, moldeadas por pautas culturales e ideológicas específicas
aprendidas desde la infancia. Por lo tanto, Vargas advierte que desarrollar un estudio
relacionado a la percepción, comprende diversas elementos culturales y psicológicos,
complicados de analizar; dado que, conlleva involucrase de forma cercana con el
participante.
El trabajo de Luz María Vargas, es relevante por su cuestionamiento del uso del
concepto de percepción. Este, claramente proviene de la psicología, pero, a nivel académico
ha tomado fuerza en las Ciencias Sociales. Algunos investigadores comprendieron procesos
psicológicos y fisiológicos que inciden en la interpretación del contexto del sujeto.
Construyendo categorías de análisis a través de instrumentos, argumentaciones y
teorizaciones en sus estudios. Ese ese sentido, fue tangente en señalar que su análisis requiere
de un manejo cuidadoso, porque se pueden valorar como un simple juicio u opiniones. Cabe
mencionar que al proponer la percepción desde una problemática social, puede enlazarla a
interpretaciones complejas del sujeto:

La percepción ofrece la materia prima sobre la cual se conforman las evidencias, de


acuerdo con la estructuras significantes que se expresan como formulaciones culturales que
aluden de modo general a una característica o a un conjunto de características que
implícitamente demarcan la inclusión de determinado tipo de cualidades y con ellas se
identifican los componentes cualitativos de los objetos.

El argumento anterior, denota que para trabajar con la población presidiaria, es


necesario un gran esfuerzo tanto metodológico como teórico. En tal motivo, es preciso
desarrollar una categoría de análisis adecuada a su contexto, que permita la sistematización
de sus percepciones. En lo cual, la antropóloga Luz María Vargas Melgarejo colabora. Pues
en el marco teórico de este diseño de investigación, se emplearan sus aportes para una
discusión conceptual.

El artículo anterior dista del presente diseño de investigación, en la manera cómo se


enfatiza en la apreciación disciplinaria. En este sentido, se enmarca desde la antropología.
Por ende, dichas aportaciones no se visualizan como cánones. El análisis de la realidad
estudiada, se enriquece desde varias disciplinas académicas. Ya que permite un mayor marco
de referencia y vinculación con la educación, así como problemáticas cercanas.

En el eje temático de la percepción del estudiante, fue necesario agregar, el artículo


realizado por Denis G. Durán Vargas: Geografía y percepción, reflexiones en torno a la
enseñanza de la geografía en la educación secundaria. Este, resume los resultados de un
trabajo anterior para optar por el grado de Licenciatura en los Estudios Sociales. Durán, se
concentró en la percepción del estudiante sobre elementos culturales y nociones espaciales
del tema. Para ello, el autor desarrolló un marco metodológico desde el paradigma cualitativo
que permitiera sistematizar y analizar las interpretaciones del sujeto.

El artículo citado de Duran Vargas, es un antecedente a tomar en cuenta desde los


Estudios Sociales. Pues, ofrece un soporte metodológico en comprender la percepción del
estudiante. Mediante esta se puede acceder a su interpretación del contexto y a la vez algún
conocimiento sobre una problemática en específico. Como lo aseveró Durán, las
percepciones de la realidad varían para cada persona. Cada individuo actuará en su mundo
con base en su forma particular de percibirlo, es más fácil para el ser humano percibir el
espacio cercano, es decir, aquel en el cual se desenvuelve la persona y con el cual interactúa
día a día. Por ende, el aporte del estudio yace en ofrecer una apreciación teórica del concepto
y como se puede analizar la interpretación del discente.

El estudio se diferencia al presente diseño de investigación, en su planteamiento


investigativo y metodológico. Mientras que, Durán se enfoca en analizar la percepción del
estudiante desde la temática espacial. Este diseño más bien se concentra en la percepción del
estudiante presidiario sobre la educación como derecho. El cual, es una persona mayor de
edad, en una condición social totalmente distante a un joven. Otra discrepancia fue la
cantidad de los participantes. El autor aplicó el trabajo de campo en dos instituciones
secundaria. Pero, no hizo mención a la cantidad. Sin embargo, se contempla con mayor
riqueza enfocarse un grupo de tres personas. Dada a la facilidad de profundizar en la
interpretación del contexto y la subjetiva, más allá de un solo contenido de la asignatura.

El trabajo de los autores Juan Pedro Barberá Cebolla y Marta Fuentes Agustí,
presentado en el 2012, y titulado “Estudios de Caso sobre percepciones de los estudiantes en
la Inclusión de las TIC en un centro de Educación Secundaria, detalló y examinó las
expectativas que tienen los estudiantes sobre la aplicación de las TIC en la práctica educativa.
El estudio, fue abordado desde un Enfoque Cualitativo. Proporcionando un aspecto
fundamental; la idea que el estudiante es quien mejor percibe, distingue y aprecia los procesos
de enseñanza y aprendizaje llevados a cabo en la práctica educativa diaria.

Este diseño de investigación, concierta con el estudio de Barbera y Fuentes, en que el


alumno debe ser el actor principal de la investigación. Las opiniones del alumno son
esenciales para suministrarles información útil, que ayuden a esclarecer su noción de cuál es
la situación de su educación y cómo pueden mejorarla. Para ello, se enfocaron en aplicar
técnicas e instrumentos cualitativos entornos al discente. Una concepción compartida en el
sentido que el grupo seleccionado asume un papel participativo. En este sentido, los
estudiantes privados de libertad y sus pensamientos, se convierten en punto crucial en el
contexto presidiario. Para lo cual, en el presente diseño, la percepción del estudiante privado
en el proceso de la educación como derecho juega el rol fundamental.

El artículo de Barberá Cebolla y Fuentes Agustí, por ende otorga un planteamiento


metodológico. Donde la percepción del estudiante, no sea algo secundario. Buscando analizar
problemáticas y proponer alternativas. Los autores, en la conclusión recalcaron su
participación, indicando que el estudio realizado abre una línea de investigación centrada en
el alumno. Como sujeto que siente y observa las actuaciones en la comunidad educativa.
Gracias a su figura, lograron interpretar, los retos presentes en la utilización de la TIC.
Sistematizando sus percepciones en cuadros de doble entra, entrevistas, entre otros
instrumentos.

Las diferencias entre halladas presente diseño y el artículo citado.

En los cuestionamientos y diferencias halladas, se puede mencionar. Estos autores


utilizaron treinta y siete estudiantes una cantidad acorde a su planteamiento de problema. No
obstante, se contempla en aras de profundizar con mayor criterio en la percepción del
presidiario, trabajar con un grupo pequeño de tres. El centro penitenciario se consideró un
contexto difícil para congregar y dar seguimiento a tanta personas. Por otra parte, este diseño
de investigación se desarrolla con adultos; quienes son poseedores de una experiencia mayor
y apreciación de su diario vivir. También de la educación como derecho; dadas las
condiciones en que se encuentran.

La fuente anterior y sus argumentaciones, se contrasta con el trabajo de Haylen


Perines y Javier Murillo “Percepciones de los docentes en formación sobre la investigación
educativa” hecho en 2017. Pues, buscó conocer las percepciones que los profesores en
formación de Educación Primaria tienen sobre la investigación educativa. De igual manera,
aportó que el sujeto central fue el profesor y sus percepciones.
En este estudio anterior, se planteó como enfoque metodológico la fenomenografía.
Para lo cual el interés del investigador bajo esta perspectiva no se centró en los fenómenos
en sí mismos. Sino en cómo los sujetos vivencian y perciben dichos fenómenos. Es decir,
con el presente diseño de investigación, relacionado en la manera de interpretar de manera
cualitativa las percepciones de los docentes. A pesar de las diferencias entre los sujetos, la
categoría de análisis utilizada por los autores, percepción de estudiantes es una contribución
para analizar en el marco teórico.

Para el presente diseño de investigación, lo anterior es un aporte metodológico. Pues


brinda un margen amplio de interpretación pertinente sobre la percepción de los estudiantes
en sus distintos niveles. Las particularidades y diferencias entre dichos estratos académicos.
Inclusive, siendo solamente cinco por nivel, un grupo pequeño y manejable para una mejor
sistematización, la cual profundiza en la información de los estudiantes.

Asimismo, otro aporte a mencionar del trabajo de Perines y Murillo, fue la utilización
de una entrevista y una matriz. Con este método, se clasificó y ordenó la información de una
mejor manera, permitiendo interpretar y relacionar los ejes temáticos planteados por los
autores. El análisis de los datos se fundamentó en el establecimiento de ciertos ejes previos
que se fueron complementando con aquellos nuevos elementos que surgían desde los propios
datos recabados.

Para el presente diseño de investigación, se rescató Del trabajo de Perines y Murillo,


la intención de trabajar con pequeños grupos en un solo nivel, teniendo un mayor
acercamiento y empatía con los estudiantes. Tarea a desarrollar, con la percepción de
estudiantes presidarios sobre su proceso de la educación. Con lo cual, es posible distinguir
ciertos temas y profundizar en el análisis de estos.

En este eje se concluye, que los estudios analizados suministraron aportes teóricos y
metodológicos importantes. No obstante, es palpable que el trabajo de la percepción de los
estudiantes, es a partir de su contexto. Más no se abocan en el estudio de la percepción de los
estudiantes en aras de mejorar su educación También, fue notable que ninguno analiza la
percepción de estudiantes presidiarios o sobre contextos carcelarios. Por lo tanto, lo anterior
constituyó un acicate para plantear un problema de investigación que trabaje con estudiantes
privados de libertad y la percepción de estos. Al mismo tiempo, se valora poner en evidencia
la situación vulnerable en la que se encuentra el participante, a partir de su visión sobre la
educación en dicha institución.

En el segundo eje temático sobre la población privada libertad desde el fundamento


jurídico y educativo. Fue necesario la revisión de fuentes bibliográficas, cuyo fin, fue
comprender de qué manera se han trabajado las cárceles desde los espacios administrativos.
Además, entender las políticas externas e internas del sistema penal.

Sumado a lo anterior, cabe destacar que es relevante puntualizar en la vulnerabilidad,


la cual va muy relacionada a entender el contexto carcelario. Esta, es una condición impuesta
en los privados de libertad, como resultado de ser una población relegada. Diversos estudios
concuerdan que la gran mayoría de la población en contexto de encierro, ha enfrentado
diversas formas de desventaja y exclusión en términos tanto sociales como educativos.

En el trabajo de las autoras Marcela Jiménez Villa y Orietta Zamora Rodríguez.


Modelo Socio-Educativo para la Atención de las Personas Menores Privadas de Libertad del
Centro Penal Juvenil San José (Actual Centro De Formación Juvenil Zurquí) se construyó un
Modelo Socio-Educativo bajo el enfoque de los Derechos Humanos. Con el fin de favorecer
una atención integral. Cuyo punto de partida sean las expectativas y necesidades de los
menores.

Este estudio, se enmarcó bajo la premisa que los menores son seres humanos sujetos
de derecho. Debido a diferentes circunstancias, han tenido dificultades para acceder a
oportunidades y tener el tutelaje de una figura de apoyo. Las autoras mencionaron que a los
menores privados de su libertad en el Centro Penal no se les brinda una atención
individualizada, donde se demanda un seguimiento de personal tanto administrativo como
docente. Lo cual, según estos, sería de mucho provecho, ya que lograría satisfacer una de las
necesidades más apremiantes que sienten tras los barrotes: ser escuchados. Por lo tanto, las
autoras exigen que los estudiantes sean actores protagónicos en la construcción de su propio
modelo de atención dentro en el contexto penitenciario.

Como aporte metodológico, la esencia del diagnóstico, se constituye en el insumo


fundamental para la elaboración del modelo. Este, contuvo el análisis del sistema de atención
que reciben los menores de edad, en el centro penal, desde los juicios de ellos mismos. Con
esto, se dieron cuenta de la percepción de los menores, en torno a su propio proceso de
prisionalización. Además, se concuerda con las autoras que los internos no cuentan con
espacios de participación. Donde, ellos expongan sus necesidades e inquietudes, con relación
a la atención que reciben y a los cambios que esta podría tener.

El estudio de Jiménez y Zamora está centrado en trabajar con menores de edad. Lo


cual, con el presente diseño de investigación se distancia, pues se trabaja con mayores de
edad. Cabe acotar, que se afrontan otro tipo de necesidades, retos y dinámicas institucionales
que influyen en el quehacer educativo. Es decir, el estudiante privado de libertad se ve
perjudicado, porque el alcance de este modelo socioeducativo, estará desfasado al momento
de ser trasladado a un centro penal para mayores de edad. A diferencia con este diseño de
investigación, no es plantear un modelo socioeducativo a partir de sus opiniones. Más bien,
es conocer la percepción del estudiante privado de libertad en su proceso de la educación.

En el año 2001, el autor Norberto Rojas en su tesis: “La Organización Educativa en


las Cárceles de Costa Rica: Análisis y Propuesta”. Recopiló la trayectoria de las políticas
educativas carcelarias desde 1970 hasta el año 2000. En este sentido, de acuerdo con los
Derechos Humanos, la tesis abordó la implementación de una estructura educacional en el
Sistema Penitenciario Nacional Costarricense. A través de un punto de vista epistemológico
constructivista, con el objeto de acercarse a la realidad como una construcción social. Este
estudio es un antecedente, en la incursión investigación educativa en las cárceles
costarricenses. Atañendo la importancia de los Derechos Humano, “para que la práctica
educativa en los centros sea capaz de satisfacer las demandas educativas básicas de la
población privada de libertad en el sistema penitenciario” .

La relación entre la tesis citada con la presente propuesta, es de orden teórico. Ya que,
ofrece una conceptualización del contexto carcelario. El autor se interesó en analizar la
educación en las cárceles. Según los criterios de orden criminológico de tradición positivista
que luego pasaron a la incorporación de una criminología crítica. Su aporte se centró en
explicar la educación en contextos de encierro, desde las corrientes teóricas de la
criminología. Por ende las políticas educativas fueron modificadas para la reeducación de los
privados de libertad. Lo anterior, mantiene sentido con el eje temático propuesto, que otorga
un referente histórico para comprender la evolución del fundamento educativo del sistema
penal.

Una limitante del escrito de Norberto. A pesar de los aportes contextuales sobre la
evolución de la educación en el Sistema Penitenciario Costarricense. Sus alcances se
circunscriben desde el punto de vista temporal. En este sentido, no se ha ahondado en otros
tipos de trabajos encausados hacia la política carcelaria y su relación con la educación hasta
la fecha. Además, el esfuerzo por conocer el contexto educativo carcelario fue dirigido hacia
la satisfacción de las demandas educativas de la población privada de libertad de todo el
Sistema Penitenciario Costarricense. A diferencia del presente diseño investigativo, que
busca conocer el contexto carcelario para profundizar en la percepción del estudiante privado
de libertad. Mediante el estudio del marco legal de la educación dentro de los centros penales,
así como del CAI. Además de, trabajar con la percepción del estudiante desde la temática de
los derechos humanos. De esta manera se distancia del presente diseño.

Desde el punto de vista metodológico, Norberto Rojas omitió dar mayor participación
a los privados de libertad. Mediante la aplicación de cuestionarios estructurados, el autor
buscó la finalidad de que estos expresaran una serie de apreciaciones y recomendaciones,
para la satisfacción de sus demandas educativas. Vale decir, que este tipo de acercamientos
no profundiza en la percepción de los sujetos. Dicho vacío es retomado en el presente estudio
para indagar en la percepción del estudiante privado de libertad y cómo esta influye en el
proceso de su educación como derecho. Entender a los estudiantes privados de libertad es
fundamental para la práctica de una educación integral, que respalde los derechos humanos.
Como base para la satisfacción de las necesidades mínimas educativas de este sector de la
población estudiantil.

Las autoras Maura Espinoza Rostran y Ayrieth Granados Carrillo en su tesis para
optar por un grado de licenciatura en Ciencias de la Educación con énfasis en didáctica de
los Estudios Sociales: Cuando mi centro educativo es una cárcel y mis estudiantes son
privados de libertad: una reconstrucción de la práctica docente en el Centro de Formación
Juvenil Zurquí del año 2001. Realizaron una investigación cualitativa en el Centro Penal
Juvenil. Caracterizaron la práctica pedagógica en el centro de formación educativa “Corazón
de María” en la modalidad de Educación Abierta. Estudiaron las condiciones inherentes al
aprendizaje. Valorando el qué, el cómo y el para qué de la educación dentro de un sistema
carcelario cerrado.

En aspectos metodológicos trabajaron con un grupo de tres estudiantes. Para ello


utilizaron el paradigma naturalista, con la intención de analizar y entender la realidad en su
contexto natural, interpretando los fenómenos de acuerdo a los significados que estos tienen
para los sujetos inmersos en esa realidad. Bajo esta misma línea, el enfoque empleado fue el
Etnográfico. Con referencia al resultado del proceso de investigación, el cual fue plasmar
todas esas circunstancias del quehacer educativo en el centro penal. Entiéndase: la práctica
docente del centro educativo, el espacio físico y emocional, las estrategias de aprendizaje,
los métodos, recursos, la evaluación y los sujetos cognoscentes (guardas, profesores,
estudiantes) que conforman esa realidad.

Lo anterior, se concibe como un aporte metodológico. Ya que Espinoza y Granados


presentaron una manera de enfocar la microcultura en el contexto penitenciario. Por medio
del trabajo, lograron abordar las opiniones del estudiante. De esta manera se conoció sobre
la vida de estos (sus sentimientos, emociones, frustraciones y necesidades), y los retos que
enfrentan para ejercer su derecho a la educación. Sumado a esto, en la investigación un
insumo importante fue plantear que muchas de las prácticas pedagógicas que se imparten en
centros penitenciarios cerrados. Están totalmente desvinculadas de la realidad del sistema
educativo formal, de las mismas necesidades y especificidades de la población penitenciaria.
Por ende plantearon necesario hacer talleres de capacitación en diversas áreas. Con el
objetivo de que cuando egresen del centro educativo, salgan dotados de algunas capacidades
en un oficio que les permita obtener recursos para su manutención y la de su familia.

Para este diseño de investigación, un desacuerdo a nivel metodológico y del


planteamiento investigativo. Fue el abordaje realizado con el grupo de estudio escogido. Pues
las autoras se limitaron a generar una propuesta didáctica para el Centro de Formación
Juvenil. Lo que constituye un vacío en el tema del derecho a la educación en contexto
penitenciario. Aspecto a desarrollar en este diseño. El cual busca abordar de manera integral,
la percepción del estudiante privado de libertad. En aras de comprender la educación de estos
estudiantes, siendo ellos los que planteen alternativas desde el enfoque de los Derechos
Humanos.
Por otra parte, un trabajo pionero en el contexto carcelario desde los Estudios
Sociales; sin duda fue la tesis de Ana Gladys Bolaños, para optar por el grado de Licenciatura
en la Enseñanza de los Estudios Sociales. Realizado en el 2003, titulado “Como Estudio
detrás de los muros, una segunda oportunidad: propuesta para el mejoramiento del plan
modular CINDEA II, en el centro de atención de (CAI) de Heredia, utilizando la metodología
del aprendizaje del aprendizaje significativo. Dado que, se contempla como un referente
histórico que explicó la apertura educativa en los centro penales. Señalando la labor en
conjunto del Ministerio de la Educación y el Ministerio de Justicia y Paz para brindar el
derecho.

Otro aporte previsto en la tesis, fue su análisis efectuado en el Estado de lo conocido.


Pues facilitó la línea investigativa de los trabajos realizados en educación durante la década
del ochenta y noventa del siglo XX. Estos mayoritariamente se preocuparon por elaborar
unidades didácticas y comprender las actitudes psicológicas del sujeto. Lo anterior, denotó
que no se ha abundado en la percepción del presidiario desde los Estudios Sociales., lo cual
representa un vacío. Es notable, que en su época el enfoque se tomó como innovador;
inclusive Bolaños lo justifica mediante la siguiente cita bibliográfica del Norberto Rojas
Coronado:

“Todo parece indicar que las prácticas educativa transmitidas desde las aulas
universitarias y reproducidas en nuestro sistema escolar formal y en el subsistema escolar
penitenciario, no está generando las condiciones para fomentar un educación novedosa”

No obstante, en los últimos años tanto la investigación socioeducativa y los Estudios


Sociales, se han experimentado grandes cambios en relación a estudios, técnicas y enfoque.
Donde, el presente diseño de investigación no escapa de estas transformaciones. Por ejemplo,
no se limita a elaborar una unidad didáctica; más bien, busca aportar a la educación e
investigación mediante un estudio que retome la percepción del estudiante presidario y su
proceso de la educación.
Para superar el vacío investigativo de anteriores trabajos, se procura involucrar al
sujeto presidiario en la construcción de un estudio de manera conjunta. No por ello la tesis
de Ana Gladys Bolaños dejó de aportar en aspecto relevantes. Como el caso, de la aplicación
de la entrevista profundidad, que aludió a su sentido de emplearla, técnicamente en la
metodología de historia de vida como un ejercicio de recopilación sobre acontecimientos y
experiencia sociales que no se pueden observar directamente. Esta técnica cualitativa, es
bastante idónea para abordar la percepción del estudiante presidiario y entender su contexto.
También se aprovechó del escrito, la forma en como explicó la cárcel. Donde, a partir de un
pequeño diagnóstico, brindó premisas y observaciones para describirla.

Con respecto a la vulnerabilidad, en el 2010 María Cecilia Borel resaltó en su


ponencia “Desigualdad educativa y vulnerabilidad” que los estudiantes visualizan a la
institución educativa como un lugar; para ser aptos y ocupar un trabajo determinado. Ingresar
a un mercado laboral, encontrar conocimientos, un sitio al que tienen que ir por obligación,
entre otros, son parte de esa condición de vulnerabilidad sistémica.

Estos estudiantes consideran principalmente a la educación como un insumo para


incorporarse al mercado laboral u obtener un mejor empleo. Aún dentro de una precariedad
generalizada: “en lugar de limpiar patios, ser peón de albañil” o “en lugar de limpiar casas,
cuidar niños”. En ese sentido, la educación es vista como una gestión para optar o ingresar
en un campo social más amplio del cual ellos viven.

Para este diseño investigación, el estudio de Borel es un aporte. Por tanto expresa la
existencia de una desigualdad educativa, producto de una vulnerabilidad social a la cual estos
jóvenes están sometidos. Particularmente, por lo que implica desde el punto de vista propio
del sujeto sobre las oportunidades – o la ausencia de ellas – laborales y de prosecución de
estudios superiores. Inclusive, para entender la significancia de la vulnerabilidad de los
estudiantes en el CAI.

La autora María Cecilia, esclareció cómo funcionan ciertos fenómenos sociales de


manera conjunta. Tales como la desigualdad existente en la sociedad y en la educación,
debido a una situación de vulnerabilidad. Se coincidió con esta fuente, en que se debe realizar
un análisis crítico sobre la desigualdad y la vulnerabilidad en el sistema educativo. En este
diseño de investigación, se enfatiza la vulnerabilidad de los estudiantes en el sistema
penitenciario.

El trabajo de Leandro Kouyoumdjian y Mariano Andrés Poblet Machando “Un punto


de Fuga”. La educación en cárceles, aportes desde el Trabajo Social de los académicos del
año 2010, en este sub eje es considerado relevante. Puesto que, se circunscribe a la realidad
Argentina, aludiendo la situación penitenciaria en materia social. El escrito buscó analizar de
qué manera la educación puede participar en la disminución de los niveles de vulnerabilidad,
de los sujetos que constituyen el blanco del sistema penal. Para ello, los autores propusieron
que la función de los trabajadores sociales, adquiera mejores criterios éticos y profesionales.
Asimismo, se vincule su labor a una educación crítica, de acuerdo a sus derechos y necesidad
humana.

El artículo de Kouyoumdjian y Poblet ofreció diversos aportes teóricos y reflexivos.


Por ejemplo, en la perspectiva sobre la educación en un centro penitenciario; ambos autores
se oponen a la visión clásica de la educación. Entendida como tratamiento terapéutico. El
estudio, parte de la visión del trabajo social; empero fue bastante acertado para ver la
educación como un derecho que puede remediar la condición humana del presidiario. No
todo lo contrario, cómo mencionaron ambos autores que con frecuencia es considerado una
forma de mantener ocupado al convicto, una forma de “matar el tiempo”.

Por ende, en el presente diseño de investigación se planteó analizar la percepción del


estudiante privado de libertad en la modalidad de educación superior. Donde, no se desestime
su derecho a la educación, como un mero ejercicio de asistencia. Sino aprovechar su
subjetividad para cuestionar y proponer posibles cambios a la modalidad que concuerde con
sus necesidades.

En el trabajo de Kouyoumdjian y Poblet, se hallaron estas limitaciones. Como primera


instancia, concierne al nivel de contexto, pues no se puede perder de vista su adecuación a –
Argentina- . Lo anterior recae en un trabajo social que pretende dar un mejor sentido a la
educación nacional de ese país. El cual, reivindica la condición humana del estudiante,
logrando superar su vulnerabilidad y respaldando su derecho. La diferencia al presente diseño
de investigación, va más allá de plantear criterios éticos y profesionales. Por lo tanto,
pretende partir de la percepción del estudiante privado de libertad. En un trabajo investigativo
que precisa acercarse al sujeto y entender la relación entre contexto penitenciario y su proceso
de la educación.

El artículo de trabajo social en conjunto de Chaime Marcuello Servós y Jesús García


Martínez, publicado en el 2011: La cárcel como espacio de de-socialización ciudadana:
¿fracaso del sistema penitenciario español? fue una fuente bibliográfica alternativa para el
presente diseño de investigación. A través de una metodología mixta cualitativa-cuantitativa,
los autores demostraron las carencias del sistema penitenciario, para que el sujeto logre
superar su condición de vulnerabilidad.

El escrito se conceptualizó en la realidad española. Los autores, realizaron eximios


análisis, empleando conceptos como: Sistema penitenciario, subcultura carcelaria y
vulnerabilidad, usados en la interpretación de los datos. En sus hallazgos, por ejemplo, se
alude la situación emocional que vive el sujeto en este centro. Citando de Goffmann lo
siguiente, las condiciones sociales del entorno carcelario acarrean, sin duda alguna,
tensiones, psicosociales, en el marco de las estructura de las personalidad de cada sujeto –
actitudes, motivaciones y valores–.

Por ende, lo que vive-percibe el estudiante presidiario, va de la mano de su situación


emocional. La cual, influye en el panóptismo institucional y su socialización con otros. Ya
sean, entre pares o trabajadores de distintas áreas del centro penal (custodios, docentes,
administradores, entre otros) que son la cara representativa del Estado y sus políticas. Lo
anterior se puede contemplar, en la adopción de los usos y costumbres propias de la cárcel,
consolidando las identidades personales prisionizadas, esto se traduce en un proceso
individual, donde se interioriza de forma progresiva la subcultura carcelaria.

Para este diseño de investigación, un aporte fue el poder analizar conceptualmente la


condición del presidiario. Dado que, facilita profundizar en la percepción de este e interpretar
a la vez su diario vivir en el centro, orientándose de esta forma en el proceso de educación
como un derecho. Un último insumo extraído de Marcuello y García, consistió en el hincapié
sobre la criminalización de la pobreza. Siendo este estudio, uno de los interesados en
comprender la condición de vulnerabilidad del presidiario.
La importancia, radica en no caer en determinismos. En tanto, la pobreza no se
contemple como factor para entender la condición del estudiante presidiario. Los autores
señalan que en la prisión se da un proceso educativo desocializador que comienza con la
misma dinámica social de la selección de las personas que acabarán en prisión,
manifestándose en un doble plano, primero de discriminación y, después, de exclusión. Por
lo tanto, se puede hablar de una sobredimensión del presidiario.

Ya que, en ocasiones se efectúan aseveraciones para explicar su situación. Su


percepción; es omitida y se encasilla como pobre o desviada. No obstante, la vulnerabilidad
económica- social, no parte de un acondicionamiento para tachar al sujeto. En contraposición,
las condiciones que afronta exhiben puntos de vista diferentes al común. Sobre lo anterior, el
presente diseño investigación, posee interés profundizar la percepción del estudiante privado
de libertad en el CAI.

Los derechos de las personas privadas de la libertad están consagrados en diversos


instrumentos universales y regionales de Derechos Humanos. Bajo esta premisa, el estudio
realizado en 2013 por El Instituto Nacional para la Educación de los Adultos titulado
Educación para adultos en contextos de encierro. Fue un insumo que posibilitó un panorama
actual de la educación en las cárceles desde el marco legal.

En dicho trabajo, se puso de contrapunto la integralidad de la educación en “contextos


de encierro”. Debido a la funcionalidad que esta cumple para cambiar la percepción de la
persona privada de libertad de sí mismo y los demás. Se ahondó, en que el estudiante percibe
la educación en la cárcel como una simple herramienta. Cuya finalidad es encontrar empleo
al cumplir la pena. En contravención, a que el estudiante presidiario a través de la educación,
encuentre una plena integralidad en su desarrollo personal.

Este diseño de investigación, concuerda con El Instituto Nacional para la Educación


de los Adultos, en que la educación en prisión suele estar limitada a los niveles elementales.
Las competencias si bien son concebidas como necesarias, no son suficientes para lograr el
pleno desarrollo humano. De igual manera, se identificó que a la educación en prisión suele
dársele un enfoque de preparación para el empleo. Sin embargo, esa formación profesional y
las habilidades que se adquieren en el proceso, contribuyen poco al pleno desarrollo de la
personalidad humana, objetivo de la Carta Internacional de los Derechos Humanos.
En ese sentido, esto se contrapone al tratamiento de la percepción brindada por la
fuente. La cual constituye una diferencia para la presente investigación. Pues pretende
conocer la percepción del estudiante privado de libertad y su proceso de la educación como
derecho. Lo anterior, es importante para formar un carácter inclusivo y democrático de la
educación de adultos en contexto de encierro, el cual tome en cuenta la visión del preso
como un ser humano.

El trabajo realizado por Hilean Sánchez Álvarez, Karen Romero Marín y Einor
Barquero Agüero, Propuesta de cooperación al proceso de reinserción social y el ejercicio
pleno de la ciudadanía de la mujer ex privada de libertad del Centro de Atención Institucional
el Buen Pastor, a partir de dos casos en el sur de San José, durante el período 2015-2016. Se
encuentra dentro de las investigaciones elaboradas en el área de los Estudios Sociales. El
tema de estudiantes privados/as de libertad ha sido analizado desde la inclusión social.

Su análisis se centró en el sujeto (privadas de libertad) cuya incursión en el estudio


de las vivencias y experiencias brindó un antecedente al presente trabajo. Al indagar desde
la investigación socioeducativa las percepciones de privadas de libertad. Con el fin de
brindarles herramientas para empoderarse mediante una participación activa en los espacios
ciudadanos.

Este diseño de investigación concuerda con la línea de conocer las percepciones del
grupo participante, en condición de vulnerabilidad. De modo que influya en su proceso de la
educación como derecho. No obstante, no se aboca en elaborar talleres en aras de una
sociedad inclusiva. En este sentido, conocer la percepción del estudiante sobre el proceso de
la educación como derecho en el CAI. Permite cuestionar de manera reflexiva y crítica, la
inclusión educativa en un contexto vulnerable.

A pesar de la similitud temática, las diferencias en la conceptualización de la


percepción marcan distancias a razón del sexo. Este diseño de investigación analiza las
percepciones de masculinos y no de femeninas. Empero, las circunstancias de contexto
conllevan a metodologías distintas. Sánchez, Romero y Barquero plantearon un contexto
histórico patriarcal. Donde el Sistema Judicial, ha mantenido una conducta desinteresada en
la oferta de servicios para las mujeres de la cárcel. Por ello propusieron la alternativa del
empoderamiento de sus derechos como mujeres libres en una sociedad patriarcal.
Cabe citar, tanto hombres como mujeres padecen lo que se ha venido a denominar
pena de “doble condena”. Ante esto, este diseño de investigación, va encaminado a que la
percepción del estudiante presidiario influya en el proceso de la educación como derecho en
el CAI. Este proceso funge como medio primordial, pues permite prepararlos de una mejor
manera para su desempeño en el medio social.

Sobre el mismo eje temático, se continúa con el contexto educativo carcelario visto
desde lo jurídico. Para lo cual, Ministerio de Justicia de la educación, fue una fuente
bibliográfica acorde. El artículo escrito por Alexis Vegas Sánchez, jefe nacional de los
servicios educativos en el 2014. Cuyo título es: La educación en el sistema penitenciario
costarricense motor para el cambio. Cabe mencionar, que analizar esta fuente oficial propia
de la institución. Permitió, comprender el fundamento manejado de la labor educativa.

Para el presente diseño de investigación contribuyó en aspectos teóricos e insumos


para profundizar las preguntas planteadas en la investigación. Asimismo el autor aludió al
trabajo conjunto del Ministerio de Justicia y Paz, y el Ministerio de Educación Pública, que
se organizan para garantizar la cobertura educativa. También, se rescató el sentido que toman
los Derechos Humanos en el contexto penitenciario. Por ejemplo Sánchez, citó que según la
Reforma Penal del 2006, los Derechos Humanos en función a la educación son un derecho
inalienable para las personas, independientemente de su condición (o estatus vinculado a la
justicia penal). Sea éste económico, social, político o de libertad de tránsito. Por lo tanto, el
escrito se vinculó al contribuir qué perspectiva educativa se presenta en los centros
penitenciarios nacionales actualmente.

Para efectos del presente proyecto de investigación, se consideró como un pilar


bibliográfico el estudio institucional del El Estado de la Justicia. Elaborado en el año del
2016. Ya que, este realiza un análisis completo de la situación del sistema judicial citando
cifras importantes y estudios de otros entes públicos y privados. Al ser un trabajo tan amplio,
se pretende aprovechar solamente el capítulo 7, nombrado: Causa de la privación de libertad
y perfil de la población penitencia.

El artículo, Inclusión, reclusión, locución: La Educación en Contexto de Encierro del


Licenciado Santiago Detone, publicado en el 2016; el autor analizó el sentido de la educación
inclusiva en la sociedad uruguaya. Mediante las siguientes preguntas: ¿Cuáles son las
posibilidades reales de que los reclusos sean incluidos a la sociedad en el sentido más parcial
del término: que dejen de delinquir? ¿Cuál es la forma de actuar de este interior que los
repele?, ¿Cómo operan los factores sistémicos de la exclusión?

Para ello, el autor utilizó como base la perspectiva del psicoanálisis. Hilvanando una
interpretación crítica que cuestiona la visión estructural política y económica de la
inclusividad educativa. Por ejemplo, el autor mencionó el posicionamiento de Gustavo
Espinoza que cuestiona las propuestas inclusivas de la fundación 2030, que alude:

(…) “La educación debe procurar la “inclusión de los jóvenes excluidos en una
agenda personalizada, descentralizada y adecuada a la diversidad de la demanda”. La
realización de este objetivo abrumador implicaría, según señala Espinosa, la selección de
“contenidos líquidos” hechos a la medida de cada alumno: “la seducción, como único
mecanismo posible y encubierto de disciplinamiento, jamás debe fastidiar o interrumpir el
deseo de su propio objeto de deseo”. La lógica inclusiva, en esta versión líquida, perpetúa la
lógica del mercado de la oferta y de la demanda, en cuanto que la oferta debe adaptarse
(ilimitadamente) al gusto del consumidor y tiende a olvidar que los principios del
conocimiento son (y deberían ser) irreductibles a los principios del mercado.”

Espinoza desaprobó la perspectiva de la fundación, pues equivale a una especie de


certificación puramente administrativa, desprovista de todo sentido o valor. Haciendo un
hincapié que lo contrapuso con la marginalidad de la sociedad y la situación del sujeto en el
contexto penitenciario. Visto como la criminalización de la pobreza, aseverando que la cárcel
es una “válvula de escape” a su vez, un mito de refundación.

Desde este marco, la Educación en Cárceles es concebida como instrumento para la


reconversión del individuo y, en definitiva, para la disminución del delito. En ese sentido, la
inclusividad se vuelve una paradoja que no ofrece oportunidades al presidiario. Sumado a la
reproducción de un modelo que canaliza la violencia y crimen en barrios marginales. En
donde, el sujeto no logra desarrollar su integralidad como poseedor de Derechos Humanos.

Lo anterior, sin duda se toma como un excelente aporte. Dado que Detone demuestra
ser crítico en el fundamento de la educación inclusiva, presente en el eje problematizador del
Seminario. El cual puntualiza en esta y el análisis de contextos educativos vulnerabilizados
desde la perspectiva de los Derechos Humanos. Así como, este diseño de investigación
comparte una visión preocupada en la aplicación de políticas, que velen realmente por la
situación del individuo.

Un trabajo reciente para entender el contexto penitenciario en el sub eje temático de


vulnerabilidad, fue la tesis de Marilyn Sofía Segura Castillo y María Fernanda Vega Alfaro:
¡Estoy caneando! Y mis vivencias también cuentan: incidencia de la política penitenciaria
referente a las vivencias de las mujeres privadas de libertad en situación de vulnerabilización
del C.A.I. Vilma Curling Rivera del 2017, para optar por el grado de licenciatura en trabajo
social.

El trabajo de las autoras se diferencia con este diseño de investigación, en que se


trabajó con población femenina (antigua cárcel “Buen Pastor”) y que es un trabajo de otra
área académica, mas esto no le resta mérito para ofrecer insumos teóricos. Cabe mencionar,
que el CAI, lugar donde es efectuado este diseño de investigación, se encuentra solamente
conformado por masculinos. Lo anterior implica un gran cuidado, pues ambos sujetos
comparten la condición de vulnerabilidad y encierro. Si bien, cada centro maneja una lógica
institucional diferente en ciertos servicios y las condiciones que se viven. Se amerita de un
ojo crítico para no confundirse y enfocarse en el desarrollo de la problemática, respondiendo
todas las interrogantes que surjan en el siguiente trabajo de graduación.

Las autoras Segura y Vega, profundizaron en el análisis de la vulnerabilidad


institucional penal y como se ve afectado el sujeto. Para ello, en primera instancia realizó un
diagnóstico del centro. Con el fin de conceptualizar las carencias que afectan y perjudican a
la población. Las cuales, provocan contradicciones con respecto a los Derechos Humanos.

El eje temático de vulnerabilidad empleado por las autoras, es de sumo interés teórico.
Pues, se accede a un diálogo sobre el vínculo existente entre contexto y sujeto, a través de
fuentes bibliográficas acertadas. Desarrollando la categoría “subcultura carcelaria” que a
grandes rasgos las autoras citan de la siguiente manera: “Facilita el entendimiento sobre las
dinámicas propias de los espacios carcelarios, el impacto que tiene sobre la personas durante
y después de un proceso privativo de libertad y las implicación sociales que las tienen”.
En este aspecto, se puede apreciar que la tesis de Segura y Vega proporcionó una
contribución valiosa. Demostrando que la vulnerabilidad, se ha trabajado desde los centros
presidiarios. Por último, se rescataron dos aportes más. El primero, va enlazado a la
apreciación histórica, en relación a la influencia de política interna y externa, presente en el
centro presidiario. Con respeto a la segunda, las autoras emplearon el concepto de Derechos
Humanos, termino vinculado a este diseño de investigación. Así como, el concepto de
vulnerabilidad, el cual abunda en la discusión del marco teórico.

Como conclusión del eje, se puede señalar que trata sobre las diversas problemáticas
que afronta la población presidiaria; por ejemplo la exclusión, situación de vulnerabilidad,
desarraigo que se le da a esta población de la sociedad, desigualdad en la condición educativa.
Sim embargo, se rescata la explicación del perfil de los privados de libertad que menciona su
condición social y las causas motivadoras de delinquir. Teóricamente contribuye en la
utilización de dos conceptos de suma relevancia como, privado de libertad, y sistema judicial.
Estos abonarán en la discusión del marco teórico sobre la influencia de las políticas en los
programas de educación en contextos carcelarios.

Con la búsqueda de fuentes para este eje temático, se denotó que pocos estudios
examinan la vulnerabilidad de los centros carcelarios. Asimismo, ninguno analiza la
vulnerabilidad de estudiantes presidiarios. Por lo tanto, a partir de los vacíos e insumos que
brindaron los trabajos, en este diseño de investigación se pretende profundizar en el papel de
los estudiantes participantes, como los personajes principales en el desarrollo de su propio
modelo de educación dentro en el contexto penitenciario. Tomando en cuenta la relación de
la vulnerabilidad con la percepción, los derechos humanos, desde un marco educativo y
jurídico.

Sobre el tercer eje temático la educación como derecho. Se consultaron estudios de


los Derechos Humanos y su relación al derecho de la educación pública en las cárceles. Lo
cual, desde una perspectiva educativa es indispensable y prioritario. Cabe mencionar que su
importancia no radica exclusivamente en la no violación de los mismos. Sino, la importancia
se torna en el ejercicio de estos. Pues, como alude Francisco Scarfó, la educación pública en
las cárceles es ante todo un derecho humano y tiene como fin el desarrollo integral de la
persona. En este sentido, se procedió en el análisis de fuentes de carácter internacional, dado
los acercamientos con la presente propuesta.

El artículo de Trabajo Social titulado “Una mirada a la educación en cárceles desde


los Derechos Humanos” de las autoras, Luciana Bravo Ruffinatti, Trinidad Figueira y
Samanta Romero. Aportó de manera teórica desde la interdisciplinariedad. La importancia
de entender la educación como derecho humano fundamental. Dicho artículo analizó la
educación pública en el contexto de encierro. En ese sentido, abonó al indicar que dentro de
la educación en cárceles. Es indispensable la educación en Derechos Humanos . Pues, esta
integra valores como: el respeto a la vida, a la tolerancia, la vida democrática, la no
discriminación, entre otros. Empoderando a las personas en el respeto. También, en la
protección de sus derechos y libertades fundamentales.

Según la caracterización de las autoras, las cárceles constituyen Instituciones Totales.


Donde el privado de libertad es despojado de su identidad, sufre humillaciones en el trato
con los superiores, violaciones de la intimidad, castigos, amenazas, malos tratos, etc.
Además, siguiendo Salinas R. “los presos padecen de consecuencias somáticas y
psicosociales que conllevan al deterioro físico y a traumas de personalidad y de imagen
propia afectando de esta manera su desarrollo integral” . Por ello las autoras plantean que en
el proceso educativo en las prisiones debería tener en cuenta las particularidades del sujeto,
“con su historia de vida, con sus pensamientos y sentimientos, y con todas aquellas
experiencias que trae consigo, ya que éste es un sujeto activo, creador y no un ‘recipiente’
vacío que debe ser llenado de información” .

El artículo de Bravo, Figueira y Romero concuerda con el fundamento de que la


educación constituye una herramienta posibilitadora de emancipación y autonomía de los
sujetos. Brindando un espacio constructivo a la palabra, “como una forma de comunicar,
socializar, reflexionar, cuestionar, liberar y posibilita un encuentro con otros, teniendo en
cuenta las realidades y aspiraciones de los propios sujetos” lo que aporta al desarrollo
personal y social. Sin embargo, según las autoras la educación no es entendida como parte
de las necesidades de los privados de libertad, sino como una necesidad de defensa del orden
social; bajo esta concepción la educación no busca el desarrollo integral de la persona privada
de libertad.
Respecto al aporte teórico este se limitó al empleo de conceptos. Orientados a
esclarecer el tema en estudio desde la posición de los Derechos Humanos. Sin embargo, sus
alcances son cuestionados por la ausencia de “modelos” prácticos que ejemplifican sus
posiciones teóricas. El artículo mencionó la emancipación y el empoderamiento pero lo dejó
en un plan ideal de cómo debería ser la educación en dichos contextos. Por lo tanto la
propuesta se limitó a un análisis conceptual. Obviando las percepciones de los estudiantes
presidiarios sin llevar a cabo un trabajo de campo que encadene la propuesta a su realidad.
Una diferencia marcada con el presente diseño que busca la participación del grupo elegido.

El artículo del argentino Francisco Scarfó, bajo el eje temático: “El derecho a la
educación en las cárceles como garantía de la educación en derechos humanos”. Realizado
en el año 2002, marcó una importante aproximación al objeto de nuestro estudio en el
contexto costarricense. El autor, abordó las conceptualizaciones teóricas compartidas por las
autoras antes mencionadas. Exponiendo un modelo de análisis y un marco metodológico para
tratar la condición del estudiante presidiario.

En el ámbito metodológico brindó distintos aportes pedagógicos. Situados al proceso


de la educación como derecho de los estudiantes privados de libertad. Dichos aportes son
orientados al estudiante (sujeto) este posee un papel activo y es responsable de su aprendizaje,
mediante la libertad plena de expresión y decisión. Esto concuerda con uno de nuestros
cometidos, el de conocer cuáles son las percepciones de los estudiantes en contexto de
privación de libertad respecto al proceso de educación como derecho.

Scarfó recuerda que por definición la “cárcel tiene un manto de rigidez y de normas
muy fuertes que no permiten la libertad de expresión y de decisión” . Al tomar la anterior
definición de la cárcel, la educación en estos centros son oportunidades para la reflexión y el
ejercicio de la libertad. Elementos importantes en la práctica de la educación en el ámbito de
cárcel. En este sentido, A. Magendzo citado por Scarfó comenta que:

“La Educación en Derechos Humanos adopta distintas iniciativas pedagógicas, como


por ejemplo: el aprendizaje auto-regulado; la elección de temas por parte del estudiante; el
diseño de aprendizaje por parte del estudiante; el aprendizaje orientado por los propios
estudiantes, en el cual los estudiantes se ayudan unos a otros a aprender; el trabajo en grupos
para promover el aprendizaje igualitario y auto-suficiente” .
Las anteriores iniciativas aportan metodológicamente al proceso de la educación
como derecho. Centrando en todo momento en el estudiante un proceso de aprendizaje sobre
la educación en Derechos Humanos. Este constituye un aporte epistemológico que se adecua
al ejercicio de una educación en valores de los Derechos Humanos en Contexto de Cárcel.
No obstante, el tratamiento de las percepciones y su conocimiento por parte de los
investigadores no es suficiente, con las anteriores iniciativas pedagógicas. Un vacío denotado
en el trabajo de Scarfó. Fue la poca profundización de la percepción del estudiante
presidiario. A pesar de incluir un capítulo, donde expuso la voz de los alumnos privados de
libertad en cuanto al tema de la educación y los Derechos Humanos. El autor basó dichas
interpretaciones, en opiniones que fueron generalizadas en datos cuantitativos. Por lo tanto
escaparon las diferentes realidades de los sujetos.

La tesis Sandra Uribe Gómez en Maestría en Derechos Humanos y Educación para la


Paz del 2004, titulada Derechos Humanos, una guía de modulo educativo dirigida al Personal
técnico del Sistema Penitenciario Costarricense del programa de Atención Penal Juvenil, fue
un antecedente nacional en la incursión de propuestas educativas desde derechos humanos.

Este estudio se centró en capacitar al personal del centro, entiéndase (administrativos,


trabajadores sociales, psicólogos, custodios, entre otros. Justificando su preparación de la
siguiente manera, las metas y razón de ser una institución sólo pueden materializarse a través
del desempeño de sus funcionarios (as); en su trabajo de todos los días, se plasma filosofía
institucional y el grado adhesión de quienes la integran. En ese sentido, se concibe vital para
resguardar los derechos en el penal, tanto administradores como seguridad deben de
representar una actitud positiva y de practica ante la población.

En cuanto a los aportes de Uribe Gómez, se descantaron los siguientes. En primera


instancia, su trabajo se dirige a la misma población que se encuentra en vulnerabilidad.
Contemplase como un referente teórico al tratar el paradigma de Derechos Humanos de
manera alterna. Ya que, contrasta la situación del sujeto, con la mejora de su situación, al
contar con personal capacitado filosóficamente desde este paradigma. Interrelacionado las
contradicciones instituciones y su condición. Dejando entre ver la complejidad del contexto
para resguardas sus derechos. Por lo tanto, consideró a la educación como agente
transformador de la realidad. Lamentablemente, la educación formal costarricense ha
demostrado la dificultad de preparar a los estudiantes para ejercer su profesión (en los
diferentes niveles organizaciones) con personas que están bajo alguna sentencia o medida
alternativa de prisión.

En este punto, apareció otro insumo teórico de cuestionar la educación no solo como
promotora de contenido. En la práctica, la transmisión de conocimientos académicos es la
preocupación de la educación formal, casi todos los esfuerzos para mejorarla se concretar
en variar el programa o el contenido. La visión de Uribe cuestiona la noción clásica. Lo cual,
se consideró un excelente aporte en el sentido de abrir un portillo en adentrarse en la función
de la instrucción en el estudiante encierro. Por ende, se consideró novedoso el presente
estudio en trabajar desde los Estudios Sociales la percepción de estudiante presidiario que
busca analizar el contexto institucional y comprender su interpretación del proceso de
educación como un derecho, no vista la labor educativa trasmisión de conocimiento.

Otro artículo de Scarfó en conjunto con Victoria Aued del año 2012, titulado El
derecho a la educación en las cárceles: aporte situacional. Profundizó sobre el eje temático
del derecho a la educación en las cárceles como derecho humano. En esta ocasión los
coautores plantearon un abordaje situacional para reflexionar sobre la educación en contexto
de cárcel. Problematizaron cómo ha sido entendida la educación en contexto de encierro
desde las teorías criminológicas y desde la educación en Derechos Humanos.

De esta manera constituyó un aporte a nivel teórico al complementar la tesis de


Norberto O. Cuya investigación recorrió la historia de la educación en el Sistema Penal
Costarricense desde el entendimiento de la teoría criminológica. No obstante, la tesis de
Norberto llegó hasta el año 2001. En esta línea, el artículo de Aued y Scarfó permite avanzar
en el tiempo y aportar a la contextualización del desarrollo de la política en materia de
educación en contexto de cárcel, al menos a nivel internacional.

El aporte del artículo mencionado, a nivel teórico-conceptual, radica en el análisis de


la educación en el ámbito penitenciario y sustenta la imposibilidad de separar el proceso
educativo del contexto en que tiene lugar. Sobre dicho tema señala:

El entorno restrictivo de la cárcel la convierte en un marco especialmente difícil para


los servicios educativos, cuya finalidad, entre otras, es permitir a las personas tomar
decisiones y, en consecuencia, asumir cierto control sobre sus propias vidas, y así lograr la
reinserción social mediante un cambio radical de conducta. Para esto habrá que promover la
autosuficiencia y la autoestima de los presos .

La cita anterior recuerda que la cárcel es un sitio acondicionadamente hostil


para el ejercicio de la educación. Sin embargo, el promover la autosuficiencia y la autoestima
son puntos en acuerdo con la presente investigación; pues no ignora el contexto político ni
ideológico a nivel jurídico. Tampoco el contexto social externo e interno del centro penal. La
metodología implementada por él y la autora quedó sin sustento. No refiere a alternativas
para el trabajo en campo, no obstante, el carácter metódico queda a un plano de propuestas
teóricas. Lo anterior dejó en evidencia la actual tendencia en esta temática. Las propuestas
metodológicas son escasas para trabajar el proceso educativo en los contextos carcelarios,
partiendo desde la postura del estudiante privado de libertad.

El artículo de Débora Cristina Fonseca Juventud, Educación y Derechos Humanos en


la Pérdida de Libertad. Reflexionó sobre el proceso de escolarización de los jóvenes privados
de libertad, desde la perspectiva de los derechos humanos. En el estudio se mencionó que
desde el Estado, las instituciones educativas y los profesores no intuyen, que la condición
humana de los jóvenes debe ser preservada. Por lo tanto, los derechos humanos en el contexto
de la privación de libertad, se consideran un respaldo en el accionar dirigido al proceso
educativo.

Sería necesaria una propuesta articulada al contexto, que posibilite la formación de


una conciencia crítica. A fin de proponer cambios importantes en la planificación de los
programas para la escolarización del joven en privación de libertad. Las autoras destacaron,
que el sistema educativo representado por sus profesores, se ha restringido a desarrollar
contenidos considerados importantes y relevantes para un grupo de educadores, así,
desconsiderando a los sujetos concretos, en el proceso educativo.

Para este diseño de investigación se considera un insumo, lo señalado por Fonseca,


Cardoso de Campos y Lustosa, con respecto a la educación como un derecho. Mencionan,
que esta se debe comprender en todas sus dimensiones y espacios educativos. Así como,
incluir la formación humana como elemento esencial. Por lo tanto, como un derecho
fundamental debe tratarse en la enseñanza escolar, lugar privilegiado para el desarrollo de la
educación. Aspecto que se retoma en este diseño, con la percepción del estudiante privado
de libertad sobre su proceso de la educación como derecho.

En este eje temático de la educación como derecho, se concluye que es imperante


valorar la manera en que se ha abordado la educación del estudiante presidiario. También,
cuestionar la formación educativa, la cual irrumpe en el desarrollo pleno y la dignidad
humana. Las fuentes consultadas denotaron su fundamentación, simplemente para capacitar
a los presidiarios en algunas áreas laborales. Al criticar esto, la corriente investigativa exhibe
un interés mayor por la teorización en temas jurídicos e indagaciones desde la posición
docente. Aún falta mucho por investigar desde la posición del estudiante privado de libertad,
por ello en esta propuesta se abocará por la percepción del estudiante en contexto de cárcel
y su educación en Derechos Humanos.

Dentro del cuarto eje temático los estudios acerca de la Educación para Adultos, se
consultaron reseñas bibliográficas interesadas en la modalidad de educación superior. Cuyos,
aportes tienden en explicar al adulto como un educando particular que presenta cualidades
de aprendizaje y dificultades únicas. Además, conceden información esencial para entender
el impacto educativo de la Universidad a Distancia y la manera en que se desarrolla en
contextos de encierro.

El artículo de Alicia Acín titulado Educación de adultos en Cárceles: Aproximando


algunos sentidos, se tomó como un primer referente para entender la educación en contextos
de encierro. Dicho estudio consistió en un análisis teórico sobre un trabajo pasado que resaltó
los significados atribuidos por parte de los presidiarios incorporados al programa
universitario de una cárcel argentina. Esto, se asemeja con el presente diseño, pues se
relaciona al participarte, contexto, modalidad y el énfasis dado a la instrucción de adultos.

Las similitudes encontradas ofrecen una serie de aportes. Por ejemplo, Alicia Acín
comprende la motivación más allá de la labor formativa. Revaloró su importancia en el
sentido que el educando presidiario se alienta en un interés por ejercer su derecho. Al inició,
la autora explicó que se originó como una búsqueda de dispersión. Sin embargo, esas
motivaciones se fueron resignificando a partir de la reconexión con el conocimiento, de las
satisfacciones encontradas en ese proceso y redescubrimiento de sus capacidades.
Por lo tanto, el presidiario como estudiante adulto ostenta a metas propias que elevan
su preocupación por lograr un nivel académico. Destinado, a afianzar una estabilidad
económica y emocional dentro de la sociedad. En un proceso educativo que se ve
influenciado por diversos componentes, tal como lo menciona Acín:

Así, el énfasis en alguno de los componentes —desarrollo personal, socialización,


corrección, instrucción— o la presencia simultánea de ellos se tornó más comprensible al
relacionarlo con las trayectorias educativas, al igual que las connotaciones que adquiere la
educación en la cárcel, en las que se ponen en juego las concepciones que circulan en el Penal
sobre la educación como derecho o como parte del tratamiento.

En ese sentido, la percepción del estudiante presidiario en la modalidad de Educación


Superior revela una madurez personal. Ya que, este valora su demanda de la educación como
derecho para mejor su condición de vulnerabilidad. Viéndose afectado según las
oportunidades en la institución. Por lo tanto, en el aporte de Acín se visualizó que el proceso
educativo del adulto dentro de un contexto vulnerable; no se puede analizar a la ligera. Pues
amerita, comprender el fundamento educativo del centro y de un componente pedagógico
que posibilita adentrarse en el contexto y la subjetiva del educando.

Un vacío metodológico del artículo de Acín, fue no mencionar su enfoque, ni


demostrar las técnicas aplicadas. A pesar de ser un ensayo científico, no expuso de qué forma
las consultas al presidiario, permitieron comprender los significados otorgados a la educación
como derecho. Se centró más en analizar el componente teórico. Dando por sentado el
abordaje del participante. Inclusive, se aludieron hallazgos en referencia a entrevistas
desarrolladas. Sin embargo, no se ajusta en ningún momento un anexo. Otra diferencia con
el presente diseño, se encuentra en el componente teórico. Se consideró pertinente analizar
la interpretación sobre su experiencia educativa y del contexto de encierro desde su
percepción. Pues, es mucho más compleja y profunda al tratar las subjetividades. Más allá,
de la categoría de socialización que omite factores cognitivos del estudiante, relacionados a
su percepción.
El articulo La educación a distancia en la profesionalización de la personas con
discapacidad y privados de libertad de Ileana Ulate Soto y Elizarda Vargas Morúa del 2012,
permitió comprender el impacto de la modalidad de Educación Superior UNED (Universidad
Estatal a Distancia) en contextos carcelarios. Sin duda, este trabajo es antecedente
bibliográfico. Puesto que, menciona una reseña histórica de la universidad, aludiendo su
evolución hasta la actualidad. A su vez, mediante dos ejemplos explica la atención
profesional y realizada a grupos vulnerables de la sociedad costarricense, tales como los
privados de libertad, entre otros.

El artículo citado aporta información esencial para analizar la modalidad en la cárcel.


Las autoras Ulate y Vargas detallan información del éxito en matricula y recursos (didácticos-
tecnológicos). También, indicaron el papel del discente durante su instrucción. La educación
de adultos se basa en las experiencias previas, capacidad, hábitos metas, actitudes y
estrategias de autorregulación y autocontrol. vDe ahí se vuelve complejo e interesante la
figura del estudiante presidiario. Ya que, este se trasforma en autodidacta. Toma la
responsabilidad de su aprendizaje y encuentra motivaciones propias para seguir
instruyéndose. Por ende, comprender su percepción del derecho implica conocer el centro
(contexto), la modalidad y su subjetividad.

De la misma línea investigativa de educación para adultos en la UNED. La tesis de


Licenciatura de Gloria Altamariano en docencia, titulada Evaluación de las estrategias de
apoyo académico y administrativo que ofrece la UNED a las privadas de libertad del Centro
de Adaptación Institucional Buen Pastor pertenecientes al programa de la UNED del 2015.
Esta, se abocó en analizar las experiencias educativas de un grupo de estudiantes femeninas.
Con respecto, al ejercicio del derecho a la instrucción en la cárcel. Aludiendo las
problemáticas vividas por estas, cuando hacen efectivo su derecho. Por ejemplo, la falta de
apoyo estatal y la infraestructura. En consecuencia, el estudio otorgó al presente diseño
investigación, conocer cómo afronta la Universidad Distancia su reto de brindar el servicio a
la población presidiario.

La tesis Gloria Altamariano se diferencia con presente diseño investigación en cuenta


a la población participarte. Se centra en participantes femeninas, a la vez, tomando las
particularidades de un centro penal dedicada a mujeres. Mientras que, este diseño valora la
educación superior con un grupo masculino. Lo anterior, cambia totalmente la situación que
vive ambos según la dinámica de la institución. Por otra parte, el trabajo posee un vacío
conceptual importante. La autora indica que metodológicamente, seleccionó el enfoque
cualitativo. Esto, permitió a la investigadora adoptar una postura investigativa, en la cual,
elementos subjetivos como los sentimientos, valores y creencias son aceptados como
elementos de análisis para producir conocimiento sobre la realidad de estudio. No obstante,
el marco teórico no se encuentra una categoría. Planteada para analizar las experiencias de
las participantes. Una carencia prevista con el referente teórico percepción del estudiante y
otras categorías propuesta más adelante.

Se concluye del cuarto eje temático Educación para Adultos, que los estudios
consultados carecen de un referente teórico idóneo para analizar la subjetividad del privado
de libertad. Además, aluden a desarrollar un estudio desde el educando. Empero, solamente
utilizan sus opiniones con el fin de indicar recomendaciones. Desaprovechan a cabalidad las
experiencias del discente, en abundar la problemáticas que afrontan. Por otra parte, el
contexto carcelario requiere categorías acertada a la hora de abundar en la dinámica
penitenciaria. Por ende, el presente diseño contempla dichas carencias pueden superarse a
nivel teórico y metodológico. Proponiéndose analizar la percepción de estudiante presidiario
sobre su proceso de educación como derecho.

El balance del Estado de lo conocido y los hallazgos encontrados según los ejes
temáticos se pueden clasificar de la siguiente manera. Sobre el primer eje percepción del
estudiante. Los trabajos consultados permitieron comprender, de qué manera se ha abordado
metodológicamente y teóricamente. Recalcando la importancia del sujeto para analizar su
conceptualización en el espacio educativo. De este modo, el grupo participante juega un papel
fundamental en la construcción de la investigación. Pues abre un ámbito para discutir y
dialogar en nuevas alternativas que puedan profundizar en las problemáticas desde su
cotidianidad. Por ejemplo, el estudio de Juan Pedro Barberá Cebolla y Agustí Fuentes, que
se adentraron en la subjetividad del discente. Con el interés de conocer el impacto de las TIC
en la institución. Lo anterior, tiene relación con este diseño de investigación, porque se pone
en evidencia que el estudiante a partir de sus percepciones, puede ser sujeto participe para el
desarrollo de su proceso de educación como derecho en un centro penal.
Por otra parte, las fuentes aportaron metodológicamente. Aludiendo como se puede
sistematizar la percepción del estudiante, utilizando instrumentos como matrices de análisis.
También, demostraron que el enfoque cualitativo, es idóneo para trabajar con grupos
pequeños. Puesto que, es un marco de compresión de los significados e interpretaciones del
discente. Por lo tanto, se reafirma el uso de dicho enfoque para el presente diseño de
investigación. El cual, permitirá adentrarse en cómo influye la percepción del presidiario en
el proceso de la educación como derecho.

Por otra parte, el segundo eje temático sobre el estudiante privado de libertad. Arrojó
el vacío, que a nivel nacional los trabajos de Educación y Estudios Sociales ninguno tuvo
interés de comprender la percepción del presidiario. Por motivo a que los programas de
Licenciatura anteriores poseyeron el afán de contribuir a otras temáticas. Empleando
unidades didácticas focalizadas en aspectos relacionados a la instrucción por ejemplo
currículum, prácticas docentes, materiales didácticos e infraestructura. Según las
observaciones del Estado de lo Conocido, las fuentes propusieron recomendaciones. Empero,
la sociedad y los programas han vivido notables cambios. Esto pone un punto crucial al
Seminario de promoción 2018-2019, de superar los vacíos y abrir nuevos espacios de
discusión investigativa. Con la finalidad, de participar en contextos vulnerables con
propuestas diferentes, a su vez integrando al grupo designado en la búsqueda alternativas de
transformación.

También se consideró pertinente mencionar los aportes de las investigaciones de


Trabajo Social, tanto a nivel nacional como latinoamericano e inclusive hispano. La
indagación de fuentes bibliográficas exhibió una gran participación de esta carrera en analizar
las problemáticas del contexto presidiario. Sin embargo, sus estudios no se concentran
primordialmente en la educación. Muchos señalaron una abierta preocupación de la
condición de vulnerabilidad de presidiario y la importancia de garantizar una educación
según sus necesidades. Lo anterior, es un portillo para este diseño de investigación. Pues
profundiza en las problemáticas, proponiendo nuevos planteamientos e involucrando al
sujeto a participar en el cuestionamiento y solución.

Por último como parte del sistema penal costarricense. Fuentes como la de Norberto
Rojas, y el Estado de la Justicia brindan insumos bibliográficos para conocer el panorama
institucional del sistema penal y el fundamento que posee la educación en dicho ámbito.
Brindando una ilustración evolutiva de la historia carcelaria nacional. En tanto, el presente
diseño explica la situación institucional del sistema penitenciario para luego detallar en el
funcionamiento del CAI y analizar cuáles son las políticas que influyen internamente.

En cuanto al tercer eje temático, educación como derecho las fuentes consultadas se
han enfocado mayoritariamente desde una perspectiva penalista distante a la investigación
en educación. Las fuentes con mayor cercanía pertenecen al ámbito internacional y aún estas
a nivel metodológico no brindan insumos importantes. La educación es un derecho y un
proceso humano que se desenvuelve a lo largo de la vida. El estudiante privado de libertad
reúne cualidades, en este sentido es necesario entender el proceso educativo de manera más
humana; para ello se debe ahondar en la percepción de los estudiantes, como contribución a
la investigación de la educación en contexto penitenciario analizada desde un enfoque
socioeducativo.

MARCO TEÓRICO

Si se contempla la educación como un proceso integral de la persona, y no como la


adquisición mecánica de aprendizajes; el panorama educativo es amplio y complejo. En este
sentido, el desarrollo integral de la persona, guía su proceso educacional adecuándose a las
particularidades y exigencias de cada estudiante. En ese sentido, el presente diseño de
investigación se formuló desde la perspectiva socioeducativa, partiendo del carácter del
seminario y la naturaleza que implica trabajar con estudiantes privados de libertad.

Por lo tanto, en este apartado se exponen y explican las principales categorías de


análisis con los cuales se sustenta la presente investigación. Asimismo, se toman en cuenta
variables sensibles que influyen en la realidad de los estudiantes privados de libertad, las
cuales dan la fundamentación teórica para comprender la problemática abordada. En este
sentido, el sujeto corresponde el primer eje temático a tratar, del cual se categorizó la
percepción del estudiante y el proceso educativo. Un segundo eje temático correspondió al
derecho a la educación, de cuales categorías se teorizó sobre la vulnerabilidad, derechos
humanos y sistema penal. El último eje temático a tratar fue el Centro de Atención Integral
(CAI) abordando las categorías de análisis: subcultura carcelaria, política carcelaria, como
también el poder.
Eje sujeto

Percepción del estudiante

La percepción del estudiante en la investigación socioeducativa atraviesa ciertas


dificultades teóricas. Su construcción como categoría requiere un trabajo minucioso que
reúne aportes interdisciplinarios de la psicología. Siendo usual la confusión a la hora de
proponerse con conceptos similares como opinión, juicio, noción, representación,
concepción, entre otros. Anticipar su complejidad en el presente proyecto, otorga un criterio
adecuado para desarrollarlo sin perder su objetivo. Es así que se subraya en cada estudio
consultado, que el planteamiento variaba según la disciplina o propuesta de investigación.
En el caso, de emplearse estrictamente en la metodología, sin requerir un fundamento teórico.
No obstante, se considera arriesgado no debatir conceptualmente sus insumos en el contexto
presidario y en el acercamiento del discente de la modalidad de educación superior.

Diversas escuelas de psicología han contribuido en conceptualizar la percepción,


ofreciendo una aproximación teórica, elementos y factores que influyen en el participante.
Donde, se destaca la aportación de la teoría Gestalt, cuya definición Gilberto Leonardo
Oviedo demarca lo siguiente, es como una tendencia al orden mental, inicialmente, la
percepción determina la entrada de información; y en segundo lugar, garantiza que la
información retomada del ambiente permita la formación de abstracciones (juicios,
categorías, conceptos, etc).1 Esta aproximación conceptual alude a un proceso intrínseco de
la persona, en el cual realiza la interpretación de la realidad cercana; detallándola a través
diferentes apreciaciones. Lo anterior afirma su carácter subjetivo, ya que puede variar según
el contexto e inclusive con la temática de estudia. Esto, va de la mano con la cotidianidad del
presidiario; poseedora de particularidades propias que difieren de un centro formar de
educación.

La teoría Gestalt plantea un vínculo cercano entre participante-contexto para analizar


la percepción. Su aporte en la psicología busca ahondar en los procesos mentales, interesada
con ahínco en la sensación corporal; por ejemplo en el sentido auditivo, visual, entre otros.
No obstante, la perspectiva teórica generaliza la interpretación del contexto y la subjetividad,

1
Gilberto Leonardo Oviedo, “La definición del concepto de la percepción en psicología”, Revista de Estudios
Sociales (Perú) 18 (agosto, 2004): p 90
lo circunscribe aspectos biológicos. Fiel a su tradición filosófica, la Gestalt plantea que en la
relación sujeto-objeto, el sujeto es aquel encargado de extraer información relevante del
objeto. Esta información rescata la estructura misma del objeto.2 De ahí se encuentra la
dificultad de trabajar desde esta perspectiva, puesto que comprende un proceso cualitativo
como un objeto. En contraste con la condición del presidiario sobre como la percepción del
estudiante privado de libertad influye en el proceso de la educación como derecho; sería
quedar corto con respecto al fin del presente diseño de investigación.

La categoría percepción del estudiante precisa acercase a estudios socioeducativos,


centrados en la subjetivada del discente. Jean Pagés evidencia la importancia dar un paso
investigado en su figura, señalando que la didáctica de las ciencias sociales ha dedicado poca
atención a la investigación sobre el alumno, sus representaciones mentales sobre la sociedad,
su influencia en el aprendizaje o los resultados del mismo.3 Por ende, el análisis de la
percepción del estudiante, es un constructo en progreso que amerita una teorización
rescatando elementos culturales y psicológicos. El cual, sobrepase en defender una opinión
o juicio en relación a una problemática. Por ejemplo, Haylen Perines y Javier Murillo en su
trabajo lo centra desde el abordaje metodológico, utilizando la fenomenografía citando
Bowden y Walsh, esta aproximación metodológica busca “identificar de forma cualitativa
las diferentes formas en que las personas experimentan, conceptualizan, perciben y
comprenden varios aspectos del fenómeno y de su mundo próximo.”4 Cuyo interés es conocer
la imagen positiva y negativa sobre la percepción de un grupo de docentes en formación. Sin
embargo, se hace un hincapié al hecho de carecer un respaldo conceptual, donde se enlace
teoría con metodología.

La psicológica conductual es otra corriente pertinente para la construcción de la


categoría percepción estudiantil. Desde la percepción social han desarrollo un constructo que
vinculado el comportamiento, estímulo y emoción, relacionando factores interpersonales. La
perspectiva teórica New Lock en percepción, otorgó al perceptor y más concretamente a sus
motivos, necesidades, expectativas y personalidad, a un papel primordial en el proceso

2
Ibid.p. 93.
3
Pilar Benejam Arguimbau y Joan Pagès Blanch. Enseñar y aprender ciencias sociales, geografía e historia en
la Educación Secundaria (España: Universidad de Barcelona, Instituto de Ciencias de la Educación, 1997). p.10
4
Haylen Perines y Javier Murillo, “Percepciones de los docentes en formación sobre la investigación
educativa” Estudios Pedagógicos (España) XLIII, n 1 (2017) p. 254
perceptivo.5 Lo anterior, se considera un avance con respecto a la propuesta Gestalt, pues la
subjetividad del participante no decae solamente en estímulos sensoriales y biológicos. De
esta manera se propone conceptualmente una profundización más cualitativa del proceso
mental que intrínsecamente desarrolla la persona colaborada; por lo tanto su análisis va más
allá de juicio u opinión.

La propuesta de la percepción como categoría compleja y teorizada, busca


fundamentar la interpretación del estudiante presidiario; con el fin de comprender como su
percepción influye en el proceso de la educación como derecho. Por otra parte, esta también
retoma contenidos de interés de la percepción del participarte, tales como sobre relaciones
(roles, redes sociales), sobre metas y objetivos que persigue y sobre los contextos, la
importancia de cada uno de estos depende del contexto, de los objetivos del perceptor, así
como la propia características.6 En ese sentido, la relación entre su cotidianidad- subjetividad
tiene rasgos propios en donde y de qué manera se desarrolla. Al mismo tiempo, se abre un
portillo en la investigación socioeducativa de valorar la subjetividad del discente para
acercase a la institución penal, viéndose como una persona capaz de cuestionar y analizar la
realidad. Lo cual, se reafirma con la siguiente aportación Luz María Vargas Melgarejo, en
relación al elemento relevante del reconocimiento de las experiencias cotidianas que es un:

(…) proceso importante involucrado en la percepción, porque permiten evocar


experiencias y conocimientos previamente adquiridos a lo largo de la vida con los
cuales se comparan las nuevas experiencias, lo que permite identificarlo y
aprehenderlas para interacción con el entorno. De esta forma a través del
reconocimiento de las características de los objetos se construyen y reproducen
modelos culturales e ideológicos que permita explicar la realidad con una cierta
lógica entre varias posibles que se prende desde la infancia y que depende de la
construcción colectiva y del plano de significación en que se obtiene la experiencia
donde esta llegaba cobra sentido. De acuerdo con los referentes del acervo cultural
lo percibido es identificado y seleccionado.7

5
Carmen Aura Arias Castilla, “Enfoques teóricos sobre la percepción que tienen las personas” Horizontes
Pedagógicos , Iberoamericana, 8, n.1 (2006) p. 13
6
Ibid,17
7
Luz María Vargas Melgarejo, “Sobre el concepto de percepción”, Alteridades, 4, núm. 8 (1994):
http://alteridades.izt.uam.mx/index.php/Alte (Fecha de acceso: 12 de agosto 2018) p. 49.
Lo acotado por María Vargas Melgarejo, introduce un nuevo elemento en la
construcción teórica de la percepción estudiantil, porque la autora, concibe a esta en el
reconocimiento de modelos culturales. Asimismo, cabe destacar que la cárcel es una
institución con dinámica cultural propia que llega incidir en la cotidianidad del participarte,
a su vez, sobre como la percepción del discente privado de libertad influye en el proceso de
la educación como derecho. También se rescata la cita textual la adquisición y contrastación
de experiencia que lleva interpersonalmente el estudiante, donde, se demuestra la capacidad
de retrotraer aprendizajes y vivencia del pasado o presente. Por lo tanto, la percepción debe
ser entendida como relativa la situación histórica-social pues tiene ubicación espacial y
temporal. 8

La condición especial del estudiante presidiario, no se postula en un escenario de


criminalización simple (castigo). Su percepción junto a otras categorías, propone un
panorama de estudio que reúne es un espacio institucional la subjetividad, dinámica cultural,
experiencias e inclusive hasta la factores que influyen en su interpretación. Esto, anima a un
acercamiento investigativo, donde sus aportes y participación, no sea meramente opiniones.
Ya que, como síntesis de la construcción de la categoría, se diseñó una referencia teórica que
reúne insumos de la psicológica que dejan entrever lo relevante de analizarla y fructífero para
los Estudios Sociales retomarla desde la figura del discente; dándole un sostén conceptual y
metodológica que fundamente ambos.

Proceso de la educación

El carácter del presente diseño de investigación comprende la necesidad de detallar


conceptos como Proceso de la Educación para poder realizar análisis más rigurosos en cuanto
a los demás conceptos y la labor educativa con los estudiantes en el centro penal. Un contexto
educativo como este, demanda hacer serias reflexiones para interpretar las diversas
situaciones de cada uno de los sujetos. Bajo esta línea Carme Arguren menciona:

Con frecuencia se desestima que el proceso educativo, además de implicar


fundamentos gnoseológicos, también compromete la formación de la conciencia
ciudadana y el conocimiento de las prácticas sociales, pues, su contextualización

8
Ibid, p. 50.
e investigación abarcan lo singular y lo global, lo establecido y lo incierto, lo
simple y lo intrincado del existir humano.9

Por lo tanto, deber ser un proceso en el cual no se circunscriba la enseñanza y el


aprendizaje a una determinada estructura de tiempo o espacio, sino que continúa
constantemente en el desarrollo del estudiante presidiario durante toda su vida. Es decir, al
salirse del esquema, el discente no se limita solo a ser instruido, sino que define su propio
proceso de la educación, al ser el mismo autodidacta, planteando su propio aprendizaje y
siendo también de una manera recíproca en enseñante de sus compañeros.

Se requieren, por lo tanto, procesos educativos que eduquen para una nueva
ciudadanía, aborden la promoción de valores, actitudes, habilidades y destrezas
necesarias para el aprendizaje continuo a lo largo de la vida, para la innovación y
la creatividad en el quehacer individual y colectivo, y para la promoción de
aspectos como: el respeto y la coexistencia pacífica en un mundo cada vez más
global. Asimismo, se debe potenciar el reconocimiento de la fragilidad de nuestro
ambiente y de la incidencia de fenómenos globales en nuestra vida cotidiana, como
parte de la toma de conciencia de que toda acción repercute en la vida de las
personas y en la de otros seres vivos. 10

La visión del Ministerio de Educación en su programa de Estudios Sociales se


relaciona con el interés de la investigación, en tanto como investigadores de esta área
educativa, existe el deber no solo como profesores, sino también como personas, de formar
a estos estudiantes presidiarios para ser ciudadanos críticos y conscientes de su medio social.
Dando a entender, la dificultad de trabajar en el ambiente tan convulso del centro educativo
penal, en el cual estos estudiantes y futuros ciudadanos están inmersos.

Por ello, el estudiante presidiario debe comprender que en su proceso educativo


dentro del centro, deben existir posibilidades de trasformación cultural y social en aras de
que sean mejores ciudadanos al momento de reinsertarse en la sociedad, adquiriendo a través
de su proceso de educación un nuevo bagaje cultural y una concepción del mundo idónea

9
Aranguren R., Carmen. Enseñar ciencias sociales en un mundo de complejidades e incertidumbres.
Reflexiones y propuestas Revista de Teoría y Didáctica de las Ciencias Sociales, núm. 19, enero-diciembre,
2013, pp. 37-47 Universidad de los Andes Mérida, Venezuela p. 39
10
Ministerio De Educación Pública. Programas De Estudio De Estudios Sociales Tercer Ciclo De La Educación
General Básica Y Educación Diversificada. (San José, Costa Rica, 2016) p. 8
para que pueda crecer como ser humano. “los procesos de cambio requieren de verdaderas
transformaciones en la forma de percibir y entender las prácticas cotidianas.” 11

Es decir, esto es importante para poder entender que en el proceso de educación, el


estudiante presidiario posee una posición importante como sujeto de cambio en una
modalidad de educación superior, esto a través del proceso educativo que actualmente brinda
el sistema educativo penitenciario.

Eje derecho a la educación

Vulnerabilidad

La vulnerabilidad visto desde una perspectiva social y educacional, es una condición


presente en la modalidad de educación superior el CAI Reinaldo Villalobos. Ante este
panorama, se convierte en una problemática que debe ser tratada. Asimismo, se visualiza
como una posibilidad para trabajar con el estudiante presidiario y plantear soluciones en aras
de realizar un cambio positivo en su situación educativa.

Según el perfil general que plantea María de los Ángeles Londoño en el Segundo Informe
Estado de la Justicia, esta población es altamente vulnerable por ser una “población joven,
obrera, con empleo informal y un porcentaje significativo de desempleo, de baja
escolaridad”12.

Por lo tanto, se toma como referencia la vulnerabilidad desde el ámbito educativo el cual
atañe a este diseño de investigación. No obstante, sin dejar de lado, la influencia que pueda
tener la vulnerabilidad en el aspecto económico o social. El término vulnerabilidad educativa
se define como el conjunto de condiciones (materiales y simbólicas, de orden objetivo y
subjetivo) que debilitan el vínculo de escolarización de un estudiante13.

11
María Inés Vázquez Clavera El enfoque cualitativo en la comprensión de los procesos de cambio en
educación. Artículo producto de la investigación. p. 12 Revista de investigaciones UNAD Bogotá - Colombia
No. 14, julio-diciembre
12
María de los Ángeles Londoño. Segundo Informe Estado De La Justicia. Raíces judiciales del
encarcelamiento: ¿Quiénes son y por qué están en prisión? 2016. p.19
13
Pansza González, Pérez Juárez y Moran Oviedo. El primer supuesto del que se debe partir en el análisis de la
escuela, es la consideración de la misma como una organización social y, en este sentido, el reconocimiento
de su historicidad. Dirección General de Cultura y Educación. 2010. P. 42
La autora Gabriela Valdebenito asevera que la “vulnerabilidad, situación que interviene
y/o caracteriza a los alumnos y a toda la comunidad escolar”14 Sosteniendo que para los
estudiantes de educación escolar básica, la vulnerabilidad toma importancia en etapas
tempranas de la educación, porque puede influir en cuanto a que:

“Se forjan las primeras experiencias como alumno, experiencias primarias que son
parte de la constitución del autoconcepto académico de los educando, que pueden
predisponer la voluntad, la motivación, como otros elementos emocionales y
psicológicos que intervienen en los proceso de enseñanza.” 15

Se concuerda con la autora, que la vulnerabilidad puede afectar el proceso educativo de


los estudiantes, en este caso el estudiante presidiario de la modalidad de educación superior,
el cual no está exento de sufrir o experimentar la condición de vulnerabilidad en el CAI
Reinaldo Villalobos. Por lo tanto existe toda una complejidad a la cual no hay que perderle
el cuidado. Es decir, pueden surgir toda una serie de problemas para que dicho proceso se
lleve a cabo de una manera adecuada.

“La noción de vulnerabilidad educativa exige dar cuenta de las interacciones entre
estas dimensiones, con particular atención a aquellos factores propiamente
escolares, que son sobre los que más directamente podemos incidir”. En este
sentido se trata de precisar cómo un conjunto de factores (sociales, institucionales
y pedagógicos) pueden generar condiciones de vulnerabilidad educativa. 16

Por lo anterior, se concierta que la Vulnerabilidad en un espacio carcelario incide en las


diversas posturas que pueda tener el estudiante presidiario sobre su educación. Lo cual, a su
vez puede repercutir en el desenvolvimiento de este en el centro penal. No se debe perder de
vista, el papel que puede jugar la Vulnerabilidad tanto en el centro penal y del centro
educativo ubicado dentro del mismo. Que a pesar de encontrar en un mismo espacio físico,
cada uno posee sus propias dinámicas con las cuales el estudiante presidiario debe convivir
diariamente.

14
Gabriela Andrea Valdebenito González Profesor de Educación Básica, una Búsqueda del Rol Profesional en
Espacios de Vulnerabilidad. (Tesis para optar al grado de Magíster en Educación, mención Curriculum y
Comunidad Educativa, Universidad de Chile, 2009) p.14
15
Ibid.p. 14
16
Pansza González, Pérez Juárez y Moran Oviedo. El primer supuesto del que se debe partir en el análisis de
la escuela, es la consideración de la misma como una organización social y, en este sentido, el reconocimiento
de su historicidad. Dirección General de Cultura y Educación. 2010. p. 45
Lo mencionado anteriormente, denota la Vulnerabilidad Educativa de un centro penal,
por el carácter de desigualdad educativa, social y cultural que presenta. En condiciones, que
en la mayoría de ocasiones no son las adecuadas. Por ende, según la UNESCO; “un sistema
educativo es de calidad cuando presta atención a los grupos marginados y vulnerables y
procura desarrollar su potencial”. 17

Con ello, para este diseño de investigación, la Vulnerabilidad es una circunstancia


para promover una educación de calidad. Donde, el estudiante presidiario reciba aprendizajes
significativos, así como la oportunidad de acceder a espacios que le permitan desarrollarse
plenamente en sus estudios y consiguientemente en su vida personal.

Derechos humanos

Para comprender los Derechos Humanos en los contextos carcelarios se dio lectura a
Francisco Scarfó. Este autor, refiere la premisa que los privados de libertad son seres
humanos sujetos de derecho. Debido a diferentes circunstancias, han tenido dificultades para
acceder a oportunidades y mantenerse alejados de los actos punitivos. Scarfó menciona que
en los Centros Penales no se les brinda una atención individualizada a los privados de
libertad, donde debiera demandarse un seguimiento de personal tanto administrativo como
docente. En este sentido la necesidad de ser escuchado tras las rejas no se satisface. Cabe
acotar que la siguiente investigación valora las vivencias del educando en el centro
penitenciario, que sin duda afronta varias contradicciones en relación a los Derechos
Humanos.

La importancia de los Derechos Humano, en la práctica educativa de los centros


carcelarios debe ser capaz de satisfacer las demandas educativas básicas de la población
privada de libertad en el sistema penitenciario. Por lo tanto, los estudiantes necesitan
formarse como actores protagónicos en la construcción de su propio modelo de educación
dentro del contexto penitenciario. Entender a los estudiantes privados de libertad es
fundamental para la práctica de una educación integral, que respalde los derechos humanos.

17
UNESCO. Educación Inclusiva. http://www.unesco.org/new/es/santiago/education/inclusive-education/.
Recuperado el día: 13 de agosto del 2018.
En aras de comprender la educación de estos estudiantes, siendo ellos los que planteen
alternativas desde el enfoque de los Derechos Humanos.

Los derechos de las personas privadas de la libertad están consagrados en diversos


instrumentos universales y regionales de Derechos Humanos. La Carta Internacional de los
Derechos Humanos apela al pleno desarrollo de la personalidad humana por medio de la
educación. No obstante, Scarfó identificó que la educación en prisión suele dársele un
enfoque de preparación para el empleo. Las competencias si bien son concebidas como
necesarias, no son suficientes para lograr el pleno desarrollo humano. Esto conlleva al
estudiante presidiario a percibir la educación en contextos de encierro como una llana
herramienta, cuya finalidad es encontrar empleo al cumplir la pena. Cuando debiera darse
todo lo contrario, la educación en el contexto carcelario entendida por el estudiante como la
opción para encontrar plena integralidad en su desarrollo personal.

Según Alexis Vegas Sánchez, jefe nacional de los servicios educativos en el 2014,
“los Derechos Humanos en función a la educación son un derecho inalienable para las
personas, independientemente de su condición (o estatus vinculado a la justicia penal). Sea
éste económico, social, político o de libertad de tránsito”. Lo cual, desde una perspectiva
educativa es indispensable y prioritario. La importancia de entender la educación como
derecho humano fundamental. No radica exclusivamente en la no violación de los mismos.
Sino, la importancia se torna en el ejercicio de estos. Pues, como alude Francisco Scarfó, la
educación pública en las cárceles es ante todo un derecho humano y tiene como fin el
desarrollo integral de la persona.

Sistema penal

La categoría: Sistema Penal es importante abordarla para entender el rol que cumple
el sujeto (estudiante privado de libertad) dentro del sistema. Roberto Bergalli se interesan por
la figura del encarcelado (delincuente) como sujeto de derechos. Para entender el sistema
penal este autor apunta que debe ubicarse en el contexto social. Por otra parte, Michael
Foucault indica que el sistema penal se compagina con la sociedad actual. Constituye un
legado de los “actuales Estados democráticos de derecho, tanto por su orden constitucional
como por el jurídico-penal, procesal y penitenciario y por sus instancias de aplicación
(policía, jurisdicción e instituciones penitenciarias)”18.

La cárcel se entiende en el presente diseño de investigación como el espacio para el


castigo en secreto. “Este consistirá en una serie de técnicas de coerción de los individuos,
gracias a unas prácticas de sumisión del tiempo y de los cuerpos”19. “La privación de libertad,
es el elemento principal que justifica la existencia y sofisticación de los sistemas
penitenciarios”20. El propósito de la prisión ha variado con el transcurso del tiempo
acoplándose a los cambios coyunturales. Así pues, “los sistemas penitenciarios se crean como
sustitutos de la pena de muerte, la deportación y los castigos corporales, tendiendo a
constituirse en sanciones penales humanitarias”21. De este modo, el encarcelamiento en
nuestros días corresponde a un castigo, que mediante el confinamiento el privado de libertad
reflexione sus hechos delictivos que lo llevaron a prisión.

El sistema penal con el encarcelamiento pretende la rehabilitación y la reintegración


del privado de libertad en la sociedad. Desaprender y aprender llegan a constituir parte
importante de la experiencia educativa para cumplir con las expectativas de la rehabilitación
y demostrar ser apto para la reintegración en la sociedad. Ante esta realidad, el sistema penal
ha venido dando respuestas parciales y educativas como promover la “conclusión de estudios
primarios, secundarios. Con el apoyo de la Universidad Estatal a Distancia se promueve la
conclusión de los Estudios Generales y el ingreso a algunas carreras universitarias”22.

Esta alternativa para los privados de libertad debe estructurarse y organizarse como
una educación reflexiva, rehabilitadora y autocrítica. En este sentido el sistema penal necesita
apelar a un modelo educativo que contemple el desarrollo integral del estudiante y aspectos
prácticos como la capacitación y actualización de los docentes, la metodología de aula, la
creación de un marco curricular, pero ante todo, un modelo educativo que entienda al

18
Roberto Bergalli, “¿Qué se controla: individuos o el propio sistema penal?”, Biblioteca Juridica Virtual del
Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. https://revistas-
colaboracion.juridicas.unam.mx/index.php/critica-juridica/article/download/3133/2933 (Fecha de acceso:
15 de agosto 2018). 25
19
Ibid.
20
Norberto Rojas Coronado, La organización educativa en las cárceles de Costa Rica: análisis y propuesta.
(Tesis Maestría en Administración Educativa, Universidad de Costa Rica, 2001), 26.
21
Ibid.
22
Ibid., 5
estudiante como el constructor y desarrollador de su propio conocimiento. La idea de la
educación como mecanismo rehabilitador pertenece a la tradición positivista, “este tipo de
modelo de atención pretendió que el privado de libertad contara con la atención técnica
especializada, según las necesidades de los mismos, destacando las disciplinas profesionales
para ello”.23 No obstante, la educación de corte positivista dicta lo que es útil aprender para
reinsertarse a la sociedad normal. Sin embargo, la educación puede ser rehabilitadora cuando
brinda las herramientas cognitivas para conocer lo que se está aprendiendo.

Los sistemas penitenciarios, son complejos en su dinámica. El privado de libertad “no esta
fuera de la ley ésta en el corazón mismo de la ley. Si bien es cierto que la prisión sanciona la
delincuencia, ésta, en cuanto a lo esencial, se fabrica por un encarcelamiento que la prisión
prolonga”24. Es un mundo complejo de significados en el que interactúan dos grupos
humanos definidos; el primero compuesto por la población encarcelada. Y el segundo grupo
compuesto por los funcionarios de seguridad encargados de la estabilidad de los centros, los
administrativos que realizan las tareas burocráticas y los técnicos y profesionales que tienen
la responsabilidad de desarrollar los programas de atención de la población penal. Cada grupo
desarrolla su propio mundo de significados, en cada mundo existen relaciones de poder, unas
más visibles otras indescifrables. “En conjunto determinan el tipo de sistema penal, que se
desea impulsar, unos más próximos al cumplimiento de los Derechos Humanos, otros, por
lógica más cerca de violar esos mismos derechos”.25

Eje temático: CAI

Política carcelaria

La política carcelaria para el caso de este diseño de investigación es en el ámbito


educativo costarricense, es aquella que promueve el sistema judicial. Cuyo fin es, que los
privados de libertad; que por diversas razones hayan -o no- concluido sus estudios opten por

23
Margarita Arce Navarro, Dinamicas de Poder/Violencia en un Centro Penal del Sistema Penitenciario
Costarricense: el ca del Centro de Atención Institucional San José 2009-2014 (Tesis para optar por el grado de
Licenciatura en Sociología, 2016), 52
24
Michel Foucault, Vigilar y Castigar: nacimiento de la prisión (México: Siglo xxi editores, 2009), 352.
25
Norberto Rojas Coronado, 26.
poder terminar y continuar su educación y así tener una llave más en su vida que le
beneficiara a la hora de reincorporarse a la sociedad una vez cumplida su sentencia.

Por lo tanto, puedan optar para que se le facilite el conseguir un empleo y no vuelvan
a reincidir en otro delito. Este “El Sistema Carcelario” le brinda una gama de oportunidades
a los privados en donde pueden optar por comenzar, continuar y concluir sus estudios desde
la primaria hasta la universitaria con la Universidad Estatal a Distancia (UNED) e incluso en
algunos centros de atención integral se brindan hasta cursos técnicos impartidos por el
Instituto Nacional de Aprendizaje (INA). De este modo, cumpliendo con el derecho a la
educación. Es decir, se hace hincapié en que el individuo o persona que se encuentra dentro
del sistema cumpliendo una sentencia se le brinda, todos los derechos y deberes como
persona siendo solamente el derecho de libre tránsito por el territorio nacional el que se le
fue denegado, con ello facilitándole un posible empleo y a la vez su superación personal y
así no volver a incurrir en otro delito una vez reincorporado a la sociedad.

Se concuerda con el documento del Ministerio de Justicia y Paz de la República de


Costa Rica, documento Política Penitencia de Costa Rica, en su eje de educación donde
menciona:

Establece las condiciones necesarias para que la persona que cumple una sentencia
privativa inicie o continúe su educación dentro del centro penitenciario u otro
programa. Sea esta educación formal, informal o técnica. El Estado debe
garantizar la incidencia del Ministerio de Educación Pública, el Instituto Nacional
de Aprendizaje, colegios, universidades, entre otros. 26

El estudiante presidiario visualiza la educación en el Sistema Carcelario como una


posible ayuda y lo hace el de estudiar solo con dos fines: uno con el fin de poder pasar el
tiempo ocupado en alguna actividad sin mayor preocupación e interés alguno incluso no lo
hacen y el segundo fin lo hacen para poder obtener un posible beneficio o ayuda con su pena
por ejemplo se dice “que si un privado de libertad estudia, trabaja eso le ayuda para su libertad
condicional o cualquier otra ayuda como por ejemplo un cambio de ámbito a otro de menor

26
p Ministerio de Justicia y Paz de la República de Costa Rica. Política Penitencia de Costa Rica. P. 60
contención, además de son bien vistos por los funcionarios y funcionarias del Centro
Penitenciario” en el cual se encuentra ubicado.

“La educación en centros penitenciarios conforma un escenario altamente


complejo, generado por múltiples tensiones que se derivan, entre otras cuestiones,
de la articulación entre dos sistemas con marcos normativos diferentes: el sistema
educativo y el sistema penitenciario”. 27

Desde el punto de vista de los investigadores, la educación en el Sistema Carcelario


del país debe ser de carácter obligatorio sin importar la condición social de la persona que
ingrese al sistema carcelario. Pues, en consideración, aproximadamente un 90 por ciento de
las personas que salen de su condición de privación de libertad, se le va a dificultar su
ubicación laboral afectando su superación personal en todos los ámbitos tanto sociales como
culturales.

Con mucho más razón, en el ámbito económico, siendo este el principal eje en el
ámbito familiar y que constituye uno de los aspectos por el cual muchas veces conlleva a
que un individuo o persona reincorporada vuelva a delinquir, y cuya recomendación de las
personas ex privadas de libertad es, que una vez que haya concluido sus estudios o educación
básica también se le brinden oportunidades de realizar estudios de carácter técnico como por
ejemplo Electricidad industrial o residencial, mecánica de toda índole, o cursos como
ebanistería, tapizado de muebles etc;

De esta manera, esta política educativa carcelaria, es un medio facilitador para que en
el caso de no poder volver a reincorporase laboralmente en una institución o empresa pueda
optar por un trabajo que le ayude a superarse personalmente dentro de la sociedad.

Subcultura carcelaria

Cuando se hace un acercamiento a la institución carcelaria. Muchas de las situaciones


sociales que acontecen y se desarrollan, son ajenas al investigador. Por lo tanto, es necesario
plantear una categoría análisis capaz de fundamentar la dinámica que viven los presidiarios
diariamente. Por ejemplo, teóricos como María Teresa Montes de Oca y Arturo Silva

27
Blazich, G., De Milén, S. & Viedma, A. (2007). La educación en establecimientos penitenciarios argentinos:
estudio de algunas cárceles de las ciudades de resistencia y corrientes. Revista digital. 1. Pp. 1-25. Instituto de
Investigaciones en Educación, Facultad de Humanidades, Universidad del Nordestes, Argentina. P. 3
Rodríguez, mencionan que alternamente las interacciones interno-interno, interno-personal
penitenciario, personal penitenciario-dirección y dirección- interno, así como el
hacinamiento han ocasionado de una organización tipo informal (en cuanto no están
registrados en los reglamentos penitenciarios).28 Ambos autores dilucidan una comunicación
entre los miembros presentes en el centro, lejana a una norma reglamentaria. A pesar, de ser
un espacio conflictivo y cerrado, el presidiario se relaciona en la medida de lo posible para
sostener su persona dentro del penal. Lo anterior, se engloba dentro una perspectiva
funcionalista.

La subcultura carcelaria desde una apreciación funcionalista, se concibe como un


escudo emocional. Una consideración importante, es que tal tipo de subcultura tiene como
finalidad neutralizar el dolor del encarcelamiento como todo sistema que promueven medios
para hacer presente su funcionalidad.29 Ya que, no se puede omitir que la condición del
presidiario median aspectos institucionales como la autoridad, protocolos, vigilancia,
invasión a la privacidad, vulnerabilidad, entre otros. Además, los largos periodos de estancia,
la desconexión con el mundo exterior, el radical cambio de modus vivendi de la calidad de
vida deben conllevar una necesaria trasformación de valores de concepciones, de
expectativas que posibilite un mínimo equilibrio psicológico.30 De esta manera, el privado
de libertad busca modos para superar y encarar su condición. Estando alerta en defender su
bienestar. El cual, depende de sus relaciones entre pares, personal administrativo, familiares
(visitas) e inclusive docentes.

La perspectiva funcionalista es clave para aproximarse a una categoría análisis


idónea. No obstante, delimitar la subcultura carcelaria a una noción de supervivencia, omite
criterios teóricos abonados por otros autores. Josep García- Bores Espi menciona los aportes
de Clemmer, distantes a la visión determinista de trabajos funcionalista. Preocupado con
intensidad en la dinámica interior. Advirtiendo Clemmer lo siguente:

28
Arturo Silva Rodriguez, Conducta antisocial: un enfoque psicológico (D.F, México: Editorial Pax México,
2003). p 282.
29
Ibid.p. 283.
30
Josep García- Bores Espi, “La carcel” en: Patios abierto y pastion cerrados psicologia cultural de las
instituciones, (eds.) Ángel Aguirre Baztán y Alvaro Rodríguez Carballeira (Barcelona, España: Editorial Boxareu
Marcobo, 2003) p. 99.
Desde este planteamiento general, las investigaciones reflejan fundamentalmente
aquellas pautas internas o modos de pensar (concepciones, creencias) y valores
que, en mayor o menor medida, van a estar sustentando las actitudes y los
comportamientos. En cuanto a las pautas externas, o modos comportamentales, las
investigaciones sólo acostumbran a reflejar aquéllas con un claro carácter
normativo, en lo que se denomina código del recluso, dejando de lado los usos y
las costumbres, en los que se incluye también el argot, que están raramente
descritos, a no ser como meras ilustraciones. 31

Por lo tanto, el presidiario no se encuentra sumiso únicamente en una normativa


informal – un código- que debe cumplir entre sus pares para sobrellevar su pena. La
subcultura carcelaria no se delimita a comprender las normas de coexistencia. Puesto que,
hay expresiones cultures como el habla y costumbres que a pesar, de no ser señalado
puntualmente por los autores, se trasladan y se representan en el desarrollo educativo del
privado de libertad. Clemmer, analizado por Josep García- Bores Espi, añade que durante su
encierro el privado vive un proceso de transformación de valores. El cual, consiste en la
asimilación de la subcultura carcelaria. También, agrega desde una óptica causal, consideró
que el origen y el mantenimiento de la cultura carcelaria residen en las características del
sujeto recluso, tanto por su antiguo ambiente y carrera criminal, como por su contacto con
otros presos y vida de los mismos, dando así una interpretación que englobaría a las dos
anteriores.32 Dicha, observación sobrepasa el sentido funcionaste. Individualizando la
experiencia que comprende la adaptación y convivencia; es vivida de forma diferente según
la persona.

La subcultura carcelaria analizada de manera individualizada, permite un referente


teórico para adentrarse a la dinámica cultural del contexto institucional. Además, se vincula
a la interpretación del presidiario, con respecto a su percepción del proceso de la educación
como derecho. En ese sentido, existen otros aspectos que se pueden tratar desde esta
categoría, pertinente a la experiencia del privado de libertad. El académico Josep García-
Bores Espi realiza una contribución valiosa, explicando la noción de espacio carcelario y
tiempo. Sobre el primero indica que este no puede inhibirse de su condición de espacio de

31
Josep García- Bores Espi, “El impacto carcelario” en Sistema penal y problemas sociales, (ed.) Roberto
Bergalli (Valencia, España: Tirant lo Blach, 1995). p 397.
32
Ibid, 398.
reclusión, definiendo físicamente los drásticos límites de liberta de movimiento, y
simbológicamente haciendo omnipresente la condición de vida a que se está sometido.33

No se puede prescindir del objetivo del centro penal; ejercer un control administrativo
e infraestructural sobre el presidiario. Evitando así que se atente en contra de la seguridad de
la institución, debido a pleitos, fugas, ventas de drogas, entre otras situaciones fuera de la
normativa. Lo anterior, es percibido por el privado que lo vive diariamente, siendo un
detonante emocional marcado. Aunque, el área educativa en ocasiones, le permite aprovechar
el cumplimiento de la pena, elevando su nivel profesional o simplemente como distracción.
Por ende, el estudiante presidiario dentro del penal, moviliza su percepción del dormitorio al
espacio educativo. De ahí que la subcultura carcelaria se hace más visible con la
personalidad, costumbres e interpretaciones de su percepción del proceso de la educación
como derecho.

El tiempo, se contempla como un segundo aspecto de valor en relación a la subcultura


carcelaria. Cuya relevancia es planteada en dos sentidos: la distribución de tiempo a lo largo
del día, que define la cotidianidad y tiempo que se constituye en un elemento central en la
experiencia psicológica de los reclusos.34 El presidiario en su condición, se ve sometido a
cumplir un protocolo institucional. Donde se enmarcan el horario de comida, atención
médica, cursos de trabajo social, llamadas telefónicas y de sueño. Su incumplimiento aguarda
consecuencias e inclusive el impedimento de no ejercer un derecho; por ejemplo la
alimentación. Por otra parte, la cantidad de años por descontar, se vuelve un
condicionamiento de presión. El estudiante privado de libertad también posee fijaciones e
intereses en el exterior –el caso de la familia u otras- que repetitivamente inciden la
percepción del proceso de la educación como derecho.

La subcultura carcelaria hace referencia a otro proceso cultural conocido como la


criminalización. Los largos periodos de encierro, exige al presidiario convivir con internos
de diversos contextos y diferente condenas. María Teresa Montes de Oca y Arturo Silva
Rodríguez explican que –las prisiones- reúnen a personas que están margen de la ley en
grupos fuertemente segregados y les dan oportunidad de enseñar a otros las habilidades y

33
García- Bores Espi p. 95.
34
Ibid. p. 96.
actitudes de una carrea desviada.35 Sin caer, en el determinismo que todos los privados se
transforman en criminales o personas violentas al interactuar entre internos, no se puede
omitir el hecho, lo complicado de evitar confrontaciones dentro un espacio conflictivo. Dado
que, dentro un pabellón, concurren personas que acarrean distintos problemas emocionales,
delictivos y personales. Por ende, el estudiante tiene vicisitudes en su desarrollo educativo,
las cuales, influyen en su percepción del proceso de la educación como derecho.

Para el presente diseño de investigación, se concluye que la categoría subcultura esta


propuesta como componente teórico, pues ofrece comprender y analizar la dinámica social
presente en la cárcel. Aspecto relevante en el sentido de aproximarse a procesos culturales
vividos por el presidiario que se movilizan al espacio educativo e influye en su percepción
del proceso de la educación como derecho, un planteamiento que sobrepone la visión
funcionalista de supervivencia. Por otra parte, la individualización de la subcultura carcelaria,
profundiza en la interpretación del participarte sobre el contexto institucional y convivencia.
Vinculando como la percepción del estudiante privado de libertad influye en el proceso de la
educación como derecho.

Poder

Los Centros de Atención Institucional corresponden a una estructura de poder subordinada


al Estado. Estas instituciones funcionan bajo una estructura vertical de poder legitimado.
Donde el uso de la fuerza tanto física como ideológica se impone con el fin de ejercer la
autoridad. De este tema ya se ha ocupado M. Foucault, teórico importante para el presente
diseño de investigación. Dicho autor indagó en el desarrollo del poder ejercido por las
instituciones carcelarias, sus aportes aun significan y tienen relación con la
contemporaneidad. Por ello, puede entenderse el poder que faculta al CAI Reinaldo
Villalobos de forma práctica para operar bajo la lógica carcelaria, la siguiente cita ilustra el
poder que ejerce la prisión sobre el sujeto preso:

“La forma-prisión preexiste a su utilización sistemática en las leyes


penales. Se ha constituido en el exterior del aparato judicial, cuando se
elaboraron, a través de todo el cuerpo social, los procedimientos para

35
Silva Rodriguez y Montes de Oca , 284-285.
repartir a individuos, fijarlos y distribuirlos espacialmente, clasificarlos,
obtener de ellos el máximo de tiempo y el máximo de fuerzas, educar su
cuerpo, codificar su comportamiento continuo, mantenerlos en una
visibilidad sin lagunas, formar en torno de ellos todo un aparato de
observación, de registro y de notaciones, construir sobre ellos un saber
que se acumule y se centraliza”.36

La cárcel ejerce una misión represiva que se encuentra avalada por leyes y reglamentos,
asignándose un rol de prevención y protección a los miembros que conforman la sociedad
civil. “la prisión ha sido desde el comienzo una ‘detención legal’ encargada de un suplemento
correctivo, o también, una empresa de modificación de los individuos que la privación de la
libertad permite hacer funcionar en el sistema legal”.37 Siguiendo a Foucault la cárcel se
encuentra inmersa en una red de instrumentos y mecanismos sometidos a un “poder
disciplinario, que se debe en efecto al uso de los instrumentos simples: la inspección
jerárquica, la sanción normalizadora y su combinación en un procedimiento que le es propio:
el examen”38. La siguiente cita esclarece la finalidad de la cárcel:

“La prisión no ha sido al principio una privación de libertad a la cual se le


confiriera a continuación una función técnica de corrección; ha sido desde
el comienzo una “detención legal” encargada de un suplemento
correctivo, o también, una empresa de modificación de los individuos que
la privación de libertad permite hacer funcionar en el sistema legal. En
suma, el encarcelamiento penal, desde el principio de siglo XIX, ha
cubierto a la vez la privación de la libertad y la transformación técnica de
los individuos”.39

Así pues, la prisión moderna se constituye en una forma consumada de lo que Foucault ha
llamado “sociedades disciplinarias”, rige la idea del panóptico de Bentham. Donde la mayor

36
Michel Foucault, Vigilar y Castigar: nacimiento de la prisión (México: Siglo xxi editores, 2009), 265.
37
Margarita Arce Navarro, Dinamicas de Poder/Violencia en un Centro Penal del Sistema Penitenciario
Costarricense: el ca del Centro de Atención Institucional San José 2009-2014 (Tesis para optar por el grado de
Licenciatura en Sociología, 2016), 49.
38
Michel Foucault, 199.
39
Ibid., 267
parte de los miembros de la sociedad; y en el caso de, los privados de libertad, obligados a
vivir dentro de los muros, se ofrecen como espectáculo para los menos: guardas y oficiales
de seguridad encargados de hacer guardar la disciplina. En este sentido, “se pretende ya no
tanto de castigar retributivamente al infractor por el hecho cometido, sino que el castigo
prevenga el surgimiento de imitadores del infractor como evitar la reincidencia de la conducta
delictiva”40.

La ‘sociedad disciplinaria’ pretende funcionar como un aparato de control semejante a un


microscopio donde pueda verse todo el individuo y su conducta. “La vigilancia pasa a ser un
operador económico decisivo, en la medida en que es a la vez una pieza interna en el aparato
de producción y un engranaje especifico del poder disciplinario”.41 La sociedad de la
vigilancia contemporánea “persigue el adiestramiento minucioso y concreto de las fuerzas
útiles”.42 El corregir o reeducar, surge como propósito de reconstruir un sujeto económica
mente productivo. En este sentido, las penas en prisión ofrecen la posibilidad de encauzar en
un proceso de aprendizaje a los privados de libertad. De esta forma el sistema penal obtiene
una utilización económica de los delincuentes corregidos. “Con esta nueva economía del
poder, el sistema carcelario que es su instrumento de base ha hecho valer una nueva forma
de “ley”: un conjunto mixto de legalidad y de naturaleza, de prescripción y de constitución,
la norma”.43

Entendiendo el poder que ejerce la cárcel como control social, puede denotarse el uso de las
leyes de manera sistemática en contra de los sectores sociales vulnerabilizados. “Pero el
efecto más importante quizá del sistema carcelario y de su extensión mucho más allá de la
prisión legal, es que logra volver natural y legítimo el poder de castigar, de rebajar al menos
el umbral de tolerancia a la penalidad”.44 La institución carcelaria establece claramente sus
relaciones de poder, impone su ritmo y su visión de mundo. En este sentido el poder que
ejerce la institución carcelaria en el entorno social, puede verse en la siguiente cita:

40
Norberto Rojas Coronado, La organización educativa en las cárceles de Costa Rica: análisis y propuesta.
(Tesis Maestría en Administración Educativa, Universidad de Costa Rica, 2001), 47.
41
Michel Foucault, 205
42
Ibid., 250
43
Ibid., 355
44
Ibid., 308
“El tejido carcelario de la sociedad asegura a la vez las captaciones reales
del cuerpo y su perpetua observación; es, por sus propiedades intrínsecas,
el aparato de castigo más conforme con la nueva economía del poder, y
el instrumento para la formación del saber de que esta economía misma
necesita. Su funcionamiento panóptico le permite desempeñar este doble
papel. Por sus procedimientos de fijación, de distribución, de registro, ha
sido durante largo tiempo una de las condiciones, la más simple, la más
material también, pero quizá la más indispensable para que se desarrolle
esa inmersa actividad de examen que ha objetivado el comportamiento
humano”.45

De esta manera el presente diseño de investigación entiende el poder de la institución


carcelaria de dos maneras entretejidas: en primer lugar, un poder manifiesto en la estructura
destinada a privar la libertad; y en segundo lugar, un poder invisible a disposición de la
sociedad disciplinaria, “el Panóptico es una máquina maravillosa que, a partir de deseos de
los más diferentes, fabrica efectos de poder homogéneos” en los individuos que observa para
mantener el estándar de la normalidad social.

Marco Metodológico

En el siguiente apartado, se desarrollará el referente metodológico del presente trabajo de


graduación. Aludiendo el paradigma, enfoque, tipo de investigación y a la vez los
instrumentos-técnicas que se empleará en el acercamiento del grupo participarte. Cada uno
se analizará explicando su correspondencia al contexto y estudiante presidiario; indicándose
de que manera contribuye en el sustento metodológico.

Paradigma-Naturalista

La particular condición del estudiante presidiario incita metodológicamente, analizar la


problemática desde el naturalismo. Cuya finalidad manifiesta Rodrigo Barrantes, indica que
es comprender e interpretar la realidad, los significados de las personas, percepciones,

45
Ibid., 350
interacciones y acciones.46 Dicha afirmación reconoce el carácter subjetivo del paradigma,
donde se destaca posicionarse mediante del participarte. Sin determinarlo a responder
intereses del investigador, visto como un simple reproductor de datos. Lo cual, se
correlaciona con el problema del trabajo, sobre de qué manera la percepción del estudiante
privado de libertad influye en proceso educación como derecho. Ya que, el estudiante
presidiario posee una percepción propia del contexto y las contradicciones afrontadas durante
su reivindicación del derecho a la instrucción superior que no puede ser inoculada.

Interpretar la subjetividad del estudiante presidiario compromete al grupo de estudio no


alterar su percepción. El paradigma naturalista propone que el mundo sea estudiado en su
"estado natural", sin manipulaciones ni por parte de la investigadora ni del investigador.47
Por lo tanto, este defiende el aporte científico del privado de libertad, mostrando su voz como
participarte, capaz de expresar su diario vivir con criterios fundamentados Y a su vez,
fortalece la sensibilidad investigativa para acercarse a un discente en una condición difícil
que buscar reguardar su derecho a la educación.

Enfoque- cualitativa

La principal razón de seleccionar como enfoque el cualitativo, obedece a la idoneidad de


abordar un grupo pequeño de tres personas. Este se plantea que los investigadores se
aproximan a un sujeto real, un individuo real, que está presente en el mundo que puede en
cierta medida, ofrecernos información sobre sus experiencia, opiniones, valores, etc…48 A
fuer de de profundizar en la subjetividad del estudiante presidiario, sin cuantificar y
generalizara su percepción. Lo anterior, tiene sentido en la relación sujeto-objeto, donde se
prioriza el sentir y condición del participarte, más allá de ser un dato puntual. Sobre esto
Guardián concuerda que el sujeto es una acción y una conciencia porque al ser constructor y
productor del mundo elaborara y re-elabora, desecha cada día construcción subjetivas de ese
mundo en cual vive. 49

46
Rodrigo Barrantes, Investigación un camino al conocimiento: Un enfoque cuantitativo y cualitativo (San
Jose, Costa Rica: EUNED, 2000), 61.
47
Gurdián, 159.
48
Carlos Arturo Monge, Metodología de la investigación cuantitativa y cualitativa, Guía Didáctica (Colombia:
Universidad Surcolombian, 2011), 32.
49
Guardián, 108.
Por otra parte, el enfoque cualitativo precisa de técnicas e instrumentos enfocados en tratar
la subjetividad del participante. Este es idóneo para analizar y sistematizar la percepción
estudiante presidiario, además, el hecho de tener, claro nuestro problema y lo que pretende,
conduce a la elección de la técnica adecuada: entrevista, observación, encuestas,
documentos.50 Su aplicación e interpretación va la de mano del planteamiento investigativo
que permitirá desarrollar las interrogantes propuestas. Donde los fines previstos, no
persiguen datos cuantificables. También se resalta que posee una validación científica con
un referente metodológico reconocido, por ejemplo la triangulación.

Tipo de investigación-etnografía

Bibliografia

Monge Carlos Arturo, Metodología de la investigación cuantitativa y cualitativa, Guía Didáctica


(Colombia: Universidad Surcolombian, 2011)

Abero Laura, Berardi Lilian, [et. Al.], Investigación Educativo, Abriendo Puertas al conocimiento
(Montevideo, Uruguay, 2015)

Barrantes Rodrigo, Investigación un camino al conocimiento: Un enfoque cuantitativo y


cualitativo (San Jose, Costa Rica: EUNED, 2000)

50
Laura Abero, Lilián Berardi, [et. Al.], Investigación Educativo, Abriendo Puertas al conocimiento
(Montevideo, Uruguay, 2015), 147.

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