1
--La unidad de explotación ovina: los estancieros organizaron su empresa apoyándose en la disponibilidad de tierra
abundante, estableciendo un sistema productivo basado en la incorporación y el uso extensivo de ese recurso. El
desarrollo de la ganadería vacuna y mas tarde la ovina, condujo a un esfuerzo sistemático por parte de estado para
asegurar la apropiación y la incorporación al uso productivo de todo el territorio de la pcia. de Bs. As. Se promovió la
consolidación de la propiedad privada, la transferencia de la tierra publica en manos privadas y la expansión de la frontera
a través de exterminación de los indígenas. La cría de ovejas condujo a la expansión efectiva de la mayor parte del
territorio. Aunque el latifundio predominante en las décadas anteriores fue disminuyendo, sin embargo hubo una
prevalencia de las explotaciones tierra – extensivas. Ello se explica, mas halla de la distribución inicial, por el patrón de
acumulación de la etapa lanar que incluía esta peculiar utilización del factor tierra.
En efecto las condiciones para la expansión de este tipo de explotaciones era la disponibilidad de recursos:
-tierra y animales: durante las dos primeras décadas pudo obtenerse a muy bajo precio.
-trabajo y mano de obra: trabajadores asalariado y mano de obra familiar.
La empresa lanar produjo transformaciones en la estructura de la producción ganadera al disminuir la extensión de los
predios, introducir el alambrado y aumentar la variedad de tareas rurales. Innovaciones tecnológicas. Se requerían
mayores brazos que el vacuno. Pero lo que realmente afecto fue el crecimiento del rebaño en pocos años.
Los cambios no solo fueron cuantitativos sino también cualitativos: la producción de lana exigió el ejercicio de nuevos
oficios y de ciertas técnicas desconocidas. La organización interna de la estancia se hizo más estricta: era necesario
cumplir con el calendario. También se impuso un diferente ritmo a las tareas: la aparición, la esquila, los rebaños
requerían cuidados diariamente. En consecuencia generó una demanda estable de mano de obra todo el año, con picos
estaciónales en el periodo de esquila. Para atender a la demanda de mano de obra, la oferta se constituyó con la
inmigración, trabajadores locales y con el trabajo familiar. Hacia fines del 40 llegaron, irlandeses, escoceses y vascos.
Dentro de la mano de obra, se distinguían el trabajo asalariado, la aparcería y el trabajo familiar. Con respecto al 1º, se
requería una gran cantidad de trabajo estacional, por la esquila. Los salarios en la década del 60 fueron florecientes y se
incrementó en la siguiente. La guerra del Paraguay, las epidemias del cólera y la fiebre amarilla, el reinicio de las
campañas contra los indígenas continuaron sustrayendo mano de obra, y contribuyeron a mantener el nivel de los salarios
en el largo plazo, a pesar de las fluctuaciones de la actividad pecuaria. Se permitió una especie de movilidad: algunos
alcanzaron una especie de autonomía laboral, la aparcería, arrendatarios y luego propietarios. Pero esta posibilidad se fue
perdiendo en los 60 debido a que ele precio de la tierra aumento y en relación al costo del total para la instalación de una
explotación. Por lo que la importancia de la posesión del animal perdía importancia frente al papel creciente de la tierra.
Los ovejeros farmers se expandieron por Bs. As. durante la década del 60 y hasta entrada la siguiente, si bien adoptaron
un papel complementario y secundario en la producción. Con la mayor complejidad de la organización productiva y la
incorporación de la fuerza de trabajo de origen europeo que acompañaron a la expansión de la cría del ovino, la familia se
convirtió en una pieza esencial del orden económico y social. Garantizaba la producción y la reproducción de la mano de
obra familiar.
Existían 2 tipos de unidades productivas: la estancia y la explotación familiar. Las 1º eran empresas capitalistas que
producían para el mercado, empleando trabajo asalariado pero combinando con otras formas (aparcería) y cuyo objetivo
era la acumulación. Las explotaciones familiares también producían para le mercado pero eran empresas que descansaban
en la utilización de la mano de obra fliar. Buscando la reproducción y la expansión de la empresa. (No son campesinos
autosuficientes).
En cuanto al nivel de acumulación, el tamaño del las unidades las hacia muy vulnerables a los riesgos de producción y
comprometía las ganancias. Otros impedimentos fueron los sistemas financieros y de comercialización que se empleaban,
especialmente la acción de los intermediarios y la excesiva dependencia de los proveedores de capital.
Las explotaciones familiares prosperaron en las décadas de 1850 y 1860, pero las transformaciones que experimentó la
estructura agraria en los últimos años del siglo afecto de manera decisiva estas unidades. Las utilidades decrecientes de la
actividad pastoril, el interés en nuevos rubros productivos y el alza de los precios de la tierra, llevaron a usos alternativos.
Los farmers tuvieron que optar por dejar sus campos o convertirse en chacareros.
En lo que respecta a la estructura del capital, las tierras y ganados representaban el grueso del capital invertido; ambos se
incrementaron a lo largo de los años, pero la tierra lo hizo a un ritmo mucho mayor que los animales. En el 1º periodo de
expansión, hasta la crisis de `60, las inversiones fueron la introducción de reproductores merinos, la provisión de
herramientas y la compra de tierras. Los fondos para inversión era externos al sector lanero, por que se generó un flujo de
capitales desde otros sectores de la economía hacia la nueva rama de expansión: el comercio y la ganadería vacuna.
También se usaron recursos internos del sector: las ganancias de las ventas de la producción, el incremento natural de los
rebaños y la capitalización de la tierra. Las inversiones en capital fijo representaban una proporción menor de gastos, sin
embargo su importancia relativa se incremento en `70 y `80, sobre todo debido a la introducción de materiales más caros
para la construcción. Los fondos provenían tanto de la actividad pastoril, como de otros sectores de la economía. El
capital externo provenía de hipotecas, créditos bancarios y canales informales de financiación.
El proceso dinámico iniciado con el boom lanar no se agotó cuando declinó la producción lanera; por el contrario, se
aceleró la expansión y la argentina hasta 1930 experimentó su fase mas importante de crecimiento económico a través del
modelo primario – exportador.