Anda di halaman 1dari 3

La estrategia del primer empleo

La primera experiencia laboral marca la vida personal y profesional de los jóvenes.


¿Cómo escoger el lugar adecuado para empezar? ¿Qué consejos tener en cuenta para
lograr ingresar? ¿Cómo enfrentar este primer desafío en su plan de carrera?

La historia se repite día a día. Luego de algunos años de haber iniciado la vida
profesional, muchas personas descubren que han dedicado tiempo valioso a
hacer algo que no les gusta. Algunas de ellas, incluso en cargos de alto perfil y
con muy buenos salarios, sacrificarían estos logros por hacer algo que se
acople más a su vocación de vida o a su carrera. Crecer en el mundo laboral
no es fácil y se dificulta mucho más cuando no se está haciendo aquello que en
verdad apasiona a las personas. Distintos estudios muestran que en Estados
Unidos más del 75% de los trabajadores no están satisfechos con su cargo. Es
posible que esta cifra sea más alta en Colombia. Aquí son privilegiados los
jóvenes que pueden estudiar en la universidad, y aquellos que logran
graduarse muchas veces se ven obligados a aceptar cualquier trabajo para
poder iniciar su carrera laboral por las grandes dificultades para conseguir
empleo. Es cierto, no hay muchas opciones a la hora de escoger el primer
empleo. Sin embargo, hay recomendaciones muy útiles, que de tenerlas en
cuenta pueden ayudarle a no perder tiempo valioso y empezar con el pie
derecho su carrera profesional.

La búsqueda interna

Antes de identificar oportunidades en el mercado laboral, empiece por


buscarlas en usted mismo. Expertos consultados por Dinero coinciden en esta
recomendación: los jóvenes deben tener muy claro quiénes son, en qué creen,
de qué son capaces y cuáles son sus gustos. Tener claridad sobre estos
puntos facilita enormemente el proceso de conseguir trabajo y permite
disminuir el riesgo de llegar a cargos que no correspondan a sus capacidades e
intereses. Juan Alberto Castro, presidente de Legis, recomienda a los recién
graduados tratar de imaginar qué quieren ser en 10 ó 20 años y, a partir de allí,
forjarse un rumbo. Castro es un buen ejemplo de cómo el primer empleo marca
la vida profesional. Abogado de la Universidad Javeriana, su primer puesto fue
en el área comercial en Carvajal S.A. Permaneció siete años en esta
organización, que tiene reconocimiento de invertir en su gente. De hecho,
temas como visión internacional y responsabilidad social, característicos en
Carvajal, han acompañado a Juan Alberto Castro en otras empresas, como
gerente de Sodexho Pass en Colombia y hoy en Legis. José Fernando
Calderón, gerente de la firma Egon Zehnder International, se dedica a
seleccionar ejecutivos de muy alto nivel, como en la actualidad lo hace para la
presidencia de la Organización Corona. Calderón cree que los jóvenes deben
tratar de identificar empresas que se reconozcan por invertir en su gente y en
ser buenas escuelas. La carrera de Juan Alberto Castro muestra que esta
recomendación es muy válida.

La búsqueda externa

Tener por criterio de selección cargos pomposos y salarios altos es un error


usual que cometen los egresados al buscar empleo. Pensar en el dinero como
la guía para ascender en la carrera profesional es peligroso, pues podría
empujar a las personas a comprometerse en temas que en realidad no son su
vocación. Para Gustavo Mutis, presidente de Gold Service International, firma
de consultoría en liderazgo y gestión estratégica, este es el punto central al
escoger el primer empleo. "La recomendación no es dónde gano más, sino
dónde soy más útil. Dónde puedo aprender más para mi desarrollo personal y
el de los demás", asegura Mutis.

Las apreciaciones de Gustavo Mutis tienen sustento propio. Luego de la


universidad, él apuntó a cargos en el sector público, como secretario en el
Ministerio de Justicia y en el Instituto de Seguros Sociales. Estos cargos le
dieron una vocación de servicio que luego en el sector privado lo impulsó a
traer al país a prestigiosos pensadores del management, como Peter Drucker y
Peter Senge. Mutis opina que "la suerte es el resultado de muchos años de
persistir en algo. Si uno tiene claros sus sueños, el mundo conspira para
lograrlos. Hay que ser leal con estos sueños", concluye.

Además del título y el dinero, el tamaño de la empresa es menos importante de


lo que se piensa. Las grandes compañías tienen sus ventajas, conocer su
organización y funcionamiento siempre será valioso; pero las pequeñas
también tienen sus beneficios. Allí es posible conocer distintas áreas porque de
alguna forma se está creciendo con la empresa. Ximena Hoyos, directora
general de Planeta Valle, ejemplifica esta recomendación. A pesar de haber
trabajado en la firma de consultoría Deloitte en Londres, luego de estudiar
filosofía y ciencia política en Oxford, ella considera que su primer empleo se dio
cuando regresó al país a trabajar con la empresa de su familia, la Compañía
Colombiana de Esmaltes. Allí empezó como auditora y llegó a ser gerente a los
29 años. "Lo más valioso de mi primer empleo fue conocer los distintos campos
de la empresa por medio de la auditoría, algo muy valioso que no se aprende
en la universidad". Hoy dirige Planeta Valle que tiene el gran desafío de
integrar tanto el sector privado, el público y al tercer sector en función del
desarrollo del Valle del Cauca.

Con el pie derecho

Las competencias académicas son determinantes pero también lo son otras


habilidades y las prácticas laborales. En la vida universitaria es positivo
involucrarse en foros, eventos, actividades estudiantiles, etc. (ver recuadro).
Ana María Delgado, gerente general de Caracol Radio, es un buen ejemplo de
ello. Apenas cursaba su primer año de Derecho en la Universidad del Rosario
cuando entró a trabajar en la firma de abogados Raisbek (hoy Baker &
McKenzie). "Entré a trabajar como 'patinadora', así llaman en el medio a los
jóvenes que vigilan los procesos en los juzgados. Así empezamos todos y
desde entonces entendí que podía organizarme para trabajar y estudiar al
mismo tiempo". Ana María Delgado no ha parado de realizar proyectos. Con el
tiempo montó su propia firma de abogados, Delgado Estrada y Asociados, y en
su paso por la Casa Editorial El Tiempo llegó a ser presidenta en 2000. Aunque
es una convencida de la importancia de foguearse en el trabajo antes de
graduarse, Ana María cree que tal vez sea mejor hacerlo al finalizar la carrera
con una práctica profesional, "la vida universitaria es importante", dice. Esta
experiencia pone de manifiesto que la carrera profesional no es un camino fácil.
Es importante saber esto desde el comienzo, entender que uno está en un
camino de aprendizaje, aceptar y respetar mandos organizacionales y, en
ocasiones, valorar empezar desde abajo.

Según Óscar Agüera, presidente de la firma HTM, que maneja los mayores
procesos de reestructuración organizacional en el país, desde que se gradúan
los estudiantes hasta los 29 años, pueden moverse entre cargos y sectores sin
que se vea como una falta de continuidad. Luego, de los 29 años a los 35 años
lo prudente es permanecer más de tres años en cada cargo para demostrar
madurez profesional. Si bien la idea no es cambiar cada tres o seis meses de
puesto, la primera etapa es una oportunidad para ser muy crítico con las
empresas donde se trabaje y cambiar antes de que sea tarde. La vida
profesional les abre a los jóvenes todo un mundo de posibilidades, enseñanzas
y tiempos difíciles. La herramienta en este camino es ser muy sincero al
reconocer lo que en realidad lo haga feliz.

Anda mungkin juga menyukai