Etapas del embarazo: los primeros síntomas

Si estás buscando tener un bebé, debes estar muy atenta a los primeros signos de embarazo, pues te darán muchas pistas sobre tu
estado antes de realizarte el test. ¿Cuáles son? Los principales síntomas de que algo ha cambiado dentro de ti son un retraso en tu
menstruación, sobre todo si es regular, unido a una ligera sensación de hinchazón abdominal y al aumento de ganas de orinar.
Otros síntomas pueden ser el aumento de tu temperatura corporal, padecer de estreñimiento e incluso de un cansancio o
somnolencia mayor del habitual. Y, si unido a todos los anteriores síntomas, también experimentas náuseas y vómitos, las
posibilidades de que estés embarazada aumentan.

Primer trimestre de embarazo

En el momento en el que tu embarazo está confirmado, ya estás en el primer trimestre de embarazo, que abarca desde la Semana
1 hasta la Semana 12. En esta etapa, especialmente si la madre es primeriza, le surgirán la mayoría de dudas: cuándo visitar al
ginecólogo, cuándo se debe realizarte la primera ecografía, a qué se debe el cambio hormonal que estás viviendo.
En estas primeras semanas, es habitual padecer náuseas y mareos, mientras que el embrión crece rápidamente y comienza a
desarrollar todos los órganos y tejidos de su cuerpo. Al finalizar esta etapa, aún es difícil determinar el sexo del bebé, pero ya
empiezan a definirse las uñas de sus manitas y de sus pies, y el cerebro continúa su desarrollo.

Segundo trimestre de embarazo

El segundo trimestre de embarazo da comienzo en la Semana 13 de gestación y finaliza la Semana 26, justo cuando el bebé ya se
coloca en posición fetal. En esta fase, ya es posible determinar el sexo del bebé, Sus sentidos ya comienzan a desarrollarse y, al
finalizar este trimestre, ya es posible que el feto (pues deja de llamarse embrión para tomar este nombre) oiga la voz. Además, en esta
etapa del embarazo, es probable que puedas comenzar a sentir contracciones ocasionales.

Tercer trimestre de embarazo

La recta final de la gestación da comienzo en la Semana 27 y finaliza en el momento del parto. Esta es la más segura de todas
las etapas del embarazo. Es por ello que, en esta etapa, se debes comenzar a preparar todo lo que el bebé necesitará al nacer, así
como la maleta para llevar al hospital,
Mientras, él se va colocando con su cabeza hacia abajo. Además, sus órganos han terminado de formarse, especialmente los
pulmones, los cuales comienzan a practicar sus primeros movimientos junto al diafragma. Tu futuro bebé ya se mueve a diario, la
madres sufre algunos cambios de ánimo e incluso puedes sentir que tiene hipo.
El tamaño tan grande de la pancita de embarazada puede traer dificultades asociadas, como las molestias para dormir, los
problemas de falta de aire según la actividad que se esté realizando, las ganas frecuentes de hacer pipí, la hinchazón y la retención de
líquidos, el ardor de estómago, el dolor de pubis, etc. También es el momento de comenzar las clases de preparación al parto, así como
de concretar con el ginecólogo todos los aspectos asociados al nacimiento.
El parto: la última de las 5 etapas del embarazo
Si tu embarazo ha llegado a término, el momento de dar a luz se producirá entre la Semana 39 y la Semana 40, el término
promedio del embarazo. Sin embargo, si el niño aún no ha nacido, como máximo, en dos semanas se provocará el parto. Por lo tanto,
esta fase supone el fin de las diferentes etapas del embarazo y el inicio de una nueva para ti: la de ser mamá.
La duración del parto, desde el inicio de las contracciones hasta el nacimiento, varía de una mujer a otra, e incluso de un
embarazo a otro. Cuando la madre es primeriza, sus tejidos son más resistentes, por lo que se necesita más tiempo y fuerza para que
el cuello del útero se dilate. Por esta razón, si se trata del primer parto, el período de dilatación puede oscilar entre las 12 y 14 horas.
El período de expulsión, es aquel en el que el niño entra en el canal del parto, entre una y dos horas; y un período de expulsión de las
secundinas (expulsión de la placenta) de 15-30 minutos. Sin embargo, si no es el primer bebé, el período de dilatación puede reducirse
a unas 6-8 horas; el de expulsión, a 30-60 minutos; y el de expulsión de las secundinas, a 10-20 minutos.
El bebé puede pesar, en promedio, unos 3.5 kilogramos. Es decir, estará entre los 2.6 y los 4 kilos. En cuanto a sus medidas, puede
oscilar entre los 46 y los 56 centímetros con las piernas extendidas.