En el entorno de la fabricación es reconocida la influencia en la calidad y en la productividad
de los factores, persona, material, máquina, método. Centrándonos en el factor material, al
margen de la selección correcta del material y del secado o de su tratamiento previo, el factor determinante en el proceso de inyección será la temperatura del material fundido y el tiempo de permanencia del material en la unidad de inyección. En un proceso de inyección ideal, una vez que el proceso ha sido definido, con el paso de los minutos desde el arranque de la fabricación, el proceso se sitúa en una estabilidad térmica, tanto del molde como del material. Los inputs térmicos se equilibran en un determinado punto con los outputs, es decir, la aportación térmica de las resistencias de la unidad de inyección, de la energía térmica generada en el interior de la unidad de inyección por el husillo, se compensa con la refrigeración del molde, de la traversa