Varela Unidad 1

Este material es para uso de los estudiantes de la Universidad Nacional de Quilmes, sus fines
son exclusivamente didácticos. Prohibida su reproducción parcial o total sin permiso escrito de la editorial correspondiente.
Editorial Gedisa ofrece

los siguientes títulos sobre CONOCER
PSICOLOGÍA Las ciencias cognitivas:
COGNITIVA tendencias y perspectivas.

Cartografía de las ideas actuales
pertenecientes a sus diferentes
colecciones y series
(Grupo "Psicología")
por
HILARY PUTNAM Representación y

realidad
Francisco J. Varela
DANIEL C. DENNETT La actitud intencional
FRANCISCO J. VARELA Conocer

JEROME BRUNER Realidad mental y
mundos posibles
Título del original en Inglés:

Cognitive Science. A Cartography of Current Ideas.
© 1988 by Francisco J. Varela
Traducción: Carlos Gardini

Cubierta: Maqueta de colección: Julio Vivas
Realización: Gustavo Macri
Esta obra está dedicada,

con todo mi amor,
Primera edición, Barcelona, 1990 a mis hijos
Alejandra, Javier y Leonor
Derechos para todas las ediciones en castellano
© by Editorial Gedisa
Muntaner, 460, entlo., 1-
tel. 201 6000
08006 - Barcelona, España
ISBN: 84-7432-383-5
Depósito legal: B. 20.367 - 1990
Impreso en España
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Verdaguer 1 - 08786 Capellades (Barcelona)
Queda prohibida la reproducción total o parcial por cual-

quier medio de impresión, en forma idéntica, extractada o
modificada, en castellano o cualquier otro idioma.
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN ........................................................... 11
AGRADECIMIENTOS ..................................................... 19
1. ¿Por qué este ensayo? .................................... 23

Motivación....................................................... 23
Estructura de este ensayo................................. 25
2. Primera etapa. Los años jóvenes .................. 29
Los comienzos ................................................. 29
La lógica y la ciencia de la mente.................... 31
Los frutos del movimiento cibernético ............ 34
3. Segunda etapa. Los símbolos:
la hipótesis cognitivista.................................. 37
Los cognitivistas entran en escena................... 37
Síntesis de la doctrina ...................................... 38
El vástago del cognitivismo:
la inteligencia artificial ................................ 46
Las ciencias cognitivas .................................... 48
El procesamiento de la información
en el cerebro ................................................ 50
Síntesis del disenso .......................................... 52
4. Tercera etapa. La emergencia:
una alternativa ante la orientación
simbólica ......................................................... 53
La autoorganización: las raíces de
una alternativa ............................................. 53
La estrategia conexionista................................ 57
Emergencia y autoorganización....................... 60
El conexionismo en la actualidad ................... 67

Las emergencias neuronales ........................... 69
Los símbolos abandonan la escena ................. 76
5. Cuarta etapa. La enacción:

una alternativa ante la
representación............................................... 87
Una insatisfacción más profunda.................... 87
El redescubrimiento del sentido común..........
Las representaciones abandonan
88 Introducción
la escena ..................................................... 96
Ejemplos de enacción ..................................... 101
Síntesis de la doctrina..................................... 108
Trabajar sin representaciones.......................... 110 Este pequeño libro se propone una tarea
Eslabones entre la emergencia ambiciosa: presentar el panorama actual de las
y la enacción ............................................... 113 ciencias cognitivas, nombre con el que hoy desig-
6. Conclusiones.................................................. 117 namos el análisis científico moderno del conoci-
miento en todas sus dimensiones. Este ensayo,
pues, constituye una concisa visita guiada a un
campo multidisciplinario que todavía no está
bien definido.
Esta tarea no puede ser neutra: se tiene que
emprender desde la perspectiva de alguien, pre-
ferentemente una parte interesada que hable de
una actividad de la cual participa. Como pronto
descubrirá el lector, mi perspectiva, desarrollada
al cabo de unos veinte años de investigación, es-
tá expuesta explícitamente en el texto. No la re-
petiré aquí, pero caben dos observaciones.
Ante todo, una observación epistemológica.

Cada época de la historia humana produce, a
través de sus prácticas sociales cotidianas y
11
blecerse como un programa de investigación ma-

duro, ha resistido tal perspectiva. La perspectiva
emergentista, sin embargo, tanto en su fase tem- 5
prana de estudio de los sistemas autoorganizati-
vos como en su actual forma conexionista, está

abierta para abarcar una mayor variedad de do- Cuarta etapa.
minios cognitivos. Una modalidad mixta o inclu-
siva parece ser, pues, la estrategia natural. La La enacción: una alternativa
asociación fructífera entre un cognitivismo me- ante la representación
nos ortodoxo y la visión emergentista, donde las
regularidades simbólicas emergen de procesos
distribuidos paralelos, es una posibilidad concre-
ta, especialmente en IA, donde predomina el Una insatisfacción más profunda
pragmatismo técnico. Esta empresa complemen-
taria sin duda producirá resultados visibles y Es tentador pensar que las CTC están hoy
quizá llegue a ser, durante muchos años, la ten- divididas en dos facciones en guerra: un paradig-
dencia dominante en las ciencias cognitivas. ma predominante, favorito del mundo académico
y las inversiones tecnológicas en gran escala, y
un más reducido grupo de investigadores jóvenes
y audaces empresas comerciales que se despla-
zan en otra dirección.
Pero, por dos buenas razones, esta descrip-
ción sería adecuada sólo en un nivel superficial.
Primero, porque para la mayoría de los investiga-
dores que participan del nuevo enfoque no resul-
ta imposible buscar una síntesis entre cognitivis-
mo y conexionismo: podría tratarse, respectiva-
mente, de un enfoque descendente y un enfoque
ascendente. La situación conceptual de tal sínte-
sis no es clara, como hemos dicho en nuestro ca-
pítulo anterior. Una buena posibilidad es una
suerte de solución de compromiso, una alianza
entre un cognitivismo menos ortodoxo que inclu-
86
87
yera procesos paralelos distribuidos de bajo nivel no que está dado de antemano. Se habla de ele-
provistos por los enfoques autoorganizativos, es- mentos informativos a ser captados como rasgos
pecialmente en la IA, dada su orientación técnica del mundo (como las formas y colores), o bien se
y su ánimo oportunista. Esta complementación encara una definida situación de resolución de
potencial sin duda producirá resultados visibles, problemas que implica un mundo también defi-
y bien podría convertirse en la tendencia domi- nido.
nante en las CTC por muchos años. Sin embargo, nuestra actividad cognitiva en
Segundo, y aun más importante, dicha des- la vida cotidiana revela que este enfoque de la
cripción es superficial porque en ambas orienta- cognición es demasiado incompleto. Precisamen-
ciones (y por ende en una futura síntesis) aún te la mayor capacidad de la cognición viviente
faltan algunas dimensiones esenciales de la cog- consiste en gran medida en plantear las cuestio-
nición. Es preciso insistir en una orientación to- nes relevantes que van surgiendo en cada mo-
talmente distinta de las CTC, nacida de una in- mento de nuestra vida. No son predefinidas sino
satisfacción más profunda que la búsqueda del enactuadas: se las hace emerger desde un tras-
paralelismo distribuido, y más relacionada con fondo,* y lo relevante es aquello que nuestro sen-
los cimientos mismos de los sistemas represen- tido común juzga como tal, siempre dentro de un
tacionales. Cabe esperar que esta tendencia contexto. Estos dos términos, enactuar y hacer
emergente, que hoy goza de cierto espacio, no emerger, no son por cierto transparentes en este
sufra el mismo destino que las primeras ideas contexto. La intención de este capítulo es expli-
autoorganizativas, que hubieron de ser redescu- carlos mediante un examen conceptual y a tra-
biertas 30 años después. vés de ejemplos específicos.
Antes de embarcarnos en esta empresa, vale
la pena insistir en que se trata de una crítica de la
El redescubrimiento del sentido común
La insatisfacción central de lo que aquí lla-

mamos el enfoque enactivo es simplemente la to- * El neologismo "enacción" traduce el neologismo inglés
enaction, derivado de enact, "representar", en el sentido de
tal ausencia de sentido común que hay hasta "desempeñar un papel", "actuar". De allí la forma "enactua-
ahora en la definición de cognición. Tanto en el da": traducir "actuada", "representada" o "puesta en acto"
cognitivismo como en el conexionismo de la ac- habría llevado a confusión. "Hacer emerger" traduce la for-
ma bring forth. En este y otros problemas he seguido el cri-
tualidad, el criterio de cognición continúa siendo terio de Pierre Lavoie, el traductor francés, quien aclara que
una representación atinada de un mundo exter- su faire-émerger es la traducción del alemán hervorbringen,
término de origen fenomenológico. (N. del T.)
88 89
noción de representación como núcleo de las CTC, analítica enfatiza la acción más que la representa-
ya que sólo se puede representar un mundo que ción, es adecuado llamar enactivo a este enfoque
está predefinido. Si el mundo en que vivimos va alternativo de las CTC.56 En el mundo anglosajón,
tradicionalmente más cerca del empirismo lógico,
surgiendo o es modelado en vez de ser predefini-

do, la noción de representación ya no puede de- estos temas se han ignorado a menudo.
sempeñar un papel protagónico. No se debe su- Sin embargo, en años recientes, algunos in-
bestimar la profundidad de los supuestos a que vestigadores de las CTC han presentado pro-
aludimos aquí. Nuestra tradición occidental ha puestas concretas, llevando estas críticas filosófi-
propiciado (con variantes, desde luego) la com- cas al laboratorio para una reevaluación de la IA.
prensión del conocimiento como espejo de la na- Se trata de una divergencia mucho más radical
turaleza.54 Sólo en el trabajo reciente de algunos de las que hubo antes dentro de las CTC, pues
pensadores europeos (sobre todo Martin trasciende los temas discutidos durante los años
Heidegger, Maurice Merleau-Ponty y Michel de formación. Al mismo tiempo, incorpora mu-
Foucault) ha comenzado la crítica explícita de las chas de las herramientas desarrolladas dentro
representaciones. Estos pensadores se interesan del contexto conexionista, como pronto veremos.
en el fenómeno de la interpretación entendida co-
mo la actividad circular que eslabona la acción y
el conocimiento, al conocedor y lo conocido, en un El problema de la resolución de problemas
círculo indisociable. Con "hacer emerger" nos re-
ferimos a esta total circularidad de la acción / in- Las CTC siempre han supuesto que el mun-
terpretación.55 Más aun, como esta perspectiva do se puede dividir en dominios: regiones de ele-
mentos discretos y tareas que el sistema cogniti-
vo enfrenta actuando dentro de un "espacio" da-
do de problemas: visión, lenguaje, movimiento.
54
Para un lúcido comentario sobre esto desde una pers- Es relativamente fácil definir el dominio del aje-
pectiva anglosajona, véase R. Rorty, Philosophy and the drez: en el "espacio" del juego de ajedrez todo
Mirror of Nature (Princeton University Press, 1981). consiste en estados posibles. Hay piezas y posi-
55
En este aspecto ha sido muy influyente e1 trabajo de ciones en el tablero. Hay reglas para los movi-
H. G. Gadamer, Truth and Method (Seabury Press, 1975).
Para una clara introducción a la hermenéutica véase
Palmer, Hermeneutics (Northwestern University Press,
1979). La redacción de este capítulo debe mucho a la in-
fluencia de F. Flores; véase T. Winnograd y F. Flores, 56
Understanding Computers and Cognition: A New Foundation El nombre dista de estar establecido. Aquí lo sugiero
for Design (Nueva Jersey: Ablex, 1986). por razones expositivas, hasta que se proponga uno mejor.
90 91
mientos y los turnos. Hay límites claramente de- el significado múltiple de una palabra, que a la
finidos. Como se indica en la Figura 9, el "mundo vez condiciona el significado de todas las demás.
del ajedrez" es casi cristalino. Por lo tanto, como La categorización de cualquier aspecto del mun-
se sabe, hay grandes progresos en el campo del
do natural en que vivimos no tiene límites preci-

ajedrez por computación. En cambio, ha resulta-
do muy infructuoso llevar este enfoque, por
ejemplo, al dominio de los robots móviles. Desde
luego, aquí también se pueden escoger ítems dis-
cretos (tales como las carrocerías, ruedas y ven-
tanillas de un ensamblaje de automóviles). Pero
también es evidente que, mientras el ajedrez tie-
ne límites bien trazados, el mundo del movimien-
to entre objetos no los tiene. Se requiere el uso
continuo del sentido común para configurar
nuestro mundo de objetos. Por ejemplo, ¿inclui-
remos a los peatones en nuestro mundo de con-
ductores de automóviles? Es obvio que la res-
puesta a estas pregunta sólo se puede extraer de
un muy difuso trasfondo de consideraciones irre-
mediablemente contextuales: dónde estamos,
qué hora es, por qué calle conducimos y demás.
Al contrario del dominio del ajedrez, el dominio
del conductor se parece más a una detallada
curva fractal que a un cristal claramente definido
(Figura 9).57 El significado de una palabra en un
lenguaje natural es quizá un buen ejemplo de to-
dos los ítems que habitan nuestro mundo natu- Figura 9. Para el espacio "ajedrez" parece posible diseñar
ral: hay que conocer todo el idioma para percibir una red de relaciones cuyos nudos representan cada ele-
mento pertinente. En el caso del espacio "conductor auto-
movilístico", una tentativa semejante muestra que, más allá
de ciertos elementos aislados, la red evoluciona rápidamen-
te hacia un trasfondo no circunscrito de sentido común.
57 (Fuente: P. Bierre, The Professor's Challenge", AI Magazine,
Véase P. Biere, "The professor's challenge", AI Invierno 1985, págs. 60-70.)
Magaztne, Invierno 1985, págs. 60-70.
92 93
sos: no se puede expresar como un dominio a En ambos casos, la esquiva ambigüedad del sen-
partir del cual elaboramos un mapa. tido común se deja en la periferia de la investiga-
De hecho, en la década de 1970, al cabo de ción, con la esperanza de elucidarla posterior-
veinte años de lentos progresos, muchos especia- mente.
listas en IA advirtieron que la acción cognitiva Estas preocupaciones tienen una desarrolla-
más simple requiere una cantidad de conoci- da contrapartida filosófica. Los fenomenólogos se
miento aparentemente infinita, que nosotros da- han explayado explicando por qué el conoci-
mos por sentada (es tan evidente que resulta in- miento se relaciona con el hecho de estar en un
visible), pero que se debe servir al ordenador en mundo que resulta inseparable de nuestro cuer-
cucharadas. Como decíamos antes, el gran héroe po, nuestro lenguaje y nuestra historia social.59
ha pasado a ser el niño desprejuiciado que Se trata de una interpretación permanente que
aprende a moverse y hablar. A principios de la no se puede aprehender adecuadamente como
década de 1960 la investigación se inspiraba en un conjunto de reglas y supuestos porque es una
la esperanza cognitivista de hallar un dispositivo cuestión de acción e historia; se comprende por
general para solucionar problemas: una máquina imitación, convirtiéndose en parte de una com-
lógica que se pudiera aplicar a cualquier proble- prensión ya existente. Más aun, no podemos
ma para resolverlo. Lenta y humildemente, este plantarnos fuera del mundo donde nos hallamos
sueño temprano se redujo a dominios de conoci- para analizar cómo su contenido concuerda con
miento estrictamente locales con problemas espe- las representaciones: estamos siempre inmersos
cíficos a resolver, donde el programador pudiera en él, arrojados en él. Al plantear reglas para ex-
proyectar en la máquina tantos conocimientos de plicar la actividad mental y los símbolos como re-
su propia experiencia como fuera posible. Por presentaciones, nos aislamos precisamente del
ejemplo, un sistema experto para reservar billetes pivote en torno del cual gira la dimensión viva de
en líneas aéreas, pero nada más. Asimismo, la la cognición. Ello sólo es posible dentro de un
estrategia conexionista exige restringir las clases
de atractores posibles a partir de supuestos acer-
ca de las propiedades conocidas del mundo, las
cuales se incorporan como reglas adicionales.58 59
Las principales referencias que tenemos en mente son:
M. Heidegger, Basic Writings (San Francisco: Harper and
Row, 1977); M. Merleau-Ponty, Phénoménologie de la per-
58
Para una descripción concisa y formal, véase T. ception (París: Gallimard, 1976); M. Foucault, Surveiller et
Poggio, V. Torre y C. Koch, Nature, 317:314-319, 1985. El Punir, naissance de la prison (París: Gallimard, 1975); H.
inspirador original fue D. Marrr, Vision (Freeman, 1984). Dreyfus, Why Computers Can't Think (Nueva York:
Macmillan/The Free Press, 1984).
94 95
contexto muy limitado donde casi todo permane- tación, y ahora será preciso recordarlos. Por una
ce constante (los filósofos hablan de una condi- parte, existe la noción relativamente aceptada de
ción ceteris paribus). El contexto y el sentido co- la representación como interpretación: la cogni-
mún no son artefactos residuales que se puedan ción siempre consiste en interpretar o represen-
eliminar progresivamente mediante el descubri- tar el mundo como si fuera de cierta manera. Por
miento de reglas más elaboradas. Constituyen la otra parte, existe la idea, mucho más extraña, de
esencia misma de la cognición creativa. que este rasgo de la cognición se debe explicar
Si esta crítica es atinada, no habrá progre- mediante la hipótesis de que un sistema actúa
sos en la comprensión de la cognición en su fun- sobre la base de representaciones internas.
cionamiento normal (y no exclusivamente en ám- Como pareciera que las dos ideas son similares,
bitos muy limitados) a menos que partamos de es preciso afinar un poco esta distinción.
otra base que no sea una exterioridad represen- Podemos comenzar señalando un concepto
table. "débil" y admitido de representación. Este con-
cepto es puramente semántico: se refiere a todo
lo que se pueda interpretar como siendo acerca
Las representaciones abandonan la escena de algo. Este es el concepto de la representación
como "interpretación", pues nada es acerca de
El verdadero desafío que esta orientación otra cosa si no la interpreta de cierta manera. Un
plantea a las CTC es que pone en tela de juicio el mapa, por ejemplo, es acerca de una zona geo-
supuesto más arraigado de nuestra tradición gráfica; representa ciertos rasgos del terreno, y
científica: que el mundo tal como lo experimenta- así interpreta que el terreno es de determinada
mos es independiente de quien lo conoce. En manera. Análogamente, las palabras impresas en
cambio, si estamos obligados a concluir que la una página representan oraciones en un idioma,
cognición no se puede entender adecuadamente que a la vez pueden representar —o ser acerca
sin sentido común, el cual no es otra cosa que de— otras cosas. Este sentido de representación
nuestra historia corporal y social, la inevitable se puede precisar un poco más. Si, por ejemplo,
conclusión es que conocedor y conocido, sujeto y nos interesan las lenguas en un contexto más
objeto, se determinan uno al otro y surgen si- formal, podemos decir que los enunciados de un
multáneamente. En términos filosóficos: el cono- lenguaje representan sus condiciones de satis-
cimiento es ontológico. facción. Por ejemplo, el enunciado "La nieve es
En nuestra exposición acerca del cognitivis- blanca" —tomado literalmente— queda satisfe-
mo distinguimos entre dos sentidos de represen- cho si la nieve es blanca; el enunciado "Recoge
96 97
tus zapatos" queda satisfecho si la persona inter- dentro del sistema cognitivo (imágenes, símbolos
pelada recoge sus zapatos. o patrones subsimbólicos de actividad distribui-
Este concepto de representación es "débil" dos por una red: eso no importa por el momen-
to). Luego tenemos una teoría cabal que estable-
porque no comporta necesariamente ninguna

implicación epistemológica u ontológica fuerte. ce que: 1) el mundo es predefinido; 2) nuestra
Así es totalmente aceptable decir que un mapa cognición aprehende este mundo, aunque sea en
representa el terreno sin preguntarse cómo ad- forma parcial; y 3) el modo en que conocemos es-
quieren los mapas su significado. También es to- te mundo predefinido consiste en representar
talmente aceptable pensar que un enunciado re- sus rasgos y luego actuar sobre la base de estas
presenta un conjunto de condiciones sin pregun- representaciones.
tarse si el lenguaje en conjunto funciona de este Para las escuelas representacionistas, toda
modo, o si de veras hay hechos en el mundo se- entidad cognitiva ha caído en paracaídas en un
parados del lenguaje que luego puedan ser re- mundo preexistente. Esta entidad sólo sobrevivi-
presentados por las oraciones del lenguaje. En rá en la medida en que esté provista con un ma-
otras palabras, el concepto débil de representa- pa y aprenda a actuar siguiendo ese mapa. En la
ción es pragmático; lo usamos constantemente versión científica de esta historia, el mapa cons-
sin preocuparnos. tituye un sistema innato de representaciones
La obviedad de tal idea, sin embargo, pronto (acerca del espacio, el tiempo, las formas, los olo-
se convierte en un concepto mucho más fuerte res y demás), mientras que aprender a usarlo
de representación que sí tiene fuertes implicacio- (patrones motores y emotivos) y actualizarlo
nes ontológicas y epistemológicas. Este concepto (aprender un lenguaje o tarea específica) es tarea
"fuerte" surge cuando generalizamos sobre la ba- de la ontogenia.
se del concepto más débil para elaborar una teo- Muchos científicos cognitivos replicarán que
ría cabal acerca del funcionamiento de la percep- hemos presentado una mera caricatura. ¿No esta-
ción, el lenguaje o la cognición. Las implicacio- mos suponiendo una concepción estática de la re-
nes ontológicas y epistemológicas son básica- presentación, una concepción que pasa por alto la
mente dobles: damos por sentado que el mundo riqueza de detalles de la estructura interior de un
está predefinido, es decir, que sus rasgos están sistema cognitivo e injustificablemente interpreta
definidos antes de toda actividad cognitiva. que la representación es un mero espejo? ¿Acaso
Luego, para explicar la relación entre esta activi- no es bien sabido, por ejemplo, que se considera
dad cognitiva y un mundo predefinido, plantea- que la percepción visual es el resultado de un or-
mos la existencia de representaciones mentales denamiento de los patrones físicos de energía que
99
98
estimulan la retina para crear representaciones Ejemplos de enacción

de la escena visual, que luego se usan para hacer
inferencias y eventualmente para emitir un juicio Tomemos el caso de la visión: ¿qué vino pri-
perceptivo? Se considera que la percepción es un mero, el mundo o la imagen? La respuesta de los
proceso activo de formación de hipótesis, no el investigadores de la visión (tanto cognitivistas

simple reflejo de un ámbito dado. como conexionistas) está dada inequívocamente
Esta objeción es justa en cierta medida, pero en los nombres de las tareas investigadas: "reco-
no da en la tecla. No nos proponemos caricaturi- brar la forma a partir de la sombra", o la "pro-
zar un complejo programa de investigación, sino fundidad a partir del movimiento", o "el color a
explicitar algunos supuestos epistemológicos del partir de diversas iluminaciones". Podemos lla-
modo más claro posible. Así, aunque todos con- marla la posición de la gallina:
vienen — con la posible excepción de algunos
conductistas recalcitrantes— en que la represen- Posición de la gallina: El mundo exterior tie-
tación es un proceso activo, se la sigue conci- ne leyes fijas y precede a la imagen que arro-
biendo como un proceso de "recuperación" o "re- ja sobre el sistema cognitivo, cuya tarea con-
construcción" de rasgos ambientales extrínsecos siste en aprehenderlo apropiadamente (sea
e independientes. En la visión, por ejemplo, uno en símbolos o en estados globales).
habla de "recobrar la forma a partir de la som-
bra" o "el color a partir del brillo". Se considera Esto parece ser muy razonable y resulta
que estos rasgos son propiedades extrínsecas del muy difícil imaginar que pueda ser de otra ma-
ambiente, las cuales brindan la información ne- nera. Tendemos a pensar que la única otra posi-
cesaria para recobrar propiedades "superiores" bilidad es la posición del huevo.
de la escena visual, tales como la forma y el co- La posición del huevo: El sistema cognitivo
lor. Persiste la idea básica de un mundo con ras- crea su propio mundo, y su aparente solidez
gos predefinidos.60 sólo refleja las leyes internas del organismo.
60
Para esta concepción de la visión, véase David Marr, La orientación enactiva propone un camino
Vision: A Computational Investigation into the Human intermedio61 para trascender ambos extremos:
Representation and Processing of Visual Information (Nueva
York: W. H. Freeman, 1982), especialmente la introducción. 61
Para una explicación filosófica de estas ideas, véase Fred I. Esto está explicado en mi "Living ways of sense ma-
Dretske, Knowledge and the Flow of Information (Cambridge, king: A middle way approach to neuroscience", en P.
Massachusetts: Bradford Books/MIT Press, 1981). Livingstone (comp.), Order and Disorder (Stanford: Anma
Libris, 1984).
100 101
darnos cuenta de que (como bien saben los gran- Expresemos las mismas ideas con un ejem-
jeros) el huevo y la gallina se definen mutuamen- plo. Pensemos en los simples sistemas autoorga-
te, son correlativos. El proceso continuo de la vi- nizativos introducidos en la Figura 6, y quitemos
da ha modelado nuestro mundo en una ida y la restricción de que están diseñados para una
vuelta entre lo que describimos, desde nuestra tarea particular. Dejemos que el sistema simple-
perspectiva perceptiva, como limitaciones exter- mente exista dentro de un ámbito que contiene
nas y actividad generada internamente. Los orí- una selección de elementos aleatorios. Luego si-
genes de este proceso se han perdido para siem- gamos su historia y veamos cómo un sistema
pre, y en la práctica nuestro mundo es estable particular se acopla con este ámbito aleatorio.
(excepto cuando se desmorona). Pero esta apa- Como muestra la Figura 10,64 entre las infinitas
rente estabilidad no tiene por qué obstaculizar secuencias posibles, el sistema cambia su esta-
una búsqueda de los mecanismos que la hicieron do global (se desplaza de un atractor a otro) sólo
emerger. Lo que marca la diferencia entre el en- cuando se topa con dos perturbaciones consecu-
foque enactivo y cualquier forma de constructi- tivas. En otras palabras, el sistema ha escogido
vismo62 o neokantismo biológico63 es este énfasis un subconjunto de acontecimientos (los que
en la codeterminación (del huevo y la gallina). Es consisten en dos perturbaciones sucesivas) co-
importante tenerlo en cuenta, pues la filosofía mo algo significativo, pues sólo ante ese encuen-
más o menos realista que impregna las ciencias tro cambia su configuración de modo regular.
cognitivas suele dar por sentado que quien cues- En este muy simple ejemplo presenciamos el ori-
tione las representaciones debe asumir ipso fac- gen de un mundo para el sistema, que emerge
to la posición antitética, acechada por el espectro tangiblemente de circunstancias aleatorias a
del solipsismo. Pero no nos llamemos a engaño través de una historia de acoplamiento. Desde
creyendo que el conocimiento opera mediante la luego, no hay "representación" de este subcon-
representación de una aparente exterioridad. junto escogido de todas las secuencias aleatorias
posibles dentro del sistema, ni era su tarea reco-
62
Véase por ejemplo P. Watzlawick (comp.), The
Invented Reality: Essays on Constructivism (Nueva York:
Norton, 1985).
63
Visto con mayor claridad en la escuela vienesa de 64
Figura tomada de F. Varela, Autonomie et
Konrad Lorenz, tal como está expresada, por ejemplo, en un Connaissance, op. cit., capítulo 11. Para una exposición de-
trabajo conocido en Inglés como Behind the Mirror (Harper tallada, véase F. Varela, "Structural Coupling in a Cellular
and Row, 1979), y en francés como L'Envers du miroir Automaton", en E. Secarz, F. Celada y M. Mitchinson
(París: Flammarion, 1975). (comps.), Semtotics and Cellular Communication (Berlín:
Springer-Verlag, 1988).
102 103
nocerlas. La existencia del sistema mismo las hi-

zo emerger desde un indefinido trasfondo de po-
sibilidades.
Para tomar un ejemplo más cotidiano, pen-
semos en el mundo de colores que percibimos to-

dos los días. Sus efectos son tan omnipresentes
en nuestra vida que sentimos la tentación de
pensar que los colores, tal como los vemos, re-
presentan el mundo tal cual es. Damos por sen-
tado que el color es un atributo de la longitud de
onda de la luz reflejada por los objetos, que no-
sotros la captamos y la procesamos como infor-
mación relevante. En rigor, como indican mu-
chas investigaciones, el color percibido de un ob-
jeto es en buena medida independiente de la lon-
gitud de onda que recibimos.65 En cambio, hay
un complejo proceso (el cual entendemos sólo
parcialmente) de comparación cooperativa entre
múltiples conjuntos neuronales del cerebro,66 el
cual determina el color de un objeto según el es-
tado cerebral global que corresponde tanto a una
imagen de la retina como a cierta expectativa de
Figura 10. Un anillo —una cadena circular— construido según el
principio ilustrado en la Figura 5 está ahora envuelto por un mun- lo que debería ser dicho objeto.
do de perturbaciones aleatorias, representadas en la parte superior Así, por ejemplo, si ponemos un papel gris
del diagrama por varios 0 y 1. El anillo entra en contacto con su sobre un trasfondo rojo, el papel (físicamente)
mundo con cada nueva perturbación, lo cual cambia el estado de
una neurona nada. Así, en el decurso del tiempo, una historia del gris cobra un color verdusco, aunque desde lue-
acoplamiento entre anillo y mundo es añadida a la dinámica inter-
na propia del anillo mismo (tal como se lo describe en la Figura 5).
En la parte inferior de esta figura mostramos un ejemplo de una tal
historia de acoplamiento. Nótese que, en este ejemplo, una o tres
perturbaciones sucesivas en una neurona dada no suponen un
cambio de una configuración espacial global a otra, mientras que 65
Véase, por ejemplo, E. Land, Proc. Nati Acad. Sci.
un encuentro con dos perturbaciones sucesivas sí. A través de tal
cambio global, el sistema ha escogido una configuración específica (USA), 80:5163-5169, 1983.
66
de encuentros (es decir, dos perturbaciones sucesivas), cuya rele- P. Gouras y E. Zenner, Pmgr. Sensory Physiol, 1:139-
vancia es pues inseparable de la historia de acoplamiento del siste- 179, 1981.
ma con este mundo aleatorio.
104 105
go no hay ninguna longitud de onda verde añadi- marios).67 En el dominio del color ni las aves ni
da en la región. Este fenómeno se denomina "in- nosotros somos más o menos "precisos" en lo
ducción cromática" y habitualmente se interpre- que concierne a un dominio que presuntamente
es el "mismo", sino que habitamos dos mundos
ta como una ilusión. Pero esta clase de proceso

es el corazón mismo de la visión cromática, pues perceptivos de diferentes dimensiones, que por lo
el color surge cuando un proceso similar se pro- tanto no se pueden superponer.
duce en tres clases de células: su actividad rela- Dicho de otro modo: las muy diferentes his-
tiva especifica qué es el color. Los teóricos mo- torias de acoplamiento estructural de aves y pri-
dernos hablan pues del color no como represen- mates han hecho emerger un mundo de datos
tación de la longitud de onda, sino de las propie- relevantes que para cada cual es inseparable de
dades reflexivas de una superficie, pues dicha su modo de vida. Sólo se requiere que cada
propiedad es independiente de la iluminación pe- senda emprendida sea viable, es decir, que sea
ro más característica del objeto. Aunque esto es una serie ininterrumpida de cambios estructura-
sin duda más satisfactorio que considerar el co- les. Los mecanismos neuronales que subyacen al
lor como longitud de onda, todavía desplaza el color no son la solución de un problema (captar
problema: ¿cómo define el subsistema, ante todo, las propiedades cromáticas preexistentes de los
aquello que debe reconocer como una superficie? objetos), sino el surgimiento simultáneo de la
El terco sentido común sale por la puerta pero percepción cromática en el hombre o el ave y lo
vuelve por la ventana. que uno luego puede describir como atributos
Lo que se puede decir es que nuestro mundo cromáticos del mundo habitado.
cromático es viable: es eficaz, dado que hemos Otra dimensión perceptiva donde se pueden
perpetuado nuestro linaje biológico. Las opera- ver estas ideas en juego es el olfato, no a causa
ciones neuronales cooperativas que subyacen a de la gama comparativa brindada por la filoge-
nuestra percepción del color son resultado de la nia, sino gracias a modernas técnicas electrofi-
larga evolución biológica de nuestro grupo de siológicas. Durante muchos años de trabajo,
primates. Pero otras especies han creado mun-
dos cromáticos diferentes al realizar operaciones
neuronales cooperativas diferentes a partir de
sus órganos sensoriales. Por ejemplo, parece que 67
muchos pájaros son tetracromáticos (requieren Para una reseña de la visión cromática comparativa,
véase G. Jacobs, Comparative Color Vision (Academic Press,
cuatro colores primarios), mientras que nosotros 1983). Para una descripción de la fisiología cromática de las
somos tricromáticos (nos bastan tres colores pri- aves, véase F. Varela y otros autores, Arch. Biol. Med. Exp.,
16: 291-303, 1983.
107
106
Freeman68 se las ingenió para insertar electrodos cognición deja de ser un dispositivo que resuelve
en el bulbo olfativo de un conejo, para poder problemas mediante representaciones para hacer
mensurar una pequeña parte de la actividad glo- emerger un mundo donde el único requisito es
bal mientras el animal se comporta libremente. que la acción sea efectiva: ¿permite la continui-
Descubrió que no existe un claro patrón de acti- dad del sistema involucrado?70
vidad global en el bulbo a menos que el animal,
entero y despierto, sea expuesto a aromas. Más Pregunta 1: ¿Qué es la cognición?
aun, tales patrones emergentes parecen surgir Respuesta: Acción efectiva: historia del aco-
de un trasfondo de actividad coherente para con- plamiento estructural que enactúa (hace emer-
figurar un atractor coherente. Al igual que el co- ger) un mundo.
lor, el olor no se revela como un mapa pasivo de
rasgos externos, sino como la articulación creati- Pregunta 2: ¿Cómo funciona?
va de sentido a partir de lo histórico.69 Respuesta: A través de una red de elementos
Bajo esta luz, pues, la operación del cerebro interconectados capaces de cambios estructura-
se interesa centralmente en la enactuación de les durante una historia ininterrumpida.
mundos a través de la historia de linajes viables:
es un órgano que construye mundos en vez de Pregunta 3: ¿Cómo saber si un sistema cog-
reflejarlos. nitivo funciona adecuadamente?
Respuesta: Cuando se transforma en parte
de un mundo de significación preexistente (como
Síntesis de la doctrina lo hacen los vástagos de toda especie), o configu-
ra uno nuevo (como ocurre en la historia de la
La noción básica es que las aptitudes cogni- evolución).
tivas están inextricablemente enlazadas con una
historia vivida, tal como una senda que no existe Señalemos que en estas respuestas apare-
pero que se hace al andar. En consecuencia, la cen dos conceptos nuevos, hasta ahora ausentes
en las CTC. El primero es que, como las repre-
68
W. Freeman, Mass Action in the Nervous System
(Academic Press, 1975). 70
69
Para una exposición introductoria completa a este
W. Freman y C. Skarda, Brain Res. Reviews, 10:145- punto de vista, véase H. Maturana y F. Varela, The Tree of
175, 1985. Significativamente, una sección del artículo se Knowledge: A New look at the biological roots qf human un-
titula: "Una retractación de la 'representación'" (pág. 169). derstanding (Boston: New Science Library, 1986).
108 109
sentaciones ya no desempeñan un papel central, sible para la IA si estamos dispuestos a desechar

la inteligencia ha dejado de ser la capacidad de las restricciones operativas de la resolución de
resolver un problema para ser la capacidad de problemas específicos predefinidos por el ingenie-
ingresar en un mundo compartido. El segundo es ro. Tal es la intención, por ejemplo, de los llama-
que el proceso evolutivo pasa a reemplazar al di- dos "sistemas de clasificación", cuya idea básica
seño orientado hacia tareas específicas. Dicho consiste en que el sistema enfrenta un ámbito no
sin rodeos, así como el conexionismo nació del definido que debe articular en significados.71 Más
cognitivismo inspirado por un contacto más es- generalmente, la simulación de historias prolon-
trecho con el cerebro, la orientación enactiva va gadas de acoplamiento y de estrategias evolutivas
un paso más allá en la misma dirección para para descubrir las tendencias básicas donde sur-
abarcar también la temporalidad del vivir, trátese ge el desempeño inteligente todavía pertenece al
de una especie (evolución), del individuo (ontoge- futuro. Pero como esta línea de investigación no
nia) o de la estructura social (cultura). arroja réditos inmediatos, no suele atraer al com-
petitivo sector de la IA, y por lo tanto se ha traba-
jado muy poco en esta dirección.
Trabajar sin representaciones Otra importante zona de influencia del enfo-
que enactivo está en el área de la informática y
La búsqueda de modelos no representacio- del lenguaje. En esta perspectiva, la actividad de
nales para el estudio de los fenómenos cognitivos la comunicación no consiste en la transferencia
(y ésta es, por cierto, una denominación vaga, al de información del emisor al receptor. La comuni-
igual que conexionismo) atrae a una cantidad re- cación se convierte en la modelación mutua de
lativamente pequeña de especialistas. Lo intere-
sante es que el número de investigadores que en-
caran el problema de esta manera no ha cesado
de crecer en los últimos años. Además, como ex- 71
Véase J. H. Holland, Informe técnico, Universidad de
plicaré en el capítulo siguiente, muchas de las Michigan, 1984. Para otras exposiciones de estas ideas (no
herramientas del conexionismo tradicional se necesariamente con el enfoque propuesto aquí), véase J. D.
pueden reformular en este contexto, de modo Farmer y N. Packard (comps.), Evolution, Games and
Learning: Models for adaptation in machines and nature,
que las líneas divisorias son tan claras como las Physica D, 1986. Para el modo en que el sistema de inmuni-
que había entre la orientación simbólica y la co- dad puede inspirar investigaciones similares, véase F.
nexionista. Varela, V. Sánchez-Leighton y A. Coutinho (1988), Adaptive
strategies gleaned from immune networks, Theoretical
Es obvio que la estrategia enactiva sólo es po- Biology, B. Goodwin & P. Saunders (comps.) (Edinburgh
Unlversity Press, 1989).
110 111
un mundo común a través de una acción conjun- Eslabones entre la emergencia y la enacción
ta: el acto social del lenguaje da existencia a
nuestro mundo. Hay algunas dimensiones del Todo eslabón entre la emergencia y la enac-
lenguaje a través de las cuales se hace emerger lo ción depende de las funciones que atribuyamos a
social. Se trata de los actos lingüísticos que reali- un sistema distribuido. Si enfatizamos un proce-
zamos constantemente: declaraciones, promesas, so histórico que conduce a regularidades emer-
requerimientos y formulaciones. De hecho, dicha gentes sin una restricción final fija, recobramos
red de actos de habla, con sus condiciones de sa- la condición biológica, de final más abierto. Si en
tisfacción, no constituye una mera herramienta cambio enfatizamos una red que adquiere una
para la comunicación sino la trama de nuestra capacidad muy específica en un dominio muy
identidad. Da cuenta de mucho de lo que ocurre definido, vuelven las representaciones, y tene-
en una oficina, y por tanto se relaciona mucho mos el más habitual enfoque de los modelos co-
más con la comprensión de su dinámica que los nexionistas. Sin embargo, la primera interpreta-
clásicos organigramas administrativos.72 Este en- ción también implica una nueva perspectiva so-
foque ha originado una nueva rama de herra- bre la cognición, como explicamos en el capítulo
mientas IA conocidas como coordinadores.73 La anterior.
idea básica es que un coordinador reemplaza el En consecuencia, el camino que tomemos
correo electrónico estándar con software destina- dependerá en gran medida de nuestro interés en
do al análisis de flujo de las conversaciones que permanecer más cerca de la realidad biológica, y
se desarrollan en una empresa. Los coordinado- más lejos de consideraciones pragmáticas. Desde
res constituyen un ejemplo de reorientación de la luego, es posible definir un dominio fijo dentro
IA: en vez de exigir al ordenador lo que quizá sea del cual puede funcionar un sistema conexionis-
imposible, es decir, la tarea abierta del análisis ta, pero ello oculta los más profundos problemas
lingüístico, se lo usa como un vehículo estructu- del origen, tan cruciales para el enfoque enacti-
rado para el reconcimiento explícito de nuestra vo.
continua enacción lingüística. Pensemos, por ejemplo, en la teoría de la ar-
monía de Smolensky. Su enfoque de la computa-
72
ción subsimbólica como modelo de la intuición
Para un comentario sobre este punto de vista, véase L. parece muy emparentado con la perspectiva
Smirch y C. Stubbart, Acad. Manag. Rev., 10:724-736,
1985. enactiva, por lo cual puede ser el mejor ejemplo
73
T. Winograd y F Flores, Understanding Computers para utilizarlo como contraste. Sin embargo, aun
and Cognition op. cit. la teoría de la armonía se evalúa en referencia a
112 113
un nivel inviolado de realidad ambiental: los ras- pero de ninguna manera es obvio que ellas co-
gos exógenos concuerdan con ciertos datos del rrespondan a un referente único.
mundo, y una actividad endógena que adquiere, Hay pues una tensión entre dos mundos pa-
ralelos de la investigación, donde la decisión de
a través de la experiencia, un estado de significa-

ción abstracta, una "codificación óptima de la re- estar en contra o a favor de la crítica enactiva es-
gularidad ambiental". La meta consiste en hallar tá influida tanto por las complejidades de un vi-
una actividad endógena que se corresponda con raje conceptual como por el mundo tecnológico,
una "caracterización óptima" del medio ambien- cuyas exploraciones están encorsetadas por la
te.74 La perspectiva enactiva requeriría que se lle- camisa de fuerza de la aplicación inmediata.
ve esta clase de sistema cognitivo a una situa- Sospecho que esta tensión se resolverá mediante
ción donde lo endógeno y lo exógeno se definan una creciente brecha entre los componentes
mutuamente a través de una prolongada historia científicos y los tecnológicos de las CTC.76
que requeriría sólo un acoplamiento viable, y que
ignorara toda forma de adecuación óptima.75
Desde luego, esta orientación parece infruc-
tuosa desde el punto de vista de la IA, cuya
orientación pragmática tiene como objetivo la
producción de un sistema que trabaje en algún
dominio con poca demora. Mi argumento es que
las propiedades cognitivas emergieron de los sis-
temas vivientes sin tal preocupación por la ca-
racterización óptima. Resultan de historias de
compensaciones viables que crean regularidades,
74
P. Smolensky, op. cit., pág. 260.
75
Vale la pena señalar que se pueden aplicar argumen-
tos similares al pensamiento evolutivo de hoy. Para los pa-
ralelismos entre representacionismo cognitivo y adaptacio-
nismo evolutivo, véase F. Varela, en P. Livingstone (comp.),
op. cit. Para una excelente exposición de los mismos proble- 76
mas adaptados a la evolución y el desarrollo, véase S. Véanse también las observaciones de Roger Schank en
Oyama, The Ontogeny of Information (Cambridge University AI Magazine, otoño 1985, págs. 122-135.
Press, 1985).
114 115

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Este material es para uso de los estudiantes de la Universidad Nacional de Quilmes, sus fines

Editorial Gedisa ofrece

COGNITIVA tendencias y perspectivas.

HILARY PUTNAM Representación y

FRANCISCO J. VARELA Conocer

Título del original en Inglés:

Traducción: Carlos Gardini

Esta obra está dedicada,

Derechos para todas las ediciones en castellano

Impreso en Romanyà/Valls, S.A.

Queda prohibida la reproducción total o parcial por cual-

1. ¿Por qué este ensayo? .................................... 23

El conexionismo en la actualidad ................... 67

5. Cuarta etapa. La enacción:

Ante todo, una observación epistemológica.

blecerse como un programa de investigación ma-

vos como en su actual forma conexionista, está

La insatisfacción central de lo que aquí lla-

surgiendo o es modelado en vez de ser predefini-

do natural en que vivimos no tiene límites preci-

porque no comporta necesariamente ninguna

estimulan la retina para crear representaciones Ejemplos de enacción

proceso activo de formación de hipótesis, no el investigadores de la visión (tanto cognitivistas

nocerlas. La existencia del sistema mismo las hi-

semos en el mundo de colores que percibimos to-

ta como una ilusión. Pero esta clase de proceso

sentaciones ya no desempeñan un papel central, sible para la IA si estamos dispuestos a desechar

a través de la experiencia, un estado de significa-

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