El Derecho de Petición es un derecho de rango constitucional que
tienen los ciudadanos de presentar peticiones de interés general o particular, es un mecanismo relativamente ágil, pues las autoridades tienen que respetar unos términos establecidos, para lograr que se resuelvan dudas, que se aclare y corrija información, se obtenga una respuesta de fondo completa y acorde a lo solicitado o se permita el acceso a documentos.
Según la constitución política de Colombia en su artículo 23 dice:
“Toda persona tiene derecho a presentar peticiones respetuosas a las autoridades por motivos de interés general o particular y a obtener pronta resolución. El legislador podrá reglamentar su ejercicio ante organizaciones privadas para garantizar los derechos fundamentales.
La Ley 1437 de 2011, estableció los procedimientos para que el
ciudadano pueda tramitar una actuación administrativa, en búsqueda de la definición de una situación jurídica que afecte intereses generales o particulares ante organizaciones públicas y privadas incluyendo figuras novedosas que amplían el rango de protección de este derecho, y consagrando mayores obligaciones para los agentes de la administración encargados de dar respuesta al peticionario y fortaleciendo las sanciones contra los funcionarios que trasgredan estos derechos. La misión otorgada por el constituyente al derecho de petición es determinante para la efectividad de principios constitucionales como la democracia participativa consagrado en el artículo 1 de la Carta Fundamental, los fines del Estado, 3 enunciados en el artículo 2 del mismo estatuto, o el ejercicio de la soberanía popular contemplada en el artículo 3 de la Constitución, lo que implica que el concepto de participación democrática supera su función meramente electoral para tornarse en el mecanismo adecuado para la consecución de la igualdad y la justicia. Se podrá ejercer el derecho de petición ante autoridades y entidades públicas, así como también ante organizaciones privadas (como sociedades, corporaciones, fundaciones, organizaciones religiosas, cooperativas, instituciones financieras, clubes, Cajas de Compensación Familiar, Instituciones del Sistema de Seguridad Social Integral, Bancos, entre otros) con el fin de garantizar los derechos fundamentales del peticionario. También se podrá ejercer ante personas naturales cuando frente a ellas el peticionario se encuentre en situaciones de indefensión o subordinación.
La ley otorga un término para resolver las peticiones;
5 días hábiles siguientes a su recepción cuando se solicite
información o aclaración de información. 10 días hábiles siguientes a su recepción, cuando se trate de documentos e información. 30 días hábiles siguientes a su recepción, cuando se realicen consultas.
En caso que de que la entidad no dé respuesta al Derecho de
Petición, se puede proceder de la siguiente manera:
Se entenderá la aceptación de la petición y como consecuencia las
copias se entregarán dentro de los 3 días siguientes.
Pero se debe tener en cuenta que eventualmente se pueden presentar
situaciones como: no aportar documentos completos, el funcionario que recibe el derecho de petición no es el competente para dar respuesta y por lo tanto se tiene que dar traslado al funcionario competente. Situaciones en las cuales habrá una suspensión de términos informando al solicitante la razón del por qué no se ha contestado a la petición. Se puede presentar una tutela, alegando que se ha vulnerado el derecho fundamental reconocido en el artículo 23 de la Constitución Política.
Interponer una queja ante la Superintendencia que se encargue de
inspeccionar, vigilar y controlar a la entidad a la que se le interpuso el derecho de petición.
El derecho de Petición, es un derecho muy fundamental en la vida de
todos los ciudadanos que requieran información importante de cualquier tipo de entidad en Colombia. BIBLIOGRAFIA