Actividades educativas presentes . Los fines de educación, que son los que
tipifican las características sociales y culturales del contexto en que vive el
alumno. Que los fines de la educación estén encadenados con los programas,
contenidos, metas y perfiles. Todo esto, sin dejar de tener en cuenta y de manera
explícita los valores sociales, que caracterizan el contexto en que se desarrolla el
acto educativo.
El uso de una serie básica de lectura es una de las mejores respuestas a los
problemas de lecto-escritura de hoy, pues permite guiar al estudiante con mano
segura a través de todo el complejo proceso de aprender a leer, brindándole las
destrezas necesarias, despertándole la curiosidad hacia el vasto y variado campo
del saber, correlacionándolo con las demás artes del lenguaje (hablar, escuchar
y, sobre todo, escribir) y, principalmente, ofreciéndole ricas experiencias que lo
lleven a comprender el ámbito sociocultural en que se mueve y a vivir
productivamente para sí mismo y para los demás.
Una serie de lectura básica es, pues, un grupo de textos que constituyen un
programa en el que, gradualmente y con una visión ecléctica del saber y de la
metodología, se lleva al educando hacia el dominio de la lectura con el fin de
convertirlo en un lector eficiente, un conocedor inteligente de su lengua vernácula
y de la cultura en general y, sobre todo, en un ciudadano responsable.
Para lograr las metas y objetivos que la serie básica se propone, cada libro se
complementa con un cuaderno de trabajo para cada estudiante y una guía
metodológica y de enriquecimiento temático o de contenido para los docentes.
Son los hechos y temas de carácter sociocultural los que de manera más amplia y
cabal pueden servir de base a los propósitos docentes tanto de la lectura como de
la educación en general. Entendemos por base sociocultural todos los elementos
que conforman la convivencia: la gente, la lengua y el habla, el folklore, el arte
culto, los valores, las relaciones con los pueblos vecinos y el resto del mundo, los
problemas y hasta los sueños e ideales. Bases socioculturales. El ser humano,
como todos sabemos, es la única criatura que tiene dos nacimientos: el biológico-
natural y el sociológico-cultural. Se mueve, pues, en dos mundos: el creado por
fuerzas ajenas a él y el creado a través del tiempo y del espacio con el esfuerzo
de su inteligencia y de sus manos. A esto se refería Aristóteles cuando afirmaba
que “el hombre es un animal político”, esto es, un ser natural nacido para vivir en
sociedad, en aquel tiempo la “polis” griega.
¿Qué fuentes pueden servir de información para crear una serie de lectura basada
en pilares socioculturales? La primera y fundamental es la Lengua o idioma
empleado en la serie, en nuestro caso el español, y /o nuestro idioma vernáculo.
Otra fuente de información para la serie son las artes, sobre todo las plásticas y
gráficas. Con ellas se estimula el desarrollo psicomotor del niño y se lo guía en la
apreciación de colores y formas. Se lo introduce en ese mundo en el que sin
palabras se dan también mensajes que vencen la fuerza del tiempo. El dibujo, la
pintura, la escultura y hasta la serigrafía pasan a ser familiares al educando.
También va conociendo algunos grandes artistas, tanto locales –en nuestro caso,
Waldemar Aldana, entre otros… como extranjeros: Velázquez, Picasso, Van
Gogh, Tamayo, etc.
Los diversos campos de la ciencia moderna con toda su maravillosa tecnología (la
televisión, la computadora, la nave aeroespacial y el rayo láser) y sus grandes
problemas ecológicos se le revelan al estudiante para guiarlo y ayudarlo a asumir
una actitud responsable frente a la conservación del ambiente y la protección de
las especies en peligro de extinción, tanto terrestres como acuáticas y del aire.
Producir una buena serie básica de lectura, como se desprende de esta ponencia,
no es tarea tan fácil ni de un día. Requiere mucho trabajo de investigación y tener
un buen criterio selectivo de los materiales curriculares a ser incluidos, a fin de
cumplir con las metas y propósitos de la docencia. No obstante, hay dos
fundamentos que ayudan a guiar a los técnicos en programas educativos en su
ardua tarea: uno es tener al educando como eje de todo el proceso de enseñanza-
aprendizaje y el otro es presentar la convivencia como la actividad humana
esencial. Todo lo demás –temas, enfoques, métodos, estrategias, valores, etc.–
surgirá casi espontáneamente.