Como tal, son palabras homófonas que, pese a que suena igual, no significan lo mismo. Por
ello, te dejamos a continuación algunos consejos para evitar errores a la hora de usarlas.
Cuándo usar ha
Por ejemplo
Cuándo usar a
A es la primera letra de nuestro alfabeto, y es también una preposición. Como tal, puede
introducir complementos, indicar dirección, lugar, situación o modo de una acción. Asimismo,
dependiendo de su sentido, puede ser equivalente a otras preposiciones,
como ante, con, hacia, hasta, junto a, para, por, según. Además, puede aparecer precediendo
a la conjunción que en fórmulas interrogativas.
Por ejemplo:
Cuándo usar ah
Por ejemplo:
He es el verbo haber conjugado en primera persona; e es una conjunción que se usa para
sustituir la conjunción y cuando la palabra que le sigue empieza por i- o hi-; mientras que eh es
una interjección usada para preguntar, llamar o reprender.
Debido a que suenan igual, son palabras homófonas. No obstante, es importante saber
distinguirlas para no cometer un error ortográfico.
Por ejemplo:
Cuándo usar e
Por ejemplo:
Cuándo usar eh
Eh es una interjección que podemos usar para preguntar, llamar, despreciar, reprender o
advertir.
Por ejemplo:
Ya te vas, ¿eh?
Has es la forma auxiliar del verbo haber usada para la formación de tiempos compuestos. Haz,
por su parte, es el verbo hacer en la segunda persona de imperativo. As, en cambio, es un
sustantivo que puede tener dos significados: o bien referirse a una carta, o bien a una persona
sobresaliente en su ámbito.
La diferencia entre has, haz y as se percibe sobre todo en la escritura en el caso de los países
seseantes, donde no hay oposición entre el sonido de la s y de la z. En cambio, en España,
donde sí existe esta distinción, es fácil apreciar cuándo se dice haz y cuándo has o as debido a
la pronunciación, lo que permite identificar cómo se escribe.
Por ejemplo:
También aparece en la forma haber de + infinitivo, que indica obligación o necesidad. En este
sentido, es equivalente a ‘tener que’. Algunos ejemplos de uso en oraciones con esta
construcción:
Haz puede ser una forma personal del verbo hacer o un sustantivo de género masculino o
femenino.
Por ejemplo:
Como sustantivo, haz posee varias definiciones. Haz, como sustantivo masculino, puede
referirse a la propagación de los rayos luminosos desde un mismo origen o a un fajo o atado de
cosas.
Por ejemplo:
Como sustantivo femenino, haz puede referirse a una tropa formada en unidades o a la cara o
rostro de una persona, de una tela, o de otras cosas.
Cuándo usar as
As es un sustantivo; puede ser el nombre de una carta del juego de baraja, o puede referirse a
una persona que se destaca o sobresale del resto en alguna materia o campo. Se debe evitar la
grafía az, que no es sino una incorrección ortográfica.
Por ejemplo:
Porque es una conjunción causal, equivalente ‘ya que’ o ‘para que’. Porquées un sustantivo,
sinónimo de ‘causa’ o ‘motivo’. Por qué se emplea para introducir oraciones interrogativas y
exclamativas. Por que es una secuencia que puede aparecer en ciertas oraciones y que es
equivalente a ‘por lo cual’ o ‘por los cuales’.
A continuación, te explicamos en detalle cómo se usa cada uno mediante ejemplos fáciles de
comprender.
Porque es una conjunción que introduce oraciones subordinadas que expresan relaciones de
causa. Equivale a ya que, puesto que o dado que.
Por ejemplo:
Asimismo, puede usarse como conjunción final, como equivalente a para que. En estos casos,
aparece precediendo un verbo en modo subjuntivo. También admite ser escrito en dos
palabras: por que.
Por ejemplo:
Porqué debe usarse cuando es sinónimo de ‘causa’, ‘motivo’ o ‘razón’; suele aparecer
precedido de un artículo y admite la forma plural.
Por ejemplo:
Por qué se emplea para introducir oraciones exclamativas e interrogativas. Es una secuencia
formada por la preposición por y el pronombre qué.
Por ejemplo:
Esta secuencia ocurre, sobre todo, cuando hay verbos, sustantivos o adjetivos regidos por un
complemento introducido por la preposición por.
Por ejemplo:
Por que, asimismo, puede usarse cuando es intercambiable por secuencias como por el
cual, por la cual, por los cuales o por las cuales.
Por ejemplo:
Vaya es el verbo ir conjugado en primera o tercera persona de subjuntivo; una valla puede ser
una cerca, una cartelera publicitaria, o un obstáculo, o también puede ser el verbo vallar en
tercera persona; una baya, por su lado, es un tipo de fruto, mientras que la palabra balla no
existe.
Vaya puede ser el verbo ir conjugado en primera (yo), segunda (usted) o tercera persona (él,
ella) de singular de presente en modo subjuntivo. Significa moverse de un lugar a otro,
extenderse una cosa de un punto a otro, entre otras cosas
Por ejemplo:
Vaya puede ser también un sustantivo femenino que equivale a ‘burla’ o ‘mofa’, o puede ser
también una interjección usada para expresar satisfacción o decepción.
Por ejemplo:
Valla es un sustantivo femenino; puede referirse al vallado o cerca que se usa para cerrar o
delimitar un terreno, a una cartelera ubicada en un lugar público con fines publicitarios, o, en
el mundo del atletismo, a un obstáculo puesto en el camino de los participantes de una
carrera.
Por ejemplo:
Tenía que saltar cada valla limpiamente para obtener la mejor clasificación.
Valla es también el verbo vallar conjugado en segunda (usted) o tercera persona (él, ella) del
singular del presente en modo indicativo, así como la segunda persona de imperativo; se
refiere a la acción de cercar un sitio con un vallado. Por ejemplo: “Pedro valla su terreno con
una cerca altísima”.
Por ejemplo:
Un cayo es una isla pequeña, mientras que callo puede ser el verbo callar conjugado en
presente de indicativo o referirse a una dureza formada en la piel. Por su parte, calló es una
forma del verbo callar en pretérito perfecto, en tanto que cayó es el verbo caer conjugado.
Las letras ll y y (con valor consonántico) no tienen diferenciación fonética alguna en regiones
yeístas, de modo que son homófonas, pues los sonidos de una y otra son iguales, de lo cual se
deriva la confusión.
Cayo o callo
Cayo es un sustantivo que se emplea para referirse a una isla rasa de pequeñas proporciones.
Por ejemplo:
Callo, por su parte, es el verbo callar conjugado en primera persona de singular de presente en
modo indicativo. Callar significa guardar silencio, no decir algo, dejar de hablar.
Por ejemplo:
Como sustantivo, callo, por otro lado, designa una dureza o callosidad formada en la piel como
consecuencia de un roce constante.
Por ejemplo:
Asimismo, callo también se refiere a las chapas que se colocan en las pezuñas de las vacas o los
bueyes para reforzarlas. Por ejemplo: “El callo está bien ajustado a la pata de la vaca”.
Calló o cayó
Calló es el verbo callar conjugado en tercera persona de singular de pretérito perfecto en
modo indicativo.
Por ejemplo:
Cayó, por su parte, es el verbo caer conjugado en tercera persona del singular de pretérito
perfecto en modo indicativo. Significa ir a dar al suelo o descender a un nivel inferior.
Por ejemplo:
Sobretodo y sobre todo no tienen el mismo significado. Un sobretodo es una prenda de vestir,
mientras que sobre todo es una locución adverbial equivalente a ‘principalmente’ o
‘especialmente’.
Es común que sean confundidas, especialmente porque los correctores de texto automático
que tan frecuentemente usamos hoy en día no las reconocen como un error en sí. De modo
que a veces ocurre que se utilizan equivocadamente, como, por ejemplo: “Deberías acostarte
temprano, sobretodo hoy”, o “Le gustaba llevar su sobre todo cuando salía de noche”.
Sobretodo es un sustantivo masculino; se refiere a una prenda de vestir larga que se lleva
sobre el traje ordinario y que cubre tres cuartas partes del cuerpo y abriga del frío, protege de
la lluvia y sirve de corta viento. En Latinoamérica, se usa como sinónimo de abrigo.
Por ejemplo:
Sobre todo, por su parte, es una locución adverbial constituida por la preposición sobre y el
adjetivo todo; se emplea en frases y oraciones como equivalente a ‘especialmente’ o
‘principalmente’.
Por ejemplo:
En el pliego de peticiones hacían énfasis, sobre todo, en los últimos dos puntos.
La confusión de decir o escribir iendo en lugar de yendo obedece a la necesidad que siente el
hablante de realizar el fonema /i/ del verbo ir.
Sin embargo, en español, cuando el fonema /i/ se encuentra en posición intervocálica o inicial
de palabra, este se palataliza y asume un sonido consonántico, es decir, se pronuncia como
/y/.
Así, por ejemplo, entre dos vocales el gerundio del verbo construir no
será construiendo sino construyendo, ni el del verbo huir será huiendo sino huyendo.
Esto mismo pasa cuando el fonema /i/ se halla en posición inicial de palabra, como con el
verbo ir, cuyo gerundio no es iendo sino yendo.
Llendo, por su parte, es un error de grafía común, frecuente sobre todo en regiones en que los
sonidos de /ll/ y /y/ han dejado de diferenciarse.
En suma, será incorrecto escribir: “¿Cómo te está llendo en tu nuevo empleo?”, o decir: “Estoy
iendo al mercado”. Lo correcto habría sido yendo.
Por ejemplo:
Sólo, cuando equivalía al adverbio ‘solamente’, solía estar acentuado para diferenciarlo del
adjetivo solo, sin tilde, que significa ‘sin compañía’ o ‘en soledad’. Actualmente, se admite el
uso de solo, sin acentuación, tanto en el sentido de 'solamente' como en el sentido de ‘sin
compañía’.
Como adverbio de modo, solo puede usarse como sinónimo de 'únicamente' o 'solamente'.
Anteriormente, este adverbio iba acentuado, pues las reglas ortográficas imponían el uso de la
tilde diacrítica para diferenciar el adverbio sólo del adjetivo solo en casos donde pudiera haber
confusión (por ejemplo: “yo solo/sólo fui a saludar”), pese a que en estos casos, las reglas
generales de la acentuación indican que no deben acentuarse palabras graves terminadas en
vocal o o en -s.
No obstante, esto es solo un consejo, no constituye una norma, de modo que el hablante
podrá decidir si prefiere seguir acentuando el adverbio soloo no.
Así, en los siguientes casos, lo aconsejable será no usar tilde, por ejemplo:
Sin embargo, en los rarísimos casos en que esta ambigüedad no pueda resolverse por el
contexto, se sugiere optar por otras alternativas, como sustituir por solamente o únicamente,
usar una puntuación adecuada, incluir algún otro elemento que permita descartar la
ambigüedad o alterar el orden de las palabras.