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En un deporte en el que el tamaño muscular enorme, la fuerza

descomunal y lo superlativo priman, Israel Búdia está llamado a ocupar
un lugar de privilegio en el panorama nacional.
Eso si él quiere, porque que eso sea así sólo depende de él, ya que todas
las cartas del éxito están en su poder.
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ucho antes de que ningún
culturista tenga intención de
subirse a un escenario de
competición, todo el que se inicia en el
entrenamiento con pesas lo hace en busca
de incrementar su fuerza y el tamaño de
sus músculos. Sólo luego, cuando el
volumen muscular es lo suficientemente
importante es cuando alguien puede poner
sus ojos en la competición, pero pensar en
ella antes de albergar el bastante volumen
es aceptar la simple participación, sin la
más mínima posibilidad de triunfo.
He visto casos patéticos en los que el
competidor no se daba cuenta que estaba
completamente fuera de lugar al lado de
sus compañeros.
Nuestro protagonista no es de esos, al
contrario, hace mucho tiempo que podría
haber subido a un escenario y haber
causado una auténtica conmoción y sin
embargo, siempre lo dejaba para más
adelante, siempre pensó que debía
acumular más masa y de seguir así pronto
no cabrá dentro del gimnasio.
En 2010 se proclamó campeón de
Su entrenamiento
es siempre brutal.
culturismo de la Comunidad de Madrid,
pero todavía no se ha decidido a dar el
zarpazo definitivo.
LOS INICIOS DE ISRAEL BÚDIA
GÓMEZ: EL BÁRBARO
Israel nació en Madrid hace en julio de
1980 y tiene dos hermanos, Rubén de 25
años y Ariana de 10 a los que él llama
“Mis ángeles”.
Tras los estudios básicos cursó
Ingeniería Técnica Informática y hoy
regenta su propio gimnasio, el Krathos
Gym sito en la Travesía de Biosca, en
Madrid. Su primera actividad deportiva
fue el fútbol: “He estado toda mi vida
jugando al fútbol, cosa que ya no puedo
hacer por el peso corporal. También
estuve un tiempo en atletismo, pero correr
no me satisfacía del todo. A los 18 años
me apunté a clases de kungfu y con ello
estuve hasta los 25, y no proseguí por
problemas entre federaciones y Israel machacando
profesores”. la espalda.
Pero la semilla de las pesas y los
músculos grandes ya había germinado en
él, ya que con sólo 15 años se compró dos
mancuernas de 10 kilos para ejercitarse en
casa, y aunque no pisó un gimnasio hasta
los 22 años, su envergadura física ya
llamaba la atención. De hecho, de tanto
hacer flexiones en casa y darle a las
mancuernas sus brazos eran
desproporcionadamente grandes para su
cuerpo, que a los 19 años para 1,83 metros
de altura sólo pesaba 75kg.
“Los brazos, y en concreto los tríceps,
crecieron de forma inusitada en relación al
resto del cuerpo de tanto hacer flexiones,
así que parecía un gorila con los brazos
muy grandes y el cuerpo de un espagueti”
recuerda Israel riendo. El cambio físico
fue tan extraordinario que asombró a todos De manera que su aventura en serio con
los que lo rodeaban, en especial a su las pesas sólo dura desde hace unos seis
familia. “Al principio todo era muy años, pero en ese tiempo se ha convertido
bonito, mi madre me decía que se me veía en el eje central de su actividad.
mejor con 5 o 6 kilos más porque daba un El primer ídolo culturista del Bárbaro fue
poco de pena verme tan escuálido. Ahora obviamente Arnold, ¿O debería decir Conan
en la actualidad, mi madre no el Bárbaro?, pero luego surgió otro:
entiende estos extremos y me dice “Siempre me ha gustado Arnold (¿y a quién
que ya estoy muy bien, que para no?), pero a medida que me iba metiendo
qué quiero más. Incluso mi abuela más en este mundo y comprendiendo el
me dice que estoy gordo, en fin, sacrificio que requiere tanto el entrenar
cosas de abuelas”. como el comer, surgió una nueva imagen,
Y es que su tamaño no deja un nuevo ‘ídolo’ al que admirar, más que
impávido a nadie. por su físico, por su sacrificio y actitud
“Pues es gracioso, porque tanto dentro como fuera del gimnasio, el
cuando entré en la universidad a guerrero Dorian Yates, que para mí es el
los 22 años, el chico que me mejor culturista de todos los tiempos”.
atendió en la matriculación era el Israel sólo ha competido dos veces, en
monitor del gimnasio, y en cuanto mayo de 2010 ganó la categoría de
me vio me dijo que el primer día principiantes en Memorial Francisco del
de clase me esperaba en el Yerro y en octubre del mismo año se
gimnasio a la salida. Al principio adjudicó el campeonato de la Comunidad
todo era muy desestructurado, de Madrid IFBB en su categoría de los
pues iba un día o dos a la semana y no me pesos máximos. Aunque su amigo y
lo tomaba muy en serio, comía
todo lo que caía en mis manos Fondos de tríceps
a lo “Bárbaro”.
sin importarme lo que fuera,
hacía lo que ellos hacían y hasta
ahí llegaban mis conocimientos.
Pero el segundo año de
universidad gané la competición
de press de banca que allí
organizaban y me animé un
poco más. Pero es que al año
siguiente volví a ganarla, cuando
tenía 24 años y creo que ese fue
un poco el desencadenante de
todo esto. A los 25 dejé
definitivamente las artes
marciales y me puse a investigar
que era eso del culturismo, etc.
Así que devoraba todos y cada uno de los mentor, Daniel La Máquina Martínez lo
libros y revistas que caían en mi poder y anima a competir, conocedor de las
entrenaba con gente que supiera más que enormes posibilidades del Bárbaro, Israel
yo con el único propósito de aprender”. no está obsesionado con la competición...
www.musclemag-es.com • 151
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Con su mujer,
Rachel.
“De la competición todo lo que venga
será bien recibido, pero con salir al 100%
de mis posibilidades me doy por
satisfecho. Fuera de la competición todo
son satisfacciones, vivo 24 horas al día
con mi cuerpo y eso me sobra y me basta,
hago lo que quiero, lo que me gusta. ¿Qué
más puedo pedir?”
LOS PRINCIPIOS BÁRBAROS DE
ENTRENAMIENTO DE ISRAEL
A Israel que gusta entrenar siempre a tope,
como un verdadero bárbaro, como si con
cada serie que hace buscase su propia
destrucción. Siguiendo la estela de su
admirado Dorian, su forma de entrenar
proviene de la del propio británico, pero
incluso más... ¡bárbara!
“Si tuviese que definir de alguna manera
mi entrenamiento sería la siguiente: corto e
intenso. Corto porque no suele durar más
de 45 minutos, e intenso porque sólo suelo
hacer dos ejercicios para los músculos
pequeños y de tres a cinco para los
grandes, y solo una serie por ejercicio con
repeticiones forzadas, parciales y
negativas. Vamos, el heavy duty pero
heavy de verdad”, de acuerdo Israel, te
entendemos, que entrenas a lo bárbaro.
“Sólo entreno tres o cuatro días fuera de
temporada y utilizo bastante un ejercicio de
preagotamiento, porque manejo bastante
peso y mucha intensidad, y me gusta que
trabajen los músculos, no que sufran las
articulaciones, por tanto lo preagoto para
no necesitar una carga enorme. Es una serie
única por ejercicio que suele comprender
entre 6 a 10 repeticiones (dependiendo de
cómo me encuentre) y suele ser casi
siempre con el mismo peso, pues es una
manera de llevar un control del progreso,
porque cuando manejo ese peso sin
problemas, lo aumento. Hay que mencionar
que todas las series son con un control total
del movimiento, sin usar rebotes y
aguantando un segundo en la parte de
máxima contracción, lo que hace elevar
mucho la intensidad”.
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Si queréis saber de que habla,
probadlo.
ISRAEL Y LA DIETA
Cuando se trata de la dieta, Israel
es muy tajante en cuanto a su
importancia.
“¿Importancia? Toda, eres lo que
comes, y no entiendo como algunos
dicen que contribuye al 60% o cosas
así. ¿Qué pasa, qué si no como sólo
muscularé un 40%? Esto no se
puede separar, es como el bien y el
mal, sin el uno no existiría el otro,
es imposible separarlos. Esto es la
santísima trinidad: entreno, nutrición
y descanso. Si fallas en cualquiera
no conseguirás el máximo de tus
posibilidades y punto. Si te pones a hacer
cálculos de porcentajes, 60% dieta 30%
entreno, 25% descanso, 15%…… algo falla.
Prueba mi ecuación: 100% dieta, 100%
entreno, 100% descanso. ¡No puede fallar!”
Como es evidente, de la misma forma
que ha evolucionado físicamente, también
lo ha hecho en su forma de alimentarse,
que como podéis imaginar cuando era un
‘palillo’ no era precisamente por seguir
buenos hábitos de nutrición.
Este culturista llegará a lo más alto.
“¿Has oído la frase ‘no es vivir, es
sobrevivir’? Pues algo parecido, simplemente
comía lo que había y las veces que se ponía
la mesa en mi casa, es decir, un desastre”.
“Hace tiempo que comprendí que la
alimentación era imprescindible para crecer.
Fuera de temporada se me conoce por mi
apetito atroz, no sé si por eso viene lo de
Bárbaro, ja, ja. Mi dieta suma unas 5500-
6000 calorías. Unos 550 gramos de
proteína, de los cuales 150 provienen de
batidos y unos 400 de los dos kilos de carne
que devoro. Otros 550 gramos de hidratos
de carbono, en su mayoría de avena, arroz
vaporizado, algo de pasta y algo de pan
integral. En cuanto a las grasas son de las
semillas y frutos secos, pero también como
grasas saturadas de las carnes rojas y los
huevos, y son en total unos 150 gramos.
Los fines de semana las proteínas bajan
ligeramente al igual que los hidratos y las
grasas, de esta manera no acumulo mucha
grasa fuera de temporada, el cuerpo no se
acostumbra a una cantidad en concreto y
también consigo una mayor absorción los
días que entreno cuando las subo. No hago
mucha trampa, pero cuando la hago, la hago
de verdad, no me como una porción de
pizza o una hamburguesita. En temporada
bajo las grasas saturadas porque casi toda la
carne que meto es pollo, algo de pescado y
claras de huevo. Los azucares aunque son
pocos, bajan casi a cero, solo entra avena y
arroz vaporizado. Las grasas, las que lleve
el pescado junto con suplementos de CLA y
de omega 3. Las cantidades no te las puedo
concretar porque dependen del peso
corporal, de la grasa y del tiempo que quede
para la competición porque cambian
constantemente, aunque si te diré que llego
casi a los tres kilos de pollo al día. En
conclusión, no hay trucos, es dieta pura y
dura”.
Nuestro hombre tiene miedo que eso sea
poco comer, así que también ‘refuerza’ su
dieta con suplementos.
“Sí, es casi obligatorio, pero no para mí,
sino para todo el mundo que hace un
mínimo de deporte. Un multivitaminico y
mineral es imprescindible, tomo unos tres o
cuatro al día, junto con vitamina C, también
tomo creatina con el pH corregido y
proteína. Cuando estoy a dieta de definición
aumentan las ayudas, como la glutamina,
ramificados BCAA, CLA, omega 3 y sobre
todo calcio-magnesio-potasio.
UN FUTURO BÁRBARO
¿Cuáles son los objetivos deportivos de
Israel el Bárbaro?
“Justo en este momento son conseguir
de 6 a 8 kilos más de músculo limpio
antes de volver a competir”.
¿Y qué espera obtener del culturismo a
largo plazo?
“De la competición todo lo que venga
será bien recibido, pero con salir al 100%
de mis posibilidades me doy por
satisfecho. Fuera de la competición todo
son satisfacciones, vivo 24 horas al día
con mi cuerpo y eso me sobra y me basta,
hago lo que quiero, lo que me gusta y
además lo he convertido en mi profesión.
¿Cuántos pueden decir lo mismo?”
Israel Búdia, alias El Bárbaro se sigue
preparando en su gimnasio Krathos Gym
para volver a subir a los escenarios de
competición y causar una verdadera
conmoción. Os aseguro que si quiere
puede hacerlo, por algo es El Bárbaro.
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AGRADECIMIENTOS DE
ISRAEL
‘EL BÁRBARO’
BÚDIA
“Si me lo permites me
gustaría dar las gracias
en primer lugar a
vosotros por sacarme
en las revistas con las
que crecí, a mis compis
de entreno Danielo,
Harry y Ube (mi
hermano), al maestro
Daniel ‘La Maquina’
Martínez y a mi
querida Rachel, que
hace todo esto
posible”.
Entrevista con
ISRAEL BÚDIA
MMI: Si fueras directivo de alguna
de esas asociaciones ¿Qué
intentarías cambiar de este
deporte?
IB: Supongo que te diré lo que todo el
mundo, que se dediquen a propagar más
este ‘deporte’ tan mal visto en este país y
que haya más ‘premios’ para los atletas,
porque ellos saben bien lo mucho que
cuesta y el sacrificio que exige la
competición
MMI: ¿Tu pareja comparte esa
misma afición por el culturismo?
IB: Sin mi pareja no habría culturismo para
mí. Tengo 31 años y llevo con ella 15, casi la
mitad de mi vida. Ella me cocina, ella me
anima, ella es mi crítica, me da masajes casi
todos los días y sufre la vida culturista
conmigo, sobre todo eso, sufre. Gracias
Rachel
MMI: ¿Qué tipo de música te gusta?
IB: Mi música preferida es el heavy metal,
creo que se esta perdiendo la bonita
costumbre de entrenar con los clásicos
como Metallica, AC/DC, Iron Maiden… que te
hacían entrar en una especie de trance en el
que te sentías como una grúa capaz de
mover toneladas de hierro.
MMI: ¿Con qué tipo de ropa te gusta
vestir?
IB: Como trabajo en un gimnasio, uso casi
siempre un chándal amplio para ir lo mas
cómodo posible y cuando salgo me suelo
poner botas, pantalón de vestir y una
camisa o camiseta un poco mas ‘elegante’
que suele quedarme algo justa por
cuestiones de tamaño. Pero soy de lo más
normal, excepto porque casi siempre voy de
negro, soy así desde los 15 años, rarito
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MMI: ¿Te gusta el cine? ¿De qué
tipo?
IB: Me gusta casi todo del cine, sobre todo
las palomitas y la coca-cola. Las pelis de
miedo son mis favoritas, pero también me
gustan las de ciencia-ficción, aventuras,
comedia, acción… vamos todas mientras
sea estar sentado y comiendo…
MMI: ¿Cuál es tu comida preferida?
Fuera de la dieta, claro.
IB: Sin dudarlo: huevos fritos con mucho
pan para mojar, ummmmmmm! Aunque
cualquier guiso es bien recibido, pues soy
de buen comer
MMI: ¿En qué ocupas tu tiempo
libre?
IB: Sobre todo en estar con mi pareja, el
que hacer es lo de menos siempre que esté
con ella.
MMI: ¿Te gusta leer? ¿Qué libro
estás leyendo?
IB: Si me gusta pero depende de qué. Estoy
leyendo, aunque suene extraño, un libro de
Eduard Punset, se llama “Cara a cara con la
vida, la mente y el universo”. Me gustan los
libros de carácter científico, ya sea de
culturismo, de matemáticas o de cualquier
tema que te aporte conocimiento.
MMI: ¿Cuál es tu trabajo actual? ¿Y
anteriormente?
IB: He trabajado en multitud de trabajos
durante los veranos en los que estudiaba para
costearme la carrera y mis gastos personales,
hasta que entré en este mundo y me puse a
trabajar en un gimnasio y me encantó, tanto
que ahora tengo uno propio, muy discreto
pero en el que me gusta enseñar a la gente
que quiere aprender las glorias y penurias de
este estilo de vida.