Ahora, en mi punto de vista creo que las personas que van a la cárcel, son personas
que han atentado contra el orden social, no necesariamente tiene que haber
cometido un delito, porque como somos personas sociales se espera que se actué
de cierta manera, por lo tanto cuando alguien atenta contra estas normas y además
es de manera ofensiva, tiene que haber un castigo y este depende de la gravedad
de la ofensa, muchas veces estos castigos no llega a aplicar para las personas que
tienen los recursos económicos para evadir estos castigos, la justicia no siempre es
justa.
Por otro lado, visitamos el Centro Penitenciario de Puerto Vallarta, donde recorrimos
las instalaciones y vimos cómo viven las personas privadas de su libertad. Cabe
mencionar que, si bien no es un Centro Penitenciario lujosos como el que podríamos
encontrar en algún lado de Europa, las instalaciones estas en buenas condiciones
y las personas privadas de su libertad viven bien, en comparación de los Centros
Penitenciarios de los documentales que revisamos. Es importante mencionar que
tal como vimos con el grupo de música que se presentó en las instalaciones de la
UDG CUCOSTA, podemos observar que la reinserción social si es factible y si
existe, solo se necesita la decisión firme de querer cambiar por parte de la persona,
así como el interés por parte de institución en querer apoyar a estas personas.
Así pues, los Centros Penitenciarios están regulados y supervisados por la CDNH,
de esto se concluye que cada Centro Penitenciario es un mundo y que existen
reglas y regulaciones como en cualquier institución.