Las fuentes AT tienen conectores a placa base (esto las diferencia de las
ATX) y además, la fuente se activa a través de un interruptor en el que hay un
voltaje de 220 v, lo que supone un riesgo al manipular el PC.
Tecnológicamente son bastante rudimentarias y ya casi no se usan. Asimismo,
se daba el problema de que al tener dos conectores que había que conectar a
placa base, eran frecuentes las confusiones y los cortocircuitos.