ESTUDIANTES:
DOCENTE:
CURSO:
- COMPEENCIA COMUNICATIVA
Tarapoto Perú
2018
INDICE
I. Introducción pag4
II. Feminicidio pag5
2.1. Realidad problemática. Pag5
2.2. Características del problema. Pag6
2.3. ¿Planteamiento del problema? Pag7
2.4. Objeto de la investigación pag7
2.4.1. Objetivo general pag7
2.4.2. Objetivo específico pag7
2
2.13. ¿Qué se está haciendo para detener el feminicidio? Pag12
2.13.1. Según diario Perú 21 pag12
2.13.2. Según diario la república pag13
2.14. Consecuencias pag14
2.15. Bases teóricas (conclusiones de tesis) pag14
2.15.1. (Sherly jennifer rivera vila, 2017) pag14
2.15.2. (José la rosa pérez biminchumo, 2017) pag15
2.15.3. (Jimena sánchez barrenechea, 2017) pag16
2.16. Tentativa de feminicidio pag20
2.17. Hipótesis pag20
2.18. Metodología pag20
2.18.1. Nivel de investigación: explicativo pag20
III. Conclusiones pag21
V. Anexos pag23
3
I. INTRODUCCIÓN
La violencia contra la mujer es un problema que afecta a todo el mundo, y ello no es de
ahora, sino que siempre ha estado presente y muchas veces esta ha sido de forma pública
sin embargo ha sido reducida al ámbito privado o doméstico.
Con el avance y desarrollo del Derecho Internacional de los Derechos Humanos, y la
participación activa que han tenido los movimientos de mujeres, así como de los
organismos internacionales se ha reconocido que la violencia contra la mujer es una grave
vulneración contra sus derechos humanos.
Dentro de este proceso, la Convención de Belém do Pará, es uno de los mecanismos
legales más importante en materia de violencia contra la mujer ya que reconoce
expresamente el problema, así como impone obligaciones a los estados partes.
En el artículo 7 de la Convención de Belém do Pará, señala lo siguiente: “Los estados
Partes condenan todas las formas de violencia contra la mujer y convienen en adoptar, por
todos los medios apropiados y sin dilaciones, políticas orientadas a prevenir, sancionar y
erradicar dicha violencia (…)” y en su inciso c) prescribe lo siguiente: “ incluir en su
legislación interna normas penales, civiles y administrativas, así como las de otra
naturaleza que sean necesarias para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra la
mujer y adoptar las medidas administrativas que sea del caso.”
4
II.FEMINICIDIO
2.1. REALIDAD PROBLEMÁTICA.
El Feminicidio, caracterizado por ser un crimen de género, es realizado por agresores cuya
intención es dominar, ejercer control y negar la autoafirmación de las mujeres como
sujetas de derechos, a través del uso de la violencia. En el Perú, los estudios sobre el tema
fueron iniciados por las organizaciones feministas, las conclusiones y datos de los
mismos, fueron presentados de forma periódica a las autoridades contribuyendo con ello
a poner el tema en la agenda pública. Es en el año 2009, que se empiezan a adoptar las
primeras políticas públicas para evidenciar y prevenir el feminicidio en el Perú.
Actualmente en el país se cuenta con estadísticas oficiales, que evidencian la magnitud
del problema. Según el Ministerio Público, entre el 2009 y 2010, se registraron 283
Feminicidios; y entre enero y julio del 2011, se perpetraron 48. Cerca del 70% de estos
crímenes corresponden a feminicidio íntimo.
El Perú es el octavo país (de un total de 23) de América Latina con el mayor índice de
feminicidios, según cifras otorgadas por el observatorio de la Comisión Económica para
América Latina y el Caribe(Cepal).
Según informó el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP), en el 2016,
hubo 124 casos de feminicidio y 258 tentativas.
Un dato importante: la mayoría de acusados son convivientes (35,5%) y ex convivientes
(24,7%) de las víctimas.
El MIMP reportó, además, que la mayor cantidad de víctimas de feminicidio y tentativas
se concentró en Lima Metropolitana (99).
Arequipa (33) y Junín (20). Arequipa registró 10 casos más de feminicidios y tentativas
el 2017 en comparación con el 2016.
En el Perú, los casos de feminicidio se han incrementado en 26,4% respecto al mismo
periodo del año anterior. Durante Enero - Abril 2017, los casos de este delito consolidados
por el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (Mimp) sumaron 34, mientras
que en el mismo rango de meses (Enero - Abril 2018), estos fueron 43 en total.
Detallado de casos de feminicidio y tentativa durante el 2018:
Enero 2018: 10 feminicidios / 44 tentativas
Febrero 2018: 12 feminicidios / 22 tentativas
Marzo 2018: 10 feminicidios/ 16 tentativas
Abril 2018: 11 feminicidios/ 21 tentativas
5
Detallado de casos de feminicidio y tentativa durante el 2017:
Enero 2017: 8 feminicidios / 21 tentativas
Febrero 2017: 12 feminicidios / 13 tentativas
Marzo 2017: 9 feminicidios / 19 tentativas
Abril 2017: 5 feminicidios / 21 tentativas
De acuerdo con el Observatorio de Criminalidad del Ministerio Público, el feminicidio
ocurre, en su mayoría, en el hogar (66 casos en el año 2017), y fuera del hogar estos delitos
pueden ocurrir en una zona desolada (7), en una calle (6), en un hotel (2), en un
establecimiento público (3), en el lugar de trabajo (2), entre otros.
Finalmente, en febrero de este año el Poder Judicial informó que, entre Enero 2017 y
Enero 2018, se emitieron 113 condenas por delito de feminicidio, así como 1 mil 852
sentencias en procesos por violación de la libertad sexual.
Precisaron que se encontraban en trámite - hasta febrero - 925 procesos por feminicidio,
así como 24 mil 973 casos por el ilícito de violación de la libertad sexual, abiertos entre
el 2016 y 2017.
NACIONES UNIDAS. Una de cada cinco mujeres será víctima de violación o intento de
violación en el transcurso de su vida, en tanto que la mitad de las mujeres que mueren por
homicidio son asesinadas por su pareja o ex pareja.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los datos de una amplia variedad de
países indican que la violencia en la pareja es la causa de un número significativo de
muertes por asesinato entre las mujeres.
6
les forma para la igualdad.
7
al pueblo, y las mujeres son parte de ello. Hemos dicho también, que existe feminicidio y
su tentativa que está ligado a otros factores. Hombres y mujeres resueltos a vivir y
convivir mejor.
2.6.2. ETIMOLOGIA:
Según la ONG el término "FEMINICIDIO" viene hacer "FEMICIDE" es un homologo a
homicidio de mujeres. Se ha preferido en la voz castellana dominar a esta nueva categoría
de estudio feminicidio, dentro de la cual se pueden abarcar las especificaciones de esta
clase de crímenes contra mujeres.
8
2.6.3. TIPOS DE VIOLENCIA CONTRA LA MUJER:
Los tipos de violencia identificados son causados por los siguientes factores.
2.6.3.1. VIOLENCIA FISICA:
Desde bofetadas, puñetazos, estrangulación y patadas hasta golpes con bastones, porras o
látigos, uso del fuego o de ácidos para causar dolor y daños de larga duración e incluso el
homicidio.
2.6.3.2. VIOLENCIA SEXUAL:
Puede focalizarse inicialmente por las violaciones. Las definiciones de esta conducta
varían de una jurisdicción a otra, sin embargo, durante el último decenio se ha producido
un importante desarrollo en el derecho internacional en lo relativo a la definición y
comprensión de la violación.
2.6.3.3. VIOLENCIA PSICOLOGICA O EMOCIONAL:
Según la ONG Flora Tristán: "Consiste en las amenazas, los comentarios degradantes, el
lenguaje sexista y el comportamiento humillante". Toda violencia física o sexual
repercute también sobre el estado mental de la víctima.
9
2.6.5.3 NIVEL COMUNITARIO:
Se refiere a la influencia de valores, usos, costumbres y de organizaciones comunitarios.
10
actuales victimarios.
2.6.8. FEMINICIDIO POR OCUPACIONES ESTIGMATIZADAS.
Las mujeres son asesinadas por ser mujeres. Sin embargo, hay otras mujeres que lo son
por la ocupación o el trabajo desautorizado que desempeñan. Bajo este criterio se
encuentran aquellas que trabajan en bares y en centros nocturnos. Ellas son las bailarinas,
las meseras y las prostitutas.
11
que tienen problemas con grupos de criminales.
Delincuencia e inseguridad en el país.
No es casualidad que la mayoría de las mujeres asesinadas sean las más jóvenes. Son ellas
las económicamente más activas, las que, por trabajo, por estudio y hasta por divertirse
salen más al ámbito público. Son ellas las que están en las calles, lugar que la cultura
patriarcal reserva a los hombres, mientras destina el doméstico a las mujeres. Teniendo
en mente este "mandato cultural", podemos pensar que muchos hombres se sienten con
autoridad para disponer ya no sólo de sus cuerpos sino también de sus vidas, como si se
tratara de objetos propios y desechables.
Crímenes pasionales:
Ante la ola de criminalidad en contra de mujeres las, autoridades de la Sección de
Feminicidios de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) manifestaron
que, de acuerdo a las averiguaciones, la mayoría de esas muertes violentas se debe a
venganzas pasionales.
Baja Autoestima:
12
violencia familiar y así ayudar a prevenir el feminicidio.
Esto permitiría que las distintas instituciones cuenten con redes que estén
articuladas y que sepan cuántas denuncias han presentado las víctimas para que se
puedan adoptar medidas de prevención", remarcó Arias a la agencia Andina.
Sostuvo que, durante las mesas de trabajo promovidas por el PNUD,
representantes del Ministerio Público contaron que varias mujeres asesinadas
presentaron algunas quejas contra sus parejas antes de morir. Se habían emitido
órdenes de restricción para que los novios, esposos o enamorados no se les
acerquen (a las víctimas) u órdenes de arresto. Pero, cuando la mujer muere, recién
se descubre que no se habían adoptado las medidas necesarias para prevenir esto",
explicó la funcionaria de la ONU.
Muchos crímenes quedan impunes por diversas razones. Por eso, se deben aplicar
de manera efectiva las leyes que están establecidas", agregó Arias.
13
2.14. CONSECUENCIAS
Llegamos a la conclusión que las mujeres sufren violencia doméstica se encuentra
generalmente dentro de las que no pueden salir de una relación ya que no tiene
apoyo económico y dependen de sus parejas.
Estos crímenes esconden su real magnitud por bajo de las faltas de denuncia que
no hacen las mujeres ya sea por temor, vergüenza, o culpa de las cuales terminan
sobreviviendo en ocasiones llegan a morir.
Es importante nombrar al feminicidio como tal.
14
2.15.2. (JOSÉ LA ROSA PÉREZ BIMINCHUMO, 2017) “el delito de feminicidio en
la ciudad de Arequipa y las limitaciones estatales para responder con efectividad a
este problema público en el periodo 2014-2015”
Está demostrado que los actos de sangre cometidos contra las mujeres en nuestro país
principalmente en la ciudad de Arequipa durante los años 2014 y 2015, no fueron acciones
criminales exclusivas de determinadas parejas, grupos humanos o sociedades, que se
desenvolvieron dentro de ciertos niveles socioeconómicos o culturales, sino que estas
acciones feminicidas no tuvieron ninguna clase de distinción o diferenciación;
agresividad humana que empezó cuando las féminas iniciaron o trataron de ejecutar o
desarrollar actividades similares o iguales a los varones dentro de la comunidad, acciones
que no fueron muy bien vistas o aceptadas por los individuos y que supuestamente
mancillaban el honor o ego del llamado macho, concepto que se formó a lo largo del
tiempo y en la que se determinó que el varón era superior.
Conforme a los datos estadísticos publicados por la Comisión Económica para América
Latina y el Caribe (CEPAL) en los años 2014-2015 el Perú llegó a ocupar el segundo
lugar en Latinoamérica en los casos de asesinatos de mujeres; y según las estadísticas del
Observatorio de Criminalidad del Ministerio Público y del Ministerio de la Mujer y
Poblaciones Vulnerables, Arequipa se ubicó también en el segundo lugar en casos de 72
feminicidios después de Lima, actividad criminal que se vio incrementada por las
creencias erróneas que los varones son superiores a la mujeres en todo el desarrollo
humano y cuya pretensión era solamente el de tener el control y dominio de sus parejas,
evitando en todas la formas el reconocimiento de las damas como personas con derecho,
a través de la brutalidad doméstica.
Para enfrentar esta problemática el Estado implementó políticas públicas
a nivel nacional, sobre la atención y protección integral de la mujer, dentro de las cuales
publicó el denominado “Plan Nacional contra la Violencia hacia la Mujer” 2009-2015”,
el que se desarrollò a través de programas y seminarios, incluyéndose la instalación de
los CEM. Otra fue la tipificación del feminicidio en el Código Penal como un delito de
género, se crearon las Comisarías PNP de Familia y Fiscalías especializadas en Violencia
Familiar; lo cual en el período 2009-2012 permitió reducir los índices de feminicidios; en
un 16%; pero a partir el 2013-2015, esto no fue suficiente, ya que se presentaron nuevos
casos y con mucha más agresividad en Lima y en la región de Arequipa, debido a la
indiferencia y pasividad de los interventores públicos para proteger apropiadamente a las
mujeres, dejando de lado las acciones idóneas y eficaces, a pesar de contar con
15
herramientas legales para accionar, permitiendo que el atacante continúe con sus actos
brutales hasta segar la vida de su consorte.
Los mecanismos que usan las instituciones del estado para combatir este flagelo y
modalidad criminal especialmente en esta localidad sureña,
73 durante los últimos años (2014-2015) no ha tenido los resultados deseados debido
también a la falta de preparación y capacitación constante de los investigadores policiales
y jurídicos, aunados a la carencia de infraestructura (casas refugio) para las víctimas o su
entorno, así como el hecho de que los feminicidios acontecidos e investigados por policías
han sido asumidos como casos simples de homicidios o asesinatos más no en esta
modalidad de violencia contra la mujer o tipología criminal, olvidándose en todo
momento las entidades públicas que deben laborar con el profesionalismo y la ética
señalada por el Estado, a fin de cumplir con el compromiso asumido con la población y
con los entes internacionales.
Asimismo, se ha evidenciado que la falta de sensibilidad y de un trabajo
coordinado entre los operadores de justicia (policía, fiscalía y juzgados), es una constante
que afecta la intervención adecuada en los casos de tentativa o asesinato de damas, lo cual
se ha comprobado cuando no se asiste oportunamente a las diligencias preliminares de
una investigación
(Inspecciones ); y en el caso de tentativa, se le exige a la víctima demostrar las agresiones
a través de un examen médico, e incluso ante una fragancia, no se actúa de forma oportuna
contra el agresor (detención), a pesar de las evidencias del delito y de la gravedad de las
lesiones que se muestran, pretextando que no existe el reconocimiento médico legal;
generando en la víctima, familiares y sociedad en general, un clima de desconfianza en
los operadores de justicia por la impunidad en la conducta del agresor.
16
normas y leyes que rigen nuestro país; entre otros. Todos ellos, construyen y dan cuenta
de un “deber ser” como comportamiento humano.
2. La socialización primaria y la socialización secundaria, las redes sociales, los grupos
de pares, el contexto socio-cultural y económico, y las historias personales; determinan el
tipo de masculinidades y femineidades que se formarán en las personas. De tal manera,
los hombres y las mujeres generan su propio sistema de representaciones sociales que
influye en sus percepciones y expectativas con respecto a sí mismos, a sus parejas y a la
sociedad.
3. Estas personas ingresan en relaciones afectivas en las que se genera un vínculo afectivo,
el cual es guiado por el sistema de representaciones
sociales que tienen. El vínculo afectivo supone la puesta en práctica dentro de la pareja
de deberes y derechos establecidos de forma implícita o explícita; que han sido
determinados de manera consensual o impuesta.
Este tipo de vínculo produce entonces una conducta esperada sobre los
individuos con el fin de poder tener ciertas expectativas y seguridad en el
funcionamiento de la pareja.
4. Las mujeres de los casos tratados, a diferencia de los hombres, presentan trabajos más
estables e incluso mejor remunerados. Esta independencia económica permitiría a las
mujeres en ocasiones rebelarse contra sus parejas, generando que muchos hombres luchen
por mantener el poder y control. Este desajuste estructural ocasiona conflictos entre ambas
partes, que pueden materializarse en insultos, golpes, violaciones y feminicidios.
5. El vínculo afectivo de deberes y derechos, se convierte en abusivo cuando se hace uso
de la violencia contra la mujer. La violencia doméstica es un medio que tiene como
finalidad la “reeducación” y “resocialización” de la mujer, o es también el resultado de la
tensión en las negociaciones de cuotas de poder en el hogar con la intención de hacer de
la mujer una
madre y esposa “ejemplar” según el imaginario masculino. Igualmente, la
violencia doméstica podría funcionar como fin para satisfacer el sadismo
del hombre por medio de la demostración e imposición de su poder.
6. Las mujeres que sufren violencia doméstica se encontrarían generalmente dentro de
dos fenómenos: el “ciclo de la violencia” y la “encerrona trágica”; lo que ocasionaría que
muchas veces, las mujeres no logren salir de una relación, ya que no tienen apoyo
económico, ni psicológico, ni redes sociales de apoyo que las ayuden para escapar.
Terminan entonces sobreviviendo y manteniéndose en estas relaciones violentas por falta
17
de oportunidades y temor, que pueden entremezclarse con sentimientos de compasión,
vergüenza, culpa e incluso por algún tipo de atadura sentimental amorosa. Incluso,
muchas veces resultaría más fácil para las mujeres exculpar a sus parejas por la violencia
doméstica que ejercen sobre ellas, ya que parece ser más simple perdonar y olvidar, que
enfrentar la realidad sobre su pareja abusiva y las consecuencias que ello acarrearía.
7. Cuando la condición masculina no está soportada; es decir, cuando existe inseguridad
personal, autoestima baja, problemas económicos, escaso nivel educativo, pobreza,
desempleo o subempleo; es decir, desposesionamiento generalizado de los valores que
constituyen el sistema de representaciones sociales masculino; entre dañada y su
masculinidad puesta en cuestionamiento, aparecen como los desencadenantes del
feminicidio uxoricida en nuestros casos. De tal manera, el pensamiento masculino
feminicidio de “Si me dejas, te mato”,
respondería al último intento de salvaguardar su masculinidad y se presentaría como el
mecanismo último de control sobre el cuerpo y sexualidad femenina frente a la eminente
pérdida de la “posesión” de la
mujer.
10.Cabe señalar que consideramos que no todo hombre que ha sufrido
infidelidad o abandono por parte de su pareja femenina termina asesinándola, pero al
parecer los que han cometido el feminicidio uxoricida en la mayoría de los casos han
sufrido infidelidad o abandono (o intento) por parte de su pareja, tal como se presentan en
nuestros casos y en diversas noticias de la prensa.
11.Por más que dentro de las relaciones de pareja donde se dio el feminicidio uxoricida
es común encontrar historias de violencia doméstica, hay que hacer la separación de
ambos fenómenos. El feminicidio uxoricida tiene como intención aniquilar a la mujer por
la afrenta generada a la masculinidad del hombre. De tal manera, el feminicidio uxoricida
no es simplemente “un paso más de la violencia” como comúnmente se habla de él. No
se trata de un golpe más fuerte ni las causas son las mismas que las de la violencia
doméstica. De esta manera, el feminicidio uxoricida
terminaría siendo una forma de relacionamiento entre hombres y mujeres,
el resultado de una negociación fallida entre ambos, dentro de un proceso
de lucha de poder y resistencia al cambio de la estructura social patriarcal.
12.El feminicidio uxoricida se inscribe así en historias de parejas o ex –parejas dando
cuenta de la violencia contra la mujer que aún se mantiene a pesar de los avances que se
dan en materia de derechos de las mujeres y a pesar del desarrollo en el que se encamina
18
nuestra sociedad. Es decir, los avances en la búsqueda de la equidad de hombres y mujeres
no van a la par con los cambios que deberían de estar dándose en las mentalidades de
todas las personas, ya que se trata de un proceso de larga data. De tal manera, se podría
decir que nos encontramos en un contexto donde conviven el discurso de equidad de
género que puede ser compartido sobre todo por personas de generaciones más jóvenes,
con mayor nivel educativo y otros; junto con otras como los hombres y mujeres de los
casos presentados quienes mantienen el ideal patriarcal, por más que en la práctica éste
se encuentre en desestructuración por la imposibilidad masculina de cumplir cabalmente
con su rol de proveedor del hogar.
13.Se suele tratar a quienes comenten estos delitos como personas emocionalmente
inestables, enfermos mentales, intolerantes a emociones fuertes, pasivos-agresivos, etc.
Es decir, se hace lo que Myriam Jimeno llamaría la “patologización de la violencia”. Si
bien consideramos que puede existir cierta forma de afección psicológica, lo que prima y
lo que es importante en estos casos es el imaginario social que prescribe que la mujer es
una posesión masculina. Esta situación es la que debe ser objeto de crítica y juicio social,
ya que la fuerza de esta creencia es la que permite el uso de la atenuante de la emoción
violenta. En nuestros casos de feminicidio uxoricida no se tratan de hechos meramente
impulsivos, sino que analizándolos detenidamente se puede descubrir su
predeterminación y hasta se podría pronosticar estas “muertes anunciadas”.
14.Estos crímenes esconden su real magnitud bajo las faltas de denuncias por parte de las
mujeres ya sea por temor, vergüenza o culpa. También se esconden bajo formas de juzgar
y nombrar del Poder Judicial, los operadores de justicia, los medios de comunicación y la
sociedad en
19
2.16. TENTATIVA DE FEMINICIDIO.
La tentativita es cuando el agresor intentó asesinar a su conyugue. Lo cual, está aún paso
de cometer el feminicidio. Ante esto las mujeres deben de actuar, pero muchas, callan por
otros factores tal como argumentamos en la justificación, otros factores, la extrema
pobreza, amenazas, intimidación, cultura familiar, etc.
2.17. HIPÓTESIS:
La educación con valores desde el hogar y la escuela y su puesta en práctica en la vida
cotidiana, es la mejor alternativa para mitigar la agresión contra la mujer como el
feminicidio y su tentativa.
2.18. METODOLOGÍA
20
III. CONCLUSIONES.
21
IV. BIBLIOGRAFÍA
https://es.wikipedia.org/wiki/Feminicidio
http://www.flora.org.pe/pdfs/Feminicidio.pdf
http://www.flora.org.pe/investigaciones/feminicidio.pdf
22
V. ANEXOS
23
24