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E X L I B R I S
HEMETHERII VALVERDE TELLEZ

Episcopi Leonensis

y
M
CASA EDITORIAL, IMPRENTA Y LITOGRAFIA "LA EUROPEA1

RESEÑA HISTÓRICA

POR

Enrique d e QlaVarría y Ferrari

TOMO I

MEXICO
IMPRENTA, ENCüAnKIíXACION" Y PAPELEEN
"LA EUROPEA"

Propietario, Temando Oamaoho. I Director, Juan Agailar Vera.


Calle de S a n t a Isabel N ú m . 9

1895
a M
IMfóM Vii; Z f à i W t è
9 iT

HOMENAJE DE RESPETO
<. . . . D i g o , p u e s , q u e h a y h o m b r e s , q u e con n o
< s e r ellos p a r a n a d a , t o m a n p o r oficio d e c i r m a l d e
« t o d o a q u e l l o q u e n o v a m e d i d o con su g r o s e r o jui-
< ció. T i e n e n o t r a c o s a r a r a , d i g n a de t a l e s s u j e t o s ,
AL SEÑOR GENERAL
« y es, q u e si o y e n a l g o f u e r a de lo q u e ellos h a n leí-
< do e n c u a t r o a u t o r e s d e g r a m á t i c a , lo a s q u e a n t a n -

. PORFIRIO DIAZ
< to, y lo b u r l a n y m o f a n de t a l s u e r t e , c o m o si s ó l o
< a q u e l l o c o n q u e ellos h a n d e s a y u n a d o su e n t e n d i -
< m i e n t o , f u e s e lo c i e r t o y d e fe, y lo d e m á s f u e s e
« p a t r a ñ a y s u e ñ o . Bien s é q u e el i n g e n i o h u m a n o
< n o s e c o n t e n t a de u n a m a n e r a , ni con l a s m i s m a s
< c o s a s , y así, d e lo que á u n o s p a r e c e b i e n , de e s o
c mismo m u r m u r a m o s otros, y aquellos a d m i r a n y
« e n g r a n d e c e n lo q u e e s t o s a b o m i n a n y b u r l a n . —
Y Á LA S E Ñ O R A
« PEDRO MALÓN DE CHEIDE. >
r

« . . . . Prefiero yo cualquier esceso de benevolen-


« c i a c o n l o s vivos, al olvido d e los m u e r t o s ; DA CARMEN ROMERO RUBIO DE DIAZ
« p u e s v a l e m á s e n a l t e c e r c o n a p o t e o s i s á los n o j u z -
« g a d o s p o r la p o s t e r i d a d , q u e a g u a r d a r t r e s c i e n t o s
< años p a r a c o n s a g r a r con mezquinas é incorrectas
« estatuas la gratitud.—EMILIO CASTELAR. »

ESTA OBRA ES P R O P I E D A D DEI, AUTOR.

FONDO E M E T E R t O
VALVERDE Y TELLEZ
PRIMERA PARTE
De 1338 a 1821

PRESENTE D E CARIÑO

A L SE. D. M A N U E L E O M E E O EUBIO

'V
C
CAPITULO PRIMERO

1538. —1560.

Curioso sería el libro en que se procurase hacer la historia de los


espectáculos públicos en México.
Para ello habría de remontarse su autor á los días mismos de la
Conquista y escudriñar la obra maravillosa de la propagación de la
Fe, realizada por los venerables religiosos que á estas regiones envió
la pía Providencia. Esos no bien admirados varones, cuya sabiduría
hace creer que sobre sus cabezas se repitió el prodigio realizado con
los apóstoles al cumplirse los días de Pentecostés, nada desperdicia-
ron de cuanto pudiese herir de un modo tangible la imaginación de
las multitudes idólatras, y por consiguiente fueron aquí los primeros
en usar de las representaciones teatrales. Así procedió el clero cris-
tiano al hacer representar, en el interior de sus catedrales, pasos de la
Sagrada Escritura y del Evangelio, para contrarrestar la popularidad
y los escándalos de los histriones italianos en los siglos X I y si-
guientes, época en que también pasaron á España, puesto que Alon-
so X , el Sabio, hubo de prohibir esas representaciones á los clérigos,
como ya lo había hecho, conminándolos con severas penas, el Papa
Inocencio I I I .
Naturalmente, los pasos representables no fueron ni podían ser xico, de que se tiene noticia, según lo refiere el Sr. Icazbalceta en la
otra cosa que rudimentarias farsas: en el siglo X V y en España, este Introducción que puso á su Edición de los Coloquios de González
género literario no pasó de las Eglogas en acción de Juan de la Enci- Eslava.
na, y de la tragicomedia de Rodrigo de Cota y Fernando de Rojas; ' 'No fué menos solemne la fiesta que celebraron el día de la Encar-
en el siguiente, que fué el de la Conquista, al verificarse ésta sólo ha- nación, contiriúa diciendo el Sr. Icazbalceta: cerca de la puerta del
bíanse señalado como autores Gil Vicente y Torres Naharro, prime- Hospital de los Cofrades de la Encarnación, aparejaron la escena
ro de nuestros preceptistas,*}' aun no aparecía Lope de Rueda, á quien para representar un auto que fué la Caída de nuestros primeros padres.''
cabe la gloria de haber sentado los cimientos del Teatro Español. Estaba tan adornada la morada de Adán y Eva (aquí copia á Mo-
Eos citados venerables religiosos, propagadores de la fe cristiana en tolinía), que bien parecía paraíso de la tierra, con diversos árboles con
México, no pueden pretender puesto entre los dramáticos castellanos; frutas y flores, de ellas naturales, y de ellas contrahechas de pluma y
pero hicieron más, mucho más de lo que debía esperarse de humanas oro: en los árboles mucha diversidad de aves, desde buho y otras aves
fuerzas, y ennobleciendo, pudiéramos decir, las farsas ó pasos, sacá- de rapiña, hasta pajaritos pequeños, y sobre todo tenían muy muchos
ronlos al aire libre y dándoles por escenario el suelo feraz y el es- papagayos, y era tanto el parlar y el gritar que tenían, que á veces
pléndido cielo americanos, hiciéronlos servir para de un modo práctico estorbaban la representación: yo conté en un solo árbol catorce papa-
explicar á las multitudes la doctrina y misterios de nuestra Religión. gayos, entre pequeños y grandes. Había también aves contrahechas
Diez y siete años después de la Conquista, hiriéronse en Tlaxca- de oro y pluma, que era cosa muy de mirar. Los conejos y liebres
la "solemnes fiestas el 20 de Junio de 1538, día de Corpus Christi, eran tantos, que todo estaba lleno de ellos, y otros muchos animalejos,
" y en ellas se sacó por primera vez en público el escudo de armas que yo nunca hasta allí los había visto. Estaban dos ocelotles atados,
'' " q u e el Emperador Carlos V concedió á los Tlaxcaltecas cuando á su que eran bravísimos, que ni son bien gato ni bien onza; y una vez
"pueblo hizo ciudad." Si en ese día no hubo representación, aca- descuidóse Eva y fué á dar en el uno de ellos, y él, de buen criado,
so por falta de tiempo—dice D. Joaquín García Icazbalceta,—bien desvióse: esto era antes del pecado, que si fuera después, tan en ho-
reparada quedó luego la omisión, porque el lunes siguiente (24 de ra buena no se hubiese llegado. Había otros animales bien contrahe-
Junio), día de San Juan Bautista, hubo cuatro, según lo refiere el Pa- chos, metidos dentro unos muchachos; éstos andaban domésticos y
dre Motolinía. Esos cuatro autos estuvieron escritos en prosa, y los jugaban y burlaban con ellosTAdán y Eva. Había cuatro ríos-ó fuen-
indios que los representaron aprendiéronlos de memoria en sólo los tes que salían del paraíso, con sus rétulos que decían Phison, Gheon,
dos días sábado y domingo. El asunto del primero " f u é la Anun- Tigris, Euphrates; y el árbol de la vida en medio del paraíso, y cerca
''dación de la Natividad de San Juan Bautista, hecha á su padre Zaca- de él el árbol de la ciencia del bien y del mal, con muchas y muy her-
r í a s , que se tardó en ella una hora, acabando con un gentil motete mosas frutas contrahechas de oro y pluma.
"en canto de órgano. Y luego adelante, en otro tablado, representa- ' 'Estaban en el redondo del paraíso tres peñoles grandes y una
r o n la Anunciación de Nuestra Señora, que fué mucho de ver, y se sierra grande; todo esto lle^ro de cuanto se puede hallar en una sierra
' 'tardó tanto como en el primero. Después, en el patio de la Iglesia de muy fuerte y fresca montaña, y todas las particularidades que en Abril
"San Juan, á do fué la procesión, luego en allegando, antes de misa, y Mayo se pueden hallar, porque en contrahacer una cosa al natural,
"en otro cadalso, que 110 eran poco de ver los cadalsos cuan gracio- estos indios tienen gracia singular. Pues aves no faltaban, chicas ni
s a m e n t e estaban ataviados y enrosados, representaron la Visitación grandes, en especial de los papagayos grandes, que son tan grandes
"de Nuestra Señora á Santa Isabel. Después de misa, se representó como gallos de España; de éstos había muchos, y dos gallos y una
"la Natividad de San Juan, y en lugar de la circuncisión, fué bautis- gallina de los monteses, que cierto son las más hermosas aves, que
"mo de un niño de ocho días de nacido, que se llamó Juan; y antes yo he visto en parte ninguna: tendría un gallo de aquellos tanta car-
' 'que dieran al mudo Zacarías las escribanías que pedía por señas, ne como dos pavos de Castilla.
" f u e bien de reír lo que le daban, haciendo que no le entendían. Aca-
''Había en estos peñoles animales naturales y contrahechos. En uno
"bóse este auto con Benedictus Dominus Deus Israel, y los parientes
de los contrahechos estaba un muchacho vestido como león, y esta-
" y vecinos de Zacarías, que se regocijaron con el nacimiento del hi-
ba desgarrando y comiendo un venado que tenía muerto; el venado
"jo, llevaron presentes y comidas de muchas maneras, y puesta la me-
era verdadero, y estaba en un risco que se hacía entre una peñas, y
"sa asentáronse á comer, que ya era h o r a . "
fué cosa muy notada.
Tales fueron las primeras representaciones de autos hechas en Mé- "Llegada la procesión, comenzóse luego el auto: tardóse en él gran
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o.
f• y rato porque antes que Eva comiese ni Adán consintiese, fué y vino
ese villancico de 1538 es la más antigua muestra que conozco de la
K Eva, de la serpiente á su marido, y de su marido á la serpiente, tres
• poesía colonial.
ó cuatro veces, siempre Adán resistiendo, y como indignado, lanzaba
de sí á Eva: ella rogándole y molestándole, decía que bien parecía el Los mismos indios de Tlaxcala representaron en 1539, en el día del
poco amor que le tenía, y que más le amaba ella á él que no él á ella; Corpus., v e n celebridad de las paces de 1538 entre España y Francia,
y echándole en su regazo, tanto le importunó que fué con ella al ár- la Conquista de Jerusalén. Con igual ocasión los españoles de la Capi-
bol vedado, y Eva en presencia de Adán comió y dióle á él también tal habían representado la Conquista de Rodas, habiendo referencia á
que comiese. Y en comiendo, luego conocieron el mal que habían he- ello en las Actas del Ayuntamiento, que dicen que en 27 de Marzo
cho, y aunque ellos se escondían cuanto podían no pudieron hacer tan- de 1539 se mandaron librar á Alonso de Avila ciento cuatro pesos y
to que Dios no los viese, pues vino con gran majestad, acompañado de medio de oro'que demostró haber gastado en nueve varas de damasco
muchos ángeles; y después que hubo llamado á Adán, él se excusó y nueve de tafetán y paño, y una gorra de terciopelo y naguas y ca-
con su mujer y ella echó la culpa á la serpiente, maldiciéndolos Dios misas y otras cosas que se le mandaron comprar para el palio y las
y dando á cada cual su penitencia, trajeron los ángeles dos vestiduras fiestas, y en la madera y clavazón que se emplearon en los tablados.
bien contrahechas, como de pieles de animales, y vistieron á Adán y " L a primera parte de la fiesta de los indios de Tlaxcala, que se ce-
E v ^ j / t o que más fué de notar fué el verlos salir desterrados y llo- lebró el 5 de Junio, consistió en un simulacro de la Conquista de Je-
rando: llevaban á Adán tres ángeles y á Eva otros tres, é iban can- rusalén. Al efecto, aprovecharon unos edificios comenzados á levan-
tando, en canto de órgano, Circumdederunt me. Esto fué tan bien tar en una llanura inmediata á Tlaxcala, destinados para nueva casa
representado, que nadie lo vió que no llorase muy recio: quedó un de Cabildo. Hincheron de tierra la parte ya labrada, que tenía de al-
querubín guardando la puerta del paraíso, con espada en la mano. tura un estado, y sobre ese terraplén levantaron cinco torres, la más
alta en el centro y las otras en los ángulos. Enlazaba las torres una
"Luego allí estaba el mundo, otra tierra cierto bien diferente de la cerca almenada, y toda la fábrica estaba muy adornada de flores.
que dejaban, porque estaba llena de cardos y de espinas, y muchas cu- Aquella especie de castillo representaba la ciudad de Jerusalén. En-
lebras; y también había conejos y liebres. Llegados allí los recién mo- frente, á la parte oriental, se hallaba aposentado el Emperador Carlos
radores del mundo, los ángeles mostraron á Adán cómo había de labrar V ; á la derecha de Jerusalén quedaba el ejército español; al otro la-
y cultivar la tierra, y á Eva diéronle husos para hilar y hacer ropa para do el de las tropas de Nueva España. En medio de la plaza estaba San-
su marido é hijos: y consolando á los que quedaban muy desconsola- ta Fe, memoria de la conquista de Granada, y allí había de situarse
dos, se fueron cantando, en canto de órgano, un villancico que decía: el Emperador con su ejército. Todos estos lugares estaban cercados
á imitación de fortalezas.
"Para qué comió "Llegada la hora de comenzar el espectáculo y sentados en el tabla-
la primer casada, do del Santísimo Sacramento los que componían la procesión, comen-
para qué comió zó á entrar en la plaza el ejército de España con sus trompetas, ataba-
la fruta vedada. les, tambores y pífanos, y sus banderas de las diferentes provincias,
La primer casada marchando de cinco en cinco: en la retaguardia iban los alemanes é
ella y su marido, italianos: un señor, indio principal, representando á D. Antonio Pi-
á Dios han traído mentel, Conde de Bénavente,""era el general de este ejército. Entró en
en pobre posada, seguida el de Nueva España, repartido en diez capitanías, y los que
por haber comido las formaban iban vestidos con ricos trajes, á l a vanguardia Tlaxcala
la fruta v e d a d a . " y México, y después los huastecos, zempoaltecos, mixtéeos, colhua-
ques y los del Perú, Santo Domingo y Cuba, tarascos y cuautemal-
"Este auto fué representado por los indios en su propia lengua, y tecos, mandado todo por otro indio principal representando á D. An-
así muchos de ellos tuvieron lágrimas y mucho sentimiento, en es- tonio de Mendoza, virrey á la sazón de la Nueva España.
pecial cuando Adán fué desterrado y puesto en el m u n d o . " "Los ejércitos infieles estaban mandados por otros indios que repre-
E s digno de notar, añade el Sr. Icazbalceta, que se cantaran esos sentaban á Don Hernando Cortés que hacía oficio de Soldán y á Pe-
versos castellanos por remate de un auto en lengua mexicana, y más dro de Alvarado, capitán general. No se alcanza la razón, dice el Sr.
cuando ésta se prestaba bien á la forma poética. De todas maneras, Icazbalceta, cuyas son estas noticias, que los religiosos, autores ú or-
E. H . T.—T. I.—2
• ií
denadores de la fiesta, tuvieron para agraviar á los conquistadores
poniéndolos por jefes en el bando de los moros. " Los moros conocieron su error, hicieron señal de paz, enviaron su
En el principio del simulacro, los moros, después de pelear un ra- parlamentario, acudió el Emperador que tomó al Soldán de la mano,
to, se retrajeron á la ciudad, pero habiendo recibido un gran refuer- lo llevó delante del Papa y los cardenales, y postrándose todos ante
zo, hicieron una nueva salida y vencieron uno tras otro al ejército es- el Santísimo Sacramento, dieron gracias á Dios por tanta merced.
pañol y al de Nueva España. Eos capitanes Benavente y Mendoza Lo más singular de este simulacro fué su remate. Traía consigo el
lo participaron al Emperador, por medio de cartas que el cronista Soldán muchos al parecer moros; pero que no eran sino indios adul-
Motolinía copia textualmente, así como las respuestas del Soberano. tos, prevenidos al intento, los cuales pidieron el bautismo al Papa, y
Este, con los reyes de Francia y de Hungría, todos con sus coronas fueron luego allí mismo real y verdaderamente bautizados.
en la cabeza, acudió en socorro de los suyos entrando en Santa Fe, Siguió después su curso la procesión, y en tres lugares distintos se
y saliendo de ella á acometer á los moros, que una vez más quedaron representaron tres autos : fué uno la Tentación del Señor: primero, con-
vencedores. En tal aprieto, el Emperador escribió al ¡Papa, quien gregáronse los demonios para dar la comisión á Lucifer, quien se dis-
después de consultarlo con los cardenales, contestó que ya mandaba frazó de ermitaño ; pero no pudo encubrir los cuernos y las uñas y és-
hacer plegarias en toda la cristiandad. Dos veces más fueron los es- tas le salían de cada dedo de los pies y de las manos, tan largas, como
pañoles rechazados, y entonces el Emperador y los demás reyes y je- medio palmo : hechas la primera, segunda y tercera tentación, en que le
fes, con el Papa y los cardenales, fueron á arrodillarse ante el Santí- ofreció al Señor las riquezas de Nueva España, Castilla, Jerusalén,
simo Sacramento, apareciéndoseles un ángel que les recomendó no Roma, Africa, Europa y Asia, Jesús le respondió: Vade, Sátkana, y
desmayasen, pues en su auxilio venía el Apóstol Santiago, que en el demonio se hundió en el peñón, que era hueco, entre espantoso rui-
efecto entró montando un caballo "blanco como la nieve, " y se pu- do que hicieron los demonios: vinieron luego los ángeles con comi-
so á su frente; pero esa vez también los moros quedaron vencedores,. da para el Señor y le pusieron la mesa entre cánticos de alabanza.
El segundo auto representado ese día, fué el déla Predicación de San
Como la ayuda del Apóstol Santiago no había sido de provecho,
Francisco, quien comenzó hablando á las aves y encargándoles que en
fué preciso ocurrir de nuevo á la oración. De nuevo se presentó el
las mañanas y en las tardes loasen y cantasen á Dios: y en esto se
ángel diciéndoles que Dios había permitido que fueran humillados pa-
presentó una espantable fiera que destruía los ganados, y el Santo la
ra probar su constancia, pero que en su auxilio enviaba á San Hi-
hizo prometer que nunca haría más daño en aquella tierra. Después
pólito, patrón de Nueva España. Elegó éste montando un caballo
comenzó su sermón diciendo que mirasen cómo aquel bravo animal
morcillo y juntándose cotí Santiago emprendieron un furioso ataque,
obedecía la palabra de Dios, y que ellos que estaban dotados de razón,
arrojándose los combatientes " u n a s pelotas grandes hechas de es-
estaban obligados á guardar los Santos Mandamientos. Le interrum-
padañas, y alcancías de barro secas al sol y llenas de almagre moja-
pió un personaje representando un indio borracho, á quien reprendió
do, que al que acertaban parecía que quedaba mal herido y lleno de
y mandó callar, sin conseguir que le obedeciese, por lo cual llamó á
sangre, y lo mismo hacían con unas tunas coloradas: las flechas te-
unos demonios que cargaron con el beodo. Luego interrumpieron el
nían unas bolsitas llenas de almagre, " para producir igual aparien-
sermón unas hechiceras '' muy bien contrahechas,'' y como tampoco
cia : á espaldas de Jerusalén, entre dos torres, estaba hecha una casa
hicieron caso al Santo, otros demonios cargaron á su turno con ellas ;
de paja á la cual se puso fuego " p a r a imitar el incendio. " En el ma-
y así fueron representados y reprendidos varios vicios, terminando
yor hervor de la batalla, apareció en la torre del homenaje ó del cen-
todo con prender fuego al infierno, '' que tenía una puerta falsa por
tro de la fortaleza el arcángel San Miguel, que entre el espanto de to-
donde salieron los que estaban dentro, y ardió tan espantosamente,
dos dijo á los moros: " S i Dios mirase á vuestras maldades y pecados
que pareció que nadie se había escapado, lo cual ponía mucha grima
' | y no á su gran misericordia, ya os habría puesto en el profundo del
y espanto en los circunstantes, aun á los que sabían que nadie se que-
infierno, y la tierra se hubiera abierto y tragádoos vivos; pero por-
maba. " El tercer auto fué el del Sacrificio de Abraham, para incul-
'j ( l u e h a b é i s t e n i d o reverencia á los Lugares Santos, quiere usar con
car á los presentes la obediencia á los mandatos de Dios. " Y con
| 'vosotros su misericordia y esperaros á penitencia, si de todo cora-
esto, concluye el cronista, volvió la procesión á la iglesia. "
z ó n á El os convertís; por lo tanto, conoced al Señor de la Majes-
t a d , Criador de todas las cosas, y creed en su preciosísimo Hijo Je- " E s muy probable, dice el Sr. Icazbalceta, que todas estas fiestas
s u c r i s t o , y aplacadle con lágrimas y verdadera penitencia. " Y esto de Tlaxcala fueran dispuestas por el P. Fray Toribio de Motolinía,
dicho, desapareció, guardián de aquel convento, y señaladamente parece haber sido su-
ya la del simulacro de la Conquista de Jerusalén. Si los demás escri-
a

' a
totes hubieran puesto igual cuidado en transmitirnos la relación cir-
ma, según se había hecho hasta allí, puesto que en 1578 y en el Co-
cunstanciada de las fiestas de otras partes, tendríamos hoy gran co-
legio de los Jesuítas, se representó por los alumnos una Tragedia en
pia de datos para escribir la historia de las representaciones sacras en
cinco actos, que existe impresa, intitulada Triunfo de los Santos, en
México. Mas no fué así, pues por lo común se contentaron con la
que se representa la persecución de Diocleciano y la prosperidad que se
mención general de ellas.
siguió con el imperio de Constantino. Figuran en esa obra San Silves-
" T a m b i é n en la capital de México hacían los indios sus represen-
tre Papa, Constantino, Daciano, Cromacio, San Pedro, San Doroteo,
taciones de autos sagrados. Fué muy célebre la del Auto delJuicio Fi-
San Juan, San Gorgonio, Albino, Olimpio, un Nuncio y un Secreta-
nal, compuesto en lengua mexicana por el gran misionero Frav An-
rio, la Iglesia, la Fe, la Esperanza, la Caridad, la Gentilidad, la Ido-
drés de Olmos, y representado en la capilla de San José de Naturales, á
latría y la Crueldad.
presencia del Virrey D. Antonio de Mendoza, del Obispo D. Fray Juan
E11 las meritísimas obras del Sr. Icazbalceta, ilustre sabio, puede
de Zumarraga, y de un gran concurso de gente, así de la ciudad co-
verse mucho, que aquí 110 cabe, sobre estos asuntos: allí se examina
mo de la comarca.' 1 Causó gran edificación á todos, indios y españo-
el cómo y por quién se representaban los autos sacramentales, presu-
les, " p a r a darse á la virtud y dejar el mal vivir, y á muchas mu-
miéndose que su primer asilo fueron los templos y sus actores perso-
jeres erradas, para, movidas de temor y compungidas, convertirse á
nas eclesiásticas. Así lo indica González Eslava, haciendo, en uno de
Dios " Ese auto debió representarse entre 1535 y i 5 4 8 . De esto ha-
sus coloquios, decir á la Presunción " q u e iba á la iglesia á ver á los
blo Mendieta en su Historia Fclesiástica Indiana.
monacillos que recitaban el Esgrima, título de ese coloquio. Después
En la escrita por Dávila Padilla se refiere que en el Corpus de 1575 salieron las representaciones á las calles, según se ve en varios pasa-
en Etla, de Oaxaca, Fray Alonso de la Anunciación dispuso se le¡ jes del Diario de Guijo, en que se lee: " e n 1658, á 8 de Junio, pu-
representase un auto á los indios para instruirlos en la fe, y levantó sieron la custodia en el lugar acostumbrado para la comedia, y oyó-
o mas bien improvisó, un estrado cubierto para abrigo del Santísimo la el Virrey, Audiencia y Tribunales, y algunos Prebendados. " " E n
y de las personas principales que debían presenciar la representación 1653, octava del Corpus, estuvo el tablado donde se representó la co-
Con la gente que en él cargó, vencióse el estrado, envolviendo en su media, al lado izquierdo de las andas donde estaba el Santísimo Sa-
ruma al Santísimo, á los concurrentes y al mismo Fray Alonso, que cramento." " E n 3 de Agosto del mismo año prosiguió la procesión
allí perdió la vida, con otros muchos vecinos. hasta la puerta de la Catedral, y en ella explicó la fábula un repre-
De la antigüedad de las representaciones sacramentales en México sentante llamado Medina. " " E n 1660 no se puso el tablado en el
puede presumirse, por el hecho de que D. Fray Juan de Zumarraga,' cementerio de la Catedral, sino en los Portales de la Audiencia de
primer Obispo, prohibió las representaciones poco honestas que se ha- abajo. "
cían en la procesión del Corpus; volvieron á consentirse después de
su muerte, acaecida en 1548, aunque según un antiguo cronista, poco
tardo en revocarse el permiso, porque estando en la fiesta del Corpus
todo dispuesto para dar la función y aparejados los representantes, 11o-
CAPITULO II
vio tanto que no fué posible sacar la procesión, y esto lo tomó el Ca-
bildo en Sede vacante, como un aviso del cielo, de que debía mante- 1560 1700.
nerse la prohibición del venerable Obispo. Este no quiso sin duda
condenar sino solo lo profano y deshonesto, pues según otro escri-
Ignórase también cuáles fueron las piezas que entonces solían re-
presentarse y los nombres de sus autores. Sin duda se echaba mano
de las escritas en España ; pero 110 faltaron en México quienes pudie-
n Í ó cín f r f• ' q U e d e d Í C Ó a l S r " Z u m á r r a ^ é imprimió
en 1546. Consta también que el Presbítero D. Juan Pérez Ramírez ran forjarlas apropiadas al carácter y costumbres del nuevo pueblo:
cada ano recibía «a;-,«/« pesos de minas por hacer la lista de las S los autores debieron abundar, pues en uno de los coloquios de Eslava
presentaciones sagradas, v e n : 5 4 7 compuso un auto que llamó dice Doria Murmuración á Remoquete '' poco ganarás á poeta, que hay
posono espiritual entre el Pastor Pedro y & Iglesia El te - más que estiércol: busca otro oficio.''
cer concilio mexicano, celebrado en 1585, renovó la prohibición de E l más antiguo y famoso autor de quien se han conservado obras
of de esta especie escritas en México, fué el Presbítero Fernán González
rcía del
r ^Obispo,
r L r v r I a s lglesias; p
las de historias sagradas y
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° « ^
cosas santas y útiles al al- de Eslava, de quien el Sr. Icazbalceta supone que puede haber sido
a

' a
totes hubieran puesto igual cuidado en transmitirnos la relación cir-
ma, según se había hecho hasta allí, puesto que en 1578 y en el Co-
cunstanciada de las fiestas de otras partes, tendríamos hoy gran co-
legio de los Jesuítas, se representó por los alumnos una Tragedia en
pia de datos para escribir la historia de las representaciones sacras en
cinco actos, que existe impresa, intitulada Triunfo de los Santos, en
México. Mas no fué así, pues por lo común se contentaron con la
que se representa la persecución de Diocleciano y la prosperidad que se
mención general de ellas.
siguió con el imperio de Constantino. Figuran en esa obra San Silves-
" T a m b i é n en la capital de México hacían los indios sus represen-
tre Papa, Constantino, Daciano, Cromacio, San Pedro, San Doroteo,
taciones de autos sagrados. Fué muy célebre la del Auto delJuicio Fi-
San Juan, San Gorgonio, Albino, Olimpio, un Nuncio y un Secreta-
nal, compuesto en lengua mexicana por el gran misionero Frav An-
rio, la Iglesia, la Fe, la Esperanza, la Caridad, la Gentilidad, la Ido-
drés de Olmos, y representado en la capilla de San José de Naturales, á
latría y la Crueldad.
presencia del Virrey D. Antonio de Mendoza, del Obispo D. Fray Juan
E11 las meritísimas obras del Sr. Icazbalceta, ilustre sabio, puede
de Zumarraga, y de un gran concurso de gente, así de la ciudad co-
verse mucho, que aquí 110 cabe, sobre estos asuntos: allí se examina
mo de la comarca.' 1 Causó gran edificación á todos, indios y españo-
el cómo y por quién se representaban los autos sacramentales, presu-
les, " p a r a darse á la virtud y dejar el mal vivir, y á muchas mu-
miéndose que su primer asilo fueron los templos y sus actores perso-
jeres erradas, para, movidas de temor y compungidas, convertirse á
nas eclesiásticas. Así lo indica González Eslava, haciendo, en uno de
Dios " Ese auto debió representarse entre 1535 y i 5 4 8 . De esto ha-
sus coloquios, decir á la Presunción " q u e iba á la iglesia á ver á los
blo Mendieta en su Historia Eclesiástica Indiana.
monacillos que recitaban el Esgrima, título de ese coloquio. Después
En la escrita por Dávila Padilla se refiere que en el Corpus de 1575 salieron las representaciones á las calles, según se ve en varios pasa-
en Etla, de Oaxaca, Fray Alonso de la Anunciación dispuso se le¡ jes del Diario de Guijo, en que se lee: " e n 1658, á 8 de Junio, pu-
representase un auto á los indios para instruirlos en la fe, y levantó sieron la custodia en el lugar acostumbrado para la comedia, y oyó-
o mas bien improvisó, un estrado cubierto para abrigo del Santísimo la el Virrey, Audiencia y Tribunales, y algunos Prebendados. " " E n
y de las personas principales que debían presenciar la representación 1653, octava del Corpus, estuvo el tablado donde se representó la co-
Con la gente que en él cargó, vencióse el estrado, envolviendo en su media, al lado izquierdo de las andas donde estaba el Santísimo Sa-
ruma al Santísimo, á los concurrentes y al mismo Fray Alonso, que cramento." " E n 3 de Agosto del mismo año prosiguió la procesión
allí perdió la vida, con otros muchos vecinos. hasta la puerta de la Catedral, y en ella explicó la fábula un repre-
De la antigüedad de las representaciones sacramentales en México sentante llamado Medina. " " E n 1660 no se puso el tablado en el
puede presumirse, por el hecho de que D. Fray Juan de Zumarraga,' cementerio de la Catedral, sino en los Portales de la Audiencia de
primer Obispo, prohibió las representaciones poco honestas que se ha- abajo. "
cían en la procesión del Corpus; volvieron á consentirse después de
su muerte, acaecida en 1548, aunque según un antiguo cronista, poco
tardo en revocarse el permiso, porque estando en la fiesta del Corpus
todo dispuesto para dar la función y aparejados los representantes, 11o-
CAPITULO II
vio tanto que no fué posible sacar la procesión, y esto lo tomó el Ca-
bildo en Sede vacante, como un aviso del cielo, de que debía mante- 1560 1700.
nerse la prohibición del venerable Obispo. Este no quiso sin duda
condenar sino solo lo profano y deshonesto, pues según otro escri-
Ignórase también cuáles fueron las piezas que entonces solían re-
presentarse y los nombres de sus autores. Sin duda se echaba mano
de las escritas en España ; pero 110 faltaron en México quienes pudie-
n Í ó cín f r f• ' q U e d e d Í C Ó a l S r " Z u m á r r a ^ é imprimió
en 1546. Consta también que el Presbítero D. Juan Pérez Ramírez ran forjarlas apropiadas al carácter y costumbres del nuevo pueblo:
cada ano recibía «a;-,«/« pesos de minas por hacer la lista de las S los autores debieron abundar, pues en uno de los coloquios de Eslava
presentaciones sagradas, v e n I 5 4 7 compuso un auto que Hamo dice Doña Murmuración á Remoquete '' poco ganarás á poeta, que hay
Posono espirüual entre el Pastor Pedro y & Iglesia El te - más que estiércol: busca otro oficio.''
cer concilio mexicano, celebrado en 1585, renovó la prohibición de E l más antiguo y famoso autor de quien se han conservado obras
of de esta especie escritas en México, fué el Presbítero Fernán González
rcía del
r ^Obispo,
r L r v r I a s lglesias; p
las de historias sagradas y
e r
° « ^
cosas santas y útiles al al- de Eslava, de quien el Sr. Icazbalceta supone que puede haber sido
T

Ú
11

andaluz y haber escrito entre 1567 y 1600. Sus Coloquios Espiritua- "Con alas de amor se extiende
les y Sacramentales y poesías sagradas, se imprimieron por primera mi querer firme y extraño,
vez en México en 1610, y el Sr. Icazbalceta los publicó en segunda puro, sin mezcla de engaño;
edición en 1877. De ellos dice ese insigne sabio : "Tenemos, en pri- muestra por donde se entiende
mer lugar, que no todos son precisamente en loor del Misterio de la la fineza de mi paño.
Eucaristía, y que algunos no constan de un solo acto, pues hay uno "Vuestra virtud reverbera
de siete jornadas y otro de dos. Conformándose con el uso general- en mi corazón constante,
mente admitido en su tiempo, no economizó el autor las figuras ale- y él será de aquí adelante
góricas y casi siempre introdujo el personaje de Bobo ó Simple, con el á vuestro querer, de cera
principal objeto de provocar la risa. Aunque se podrán notar defec- y á los vicios, de diamante:
tos en los Coloquios, y más si se cae en el error de juzgarlos conforme "Compáselo aquel compás
á las reglas del gusto dominante en nuestra época, tampoco será di- que á vuestro querer cumpliere,
fícil señalar en ellos bellezas que compensen con usura los defectos; que lo que en él se imprimiere
y de todas maneras constituyen un monumento muy importante en imprimirá en los demás,
la historia de la literatura mexicana, ó déla española, que es lo mis- que quieren lo que éste quiere.''
«v.
mo Reimprimiendo este libro de suma rareza, he querido librar
del olvido á un poeta notable, versificador fácil y teólogo entendido.
Al fin del Coloquio, la Iglesia Militante dice:
Me conducía á ello, además, el deseo, antiguo y arraigado, de hacer
ver, hasta donde pueda, que México, en el primer siglo de la civili- " D e percha sirvió la Cruz
zación cristiana, en esa época mal llamada de oscurantismo, puede do el paño de Dios colgaron,
figurar, y de un modo no despreciable respecto á la época, en todos y allí tanto lo estiraron
los ramos del saber humano. " que el paño de suma luz
Los coloquios son diez y seis, y tienen estos títulos ó indicación de sus en dos partes lo rasgaron.
asuntos: Del Obraje Divino: De la jornada que hizo á la China el Ge- "Viendo el Divino Saber
neral Miguel López de Legazpi: De la consagración del Dr. D. Pe- que estaba el paño rompido
dro Moya de Contreras, Arzobispo de México: De los cuatro Doctores de de su Hijo tan querido,
la Iglesia: De los siete fuertes que el virrey D. Martín Enríquez mari- ordenó con su poder
dó hacer en el camino de México á Zacatecas: De la fiesta del Santísimo de zurcir lo dividido.
Sacramento en la entrada del Conde de la Coruña: De la predicación de ' 'Con cuatro dotes de gloria
fonás á Nínive: Del Testamento Nuevo de Cristo: De la Albóndiga Di- este paño se zurció,
vina: De la Escrima Espiritual: Del Arrendatniento de la Viña: De la y así, lo que se rompió,
Batalla Naval de Don Juan de Austria: De la Pobreza y la Riqueza: porque cantemos victoria
De la pestilencia que dio sobre los Naturales: Del recibimiento de Don de este paño nos vistió."
Luis de Velasco: Del Bosque Divino, donde Dios Nuestro Señor tiene sus
aves y animales. D. Francisco Pimentel, en su Historia Crítica, encuentra que los Co-
De la loa que precede al titulado El Obraje Divino, son las siguien- loquios de Eslava son apreciables bajo el punto de vista literario, his-
tes quintillas que dice la Nueva España, dirigiéndose al Virrey: tórico y lingüístico, y estima al autor como uno de los principales
adornos de nuestra literatura, por más que no pueda colocársele al
"Espejo donde se muestra lado de Lope y de Calderón.
la verdad que lo acompaña, En lo relativo á representaciones sagradas debemos decir aún, que
Señor, yo soy Nueva España, 110 sólo no fué el clero enemigo de las honestas, sino que procuró pro-
que mi alma en verse vuestra tegerlas, según se desprende del hecho de que, en 18 de Mayo de 1565,
en mar de gloria se baña. el Cabildo eclesiástico acordó dar cada año " u n a joya de oro ó plata,
de valor de hasta treinta escudos, á la mejor representación ó letra
17

que se hiciere para representarse el día del Corpus." El premio se Sin duda 110 abundaban entonces los poetas mejores que éste, pues-
llamaba joya, cualquiera que fuere su naturaleza, dinero, ropa, alha- to que los Regidores se sometían á tratar con el Bachiller Villalobos,
ja, etc. Tres libros de comediasen mexicano escribió Fray Juan Bau- hombre de poca formalidad, pues según las mismas notas: " E n 9 de
tista, quien en 1599 dejó dicho: " T e n g o larga experiencia que con Junio de 1589, se mandó que el Procurador Mayor junte los papeles
las comedias que he hecho representar en las Cuaresmas, ha sacado y represente contra el Bachiller Villalobos, por no haber cumplido
Nuestro Señor gran fruto, limpiando y renovando conciencias enve- con el concierto ó convenio de la función de Corpus."
jecidas en muchos años de ofensa s u y a . " Alguna vez salían también en esa fiesta los famosos carros tan usa-
Al terminar el siglo X V I , el franciscano Fray Francisco de Gam- dos en España. Así lo hace suponer una acotación de un coloquio de
boa, instituyó en México una cofradía de Nuestra Señora de la Sole- Eslava, que dice:
dad, en la Capilla de San José, y dispuso para todos los viernes unas "Rendidos los vicios, les atan las manos las Virtudes, y así presos
prácticas religiosas, de que formaba parte un sermón, durante el cual y quitada la presa, los llevan ante un carro triunfal, hecho en la mis-
se representaría algún paso de la Pasión de Nuestro Señor: las repre- ma forma y traza que está el cercado divino. Eos cuatro Evangelis-
sentaciones, añade el Sr. Icazbalceta, indudablemente serían mudas, tas sobre los animales;que los vido Ezequiel, los Doctores de la Igle-
pues de otra suerte hubieran sido incompatibles con el sermón. sia y todos los que guardaron la casa de Cristo, han de salir cada uno
" P o r aquel mismo tiempo introdujo el historiador Fray Juan de con una bandera . . . . Ha de ir en el carro el cordero que vido San
Torquemada, unos autos, á que dieron el nombre de neixcuititli, que Juan en su Apocalipsis, y Cristo crucificado en é l . "
en lengua mexicana significa ejemplo. Hacíanse los domingos por la De noticias de aquellos primeros comediantes, hallo en los mismos
tarde, después del sermón, y se acostumbraban todavía un siglo des- apuntes: " E n 17 de Junio de 1588, se dieron cincuenta pesos de gala
pués. El historiador mismo compuso, en lengua de los indios, mu- á un muchacho que lo hizo bien en la representación de la comedia.
chas de las piezas que se ejecutaron, y algunas escribió su maestro, " E n Julio de 1595, Navijo, el comediante, pidió ayuda de costa por
el gran naturalista y fecundo escritor Fray Juan Bautista," citado la comedia de la conquista. En 5 de Mayo de 1597, los comisarios de
no ha mucho en este mismo capítulo. la fiesta del Corpus dieron razón de haber ajustado la comedia en
Las representaciones de pasos de la Pasión, continuaron hasta lle- seiscientos pesos, con tres entremeses."
gar á nuestros días, suprimida la parte hablada, como en las dispues- Los tablados de que en esas citas se hace mérito, levantábanse en
tas por el Padre Gamboa, y conservando sólo la figurativa ó panto- los portales de las Casas del Cabildo de Ciudad ó en el atrio de la
mímica, acompañada de sermones, como en los llamados Prendi- Catedral, á juzgar por una nota de las que forman el Diario de suce-
miento, Tres caídas y Descendimiento. sos notables, de Guijo, que, según la cita que en anteriores párrafos
El Ayuntamiento, por su parte, protegía también á los autores: en se hizo, refiriéndose á 1651, dice: "llegaron á lastres á la Catedral,
un apunte que se sirvió facilitarme el distinguido escritor D. Luis y pusieron la Custodia en el lugar acostumbrado para la comedia, y
González Obregón, se lee: oyóla el Virrey, Audiencia y Tribunales, y algunos prebendados,
" E n 29 de Agosto de 1594, el bachiller Villalobos metió escripto y acabóse cerca de las cinco de la tarde y entróse á la Catedral."
diciendo que era muy digno que esta Ciudad tuviese autor, con sala- Mis modestas pretensiones no pueden pasar de esta sencilla indi-
rio, para las fiestas del Corpus y San Hipólito, pues se usan letras vie- cación acerca de esas farsas, las más de las veces irreverentes y sa-
j a s que en otras partes se han representado; que se le asignen dos crilegas, anatematizadas en Europa por Concilios, Papas y Reyes, y
mil pesos y él hará tres fiestas, el día de Corpus, su octava y la de de escasa ó ninguna influencia en el desarrollo del Teatro, del cual,
San Hipólito. lejos de haberle servido en su origen, recibieron majestad y nobleza
" E n 4 de Septiembre los Regidores trataron con Villalobos, que cuando la Musa dramática anduvo en manos de poetas de la gran-
hará la letra para las tres fiestas y las demás que se ofrezcan á la Ciu- diosa talla de D. Pedro Calderón de la Barca.
dad, corriendo de su cuenta las pinturas y artificios, vestuario de los Por entonces demencia hubiese sido exigir más. En el mismo si-
personajes, de seda, á satisfacción de la Ciudad; para lo cual hará glo X V I á que venimos refiriéndonos, el Teatro español apenas en
presentar tres piezas antes de la representación, y no saliendo á gusto, su cuna estaba; á mediados de él, entre los años de 1544 y 1567, apa-
hará otras de nuevo; y que la Ciudad ha de correr con los tablados, reció y sentó sus buenos cimientos el insigne Lope de Rueda, poe-
haciéndolos del tamaño que se pudiere, y se le han de dar dos mil ta y actor á la vez, con recursos tan pobrísimos, que como dice Cer-
pesos. Se mandó dar noticia al Virrey y se traiga al Cabildo." vantes, ' 'todos sus aparatos se encerraban en un mísero costal, y cons-
A «
19
tituían su teatro cuatro bancos e;i cuadro, y cuatro ó seis tablas en-
cima, con que se levantaba del suelo cuatro palmos; el adorno era En este punto México fué m i s afortunado que su metrópoli. Hu-
una manta vieja tirada con dos cordeles de una parte á otra, que biese ésta querido nuestro primer coliseo, anterior á 1673, sito en el
hacía lo que llaman vestuario, detrás de la cual estaban los músicos claustro del Hospital Real de Naturales, cuya cédula de creación se
cantando, sin guitarra, algún romance viejo. Las comedias eran unos remonta á 1553 ; ese coliseo, administrado como el hospital por los re-
coloquios como églogas, aderezados con dos ó tres entremeses, cuyas ligiosos Hipólitos, constituía una de sus rentas más pingües, del mis-
figuras hacía el tal Lope con la mayor excelencia y propiedad que mo modo que los de la Cruz y la Pacheca, construidos por cuenta de
pudiera imaginarse." las cofradías de la Pasión y de la Soledad, sirvieron para el manteni-
miento y asistencia de enfermos del Hospital General de Madrid y de
Sus imitadores ó sucesores, cuyo catálogo honran Argensola, Cer-
otras casas de caridad. Esa era la época: todo lo que rendía algún pro-
vantes y Guillén de Castro, ya pudieron disponer de mayor local y
vecho, tributaba ó era propiedad del poder eclesiástico, erigido en tu-
de más abundantes aparatos, al establecerse en la Villa y Corte de
tor de la sociedad civil y en promotor y director de la educación y de
Madrid, y en 1568, el local para comedias que se llamó de La Pacha-
la beneficencia.
ca, reformado en 1579, un año antes de haber sido fabricado el no
menos célebre de La Cruz. El primer coliseo de México, posterior más de un siglo al corral de
la Pacheca, tuvo sobre éste y los de la corte las ventajas de haber sido
Pero, ¡qué locales aquellos! Baste decir que su primitiva denomina-
expresamente construido para teatro y de haber estado techado de fir-
ción fué la de corrales. "Difícil es—dice un autor,—dar idea de la po-
me, casi setenta años antes que aquel. Contra el pobrísimo aspecto de
breza de su escena : las decoraciones las componían retazos de telas de
los corrales del Príncipe y de la Cruz, el coliseo de México ofrecía una
algodón y seda; el sol era figurado por una docena de faroles de pa-
agradable vista: sus dos andanadas, ó pisos de aposentos ó palcos, con
pel con su correspondiente luz de sebo ; los truenos, por un costal de
entrada por los claustros del hospital, estaban formados por danzas ó
piedras que se removía de un extremo á otro, debajo de las tablas, y
series de arcos con antepechos de balaustres torneados, y provistos de
cuando en la escena se invocaba á los demonios, subían éstos muy tran-
celosías con sus correspondientes postigos, para ver ó ser vistos, á vo-
quilamente por las escaleras de los agujeros abiertos en el tablado;
luntad, los concurrentes á ellos: era muy cómoda su cazuela ó galería,
faltando las decoraciones, los mismos cachivaches servían para todo ; el
formada de madera de cuartones ó maderos gruesos. El tablado para
recitante se ocultaba un segundo tras de uno de los colgajos que ser-
la comedia era de vara y media de alto, quince de largo y ocho de an-
vían de telones, y volvía á presentarse diciendo: " y a estamos en el
cho, y estaba separado de la sala por pilastras de madera muy bien ade-
Palacio, ó en el Castillo, ó en la Iglesia, ó en la gruta; " y el es-
rezadas, teniendo en medio del frontis el escudo de las armas reales.
pectador aceptaba la ilusión del cambio, como si e;i efecto se verifi-
Pedro de Arrieta, maestro mayor ó arquitecto del Reino y de la San-
case. Las paredes del teatro las constituían las fachadas de las casas
ta Iglesia Catedral, en una relación é informe acerca del dicho coliseo
que daban al corral, y sus ventanas y balcones eran los palcos ó apo-
y del hospital que se le mandó reconocer, elogió su construcción y
sentos. El techo lo formaba un toldo de lona que defendía del sol,
adorno, que parece no fueron superados por los coliseos que le suce-
pero no del agua, á los concurrentes de patio, verdadero patio, tosca-
dieron, hasta el del Teatro Principal, que aun existe.
mente empedrado, con unas cuantas filas de bancos de madera, próxi-
mas al escenario, y sin asiento alguno en el resto, denominado mos- En unas Memorias de nuestro teatro, publicadas en los núms. 844
quete. y 845 del tomo V I I I del Diario de México, dánse algunas noticias del
coliseo, sus representaciones y sus compañías. De tiempo atrás, y qui-
En semejantes coliseos fué donde representáronse las admirables co-
zá en los tablados que, segiin hemos visto, contrataba ó construía el
medias del Monstruo de la Naturaleza, según llama Cervantes al gran
Ayuntamiento, hacíanse comedias en los barrios, sin duda por el sis-
Frey Félix Lope de Vega, nacido en 1562 y muerto en 1635. A las
tema de Lope de Rueda, y representábanse las llamadas conquistas ó
de Lope, verdadero creador del Teatro español, sucedieron las de Tir-
farsas de guerras, según nos lo da á entender la cita que ha poco es-
so de Molina, de 1585 á 1648 ; las del insigne I). Juan Ruiz de Alar-
tampé, referente á Julio de 1595, en cuya fecha pidió ayuda de cos-
cón, muerto en 1639; las del grandioso, inconmensurable, I). Pedro
ta por una comedia de conquista, el nombrado Navijo, primer comedian-
Calderón de la Barca, de ióooá i 6 8 i | y sólo, después de muchos años
te de que tenemos noticia.
del fallecimiento de tantas eminencias, los miserables corrales de la
Cruz y de la Pacheca ó del Príncipe, se convirtieron en teatros regu- En 1673, Mateo Jaramillo era el autor ó Director de la Compañía del
lares y cómodos, el primero en 1743 y el segundo en 1745. Coliseo, en la cual figuraban Isabel Gertrudis, Josefa y Micaela Ortiz,
Antonia de Toledo, Francisco de Castro, José Martínez, Antonio,
Ventura y Bartolomé Gómez, Diego Jaramillo, Felipe de Viaja, Lo-
renzo Vargas y Juan de Saldafía. No es poco saber esta noticia, debi-
da al articulista del Diario de México: en España, donde la adquisi-
ción de estos pormenores es menos difícil, la primera lista de Compa- CAPÍTULO III
ñía del Teatro del Príncipe que se tiene completa, es de 1633, tan sólo
cuarenta años anterior á la de nuestro coliseo.
En 1683, por haberse exonerado del cargo de autor Ignacio Mar-
qués, se juntó la compañía, dicen las " Memorias, " en casa del Pres- 1700.—1753.
bítero D. Antonio Acosta, administrador del Hospital Real, para pro-
seguir la representación sin autor, obligándose á solicitar las come- *

dias más en boga y á recibir sin repugnancia el papel que se les re- Tales fueron los humildes principios de las representaciones dramá-
partiera, y así se verificó por convenio de los cómicos, que lo eran Ber- ticas en México, en aquello que verdaderamente puede llamarse tea-
narda Pérez de Rivera, María y Ana de Villegas, María Ortiz Jara- tro. Mas como en mi modesto libro, y á título de curiosidad, hemos
millo, Ignacia de Cárdenas, Juan de Dios, Antonio Pinto, Diego de de tocar cuanto de notable encontremos relativo á espectáculos públi-
Sevilla, Juan Ferrete, Juan Ortiz de Torres y Antonio Ventura de Cer- cos, quizá 110 esté de más referirnos á las pantomimas propias de los
dán. indígenas, en uso antes de la conquista, y alguna vez repetidas en fies-
Las representaciones debieron ser muy salteadas. En Madrid mis- tas de los primeros años del período virreinal.
mo, en un principio, sólo eran permitidas los domingos, las fiestas y Copiando de quienes nos han precedido en labores de historia, pues
las Pascuas, y posteriormente los martes y los jueves, y los quince días más 110 puede hacer quien no ha presenciado los sucesos que relata,
anteriores á Carnestolendas, en cuyo día cesaban las representaciones diré, que en sentir de historiógrafos y cronistas, no solamente apre-
para volver á ejecutarse en la Pascua de Resurrección, siempre por la ciaban los antiguos mexicanos la poesía lírica, sino también la dra-
tarde y nunca por la noche, ya porque las condiciones de los corrales mática. El teatro en que representaban sus dramas era un terraplén
no permitían iluminarlos con otra luz que la del día, ya por poner coto cuadrado, descubierto, situado en la plaza del mercado, ó en el atrio
á los escándalos é indecencias á que se prestaba la oscuridad. inferior de algún templo, y bastante alto para poder ser visto porto-
dos los espectadores. El que había en la plaza de Tlaltelolco era de
En México, á fines del siglo X V I I y principios del X V I I I , las re-
piedra y cal, según afirma Cortés, y tenía trece pies de alto, y de largo,
presentaciones se hacían también por las tardes, mas como nuestro co-
por cada lado, treinta pasos.
liseo era local cerrado y cubierto, cuando se prolongaban después de
la oración, se mal iluminaba el teatro. Digna sin duda de crédito, por ir conforme con el carácter de aque-
Los lunes y los jueves dábanse en él funciones gratis en obsequio llos pueblos, es la descripción de su teatro y de sus representaciones,
de la clase pobre, funciones denominadas guanajas, del mismo modo dada por el Padre Acosta, en la que hace mención de las que se da-
que las que se daban en los arrabales de la ciudad, con motivo casi ban en Cholula, con motivo de las fiestas del dios Quetzalcoatl. " Ha-
siempre de festividades religiosas. bía, dice, en el atrio del templo de aquel dios, un pequeño teatro de
treinta pies en cuadro, curiosamente blanqueado, que adornaban con
El jueves 11 de Noviembre de 1700, en un tablado erigido en la pla-
ramas y aseaban con el mayor esmero, guarneciéndolo con arcos de
zuela de San Juan de Dios, comenzaron las comedias con que México
plumas y flores, y suspendiendo en ellos pájaros, conejos y objetos cu-
celebró la canonización de ese santo ; esa tarde se representó El Prínci-
riosos. Allí se reunía el pueblo después de comer, y presentándose los
pe prodigioso, y la del viernes 12, la titulada No puede ser. Un escán-
actores hacían sus representaciones burlescas, fingiéndose sordos, res-
dalo ó riña que ocurrió esa tarde, hizo que no se diera comedia el 13
friados, cojos, ciegos y tullidos, los cuales figuraban ir á pedir la sa-
y se quitase el tablado.
lud al ídolo. Los sordos respondían despropósitos, los resfriados to-
Nada puedo decir del mérito de las comedias que en esos días se re- siendo, los cojos cojeando, y todos referían sus males y miserias, con
presentaban; pero sin duda debió ser ó muy escaso ó negativo. lo que excitaban la risa del auditorio. Seguían otros actores que hacían
el papel de diferentes animales, unos vestidos á guisa de escarabajos,
otros de sapos, otros de lagartijas y se explicaban unos á otros sus res-
pectivas funciones, cada uno ponderando las suyas. Eran muy aplau-
Ventura y Bartolomé Gómez, Diego Jaramillo, Felipe de Viaja, Lo-
renzo Vargas y Juan de Saldafía. No es poco saber esta noticia, debi-
da al articulista del Diario de México: en España, donde la adquisi-
ción de estos pormenores es menos difícil, la primera lista de Compa- CAPÍTULO III
ñía del Teatro del Príncipe que se tiene completa, es de 1633, tan sólo
cuarenta años anterior á la de nuestro coliseo.
En 1683, por haberse exonerado del cargo de autor Ignacio Mar-
qués, se juntó la compañía, dicen las " Memorias, " en casa del Pres- 1700.—1753.
bítero D. Antonio Acosta, administrador del Hospital Real, para pro-
seguir la representación sin autor, obligándose á solicitar las come- *

dias más en boga y á recibir sin repugnancia el papel que se les re- Tales fueron los humildes principios de las representaciones dramá-
partiera, y así se verificó por convenio de los cómicos, que lo eran Ber- ticas en México, en aquello que verdaderamente puede llamarse tea-
narda Pérez de Rivera, María y Ana de Villegas, María Ortiz Jara- tro. Mas como en mi modesto libro, y á título de curiosidad, hemos
millo, Ignacia de Cárdenas, Juan de Dios, Antonio Pinto, Diego de de tocar cuanto de notable encontremos relativo á espectáculos públi-
Sevilla, Juan Ferrete, Juan Ortiz de Torres y Antonio Ventura de Cer- cos, quizá 110 esté de más referirnos á las pantomimas propias de los
dán. indígenas, en uso antes de la conquista, y alguna vez repetidas en fies-
Las representaciones debieron ser muy salteadas. En Madrid mis- tas de los primeros años del período virreinal.
mo, en un principio, sólo eran permitidas los domingos, las fiestas y Copiando de quienes nos han precedido en labores de historia, pues
las Pascuas, y posteriormente los martes y los jueves, y los quince días más 110 puede hacer quien no ha presenciado los sucesos que relata,
anteriores á Carnestolendas, en cuyo día cesaban las representaciones diré, que en sentir de historiógrafos y cronistas, no solamente apre-
para volver á ejecutarse en la Pascua de Resurrección, siempre por la ciaban los antiguos mexicanos la poesía lírica, sino también la dra-
tarde y nunca por la noche, ya porque las condiciones de los corrales mática. El teatro en que representaban sus dramas era un terraplén
no permitían iluminarlos con otra luz que la del día, ya por poner coto cuadrado, descubierto, situado en la plaza del mercado, ó en el atrio
á los escándalos é indecencias á que se prestaba la oscuridad. inferior de algún templo, y bastante alto para poder ser visto porto-
dos los espectadores. El que había en la plaza de Tlaltelolco era de
En México, á fines del siglo X V I I y principios del X V I I I , las re-
piedra y cal, según afirma Cortés, y tenía trece pies de alto, y de largo,
presentaciones se hacían también por las tardes, mas como nuestro co-
por cada lado, treinta pasos.
liseo era local cerrado y cubierto, cuando se prolongaban después de
la oración, se mal iluminaba el teatro. Digna sin duda de crédito, por ir conforme con el carácter de aque-
Los lunes y los jueves dábanse en él funciones gratis en obsequio llos pueblos, es la descripción de su teatro y de sus representaciones,
de la clase pobre, funciones denominadas guanajas, del mismo modo dada por el Padre Acosta, en la que hace mención de las que se da-
que las que se daban en los arrabales de la ciudad, con motivo casi ban en Cholula, con motivo de las fiestas del dios Quetzalcoatl. " Ha-
siempre de festividades religiosas. bía, dice, en el atrio del templo de aquel dios, un pequeño teatro de
treinta pies en cuadro, curiosamente blanqueado, que adornaban con
El jueves 11 de Noviembre de 1700, en un tablado erigido en la pla-
ramas y aseaban con el mayor esmero, guarneciéndolo con arcos de
zuela de San Juan de Dios, comenzaron las comedias con que México
plumas y flores, y suspendiendo en ellos pájaros, conejos y objetos cu-
celebró la canonización de ese santo ; esa tarde se representó El Prínci-
riosos. Allí se reunía el pueblo después de comer, y presentándose los
pe prodigioso, y la del viernes 12, la titulada No puede ser. Un escán-
actores hacían sus representaciones burlescas, fingiéndose sordos, res-
dalo ó riña que ocurrió esa tarde, hizo que no se diera comedia el 13
friados, cojos, ciegos y tullidos, los cuales figuraban ir á pedir la sa-
y se quitase el tablado.
lud al ídolo. Los sordos respondían despropósitos, los resfriados to-
Nada puedo decir del mérito de las comedias que en esos días se re- siendo, los cojos cojeando, y todos referían sus males y miserias, con
presentaban; pero sin duda debió ser ó muy escaso ó negativo. lo que excitaban la risa del auditorio. Seguían otros actores que hacían
el papel de diferentes animales, unos vestidos á guisa de escarabajos,
otros de sapos, otros de lagartijas y se explicaban unos á otros sus res-
pectivas funciones, cada uno ponderando las suyas. Eran muy aplau-
22

didos, porque sabían desempeñar sus papeles con sumo ingenio. Ve-
nían después unos muchachos del templo, con alas de mariposa y de muy numerosas cortapisas; y, en el reglamento respectivo, entre las
pájaros de diferentes colores, y subiendo á los árboles dispuestos al penas con que eran conminadas las faltas á él, figuraban fuertes mul-
efecto, les tiraban los sacerdotes bolas de tierra con las cerbatanas, aña- tas para la primera, destierro para la segunda, y dos años de galeras para
diendo expresiones ridiculas en favor de unos y contra otros. Por fin la tercera. En 1644 y 46, el Consejo llevó sus escrúpulos al extremo
se hacía un gran baile de todos los actores, y así terminaba la función. de disponer, en el segundo artículo de su dictamen, lo siguiente: "Que
Esto se hacía en las fiestas más solemnes. " las comedias sean de buen ejemplo, sin mezcla de amores, y para con-
Eos primeros religiosos que anunciaron el Evangelio, aprovecharon seguirlo se prohiban todas las que hasta entonces se han representa-
aquellas inclinaciones de los indígenas, y viéndolos tan aficionados do, especialmente las de Lope de Vega, que tanto daño han hecho á las
al canto y á la poesía, compusieron cánticos en lengua mexicana, en costumbres." El Consejo dió un último golpe al arte dramático, dis-
loor del Dios cristiano, para que aquellos los recitasen en sus panto- poniendo en su art. 10: " Q u e no se puedan representar, de aquí ade-
mimas. Dícese que el laborioso franciscano Bernardino de Sahagún lante, comedias de inventiva propia de los que las hacen, sino de his-
compuso, en puro y elegante mexicano, é imprimió en México, tres- torias y vidas de Santos." Si así era tratado en España el teatro, claro
cientos sesenta y cinco cánticos, uno para cada día del año, llenos de es que en su colonia 110 pudo serlo mejor.
los más devotos y tiernos sentimientos religiosos, y aun hubo indios Xo hay, pues, que hacerse ilusiones acerca de la marcha del teatro
que escribieron muchos sobre los mismos asuntos. entre nosotros, y esta convicción justifica la rapidez con que hemos
Boturini cita las composiciones de D. Francisco Plácido, Goberna- de tratar de esta primitiva época de nuestros espectáculos. Estos no
dor indígena de Atzcapotzalco, en loor de la Madre de Dios, canta- podían ser mejores que los de Madrid, acerca de los cuales un escri-
das por él en los bailes sacros que con otros nobles mexicanos hacía tor holandés, citado por D. Ricardo Sepúlveda, dice: " L o s come-
delante de la famosa Imagen de la Virgen de Guadalupe, y ya hemos diantes 110 representan con luces, sino con la del día, y así privan á
visto que los celosos franciscanos, compusieron loas y aun una espe- las escenas de cierta ilusión. Los vestidos de los actores 110 son sun-
cie de comedias en mexicano, sobre asuntos sagrados, para ser repre- tuosos ni adaptados á los papeles. Una comedia de argumento roma-
sentadas por los indios. no ó griego, se representa con traje español. Todas lasque yo he vis-
to se componen de sólo tres actos, que los españoles llaman jornadas.
Ea cita que hemos tomado del Padre Acosta, hace suponer que las Dánlas principio por un prólogo ó loa en música, y cantan tan mal,
danzas sagradas de los antiguos mexicanos, se convertían alguna vez que su armonía se parece á chillidos de niños. Entre las jornadas in-
en farsas pantomímicas, entremezcladas de diálogos y canciones, que tercalan algún entremés, algún baile, ó algún saínete, que muchas
las asemejaban á las primitivas loas; pero en la mayoría de las veces, veces es lo más entretenido de la comedia." Ni debe extrañar que
esos terraplenes, denominados teatros, servían de escenario á unas así sucediese, cuando hemos visto que se prohibían, por inmorales,
suertes de cacerías, en las que con gran bullicio de gritos y voces, fle- las obras del insigne Lope de Vega, dato que sublima la ignorancia
chaban ó tomaban á mano venados, liebres, conejos, comadrejas, ar- y estupidez de las primeras autoridades. En el reinado de Felipe IV
dillas y culebras, con anterioridad allí dispuestos para la diversión, ó gozaron las representaciones teatrales de un brillante período; pero á
en honor de alguna de sus divinidades. su muerte en 1665, la Reina Gobernadora ordenó que cesasen ente-
Según he indicado, esas cacerías se repitieron en los primeros años ramente en toda la Monarquía, "hasta que el Rey mi hijo, tenga edad
del período virreinal en alguna solemne fiesta, cuya descripción no para gustar de ellas," y adviértase que ese su hijo, que fué Carlos
puede caber en mi libro, por ser extraño á ellas. Las he citado para II, contaba en esa época apenas cuatro años de nacido.
demostrar que procuro no olvidar cosa alguna que con nuestro teatro Tiempo y trabajo costó que se revocase esa orden, y durante el rei-
tenga relación, por lejana que ella sea, y volvamos á mi relato nado de aquel príncipe, á quien la historia llama El Hechizado, en vez
La suposición del mérito, escaso ó negativo, de las primitivas co- de El Imbécil, los sucesores de Lope, Calderón, Tirso, Alarcón, Mo-
medias que dejo asentada al final del capítulo anterior, se funda en reto y Solís se vieron desdeñados, y perseguidos los comediantes.
lo mal visto que los espectáculos teatrales venían siendo, de tiempo " E s un dolor—escribe Jovellanos, refiriéndose á la época de Car-
atrás, por toda clase de autoridades, no ya en México, sino en la mis- los I I , — q u e la Talía española que había pasado los Pirineos para ins-
ma España. A virtud del informe de un Consejo ad hoc, formado por pirar al gran Molière, se vea aquí en Castilla, tan afrentada y perse-
Felipe II, fueron allá prohibidas las comedias, declarándose que ' 'eran guida por el fanatismo que domina en la corte."
ilícitas y pecado mortal representarlas." En 1615, se permitieron con ¿Acaso esas prohibiciones dieron algún resultado práctico para la
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moralidad y las buenas costumbres? Sepúlveda dice: " N o hubo exce-
sus comedias: El menor Máximo, San Francisco, El Asturiano en las
so ni escándalo que no se cometiera, ni truhanería inmunda que no
Indias, Por engañar engañarse, Amar á S7¿ semejante, Las constantes
arrancase aplausos. En un auto sacramental en que el ángel anuncia-
españolas, Con agravios loco y con celos cuerdo, Por los peligros de amor
ba á la Virgen la Encarnación del Verbo, al responder, traducidas
conseguir la mayor dicha, El amor excede al arte, Si el amor excede al
en buenos versos castellanos, las palabras del Evangelio: Quomodo
arte, ni arte ni amor á prudencia, La Conquista de México, El Apos-
fiet isiud quoniam virum non cognosco, los apostrofes hediondos del
tolado en Indias, La pérdida de España por una mujer y El amor más
patio dirigidos á la cómica, interrumpían el espectáculo con irreligio-
bien premiado entre traición y cautela.
sa y sacrilega algazara, y hacían conocer á muchas madres cuán mal
habían hecho en llevar consigo á sus hijas honestas." Para esto se ha- E l autor de las Memorias del Teatro de México, cree probable que
bían prohibido las comedias de amores, las muy hermosas (cualesquiera José y Eusebio Vela fueran los asentistas del Coliseo en 1722, año en
que sus defectos sean), comedias de capa y espada, y ordenado que só- el cual un incendio dió al traste con la fábrica tan elogiada por el
lo se representasen autos sacramentales y comedias de Santos. Con ra- Maestro Mayor D. Pedro de Arrieta. La tarde del 19 de Enero se repre-
zón el más ilustrado de los monarcas españoles, el gran Carlos I I I , al sentó en dicho teatro la comedia " R u i n a é incendio de Jerusalén ó
pasar de Nápoles á Madrid, prohibió la representación teatral de los Desagravio de Cristo." A las cinco de la mañana del 20, el Padre
autos sacramentales, por real cédula de n de Junio de 1765. Capellán, cuya habitación caía precisamente sóbrela pieza en que se
guardaban los palos, trastos y tramoyas del Coliseo, creyó sentir que
Perdóneseme estas largas y frecuentes referencias al Teatro de la la iiltima estuviese ardiendo. Dada la voz de alarma, se trató de for-
Metrópoli; pero me han parecido indispensables para dar á suponer zar la puerta de la pieza que se quemaba, y lo mismo fué derribar
cuál pudo ser el mérito de los espectáculos teatrales en la colonia, en esa puerta que levantarse las llamas, con tal voracidad, que prendían
sus primitivos tiempos. Sin esas referencias, el relato habría pareci- como pólvora, según la frase de uno de los testigos, sin ser posible evi-
do incoloro y casi sin interés. tar la ruina de todo el Coliseo y de gran parte del Hospital Real. F u é
Poco tiene, en efecto, decir á secas, que por las escasas noticias pu- preciso transladar prontamente el Santísimo Sacramento á San Fran-
blicadas en los citados "Diarios de México," se viene en conocimien- cisco, desguarnecer los altares, quitar lienzos y envigados, arrancar
to de haber sido en 1707 asetitisla ó contratista de nuestro primer tea- puertas y ventanas y llevar los míseros enfermos á las casas de los
tro, Juan Gómez Medina, y en 1712, Felipe Fernández de Santillana, vecinos, Ínterin se transladaban á los hospitales de San Hipólito y
y así por el estilo. Mas ya que este asunto tocamos, no dejaremos de del Espíritu Santo. Todo esfuerzo para sofocar las llamas sólo bastó
decir que á lo que parece, ese Santillana fué el primero en quien los para impedir la ruina del Hospital, pero 110 del Coliseo, del cual sólo
religiosos Hipólitos descansaron de la carga de entenderse con la ad- quedaron algunas de las más gruesas vigas. De las conjeturas que se
ministración del Coliseo y de contratar y luchar con la levantisca com- hicieron en vista de las diligencias judiciales, se dedujo que el incen-
pañía de comediantes. Eos religiosos habían tenido sendos disgustos dio provino de no haberse apagado bien los pabilos de las velas usa-
con ellos y vístose en compromisos con el público por faltas de forma- das en la noche del 19, y guardádose así con los candiles en sus res-
lidad. Una primera dama, Antonia Rivera, no cumplió con la contra- pectivos cajones. Para el día 20, en que ocurrió el incendio, estaba
ta que había celebrado, y para suplirla se ajustó en su lugar á Gertru- anunciada la comedia ' 'Aquí fué T r o j ' a . ' '
dis Cervantes, quien á su vez rompió su compromiso para entrar en
Poco después, y según se dice en el "Prólogo á las Constituciones
un convento.
y Ordenanzas del Hospital Real, impresas en 1778," no siendo justo
En 1718, y por la renta de tres mil pesos anuales, arrendaron el Co- que el público se privara de la común diversión, ni el Hospital care-
liseo del Hospital, José y Eusebio Vela; de éste, dice Beristáin, y pru- ciese del producto de su renta, se determinó restablecer el Coliseo, y
dente será oírlo con ciertas reservas, "que fué poeta dramático, si no al efecto se construyó otro, también de madera, en el mismo sitio del
igual á Eope y Calderón, sí seguramente superior á los Montalvanes destruido por el fuego, hasta que enseñando la experiencia el grave
(cosa posible), y á los Moretos (cosa que no creo), en la decencia de perjuicio que sufrían los enfermos con el ruido de los concurrentes,
las jocosidades." El ameritadísimo D. Luis González Obregón, pien- ' 'se resolvió levantar un tercer teatro en un terreno sito entre el ca-
sa también que "este Eusebio Vela fué, á no dudarlo, el autor dra- llejón del Espíritu Santo y la calle que en nuestros días conocemos
mático más importante del siglo X V I I I , " elogio quizás en extremo por la del Coliseo Viejo, y entonces estaba invadida por la acequia
exagerado, y que desgraciadamente hasta ahora no ha podido ser ni que, pasando por el costado de Palacio, llegaba hasta el llamado ca-
confirmado ni rectificado, pues sólo quedan los siguientes títulos de llejón de los Dolores y al presente calle de la Independencia."
E . H. T.—T. I.—1
*

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Todavía puede verse eu los portales del Coliseo el arco que daba
de su voz en lo que c a n t a . " Fué el galán de su Compañía el ya nom-
acceso á la entrada del tercer teatro, y se distingue por su mayor luz
brado Diego Francisco de Asís, muy diestro en su arte, y cuya muer-
y por la cruz y dos almenas que rematan la pobrísima fachada de la
te, ocurrida á la edad de cuarenta y cinco años en 1753, fué muy
casa que sobre él asienta; como los precedentes, fué de madera, y se
lamentada por la falta que á la comedia había de hacer. Diego de
construyó en 1725.
Asís fué natural de San Angel, y muy virtuoso debió ser cuando, se-
En cambio de su mala fábrica lucieron en él, dice el Diario de Mé-
gún se dice, el clero consintió que su cadáver fuese sepultado en la
xico, excelentes habilidades, pues desde 1731 le tomó á su cargo Este- iglesia del Convento de San Bernardo. Mejor fin aún tuvo la citada
ban Vela, que agradaba mucho en las tablas y fué muy protegido por primera actriz Ana María de Castro, de la misma Compañía, la cual,
el Canónigo D. Luis Antonio de Torres, Administrador del Hospital y habla Beristáin, dejó el ejercicio de las tablas, convertida por los ser-
admirador de su notoria habilidad. Debido á su influjo prorrogósele mones del Padre D. Matías Conchón, que á este propósito compuso
á Vela el arrendamiento en 1736 por nueve años más, dentro de los una poesía intitulada " L a Despedida."
cuales falleció: los principales cómicos de su Compañía eran enton-
Esta conversión se operó, sin duda, en 1742, fecha en que, según
ces Felipa Sánchez, Nicolás Campos, Alejandro Monzón, Clemente
las "Memorias del T e a t r o , " la Castro formó su Compañía, y en que
Figueredo y Diego Francisco de Asís. las aficiones artísticas de D. José Cárdenas, Administrador del Hos-
Antes de proseguir, hagamos aquí lugar á unas citas que tomo de pital y Contador honorario del Real Tribunal de Cuentas, elevaron
las Gacetas de 1728 y 29, y nos hablan de algunas representaciones en las representaciones á un grado sobresaliente. Con licencia de Su Ma-
esa primera mitad del siglo, y del teatro que en el Palacio Virreinal jestad, Cárdenas hizo ajustar en Cádiz varias notabilidades, entre
existió. Del 12 al 28 de Noviembre del primero de los dos años ci- ellas á José Ordóñez, su mujer Isabel Gamarra y sus dos hijas, Vi-
tados, la Compañía de Jesús celebró solemnes fiestas con motivo de centa y Josefa. La última casó con Juan Gregorio Panseco, milanés,
la canonización de S. Luis Gonzaga y S. Estanislao deKostka, y en músico de los batallones de Marina y profesor de violín y flauta, y
ellas, el día 13, se recitaron cuatro coloquios, cuyos títulos fueron llegó á ser muy reputada primera dama. También entonces vinieron
Los triunfos del cielo, La virtud coronada, La concordia de las ciencias y José Pisoni, Juan Bautista Arestín, Gaspar y Andrés Espinosa, Be-
Las competencias del Paraíso. En 19 de Diciembre del mismo año se nito Andrés Preibus y Francisco Rueda, tocadores de violín, flauta,
celebró, dice la Gaceta, "el cumpleaños de nuestro monarca, con las trompa y oboe, y Petronila Ordóñez, mujer del último y habilísima
fiestas de costumbre y la Real Audiencia, Tribunales y Ayuntamien- cantarína.
to, concurrieron las tres noches inmediatas á la comedia Celos, aun Como compositor y maestro, Cárdenas hizo venir á D. Ignacio Je-
del aire jnatan, que se tuvo que representar en el suntuoso teatro del rusalén, italiano, que llegó á ser Maestro de Capilla de la Catedral.
Real Palacio del excelentísimo Señor Virrey." En las fiestas con que En 1749, año en que por decreto de 29 de Noviembre se suprimie-
á su turno celebraron los Carmelitas la canonización de S. Juan de ron las celosías en el Coliseo y se separaron las cazuelas de hombres
la Cruz, del 15 al 24 de Enero de 1729, se corrieron toros y se repre- y de mujeres, estaba el tercer teatro tan inservible por lo podrido de
sentaron comedias. Por último, el 19 de Diciembre del mismo 1729, muchas de sus vigas y lo mal acomodado de otras medio quemadas,
en celebridad del cumpleaños del Rey, ' 'las autoridades concurrieron por haber pertenecido al primitivo del Hospital, que la autoridad
por sus turnos á la comedia '' El amor excede al arte y Máquinas de mandó suspender las representaciones. A influjo de la ya primera
Arquímedes," que hizo representaren el Teatro de Palacio el Exce- dama, Josefa Ordóñez, se revocó la orden de suspensión, cuando des-
lentísimo Señor Virrey." pués de tres semanas y con un costo de mil quinientos pesos, hubo
Volvamos al tercer Coliseo. Muerto Esteban Vela, quedó con el reparado la fábrica el maestro de arquitectura D. Lorenzo Rodríguez,
arrendamiento, después de un reñido pleito con la viuda de aquél, la y dádole su aprobación el Ingeniero D. Felipe Ferigán Cortés.
muy reputada actriz Ana María de Castro, á quien el público aplaudía Pero la compostura no podía pasar de muy provisional y ni el mis-
y admiraba con entusiasmo. Vestía con gusto, dice el autor de las mo maestro Rodríguez la garantizó más allá de diez ó doce años.
"Memorias" varias veces citadas; tenía gran caudal de exquisita ro- Por otra parte, teníase noticia de que desde 1743 y 45, los antiguos
pa, y de su habilidad se dice en un informe de D. Francisco Cháva- corrales de la Cruz y del Príncipe, en Madrid, habían sido convertidos
rri al Duque de la Conquista: "es aclamada de todo el público su vi- en cómodos teatros dignos del arte y de la Corte, y la capital del vi-
veza en representar, lo bien sentido del verso, consonancia de sus pa- rreinato de Nueva España 110 quiso ser menos que la metrópoli. En
labras, la retórica y viveza de sus acciones, y la dulzura y armonía ella y en la colonia disfrutábase de muy pasable bienestar bajo la
monarquía de Fernando V I y virreinato del primer Conde de Revilla
sala, y los muros se cubrieron con los colores azul y blanco. Como
Gigedo; el Hospital no tenía sino motivos de felicitarse por la renta
no habría sido fácil tender azotea de tan grande extensión como el
que el Coliseo le proporcionaba, y el buen D. José Cárdenas, apro-
tamaño de la sala, el techo fué lo que se llamaba d<t zaquizamí 6 aguar-
vechando todas estas circunstancias favorables, quiso y pudo empren- dillado, es decir, de armadura de vigas y tablazón, cubiertas de plomo.
der la construcción de un cuarto y definitivo Coliseo, el mismo que, Su entrada principal, que por estar en la acera opuesta á la línea de la
con el nombre de El Principal, existe al presente. fachada del Colegio de Niñas, miraba al Occidente, la componía un
El que por su pobreza é inseguridad estaba llamado á desaparecer portal de tres arcos, que á su derecha tenían una puerta, existente
en un corto plazo, era de forma rectangular como sus dos predeceso- aún, para entrada á los cuartos ó palcos.
res y como habíanlo sido los de Madrid, construidos en patios ó co- Las ordenanzas sobre teatros, vigentes en España y sus posesiones,
rrales. disponían en su art. V I I I , " q u e la comedia se empezase á las 2 en
Su tablado ó escenario y las dependencias de utilería y cuartos pa- el invierno y á las 3 en el verano," y por consiguiente la inaugu-
ra los cómicos, tuvieron entrada especial y distinta de la del público ración del Coliseo Nuevo se verificó en la tarde del 23 de Diciembre
por una casa de vecindad del callejón del Espíritu Santo. Y esto es de 1753, con la comedia "Mejor está que estaba," y con asistencia
todo cuanto sabemos. del Virrey D. Juan Francisco de Huemes y Horcasitas, Conde de
Sin suspender las representaciones en el tercer coliseo, que quedaba Revilla Gigedo, y de su esposa D a Antonia Padilla.
al fondo y á la derecha del nuevamente proyectado, previa superior Sin perjuicio de darlas más por extenso en sus lugares respectivos,
licencia de 6 de Febrero de 1752, el susodicho Administrador D. Jo- pongo aquí las siguientes noticias de la disposición que guardaba el
sé Cárdenas, procedió al derribo de casas que, habiendo pertenecido edificio en sus primeros tiempos.
á D. Juan Villavicencio, compró al mayorazgo D. José Gorraiz y Lu- Tenía el Coliseo tres pisos de cuartos ó palcos con diez y ocho
yando, Secretario de la Gobernación del virreinato, en trece mil pe- en cada uno: cuatro bancas de lunetas con diez y ocho asientos la pri-
sos, con más el reconocimiento de varios censos. Dichas casas esta- mera, diez y seis la segunda y la tercera, y veinticinco la cuarta;
ban ubicadas frente á la de Irolo, en la calle que hasta entonces se había, á más, seis asientos que quedaban bajo los palcos 1, 2 y 3,
llamó del Colegio de las Niñas, y del Coliseo Nuevo, posteriormente á que eran los que ocupaban los virreyes.
la construcción de éste, tomando el de Coliseo Viejo, que conserva El resto del patio no tenía asientos y se denominaba El Mosquete:
hasta hoy, aquella en que estuvo la entrada del tercer teatro. la cazuela ó galería estaba dividida en dos partes independientes y sin
El trazo y dirección de la obra á que se dió principio en los prime- comunicación, una para los hombres y otra para las mujeres.
ros días de Diciembre, corrieron á cargo de los maestros D. José Entre una y otra había un cuarto que se llamaba de los vuelos, y en
Eduardo de Herrera y D. Manuel Alvarez, quienes ofrecieron con- él una enorme argolla por la que pasaba una cuerda ó soga de cá-
cluirla en seis meses y la presupuestaron en diez y ocho á veinte mil ñamo que iba á dar al tablado ó escenario y servía para que por ella
pesos. El autor del brevísimo artículo de Memorias del teatro, nos se deslizasen, 110 sin grave riesgo de su propia vida y de la de los
cuenta, y lo transcribo íntegro porque no lo entiendo, " q u e los maes- concurrentes al patio y al mosquete, los ángeles ó los demonios de las
tros ofrecieron hacer el Coliseo de figura aovada, lo cual no se pudo comedias, agarrados á una enorme polea, que al girar en su eje, chi-
verificar, porque el teatro corta esa figura aovada en su menor diá- rriaba de desagradabilísimo modo.
metro y forma más bien la de una herradura." Cualquiera podría Algún tiempo después se alteró en parte la disposición del teatro:
suponer que más que un teatro habíase proyectado un circo ó coliseo el proscenio se adelantó unas dos varas sobre el patio, afectando la
romano. También se equivocaron los maestros en el cálculo del tiem- forma de un trapecio, de cuyos vértices partían las dos calles ó pasos
po necesario para la construcción, que fué de un año y 110 de seis me- para el público de bancas; cinco eran las filas de lunetas, y venían
ses, y aun así no nos parece mucho si consideramos el extraordinario siendo tanto más largas cuanto más se acercaban á la mitad de la sa-
é impropio espesor de los muros de la tal fábrica. Formaron el salón la; excepción hecha de la primera que contaba veinte asientos, seguía
cuatro altos ó pisos, el superior destinado á cazuela ó galería y los la segunda con diez y nueve, la tercera con veinte, la cuarta con vein-
demás con un total de cuarenta y un cuartos ó palcos, con balcones tidós, y con veintitrés la quinta. Oblicuas á los palcos contábanse á
de hierro, de media vara de altura y volados. Ostentaba las armas rea- uno y otro lado otras tantas pequeñas filas de lunetas, con un total
les en el frente de la embocadura del escenario, diversas pinturas de ciento diez y nueve asientos.
mitológicas adornaban los huecos del dicho frontis y el techo de la Detrás de la última banca hallábase el mosquete, capaz para trescien-
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30
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tas sesenta y nueve personas que permanecían en pie durante toda la


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función: alguna vez que en el mosquete se pusieron bancas, pudieron toda especie, que dificultaron su marcha material, pues en cuanto á la
tomar asiento doscientas ochenta y ocho personas. artística, nada podía esperarse digno de mención, no siendo extraño
que nadie se preocupase en conservar noticias de unos espectáculos
Los palcos primeros 6 cuartos de primara andanada, eran diez y
que, en la misma España, habían llegado entonces y continuaron mu-
ocho, ocupando los virreyes los núms. 1, 2 y 3: segunda y tercera an-
cho tiempo aún en supina decadencia.
danada contaban igualmente diez y ocho cuartos ó palcos, pero en
E n las representaciones de ese tercio del siglo, dice un historiador
los terceros los números del 8 al 13, que se llamaban del común, se
madrileño, " n o había ni decencia ni sentido común: tuvo grande bo-
vendían por asientos, debiendo tomarse por entero los demás.
ga ante aquel público ignorante, una comedia mitológica en que Dia-
El paraíso, galería ó cazuela, estaba dividido en dos partes entera-
na bajaba á la escena en una nube de tul, cantando seguidillas y prin-
mente separadas y sin comunicación alguna: la cazuela de hombres con
cesas, así llamadas en lenguaje de bastidores las coplas acompañadas
ciento cincuenta y nueve asientos, y la cazuela de mujeres con dos-
á la guitarra. Otras veces era Semíramis la que salía peinada á la pa-
cientos treinta y seis.
pillota, con arracadas semejantes á las usadas por las charras, con ca-
En los cuartos primeros cabían ciento sesenta y cuatro personas,
saquín de glacé, bucles angelicales, paletina de nudos, excusalí, ton-
ciento noventa y nueve en los segundos y ciento cuarenta y tres en
tillo y zapatos de tacón alto. A Julio César se le presentaba con su
los terceros.
corona de laurel, peinado á la rinoceronte, sombrero de plumaje, colo-
Las temporadas cómicas se abrían el Domingo de Pascua de Re- cado con gracia debajo del brazo izquierdo, chupa de tisú, casaca de
surrección y se cerraban el Miércoles de Ceniza, dándose sin inte- terciopelo, medias á la virulé, espadín de concha, y corbata guarne-
rrupción funciones todos los días de la semana, excepto los sába- cida de encajes. Todo esto era acompañado por una orquesta forma-
dos. da por cinco violines desafinados y un contrabajo ronco "Si
Un cuarto de primera ó segunda andanada, costaba de abono por tal situación guardaba el Teatro en Madrid muchos años después de
toda la temporada $300, y $ 200 por sólo los días de fiesta; se pagaba, inaugurado el Coliseo de México, ¿es creíble que fuera ni mejor ni más
además, por entrada diaria por persona, dos reales los días en que se digna la del nuestro?
doblaban los precios, un real en días de fiesta ó trabajo y nada en Para mayor desgracia, las calamidades y los lutos interrumpie-
los que se llamaban de coca, que eran funciones á bajo precio ó en ob- ron con frecuencia las representaciones. Ya era la muerte del Rey
sequio al público, como ahora se dice. El abono á banca ó luneta cos- Fernando VI; ya la del Marqués de las Amarillas, sucesor de Revilla
taba $ 6 al mes; la entrada eventual, ó alquiler de una luneta, valía Gigedo en el virreinato; ya los temores de que el país fuese invadido
seis reales en los días dobles, cuatro en los de fiesta, tres en los de tra- por los ingleses en guerra con España; ya las alarmas por la expul-
bajo y uno en los de coca. La entrada al mosquete, un real en los dobles sión de los Jesuítas. No faltan, sin embargo, referencias incompletas
y medio en los demás; las cazuelas, dos reales en días dobles, un real y escasas á representaciones y autores cómicos en México.
en los de fiesta y trabajo y medio en los de coca. La entrada eventual, Buscando aquí y acullá, puede tropezarse con D. Juan Ortiz de
ó alquiler de un palco, costaba $5 en días dobles, $3.50 en los de fiesta Torres quien, en 1645, hizo á una dama recitar un monólogo en ho-
y trabajo y doce reales en los días de coca. nor ó memoria de las Isabeles de España, en una fiesta del Santísimo
Por lo regular estaban abonados todos los palcos primeros y segun- Sacramento: Jerónimo Bezerra, en 1651, autor de una loa á la Poe-
dos, con excepción de cinco ó seis que se ponían á la venta, y todas sía; Antonio Medina Soler, de quien en 2 de Febrero de 1667, se re-
las lunetas, excepto cincuenta. presentó una loa en el Cerro del Tepeyac con motivo de la colocación
Descontada la parte correspondiente al abono, el teatro hacía, de lo de la Imagen de Nuestra Señora de Guadalupe; Agustín Salazar y
que podemos llamar entrada eventual, $600 en los días dobles. Torres, autor de varios Autos Sacramentales y de las comedias Ele-
Estaban exceptuados de todo pago de entrada, el Virrey y su fami- gir al enemigo, f uegos Olímpicos, El encanto eri la hermosura y el he-
lia, y sus pajes y damas, el Juez de teatro y su familia, el Secretario chizo sin hechizo, de un drama para la Universidad de México, y de
y los alabarderos del Virrey, el Mayordomo del Hospital, los Oidores una loa para la comedia Tetis y Peleo; Alonso Ramírez Vargas, au-
y sus mujeres, los Regidores, la oficialidad del Cuerpo de Granaderos, tor de El mayor trninfo de Diana, pieza representada en la Universi-
que daba la guardia, el escribano del Coliseo y los cómicos y los bai- dad, con un lujo y un gran aparato de transformaciones y tramoyas de
larines francos. que se hace lenguas Sigüenza, y que deben ponerse en duda, pues no
Los primeros años del Coliseo Nuevo abundaron en calamidades de es creíble que la colonia fuese en estos asuntos superior á la Metro-
f
f. f'
poli. La obra de Ramírez Vargas gustó tanto, que liubo necesidad España á su hermano Fernando VI, muerto el 10 de Agosto del mismo
de repetirla en las tardes de tres días seguidos. año. Al siguiente, y en 5 de Febrero, falleció en Cuernavaca el Mar-
De la misma época, entre 1651 y 1695, es la sobre toda ponderación qués de las Amarillas, á quien sustituyeron primero la Audiencia y
insigne Sor Juana Inés de la Cruz, que á su turno escribió varias loas, después D. Francisco Cagigal de la Vega, el cual, tras breve interi-
los tres autos El cetro de San José, San Hermenegildo y El Divino nato, hizo entrega del mando á D. Joaquín de Monserrat, Marqués de
Narciso, y las dos comedias Amor es más laberinto y Los empeños de Cruillas, el 5 de Octubre de 1760.
una casa.
A Cruillas tocó celebrar la jura de Carlos I I I , mostrarse benéfico
Inquiriendo más aún, podrían citarse el Presbítero D. Manuel Zu- con sus gobernados en la inundación que sufrió la Capital, distinguirse
maya, traductor de varias óperas italianas y autor de otra intitulada por sus hábiles disposiciones militares para defender á Veracruz de
Fartenope, que se representó en el Palacio Virreinal para celebrar el posibles ataques de los ingleses, en guerra con España, y recibir al
natalicio de Felipe V, y se imprimió en 1711; escribió también el dra- severísimo Visitador D. José de Gálvez, en 1764. De ese año y de 14
ma El Rodrigo, representado en el Palacio también, en celebridad del de Julio, es la Real Cédula que aprobó el arrendamiento del Coliseo
nacimiento del Príncipe Luis Fernando : D. José Antonio Pérez Fuen- por D. George Anastasio de Zúñiga en 1763, en la renta anual de cua-
te con su comedia El portento mexicano y veinte loas en verso mexi- tro mil quinientos pesos.
cano : Manuel Santos Salazar, con su coloquio La Invención déla Cruz,
A Cruillas sucedió D. Carlos Francisco de Croix, Marqués de Croix,
escrito en 1714, y una pequeña pieza dramática : el Padre Juan Arrio-
creador de la fortaleza de Perote y enérgico ejecutor de la orden de
la con su comedia, No hay mayor mal que los celos; el célebre D. Ca-
expulsión de los Jesuitas, verificada en México el 25 de Junio de 1767.
yetano Cabrera, con sus comedias La esperanza malograda y El Iris
En su tiempo, el asentista del Coliseo lo fué D. Diego Ballesteros.
de Sala?nanca; D. Francisco Soria, con sus Guillermo, Duque de Aqui-
El íntegro y recto Virrey, tuvo por sucesor á D. Antonio Bucareli
tania; La mágica mexicana; La Genoveva y De los celos y el amor cual
y Ursúa, fundador de los presidios ó acantonamientos de tropas del
es afecto mayor; el Padre Agustín Castro, con su tragedia traducida
Norte, del Castillo de San Diego ele Acapulco, reparador de la Acor-
La Troyana y sus saínetes de costumbres nacionales, Los remendones y
dada, y gran protector del comercio y de la minería. En su época se
Los Charros. Difícil sería mejorar ó completar listas de esa especie,
fundaron el Montepío, el Hospicio de Pobres, el Hospital de San Hi-
que creo sean tan curiosas como poco ó nada importantes para la glo-
pólito y la Casa de la Cuna; se procuró el adelanto de las ciencias, el
ria de las letras mexicanas.
establecimiento de la fabricación de tejidos, el cultivo del lino y del
cáñamo y la implantación de toda especie de mejoras. Todo ello hizo
que su fallecimiento, ocurrido el 9 de Abril de 1779, causase un duelo
general en la colonia, que contó á Bucareli en el número desús más
ilustrados gobernantes.
CAPÍTULO IV Un hombre como él, no podía haber visto con despego los asuntos
teatrales, y, con efecto, hizo cuanto le fué dable para levantarlos del
decaimiento en que se encontraban. En 13 de Febrero de 1777, D. Juan
de San Vicente '' remató el Real Asiento y Dirección de Comedias del
1755. —1786. Coliseo, por cinco años y pensión de cuatro mil quinientos pesos que
habían de pagarse al Hospital Real de Naturales." D. Juan de San
Apenas dos afios después de inaugurado el tercer Coliseo por el pri- Vicente tuvo en este asunto la representación del Lic. D. Félix de
mer Conde de Re villa Gigedo, entregó éste el mando á su sucesor D. Sandoval, abogado que era de la Real Audiencia: por razón de su
elevado cargo, Sandoval no quiso aparecer como asentista, pero sí se
Agustín de Ahumada y Villalón, Marqués de las Amarillas, á 10 de
comprometió á facilitar los caudales necesarios para la empresa, ce-
Noviembre de 1755. Durante el gobierno de este activo y laborioso
diendo á San Vicente la tercera parte de las utilidades, de la cual
virrey, á quien tocó celebrar las fiestas del patronato nacional de la
habría de descontarse la suma de veinticinco pesos mensuales que su
Virgen de Guadalupe en 17561 se arrendó por primera vez y en ese
representante pidió para su manutención. E l acuerdo entre Sandoval
mismo año el Coliseo, en cuatro mil pesos anuales, á D. José de Cal-
y D. Juan de San Vicente, apenas duró un año, pues el apoderado no
vo Rendón, cuyo contrato tuvo á bien aprobar, en Real Cédula de 25
se portó bien con su poderdante, á quien no presentó cuentas de gas-
de Octubre de 1759, Carlos I I I , que acababa de suceder en el trono de
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f. f'
poli. La obra de Ramírez Vargas gustó tanto, que liubo necesidad España á su hermano Fernando VI, muerto el 10 de Agosto del mismo
de repetirla en las tardes de tres días seguidos. año. Al siguiente, y en 5 de Febrero, falleció en Cuernavaca el Mar-
De la misma época, entre 1651 y 1695, es la sobre toda ponderación qués de las Amarillas, á quien sustituyeron primero la Audiencia y
insigne Sor Juana Inés de la Cruz, que á su turno escribió varias loas, después D. Francisco Cagigal de la Vega, el cual, tras breve interi-
los tres autos El cetro de San José, San Hermenegildo y El Divino nato, hizo entrega del mando á D. Joaquín de Monserrat, Marqués de
Narciso, y las dos comedias Amor es más laberinto y Los empeños de Cruillas, el 5 de Octubre de 1760.
una casa.
A Cruillas tocó celebrar la jura de Carlos I I I , mostrarse benéfico
Inquiriendo más aún, podrían citarse el Presbítero D. Manuel Zu- con sus gobernados en la inundación que sufrió la Capital, distinguirse
maya, traductor de varias óperas italianas y autor de otra intitulada por sus hábiles disposiciones militares para defender á Veracruz de
Fartenope, que se representó en el Palacio Virreinal para celebrar el posibles ataques de los ingleses, en guerra con España, y recibir al
natalicio de Felipe V, y se imprimió en 1711; escribió también el dra- severísimo Visitador D. José de Gálvez, en 1764. De ese año y de 14
ma El Rodrigo, representado en el Palacio también, en celebridad del de Julio, es la Real Cédula que aprobó el arrendamiento del Coliseo
nacimiento del Príncipe Luis Fernando : D. José Antonio Pérez Fuen- por D. George Anastasio de Zúñiga en 1763, en la renta anual de cua-
te con su comedia El portento mexicano y veinte loas en verso mexi- tro mil quinientos pesos.
cano : Manuel Santos Salazar, con su coloquio La Invención déla Cruz,
A Cruillas sucedió D. Carlos Francisco de Croix, Marqués de Croix,
escrito en 1714, y una pequeña pieza dramática : el Padre Juan Arrio-
creador de la fortaleza de Perote y enérgico ejecutor de la orden de
la con su comedia, No hay mayor mal que los celos; el célebre D. Ca-
expulsión de los Jesuitas, verificada en México el 25 de Junio de 1767.
yetano Cabrera, con sus comedias La esperanza malograda y El Iris
En su tiempo, el asentista del Coliseo lo fué D. Diego Ballesteros.
de Sala?nanca; D. Francisco Soria, con sus Guillermo, Duque de Aqui-
El íntegro y recto Virrey, tuvo por sucesor á D. Antonio Bucareli
tania; La mágica mexicana; La Genoveva y De los celos y el amor cual
y Ursúa, fundador de los presidios ó acantonamientos de tropas del
es afecto mayor; el Padre Agustín Castro, con su tragedia traducida
Norte, del Castillo de San Diego ele Acapulco, reparador de la Acor-
La Troyana y sus saínetes de costumbres nacionales, Los remetidonesy
dada, y gran protector del comercio y de la minería. En su época se
Los Charros. Difícil sería mejorar ó completar listas de esa especie,
fundaron el Montepío, el Hospicio de Pobres, el Hospital de San Hi-
que creo sean tan curiosas como poco ó nada importantes para la glo-
pólito y la Casa de la Cuna; se procuró el adelanto de las ciencias, el
ria de las letras mexicanas.
establecimiento de la fabricación de tejidos, el cultivo del lino y del
cáñamo y la implantación de toda especie de mejoras. Todo ello hizo
que su fallecimiento, ocurrido el 9 de Abril de 1779, causase un duelo
general en la colonia, que contó á Bucareli en el número desús más
ilustrados gobernantes.
CAPÍTULO IV Un hombre como él, no podía haber visto con despego los asuntos
teatrales, y, con efecto, hizo cuanto le fué dable para levantarlos del
decaimiento en que se encontraban. En 13 de Febrero de 1777, D. Juan
de San Vicente '' remató el Real Asiento y Dirección de Comedias del
1755. —1786. Coliseo, por cinco años y pensión de cuatro mil quinientos pesos que
habían de pagarse al Hospital Real de Naturales." D. Juan de San
Apenas dos afios después de inaugurado el tercer Coliseo por el pri- Vicente tuvo en este asunto la representación del Lic. D. Félix de
mer Conde de Re villa Gigedo, entregó éste el mando á su sucesor D. Sandoval, abogado que era de la Real Audiencia: por razón de su
elevado cargo, Sandoval no quiso aparecer como asentista, pero sí se
Agustín de Ahumada y Villalón, Marqués de las Amarillas, á 10 de
comprometió á facilitar los caudales necesarios para la empresa, ce-
Noviembre de 1755. Durante el gobierno de este activo y laborioso
diendo á San Vicente la tercera parte de las utilidades, de la cual
virrey, á quien tocó celebrar las fiestas del patronato nacional de la
habría de descontarse la suma de veinticinco pesos mensuales que su
Virgen de Guadalupe en 17561 se arrendó por primera vez y en ese
representante pidió para su manutención. E l acuerdo entre Sandoval
mismo año el Coliseo, en cuatro mil pesos anuales, á D. José de Cal-
y D. Juan de San Vicente, apenas duró un año, pues el apoderado no
vo Rendón, cuyo contrato tuvo á bien aprobar, en Real Cédula de 25
se portó bien con su poderdante, á quien no presentó cuentas de gas-
de Octubre de 1759, Carlos I I I , que acababa de suceder en el trono de
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tos y productos, é hízole de tal manera á un lado, que casi se convirtió


en dueño absoluto de la negociación. Perdida la paciencia, Sandoval No era este sólo el caudal de música de nuestro Coliseo, pues en el
acudió á quienes pudiesen hacerle justicia, y por auto de 15 de Di- mismo inventario consta la siguiente : '' Una ópera intitulada La di-
ciembre de 1778, firmado por D. Basilio Villarasa Venegas, Oidor de cha en el precipicio, tasada en cuarenta y cuatro pesos; las músicas
la Real Audiencia y Juez en turno de Hospitales y de la finca del para Psiquis y Cupido, La fuente de la fudía, Santa Genoveva, La
Coliseo, San Vicente fué suspendido y embargado. Sandoval nombró boba y la discreta, La Conquista, El bruto de Babilonia, y La pru-
entonces depositario á D. José Moreno, y encargó de la dirección del dencia en la niñez, amén de tres cuartetos sueltos (el inventario dice
Coliseo á D. Pedro Galup, práctico é inteligente en el asunto. tres quatros) , dos arias, y un minué.
Entre los utensilios deguarda-muebles y deguarda-ropa, figuran:
Consultando ese expediente, hallo que las comedias más en boga
' ' Cuatro lienzos de cotense pintados al temple, de Emperadores ro-
en su tiempo, eran las intituladas: Los tres afectos de amor, El poder
manos; Tres banderas de lienzo blanco, con las armas de España;
de la amistad, No siempre lo peor es cierto, También la afrenta es vene-
Cuatro lienzos de teatro en cotense florete nuevo, pintados al temple,
no, El catalán Serrallonga, Los siete Infantes de Lara, El garrote más
que forman una plaza de la zarzuela Las Segadoras; Cuatro lienzos
bien dado, Antioco y Seleuco, Mañanas de Abril y Mayo, Reinar después
en cotense de abrigo, pintados de arboleda, que sirven en dicha zar-
de morir, El Diablo predicador, Felipa la lavandera, Re?idirseá la obli-
zuela; Dos lienzos en cotense de abrigo, con dos ninfas pintadas al
gación, La más constante mujer, El Mariscal de Virón, El Nazareno
temple; Una perspectiva de coche cerrado; Una estatua á caballo; Un
Sansón, La gitana de Menfis, Los amantes de Teruel, La Dama duen-
morrión en cotense pintado; Seis leones; Una mitra; once máscaras;
de, Los áspides de Cleopatra, El negro más prodigioso, El mayor mons-
Una cabeza de león armada en otate y forrada de papel; Un carcaj de
truo los celos, No puede ser, El amo criado, El negro valiente en Flandes,
madera fileteada de oro; Una corona imperial de latón amarillo; Seis
La vida es sueño, La adúltera penitente, El bruto de Babilonia, El
Gupiles de vaqueta pintados de encarnado; Seis sonajas de madera con
Aguila de la Iglesia, La Andrómaca y otras muchas obras, cuyos tí-
cascabeles de hoja de lata; Un cencerro; Una grupera de vaqueta; Un
tulos no copio, por temor de hacer difusa esta relación.
báculo de otate; Dos violines ordinarios; Una fuente de hoja de lata
Del 19 de Abril al 19 de Diciembre de 1778, los productos del Co- para el degüello; Una capilla de papel pintada al temple para la co-
liseo fueron de treinta y cuatro mil doscientos veinticinco pesos cuatro media de San Agustín; Un clavo y un martillo de madera para la
reales-, los gastos de veintitrés mil seiscientos dos pesos seis y medio rea- comedia del Mágico-, Cinco borlas para el entremés de Los Doctores;
les, y las utilidades ascendieron á diez mil seiscientos veintidós pesos y Dos áspides de badana para la comedia de Cleopatra; Un laurel de va-
anco y medio reales. queta y pergamino; Una capucha negra; Siete anteojos de vaqueta;
Entre los saínetes en boga figuraban : La máscara, El Abate habla- Dos barbas con sus cabelleras de ixtle para sátiros; Dos turbantes de
dor, El arcabuceado, El maestro de cantar, La Puerta del Sol, Los payos moros; Una calavera de madera; Catorce cuchillos belduques; Un
simples, El payo y la novia, El niño bobo, La tostonera, El paje á la plato de peltre en dos mitades para el Pastelero de Madrigal; Seis pal-
greca, El petimetre afectado, La besuguera, La viuda, El marido celoso, mas de cotense; Cuatro pares de tijeras para el saínete de los Amola-
Las majas celosas, El tecolote, y Una tía y dos sobrinas. dores; U11 cartel de dos varas con las armas de España, al óleo; Un
E n el repertorio de tonadillas, constan : El amor buscón, La confusa vestido de Muerte, de badana, pintado al temple; Un vestido de león,
turbada, Los mosqueteritos, El lance del ensayo, México adorado, El de cotense; Una chupa y calzones negros; Una saya vieja; Unos cal-
amito del viejo, El emporio del Orbe, Atención, señores, Lo quépala en zones de crea listada, de marinero; Un manto capitular de tafetán
los Cortejos, La maja naranjera, El amor de los hombres, Madrid de mi encarnado, con vueltas de felpa; Una mar Iota chica, de sangalete ama-
vida, Buenas noches, amado Coliseo, Viendo mis queridicos, Apoderación rillo; U11 vestido de figurón, blanco; Tres pares de calzones de zan-
de las modas, La solterita, y Paisanitos graciosos. galete amarillo, para moros; Dos pieles de cotence pintadas al temple;
Del catálogo de seguidillas más en uso, extraigo los siguientes títu- Dos hábitos azules con sus capillas; Una marlota de moro de sangale-
los : Un majo de chupete, El ?nar proceloso, A dónde vais, suspiros, La te nácar con vueltas amarillas; Un hábito de estameña musga, para
dicha de que gozo, Cuando un amante adora, Queridos mosqueteros, A la duende; Una piel de bayeta blanca con pintas negras; Tres ropillas ne-
fuente, Narciso, Aquí caigo rendida, No sé cómo me atrevo, Mi muer- gras para vej ete; Una capa de seda azul, á la española antigua.'' Verda-
te con tu ausencia, Ohqué terrible pena, Estaba yo una noche, Ay deaquel deramente, toda esta curiosa enumeración de útiles de teatro, no ha-
que cautiva, Filomenas del Campo, Tengo una quimerilla, Pajarillas que bla mucho en favor de la riqueza del guarda-muebles y guarda-ropa
en los campos, El dueño que yo adoro, y Los celos son un fuego. del Coliseo de la Capital.
Tres meses y medio después del fallecimiento de Bucareli, tomó
>T °
37
posesión del virreinato D. M a r t í n de Mayorga, fundador del Hospital iris de nuestro sosiego.
de San Andrés y de la Academia de Bellas Artes de San Carlos, nom- E l insigne D. Martín
bre que le dió en honor del ilustre monarca que á la sazón reinaba de Mayorga, que obteniendo
en los dominios españoles. D u r a n t e su virreinato dióse en el Coliseo de Vice-Rey el comando,
una función en celebridad de los días del Rey, declamando en ella los con sagacidad siguiendo,
siguientes versos uno de los cómicos: con caridad gobernando,
el padre es de aquestos reinos,
desea que vuestra vida
" Elogio á nuestro Católico Monarca en el día de San Carlos
del Fénix sea renuevo.
del año de IJ8I.
Y todo el concierto heroico
que miro, noto y advierto,
Heroico é i n s i g n e Carlos,
Nobleza en palcos y bancas,
Rey piadoso en quien contemplo,
Militares y Pequeños,
lo famoso y lo bizarro
dicen que por muchos años
en vuestros merecimientos.
viva Don Carlos Tercero."
Monarca el m a y o r del Mundo,
pues á v u e s t r a s plantas vemos Después de este romance sonó la música y con acompañamiento de
con sagacidad rendido ella los cómicos cantaron á coro:
el Occidental Imperio.
Cristianísimo Monarca, " Q u e viva, que reine

( Adonis del europeo


plantel, h e r m o s o pensil
que en aquel recinto ameno
os ama, adora y venera,
el Monarca excelso,
y sea sin segundo
el que es sin primero."

Agobiado á disgustos por la mala voluntad del antiguo visitador


reconociendo p o r dueño.
D. José de Gálvez, ministro entonces de Carlos III, D. Martín de
Vuestra vida, oh Gran Señor,
Mayorga dejó en 28 de Abril de 1783 la pesada carga del Gobierno
á par vaya con el tiempo,
al Teniente General D. Matías de Gálvez, hermano de aquel hombre
no faltando vuestro amparo poderoso. Poco duró en su empleo D. Matías; fallecido en México el
á este Mundo, y á aquel cielo 3 de Noviembre de 1784, la Audiencia recogió interinamente el bas-
de España, j o y a preciosa tón de mando para entregarle al nuevo virrey D. Bernardo de Gál-
que puso Dios en el suelo. vez, Conde de Gálvez, hijo de aquel. Ya ilustre el conde por su va-
Que gocéis eternamente lor y acierto en la guerra y en la gobernación de la Florida y de la
la quietud en vuestros reinos, Isla de Cuba, su virreinato, que principió el 17 de Junio de 1785, fué
la paz en leales vasallos muy beneficioso para la Nueva España. Sufriéronse en su tiempo ex-
que os aman, y al mismo tiempo tremas escaseces y pestes mortíferas á resultas de pérdidas de cose-
la victoria consigáis chas, males que remedió con cuantiosas sumas que, tomadas de su
contra enemigos perversos peculio particular, cedió á los pobres, y proporcionando trabajo al
que á la Iglesia Nuestra Madre pueblo, á cuyo fin emprendió entre otras obras públicas la recons-
persiguen, y todos ellos trucción del Palacio de Chapultepec, la fábrica de las torres y el ce-
á la Santa Religión menterio de la Catedral y el trazo de las calzadas de Vallejo, la Piedad
rindan y postren los cuellos. y San Agustín de las Cuevas. En todo mostró su liberalidad y amor
Recibid, Monarca Augusto, á la colonia, que guardó grata memoria de su afabilidad y brillantes
el no ponderado afecto dotes personales, y con positivo duelo lloró su muerte ocurrida el 30
de que vuestra vida sea de Noviembre de 1786.
Su protección al Coliseo y á sus espectáculos fué eficacísima. Reu-
nidas las diversas disposiciones dictadas sobre teatros por algunas su talento, fué en moralizar á los cómicos, que en ese tiempo eran co-
autoridades, con ellas formó su primer reglamento el Oidor D. Basi- sa perdida sobre toda ponderación. Desde 1780 venía siendo prime-
lio Villarasa Venegas, Juez, según dije no ha mucho, de Hospitales ra dama del Coliseo, Antonia de San Martín, bella gaditana, esposa
de Antonio Pizarro; actriz de notables facultades y hermosa mujer,
y de la finca del Coliseo, en 1779: pero como en él "se observaran al-
rebosaba en caprichos, orgullos y vanidades de toda especie. Al fin
gunas deficiencias, se reformó por el Conde de Gálvez en n de Abril
de la temporada de 1780, muy pagada de la acogida del público y de
de 1786, pasando inmediatamente á la superior aprobación de Su
los aplausos alcanzados en las comedias, Antonia de San Martín qui-
Majestad. Como la finca se hallaba en grandes maltrato y abandono,
so que se le aumentase el sueldo, y como hallase resistencia á ello, se
ordenó su inmediata reposición, y el foro fué prolongado, se refor-
presentó á D. Lorenzo Montalvo, sub-arrendatario del Coliseo, y le
zó el arco del proscenio, se cambiaron el movimiento y disposición
manifestó, so pretexto de grandes quebrantos de salud, la imposibilidad
de los bastidores, se dió luz al guarda-ropa, y se extendió y puso
en que se hallaba para seguir en el ejercicio de primera dama de co-
nueva la madera del tablado; reformóse también el palco del Virrey medias. Y como Montalvo le contestase en un rapto de mal humor,
haciendo un solo arco de los dos que entonces tenía, y construyéron- tan común en empresarios, que condescendía lisa y llanamente en
se á la espalda del foro varias viviendas y un amplio salón para aca- su separación, la Antonia fuese á uno de los pueblos de los alrededo-
demia y ensayos de baile. Los gastos de estas obras fueron : seiscien- res de la Capital, simulando que á un cambio de aires demandaba su
tos trece pesos siete reales, en la recomposición del teatro; cincuenta alivio, pero en realidad con el propósito de no alejarse mucho, en la
pesos, en la prolongación del tablado; ciento cincuenta pesos, en el seguridad de que gracias á su partido con el público, el empresario
palco del Virrey; ochocientos cuarenta pesos, en la construcción de iría en su busca y solicitud accediendo al aumento del sueldo. Suce-
viviendas; setecientos setenta y seis pesos, en el salón de baile, y dió en parte como lo esperaba, pues el día 29 del mes de Marzo de
ochenta y cuatro pesos en el enladrillado: total, dos mil quinientos tres 1781 presentósele D. Lorenzo Montalvo con D. Mariano Cepeda, es-
pesos y siete reales. El telón de embocadura se hizo de nuevo según el cribano del Coliseo, exponiéndole la necesidad en que se hallaban
proyecto contenido en la siguiente nota anexa al presupuesto: " P a r a de primera dama: la Antonia respondió que por más que sus males
el nuevo telón grande se ha de formar un diseño que contenga el Mon- 110 habían tenido alivio, se avendría á seguir trabajando siempre que
te Parnaso, y en él á las nueve Musas, Caliope que preside en el poe- se aceptasen las fuertes condiciones que impuso.
ma heroico; Clío en la historia; Erato en la poesía amorosa; T a h a en
Montalvo acudió al Virrey, que lo era D. Martín de Mayorga, y és-
la comedia; Melpomeue en la tragedia; Terpsícore en el baile: Eu-
te y el Juez del Coliseo ordenaron "se intimase á la Antonia que ó
tropia en los instrumentos; Polimnia en la oda y Urania en la astro- inmediatamente exhibiese las condiciones de su contrata ó de lo con-
logia: á cada una de estas Musas se le ha de pintar con el geroglífi- trario á otro día se la sacaría de la ciudad con destino á la de Vera-
co correspondiente al arte que preside. Al pie del Monte han°de estar cruz." Antonio Pizarro pasó en seguida á verse con el Juez y mos-
D. Pedro Calderón de la Barca, con hábito de Santiago; Lope de trarle las condiciones pedidas, y como se juzgasen inadmisibles, el
Vega Carpió, con el de San Juan, y D. Antonio de Solís, cuyos re- escribano notificó á la primera dama la orden "de salir dentro de tres
tratos se procurarán adquirir. En la cúpula ó cima del Monte, han días del recinto de la corte virreinal."
de estar dos figuras que representen á Júpiter y á Mnemósyná, pa- Antonia de San Martín representó entonces al Virrey que estaba
dres de las Musas, y sobre todos, Apolo de presidente, cada uno de dispuesta á someterse a tanto rigor; pero que en vista de hallarse en
estos tres también con sus geroglíficos. Sin embargo de estos gero- cinta y tener dos criaturas, tan pequeñas que una estaba aún á pe-
glífieos que han de pintarse en cada una de estas figuras, se les pon- chos de ama de cría, se le concediese tiempo suficiente para salir de
drán los nombres también al pie, y lo mismo á los tres poetas Calde- su cuidado y ver de conseguir mujeres que quisiesen seguirla en su
rón, Lope de Vega, y Solís. Debajo se escribirá este verso: viaje á España dando el pecho á sus hijos. Jugó bien el Virrey el
papel enérgico que demandaba la necesidad de asustar á la San Mar-
" E s el drama mi nombre tín para no quedar sin primera dama en el Coliseo, y en 6 de Abril
y mi deber el corregir al hombre, el escribano asentó en los autos la siguiente razón: " P o r mandato
haciendo en mi ejercicio verbal del Excelentísimo Sr. Virrey, comparecieron ante mí Antonio
amable la virtud, odioso el vicio." Pizarro y Antonia de San Martín, á quienes en cumplimiento de la
Pero en lo que mejor demostró el Conde de Gálvez su energía y superior orden de Su Excelencia, hice varias reconvenciones, de que
resultó el allanamiento de ambos á continuar sirviendo en el Coliseo
por el mismo sueldo y condiciones del anterior año: en cuya virtud liares intereses, ha permitido la entrada en mi casa á varias personas
les previne pasasen á presentarse al Sr. Juez del Coliseo y pidiesen y repudiado otras: de modo, que todos aquellos que contempla le
á Su Señoría, hiciese que los admitiesen, de que di cuenta á Su Ex- pueden franquear cantidades para fomento de sus vicios, quiere que
celencia, quien se sirvió aprobarlo." continúen, me interpela á recibirlos con agrado, que no me separe
En Febrero de 1783, el mismo D. Martín de Mayorga se vió obli- de sus conversaciones, y que los trate con la mayor afabilidad; por el
gado á conocer en la demanda de separación de Antonio Pizarro que contrario, aquellos que aun por el ejercicio que tengo es preciso me
le presentó la Antonia. Por respeto á mis lectores, aunque con per- visiten, aunque sean con buena intención, les pone malos modos, los
juicio del rigorismo histórico, no insertaré íntegro el pedimento de despide, y por lo mismo á mí me maltrata de obras y palabras, me
la cómica, que acusa una inmoralidad y una impudencia repugnan- vitupera con los mayores pesares, y quiere que sólo siga sus ideas.
tísimas. No obstante, lo que pueda decir bastará para que aquellos Estas son de la mayor infamia, porque sin atender á la debida pure-
za que se debe conservar en un matrimonio, ha permitido y sugerí-
de mis lectores que no hayan frecuentado los escenarios, sepan algo dome á deshonestas solicitudes, que jamás debiera haber admitido en
de la vida miserable y perversas costumbres de esas infelices que tan- violación de la fe del contrato esponsalicio . . . . Y ya que han surti-
ta ilusión suelen causar á quienes sólo las ven á la luz de las candi- do efecto con sumo desacato, me ha quitado lo que se me ha minis-
lejas, y vistiendo los oropeles de los personajes que interpretan. trado por el servicio . . . No cabe, Señor Excelentísimo, en católicos
El ocurso de la Antonia empieza así: "Excelentísimo Señor.— corazones semejante inhumanidad, pues aun los animales irraciona-
Antonia de San Martín, vecina de esta ciudad y Primera Dama del les solicitan con el mayor esfuerzo que sus consortes no sean ofen-
Real Coliseo, por el más oportuno recurso digo: Que en el espacio didas por otros . . . . Para acabar de dar una corta instrucción de la
de poco más de diez años que llevo de casada con Antonio Pizarro, perversidad de mi marido, hago presente á Vuestra Excelencia, que
ha sido la mala vida que me ha dado tan continua, que falta toleran- habiéndome comunicado que se le proporcionaba acomodo en con-
cia para sufrirla y razones para explicarla: porque á pocos días de ducción de víveres para la ciudad de la Habana, me esforcé en lo po-
verificado el matrimonio, sin haberle dado el más leve motivo, co- sible así para que fuera con estimación, como para ministrarle mil
menzó á maltratarme de obras y palabras, de suerte que hallándome pesos en reales y otras alhajas, con que pudiera conseguir algunos
una ocasión grávida, sin atender á la delicadeza del estado, no tuvo adelantamientos; y lo que ha resultado de todo, fué que habiendo
embarazo para arrojarme á rodar una escalera, con un golpe que me llegado á Veracruz, de allí se regresó para la ciudad de Guanajuato
dió, lo que fué suficiente para que se desgraciara la criatura, y las á formar compañía cómica, donde tengo noticia que en embriagueces,
fatales resultas que por esto se han causado, hasta el presente exis- juegos é ilícitas comunicaciones, ha disipado todo lo que le ministré,
ten, como que de día en día experimento notable quebranto en la sa- y tiene ánimo de regresarse de pronto á mi compañía.—Si esto se
lud; y como no cesa la causa, que han sido los golpes con palo ó mano verifica, es preciso que continuando en su desarreglada conducta,
no pueden parar los efectos de enfermedades, cóleras y sinsabore¡ intente que yo siga admitiendo los obsequios y pretensiones que á él
que tanto me han consternado. (Sigue aquí un párrafo impublicable le sirven de beneficio y á mí de perder mi alma . . . . y si éste advier-
relativo á los viciosos extremos de Pizarro, en el uso de sus derecho^ te en mí la más mínima resistencia, es de presumir que, aumentando
como consorte.) Conducidos que fuimos de la ciudad de la Habana los malos tratamientos, me quite la vida. Atento á lo cual la justi-
a esta Capital, me coloqué en el Real Coliseo, y en lugar de que mi ficación de Vuestra Excelencia, se ha de servir mandar se me re-
ciba la información sobre los atentados particulares, con la debida
mando había de esforzarse en acudirme con los precisos alimentos y
reserva, y que el escribano D. Mariano Cepeda, certifique lo que le
asistencias, lo que ha hecho es aprovecharse de la ocasión y con ella
constare, de uno de los pasajes que presenció; haciendo que con apre-
de mi sueldo, no perdonando ni aun las galas que se me dan, porque
mio declaren las personas que señalaré, lo que igualmente les cons-
todo lo apropia y disipa en los vicios detestables de malas amistades
te, para que instruida la sumaria en debida forma, determine Vuestra
embriagueces y juegos; de suerte que cuando podíamos tener algún
Excelencia lo que tenga por oportuno, á vista de los graves excesos
alivio, es cuando se verifican escaseces, siendo casi necesario ocultar
cometidos por Antonio Pizarro, en que queda ofendida la Divina Jus-
la ropa y demás adornos para presentarse al público, que á no ser
ticia, el honor del matrimonio y la causa pública: á cuyo efecto in-
así, ni aun esto tuviera, á vista de su desarreglada conducta. —Siendo terpongo querella en debida forma."
como son estos excesos dignos de severa corrección, aumenta más
el delito con lo que infamemente practica; pues movido de sus pecu- Como Pizarro no pudo justificar empleo ú ocupación honesta y lu-
R . H . T.—X. I . — 6
crativa, las autoridades, celosas de que el Coliseo no perdiese el es-
plendor que á los espectáculos daba el talento de la Primera Dama allanamiento verbal de Bárbara, se le notificase se abstuviese de pro-
el tal mando fué expulsado de la ciudad, como vago y mal entrete- vocar, contestar ni aun transitar por la calle en que viva Antonia,
nido, mientras otra más grave determinación se tomase. apercibida que en caso contrario se procedería contra ella á lo que hu-
biese lugar, y se alzó el depósito y condenó á ambas partes en sus
Esto fué en 1783. Dos años después, hubo nuevo pleito de la An-
respectivas costas. "
tonia con las actrices sus compañeras. H e aquí un resumen de lo de-
terminado y sucedido, tomado de los autos originales: " E n la causa
que se siguió, contra Bárbara Ordóñez, Sobresalienta del Teatro de
México, por querella de Antonia de San Martín, Primera Dama, que
se principió en 3 de Octubre de 1785, sobre amenazas de muerte he- CAPITULO V
chas por aquella á ésta, declaró la dicha Bárbara que el encono que
le tema la Dama, dimanaba de haberle parecido que ella se comuni-
caba con D. Francisco Balmis, por cuya malicia le había requerido 1786
D. Juan de San Vicente á la dicha Bárbara, no se tratase ni comuni-
case con Balmis, porque la Dama estaba muy resentida de ello, sobre Demos ahora extensa y pormenorizada razón de cómo estuvieron
que también citó la Bárbara á María La Carpintera y Anita La Que- organizadas las Compañías del Viejo Coliseo en la época virreinal, to-
retana. Examináronse á estos tres, y San Vicente dijo ser cierta mándola de un antiguo documento que tiene por título '' Razón de
a cita y que habiéndole dado queja la Dama de que la insultaba y los individuos de que se componen las Compañías de Cómicos, Bai-
la mofaba la Bárbara con asomarse á las cortinas del tablado á hacer larines y Orquesta del Teatro de esta Corte, sus sueldos y obliga-
senas a Balmis, le había prevenido lo excusase, por estar de ello muy ciones. Este documento publícase hoy por primera vez.
resentida la D a m a . - M a r í a Josefa Martínez Delgado, alias la Carpin- "Mujeres.—ANTONIA D E S A N M A R T I N , Primera Dama: gana mil
tera, expreso ser cierto que Antonia le encargó tuviese-cuidado de si ochocientos pesos en las temporadas que corren desde el primer día
entraba Balmis en casa de Bárbara, que vivía frente de dicha María de Pascua de Resurrección hasta el último del siguiente Carnaval.
Joseía, a que expone le había respondido que no lo había visto entrar Según su Escritura no se la ha de poder despedir en el tiempo de su
como asi era: Que también era cicrto que en una ocasión en que Bár- ajuste, ni destinarla á otro papel que al de Primera Dama. Se le pa-
bara estaba chuleando á la declarante, le instó Antonia que se fuese á gan por separado las comedias supernumerarias al respecto de seis
quejar con el E x m o . Sr. Virrey, y que le informase lo mala que era pesos, cada una que ejecute á más de las cuatro á que está obligada
a Barbara, y lo mismo le encargó algunas otras ocasiones, instándo- por los expresados un mil ochocientos pesos. No puede pedir aumen-
le a que si se ofrecía en el Palacio hablar de Bárbara, informase mal to de sueldo ni gratificación alguna con ningún título. Debe hacer
en cada mes una comedia de pilón (gratis), para reemplazar con sus
de e i i a . pero a lo h i z 0 ]a d e c l a r a n t e i ni tuvQ m o ü v o
producíoslos gastos de adealas y gajes, y otra, además, de la misma
ello, como se o había comunicado alguna vez á su m a r i d o . - A n a de suerte, siempre que muera algún individuo de la Compañía, hasta cu-
H y a r que es la Queretana, dijo era cierto que varias veces de las que brir con sus rendimientos cincuenta pesos que se dan para el entie-
el a iba a Palacio le aconsejaba la Dama que si se ofrecía hablar de rro. Y en cada año ha de hacer también otra comedia de pilón para
Barbara con Su Excelencia, le informase mal de ella, lo que nunca los gastos de la cera de la Oración de las Cuarenta Horas en el Hos-
hizo, y que un día en que fué á visitar á la Antonia, le encargó á la pital Real.
declarante que le llevase un papel al precitado Balmis, lo que no qui- "Nota.—En cuanto á estas comedias de pilón están obligados á
so hacer, excusándose con decir que á eso no iba ella, que era una hacerlas todos los individuos de la Compañía de Cómicos y de la Or-
m u j e r j a s a d a . - S o l t ó s e de fiado á la Bárbara para que se pusiese en questa. También se debe entender generalmente que las obligacio-
cura depositándola en casa de San Vicente, y teniendo la causa es- nes de los expresados individuos, inclusos los Bailarines, son lo mis-
tado de prueba sin haber hecho alguna ninguna de las partes, por au- mo que la de la Dama, relativa á que sólo comprenden desde el día
to del día 13 de Febrero de 1786, en atención á haberse hecho compa- primero de Pascua de Resurrección hasta el último del siguiente Car-
recer a una y á otra de las dos contendientes y convenido en que sé naval.
cortasen estos procedimientos quedándose en el estado que tenían se "MARÍA ORTEGA Y ROCHA, Segunda Dama. Gana un mil pesos
impuso perpetuo silencio en los Autos, mandándose que conformé al por las cuatro comedias semanarias, y en las supernumerarias lo que
crativa, las autoridades, celosas de que el Coliseo no perdiese el es-
plendor que á los espectáculos daba el talento de la Primera Dama allanamiento verbal de Bárbara, se le notificase se abstuviese de pro-
el tal mando fué expulsado de la ciudad, como vago y mal entrete- vocar, contestar ni aun transitar por la calle en que viva Antonia,
nido, mientras otra más grave determinación se tomase. apercibida que en caso contrario se procedería contra ella á lo que hu-
biese lugar, y se alzó el depósito y condenó á ambas partes en sus
Esto fué en 1783. Dos años después, hubo nuevo pleito de la An-
respectivas costas. "
tonia con las actrices sus compañeras. H e aquí un resumen de lo de-
terminado y sucedido, tomado de los autos originales: " E n la causa
que se siguió, contra Bárbara Ordóñez, Sobresalienta del Teatro de
México, por querella de Antonia de San Martín, Primera Dama, que
se principió en 3 de Octubre de 1785, sobre amenazas de muerte he- CAPITULO V
chas por aquella á ésta, declaró la dicha Bárbara que el encono que
le tema la Dama, dimanaba de haberle parecido que ella se comuni-
caba con D. Francisco Balmis, por cuya malicia le había requerido 1786
D. Juan de San Vicente á la dicha Bárbara, no se tratase ni comuni-
case con Balmis, porque la Dama estaba muy resentida de ello, sobre Demos ahora extensa y pormenorizada razón de cómo estuvieron
que también citó la Bárbara á María La Carpintera y Anita La Que- organizadas las Compañías del Viejo Coliseo en la época virreinal, to-
retana. Examináronse á estos tres, y San Vicente dijo ser cierta mándola de un antiguo documento que tiene por título '' Razón de
a cita y que habiéndole dado queja la Dama de que la insultaba y los individuos de que se componen las Compañías de Cómicos, Bai-
la mofaba la Bárbara con asomarse á las cortinas del tablado á hacer larines y Orquesta del Teatro de esta Corte, sus sueldos y obliga-
senas a Balmis, le había prevenido lo excusase, por estar de ello muy ciones. Este documento publícase hoy por primera vez.
resentida la Dama—María Josefa Martínez Delgado, alias la Carpin- "Mujeres.—ANTONIA D E S A N M A R T I N , Primera Dama: gana mil
tera, expreso ser cierto que Antonia le encargó tuviese-cuidado de si ochocientos pesos en las temporadas que corren desde el primer día
entraba Balmis en casa de Bárbara, que vivía frente de dicha María de Pascua de Resurrección hasta el último del siguiente Carnaval.
Josefa, a que expone le había respondido que no lo había visto entrar Según su Escritura no se la ha de poder despedir en el tiempo de su
como asi era: Q u e también era cicrto que en una ocasión en que Bár- ajuste, ni destinarla á otro papel que al de Primera Dama. Se le pa-
bara estaba chuleando á la declarante, le instó Antonia que se fuese á gan por separado las comedias supernumerarias al respecto de seis
quejar con el E x m o . Sr. Virrey, y que le informase lo mala que era pesos, cada una que ejecute á más de las cuatro á que está obligada
a Barbara, y lo mismo le encargó algunas otras ocasiones, instándo- por los expresados un mil ochocientos pesos. No puede pedir aumen-
le a que si se ofrecía en el Palacio hablar de Bárbara, informase mal to de sueldo ni gratificación alguna con ningún título. Debe hacer
en cada mes una comedia de pilón (gratis), para reemplazar con sus
de e i i a . pero a lo h i z 0 ]a d e c l a r a n t e i ni tuvQ m o ü v o
producíoslos gastos de adealas y gajes, y otra, además, de la misma
ello, como se o había comunicado alguna vez á su m a r i d o . - A u a de suerte, siempre que muera algún individuo de la Compañía, hasta cu-
Hijar que es la Queretana, dijo era cierto que varias veces de las que brir con sus rendimientos cincuenta pesos que se dan para el entie-
el a iba a Palacio le aconsejaba la Dama que si se ofrecía hablar de rro. Y en cada año ha de hacer también otra comedia de pilón para
Barbara con Su Excelencia, le informase mal de ella, lo que nunca los gastos de la cera de la Oración de las Cuarenta Horas en el Hos-
hizo, y que un día en que fué á visitar á la Antonia, le encargó á la pital Real.
declarante que le llevase un papel al precitado Balmis, lo que no qui- "Nota.—En cuanto á estas comedias de pilón están obligados á
so hacer, excusándose con decir que á eso no iba ella, que era una hacerlas todos los individuos de la Compañía de Cómicos y de la Or-
m u j e r j a s a d a . - S o l t ó s e de fiado á la Bárbara para que se pusiese en questa. También se debe entender generalmente que las obligacio-
cura depositándola en casa de San Vicente, y teniendo la causa es- nes de los expresados individuos, inclusos los Bailarines, son lo mis-
tado de prueba sin haber hecho alguna ninguna de las partes, por au- mo que la de la Dama, relativa á que sólo comprenden desde el día
to del día 13 de Febrero de 1786, en atención á haberse hecho compa- primero de Pascua de Resurrección hasta el último del siguiente Car-
recer a una y á otra de las dos contendientes y convenido en que se naval.
cortasen estos procedimientos quedándose en el estado que tenían se "MARÍA ORTEGA Y ROCHA, Segunda Dama. Gana un mil pesos
impuso perpetuo silencio en los Autos, mandándose que conformé al por las cuatro comedias semanarias, y en las supernumerarias lo que
corresponda según prorrata de dicho sueldo. Está también obligada
" M A R Í A E O R E T O R E N D O N , Cantarína y Bailarina de los Bailes
á hacer el papel de Sobresalía uta, siempre que se tenga por convenien-
de la tierra. Gana un mil pesos, los seiscientos por el cantado y los
te, en cuyo caso, haciendo papel de Dama primera, ya sea en las co-
cuatrocientos por dichos bailes, en las cuatro comedias semanarias :
medias supernumerarias ó en las cuatro de la general obligación, por
enfermedad de la propietaria ó por otro motivo, se le han de satisfa- y en las supernumerarias, si acaso trabajare en ellas, dos pesos por
cer cinco pesos por cada representación. Si quedase de Sobresáltenla cada una. E n las demás obligaciones lo mismo que la Segunda Gra-
de pie fijo, se le han de abonar en las noches de comedia supernume- ciosa.
raria los reales correspondientes al sueldo de los mil pesos que van " M A R Í A J O S E F A M A R T Í N E Z , Cantarína. Gana seiscientos pesos <t\\

citados, aunque en dichas noches no haga papel alguno, siendo su las cuatro comedias semanarias, y dos pesos en cada una de las super-
obligación asistir al Teatro én todas las representaciones vestida, pei- numerarias si trabajare en ellas. E n las demás obligaciones lo mis-
nada y pronta á salir en cualquier accidente que ocurra, menos para mo que la Rendón.
hacer la comedia titulada La Tía y la Sobrina, porque ésta la tiene Hombres.—JUSTO H I D A L G O G U E V A R A , Primer Galán. Gana un
excluida expresamente en su Escritura para no representarla. I t e m : mil doscientos pesos en las cuatro comedias semanarias, y en las su-
es obligada á devolver las sacas de comedias y demás piezas que se pernumerarias lo que le corresponda á prorrata de su sueldo en cada
le entreguen, pagando las que falten. una, si trabajare en ellas. E s de su obligación admitir en las come-
dias ó piezas que se hicieren el papel que se le señalare: cuando no
" A N A D E H I J A R , Graciosa. Gana ochocientos pesos por las cua-
sea de su carácter el que corresponda al Galán, ó se crea que puede
tro comedias semanarias, y en las supernumerarias cuatro pesos por
desempeñarse con más propiedad por otro, ha de poder dársele al que
cada una, si acaso hiciese algún papel en ellas. Está obligada á hacer
parezca mejor : ha de mantener con decencia la ropa necesaria para
los papeles de Primera ó Segunda Graciosa, según se le m a n d e ; asis-
el tablado, y ha de devolver las sacas de comedias, sainetes y demás
tir diariamente á la Escoleta de versos y de música á las horas que se
que se le entreguen, pagando los que faltaren.
le señalen; aprender en ellas lo que se le enseñe; asistir al Coliseo
" J O S É D O M I N G O R O S A L E S , Autor y Segundo Galán. Gana por este
todos los días de comedia, desde la Oración hasta que se acabe el to-
último destino ochocientos cincuenta pesos, en las cuatro comedias sema-
do de la representación, vestida y peinada de su c u e n t a ; cantar, todas
narias, y en las supernumerarias lo que corresponda á cada una, según
las noches que se lo manden, seguidillas, saínetes, tonadillas, ansias
prorrata de su sueldo. No tiene Escritura alguna por no haberla hecho
y demás que se le enseñasen ; cantar en las comedias y las músicas
nunca, y haber cumplido, no obstante, cuanto se le ha prevenido. Por
diarias, haciendo acompañamiento á las D a m a s ; vivir cerca del Tea-
lo de Autor aun no se le ha señalado cosa alguna, por 110 haberse re-
tro ; mantener decente la ropa de él y la necesaria; devolver las le-
ducido á pedir honorarios por este trabajo, aunque se le h a instado
tras de tonadillas, sainetes ú otras piezas que se le entreguen, pagan-
para ello. Sus obligaciones como Autor, son, entre otras, las del Go-
do las que faltasen.
bierno económico de la Compañía, como cabeza y principal papel de
" T E R E S A D E A C O S T A , Segunda Graciosa y Cantarína. Gana cua- ella; distribuir las órdenes que se le comuniquen por la Dirección del
trocientos pesos por las cuatro comedias semanarias, y en las supernu- Teatro, haciéndolas observar con su responsabilidad; prevenir lo ne-
merarias,. si hiciese algún papel en ellas, se le han de dar dos pesos cesario para la ejecución de las comedias y demás piezas, pidiéndolo
por cada u n a ; tiene obligación de asistir diariamente á la Escoleta de con la debida anticipación; repartir á los cómicos sus sueldos, para lo
representación y de música á la hora que se le señale, y allí aprender que entrarán en su poder los fondos necesarios á fin de cada semana,
á cantar lo que se le enseñe; asistir al Teatro todos los días de come- y hacer lo demás que se le prevenga, relativo á la representación.
dia, desde la Oración hasta que se concluya el todo de la representa- ' ' F R A N C I S C O C A R R E Ñ O , Tercer Galán. Gana quinientos pesos en las
ción, vestida y peinada de su c u e n t a ; ha de representar y cantar to- cuatro comedias semanarias, y en las supernumerarias lo que le co-
das las noches que se lo manden, comedias, entremeses, seguidillas, rresponda á prorrata, si tuviese papel en ellas. E s de su obligación, á
sainetes, tonadillas, ansias y demás que le enseñen ; ha de cantar en más del dicho papel de tercer galán, suplir las plazas de primero y
las comedias las músicas diarias, haciendo acompañamiento á las Da- segundo, sin otro a b o n o ó gratificación que el referido sueldo: ha de
m a s ; ha de vivir cerca del T e a t r o ; ha de mantener con decencia la mantener la ropa necesaria para el Teatro con aseo y decencia, y n o
ropa necesaria para el tablado, y ha de devolver las letras de tonadi- haciéndolo se ha de reducir su sueldo á trescientos setenta y cinco
llas, sainetes ú otras piezas que para aprenderlas se le hayan entre- pesos : ha de devolver los papeles que se le entreguen para aprenderlos,
gado, pagando las que le falten. pagando los que faltaren, y en caso de que haga algún otro papel
distinto de los expresados, se le han de pagar separadamente según y
como se haya hecho en sus respectivas clases en tiempo del arrenda- " V I C E N T E T O M A S I , Primer Barba. Gana novecientos pesos con la
dor D. Manuel Lozano, de que habrá constancia en las papeletas obligación de ejecutar además de los papeles que corresponden á di-
diarias. cho destino, cualesquiera otros que se le manden, sean de la clase que
se fueren, en las cuatro comedias semanarias; pero en las supernu-
" N I C O L Á S J A I M E V I L L A V I C E N C I O , CuartoGalán. Oawacuatrocien-
merarias en que supla algún papel de Galán, se le h a de satisfacer lo
tos cincuenta pesos por las cuatro comedias semanarias, y á este res-
que corresponda á prorrata al sueldo que va asignado, y solamente en
pecto lo que importaren cada una de las supernumerarias. E s de su
cuanto á este papel, y nada por lo que respecte á los otros que haga :
obligación mantener la ropa del Teatro decente y necesaria, reducien-
y está obligado como los demás, en lo de mantener su ropa y devolver
do su sueldo, de lo contrario, á trescientos pesos. E n lo demás como
papeles.
el tercer galán.
" M A R I A N O R O S U E L A , Vejete y Vejeta, con el agregado de hacer
Sobresaliente. Gana setecientos pesos, y es
" C R I S T Ó B A L DE MESA,
de su obligación ejecutar además de este papel, cualquiera otro que partes de por medio según se le destine. Gana trescientos pesos por
se le mande, sea de la clase que se fuere, sin réplica ni excusa alguna, comedias semanarias y supernumerarias, sin más gratificación que los
en las cuatro comedias semanarias, y si en las supernumerarias supliese que se llaman gajes y adealas.
" M A R I A N O C A R O , Guardarropa, con el agregado de repartir á to-
algún papel de Galán, se le ha de satisfacer separadamente lo que co-
rresponda á prorrata de dicho sueldo: tendrá la ropa necesaria y de- dos los individuos de la Compañía de Cómicos los papeles que hayan
volverá los papeles que se le den para aprenderlos. de estudiar. Gana cuatrocientos pesos, sin asignación alguna por co-
medias supernumerarias ni otro motivo alguno, á excepción de que
" J U A N M O R E N O , Segundo Gracioso. Gana trescientos sesenta pesos
se le destine á hacer algún papel que entonces se ha de pagar por se-
en las cuatro comedias semanarias, y en las supernumerarias á pro-
parado. E s de su obligación habilitar las comedias, saínetes y demás
rrata. Es de su obligación suplir las enfermedades y ausencias del
piezas, de aquellas menudencias que diariamente necesitan; tener
primer gracioso: ha de mantener bien su ropa, y no haciéndolo, se le
prontos los vestuarios que sirven para las funciones, siendo respon-
reducirá el sueldo á trescientos diez pesos: ha de cantar lo que se le
sable de ellos; habilitar de luces y candilejas el teatro, por el precio
mande, pagándosele dos pesos por la primera vez que recite cada pieza
que tengan, según corra la postura del sebo, cuyo importe y el de los
y un peso en las demás: ha de ser primer figurante de todos y cua-
demás gastos menudos se le ha de abonar.
lesquiera Bailes en que los haya, sin excluirlo de ninguno en la clase
tal Ügurante " S E B A S T I A N D E G U Z M A N , Primer Sainetero. Gana seiscientos pesos
< pagándosele separadamente por este trabajo dos pe-
sos en cada ocasión que le tenga. en las cuatro comedias semanarias, y si cantare alguna vez más, se le
h a n de pagar en cada ocasión cuatro pesos á más de los expresados
<' M I G U E L Z E N D E J A S , Parte de por medio, con la calidad de desem-
seiscientos. En ropa y papeles como los demás.
peñar los papeles que se le den de primeros galanes, segundos ó ter-
' ' J U A N P U E R T O , Segundo Sainetero. Gana cuatrocientos pesos, sien-
ceros, u otros que puedan ofrecerse. Gana trescientos cincuenta pesos
do de su obligación asistir á la Escoleta de música siempre que se
y a mas de lo dicho, es de su obligación mantener su ropa y devolver
le mande, á las horas que se le señalaren, para aprender á cantar
los papeles. En las comedias supernumerarias se le ha de pagar lo que
lo que le enseñen; haciéndolo todas las noches ó las que se le asignen,
corresponda al papel que ejerza ese día. • sea en las músicas de comedias, en seguidillas, saínetes, tonadillas,
Parte de por medio. Gana doscientos cin-
ZTJeT
" J O S É MARÍA VIVEROS, ó arias, ó cualquiera otra cosa que se le mande y haya aprendido:
SU C a r g 0 r e p r e s e n t a r l o s v e r s o s
y papeles que entendiéndose este sueldo por semanarias y supernumerarias.
se le manden y sean correspondientes á la clase de criados y partes de
ÍuZZ
" N O R B E R T O I N Z A U R R A G A , Apuntador en el sitio que se le destine,
T i ^ t r C e r ' S Í e n d ° ^ S U 0 b H g a C Í Ó 1 1 — t e n e r decente alternando con sus compañeros. Gana cuatrocientos setenta y anco
su opa en la clase de su destino, entendiéndose que en el referido pesos, pero si se le destinase á pie fijo al cajón del medio del tablado,
sueldo se comprenden todas las comedias y funciones que se ejecuten
se le han de abonar veinticinco pesos más en las cuatro comedias se-
sean as cuatro semanarias ó las supernumerarias, pues en todas £
manarias, porque si se hiciere alguna supernumeraria se le ha de abo-
t caTt d a q u e se le destine, sin que por ello pueda preten- nar lo que corresponda á prorrata de dicho sueldo. E s de su obliga-
der cantidad alguna más que la expresada
ción apuntar todas las comedias, saínetes y demás piezas que se eje-
" J O S E P H VIGUERAS, Parte de por medio, con el mismo sueldo y
cuten, y acudir á casa del Autor siempre que se lo prevenga, á repasar
obligaciones que el antecedente. *
las comedias y corregirlas de los defectos teatrales que tengan, cum-
48
49
pliendo las demás órdenes que se le den respectivas á su ejercicio de poner las luces del zaguán y del común que está j u n t o á las cazuelas,
apuntador; y si quedaren en su poder algunas piezas las lia de devolver, en los días de comedia, tomándolas de la Guardarropa, y encendién-
pagando las que faltaren. dolas luego que vaya á anochecer.
" M I G U E I . A L A N I S , Otro Apuntador con el mismo sueldo, pactos
" J O S É G O N Z Á L E Z , es de su obligación alumbrar los tránsitos de
y obligaciones que el antecedente. los palcos; poner la iluminación general en los días que la hay; en-
J O S E P H G U A N O , Tramoyista. Gana cuatrocientos cincuenta pesos,
cender las luces de los cuartos del Excelentísimo Sr. Virrey; barrer
y es de su obligación disponer las tramoyas y decoraciones teatrales diariamente, aunque no haya comedia, los corredores de los tres pi-
que requieran las comedias y demás funciones que se ejecuten, tra- sos y todos sus palcos, sacando la basura á la calle. Proveer de todas
bajando por sí en lo que es carpintería, dándosele para ello los oficia- las sillas á aquellos; abre y cierra las puertas de la entrada de Su Exce-
les y materiales que sean necesarios. ' lencia; acomódalas gentes en los palcos que le necesiten; limpia los
" J O S É D E F U E N T E S , Cobrador y Alquilador de cuartos, por cuyo
faroles de los tránsitos cada ocho días, y avisa cuando estén rotos y
encargo y demás que se le mande en servicio de la Casa, por la Di- los cuartos que necesiten composición, lo mismo que los tránsitos: Ga-
rección del Teatro, gana doscientos noventa y cuatro pesos, con más na ochenta y tres pesos.
veinticuatro para ayuda á pagar la casa en que vive, inmediata al
"JOSÉ N A J E R A , Acomodador de las Bancas y Mosquete. Abre y
Coliseo.
cierra sus puertas para la salida y entrada de las gentes, con prohi-
" J O S É Z U Ñ I G A , tiene obligación de iluminar el Teatro dentro del
bición absoluta, so pena de quince días de cárcel, de no pedir á per-
Tablado, arañas y candilejas; apagando todo después, y recoger los sona alguna gratificación por preferencia de asiento, que no debe te-
cabos y desperdicios del sebo que resulten, entregándolos al Guarda- ner sino el que llegue primero. Es también de su cargo encender las
rropa: pone y quita los carteles de la comedia; avisa entre día á los luces del callejón de la Luneta, del que sigue hasta el zaguán, y la
cómicos cualquiera novedad que ocurra, ayudándole al mozo de Guar- que se pone al cobrador de las Bancas, y por todo gana dos reales
darropa; limpia y asea diariamente, aunque no haya comedia, cuan- semanarios.
tos cuartos y sitios hay de la punta del Tablado adentro, y hace to-
"Bailarines.—Hombres.— G E R O N I M O M A R A N I , es de su obliga-
do lo demás que le prevenga el Autor, relativo al Teatro. Gana cin-
ción dirigir y poner todos los bailes que se ejecuten en el Teatro, po-
cuenta pesos y se le da lugar en la faena de tirar de los bastidores
niendo ocho nuevos grandes, en la temporada, y los demás que sean
para que tenga esta ayuda de costa.
necesarios pequeños, conocidos por el nombre de Bailetes. Tercetos,
" M A T E O Z E B A L L O S , MOZO de la Guardarropa. E - DE su obliga- Quintetos, Misceláneas, ú otros, con los cuales y la repetición que ha-
ción ayudar al Alumbrador en avisar á los Cómicos las novedades ya de los que estén ejecutados, se completen los necesarios para los
que ocurran; hacer todo lo que para el servicio del Teatro le preven- Domingos y Jueves de cada Semana, en que regularmente h a d e ha-
gan el Autor y el Guardarropa; cuidar de tener abierta y aseada la ber Bailes, suprimiéndose los de los Jueves siempre que haya día
Escoleta, custodiando sus muebles y evitando todo escándalo. Gana de fiesta de intermedio; pero siempre los debe haber en todos los de
cincuenta pesos 5- casa en que vivir. esta clase. E s también de su obligación disponer las decoraciones
" F R A N C I S C O C E N T E N O , es de su obligación barrer diariamente, para todos los bailes y dar la música de ellos, cuyas copias se han de
aun cuando no haya comedia, todo el callejón desde la puerta del ves- costear por el Asentista. Gana cuatro mil pesos para sí, su mujer y
tuario hasta la calle; el Mosquete, Patio, Lunetas, y todos los luga- los dos hijos, estando todos cuatro obligados á bailar siempre que se
res comunes exteriores é interiores, limpiando los vasos inmundos. les mande.
Gana seis pesos mensuales y se le da lugar en la corrida de bastidores.
"JOSE MORALI, Segundo bailarín. Gana un mil pesos.
"JOSÉ MARÍA GARCÍA y V I C E N T E E N R I Q U E Z , Acomodadores, el " J O S É I B A R R A , Bailarín en el lugar que se le señale. Gana cuatro-
primero de la Cazuela de Mujeres y el segundo de la de Hombres. Tie- cientos cincuenta pesos.
nen obligación de limpiar diariamente, aun cuando no haya comedia, ' ' J U A N M A R A N I , hijo de Gerónimo; está comprendido con su padre.
las dos cazuelas y sus escaleras, sin echar la basura debajo de ellas; " J O S É P I N T O , Bailarín en el lugar que se le señale. Gana tres-
acomodar á las gentes en sus asientos, con prohibición absoluta, so cientos setenta y cinco pesos.
pena de quince días de cárcel, de exigir dinero alguno por preferir " J o s E M A R Í A M O R A L E S , (alias El Bicho') Bailarín en laclase que
á nadie en los asientos, que sólo deben obtener los que lleguen pri- se le señale. Gana seis pesos por cada baile de aquellos en que en-
mero. Gana cada uno un peso semanario, siendo de su cargo además trare, y además cincuenta al año por los de la tierra.
E. H. T.—T. I.—7
" J U A N J O S É Z E N D E J A S , Bailarín en la clase de figurante; gana
. J ° S E M A N U E L A L D A N A , segundo violín, con las mismas obliga-
dos pesos en cada baile de los que entrare. ciones que el antecedente, más la de suplir al primero; gana quinien-
" J O A Q U Í N R I V E R A , Bailarín como el anterior. tos cuarenta y cuatro pesos.
" J U A N M O R E N O , Bailarín en la clase de figurante; está compren- " J U A N M A R Í A C A M P U Z A N O , refuerzo del primer violín con las
dido cuando se trató de los cómicos, cuyo papel ejerce también. mismas obligaciones que los dos antecedentes, más la de asistir á los
Mujeres.—TERESA MARANI, está comprendida con su marido. ensayos diarios de Baile y suplir al primer violín en caso de necesi-
" J U A N A M A R A N I , está comprendida con su padre. dad ; gana quinientos noventa y cuatro pesos.
" M A R Í A P I N T O , bailarina en la clase que se le señale. Gana cua- " F R A N C I S C O M A R Í A C A M P U Z A N O , refuerzo del segundo violín con
trocientos cincuenta pesos. la obligación de asistir á los ensayos diarios de los bailarines y de su-
" R O S A A R C I L L E S , como la antecedente. Gana cuatrocientos vein- plir al primer violín en caso de necesidad; gana trescientos treinta y
ticinco pesos: dos pesos.
" G E R T R U D I S ARAONA, como la antecedente. Gana trescientos se- " I G N A C I O C A B R E R A , con el encargo de Maestro de Cantar, y de
tenta y cinco pesos. enseñar cada cuatro semanas dos piezas, comprendidas en éstas las
" M A R Í A ARCILLES, como la antecedente y el mismo sueldo. de Teatro, por su turno; repasar la música á los cantores que la tie-
" M A R Í A ANTONIA CORONCIER. Gana cuatrocientos cincuenta pesos. nen ya sabida; apuntar en el Cajón del Teatro (la concha), las letras
" M A R Í A Z E N D E J A S . Gana trescientos setenta y cinco pesos. á los cantores y cantoras, y en las Músicas corrientes de las mismas
M A R Í A J O S E F A P A C H E C O . Gana tres pesos en cada baile de aque- comedias; instruir á los que deben cantarlas para que no se separen
llos en que entrare. de la Orquesta; gana quinientos diez y ocho pesos.
Todos los expresados bailarines están obligados á bailar en cuantas " J O S E A L V A , Tercer violín, con la obligación de asistir á los Bai-
ocasiones se les mande, ya sean Bailes completos en que entren todos, les para ensayarlos en defecto de los destinados, empleándosele, ade-
ó en los que no se compongan más que de cierto número, porque de más, en cuanto accidentalmente ocurra ; gana doscientos noventa 'pesos.
cualquiera suerte que se hagan, sean pocos ó muchos, nuevos ó repe- " N I C O L Á S M O R A , cuarto violín, con el encargo de primera viola
tidos, ó piezas sueltas, han de salir á bailar todos ó cualquiera que sea y suplir de trompa y clarín; gana doscientos noventa pesos.
señalado para ello, dándoseles solamente los vestuarios que haya sido M A R I A N O F L O R E S , cuarto violín, con el encargo de segunda viola
práctica, y poniendo ellos el medio vestuario. y suplir de oboe y flauta ; gana doscie?itos setenta y nueve pesos.
" P E D R O L E R O Y (en otros documentos se le apellida Lerrua y La- " M I G U E L G A L V E Z , violón, con la obligación de enseñar á cantar
rrué). Peluquero del Teatro. Está ajustado á razón de seis pesos men- cada cuatro semanas dos piezas, reparar la música ya usada en el Co-
suales por cada Mujer y tres pesos por cada Hombre de los que peina- liseo, y en caso preciso suplir en el contrabajo; gana quinientos vein-
re ; siendo de cuenta de la Empresa solamente el exceso que haya en tiocho pesos.
lo anteriormente pagado, que era ochenta y seis pesos y seis reales y lo " J O S E I R A L A , contrabajo, con la obligación de coordinar los pa-
ahora convenido que es ciento treinta,y ocho.— (Este ajuste va por vía peles que cada noche han de servir; gana trescientos un pesos.
de experiencia respecto á dudar Monsieur Leroy que pueda tenerle cuen- " J O S É M A R I A N O O R T E G A , agregado á la Orquesta para tocar el
ta, y así sólo se obliga á cumplirlo por tiempo de tres meses, poniendo violín cuando se le mande, con la obligación de visitar á los músicos
de su cuenta sebo y polvos, y con la calidad de que si les vendiese de para reunirlos; gana cien pesos.
su Tienda algunos adornos para la cabeza de las mujeres ó algu- '1 Nota. Se convienen por los salarios arriba asignados á las obliga-
nos otros efectos á los hombres, lo deberá hacer á dinero en mano ciones del Coliseo, esto es, á las cinco comedias de cada semana y á
porque si fuere fiado debe estar en la inteligencia de que no podrá cuantos bailes se ejecuten.—Eos acinco Maestros Manuel Del-ado
repetir su valor del semanario que cada individuo tiene señalado, por José Manuel Aldana, Juan María Campuzano, Ignacio Cabrera v Mi-
necesitarlo precisamente para comer). guel Gálvez, piden sejes asigne hora para la Escoleta y ensayos, que
"Músicos.-Instrumentos de cuerda.— M A N U E L D E L G A D O , primer sean de las que no interrumpan su asistencia á las funciones que tie-
violm; con la obligación de enseñar cada cuatro semanas dos pie- nen accidentales de Iglesia y en la calle, y en la instrucción de todos
zas, comprendidas en éstas las de Teatro, por su turno. Gana quinien- los cantores y cantoras se obligan al mayor desempeño.
tos noventa y siete pesos y cien más á sus hijos José y Francisco Delga- " P a r a que ninguno de los Músicos falte á las obligaciones en que
do, para que le ayuden. se han constituido, se imponen unánimes las penas siguientes: El
que faltare á la Escoleta, ensayos y Orquesta, por la primera vez, un cioso de Puebla, cuyo sueldo se arreglará después con presencia de
peso; por la segunda dos; por la tercera tres, y por la cuarta el sala- su habilidad y de lo que se adapte al público).
rio de una semana. De esto se hará un fondo para pagar músicos que " B E R N A R D O D A Z A , Portero del Vestuario, para que durante la re-
suplan sus faltas, y lo sobrante se repartirá entre los que nunca las presentación abra y cierre la puerta, cuidando de que sólo entren los
hagan, quedando á la voluntad de la Dirección del Teatro separar de Actores y demás necesarios á la representación: gana ci?icuenta pe-
la Orquesta á los incorregibles. sos, en toda la temporada.
" S i alguno cayere enfermo se le considerará y abonará el salario " A N T O N I O A T A M O R O S , Segundo Barba, supliendo también las au-
de diez días, todo completo; y si pasase de dicho término sólo cobrará sencias y enfermedades del primero, y haciendo cualquiera otro pa-
la mitad, quedando la otra á favor del fondo para pagar al que lo pel que se le reparta en las Pitipiezas y comedias en prosa, á mane-
reemplace. ra de la del Hipocóndrico y otras de su clase; usando la ropa del Tea-
"Considerando lo que el Exmo. Sr. Virrey se ha interesado en los tro que da la casa, ó trayéndola de la suya, pero sin gaje alguno:
aumentos de estos individuos, cuyo beneficio resulta en los patricios volverá dos semanas antes de concluirse la temporada todos los pa-
de este Reino, así en que se hagan hábiles en su arte, como en pro- peles que tenga, pagando los que falten. Sueldo, cuatrocientos cin-
porcionarles caudal de papeles de Música, suplican rendidamente á cuenta pesos, con comedia supernumeraria á este respecto.
Su Excelencia que en prueba de-su agradecimiento les admita el obse- " J O S É A L V A R E Z G A T O , Parte de por medio con trescientos pesos
quio de que, cuando lo hubiere por conveniente, vayan á Palacio á y comedia supernumeraria; ha de cantar y hacer cualquiera papel
ensayar los papeles de Música para su mayor acierto. que se le mande, pagándosele aparte dos pesos en cualquiera ocasión
"Ultimamente se convienen todos á estar subordinados á la Di- que lo ejecute.
rección del Teatro, y en lo que pertenece á la instrucción de su mi- " F E L I P A M E R C A D O (aliasLa Gata), mujer del antecedente: ha de
nisterio, al primer violín Manuel Delgado y á Juan María Campu- cantar diariamente una ó más veces, según se le mande; 110 ha de
zano, á aquél en cuanto á conciertos, oberturas, acompañamiento de representar versos, y se le ha de escoger la música según su carácter.
arias, etc., y á éste por lo que toca á Bailes, tonadillas, seguidi- Gana un mil cien pesos, y comedia supernumeraria á este respecto.
llas, etc., siguiendo las mismas reglas en la Escoleta, Ensayos y Or- " N I C O L Á S B E L M O N T E , Entonador de voces y Director de acciona-
questa. do en las partes de cantado, gana seiscientos pesos.
Instrumentos de viento.—Euis B U S A R D , primer clarinete, y en caso " M I G U E L M E N E S E S , Apuntador tercero, gana trescientos sesenta y
preciso, servir de segunda flauta ó segundo octavino; gana doscien- seis pesos, con supernumeraria á este respecto de sueldo.
tos pesos. " E s t a razón de Cómicos, Bailarines y Orquesta, está formada en 21
" L u i s A N S E L I N C H , segundo clarinete, con el encargo de suplir de Abril de 1786, por D. Francisco de Paula Sarmiento Fuentes,
en la flauta en caso preciso; gana ciento ochenta pesos. Administrador General interino de la Sociedad de Señores Suscrito-
" F R A N C I S C O C H E D O M E S , primera trompa; gana cie?ito ochenta pesos. res que por su cuenta había tomado el Teatro Cómico de la Capital
" L U I S S E G Í J E N , segunda trompa, con el encargo de suplir al pri- por quiebra del Asentista D. Manuel Lozano, todo ello durante el Go-
mer clarinete en caso necesario ; gana ciento ochenta pesos. bierno del Exmo. Sr. Virrey D. Bernardo de Gálvez, Conde de Gálvez.''
" P A B L O B U S E N C H , primera flauta, con el encargo de suplir de ba-
jón ó primer octavino en caso preciso; gana doscientos pesos.
" L u i s D E G R E S Ó , segunda flauta, con el encargo de suplir de se-
gunda trompa, bajo, octavino ó tocar el clarín en caso necesario; gana CAPÍTULO VI
ciento ochenta pesos.
"Aumentos para el mejor servicio del Teatro. F R A N C I S C O R U B I O , * 1786
gracioso de la Compañía de Cómicos, que gana setecie?itos pesos, con
más lo que á este respecto le corresponda en las comedias supernu- Dicho ya cómo estaban organizadas las Compañías del Coliseo de
merarias que hiciere. ( No se le descontará por ahora lo que se suplió la Capital en la época del Virrey Conde de Gálvez, que tanto hizo
á su familia durante el tiempo de su enfermedad en el Hospital del Es- en favor del mayor lucimiento de sus espectáculos, demos ahora una
píritu Santo, y sin que tampoco sirva de óbice el que se halle enfermo noticia de las disposiciones entonces vigentes, relativas á ellos.
de gravedad y que por lo mismo se haya traído en su lugar al Gra- E n una Real Cédula de 12 de Mayo de 1703, se mandó que la Ad-
que faltare á la Escoleta, ensayos y Orquesta, por la primera vez, un cioso de Puebla, cuyo sueldo se arreglará después con presencia de
peso; por la segunda dos; por la tercera tres, y por la cuarta el sala- su habilidad y de lo que se adapte al público).
rio de una semana. De esto se hará un fondo para pagar músicos que " B E R N A R D O D A Z A , Portero del Vestuario, para que durante la re-
suplan sus faltas, y lo sobrante se repartirá entre los que nunca las presentación abra y cierre la puerta, cuidando de que sólo entren los
hagan, quedando á la voluntad de la Dirección del Teatro separar de Actores y demás necesarios á la representación: gana ci?icuenta pe-
la Orquesta á los incorregibles. sos, en toda la temporada.
" S i alguno cayere enfermo se le considerará y abonará el salario " A N T O N I O A T A M O R O S , Segundo Barba, supliendo también las au-
de diez días, todo completo; y si pasase de dicho término sólo cobrará sencias y enfermedades del primero, y haciendo cualquiera otro pa-
la mitad, quedando la otra á favor del fondo para pagar al que lo pel que se le reparta en las Pitipiezas y comedias en prosa, á mane-
reemplace. ra de la del Hipocóndrico y otras de su clase; usando la ropa del Tea-
"Considerando lo que el Exmo. Sr. Virrey se ha interesado en los tro que da la casa, ó trayéndola de la suya, pero sin gaje alguno:
aumentos de estos individuos, cuyo beneficio resulta en los patricios volverá dos semanas antes de concluirse la temporada todos los pa-
de este Reino, así en que se hagan hábiles en su arte, como en pro- peles que tenga, pagando los que falten. Sueldo, cuatrocientos cin-
porcionarles caudal de papeles de Música, suplican rendidamente á cuenta pesos, con comedia supernumeraria á este respecto.
Su Excelencia que en prueba de-su agradecimiento les admita el obse- " J O S É A L V A R E Z G A T O , Parte de por medio con trescientos pesos
quio de que, cuando lo hubiere por conveniente, vayan á Palacio á y comedia supernumeraria; ha de cantar y hacer cualquiera papel
ensayar los papeles de Música para su mayor acierto. que se le mande, pagándosele aparte dos pesos en cualquiera ocasión
"Ultimamente se convienen todos á estar subordinados á la Di- que lo ejecute.
rección del Teatro, y en lo que pertenece á la instrucción de su mi- " F E L I P A M E R C A D O (aliasLa Gata), mujer del antecedente: ha de
nisterio, al primer violín Manuel Delgado y á Juan María Campu- cantar diariamente una ó más veces, según se le mande; 110 ha de
zano, á aquél en cuanto á conciertos, oberturas, acompañamiento de representar versos, y se le ha de escoger la música según su carácter.
arias, etc., y á éste por lo que toca á Bailes, tonadillas, seguidi- Gana un mil cien pesos, y comedia supernumeraria á este respecto.
llas, etc., siguiendo las mismas reglas en la Escoleta, Ensayos y Or- " N I C O L Á S B E L M O N T E , Entonador de voces y Director de acciona-
questa. do en las partes de cantado, gana seiscientos pesos.
Instrumentos de viento.—Euis B U S A R D , primer clarinete, y en caso " M I G U E L M E N E S E S , Apuntador tercero, gana trescientos sesenta y
preciso, servir de segunda flauta ó segundo octavino; gana doscien- seis pesos, con supernumeraria á este respecto de sueldo.
tos pesos. " E s t a razón de Cómicos, Bailarines y Orquesta, está formada en 21
" L u i s A N S E L I N C H , segundo clarinete, con el encargo de suplir de Abril de 1786, por D. Francisco de Paula Sarmiento Fuentes,
en la flauta en caso preciso; gana ciento ochenta pesos. Administrador General interino de la Sociedad de Señores Suscrito-
" F R A N C I S C O C H E D O M E S , primera trompa; gana cie?ito ochenta pesos. res que por su cuenta había tomado el Teatro Cómico de la Capital
" L u i s S E G Í J E N , segunda trompa, con el encargo de suplir al pri- por quiebra del Asentista D. Manuel Lozano, todo ello durante el Go-
mer clarinete en caso necesario ; gana ciento ochenta pesos. bierno del Exmo. Sr. Virrey D. Bernardo de Gálvez, Conde de Gálvez.''
" P A B L O B U S E N C H , primera flauta, con el encargo de suplir de ba-
jón ó primer octavino en caso preciso; gana doscientos pesos.
" L u i s D E G R E S Ó , segunda flauta, con el encargo de suplir de se-
gunda trompa, bajo, octavino ó tocar el clarín en caso necesario; gana CAPÍTULO VI
ciento ochenta pesos.
"Aumentos para el mejor servicio del Teatro. F R A N C I S C O R U B I O , * 1786
gracioso de la Compañía de Cómicos, que gana setecie?itos pesos, con
más lo que á este respecto le corresponda en las comedias supernu- Dicho ya cómo estaban organizadas las Compañías del Coliseo de
merarias que hiciere. ( No se le descontará por ahora lo que se suplió la Capital en la época del Virrey Conde de Gálvez, que tanto hizo
á su familia durante el tiempo de su enfermedad en el Hospital del Es- en favor del mayor lucimiento de sus espectáculos, demos ahora una
píritu Santo, y sin que tampoco sirva de óbice el que se halle enfermo noticia de las disposiciones entonces vigentes, relativas á ellos.
de gravedad y que por lo mismo se haya traído en su lugar al Gra- E n una Real Cédula de 12 de Mayo de 1703, se mandó que la Ad-
ministración del Teatro de las Comedias corriese al cuidado del Ma-
yordomo del Hospital Real de Naturales, orden que fué confirmada sólo en los intermedios de la representación, y sin pasar de los extre-
en el capítulo cuarto de la Real Cédula de 31 de Diciembre de 1741, mos de las bancas.
llamada de Providencia por las muchas que contiene, disponiéndose " S i n que se suprima el festivo desahogo y comedida libertad con que
al efecto que el dicho Mayordomo entendiese en la formación de la el público suele manifestar su complacencia por el acierto con que se
compañía de representantes, pues que era Soberana voluntad que el ejecuta alguna pieza, deberá estar entendido que no se le permitirá
tal sujeto tuviese la libre disposición del referido Teatro y pudiese estrépito ni alboroto alguno con que se hagan molestos, tolerándose
nombrar autor de su satisfacción. En 1759 otra Real Cédula mandó solamente el que palmeteen á los Actores ó Actoras, luego que ha-
corriese el Teatro por arrendamiento, sin embargo de estar dispuesto yan concluido su relación ú otro pasaje que merezca la satisfacción y
lo contrario, en atención á los perjuicios que se acreditaron de estarse aplauso del todo ó parte del espectáculo, al que con sólo el silencio,
administrando por el Hospital Real de Naturales. En consecuencia, y no de otro modo, le será lícito manifestar lo contrario, pues 110 es
el Virrey quedó facultado para presidir los actos de remate del Tea- correspondiente á la decencia del público el abochornar á quien hace
tro, el modo de formar la Compañía, ajustar actores y reemplazar los lo que puede y sabe, con deseo de agradar y con esperanza de discul-
que faltaren. Dicho remate se hacía con la mayor solemnidad, y para p a ; y al que se atreva á turbar el espectáculo con voces descompues-
él se fijaban rotulones en la puerta de la pieza destinada en el Pala- tas ó mofando á alguno de los dichos Actores, se le pondrá en la cárcel
cio á las Reales Almonedas, en los corredores del Palacio, en la es- por ocho días 110 siendo persona distinguida, y si lo fuere será condu-
quina del puente de éste, en las dos del Portal de Mercaderes y en cida á presencia del Gobierno para prevenirse lo que corresponda. -
la puerta del Coliseo. Con sus correspondientes intervalos hacíanse
" A l público que ocupe los sitios inmediatos al Tablado, se le orde-
treinta pregones por el pregonero de la Ciudad, y el remate había de
na excusar las invectivas con que se ha solido insultar á los actores.
ser presenciado por el Fiscal de lo Civil, por el Mayordomo del Hos-
'' Se permiten las demostraciones que con el nombre de galas acos-
pital y por el anterior arrendatario.
tumbra el público á hacer á los Actores, con el objeto de que este
Ea Real Cédula en que S. M. se sirvió aprobar el Reglamento ú aliciente les estimule al más exacto cumplimiento de sus obligacio-
Ordenanzas de Teatro, formado ó dispuestas en 11 de Abril de 1786 nes, pero deberán hacerse moderadas y prudentes, sin profusión y sin
por el Conde de Gálvez, contiene, entre otras, que en obsequio de la prodigalidad, pues de experimentarse lo contrario se prohibirán en-
brevedad debo suprimir, las siguientes disposiciones: teramente.
" M A N D A E L R E Y , que eomponer las diferencias de los cómicos, " Comenzada la representación nadie tendrá puesto el sombrero, y
conocer de sus causas por razón de su oficio, señalar la hora, cuidar nadie tampoco permanecerá embozado.
de que las diversiones sean honestas, con lo demás anexo y depen- " A l a cazuela de mujeres no se permitirá subir á ningún hombre,
diente, corresponde al Superior Gobierno de su Virrey. Concurrirán ni á la de hombres pasarán mujeres.
por turno semanario, á ejemplo de Madrid, los Alcaldes del Crimen, '' Habrá un escribano, con sueldo de doscientos pesos, para que ac-
á efecto de hacer observar con prontitud el buen orden, quietud y so- túe en todos los negocios civiles y criminales, y para asistir diaria-
siego públicos, fungiendo de Juez de Teatro el Corregidor y Alcaldes mente al Teatro; para notificar por escrito ó de palabra cualesquiera
ordinarios. mandatos del Juez ó Jueces, ya se dirijan contra los concurrentes ya
" Para salir al encuentro á los inconvenientes que se siguen d e q u e contra los cómicos.
la función termine á deshoras de la noche, se comience por punto ge- " Para el buen orden del Teatro se pondrán las quince centinelas
neral en.esta Capital un cuarto de hora despues de la Oración. siguientes: Una en el Puente para que no se permita pararse coche
" A l extremo del Tablado y por su frente en toda la latitud, se alguno, sino que anden á una parte ú otra, dejando el paso franco:
ponga una tabla de altura de una tercia, á fin de embarazar por este Una á las puertas del Teatro para que luego que se desocupen los
medio que se registren los pies de las actoras al tiempo que están re- coches sigan á su destino, y cuidar de que en las inmediaciones de
presentando. su puesto no pare ningún coche, y avisar si pasa Su Majestad y cual-
quiera otra novedad que ocurra : Dos en las dos puertas que venden
" Q u e diariamente se aseen el Patio, Mosquete, Palcos, Corredo-
billetes para las cazuelas : Una en los vendedores de billetes de Bancas
res, entradas, y demás partes del Teatro, para evitar la indecencia
que en otras veces se advertía. y Mosquete : Una en el descanso de la escalera principal, en el puesto
de la venta de billetes para primero, segundo y tercer piso: Una en
" Q u e los mozos que venden agua y dulces lo hagan sin gritar, y
el recibidor de billetes de primero y segundo piso: Una para el de
boroto y desorden, y no permitiendo gente alguna detenida ni al en*
tercer piso: Una en cada Cazuela para la quietud: Dos en el Mosquete trar ni al salir, más tiempo del preciso para transferirse á la calle."
para la quietud: Una en la puerta del Vestuario: Dos á los lados de
Bien necesitaba aquel público, sin duda un tanto incivil, de esas
los bastidores: Una en la escalera por donde sube S. E . : Una en la
detalladas providencias. Gobernando por muerte del Conde de Gálvez
esquina de la calle de San Francisco.
la Real Audiencia, hubo de fijarse en las puertas del Teatro el si-
" E o s señores Oficiales, Sargentos, Cabos y Soldados de la Guardia guiente cartel: " Habiendo acreditado la experiencia en los años an-
que asiste al Teatro de la Capital y se reparte como queda dicho, teriores el desorden con que algunos concurrentes al Teatro han pro-
cumplirán las siguientes órdenes que aclaran lo anterior: Ea Centi- cedido en los días de Carnaval, tirando con inconsideración á los
nela que se pone y debe continuar en el Puente que llaman del Colegio, Palcos y al Tablado, grande porción de anises gruesos, almendras
tiene por objeto y debe cuidar de que no pare coche alguno en el cubiertas y otras piezas de igual tamaño; usando varios de la impru-
mismo Puente si no son los de Palacio, que éstos deben quedar al pie dencia de tirar también cebada, alverjones y otras semillas, y aun á
del citado Puente, de cara á la calle Principal del Teatro y puestos veces piedras pequeñas, con cuyos hechos no sólo incomodan á los
de suerte que no incomoden el paso á los que vayan y vengan. H a demás concurrentes que los sufren, sino que les manchan la ropa,
de cuidar también que en la calle que está al costado y llaman de la lastiman y se turba el espectáculo por el desconcierto en que ponen
Acequia, no haya coche alguno en toda ella, sea de quien fuere y sin á los Actores y Actoras; se manda por la Real Audiencia Goberna-
excepción alguna. — A la hora de salir de la comedia vendrán los co- dora que ninguna persona use de los referidos medios en los expre-
ches desde el rumbo del citado Puente del Colegio y no de otro alguno sados días de Carnaval, permitiéndose que puedan divertirse tirando
del Coliseo, pero en habiéndolos tomado sus dueños podrán dirigirse anises menudos de los que suelen llamar grajea ó mostacilla, y esto
por el lado que quieran, y á efecto de hacer observar el buen orden con moderación, bajo el concepto de que se han dado las órdenes con-
y evitar confusiones, permanecerá la Centinela en el mismo Puente, venientes á la Tropa y á los Ministros de Justicia, para que sin ex-
hasta el retiro de todos los coches.—Esta Centinela no permitirá en cepción de persona alguna aseguren en el acto á cualquiera contra-
las inmediaciones de su puesto gente alguna detenida, sea quien fuere. ventor y se le ponga en arresto, contra quien se procederá conforme
- — No se golpeará en ningún caso á las muías de los coches, ni á los haya lugar y las circunstancias del caso lo exijan : y para que llegue á
cocheros; y si éstos no quisieren obedecer lo que se les mande, se noticia de todos, se hace saber al público por medio de este Cartel."
asegurarán en la cárcel, dando cuenta á los Directores del Teatro para
su correspondiente castigo. — La Centinela que se pone y ha de con- En otro género de disposiciones son muy curiosas las que paso á
tinuar en las puertas del Teatro, ha de cuidar de que luego que los extractar referentes á los ensayos de cantarínas y músicas. " A los
coches que conducen á sus dueños se apeen de en él, dejen desocupada maestros de Escoleta no se les dará menos del término de quince días
la calle, marchándose al destino que les corresponda, pudiendo hacerlo para poner á las cantarínas los cuatros (cuartetos), por ser difícil y
por cualesquiera de los rumbos, sin que para este fin impida dicha prolijo encajar cuatro voces á la memoria de quienes no tienen talento
Centinela que los expresados coches tomen vuelta en la calle principal para discernir lo que en esto hacen; y aun para las arias y piezas sueltas
del Coliseo, cuidando, sí, que esté desocupada. — La Centinela que hágase lo mismo, por cuidar de que las cantarínas no se enronquezcan
está á las puertas del Teatro no permitirá una considerable detención como ha sucedido y hay de ello experiencia.
á los coches que vayan llegando para recibir á sus dueños, pero sí ' 1 E s conveniente que los ensayos que habían de ser en Domingo
una prudente espera para que los criados tengan lugar de avisar á y otros días de fiesta, sean en la víspera, porque en ningún tiempo
sus amos: cuidará de que en viendo ya la hora de la conclusión del se ha dado el caso de que en ellos se cumpla con dicho ensayo como
Saínete 110 cruce coche alguno que venga del rumbo de la calle de se debe, porque, con el pretexto de oir misa, ó no vienen ó vienen
San Francisco al Puente del Colegio, pero antes.de esa hora no se con precisiones, y por fin el ensayo se queda en conversación.
impedirá el que transite cualquiera que le acomode, bien venga con "Habiéndose presenciado el sumo trabajo y demasiadas mohinas
gente ó vacío, ni tampoco se impedirá que los vecinos de la calle que que le cuesta al maestro Cabrera convenirse con las cantoras en se-
tienen coches los saquen siempre que quieran, pero de modo que 110 ñalar las piezas que se han de ejecutar la noche de la representación,
impidan el paso. Tampoco esta Centinela golpeará á las muías de los porque todas por lo general ó no quieren cantar, ó cantan seguidillas
coches, ni á los cocheros.—Dentro del Portal del Teatro debe sub- que es lo más corto y de menos trabajo para ellas, se les establecerá
sistir otra Centinela con el objeto de auxiliar á los vendedores de una regla fija, como el medio para abolir los muchos chiqueos con
billetes de las dos Cazuelas, siempre que lo pidan, evitando todo al- que todas se portan en esta materia. "
R. H. T.—T. I.—8
Pero si los abusos ó los desórdenes en todos los ramos eran muchos, torcidas ó mechas cada uno, en tres pesos un real cada noche, y el de
nunca se consintieron de buen grado por aquellas celosas autorida- seis reales por docena de morteretes para los bailes." Informó
des, y ciertamente sería interminable la simple lista de las mil dispo- Cano : '' H e observado que aun estando en el precio de tres pesos un
siciones que para remediarlo se dictaban. Sobre cualquier cosa se for- real, las candilejas dejan utilidad, aunque muy corta, siempre que no
maba un voluminoso expediente, y por curioso voy á poner aquí el suba el precio de la manteca. En lo que toca á los morteretes paga-
relativo al alumbrado del Vestuario ó Foro del Coliseo. dos á seis reales, es donde se ha conocido lo que deja más ganancia;
Empieza él con una nota que textualmente dice: '' Explicación de pero como este renglón no es cuotidiano se hace tolerable. Y aunque
la manteca que se gasta en la iluminación del Teatro.—Eos cajonci- consta de mi contrata que yo soy quien debe tener el beneficio de dar
llos que tienen una tercia de largo, seis dedos de ancho y cuatro de la iluminación, he considerado que el pobre que la tiene ha fundado
alto, les cabe dos libras y cuarto de manteca, que á dos reales libra, su remedio en este oficio, y por lo tanto no quiero hacerle daño en
y medio de mecha, son cinco reales. El rezago que de esta cantidad que se me dé; y espero de la piedad de Vuestra Merced le haga la ca-
queda, que es corto, se reemplaza con manteca buena, y la que que- ridad de dejárselas á dicho Mariano Rosuela, que á mí, Dios me so-
da para el otro día baja de ley, y al tercero ya no sirve. En las come- correrá, según mi modo de pensar en este asunto, y el pobre recibe
dias que tienen bailes, se carga la manteca, que llega á dos libras y en esto el mayor beneficio." De una nota de gastos que tengo á la
media, y por consiguiente se aumentan mechas y se ponen con man- vista parece ser que este gasto de manteca para candilejas y cazole-
teca nueva. Los rezagos de unos y otros sobrantes quedan al otro día tas importaba anualmente seiscientos cuarenta y ocho pesos; el alum-
inservibles.—En los bailes se aumentan las docenas de cazuelas que brado general del Coliseo, mil pesos ; el particular del palco y esca-
pide el maestro de ellos, y éstas se pagan á tres reales docena y le co- lera del Virrey, ciento treinta y siete pesos cuatro reales; y las ha-
rresponden á un real en cada dos cazuelas, viniendo á importar la do- chas de viento para la Guardia, veinte pesos: por un artículo del re-
cena seis reales; agréguensele las mechas, la tira de hoja de lata y glamento de policía del Teatro, éstas hachas no debían encenderse
las cazuelas que se pierden y derraman, el valor de las que se com- de puertas adentro de la Casa de Comedias, para evitar el riesgo de
pran al locero á medio real. un incendio.
'' E l peso de manteca que tiene cada morterete ó cazoleta de luz Y pues he vuelto á referirme á reglamentos, añadiré á lo ya dicho
que sirven para los bailes, es de tres onzas. Las candilejas que se usa- anteriormente, que á fines de 1786 publicóse otro Cartel en que se hi-
ban antes en lugar de las que ahora (1786), se han puesto de hoja de cieron las siguientes prevenciones : " Q u e en las Bancas, Palcos, Ca-
lata, eran también cazoletas, con la diferencia que las de los bailes zuelas y Mosquete que se alquilan por asientos no haya preferencia,
como que sólo servían para ellos llevaban tres onzas, y las de come- sino que se tomen por los primeros que lleguen, sin que sirva de pre-
dias cuatro y media onzas." texto que el Acomodador diga estar ya tomados; pero las Bancas de
Vista esta razón por el Sr. Contador D. Silvestre Díaz de la Vega la Luneta, como uno de los sitios más distinguidos y señalados, de-
tuvo á bien resolver: "Dígase á Mariano Rosuela encargado de la ben estar ocupadas por las personas que concurran con traje más
iluminación del Coliseo que seguirá en este encargo si se acomoda á decente, por decoro de las mismas personas y por el debido al público.
que se le pague por los cajoncillos de hoja lata, tres pesos 1111 real en '' Que los concurrentes no podrán pedir con imprudencia la repeti-
lugar de seis pesos siete reales que se han estado satisfaciendo hasta ción de Bailes, Tonadillas ú otras piezas, ó que salga algún Actor á
ahora." A esto respondió Mariano Rosuela : " L a precisa obligación ejecutar alguna de estas habilidades, pero bien se permitirá el que las
en que me he constituido de pagar la manteca que tengo en mi casa, pidan con tal que lo hagan con la moderación debida, y estando en-
fiada de una tocinería bajo de un fiador, me hace admitir dar la ilu- tendidos de que si por algún justo motivo no se les concediere, no
minación de los once cajoncillos de hoja de lata al precio de tres pe- se ha de instar á ello.
sos y un real, y por cada cazoleta de los bailes, medio real, resultan- ' ' Que siendo tan general el uso del tabaco en humo en esta Capital,
do cada docena á seis reales: Siendo esta admisión en la inteligencia no es fácil impedirlo en el Coliseo, pero que sí debe prohibirse el que
de que no suba el precio de la manteca, como se teme de la calami- los concurrentes arrojen desde la Cazuela y Palcos, yesca encendida
dad del tiempo." y cabos de cigarros al Patio, sucediendo no pocas veces que se que-
La propuesta pasó á informe de Mariano Cano, Guardarropa del men los vestidos y capas de las personas que ocupan los Pal eos más
Teatro, á quien se preguntó " s i era justo, sin daño de tercero, el bajos, Bancas y Mosquete; debiéndose prohibir igualmente el que
precio de las diez candilejas ó cajoncillos de hoja de lata, con cinco escupan al Patio, tiren cáscaras de fruta, cabos de velas, y otras co-
61

sas con que incomodan al concurso, manchan la ropa y suscitan al- de treinta y cinco años, que hoy vive en la calle de Venero pasada la
gunas r i ñ a s . " Vinatería y Alcantarilla, al cual, para que declare, le recibí Jura-
Estas muestras de mala educación y grosería fueron muy comunes mento que hizo por Dios Nuestro Señor y la Santa Cruz, so cuyo
y difíciles de extirpar, pues poseo un ejemplar de un bando fechado cargo ofreció decir verdad en lo que fuere preguntado: y siéndolo so-
en Abril de 1794, en q u e se reproducen letra á letra las citadas dis- bre qué oficio ó ejercicio tiene para su subsistencia, Dijo: Que en el
posiciones para su remedio. día la consigue del muy corto sobrante que le rinde la representación
Ea revista y estudio de las ordenanzas y reglamentos de Teatros de una Compañía de Muñecos en hacer comedias, con licencia que
de la Capital, hízome descubrir cuán antiguas deben de ser en Mé- para ello consiguió del Exmo. Sr. Virrey, que al efecto demuestra: y
xico las representaciones hechas por títeres que á tanta perfección yo, el Escribano, doy fe haberla visto, leídoy devuéltosela, que es dada
han llegado aquí. E n 18 de Noviembre de 1786, D. Silvestre Díaz en esta Ciudad en 15 de Diciembre del año próximo pasado de ochenta
de la Vega, como Juez de Hospitales y Teatro que era, ordenó al Es- y cinco, con las calidades de que haya de comenzarse la comedia pre-
cribano del mismo Teatro, D. Mariano de Zepeda, lo siguiente: cisamente á lá Oración de la noche y acabar á las diez, que 110 haya
'' Habiéndose entendido que varios de los individuos de ambos sexos desórdenes en comidas y bebidas, manteniendo bien iluminado el lu-
de la Compañía de Cómicos y de la de Bailarines del Teatro de esta gar en que se ejecute, y con la debida separación de personas de am-
Capital y otros dependientes de él, así en las noches en que no repre- bos sexos que concurran, y que el Alcalde de barrio á quien toque,
sentan como en las que lo ejecutan, después de concluido se van á tra- cuide del cumplimiento: la que le devolví con la prevención de que
bajar en el ejercicio de representaciones de Muñecos á las casas don- cumpla puntualmente con ella, y que no consienta la concurrencia de
de hay Compañías de ellos, de que resulta que trasnochándose hasta los cómicos y cómicas del Coliseo de esta Corte; de que entendido,
deshoras de la noche, n o tienen al día siguiente tiempo para estudiar expresó que 110 asisten en su casa ninguno de ellos, pues en donde
sus papeles á cuyo desempeño están obligados, á que se agrega que lo hacen es en otra igual Compañía que se halla en una casa del Por-
por el desorden y embriaguez con que se tiene entendido proceden, tal de Tejada, cuyo dueño ó Autor se apellida Estrada."
acontecen enfermedades ó indisposiciones que les impiden la asisten-
cia al Teatro, en grave perjuicio de los intereses de éste y también Compareció la segunda " u n a mujer que expresó llamarse Francis-
del público por lo mal servido que se halla; para remedio de todo se ca Tomasa Montoya y Cadena, ser castiza, doncella, originaria de la
da comisión en forma al Escribano D. Mariano de Zepeda, para que ciudad de Puebla, y vecina de ésta ha el tiempo de diez y ocho años,
con la precaución y cautela conveniente, pase á las casas en donde se y que cuenta cuarenta y ocho de edad, y que hoy vive en el Puente
ejecutan las representaciones de comedias de Muñecos, y encontran- Colorado, casa que llaman de las Comedias.'' Recibido el Juramento
do en ellas algún cómico ó cómica, cantarín ó cantarína, ó bailarín ó y preguntada, " Dijo : Que con el motivo de sus enfermedades y can-
bailarina, los ponga desde luego en la Cárcel á disposición de la Di- sada edad, después de haber sido Cómica en este Coliseo, en el de
rección del Teatro, sin exceptuar á persona alguna, y procederá igual- Puebla y en el de Veracruz, está reducida en el día á un muy corto
mente á asegurar cuanto baste, el tiempo de la concurrencia á estas estipendio que le queda con hacer comedias de Muñecos en dicha
casas de las tales personas dependientes del Teatro, y también la li- Casa, las que ejecuta desde el día 13 de Mayo de este año, en que el
cencia del Superior Gobierno con que se estén haciendo semejantes Exmo. Sr. Virrey le dió para ello licencia, que yo, Escribano, doy fe
representaciones de Muñecos, y en el caso de que no haya alguna haber visto, por la que se le concede con la condición de no poder
procederá contra los representantes de estas figuras, según y como en verificar la representación, si no es en los Barrios de esta Ciudad, y no
semejantes oca§iones se acostumbra por el Juzgado de Teatro, amo- en el Centro." En lo demás, la declaración de la Montoya fué como
nestando á los que tengan dicha Superior licencia, para que no vuel- la de Alcántara, é iguales también las prevenciones del Escribano.
van á admitir en sus compañías á ninguno de los dependientes del "Resultando por las dos anteriores declaraciones que en la calle
Teatro, apercibidos de que de lo contrario se procederá contra ellos, del Portal de Tejada había representación de Comedias de Muñecos
y fecho todo, dará prontamente cuenta. " en la casa esquina que hace á dicha calle y callejón de la Polilla,
arriba de la Vinatería, pasé la tarde del día de hoy (24 de Noviem-
Cumplió Zepeda como era de esperarse, haciendo parecer ante él b r e ) ^ ella, y habiendo entrado á su sala y visto el Teatro de la re-
á los dueños de empresas de muñecos: fué el primero " u n hombre presentación, le pregunté por el dueño de ella á una mujer que allí
que expresó llamarse Francisco Javier Alcántara, ser español origi- estaba, la que me expresó ser vecina de la casa, y que el Autor se
nario de Puebla, y desde pequeño avecindado en esta Ciudad, soltero, hallaba enfermo de Tabardillo, pero que éste podría contestar res-
pecto de estar aliviado; y con efecto, habiendo pasado á la última t e l : Que siempre ha cumplido y cumple con las calidades con que se
pieza interior, encontré á un hombre en cama, rodeado de un petate, le dió la licencia."«
al parecer enfermo, el que preguntado por su nombre, generales, y Para completar las varias noticias que este capítulo contiene, y
demás concerniente á esta averiguación, expresó llamarse José Es- según creo, por primera vez se ven impresas, daré una idea del equi-
trada, ser español, casado con Agustina Morales, de oficio estirador paje de un actor de aquel tiempo, sirviéndome para ello de dos inven-
de oro, de veinticinco años de edad: Que es cierto ser dueño de tarios de los bienes que á su fallecimiento dejaron Agustín Oquendo,
la representación de las comedias, las que ha hecho por ver si bus- parte de por medio, y Antonio Atamoros, Segundo Barba, muerto éste
caba algo más de lo que adquiere con su trabajo, porque en ellas hace en 25 de Noviembre de 1786.
el papel de primer galán ; Que el Teatro y Muñecos con que la veri-
H e aquí la mísera herencia de Oquendo, con la tasación de sus va-
fica son propios de D. Felipe Manjarrés á quien se los tiene arrenda-
lores hecha por el Maestro Sastre José Mariano Ruiz: " U n vestido
dos en ocho pesos cada mes, bajo la fianza que le dió con D. José
morado de chupín y casaca, tasado en tres pesos: Otro de casaca,
Ponce de León; Que los que le ayudan á dicha representación son
chupín y calzones de raso listado de azul, en catorce pesos: Dos
Francisco Coca, que hace el segundo galán, el tercero José Cano, el
pares de calzones negros, unos de terciopelo del Bastón, y otros de
barba lo hacen José Romero y Mariano Zanca, y el de gracioso Ma-
raso, ambos viejos y remendados, en tres pesos: Un espadín de guar-
teo Cevallos; la primera dama Ana la Zanca, la segunda Ana Gar-
nición chica de plata y con la hoja tomada, en seis pesos : Un capote
cía; dos criadas, que son las cantarínas, la una María y la otra Pepa :
de paño de la tierra, viejo, azul, en seis pesos : Dos pares de medias,
Que es cierto que Francisco Carreño, Miguel Alanís, Teresa Acosta
viejas, unas de seda y otras de algodón, en un peso un real: Una so-
y José Viguera, alias el Maestrito, han hecho para diversión tres ó
lapa de género de Puntiví, en un peso : Una bolsa de pelo, flor y fleco,
cuatro papeles, sin estipendio alguno, pues sólo Alanís ha tomado
todo viejo, en un real: Un sombrero de Castor, viejo, en un peso
una tal cual noche una galita: y preguntado con qué licencia hacía las
cuatro reales: Unas hebillas con sus charreteras, en seis pesos. To-
comedias, respondió no tener alguna, y que esta era la causa porque
tal, cuarenta y siete pesos y seis reales."
consentía que los referidos Carreño y demás hiciesen algunas veces
los papeles, creído de que por medio de éstos no se le seguiría per- Véase ahora el equipaje de Antonio Atamoros: " U n a cuchara y
juicio alguno; en cuya vista le intimé me entregase los Muñecos con tenedor de plata : Unas hebillas Chatres con dos charreteras desigua-
que hacía la representación, lo que ejecutó entregándome doce Mu- les : Un par de hebillas de cobre, redondas: Diez pesos en reales:
ñecos, los mismos que puse en poder del Señor Contador, é igual- Casaca y Chupín verde, bordada al canto, de oro: Casaca y chupín
mente le apercibí no reincida otra vez en hacer iguales comedias." de Borborán-musgo, bordada al canto de seda de colores: Una casaca
musga, bordada de seda al canto: Un chupín de tela de oro y fondo
Por último, en primero de Diciembre el Escribano Zepeda terminó nácar: Una casaca y chupín de paño verde: Un chupín de tela de
su comisión haciendo comparecer ante él á " una mujer que expresó oro y blanco : Una chupa de Moé-Morado, con flores verdes: Casaca
llamarse María Petra Aguilar, ser española, casada con José Melén- y chupín de lustrina negros: Dos pares de calzones de terciopelo ne-
dez, y mayor de treinta y cinco años, originaria y vecina de esta Ciu- gro, viejos: Un vericú de paño de grana, con su hebilla de cobre:
dad, en la actualidad en el Portillo de San Diego." Tomado el Ju- Un espadín con puño de latón y guarnición de fierro: Un camisón
ramento y llenadas las demás formalidades, dijo: 1 'que en el día con- de estopilla: Dos chupas blancas, hechas pedazos: Un par de calzo-
sigue su subsistencia por la representación de comedias de Muñecos nes blancos : U11 paño de polvos, azulito : Unos manguillos viejos:
que hace en la casa que habita en dicho Portillo, nombrada la del Dos corbatines de estopilla: Dos birretes viejos, remendados: Un
Obraje, con licencia que para ello consiguió del Exmo. Sr. Virrey par de calcetas de algodón : Dos vasos de cristal, uno de cuartillo y
D. Matías de Gálvez, con previo informe del Señor Corregidor de esta otro de medio: Dos pares de medias blancas, de seda, viejas: Un
Nobilísima Ciudad, la que demostró, y es dada á veintidós de Octu- sombrero de la tierra, blanco : Una camisa de Puntiví: Un pañuelo
bre de setecientos ochenta y tres, la que se le confirió en virtud de viejo, de Bretaña: Un Capingón de paño azul de primera, viejo:
Memorial que presentó, diciendo estar cargada de familia, y su ma- Cuatro óvalos de Nuestra Señora de los Dolores, San José, San Fran-
rido no poder trabajar en su oficio de Sastre, por falta de vista: Que cisco y San Antonio : Una repisa grande, de tajamanil: Una luna de
nunca ha representado ni hecho papel alguno, ni consiente á ninguno tercia : Un estante achinado ordinario, con su llave : Una colcha vieja:
del Coliseo en su casa: Que las más ocasiones se hace la comedia Dos sábanas de manta : Unos anteojos : Un legajo de papeles, al pa-
con la asistencia de D. José Iglesias, Alcalde de Barrio de aquel Cuar- recer del Coliseo : Un bastón : Un espadín : U11 sombrero de castor :
Una peluca : Dos cajas con dos pelucas: Una cana: Una barba :—• que por sus empleos están exceptuados de pagar entradas, y á estos
Todo lo que se entregó á María Francisca Chávez, casada con Manuel les sale un asiento en dos reales cuatro granos, y al teatro le produ-
Mendoza, de oficio cocinero y en el día está en la Cocina de Su Ex- cen siete pesos. Los cuarenta y tres asientos de arrendamiento even-
celencia.—Firmado, Rosales." tual, tienen señalado el precio de cuatro reales y uno de entrada
en los días de trabajo; cinco reales el asiento y uno la entrada, en
los de fiesta, y en los de paga doble, seis reales el asiento y dos la
entrada. Al primer respecto, si se ocuparen todos en todos los días
CAPITULO VII podrían producir, veintiséis pesos y siete reales: al segundo respecto,
treinta y dos pesos y dos reales, y al tercero, cuarenta y cuatro pesos.

1786
Patio ó Platea.
E n 7 de Agosto de 1786 mandó el Conde de Gálvez se hiciese un En este sitio hay diez y nueve Bancas, de las cuales están desti-
cálculo prudencial de la gente que cupiese dentro del Teatro de la nadas siete para los Oficiales de los Cuerpos, y los dispersos que resi-
Ciudad de México y de lo que podría producir su entrada, á fin de den en esta Capital que se hallan abonados, los Capitanes á cuatro
averiguar las causas por las que había quebrado la Sociedad de Sus- pesos, los Tenientes á dos pesos y cuatro reales, y los Alféreces y
critores que le tuvo en arrendamiento después del asentista D. Ma- Cadetes á un peso y cuatro reales, todo mensual, que según el pri-
nuel Lozano, que á su vez había perdido en ello una respetable suma. mer abono importa en un mes doscientos cincuenta y siete pesos; y
Los motivos de las pérdidas de Lozano las enumera así un papel siendo los asientos que ocupan estas siete Bancas ciento uno, vienen á
firmado por D. J u a n Manuel de San Vicente: " E s t e tercer año de salir uno con otro á razón de dos pesos, cintro reales y cuatro granos
1784 fué el más calamitoso para el Coliseo, por la dilatada peste de al mes, y al día en las veinte comedias que hay en cada uno, al res-
los dolores de costado; por dos novenarios de la Virgen de los Reme- pecto de 1111 real, poco más, que en los ciento 1111 asientos hacen dia-
dios y uno del Señor de Santa Teresa que estuvo cerrado el Coliseo, riamente doce pesos y cinco reales. En las doce Bancas restantes hay
y por otro mes que también se cerró durante la enfermedad, muerte ciento ochenta y siete asientos destinados para el público: estos asien-
y novenario de duelo del Exmo. Sr. Virrey D. Matías de Gálvez." tos valen tres realeS en cada día de trabajo, cuatro en los de fiesta, y
H e aquí el cálculo prudencial que acabo de citar: seis en los de paga doble. Al primer respecto, si se llenaren todos,
produciría la entrada diaria setenta pesos y un real: al segundo, no-
venta y tres pesos y cuatro reales, y al tercero, ciento cuarenta pesos
Luneta. y dos reales.

La primera banca tiene veinte asientos; la segunda diez y nueve;


la tercera veinte; la cuarta veintidós; la que está debajo del Palco de Mosquete.
S. E . nueve, y la de enfrente siete: Total, noventa y siete asientos.
El día 10 de Julio de este año, en que se celebraron los de la
Están tomados por temporada, cincuenta y cuatro; se le da uno de
E x m a . Sra. Virreina, entraron en este sitio trescientas sesenta y
gracia al Oficial de la Guardia, y quedan, pues, para arrendar al pri-
nueve personas; la paga en los días de trabajo y de fiesta es á medio
mero que lo solicita, cuarenta y dos. De los cincuenta y cuatro asien-
real, y á uno en los de entrada doble. Al primer respecto producirá
tos que están arrendados por temporada, que se renueva cada mes,
ocupándose diariamente, veintitrés pesos y seis granos, y al segundo,
los cincuenta y uno pagan seis pesos cada uno y además la entrada cuarenta y seis pesos y un real.
que está computada en tres pesos, y todo importa nueve pesos, que
en las veinte comedias que hay regularmente por mes, sale cada una
á tres reales y medio con corta diferencia: y por este orden rinden
Asientos en los Cuartos del Primer piso.
los expresados cincuenta y un asientos diariamente, veintidós pesos, dos
reales y seis granos. Los tres asientos restantes sólo pagan seis pesos Los números 1, 2, 33-4, están destinados al Exmo. Sr. Virrey, v
mensuales, por ocuparlos los Sres. Mayordomos Córdova y Salcedo, el 6 al Mayordomo del Hospital Real de Indios. En los Cuartos res-
R. H. T.—T. I.—9
Una peluca : Dos cajas con dos pelucas: Una cana: Una barba :—• que por sus empleos están exceptuados de pagar entradas, y á estos
Todo lo que se entregó á María Francisca Chávez, casada con Manuel les sale un asiento en dos reales cuatro granos, y al teatro le produ-
Mendoza, de oficio cocinero y en el día está en la Cocina de Su Ex- cen siete pesos. Los cuarenta y tres asientos de arrendamiento even-
celencia.—Firmado, Rosales." tual, tienen señalado el precio de cuatro reales y uno de entrada
en los días de trabajo; cinco reales el asiento y uno la entrada, en
los de fiesta, y en los de paga doble, seis reales el asiento y dos la
entrada. Al primer respecto, si se ocuparen todos en todos los días
CAPITULO VII podrían producir, veintiséis pesos y siete reales: al segundo respecto,
treinta y dos pesos y dos reales, y al tercero, cuarenta y cuatro pesos.

1786
Patio ó Platea.
E n 7 de Agosto de 1786 mandó el Conde de Gálvez se hiciese un En este sitio hay diez y nueve Bancas, de las cuales están desti-
cálculo prudencial de la gente que cupiese dentro del Teatro de la nadas siete para los Oficiales de los Cuerpos, y los dispersos que resi-
Ciudad de México y de lo que podría producir su entrada, á fin de den en esta Capital que se hallan abonados, los Capitanes á cuatro
averiguar las causas por las que había quebrado la Sociedad de Sus- pesos, los Tenientes á dos pesos y cuatro reales, y los Alféreces y
critores que le tuvo en arrendamiento después del asentista D. Ma- Cadetes á un peso y cuatro reales, todo mensual, que según el pri-
nuel Lozano, que á su vez había perdido en ello una respetable suma. mer abono importa en un mes doscientos cincuenta y siete pesos; y
Los motivos de las pérdidas de Lozano las enumera así un papel siendo los asientos que ocupan estas siete Bancas ciento uno, vienen á
firmado por D. J u a n Manuel de San Vicente: " E s t e tercer año de salir uno con otro á razón de dos pesos, cintro reales y cuatro granos
1784 fué el más calamitoso para el Coliseo, por la dilatada peste de al mes, y al día en las veinte comedias que hay en cada uno, al res-
los dolores de costado; por dos novenarios de la Virgen de los Reme- pecto de un real, poco más, que en los ciento 1111 asientos hacen dia-
dios y uno del Señor de Santa Teresa que estuvo cerrado el Coliseo, riamente doce pesos y cinco reales. En las doce Bancas restantes hay
y por otro mes que también se cerró durante la enfermedad, muerte ciento ochenta y siete asientos destinados para el público: estos asien-
y novenario de duelo del Exmo. Sr. Virrey D. Matías de Gálvez." tos valen tres realeS en cada día de trabajo, cuatro en los de fiesta, y
H e aquí el cálculo prudencial que acabo de citar: seis en los de paga doble. Al primer respecto, si se llenaren todos,
produciría la entrada diaria setenta pesos y un real: al segundo, no-
venta y tres pesos y cuatro reales, y al tercero, ciento cuarenta pesos
Luneta. y dos reales.

La primera banca tiene veinte asientos; la segunda diez y nueve;


la tercera veinte; la cuarta veintidós; la que está debajo del Palco de Mosquete.
S. E . nueve, y la de enfrente siete: Total, noventa y siete asientos.
El día 10 de Julio de este año, en que se celebraron los de la
Están tomados por temporada, cincuenta y cuatro; se le da uno de
E x m a . Sra. Virreina, entraron en este sitio trescientas sesenta y
gracia al Oficial de la Guardia, y quedan, pues, para arrendar al pri-
nueve personas; la paga en los días de trabajo y de fiesta es á medio
mero que lo solicita, cuarenta y dos. De los cincuenta y cuatro asien-
real, y á uno en los de entrada doble. Al primer respecto producirá
tos que están arrendados por temporada, que se renueva cada mes,
ocupándose diariamente, veintitrés pesos y seis granos, y al segundo,
los cincuenta y uno pagan seis pesos cada uno y además la entrada cuarenta y seis pesos y un real.
que está computada en tres pesos, y todo importa nueve pesos, que
en las veinte comedias que hay regularmente por mes, sale cada una
á tres reales y medio con corta diferencia: y por este orden rinden
Asientos en los Cuartos del Primer piso.
los expresados cincuenta y un asientos diariamente, veintidós pesos, dos
reales y seis granos. Los tres asientos restantes sólo pagan seis pesos Los números 1, 2, 33-4, están destinados al Exmo. Sr. Virrey, v
mensuales, por ocuparlos los Sres. Mayordomos Córdova y Salcedo, el 6 al Mayordomo del Hospital Real de Indios. En los Cuartos res-
R. H. T.—T. I.—9
tantes se considera que unos con otros pueden ocupar ciento setenta
y cuatro asientos. Su precio en los días de trabajo y de fiesta es el de
un real, y en los de paga doble, dos reales. Al primer respecto as-
ciende á veintiún pesos y seis reales, y al segundo, cuarenta y tres Cazuela de Mujeres.
pesos y cuatro reales.
Aquí hay doscientos treinta y seis asientos y pagan lo mismo que
en la Cazuela de H o m b r e s ; y así en los días comunes importaría vein-
Asientos en los Cuartos del Segundo piso. tinueve pesos y cuatro reales,y en los de paga doble, cincuenta y nue-
ve pesos.
E n éste se dan libres de paga el número i, al Secretario del Virrei- Puede rendir el Teatro en cada día de trabajo, trescientos treinta
nato, y el 9 á la Nobilísima Ciudad. E n los demás cuartos se regula y tres pesos y cuatro reales.
que pueden caber ciento noventa y nueve personas. Su precio es lo
mismo que en el primer piso, y á este respecto importarían en días
de trabajo y de fiesta, veinticuatro pesos y siete reales, y en día de
En días de fiesta y de paga doble.
paga doble, cuarenta y nueve pesos y seis reales.

Luneta abonada 23.1.6 23.1.6


Id. eventual 32.2.0 ^ Q Q
Cuartos y asientos en el Tercer piso. Bancas ó Patio abonado 12.5.0 12.5.0
Id. eventuales 93.4.0 I 4 0 ^ 0
E l número 12 de esta clase está dado para la Familia de ¿fecalera Mosquete 23.0.6
abajo át\ E x m o . Sr. Virrey. Eos números 1, 2, 3, 4, 15, 16, 17 y 18 son Primer piso, en los asientos . . . 21.6.0 43.4.0
de arrendamiento por entero, y se paga por sólo el Cuarto dos pesos Id. en los de segundo 24.7.0 49.6.o
cuatro reales en los días de trabajo, tres pesos en los de fiesta y cinco Arrendamiento de cuartos del
en los de contribución doble. Si se arrendaren todos de continuo, P1S0 39 24.0.0 40.0.0
valdrán en el primer caso veinte pesos, en el segundo veinticuatro y Entradas á éstos g.o.o 16.0.0
en el tercero cuarenta: las entradas á estos cuartos se pagan separa- Id. en los que se alquilan por
damente al mismo precio que en los otros pisos, y regulándose que asientos
7M-o 107.2.0
cabrían en estos ocho cuartos sesenta y cuatro personas, importan Cazuela de H o m b r e s . . . . , 19.7.0 39.6.0
ocho pesos, y en los días de paga doble diez y seis pesos. Eos números Cazuela de Mujeres 29.4.0 59.0.0
5» 6 . 7. 8, 9. lo» 11, 13 y 14, están destinados á arrendarse por asien-
tos, y cabrán en ellos por u n prudente cálculo ciento cuarenta y tres Producto en día de fiesta.384.1.o; en día doble 620.3.6
personas, que pagan tres reales en días de trabajo, cuatro reales en
los de fiesta y seis en los de paga doble. Al primer respecto valdrían E n las cuarenta y cuatro semanas que hay de representación, se
estos asientos cincuenta y tres pesos y cinco reales; al segundo, se- consideran doscientos veinte días útiles, los ciento seis de trabajo,
tenta y 1111 pesos y cuatro reales, y al tercero, ciento siete pesos y cien regulados como días de fiesta por estar incluidos los j u e v e s en
dos reales. que por haber baile se cobra como si lo fuesen y los de Eolias en que
se exige lo mismo: quedan catorce de paga doble; y según las regu-
laciones que van hechas, rendiría el Teatro en toda la t e m p o r a d a , l a s
Cazuela de Hombres. siguientes partidas:

E n los ciento seis días de trabajo á razón de los


E n esta hay ciento cincuenta y nueve asientos, y valen un real en
333 pesos y 4 reales en cada uno $ 35-351.
los días comunes y de fiesta, y dos en los de paga doble. Al primer
En los cien días considerados como de fiesta á
respecto producirían diariamente diez y nueve pesos y siete reales, y
al segundo treinta y nueve pesos y seis reales. 384 pesos y 4 reales cada uno J( 3 8 4 1 2 . 4

A la vuelta $ 73-763. 4
D e la vuelta $ 73-7 6 3- 4 que hay en México, es más extraña la falta de frecuencia en ella, á
En los catorce de paga doble á 620 pesos y 3 rea- menos que no tenga considerable parte en el retraimiento de las gen-
les y medio en cada uno 8.686. 1 tes, las calamidades y miserias que se han sufrido en el presente año.''
Total producto de entradas y arrendamiento de El Conde de Gálvez decidido á proteger al Coliseo, dispuso que
ocho cuartos d e tercer piso $ 82.449. 5 setenta asientos que en Lunetas y Bancas quedaban desocupados se
Arrendamiento de cuartos de primero y de se- enviasen al Real Consulado para que los repartiese á los individuos
del Comercio, invitándolos á pagarlos al precio de seis reales en las
gundo piso 7-58o.,,
ciento tres comedias que quedaban hasta el próximo Carnaval. A
Id. del Cuarto de la nieve que este año sólo ha
esta resolución acompañaba la nota siguiente : ' 1 Debe advertirse que
estado arrendado tres meses, habiendo que-
en Madrid es el precio del asiento y entrada á la Luneta en cada co-
brado el que lo tomó 160. ,,
media regular ocho reales y seis maravedís de vellón, y en las de Teatro
Total producto posible del Teatro $ 90,189. 5 once reales y uno y medio maravedís, según los últimos precios se-
ñalados en 25 de Febrero de 1785; cuyo precio medio es de nueve
reales y veinte maravedises y tres cuartas partes de otro, que consi-
derados como de plata según la Real Cédula de comparación de mo-
Arotas. nedas de uno y otro reino, vendría á salir cada una de las expresadas
ciento tres comedias á un peso, un real, veinte maravedises de plata
y tres cuartas partes de otro; á cuyo respecto ascenderían á ocho mil
A cada asiento se le ha considerado media vara de hueco, para hacer
seiscientos sesenta y tres pesos y seis y medio reales, en vez de la de
más próximo á la realidad el cálculo, pues es constante que en días
cinco mil cuatrocientos siete pesos cuatro reales á que se van á dar
de mucho concurso en cada tres medias varas se colocan cuatro per-
en el Coliseo de México."
sonas y á veces más. — D e b e advertirse que en estos cálculos van re-
bajados todos los asientos que ocupan las personas que conforme al H e aquí ahora el presupuesto de gastos de ese fin de año de 1786,
art. 39 del Reglamento del Teatro están exceptuadas de pagar entra- con las reducciones que se estimó conveniente hacerle:
das, las cuales podrán llegar á cien personas diarias, que en los días
de trabajo y de fiesta, consideradas por la entrada más baja ascienden
á doce pesos cuatro reales y en los de paga doble á veinticinco pesos: Arrendamiento y limosna de cera al H o s p i t a l . . . . $ 6,625
lo cual en los ciento seis de trabajo, cien de fiesta, y catorce de paga Alquiler de Guarda-ropa 162
doble, importan 2,925 pesos, que rebajados de los noventa mil ciento Demérito en los útiles del Teatro 1,000
ochenta y nueve pesos y cinco reales, vienen á dejar á éstos en ochenta Tramoyista 250
y siete mil doscientos sesenta y cuatro pesos y cinco reales. Mozo de Guarda-ropa 50
Portero del Vestuario 50
Este cálculo acredita que siempre que se halle modo de que las
Caja y clarín 78
gentes concurran al Teatro, podrá sacarse mucha utilidad de él, aun
Cobrador de Cuartos de 1? y 2? piso 318
cuando de los productos que van regulados se rebaje todavía una sexta
parte que importa catorce mil quinientos cuarenta y cuatro pesos, por Idem de Lunetas 165
todas las consideraciones que quieran hacerse para minorarlos; en este Idem de Bancas y Mosquete 165
caso quedarán de rendimientos setenta y dos mil setecientos veinte pe- Idem de tercer piso 165
jios, que aun suponiendo que hubiese que gastar en cada un año cin- Idem de las dos Cazuelas 165
cuenta mil, que ya se ve que esto ni aun es imaginable, quedarían de Alumbrador del Teatro 70
beneficio veintidós mil setecientos veinte pesos. Acomodador de la Cazuela de Mujeres 60
Idem de la de Hombres 60
Estas reflexiones acreditan que el quebranto que ha sufrido la So-
Idem del Mosquete 30
ciedad de Suscritores, 110 ha dimanado de los gastos erogados, sino
del corto rendimiento de las entradas, que nunca se creyó ni podía Seis tiradores de Bastidores de cuya cuenta serán los
esperarse, discurriendo racionalmente, mejorándose como se ha me- ayudantes que necesiten 552
jorado en todas sus partes la diversión: y siendo la única decorosa Escribano del Teatro 200
Orquesta con cinco violines, un violón, un contra- Home, y concluyó con Llacer que hacemos el viernes 30. Principió el
bajo, dos oboes, y dos trompas 3,504 año de 1786 dándose el domingo 1? de Enero El desertor, y terminó
Cómicos, cómicas, cantores y cantoras 19,024 el mes con una folla. Dióse el jueves 2 de Febrero La Andrómaca,
Alumbrado 1,842 vióse el 13 El Noé, el 16 El Nazareno Sansón y el 22 La Mujer con-
Gastos menudos 555 tra el consejo. Entre las tonadillas más aplaudidas en la temporada fi-
Pintor del Teatro, comprendidos carteles 400 guraron La murmuración del Prado, Los títulos de comedias, y Los
Diez por ciento para imprevistos gastos 3,549 polaquitos, que fueron cantadas por Mariquita, Felipa y Eoreto: de las
seguidillas gustaron mucho Yo soy una remaja, Qué lástima te tengo,
El total de gastos anuales importaría según este presupuesto la can- La que tan fina adora, A la fuente Narciso, Filomenas del campo y Te-
tidad de treinta y nueve mil treinta y nueve pesos, quedando bien asis- rrible es mi fatiga, luciéndose en ellas Eoreto, Anita y Felipa: los
tido el Teatro y con mayor número de actores que en temporadas saínetes de mayor efecto fueron El abate y la moza, El francés de los
precedentes.'' violines, Los cortejos reñidos y Los majos de Cádiz.
Demos ahora una noticia de las obras puestas en escena en nuestro En el mes de Junio se ofreció en el Coliseo el espectáculo nuevo de
Coliseo, en las cuarenta y nueve semanas de la temporada que empezó que habla el siguiente prospecto, que copio íntegro:
el Domingo 27 de Marzo de 1785 para concluir el 28 de Febrero de " Aviso al público. — H a llegado á esta ciudad el Señor Falconi, cé-
1786. Empezó en aquel día con la comedia Hados y lados, siguiéndola lebre Físico, Maquinista y Matemático, que se puede llamar el solo
en los sucesivos Los menestrales, Mejor está que estaba, y También la y único en este género de espectáculo, que se compone de piezas Fí-
afrenta es veneno. E11 Abril, El Conde de Atareos, Fuego de Dios, Di- sicas, Automáticas y Matemáticas de las cuales es el autor. E l buen
cha y desdicha, Gustos y disgustos, El Conde Luconor, El Príncipe Lito, suceso que ha obtenido en las varias Cortes á donde ha estado, como
Por un Rey, La niña de Gómez Arias, El Petrarca de ferusalén, Los delante del Rey de Nápoles, de Francia, de Portugal, y líltimamente
Amantes de Teruel, Antiocoy Seleuco, El sabio en su retiro, Para ven- de Su Majestad Católica Carlos Tercero ( q u e Dios guarde), y el ha-
cer amor querer vencerle, La posadera, El Conde de Saldaña y El dia- ber habido á Su Alteza el Príncipe de Asturias por discípulo, le hace
blo predicador. Mayo principió el Domingo 1? con La Vida es Sue- esperar que gustará aquí. Los Certificados, Licencias, Pasaportes y
ño, vió La farret¿era y Los empeños de una casa entre otras, y terminó Recomendaciones que trae, hacen fe. E l 110 tiene más que cuatro ó
con No siempre lo peor es cierto. Junio empezó con una lucida folla y seis representaciones que ofrecer á este instruido y generoso Pú-
terminó con La Mujer prudente: Julio con El amor creado y La An- blico.
drómaca respectivamente. El lunes 1? de Agosto se repitió El sabio
'' E s imposible poner en este papel todas las experiencias y habili-
en su retiro, y vióse El Rico-Home de Alcalá, El Falso Nuncio de Por-
dades que hará en este poco tiempo que aquí promete; y como hay
tugal, Los Aspides de Cleopalra, La Conquista de México, el jueves 11,
muchas de ellas que estando prevenidas pierden el mérito de la no-
repetida con mucho aplauso el miércoles 17 y el miércoles 31. Prin-
vedad, dará aquí solamente una idea de algunas piezas que en gene-
cipió Septiembre con El defensor de un agravio, y concluyó con una
ral compondrán la primera representación, advirtiendo que todas las
folla. El Domingo 2 de Octubre se repitió Para vencer amor querer
representaciones serán diferentes.
vencerle, y concluyó el Domingo 30 con repetición también de Los
"Primero; un molino puesto sobre una mesa, por simpatía natural
empeños de una casa. Dióse el martes 1? de Noviembre El garrote
de una cajita que una persona tiene en la mano y una vela encendi-
más bien dado, y el viernes 4 se celebraron los días del Rey con el
da en la otra, hará, á medida de su deseo, trabajar al molinero, en
estreno de El delincuente honrado y una bien dispuesta Loa, alusiva
poniendo, cuando quiera, la vela debajo de la cajita, y retirarla cuan-
al nombre de Carlos, habla el programa respectivo, representándola
do quiera parar dicho molino.
seis actores, á saber, por la C., el corazón, rey de los miembros; por la
A., la águila, reina de las aves; por la R., la rosa, rema de las flores- "Después, varias experiencias sobre la Catóptrica ó reflexión de
por l a E e l león, rey de los animales; por la O., el oro, rey de los meta- los espejos. — El maravilloso Dolfin, que á más de escribir lo que se
les; y por la S., el sol, rey de los astros. le pide, dará la suma de seis columnas en números, que hará antes
que los espectadores lo hagan. — La Cabeza de Teofratus Paracelsus,
Siguieron, en subsecuentes días, Antes que todo es mi dama, La que es una cabeza de oro macizo, gruesa como una nuez, la cual puesta
gran Cenobia, El castigo de la miseria, El Maestro de Alejandro El se- en un vaso cubierto, responderá por señales á lo que se le pregunte;
creto á voces y la Dama duende. El viernes 2 de Diciembre vió El Rico adivinará los números de dados que cualquiera eche; y también una
persona echará debajo de un sombrero los dados sin verlos, y Teofra-
que lo ejecute pierda el ya relacionado equilibrio.—F,n la misma cuer-
tus dirá los puntos que hay.
da se pondrá una batea, en la cual se parará y meterá dentro de ella
" Para no cansar más al lector, el Sr. Falconi, siendo el poseedor del
Urbano, moviéndola de un lado á otro, y formando desde ella un sal-
gran secreto del Magnetismo animal de Mr. Mesmer de París, en el
to, que al tiempo de perder el equilibrio la batea, quede él parado en
hará muchas experiencias, con otras habilidades que 110 están pues-
la cuerda.—El mismo tomará un fusil, y saldrá desde la tijera con él,
tas aquí. Se acabará esta función con la gran sorpresa de la aparición
marchando hasta la mitad de la cuerda, donde hará el manejo de éste
de una paloma que llevará la respuesta de un billete (pie una perso-
y dará cuatro descargas.—Divertirá con varios sones en dicha cuerda,
na habrá hecho, y puesto en una pistola cargada, sin dejarlo ver á
y subiendo arriba en la floja, (que llaman columpio), ejecutará des-
nadie, la habrá disparado fuera de la ventana. Con lo que espero
trezas no vistas, que llenarán la atención de los espectadores.—Con
quede gustoso el público."
más, los Actores y Actrices de la Compañía darán una pieza de repre-
Al siguiente día de la primera representación de Mr. Falconi, apa- sentado y otra de canto.
reció en las puertas clel Teatro u n pasquín en que el Rey de los locos
" Advertencia.—El arrendamiento de Palcos, Lunetas y demás
de San Hipólito condenaba á destierro al ilusionista, como hoy se dice,
asientos de temporada, se efectúa con respecto á cinco comedias sola-
" p o r q u e después de haberse publicado por insigne Físico y haber
mente, cuando en la semana 110 se hacen bailes en Domingo, días de
"prometido cosas dignas de la admiración, ajeno de ejecutarlas, sólo
fiesta y jueves, según antigua costumbre introducida y observada
" h a logrado su artificio llamar la curiosidad para el engaño, y con
umversalmente por el público y el asentista; y de aquí es que cual-
"ella beneficiarse á costa de los que queriendo lisonjear su gusto sólo
quiera diversión que haya en el Teatro, debe pagarse separadamente,
'' han sacrificado su dinero. Falconi, con faltar al exacto cumplimien-
como sucedería si las habilidades que han de ejecutar los individuos
" to de sus promesas, sólo ha servido de cruel perseguidor de los bol-
expresados, hubiesen de hacerlas en otra casa distinta que 110 fuera
s i l l o s , queriendo divertir al público con frioleras y puerilidades co-
el Patio de las Comedias, y así se ha hecho siempre que en la Cua-
" m o la suerte del tira y afloja, en la que después de unas largas y'
resma ha habido en el de esta Ciudad diversión de equilibrios ú
"dilatadas prevenciones y hacer subir dos arrenguiues, dejó en sus-
otras.
p e n s i ó n á todos los asistentes que esperaban alguna extraña y sin-
g u l a r notabilidad y no que resultase la suerte un propio j uguete de '' Todas las comedias que dej en de ejecutarse con motivo de esta nue-
niños. Después de haber perdido toda la noche en esta y otras bo- va diversión, como las que se han omitido por el Novenario de Roga-
t e r í a s , quiso divertir al público con las sombras chinescas, en que ción á la Santísima Virgen de los Remedios, se reemplazarán y darán al
" s e representaban las aventuras de Polilla, pasajes tan fríos y tan sin público en el modo que va insinuado.—Todos los sujetos que en la ac-
"gracia que á falta de ellos hubieran dado los asistentes por bien em- tualidad tienen palcos, lunetas y demás asientos tomados por tempo-
p l e a d o el mal rato de un entremés. " rada, serán preferidos, conformándose con los precios que se señalarán
adelante, y pagando cada uno su palco ó asiento á la entrada en la
Después de Falconi; y con mejor éxito, trabajaron en el Coliseo diversión, que será á la hora de la Oración de la noche.
unos gimnastas y equilibristas, según reza el siguiente programa : " L o s precios que se pagarán en cada espectación de estas, serán
" L o s Bailarines de Cuerda Urbano Ortiz y Miguel Sandi, que han los siguientes: Los palcos de primero, segundo y tercer piso, exclu-
trabajado en las ciudades más populosas del Reino, y Villas y Pueblos, sos los del señor Juez de Teatro, Nobilísima Ciudad, Secretario del
con singular destreza, pues fueron discípulos, el primero de su mis- Virreinato y Mayordomo del Real Hospital de Naturales, se pagarán
mo padre Juan Ignacio Ortiz, el mejor que en el Reino se ha visto en á dos pesos cuatro reales, y los que 110 se alquilen por asientos en el
equilibrios y suertes de todas clases, y el segundo también lo fué de tercer piso á dos pesos dos reales.—Cada asiento en las Bancas, á tres
su padre, célebre Romano y profesor de esta habilidad, prometen di- reales y medio.—Los de los palcos de primero, segundo y tercer piso
vertir al respetable público de esta Capital, la noche del día 2 de Julio, común, á dos reales cada uno.—En los cuartos de tercer piso que se
con las siguientes suertes:—Miguel Sandi, principiará, al uso valen- toman por asientos, dos reales cada uno de estos.—Los de ambas Ca-
ciano, con diferentes suertes en el suelo á todo rigor, vueltas en el aire zuelas á un real, y en el Mosquete, medio por persona.—Los asientos
y saltos mortales.—Urbano Ortiz seguirá en la cuerda tendida, ejecu- de las Lunetas á cinco reales, tomándose en las noches en que se eje-
tando por primera vez esta suerte: que es, llevando un aro en la mano, cute esta diversión, aunque sea por las personas que los tienen por
poner en éste un vaso con agua y dos huevos, el que volteará repetidas temporadas.
veces, estando sin timón en mitad de la cuerda, sin que en las veces
" Para mayor lucimiento de la función, estará el Teatro completa-
mente iluminado, y se da esta noticia con permiso y acuerdo del Su- de oficic ó artesana y dedicado por la sociedad más distinguida á re-
perior Gobierno. ligiosas prácticas en los Santuarios de Guadalupe, la Piedad y los
" E n el cuarto de la nieve ó Nevería, se servirán al público }r á pre- Angeles. Así, pues, en miércoles ó sábados, sólo si eran festivos, ha-
cios económicos, nieve y fiambres." bía función de comedia. Nuevo golpe recibieron éstas con el falleci-
miento del gran Carlos Tercero, ocurrido el 14 de Diciembre de 1788,
pues si sucesos semejantes eran siempre motivo de duelo para el
Reino español y sus colonias, más había de serlo en el caso éste, pues
España y sus Indias perdían un verdaderamente ilustre é insigne mo-
CAPITULO VIII narca.
Cuando el trastorno en esta causa originado húbose apaciguado
un tanto, el Subteniente de Milicias Provinciales de Toluca, D. Ma-
nuel Lozano, que protegido por ricos capitalistas había vuelto á ha-
1787—1790
cerse cargo de la Dirección del Coliseo, comenzó á reorganizar las
cosas para la temporada de 1789. En la anterior había, como desde
El fallecimiento del insigne protector y reglamentador del Coliseo nueve años á esa fecha, seguido con aplauso público en el puesto de
de México, D. Bernardo de Gálvez, Conde de Gálvez, suspendió ó in- primera Dama, Antonia de San Martín; pero á lo que parece llevóse
terrumpió la marcha de sus mejoras; éstas fueron nulas durante la mal con sus compañeras Josefa y Bárbara González, actrices conoci-
breve administración de su sucesor D. Alonso Núfiez de Haro y Pe- das por las Habaneras, que dícese no pudieron aguantar el genio
ralta, Arzobispo de México, digno prelado á quien hubo que agrade- altivo é intrépido de la Antonia. Esta, ocho días después de las Car-
cer las solemnes exequias que celebró en honra del dicho Conde de nestolendas de 1789, al ser preguntada por Lozano si estaría dispues-
Gálvez al trasladar con gran pompa á la Iglesia de San Fernando los ta á continuar en su Compañía, contestó que sólo se avendría á ello
restos del ilustre Virrey que por su liberalidad y brillantes dotes per- si Lozano aceptaba las tres siguientes condiciones: primera, que no
sonales supo captarse las voluntades de sus gobernados. habían de continuar en el cuadro Josefa y Bárbara González; segun-
Haro y Peralta, en 17 de Agosto de 1787 entregó el mando al Te- da, que no había de hacer escritura, quedando á su arbitrio salirse
niente General D. Manuel Antonio Flores. Este dedicó principal- cuando quisiera; y tercera, que aunque no hiciese comedias supernu-
mente su atención al arreglo del ejército y progreso del arte de la merarias, se le había de satisfacer una en cada semana.
Minería, y no hizo gran cosa por el Teatro, si bien 110 lo vio tampoco Lozano encontró inconvenientes y gravosas estas condiciones, y,
con indiferencia. Para captarse su voluntad, el Asentista y la com- desentendiéndose de la Antonia, contrató á Josefa González con mil
pañía dispusieron en 22 de Mayo de 1788, y para celebrar los días del ochocientos pesos, sueldo de primera, y á su hermana Bárbara como
Virrey una solemnísima función que dió principio con una Loa feli- segunda. En cuanto la Antonia lo supo ocurrió al Virrey D. Antonio
citando á S. E. Esa Loa, la nueva tragedia " L a Elmira," y un en- Flores, pidiéndole que Lozano 110 la excluyese, y como la bella y re-
tremés segunda parte de Los Abates locos, " f u e r o n dispuestos, di- voltosa actriz gaditana tenía buenos apoyos é influencias, pasado el
" ce La Gaceta, en obsequio del Virrey, por D. Juan Pisón y Vargas, ocurso al Asesor Valenzuela, éste opinó porque se contratase á la
" c u y o ingenio es bien conocido por otras piezas que ha publicado en San Martín y que la Habanera y su hermana, siguiesen en los mis-
" E u r o p a , y desde luego llenó con las presentes la espectación del nu- mos términos que en el año anterior habían estado, y el Virrey acordó
m e r o s o concurso que las presenció, puesto que el Administrador al margen como parece al Asesor. Así se les notificó ánodos los inte-
" d e l Coliseo se vió en la precisión de repetirlas el siguiente Domiu- resados, el día 4 de Abril.
" g o , para complacer á los muchos que quedaron sin verlas aquella
Al siguiente, Bárbara González expuso debidamente y en forma,
"noche."
" que hallándose bastante enferma y resuelta por esta causa á dejar
Con más ó menos irregularidad por razón de lutos, novenarios y una el Teatro y quitarse para siempre de ser cómica, destino á que su in-
que otra causa de entorpecimiento, continuáronse dando en las sema- feliz suerte la había conducido, muy contrario á su genio, índole y
nas sin fiestas cuatro comedias ordinarias y una supernumeraria los nacimiento, estaba determinada á no seguir en él, pues el ejercicio
domingos, lunes, martes, jueves y viernes y 110 los miércoles y sábados la conduciría precisamente al sepulcro, con perjuicio suyo y de sus
por ser aquel día de correo y el segundo muy ocupado para la gente cuatro hijos, que siendo todos pequeños, no tenían más amparo que
mente iluminado, y se da esta noticia con permiso y acuerdo del Su- de oficio ó artesana y dedicado por la sociedad más distinguida á re-
perior Gobierno. ligiosas prácticas en los Santuarios de Guadalupe, la Piedad y los
" E n el cuarto de la nieve ó Nevería, se servirán al público }r á pre- Angeles. Así, pues, en miércoles ó sábados, sólo si eran festivos, ha-
cios económicos, nieve y fiambres." bía función de comedia. Nuevo golpe recibieron éstas con el falleci-
miento del gran Carlos Tercero, ocurrido el 14 de Diciembre de 1788,
pues si sucesos semejantes eran siempre motivo de duelo para el
Reino español y sus colonias, más había de serlo en el caso éste, pues
España y sus Indias perdían un verdaderamente ilustre é insigne mo-
CAPITULO VIII narca.
Cuando el trastorno en esta causa originado húbose apaciguado
un tanto, el Subteniente de Milicias Provinciales de Toluca, D. Ma-
nuel Lozano, que protegido por ricos capitalistas había vuelto á ha-
1787—1790
cerse cargo de la Dirección del Coliseo, comenzó á reorganizar las
cosas para la temporada de 1789. En la anterior había, como desde
El fallecimiento del insigne protector y reglamentador del Coliseo nueve años á esa fecha, seguido con aplauso público en el puesto de
de México, D. Bernardo de Gálvez, Conde de Gálvez, suspendió ó in- primera Dama, Antonia de San Martín; pero á lo que parece llevóse
terrumpió la marcha de sus mejoras; éstas fueron nulas durante la mal con sus compañeras Josefa y Bárbara González, actrices conoci-
breve administración de su sucesor D. Alonso Núfíez de Haro y Pe- das por las Habaneras, que dícese no pudieron aguantar el genio
ralta, Arzobispo de México, digno prelado á quien hubo que agrade- altivo é intrépido de la Antonia. Esta, ocho días después de las Car-
cer las solemnes exequias que celebró en honra del dicho Conde de nestolendas de 1789, al ser preguntada por Lozano si estaría dispues-
Gálvez al trasladar con gran pompa á la Iglesia de San Fernando los ta á continuar en su Compañía, contestó que sólo se avendría á ello
restos del ilustre Virrey que por su liberalidad y brillantes dotes per- si Lozano aceptaba las tres siguientes condiciones: primera, que no
sonales supo captarse las voluntades de sus gobernados. habían de continuar en el cuadro Josefa y Bárbara González; segun-
Haro y Peralta, en 17 de Agosto de 1787 entregó el mando al Te- da, que no había de hacer escritura, quedando á su arbitrio salirse
niente General D. Manuel Antonio Flores. Este dedicó principal- cuando quisiera; y tercera, que aunque no hiciese comedias supernu-
mente su atención al arreglo del ejército y progreso del arte de la merarias, se le había de satisfacer una en cada semana.
Minería, y no hizo gran cosa por el Teatro, si bien 110 lo vió tampoco Lozano encontró inconvenientes y gravosas estas condiciones, y,
con indiferencia. Para captarse su voluntad, el Asentista y la com- desentendiéndose de la Antonia, contrató á Josefa González con mil
pañía dispusieron en 22 de Mayo de 1788, y para celebrar los días del ochocientos pesos, sueldo de primera, y á su hermana Bárbara como
Virrey una solemnísima función que dió principio con una Loa feli- segunda. En cuanto la Antonia lo supo ocurrió al Virrey D. Antonio
citando á S. E. Esa Loa, la nueva tragedia " L a Elmira," y un en- Flores, pidiéndole que Lozano 110 la excluyese, y como la bella y re-
tremés segunda parte de Los Abates locos, " f u e r o n dispuestos, di- voltosa actriz gaditana tenía buenos apoyos é influencias, pasado el
" ce La Gaceta, en obsequio del Virrey, por D. Juan Pisón y Vargas, ocurso al Asesor Valenzuela, éste opinó porque se contratase á la
" c u y o ingenio es bien conocido por otras piezas que ha publicado en San Martín y que la Habanera y su hermana, siguiesen en los mis-
" E u r o p a , y desde luego llenó con las presentes la espectación del nu- mos términos que en el año anterior habían estado, y el Virrey acordó
m e r o s o concurso que las presenció, puesto que el Administrador al margen como parece al Asesor. Así se les notificó ánodos los inte-
" d e l Coliseo se vió en la precisión de repetirlas el siguiente Domiu- resados, el día 4 de Abril.
" g o , para complacer á los muchos que quedaron sin verlas aquella
Al siguiente, Bárbara González expuso debidamente y en forma,
"noche."
" que hallándose bastante enferma y resuelta por esta causa á dejar
Con más ó menos irregularidad por razón de lutos, novenarios y una el Teatro y quitarse para siempre de ser cómica, destino á que su in-
que otra causa de entorpecimiento, continuáronse dando en las sema- feliz suerte la había conducido, muy contrario á su genio, índole y
nas sin fiestas cuatro comedias ordinarias y una supernumeraria los nacimiento, estaba determinada á no seguir en él, pues el ejercicio
domingos, lunes, martes, jueves y viernes y 110 los miércoles y sábados la conduciría precisamente al sepulcro, con perjuicio suyo y de sus
por ser aquel día de correo y el segundo muy ocupado para la gente cuatro hijos, que siendo todos pequeños, no tenían más amparo que
el suyo. Exponía también que á pesar de su repugnancia, había ce-
gase una indemnización que Lozano hubo de transar en doscientos pe-
dido á las súplicas de Eozano para continuar en el Teatro, seducida
sos, de los cuales la interesada dió recibo en 10 de Diciembre del cita-
por la oferta del sueldo de Primera Dama; pero desde el momento en
do 1789.
que el Decreto de 4 de Abril le quitaba ese sueldo para dárselo á la
Antonia, pedía y suplicaba se le permitiese dar por nula su contrata Desde el momento en que el gran Revilla Gigedo húbose hecho car-
y retirarse del dicho ejercicio de cómica que la aniquilaba y destruía go del Gobierno, diéronse pasos para mejorar el espectáculo cómico
de alma y cuerpo." que había vuelto á caer en suma postración, al grado de que uno de los
solicitantes á su arrendamiento decía en su ocurso: "Deseando que
Opinó el Asesor, que "si bien los términos modestos y persuasivos
la amena diversión del Coliseo sea agradable al público, y no sufra por
del ocurso de Bárbara González parecían convencer de su justicia, no
más tiempo la molestia é indisplicencia que notoriamente le ocasiona
dejaba por ello de haber motivo fundado para creer que fuere su pro-
el modo y término en que se está manejando en el día, tanto que los
ducción un efecto de sentimiento, paliado con el pretexto de mejorar
más de los espectadores concurren á ella por defecto de otra diversión
de vida. Pero que siendo ello un asunto de conciencia, opinaba por-
y se juntan en la casa de Comedias, 110 á gustar de éstas por lo mal
que se le concediese su separación, apercibiéndola con cinco años de
que las representan, sino más bien á conversar unos amigos con otros,
Recogidas en la Casa de esta Corte, si se verifica que en cualquiera
he formado el plan que me ha parecido más á propósito á establecer
de los pueblos de este Reino se la encicenlra representando, sea con
una diversión completa y agradable y lo presento con toda veneración
el papel 6 pretexto que fuere." El terrible Asesor continuaba dicien-
á V. E . para si mereciese su superior aprobación. "
do así: " Y para coadyuvar V. E . á que 110 se destruya ni aniquile
su alma como expone en su citado Escrito, mandará igualmente, sien- El firmante de esta solicitud lo fué D. Ramón Blasio, Subteniente
do de su superior aprobación, que el señor Juez de Providencia ó retirado de la Compañía de Granaderos del Regimiento de Infantería
cualquiera de los de esta Ciudad á quien toque el Cuartel donde ha- Española del Príncipe de Asturias, y Alcalde del Cuartel número 31,
bite la citada Bárbara, cuide m u y particularmente de la vida que ésta quien decía así: " Prometo llenar enteramente el gusto público, dando
guarde, tratos y comunicaciones que tenga, prohibiéndole las que una diversión completa que imite de algún modo la de los Teatros de
puedan ser sospechosas, y castigándole las que traigan algún escán- la Europa en cuanto posible sea, y para ello propongo mi plano, que
dalo si acaso hubiere alguna de éstas, dando cuenta de todo á V. E . es el siguiente:—Dar al público comedias de gusto y al propósito al
Ultimamente, se hará saber á la citada Bárbara que no pueda mudar- estado en que se halla el ramo de cómicos, y poner los mejores aun-
se á otra casa alguna ni salir de esta Ciudad para otro pueblo, sin pre- que estén ausentes; las comedias serán de Calderón y Moreto y los
via licencia del Superior Gobierno, apercibida con dos años de Reco- mejores autores; pondré los mejores bailarines, y los Domingos haré
gidas por cualquiera transgresión." Casi á la vez que esto aconseja- una comedia de todo gusto, con una tonadilla buena, unas seguidillas
ba el Asesor Valenzuela, disponía que Josefa González fuese puesta en el primer intermedio, y en el segundo una zarzuela ó saínete y un
ocho días en la cárcel si se obstinaba en no hacer-el papel que el Baile grande, bien entendido que variará la diversión para 110 dar lo
Asentista Eozano habiále repartido. mismo unas semanas que otras. Lunes, comedia de capa y espada, á
medida del gusto del país; una petipieza-, tonadilla en el primer inter-
Ambas hermanas dieron sus poderes á D. Francisco Antonio Bus- medio, y en el segundo saínete y seguidillas. Martes, ídem. Miércoles,
tamante y D. Mariano Pérez de Tagle, para que á su nombre agita- tres petipiezas, unatonadilla, dos seguidillas, dos saínetes y dos bailes
taran sus derechos contra el Asentista, obligándole á cumplirles el cortos. Jueves, comedia grande, tonadilla, seguidilla, baile bueno,
contrato hecho con ellas antes de que se le ordenase escriturar á la saínete y más seguidillas. Viernes, comedia decapa y espada, entre-
San Martín, ó darles un premio por el perjuicio que de 110 cumplírse- més bueno, seguidillas, saínete y más seguidillas. Sábado, una peti-
les se les haría. Por fortuna para ellas, en 19 de Octubre del mismo pieza, dos entremeses buenos, dos tonadillas, un saínete y dos bailes
año de 1789, D . J u a n Vicente de Giiemesy Pacheco, Conde de Revi- cortos.
lla Gigedo, recibió de su antecesor Flores el mando supremo, y el " Todos los cómicos saldrán bien vestidos y con la mayor decencia,
terrible Asesor Valenzuela dejó de conocer en este asunto. R^villa entrando y saliendo en su lugar, sin que se vean los desfiguros que
Gigedo, segundo Virrey de este nombre, se humanizó con las dos des- hasta el día se ven. Las tramoyas bien ejecutadas; los apuntadores
venturadas hermanas y ordenó que se le levantase á Bárbara la cua- que no se perciban; que todos sepan sus papeles; que la música sea
si proscripción fulminada por Valenzuela, dejándola en libertad para buena; que el alumbrado sea mejor que el que está, y que la voz no
retirarse del Teatro ó seguir en él, y mandó que á Josefa se le pa- se pierda tanto para que se oiga de todas partes.
" Y si se me ha de dejar el teatro por todo el quinquenio próximo, José Aldana: Tercero, José María Delgado: Cuarto, Francisco Del-
me comprometo á traer y hacer venir de Europa los cómicos y cómicas, gado: Viola, Mariano Flores: Otra, Gabriel Martínez: Bajo, Juan
cantores y cantoras que se pueda enganchar allí, como asimismo mú- Muñoz: Contrabajo, Rafael Domínguez: Primer Oboe, Luis Brosat:
sica, saínetes, seguidillas, comedias y demás cosas propias para el Primera Trompa, Nicolás Mora: Segunda, Manuel Correa: Primera
mejor cumplimiento y diversión, como también un compositor y maes- Flauta, Pablo Buisem: Segundos Maestros, Juan Ignacio Cabrera y
tros de teatro en todas facultades. Francisco Ceballos.
" Y en virtud de estar la casa del Teatro en una disposición fatal, D E B A I L E : Primera Bailarina, Teresa Marani: Otra, Juana su hija:

pues la mayor parte de los cuartos no tienen la vista correspondiente, Primer Bailarín, Gerónimo Marani: Otro, Juan su hijo: Otro, José
y que por más que se haga no se le puede dar tornavoz, el Hospital hará Sabella Morali: Otros, José María Morales, José Ibarra, José Joaquín
las reformas necesarias. Rivera: Bailarinas, Ana Zendejas, María Pacheco, Gertrudis Sánchez
" Siendo un país tan escaso en diversiones, y teniendo presente y María Antonia hija de Marani.
que los Señores y Señoras son muy aficionados á bailes, y que S E R V I C I O D E L T E A T R O : Administrador, Miguel Meneses: Carpin-

éstos no los tienen por las incomodidades que traen consigo, con el tero, Juan de Zúñiga: Peluquero, Rafael Gómez: Portero, Ignacio
Superior permiso podré correr el tablado hasta el Mosquete y hacer Vega: Mozo de Guarda-ropa, José Tenorio: Id. de Cuartos, Mariano
bailes en cualquier tiempo y también en Carnaval de Máscaras, al uso el largo: Id. de luces, José Lino Zúñiga: Guarda-Casa, José Dimas:
de Europa, para cuyo fin dispondré la casa en términos que no pueda Pintor, Francisco Bravo.
haber discordias, y con el mayor celo prometo evitar picardías en los ' ' N O T A S . Al Peluquero se le paga su honorario al respecto de
escondrijos. Asimismo disponer tengan refrescos y cenas con unos doce reales cada baile. Anteriormente se pagaba por cada individuo;
precios cómodos.—México, 18 de Enero de 1790.—Firmado, Ra- ahora se ha arreglado como queda dicho, para que sirva á la Compa-
món Blasio. " ñía de Bailarines.
Este quizás muy extraño Memorial no dió resultado á su autor, en " M a r a n i , s u familia y Morali no tienen salario, porque siendo el
primer lugar, por haber pedido que se le eximiese de la fianza que primero en quien se traspasó el Teatro, deben ser suyas las utilidades
exigía el Hospital, y en segundo, porque parecieron más prácticas y ó pérdidas que resulten, y componerse con los demás individuos que
formales las proposiciones de Gerónimo Marani, en cuyo favor cedió 110 tienen asignación.
D. Manuel Lozano todos sus derechos, quedando por asentista y di- " La Compañía del Teatro excede en la presente temporada á la úl-
rector del Coliseo para la temporada de Pascua de Resurrección de tima anterior en veinte individuos; dos de representado, dos de can-
1790. tado, dos de música, doce de baile y dos de servicio, teniendo un to-
La Compañía quedó formada así: D E R E P R E S E N T A D O : Primera tal de sesenta en 1790, cuando sólo fué de cuarenta en 1789.
Dama, Antonia de San Martín: Segunda dama, Gertrudis Fernández " A n t e s se hacían bailes, pero sólo en los días grandes, y ahora se
Solís: Primera graciosa y Sobresalienta, Josefa González: Segunda repiten lo menos dos veces cada semana, con cuyo fin hay Compañía
graciosa, Teresa de Acosta: Quinta Dama, sirviendo también de Can- formal de esta clase.
tarilla, Ana Espíndola: Primer Galán, Justo Guevara: Segundo, Mi- " Los gastos son: Salarios de la Compañía, veinticuatro mil nove-
guel Zendejas: Tercero, Nicolás Jaime: Cuarto, Miguel Meneses ( el cientos veintiséis pesos: Arrendamiento del Teatro, ocho mil dos-
Chico')-. Quinto, José María Viveros: Sexto, Miguel Ayala: Séptimo cientos veinticinco pesos: Id. de la Escoleta, doscientos ochenta y
y Vejete, Mariano Rosuela: Octavo, y Encargado del Guarda-ropa, ocho pesos: Porteros y cobradores, mil cuatrocientos veinticinco pe-
José Francisco Morales: Primer Barba, José Domingo Rosales: Se- sos: Alumbrado, á cinco pesos diarios, mil doscientos veinticinco
gundo, José Antonio Zorrilla: Primer Gracioso, Juan Moreno: Segun- pesos: Comedias sepernumerarias, setecientos ochenta y seis pesos:
do y sainetero, José Fragoso: Primer Apuntador, Francisco Inzau- Gastos menudos de la Papeleta diaria, cuatro mil cuatrocientos no-
rraga: Otro, Francisco Javier Martiarena: Otro, Miguel Meneses (el venta y siete pesos: Total de gastos, cuarenta y 1111 mil trescientos se-
Grande.) tenta y dos pesos.''
DE CANTADO: Primera Cantarina, Felipa Mercado: Segunda, Ma- H e aquí, ahora, cómo era juzgada la Compañía en un papel manus-
ría Martínez: Tercera, Micaela Méndez: Primer Sainetero, Sebastián crito que su autor intituló: "Querella contra el estado del Coliseo,
Guzmán: Segundo, Juan Puerto: Tercero, Mariano Arízar. representada la acción popular por un Hermano de la Cofradía del
DE MÚSICA: Primer violín, Manuel Delgado: Segundo y Maestro, Recato."
" Si el Derecho popular
con que puedo presentarme Agrégase á su desgracia
da derecho de quejarme para dar más al través
sin decretar no ha lugar, la figura que la ves
nadie podrá fulminar de una pandorga sin cola,
que vulnero la justicia, una albóndiga, una bola,
que produzco con malicia, un tonel que anda en dos pies.
que no digo la verdad, Por cualquiera verso trepa
que hablo con temeridad , la gentil Dama segunda,
y demando una injusticia. y en no medirlo se funda
'' Un mes há que está burlado la gracia de nuestra Pepa:
el público que hace forma, acciona como que increpa,
y el infeliz se conforma y todo afecto revoca,
con haberse querellado; hace como que provoca,
mas ya desesperanzado, y cuando quiere ostentar,
desesperado el deseo, lleva para pronunciar
cuando juguete le veo de estopa llena la boca.
de la mofa y la irrisión, " V u e l v o al Güero á definir:
quiere en esta petición gran traza de facistol,
quejarse del Coliseo. poca luz, mucho farol
'' Por fuerza quieren que guste que nunca podrá lucir:
del Güero los aullidos, no escucha para decir,
de Nicolás los berridos, acciona siempre á puñadas,
y de Tules el embuste: ajusta el verso á patadas
y aunque á la vista no ajuste y lucen sus perfecciones
su infelice, tibia llama, sólo en Las cuatro Naciones,
quiere, quien así lo trama, y escenas afrancesadas.
con novedad bien extraña, '' Si Nicolás se fundiera
que represente una araña quizás consiguiese, acaso,
papel de primera Dama. que en su boca cualquier paso
' 1 ¿En qué pensamiento impropio no fuese como escalera:
cupo hacer Sobresaliente mas porque gracia tuviera
un pigmeo á quien la gente la excita en gritos atroces,
observa por microscopio ? y con sus versos veloces,
El más largo telescopio con destemple y menos tino,
no distingue su figura ni acciona, ni dice fino,
y sólo por conjetura y sólo sabe dar voces.
de aquellas dos charreteras " Zendejas, que es lo mejor,
tan extrañas y primeras, y lo llega á confesar
se le infiere la estatura. sin que lo pueda negar
" Por graciosa quien sin gracia el más necio espectador,
desde su natal salió, irá de mal en peor
el buen gusto la eligió porque estímulo no tiene
porque en errar no se sacia. ni sobresalir previene,
porque cuando más consiga
R. A. T.-T. I.—U
al compositor Juan Rana
puede ser que se le diga
le diera de oiría mollina,
que en las tablas no conviene.
con cualquiera chilindrina
'' Rosales se va secando
vieja y de antigua invención,
de ver la esterilidad
A cumple con la obligación
de tanta bestialidad
de cantar en Tonadilla
en el Teatro pastando:
á modo de seguidilla
suele, sí, de cuando en cuando
alguna lamentación.
estar torpe en su papel,
pero finalmente, él '' Aquel hombre de cartón
desempeña en sus afectos con los ojos de empachado,
los infinitos defectos con traza de garrotado,
de su compañía infiel. y sin estilos de Anfión,
pone toda su atención
'' Moreno es un presuntuoso
en el estilo pomposo
gracioso de patarata,
de Majo muy relumbroso,
que sólo de saber trata
y con esta patarata
tejer paños de rebozo:
se nos da en jarra de plata
él hace un fatal destrozo
la peor agua de pozo.
con que á su papel da fin;
hace muecas de Arlequín " A fe que se me olvidaba
y en desacato cruel, • hablar de la Carpintera;
Los Amantes de Teruel canta bien, y más luciera,
agracia con el bacín. pero tiene algo de pava:
" Los Meneses buenas pescas f mas por ella se pasaba
son, y serán padre é hijo: á ésta; pasando á la Gata,
que desertaron, colijo, también es su voz muy grata,
de algunas sombras chinescas: música de profesión,
para hacer cosas burlescas de buena disposición,
es figura de ajedrez, mas de vista muy ingrata.
y si hace locos tal vez " E l vejete . . . ¡qué animal
es su numen enfandoso, y el Barba segundo, infiero
tan neciamente gracioso >j * que es algo más que cabrero
como fué El tiesto de Inés. y de voz irracional.
" Y la otra pobre infeliz La comparsa es bien igual
que hace segunda graciosa al resto de compañía,
con el grado de mocosa, porque no se encontraría
tiene honores de lombriz; si con candil los buscaran,
cauta con tanto desliz ni mas léperos se hallaran
que 110 es fácil concebir en la mejor pulquería.
si entona para aburrir, " D i r á n , como si lo oyera,
pues con términos ingratos, quién me mete á criticar
es su estilo como gatos y me pone á censurar
que están á medio morir. como si de ello entendiera.
" La estética cantarína Mas si el que dice supiera
cuya voz por cerbatana saber lo que no entendió
conociera lo que yo, " D i g a el Juez lo que quisiere,
motroco, que aunque se tapa, y al conjuez le dé la gana,
bajo de mi pobre capa que yo á la pata la llana
buen bebedor se encubrió. diré lo que verdad fuere.
'' La malicia sospechosa Y si acaso se sintiere
que oculta su ceremonia, alguno, que 110 lo creo,
que soy parcial de la Antonia sígame causa por reo,
inferirá venenosa; sentenciando con destreza
y de sátira injuriosa destinarme á la Profesa
tratará todo mi estilo. por no ver el Coliseo.
Pero de la audacia el filo " Me dirán que sin deslices,
nunca me podrá cortar recatando mis horrores,
lo que n o puede sacar traté de buscar Actores
por la hebra de su hilo. y solicitar Actrices.
" D i r é si se me pregunta, Pero me da en las narices
que la posesión teatral que si digo lo que infiero
tiene Antonia bien cabal, me tendrán por un grosero:
proporcionalmente junta. y yo, para más no errar,
Versos al caso, que apunta, diré que pueden cerrar
tiene afectos con finura, y ahorrarnos nuestro dinero."
sabe decir con mesura,
acciona regularmente,
el estilo es bien decente,
y admirable su locura.
'' Si acaso algún calzonudo, CAPI! J L O IX
que con damas no me meto,
saca la cara indiscreto
si acaso sacarla pudo,
traiga consigo el escudo 1790
que labra la ingenuidad,
y armado de integridad Con el fin de que en los espectáculos del Coliseo, hubiese el ma-
destierre la adulación, yor decoro posible por la buena elección de las obras que se repre-
y verá la conclusión sentasen, el Conde de Revilla Gigedohizo en la persona de D. Cosme
que le hace la verdad. de Mier y Trespalacios, del Consejo de Su Majestad y su Oidor en
" N o me mezclen con los Jueces, la Real Audiencia, especial nombramiento para Juez del Teatro de
ni enreden con Asentista, Comedias, y á la vez designó por su ilustración, luces y experiencia,
porque ni soy embrollista al Padre D. Ramón Fernández del Rincón, para censor de las pie-
ni ejerzo yo tales veces. zas, que debían serle presentadas para su examen, un mes antes de
Si por saberlo pereces, ser puestas en escena.
sabe que soy hombre honrado, Procurando vengo ser lo más breve posible en este mi relato, que
y que soy Apoderado mucho podría extender si hubiere de dar salida al cúmulo de mis
que cumpliendo con mi parte,
apuntes y documentos; mas, habrá de permitírseme aquí dar com-
con estilo, modo y arte,
pleta razón de cómo se ejercía en la Nueva España esa previa censu-
me tengo por presentado.
ra, insertando algunos de los más notables juicios producidos por el
conociera lo que yo, " D i g a el Juez lo que quisiere,
motroco, que aunque se tapa, y al conjuez le dé la gana,
bajo de mi pobre capa que yo á la pata la llana
buen bebedor se encubrió. diré lo que verdad fuere.
'' La malicia sospechosa Y si acaso se sintiere
que oculta su ceremonia, alguno, que 110 lo creo,
que soy parcial de la Antonia sígame causa por reo,
inferirá venenosa; sentenciando con destreza
y de sátira injuriosa destinarme á la Profesa
tratará todo mi estilo. por no ver el Coliseo.
Pero de la audacia el filo " Me dirán que sin deslices,
nunca me podrá cortar recatando mis horrores,
lo que n o puede sacar traté de buscar Actores
por la hebra de su hilo. y solicitar Actrices.
" D i r é si se me pregunta, Pero me da en las narices
que la posesión teatral que si digo lo que infiero
tiene Antonia bien cabal, me tendrán por un grosero:
proporcionalmente junta. y yo, para más no errar,
Versos al caso, que apunta, diré que pueden cerrar
tiene afectos con finura, y ahorrarnos nuestro dinero."
sabe decir con mesura,
acciona regularmente,
el estilo es bien decente,
y admirable su locura.
'' Si acaso algún calzonudo, CAPI! J L O IX
que con damas no me meto,
saca la cara indiscreto
si acaso sacarla pudo,
traiga consigo el escudo 1790
que labra la ingenuidad,
y armado de integridad Con el fin de que en los espectáculos del Coliseo, hubiese el ma-
destierre la adulación, yor decoro posible por la buena elección de las obras que se repre-
y verá la conclusión sentasen, el Conde de Revilla Gigedohizo en la persona de D. Cosme
que le hace la verdad. de Mier y Trespalacios, del Consejo de Su Majestad y su Oidor en
" N o me mezclen con los Jueces, la Real Audiencia, especial nombramiento para Juez del Teatro de
ni enreden con Asentista, Comedias, y á la vez designó por su ilustración, luces y experiencia,
porque ni soy embrollista al Padre D. Ramón Fernández del Rincón, para censor de las pie-
ni ejerzo yo tales veces. zas, que debían serle presentadas para su examen, un mes antes de
Si por saberlo pereces, ser puestas en escena.
sabe que soy hombre honrado, Procurando vengo ser lo más breve posible en este mi relato, que
y que soy Apoderado mucho podría extender si hubiere de dar salida al cúmulo de mis
que cumpliendo con mi parte,
apuntes y documentos; mas, habrá de permitírseme aquí dar com-
con estilo, modo y arte,
pleta razón de cómo se ejercía en la Nueva España esa previa censu-
me tengo por presentado.
ra, insertando algunos de los más notables juicios producidos por el
dicho Padre D. Ramón Fernández del Rincón en el año de 1790. H e
personajes, duró un día ó poco menos, ya se hacía verosímil y se ve-
aquí varios de ellos:
rificaba la unidad de tiempo. Hay otros yerros más chocantes y más
" La comedia intitulada El más honrado más loco, que manuscrita
irremediables. El primero es la insolencia con que la criada Luisa
se me ha traído para su revisión, es un fárrago monstruoso en que se
trata á su Amo D. Lucas, cargándolo de improperios y dicharachos
falta á todas las reglas del Arte. En la primera jornada se ven dos
los más injuriosos, y, á consecuencia, los más repugnantes á una bue-
acciones bien considerables por su extensión, de las cuales una pasa
na razón, pues 110 se puede concebir que haya Amo tan flemático
en Nápoles y otra en el Reino de Aragón. En la segunda aparece el
que sufra sin alteración un nublado de baldones, y criada tan im-
personaje principal que habiendo estado en la primera en Nápoles,
prudente que se atreva á proferirlos sin motivo personal, y más cuan-
vuelve después de 1111 viaje de mar y de una larga campaña, áver lo
do, como ella dice, espera que D. Lucas le gratifique sus servicios con
que pasa en su casa; y aquí también se introduce un largo coloquio
un cuantioso legado.—El segundo es el grosero artificio con que el
entre dos graciosos, el más insípido é inconducente que se puede ima-
criado Crispín intenta que D. Lucas le tenga por su sobrino, vistién-
ginar. En la tercera, ya no sé lo que se dice, porque falta la pacien-
dose para esto de mujer, pues por más tocas y faldas que se pusiera,
cia para leerla, y porque basta haber registrado las dos anteriores,
la voz, las barbas, puesto que se figura hombre provecto y viudo, lo
para conocer que toda la pieza es un agregado de inepcias y boberías
abultado de los miembros y lo tosco de las facciones, habían de ha-
indignas de la atención de cualquiera hombre que haya uso de razón.
cer traición al disfraz y descubrir el embuste, 110 digo á D. Lucas que
. cierto que en las producciones de Calderón, Moreto, Solís, Can-
lo veía en pleno día, sino á u n ciego con sólo que lo oyera y palpa-
damo y demás poetas cómicos acreditados, y principalmente en las
ra.—El tercero es el otro embeleco, con que el mismo Crispín quiere
Tragedias y Comedias Heroicas, se ven violadas las reglas de la uni-
engañar á los Escribanos ante quienes otorga el testamento. ¿Cómo
dad y se experimentan otras irregularidades; pero la fluidez y na-
es posible que unos Notarios de Madrid, al oir la voz entera de un
turalidad del metro, la hermosura de los pensamientos, la gravedad
hombre sano, se persuadieran que hablaba un viejo caduco, enfer-
de muchas sentencias oportunas, el feliz encadenamiento de algunos
mo, y próximo á morir? ¿Y cómo es posible que teniendo bastante
lances y otros varios pormenores, hacen tolerables los demás defec-
luz para escribir, no la tuvieran para ver que el testador que se de-
tos y aun los esconden á los ojos de los poco inteligentes. Pero en la
cía D. Lucas, era el mismo criado que había ido á llamarlos? Seme-
pieza en cuestión, nada hay que no choque y que no ofenda al sen-
jantes farsas sólo pueden pasar en los entremeses, en que el empeño
tido común, porque á más de que, como va dicho, no se observan las
de hacer reír, lleva la ridiculez hasta el exceso, pero no son tolera-
leyes esenciales del Drama, la versificación es forzada, los conceptos
bles en la comedia, que, por su esencia, es una imitación de las ac-
son viles y chavacanos, las expresiones vagas y algunas impías é irre-
ciones humanas.— Lo cuarto es la discrepancia que se advierte en-
ligiosas, las bufonadas insulsas y groseras, y todo ello un cúmulo de
tre el testamento y su copia: el original se dictó en verso y el testi-
desatinos. Por lo cual soy de sentir que Vuestra Señoría debe man-
monio salió en prosa, y prosa m u y mal forjada, con lo que se faltó á
dar que la dicha comedia intitulada El más honrado ?nás loco, sea para
la constancia que según el arte debe haber en las palabras, del mismo
siempre proscrita y desterrada del Teatro, y que en consecuencia se re-
modo que en las costumbres. — Lo quinto es la primera escena de
coja del Asentista y se rompa.— México, Abril i o d e 1790.—Eincón."
la jornada segunda, en que Lucía refiere á Crispín el casamiento de
No salió mejor librada la que fué objeto del siguiente parecer: D. Lucas, la determinación que tiene de hacer testamento, el here-
"Siendo la intención del Exmo. Sr. Virrey, el que en el Teatro de dero que quiere instituir, y los legados que ha de dejar á sus dos so-
esta ciudad se representen piezas dignas de la atención de un con- brinos, todo lo cual ha pasado ya en la primera jornada, y con su
curso civilizado, en que hay muchos individuos que, por su fina edu- repetición se da á los espectadores la molestia de que oigan dos veces
cación y por un discreto uso del mundo, saben juzgar rectamente de una misma cosa, faltando en esto á uno de los más importantes pre-
los espectáculos que se les ofrecen, no me parece conveniente que se ceptos.—El sexto es la introducción del Boticario, en la segunda
ejecute la comedia intitulada, Astucias por heredar un sobrino á un jornada. Este es un personaje totalmente ocioso, porque 110 sirve pa-
Tío, por varios defectos de que adolece. No es el mayor la inverosi- ra entablar la acción ni para conducirla y terminarla, y sólo compa-
militud de que los sucesos de la acción pasaron en el espacio de dos rece á invectivar á D. Lucas, á declamar contra los médicos y á ha-
horas y media, cuando en este término apenas se pueden leer pasan- blar palabras asquerosas; y así, este actor es para la comedia lo que
do la vista rápidamente. Este, como digo, no es defecto tan grande un parche de la botica para un cuerpo humano, que aunque lo abulta,
que 110 se pueda remediar, pues con poner que k> actuado entre los lo deforma y afea. —El séptimo es el embolismo y confusión de lu-
gares que se observa en la tercera jornada. Al fin de la tercera esce- una divertida Escuela de virtudes privadas y sociales, á lo menos no
na dice D. Pedro que va á la casa de D? Teresa, á ocultar unos va- se deben ofrecer al Público aquellas piezas monstruosas que sin me-
lores que ha extraído de entre los papeles de su Tío, y retirándose jorar las costumbres, sólo sirven de estragar el gusto y hacer el abu-
deja á los dos criados hablando entre sí: éstos también se retiran y so más dominante. Según esta máxima que á mí me parece que debe
comienza la escena cuarta, en que salen D. Pedro, D? Teresa y su seguirse en la necesidad en que nos hallamos, he registrado las co-
hija, tratando ya de la ocultación de los valores, con lo que se con- medias contenidas en la lista de la vuelta, y hallo que debe deste-
vence que los tres están en la casa de I3!.1 Teresa, á donde D. Pedro rrarse desde ahora y para siempre, la intitulada Lucinda y Velardo:
dijo que iba á diligenciar este negocio; permaneciendo aún en el si- éste es un historión fuera de todas las reglas, en que no se reconoce
tio, sigue la escena quinta, apareciendo Crispín y diciendo que lle- ni disposición, ni verosimilitud, ni metro, ni el menor agrado. En la
ga á l a sala D. Lucas, quien de facto se presenta y continúa en el primera Jornada aparecen en España unos moros expugnando á Valen-
puesto hasta el fin de la pieza. Aquí salta la reflexión, de que si la sala cia, y en la misma jornada se ven de vuelta en Constantinopla, pre-
a que, según el aviso de Crispín, llega D. Lucas, es en la casa de D? sentando al Gran Señor unos cautivos. E n la segunda se presenta la
Teresa, se comete una inverosimilitud de marca, porque es increíble Princesa del Imperio Otomano soñando y viendo visiones, como si
que un viejo moribundo que acaba de padecer un profundo paroxis- fuera Profetisa. En la tercera, esta misma y su Amante, que hace de
mo, pueda salir á la calle y andar alguna distancia: y si es la casa cathequista, padecen martirio por la Fe, y bajan los ángeles con pal-
de D. Lucas ¿cómo estaban allí D? Teresa y su hija al tiempo de sa- mas y coronas á aplaudir su triunfo, por cuyo capítulo es también
lir Crispín á darle el aviso, cuando no hay algún antecedente por digna de repelerse, por ser contra la orden de Su Majestad, que pro-
donde inferir que estas Actrices habían vuelto á ella, cuando las dos hibe la representación de materias sagradas como es el Martirio.—
y D.^ Pedro hablaban de la ocultación de los valores, cosa que según En la misma turquesa está vaciada la comedia de Los esclavos de su
el mismo D. Pedro se había de hacer en la casa de D? Teresa y no esclava; aquí también hay apariciones del Cielo, conversión de Mora,
en la de su Tío, de la cual se salió para este efecto? Este es un em- un muerto que viene del otro mundo á libertar á unos prisioneros,
brollo confusísimo que echaría á perder la composición mejor traba- y otras cosas de este jaez. Y lo más admirable es que la primera Jor-
jada. Todos estos defectos son m u y visibles, y como por otro lado nada comienza en Argel y sigue en España; la segunda pasa en Es-
no se encuentren algunos primores, pues en la comedia no se observa paña, y la tercera, parte en Argel y parte en España, y si hubiera
ni pureza de lenguaje, ni dulzura de metro, ni brillantez de concep- cuarta Jornada, el poeta la hubiera hecho pasar en el Cayro, en Ton-
tos, ni oportunidad en su acción, ni otro mérito recomendable soy quín, ó en otro país más lejano.—Aunque la comedia Lograr el ma-
de sentir que V. S. debe negar la licencia para que se represente la yor imperio por un feliz desengaño, acepta entre sus Actores á Santa
comedia Astucias para heredar un sobrino á un Tío, y mandar que se Elena, y en la tercera jornada ó acto, como le llama el poeta, hay una
devuelva a su dueño, para que si quiere la corrija y enmiende " disertación sobre la Inmaculada Concepción de la Santísima Virgen,
El acuerdo del Juez de Teatros, recaído sobre esta censura, dice- y se tocan otros puntos de Religión, sin embargo, me parece que
Hágase saber al Empresario reforme por sí ó por el Autor de esta puede permitirse su representación, según el estado en que la han
pieza, los defectos é impropiedades notadas, y verificado esto, trái- dejado el Apuntador ó el Empresario, señalando con unas líneas mar-
gase nuevamente para deliberar de su representación según con- ginales todo lo que se debe suprimir, pues con esta limitación es muy
venga." ° poco lo que le queda de sagrado, y, por otro lado, Santa Elena sólo
interviene como una matrona piadosa y respetable.—La tragicomedia
Para representarse en Mayo, señaláronse en la lista que se remitió Troya abrasada, aunque no contiene cosa sagrada, sí contiene el gran
al censor, las siguientes comedias: Majencia y Constantino, No siem- desatino de querer reducir al tiempo que debe durar una acción tea-
pre lo peor es cierto, No hay contra un padre razón, El Villano del Da- tral, una guerra que duró diez años, y no es razón que se entretenga
nubio Los Aspides de CleoPatra, El mayor monstruo los celos, La escla- al público con semejantes boberías.—Por lo cual soy de sentir que
va del Negro Ponto, Troya abrasada, La Andrómaca, El befen sor de V. S. debe negar licencia para que se representen las referidas come-
su agravio La más constante mujer, Los esclavos de su esclava El dias de Lucinda, de los Esclavos y de Troya, y concederla para que
escondido y la tapada El Elector de Sajonia, El Católico Recaredí, La se representen las demás.
Ni te ti, Lucinda y Velardo, Fingir y amar,y El Conde de Saldaría
La censura del P Rincón fué la que sigue: " Y a que no tenemos " L a s comedias intituladas Las Roncalesas, El Dómine Lucas y
suficiente provision de buenas comedias, para convertir el Teatro en Un hijo de cuatro padres y de tres madres, con que el Asentista quiere
R. H. T.—T. I.—12
reemplazar en este Mayo las tres que se le repelieron, se pueden eje-
cutar con tal de que en la representación de la última, se observen Todos. Todos de gozo lloramos :
las testaduras y correcciones que le he puesto para honestar algunas viva nuestro Padre, viva!
expresiones poco decentes." Alonso. Mal estamos, Escribano. (Aparte.')
H e ahora el dictamen del Padre censor á la comedia Pueblo Feliz: El honor que os hace el Rey
" Los mejores caracteres, son el del Abate y el del Boticario santu- gozadlo por muchos años.
rrón, y también son los más propios de la comedia, cuyo objeto es Escribano. Yo os doy muchos parabienes.
imitar las acciones ridiculas de las personas de mediana condición, Benigtio. Si no os conociera, falsos. (Aparte.)
para corregirlas con la fisga: Ridendo castigat mores. En lo demás, Vuestra atención agradezco,
la pieza tiene muchas cosas buenas; sólo me parece que la acción pero sepa el vecindario
principal no está completa, porque consistiendo en el gobierno del que el Rey quiere que me quede
Corregidor, nos quedamos sin saber si este Magistrado consiguió la para castigar engaños.
prórroga de su Oficio, ó si pasó á servir su plaza de Oidor, y á con- Para que el Pueblo Feliz
secuencia nos quedamos con el deseo de saber si continuó la felici- concluya con este acto
dad del Pueblo, ó se acabó con la ida del Bienhechor.—Es calidad felizmente.
que el Boticario no salga con hábito exterior de Tercero, porque
aunque de él han abusado muchos picarones, siempre es traje de pe-
La pieza en cuestión debió ser escrita ó arreglada para felicitar al
nitencia, por lo cual y porque no es necesario para expresar el carác-
Virrey, en su Santo ó por otro motivo, pues la acotación continúa
ter del personaje, deberá éste salir con un vestido pardo y poco cu-
con que dirigiéndose el Actor al palco de S. E . dice Leandro:
rioso que demuestre su ánimo a v a r o — E n cuanto al Abate, no es-
crupulizo, porque el traje no es el que traza la Iglesia en sus cánones,
y se puede tener por un traje escolar, de que usan con bastante Y Vuecelencia
profanidad todos los señoritos de España, que se dedican á los estu- sírvase oír con agrado
dios, como lo demuestran las estampas que de allá nos vienen." este breve rasgo, que
humildes le consagramos.
E l juicio por el Censor formado, debió satisfacer el amor propio
La conducta, Señor, del Magistrado
del poeta, que se avino de buen grado á contentar la curiosidad del
que gobernó de un pueblo el corto suelo,
Padre Rincón, relativa á si el Corregidor siguió haciendo la felicidad
nunca es digna de entrar en paralelo
de sus gobernados, y en el expediente relativo consta el siguiente
con el celo que activo habéis mostrado.
aumento hecho á la pieza: " Todo lo que está entre las dos cruces y
Aquél tuvo por único cuidado
con las vírgulas al margen se omite, y en su lugar Florencio prosigue
ser de los labradores el consuelo,
leyendo:
mientras vos extendéis vuestro desvelo
"Resuelvo á todos los objetos del Estado.
en el empleo continuarlo, Aquél con buena influencia fué el Apolo
con los honores de Oidor, que hizo un terreno fértil y fecundo
por el tiempo de mi agrado, y vos ilumináis aqueste Polo
declarándolo acreedor Con la luz de un espíritu profundo:
á mayor merced, y aguardo aquél hizo feliz á un pueblo solo,
de su rectitud y celo y vos hacéis feliz al Nuevo Mundo.
que prosiga gobernando Benigno. Pues todos nuestra dicha celebremos
con el acierto que hasta ahora y á nuestro excelso Protector cantemos.
en su conducta ha mostrado."
¡ Qué es lo que aquí leo! Amigos,
el gusto que tengo es tanto Coro.
que proseguir no me deja. Tributemos aplausos
á nuestro Protector, etc.
A otra pieza, Leandro. 6 la Virtud perseguida, el Padre Rincón pu- E n la tercera jornada tachó asimismo,
so la siguiente censura: " Lo que encuentro que le falta á la pieza
es un interés sostenido, pues ni el empeño que manifiestan las mu-
Que yo no lo he querido
chachas para obtener el premio de sus labores, puede prestar al espec-
ver, porque siendo el Juez
tador bastante asunto para ello, ni la virtud perseguida de Eeandra
superior aquí, es preciso
ofrece escenas con los contrastes convenientes para excitar la compa-
ocupe el mismo lugar
sión necesaria á empeñar su deseo de verla premiada. Por otra par-
que si fuera Carlos Quinto,
te, está sembrada toda la pieza de expresiones dirigidas á vilipendiar
y entonces juzgaran que
á la Nobleza, y esto debe disgustar á los concurrentes de esa clase."
con el perdón les convido.
No era el cargo de Censor de Comedias tan llano y fácil que no pro- N

dujese de vez en cuando tal ó cual conflicto. Húbolo, y de importan- 1


Todo lo cual se reformó ' por estimar que con ello pudiera pare-
cia, con motivo de un Drama Heroico escrito y representado en Mé- cer impropio y mal sonante á los políticos oídos." Ahora, para de-
xico, según paso á decir tomando mis noticias del voluminoso expe- mostrar que 110 se tratan en la comedia hechos falsos, inciertos y
diente que en la Biblioteca Nacional ó de San Agustín existe. contrarios al carácter de la Nación, entra el Censor á relatar el ar-
En 13 de Septiembre de 1790, el Contador General de la Renta de gumento.
Tabacos D. Silvestre Díaz de la Vega, por encargo y ausencia del Pa- " Rendido México (1? parte), á impulsos de la sangrienta batalla
dre D. Ramón Fernández del Rincón, examinó y aprobó la represen- que sostuvieron gloriosamente los españoles, propuso Hernán Cor-
tación de la comedia intitulada México rebelado, con advertencia de tés, su General, á Guatimotzín, sucesor de Moctezuma, que que-
que en los carteles se la llamase México Segunda vez conquistado, y daría reconocido de sus vasallos, sin más novedad que lo de que
con las correcciones y anotaciones que estimó oportunas. En vista de con igualdad ó de común acuerdo, gobernaren el Imperio los dos.
ello, el Juez de Teatro D. Cosme de Mier y Trespalacios, concedió li- (Págs. 3, 8 y 9 de la copia.) Segunda parte: Asintió Guatimotzín con
cencia para la representación, que se verificó el 19 de Setiembre, condición de que no se le faltase al decoro y honores á la Emperatriz
con una entrada de trescientos cuarenta pesos, y una utilidad para el su esposa, y, avenido Cortés, fué rémora á la primera providencia
asentista, de cien pesos siete reales. Según parece, una buena parte del que iba á tomar sobre la entrada del agua dulce á México, de la Al-
público aplaudió con furor la comedia, con indecible disgusto de los berca de Chapultepec, impedida por la fracción de los Acueductos
españoles concurrentes. Señalada nuevamente para el 21, " f u é s u s - acaecida en la batalla, un inopinado accidente que sobrevino á la
p e n d i d a por aviso privado, por haberse propalado que en dicha co- Emperatriz. (Págs. 11 y 12.) Tercera parte: Divulgó en seguida Ju-
" media se representan hechos falsos, inciertos y contrarios al carác- lián, soldado español del ejército, que el General Cortés era cómpli-
t e r de la Nación." ce con el Emperador y el Señor de Tacuba en la ocultación, que su-
El Juez Mier dispuso que el Censor .Díaz de la Vega se justificase ponía, de los tesoros de estos dos, de cuya indecorosa calumnia no-
de los cargos que pudieran resultarle de no haber estudiado bien el ticioso Cortés, se vió obligado á convenir en la cuestión de tormento
asunto, y Díaz de la Vega produjo en 22 de Octubre un extenso in- en que le propusieron sus soldados pusiese á Guatimotzín y su pri-
forme que paso á extractar, sirviéndome siempre que pueda, de sus mo el Señor de Tacuba Nesehualcoyol. ( P á g s . 17, 18, 23, 24, 33 á
mismas palabras. 43, 46, 47 y 55.) Cuarta parte: Al acto de la ejecución los libertó
Comienza por demostrar que sí vió con atención la comedia, y se- Cortés á quien comunicó Guatimotzín, haber arrojado en un estanque
ñala las correcciones que estimó conveniente hacerle. En la primera de su palacio varias piezas de oro, y en la laguna sus armas; y ase-
jornada suprimió la expresión de rebelado en el título, cambiándola gurado Nesehualcoyol á Alvarado 110 tener oculto tesoro alguno, le
por la de Segunda vez conquistado: quitó la palabra absoluto mudán- prometió éste interponer su valimiento á fin de atraerle la benevo-
dola en como antes. En la segunda jornada suprimió estos versos: lencia de su General Cortés. (Págs. 56 á 65.) Quinta parte: Pasado
algún tiempo, supo Cortés que Guatimotzín había juntado todos los
principales de su ejército, los que proponiendo la triste situación de
Porque soy en
la monarquía mexicana por falta de mando independiente, convinie-
la jerarquía que advierto,
ron en dedicar el esfuerzo todo de sus tropas contra los españoles,
contra el idólatra torpe
asegurando el logro de la empresa en hallarse Cortés en estado de
y contra tu acto soberbio.
no esperar traición alguna; con lo que poniendo éste su tropa sobre lo e x a m i n e . " E l Padre Rincón acababa de regresar de un viaje á
las armas, mandó prender á Guatimotzín y Nesehualcoyol, y tomadas Querétaro.
sus declaraciones y puesto el proceso en estado, teniendo considera- Acordado lo último, en 24 de Octubre, por el Juez Mier, el dicho
ción del riesgo en que se hallaban las vidas de todos, y de perderse Padre Censor contestó lo que paso á extractar: " D o s son los puntos
lo conquistado si volvían á formar una nueva conjuración cogién- á que este incidente se reduce: á si los procedimientos del ilustre
dolos de sorpresa, firmó sentencia de horca contra los dos, y ejecu- Cortés contra Guatimotzín y su primo el Señor de Tacuba, que hacen
tada, amotinados los mexicanos presentaron batalla á los españoles, el fondo del drama, son constantes y ciertos, y á si son contra el ho-
en la que lograron éstos una completa victoria, quedando así Méxi- nor de la Nación española y también contra su carácter.—Las accio-
co pacificado segunda vez. ( P á g s . 77 á 79, 90 á 95 y 105 á 107.)" nes de Cortés que chocaron á los espectadores, fueron la tortura que
Según el Censor, la primera parte del argumento estaba justifica- mandó dar á aquellos, y la pena infamante de horca en que les quitó
da con la Historia de México, Población y Progresos de la América Sep- la vida para impedir la sublevación. Pero todo ello consta en las his-
tentrional, conocida por el nombre de Nueva España, Segunda parte torias de Indias, de Salazar, Bernal Díaz, López de Gomara, Anto-
su autor D. Ignacio de Salazary Olarte, que acababa de reimprimirse nio de Herrera y F r a y J u a n de Torquemada, y sólo puede creerlos
en 1786. Lo mismo sucedía en cuanto á la segunda, en la misma falsos el que sólo conozca la de D. Antonio de Solís, que acaba con
Historia, y otro tanto la cuarta y la quinta. Al efecto de probarlo la rendición de México.—El honor de una Nación no pende de la
transcribe Díaz de la Vega, los párrafos de Salazar conducentes, y conducta de algunos particulares, como dice el Abate N u i x ; y si
añade: E l autor ( d e la comedia), fué fiel, sin más diferencia que Cortés se equivocó en unas cosas, acertó en otras aun en provecho de
haber agregado algunas expresiones que moderasen el concepto de los Indios: a u n q u e los Héroes sean héroes, también son hombres, y
los procederes de los españoles." Cortés fué obligado por Alderete y los soldados, y 110 de su gusto.
Defiende después á éstos por lo de la codicia, asentando " q u e es Ese recaudador de la Real Hacienda y esos soldados plebeyos ¿com-
una injusticia evidente j u z g a r á los conquistadores de América, con ponían, acaso, la mayor y más noble porción de los individuos de la
el rigor del derecho de gentes que de presente usamos.'' Trae á cuen- monarquía ? ¿ Pues por qué se ha de imputar á todos su inhumanidad?
to las crueldades romanas en el Reino de Epiro, en Cartago y Co- Así pues, esto no desmerece á España.

ZTa I V - M a r i ° y á S Ü a y l 0 S r 0 b 0 S d e C a t i , i n a y l a s proscripcio- ' 'Lo de la horca sí es sólo de cuenta de Cortés, y Bernal Díaz lo califi-
nes del Triunvirato. Dice después que ni la Corte aprobó lo hecho ca de muerte muy injustamente dada: pero la falta de un individuo no
por los conquistadores, ni 1 0 encontró justo su población sensata, que puede recaer sobre España, m á x i m e cuando sus mismos compañeros
siempre fue inclinada á la piedad, ni puede ser responsable de lo he- la desaprobaron. Erró el gran Constantino, erró David, erró Salomón
cho, no por toda ella, sino por uno ó algunos de sus individuos, y y erraron otros muchos, y como ellos erró Cortés, y si con tales ejem-
asi ni la comedia contiene hechos contrarios al carácter de la Na- plos no h u b o desdoro para Cortés que tanto bueno hizo, menos pue-
a P y
° 1 a 611 d d k h ° ^ l 0 S h Í S t 0 r Í a d o r e s > P u e s nada en de causar desdoro á España. Pero todos esos crímenes son opuestos
resumen hay en ella que no esté casi á la letra en la Historia de Sa- al carácter nacional, que es la dulzura, como se demuestra en las de-
fensas de Zumárraga y de los primeros misioneros, cuyas voces llega-
Encontrando inconveniente el celo de la autoridad que había sus- ron á los Reyes haciéndoles legislar en favor de los Indios.—Estuvo,
pues, bien dada la aprobación de D. Silvestre Díaz de la Vega, que 110
cmela Z I T ^ ^ ~ observa pudo pensar que hubiese espectadores tan delicados que dieran por
que la Corte ha permitido la impresión y ejecución en sus Teatros

: méricas'como 5011 elAtahua,»a


agraviada á la Nación de lo que ella j a m á s ha hecho duelo, y que en
de dos dramas que contienen hechos acaecidos en el descubrimiento
c Z ^ T y CrüaJ
el vez de censurar la pieza en lo que peca, la culpasen sobre u n capítulo
en que se halla inocente.—Peores cosas se ven en la comedia El Va-
liente Justiciero,«de Moreto, en La Niña de Gómez Arias, de Calde-
Colon, que sin embargo no se impidieron representar á la vista del rón, y La Raquel, de García de la H u e r t a , y nadie acusa á España
Solio; y si en la Corte no ocurrieron embarazos para esas representa de los horrores que en ellas cometen los personajes, y nadie ha pro-
ciones, ¿ como me había yo de determinar en n i n g ú n caso á ponerlos hibido nunca su representación aunque sobrados motivos habría para
d e r t a T a q U r SG V e r Í f i C a S £ ° t r a Í g U a l r e S P e c t i v a - t e n i e n d o ' c i e n l
cierta de aquella ejecución?"
derechos del Empresario y enConcluye
justificación pidiendosuya,<se -que
siga enperm
respeto á bs
tiendo prohibirla. Ciertos crímenes como ellos, forman los asuntos de los
la representación, y q u e pase su informe al Padre Rincón pa dramas y el poeta con su fantasía los engrandece: en el México, Se-
gunda vez conquistado, su asunto cayó por desgracia en manos de un
tamen no le parecía bien al Juez, podía éste consultar á otra perso-
aficionado, que sin saber ni aun lo que es unidad de lugar, como se
na, pues la suya 110 estaba en disposición de reformar el de 20 de
le nota al fin de la tercera jornada, tejió un historión prolijo que en
Enero."
vez de excitar la compasión, que es el objeto de la tragedia, sublevó
Ignoro cómo concluyó este curioso asunto, pues el expediente de
contra sí la mollina y el enfado de los mirones; y éstos, ignorando
la Biblioteca no aparece terminado. Ahora bien: ¿quiénes fueron los
también las leyes del Teatro, no adivinaron la causa de su pesadum-
autores de estas comedias escritas en México? Por mi parte nada sé;
bre, y para desahogarla tomaron por pretexto el honor de la Nación.
pero quizás puedan averiguarlo los distinguidísimos D. José María
" E s a comedia es mala, pero si sólo se permitiesen buenas, ó ha- Vigil, D. José María de Agreda, D. Luis González Obregón y D. Je-
bría que cerrar los Teatros ó que estar repitiendo constantemente u n sús Galindo y Villa, á quienes gustoso dejo el trabajo de la investi-
corto mimero. Yo soy el primero que me alegraría de que hubiese gación y la gloria de resolver la incógnita. Me basta á mí la satisfac-
una suficiente colección de buenas composiciones dramáticas, que ción de ser el primero que haya hablado de dichos curiosos asuntos,
sirviese de frecuentes lecciones de honor, de regularidad, de senti- que en las páginas de mi libro ven, también por primera vez, la luz
mientos nobles, de grandeza de ánimo y de otras virtudes civiles, y de la publicidad.
al mismo tiempo aprendieran á discurrir con exactitud, con método
y con buen juicio. Me alegraría de que no se repitieran á cada ins-
tante esos amores tan vivos y tan patéticos, esos celos tan necios y
tan mal fundados, esos desafíos quijotunos, esas cuchilladas y pen-
dencias de que abundan nuestras comedias, que al mismo tiempo que CAPITULO X
corrompen el corazón pervierten el espíritu con la hinchazón del ver-
so, con lo afectado de las pinturas, con la desproporción de las hipér- *****
boles, con la inverosimilitud de los lances y con otros muchos defec-
tos que se encuentran á cada paso: pero, lo repito, habría que cerrar
los teatros.
Si de obras de alguna importancia escritas en México no me es po-
" En resumen: los hechos apuntados 110 son contra el honor de la sible dar más noticias que las muy breves ya puestas en anteriores
Nación, porque fueron acciones de particulares que ella jamás orde- capítulos, sí diré algo de una colección de loas y entremeses, y de
nó ni aprobó, y antes bien procuró remediar en el modo posible. Así, comedias de santos y pastorelas, que una casualidad trajo á mis manos.
pues, la aprobación puesta por D. Silvestre Díaz de la Vega, f u é Esa casualidad, no producirá, desgraciadamente, honra grande á las
justa, prudente y conforme al Reglamento de Teatros.—Enero 20 letras patrias, y quizás hubiérase perdido poco no sacando á luz la
de 1791.—Ramón Fernández del Rincón." colección; tan pobre así es el hallazgo: pero supla á lo bueno lo cu-
El Juez de Teatro, volvió al Padre Rincón su informe, haciéndole rioso. H é aquí una muestra.
observar que la Raquel había sido últimamente prohibida; que El
Príncipe Perfecto, de Eope, era peor que ella: que lo que en su infor-
me se leía acerca de que el Mosquete era muy dueño de silbar, pare- "LOA EN OBSEQUIO DE LA PURISIMA, que dirá un Indio
cía una chocarrería indigna del carácter del Censor, y que el México frutero, el que sacará un canasto en la cabeza con todo lo que se
Segunda vez Conquistado no sólo á los indoctos había causado pesa- expresa.
dumbre, sino al Mosquete, á la Luneta y á los Palcos, causando tal
indignación, que algunos dieron queja al Virrey. Que todo esto se le Miísica. E s María en su concepción
decía por si deseaba reformar su informe. un espejo cristalino:
El Padre Rincón acogió de mal talante la devolución y estas ad- en todo el poder divino
vertencias, y respondió que á él no le constaba la prohibición de la puso toda su atención.
Raquel al escribir su dictamen; que El Príncipe Perfecto no venía al El indio, gritando. Toman ustedes manzanas,
caso, pues él hablaba de lo que se representaba frecuentemente, y la granada, melón, zapote,
comedia de Lope no estaba en este caso; que el derecho del Mosque- sandía, perón, camote,
te á la silba, lo creía justo, y por su parte lo sostenía, y que si su dic- y unas buenas avellanas :
gunda vez conquistado, su asunto cayó por desgracia en manos de un
tamen no le parecía bien al Juez, podía éste consultar á otra perso-
aficionado, que sin saber ni aun lo que es unidad de lugar, como se
na, pues la suya 110 estaba en disposición de reformar el de 20 de
le nota al fin de la tercera jornada, tejió un historión prolijo que en
Enero."
vez de excitar la compasión, que es el objeto de la tragedia, sublevó
Ignoro cómo concluyó este curioso asunto, pues el expediente de
contra sí la mollina y el enfado de los mirones; y éstos, ignorando
la Biblioteca no aparece terminado. Ahora bien: ¿quiénes fueron los
también las leyes del Teatro, no adivinaron la causa de su pesadum-
autores de estas comedias escritas en México? Por mi parte nada sé;
bre, y para desahogarla tomaron por pretexto el honor de la Nación.
pero quizás puedan averiguarlo los distinguidísimos D. José María
" E s a comedia es mala, pero si sólo se permitiesen buenas, ó ha- Vigil, D. José María de Agreda, D. Luis González Obregón y D. Je-
bría que cerrar los Teatros ó que estar repitiendo constantemente u n sús Galindo y Villa, á quienes gustoso dejo el trabajo de la investi-
corto mimero. Yo soy el primero que me alegraría de que hubiese gación y la gloria de resolver la incógnita. Me basta á mí la satisfac-
una suficiente colección de buenas composiciones dramáticas, que ción de ser el primero que haya hablado de dichos curiosos asuntos,
sirviese de frecuentes lecciones de honor, de regularidad, de senti- que en las páginas de mi libro ven, también por primera vez, la luz
mientos nobles, de grandeza de ánimo y de otras virtudes civiles, y de la publicidad.
al mismo tiempo aprendieran á discurrir con exactitud, con método
y con buen juicio. Me alegraría de que no se repitieran á cada ins-
tante esos amores tan vivos y tan patéticos, esos celos tan necios y
tan mal fundados, esos desafíos quijotunos, esas cuchilladas y pen-
dencias de que abundan nuestras comedias, que al mismo tiempo que CAPITULO X
corrompen el corazón pervierten el espíritu con la hinchazón del ver-
so, con lo afectado de las pinturas, con la desproporción de las hipér- *****
boles, con la inverosimilitud de los lances y con otros muchos defec-
tos que se encuentran á cada paso: pero, lo repito, habría que cerrar
los teatros.
Si de obras de alguna importancia escritas en México no me es po-
" En resumen: los hechos apuntados 110 son contra el honor de la sible dar más noticias que las muy breves ya puestas en anteriores
Nación, porque fueron acciones de particulares que ella jamás orde- capítulos, sí diré algo de una colección de loas y entremeses, y de
nó ni aprobó, y antes bien procuró remediar en el modo posible. Así, comedias de santos y pastorelas, que una casualidad trajo á mis manos.
pues, la aprobación puesta por D. Silvestre Díaz de la Vega, f u é Esa casualidad, no producirá, desgraciadamente, honra grande á las
justa, prudente y conforme al Reglamento de Teatros.—Enero 20 letras patrias, y quizás hubiérase perdido poco no sacando á luz la
de 1791.—Ramón Fernández del Rincón." colección; tan pobre así es el hallazgo: pero supla á lo bueno lo cu-
El Juez de Teatro, volvió al Padre Rincón su informe, haciéndole rioso. H é aquí una muestra.
observar que la Raquel había sido últimamente prohibida; que El
Príncipe Perfecto, de Eope, era peor que ella: que lo que en su infor-
me se leía acerca de que el Mosquete era muy dueño de silbar, pare- "LOA EN OBSEQUIO DE LA PURISIMA, que dirá un Indio
cía una chocarrería indigna del carácter del Censor, y que el México frutero, el que sacará un canasto en la cabeza con todo lo que se
Segunda vez Conquistado no sólo á los indoctos había causado pesa- expresa.
dumbre, sino al Mosquete, á la Luneta y á los Palcos, causando tal
indignación, que algunos dieron queja al Virrey. Que todo esto se le Miísica. E s María en su concepción
decía por si deseaba reformar su informe. un espejo cristalino:
El Padre Rincón acogió de mal talante la devolución y estas ad- en todo el poder divino
vertencias, y respondió que á él no le constaba la prohibición de la puso toda su atención.
Raquel al escribir su dictamen; que El Príncipe Perfecto no venía al El indio, gritando. Toman ustedes manzanas,
caso, pues él hablaba de lo que se representaba frecuentemente, y la granada, melón, zapote,
comedia de Lope no estaba en este caso; que el derecho del Mosque- sandía, perón, camote,
te á la silba, lo creía justo, y por su parte lo sostenía, y que si su dic- y unas buenas avellanas :
plátano, naranjas, moras,
Viendo Dios que nos perdimos
ciruelas, peras y nueces,
porque la nuez salió vana,
jicama, cañas y reices,
de Eva, nos dió una avellana
con cacahuate y anonas,
conque la gracia adquirimos;
pera que ya está cocida,
de uvas nos dió los racimos
uvas por libras ó arrobas ?. . . .
y de dulzura nos carga:
¡ Válgame el Virgen! ¿ 110 lo hay no es de la cáscara amarga
quien me lo compre, señores ? el fruto de esta criatura,
(Viendo á la Santísima Virgen pues su carne es dulce y pura
que estará en sus andas). que de la culpa descarga.
Osté que viene tan alta
El melón está calado
con sos cuatro cargadores,
y ya su fragancia exhala;
cómpremelo osté mi fruta;
también la sandía calada
mire osté que estoy moy pro ve.
explica el Verbo encarnado.
Desde el alba ando vendiendo
El capulín sigue ahora,
y no hallo quien me lo compre
que es fruta que el ser recibe
ni al medio día ni á la tarde,
de Dios, que en la gracia vive
y ya lo llega la noche:
á vista de esta Señora,
desde el principio hasta el fin
que en lo más pequeño mora
del mondo llegan mis voces,
y con Dios siempre reside.
y siendo tan natorales
. . •.. ¿ Qué tal va quedando el loya ?
se hace sordo quien las oye.
¿ les cuadra á los mormorones ?
. . . . Pero . . . . ¿ qué es esto que miro ?
¿ lo habla bien los natorales,
T o majestad me perdone!
lo mesmo que el españoles ?
Si to eres paraíso ameno,
¿cómo quiero que me compres, Pues agora lo verán
siendo vos la tierna Virgen todos esos habladores,
que da los frutos mexores, que debajo de un mal capa
y toda es fruta pintada los hay güenos bebedores.
la que en mí se reconoce ? Vámonos ya poco á poco
. . . . Aparto mi fruta á un lado, ó nos iremos al trote,
suspendan las atenciones, porque el pera y la cirgüela
y sea la fruta el asunto, me dejó como un camote.
Señora, de vuestros loores. Pero espérese un poquito
que un verso quiero lo trove
Pena fiera el mondo espera
el mi rústico cacumen :
porque con prevención vana
sospendan sos atenciones
por un yerro una manzana
que aqueste dulce armonía
vendió la primer frutera:
ya va á declarar sus voces.
y si bien se considera,
Música. Esta que ves es María,
fué yerro de valor tal,
clara luz, divina estrella;
que hizo al hombre tanto mal
si el que la hizo nació de ella,
de una manzana un bocado,
contempla qué tal la haria.
que á uno y á otro le ha quitado
al Universo el caudal. Indio. E s del Padre Eterno pira,
es de su trono columna,
es inmaculada y pura, que en todo le des auxilio
y es espejo en quien se mira: á nuestro párroco y cura,
es manantial que respira pues con su ejemplo asegura
su santidad : ¡ qué alegría ! buscando felicidad
es el sol y luz del día, á este pueblo en realidad
es la torre de David pues todo bien nos procura.
pues dijo el Señor así:
Y á nuestro señor Alcalde
Música. "esta que ves es María."
que domina aqueste pueblo,
Indio. E s de la gracia el maná,
por su celo muy constante
es fijo reclinatorio,
corónalo allá eu el cielo,
es divino consistorio
en unión del poeta autor
de la augusta Trinidad.
que con muy crecido anhelo
E s madre de la verdad,
os dedica aquesta loa
es en todo Virgen bella,
con amor muy verdadero,
fué á gusto del Padre en ella
y si acaso, Virgen pura,
que el Verbo había de encarnar,
merecen un corto premio,
y así se llegó á formar:
colócalos en t u Reino
Música. "clara luz, divina estrella!'
que es lo que mi amor procura.
Indio. E s Madre, es Hija, es Esposa,
Y en conclusión, todos d i g a n :
de tres personas iguales,
viva! viva! Maríapura/"
en divinidad cabales,
y en trina ciencia una sola.
Paréceme que mis lectores convendrán conmigo en que la tal loa
Del Padre Hija poderosa,
sólo á título de curiosidad merece haber sido por primera vez impre-
es del Hijo Madre bella,
sa en estas páginas.
es Esposa y es Doncella
del Espíritu, es verdad Sin duda era en esos tiempos muy de gusto del público ver á los
y aseguro en realidad: indios en escena chapurreando el castellano. En un entremés para las
Música. "si el que la hizo nació de ella." Posadas, representado en 1790, y que original poseo, figuran los si-
Indio. De la más realzada ciencia guientes personajes: Pascual, indio: Una moza: Un monigote: Juan de
la hizo Dios tan poderosa, la Cruz, indio: Candelaria, india: y Encarnación, india. H e aquí como
cándida azucena hermosa habla Pascual:
de la más alta eminencia. Alabado sea el Sior,
E s de tan sacra excelencia, que sea por siempre alabado.
de toda la gerarquía Téngalo ostied buena noche
la escogió con alegría con todo el gosto culmado.
haciéndola sin igual, Ya veo dirán sos merciedes,
sabia, maestra general: al diablo el indio borracho,
Música. " contempla qué tal la haría." que sin que nadie lo llame
en la mesa está parado.
Indio. Ya te lo dije el glosista, Mas el que así lo dijere
Sacra divina Señora. se le seque el espinazo.
Mi frotita se ha quedado Yo soy aquel buen Pascual
y voy á venderla agora. que ostied habrá oido mentado.
Y te dejo soplicado, H e sido Gobiernador,
Sacra .María Virgen pura, agora alcalde parado,
102

Este es el pora verdad Encarnación y su tía


como tres y dos son cuatro. Candelaria, y Juan Pascual
No soy indio carbuneró; su padre, y Juan de la Cruz.
lo soy algo españolado. Se reduce su venida
Por so lado de mi agüela á que Encamación se casa
soy noble, no hay que dodarlo. con Juan de la Cruz, y estilan
Por so lado de mi pagre estos tomar bendición
no tengo de que contarlo, de las personas que estiman.
porque lo era un buen persona, Aquí llega Encarnación.
pues luego luego lo ahurcaron. Encarnación. Cómo lo está ostied, Magrina,
Por so lado de mi magre , 0 maquí momachín, Señora.
el conceptu lo está claro Monigote. Habla la lengua castilla.
pues aunque era prieta, prieta, Juan de la Cruz. Yo lo soy maestro-capilla.
tiene so ojo blanco, blanco; Yo lo soy hombre de bien,
y á mí comtiémpleme ostied lo entiendo de solfería;
si soy bueno ó si soy malo. lo sé cantar un respunso
También, lo habéis de saber, que lo oyera en el esquina:
soy on poco estodiantado, también lo sé yo cantar
y lo sé cantar on réquiem, el Misa angeliquería,
on secolaron cantado. que me estoy en los amenes
Lo entiendo estodiar las loas cerca de lo medio día.
sin decir desatinados. Toco todos instromentos,
lo sueno la organería,
Después de esto y de un villancico en honor de los Santos Peregri- arpa, violín, tulolochi,
nos, el indio Pascual trama disputa con una moza de la casa, y e s flaota, salbaj onería;
preciso que intervenga y le pacifique Monigote, diciéndole: así lo quisiera ostied
que yo lo viniera on día
Pascual, en estos parajes y que lo cantara el coro,
usa de grande política, porque lo canto tan recio
y mira que es buena crianza que la dejara atordida.
el ser la gente rendida. Pascual. Yecuale Don Juan Sichaqua,
Monigote, hace entrega de unas cartas que trae de parece ostied taraviya.
Cura de Zagualica, y dice á Pascual: Es fuerza ostied convidar
Siquelguí incarnación, ' que lo fuere ostied on día
ó iguán ó se Mariquilla á honrar sos güeñas personas,
ynoseltín Juan de la Cruz, que no faltará on tortilla
simo calaquí vanican. y lo divirtiera ostiedes,
Pascual. Onicancatí, Señor. lo trajera mi borrita
Monigote. Pues asean Siguala nican. lo montaran sos miercedes
De la parte de mi Cura poco á poco, está mansita:
vuesas mercedes reciban comerán sopicho meló,
sus espresivas memorias que lo mato mi cochina,
de su gratitud florida, tan gordo verán ostiedes
y que de su parte vienen da tanta mantequería.
Encarnación. Y yo también, Virgen Santa, Guadalupe. En ella toman parte los siguientes personajes: Un loco
te soplico con anhelo un meco; San Miguel; Lucifer.
que á todos, todos, toditos
nos juntéis allá en el cielo,
Música. Al mayor portento
quedando el pulque en su calma
que América vió,
no lo persiga el topile,
salve le prevenga
mas que lo pierda el huepile
la celeste Sion, •
como no lo pierda mi alma:
y en himnos alegres
110 se lo lleve la palma con acorde unión,
el diablo, con so caverna; celebren amantes
te lo pido José tierno ^ * su alta Aparición.
por vida to mogercita
(Sale el loco comiendo alguna cosa.)
110 lo muere con el pita
Ola! ¿ qué música es ésta ?
y me lo lleve al infierno.
¿ qué casta de prevención
Pascual. También pedimos los dos
nos viene aquí dando indicios
yo Piscual y mi moger,
que no nos dejéis beber, de que puede haber función ?
por ser on bebida atrós ¿ Quiénes con tanta imprudencia
el polque, porque, Señor, y tan grande sinrazón
tarantado muero yo, alborotan mi contento
y me lo dice on mochacho é inquietan nuestra pasión,
que si la doy en borracho cuando cada uno ocupado
el diablo me lo llevó. está en su negociación,
Cate ostied aquí acabada unos pensando en los astros,
la fonción de la Jornada. otros pensando en su amor,
Todos. Y así digan todos otros en la valentía,
con suma alegría otros en la sinrazón,
que aquí siempre asistan otros pensando en la ciencia,
Josef y María. otros en composición ?
Festejen y aplaudan En fin, cada uno en su tema
en aqueste día pero yo en la tragazón ;
la Posada hermosa y así, cállense la boca;
de José y María. silencio, chito, chitón!
Déjenme comer á gusto
* porque si me enojo yo. . . .
* *

(tira lo que come)


Angeles y arcángeles, he de hacer que se estremezca
venid y cantad todo el Orbe y la región
hoy en la Posada esférica de este Globo
que hay en mi corral. y Celeste Pabellón;
y en este esférico mundo
Podrían bastar las muestras presentadas para no dejar deseos de pelearé tan fuerte yo
conocer otras, pero debo proseguir y prosigo con otro manuscrito de que empedraré con cabezas
mi colección. Trátase de una Loa en obsequio de Nuestra Señora de toda su circulación.
io6

¿ Pero onde está mi comida ? á su precioso Hijo envió


¿ Quién de aquí se la llevó ? á hacerse hombre por el hombre,
(Cantan el primer verso y sale San Miguel.) dentro el más puro candor
Loco. Y dale con la porfía ! de la más pura doncella
Sin duda que locos son, que para madre escogió,
pues siguiendo van su tema, siendo amada hija y esposa
Mas. . . . me causa confusión, de tan Supremo Hacedor.
pues las voces por el aire Loco. Jesús! qué dicha tan grande
esparcen su entonación. el primer hombre alcanzó,
¿ A quién le iré á preguntar ? que el hijo de Dios viniera
¿ó quién me dará razón á hacerse hombre por su amor.
de toda esta novedad ? Vamos, que es grande fineza.
Miguel. Esa vengo á daros yo. Miguel. Pues á más grande llegó,
Loco. Ay ! qué hermoso pajaróte ! que después de haber nacido
¿Sois canario, ó sois gorrión? sufriendo tanto rigor,
No de balde por el viento por el hombre padecer
se escuchaba tu canción. quiso cruel muerte y pasión,
E n fin, declara quién eres: hasta dar en una cruz
acaba ; dime ¿ quién sois ? la sangre del corazón.
¿ Por ventura eres armado ? Loco. Todos en Adán pecamos
Creo que traes morrión ; y á todos nos contagió.
más bien pareces danzante. Conque si por esto vino
P e r o . . . . aguárdate ; que no, á padecer el Señor,
que no, mírenle los pies. hasta á nosotros los locos
No hay que hacer: es bailador. sin duda nos alcanzó.
Pero bailador con alas, Miguel. Es así como lo dices,
¿qué será? válgame Dios! y más se explayó su amor
En fin, sea lo que fuere, á todo el género humano,
vaya, dime tu intención que para su salvación,
antes que vuelva á venir bajo las santas especies
esa cantada ó rumor, de pan y vino quedó,
que no me deja comer y esto por siglos sin fin
cuando más á gusto estoy. hasta la consumación.
Miguel. Soy paraninfo celeste, Loco. Es infalible verdad;
y la alta disposición sabes más que Salomón,
del Juez Eterno y Supremo, y esto y lo más que me has dicho
que bajara decretó, 110 tiene ni duda, no;
pues aunque el hombre primero y todo, á puño cerrado,
ingrato se le mostró firmemente creo yo.
allá, en el Sacro paraíso, Miguel. ¿ Ya ves tantos beneficios ?
y el precepto quebrantó, Pues otro grande favor
como que lo hizo á su imagen, á el Orbe, de polo á polo,
de su culpa se apiadó ha causado admiración.
y por su misericordia Loco. Y ¿ cuál es ese primor ?
Miguel. Enviar á su propia Madre Que lo acredite mi mano.
para que contra el error lie da la mano >.•
de la culpa y la malicia,
Desde hoy tu compadre soy.
rayos, pestes y traición,
como que es corredentora, Miguel. Y yo siempre á vuestro lado
sea amparo del pecador. seré vuestro protector.
IVrsc cada uno, _y suenan rajas y truenos y sale
Y así, yo vengo del cielo,
Lucifer>.
pues Dios el decreto dió
de que lo intime en la tierra, Lucifer. Arma ! arma ! guerra ! guerra I
para que la devoción infamia ! furia y horror !
de todo el género humano Avaricia, Lujuria, Ira,
se aliente con gran fervor, aprontaos ! llamo yo !
celebrando de María Gula, Pereza y Envidia !
la celeste aparición. Vengan todos á mi voz,
Y como Luzbel rabioso que está en campaña el contrario.
siembra zizafia y error, Aquí de todo el furor
cuando á esta Emperatriz Sacra de mis ardientes entrañas,
se le rinde adoración, cuyo veneno manchó
vengo á que esté advertido á todo el género humano,
todo el mundo en conclusión, y del Paraíso arrojó
contra ese monstruo maldito, á aquel hombre que á su imagen
para hacerle oposición. hizo el Eterno Creador!
Yo de mi parte te encargo Pero . . . . ¿ qué es esto ? ay de mí!
el que aquesta narración No sé qué trasmutación
á todos cuantos encuentres entre preludios y asaltos
intimes con gran primor, me sofoca el corazón,
para que todos unidos pues veo que del cielo hermoso
en tan célebre función, con cristalino fulgor
rindan á su Reina y Madre resplandecen las esferas,
alma, vida y corazón. luna, luceros y el sol,
y los Angeles ¡ qué pena !
Loco. Salto, brinco de contento !
se postran con fino amor
Yo lo haré con grande amor,
á esa que nombran su Reina !
y á todo aquel que se oponga
Ay de mí! qué compasión !
á nuestra proposición,
¿ Posible es que una mujer
si me coge con la luna
me cause tanto temor?
le aventaré con el sol,
No es posible! no es posible!
cosa que se abrase todo
¿Quién tan gran bajeza vió?
siendo al infierno tizón.
¿ No soy yo el Rey de los vicios ?
Ya yo me voy á comer,
¿ No soy quien se coronó
y con esto, adiós, adiós!
por Príncipe del Abismo,
El encargo que me haces,
y de él tomó posesión ?
pierde cuidado, que yo
¿ No fui quien me opuse al cielo
lo haré con crecido empeño,
y de su centro arrancó
con grande ánimo y valor.
í
v

la tercia parte de nueve discordia, murmuración,


del Angélico escuadrón ? tengo de impedir celebren
¿ No soy quien le dió las fuerzas esta Sacra Aparición
al titánico Faraón, que me da tanto tormento
por medio del mar bermejo y terrible confusión.
siguiendo al pueblo de Dios ? Y si hay quien contra mi intento
¿ No hago adorarme á mí mismo quiera hacerme oposición,
cual Nabucodonosor ? sacándole las entrañas,
Contra el fuerte Mardoqueo rompiéndole el corazón,
¿no pudo más mi ambición el centro de mis furores
en la privanza que tuvo será su eterno panteón !
con Asuero ? ¿ No soy yo [Sale el loco sin ver al Diablo],
aquel fuerte Roboán Loco. Bien haya la Providencia
que contra la emulación de aquel bendito Señor
muchas estatuas ofrezco que á mi Padre San Hipólito
de oro al ídolo Dagón, tanta caridad le dió;
para que me adoren luego? he comido como un loco,
¿ No soy el que á Cain soberbio y á lo loco lo que soy.
la quijada le ofreció Pero tengo reflejado
que al inocente de Abel que ya tan loco 110 estoy
infausta muerte le dió ? desde que con mi compadre
Y por último, ¿ mi esfuerzo tuve la contestación
no los cielos revolvió, de aquel encargo que me hizo,
ni soy, en fin, el que quiso y 110 se me olvida; 110,
oponerse al mismo Dios ? aquí tengo de aguardarlo.
Pues si todo ese poder Sentaréme.
ha encerrado mi rencor, /Se sienta /.
¿cómo ahora me atemoriza, Lucifer. Qué rigor!
cómo ahora me da pavor Ya los cielos se conspiran
solamente una mujer? en mi contra! Qué dolor!
¡ Muera quien tal pronunció ! [Ruido dentro. Se para el loco, abre la puerta y
¡ Muera todo aquel que intente sale el Meco].
el rendirle adoración! Loco. Ahí viene ya mi compadre;
Y en fin, ¡ muera todo el mundo ! pues á recibirlo voy.
antes que la devoción ¡ Sagrada Virgen María !
se le sacrifique amante por Jesús, que me espantó :
á quien no puedo ver, yo en qué instante mi compadre
que pirata de estos montes, ya se me transfiguró !
vestido de la traición, Meco. Amigo, no os asustéis,
bandolero de las selvas, que á buscar vuestro favor
seré el más fuerte campeón, vengo, como desvalido,
que armando fuertes de vicios, fugitivo del furor
y un formidable escuadrón de entre mis propios amigos.
de pecados y de ofensas, . Del Nuevo México soy
el más valiente entre todos Lucifer, (aparte.) Oh! quién licencia tuviera
los de aquella mi nación, de arrancarte el corazón!
y viendo que con mi Rey Meco. Pues esa Virgen me valga
me lie llevado la atención, y válgame vuestro Dios.
solicitan envidiosos T u ley pretendo seguir.
mi muerte, y por eso yo Lucifer. Eso sí digo que no.
vengo buscando el amparo Vil, bárbaro! ¿os atrevéis
acá, por vuestra nación. á olvidar vuestra nación?
Lucifer, (aparte.) Todas aquestas razones Loco. ¿Y quién le mete á usté en eso?
tormentos para mí son. Lucifer, (agarrándolos.) Aquí morirán los dos!
Loco. Pues si el patrocinio buscas Miguel, (saliendo.) Dime, serpiente infernal,
de la cristiana nación, común enemigo atroz,
no la hay en otra más grande ¿qué tus astucias pretenden?
que el que por dicha logró Lucifer. Estorbar la devoción.
tener á María por Reina, Miguel. Pues porque veas, soberbio,
y tener por Rey á Dios, rendido vuestro furor,
para afianzarnos su amparo á mis plantas obediente
y darnos su protección. has de quedar, vil traidor.
Lucifer, (aparte.) Oh! pese á todo el Infierno! Lucifer. ¿Cómo rendirse Luzbel?
Meco. Pues mi Rey será tu Dios, Miguel. De este modo, infame, atroz!
ya que esa Reina María {Riñen.)
me ha inspirado el corazón: Lucifer. ¿Quién cómo yo en el poder?
y así te ruego me digas Miguel. ¿Quién ha de ser como Dios?
algo de tu religión. (1Cae ti sus pies.)
Loco. Pues mira, el Eterno Padre, Meco. Válgame! qué fuerzas tiene;
que es el verdadero Dios, es más valiente que yo.
ni principio ni fin tiene; Loco. Pues si éste es compadre mío:
cielos y tierra creó; ¿ya ves como lo mató?
luego, de su propia imagen Aguárdate, le hablaré.
el Verbo Eterno salió, Compadre: aquí estamos dos
y del amor tan recíproco que venimos con gran gusto
conque se amaron los dos á hacer lo que me encargó,
el Espíritu Divino pues queremos celebrar
al instante procedió. la admirable Aparición.
Son tres personas distintas Y no tenga usté cuidado,
y tan sólo un solo Dios. ya éste sabe la lección,
La segunda, que es el Hijo, y á mí, Dios, como piadoso
á tomar carne bajó ya el juicio me restauró.
en el puro y casto vientre Pero empiece usté primero
de la que en su Aparición, en esta celebración.
nos mostró todo su anhelo,
Miguel. Como Reina de los Angeles
y siempre Virgen quedó.
esa Esther que preservó
Esta es la Reina del Cielo,
el Divinísimo Asuero,
á quien hoy se hace función.
me viene de obligación,
R. H. T.—T. I.—15
y así, angélicas cadencias y es tan cruel la pena mía
suenen desde la alta Sion, y tan mísero quedé,
celebrando de María que tiemblo diciendo que.
la admirable Aparición. Música. Nací de alta jerarquía.
(Música por dentro.) Lucifer. Ouise oponerme al Creador,
Miguel. Celebren los hombres vano, soberbio y osado,
Loco. La alta Aparición pero me vi castigado
Meco. De María sagrada con indecible rigor.
Lucifer. Contra mi furor. Miguel! terrible dolor!
Miguel. Sagrada Virgen María, dió con mi dicha al través;
Madre, Hija, Esposa de Dios, penas, desdichas, después
bendita entre las mujeres, se volvió el gozo profundo,
pues la culpa no os tocó, porque á un fuego sin segundo.
porque en el primer instante Me despeñó mi altivez.
Música.
de tu limpia concepción Lucifer. Mas mi envidia sin tardanza
todo el Poder Sempiterno dispuso, según se prueba,
en hacerte se esmeró. contra Adán y contra Eva,
Y tanto os quiso, Señora, la más infame venganza.
con tan indecible amor, Los engañé, y su mudanza
que el tesoro de la gracia míos los hizo esa vez,
todo en ti depositó, mas según el caso es
y por nuestra Reina y Madre y de todos conocido,
tu amparo nos endonó,
y á esta América felice habiendo sido vencido
amante la cultivó, Música. Yo vencí al mundo después.
para que tu patrocinio Lucifer. En fin; ya que á mi pesar
explayara con amor ha de seguir la función,
á cuantos lleguen humildes voyme á mi eterna prisión
á pedirte su favor. pues no lo puedo estorbar.
Lucifer. Basta, Paraninfo, basta Miguel, déjame pasar;
tanta mortificación. ya 110 estorbo esta alegría.
Baste de tanto tormento. Cristianos, aqueste día
Cese ya tanto rigor! gracias den al Sempiterno
porque á pesar del I n f i e r n o . . . .
(Música.)
Música. A mí me venció AL aria.
Nací de alta jerarquía, Miguel. Vete ya, monstruo infernal,
me despeñó mi altivez, que ya me ordena mi Dios
yo vencí al mundo después, te sepulte en las cavernas
y á mí me venció María. de esa tu oscura región, (vase.)
Lucifer. (parándose.) En una silla triunfante Lucifer. ¿Qué es esto que me sucede?
me vi, oh desdicha fiera! ¿qué es lo que pasa por mí?
luciendo en aquesa esfera Triste Luzbel, no hay remedio!
como una estrella brillante. ¡Ay infelice de ti! (vase.)
Mas mi soberbia arrogante Anda donde 110 hagas daño
Meco.
perdió el gozo que tenía, y déjanos á los dos,
á-

117

porque nosotros faltamos


y sochipisagua
de alabar la Aparición.
queridita mía,
Loco. Rosicler puro y hermoso, y sochipisagua
bella Luna, claro Sol, Madre amorosa,
Palma, Ciprés, Torre, Espejo y sochipisagua
en donde Dios se miró. del alma mía.
Meco. H u e r t o cercado, Jardín,
Ciudad grande y la mejor:
Sagrada Imperial Paloma
en donde habitó el Señor.
Loco. De J u a n la pluma sagrada CAPITULO XI
dice que del Sol vestida,
eres luz de eterna vida
y de estrellas coronada.
Meco. ¿Quién es capaz, Virgen pura,
* >.: -S * *
de alabar tanta grandeza,
santidad, gracia y pureza
como Dios en ti asegura? Todas aquellas piezas r e p r e s e n t a b a s en los teatros unas veces y
Música. Viva la que en candores ante las mismas Imágenes otras, según se ve indicado en las que ex-
de gracia es llena, tractadas ó copiadas dejo en el precedente capítulo, abundaban en
pues la hizo Dios sin mancha, acrósticos, romances en ecos, glosas, poesías mudas, laberintos, poe-
blanca azucena. mas cúbicos, consonantes equívocos, y los mil y un primores ó za-
Meco y Loco á la vez. Y todos alegres randajas que codificó el celebérrimo D. J u a n Díaz Rengifo, natural
en acorde unión, de Avila, bajo el título de " Artepoética española, con una fértilísima
repitan que viva silva de consonantes comunes, propios, esdrújulos, reflejos, y u n Di-
t u alta Aparición. vino estímulo del Amor de Dios, aumentada en esta última impre-
T e ofrezco hoy por oblación, sión (1759), con dos Tratados, uno de Avisos y Reglas, otro de aso-
Aurora Guadalupana, nantes, con cuarenta y ocho capítulos y con un compendio de toda
en esta función m a ñ a n a el Arte Poética, y casi cinco mil consonantes."
rendido mi corazón. Siguiendo la regla, ó mejor sería decir receta, de Rengifo, para la
Y sochipisagua formación de laberintos, y dice,
criollita hermosa,
y sochipisagua
" A l derecho y al revés,
queridita mía,
por atrás y por delante,
y sochipisagua á la morisca y través,
Madre amorosa, j u n t a n d o dos y tres pies
y sochipisagua hallarás el c o n s o n a n t e , "
del alma mía.
Defiéndenos con anhelo,
siendo por gloria cristiana en las loas, entremeses, pastorelas y coloquios á que hago referencia,
tu imagen Guadalupana abundan los esfuerzos de ingenio mal gastado y de paciencia mal em-
de la América el consuelo. pleada, productores de estrambóticas maravillas métricas.
Y sochipisagua, De un enorme parlamento escrito en México y dedicado á celebrar
criollita hermosa, la Eimpia Concepción, tomo las siguientes quintillas, de las que su
á-

117

porque nosotros faltamos


y sochipisagua
de alabar la Aparición.
queridita mía,
Loco. Rosicler puro y hermoso, y sochipisagua
bella Luna, claro Sol, Madre amorosa,
Palma, Ciprés, Torre, Espejo y sochipisagua
en donde Dios se miró. del alma mía.
Meco. H u e r t o cercado, Jardín,
Ciudad grande y la mejor:
Sagrada Imperial Paloma
en donde habitó el Señor.
Loco. De J u a n la pluma sagrada CAPITULO XI
dice que del Sol vestida,
eres luz de eterna vida
y de estrellas coronada.
Meco. ¿Quién es capaz, Virgen pura,
* >.: -S * *
de alabar tanta grandeza,
santidad, gracia y pureza
como Dios en ti asegura? Todas aquellas piezas r e p r e s e n t a b a s en los teatros unas veces y
Música. Viva la que en candores ante las mismas Imágenes otras, según se ve indicado en las que ex-
de gracia es llena, tractadas ó copiadas dejo en el precedente capítulo, abundaban en
pues la hizo Dios sin mancha, acrósticos, romances en ecos, glosas, poesías mudas, laberintos, poe-
blanca azucena. mas cúbicos, consonantes equívocos, y los mil y un primores ó za-
Meco y Loco á la vez. Y todos alegres randajas que codificó el celebérrimo D. J u a n Díaz Rengifo, natural
en acorde unión, de Avila, bajo el título de " Artepoética española, con una fértilísima
repitan que viva silva de consonantes comunes, propios, esdrújulos, reflejos, y un Di-
t u alta Aparición. vino estímulo del Amor de Dios, aumentada en esta última impre-
T e ofrezco hoy por oblación, sión (1759), con dos Tratados, uno de Avisos y Reglas, otro de aso-
Aurora Guadalupana, nantes, con cuarenta y ocho capítulos y con un compendio de toda
en esta función m a ñ a n a el Arte Poética, y casi cinco mil consonantes."
rendido mi corazón. Siguiendo la regla, ó mejor sería decir receta, de Rengifo, para la
Y sochipisagua formación de laberintos, y dice,
criollita hermosa,
y sochipisagua
" A l derecho y al revés,
queridita mía,
por atrás y por delante,
y sochipisagua á la morisca y través,
Madre amorosa, j u n t a n d o dos y tres pies
y sochipisagua hallarás el c o n s o n a n t e , "
del alma mía.
Defiéndenos con anhelo,
siendo por gloria cristiana en las loas, entremeses, pastorelas y coloquios á que hago referencia,
tu imagen Guadalupana abundan los esfuerzos de ingenio mal gastado y de paciencia mal em-
de la América el consuelo. pleada, productores de estrambóticas maravillas métricas.
Y sochipisagua, De un enorme parlamento escrito en México y dedicado á celebrar
criollita hermosa, la Eimpia Concepción, tomo las siguientes quintillas, de las que su
autor advierte tener cada una de ellas, la curiosidad de que lo
De tu vientre virginal
pueden leerse '' de arriba abajo que de abajo arriba;''
salió nuestro Redentor
sin la culpa original
hecho hombre por nuestro amor
Kn su limpia Concepción
para librarnos del mal.
más reluciente que estrella,
Te nos mostrastes Aurora
le dió al Orbe admiración
en el más brillante día,
esta preciosa doncella
que del hombre intercesora,
pisando al fiero dragón.
Hermosísima María,
Del rapto de culpa y pena
fuiste la corredentora
es María privilegiada,
pues cual cándida azucena
se presenta inmaculada, Y así sigue y sigue esa serie de quintillas, que, como notarse pue-
de toda la Gracia plena. de, nada nuevo ni señalado dicen ni leídas al derecho ni leídas al re-
Con peregrino arrebol vés, sin pasar de un simple amontonamiento de palabras y de frases.
amaneció aquesta Aurora E n la misma colección hay dos décimas igualmente dedicadas á la
aun más brillante que el Sol; Inmaculada Concepción, con la curiosidad de que cada uno de sus
de luces los campos dora versos tienen por centro ó el sol ó la luna.
como encendido Farol.
E s un intacto Santuario,
con los bienes de la Gloria, Del sacro ' Soberano
de gracias teniendo Erario, Copia fué del Divino,
cantó el mundo la victoria Hermoso que previno
de su común adversario. El en su regio arcano,
Más agraciada que Esther, A este del ser humano
SOL
sin sombra de culpa alguna Eo hace sin sombra alguna
la vió el Orbe amanecer, Y que este en su cuna
sin menguante hermosa Euna Nazca con resplandor,
con brillante rosicler. Porque el de su candor
Del Occeano de pureza Es sin mancha importuna.
el Señor con eficacia
formó esta rara belleza,
dotándola de la Gracia La décima que tiene la luna por centro, dice:
de su liberal Grandeza.
Adán por la sierpe astuta Es María luciente,
el precepto quebrantó, bella sin menguante,
y en una vedada fruta que como flamante
á su prole contagió es en candor creciente,
con una culpa absoluta. Esta en claro Oriente,
Del cielo desheredado pura LUNA
sin lección
el hombre con todos daños se vió en su estación
se miraba aprisionado tan rara del cielo,
por más de cuatro mil años la nueva que al suelo
en el más mísero estado. fué en su Concepción.
La Culpa, que en esa loa toma parte, habla en el siguiente altiso- E s falso que esta mujer
nante estilo: se mirara tersa y limpia
Espera, temible acento! contra el orden natural.
contén la voz! no prosigas! No puede ser, es mentira,
que tus métricas candencias es imposible; 110 hay duda,
rompen de la cristalina es falsa Filosofía.
esfera, el azul celeste, Dios 110 ha hecho cosa imperfecta
cuyas diáfanas cortinas y esa mujer lo sería
se empavesan de luceros á estar libre del pecado
con bizarra gallardía, que á su prole contamina.
ostentando en sus celajes Eso no es verdad, es falso;
de los astros la divisa, y si alguno me replica
pues son vasallos de Febo ó contradecirme quiere,
los fulgores que allí brillan. salga en forma silogística
Retira tus consonancias, á defender lo contrario:
ó al impulso de mis iras la Culpa los desafía
convertiré en tempestades ' sin reserva de personas
toda la máquina empírea, en la cumbre de la cima.
forjando ligeros rayos
que conviertan en cenizas
A tan grandes bravatas de la Culpa se presenta la Gracia y quieras
con los efluvios del fuego
que no quieras, y ayudándose con celestes coros, demuestra su error á
á esta vasta Monarquía.
la Culpa.
Enmudece los violines,
rompe las cadentes liras, ¿ E s posible que esto escuche
destiempla bajos y trompas y que al instante 110 muera ?
que con gran melancolía Reniego de mi poder !
canten mientras lloro yo, ¿ De qué sirve mi soberbia ?
ó pese á las furias mías!
¿A una mujer tanto aplauso? De nada en efecto le sirven, pues á la voz de la Gracia
No comprendo tal enigma,
que á la que es hija de Adán á pesar de tus astucias
y en su mismo ser nacida, y tus ardides y enredos,
le han de dar tales aplausos, se presentan valerosos
siendo consecuencia fija con ínfulas y capelos
que le comprendió la culpa Doctores y Santos Padres,
de la venenosa arpía agotando los tinteros
del pecado original en universal defensa
que á su prole contamina. del Purísimo Misterio
¿Cómo libre se ha de hallar de la Concepción en Gracia
la que es de su herencia misma? de la Reina de los Cielos.
Mienten todos los anuncios, Sacando á luz sus errores
son falsas las profecías, que se presente Lutero;
que procuran separarla en fin, sin limitación
y que quieren distinguirla. que salgan en este puesto
calvinistas' mahometanos
y todo el infeliz gremio 110 sea el Diablo que soceda
de paganos y gentiles, lo que socedió á tio Pegro,
que el Santo Doctor Angélico que por cosa como este
Sapientísimo Tomás no más, le dieron doscientos,
los despachará al infierno. 110 dineros, sino azotes
con on pero verdoguero.
La Culpa se va al fin, echando pestes por aquella boca: Mi agüelo, mírelo osted,
ese fué otro fondamento:
110 li cuadraba la aguja,
Reniego de mi desdicha!
ni el dedal, ni por lo pienso!
Mi pecho en ira se abrasa
A lo grande se inclinaba,
pues ha triunfado de mí
á los vestidos muy güenos,
esta Reina inmaculada.
los relojitos de plata,
Retiróme á las cavernas
los centillos, cosas goeno.
á llorar en sus entrañas
A mi hermano lo azotaron
el bien que logran los hombres
por jurtón y matutero.
por Niña tan soberana.
Mi tata, mírenlo ostede,
Pero yo de los mortales
ese jué otro fondamento:
tomaré crüel venganza,
por nueve veces casado
inventando nuevas culpas
salió so acompañamiento
que devoren á las almas,
en on burro aparejado
ya que aquesta Mujer Fuerte
con ojos en so piscuezo,
la Original deja atada.
con so coroza muy grande
y so vítor giieno, giieno.
De esas altas filosofías descansaba el buen público de las fiestas re-
ligiosas, con los entremeses en que era gracioso el Indio: vaya una
muestra más de los chistes de aquellos graciosos: la tomo del saine- Pero donde más resaltan el candor y el ingenio de esos días y esos
te El Indio criado: autores, es en los coloquios y pastorelas que dando principio en la
rebelión de Luzbel venían á terminar en la adoración de los pastores
Alabado sea Jisós! á Jesús recién nacido.
Cuánto cansado lo vengo La primera escena tenía lugar en el cielo, entre Luzbel y Miguel:
de boscar on convenencia el primero, en todo el esplendor de su prístina belleza, recreándose
porque de hambre me lo muero. en sí mismo, tomando para sí los cánticos de alabanza de todas las
Ayer me j u í al catarral, jerarquías, pretende convencer al segundo de su absoluta igualdad
por señas lo iba saliendo con el Ser Supremo, pues lo creó tan hermoso y perfecto cual lo es
á on siñor con so piloca, él mismo. Miguel llega á perder la paciencia al oir las blasfemias del
so chopa largo, moy goeno, soberbio espíritu, y desenvainando su espada arroja por tierra al in-
on pañito culurado grato, gritándole con voz de trueno:
con sos adornos bermejo:
yo no mas le puse el mano Bárbaro! ¿quién como Dios?
y se me enredó en los dedos.
El siñor no lo vió nada Aunque ya en la desgracia, Luzbel no se da por vencido y exclama:
y yo lo quedé sospenso.
¡ Válgate Dios por pañito ! ¡Qué importa que del cielo
¿ con este paño qui haremo ? injustamente Dios me haya arrojado
1 2 4 125

si con la ciencia infusa me ha dejado? Luzbel acaba de deslizarse detrás del árbol prohibido y se prepara
¿No es perpetuo mi ser? ¿pues cómo ignora á contestar á las dudas de Eva, en la forma que Rengifo llama eco:
que igual tengo de ser á su grandeza?
Por la que en mí, infinita se atesora Eva. ¿Qué puedo perder en ver
¿podrá acabarse mi naturaleza? la fruta vedada?
Luzbel, (oculto.) Nada!
No obstante, tiénele intranquilo el saber que Dios se entretiene en Eva. ¿Y qué haré al la ver?
formar de vil arcilla la humana criatura, en la que infundirá un alma Luzbel, (oculto.) Comer!
á su imagen y semejanza, y en la cual pondrá todo el amor que dejó Eva. Si el árbol vedado toco
vacante la rebeldía de Luzbel. Juzga éste que la fabricación de se- ¿habré delinquido?
mejante muñeco, es un entretenimiento indigno de Dios y la mayor Luzbel, (oculto.) No!
burla que á él puede hacérsele, y se prepara á vengarse echándole á Eva. ¿Quién me ha respondido?
perder su nueva criatura. Gracias á la ciencia infusa de que ya nos Luzbel, (oculto.) Yo!
habló, al ver á Eva adivina Luzbel el lado flaco de Adán. Eva. ¿Qué aventuro en esto?
Luzbel. Poco?
Ya acierta mi experiencia! La costilla Eva. ¿Qué más claro desengaño?
que en su fragilidad es fortaleza, pues sin saber cómo ó quién
á mi cautela juzgo qne se humilla. dice quien y dice bien,
Guárdese el hombre, que mi enojo empieza. mucho el miedo y poco el daño,
resuelta voy á tocar
Aparece el Paraíso: Adán galantea á su hermosa compañera, y le ex- el árbol y ver el fruto,
plica cuánta es la multitud de los favores que ambos deben á Dios, pues es negar el tributo
quien todo les consiente y permite, menos una sola y única cosa. comer pero no mirar.

Todo es vuestro, amada esposa; Eva come la fruta, la hace comer á Adán, sobreviene á poco una
pero mirad que os advierto tempestad en que se manifiesta la cólera de Dios; Miguel, armado
que aquel árbol no toquéis, con espada de fuego, arroja del Paraíso á los primeros pecadores, y
que es soberano precepto la escena múdase en un Templo en que se presentan Daniel é Isaías
de Dios, y en viendo su gloria á anunciar que es llegada la hora en que el hombre empiece á ser re-
fácil reconocimiento, dimido con la llegada del Mesías. El ejemplar que manuscrito poseo,
no quiere más su grandeza dice al llegar á este pasaje del coloquio y pastorela: " P i t o de infier-
que este divino precepto. no. A este pito se descubre la vista de Infierno, en la que aparecerá
El que probare la fruta Lucifer en una peña recostado y un caudillo á sus pies. El Pecado,
y no obedezca el decreto, prevenido por vuelo grande, y Satanás por escotillón de la izquier-
está condenado á muerte da, hasta sus correspondientes pitos. Lluvia de fuego para la hora
su eterna gracia perdiendo. del Conciliábulo, Cajas, Tempestades, Caudillos, y Diablos."
Al son de músicas tristes, dice la comedia, laméntase Luzbel de los
Vase Adán, queda sola Eva; y en el acto piensa así: pesares que le afligen sin tener siquiera el consuelo de poder dormir;

Si he de decir la verdad, á un mortal no se le niega


yo por ver el árbol muero, del sueño el dulce letargo,
que al pensamiento ligero y yo, infeliz, por más que hago
sigue la curiosidad. más y más de mí se aleja.
Dime, sueño, injusto amigo, Nube del día, horror de sus candores!
¿por qué tanto te escaseas Mancha de Adán que á todos has tocado!
con un desdichado? Di. Pecado original!!!
Que si yo te poseyera Pecado, (alpaño.) ¿Quién me ha llamado?
sosegara el pensamiento Lucifer. T u Príncipe y Señor!
y minorara mis penas, Pecado. Ya te obedezco
porque eres tan parecido y hoy de nuevo á servirte á ti me ofrezco.
á la muerte en tal manera
que el que de tu sueño goza Inmediatamente Luzbel llama y hace venir á Satanás, que en el
ó el que tu amistad profesa, acto acude diciéndole:
ni agradece beneficios
ni se previene á cautelas. Príncipe invicto, ¿qué mandas?
Aquí estoy á tu obediencia:
que aunque somos, Gran Señor,
Su mal humor se desfoga en maldiciones y blasfemias, que hacen
los dos nacidos de un parto,
que el coro, con música alegre, le repita las palabras de Miguel,
y nada puede perderse
entre dos que son hermanos,
Bárbaro, ¡ quién como Dios!
dejo á mejor ocasión
poner mi derecho á salvo.
Por supuesto que Luzbel responde encolerizado repitiendo sus eter-
nas amenazas, llegando á ponerse de punto de caramelo cuando los co- Luzbel, antes de decirles el objeto de su llamado, les refiere la crea-
ros de músicas alegres, le anuncian el próximo parto de la Virgen, que ción del universo y del hombre, su soberbia y su rebeldía, su perdi-
no dejará de serlo ni aun siendo madre. E n el colmo de la irritación ción y la de los ángeles que le siguieron, amenizando su enorme par-
exclama Luzbel: lamento con descripciones como esta:
No lo creo ni por pienso,
pues aunque más santa sea, Con admirable prudencia
más hermosa ó más divina hizo el cristalino Globo.
que pueda haber en la esfera, Luego, con suma grandeza,
vasallos tengo tan leales, de uno á otro polo fijó
y tan valientes se muestran, dos ejes que lo rodean,
que á las murallas más altas para que los once cielos
han derribado sus fuerzas. que la evidencia enumera,
Y para que juzgue el Orbe y el estrellado Zafir,
que Luzbel verdad profesa, firmamento que se muestra
al llamado de mi voz á un paraninfo celeste
acudan á hacerle guerra. que arrebatado voltea
(Con terrible y estruendosa voz)
todo el esférico río
Horrible noche del Caos profundo! que le dió la Omnipotencia.
Eclips soberbio del primero mundo! En medio del cuarto cielo
Noche común del hombre inobediente! de los que os hablo en mi tema,
Contagio del Oriente y Occidente! puso el Sol, porque alumbrase
Abismo lobregoso. Lunar feo giro á giro, esfera á esfera;
del huerto deleitoso! y por influencia dispuso
Aspid entre las flores! astros, signos y planetas,
dando lo muy conveniente
á cada cual en su esfera. Pecado. Que ya el Pecado os incita!
Todo cuanto aquí os he dicho Satanás. Muera el hombre á nuestras manos!
es porque veáis que á mi ciencia Luzbel. Dadle al hombre batería!
nada se le oculta, y todo Satanás. Toque al arma nuestro aliento!
se encuentra sujeto á ella. Luzbel. Al arma, infernal milicia!
Pero aquí mismo principian Pecado. Con vuestras voces, Señor,
mis dolores y mis penas, todo el infierno se alista
pues dicen las que manejo para ganar las victorias
ciencia infusa y sabias letras, que tenemos á la vista
que ha de nacer de una estéril
una niña, en cuya perla
Y, en efecto, " á sus voces, dice la acotación de la comedia, toma
será en que se deposite
cada uno*posesión de su lugar, y, al pito, se irán, Lucifer, por vuelo
la sagrada Omnipotencia.
grande; Pecado, por escotillón de la derecha; Satanás, por el de la
izquierda y los caudillos y los demás diablos por la boca del infierno,
A todo está dispuesto Luzbel para impedir que se cumplan las pro- y todo esto será muy violento."
fecías, y todo lo intentará antes de que su cabeza pueda servir de al- Sigúese en decoración de Templo el acto de elegir María esposo,
fombra á la doncella elegida, y al caso dice hermosamente: que es José, cuya vara florece de improviso, y la boda queda cele-
brada.
primero, tantos pedazos Ea segunda parte empieza con la salutación del Arcángel Gabriel
contra estos muros la hiciera, y con la conformidad de la Virgen á la voluntad divina; sobreviene
que tan sólo en recogerlos José, y María se turba no resolviéndose á decirle lo acontecido, y ter-
un joven se envejeciera. mina la escena conviniendo ambos esposos en ir á visitar á su prima
Isabel. Esta, sin más pesar que el de tener mudo á su esposo Zaca-
Satanás y el Pecado original convienen en poner en pie de guerra rías, ocúpase en el arreglo de su casa y en dar buenos consejos y to-
á todo el infierno; el Pecado trata de dar ánimo á su Señor recordán- mar cuentas á sus pastores, por los cuales sabe el matrimonio de su
dole la importante ayuda que en todas las ocasiones le ha prestado prima María, fausta nueva que la regocija grandemente. Entonces
para rellenar de condenados el abismo, y después de mucho argumen- es cuando hace su primera presentación en la comedia el pastor Bras,
tar y de mucho discutir, pues todos tres son impertérritos habladores, que de sí mismo dice:
resuélvense á salir á campaña.
Señora, me llamo Bras;
Luzbel. Amigos, con vuestra ayuda pero debes entender
todo mi poder se anima, soy Brasito en trabajar
y, así, empiece la venganza. y Brasote en el comer.
Los dos. Nuestra venganza prosiga!
Pecado. A h ! de esa lóbrega estancia!
Satanás. A h ! de esa fogosa hornilla! Con él se dan también á conocer Bato y Gila, tan graciosos y bue-
Lucifer. Donde impera mi poder. nos consortes que cuando Gila pregunta si la ha extrañado, contesta
Bato:
Pecado. Donde reina mi malicia.
Satanás. E h ! valientes capitanes ! Bien sabes que te he querido
Luzbel. E h ! valerosas cuadrillas! como á un dolor de costado.
Pecado. Salid del oscuro averno ! Gila. Así lo tengo entendido;
Satanás. Dejad la laguna Estigia !
t u habrás de morir por mí.
Luzbel. Que vuestro Príncipe os llama!
Bato. Pues si muriera por ti,
¿qué te harías de otro Bato?
Bato. Este es un almartigón
Gila. Yo buscara con desdén de mi ya difunto tío.
otro marido segundo. Bras. Qué ¿tu tío era caballo?
Bato. ¿Y habrá marido en el mundo Bato. Era de su animalito,
que á su mujer quiera bien?
¿y tú qué traes cargado?
Gila. Los buenos lo hacen así. Bras. E s un fuste, amigo mío,
Bato. Pues yo soy que ni de palo que se ponía mi padre
y si algo tengo de malo
cuando salía al camino.
lo habré aprendido de ti.
Bato. ¿Conque tu padre era bestia?
Gila. Mejor es que al monte vayas
me harás perder el sentido
por lefia, para amasar.
Bato. Ahora vengo muy cansado, Bato. Pues acércate primero.
mejor será irme á acostar. Bras. Si tendré valor no has dicho.
Adiós, Gila de mi vida. Bato. Ensíllalo, y caminemos.
Gila. Adiós, Bato, tuya soy. Bras. Y tú acaso ¿estás tullido?
Bato. Y de cuantos quieras eres. Bato. Pues ¿hasta qué hora lo coges?
Bras. T ú le tienes miedo, amigo.
Riñas y galanterías semejantes entre ambos esposos, se repiten á Bato. No sé si sabrá de ancas.
cada momento en el curso de la obra. Bras. ¿No ves que 110 tiene brío?
Igualmente burdos, glotones y holgazanes, Bato y Bras son los Bato. Date prisa, no se vaya.
eternos camaradas de aventuras y merodeos, y unidos acometen las Bras. A un tiempo démosle el grito.
más arresgadas empresas: á la husma de cuál será la mujer elegida
para madre del Mesías, Luzbel se presenta en los campos vecinos á El primer intento no les sale bien, pues Lucifer los rechaza y tira
la casa de Isabel, y en uno de sus monólogos tristes echa roncas de su al suelo:
pecho, y maldiciones y blasfemias que sorprenden Bato y Bras, y sin
Bato. Todo ¡ay! me ha descuadrillado!
asustarse con la fea catadura del Rey de las Sombras, conciben el
Bras. Una pierna ¡ay! me ha rompido!
atrevido proyecto de ensillarle y ginetearle.

Pero después, invocando á Dios y á San Miguel, logran ensillar y


Bras. Bato amigo, ¿no escuchaste montar á Lucifer, que dice:
lo que ese jumento dijo?
Bato. No he entendido una palabra
¡Que por orden del Creador
porque el miedo aun no disipo. y su poderoso edicto,
Bras. Pues qué ¿no tendrás valor . . . . sea yo juguete y escarnio
de lazar á ese pollino de villanos que abomino!
y montados á caballo Acaba, suerte tirana!
le llevamos al aprisco? Oh! Miguel: t ú me has vencido!
Bato. ¿Y si acaso se voltea pero yo me vengaré
el chirrión por el palito con doblar al hombre el vicio,
y nos ensilla á nosotros? y avivando mis astucias
todos irán al abismo!
Vencidos los reparos de Bato, éste y Bras vanse en busca de los
útiles necesarios para la empresa, y á poco rato vuelven, dice la aco- Lucifer arroja al suelo á Bato y Bras, y huye por un escotillón del
tación respectiva, Bato con un almartigón y Bras con un fuste viejo, que salen llamas y humo que tizna á los dos pastores.
y hablan en voz baja:
Entáblase una especie de diálogo entre los coros que cantan coplas
Bato. Grita, que el monte se quema:
con música alegre, y San Miguel que las comenta en ampulosos versos,
¿no miras el fuego activo?
hasta el instante en que lo interrumpe Euzbel gritando dentro:
Pastor. ¿Y quién os ha puesto así?
Bato. Por jugar al caballito
sobre un potranco cerrero, Vivan Luzbel y sus tropas!
echó un reparo el maldito, Soldados míos, alerta!
y á los dos nos ha dejado que está el contrario en campaña.
muy bien tiznado el hocico, Arma! arma! guerra! guerra!
con fuego que por la cola
le salió como á torito.
Preséntanse Luzbel y el Pecado que andan sin saber por dónde, en
Gila. Bonito par de figuras
busca de la mujer que ha de dar á luz al Mesías, y cruzan la escena
para espantar muchachitos!
María y José, que andan de peregrinos y se detienen á aplacar su sed
en una fuente que allí brota. Miguel se presenta á saludar y ofrecer
sus respetos á María:
En medio de los bailes y cauciones con que sus pastores y colonos
quieren distraer á Isabel, Bato y Bras vuelven á dar aviso de que lle-
gan María y José, quienes son recibidos con pastoriles festejos por Al fin, llegaron mis ansias
Isabel y todos los moradores de su casa y de sus campos. á ver el monte celeste
Pero, so pena de extendernos por demás, desistamos de seguir pun- donde se dieron de amor
to por punto esa nueva edición de la Biblia y del Evangelio puestos las más soberanas leyes;
en verso, y lleguemos á los instantes solemnes en que se prepara el á ver la mesa más franca
nacimiento del Redentor. Ea acotación dice " por vuelo San Miguel y de este cordero eminente,
en bosque corto" de ese divino retrato
que con su hechura engrandece
Miguel. Montes que de ese velo transparente á el Apeles más divino,
poseéis el influjo más luciente; cuyos sagrados pinceles
riscos cuya eminencia para dibujarla hermosa
á las nubes les hacen competencia; vertieron esplendideces
altos, verdes escollos de estos prados sin tasas y sin medidas
de variedad de flores matizados; en esta imagen que ofrece
fuentes que con risueños movimientos el figurado maná
corrientes explicáis los sentimientos; que es de la vida la fuente.
aves cuyo concento lisonjero Pásmense el mundo y los cielos
en primores os puso el mes de Enero, pues esta antorcha luciente,
prorrumpa nuestro canto en voz sonora esta carroza del sol,
dulces acentos hoy á vuestra aurora, hoy, desquiciando sus ejes,
que yo por ello intento se bajara si pudiera
esparcir alegrías por el viento, para postrar altiveces.
siendo mi voz clarín dulce y sonante Y así, criaturas todas
que á las aves despierte vigilante, montañas, riscos y fuentes,
y pues soy de los cielos mensajero plantas, flores, valles, cumbres,
sea la voz acento lisonjero, aire, tierra, aguas y peces,
y sus canciones saetas prevenid todos posadas
que despierten del sueño á los profetas. á quien por todos hoy viene,
dejando alcázares ricos
por nacer en un pesebre.
Luzbel. Y que no pueda valerme!
Satán. Y que valerme 110 pueda!
María le contesta con humildad y sencillez celestiales, Luzbel. Que me ofenda así su vista!
Pecado. Que así su vista me ofenda!
Oh! divino Embajador,
cuya presencia me tiene Acábase por poner en fuga á los diablos, y por ello felicitan los án-
absorta, por ver que el Cielo geles á María, que sigue su camino para Belem. A la entrada del pue-
tantos favores previene blo sitúase Luzbel para impedir que las gentes vayan á adorar al ni-
para aquesta humilde esclava ño Jesús, ya que no le es posible impedir su nacimiento. Los primeros
que en verdad nada merece: • individuos que con él se tropiezan son Bato y Bras, que llegan cansa-
Paraninfo soberano, dos y con hambre y hablando, como de costumbre también, grosera-
cumplida veréis en breve mente:
vuestra súplica, pues ya
toda mi alma se siente Bato. A mí me tiene rabiando
anegada con los gozos la puerca de mi mujer.
de mi alumbramiento breve.
Preséntaseles Luzbel, y se renuevan las ordinarieces y los insultos:
El Pecado entra en escena y procura ganarse la buena voluntad de
la Virgen, fingiéndose un pobre simple, pero á pesar de su disfraz es
Luzbel. Villano! si yo me enojo
conocido y Miguel le maltrata y arroja á los pies de María. El Peca-
te haré morir á mis manos.
do pide auxilio y salen Lucifer, Satanás, San Gabriel y San Rafael y
Bato. No te enojes, cara negra:
se entabla una lucha enconosa por ambas partes. Lucifer, soberbio
ya no te diremos nada.
siempre, grita:
Bras. Con esa cara tiznada
te pareces á mi suegra.
Quién como yo, di, Miguel!

y Miguel le contesta con voz tonante Sirviéndose de su glotonería, Luzbel ofrece á Bato y á Bras una su-
culenta comida con tal de que le firmen una escritura vendiéndole
sus almas: Bato y Bras admiten en apariencia, pues lo que quieren es
Quién como Dios! di, serpiente!
jugarle
una burla, y después de comer y beber como príncipes, á la
y Luzbel queda vencido y humillado, y el Pecado y él y Satanás se
hora de firmar, para lo cual trae Satanás tintero, pluma y papel, ambos
desahogan con el siguiente laberinto:
pastores dicen que no saben ni leer ni escribir. Luzbel se enfurece
con aquella burla y manda colgar á Bras y enterrar vivo á Bato, pe-
Pecado. Sólo eso siente mi pena! ro llega Miguel y los salva. Después de esta última derrota, ni Luz-
Satán. Sólo eso mi pena siente! bel ni sus demás infernales camaradas vuelven á presentarse.
Luzbel. Que á mí me ofenda y lo mire! En vista de calle, con muralla y centinela en ella, dice la acotación,
Pecado. Que no la mate y me vengue! salen María, José y Miguel buscando donde hospedarse. José llama
Satán. Que no me vengue y la mate! á las puertas de dos de sus parientes, que uno tras otro le despachan
Luzbel. De aquesta suerte Luzbel! con cajas destempladas y más que groseras razones. Después pide po-
Pecado. Pecado de aquesta suerte! sada en un mesón del que es portero unpobe negó que les responde
Satán. A mí te atreves, esclava! que no hay lugar ni albergue para nadie, y menos para una mujer que
Pecado. Que esta esclava á mí se atreva! está para parir y podría despertar á los demás huéspedes. Miguel se
dirige entonces al centinela ordenándole que abra las puertas de la
ciudad.
Suenan de pronto músicas alegres que cantan,
Sabe que á tus puertas tienes
la Redención de Israel: Acudid, pastores
abre las puertas que viene todos con fervor,
el verdadero Mesías que á la media noche
á que los muros le entregues. ha nacido el sol.

Esta copla vieja viene á demostrar que es más antiguo de lo que se


Pero contra el tal centinela Miguel y su Quién como Dios! nada pue- creía aquello de noche en que el sol brilló, que tanto ha sido criticado á
den, y el implacable soldado acaba por llamarle impertinente y vol- un excelso poeta mexicano.
ver la espalda á los peregrinos, que alfinse resuelven á guarecerse Viene Gabriel, anuncia á los pastores el nacimiento del niño Dios
en mísero y desmantelado portal. y les invita á ir á Belem á adorarle, lo que ellos hacen muy de buen
Estamos en un campo yermo y á todos los aires del invierno más grado, y aparece el Portal y Jesús en un pesebre y María y José á sus
cruel, no obstante lo cual el poeta mezcla y confunde las Estaciones, lados, y cántase la gloria y alegres coplas y gozosos villancicos, y ca-
obligado por la fuerza del consonante, puesto que los pastores dicen, da cual ofrece al Niño lo mejor que posee, viandas, frutas, flores y pu-
y por dos veces, ro y sincero amor, y la pastorela concluye abriéndose sobre el feliz
portal de Belem todos los esplendores de la Gloria, que durante trein-
Feliciano. Son crecidos los rigores ta y tres años habría de quedar huérfana de la segunda persona de la
con que nos maltrata el frío. Omnipotente Trinidad.
Rosaura. Ya me acaba el cruel estío: Feliz el para nosotros ignorado poeta, que de tan antiguos tiempos
paremos aquí, pastores. viene recreando á los sencillos de corazón con su humildísima obra,
Bato. Gran trabajo es caminar por la cual viven en el mundo infantil el valiente Miguel, el fanfa-
con tan riguroso estío. rrón Luzbel, el gritón Pecado original, los rústicos Bato y Bras y la
Rosaura. Helada vengo de frío; poco escrupulosa Gila!
démonos prisa á cenar.

Todo lo disponen para el caso, y pronto se enciende el fuego y es- CAPITULO XII
tá lista la cena, que alegremente despachan, añnado cada pastor con
su cuchara. E l glotón Bato exclama,

1791.—1792.
Quién tuviera veinte bocas
y cuarentamil barrigas No pudiendo, en obsequio á la brevedad, hablar de todas las fun-
para llenarlas de migas. ciones de la temporada de 1790 á 1791, me referiré á las más notables
por cualquiera circunstancia. El domingo 25 de Abril la función del
Coliseo estuvo dedicada á celebrar '' los felices años que numera la
A lo que responde Bras: Serenísima Infanta de España y Princesa del Brasil, D¡.1 Carlota Joa-
quina de Borbón, en debida manifestación de vasallaje á nuestro So-
O quién tuviera un gaznate berano el Señor D. Carlos I V (que Dios guarde), y como un peque-
de cinco varas de largo ño átomo del amor que debe rendir todo fiel vasallo:" púsose en es-
cena la gran comedia El maestro de Alejandro, y siguió el suntuoso
Gila. Guarda, Bras, para mañana,
baile, invención de Mr. Morali, Divertimiento de los villanos. E l pro-
que te acabas la cazuela.
grama dice: " A todo Teatro ( y con previa general iluminación de
Bras. Anda á moler á tu abuela:
vistosos y armoniosos candiles, de nueva invención y exquisito gusto),
todavía tengo gana.
Suenan de pronto músicas alegres que cantan,
Sabe que á tus puertas tienes
la Redención de Israel: Acudid, pastores
abre las puertas que viene todos con fervor,
el verdadero Mesías que á la media noche
á que los muros le entregues. ha nacido el sol.

Esta copla vieja viene á demostrar que es más antiguo de lo que se


Pero contra el tal centinela Miguel y su Quién como Dios! nada pue- creía aquello de noche en que el sol brilló, que tanto ha sido criticado á
den, y el implacable soldado acaba por llamarle impertinente y vol- un excelso poeta mexicano.
ver la espalda á los peregrinos, que alfinse resuelven á guarecerse Viene Gabriel, anuncia á los pastores el nacimiento del niño Dios
en mísero y desmantelado portal. y les invita á ir á Belem á adorarle, lo que ellos hacen muy de buen
Estamos en un campo yermo y á todos los aires del invierno más grado, y aparece el Portal y Jesús en un pesebre y María y José á sus
cruel, no obstante lo cual el poeta mezcla y confunde las Estaciones, lados, y cántase la gloria y alegres coplas y gozosos villancicos, y ca-
obligado por la fuerza del consonante, puesto que los pastores dicen, da cual ofrece al Niño lo mejor que posee, viandas, frutas, flores y pu-
y por dos veces, ro y sincero amor, y la pastorela concluye abriéndose sobre el feliz
portal de Belem todos los esplendores de la Gloria, que durante trein-
Feliciano. Son crecidos los rigores ta y tres años habría de quedar huérfana de la segunda persona de la
con que nos maltrata el frío. Omnipotente Trinidad.
Rosaura. Ya me acaba el cruel estío: Feliz el para nosotros ignorado poeta, que de tan antiguos tiempos
paremos aquí, pastores. viene recreando á los sencillos de corazón con su humildísima obra,
Bato. Gran trabajo es caminar por la cual viven en el mundo infantil el valiente Miguel, el fanfa-
con tan riguroso estío. rrón Luzbel, el gritón Pecado original, los rústicos Bato y Bras y la
Rosaura. Helada vengo de frío; poco escrupulosa Gila!
démonos prisa á cenar.

Todo lo disponen para el caso, y pronto se enciende el fuego y es- CAPITULO XII
tá lista la cena, que alegremente despachan, añnado cada pastor con
su cuchara. E l glotón Bato exclama,

1791.—1792.
Quién tuviera veinte bocas
y cuarentamil barrigas No pudiendo, en obsequio á la brevedad, hablar de todas las fun-
para llenarlas de migas. ciones de la temporada de 1790 á 1791, me referiré á las más notables
por cualquiera circunstancia. El domingo 25 de Abril la función del
Coliseo estuvo dedicada á celebrar '' los felices años que numera la
A lo que responde Bras: Serenísima Infanta de España y Princesa del Brasil, D¡.1 Carlota Joa-
quina de Borbón, en debida manifestación de vasallaje á nuestro So-
O quién tuviera un gaznate berano el Señor D. Carlos I V (que Dios guarde), y como un peque-
de cinco varas de largo ño átomo del amor que debe rendir todo fiel vasallo:" púsose en es-
cena la gran comedia El maestro de Alejandro, y siguió el suntuoso
Gila. Guarda, Bras, para mañana,
baile, invención de Mr. Morali, Divertimiento de los villanos. E l pro-
que te acabas la cazuela.
grama dice: " A todo Teatro ( y con previa general iluminación de
Bras. Anda á moler á tu abuela:
vistosos y armoniosos candiles, de nueva invención y exquisito gusto),
todavía tengo gana.
se liarán visibles sus decoraciones, presentándose á igualdad respec- H e aquí la copia de su contrata, al uso de la época: " D i g o yo Juan
tiva Actores y Actrices, con la más posible decencia, en debida gra- Lagenheim, que me ajusté con Gerónimo Marani, Asentista del Tea-
titud de tan festivo día: el adorno de los intermedios será de la mejor tro de esa Corte, á servirle en él y por el sueldo de quinientos pesos
elección, así en lo armonioso de su compuesto, como en la novedad desde hoy día de la fecha, hasta el último del Carnaval próximo ve-
de su invención que aumentará la brillantez. Y siendo indispensable nidero, en la plaza de Primer Galán, haciendo por ahora en cada se-
aumentar los costos, lo es asimismo, que la paga sea doble, previa mana solamente dos comedias en los domingos y jueves de ellas ó en
licencia y calificación superior." los que se me señalen con la debida anticipación; y en caso de que
Aquí es oportuno decir, en qué consistía el aumento de luces del llegue á estar en aptitud de ejecutar algunas comedias más, las haré
Teatro en días solemnes, y cuánto importaba el gasto, según una por sólo el salario de los expresados quinientos pesos. Asimismo se-
nota firmada por Miguel Meneses: " R a z ó n del número de Candiles ra de mi obligación hacer todos los Galanes en comedias ó en zarzue-
y luces que en ellos se aumentan los días de Besamanos.—Cinco can- las de música, y en esta clase, si se ofreciere, cantaré saínetes y to-
diles en el cielo raso de á doce luces cada uno, que son sesenta luces: nadillas en algunos intermedios, precediendo la anticipación de una
Otro dicho con diez y ocho luces: Cuatro dichos del frente del Tea- perfecta enseñanza. En las comedias que además del Galán tengan
tro con seis luces en cada uno, y son veinticuatro luces: Cinco otros otros papeles de carácter igual ó que no desmerezcan de él, será de
dichos de á seis luces en cada u n o en el cielo raso, y son treinta lu- mi obligación hacerlos á más de las comedias referidas, y se me pa-
ces: Veintisiete candiles chicos en Palcos y Cazuelas de á cuatro lu- garan aparte aquellas adealas y gages que me toquen, sin abono de
ces cada uno, y son ciento ocho luces. Total, cuarenta y dos candiles comedia supernumeraria, por lo que me obligo á trabajar también la
con doscientas cuarenta l u c e s . " comedia que se da d z pilón en cada mes. E n verdad de lo cual firmé
En 22 de Junio se fijó en las puertas del Teatro un cartel impreso la presente en México á 12 de Junio de 1 7 9 0 . - J u a n de Lagenheim."
en que se avisaba: " Para mejor comodidad del público concurrente
Caudal de comedias de Juan de Eagenheim: La Morbella, El des-
al Teatro en sus salidas de él, se han aumentado varias puertas que
den con el desdén, El Mariscal de Virón, El Desertor, La Eugenia, An-
la franquearán diariamente, y también en cualquier suceso extraor-
tioco y Seleuco, Reinar después de morir, La fuerza del natural, El Prín-
dinario de temblor de tierra ó de incendio. Una de ellas, que .se ha-
cipe jardinero y fingido Clorida.no, El delincuente honrado, Progne y Fi-
lla ya en uso, gobierna ó da paso del primer piso al Portal donde es-
lomena, Del Cielo viene el buen Rey, El cerco de Roma, El Tetrarca, La
tán los tres arcos ó puertas principales. Otra lo facilita del tercer piso
Zayda, Ponerse hábito sin pruebas y Guapo Julián Romero, El Abrahán
y Cazuela de hombres á la misma calle del Teatro, á distancia pro-
castellano, El carbonero de Londres, Los carboneros de Francia, Gustos
porcionada de dicha puerta principal y de la que da comunicación al
y disgustos son no más que una imaginación, Dar la vida por su dama,
segundo piso, para que no impida la llegada de los coches. Otra fran-
Las armas de la Hermosura, No cabe más en amor, Conquista de las
quea la misma salida á la gente del Patio y Mosquete, que se condu-
Molucas, Mustajá."
cirá por la Puerta nuevamente hecha, además de las otras que se han
usado hasta aquí. E l paso interior que hay del primer piso al segun- En la noche del 9 de Julio se dió en el Coliseo una función por una
do, quedará franco para que los concurrentes usen de él como les Compañía de Bolatines, con el siguiente programa: " Ea maravillosa
convenga al tiempo de salir; pero el que había y ha servido hasta Suerte de la Tabla, Mesa y Silla, de diferente modo que el visto has-
ahora para el mismo fin en el tercer piso, quedará privado para tal ta aquí, se mantendrá sentada la Romanita á cuyo beneficio es la fun-
objeto, y lo propio la salida antigua de dicha Cazuela de hombres. ción, y otros dos haciendo un equilibrio, todos al mismo tiempo, y se
Eas puertas nuevamente habilitadas, estarán en franquía desde que hará otro parándose de pies en la silla, á que seguirá el salto de la
medie la tercera jornada de las funciones teatrales, dándose principio cinta, con salto de Dama y sin palo, continuando la suerte de la Ca-
el día 24 de este mes. E n las entradas 110 se hace novedad, pues és- pa y el Sombrero; y el Payaso bailará el Jarabe, vestido de mujer en
tas han de continuar por los mismos parajes que hasta ahora. Tam- la misma maroma. Habrá saltos en el aire, haciendo varios nuevos
poco ha de haber variación en la salida del segundo piso, que ha de con los grandes del Trampolín, y después de otros distintos el de k
continuar como hasta aquí. Y para que llegue á noticia de todos, se Puente, concluyendo con el mortal de pasar por cima de cuatro ca-
da la presente, de orden del Gobierno." ballos con sus ginetes. En la pequeña cuerda floja se harán las Cam-
panas de París con fuego de artificio. Se repetirá el equilibrio de la
En el mismo mes de J u n i o de 1790 y á 12 de él, la Compañía del Escalera suelta, de diferente modo que hasta aquí. Habrá también
Coliseo fué reforzada con un nuevo Galán de bien extraño apellido. dos suertes de manos que serán, la primera, quitarle á uno la camisa
-> c

para lo cüal disponen elegante


sin que lo sienta, y la segunda cargar una pistola con una bala que
una Folla, que excita su consuelo
aparará uno encima. La Romanita bailará el Minuet de la Corte y se
en que si lo mejor 110 fuere, lo escogido,
dará fin con nuevas Sombras impalpables."
iguale á lo pasado en divertido.
A beneficio de Teresa Marani, se representó el sábado n de Se-
Las piezas que por buenas han nombrado
tiembre El Padre avariento, y " l a pieza de mucho chiste y gracia El
es El Viudo Epifanio y El Tramposo,
embarazo y el parto fingido. Se cantó el buen saínete de El medio sim-
pieza que aquí no se ha representado
ple del caudal de Felipa Mercado, y una tonadilla nueva á solo, nom-
y esperan dará gusto en lo jocoso:
brada La hidalga en la Corte, por María Martínez, alias La Carpinte-
las dos partes también se han colocado
ra. También hubo dos bailes, el uno de El Ametamiro, y el otro el de la loca y sillero codicioso
de Los locos. Esta función, añadía el Programa, es dispuesta por Te- nombrado por el chiste en su porfía
resa Marani, primera Bailarina del Teatro, impulsada de su mayor El monigote astuto y Lotería.
agradecimiento á la benignidad pública que ha disfrutado, de la que
Dos piezas de cantado primorosas
aguarda, con el numeroso concurso, la fortuna de agradar acertando
harán los intermedios divertidos,
á servir."
siendo del mejor gusto, y deleitosas,
En 23 de Octubre la beneficiada fué Antonia Marani, con las pie-
que con placer ofrecen muy rendidos,
zas El chasco de la anciana, La forma del sombrero; el sainete La Pro-
Las lanchas y Boleras tan graciosas,
cesión, y los bailes El Quácaro, y El amor corsario. Siguió Juana Ma-
y otros sones del pais, ya conocidos,
rani con las piezas El sastre y su hijo, Cada uno en su casa y Dios en
Jarabe y Bergantines cantarán,
la de todos, y Los maridos engañados: cantáronse las seguidillas Dor-
, las que Acosta y Morales bailarán.
mido en una peña, y No lloréis, Fabio, celos; y bailáronse Los bergan-
tines, La cucaña, Las boleras, La alemanda, y los bailes del país, Los Atendiendo á dar gusto, han preparado
garbanzos por Anita Espíndola, alias La Magueyito, y La Tirana. E l La Alemanda, que enlaza en acción fina,
programa traía esta advertencia: " E n cuanto á la entrada, desearía y el gran baile de todos celebrado
sinceramente la interesada que su querido público la disfrutase fran- que es Las ferias del Puerto, se destina:
ca; pero ya que esto no es compatible con su suerte, deja á lo menos con esto pondrá fin todo el cuidado,
al arbitrio de los que ocupan los palcos y lunetas el hacer la contri- y á suplicar, su afecto leal se inclina,
bución que sea de su agrado, pidiéndoles, sí, la asistencia de todos se sirva vuestra fiel Benevolencia
modos. Para los lugares no arrendados, la paga será como en día de honrarnos esta vez con su asistencia.
trabajo."
En otras ocasiones de beneficio los programas eran redactados en Nota. Se cobrará la entrada lo mismo que en los pasados benefi-
verso y aquí va una muestra, que recomiendo: cios: en cuanto á Cuartos y Asientos de temporada, se deja la contri-
bución á la generosidad de las Nobles Personas que los o c u p a n . "
Ultimo Beneficio, que de gracia E l programa para el beneficio de María Marcela y Morales, en ver-
Su Excelencia piadoso ha concedido, so también, terminaba así:
en que su gratitud benigno espacia
premiando su mérito sabido: Anita Hijar ofrece
previene dar lugar con eficacia
boleras nuevas,
á quien también quiere sea atendido:
y Felipa Mercado
disfrutaránle pues, Antonia San Martín,
da gusto en ellas.
con Juanito Marani, bailarín.
Y así en justa razón su afecto amante
procurará esforzar con vivo anhelo, E l beneficio del Primer Galán Juan de Lagenheim (que en el pro-
el ansia que profesan incesante grama está escrito Languenheim, aunque él firmaba como primero va
de al público servir con leal desvelo, puesto), comenzó con la Pitipieza nueva, Industria contra miseria ó el
Chispero: en el primer intermedio se cantaron las seguidillas Un rús-
en aplausos y en productos, porque Gerónimo Marani, contaba con
tico á un jilguero, por María Martínez, alias la Carpintera; y bailó el
buenos y numerosos amigos, y era muy apreciado por su habilidad.
Jarabe y una Tiranita A n a Maguei y Espíndola. Siguió la pieza Los
Su repertorio ó caudal de Bailes constaba de los siguientes: La esta-
locos de mayor marca, y en el intermedio bailó La Bamba Poblana Jo-
tua, Los Floreros, El enano, El piriodo, El sastre, La silla de manos,
sé María Morales, acompañándole el figurante José Acosta, y cantó
El casamiento de los labradores, Los jardineros, Los amoladores, El
Felipa Mercado las seguidillas Los más finos afectos. Continuó la fun-
horno de vidrio, Los húngaros, El caballito, El médico, El baile inglés,
ción con la Pitipieza El enfermo fugitivo; Juana Marani y su hermano
Los cazadores, Los pescadores, El Sarao, El Ametamiro, El convidado
bailaron La Alemanda; María Martínez bailó y cantó unas Boleras á
de Piedra, El baile de Baco y los Locos. Con ellos alternaban los del
solo, y siguió el gran baile de Los artesanos y riña de peluqueros. Con-
caudal de Morali, extranjero también, en que figuraban El amor cor-
cluyó el espectáculo con la pieza El Caballero de Medina.
sario, El Gran Señor, El escultor, El fraquesar de Londres, Venus y Vul-
La concesión de funciones de beneficio correspondía al Virrey, que cano, La sorda, Los gitanos, La muerte de Arlequín, Los viejos remoza-
las acordaba según el mérito de los Actores y como una recompensa dos, El capitán de navio, El holandés, El esqueleto, La dama celosa, La
de los esfuerzos que por agradar al público hacían los interesados. Conquista de México, La jamaica, Los maridos burlados, El barbero per-
Por ser digno de esta gracia el Primer Galán Fernando Gavila, aun- lático y el Escribano ladrón.
que no había hecho toda la temporada por haberse ajustado con Ma-
E l final de aquella temporada, no fué muy bueno, á causa de que
rani ya muy avanzada, tuvo á su vez su beneficio con las piezas El
Antonia de San Martín dió en enfermarse ó en darse por enferma,
Albañil borracho y el Abate caído en la trampa, El ciego por su provecho
obligando al empresario á cambiar frecuentemente las comedias anun-
y el Payo imprudente, El chico y la chica, en la que cantó Ana Maguei
ciadas por otras en que aquella no trabajase, ó á confiar á la Sobre-
unos airecillos graciosos, y El tonto Alcalde discreto. Entre pieza y
s a l i e r a los papeles en que la Antonia seguía siendo la favorita de
pieza se bailaron el Jarabe de la tierra, unas Boleras, un Solo á la in-
sus muy numerosos partidarios. Quejóse y con justicia el Asentista,
glesa y El fandanguillo de Cádiz. María Martínez, la Carpintera, can-
ocurrió al Virrey para que pusiese en orden á la primera Dama, obli-
tó unas Boleras nuevas del mejor gusto, y para conclusión se dió el
gándola á ser menos informal en su trabajo; pero ella presentó ex-
baile El Florero astuto.
tensos certificados de sus enfermedades é imposibilidad de trabajar,
Vino después el beneficio de Juan Moreno, primer gracioso, Mi- que firmaban las siguientes eminencias médicas de la Colonia, cuyos
guel de Ayala, segundo, y José Duque, tercer galán, con las piezas nombres y títulos creo curioso poner aquí, y fueron los siguientes:
El Alcalde de Moda ó Crítica de los españoles afectos á lo extranjero, —D.José Gracicla y Bernal, Bachiller en ambos derechos, Licenciado
El mundo al revés ó el Triunfo de las mujeres, y Los Borlados: se re- en Artes, Doctor en Medicina, Catedrático de Anatomía y Cirugía en
presentó después el unipersonal ó monólogo compuesto por Fernan- esta Real y Pontificia Universidad, Médico de pública aprobación y
do Gazula, que también era autor dramático, y que él mismo dijo ejercicio, y uno de los del Turno del Apostólico Colegio de Propa-
para dar gracias á nombre de los beneficiados. Amenizaron la función ganda Fide de San Fernando de esta Corte, etc.—El Lic. D. Manuel
los saínetes El Oso y La Venta, y los bailes El esqueleto, El jarabe y El Antonio Moreno, de la Real Sociedad Vascongada de los Amigos del
Fandanguillo. País, y Director de la Real Escuela de Anatomía y Cirugía, de esta
Eos saineteros Machuca y Arízar representaron en su función de Capital.—El Bachiller D. Alejo Ramón Sánchez, Director de Ana-
gracia Don Cosme el Toreador, El paje pedigüeño, El engaño y el des- tomía del Real Anfiteatro, Cirujano Mayor del Real Hospital de Na-
engaño y El Abate albañil: Felipa Mercado, alias la Gata, cantó unas turales y Cirujano Mayor del General de San Andrés de esta Capi-
seguidillas, y otras nombradas Las naves muy veleras María Martínez. tal. El Dr. Gracida tuvo su habitación en las calles de Jesús María
Machuca bailó La muerte de Arlequín y La Bamba, y Arízar y la Ma- y su Estampa, con despacho en la esquina de la calle del Parque.
gueyito El farabe.
Aunque respetables todos ellos, D. Cosme de Mier y Trespalacios,
Gerónimo Marani, como empresario que era, tuvo un segundo be-
como Juez de Teatros por especial acuerdo del Virrey, quiso que la An-
neficio con El día de Lotería y El Chasco del Sillero, Las burlas de
tonia fuese reconocida por otro médico por él nombrado, y al efecto
Crispín, El callejón de la Plaza Mayor y El Alcalde justiciero. Canta-
designó á D. Daniel de Usúliban, Doctor en Filosofía y Medicina,
ron la Gata y la Carpintera, y bailáronse La Cucaña, La Feria del
Ex-Profesor de Matemáticas en el Real Colegio de Tolosa, Premia-
Puerto, Las Boleras y los bailes de la tierra Bergantines y Jarabe. E a do del Premio Universal de Filosofía en dicha Universidad, Indivi-
función de beneficio del Bailarín y Empresario ó Asentista fué buena duo de la Real Sociedad Médica de Edimburgo, y de la de Cádiz, Co-
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rrespondiente de las de Londres, de la de Ciencias de Tolosa, Médico varias cortes extranjeras, á presencia de sus soberanos, á saber: en
de los Hospitales de San Andrés y de Jesús Nazareno, del Regimien- Alemania, Moscovia, Londres y París, y también en la de Madrid,
to de Infantería de Puebla, etc. en donde lograron el mayor aplauso, como lo esperan también del
Como puede verse, el Médico elegido por el Juez, ganaba en títulos delicado gusto de este respetable público.—Esta compañía dará prin-
á sus tres colegas. L a Primera Dama no encontró la amable condes- cipio á sus funciones el 17 del presente mes en el Teatro, mostrando
cendencia de aquellos para con sus melindres y caprichos, y sin más su destreza en las muchas habilidades que harán en Maromas tiran-
ni más informó que sus enfermedades no eran causa bastante para tes, con balanza y sin ella, en cuerdas de voltear, Alambre flojo y
que dejase de trabajar; pero si contra su opinión insistía ella en no Equilibrios: Saltos de nueva invención con diferentes posturas; Suer-
creerse capaz de hacerlo, estimaba conveniente que se la sujetase á tes
_ particulares de extraordinaria vista, que serán en la Maroma el
un enérgico sistema curativo, " ministrándole preparaciones de Mer- Baile inglés, un salto atrás girando el cuerpo de un lado á otro, con
'' curio y haciendo á un lado los pretendidos descubrimientos con que una suerte de entrar y salir por un aro; Saltos singulares como el de
" e l charlatanismo ha procurado en todos tiempos y países abusar de la Cinta, el grande del Guerrero, y otros; en el Alambre se jugarán
" l a credulidad del v u l g o . " tres naranjas en el aire con un tenedor en la boca y otro en cada ma-
La Primera Dama negó indignada que pudiese necesitar semejantes no, á ensartarlas todas á un mismo tiempo; en la cuerda floja poner-
medicamentos, y añadió que '' hablando con el respeto debido, no pue- se de pie derecho y hacer un molino de viento; á más se harán otras
de cumplir con lo que se le m a n d a " en tal supuesta curación, " p o r lo suertes.—El primero de los individuos de dicha compañía que subi-
cual está pronta, si se necesitare, á continuar en su plaza de Primera rá á la Maroma Tesa, será uno llamado Escaramuza, Americano; Se-
Dama, desempeñándola hasta donde alcancen sus fuerzas y s a l u d . " gundo el Caraqueñito; Tercero el Holandés; Cuarto el célebre Payaso,
El Virrey creyó necesario castigar á la Actriz que así se vendía á privilegiado por el Rey de Francia, primer Volteador en el Aire.—
sí misma, y por su orden el Juez Mier, dictó la siguiente sentencia: Este y todos los demás harán lo posible por complacer á este respe-
" Vista la anterior respuesta en que se descubre la resistencia de An- table público, y acreditarle que sus ofertas no son comunes y sí ver-
tonia de San Martín á curarse radicalmente de la enfermedad de que daderas, acerca de la destreza, primor y singularidad con que ejecu-
adolece, con la que es notorio no puede desempeñar su plaza, como tarán sus habilidades, en que oportunamente tendrá parte la hija del
ha acontecido en el año anterior en que percibió dos mil cien pesos por Romano, cuya salida se anunciará."
su contrata y la comedia que llaman supernumeraria, haciendo repe-
Por satisfecha se dió Antonia de San Martín con la determinación
tidas y continuas faltas so color de sus indisposiciones, avisando de
de Mier de dejarla en libertad para 110 escriturarse, lo cual ella desea-
ellas á la hora crítica de empezar la comedia, todo lo que incomoda
ba, contando, como contaba, con más que suficientes ahorros, y segura
á la compañía, perjudica gravemente á la pública diversión que de-
de que el Coliseo sería á la postre el perjudicado. En consecuencia,
be sostenerse, y considerando asimismo que perjudica y turba el
para la temporada que había de correr desde el primer día de Pascua
buen orden exterior del Teatro: Por estas y otras razones debía man-
de Resurrección de 1791 hasta el último día del carnaval de 1792, en
dar y mando al Asentista del Teatro, proceda prontamente á formar
que terminaría el remate de Gerónimo Marani, la Compañía del Co-
lista de la Compañía según le conviniere y acomodare sin contar con
liseo de México estuvo así formada:
Antonia de San Martín.—Marzo 26 de 1791." Que todo ello fué con-
certado y convenido para mortificar la soberbia y las veleidades de la DE REPRESENTADO.—Primera Dama, Gertrudis Solís: Segunda y
hermosa y aplaudida Primera Dama, se comprueba con una razón Sobresalienta de la Primera, Josefa González: Primera Graciosa y So-
que firmada por el Escribano Zepeda consta en el expediente, y dice bresalienta de Primera y Segunda Dama, Marcela Elizondo (nueva):
que " llevada su declaración al Dr. D. Daniel Usúliban, se excusó de Segunda Graciosa, Gertrudis Rocha (nueva): Quinta Dama con obliga-
firmarla," con u n fútil pretexto. ción decantar, Elena Zeballos (nueva):Primer Galán, Juan Lagenheim:
Sobresaliente, Fernando Gavila: Segundo Galán, Miguel Zendejas: Ter-
Sobrevino en esto la cuaresma de 1791, y el coliseo suspendió sus cer galán y Segundo Barba, Nicolás Jaime: Cuarto, Miguel Meneses,
comedias y fué ocupado por una Compañía de Bolatines del País, que el joven: Quinto, José María Tenorio: Sexto, Miguel Ayala: Sétimo y
trabajaría los Domingos, Martes y Jueves. H é aquí su primer progra- Vejete, Mariano Rozuela: Primer Barba, José Domingo Rosales: Ter-
ma fechado el 17 de Marzo. " A v i s o al Público.—Ha llegado á esta cero, José Vicente de Rivera: Primer Gracioso, Juan Moreno: Segundo,
ciudad la famosa Compañía de Bolantines, que se anunció por el im- José Fragoso: Primer Apuntador, Norberto Inzaurraga: Segundo, Mar-
preso del día 7 de este mes.—Como allí se indicó han trabajado en celino Garfaño.
DE CANTADO.—Primera cantarína, Felipa Mercado: Segunda, Ma- mo Hospital, en el lugar que corresponde á su destino. Que el com-
ría Martínez: Tercera, Rosalía Chacón (nueva): Cuarta, Elena Zeba- poner las diferencias de los Cómicos, conocer de sus causas por razón
llos: Primer Sainetero, Sebastián de Guzmán: Segundo, Mariano Arí- de oficio, señalar la hora, cuidar de que las decoraciones sean hones-
zar: Tercero, J u a n Puerto: Cuarto, José Fragoso. tas, con lo demás anexo y dependiente, corresponde á ese Superior
ORQUESTA.—Primer violín, Manuel Delgado: Segundo y Maestro, . Gobierno, y que mandando mi actual Virrey cesar al Juez de Teatro
Manuel Aldana: Primer Ripiano, Francisco Delgado: Segundo, Ga- que había elegido, se prevenga que á ejemplo de Madrid concurran
briel Martínez: Primera viola, José Mora: Segunda, Félix Ortiz: / V > por t u r n o semanario los Alcaldes de la Sala del Crimen de esa mi Real
clarión, Pablo Buisem: Segundo, José Delgado: Bajo, Mariano Audiencia, á efecto de hacer observar con prontitud el b u e n orden,
Flores: Contrabajo, J u a n Ramírez: Maestro de Escoleta, J u a n Ignacio quietud y sosiego público durante la representación; entendiéndose que
Cabrera. h concurrencia del Regente, si quisiere ir al Teatro, sea al Palco que
según contrata de arrendamiento se hubiese asignado al Hospital;
DE BAILE.—Gerónimo Marani, J u a n Marani, Teresa Marani Jua-
y asimismo, que la concurrencia del Juez del propio Teatro, sea de
na Marani: Bailarines de jila, José María Morales, F e r n a n d o Gavila,
Vos el Corregidor y Alcaldes Ordinarios, y 110 de los referidos Alcal-
José Joaquín Rivera, José Vigueras: Bailarinas, A n a Zenayas, María
des del Crimen de esa Audiencia; lo que os participo para vuestra
Pacheco, Gertrudis Sánchez, María Antonia Marani.
inteligencia y gobierno, y áfinde que, como os lo ordeno y mando,
Servicio del Teatro.—Administrador, Miguel Meneses: Carpintero,
cumpláis y hagáis cumplir y ejecutar, puntual y efectivamente en la
J u a n de Zúñiga: Pelliquero, Rafael González: Portero, Felipe Sol: Guar-
parte que respectivamente os corresponda, la expresada mi Real reso-
darropa, Miguel Silva: Mozo de cuartos, Mariano Espinosa: Mozo de
lución: en inteligencia de que con esta fecha de este día se comunica
luces, Lino Zúñiga: Guarda-Casa, José Dimas: Pintor, Francisco Bra-
también al propio efecto al nominado mi Virrey, al Regente de esa
vo: Mozo de Bancas, Serapio Altamirano: Acomodador de la Cazuela
Audiencia y á la Sala del Crimen de ella, por ser así mi v o l u n t a d -
de hombres, Vicente E n r í q u e z : Id. de la de mujeres, José Martínez.
Fecha en Aranjuez á quince de Abril de mil setecientos noventa
Escribano del Teatro, Mariano de Zepeda. y dos. Yo EL REY.—Por mandado del Rey Nuestro Señor .—Antonio
El arrendamiento del T e a t r o , pagado al Hospital de Naturales, Ventura de Tara neo."
importaría ocho mil doscientos veinticinco pesos.
Y aquí debemos hacer mención de una nueva Real Cédula firma- Esta Real Orden fué cumplida y obedecida en México á 14 de Ju-
da por Carlos I V , resolviendo las competencias suscitadas entre los lio del-mismo año de 1792.
Virreyes y la Audiencia en lo referente á asuntos de Teatro, y dice:
" E L REY.—Corregidor y Alcades Ordinarios de la Ciudad de Mé-
xico.—En carta de veintiocho de Mayo del año próximo pasado me
representó con testimonio y una certificación D. Francisco Javier
Gamboa, Regente de esa Audiencia, lo ocurrido con mi Virrey de esas CAPITULO XIII
Provincias, de resultas d e haberle nombrado Yo y á sus sucesores en
el mismo empleo en Real Cédula de 19 de Setiembre de mil setecien-
tos noventa, por Juez del Hospital Real de Indios de esa Capital;
nombrándose cada dos años un Oidor para que le ayudase en los asun- 1792.—1794.
tos que le encargara, y el efecto diminuto que dicho nombramiento
había surtido, áfinde q u e enterado de ello me sirviera resolver lo Del 8 de Abril de 1792 al 12 de Febrero de 1793 la Compañía del
que fuera de mi Real agrado. Visto en mi Consejo de las Indias, con Real Coliseo de México estuvo así formada: Primera Dama, Antonia
lo que en su inteligencia y de los antecedentes expuso mi Fiscal, y de San Martín: Segunda, Marcela Elizundo: Sobresalienta, Josefa Gon-
consultándome sobre ello en treinta y uno de Enero de este año, h e zález : Primera Graciosa, Teresa Acosta: Segunda, A n a de Castro:
resuelto declarar como por esta Real Cédula declaro, que al Regente Primer Galán, Fernando Gavila; Otro, J u a n de Lagenheim; Segundo,
de esa Audiencia como J u e z del Hospital, de quien es finca el Coli- Miguel Zendejas: Tercero, Nicolás Jaime: Cuarto, Miguel Meneses
seo de Comedias, sólo compete en este respectivo á obras, reparos, (el menor): Primer Barba, José Domingo Rosales: Segundo, Gerónimo
y cobro de productos en q u e se arriende, pudiendo concurrir, si qui- Guerrero: Primer Gracioso, J u a n Moreno: Segundo, Miguel de Ayala:
siere, por vía de diversión al Palco que parece tener reservado el mis- Partes de por medio, Mariano Rozuela, José Duque, Ignacio Vega,
DE CANTADO.—Primera cantarína, Felipa Mercado: Segunda, Ma- mo Hospital, en el lugar que corresponde á su destino. Que el com-
ría Martínez: Tercera, Rosalía Chacón (nueva): Cuarta, Elena Zeba- poner las diferencias de los Cómicos, conocer de sus causas por razón
llos: Primer Sainetero, Sebastián de Guzmán: Segundo, Mariano Arí- de oficio, señalar la hora, cuidar de que las decoraciones sean hones-
zar: Tercero, J u a n Puerto: Cuarto, José Fragoso. tas, con lo demás anexo y dependiente, corresponde á ese Superior
ORQUESTA.—Primer violín, Manuel Delgado: Segundo y Maestro, . Gobierno, y que mandando mi actual Virrey cesar al Juez de Teatro
Manuel Aldana: Primer Ripiano, Francisco Delgado: Segundo, Ga- que había elegido, se prevenga que á ejemplo de Madrid concurran
briel Martínez: Primera viola, José Mora: Segunda, Félix Ortiz: / V > por t u r n o semanario los Alcaldes de la Sala del Crimen de esa mi Real
clarión, Pablo Buisem: Segundo, José Delgado: Bajo, Mariano Audiencia, á efecto de hacer observar con prontitud el b u e n orden,
Flores: Contrabajo, J u a n Ramírez: Maestro de Escoleta, J u a n Ignacio quietud y sosiego público durante la representación; entendiéndose que
Cabrera. h concurrencia del Regente, si quisiere ir al Teatro, sea al Palco que
según contrata de arrendamiento se hubiese asignado al Hospital;
DE BAILE.—Gerónimo Marani, J u a n Marani, Teresa Marani Jua-
y asimismo, que la concurrencia del Juez del propio Teatro, sea de
na Marani: Bailarines de jila, José María Morales, F e r n a n d o Gavila,
Vos el Corregidor y Alcaldes Ordinarios, y 110 de los referidos Alcal-
José Joaquín Rivera, José Vigueras: Bailarinas, A n a Zenayas, María
des del Crimen de esa Audiencia; lo que os participo para vuestra
Pacheco, Gertrudis Sánchez, María Antonia Marani.
inteligencia y gobierno, y áfinde que, como os lo ordeno y mando,
Servicio del Teatro.—Administrador, Miguel Meneses: Carpintero,
cumpláis y hagáis cumplir y ejecutar, puntual y efectivamente en la
J u a n de Zúñiga: Pelliquero, Rafael González: Portero, Felipe Sol: Guar-
parte que respectivamente os corresponda, la expresada mi Real reso-
darropa, Miguel Silva: Mozo de cuartos, Mariano Espinosa: Mozo de
lución: en inteligencia de que con esta fecha de este día se comunica
luces, Lino Zúñiga: Guarda-Casa, José Dimas: Pintor, Francisco Bra-
también al propio efecto al nominado mi Virrey, al Regente de esa
vo: Mozo de Bancas, Serapio Altamirano: Acomodador de la Cazuela
Audiencia y á la Sala del Crimen de ella, por ser así mi v o l u n t a d -
de hombres, Vicente E n r í q u e z : Id. de la de mujeres, José Martínez.
Fecha en Aranjuez á quince de Abril de mil setecientos noventa
Escribano del Teatro, Mariano de Zepeda. y dos. Yo EL REY.—Por mandado del Rey Nuestro Señor .—Antonio
El arrendamiento del T e a t r o , pagado al Hospital de Naturales, Ventura de Tara neo."
importaría ocho mil doscientos veinticinco pesos.
Y aquí debemos hacer mención de una nueva Real Cédula firma- Esta Real Orden fué cumplida y obedecida en México á 14 de Ju-
da por Carlos I V , resolviendo las competencias suscitadas entre los lio del-mismo año de 1792.
Virreyes y la Audiencia en lo referente á asuntos de Teatro, y dice:
" E L REY.—Corregidor y Alcades Ordinarios de la Ciudad de Mé-
xico.—En carta de veintiocho de Mayo del año próximo pasado me
representó con testimonio y una certificación D. Francisco Javier
Gamboa, Regente de esa Audiencia, lo ocurrido con mi Virrey de esas CAPITULO XIII
Provincias, de resultas d e haberle nombrado Yo y á sus sucesores en
el mismo empleo en Real Cédula de 19 de Setiembre de mil setecien-
tos noventa, por Juez del Hospital Real de Indios de esa Capital;
nombrándose cada dos años u n Oidor para que le ayudase en los asun- 1792.—1794.
tos que le encargara, y el efecto diminuto que dicho nombramiento
había surtido, áfinde q u e enterado de ello me sirviera resolver lo Del 8 de Abril de 1792 al 12 de Febrero de 1793 la Compañía del
que fuera de mi Real agrado. Visto en mi Consejo de las Indias, con Real Coliseo de México estuvo así formada: Primera Dama, Antonia
lo que en su inteligencia y de los antecedentes expuso mi Fiscal, y de San Martín: Segunda, Marcela Elizundo: Sobresaliente!, Josefa Gon-
consultándome sobre ello en treinta y uno de Enero de este año, h e zález : Primera Graciosa, Teresa Acosta: Segunda, A n a de Castro:
resuelto declarar como por esta Real Cédula declaro, que al Regente Primer Galán, Fernando Gavila; Otro, J u a n de Lagenheim; Segundo,
de esa Audiencia como J u e z del Hospital, de quien es finca el Coli- Miguel Zendejas: Tercero, Nicolás Jaime: Cuarto, Miguel Meneses
seo de Comedias, sólo compete en este respectivo á obras, reparos, (el menor): Primer Barba, José Domingo Rosales: Segundo, Gerónimo
y cobro de productos en q u e se arriende, pudiendo concurrir, si qui- Guerrero: Primer Gracioso, J u a n Moreno: Segundo, Miguel de Ayala:
siere, por vía de diversión al Palco que parece tener reservado el mis- Partes de por medio, Mariano Rozuela, José Duque, Ignacio Vega,
J*>

Manuel Alanís, Diego Luciano Rodríguez: Primer Apunte, Norberto


dó el Sr. D. José Cárdenas al Soberano, exponiendo haberlas aumen-
Inzaurraga: Segundo, Miguel Meneses: Tercero, José Garduño: Guar-
tado en su tiempo desde siete mil hasta treinta y siete mil pesos. Así
darropa, Mariano Rivero: Ayudante, Miguel Silva.—Cantores: Prime-
nos persuadiríamos que la administración del Coliseo por el Hospi-
ra, Felipa Mercado: 2? María Martínez: 3^ María Loreto Rendón: 4?
tal tuvo bastante parte, y no cesó hasta el año de 1756, en que repre-
Francisca Montes: 5? Matilde Guzmán: 65> Rosalía Estrada: Primer
sentando el propio Sr. Cárdenas, la pérdida que en los de 54 y 55
Sainetero, Sebastián Guzmán: 2? Mariano Irízar: 3? Ignacio Flores:
había sufrido, de cuyo repentino accidente no se conocía la causa, se
4? Mariano Girón.—Bailarines:Gerónimo Marani.su mujer y cuatro
arrendó la Casa por siete años, y se ha estado arrendando en todos
hijos: José María Morales: Figurantes, Joaquín Rivera, José Vigueras,
los veintiséis subsecuentes y en diferentes precios, de modo que, cuan-
Mariano González, Ana Zendejas, Gertrudis Sánchez, Ana Pacheco,
do más han llegado á dar por ella ocho mil y tantos pesos, habiendo
Feliciana Espinosa, María Albina: Para cantar y bailar sones del país,
por lo general bajado en suma considerable.
José Bonilla.—Pintores, Juan Ignacio Tamayo, Juan Sáenz: Carpin-
tero, Juan Zúñiga: Peluquero, Antonio Gómez.—Director, Dionisio " Ya V. S. lo ha visto en el presente, pues á pesar de repetidas Al-
Vernad. monedas, 110 hubo postor que pasase de cuatro mil y quinientos pesos-.
lo que advertido por su justificación, tuvo á bien consultar al Exce-
'' Notas.—Las dos partes de por medio, Manuel Alanís y Diego Lu-
lentísimo Sr. Virrey, y de su acuerdo determinó la administración
ciano Rodríguez, fueron ajustados lo mismo que los otros tres ante-
por el Hospital, conociendo sin duda las máximas de los arrendata-
riores; pero siendo unos sujetos viciosos á más de su poca aptitud, y
rios en tanto extremo gravosas como que se dirigían contra unos mi-
habiéndose ausentado, se tuvo por mejor para la Casa que 110 siguie-
serables Indios enfermos, careciendo de las limosnas y otros arbitrios
sen. Por las mismas razones fué echado el Guardarropa Rivera. La
que los demás Hospitales disfrutan, siendo constante que su subsis-
bailarina Feliciana Espinosa fué despedida, y por su falta se admitió
tencia es sólo debida al incesante duro trabajo en que se hallan su-
á la Pacheco. Ultimamente, la bailarina Ana Zendejas, habiéndose
mergidos, y á las piadosas entrañas del Rey, cuya Real protección es
casado se imposibilitó para ejercer su oficio, y en su lugar se puso á
su único consuelo.
María Albina.
" D e esa sabia determinación fué consiguiente mi entrada en dicha
" No siendo suficientes las cantoras que entraron desde el principio
Casa, que aunque me fué sensible en los principios, tanto por la con-
para desempeñar las dos piezas diarias conforme á sus ajustes, se ad-
sideración del mecanismo en que es forzoso entender, cuanto por el
mitió en 19 de Enero á Ana Espíndola."
temor de lidiar á todas horas con los Actores y otros dependientes de
Para dar razón de trabajos de esa temporada y de las dificultades
extraviados pensamientos, estoy contento en el día con el hecho de
que se presentaban para la siguiente, traslado aquí el Informe que
llegar á descubrir el valor de una finca, que por instantes veía acer-
el Director-Administrador dirigió con fecha 12 de Noviembre de 1792
carse á ser víctima dolorosa del desprecio.
á D. Francisco Javier de Gamboa, del Consejo de S. M., su Regente
en esta Real Audiencia, y Juez privativo del Hospital de Naturales. " Y o no podía entrar en ella de otro modo que con los ojos cerra-
dos á la luz que necesita la materia teatral, mayormente habiendo
Dice así: " B i e n notorios son á V. S. las Rentas con que subsiste
sido esa entrada intempestiva, porque las circunstancias que la mo-
el Hospital Real de Naturales de mi cargo, y que, mirado á todas lu-
tivaron 110 era posible diesen lugar á otra cosa. Ya se ve que ella es
ces, no tiene otra más segura y menos expuesta á lastimosas contin-
una materia bastantemente oscura aun para los más instruidos cómi-
gencias que la de la finca que sirve de Coliseo, aun cuando se arrien-
cos, siempre que mediante la práctica no se acomoden al gusto del
de por cuatro mil pesos que es el precio más ínfimo que hasta el día
país, ya disponiendo con arreglo á éste unas ú otras funciones, ó ya
se ha ofrecido en estos próximos tiempos, y aun cuando el mismo Hos-
proporcionando su ejecución por éstas ó las otras habilidades.
pital haya corrido con ella, que es lo que se infiere del Capítulo IV
de la Real Cédula expedida en 31 de Diciembre de 1741, en que man- " P e r o de cualquier manera, lo que no tiene duda es, que, segúu
da S. M. n o se dé en arrendamiento, sino que precisamente se ma- los progresos del tiempo que hasta hoy contamos, pueden ascender
neje por su Dueño. las utilidades en el año á doce mil pesos, sobre poco más ó menos, que,
como ve V. S., es un exceso desmedido aun en comparación del más
" L o s fundamentos en que esta declaración pudo estribar, no de-
subido arrendamiento. Y en verdad que si esto sucede cuando la di-
bieron ser otros que la mucha utilidad que por entonces se experi-
versión no está perfectamente desempeñada ¿qué deberíamos esperar
mentaría, respecto de los arriendos: y ello es, que en aquella época
trayéndose de otros parajes las personas de que ciertamente se care-
fué cuando estaban subiendo dichas rentas, en el grado que recomen-
ce para la representación y bailes?
A.
V3R
Ó

"Entonces, sin disputa se dedicarían las gentes de este vasto pú- faltando en Europa Graciosas que ejercen la Música y Graciosos que
blico á la continua asistencia del Teatro, porque no echarían de me- hacen también papeles serios, cantando en las piezas que lo piden,
nos la ejecución de buenos papeles, ni les cansaría la repetición de se busquen de esa calidad para que así se vean mejor logrados los
una misma cosa en los intermedios de la comedia, sino que les serían referidos proyectos."
deleitosas las nuevas invenciones, de que en el día, á más 110 poder,
El Virrey aprobó lo propuesto por el Mayordomo Administrador
se privan; con lo cual 110 sentirían en la paga el aumento que era
D. José del Rincón, apoyado por persona de tanto influjo y tan dis-
consiguiente para compensar al principio los costos que se causasen
tinguida como D. Francisco Javier de Gamboa, y acto continuo, dié-
en la enunciada conducción de Actores, y después el mayor realce de
ronse los pasos convenientes para alcanzar de S. M. el permiso para
sueldos.
proceder á la contrata de Actores y Bailarines, de los teatros de Ma-
" Por de contado, son precisísimos un Galán, una Dama, un Bar- drid y de Cádiz, á cuyas dos ciudades se enviaron cartas dirigidas á
ba, una Graciosa y un Gracioso, porque aunque es cierto que para to- elevados personajes y ricos comerciantes, instruyéndoles en la elec-
das estas plazas hay sirvientes, también lo es que en todas ellas se ción de artistas y poniendo á sus órdenes los fondos necesarios. Na-
advierten ciertos escollos difíciles de allanar. da de ello dió un resultado inmediato por razón de circunstancias
" ¿De qué sirve, pues, que en la primera estén ocupados dos hom- políticas, pero sí influyó y 110 poco en que los individuos de la Com-
bres, si el uno no gusta al público y ei otro, aunque merece la gene- pañía de nuestro Coliseo se disgustasen con el Administrador, con el
ral aceptación, está forzado y por eso continuamente achacoso? ¿De Regente de la Audiencia y con el mismo Virrey, Conde de Revilla
qué sirve que la segunda lo esté con la bien recibida Antonia de San Gigedo.
Martín, si enfermándose ésta no hay otra que ocupe su lugar, y, á
La primera manifestación de ese disgusto fué originada en un de-
más de gastarse el dinero, se lasta por otro lado, aflojando las entra-
creto del Virrey, relativo á funciones de beneficio en la temporada de
das, por no ser capaz la que se pone de suplir un papel tan principal
1793 á 1794, durante la cual siguió la misma Compañía que poco ha
como el de sobresalienta de la enferma? ¿De qué sirve que la terce-
dimos á conocer. E l decreto decía así: "México, 6 de Julio de 1793.—
ra lo esté con el adaptable Rosales, si este pobre, con tantos afios de
Aunque fueron determinadas las personas á quienes al tiempo de for-
ejercicio, está de tal manera quebrantado que sólo su acreditado buen
malizar el ajuste de las Compañías Cómica y de Bailarines de este
porte puede guiarlo á trabajar algunas noches? ¿De qué sirve, por
Coliseo, ofrecí ventajas en esta temporada, sin embargo, he resuelto
último, que lo estén las otras dos, si la Graciosa se ha llevado lo más
que gocen todos de ellas en la parte que sea posible, y al fin de que
de la Temporada enferma, y el Gracioso, como que sirve ya contra
así se verifique, tendrán los beneficios siguientes, por el orden y en
su voluntad, no trabaja del modo que exige el papel que obtiene?
los días que se indican, á saber: Domingo Rosales, el miércoles 17
" Pues esto es, ni más ni menos, lo que he visto y lo propio que de Julio: Marcela Elizundo, el miércoles 24 de ídem: Gerónimo Ma-
sucede en la Compañía de Bailarines, siendo por lo mismo indispen- rani, el miércoles 31: Antonia de San Martín, el miércoles 7 de Agos-
sable el ajuste y trasporte de dos intruídos sujetos, y de lo contrario to: Ana de Hijar y Castro, el sábado 17 de Agosto: Ana Espíndola,
dudo que para el año que viene pueda mantenerse esta esencial par- el martes 27: Miguel Zendejas, el miércoles 4 de Setiembre: Felipa
te de la diversión; pues á más de otras cosas tenemos ya la experien- Mercado, el sábado 14: Gertrudis Solís, el miércoles 25: María Mar-
cia en las manos, viendo á los principales que hoy la componen, so- tínez, el miércoles 2 de Octubre: Fernando Gavila, el sábado 12: Juan
bre agobiados de la avanzada edad, mucho tiempo hace impedidos, de Lagenheim, el miércoles 23: Teresa Acosta, el sábado 9 de No-
y ahuyentados por eso algunos apasionados del baile. viembre: Gerónimo Marani (segunda vez), el sábado 15: José María
" P o r eso vuelvo á decir, y es la materia de esta representación, Morales, el miércoles 27: los cuatro saineteros, el miércoles 4 de Di-
que sería muy conveniente traer las sietes expresadas habilidades de ciembre; el Cuarto Galán y 1? y 2? graciosos, el sábado 14: Figuran-
otras partes: y como quiera que ninguna se encuentra en este Reino tes de los bailes, el miércoles 8 de Enero de 1794: Partes de por me-
por la poca inclinación de sus patricios al Teatro, me parece á pro- dio, el sábado 18: Apuntadores, el miércoles 29: Partes de Cantado,
pósito que en atención á lo expuesto, se sirva V. S. consultar al Ex- el sábado 8 de Febrero: Figurantes de los bailes, el miércoles 29.—
celentísimo Sr. Virrey lo que tenga por más acertado en el particular; Cada uno de estos individuos, señalará la comedia y pequeña pieza
y si su determinación fuere de conformidad con lo que yo he pensa- que haya de ejecutarse en su respectivo día, pero no en el Baile ni
do, suplicar desde ahora á Su Excelencia se digne tomar inmedia- en los intermedios de cantado, pues en estos se seguirá el orden que
tamente las providencias oportunas, con especial encargo de que no se acostumbra.
"Respecto á que todos son beneficiados recíprocamente, todos tam- disfrutar del beneficio, y que deseará conseguir salud para hacer las
bién se trabajarán de balde, de modo que cada individuo tenga ásu fa- que le toquen en la Casa.—Ñorberto Inzaurraga, ídem.—José Duque,
vor el producto líquido de su función, sin pagar otra cosa que los gas- ídem, por ser nuevo en la plaza de 3? y 4?, y porque no le alcanza el
tos precisos de alumbrado, cobradores, orquesta y los demás que sean tiempo para estudiar, no teniendo caudal sabido.—María Martínez di-
indispensables, aunque no el Arrendamiento de la Casa, pues desde ce: que respecto á sus achaques no asegura trabajar en todas las vein-
luego les hago esta gracia por varias consideraciones justas que me tidós comedias, pero que lo hará en las que cómodamente pueda. —Feli-
mueven á ello. pa Mercado, ídem.—Juan Moreno dice: que agradece mucho el favor
" Cuando el beneficio sea á favor de dos, tres, ó más personas, re- de S. E., pero que los miércoles y los sábados son los únicos que le
partirán entre sí, á partes iguales, su producto líquido. permiten descansar y ejercitarse en dar giro á su comercio, por lo cual
110 puede admitir el beneficio, una vez que sólo ha de trabajar las co-
" T o d o s los que tengan Cuarto ó Asiento ajustado por temporada,
medias de la Casa.''
deben pagar en estos días de beneficio; pero con rebaja, porque la
experiencia en semejantes casos anteriores, ha acreditado que con- Por primera vez se daba el caso de que los cómicos del Real Coli-
viene así; y en este concepto, por cada cuarto de los de esta clase se seo rechazasen osadamente una gracia del Virrey, como dando á en-
pagará un peso, proporcionando á este modo la Luneta y asientos tender que no necesitaban de ella, y que no procuraban hacer méri-
que se hallen en el caso: pero los demás que no sean ajustados por tos para ser nuevamente escriturados, anticipándose así á lo que sobre
temporada, satisfarán el todo de lo que les corresponda, como se eje- su separación hubiere de determinarse una vez que llegasen las emi-
cuta diariamente.—Quedará al arbitrio de los beneficiados el cobrar nencias que se quería echarles encima. Pero el Conde de Revilla Gi-
la cuota que se señala á los ajustados por temporada, ó el contentar- gedo no era hombre capaz de aguantar pulgas de esta especie, y
se con lo que cada uno quiera voluntariamente darles, ya sea más, apenas se le comunicó lo acontecido, dictó lo siguiente:
ya menos, ya nada; pero debe entenderse que de ningún modo han '' H e visto con el mayor desagrado por el testimonio que me acom-
de entrar con bandeja para recoger estas contribuciones en los cuar- paña V. S. con fecha de ayer, las contestaciones dadas en vista de mi
tos, ni en las Lunetas y Bancas, sino que han de cobrarse en la Puer- Decreto de 6 del corriente mes, por Antonia de San Martín, Fernan-
ta, anunciándose al mismo tiempo que la Comedia, y en el Cartel, do Gavila, Norberto Inzaurraga, José Duque y Juan Moreno; y en
que la persona á cuyo favor es el beneficio, no exige á los ajustados consecuencia prevengo á V. S. que haga se le presenten inmediata-
por temporada otra contribución que la que quieran voluntariamen- mente los expresados sujetos, y que citando también al Administra-
te, ó por el contrario, que exige la cantidad señalada de un peso por dor del Hospital, vuelva á leerles el Escribano del Coliseo mi citado
cada cuarto. Decreto en la parte que les corresponda, para que expongan nueva-
" A fin de que todos los actores se hallen enterados de esta resolu- mente lo que se les ofrezca, en el concepto de que han de ser también
ción, se les juntará del mismo modo que cuando se les ajustó, y se instruidos de esta orden, quedando en la inteligencia de que si abu-
san más de mi bondad y de la consideración con que los trato y de que
les hará saber para su inteligencia y gobierno.—Revilla Gigedo."
no son acreedores, tomaré con ellos una providencia que no sólo los
D. Cosme de Mier y Trespalacios, Juez de Teatro, ordenó que este
escarmiente y enseñe á obedecer y acatar como corresponde mis supe-
Decreto se comunicase en la mañana del 9 de Julio á los interesados.
riores determinaciones, sino que los separe para siempre del espíri-
La certificación del Escribano, de haberlo hecho, dice, " á poco más
tu de partido en que ahora se hallan, y del engreimiento, altivez y
de las once, estando el Sr. Juez en la pieza del Tablado, y el Mayor-
soberbia que infundadamente tienen y de que deben estar muy dis-
domo Administrador D. José del Rincón, presentes todos los más de
tantes.
los citados, mandó S. S. se les leyese como se les leyó de verbo ad
verbum el Superior Decreto del Exmo. Sr. Virrey; y de él enterados, María Martínez y Felipa Mercado ó entendieron mal mi referido
la mayor parte guardaron silencio en manifestación de su obediencia, decreto ó no se les explicó bien, pues debiendo trabajar en las come-
y la Dama Antonia de San Martín dijo: Que por sus enfermedades dias de beneficio no sólo ellas sino Ana Espíndola y las otras partes
no puede dar abasto ni aun á las de su obligación, y menos podrá ha- de cantado, es bien claro que no pueden hacerlo las dos primeras ci-
cer veintidós comedias para ella y sus compañeros: sin embargo, da tadas en las veintidós que han de ejecutarse: así pues, es necesario
muchas gracias á S. E. por haberla tenido presente.—Fernando Ga- que haciéndolas V. S. comparecer solas, les haga esta explicación pa-
vila asentó también el hallarse enfermo, sin poderse acomodar á este ra que estén enteradas de que lo mismo que ellas pidieron es lo que
virtualmente mandaba mi citado Decreto, y que en este concepto es-
temperamento: da igualmente las gracias á S. E. sintiendo no poder
R, H. T.—T. I.—20
toy persuadido á que reiterarán las pruebas de su obediencia que me
han dado en otras ocasiones. Reinos, á fin de que en su vista pueda yo dictar la providencia á que
haya lugar.
" Dios guarde á V. S. muchos años. México, 10 de Julio de I793-—
El Conde de Revilla Gigedo— Sr. D. Cosme de Mier y Trespalacios." " H á g a s e saber á Mariano Arízar, que por las mismas razones de
Juzgaron los descontentos que estando como estaba adelantada la desagradecimiento indicadas por lo respectivo á Marani, queda ex-
cluido de trabajar en este Coliseo, y prohibido absolutamente de eje-
temporada, más cuenta les tenía concluirla y guardar sus resenti-
cutarlo en cualquiera otro del Reino, sin que pueda salir de esta Ca-
mientos para la próxima, y en la segunda notificación del Decreto
pital sin mi Superior permiso, y finalmente, dentro de tercero día
sometiéronse á lo que en él se disponía, dando por disculpa de su
contado desde la notificación de este decreto, me ha de acreditar en
primera actitud su mismo deseo de cumplir con el público y el temor
debida forma, por conducto del Sr. Corregidor, estar ocupado en ejer-
de no haberse hecho dignos de la bondad del Virrey, aceptando un
cicio que le produzca para mantenerse, pues de lo contrario, será
trabajo excesivo.
tratado como vago, ocioso y mal entretenido.
Pero llegó el Carnaval de 1794 y tras él Abril, en que debía formarse
'' Si Pedro Montero 110 se conformare en el acto de esta notificación
el nuevo plan de sujetos dependientes del Real Coliseo, y aquello fué
con lo que dispuse por lo respectivo á su salario, deberá entregar en
brotar por todos lados odios, exigencias, oposición y desconcierto.
el mismo acto la licencia con que vino á estos Reinos, y presentarse
El Virrey, tomando á lo serio la Real Orden que le erigía en único
diariamente al Corregidor de esta Capital, mientras que en virtud de
arbitro para componer las diferencias de los cómicos, excluyó á los
aquel documento dicto la providencia que convenga.
más irreducibles, y con el resto y con otros que hizo venir de teatros
"Me ha costado trabajo entender por la indebida distinción que se
de Provincia formó la Compañía, repartiendo obligaciones y señalan-
le da, que D. Mariano Flores es un músico del Regimiento de Dra-
do sueldos como mejor le pareció, y dispuso que, según costumbre,
gones de México, y marido de María Martínez (alias la Carpintera)-.
se hiciese reunir á los electos para hacerles saber el Superior Decreto.
es muy justa la determinación de que ésta se cure; pero no lo es me-
Cómicos y bailarines, comprendiendo que aquello no tenía ni pies ni
nos la de que se le notifique que dentro de tercero día contado desde
cabeza, y que sería imposible sostener temporada con tan incompleto
que se le haga la notificación, debe salir de esta Capital á incorpo-
y deficiente cuadro, resueltamente se negaron á firmar sus escritu- rarse en su Regimiento, llevando en su compañía precisamente á su
ras tal como estaban concebidas, y los unos pidieron se les dejase en mujer; quedando en la inteligencia de que ni uno ni otro han de po-
completa libertad para irse á donde mejor les acomodase, y los otros der ser empleados en Coliseo alguno de este Reino, ni menos tener
ofrecieron entrar en la Compañía sólo en el caso de que sus contratas conciertos en su casa ni fuera de ella; que haré celar estrechísima-
se reformasen según cada uno tuvo por conveniente. mente sobre la conducta de ambos, que serán castigados como corres-
Ea demasiada extensión que he venido dando á noticias teatra- ponda á los excesos que cometan y que hasta ahora les he disimu-
les de los últimos años, me obliga, á mi pesar, á reducir las que lado por pura conmiseración; y últimamente, que á fin de que se
tengo aún, puesto que creo ya conseguido mi objeto de haber dado verifique su salida de esta Capital sin la menor indulgencia, paso
exacta idea del modo con que estuvo constituido el Teatro de Mé- con esta fecha la orden conveniente al Sargento Mayor de la Plaza,
xico durante el Gobierno de los Virreyes, y esto basta para mi pro- y lo mismo ejecutaré por lo respectivo al Jefe de su Regimiento y á
pósito. los Magistrados de Puebla, quedando abolido desde ahora para siem-
Ahora, del nuevo conflicto, nada puede dar mejores noticias que pre el tratamiento de Don que se le da.
el siguiente tronante decreto fechado el 9 de Abril de 1794. Héle
Nadie pide con más injusticia que José María Morales, pues debía
a q u í : " I m p u e s t o de la contestación dada por Gerónimo Marani al
tener bien presentes los beneficios que se le han hecho en la última
Administrador del Coliseo de esta Capital, á consecuencia de mi de-
temporada, y la consideración con que he tratado sus punibles excesos:
terminación para su ajuste y el de su familia para trabajar en la tem-
por esta razón, quedando él y su mujer excluidos del Coliseo, me
porada próxima, no accedo á ninguna de sus proposiciones sentadas harán constar, del mismo modo que queda prevenido para Mariano
con poco respeto á mi citada determinación y con ninguna conside- Arízar y en igual término de tres días, la decente ocupación con que
ración á los beneficios que le he proporcionado en la temporada últi- adquieren para pasar la vida, quedando entendidos de la prohibición
ma, y que de ningún modo hubiese tenido si hubiese yo podido pre- absoluta que les impongo para trabajar en otro Coliseo, de que no han
sumir su desagradecimiento : en consecuencia; notificándosele así, se de salir de esta Capital sin previa licencia mía, y de que haré celar su
le mandará exhibir en el mismo acto la licencia con que pasó á estos conducta con el mayor escrúpulo.
' 'Teresa de Acosta fué igualmente beneficiada en la temporada últi- todo auxilio en socorro de mi honestidad y salud, buscaré casa donde
ma, no sólo por lo respectivo á intereses, sino en no haber tomado con estar y servir en lo que pueda, y cuando 110, hay Hospicio de Pobres
ella la providencia á que se hizo acreedora durante dicha temporada: sin ser necesario tomar otros arbitrios menos cristianos."
pero desentendiéndose de todo, repugna ahora la justa determinación
Mariano Flores, marido de María Martínez, sólo pidió que se le
de que asista diariamente á los ensayos, por cuya razón quedará des-
diese mayor tiempo que el de tres días para ir á reunirse con su Re-
de luego despedida del Coliseo, manifestando en el acto de la notifi-
gimiento, levantándosele el sambenito que se le echaba encima or-
cación la casa y calle donde vive, acreditando en debida forma dentro
denando que se le vigilase y celase por sus Jefes, pues nunca había
de tercero día, la honesta ocupación con que pasa la vida, y quedando
dado qué decir en lo más mínimo en lo tocante á su conducta.
entendida de que no podrá mudar de casa sin hacerlo saber antes al
Gerónimo Marani, expuso ser natural de Italia, y que hallándose
Juez Mayor de su Cuartel, ni menos salir de esta Capital sin permiso
de bailarín principal en el Coliseo de Cádiz, le solicitó y condujo á
mío, en el supuesto de que haré que se vigile sobre su conducta, con
México para el mismo fin el Virrey Conde de Gálvez, según el docu-
la mayor escrupulosidad, y si vuelve á incurrir en los pasados desór-
mento que presentaba '' para calificar que fui solicitado y 110 embar-
denes, será tratada como corresponde.
gado como los que llaman polizones: vine en efecto con mi mujer y
"Si Juan Moreno no quiere continuar dándome gusto, como dice, nuestros hijos, en la esperanza de mejorar de fortuna, abandonando
por la asignación que le he señalado, quedará á su voluntad el hacer la que lograba en Cádiz. Al principio me ajusté en cuatro mil pesos,
lo que más le acomode, pues no me hallo en ánimo de repetir las be- incluyendo en ellos á mi mujer y á mis hijos; muerto aquel Virrey
nignas insinuaciones que le he hecho en los dos años anteriores, y busqué mi vida en otros pueblos como las ciudades de Santiago de
que eran más que suficiente motivo para que, si pensase con la con- Querétaro y la Purísima Concepción de Celaya, y al fin volví tam-
sideración que corresponde, hubiera omitido en esta ocasión el ma- bién solicitado. Ultimamente el Mayordomo del Hospital de Natu-
nifestar su injusta repugnancia.—Revilla Gigedo." rales me solicitó para nuevo ajuste, pero era tan bajo el que me pro-
El encargado de comunicar y hacer cumplir el anterior Decreto lo ponía que me fué imposible admitir, y le hice mis proposiciones por
fué el Sr. D. Bernardo Bonavia y Zapata, Coronel de Infantería de las cuales se me reprendió graduándolas de excesivas. Después se me
los Reales Ejércitos, Caballero del Orden de Alcántara, Comendador mandó presentar la licencia con que vine á este Reino, y que no ha-
de Betundeira en la misma, Corregidor de esta Nobilísima Ciudad, y biéndola se me haría restituir á mi Patria. Por qué vine ya lo he di-
Juez del Teatro de la Capital. cho, y en cuanto á hacerme emprender una pronta ejecutiva marcha,
La primera en responder al destemplado Decreto, fué Teresa Acos- sería consumar mi propio sacrificio y el de mi inocente familia; lo
ta, que lo hizo toda humilde y cariacontecida, diciendo entre otras primero, porque mi pobreza es incapaz de soportar un viaje tan costoso
cosas: " A l Público y á S. E. vivo tan agradecida que sólo con la y dilatado de Mar y Tierra, y se me obligaría á caminar arrastrando
sangre de mis venas podré remunerarles la gratitud que les reconoz- desdichas; lo segundo, por el riesgo que correríamos en la presente
co, y sólo pensar que le tengo disgustado ha causado en mi espíritu constitución de Guerra, y lo tercero porque sería preciso abandonar
tal opresión que puede costarme la vida. Vivo tan achacosa y enfer- una cortísima finca rústica que compré inmediaciones de esta Capital
ma de accidentes anteriores, que no soy capaz de nada, y cada día en Popotla, para que por mi muerte hubiera mi desgraciada familia
estoy derramando la vida, como pueden atestiguarlo mis médicos D. un pedazo de pan.
José Larrañaga y D. Francisco Ferrarís." Defendiéndose del cargo
'' De aquí se deduce hallarme ya con algún arraigo, constituido va-
de no querer asistir á los ensayos, dice: " El ensayo es la cosa más
sallo del mejor de los Monarcas, y sujeto á sus Leyes, así como me
molesta y menos útil. Se reduce á sólo instruirse el representante de
amparan las establecidas para todos. Yo, por la Divina Misericordia,
con quién ha de salir y por qué puerta. Para esto se incomoda toda
no nací esclavo, de consiguiente no me parece soy digno de expul-
la mañana, faltan las mujeres á los deberes de su casa y no adelan-
sión sin haber cometido delito que lo exija, como no lo es el que no
tan cosa alguna, pues aquella instrucción mejor se toma en su misma
me acomode á lo que se quiere, pues esto es libre en todo individuo
habitación, sin estar expuesta á los desaires de los ociosos." En cuan-
de la República, al modo del que compra y vende. Yo no tengo más
to á sus medios de subsistencia honrada, dice: " T e n g o por el tra-
mercaderías ni peculio que el trabajo personal de mi habilidad • si
bajo de mi padre y hermanos con que subsistir, pues entre todos ganan
vendiéndolo á la pública utilidad, 110 acomoda el precio que estimo
lo suficiente para alimentarme con decencia, y esto es lo que. me es-
correspondiente á mi manutención y la de mi familia, me quedaré
timula á separarme del Coliseo; que cuando en lo absoluto me falte
reducido á cultivar el pobre rincón de la misma finca que ya me tiene
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arraigado, y buscar otros arbitrios que me ayuden, con la misma hon- Como el Virrey lo esperaba, los cómicos y bailarines dejáronse in-
radez que tengo acreditada, como que 110 he dado la más leve nota timidar por el enfado de su Superior, y para el mes de Mayo la Mar-
que merezca reprensión. Estos mismos auxilios 110 podré buscar, exis- tínez y su marido Flores, Marani y su familia, el sainetero Mariano
tente mi sujeción al Coliseo, pues ya he servido en él por bajo sueldo Arízar y la mayoría de los descontentos habían solicitado y obtenido
con la oferta de aumento si había ganancia, y se verificó ésta, mas no el ingreso en la Compañía del Coliseo, que inauguró la temporada
la oferta. Este año se me mandó pusiera algunos bailes que se me dando en los tres días de Pascua las comedias Caprichos de amor y
pagarían aparte: puse hasta once, y los cuatro no se me pagaron y celos, El Parecido en Rusia y El secreto á voces.
de los siete se me hizo un fuerte rebajo. Vendí al mismo Mayordomo
varias decoraciones y vestidos en quinientos noventa y nueve pesos,
y sólo se me han dado ciento, y los restantes 110 se me quieren pagar.
Todo ello forma conciso detalle para venir en conocimiento de la des-
gracia que después de muerto el Exmo. Señor Virrey que me trajo,
comencé á experimentar. CAPITULO XIV
" T o d o lo cual expongo á la piadosa consideración de V. E . confia-
do en que 110 ha de permitir perezca toda una familia desdichada, sólo
porque así lo quieran el Mayordomo del Hospital y otros, guiados de
1794—1805.
un celo poco conforme á las reglas de Equidad y de Justicia distribu-
\
tiva.—Firmado, Gerolamo Marani."
José María Morales presentó constancias de que podía vivir hones- Como era de temerse estando la Compañía compuesta de gente ca-
tamente dando lecciones de baile por la paga mensual de doce pesos si forzada, las funciones del Coliseo dejaron mucho á desear y el pú-
por persona, siendo discípulos suyos Joaquín Botello, Gerónimo Prie- blico concurrió en escaso número á ellas, seguro de que habría de
to, Francisco Acevedo, José Gallani y algún otro. Pedro Montero, estar mal servido. La primera Dama se enfermó seriamente y el Ad-
dijo haber venido con licencia del Gobernador del Perú; Juan Moreno ministrador Director paso mil y un trabajos para encontrar Sobresa-
expuso que para retirarse del teatro y poder vivir sin embargo, bas- l i e r a que la supliese. Todo el trabajo vino á pesar sobre Teresa de
tábale ir á Puebla, donde tenía una madre anciana fabricante de pastas Acosta, quien estando contratada como primera Graciosa, contrajo
y dulces, á quien podría ayudar en su trabajo. Así por el estilo fueron en esa mala época singulares méritos, supliendo plazas de Dama. E n
contestando los actores y actrices disidentes, sin que el Virrey en- este aprieto se creyó conveniente contratar á Mariana Coronel y á
contrase bastante fundadas las razones de ninguno ni depusiese su María Dolores Tenorio, actriz que se hallaba en Pátzcuaro trabajan-
atrabiliario enojo. A la digna y valiente exposición de Gerónimo Ma- do en la Compañía del vulgarmente llamado el Pastillero, y usando
rani acordó: ' 1 hágasele comparecer y repréndasele con la mayor aspe- del derecho que los teatros de Capitales como las de Madrid y Méxi-
reza, por las insultantes, poco regulares, y descomedidas expresiones co tenían para llamar á ellos artistas de cualquier Coliseo de Provin-
vertidas en su escrito, apercibido de que si en lo sucesivo no mejora cia, el Virrey ordenó al Intendente de Valladolid, que en el acto hi-
su modo de producirse, será tratado con el mayor rigor." También ciese poner en camino para México á la susodicha Tenorio. E l Ad-
se le exigió "dijese quién le había formado el expresado escrito," ministrador no se hacía grandes ilusiones respecto á la Coronel, y en
que resultó haber sido obra del Doctor en Leyes D. José de Ahed'o su informe acerca de las dificultades de la Dirección, se expresaba
que vivía por el rumbo de San Cosme. así: " N o he creído ciertamente que pueda esa mujer ser capaz de
Todo ello no pasó de un simulacro de enojo, pues en oficio Reser- desempeñar inmediatamente la falta de la Primera Dama, tanto por
vado, decía el Virrey á su Juez de Teatros: " P o r la adjunta copia se ser principianta en las Tablas, cuanto por no tener caudal de come-
instruirá V. S. de las providencias que he tomado sobre lo acaecido dias con que arrojarse á ese desempeño; pero tampoco hay otra que
con los cómicos, teniendo en cuenta lo urgente de reducirlos al orden llene en el modo que ella puede hacerlo el lugar de la Segunda Da-
para poder abrir el Coliseo en tiempo urgente. Esta clase de gentes ma, cuando ésta suba á Primera; así lo expresé exponiendo que la
deben gobernarse con mucho tino y prudencia, y es muy conveniente Coronel representaba tal cual, lo que junto con la felicidad de su me-
tratarles con afabilidad; pero en ocasiones importa siempre hacerles moria podría hacerla útil, mayormente corrigiéndola en la parte que
conocer la superioridad y el respeto que deben tener." sea susceptible, conforme á lo que se note. Con estas consideraciones
159
arraigado, y buscar otros arbitrios que me ayuden, con la misma hon- Como el Virrey lo esperaba, los cómicos y bailarines dejáronse in-
radez que tengo acreditada, como que no he dado la más leve nota timidar por el enfado de su Superior, y para el mes de Mayo la Mar-
que merezca reprensión. Estos mismos auxilios no podré buscar, exis- tínez y su marido Flores, Marani y su familia, el sainetero Mariano
tente mi sujeción al Coliseo, pues ya he servido en él por bajo sueldo Arízar y la mayoría de los descontentos habían solicitado y obtenido
con la oferta de aumento si había ganancia, y se verificó ésta, mas no el ingreso en la Compañía del Coliseo, que inauguró la temporada
la oferta. Este año se me mandó pusiera algunos bailes que se me dando en los tres días de Pascua las comedias Caprichos de amor y
pagarían aparte: puse hasta once, y los cuatro no se me pagaron y celos, El Parecido en Rusia y El secreto á voces.
de los siete se me hizo un fuerte rebajo. Vendí al mismo Mayordomo
varias decoraciones y vestidos en quinientos noventa y nueve pesos,
y sólo se me han dado ciento, y los restantes 110 se me quieren pagar.
Todo ello forma conciso detalle para venir en conocimiento de la des-
gracia que después de muerto el Exmo. Señor Virrey que me trajo,
comencé á experimentar. CAPITULO XIV
" T o d o lo cual expongo á la piadosa consideración de V. E . confia-
do en que 110 ha de permitir perezca toda una familia desdichada, sólo
porque así lo quieran el Mayordomo del Hospital y otros, guiados de
1794—1805.
un celo poco conforme á las reglas de Equidad y de Justicia distribu-
\
tiva.—Firmado, Gerolamo Marani."
José María Morales presentó constancias de que podía vivir hones- Como era de temerse estando la Compañía compuesta de gente ca-
tamente dando lecciones de baile por la paga mensual de doce pesos si forzada, las funciones del Coliseo dejaron mucho á desear y el pú-
por persona, siendo discípulos suyos Joaquín Botello, Gerónimo Prie- blico concurrió en escaso número á ellas, seguro de que habría de
to, Francisco Acevedo, José Gallani y algún otro. Pedro Montero, estar mal servido. La primera Dama se enfermó seriamente y el Ad-
dijo haber venido con licencia del Gobernador del Perú; Juan Moreno ministrador Director paso mil y un trabajos para encontrar Sobresa-
expuso que para retirarse del teatro y poder vivir sin embargo, bas- l i e r a que la supliese. Todo el trabajo vino á pesar sobre Teresa de
tábale ir á Puebla, donde tenía una madre anciana fabricante de pastas Acosta, quien estando contratada como primera Graciosa, contrajo
y dulces, á quien podría ayudar en su trabajo. Así por el estilo fueron en esa mala época singulares méritos, supliendo plazas de Dama. E n
contestando los actores y actrices disidentes, sin que el Virrey en- este aprieto se creyó conveniente contratar á Mariana Coronel y á
contrase bastante fundadas las razones de ninguno ni depusiese su María Dolores Tenorio, actriz que se hallaba en Pátzcuaro trabajan-
atrabiliario enojo. A la digna y valiente exposición de Gerónimo Ma- do en la Compañía del vulgarmente llamado el Pastillero, y usando
rani acordó: ' 1 hágasele comparecer y repréndasele con la mayor aspe- del derecho que los teatros de Capitales como las de Madrid y Méxi-
reza, por las insultantes, poco regulares, y descomedidas expresiones co tenían para llamar á ellos artistas de cualquier Coliseo de Provin-
vertidas en su escrito, apercibido de que si en lo sucesivo no mejora cia, el Virrey ordenó al Intendente de Valladolid, que en el acto hi-
su modo de producirse, será tratado con el mayor rigor." También ciese poner en camino para México á la susodicha Tenorio. E l Ad-
se le exigió "dijese quién le había formado el expresado escrito," ministrador no se hacía grandes ilusiones respecto á la Coronel, y en
que resultó haber sido obra del Doctor en Leyes D. José de Ahed'o su informe acerca de las dificultades de la Dirección, se expresaba
que vivía por el rumbo de San Cosme. así: " N o he creído ciertamente que pueda esa mujer ser capaz de
Todo ello no pasó de un simulacro de enojo, pues en oficio Reser- desempeñar inmediatamente la falta de la Primera Dama, tanto por
vado, decía el Virrey á su Juez de Teatros: " P o r la adjunta copia se ser principianta en las Tablas, cuanto por no tener caudal de come-
instruirá V. S. de las providencias que he tomado sobre lo acaecido dias con que arrojarse á ese desempeño; pero tampoco hay otra que
con los cómicos, teniendo en cuenta lo urgente de reducirlos al orden llene en el modo que ella puede hacerlo el lugar de la Segunda Da-
para poder abrir el Coliseo en tiempo urgente. Esta clase de gentes ma, cuando ésta suba á Primera; así lo expresé exponiendo que la
deben gobernarse con mucho tino y prudencia, y es muy conveniente Coronel representaba tal cual, lo que junto con la felicidad de su me-
tratarles con afabilidad; pero en ocasiones importa siempre hacerles moria podría hacerla útil, mayormente corrigiéndola en la parte que
conocer la superioridad y el respeto que deben tener." sea susceptible, conforme á lo que se note. Con estas consideraciones
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la propuse con sólo el limitado sueldo de quinientos pesos anuales,
dose otra menor en términos que pueda ejercer su oficio y ser útil á
lo que n o sucedería si fuese ya mujer de acreditada aptitud. V. E.
la República." Por eso y por la recomendación del piadoso interés
determinará después de oir al Sr. Corregidor, ante quien he citado á
que tiene el Hospital en esta diversión pública, entiendo que la Real
la interesada, para hacer los experimentos que su Superioridad me or-
Sala del Crimen podrá acceder á la solicitud de esta mujer, mediante
d e n a . " Mariana Coronel se presentó al público del Coliseo en la fun-
el Oficio que V. E . se sirva pasarle, teniendo á mayor abundamiento
ción de la noche del 20 de Abril de 1794, teniendo la desgracia de no
por compurgado en bastante parte el delito que se dice cometió, con
gustar á los espectadores, por lo cual, y á petición suya, el Juez de
la larga prisión de dos años y nueve meses sufrida en la Cárcel de
Teatros dispuso quedase separada de la Compañía, dándosele una
Veracruz y Casa de Recogidas de la misma Ciudad. De este modo
gratificación por su trabajo de la citada noche.
no serían ya tantos los trabajos que la escasez de cómicas origina,
Para la venida de María Dolores Tenorio, cuya habilidad se ex- pues se lograba restaurar una habilidad que ha sabido dar gusto en
tiende, dice el informe, á cantar bien, parece que se pulsaron algu- las Tablas en la plaza de Sobresalienta de primera, segunda y tercera
nas dificultades acerca de su viaje, pues leo en un escrito del Admi- dama, con el sueldo de novecientos pesos que únicamente tuvo el año
nistrador D. José del Rincón: " D i j e también que pudiera haberse de 1785, último que trabajó a q u í . "
conducido por Arrieros conductores y efectivamente creo que con es-
Tramitado este ocurso con apoyo del Virrey, vino á resolverse se-
to no padecería el honor de la Casa, porque aun cuando esa cómica
gún se verá en el siguiente Auto :
de la legua, fuera una Señora doncella de muchas circunstancias, se
" E n la Ciudad de México, á 11 de Junio de 1794, los Señores Go-
ve generalmente que esos tales conductores, transportan á personas
bernador y Alcaldes del Crimen de la Real Audiencia de esta Nueva
decentes con toda seguridad, como puede V. E. informarse." Tam-
España : Habiendo visto la instancia de D. José del Rincón, Conta-
bién se solicitó á la cantarína María Ignacia Rueda, dotada de "buen
dor Mayor Honorario del Real Tribunal y Audiencia de Cuentas, y
estilo y regular voz, que, á juicio del Maestro Aldana, prometía mu-
Administrador del Hospital Real de Naturales de esta Corte: lo pe-
chas esperanzas," y á la ya conocida María Eoreto Rendón.
dido por el Fiscal de Su Majestad, con lo demás que se tuvo presente
Pero con nada de esto pudo componerse la Compañía, con grave y ver convino; Mandaron : Que sin que sirva de ejemplar, y en cali-
detrimento de los productos que de ella esperaba el Hospital, por lo dad de presa, se traslade la Rea Bárbara Ordóñez del Recogimiento
que fué necesario ocurrir á lo que á decir voy valiéndome de docu- de Santa María Egipciaca de la Ciudad de Puebla á esta Corte, con
mentos oficiales. Sea el primero el siguiente ocurso del tantas veces el preciso objeto de servir en el Coliseo, de cuenta y riesgo del refe-
citado Rincón: rido Administrador D. José del Rincón, quien la pondrá como tal
Para cubrir el papel de Sobresalienta he procurado instruirme de presa en casa de su satisfacción, hasta cumplir el tiempo de su con-
las habilidades que hay en el Reino suficientes para ello, según en la dena, cuidando que no salga de ella sino á las obligaciones de Misa
necesidad que nos hallamos, y sólo he podido saber que para esa pla- los días festivos y á la representación al Teatro, conducida por per-
za no hay otra fuera de esta Capital, que María Bárbara Ordóñez, sona que sea de su confianza, avisando la casa que sea, á este Tribu-
presa en la Casa de Recogidas de Veracruz, y sentenciada por la Real nal, para estar á la mira de sus procedimientos, y seriamente aperci-
Sala del Crimen á la de la Magdalena de Puebla, por cierto homici- bida que en caso de incurrir en el más leve defecto, se trasladará á
dio que se dice cometió. Esta me ha escrito desde su prisión mani- las Recogidas y se castigará con todo rigor.
festando sus deseos de servir en este Teatro, aunque sea estando en
la Real Cárcel ó en una Casa segura, depositada el tiempo de cuatro " Y para cumplimiento de todo lo referido, se libre el correspon-
años que le faltan de reclusión, á más de cerca de tres que hasta el diente Despacho al Sr. Gobernador Intendente de Puebla. Así lo pro-
presente lleva, lo cual parece asequible una vez que llega á experi- veyeron y rubricaron.
mentarse la continuación de su captura con sólo la libertad de salir "Señalado con las de los Sres. Saavedra, Irizarri, Valenzuela y
asegurada á servir á un Público, cuya diversión es precisísima para Urrutia.—José Mariano Benitez."
distraerlo de otras gravemente perjudiciales que el ocio trae consigo: Enterado del Auto el Fiscal de Su Majestad, el escribano asentó
siendo también esta providencia muy conforme á varias disposiciones lo que sigue:
de Derecho y de las Leyes que previenen " q u e si alguna persona " E n . el propio día 14 de Junio, Yo el Escribano, presente D. José
peritísima en su Arte, cometiese algún delito, deberá suspenderse la del Rincón, le hice saber lo mandado en Auto de 11 del corriente,
ejecución de la pena y consultar al Príncipe su revocación, imponién- y en su inteligencia dice lo oye, y que cumplirá lo que en él se le
previene. Esto respondió y firmó, Rincón. Doy fe, José Mariano Be*
R. H. T.—T. I.—21
t

162
163
nites. Y para que lo mandado tenga p u n t u a l cumplimiento, el Sr. Go-
co de la Capital. En 7 de Mayo dijo por oficio al Director del Teatro:
bernador Intendente de la Ciudad de Puebla, luego que reciba el
'' Se notan en las representaciones algunos defectos é impropiedades
presente, liará que se notifique á la Rea Bárbara Ordóñez, y se aper-
que conviene evitar y considero de fácil remedio. Tales son el pasar
ciba seriamente según se previene en el Superior Auto inserto: y la
por delante de los que hacen papeles principales, los que representan
entregará á la persona que por el Contador Honorario D. José del
los de criados y otros inferiores: ponerse éstos el sombrero delante de
Rincón se señale, sacándola al efecto del Recogimiento de Santa Ma-
aquellos, y unos y otros en parajes donde nadie acostumbra tenerlos
ría Egipciaca de esa Ciudad, donde e x i s t e : y de haberlo ejecutado
puestos, como dentro de las casas: concluir las comedias y entre-
dará cuenta, devolviendo diligenciado el presente, que firmó el Sr. Se-
meses pidiendo los Actores al Público perdón de sus faltas, lo que es
manero, en México, á 14 de Junio de 1794.—Manuel José de Urrutia.
contra la ilusión, calidad tan esencial en el Teatro, que sin ella se re-
~José Mariano Benítez."
duce á nada cuanto se representa ; y últimamente, salir tan andrajo-
Sigue á esto la designación hecha por Rincón, y dice: " S e ñ a l o pa- sos los que tienen que figurar pobres ó individuos de ínfima plebe,
ra que se entregue, en mi nombre, de la persona de Bárbara Ordóñez, que rayan en lo indecente, faltando gravemente al decoro y al respeto
á quien elija D. Francisco Antonio de Zamacona, Factor del Taba- debido al Público, defecto que suele llegar á un exceso insoportable
co, de Puebla.—Ut Supra.—José del Rincón." cuando se acompaña con acciones descompuestas. Conviene, pues,
Nada más elocuente que los anteriores documentos para pintar el poner el remedio posible en estos defectos, para hacer más agrada-
estado deplorable á que había ido á dar el Coliseo de la Capital al ble la diversión, y al intento encargará Vuestra Señoría al Admi-
acercarse el fin del Gobierno del gran Virrey Conde de Revilla Gige- nistrador que procure se reformen los advertidos, prohibiendo se use
do. Hasta allí no pudieron alcanzar el influjo de su buen juicio y de andrajos y vestuarios indecentes en los entremeses, y también
profundo saber, el talento singularísimo y la energía y perseverancia que los que representan en las comedias papeles de criados y cria-
de aquel gran carácter. Consiguió establecer la seguridad pública das, salgan, lo cual es muy reparable, mejor vestidos que los princi-
persiguiendo y castigando malhechores en los caminos reales, y dando pales."
á la Capital el espectáculo imponente de la ejecución de los asesinos
Pero por más que se procuraba evitarlo, el asunto teatral iba de
de D. Joaquín Dongo: mejoró la ciudad haciendo empedrar y em-
mal en peor. E l número reducido de las habilidades, disminuía más
banquetar las calles y dotarlas de alumbrado: amparó los bosques y
aún con la mala salud de aquellos ya viejos y cansados actores. Una
arbolados reglamentando el corte de maderas : abrió y reparó cami-
de las más aplaudidas cantarínas, la llamada Ana Maguei ó la Ma-
nos: protegió las empresas marítimas, las ciencias y las artes • estuvo
gueyitos, pidió licencia para retirarse á uno de los pueblos de los al-
siempre atento á cultivar y mejorar las clases ínfimas y menesterosas-
rededores, y hubo que concedérsela, en vista de 1111 certificado de
combatio los abusos y facilitó la justicia, llegando á establecer un bu-
D. José Graciday Bernaly D. José Rafael de Cuevas, Médicos de pú-
zón público en que recogía toda especie de avisos, advertencias y con-
blica aprobación y ejercicio, que decía así: " Certificamos y en caso
sejos que le hacían estar al tanto de cuanto pasaba, y dejó á su pér-
necesario juramos, que de unánime acuerdo hemos asistido á Ana
fido y mal agradecido sucesor una útilísima Instrucción reservada
Maguei más de mes y medio, de las varias y graves enfermedades de
de como debía regir y mejorar la perla de las colonias españolas I a
que ha adolecido, hasta haberle mandado recibir el Sagrado Viático,
misma naturaleza le ayudó á descubrir y desenmascarar picaros y bri-
y que habiendo logrado se restableciese de lo ejecutivo de sus acci-
bones, pues muchos de ellos asustáronse con la Aurora Boreal de la
dentes, permanece aún expuesta á algunas accesiones epilépticas, de
noche del 14 de Noviembre de 1789, y creyéndola fuego de la cólera
las que juzgamos podrá convalecer mudando de aires y de tempera-
celeste á voces publicaron sus delitos pidiendo para sus culpas mi-
mento por algún espacio de tiempo, con el auxilio de otras medici-
sericordia. Solo no pudo dominar á la gente de teatro, levantisca é
nas nervinas y tónicas de que igualmente deberá u s a r . "
inmoral y corrompida.
De otras dificultades y tropiezos enterará á mis lectores el siguiente
Podríamos registrar aún muchas disposiciones suyas referentes á extracto de un informe de D. José del Rincón, en respuesta á una
esta materia. En 24 de Abril de I 7 9 4 ) dispuso que la viuda Gertru- consulta que se le hizo de si creía ó no conveniente que se suprimie-
dis Banda, se abstuviese de hacer títeres en la calle de San Juan y ran ó continuaran los Bailes en la escena.
se dedicase con sus dos hijas doncellas á otro ejercicio que no f u é r l " A u n cuando los clamores de los últimos Arrendatarios contra la
ese, contra el cual representó el Administrador del Coliseo, invocan- subsistencia de los Bailes por las pérdidas que con ellos han sentido,
do una antigua disposición que prohibía títeres y maromas en el cas- se hayan tenido hasta aquí por aparentes, no creyéndose que esa mo-
'fe
v sy r

164
165
derna diversión es, como dicen aquellos, polilla suficiente para acabar
te, si el Coliseo tuviese un abundante fondo con el único objeto de
con los intereses que por medio de las otras antiguas puede producir
divertir á toda costa al público, sacrificando á este fin su interés pro-
el Coliseo, sería bastante para variar en parte de dictamen el ver aho-
pio: en este caso se harían muchos Bailes nuevos con continuas ideas
ra un ahorro de cinco mil quinientos y tantos pesos que se pagaron
en vestidos y decoraciones, de cuyo modo sería esa pieza uno de los
en la última temporada, á que pueden agregarse cuasi cuatro mil ó
mejores adornos de intermedios en las principales de representado,
más en que se calculan prudentemente los gastos de papeleta y otros
y también mayor la concurrencia si se lograba ir haciendo el país á
extraordinarios, como el mayor alumbrado en las candilejas, ilumi-
funciones serias, pues vemos que hasta el día es llevado más en ge-
nación de cera para los trasparentes, sin contar con los crecidos cos-
neral que de ellas de comedias de Valientes, Mágicos y Vuelos, con
tos que ocasiona la postura de los nuevos Bailes.
otras vulgaridades semejantes con que se llena la casa, á pesar de
Todos estos ahorros me parece á mí que son efectivamente supe- la ninguna sustancia que les hallan algunos concurrentes de mejor
riores al quebranto que pueda experimentarse con la supresión, pues gusto.
á mi entender, la frialdad del público no durará sino hasta que pierda
' '¿Y qué diremos si faltan un Director como Marani y su sustituto
las esperanzas de que los h a y a : pues ahora lleva á capricho no asis-
Morales? Que entonces subirá de punto la pérdida de enseres; y si se
tir al Teatro, por ver si así consigue hacer creer que son precisos,
siguen ejecutando por otros no inteligentes, vendremos á quedar ex-
llevados algunos de dichos concurrentes de estímulos de los mismos
puestos á la indignación del público, cuyos efectos son temibles y ya
bailarines, á quienes por protección sencilla ó por otras causas 110
se han experimentado alguna vez en el año anterior, si 110 se hubie-
muy difíciles de comprender, desean mantener en el Teatro y com-
se echado el telón antes de tiempo para cubrir una escena acreedora
placerlos.
de la irrisión y mofa de las gentes.
'' Lo cierto es que aquí no hubo nunca Bailes hasta de pocos años
"Ultimamente, es el Baile contra los rendimientos de la Casa, por
al presente, ni aun desde que comenzaron se han hecho en todos los
lo que ésta se expone á perder con ellos en un incendio, que 110 es
tiempos. Y así, se ha conocido prácticamente que sin ellos es segura
m u y remoto por los cerillos que arden en las decoraciones transpa-
la ganancia en el Coliseo, como lo demuestra la retirada de asentistas
rentes, cuya inmediación, por más cuidado que haya, se deja cono-
con el motivo de su continuación, lo que creo no sucederá si se abo-
cer el riesgo que amenaza, siendo el aceite uno de los ingredientes
liesen. Dígalo la Sociedad de suscritores abonados, dígalo D. Manuel
de la pintura, y ya se vió en el anterior año pegar á una bambalina
Lozano y dígalo D. Francisco Villa y T o r r e : la primera no deja de
la flama del cerillo, con que nos vimos bastantemente apurados para
sentir que los bailes tuvieron bastante parte en aquella excesiva
cortar el fuego, que si hubiera seguido todo se habría perdido.
pérdida de treinta y ocho mil pesos, de la cual se evadió el segundo
habiendo experimentado aumento sin ellos y resarcido la pérdida que " L a superioridad de S. E . determinará lo que parezca más conve-
le causaron durante se mantuvieron. E l último que es Villa y Torre niente, pues no debo insistir por la consideración de esas pobres fa-
lo explicó más claro en la Almoneda celebrada el año de 1792, pues milias que, mantenidas hasta hoy con los bailes, quedarían perdidas
asentó que no tendría embarazo en hacer postura siempre que se le si no continuasen, quejándose de mi influjo."
cumpliese la condición de no continuar los bailes en el Teatro. Estos Como nota referente á Teatros durante el Gobierno del gran Con-
arrendatarios que debemos considerar amigos del aumento de su cau- de de Revilla Gigedo, digamos algo de otro autor dramático del país.
dal, no paso yo á creer quisiesen, por sólo tema, perder el logro que Nada debe desperdiciarse á este respecto. Por Octubre de 1793 el Ba-
les resultare si los referidos Bailes fueren provechosos á la negocia- chiller Córdova pidió al Virrey remediase sus necesidades dando or-
ción: y sin embargo, han permanecido sin aprovechar la Almoneda den para que se representasen unas comedias de su invención que
de 1792 que aun se mantiene abierta, y á pesar de las ganancias que tenía presentadas. El informe del Juez de Teatros dijo: " E s verdad
en estos dos años ha tenido el Coliseo. que ha hecho una comedia que ya tengo en mi poder, la cual puso
en manos del Sr. D. Cosme de Mier, y pasó á la aprobación del Pa-
''Yo no pongo duda en que á unos les gustan los bailes, se entien- dre Revisor, quien dijo que podía representarse por no contener co-
de los pocos que hay buenos: pero tampoco debo dudar que á otros sa alguna que se oponga á nuestra Religión ni desdiga de la modes-
no les agradan por sus repeticiones continuas y su poca variedad, pues tia que inspira la moral cristiana.
siempre son unos mismos los saltos y unos mismos los actores, con " E n este estado fué cuando yo vi la comedia, y como conocí que
solo la diferencia de una que otra tal vez fastidiosa pantomima, co- el Bachiller Córdova no la presentaba graciosamente á la casa, de
mo que es facultad poco extensiva á variaciones. Lo sería ciertamen- ahí nació la precisión de inquirir si sería pieza de alboroto como La
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Mexicana ú otras cuasi semejantes, capaz de dejar producto y grati-
ficar al que la había presentado. sas de nuestros teatros, que pudiendo representar de balde las come-
"Después de un prolijo examen saqué en limpio que la comedia dias venidas de España, niéganse á pagar cosa alguna á los autores
no pasa de común; que no es por su materia y lances, superior á las de comedias escritas en México.
del precio de dos reales, á lo menos para el gusto del público, y que En 11 de Julio de 1794 el muy ilustre D. Juan Vicente de Güemes
al igual de ella y aun mejores las tengo impresas por dicho precio en y Pacheco, Conde de Revilla Gigedo, hizo entrega del mando del Vi-
la casa del Padre D. José Jáuregui, sin quedar con su representación rreinato á su sucesor D. Miguel de la Grúa Talamanca, Marqués de
expuesto á que se gratifique si, por ventura, en su estreno hubiese Branciforte, digno pariente y hechura de D. Miguel Godoy; pérfido
una regular entrada, ocasionada de la novedad de ser moderna y es- y envidioso contra Revilla Gigedo, á quien con sus acusaciones ori-
crita por ingenio americano, aunque luego no se considerara digna ginó graves disgustos; enriquecido con la venta de empleos y gra-
de una sola repetición. cias, de acuerdo y en sociedad con el Conde de la Contramina, y de-
rrochador de fondos públicos en la organización de tropas que para
"Mientras yo andaba en esta inquisición, me entregó Córdova una nada eran aquí necesarias. Débesele, sin embargo, el que, por adu-
pequeña pieza, que no hay duda ha caminado con la misma fortuna lación á la imbécil Majestad de Carlos IV, mandase labrar el mo-
como él expresa; pero tampoco la hay en que para ello me ha suge- delo y fundir la magnífica estatua ecuestre que, por apodo del vulgo,
rido las mismas razones que para la inadmisión de la anterior, sin conocemos con el despectivo mote de El Caballito de Troya. Con
que para no dar al público una y otra me haya llevado de conceptos motivo de la colocación de la provisional en yeso, en la Plaza de
de conucos, cuyas sugestiones me serían indecorosas; y sólo el Ba- Armas, celebráronse en la Capital suntuosas fiestas. De ellas y en
chiller Cordova que no tiene conocimiento de mi modo de pensar lo que al Teatro se relaciona, dijo La Gaceta:
podra asentar que en esta materia me sugieren, sobre que se servirá
Y . E . hacerle el correspondiente apercibimiento. " E n 9 de Diciembre de 1796, con motivo de las fiestas con que se
"También he sabido que la comedia titulada La Ermione, que es celebró el adorno de la Plaza Principal y la erección de la estatua
el nombre de la presentada, ha mucho tiempo que está impresa y ecuestre provisional de Carlos IV, el Virrey Marqués de Branciforte
por curiosidad la he mandado pedir á D. José Camblón,á José Gar"- asistió á las siete y media de la noche al Coliseo, que estaba suntuo-
duno, Apuntador de este Coliseo y al plaza de por medio Ignacio samente iluminado, y se representó el nuevo drama en un solo acto,
La lealtad americana; se cantó una tonadilla muy graciosa y siguió
V ega que cada uno tenía un ejemplar; y lo cierto es que, no habien-
después un hermoso baile tragi-cómico-pantomimo, cuyo asunto era la
do podido conseguir ninguno por haberme respondido todos que se
reciente historia y muerte de Muley Eliacid, Emperador de Ma-
les ha extraviado, ocurrí á tomar noticias de su argumento y me lo
rruecos."
han pintado igual al de la de Córdova, con sólo la diferencia del
Nada notable hay que registrar en punto á teatros de 31 de Mayo
verso, que donde ésta lo tiene de arte mayor ó heroico, está escrito
de 1798 á 29 de Marzo de 1800, período del gobierno de D. Miguel José
en aquella con el corriente de Romance; pero aun en los personajes
de Azanza, y menos aún de esa última fecha á la del 4 de Enero de
que son unos mismos, me han ido señalando los nombres de todos
1803, en que terminó el virreinato de D. Félix Berenguer de Marqui-
y no encuentro variedad entre los de una y los de otra
na, y dió principio el de D. José de Iturrigaray, en cuyo tiempo in-
" E n estos términos, parece que deben devolverse al Bachiller Cór- trodujo en México la vacuna contra la viruela D. Francisco Balmiz,
dova sus dos piezas, una vez que ninguna es suficiente de convidar y principió en 1? de Octubre de 1805 el Diario de México fundado por
al publico para contribuir en dos ó tres repeticiones anuales, á más D. Jacobo Villaurrutia y D. Carlos María de Bustamante, que tanto
de llenar en a primera noche su representación, de cuyo modo sería habrá de servirnos en las siguientes páginas.
HoTtÍ* , r e m e C U a r k S n e c e s i d a d e s d e - autor, pues quedaba el No quiere esto decir que 110 nos haya sido ya útil en precedentes
Hospital Peal esperanzado del reintegro para cubrir las más urgen- noticias, la imprenta, en México introducida, antes que en ninguna
tes que padece. De lo contrario, sería gravar sus fondos, mayormen- otra ciudad de América, por el primer Virrey D. Antonio de Mendo-
te, cuando como llevo dicho, hay comedias nuevas por dos reales
za, con el cual vino en Octubre de 1535 y produjo el primer libro en
que sin la contingencia de desembolso en el caso de que engañosa- 1536, impreso por J u a n Pabloso, ficial y dependiente de Juan Crom-
'tienen menos costo que aventurar ^ á berger, célebre impresor establecido en Sevilla. Ya nos hemos servido,
y citádola varias veces, de la Gaceta que, según el eminentísimo sabio
Por este ejemplo se ve cuán antiguo es el egoísmo de las Empre- D. Joaquín García Icazbalceta, empezó á publicarse en 1671, impresa
i68 169

por la Viuda de Bernardo Calderón. Esta especie de publicaciones


trador del Hospital de Naturales, y propuesta del Sr. Decano de esta
periódicas sólo contaba en aquel entonces sesenta y seis años de vida
Real Audiencia D. Ciríaco González de Carbajal, se procediese á su
en Europa, tocando á los Países Bajos, dependientes entonces de los
reedificación. En consecuencia, comisionóse para ello al Sr. Alcalde
Reyes españoles, la gloria de haberlas creado en 1605, en la ciudad de
de Corte, D. Manuel del Campo y Rivas, el que en menos de un mes
Amberes. Veintiséis años más tarde, en 30 de Mayo de 1631, fundó Re-
le ha dado toda la comodidad, seguridad y hermosura de que es sus-
naudot La Gaceta de Francia, y á ésta sólo en cuarenta años fué poste-
ceptible, advirtiendo el público que se tuvieron presentes cuantas
rior la Gaceta de la Viuda de Calderón. Los números de ella 110 se pu-
circunstancias se requieren para hacer apreciable esta casa de recreo.
blicaban en época fija, por carencia de noticias, ni por un mismo impre-
Fueron sus artífices: de arquitectura D. Joaquín de Heredia; de pin-
sor: en 1687 la siguió imprimiendo María de Rivera, heredera de la
tura, el célebre Francisco Zapari, y D. Gerónimo Marani de la má-
Calderón, y duraron por lo menos hasta 1721. Hacia 1693 (sigue ha-
quina, quienes comprendiendo á fondo los conceptos de dicho señor
blando el Sr. Icazbalceta), publicó D. Carlos de Sigüenza y Góngora
Ministro, los ejecutaron en términos que el Coliseo de México casi
su Mercurio, y en 1? de Enero de 1722 fundó el Dr. D. Juan Ignacio de
puede competir con cualquiera de los de E u r o p a . "
Castoreña y Ursúa la Gaceta de México, que mensualmente aparecía
impresa por la Viuda de Miguel de Rivera Calderón, en el Empedra- Aun en esa reforma precedió nuestro Coliseo Nuevo al del Prínci-
dillo. Duró sólo hasta Julio del mismo año, y después de cinco y me- pe en Madrid; éste, al cual un incendio ocurrido en Julio de 1802,
dio de suspensión, la renovó D. Juan Francisco Sahagúu de Arévalo, maltrató en extremo, no vino á quedar reedificado sino en Agosto
con el mismo título de Gaceta de México desde I-vnero de 1728, siendo de 1807, quince meses después del de México.
empresario y editor el Bachiller Hogal. Por escasez y carestía de pa- H e aquí la lista de los actores ajustados para el año cómico ó tem-
pel se suspendió en los años de 1740 y 41: continuó en 42 con el nom- porada de 1806 á 1807.
bre de Mercurio de México. En 1768 publicó el Padre Alzate su Dia- Damas: Primera, Luz Vallecillo, con dos mil pesos anuales; Se-
rio Literario; en 1772 y 73 hizo otro tanto el Dr. D. José Ignacio Bar- gunda, Agustina Montenegro, con mil trescientos; Graciosa, Juana
tolache con su Mercurio Volante, y de 1788 á 1795 su Gaceta de Lite- Mendoza, quinientos; Criada, Juana Martínez, doscientos treinta;
ratura el ya nombrado Padre Alzate. El periódico más notable y co- otra segunda, Dolores la Fina, quinientos; Galanes: Autor, galán y
nocido de la época virreinal, es, sin embargo, la Gaceta de México, que primer gracioso, Luciano Cortés, con sueldo anual de tres mil pesos;
D. Manuel Antonio Valdés comenzó á publicar el 14 de Enero de Segundo, José Duque, con mil doscientos; Sobresaliente, Fernando
1784 y vino á ser como el origen de los periódicos oficiales de Méxi- Gavila, con mil; Tercer galán, Antonio Abad, ochocientos; Cuarto,
co, y según queda dicho, en 1? de Octubre de 1805 dió principio la Teodoro Borja, quinientos: Estrada, quinientos; Plazas de por medio,
publicación del Diario de México. Pedro Rivera y José Aragón, con doscientos cincuenta cada uno; Jo-
sé Mendoza, doscientos; José García, ciento ochenta; Barbas: Prime-
ro, Francisco Carreño, novecientos; Segundo, Mariano García, qui-
nientos; Sobresaliente, Ignacio Miranda, cuatrocientos; Graciosos: Se-
gundo, José Tenorio, setecientos; Idem, Francisco Saldaña, quinien-
CAPITULO XV tos; Apuntadores: Primero, Mariano Lara, setecientos cincuenta; José
Rincón, cuatrocientos; Leopoldo Olmedo, doscientos cincuenta; Ar-
chivero, José Zabalza, doscientos setenta y cinco. Cantarines: Dolores
Munguía, mil seiscientos; Josefa Cárdenas, mil; Timotea, seiscientos;
1805.—1806. Juana Felbeta, trescientos noventa; Andrés Castillo, mil quinientos;
Victorio Rocamora, mil cincuenta; Antonio Bemasconi, seiscientos;
Ya comenzado el siglo X I X , el Coliseo Nuevo fué objeto de gran- Bailarines: Guadalupe Gallardo, seiscientos; Magdalena Lubert, tres-
des reformas y mejoras, según se lee en la Gaceta de 3 de Mayo de cientos diez; Isabel Rendón, doscientos setenta y cinco; María Peña-
1806, que á la letra dice: losa, doscientos cincuenta; Cecilia Ortiz, quinientos; José María Mo-
" E l Coliseo de esta Corte acaba de presentarnos un testimonio de rales, seiscientos cincuenta; Juan Marani, quinientos cincuenta; Or-
que la pintura y la arquitectura adquieren, en cierto modo, su perfec- questa, cuatro mil seiscientos pesos; Guardarropa, doscientos; Pelu-
ción, cuando son dirigidas por las letras. Había mandado el Exmo. quero, trescientos; Sastre, doscientos; Portero y Guardacasa ciento
Sr. Virrey que, atendida la representación del Mayordomo Adminis- treinta; Carpintero tramoyista, trescientos veinticinco; Pintor, quinien-

E. H. T.—T. I.—22
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por la Viuda de Bernardo Calderón. Esta especie de publicaciones


trador del Hospital de Naturales, y propuesta del Sr. Decano de esta
periódicas sólo contaba en aquel entonces sesenta y seis años de vida
Real Audiencia D. Ciríaco González de Carbajal, se procediese á su
en Europa, tocando á los Países Bajos, dependientes entonces de los
reedificación. En consecuencia, comisionóse para ello al Sr. Alcalde
Reyes españoles, la gloria de haberlas creado en 1605, en la ciudad de
de Corte, D. Manuel del Campo y Rivas, el que en menos de un mes
Amberes. Veintiséis años más tarde, en 30 de Mayo de 1631, fundó Re-
le ha dado toda la comodidad, seguridad y hermosura de que es sus-
naudot La Gaceta de Francia, y á ésta sólo en cuarenta años fué poste-
ceptible, advirtiendo el público que se tuvieron presentes cuantas
rior la Gaceta de la Viuda de Calderón. Los números de ella 110 se pu-
circunstancias se requieren para hacer apreciable esta casa de recreo.
blicaban en época fija, por carencia de noticias, ni por un mismo impre-
Fueron sus artífices: de arquitectura D. Joaquín de Heredia; de pin-
sor: en 1687 la siguió imprimiendo María de Rivera, heredera de la
tura, el célebre Francisco Zapari, y D. Gerónimo Marani de la má-
Calderón, y duraron por lo menos hasta 1721. Hacia 1693 (sigue ha-
quina, quienes comprendiendo á fondo los conceptos de dicho señor
blando el Sr. Icazbalceta), publicó D. Carlos de Sigüenza y Góngora
Ministro, los ejecutaron en términos que el Coliseo de México casi
su Mercurio, y en 1? de Enero de 1722 fundó el Dr. D. Juan Ignacio de
puede competir con cualquiera de los de E u r o p a . "
Castoreña y Ursúa la Gaceta de México, que mensualmente aparecía
impresa por la Viuda de Miguel de Rivera Calderón, en el Empedra- Aun en esa reforma precedió nuestro Coliseo Nuevo al del Prínci-
dillo. Duró sólo hasta Julio del mismo año, y después de cinco y me- pe en Madrid; éste, al cual un incendio ocurrido en Julio de 1802,
dio de suspensión, la renovó D. Juan Francisco Sahagúu de Arévalo, maltrató en extremo, no vino á quedar reedificado sino en Agosto
con el mismo título de Gaceta de México desde I-vnero de 1728, siendo de 1807, quince meses después del de México.
empresario y editor el Bachiller Hogal. Por escasez y carestía de pa- H e aquí la lista de los actores ajustados para el año cómico ó tem-
pel se suspendió en los años de 1740 y 41: continuó en 42 con el nom- porada de 1806 á 1807.
bre de Mercurio de México. En 1768 publicó el Padre Alzate su Dia- Damas: Primera, Luz Vallecillo, con dos mil pesos anuales; Se-
rio Literario; en 1772 y 73 hizo otro tanto el Dr. D. José Ignacio Bar- gunda, Agustina Montenegro, con mil trescientos; Graciosa, Juana
tolache con su Mercurio Volante, y de 1788 á 1795 su Gaceta de Lite- Mendoza, quinientos; Criada, Juana Martínez, doscientos treinta;
ratura el ya nombrado Padre Alzate. El periódico más notable y co- otra segunda, Dolores la Fina, quinientos; Galanes: Autor, galán y
nocido de la época virreinal, es, sin embargo, la Gaceta de México, que primer gracioso, Luciano Cortés, con sueldo anual de tres mil pesos;
D. Manuel Antonio Valdés comenzó á publicar el 14 de Enero de Segundo, José Duque, con mil doscientos; Sobresaliente, Fernando
1784 y vino á ser como el origen de los periódicos oficiales de Méxi- Gavila, con mil; Tercer galán, Antonio Abad, ochocientos; Cuarto,
co, y según queda dicho, en 1? de Octubre de 1805 dió principio la Teodoro Borja, quinientos: Estrada, quinientos; Plazas de por medio,
publicación del Diario de México. Pedro Rivera y José Aragón, con doscientos cincuenta cada uno; Jo-
sé Mendoza, doscientos; José García, ciento ochenta; Barbas: Prime-
ro, Francisco Carreño, novecientos; Segundo, Mariano García, qui-
nientos; Sobresaliente, Ignacio Miranda, cuatrocientos; Graciosos: Se-
gundo, José Tenorio, setecientos; Idem, Francisco Saldaña, quinien-
CAPITULO XV tos; Apuntadores: Primero, Mariano Lara, setecientos cincuenta; José
Rincón, cuatrocientos; Leopoldo Olmedo, doscientos cincuenta; Ar-
chivero, José Zabalza, doscientos setenta y cinco. Cantarines: Dolores
Munguía, mil seiscientos; Josefa Cárdenas, mil; Timotea, seiscientos;
1805.—1806. Juana Felbeta, trescientos noventa; Andrés Castillo, mil quinientos;
Victorio Rocamora, mil cincuenta; Antonio Bemasconi, seiscientos;
Ya comenzado el siglo X I X , el Coliseo Nuevo fué objeto de gran- Bailarines: Guadalupe Gallardo, seiscientos; Magdalena Lubert, tres-
des reformas y mejoras, según se lee en la Gaceta de 3 de Mayo de cientos diez; Isabel Rendón, doscientos setenta y cinco; María Peña-
1806, que á la letra dice: losa, doscientos cincuenta; Cecilia Ortiz, quinientos; José María Mo-
" E l Coliseo de esta Corte acaba de presentarnos un testimonio de rales, seiscientos cincuenta; Juan Marani, quinientos cincuenta; Or-
que la pintura y la arquitectura adquieren, en cierto modo, su perfec- questa, cuatro mil seiscientos pesos; Guardarropa, doscientos; Pelu-
ción, cuando son dirigidas por las letras. Había mandado el Exmo. quero, trescientos; Sastre, doscientos; Portero y Guardacasa ciento
Sr. Virrey que, atendida la representación del Mayordomo Adminis- treinta; Carpintero tramoyista, trescientos veinticinco; Pintor, quinien-

E. H. T.—T. I.—22
tos. Interventor, D. José Carbelo, ochocientos. Escribano, D. Félix
Zamorano, doscientos. Escribiente. D. José Juan Romero, doscientos _ P o r ese tiempo y aun muchos años después, ni en México ni en
ochenta. España podían usar los cómicos el Don, ni nadie se lo daba.
El prospecto anunciando la primera función para la noche del Do- Preocupaciones basadas en la incorrecta conducta pública y priva-
mingo 6 de Abril de 1806, decía así: da de muchos de ellos, justificaban hasta cierto punto lo mal vistos
" T o d o sabio é ilustrado gobierno, ha promovido y sostenido en y recibidos que eran fuera del escenario y en la sociedad de gente
todos tiempos las diversiones y espectáculos públicos como máxima educada. En 1808 el Ayuntamiento de Madrid prohibió á los cómi-
de política para el mejor orden. E l nuestro, llevado de ese benéfico cos de la Cruz y del Príncipe " q u e asistieran á las representaciones
deseo, ha tomado las más justas y activas providencias para su logro, desde los palcos bajos y principales, para evitar de este modo el mal
y si por ahora ha determinado la suspensión de los grandes bailes, efecto que su presencia producía en el público, permitiéndoles solamente
ha sido por la consideración de que son sólo una diversión de los que presenciaran la función desde los palcos segundos." El gran Isi-
sentidos y 110 de entendimiento, por su poca variación y principalmente doro Máiquez reclamó contra tal afrenta, y gracias á él consintió el
por los excesivos costos que demandan y 110 puede sufrir una casa Ayuntamiento en alzar la prohibición, "siempre que pagaran el asien-
de misericordia tan recomendable como es el Hospital de Naturales to y guardaran el mayor orden y compostura, para 110 verse precisa-
de esta Capital.—Como el fin es enseñar divirtiendo y esto se logra da la Corporación á tener que adoptar respecto á ellos ciertas medi-
con la poesía dramática, se han mejorado en todo lo posible las Com- d a s , " y todavía muchos años después, con fecha 2 de Abril de 1833
pañías de representantes, cantarines y bailarines para los sones del el Director del Real Conservatorio de Madrid, propuso á la Comisión
país, y mejorado el Coliseo en todas sus partes.—Por ahora, mientras de Teatros que se les diera dicho tratamiento de Don á los famosos
haya quien haga en propiedad de primera dama, sólo se darán cinco actores Carlos Latorre y José Luna, y la Comisión contestó que 110
funciones á la semana; pero luego que haya proporción y esté la Com- podía acceder á ello.
pañía en estado de dar extraordinarias en los miércoles y sábados, Mucho tiempo había de pasar aún para que la Sociedad alzase, y
se harán seis ó siete funciones á la semana.—Entretanto se experi- no de un modo general y completo, el terrible anatema que pesó aun
menta si puede sostenerse la diversión en el pie establecido, no se sobre tan ilustres comediantes como Iusepa Vaca, la amiga de todos
hace aumento alguno en palcos, lunetas, mosquete, cazuelas y demás los nobles de la corte de Felipe I I I ; Gerónima Burgos, la favorita de
asientos, como tampoco en las entradas, sin embargo del extraordi- Lope; María Calderón o La Calderón a, por obra de Felipe IV madre
nario costo que ha tenido la casa en mejorar la finca.—-Sólo estarán de D. Juan de Austria en 1629; Rita Luna, trágica eminente; Isido-
libres de paga de entrada las personas qne ha determinado este Su- ro Máiquez, amigo y discípulo de Taima y reformador del arte escé-
perior Gobierno y constan en la siguiente lista:—Agraciados en el nico en España, reforma que inauguró en el teatro de los Caños del
art. 39 del Reglamento del año de 1806, para entrar de balde en el Peral cuando á él se transladó la Compañía cómica, mientras se reedi-
Coliseo de esta Capital: Los Exmos. Sres. Virreyes: de su familia, ficaba el del Príncipe.
Secretario Particular, Mayordomo, Damas y Pajes de servicio, y el Demos ahora una idea general de nuestros espectáculos y recreos
Caballerizo: Secretario de Cámara y su esposa; Oficial Mayor y los públicos al principio del siglo, tomándola de un papel de la época,
de número con los de Guerra, Señores Ministros Togados y sus mu- q u e dice:
jeres, sin familias. E l Sr. Corregidor, Alcaldes ordinarios, Regidores
" E l principal espectáculo es el de la comedia; sus decoraciones son
y sus mujeres, sin familias; todos los individuos de la Guardia de
buenas; los representantes no son malos, y entre ellos hay algunos
Alabarderos, sólo cuando vayan de servicio; el Administrador del
que pudieran lucir en Madrid mismo y en Nápoles: la casa es cómo-
Hospital y su mujer, sin familia.—Se dará principio á la temporada
da y en ella reina el buen orden por la vigilancia de los jueces. Sólo
esta noche, con la comedia moral de La Reconciliación ó los dos Her-
se nos ofrece preguntar, ¿por qué la parte sensata de los concurren-
manos: su primer intermedio se cubrirá con el minuet Congo por la Sra.
tes se mezcla en aplaudir unos entremeses que se ejecutan sólo para
María Guadalupe Gallardo y el Sr. Juan Marani, y cantará una buena
congeniar con la ínfima plebe? ¿Ignora tal vez que un aplauso intem-
tonadilla la Sra. Josefa Cárdenas, y el segundo cantarán la Sra. Do-
pestivo arraiga más fuertemente el gusto depravado con que se elogian
lores Munguía y el Sr. Luciano Cortés, la chistosa tonadilla del Pre-
unas representaciones que debían desterrarse en un siglo y en un país
sidiario, y bailarán La Morenita las Sras. Magdalena Lubert é Isa-
tan ilustrado como el nuestro? En lo demás debemos hacer justicia á
bel R e u d ó n . "
la verdad: los teatros de Europa 110 guardan la misma moderación y
decencia que ostenta el nuestro en cuanto al trato interior de los pal-
eos y luneta. Un poco de gusto moderno en la elección de las piezas, lógico, á que soy tan afecto, y pasádome sin hablar algo de nuestro
mayor estudio en los cómicos, menos ejercicio en los apuntadores, el teatro en los meses anteriores á su reforma de 1806. Por Octubre del
olvido de los cigarros en el tiempo de la escena, y, finalmente, el fa- precedente se representaban las comedias La Holandesa, Amar después
vor de la opinión para que cualquiera pueda sentarse en el patio sin de la muerte y Los esposos reunidos. Un programa del 4 de ese mes,
consultar su vestido, y menos preocupación en contra de una diver- dice: " H o y se ejecuta una primorosa Folla, compuesta de las piezas
sión que en sí no tiene nada malo, pueden, no sólo mejorar nuestro siguientes: De representado: x? la pieza La forma del sombrero; 2?
teatro, sino hacer mucho más agradable y útil su concurrencia. Un loco hace ciento; 3? El pleito del pastor. De cantado: Unas boleras
" L a Pelota, cuya casa es pública, ofrece un buen rato al especta- por el Sr. Andrés del Castillo, obligadas á trompa por D. Antonio
dor, y un ejercicio provechoso á la salud del que juega. Las apues- Salot. El saínete nuevo intitulado La Vizcaína y el cirujano, por la
tas que se hacen á favor de algún partido no debieran pasar de pocos Sra. Dolores Munguía y el Sr. José Estoracio. Se tocará un concier-
pesos. El que atraviesa cantidad de onzas de oro, da á conocer que to de música obligado á violín por D. Andrés Ramírez, ciego de na-
va allí á buscar un juego ruinoso y no una honesta diversión. ción, del mejor gusto. E l baile grande será del maestro Sr. Juan Me-
" L o mismo diríamos en cuanto á las peleas de gallos. La casa des- d i n a . " Folla, perdonen los que ya lo sepan, significa diversión tea-
tinada á este fin pudiera pasar por la más perfecta, si los corredores tral compuesta de varios pasos de comedia inconexos, mezclados con
que manejan y combinan las apuestas 110 abarcasen tantas acciones otros de música.
de un golpe, y fuesen más prontos en dar razón de si hay ó no quien Eran muy comunes en esa época, especialmente en los beneficios.
reciba los envites. En el suyo dió el Sr. Andrés Castillo, á 9 de Octubre de 1805, las si-
"Los Cafés no han servido en México más que para almorzar y guientes piezas: De representado: 1? La hija embustera y la madre más
formar un rato de tertulia; las discusiones literarias empiezan ya á que ella. 2? Las astucias desgraciadas. 3? El perlático fingido. De can-
tener lugar en ellos. El Diario, La Gaceta y El Jornal (?) Económico tado: la aria obligada á trompa y unas nuevas boleras con acompaña-
Mercantil, suministran bastante pábulo al criterio público. ¡Dichosos miento de dos guitarras y trompa, por el dicho Castillo. Por el mis-
nuestros papeles si por medio de la crítica misma que sufran, conser- mo, Sra. Dolores Munguía y Sr. José Estoracio, un nuevo saínete
van los Cafés libres de las cábalas y murmuraciones que en otras llamado La novia artista. De baile: el agraciado de los Negrillos á
partes abrigan y por ventura no se han deslizado en los nuestros! cuatro, y -por grande uno de los mejores.
" E l paseo más considerable y de asistencia casi precisa, es el de la A estas follas seguían, ó alternaban con ellas, las comedias, Tam-
Alameda los días de domingo. La multitud de coches, la diversidad bién la afrenta es veneno, Los áspides de Cleopatra, La petimetra co-
de sus colores y estructura, el aseo del traje, los sujetos ilustres que rregida, Catalina Segunda Emperatriz de Rusia, No hay burlas con
concurren, la finura de las madamas que lo hermosean, todos esos el amor, El hombre singular, El Aguador de París, La Misantropía,
objetos contribuyen á hacer muy agradable esta especie de espec- La Matilde, Mujer, llora y venceréis, La jura de Artagerjes, No pue-
táculo público. Sólo el capricho lo embaraza algún tanto: aquella de ser guardar á una mujer, El mágico de Salerno, y cien otras en
precisión de mantenerse en coche mirándose á la cara unos á otros, que se mezclaban los nombres de los más ilustres autores del siglo
y la costumbre de no poderse presentar á pie sin chocar con los prin- de oro con los de D. José de Cañizares y los poetastros de que fué in-
cipios contrarios de la opinión, son unas violencias insufribles, espe- fatigable maestro, cual el sastre célebre Juan Calvo y Vela, que com-
cialmente para quien no tiene coche. Tal cual, ya se empiezan á co- puso para los cómicos del Príncipe la citada comedia de El Mágico
nocer estos perjuicios y quizás presto se sacudirán. de Salerno ó Pedro Vayalarde.
" P o r cuaresma comienza el paseo que llaman de la Viga y dura Pero el mayor atractivo para la generalidad no educada del público,
hasta el día de la Ascensión del Señor. La frondosidad de los árbo- eran los saínetes y los bailes, unos y otros suficientemente groseros
les que lo rodean, su agradable sombra, las chinampas inmediatas, á lo que parece. " T o d a la gracia, todo el chiste de aquéllos, decía un
la hermosa acequia navegable con la multitud de gentes que andan colaborador del Diario, consiste por lo regular en dichitos sobre glo-
en las canoas y barcos, las quintas ó casas de campo cercanas, la be- tonería, sobre cobardía, sobre tercería ó sobre chismería. E s preciso
lla arquitectura y jardines de éstas, no sólo lisonjean la vista sino pasar por mil impropiedades é impertinencias para encontrar una gra-
también inspiran un dulce entusiasmo y elevan el espíritu hasta la cia. Las más veces que hacen reír es por equivoquillos indecorosos ó
meditación del Supremo Creador de la Naturaleza." por extravagancias También me tomo la libertad de recomendar-
Sin pensarlo he ido más adelante de lo que exige el orden crono- le declame contra la disolución de algunas bailarinas, pues parama-
nifestarnos su agilidad y destreza en las mudanzas, no necesitamos
que nos acompañen éstas con impurezas; pues aunque algunos hom-
bres estragados, ¡ un antes de la edad porque han abusado de todo,
las aplauden y palmotean, efecto, sin duda, de necesitar de la inde-
cencia para que despierte en ellos la vida apagada, ¡qué desconsuelo es CAPITULO XVI
para un padre que se ve en la necesidad de permitir presenciar tales
disoluciones á una hija á quien ama y en cuya moral se interesa!"
Para concluir este capítulo pondré aquí, tomándolas de los progra-
1806—1812
mas de la época, una breve noticia de las tonadillas y bailes más en
uso y de las piezas de cantado.
Dije en el capítulo precedente cómo estuvo formada la Compañía
En una Folla de 12 de Octubre, siempre de 1805, se ejecutó el bai- del Coliseo Nuevo para el año cómico de 1806 y 1807, y aun di tam-
le de el Agraciado de Zanganillo y por grande, ó sea de espectáculo, el bién el programa de la primera función.
de Adelaide de Guesclin, de la composición del Maestro Juan Medina.
Siguiéronse las comedias Buen amante y buen amigo. Cumplir dos
El 25, y á beneficio de Victorio Rocamora, á la " chistosa comedia en
obligaciones, ó Duquesa de Sajonia, y Las víctimas del libertinaje, con
un acto, El Encuentro feliz, siguió la zarzuela bufa en dos, del célebre
intermedios como la Polaca ó dúo el amor es dulce hechizo, y el agracia-
Ci mar rosa, el Filósofo burlado, que cantaron María Dolores Munguía,
do sonecito El Bejuquito.
Mariana Argíiello, Andrés del Castillo y el beneficiado. En un in-
termedio se bailó la Bamba, á cuatro, y por fin de fiesta el de Ade- El viernes 11 de Abril se dió, por primera vez en México, la fa-
laide de Guesclin." El 29, y á beneficio de la bailarina María Guadalu- mosa comedia del célebre Moratín, El Café, anunciada con la tona-
pe Gallardo, después de los sainetes el Soldado fanfarrón, los Bandos dilla El paje en la tinaja por la Munguía, Castillo, Saldafia y Miguel
del Avapiés y el Celoso confundido, cantaron y bailaron unas Boleras Maya y el saínete El payo de la burra. Vinieron después en las si-
y la tonadilla de el Petimetre majo Castillo y Rocamora, la beneficia- guientes noches la comedia heroica de El Duque de Pentiebre, FJ ca-
da y Juan Marani; por grande se bailó el Apeles y Campaspe, compo- samiento por Juerza, El payo de la carta y una graciosa Folla en que
sición también de Juan Medina, autor de Dido abandonada, bailado figuraron el Examen de cortejos, y la pieza Perdónela enferma, en la que
el 4 de Noviembre en celebridad del cumpleaños del Rey. además de los individuos de la Compañía salieron á dar muestra de
sus habilidades Cristóbal Flores, Mariano El Texcucano, Felipe Bae-
En el beneficio del bailarín José María Morales, se estrenó un ju- za y María Dolores, diestros volantines que hicieron en la maroma
guetillo en que cantaron Andrés del Castillo la Polaca del Astrólogo, diversas y difíciles suertes: concluidas ellas, Luciano Cortés dijo el
y el mismo, la Munguía, Victorio Rocamora, y Rosalía Medina, un unipersonal de las contradanzas, se cantó la tonadilla de El Cocherito
terceto, unas boleras y el sonecito la Chipicuaraca. Siguió la tonadi- Simón, y se representó la pieza El Viudo Don Epifanio.
lla general de la casa de locos por Mariana Arguello, María Guadalupe
Gallardo, José Estoracio y Luciano Cortés. De baile hubo lo siguien- Diéronse en el resto de aquel Abril: el 20 una tercera representación
te: el Minuet fandango, el Churripampli, por Ana María Cendejas y de El Café; se presentó María Dolores Carpintero con una tonadilla,
Antonio Medina, y por grande el de Chaveta en la ciudad. género en que lucía su salero y su gracia Inés García, guapísima y
seductora mujer y cómica y cantarína, más conocida por la Inesi-
El 2 de Diciembre fué el beneficio del galán de música Victorio Ro-
lla, y se representó El tonto, Alcalde discreto. El 22 se dió la comedia
camora, con los sainetes: la Maja majada, el Negro sensible, el Solda-
Trampa adelante. El 24 el Galeote cautivo, desempeñando el galán
do fanfarrón, el Terceto del Campanello, la tonadilla la Disputa de los
Fernando Gavila y el gracioso Luciano Cortés; en esa obra se estrenó
amigos, el baile Diana y Silvio, compuesto por Medina, y el dúo de
una magnífica decoración del diestro y acreditado pincel de D. Fran-
los Rivales de amor, obra de D. Manuel de Arenzana, Maestro de Ca-
cisco Zapari. El 27, en celebridad del cumpleaños del Virrey Iturri-
pilla de la Santa Iglesia Catedral de Puebla de los Angeles, y autor
garay, se dió la gran comedia de música La prudencia en la niñez y Rei-
de la ópera en dos actos El Extranjero, cantada en el Coliseo'Nuevo
na loca de Hungría, desempeñando el papel de dama de cantado María
o Principal el 25 de Noviembre anterior, con mucho aplauso
Dolores Carpintero. El 29 El falso Nuncio de Portugal y tonadilla del
Petimetre y la patrona.
En Mayo fueron dadas: La madre engañada, el Majo celoso, Entre bo-
bos anda el juego, el Parecido en la Corte, el Buen Labrador, el Segunde
nifestarnos su agilidad y destreza en las mudanzas, no necesitamos
que nos acompañen éstas con impurezas; pues aunque algunos hom-
bres estragados, ¡ un antes da la edad porque han abusado de todo,
las aplauden y palmotean, efecto, sin duda, de necesitar de la inde-
cencia para que despierte en ellos la vida apagada, ¡qué desconsuelo es CAPITULO XVI
para un padre que se ve en la necesidad de permitir presenciar tales
disoluciones á una hija á quien ama y en cuya moral se interesa!"
Para concluir este capítulo pondré aquí, tomándolas de los progra-
1806—1812
mas de la época, una breve noticia de las tonadillas y bailes más en
uso y de las piezas de cantado.
Dije en el capítulo precedente cómo estuvo formada la Compañía
En una Folla de 12 de Octubre, siempre de 1805, se ejecutó el bai- del Coliseo Nuevo para el año cómico de 1806 y 1807, y aun di tam-
le de el Agraciado de Zanganillo y por grande, ó sea de espectáculo, el bién el programa de la primera función.
de Adelaide de Gnesclin, de la composición del Maestro Juan Medina.
Siguiéronse las comedias Buen amante y buen amigo. Cumplir dos
El 25, y á beneficio de Victorio Rocamora, á la " chistosa comedia en
obligaciones, ó Duquesa de Sajonia, y Las víctimas del libertinaje, con
un acto, El Encuentro feliz, siguió la zarzuela bufa en dos, del célebre
intermedios como la Polaca ó dúo el amor es dulce hechizo, y el agracia-
Ci mar rosa, el Filósofo burlado, que cantaron María Dolores Munguía,
do sonecito El Bejuquito.
Mariana Argíiello, Andrés del Castillo y el beneficiado. En un in-
termedio se bailó la Bamba, á cuatro, y por fin de fiesta el de Ade- El viernes 11 de Abril se dió, por primera vez en México, la fa-
laide de Gnesclin." El 29, y á beneficio de la bailarina María Guadalu- mosa comedia del célebre Moratín, El Café, anunciada con la tona-
pe Gallardo, después de los sainetes el Soldado fanfarrón, los Bandos dilla El paje en la tinaja por la Munguía, Castillo, Saldafia y Miguel
del Avapiés y el Celoso confundido, cantaron y bailaron unas Boleras Maya y el saínete El payo de la burra. Vinieron después en las si-
y la tonadilla de el Petimetre majo Castillo y Rocamora, la beneficia- guientes noches la comedia heroica de El Duque de Pentiebre, El ca-
da y Juan Marani; por grande se bailó el Apeles y Campaspe, compo- samiento por fuerza,, El payo de la carta y una graciosa Folla en que
sición también de Juan Medina, autor de Dido abandonada, bailado figuraron el Examen de cortejos, y la pieza Perdónela enferma, en la que
el 4 de Noviembre en celebridad del cumpleaños del Rey. además de los individuos de la Compañía salieron á dar muestra de
sus habilidades Cristóbal Flores, Mariano El Texcucano, Felipe Bae-
En el beneficio del bailarín José María Morales, se estrenó un ju- za y María Dolores, diestros volantines que hicieron en la maroma
guetillo en que cantaron Andrés del Castillo la Polaca del Astrólogo, diversas y difíciles suertes: concluidas ellas, Luciano Cortés dijo el
y el mismo, la Munguía, Victorio Rocamora, y Rosalía Medina, un unipersonal de las contradanzas, se cantó la tonadilla de El Cocherito
terceto, unas boleras y el sonecito la Chipicuaraca. Siguió la tonadi- Simón, y se representó la pieza El Viudo Don Epifanio.
lla general de la casa de locos por Mariana Arguello, María Guadalupe
Gallardo, José Estoracio y Luciano Cortés. De baile hubo lo siguien- Diéronse en el resto de aquel Abril: el 20 una tercera representación
te: el Minuet fandango, el Churripampli, por Ana María Cendejas y de El Café; se presentó María Dolores Carpintero con una tonadilla,
Antonio Medina, y por grande el de Chaveta en la ciudad. género en que lucía su salero y su gracia Inés García, guapísima y
seductora mujer y cómica y cantarína, más conocida por la Inesi-
El 2 de Diciembre fué el beneficio del galán de música Victorio Ro-
lla, y se representó El tonto, Alcalde discreto. El 22 se dió la comedia
camora, con los sainetes: la Maja majada, el Negro sensible, el Solda-
Trampa adelante. El 24 el Galeote cautivo, desempeñando el galán
do fanfarrón, el Terceto del Campanello, la tonadilla la Disputa de los
Fernando Gavila y el gracioso Luciano Cortés; en esa obra se estrenó
amigos, el baile Diana y Silvio, compuesto por Medina, y el dúo de
una magnífica decoración del diestro y acreditado pincel de D. Fran-
los Rivales de amor, obra de D. Manuel de Arenzana, Maestro de Ca-
cisco Zapari. El 27, en celebridad del cumpleaños del Virrey Iturri-
pilla de la Santa Iglesia Catedral de Puebla de los Angeles, y autor
garay, se dió la gran comedia de música La prudencia en la niñez y Rei-
de la ópera en dos actos El Extranjero, cantada en el Coliseo'Nuevo
na loca de Hungría, desempeñando el papel de dama de cantado María
o Principal el 25 de Noviembre anterior, con mucho aplauso
Dolores Carpintero. El 29 El falso Nuncio de Portugal y tonadilla del
Petimetre y la patrona.
En Mayo fueron dadas: La madre engañada, el Majo celoso, Entre bo-
bos anda el juego, el Parecido en la Corte, el Buen Labrador, el Segunde
Séneca de España, Amar después de la muerte, el Secreto á voces, el Otelo, En Noviembre: Dios hacejusticia á todos, Más vale el loco en su casa,
la comedia de figurón el Hechizado por fuerza, el Señorito mimado, la El natural vizcaíno, Mentir y mudarse á un tiempo.
zarzuela la Isabela, la Fulgencia para presentación de k dama María En Diciembre fué el espectáculo más notable, el estreno en nues-
Dolores Vélez, la Raquel, Sancho Ortiz de Roelas, los Falsos hombres de tro teatro de El Barbero de Paisiello, verificado el 4 y repetido el 9.
bien, la Viuda generosa, Matilde de Orleim, los Hijos de Nadar ti, y el El Diario de México, periódico minúsculo, pero que nadie que es-
Músico chasqueado. criba sobre asuntos de nuestro país debe dejar de consultar, huyendo
En Junio: La Mogigata, El Chismoso, la comedia compuesta por un de la manía tan común en cierto género de prensa de atacarlo todo
ingenio de la Capital con el título de Napoleón Bonaparteen el paso del sin producir nada y sin fomentar nada, procuraba en la medida de
Adigey batalla de Arcóle, la Cecilia, elVinatero de Madrid, la Misantro- sus fuerzas, dar aliento á la literatura dramática nacional, abriendo
pía, el Rey Demofonte de Tracia, la Presumida y la hermana, Natalia y concursos y señalando premios en dinero á los autores. En esos hu-
Carolina, la Tía y la sobrina, ó de la calle vendrá quien de casa nos echará; mildes, cuanto meritorios certámenes, salió premiado, allá por Abril,
la Modesta labradora, el Buen hijo ó María Teresa, el Montañés; para un entremés ó petipieza, titulada: Al mayor libertinaje la prudencia con-
presentación de la dáma Dolores Tapia el Soldé España en Oriente ó tra el vicio. El 9 de Julio el Coliseo anunció '' El blanco por fuerza, crí-
toledano Moisés, la Moza de cántaro y el Asombro de Jerez ó Juana la tica nueva escrita en este Reino y que se sacó el premio, se ejecuta-
Rabicortona. rá con el mayor esmero, trajes propios que pide y demás necesario á
E n Julio: Cuantas veo tantas quiero, la Emilia, el Nuevo Mundo des- su acierto." El citado periódico anunció en uno de sus números de
cubriendo, la Escondida y la tapada, el Temistocles, el Filósofo enamo- Diciembre que en su jurado calificador del día 6, salió premiado el saí-
rado, Fuego de Dios en el querer bien, Cristóbal Colón, el Conde Ols- nete El miserable engañado y niña de la media almendra. " Abierto el
bah, el Dómine Lucas, el Negro y la blanca, la facoba, el Católico Recaredo pliego, se halló ser autor D. Francisco Escolano y Obregón, oficial
y el amante generoso. Merece mención especial la función dada á 25 de de libros de la fiñatura de la Real Casa de Moneda," al cual se invi-
dicho Julio, que se anunció así: "Bonaparte en Egipto y toma del Cairo, tó á pasar á la librería de Arizpe á recibir el premio en dinero seña-
drama nuevo heroico en tres actos, adornado con vistosas escenas y lado en la convocatoria.
comparsas francesa y mameluca, trajes propios, evoluciones, música Para el año cómico de 1807 y 8, la Compañía del Coliseo Nuevo
militar, vistas del caudaloso Nilo y del interior de la magnífica pirá- se formó así: primer galán, Luciano Cortés; segundo, Miguel Cende-
mide de Cheops, y gran plaza de la ciudad conquistada." jas; tercero, Bartolomé Arias; barbas, Carreño y Zorrilla; graciosos,
En Agosto: Mudanzas de la fortuna, El convidado de piedra, Cortés Juan Moreno y Francisco Saldaña; damas, Gertrudis Solís y Dolores
en Tabasco, Chirivitas elyesero, Pablo y Virginia, El Príncipeprodigioso, Munguía; graciosas, Josefa Cárdenas, J u a n a Martínez y Dolores Vé-
La Conquista de México, El esclavo en grillos de oro, México por Carlos lez; cantarínas, Dolores Munguía, Dolores Carpintero, Inés García,
Quinto, Los empeños de un acaso. Abundia Cárdenas; cantarines, Andrés Castillo, Victorio Rocamora,
E n Setiembre: Marta la Romarantina, tragedia La Shore, La Real Miguel Maya; baile, José María Morales, Guadalupe Gallardo, Isa-
jura de Artagerjes, El premio de la humildad, Hacer que hacemos, El bel Rendón, Magdalena Lubert, Sebastiana Pefialosa; apuntadores,
lindo Don Diego, El Rábula, El encanto por los celos ó Fuente de la Ju- Manuel Lara, José Rincón, Leopoldo Olmedo; Director de Orquesta,
dia, El Gran Conde de Saldaña, También la afrenta es veneno, Capri- J u a n Campuzano. Esta Compañía, con sus partes de por medio y de-
chos de amor y celos. En el programa de Marta la Romarantina, se más empleados, costaba al año $35,505, y anunció que daría come-
anunció: " e l primer galán Sr. Fernando Gavila volará del castillo á dias los siete días de la semana.
la linternilla del centro, con todas sus vistas y tramoyas." Después de pormenorizada la lista de obras puestas en escena en
En Octubre: El parecido de Rusia, El tejedor de Segovia, El error y el año anterior, creo innecesario referirme á las de la nueva tempo-
el honor, El Licenciado Farfulla, La más hidalga hermosura, Alberto I, rada, más ó menos igual ó semejante, y paso á decir quiénes forma-
ó la Adelina, El anillo de Giges, No siempre lo peor es cierto, El prisio- ron la Compañía en 1808 y 1809. Actores, Fernando Gavila, Teodoro
nero de guerra. En ese mismo mes se dió el drama trágico La insubor- Borja, Bartolomé Arias, Mariano Ayala, José María Ruiz, Agustín
dinación, presentándose en él una ejecución con todos sus pormeno- Castillo, Mariano Aragón, José Mendoza, Francisco Carreño, Maria-
res, y se cantó el dúo misturado en los dos idiomas, italiano y caste- no García, Juan Moreno, Francisco Saldaña; cantarines: Andrés Cas-
llano, nominado de calma qüel core, por María Dolores Carpintero y tillo, Victorio Rocamora, Miguel Maya; actrices: Agustina Montene-
Victorio Rocamora. gro, Luisa Aguilar, Antonia Rodríguez, María del Carmen Uribe,
R. H. T — T . I.—23
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Dolores Pérez, Dolores Munguía, Dolores Carpintero, Inés García,
María Josefa Echarte; baile: Josefa, Manuela y Rafaela Olivarre, Ana arcos, etc., acompañando varias actitudes teatrales. El mono, vesti-
María Cendejas, Guadalupe Gallardo, Cecilia Ortiz, Magdalena Lu- do de general francés, será sentenciado y él mismo demostrará que
bert, María Peñalosa. Maestro de escoleta y primer violín de orquesta, lee su sentencia antes de ejecutarse; se advertirá que procura este
José Manuel Aldana. animal cumplir exactamente con su obligación delante de tan respe-
La primera función de temporada, el Domingo de Resurrección, table público.—Habrá doble orquesta."
17 de Abril de 1808, se compuso de la comedia El amor y la intriga, Terminadas la Cuaresma y Semana Santa, el Coliseo abrió nueva-
una tonadilla cantada por la Carpintero, el saínete de El Majo celoso por mente sus puertas el 2 de Abril de 1809 con la siguiente Compañía-
Dolores Munguía y Andrés Castillo, y el sonecito del Churripampli. Primera dama, María de la Luz Vallecillo; segundas, Bernardina
No debo extenderme á más so pena de hacer monótona y cansada Saavedra, Antonia de San Martín; graciosas, María del Carmen Uri-
la lectura: por otra parte, los ánimos 110 estaban para diversiones; la be, Iguaria Estrada; primer galán, con obligación de hacer figurones
Madre Espafia acababa de ser invadida por Napoleón, sus monarcas y graciosos, Luciano Cortés; segundos, Manuel Diez, Bartolomé Arias
habían abandonado á su heroico pueblo que mataba ó se hacía matar José Torremocha, Mariano Ayala, José Aragón y José Martínez - so-
en desesperada y desigual lucha, y en México la torpeza y el orgullo bresaliente general, Fernando Gavila; gracioso, Francisco Saldaña; 'bar-
del ambicioso Iturrigaray, traían á mal traer los asuntos del virrei- bas, Francisco Carreño y Mariano García; saineteros, Victorio Roca-
nato. Puestos, por su causa, en pugna el partido español y el ameri- mora y Miguel Maya; camarinas, Dolores Munguía, Inés García, Mi-
cano, aquél no se anduvo con chicas y por sí y ante sí asaltó el Pala- caela Aguilar, Josefa Olivares; bailarinas, Guadalupe Gallardo, Isabel
cio en la noche del 15 de Setiembre de 180S, aprisionó y destituyó Rendón, Sebastiana Peñalosa, Manuela Olivares. Maestro Director
al Virrey y puso en su lugar al ochentón D. Pedro Garibay, y sin Antonio Medina, y de escoleta, José Manuel Aldana y Vicente Virgen
darse cuenta de ello, los mercaderes conspiradores prepararon la mag- El estreno de temporada se hizo con Sancho Ortiz de las Roelas.
na insurrección de 1810. En funciones notables sólo hallo en esa temporada la del 18 de Ma-
Mas no adelantemos los sucesos, como dicen los novelistas, y re- yo, en que se representó el drama nuevo acabado de llegar de España
duzcámonos á nuestra modestísima tarea de cronistas de espectáculos. Los patriotas de Aragón. Su éxito fué grande, pues estaba en moda
A ese respecto, la novedad de principios de 1809 la ofreció el Ca- celebrar á los héroes de la península y deprimir é insultar á los in-
pitán D. Felipe Lailson, quien desde Julio del año anterior, había vasores. Ya vimos que Lailson trató de explotar á su público, vis-
hecho anunciar en la Gaceta, que se ocupaba en levantar un Circo tiendo á un mono de general de Napoleón; los poetas producían dia-
"para dar una temporada de ejercicios de equitación y volteo, semejan- n a s diatribas contra los franceses, y en el Sábado de Gloria de 1810
tes á los ejecutados en varias Cortes de E u r o p a . " El revistero de la que cayó á 21 de Abril, se publicó una letrilla con el título de Los
Gaceta, decía en 4 de Enero del de 1809, " n o sólo ha presenciado juditas de nuevo cuño, que decía:
este público la grande habilidad del Capitán D. Felipe Lailson en di-
ficilísimas suertes y equilibrios sobre los caballos, sino que ha visto
"Este Sábado de Gloria
que obedeciendo á su voz ejecutan por sí mismos cosas sólo reserva-
ya no sirves, Judas viejo;
das á la inteligencia del hombre. Actualmente tiene dispuesto para
ya yo tengo otro pellejo
la primera función, el que otro animal ejecute cosas enteramente nue- de que hacer judas de moda.
vas á las que ha verificado con otros caballos. Un mono se presenta-
"Si saldrá con todo y cola
rá vestido de General francés y hará varias evoluciones, con otras co-
del rey Don Chepe un juditas?
sas raras y divertidas; este mismo animal sabe escribir estas palabras: ¡Bravo! ¡y con sus botellitas!
yo soy mono, y al parecer imita la voz del hombre. Vide et crede." Di- Este Judas arderá!
fícil es imaginarse más cándida admiración.
Todo es fuego!
Para concluir con este asunto, copio aquí el programa de una de
Allá va,
esas funciones del llamado Real Circo de Equitación: " S e tocará una señoritas, eljudero.
marcha compuesta por D. Felipe Lailson, dedicada al noble pueblo
mexicano. Seguirán varias maniobras ejecutadas por toda la Compa-
" E s t e Sábado de Gloria
ñía. El Capitán Lailson hará la de las naranjas, sombrero de los tres
del nuevo cuño, muchachos,
de esos malditos gabachos sobre los insurgentes del primer período de la guerra de Indepen-
lie de hacer judas de moda. dencia.
"Si saldrá cotí todo y cola Entre los festejos que se le hicieron, figuraron algunas funciones
de Soult un par de j uditas? en el Coliseo, siendo en ellas de tal modo aplaudido y aclamado, que
¡Bravo! y sacan tres colitas! el Virrey Veuegas, que con el jefe realista había tenido ya más de
Este judas arderá? 1111 motivo de disgusto, sintió celos y determinó 110 volver á concu-
Todo es fuego! rrir al teatro mientras Calleja permaneciese en la Capital, puesto que
Allá va, la veleidad pública le obligaba á hacer un papel secundario y des-
señoritas, e l j u d e r o . airado. Un revistero de la época nos dice que "en esas funciones de
obsequio á Calleja, se adornó el Coliseo como en los días de santo ó
cumpleaños de los monarcas: colgaduras de muselina y seda, primo-
" E s t e Sábado de Gloria rosamente bordadas de oro y estambres de colores, cubrían los ante-
enriqueces, Pantaleón; pechos; coronas y guirnaldas de flores de tela se entrelazaban con los
del tirano Napoleón trofeos, alegorías y tarjetones con las iniciales de Fernando VII; las
he de hacer judas de moda. arañas ó candiles, que pendientes del cielo raso derramaban la luz
"Si saldrá con todo y cola? producida por la combustión del aceite, eran aumentadas, y grandes
¡Cáspita! si todo es patas! albortantes de madera sostenían grupos de olorosas velas de cera con
Miren un Judas á gatas! arandelas de papel encarrujado."
Este J u d a s arderá?
La Compañía cómica venía siendo casi la misma que en las ante-
Más que el fuego!
riores temporadas, y he aquí la curiosa noticia que de las intrigas y
Allá va,
disgustos entre sus individuos di en mis Episodios Históricos: Dolores
señoritas, e l j u d e r o . "
Munguía, primera dama de música y Agustina Montenegro, primera
de representado, se miran hace tiempo mal, y aun se dice, que aqué-
Para la temporada de 1810, quedaron en la Compañía muchos de lla puso en j uego todos sus recursos femeniles para que la segunda
los cómicos ya apuntados anteriormente, y fué primera dama Agus- 110 fuese contratada. Miguel Maya, galán de música, teme que Lucia-
tina Montenegro y director de orquesta José María Bibién: 110 repro- no Cortés continúe siendo el favorito del público, que de él se enamo-
duzco la lista completa, por no hacer cansada esta parte. En cuanto ró desde que en la temporada última interpretó á la perfección el
al éxito de la temporada, casi me parece innecesario decir que 110 fué Barbero de Sevilla, de Paisiello, primera ópera italiana conocida en
bueno. México. María Ramírez, que cuenta los amigos á millones, hace im-
España continuaba luchando con grandioso heroísmo contra Na- prudente alarde de su popularidad ante Sebastiana Peñalosa, que es
poleón, su Junta Central Gubernativa pedía sin dencanso recursos pa- la favorita del Empresario, y por consiguiente, la tirana de sus com-
ra continuar la guerra, su colonia 110 escaseaba ciertamente esos au- pañeras. José María Amador teme las venganzas de Manuel Díaz, á
xilios, y el exaltado amor patrio de la generalidad habría estimado quien fué preferido y el cual le ha jurado sublevarle una noche á los
casi un crimen emplear en diversiones el dinero que podía destinar- inquietos concurrentes al mosquete, y todos, en fin, se aborrecen, se
se á alimentar ó vestir á un soldado. Para colmo de preocupaciones, odian, se detestan, se insultan, infaman y desacreditan, y es el esce-
nario trasunto de desorden, semillero de disgustos, fábrica de intri-
dos días después de haber tomado posesión del virreinato D. Fran-
gas y cúmulo de todas las pasiones, si bien las nobles escasean y las
cisco Javier Ve.iegas, estalló en Dolores la formidable rebelión de
indignas crecen, se agigantan, y todo lo invaden y lo trastornan to-
D. Miguel Hidalgo contra el gobierno establecido, y las acciones de
do. ¡Cuán viejos son estos vicios del teatro!
Guanajuato y Valladolid y la del Monte de las Cruces, sembraron el
luto y la alarma por donde quiera, y acabaron de dar al traste con el Creo haber venido dando hasta aquí idea bastante del modo de ser
brillo de los espectáculos públicos. La felonía del traidor Elizondo de nuestro teatro durante la dominación española, sin entrar en mu-
entregó á las balas realistas las vidas de los patriotas que habían es- chos pormenores, que sería materialmente imposible hacer caber en
capado á los reveses de Aculco y Calderón, y el terrible Calleja vi- estos artículos, sin que dejaren este carácter y se convirtiesen en
no á México á principios de 1812 á recibir el premio de sus victorias verdaderos tomos que pocos leerían y comprarían muchos menos. No
son nuestros días ni nuestros gustos para escribir libros de este gé- " L a paga será como de día de trabajo, y en cuanto á los palcos y
nero, no porque nos falte quienes puedan escribirlos, pero sí porque asientos de temporada, no exige la cantarilla otro interés que el que
carecemos de lectores y de compradores, como acabo de indicar. No cada persona quiera entregar voluntariamente al cobrador."
busco los últimos pero sí los primeros, y estoy cierto de que los per- ¡Cuán segura no estaría la Inesilla del cariño del público, que no
dería si entrase en muchos detalles, como por ejemplo, el de copiar fijaba precio alguno á las localidades!
los elencos ó listas de compañías. El éxito que esperaba la bella actriz, fué completo, y es de asom-
Elijamos, pues, lo más agradable por anecdótico, buscándolo allá brar en estos tiempos tan distantes de aquellos en derroches de ri-
por 1813, en que tomó posesión del Gobierno del Virreinato D. Félix quezas y entusiasmo.
María Calleja, á quien nuestro Coliseo debió alguna protección. La Inesilla dedicó su beneficio á Calleja, y éste hizo que sus ayu-
Señalábase por esos días como una de las más inteligentes y gra- dantes, al presentarse en las tablas la hermosa actriz, arrojasen á sus
ciosas actrices, la ya varias veces nombrada Inés García, más cono- pies más de cien onzas de oro; la Virreina le envió uno de sus mejo-
cida por la Inesilla. H é aquí cómo la retraté en mis citados Episodios res aderezos de brillantes. Otras muchas personas del público arroja-
Históricos, guiándome por informes fidedignos. El óvalo de su rostro, ron también al escenario onzas y otras monedas de oro, y entre los
tenuamente apiñonado, se encerraba graciosamente en un marco de obsequios de alhajas, que fueron numerosos, figuraron hilos de per-
suavísimos cabellos negros, artificialmente rizados: negros y grandes las, aretes, cruces y aderezos completos de brillantes, cofrecitos de
sus ojos, miraban al medroso ante su hermosura, con graciosa picardía, oro, rosarios y relojes con piedras finas.
y al atrevido, con apacible sencillez: la boca era en la Inesilla un ca- Según costumbre de ese tiempo y como vemos en el programa, la
nastillo de verdaderas gracias; pequeños y encendidos los labios, di- Inesilla 110 señaló precio de entrada á las localidades abonadas, de-
minutos y blancos los dientes, embriagador y aromático el aliento. jando al arbitrio de las personas que debían ocuparlas, el dar por
No era de alta estatura, pero tenía la bastante para sobresalir por la ellas lo que fuese su voluntad. A este fin, situábase en la puerta de
corrección de sus formas entre sus demás compañeras; sus manos eran entrada el cobrador con una gran charola, bandeja ó azafate de pla-
finas, alargadas, como las de las señoritas de buena clase; sus pies pe- ta, y cada cual depositaba en ella, lo que por conveniente tenía, y
queños y delicados y en ellos tenía cifrado su orgullo femenil, 110 sin siempre mucho más del valor ordinario del asiento.
justicia y razón. Aparte, pues, de los obsequios en alhajas, el beneficio de la Inesilla
Por la nombradía que con su belleza adquirió, hago cita especial de produjo mil seiscientos pesos de localidades, y mil novecientos en mo-
la Inesilla y voy á hablar de uno de sus beneficios. En Nueva España, nedas, arrojadas al tablado.
esas funciones de gracia eran otorgadas á los cómicos por los virre- La beneficiada hizo repartir, impreso en seda con letras cloradas ó
yes, como ya tengo dicho y consta en el siguiente curioso programa: en papel blanco con letras rojas, la siguiente invitación ó dedicatoria
" E l lunes primero del corriente se sigue á gozar del beneficio que el con título de Soneto acróstico:
Exmo. Sr. Virrey ha proporcionado á los individuos de este Real Coli-
seo, la segunda dama de música y cantarína Inés García, quien con la pesarosa mi dicha, i dudos
esperanza de que el benigno público, su amado favorecedor, concurri- C^nir quisiera ^ o tan feliz di
rá á prestarle la atención que acostumbra, fomentando ahora el mayor baoluntad y posibles, •^iva harí
lucimiento á que aspira por el interés que le puede resultar, ha dis- í ^ u j o y grandeza cción más generos
puesto una función que considera suficiente para el lleno de sus deseos. ^ a s í lograra ^ e mi fe amoros
" Se representará, pues, la famosa comedia titulada La Mexicana o, onociesen mi afecto ¡ í i n m i porfí
en Inglaterra, en cuyos intermedios se ejecutarán los siguientes agra- Cimi eficacia, ^ as en tal maní v

dables adornos: la pequeña pieza de El Casero burlado por amor á la fe: ien encuentro que inútil fe s y ocios
inquilina: las seguidillas nombradas En los campos de Arminda por la fen todo he sido erxes con la Greci
misma interesada: unas primorosas boleras á solo, por Isabel Rendón: o es esta culpa mía ^ maginad
La Alemanda, por José Morales: el son de la tierra llamado el Jarabe >^es mi destino ^ o m o me despreci
y la La Bamba Poblana: la zarzuela La Amalia, por Luciano Cortés P) ustosa advierte O h corte venerad
y la interesada: el baile grande de La Estatua ó el escultor, en que <^orte en vuestras piedades frln que apreci
danzarán todas las parejas Las Boleras al tiempo de la contradanza. Cjy otra suerte t^a beneficiad
Las letras mayúsculas de mitad de cada verso y las iniciales de Porque quien ama
ellos, dicen leídos de arriba para abajo Viva de México el Público be- tiene de lo que estima
nigno, teniendo además ese llamado soneto y disparatada composición, desconfianza.
la curiosidad de que todos sus catorce versos terminan en una A que
en el original, que poseo, iba sacada á la derecha. Nada le satisface
ni hay causa suficiente
para que cuerdo sufra
lo que el corazón siente.
CAPITULO XVII Ya se arrebata,
ya se suspende,
y vacilante
nada resuelve.
1812—1821. La ternura le aplaca
el celo le enfurece,
Para cerrar esta primera parte de mi libro, relativa al teatro en y en opuestos volcanes
México durante el gobierno Colonial, daré aquí algunas de las letras batalla el triste siempre.
ó tonadillas que en sus tiempos se cantaban en los intermedios de las Pues jamás disuadido
funciones. En la época más remota, y cuando las canciones eran del de su pública ofensa,
género español, la cantarilla era acompañada por diestros tocadores satisfacción oculta
de guitarra ó de vihuela, que formábanle semicírculo sentados en si- no le aprovecha."
llas: pero cuando se dispuso de orquesta, á su cargo corrieron las
músicas y acompañamientos.
Véase ahora la siguiente en que se relatan las dificultades de los
H e aquí una de esas letras-. artistas para complacer á sus oyentes.

" A l que sufre de celos


"Llega á las bancas uno y oye atento
notoria pena,
mil pareceres entre gustos ciento.
satisfacción oculta
Unos, quieren por lo majo,
no le aprovecha.
otros, patético aman,
De todo desconfía,
otros, alegre es su agrado;
y en su dolor constante,
unos, pasos de gorgeo,
lo adverso da por cierto,
otros, el manejo y garbo,
duda lo favorable.
unos fuerte, otros piano.
Exhala fuego
su pecho amante,
gime á los cielos, Si se canta tonadilla
suspira al aire. con música de primor,
Ni el halagüeño hechizo dicen luego:—ya nos cantan
ni el atractivo afable, sin duda lamentación.
de su adorada causa, Si se canta cosa alegre
mitiga los pesares; con su gustosa invención,
pues siempre persuadido dicen que es muy ordinaria
de su pública ofensa, y ajena de la razón.
satisfacción oculta Si el cantarín canta grueso
no le aprovecha. dicen que es un berracón,
Las letras mayúsculas de mitad de cada verso y las iniciales de Porque quien ama
ellos, dicen leídos de arriba para abajo Viva de México el Público be- tiene de lo que estima
nigno, teniendo además ese llamado soneto y disparatada composición, desconfianza.
la curiosidad de que todos sus catorce versos terminan en una A que
en el original, que poseo, iba sacada á la derecha. Nada le satisface
ni hay causa suficiente
para que cuerdo sufra
lo que el corazón siente.
CAPITULO XVII Ya se arrebata,
ya se suspende,
y vacilante
nada resuelve.
1812—1821. La ternura le aplaca
el celo le enfurece,
Para cerrar esta primera parte de mi libro, relativa al teatro en y en opuestos volcanes
México durante el gobierno Colonial, daré aquí algunas de las letras batalla el triste siempre.
ó tonadillas que en sus tiempos se cantaban en los intermedios de las Pues jamás disuadido
funciones. En la época más remota, y cuando las canciones eran del de su pública ofensa,
género español, la cantarilla era acompañada por diestros tocadores satisfacción oculta
de guitarra ó de vihuela, que formábanle semicírculo sentados en si- no le aprovecha."
llas: pero cuando se dispuso de orquesta, á su cargo corrieron las
músicas y acompañamientos.
Véase ahora la siguiente en que se relatan las dificultades de los
H e aquí una de esas letras-. artistas para complacer á sus oyentes.

" A l que sufre de celos


"Llega á las bancas uno y oye atento
notoria pena,
mil pareceres entre gustos ciento.
satisfacción oculta
Unos, quieren por lo majo,
no le aprovecha.
otros, patético aman,
De todo desconfía,
otros, alegre es su agrado;
y en su dolor constante,
unos, pasos de gorgeo,
lo adverso da por cierto,
otros, el manejo y garbo,
duda lo favorable.
unos fuerte, otros piano.
Exhala fuego
su pecho amante,
gime á los cielos, Si se canta tonadilla
suspira al aire. con música de primor,
Ni el halagüeño hechizo dicen luego:—ya nos cantan
ni el atractivo afable, sin duda lamentación.
de su adorada causa, Si se canta cosa alegre
mitiga los pesares; con su gustosa invención,
pues siempre persuadido dicen que es muy ordinaria
de su pública ofensa, y ajena de la razón.
satisfacción oculta Si el cantarín canta grueso
no le aprovecha. dicen que es un berracón,
187
i86

cordarse, es una de las tonadillas citadas entre las que se embargaron


que mejor que sainetero
en 1778 á D. Juan de San Vicente, según se dijo en el Cap. IV de esta
pudiera ser cargador.
primera parte. Me resuelvo á publicarla sin enmienda alguna, por-
Si tiene, acaso, delgada,
que ofrece la curiosidad de que en ella se citan todos los conventos
el que ejecuta, la voz,
de monjas que entonces existían en México, las especialidades que en
dicen:—este hace mal gallo,
ellos se fabricaban ó vendían, y aun los defectos ó vicios de tal cual
gallina fuera mejor.
comunidad. Dice así La Solterita:

Queriditos del alma Para quitarme del mundo


bien considero Y su quimera,
que pero no se halla Viéndome pobre, soltera
sin tener pero. Y abandonada;
Y en esta vida Hallándome atribulada
en la más bella cosa Me fui á un jardín
hay su cosilla. A pensar cuál sería el fin
De mis amores:
Si la sainetera es Hallándome entre las flores
amante de su recato, Más especiales,
dicen que es cosa muy fría Para alivio de mis males
y una estatua en el teatro. Quise pensar,
Si la que canta echa airosa Un destino que tomar
un poco de aire de taco, Para mi estado:
dicen que es desenvoltura, Si me meto con soldado
y más que garbo descaro. Me causa tedio,
Si se prende, presumida; Pues una mujer con medio
si no viene bien, pingajo; No ha de haccr n a d a :
si anda aprisa ¡qué carrera! Yo 110 quiero ser casada
¡qué nieve! si anda despacio. Por mis hijitos,
Si canta alto ¡desentona! Cuando tengan hambre, á gritos
¡no se oye! si canta bajo; Me aturdirán:
si risueña ¡es una loca! Si ni frijoles ni pan
si seria ¡habrán regañado! Tengo que darles,
Será preciso pegarles
Mas el medio del mundo Y esto me amohina:
es sin remedio Si me meto á Capuchina,
que el un medio se ríe Soy dormilona;
del otro medio. , Para ayunar, soy tragona,
Y en el teatro Y es impaciencia;
no hay un malo sin bueno, No quiero hacer penitencia,
bueno sin m a l o . " Que es tiranía:
Si voy á Jesús María,
No son, en verdad, modelo de poesía las dos letras ó tonadillas pre- Pelan las cocas,
cedentes; pero las hubo aun peores y doy como ejemplo la intitulada Y querrán que haga las sopas
Pa la función:
La Solterita, que sin duda es de las más viejas, pues, como podrá re-
Y

Si voy á la Encamación
Por mi desdicha Todo me estará amohinando
Querrán que haga yo la chicha Pues no lo entiendo:
Y que esté fina : Si Jerónima pretendo
Si me meto á Catalina <
Como pudiera,
Por mis conflitos, y Buena calabazatera
Querrán que haga rosaritos Saldré de allí:
Y de San Blas: Las Bernardas para mí
En la Enseñanza no más Son cocoritas,
E s gritería, Querrán que haga tostaditas
Querrán que á toda porfía Pa los purgados,
Sea maestra de amiga; Gastaré dos mil enfados
No estoy para hacer fatiga Por mi falacia:
Por ningún pienso: Monja en San José de Gracia
> -V
Si me meto á San Lorenzo Es gran tontera,
Como pudiera, Querrán que sea campanera
Querrán que sea alfeñiquera, Cuando novicia,
En conclusión : Y será grande injusticia
Si voy á la Concepción Hacerlo así :
Arman mil buyas, Balvanera para mí
Querrán que cante aleluyas E s buen convento;
Todito el día: Pero tampoco consiento
En Santa Clara á porfía, Porque son finas,
Como son pocas, Hacen flores cartulinas
Vi
Querrán que haga yo las tocas v Sin interés:
Para las muertas: Si me meto á Santa Inés
En Santa Isabel son tuertas Allí se observa,
Eas mandaderas, Estar haciendo conserva
Y tendré mil molederas, Que es buena pieza :
Pues no ven bien : Yo no quiero ser Teresa,
En las Brígidas también Pues me hará mal
Recolección, Comer comida sin sal
Y querrán que á la oración Y mondar habas:
Ya esté durmiendo: En las Mochas, paño y naguas
Monja de San Juan, no entiendo H e de tener,
Ser Franciscana, ¿ Quién me querrá mantener
Andar vestida de lana Allí metida ?
Y amortajada: Pues me hallo tan desvalida
En Regina no habrá nada, Del valimiento:
Ni quien me asista, Si yo á las Niñas consiento
Querrán que yo sea organista, Entrar, me muero,
Y á la verdad Pues.querrán que el día primero
Al ay de mi falsedad Pague mi piso:
Estaré ensayando; ¿ Quién me hará este beneficio ?
No tengo quien:
En las Vizcaínas también quien llene como él su papel en las zarzuelas la Isabela y la Ama-
Son gachupinas, lia; no exigen nada superior á su voz y habilidad, y la parte cómica
desmerece infinito no desempeñándola él, porque cabalmente es su
Y como aquellas son finas
elemento, y no tiene igual en el carácter de viejo enamorado. Tam-
Y yo soy criolla,
poco hay quien le supla en la parte que canta en la tonadilla Oros son
Con mi tompeatito y mi olla
triunfos, y lo hace muy bien en otras.
Vendré á parar,
Sin poderlo remediar " La Ramírez tiene una voz sonora, flexible y teatral, y bastante
De limosnera: despejo; no hay otra de mejores esperanzas.
No he de ser recamarera " L a voz dulcísima, afinada y dócil de la Olivares, si deja de can-
Ni ama de llave, tar siempre á solo y tonadillas viejas, hará conocer su mérito.
Quiero un trabajito suave, " A h o r a bien, mientras no se varíe más de funciones y se echen
De sentadita, nuevas, nunca habrá el atractivo que se necesita. En México hay dos
Y á cualquiera fiestecita óperas nuevas con su música, y quien las ponga en castellano; hay
Que se me ofrezca asuntos, hay poetas, y hay compositores de música para saínetes y
Salir á pasear bien puesta, tonadillas nuevas y peculiares del país, que agradarían más; ¿cuánto
no ha producido el Barbero de Sevilla sobre lo que costó ?
Bien regalada,
Bien comida y bien paseada, " E n cuanto al representado, puede ocurrirse á Amador, la Valle-
Todo lo admito: cilio, Juana Martínez, la Montenegro, la Pefialosa, la Ramírez, el
En la noche á un fandanguito chatillo Diez y la Munguía, distribuyéndolos así: Amador y Arias
Me llevarán, para galanes; la Vallecillo y la Martínez para damas; la Rodríguez,
Ya sea Pedro, ya sea Juan, Castillo y la Munguía para primeros cantarines; bailarines maestros
Morales y Marani, y como sobresaliente general y primer gracioso y
Nada me importa,
barba Luciano Cortés, dando primer lugar á Inesilla García, inimi-
El fin es buscar la torta
table en el Barbero por la dulzura de su voz y por su empeño y apli-
Y nada más.
cación constante.
Demos ya término á esta primera parte, relativa á nuestro antiguo " A todo puede cubrir nuestro Coliseo que estando completo pro-
Coliseo en la época colonial. Eo dicho en los precedentes capítulos duce en una entrada doble seiscientos pesos así repartidos: bancas, dos-
basta para que cualquier lector pueda darse cuenta de la escasa impor- cientos treinta; mosquete, sesenta; entrada de primera y segunda fila
tancia que en ese dilatado espacio de tiempo alcanzaron en la Nueva de palcos, cincuenta; palcos terceros de comunidad, noventa; dichos
España los espectáculos teatrales, y nada verdaderamente importante de alquiler por entero, setenta; cazuela de mujeres, sesenta; cazuela de
podríamos añadir á las muy curiosas y, en su mayoría, hasta hoy hombres, cuarenta."
inéditas noticias que he tenido la suerte de poder agrupar en estas No vale la pena de hacer perder el tiempo á mis lectores con el re-
páginas. lato de funciones de nuestro Coliseo en los años que precedieron á la
Para mejor completarlas pongo aquí algunos otros pormenores ex- consumación de la Independencia. Los sucesos políticos en España
tractados de unas cartas que se publicaron en el Diario de México, y y en México, no se prestaban al lucimiento de nuestros espectáculos
dicen: teatrales, que fueron decayendo lenta pero fatalmente, al grado de no
' ' E n lo tocante á la orquesta, se hacen elogios del expresivo D. Ma- encontrar asentistas ó empresarios que quisiesen afrontar los riesgos
nuel Delgado, del singular D. Matías Trujeque, del incomparable D. y obligaciones de tales. Si el Coliseo no se cerró de un modo defini-
Antonio Salot, del diestrísimo en el violoncello y violín conocido por tivo, fué porque los primeros actores, los de mejor sueldo, tomaron
el Habanero, de las habilidades bien notorias de D. Vicente Virgen, la empresa por su cuenta, 110 ya para buscar ganancias, sino para ir
y del sin par contrabajo D. Rafael Domínguez. mal viviendo.
" E n t r e los cantarines se cita á nuestro benemérito Victorio Roca' Sus funciones no ofrecían novedad alguna; reducía y estrechaba su
mora y á Inés García, al gran Andrés Castillo, á la nunca bien elo= repertorio la necesidad de complacer á la clase plebeya, única que al
giada Rodríguez, á Dolores Munguía, y á Luciano Cortés: no hay Coliseo concurría, y eso tan sólo cuando esas funciones se le daban
casi de balde, y en ellas se le cantaban tonadillas como La definición
del cortejo, Yo soy, señor, una mocita, La Salerosa, El lance del extran- de proscriptos infandas legiones
jero, La desapasionada, ó seguidillas del género de las tituladas Del altanero llegó á levantar:
bien que adoro alísente, Un dolor inhumano, Oh ! cuánto un pecho sufre, y enemigo del Rey que lo honrara
Atiende, dueño mío, No me quejo, tirano. Los saínetes entonces prefe- y la Patria que amádole había,
ridos eran El desafio de Polonia, El novio hidalgo, El Abate hablador, de ambos quiso su loca porfía
El barbero y su mujer, Paloma turbada, La paya de los pavos. la ventura y el nombre arruinar.
De vez en cuando los cómicos recurrían á adular al Virrey brin-
dándole con funciones en su obsequio: en una de esas se dió á cono- " Odio á Mina, baldón del Ibero,
cer una canción marcial compuesta por Benito Erbiti, director de la que aborrecen los nobles hispanos
música del 2? Batallón de Patriotas, con letra más que depresiva para desde el cántabro fiel y guerrero
los insurgentes. hasta el bético alegre y leal.
Con motivo de la aprehensión del insigne D. Javier Mina, fusilado Odio siempre, y perezca entre horrores
con lujo de crueldad en 11 de Noviembre de 1817, nuestro Coliseo aquel vil que á manchar se atreviera
dió una impía función á que se refiere así La Gaceta: " E l leal co- la lealtad española que fuera
mercio de México, en unión del profesor D. Manuel del Corral, lleno su divisa y tesoro inmortal.
del mayor entusiasmo patriótico, suplicó á un sujeto, en el mismo
momento de haberse publicado la plausible noticia de la prisión del
"Gloria eterna, repiten las voces,
traidor Mina por el célebre Sr. Coronel D. Francisco de Orrantia, que
á Fernando feliz y adorado,
hiciese una marcha patriótica para celebrar debidamente este hecho,
gloria eterna, los ecos veloces,
y se franqueó gustoso á ello, entregando en el acto la siguiente, que
á Apodaca invencible y sagaz.
puso en música el expresado Corral, y dedica al virtuoso y digno jefe
Gloria siempre al intrépido Orrantia,
que nos gobierna, el Excmo. Sr. D. Juan Ruiz de Apodaca.
gloria igual al ejército fiero
que abatiera el orgullo altanero
'' Rompa el aire con rápido vuelo del que quiso turbar nuestra p a z . "
nuestra voz de lealtad inflamada,
y retumbe en el cóncavo cielo
"Mientras se cantó esta marcha, que fué repetida, permaneció en
el acento de gloria y placer,
pie el Virrey, y á su imitación todos los concurrentes á la función del
porque el bravo español victorioso,
Coliseo, y al oir el nombre de Fernando prorrumpió en vivas de acla-
siempre fiel al augusto Fernando,
mación, que fueron respondidos con igual entusiasmo por los espec-
sus blasones y honor aumentando
tadores."
sólo sabe triunfar y vencer.
» Esto dijo La Gaceta y yo añado que no puede darse mayor núme-
ro de insultos en más detestables versos, dignos de la raquítica y mi-
" De soberbia y de crímenes lleno
serable musa de la Nueva España de aquellos días, en los que 110
un traidor que la patria detesta,
encuentro más Sociedad literaria que la titulada Arcadia Mexicana
nuevamente el rebelde veneno
con su presidente denominado mayoral y sus socios bautizados con el
sobre México osara sembrar.
de árcades ó zagales: sus composiciones publicábanse en el Diario de
Mas el héroe que rige este mundo
México é iban firmadas con los seudónimos de Flagastro Cieñe, Bati-
de exterminio las órdenes diera,
lo, Aminto, Ciorlapa, Tirsis, Damón, Ascanio, El Aplicado Anfriso, y
y al momento sus plantas se viera
otros por el estilo. F u é uno de sus presidentes ó mayorales el P. Fray
el iluso bandido besar.
José Leal de Gavie, que producía epigramas como el siguiente:

" Y a gimiendo entre duras prisiones


yace el monstruo que ingrato y perdido '' Antes que yo me casara
era un ángel mi mujer;
tú á tu consorte muerto
¡qué humildad, señor! ¡qué cara! yo á mi viva p e r j u r a . "
¡aquel modito de ver!
¡vaya! si era cosa rara! Otro árcade, por mal nombre Antimio, cantaba así:
" Pero después de casado,
¡qué genio! ¡qué altanería! " Préstame, suave Orfeo,
¡qué hocico tan retobado! tu delicada lira,
más que con ella valía para cantar las gracias
vivir con un condenado!" de una discreta niña.
" E s una honesta Diana,
En otros números, el Diario apadrinaba y dábanse á luz prodigios una hermosa Ericina,
de cultura é ingenio como el siguiente: una sabia Minerva,
y una Safo poetisa.
" U n maestro dijo á un muchacho:
'' Hasta su bello nombre
¿me tienes por macho? di!
de lo divino es cifra,
y el chico respondió—sí,
pues se llama ¡Oh misterio!
porque quien no es hembra es macho."
la sin par Angelita!"

A falta de más espontáneos elogios, los árcades mismos se felicita- En nuestros días, que no son en verdad los de Homero, con poemas
ban por sus mutuos talentos en composiciones que, como dejo dicho, como el anterior felicitan nuestros muchachos el santo á su papá, ó
veían la luz en el Diario, siempre á la cabeza del periódico, y según pide el repartidor de periódicos su calavera ó su tarasca.
los tales, estrecho les venía el Parnaso para albergar las grandezas
Con el mismo mal gusto cantaban otros árcades menos risibles
de sus méritos. Lo enteco de la inspiración corría parejas con lo ba-
asuntos con rebuscados giros y anticuadas voces, necedad de la que
ladí de los asuntos que escogían para sus composiciones, escritas ca-
no están exentos algunos de nuestros contemporáneos, positivos tra-
si constantemente en versitos de arte menor, que en su mayor parte
peros del idioma que urgunean los escritos de Cervantes y Fray Luis
demostraban desconocimiento de la prosodia en sus autores, ó su fal-
sin ser capaces de parecérseles ni en el ingenio ni en la inspiración.
ta de oído, como dicen familiarmente: vaya si no otra muestra del
Y para que no se estime este juicio, natural resultado de mi insufi-
ingenio de un árcade, que firmaba, Noatino Glosado:
ciencia, copio aquí á una autoridad, la de D. Francisco Pimentel,
quien aun queriendo ver en la literatura colonial lo mejor posible,
" Y o vi, Tania inconstante, nos dice en su Historia Crítica: "Si bien lo referido demuestra el pro-
en el ciprés erguido greso literario de México en el siglo X V I I I y principios del X I X ,
á una tórtola amante esto no significa que todos los escritores en verso de entonces fueran
que desde el triste nido buenos poetas; por el contrario, la mayoría de los citados por Beris-
á Júpiter Tonante táin resultan meros aficionados á la poesía, y muchos de ellos malos
dirigía su quejido. versistas. Efectivamente, si tomamos en una mano la Biblioteca de
" P o r q u e en el bosque hojoso Beristáin y en otra las composiciones á que se refiere, veremos que
un impío cazador la mayor parte son del tenor siguiente: un mal soneto castellano ó un
con el arpón filoso epigrama en latín macarrónico para algún arco triunfal; un devocio-
del arco destructor, nario gongorino; algún romance prosaico; elementos didácticos fríos
le dió muerte á su esposo, y descarnados; biografías, narraciones ó descripciones cansadas, ver-
sordo á tanto clamor. daderamente soporíferas; todo, menos talento poético, imaginación
'' De compasión cubierto creadora, verdadero sentimiento, buen g u s t o . . . . "
la dije con blandura No es más favorable la opinión del Sr. Pimentel acerca de los au-
lloremos de concierto tores dramáticos de la misma época: "de sus producciones, dice, ape-
nuestra igual desventura
ñas pueden entresacarse algunas muy medianas, necesitándose llegar
á D. Manuel E d u a r d o de Gorostiza para encontrar obras dramáticas
de méritos reales y positivos."
Por lo que toca á la decadencia de los espectáculos teatrales en la
Capital, sus causas principales estuvieron en la pobreza que empezó
á generalizarse y en las enconosas luchas civiles. E n efecto, las al pa-
recer inagotables fuentes de riqueza pública, habían quedado cegadas
por los préstamos infinitos y continuos al gobierno de la Metrópoli, y
por la ruina que originó la guerra de Independencia, guerra en la
cual realistas é insurgentes compitieron en actos crueles contra la vi-
SEGUNDA PARTE
da y la propiedad, al grado de que apenas hubo familia en uno y en
De 1321 á 1840
otro campo que no vistiese las tocas de luto ó los andrajos de la mi-
seria.
Once años después, y cuando los más acérrimos enemigos de la In-
dependencia vieron que empezaban á brillar los primeros resplando- HOMENAJE DE RESPETUOSO CARIÍFO

res de las luces que habían de dar nombre á nuestro siglo; cuando AL SR. D. JOAQUIN BARANDA
echaron de ver que la heroica España que con ciego patriotismo había
bregado contra el mayor Capitán de los tiempos modernos, aceptaba
muchas de sus ideas de regeneración y progreso humanos, y que, más
ó menos tímidamente, derrocaba las entidades legendarias del anti-
guo régimen, traicionáronse á sí mismos y otorgaron á D. Agustín CAPITULO PRIMERO
de Iturbide el honor de dar cima á la obra emprendida por el vene-
rable Hidalgo, el nunca bien admirado y cual ninguno insigne Mo-
relos, y el generoso Mina, y el miedo á la libertad permitió que la li-
1821—1824.
bertad triunfase en las tres veces secular colonia, y los mártires in-
surgentes quedaron justificados por los asimiladores trigarantes.
Al consumarse la Independencia, el estado de nuestro Coliseo y
de sus espectáculos era tristísimo. La pobreza, la ruina originadas
por aquella terrible guerra de once años, alcanzaron á todos y en to-
do se hicieron sentir.
La imperfección del Coliseo, en punto á decoraciones, era extrema,
según nos los dice un papel de la época, el Semanario político y litera-
rio.—"¿Cómo, exclama, cómo ahora que tenemos cómicos m u y ca-
paces de desempeñar con esmero nuestros mejores dramas, 110 piensan
los empresarios en adornar la escena conforme al carácter de las pie-
zas que representan? Todo está mal pintado, sin perspectiva, sin
el menor conocimiento de arquitectura, sin n i n g ú n efecto de claro
oscuro, y es tal la confusión en los bastidores, que rara vez convie-
nen con el telón. T a n mal arreglado, t a n mal dirigido está todo lo
que pertenece á esta parte esencial del teatro, que á veces se me fi-
gura que presencio las farsas de aldea, y sólo en fuerza del hábito y
de su mucha prudencia puede sufrir el público tan garrafales descon-
ciertos. Cuando el patio está bien iluminado, no hay luz en la escena,
tanto que las más veces no se distinguen desde el centro del teatro,

W
ñas pueden entresacarse algunas muy medianas, necesitándose llegar
á D. Manuel E d u a r d o de Gorostiza para encontrar obras dramáticas
de méritos reales y positivos."
Por lo que toca á la decadencia de los espectáculos teatrales en la
Capital, sus causas principales estuvieron en la pobreza que empezó
á generalizarse y en las enconosas luchas civiles. E n efecto, las al pa-
recer inagotables fuentes de riqueza pública, habían quedado cegadas
por los préstamos infinitos y continuos al gobierno de la Metrópoli, y
por la ruina que originó la guerra de Independencia, guerra en la
cual realistas é insurgentes compitieron en actos crueles contra la vi-
SEGUNDA PARTE
da y la propiedad, al grado de que apenas hubo familia en uno y en
De 1321 á 1840
otro campo que no vistiese las tocas de luto ó los andrajos de la mi-
seria.
Once años después, y cuando los más acérrimos enemigos de la In-
dependencia vieron que empezaban á brillar los primeros resplando- HOMENAJE DE RESPETUOSO CARIÍFO

res de las luces que habían de dar nombre á nuestro siglo; cuando AL SR. D. JOAQUIN BARANDA
echaron de ver que la heroica España que con ciego patriotismo había
bregado contra el mayor Capitán de los tiempos modernos, aceptaba
muchas de sus ideas de regeneración y progreso humanos, y que, más
ó menos tímidamente, derrocaba las entidades legendarias del anti-
guo régimen, traicionáronse á sí mismos y otorgaron á D. Agustín CAPITULO PRIMERO
de Iturbide el honor de dar cima á la obra emprendida por el vene-
rable Hidalgo, el nunca bien admirado y cual ninguno insigne Mo-
relos, y el generoso Mina, y el miedo á la libertad permitió que la li-
1821—1824.
bertad triunfase en las tres veces secular colonia, y los mártires in-
surgentes quedaron justificados por los asimiladores trigarantes.
Al consumarse la Independencia, el estado de nuestro Coliseo y
de sus espectáculos era tristísimo. La pobreza, la ruina originadas
por aquella terrible guerra de once años, alcanzaron á todos y en to-
do se hicieron sentir.
La imperfección del Coliseo, en punto á decoraciones, era extrema,
según nos los dice un papel de la época, el Semanario político y litera-
rio.—"¿Cómo, exclama, cómo ahora que tenemos cómicos m u y ca-
paces de desempeñar con esmero nuestros mejores dramas, 110 piensan
los empresarios en adornar la escena conforme al carácter de las pie-
zas que representan? Todo está mal pintado, sin perspectiva, sin
el menor conocimiento de arquitectura, sin n i n g ú n efecto de claro
oscuro, y es tal la confusión en los bastidores, que rara vez convie-
nen con el telón. T a n mal arreglado, t a n mal dirigido está todo lo
que pertenece á esta parte esencial del teatro, que á veces se me fi-
gura que presencio las farsas de aldea, y sólo en fuerza del hábito y
de su mucha prudencia puede sufrir el público tan garrafales descon-
ciertos. Cuando el patio está bien iluminado, no hay luz en la escena,
tanto que las más veces no se distinguen desde el centro del teatro,

W
y aun mucho más cerca, los personajes que hay en ella. Todas las
noches, y sea cual fuere el drama que se representa, salen las mismas
porcionada sin que nunca se verifique que unas veces salgamos á las
decoraciones, y siempre estamos en la misma ciudad, en la misma
once y media y otras á las nueve en punto, como ha sucedido en los
habitación y en el mismo cuarto. Otras veces sirve para la tragedia
últimos días.
la misma decoración que para la comedia ó sainete, y no contentos con
" L o s bailes exigen también una reforma; su esencia no consiste
representarnos de la misma manera el edificio griego que el de Cons-
en dar saltos y brincos sin objeto alguno: ellos son unos poemas co-
tantmopla, y las formas y los adornos arquitectónicos del tiempo de
mo otro cualquiera, y por consiguiente deben tener un argumento
Alejandro, los mismos enteramente que los de quince ó veinte siglos
expresado por medio del gesto y de la pantomima, y aunque se eje-
después, quieren también hacernos creer que las casas de Madrid y
cutan algunos de esta clase, los quintetos y sextetos que vemos diaria-
París no se distinguen de los antiguos palacios de Venecia y Roma,
mente son las composiciones más monstruosas y chocantes del mundo.
y que los reyes de Castilla y Aragón edificaban y decoraban sus ha-
bitaciones lo mismo absolutamente que los egipcios y cartagineses. " En cuanto á la propiedad de los trajes, se ha adelantado mucho
Conozco decoraciones que tienen quince ó veinte años de pintadas, de uno ó dos años á esta parte, pero aun se usa un vicio sumamente
y durante todo ese tiempo se han aprovechado de ellas los asentistas ridículo y es la reverencia que hacen al público todos los actores lue-
con tanto tino y economía, que han hecho papel en todos los países go que salen por primera vez á la escena, sin embargo de hallarse
que alumbra el sol y han servido para cuantos sucesos públicos y expresamente prohibido por el Sr. D. Carlos I I I en real orden de i x
privados, grandes y chicos, han acaecido desde los primeros siglos de Diciembre de 1786, que se encuentra entre las leyes de la Novísi-
hasta nuestros días. Las decoraciones hechas después de mi salida ma Recopilación, cuyas palabras nos parece conveniente copiar: " n o
de México, salvo una de un subterráneo, bastante buena, que copió " p o d r á n , dice, dichos actores y actoras hacer gestos, señales, ni co-
Aparicio de una de las Tadei, tan aplaudidas en Madrid y Barcelo- r r e s p o n d e r con cortesías á las que recibieren, ó al retirarse de la
na, son sin duda las peores de nuestro teatro." "escena á los aplausos que les dieren: pues además de los inconve-
n i e n t e s morales que resultan de algunos de estos abusos, todos cons-
' 'La elección de las funciones, dice el mismo periódico, debía estar " p i r a n á destruir la ilusión teatral."
á cargo de un hombre de conocimientos que no permitiese represen-
" E l teatro, que debe ser la escuela de las buenas costumbres, de
tar ejemplos de inmoralidad como la escandalosa altercación entre el
la educación y de la finura, es en esta Capital la cátedra de la corrup-
Marinero y el Capitán Sobó en la opereta del Marinerito, y otros mu-
ción y de la grosería: los dramas que se representan son inmorales y
chos con que cada día se nos enseña á menospreciar todas las ideas
escandalosos, tales como el Diablo predicador cuyo argumento, con-
de honradez y todos los principios de la buena educación. Cuidaría
trario á todas las reglas del arte, es además un tejido de impiedades
también del mérito literario de los dramas, procurando ir infundien-
y burlas de la Religión: la Inocente Dorotea no presenta sino un cua-
do en los espectadores el verdadero gusto clásico, á que por desgra-
dro inhonesto: el Falso Nuncio de Portugal es de la misma clase de
cia se va sustituyendo el que conocen en Europa con el nombre de
el Diablo predicador. Los personajes más respetables no aparecen si-
romántico. De las comedias de Moratín, Cienfuegos y Quintana co-
no en ridículo, las lecciones que se dan en el teatro son inmorales;
nocemos pocas; en lo que llevamos de temporada sólo se han ejecu-
el ridículo cómico, el de opinión, se han abandonado por las accio-
tado El Café y el Sí de las niñas, del primero, sin hacer caso del Vie-
nes romancescas y por los delitos atroces; los títulos de las comedias
jo y la runa, la Mogigata y el Barón; de Quintan a sólo se ha dado El
bastan para atemorizarnos en vez de excitarnos á risa, objeto de la
lelayo. Estos y las comedias de Vega, Calderón, Moreto, Cañizares
comedia; el Asesino, el Hombre de la Selva negra, la Terrible noche de
etc., pudieran proporcionarnos una diversión bastante variada y na-
un proscrito, los Piratas en el bosque délos sepulcros... .todo nos asus-
da p e r j u d i c i a l . - L a s tonadillas y saínetes que sirven de intermedios
ta con sólo su nombre; cuanto se presenta en las tablas respira san-
deben desterrarse para siempre, porque además de ser casi todos un
gre, sensualidad y escándalo.
tejido de desvergüenzas y deshonestidades, están puestos en una mú-
sica tan estrafalaria que hacen muy poco honor al gusto de los espec- " E n su mayoría los cómicos no procuran abandonar el libertinaje
tadores. Piezas cortas hay que alternando con los bailes y algunas y los extravíos á que se entregan como consecuencia del abatimiento
anas escogidas, pudieran servir, no de intermedios, porque estos des- social en que se encuentran, y sucede que la que representa el papel
truyen todo el efecto y la ilusión del drama principal, sino de final de Lucrecia tiene dividido el resto de la noche con una parte de los
de las funciones, las cuales siempre deben terminar á una hora pro- admiradores de la virtud, como dice un ilustre escritor. Y en los es-
pectadores, ¿qué otra cosa se nota por lo común, sino mala educación
y grosería? Ya estos tratan de comercio; ya otros con guerreros y
legisladores; ya, en fin, todos hablan alto, todos fuman á la vez, to- ¿ Y todo fué ilusión ? ¿ Y Hamlet furioso
dos molestan al que quiere tener un rato de desahogo y que al fin no es un actor no más ? ¿ Y es solamente
lo consigue, porque los que concurren al ter.tro y se tienen por ilus- el joven Aragón? Ilustre pueblo,
trados son los primeros que lo impiden, pues parece que todo su em- siga tu admiración, tu aplauso siga
peño es incomodar á los demás." y premios dignos al actor prodiga."
Otro periodista, comentando las anteriores censuras, añadía : ' 1 Na-
da en efecto se ha reformado en el teatro: el público se cansa de su- En ese año de 1821 hubo en el Coliseo una función notable, la de
frir y apenas hay noche que no manifieste su disgusto con silbidos, la noche del 27 de Octubre. Por bando imperial de 13 del mismo, fué
que más bien que á los actores se dirigen á las piezas que ejecutan, y dicbo día 27 designado para la proclamación y jura solemne de la
no es extraño que aburridos los espectadores se entretengan en con- Independencia consumada por el jefe del Ejército Trigarante. La ce-
versaciones ajenas al lugar en que se h a l l a n . " remonia, que fué de lo más fastuoso, se verificó en la tarde de ese día
Sin embargo, parece que al menos de vez en cuando dábanse fun- en la plaza principal ó de armas, en un vistoso templete decorado con
ciones notables que merecían ser cantadas por nuestros poetas. En pinturas y poesías alusivas, levantado en el centro de ella y dispuesto
el Semanario Político de 28 de Agosto de 1821, se hacen elogios del de modo que ocultaba la estatua ecuestre de Carlos IV, que estaba
primer galán de la Compañía y se inserta la siguiente entonces allí.
E n la noche hubo función de gala en el Teatro, representándose el
Poesía al Sr. Aragón en la representación déla tragedia HAMLET. melodrama, México Libre, escrito por el poeta mexicano D. Fran-
cisco Ortega, literato y hombre público muy distinguido. " S u melo-
" Y o lo vi, yo lo vi; puñal sangriento drama, en concepto de Pime-.tel, se recomienda por su argumento
era en su mano, y el ardiente joven sencillo y está desempeñado por msdio de personajes alegóricos: la
venganza grita, y retumbó venganza Libertad favoreciendo á la América; Marte y Palas ayudando á la Li-
desde el fuerte cimiento bertad y pretendiendo cada cual haber decidido el buen éxito de la
al artesón del anchuroso alcázar. Independencia: Mercurio aparece mediando en la controversia; el
La augusta sombra del difunto padre Despotismo, la Discordia, el Fanatismo y la Ignorancia, confiesan los
miradas de terror al joven lanza; males que han ocasionado á México, se declaran culpables y huyen
" h é t e , le dice, en la orfandad sumido, á los abismos. El lenguaje es correcto y la versificación armoniosa.''
héte al arbitrio de nefanda madre D. Francisco Ortega, diputado al primer Congreso mexicano, fué
y de adúltera vil; venga mi muerte: uno de los pocos miembros de él que hicieron oposición á Iturbide y
¿eres hijo de Hamlet? ¡pues sé f u e r t e ! " con motivo de su coronación, como primer Emperador, le compuso una
— S í : yo te vengaré, será teñido oda en que le decía con honrada franqueza:
de sangre parricida el pavimento,
y yo tal vez los seguiré á la t u m b a . . . . Esos loores con que al cielo te alzan
Mas nada importa, que morir es dulce los vítores confusos que de Anáhuac
si las venganzas al morir p r e c e d e n . . . . Señor hoy te proclaman,
Tiembla, tiembla de mí, madre inhumana, del rango de los héroes, inhumanos,
sangre pide la víctima inocente; te arrancan, y encaraman
con muertos y con sangre pueden sólo al rango ¡ oh Dios! fatal de los tiranos.
sus gritos acallarse, y es la tuya
la sangre que me pide; él me lo dice, el cetro aborrecido
óyelo y muere de vergüenza luego, arroja presto, que tu gloria empaña.
¿no le mataste tú? júralo al punto,
que de mi padre las cenizas frías
reciban el sagrado juramento. Con la severidad del Segismundo de Calderón de la Barca, los po-
Mas t i e m b l a s ! . , . , te desmayas! infelice! " líticos mexicanos habían derrocado á D. Agustín de Iturbide y ofre-
R. H . T . — T . I . — 2 6
L-

202

ciclo, si bien á regañadientes, el planteamiento del sistema federal. Para el día 18, siguiente al de la solemne ceremonia de la coloca-
A los exóticos títulos nobiliarios del primer Imperio, sucedieron las ción de los restos de los caudillos insurgentes en el altar de los Reyes
exageraciones democráticas, y los cómicos hubieron de ajustarse al en Catedral, se anunció la contrata de los ciudadanos José María Ama-
dor y Juana Martínez. Un tanto cuanto gastada, pero hermosa aún,
nuevo patrón. El programa para la función del 9 de Setiembre de
también figuraba en aquel cuadro Inés García; pero la nueva estrella
1823 está así concebido :
teatral éralo por entonces Cecilia Ortiz, de la cual no tardaré mucho
" E s t a noche serán ejecutadas las piezas que siguen : Una sobre- en hablar.
saliente obertura: una aria escogida, por la ciudadana Mariana Gu-
tiérrez : un concierto de violín obligado p?>r el profesor ciudadano En cuanto á la disposición de las funciones, poco, según hemos
Francisco Delgado: aria por la ciudadana Amada Plata: aria bufa visto, se había variado. Aquello era una estrambótica mesa revuelta;
por el ciudadano Victorio Rocamora : dúo por los nombrados Maria- júzguese por las siguientes citas. El 21 de Setiembre la función se
na Gutiérrez y Rocamora; terceto por Amada Plata, Miguel Maya y compuso de la ópera El Barbero de Sevilla, y el saínete de El Burro
Victorio Rocamora: terminando la función con la chistosa comedia afeitado. En los días siguientes, y 110 cito fechas por no hacerme can-
en un acto, la Inocente Dorotea, en la que desempeñará la damita una sado, se dieron en variada confusión Sancho Ortiz y la tonadilla de
joven de diez años." Los Hidalgos de Medellín, la tragedia Otelo y el dúo del Tío y la Tía;
la ópera El Califa de Bagdad, Lo cierto por lo dudoso, la tonadilla El
Inserto ese programa porque es el primero que tengo íntegro en
inglés y la gaditana, y las boleras por Margarita Olivares y Juan
mi repertorio de noticias; pero 110 quiere decir que esa fuese la p r i - .
Marani.
mera función de la temporada. Aunque con mucha irregularidad y
varias interrupciones, la Compañía venía trabajando desde mediados Por cierto que á las bailarinas 110 se las juzgó, sin duda, dignas de
de Abril, en cuyo día 25 ofreció una función á los Jefes del Ejército ser ciudadanas, pues hallo que en 27 de Setiembre, en la conmemo-
Libertador, que así era llamado el que derrocó á Iturbide, represen- ración del aniversario trigarante, después de la comedia Las Cuatro
tándose la tragedia La Viuda de Padilla, que fué recibida con sin Sultanas, se bailó el quinteto de Dido abandonada, por las madamas
igual entusiasmo. Isabel Rendón é Ignacia Aguilar, y los ciudadanos Morales, Podrí-
guez y Victoriano Mota. En 29 de Setiembre se representó el Pintor
Eas irregularidades é interrupciones á que he hecho alusión, eran
fingido y cantaron un dúo Inés García y Manuel Patiño.
causadas por el terrible estado de intranquilidad en que México vivió
en esos meses, originado por las enconosas luchas de centralistas y Las funciones se anunciaban, como era antiquísima costumbre,
federalistas que se disputaban la influencia que uno ú otro habrían con un cartel que se fijaba cu la entrada del Portal de Mercaderes;
de ejercer sobre el nuevo Congreso constituyente. Esta agitación esos carteles solían estar adornados con pinturas de las escenas más
trascendía al teatro, y en cada función se armaban magnas peloteras notables, y á este propósito encuéntrome en el programa que insertó
en el público, sobre cualquier frase ó liberal ó realista, de las comedias El Solé 1 29 de dicho Setiembre, la siguiente "Nota. En el cartel de
que se ejecutaban. Para cada noche de representación era necesario ayer en que se anunció la tragedia El Orestes, se pintó un cuadro de
permiso expreso del Gobierno, que lo negó muchas veces. la ciudad de Argos atacada á fusilazos por los enemigos del Egipto.
Lo advertimos para que se sepa que la invención de la pólvora fué
En 11 de Setiembre la Compañía expidió el siguiente anuncio :
posterior."
Habiéndose alcanzado del Supremo Gobierno extendiese su per-
miso para otras cuatro funciones sobre las ocho ya ejecutadas; deseoso En 1? de Octubre, para celebrar los triunfos de la República de
el ciudadano empresario Victorio Rocamora de que en lo sucesivo se Colombia sobre las fuerzas invasoras españolas, se representó en el
Coliseo El Duque de Pentievre ó el buen Gobernador.
guarde el orden más exacto para que este respetable público quede
del mejor modo servido, ha determinado distribuir boletines para to- El día 9 de ese mismo mes de Octubre de 1822 merece fijarse de
das las localidades, comenzando el domingo 14 con una sobresaliente un modo especial en estas memorias, porque en él y por primera vez
obertura; un rondó obligado á fagot, que cantará la ciudadana Ma- en su larga vida, el Coliseo Nuevo tuvo un competidor, según cons-
riana Gutiérrez; un concierto á trompa por el ciudadano Salot; una ta del siguiente programa ó anuncio, que estimo muy curioso:
aria bufa por el ciudadano Victorio Rocamora : otra aria por la ciu- "Teatro en el Palenque que fué de Gallos— La Compañía cómica
dadana Amada Plata; dúo por la Gutiérrez y Miguel Maya : el quin- del ciudadano Luciano Cortés, que tiene el honor de ofrecerse á tan
teto de la Dama Voltaria por los dichos y el ciudadano Luciano Cor- respetable público, comenzará sus tareas la noche de este día en el
tés, y la comedia en un acto El Esplín." teatro nuevamente formado en el palenque que fué de Gallos, con la
comedia en cinco actos titulada Aradín Barba Roja ó los piratas en '' No sus antiguos cómicos ostente
el bosque de los sepulcros. Su primer intermedio se cubrirá con un ter- Roma, que tanto fueron celebrados;
ceto por los ciudadanos Mariana Gutiérrez,Victorio Rocamora y Ber- ni á sus modernos la ilustrada Europa
nardo Contreras, y el segundo con el bolero que bailarán los ciuda- prodigue encomios ni prevenga lauros.
danos Margarita Olivares y J u a n Marani.—La hora de comenzar será " E n el Anáhuac hay quien los imite,
á las siete y media si el tiempo lo permitiere.'' muy mal he dicho, hay quien en sus teatros
¿Qué quiso decirse con esta condicional? ¿Acaso la cubierta del los aventaje á todos, pues en su arte
teatro no era impermeable á la lluvia? Ese antiguo palenque ó plaza inimitables son; no hay que dudarlo.
de gallos ocupó un extenso terreno entre las calles de las Moras y de ' 1 Venga á México, venga aquel que juzgue
Celaya en los solares que hoy ocupan á su vez las casas núms. 17 y 19 que sólo la pasión mueve mi labio,
de la primera calle citada y las núms. 17 y 18 de la segunda. El local para alabar así nuestros actores
era cómodo y grande, y como construido de madera en su mayor par- en cuyo digno elogio aun quedo escaso.
1
te, mucho más airoso y aun elegante, relativamente, que el Coliseo su ' Aquí, pues, los verá cuando en la escena
predecesor. En las funciones subsecuentes á su estreno dió El Des- muestran al noble delincuente honrado,
dén con el desdén, El médico á palos, La mujer firme ó lo cierto por lo ni hay, ni puede, ni jamás ha habido
dudoso, la tonadilla de El Presidiario, por Francisco Esquivel y Ber- genios en su arte tan aventajados."
nardo Contreras, y Quien á otro mal desea es fuerza que en sí lo vea, ó
El prisionero de guerra.
Va haciendo después el autor de la composición el elogio de cada
Tal fué el modesto principio del Teatro de los Gallos, que no tar-
dó mucho en gozar de un relativo esplendor artístico, para venir á dar uno de los cómicos susodichos, y al llegar á Cecilia Ortiz, exclama
más tarde en los mayores descrédito y miseria, al extremo de que con entusiasmo:
México había casi olvidado el tal teatro cuando en un cierto día de
Todos Santos, hubo de reducirle á cenizas un incendio producido por " Apolo dijo, no hay quien aventaje
el aguarrás de la esponja de un globo que cayó sobre los apolillados á los actores tres que van nombrados,
tajamaniles de su vetusta techumbre. mas Melpomene al punto le presenta
á Cecilia que lleva de la mano.
Con Luciano Cortés, empresario y director de aquel cuadro, com-
'' ¿Cecilia .... sí, Cecilia.... no mal dij e:
partía los triunfos Cecilia Ortiz, guapa y muy graciosa mujer, de
la divina Cecilia, el gran milagro
quien sus contemporáneos hacen así el retrato: "gustábale lucir su
cómico, que reunir en sí ha sabido
garbo en la calle, y vestía por lo regular un traje corto y alto de talle,
la tragedia, comedia, baile y canto.
de muselina con olanes de tarjas, que le permitía lucir sus menudos
pies calzados con zapatos escotados de seda; casi siempre llevaba al " ¿Quién no se sorprendió la triste noche
cuello un grueso hilo de perlas con un pendiente de dos granos en que la vimos llorar su esposo amado?
figura de guaje, montado en diamantes rosas; los zarcillos eran de ¿qué pecho diamantino no se mueve?
igual forma y montura que el pendiente; sujetaba el reloj á la cintu- ¿qué férreo corazón no queda blando?
ra con un broche de oro en que remataba la soguilla, de un delicado ' 1 Al admirar su procer estatura
trabajo de filigrana; llevaba con mucha gracia la mantilla de punto por Andrómaca alguno la ha juzgado,
blanco, y solía cubrir sus hombros con un magnífico tápalo de Chi- que llena de aflicción y sentimiento
na, que recogía con la mano izquierda en la cintura, á la moda de las lloraba las exequias de Héctor bravo.
majas españolas." " ¡Ay! por piedad, Cecilia, no, no finjas
con tantas veras tu dolor tirano:
En un Romance Heroico publicado por Erasmo Luján, en El Sol de
¿qué, quieres darle muerte verdadera
8 de Noviembre de 1823, se leen los siguientes elogios de la Ortiz y
al auditorio con tormento falso?
de sus compañeros Torremocha, Amador y Luciano Cortés, á propó-
"¡Qué lágrimas! ¡qué afectos! ¡que sollozos!
sito de una representación de El delincuente honrado.
¿Es cierto ó es fingido lo que palpo?
¿Puede á los hechos verdaderos, reales,
la ilusión sola aventajar acaso? no habrá alguno que no lo califique
" No es ilusión, es cierto cuanto miro: de dulce, de armonioso y arreglado.
ved cómo llora y gime....¡ay! . . . . u n desmayo " V e n conmigo, concluye el Dios Apolo;
¡Desmayo! No: ¡La muerte en un instante ven conmigo, Cecilia, coif Luciano,
á Cecilia por siempre ha arrebatado! con Amador y Torremocha unidos,
" Pero no, que otra vez muy lentamente que hoy el debido premio voy á daros.
torna á mover los miembros fatigados. " Así dijo, y en una blanca nube
La ilusión me engañó: ya reflexiono coloca el dios de Délos á los cuatro,
que sólo fué aparente el lance aciago. y los lleva consigo, asaz contento,
" T a n bien fingido estuvo, que jurara á morar para siempre en el Parnaso."
que á tocarla llegué su rostro helado:
yo de su cuerpo vi salir su sombra
No obstante esto, vivieron aún algunos años sobre la tierra, y al
buscando pura los elíseos campos.
fin murieron sin dejar semilla, lo cual fué lástima, tratándose de no-
Con razón Melpomene ante su Apolo
tabilidades que así enloquecían á Apolo.
de la tragedia le consigna el mando,
Las noticias que de España se recibían ponderándonos el esplen-
y el Pitio dios en su serena frente
dor alcanzado en Madrid por la ópera interpretada por el tenor Mon-
ciñe el inmarcesible y digno lauro.
tresor, los bajos Magiotti y Vacani, la tiple Cortesi, y la contralto Fá-
— " E l l a es sin duda en todo la primera,
brica, fueron causa de que con el objeto de traer una Compañía de
dice el Délfico dios, á nadie es dado
Canto Italiano, varias personas de buen gusto convidaran á fines de
imitar á Cecilia, y solamente
Enero de 1824 á la formación de una empresa de abonados, por ac-
tal prodigio formé para admirarlo.
ciones de á cien pesos: el encargado de recibir las adhesiones, lo
"¿En el ligero baile no la visteis fué el librero D. Mariano Galván, pero desgraciadamente la asocia-
llevar graciosa los veloces pasos, ción no llegó á tener efecto, porque con la cosa de que los españoles
y entre sus plantas corazones y ojos europeos andaban alebrestados, no concurrieron á suscribirse mu-
á la par unos y otros va enredando? chas de sus familias, que eran las de mayores posibles y elementos.
Los tiernos geniecillos ledos mueven Los triunfos de los federalistas en las discusiones del proyecto de
sus vestidos hacia éste y aquel lado, Constitución, y la resistencia de los conservadores, fueron sembran-
para que al talle airoso más agracien do en el país los impacientes y los descontentos, y las revueltas y
y den al pie ligero paso franco. sediciones sucedíanse con rapidez. E n la tierra caliente diversos cabe-
Cuando escena amorosa representa cillas habían levantado bandera contra los españoles, tan numerosos
¿qué amante en la comedia 110 le ha echado en aquel rumbo, pidiendo el despojo y la expulsión inmediata de to-
una ojeada á la joven á quien ama, do gachupín.
y de la que es también luego mirado?
La pobreza era suma y apenas circulaba otro dinero que el odioso
"Píramo y Tisbe, Psiquis y Cupido
papel moneda mandado imprimir por el Poder Ejecutivo en el rever-
el fuego del amor nunca expresaron
so de las bulas sobrantes de la Santa Cruzada, á fin de que no fuera
con los suaves afectos que lo expresa
fácil falsificarlo, con cuyo papel moneda se sustituyó el expedido por
Cecilia con su ardor y su entusiasmo.
el Gobierno Imperial de Iturbide, que se recogió é inutilizó.
"Las apacibles gracias, los amores,
En los primeros días de 1824 y últimos de Enero, el Gral. Lobato
salen sonriendo de sus dulces labios.
y el Comandante Stávoli se pronunciaron en la misma Capital, exi-
¡Ay! los amantes ¡ay! no sé qué sienten....
giendo á su vez el despojo y expulsión de españoles, y gracias á la
¡cuántos suspiros causa! ¡cuántos llantos!
entereza del Poder Ejecutivo y del Congreso, los amotinados hubie-
'' Si entre los suaves tonos de la orquesta
ron de desistir de obtener por las armas lo que no había de tardar en
él. oido regocija con su canto,
concedérseles por vías legales.
i /%
S/

209

presentación está permitida y hacer todos los esfuerzos que están en


sus facultades para mejorar nuestro teatro en todas sus partes.
" Entre las piezas que pueden representarse, habrá acaso algunas
que en las circunstancias no convengan, y esto no por defecto de ellas
CAPITULO II mismas, sino por la interpretación que pueda darles el auditorio. Así
hemos visto suceder con la Alzira de Voltaire, bautizada entre nos-
otros, quién sabe por qué, con el nombre de la Elmira. ¡ Qué lejos
estaba Voltaire al componer esta pieza, cuyo objeto moral, como él
1834—1825. mismo dice, es hacer resaltar las virtudes del cristianismo en las per-
sonas de Guzmán y su padre, sobre las puramente naturales, de que
Dejando aparte la historia política de aquella tristísima época, en ella sirviese de pretexto é iniciativa para voces de persecución y de
la que tuvo principal lugar el impío fusilamiento de D. Agustín de sangre! Si el viajero que él finge en una de sus novelas que va dan-
Iturbide, hablemos de nuestros dos teatros, el " A n t i g u o " ó del Co- do la vuelta al mundo, y que regresa horrorizado al ver en España
liseo, y el " N u e v o , ' ' ' 'Moderno" ó '' Provisional,'' como era llamado un auto de fe, en Constantinopla una ejecución, etc., hubiese apor-
el de los Gallos ó de las Moras. Del estreno de éste di ya noticia, y tado á nuestra ciudad y visto nuestro teatro en el momento de aque-
de sus cómicos nos hizo hiperbólicos elogios el poeta Erasmo Lujan, lla representación, ¿ qué habría dicho ? ¿ Qué habría dicho el autor de
anagrama que usó el distinguidísimo escritor y periodista D. Juan la pieza, el hombre humano y tolerante por esencia, si hubiese sabido
Morales, nacido en Guanajuato el 29 de Agosto de 1788, venido á Mé- que después de la representación de ella, se fijaban en las esquinas
xico en 1809, donde hizo brillantísima carrera, aun en medio de su listas de proscripción de españoles? No es de nuestro objeto exami-
pobreza indecible, que en 1812 le produjo un gravísimo ataque de nar más detenidamente la circunstancia de la representación de esta
insidio, causado por el hambre, y donde más tarde fué famoso y co- pieza, y sí únicamente recomendar á las autoridades encargadas de
nocido por el Gallo Pitagórico. la policía del teatro que celen para evitar en la temporada próxima
semejantes escenas que honran tan poco á nuestra civilización.
Digamos ahora, copiando un impreso de 1824, cuál era la situación
que guardaban en esa época los espectáculos públicos: Pudiera, acaso, variarse y hacerse más interesante el teatro, dan-
" E n la temporada que acaba, se han desenterrado todas aquellas do de cuando en cuando algunas de aquellas óperas italianas que no
piezas que el buen gusto había condenado á justo olvido, por ejem- necesitan un gran número de actores para su ejecución. Convendría
plo, San Francisco Javier, Nuestra Señora de Guadalupe, Santa Mar- también mucho cuidar de la propiedad de los trajes y adornos, ha-
garita de Cortona y toda la corte celestial convertida en diversión y ciendo que fuesen acomodados á los países y tiempos en que se su-
mofa de nuestro vulgo, sin olvidar los Mágicos de Salerno y de As- pone verificarse el argumento que se representa; pero sobre todo, se
tracán y Juana la Rabicortona, Agustín Lorenzo y una multitud de gua- necesitaría vigilar sobre el aseo del teatro mismo y sus dependencias,
pos que la ignorancia estúpida ve salir con gusto sobre la escena. que están en el más chocante estado de suciedad.
'' E s menester que no se abandone á la codicia de los empresarios . ' 1 Pudiéramos indicar otras mil cosas, pero harto será que se logre
nuestro teatro; que la autoridad vele sobre la ejecución de las piezas algo de lo dicho, y, por otra parte, la ilustración del Ayuntamiento
y sobre el decoro de la ejecución, tratando de formar un repertorio no necesita de nuevas advertencias. Se ha hablado de conciertos du-
cual conviene al gusto y decoro de nuestra nación, desterrando para rante la cuaresma ; ésta sería una diversión que ocuparía agradable-
siempre esos comediones que suelen destinarse para las representa- mente esas horas de descanso y que evitaría que muchos las consu-
ciones de las tardes, y que sólo con que se vean sus anuncios en miesen en distracciones menos honestas y acaso perjudiciales."
nuestros periódicos basta para desacreditarnos. No parece que hicieran mucho efecto estas juiciosas observaciones,
" Creemos que sería oportuno que acudiese á remediar estos males pues en la lista de comedias representadas en ese año de 1824, figu-
nuestro Ayuntamiento, á quien de derecho toca, desde que el decreto ran con frecuencia varias de las obras criticadas, y otras de títulos
de 21 de Febrero de 1822 suprimió el decadente Hospital de Naturales tan extraños é inconmensurables como La delirante por amor ó conse-
y el Municipio se encargó de la administración de sus rentas y del cuencias de una inconsideración; La emigrada del colegio ó justo proceder
arriendo del Coliseo. Al celo y buen gusto de los regidores, toca, re- de la verdadera nobleza; La mujer prudente vence ó domina al marido;
petimos, mandar revisar y expurgar la lista de las comedias cuya re- La huérfana ó lo que son los parientes; La muerta viva ó el sepulcro de
B. H. T.—T. I.—27
2IO

Adelaida y El villano del Danubio ó el buen juez no tiene patria. A la


ameritado, quien desde luego mereció que el revistero del periódico
vez, y en compensación, alternábanse las mejores obras délos poetas
El Sol, dijese:
españoles del siglo de oro, con La escuela de los maridos, La Raquel,
" Las funciones ejecutadas en el teatro de esta Capital en las no-
Otelo, El viejo y la niña é Indulgencia para todos.
ches del 29, 30 y 31 del próximo pasado, deben llamar la atención de
Las óperas que en el mismo año de 1824 mal cantaron nuestros có-
toda persona amante del buen gusto. Apenas se habrán representado
micos, traducidas al castellano, pues ni ellos conocían el italiano, ni el
en él piezas tan bien desempeñadas ni que más hayan agradado al
público gustaba de ese idioma, fueron Los dos gemelos, La Isabela, El
público : y si consideramos el vivo interés que ha manifestado en estas
duende fingido, El secreto, El tío y la tía, La italiana en Argel, La no-
representaciones el inmenso concurso que de todas las clases del pue-
via impaciente y La travesura.
blo ha asistido á ellas, hallaremos que si hasta ahora se han dado
En Julio de ese año de 1824, se presentó en nuestro viejo Coliseo aplausos á esos comediones informes y ridículos de tramoyas, apari-
un distinguido actor español, Diego María Garay, quien se anunció ciones y vuelos, y á los grotescos y bárbaros modos de algunos có-
y saludó al público mexicano, en el siguiente manifiesto que estimo micos, no es tanto por la falta de gusto que se exagera, como por
digno de reproducir, y decía así: carecerse de actores capaces de inspirarlo. No dudo que antes de mu-
"Respetable público; llegó el momento que anhelaba con impacien- cho desaparecerán las Juanas Romarantinas, las Santas Genovevas y
cia; si una casualidad tan imprevista como fatal para mí me priva del toda esa multitud de disparates, que ya deberían estar proscritos
equipaje, y por consiguiente, el poder empezar á ofrecer mis escasos como contrarios á la ilustración, y que con algunos otros pocos ac-
talentos con un drama digno de la ilustración de nuestro siglo, al me- tores de la escuela del Sr. Garay, lograremos tener un teatro digno
nos me glorío de no haber omitido desvelo alguno para el buen éxito de ser frecuentado por los nacionales y extranjeros del más delicado
de la tragedia conocida por Los Caballeros Templarios, la que tendré la gusto."
satisfacción de ejecutar el jueves 29 de éste. Ea reforma de alumbra-
do en el proscenio, un nuevo telón de boca y los lucidos trajes que se Queriendo Garay corresponder al aprecio del público y captarse la
han hecho al intento para los comparsas, no dudo contribuirán al buena voluntad de los liberales descamisados que parecían ser los
decoro y esplendor de la escena. A los señores de la comisión nom- dueños de la cosa pública, anunció para la noche del jueves 12 de
brada por el Exmo. Ayuntamiento para entender en los asuntos tea- Agosto " l a c o m e d i a nueva en cuatro actos, nunca aquí representada,
trales, se debe la mayor parte de esta mejora; ellos, convencidos de La virtud perseguida por la superstición y el fanatismo, de la que decía
la utilidad que ofrece á los pueblos un teatro culto, y que él es el el programa:
barómetro por donde se mide la cultura de las naciones, trabajan con " Este drama, sacado de un hecho histórico perteneciente á la isla
un celo infatigable, á la verdad digno de emulación, para desterrar de Mallorca, manifiesta hasta qué extremo llevaban sus tiranías los
los abusos que ocupan la escena, mejorándola acaso hasta el grado satélites del llamado Santo Tribunal de la Inquisición, oprimiendo á
de perfección de que es susceptible, pues así lo reclama la ilustración los virtuosos que caían bajo su despótico furor. Otro país menos culto
mexicana, y así lo exige su regeneración política. Yo, identificado miraría esta representación con aquel fanatismo que ofrece la escla-
con los deseos de estos señores, uniré mis esfuerzos á los suyos y á vitud; mas el director ofendiera la ilustración mexicana, si vacilase
los de los directores de la Empresa, que animados de tan bellas ideas, un momento en creer que no la recibiese México como un pueblo li-
nada omiten de cuanto está á sus alcances para la posible reforma. bre que detesta la iniquidad."
En otro de sus programas, la Empresa había anunciado los ensa-
" La premura del tiempo, la carencia de mis trajes y comedias y
yos de ese drama, diciendo de él:
los inconvenientes que presenta una compañía que no esperaba tener
en su seno nuevos actores, con otras mil trabas que entorpecen no po- " E n la semana entrante se ejecutará en el Teatro de esta Capital,
co, acarrearán algunas veces dificultades varias; pero en ninguna de por el ciudadano Garay, una sobresaliente comedia, cuyo título es:
aquellas se verá desmentido el ardentísimo deseo que tengo de com- La hiquisición por dentro. El mérito de esta pieza respecto á las re-
placer al pueblo mexicano, con quien me unen íntimamente afectos glas que constituyen un drama bueno, será inútil encarecerlo cuando
de amor y agradecimiento. los inteligentes harán al autor la justicia de que es digno. La materia
de su argumento merece un lugar distinguido entre las composiciones
" D í g n a t e , oh público amable y benigno, admitir mis votos y mis
de esta especie. Un padre sensible arrebatado del seno de su familia,
deseos, y nadie se dirá más feliz que Diego María Garay"
sin más delito que el del justo, y sacrificado al furor inquisitorial,
Frecuente ocasión tendremos para hablar de ese actor español muy
ofrece á los concurrentes el espectáculo más tierno. El secretario de
213
la Inquisición, no pudiendo conseguir de una hija suya sus abomi-
persticiosos que hablan según sus deseos y opiniones absurdas, sin
nables designios, es la causa de su ruina y le conduce al suplicio,
reflexionar que con inventar semejantes quimeras desacreditan nues-
cubriendo de orfandad á una pacífica familia. Estas interesantes es-
tro sabio gobierno creyéndolo capaz de sostener las preocupaciones
cenas, que tienen por objeto odio implacable á estos tigres carniceros
ridiculas. Más valiera que los que se entretienen en promulgar estos
de la humanidad, presentarán un grandioso cuadro de iniquidad con-
desatinos, se avergonzaran de presentarse ante los hombres ilustra-
trastada por la santa virtud, que en todos tiempos hace aborrecibles
dos y amantes de la humanidad."
á los perversos y criminales."
Pero el autor de ese comunicado no estaba en lo cierto al proclamar
Estos anuncios hicieron entrar en alarma á la mayor porción de la
el desdén público contra el fanatismo y la superstición, que entonces
sociedad mexicana, y la autoridad, cediendo á poderosas influencias,
se encontraban en todo su auge. En comprobación de ello léase el
dispuso que el estreno fuese suspendido, contra lo cual el dicho pe-
siguiente artículo publicado en El Sol del 31 del mismo Agosto:
riódico El Sol, insertó en sus columnas el siguiente comunicado ó re-
"Anteayer, poco antes de las oraciones de la noche, se ha cometido
mitido :
en esta ciudad un asesinato por todas sus circunstancias atroz • un
" Ayer ha corrido la voz de que se ha mandado suspender la eje- zapatero, natural de los Estados Unidos del Norte de América, poco
cución de la comedia titulada la Inquisición por dentro, que ustedes tiempo hacía avecindado en esta ciudad con tienda de zapatería en
nos anunciaron hallarse dispuesta para la presente semana, por ha- una accesoria de las casas del Estado en el Empedradillo, estaba muy
berse prohibido. Creo sin duda que ésta ha sido una invención de tranquilamente en su accesoria, á tiempo que pasó delante de ella el
algunos fanáticos que desean que así suceda, para que el pueblo ja- Divinísimo que salía del Sagrario con dirección á la calle de Santo
más llegue á ilustrarse bastantemente, y á fundar con solidez el odio Domingo. Un hombre vestido con una esclavina se arrodilló delante
que manifiesta profesar al monstruoso y sanguinario tribunal de la de la puerta de la zapatería y el zapatero lo hizo, es dudoso si antes
Inquisición, y á conocer las perversas maquinaciones de que se valían o después de haberlo requerido el de la esclavina, en una silla del
sus bárbaros ministros, para triunfar de la inocencia oprimiéndola con interior de su casa; el de la esclavina exigía que se viniese á arrodi-
fiereza. Este es cabalmente el argumento de esa pieza, cuya repre- llar al umbral de la puerta, con lo que se hicieron de razones, siendo
sentación necesitamos en el día más que nunca, para acabar de des- el resultado caer atravesado de una estocada el infeliz zapatero y po-
arraigar las preocupaciones de un pueblo oprimido por trescientos nerse en salvo con la fuga el bárbaro asesino. Sólo la historia de las
años, que ahora es cuando empieza á conocer las inhumanidades que guerras de religión de Francia y Holanda, puede presentar algún he-
cometían los monstruos que se llamaron inquisidores. cho comparable con esta atrocidad que prueba evidentemente el errado
"Felizmente disfrutamos de un sistema de gobierno verdadera- principio de instrucción religiosa que se ha seguido por desgracia en
mente libre y es llegado el tiempo de sacudir el oprobioso yugo del nuestro país, haciendo consistir la religión en puras prácticas exte-
fanatismo. riores y olvidando casi del todo la moral cristiana. Así hemos visto
" Ea comedia de que se trata no contiene nada que sea contrario á por fruto de este funesto sistema un hombre que arrastrado por el
los dogmas de la santa y única verdadera religión que profesamos- fanatismo, no se ha hecho escrúpulo de asesinar á otro, y sí se lo hacía
por el contrario, en su argumento se ve triunfar la santa virtud de la de que éste adorase al Santísimo en la puerta de la calle ó en lo in-
perversidad de falsos acusadores, que con la máscara de la religión terior de su casa. ¡ Quiera Dios que una instrucción mejor dirigida
que no conocen, sacrificaban víctimas á sus pasiones y ambición in- haga entender á nuestro pueblo que la caridad es la primera de las
saciable, vertiendo la sangre humana. virtudes cristianas, y que sólo las autoridades tienen la obligación y
el derecho de celar la conducta de los demás! Pero ya que esto sólo
' 1 Es hacer una injusticia notoria á nuestro gobierno, el persuadirse
puede ser obra del tiempo, es preciso que entretanto se logra, una
que sea cierto que ha prohibido ese útil drama, y es necesario des-
justicia severa y vigorosamente administrada ponga á cubierto á to-
preciar a los que se atreven á esparcir unas voces que tan poco honor
dos los habitantes de este país, cualquiera que sea el de su origen,
hacen a nuestras autoridades. ¿Qué dirían los ilustrados extranjeros
contra semejantes atentados, capaces de deshonrarnos para con to-
que se hallan entre nosotros, si acaso fuese cierta esa noticia ? dirían
das las naciones cultas.''
y con razón, que aunque en la República Mexicana está abolido eí
tribunal de la Inquisición, aun hay inquisidores que la defienden y Este crimen causó en México terrible sensación, y obligó al Go-
que tal vez tratan de restablecerla. ¡ A h ! lejos de nosotros semejante bierno á publicar el siguiente aviso:
idea. Me lleno de ira sólo de pensar que haya todavía hombres su- " H a b i e n d o sido alevosamente asesinado Seth Hayden, natural de
215

los Estados Unidos de Norte América, en su vivienda en la casa del tenecer á la primera ni del todo á la segunda, desprecian sus juegos
Estado sita en el Empedradillo, en la tarde del domingo anterior 29 haciéndose de los habilones, y murmurándolo luego que advierten
de Agosto, por un hombre que se fugó y cuyo nombre y paradero se ó les parece que saben en qué consiste la ilusión, como si porque yo
ignoran, y estando la causa radicada en el Juzgado de Letras del Lic. sé que en el equilibrio consiste que el volatín se mantenga en la cuer-
D. Francisco Ruano de esta Capital, se ofrecen dos mil pesos á la per- da, ya me creyera capaz de bailar en ella un wals, sin advertir lo
sona ó personas que verifiquen el descubrimiento y legal seguro arres- que va de la teórica á la práctica. Si uno de esos habilones se parara
to del verdadero reo, para que sea entregado y juzgado conforme á en el teatro con los instrumentos de Castelli, nada hiciera digno si-
las leyes, cuya cantidad está puesta para este objeto á la disposición no de los silbos generales. Estos tontos vanos merecen compasión.
de los señores el Cónsul de los Estados Unidos y el Cónsul General " E l Sr. Castelli debe saber que en lo que le falta que correr de
d e S . M. B., y deberá dividirse equitativamente entre los descubrido- América va á luchar con mucha ignorancia y con un fanatismo deses-
res y aprehensores luego que el reo sea convicto ó confeso.—México, perado. E s menester que siempre advierta en sus carteles que no
4 de Setiembre de 1824." es Dios ni Diablo y que sus juegos son obras puramente naturales,
Pero no sólo en aquel terrible suceso se dió á conocer la violencia para que sus espectadores no se escandalicen."
de las supersticiones reinantes entonces. Por esos días trabajó en Garay no por esto cesó en su empeño de combatir el fanatismo con
nuestros teatros un prestidigitador italiano apellidado Castelli, y mil piezas teatrales, y ya que la Inquisición se le escapase de las manos,
y un disgustos le valió su habilidad, pues el vulgo le tomó por un arremetió contra aquel por medio de otro drama que en 3 de Setiem-
brujo ó hechicero, y caro hubiese pagado el aplauso que recibió de bre anunció así:
las personas más ilustradas, á no haberle tomado bajo su protección " Carlos IX ó sea la escuela de los reyes. Esta delicada composición
la policía. Esto dió lugar á un artículo que con su firma publicó El que por la fluencia de sus versos, lo sublime de su estilo y la brillan-
Pensador Mexicano en El Sol del 3 de Agosto de 1824, y entre otras tez de sus escenas está tenida por una de las primeras en su clase,
cosas decía así: hace recordar el ominoso fanatismo con que en aquella desgraciada
" Este joven ha concluido sus funciones y está para salir de Méxi- época se degollaron hombres á millares, y particularmente en la ho-
co á continuarlas en otras partes. Yo deseando manifestarle el apre- rrorosa matanza llamada de San Bartolomé, que formará época en
cio que hago de su persona y habilidad, quiero recordarle, por me- los anales de la Francia. Al paso que su autor acomodó perfectamen-
dio del periódico de vdes. unas cuantas reflexiones, que no le serán te parte de estos hechos á las estrictas leyes de la escena, retrató al
del todo inútiles. vivo la delicada intriga, los vicios y perfidias que se anidan en los
" E n tres clases se dividen los espectadores que debe tener en to- palacios, preparando al espectador curioso á detestarlas sin que pier-
das partes: ilustrados, ignorantes y necios. Los primeros conocen que da jamás el grato interés de ver el patriotismo en pugna con la ti-
todas sus suertes ó juegos consisten en un mero mecanismo ó des- ranía."
treza con que engaña el sentido de la vista; pero que es imposible que Promulgada la primera Constitución Federal en 4 de Octubre, el
convierta la agua en vino, que resucite un pajarito, que restituya á Gral. D. Guadalupe Victoria, electo Presidente de la República, to-
su primitivo ser un pañuelo quemado, ó un cintillo hecho añicos, mó posesión de su elevado puesto el 10 del mismo, y cinco días des-
etc., etc.; porque á ningún hombre es dado el trastornar el orden na- pués, en el Antiguo Coliseo, se le ofreció una función que se com-
tural; pero celebran la gracia con que mantiene la ilusión á merced puso de la tragedia El Régulo ó el patriotismo en triunfo, un Terceto de
de sus instrumentos y destreza. Los aplausos de estos espectadores baile asiático y un apropósito intitulado Alegoría del triunfo de la li-
debe apreciarlos, porque recaen precisamente sobre su mérito. bertad.
" L o s segundos espectadores, que son los ignorantes, y son los más, En 2 de Diciembre fué cantado El Solitario, y dice textualmente
ordinariamente, después que se divierten, lo temen y odian, creyen- el programa de esa audición: " S e ejecutará la grande ópera en tres
do que si no es el mismo diablo, tiene con este duende un parentes- actos titulada El Solitario, cuyo heroico argumento está sacado de la
co muy cercano. Esta clase de gente es disculpable por su misma conocida historia de Carlos el Temerario, y la música es original del
ignorancia, todo lo maravilloso que no alcanza lo atribuye á milagro acreditado Cristian i, compuesta por él en esta Capital." La obra de
ó á maniobras diabólicas. El Sr Castelli se habrá reído bien y se rei- Cristiani gustó y se repitió con frecuencia en ese año y en el siguien-
rá á costa de estos brutos. te de 1825, que además del repertorio citado, dió diferentes veces el
Don Dieguito, El Café, Los piratas del bosque de los Sepulcros, El Pi-
' ' La tercera clase de sus espectadores, son los necios, que sin per-
taco ó renunciar al trono por el bien de la patria, El imperio de la ver- que oro forma sus firmes entrañas
dad ó el ilustre sepulturero, La terrible noche d; tin proscripto ó Eduardo manifiesten su rico poder.
en Escocia, El hijo criminal juez de su inocente padre y otras así. En- " A l influjo de celestes lumbres
tre las óperas se cantaron El Califa de Bagái y Ramón y Rosilia ó luego vuelvan tesoros á crear,
la paña negra. y no cesen de remunerar
El autor de la citada ópera El Solitario llamábase Esteban Cristia- la tarea que se supo tener.
ni y fué, según parece, un distinguido profesor de música y un buen " L a admirable, la gran Valenciana,
maestro de piano. la que ha sido del mundo el abismo,
Entre las curiosidades teatrales de ese año, encuentro el siguiente sea en delante, en riqueza lo mismo
programa: que al principio de su hallazgo fué.
"Lunes j de Enero de 1825. Con motivo del beneficio que resulta "Retribuya de muy buena gana
á este benemérito público, de q u e el día de hoy hayan empezado los el afán de sus dueños prolijo:
trabajos del desagüe de la notoria rica mina de Valenciana, ha re- sea su fruto seguro, sea fijo,
suelto la Compañía Cómica solemnizar tan próspero suceso con una el durar que el pronóstico cree.
sobresaliente función que dedica á los señores interesados en tan útil " D e Neptuno el tremendo coraje
como importante empresa. su raudal apacigüe violento,
"Se abrirá la escena con una rumbosa marcha con letra al intento, y extinguido se logre al momento
á la que seguirá la comedia heroica en dos actos Isabel primera de la abundancia y riqueza gozar.
Rusia. En su intermedio se cantará el famoso terceto de La Espada, " E l minero con gusto trabaje,
y por fin de función se presentará por primera vez á bailar un á solo su indigencia remedie, y ufano
el C.Victoriano Mota, profesor y habilidad en este ramo.—Ea casa y reconozca al Anglo-Mexicano
teatro se adornará é iluminará completamente. los recursos que quiso prestar.
"Recomiende este pueblo tan grato
"MARCHA que en celebridad de comenzarse la grande obra del desagüe en los dueños de tal posesión,
de la mina de Valenciana, se cantará la noche del j de Enero en el que olvidando su propia razón
Coliseo de esta Capital. vieron sólo el común interés.
" N o pudiera del fiel Guanajuato
" G u a n a j u a t o , t u nombre famoso soportar el crisol de su suelo
en los países del orbe resuena; ningún hombre, que el público celo
y hoy de gozo tu Estado se llena no animase sin falso doblez.
porque torna á su antiguo lucir. "Celebremos contentos y unidos
" D e tu suelo feraz y abundoso este día de ventura y placer,
beneficios aguarda tener: y mil votos al Supremo Ser
presto, juzga, que vuelvas á ser, dirijamos con alma veraz :
y seguro contar tu existir.
"Bajo el trono grandioso rendidos
imploremos con pura intención
CORO.
la constante fraternal unión,
libertad en la ley, y la p a z . "
''Loor eterno al inglés generoso
cuyo auxilio tan útil te fué:
él florezca también venturoso Increíble parece que un suceso que se decía ser tan próspero no
y la suya en tu dicha granjé. hubiese encontrado un menos detestable poeta que le cantase.
H e aquí ahora un resumen del pésimo modo de ser de nuestros
"Esas, pues, soberbísimas cumbres teatros en los primeros años de la independencia nacional, dispuesto
de graciosas espesas montañas, en forma de preguntas por un articulista de El Sol:
" ¿Es ilustración que en un país libre, rico y privilegiado de la na-
turaleza, se deje el Coliseo y sus actores en tal abandono que dé lugar contestarlos dejen correr impresos en los periódicos de esta Capital
á que los extranjeros nos miren con aire de desprecio? los fárragos indecentes en que se critican las comedias de Solís, se
celebran las del remendón Castañeda, y se deprime el mérito del Sr.
' ' ¿Es ilustración que haya un santito en su capillica á la entrada
Garay, que es el único que hemos visto con conocimiento de lo que
de la mansión de Talía y Melpomene, en medio de los fétidos olores
es acción, gesticulación y declamación?
que despiden las cloacas é inmundicias que tienen que atravesar los
concurrentes ? " ¿ E s ilustración dejar que exasperen á un actor distinguido que
más de una v^z se ha calzado el coturno, mientras se sufre que Arias
" ¿Es ilustración que una parte de éstos atiendan sólo al argumento
110 estudie, que Luciano esté sordo, que Melquíades se equivoque
de la pieza cuando es nueva, y que cuando no lo es se pongan en ter-
siempre, que el apuntador grite, que las damas vistan como quieran
tulia y armen tal susurro que se moleste el espectador más atento
sin ninguna propiedad, que nos presenten decoraciones llenas de ro-
aunque sea sordo ?
turas y manchas y que nos estén exhaumando con el humo del mal-
" ¿Es ilustración que se hable con tal furor en los palcos inmedia-
dito aceite que emplean en sus luces ?
tos al proscenio que se confunda el eco con el de los actores?
'' ¿Es ilustración que se fume cuando la cortina esté levantada y " ¿ Y será ilustración, por último, que la temporada entrante caiga
que en el pasaje más patético se sienta sacar lumbre á los que no pu- el teatro en manos mercenarias que no atiendan más que á su prove-
dieron esperarse un poco ? cho, y que el Gobierno deje abandonado este barómetro de la cultura
de los pueblos, privando además las piezas que tanto contribuyen á
" ¿ E s ilustración que estando el público más interesado en el des-
desfauatizar á la muchedumbre y á cimentar la opinión y gloria de
empeño, de un buen drama salgan en el entreacto con sus cantatas
una República naciente?"
la Esquivel, Maya ó Rocamora á arrebatar toda la ilusión á los es-
pectadores ? Estas y semejantes censuras se extremaron al concluir la temporada
" ¿Es ilustración que haya quien quiera formar partidos en el patio de principios de 1825, y léase lo que un revistero dijo acerca de ello :
para dar silbidos, y quien diga que es mejor el Solitario de Cristiani '' En la próxima pasada temporada estuvo el teatro en poder de los
que las óperas de Rossini, que hemos visto medianamente ejecutadas cómicos, y ya ha demostrado la experiencia que no valen maldita la
por los esfuerzos del Sr. Castillo ? cosa para asentistas. Se puede asegurar que es el primer año en las
¿Es ilustración que cuando sale la Corderito ó Isabelita á divertir diversas ocasiones que lo han arrendado por sí, que han concluido la
con sus honestísimos y decorosos meneos, salgan también á la escena temporada. En el de 1817 ó 1818 se empeñaron en ser asentistas, y
aquellos zamacucos que tocan y cantan, y que por cada bastidor se contrataron el teatro; pero se dieron tan buenas mañas, y procuraron
vea un grupo de muchachos y criadas trapientas formando un cuadro conservar tal armonía, que á los siete meses no se las podían acabar
de zahúrda? unos con otros, de manera que para quedar en paz y que 110 faltase
al público la diversión, se vieron precisados á traspasar sus derechos
" ¿ E s ilustración que no haya un juez de carácter que contenga
á D. Hipólito Ondraita, que asociado con otros sujetos sostuvo el
estos abusos y haga entender á la Sra. Cecilia Ortiz que 110 debe in-
teatro los años siguientes. En el de 1823 se les volvió á antojar el ser
vertir el orden de la Compañía ni obstruir sus funciones, ni insultar
empresarios, y á los dos meses doblaron las manitas y anunciaron por
groseramente á los que ajustaron las cuentas de su señor marido por-
papeletas impresas que no podían continuar con el cargo que volun-
que no salieron á su gusto ?
tariamente tomaron sobre sí, dando el gran golpe de cerrar el teatro,
'' ¿Es ilustración el no haberle contestado al sonetero que deliró por á pesar de los razonables partidos que les proponían el Excelentísimo
amores de la Sra; Ortiz, y metió en la danza á todo el patio cuando señor Jefe Político y Ayuntamiento, que no perdonaron sacrificio por
hubo hombre que bostezó veinte veces al oir los gipidos y altisonantes, evitar un acontecimiento tan desagradable. Pero los actores habían
oscuros y monótonos de esta señora con que tanto ha acreditado el nin- pronunciado el fallo y el teatro se cerró.
gún conocimiento que tiene del arte que profesa ?
'' ¿Es ilustración consentir que cualquier zarramplín enamorado, " E s bien notorio de la manera que concluyó la temporada última,
enemistado ó arrimado á las cómicas y cómicos tome el nombre res- y la paz y buena fe que presidía á sus deliberaciones: todas eran renci-
petable del público para estampar en sus escritos lo que se le viene llas, todas intrigas. . . . ¡Pero qué intrigas! Todas desavenencias, artifi-
á las mientes y conviene á sus miras ? cios y trácalas miserables. En vez de reunirse para facilitar la ej ecución
de las piezas que hubieran agradado al público que tanto afectan respetar
" ¿Es ilustración que los amantes de la justicia estén callados, y sin
y desean complacer (¿pues, no te digo?) se ocupaban en inventar mo-
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dos de obstruirlas y entorpecerlas, confiados en la paz y concordia de sentencia de muerte contra nuestro Redentor, cuya escena repiten en
los abonados que satisfacían sin falta los recibos del mes adelantado, los demás tablados.
se les daba un pito de que rabiasen al verse tan pésimamente servidos,
Fórmase después la procesión iluminada con hachas de brea, en
con tal que no dilatasen el pago de sus asientos.
que se ve uno blandiendo la pica que ya jugó dentro de la iglesia,
" De nada nos servía que hubiese dos galanes primeros y dos da- otro montado en un caballo que va haciendo brincar, Judas dando
mas de mérito en su ejercicio. Si trabajaba Amador, no parecía Ga- talegazos á los espectadores, los rabinos tiran unas cadenas que des-
ray; y si este actor se dignaba salir á la escena, como si no existiese componen muchas piernas, otros con una mesa en que juegan los da-
aquel en el mundo. Si la Sra. Montenegro desempeñaba la función, dos, los pontífices tomando tragos repetidos de quién sabe qué licor,
estaba enferma la Sra. Ortiz, y cuando esta actriz se restablecía de su otros que también comen y beben representando el Cenáculo, el bea-
indisposición traspasaba los males á su compañera, y con tan reco- to Alano con una muleta fingiéndose cojo, y con una lente que entre
mendable y bonita voltereta complacían sus pasiones á expensas del escandalosas morisquetas dirige á las mujeres más bien parecidas, ó
público, careciendo éste de sus habilidades, teniendo que contentarse á las que más lo inclinan sus desordenados sensuales apetitos, y otros
con que las comedias fueran desempeñadas por los inolonguetes, aun- disciplinándose. Sigue el carretón de la muerte, Longinos, San Lá-
que otros menos sufridos conociendo las intrigas, daban al diablo ( y zaro desnudo y estirando un perro, luego las jóvenes más bonitas del
el diablo no los q u e r í a ) , á los traviesos y sus travesuras. Cada uno lugar figurando á Judith, Rebeca, Débora, Esther, Viuda de Naín, rei-
de los actores nombrados tiene su mérito particular y también sus ami- na Sabá, tres Marías, Verónica, Sibilas, muchas Rosalías y otra infi-
gos y apasionados. Estos están contentos cuando ven á su predilecto nidad de truhanes que van llamando la atención de un pueblo diver-
en la escena, y nada habría más acertado que el que noche por noche tido. A continuación van las imágenes de San Pedro, San Juan, la
nos favoreciesen con su presencia y habilidad." Magdalena y de otros santos, las que según mi parecer, acompañan
Todo quedó en suspenso con la llegada de la Cuaresma, y queda- á Jesús, á quien verdaderamente va crucificando la tumultuosa ple-
ron por únicos recreos las procesiones de pasos de la Semana Santa be. Entre estos santos simulacros se distingue la efigie del Redentor
en los pueblos de los alrededores; hé aquí como, censurando las irre- hecho el juguete de unas manos sacrilegas, que por medio de corde-
verencias que en ellas se cometían, las pintaba un papel de la época : les la hacen caer y volver la sagrada cabeza con otros movimientos,
" D e un ano para, otro se liace j u n t a del vecindario, presidida por según el antojo de sus espíritus groseros.
el juez territorial y asistida del párroco, en la que eligen bajo la pe-
Desde el Jueves Santo hasta el Sábado de Gloria el zafio indio
na de una multa arbitraria, el capitán de la sentencia, el centurión,
que representa al Iscariote tiene derecho para meterse en casas y en
el beato Alano, y otra caterva de ridículos farsantes. Llegado el día
tiendas y cogerse de ellas todo lo que le acomoda, sin que nadie se
en que han de representar, dispuestos á la puerta de la iglesia y por
lo impida: los robados ponen sus espías para enterarse de donde el
las calles varios tablados que sustituyen los perversos tribunales de
Judas esconde lo que se lleva. Llega el Sábado de Gloria, suenan
Anás, Caifás, Herodes y Pilatos, colocada la imagen de Jesús en me-
las campanas que anuncian la Resurrección, y entonces, todos los
dio de la iglesia, sube el predicador al púlpito, quien después de ha-
despojados corren en busca del indio Iscariote y á palos y ápedradas
blar alguna cosa sobre la Oración del Huerto, llama á Judas que entra
con que medio lo matan, le exigen que les devuelva lo que les llevó,
al templo en fuerza de carrera atropellando al auditorio: le pregunta
sucediendo que muchos objetos ya no parecen.
el sacerdote sobre las señas que ha dado a los judíos para entregar á
su Maestro, brinca aquél á las andas, besa el carrillo del Divino Re- Nadie podrá negarse á la justicia con que se declame contra estos
dentor, enseña al pueblo la talega, mueve sus manos para llamar la desórdenes, y me admiro de verlos consentidos sin castigar á sus au-
comparsa, entran de tropel los fariseos, pregunta el predicador ¿á tores, principalmente cuando después de la infracción de las citadas
quién buscáis? Responden que á Jesús Nazareno: caen en tierra, da leyes, y de los insultos hechos á Dios y á la religión, concluye aque-
licencia el orador para que se levanten y le prendan, lo verifican con lla farsa con un gran refresco y cena, con que echando por tierra el
algazara, gritan las mujeres, hay lágrimas fingidas, etc., y baja el precepto del ayuno, remachan los clavos en la cruz. Yo juzgo que
sacerdote del púlpito entre las aclamaciones de un pueblo carnal. semejantes excesos exigen imperiosamente un pronto remedio, como
diametralmente opuesto á la santidad de la religión que profesamos,
" L l e v a n la imagen á la puerta de la iglesia, en donde los simula- y porque cediendo su disimulo en destrucción de los pueblos, se debe
dos pontífices, que han cubierto sus corrompidos corazones con ropas obligar á sus vecinos no sólo á que sean buenos ciudadanos, sino tam-
y mascaras ridiculas, pronuncian entre gestos y acciones burlescas la
bién buenos cristianos, respetuosos y obedientes á las leyes de la pacidad para una asistencia de trescientos niños, en el salón que fué
Iglesia y á las demás autoridades." del Secreto en la extinguida Inquisición. Circunstancia notable y que
El anteriormente citado profesor Esteban Cristiani, autor de la debe recordarse fué la de que en esa época el Gobierno no auxiliaba
ópera El Solitario, el lunes 28 de Marzo de 1825 dió en los entresue- con fondos ningunos á la Compañía, la que atendía á todos sus gas-
los de la casa de la Condesa de Miravalle, sita en la calle del Espíritu tos con la cuota mensual de dos pesos que pagaba cada socio. Puesto
Santo, un lucido concierto, al precio de dos pesos la entrada. En él que un libro como mi humilde Reseña, puede servir para dar idea de
cantaron Andrés Castillo, la Gutiérrez y Amada Plata; Palomino to- nuestra cultura intelectual, no me parecen fuera de lugar estas noti-
có un obligado á violín y Cristiani una gran fantasía en el pianoforte. cias que algún día serán sin duda consignadas en libros especiales que
hoy por hoy 110 han sido escritos. Mientras eso se hace, los que ama-
Entre nuestros aficionados y profesores venía distinguiéndose D.
mos á México no debemos desperdiciar ocasión de recordar los nom-
Mariano Elízaga, quien, con apoyo del gobierno, abrió el lunes 18 de
bres de nuestros personajes distinguidos, á los cuales la ingratitud
Abril de aquel afio las clases de la "Sociedad Filarmónica," en la
ignorante suele anteponer enojosas cuestiones de falso patriotismo,
casa núm. 12 de la calle de las Escalerillas, mientras se le propor-
que envenenan los ánimos y reproducen odiosas é inútiles rencillas
cionaba un lugar á propósito. El domingo 17 de Abril se verificó en
que nos empequeñecen y quitan el crédito ante la civilización.
el salón general de la Universidad la apertura de la susodicha acade-
mia filarmónica, con asistencia del Presidente D. Guadalupe Victoria Pero reanudemos nuestra relación de sucesos de 1825, año de agi-
y la de todos los funcionarios públicos: por la noche hubo un gran taciones y desórdenes en la Capital, donde eran casi desconocidas la
concierto en el mismo salón, y el jueves 21 se cantaron en la iglesia tranquilidad pública y la seguridad personal. A cada momento re-
de San Francisco misa y Te Déum en celebridad de esa inauguración gistrábanse en México motines, robos y asesinatos, y el vecindario
y en honor de su patrona Santa Cecilia. se veía afligido por enfermedades como el sarampión y la escarlatina,
que causaron horrible mortandad aun entre los adultos, especialmen-
E l arribo de Ward y de Poinsset, Ministros de la Gran Bretaña y
te en la clase de tropa: según la estadística oficial, sólo e 1 la ciudad
de los Estados Unidos ante nuestra República, suceso que hizo excla-
murieron en Julio quinientas cuarenta y nueve personas, en Agosto
mar á Victoria en celebérrima y casi humillante proclama: "Llegas-
mil setecientas setenta y siete, mil cuatrocientas diez y siete del 1? al
teis, mexicanos, al colmo de la ventura; la más poderosa de las na-
15 de Septiembre, y novecientas cuatro del 16 al 30.
ciones os enumera en su catálogo," dió motivo á grandes fiestas,
bailes y funciones de teatro. Uno y otro ministro presentaron sus Fué necesario abrir suscriciones para ocurrir al socorro de tanta
credenciales en 1? y 2 de Junio, y días antes, el 28 de Mayo, fueron calamidad; la legislatura de México se apuntó con quinientos pesos,
obsequiados con un baile magnífico que les sirvió de presentación an- Mr. Ward, con mil; Santa María, Ministro de Colombia, con veinte
te la más escogida sociedad de la Capital, muy entretenida con las onzas de oro, y el Cónsul inglés, O'Gorman, con tres mil ciento diez
fiestas de la Pascua que aquel año cayó á 25 del mes últimamente ci- pesos, que reunió entre sus compatriotas.
tado, fiestas animadísimas que llevaron á San Agustín de las Cuevas En cuanto á lo de la inseguridad en que se vivía, sólo diré que en
gran concurso, y dieron origen á enormes pérdidas y ganancias en los 3 de Setiembre el Sr. Mora, Presidente d é l a Cámara de Diputados,
juegos de monte y de gallos. En cambio las lides de toros sufrieron un hizo pública la siguiente queja : ' 'Hace unas cuantas noches que una
rudo golpe con la completa destrucción de la Plaza Nacional taurina, partida considerable de bandidos recorre el barrio del Puente de Al-
que en la madrugada del 9 de Mayo comenzó á incendiarse, cebán- varado; esta misma cuadrilla que, á lo que se dice, se reúne en una
dose las llamas en aquella enorme construcción de apolillada madera, pulquería que existe, contra el bando de la materia, que se llama de
con tal actividad, que en poco tiempo quedó reducida á cenizas. La Niña, ha saqueado varias casas y dado diferentes ataques á otras,
entre ellas la de un comerciante llamado D. Alonso; por último, an-
A la vez que se fundaba nuestra primera Sociedad Filarmónica,
tes de anoche, un grupo considerable asaltó la mía á las ocho, sor-
creábase en el antiguo convento de Betlemitas y por el mes de Julio,
prendiéndome en un gabinete donde escribía á la sazón, hiriendo á
la escuela mutua del sistema Eancáster. Ea sociedad de la Compañía
un criado y estropeando á mi madre y resto de mi familia, todos los
Eancasteriana habíanla introducido en México el 22 de Agosto de
que salvamos porque una criada logró subir á una azotea, desde don-
1822, los que entonces eran editores del periódico El Sol, D. Eulogio
de llamó á los vecinos, uno de los cuales disparó una pistola, y al
Villaurrutia, el Médico D. Manuel Cordoníu, el Lic. D. Agustín
ruido huyeron los malhechores."
Buenrostro y D. Manuel Fernández Aguado, quienes desde luego
abrieron la primera escuela mutua, que llamaron " E l Sol," con ca- El Sol, de 13 del mismo Setiembre, dijo: " A las siete de la noche
ha sido robada la casa del Sr. D. Juan Cervantes, en la calle de San la ópera La urraca ladrona, y á 29 de Diciembre la 110 menos famo-
Francisco, por una cuadrilla de diez hombres bien vestidos. Robaron sa y aplaudida Tancredo. La sección dramática estrenó allí mismo las
cinco mil pesos, ataron á los criados, y cuando volvió Cervantes le tragedias Sila y el Duque de Viseo y obtuvo grandes aplausos con las
maltrataron é hicieron entregar las llaves; á un amigo suyo que le comedias El Mendigo y Teresa, La familia nueva, Las cuatro bodas á
esperaba le robaron cuatro onzas y le hirieron de una puñalada cre- un tiempo, Aventuras de Camila y Cobián, El disfraz venturoso y la
yendo que iba á defenderse. Nada se notó por los serenos de las es- Mogigata. En 27 de Diciembre estrenó una comedia escrita en Méxi-
quinas en una calle tan céntrica, estando situada la casa de manera co con el título de T^a puerta de tierra de Veracruz. La sección de bai-
que enfrente tiene la Guardia de la Audiencia del Estado, en una de le presentó á su vez las grandes pantomimas coreográficas: Hossidg
las esquinas de la cuadra la guardia del Monte Pío, y en la opuesta y Ovando ó los hermanos enemigos, en tres actos; Aider-Ali-Kan ó los
el centinela del Coliseo. El mismo día, á las once, fué robado de la celos del serrallo en dos, y Jasón en Corinto ó los encantos de Medea,
Catedral un atril de plata. No parece sino que los lazos de la socie- en tres.
dad se han disuelto en la Capital, y que los hombres están destinados
El antiguo Coliseo sufrió un rudo golpe con la reapertura del Tea-
á ser víctimas de una compañía de ladrones, que sin duda se ha or-
tro Provisional, y para quitarle su público, la Empresa y los cómicos
ganizado y es dueña de sus bienes."
de aquél hicieron circular unos pasquines diciendo que el Provisio-
Basta lo dicho para hacer notar que no era aquella época la más nal se hundiría con el peso de la gente, por estar construido casi to-
propicia para que los espectáculos teatrales progresasen: los morado- do sólo con madera. A este propósito dijo El Sol: " E l nuevo teatro
res de México tenían miedo de alejarse de sus casas y de transitar ha comenzado sus funciones; para evitar que el concurso en él fuese
por las calles después de las oraciones. crecido, se fijó en las esquinas de varias calles un pasquín lleno de
Sin embargo, D. Diego Ramón Somera, propietario entonces del especies altamente subversivas, pretendiendo hacer asunto de parti-
Teatro Provisional ó de los Gallos, tuvo bastante dinero y entusias- do lo que no lo es más que de diversión. Con este motivo, ha salido
mo artístico para proceder desde el mes de Mayo del dicho año de á luz un papel en que se inserta y rebate dicho pasquín, que no ha
1825 á su completa reconstrucción, obra bien necesaria, pues aque- producido, en verdad, gran efecto, pues el Teatro Provisional ha es-
lla antigua plaza de gallos ofrecía tan malas condiciones para teatro, tado muy concurrido en las tres noches que lleva de funciones y casi
como nos lo indica el aviso ó anuncio de su primera función de es- desierto el Antiguo. Sería de desear que ambos rivalizasen, no por
treno que copié en el anterior capítulo, y dice: ' 'la hora de comenzar tan ruines y punibles medios, sino compitiendo en el mérito de los
será á las siete y media, si el tiempo lo permitiere.'' Quiere decir que actores y en la elección de las piezas. El público está ya demasiado
su techumbre, suficiente para proteger de los rayos del sol de la ma- ilustrado para dejarse llevar por los groseros impulsos que en el pas-
ñana á los aficionados á las peleas de gallos, no lo era para resguar- quín han querido darle: mientras que en un teatro se represente el
dar de la lluvia á los concurrentes á funciones nocturnas. Ta recons- Anillo de Giges y en el otro La niña en casa y la madre en las másca-
trucción emprendida por Somera no fué mejor que la empleada en ras, es claro que las gentes ilustradas han de concurrir al segundo,
salas de su especie; todo se hizo de vigas y tablas, y la techumbre no sólo siendo sus actores conocidos y estimados, sino aun cuando
se revistió de hoja de lata; el conjunto y la vista interior del salón acabasen de llegar de Guinea. Así, pues, el modo de atender á los
y del escenario eran agradables, y todo se compuso y adornó del me- intereses de los pobres indios de San Gregorio, á cuyo Colegio han
jor modo posible. sido aplicadas las rentas del antiguo Hospital Real, desde Octubre del
Su inauguración y estreno, se verificaron en la noche del 21 de año de 1824 pasado, y de atraerse un gran concurso, no es más que
Agosto con la comedia La Niña en casa y la Madre en las máscaras; mejorar el Teatro Antiguo y hacer que el público lo prefiera porque
el éxito fué grande, pues realmente el reformado Teatro de los Ga- encuentre en él mayor diversión que en el otro."
llos ofrecía mucho más airoso aspecto que el pesadote Coliseo anti- El mismo diario, pasando revista á las funciones del Provisional,
guo, con sus paredes como murallas de fortaleza. E n la Compañía ó Moderno, ó de los Gallos, nos da las siguientes curiosas noticias:
figuraban el gran cantante de anas de música, Andrés Castillo, el bai- " H a r e m o s notar al Sr. Diego María Garay, Director de la Com-
larín, Andrés Pautret, y la graciosa bailadora de boleras Manuela Gar- pañía de Verso, que tres tragedias consecutivas no han tenido el efec-
cía Gamborino. to que debían por la mala repartición de papeles, y éstas son los Tem-
La sección de cantarines y cantarínas, bajo la hábil dirección de plarios,, la Mérope y el Sila, todas tres por no haber desempeñado el
Castillo, puso con grandísimo éxito, y á 13 de Setiembre, en escena, joven Cruz el papel que le tocaba, y haberlo hecho en la primera y
R. H. T.-T. I.—29
tercera la Sra. Manuelita Gamborino y en la segunda el Sr. Patifío.
"Para que las piezas salgan bien desempeñadas, es necesario aco- zas de representado, canto y baile, jamás esperó pantalones remen-
modar los papeles al genio, carácter y personal físico de los actores: dados del Sr. Fernández, y otras ridiculeces como las que frecuenta
la Sra. Gamborino desempeña perfectamente los papeles de una jo- el Sr. Maya en actitud de esprimir naranjas "
ven franca, natural y viva, ya sea juiciosa ó coqueta, como lo hemos Concluyamos con la historia de los espectáculos en la Capital du-
visto en La niña en casa, en EL seductor moralista, en el Fingido Es- rante ese año de 1825, que en su mes de Setiembre vio nacer la funes-
tanislao y en la Terrible noche de un proscrito y otras; pero este carác- tísima á México asociación masónica de los Yorkinos, fundada por D.
ter, su bonita figura, y su poca edad, que, vestida de hombre, parece José María Alpuche é Infante, cura de una parroquia del Estado de
menor, no son á propósito para expresar la fiereza y heroísmo de un Tabasco y Senador por el mismo Estado. Por fortuna, si México hubo
guerrero; se pierde la ilusión, principalmente en el Sila, en cuyo fin de lamentar y por largos años esta desgracia, túvose la grata suerte
es nombrado cónsul el personaje que figura, empleo para el que era de que el Brigadier D. José Coppinger, Gobernador del Castillo de
necesario tener una edad que 110 representa la Gamborino vestida de Ulúa, se viese obligado á capitular con el Gral. D. Miguel Barragán
hombre con mucha defereucia. Esta mutación la he visto ejecutar en en 17 de Noviembre y hacer entrega de la fortaleza, en la que hasta
Europa en algunas óperas en que por falta de hombres que desem- entonces había ondeado la bandera española y en la cual á las once
peñen la voz de contralto, lo hacen mujeres; pero en las óperas no y media de la mañana del 23 del citado mes,enarboló el general ven-
es extraño, porque en ellas ni se busca el argumento ni la ilusión, cedor el pabellón mexicano, en grato anuncio de haber cesado por
sino la música y la consonancia de las voces. completo la ocupación española iniciada por Hernán Cortés.

" E l Sr. Patiño no es á propósito ni por su físico, ni por su voz, ni En la Capital se hizo pública oficialmente la noticia de la rendición
por nada, para desempeñar el joven Ejisto de Mérope; pero sí haría de San Juan de Ulúa, á las dos de la tarde del miércoles 23, entre el
bien á Catilina en el Sila, desempeñando Cruz el papel de Fausto. estruendoso repique de las campanas de todas las iglesias, el estrépito
de los cañonazos y el vocerío alegre de las multitudes. D. Guadalupe
'' Sin embargo de esto, yo doy las gracias al Sr. Garay por el deseo
Victoria expidió entusiasta proclama que empezaba así: "Conciuda-
que tiene de servir al público, y á la Gamborino porque 110 se excusa
danos : el pabellón de la República tremola en el Castillo de Ulúa. Yo
de trabajar, haciendo más de lo que puede y de lo que es su obliga-
os anuncio con indecible gozo que al cabo de trescientos cuatro años
ción. A Garay le pido que alternen las óperas que saben y dejen des-
han desaparecido de nuestras costas los pendones de Castilla."
cansar al Tío y la Tía, el Secreto, el Marinerito, y la Travesura, y que
muden la repartición de papeles de la Italiana, haciendo Martínez al El suceso inspiró á un poeta el siguiente soneto, que tomo de un
Bey, Castillo á Lindoro, y Maya á Aly. Nada digo en punto á damas periódico de la época :
de música, porque se ha repetido mucho sobre el asunto, y parece que
en la compañía de canto la primera ha de hacer á la primera, véngale '' Salve mil veces, país afortunado,
ó no le venga." pues cuentas con la vida interesante
del diestro General, del digno Atlante
En otra revista el mismo crítico decía: ' ' Nos tomamos la confianza
que tu concepto y gloria ha asegurado.
de manifestar al Sr. Garay lo disgustado que se halla el público por
el ningún aprecio á las insinuaciones para que no tengan lugar los " S u celo infatigable, su cuidado
saínetes, tonadillas y piezas de baile en los intermedios, pues es suma- ha sido en tu defensa tan constante,
mente impropio interrumpir el curso de los argumentos con frivoli- que no pudiera ser más vigilante
dades de aquella clase. el genio de la guerra celebrado.
" Viva edades sin fin, y su existencia
Tampoco se ha alternado el trabajo de drama, ópera y baile como
sea el apoyo feliz del patrio suelo,
se había ofrecido: si las causas son enfermedades de los primeros ac-
y de su memorable independencia.
tores ó actrices, claro está que podían y debían sucederles las segundas
'' Y pues á Barragán conserva el cielo,
clases. Por ejemplo, que Madama Pautret se halle enferma, que no
alabemos de Dios la omnipotencia
lo dudamos y sentimos en extremo, no es un inconveniente para que
que ha dado á Veracruz este consuelo."
deje de haber baile, pudiendo tomar su lugar la Sra. Gamborino, á
pesar de que su mérito no llenará el hueco de aquella señora su maestra.
Cierro el capítulo copiando el programa de la función que en 17 de
Además, aunque el público sufre ser espectador de malísimas pie-
Noviembre dió el Teatro Provisional, y dice:
" P r i m e r o : La pieza titulada La Tragedia de Buñuelo.—Segundo: con la gran ópera de Rossini El Barbero de Sevilla.—Palcos cincope-
El nuevo recreo de baile en cuatro partes: i? Introducción por los fi- sos; lunetas y galerías seis reales; cazuelas dos reales; entrada á palcos
gurantes y terceto por J u a n Antonio Medina y Reinaldo : 2? Solo por dos reales."
Antonio del Aguila, acompañado por los figurantes : 3'1 Boleras á seis Parece que Andrés del Castillo tomó esta determinación de trabajar
por Manuela García, Luisa Martínez, Dolores Cordero, Mariano Ro- en el Provisional, para vengarse de una herida que en su amor propio
dríguez, José Romero, Andrés P a u t r e t : 4? El gran solo de la araña, estimó haber recibido de la operista Sra. Santa Marta, que acababa
desempeñado con castañuelas por María Pautret, con su acompaña- de llegar de España contratada para el Coliseo Antiguo ó Teatro Prin-
miento de jaleo. Tercero : Concluirá con la pieza en un acto El Triun- cipal. Esa cantante, cuyos trabajos debían principiar en la próxima
fo del interés." Pascua, accedió á la invitación de la Empresa para que diese algunos
conciertos, el primero de los cuales se verificó en la noche del 19 de
Febrero. A tomar parte en él fué invitado Castillo, que aceptó can-
tando alguna aria y unos dúos con la Santa Marta, quien pasado el
concierto remitió á Castillo una gratificación de veinticinco pesos:
CAPITULO III pareció insignificante esta suma al orgulloso cantarín, tan acreditado en
México, y no sólo no la aceptó, sino que la devolvió con una carta, en
que anunciaba que no tomaría participio en el segundo concierto, so
pretexto de que encontrándose enfermo había determinado dedicar la
1 8 2 6. Cuaresma al descanso en su residencia de Tacubaya. Como la Santa
Marta, aunque le contestó con suprema finura y delicadeza lamen-
Entre las más notables funciones de nuestros teatros en los prime- tando la enfermedad y el no haber podido hacer mayor obsequio, no
ros meses de 1826, sólo citaré dos con carácter lírico, en uno y otro mostró pena alguna por la falta del concurso de Castillo, éste se alivió
Coliseo. El 6 de Enero el Provisional anunció la siguiente: " D a r á repentinamente y autorizó la publicación del aviso del Teatro Provi-
principio con la sinfonía Efigenia en Aulide; á continuación la canción sional á que me he referido.
El modo de enamorar á las mujeres; en seguida la pieza El desafio; se- En estas y otras pequeñeces pasáronse las semanas de Cuaresma y
guirá la canción de la Intriga y finalizará con el baile La flauta mágica." llegó el domingo de Pascua caído en 26 de Marzo, casi sin haberse
El 16 del mismo mes, en el Antiguo ó Principal, se dió el beneficio podido organizar los cuadros de artistas de comedia, ópera y baile que
de la orquesta, según este p r o g r a m a : "Obertura de la Italiana; co- deberían actuar en el Principal, parte por culpa de la empresa que
media en cuatro actos El opresor de su familia: el primer entreacto se quería organizar sus compañías de modo que le fuere casi imposible
cubrirá con un concierto á clave por el profesor ciudadano Elízaga, y á otra alguna hacerle competencia; parte por intrigas de los princi-
concluido se cantará una aria de la composición del Maestro Paisiello: pales actores de antiguo residentes en México, ofendidos con la em-
en el segundo un concierto de violines por los ciudadanos Francisco presa susodicha, porque ésta, buscando el mayor esplendor de nuestros
Delgado y Vicente Castro; en el tercero un obligado á flauta por los espectáculos y las mayores utilidades posibles, había hecho venir y
ciudadanos Matías é Ignacio Trujeque, finalizando con un bolero á contratado á un muy distinguido artista español que por credenciales
cuatro." de sus méritos traía muy satisfactorias cartas y recomendaciones de
Aquel año cayó el Domingo de Carnaval á 5 de Febrero, y el miér- D. Manuel Eduardo de Gorostiza, residente entonces en Europa, en
coles 8 dió principio la Cuaresma, y se suspendieron en ambos teatros la cual D. Mariano Michelena habíale nombrado á mediados de 1825
las representaciones ordinarias, es decir, las de abono y de comedias Cónsul General de México en los Países Bajos y ciudades anseá-
ó dramas, pues á las de canto y baile no se negaba á concurrir aquella ticas.
sociedad de extraños católicos. En prueba de ello, diré que á media- Dicho actor español habíase en 1818 presentado en el Teatro del
dos del mes la Empresa del Teatro Provisional hizo circular el siguiente Príncipe, procedente de Barcelona en la cual era apreciadísimo, co-
aviso: "Habiendo alcanzado del Gobernador del Distrito permiso para mo segundo del gran Isidoro Máiquez; puesto que, con general
dar en el Provisional diez funciones de ópera y bailes, los ciudadanos aplauso, conservó en el mismo teatro en 1820 y 21, en aquellas es-
Andrés del Castillo y Andrés Pautret ofrecen sus nuevas tareas á este pléndidas compañías en que brillaban, aparte del insigne Máiquez,
inteligente público, comenzando el jueves 23 del corriente Febrero los eminentes Concepción Rodríguez, Carlos Latorre, Antonio Guz-
" P r i m e r o : La pieza titulada La Tragedia de Buñuelo.—Segundo: con la gran ópera de Rossini El Barbero de Sevilla.—Palcos cincope-
El nuevo recreo de baile en cuatro partes: i? Introducción por los fi- sos; lunetas y galerías seis reales; cazuelas dos reales; entrada á palcos
gurantes y terceto por J u a n Antonio Medina y Reinaldo : 2? Solo por dos reales."
Antonio del Aguila, acompañado por los figurantes : 3'1 Boleras á seis Parece que Andrés del Castillo tomó esta determinación de trabajar
por Manuela García, Luisa Martínez, Dolores Cordero, Mariano Ro- en el Provisional, para vengarse de una herida que en su amor propio
dríguez, José Romero, Andrés P a u t r e t : 4? El gran solo de la araña, estimó haber recibido de la operista Sra. Santa Marta, que acababa
desempeñado con castañuelas por María Pautret, con su acompaña- de llegar de España contratada para el Coliseo Antiguo ó Teatro Prin-
miento de jaleo. Tercero : Concluirá con la pieza en un acto El Triun- cipal. Esa cantante, cuyos trabajos debían principiar en la próxima
fo del interés." Pascua, accedió á la invitación de la Empresa para que diese algunos
conciertos, el primero de los cuales se verificó en la noche del 19 de
Febrero. A tomar parte en él fué invitado Castillo, que aceptó can-
tando alguna aria y unos dúos con la Santa Marta, quien pasado el
concierto remitió á Castillo una gratificación de veinticinco pesos:
CAPITULO III pareció insignificante esta suma al orgulloso cantarín, tan acreditado en
México, y no sólo no la aceptó, sino que la devolvió con una carta, en
que anunciaba que no tomaría participio en el segundo concierto, so
pretexto de que encontrándose enfermo había determinado dedicar la
1 8 2 6. Cuaresma al descanso en su residencia de Tacubaya. Como la Santa
Marta, aunque le contestó con suprema finura y delicadeza lamen-
Entre las más notables funciones de nuestros teatros en los prime- tando la enfermedad y el no haber podido hacer mayor obsequio, no
ros meses de 1826, sólo citaré dos con carácter lírico, en uno y otro mostró pena alguna por la falta del concurso de Castillo, éste se alivió
Coliseo. El 6 de Enero el Provisional anunció la siguiente: " D a r á repentinamente y autorizó la publicación del aviso del Teatro Provi-
principio con la sinfonía Efigenia en Aulide; á continuación la canción sional á que me he referido.
El modo de enamorar á las mujeres; en seguida la pieza El desafio; se- En estas y otras pequeñeces pasáronse las semanas de Cuaresma y
guirá la canción de la Intriga y finalizará con el baile La flauta mágica." llegó el domingo de Pascua caído en 26 de Marzo, casi sin haberse
El 16 del mismo mes, en el Antiguo ó Principal, se dió el beneficio podido organizar los cuadros de artistas de comedia, ópera y baile que
de la orquesta, según este p r o g r a m a : "Obertura de la Italiana; co- deberían actuar en el Principal, parte por culpa de la empresa que
media en cuatro actos El opresor de su familia: el primer entreacto se quería organizar sus compañías de modo que le fuere casi imposible
cubrirá con un concierto á clave por el profesor ciudadano Elízaga, y á otra alguna hacerle competencia; parte por intrigas de los princi-
concluido se cantará una aria de la composición del Maestro Paisiello: pales actores de antiguo residentes en México, ofendidos con la em-
en el segundo un concierto de violines por los ciudadanos Francisco presa susodicha, porque ésta, buscando el mayor esplendor de nuestros
Delgado y Vicente Castro; en el tercero un obligado á flauta por los espectáculos y las mayores utilidades posibles, había hecho venir y
ciudadanos Matías é Ignacio Trujeque, finalizando con un bolero á contratado á un muy distinguido artista español que por credenciales
cuatro." de sus méritos traía muy satisfactorias cartas y recomendaciones de
Aquel año cayó el Domingo de Carnaval á 5 de Febrero, y el miér- D. Manuel Eduardo de Gorostiza, residente entonces en Europa, en
coles 8 dió principio la Cuaresma, y se suspendieron en ambos teatros la cual D. Mariano Michelena habíale nombrado á mediados de 1825
las representaciones ordinarias, es decir, las de abono y de comedias Cónsul General de México en los Países Bajos y ciudades anseá-
ó dramas, pues á las de canto y baile no se negaba á concurrir aquella ticas.
sociedad de extraños católicos. En prueba de ello, diré que á media- Dicho actor español habíase en 1818 presentado en el Teatro del
dos del mes la Empresa del Teatro Provisional hizo circular el siguiente Príncipe, procedente de Barcelona en la cual era apreciadísimo, co-
aviso: "Habiendo alcanzado del Gobernador del Distrito permiso para mo segundo del gran Isidoro Máiquez; puesto que, con general
dar en el Provisional diez funciones de ópera y bailes, los ciudadanos aplauso, conservó en el mismo teatro en 1820 y 21, en aquellas es-
Andrés del Castillo y Andrés Pautret ofrecen sus nuevas tareas á este pléndidas compañías en que brillaban, aparte del insigne Máiquez,
inteligente público, comenzando el jueves 23 del corriente Febrero los eminentes Concepción Rodríguez, Carlos Latorre, Antonio Guz-
mán, García Luna, Antera Baus, Manuela Molina y los después nues- lunetas en quince pesos y los de palco en sesenta y cinco por mes,
tros huéspedes Rosa Peluffo y Pedro Viñolas. de veinticuatro funciones, precios más altos que los usuales, un ar-
E r a ese ameritado actor Andrés Prieto, primer verdadero artista ticulista que firmaba A. B. C., salió en el periódico citado tronando
que se desprendió del teatro español para visitar la América, trayén- contra empresarios y artistas. " E l presupuesto que se nos ha dado
donos la escuela del gran Isidoro Máiquez, del reformador de la de- para justificar el alza, dice el escritor, es parecido á las cuentas que
clamación española hasta él enfática y ridicula, del amigo y discí- llaman del Gran Capitán ; yo he hecho las cuentas, y repartiendo la
pulo del celebérrimo Taima, á quien admiró y estudió en el mismo suma de los sueldos entre los individuos de la lista de la compañía,
París de 1799 á 1801. Con Andrés Prieto vino á México su hermano con inclusión de Prieto y la Santa Marta, resultan sobrantes para los
Manuel, actor muy secundario con quien no debe confundirse el ca- Sres. Sabatini, Valladares y los dos tenores que aun no llegan, vein-
marada de Máiquez y querido amigo de Gorostiza. tinueve mil pesos, cantidad muy excesiva, y ahora salen los asentis-
En 31 de Marzo del repetido 1826, la Empresa del Principal, justa- tas con que en aquel estado no están inclusos los trece mil pesos que
mente orgullosa de su adquisición, anunció que en la siguiente sema- gozan Prieto y la Santa Marta : véase si se ha procurado ó no abu-
na se presentarían Prieto y la Santa Marta; yen efecto, el martes 4 de sar de la credulidad de los espectadores y engañar al público.
Abril, día de San Isidoro, elegido al intento por el actor español en " Pasando á hablar de las mejoras tan decantadas por los asentis-
recuerdo de su amigo Máiquez, hizo Andrés Prieto su presentación tas en las compañías, me parece que para desmentirlas no es nece-
en México, con la tragedia Los Templarios. El sábado 8 hizo la su- sario más que decir que en la compañía de baile falta la segunda bai-
ya la Santa Marta con la ópera Tancredo. larina, cuyo hueco no llenan Isabel Rendón, Ana Pardo y Desideria
El público sensato y prudente acogió con entusiasmo indecible á Castañeda, que en la lista aparecen en su lugar : la primera fué bue-
Prieto; mas el vulgo de ignorancia recalcitrante se unió á los acto- na para los sonecitos del país, y en el día ni aun para eso ; las dos si-
res existentes en México, envidiosos y tacaños, para censurar en Prie- guientes 110 pasan de figurantas, aunque en el tal manifiesto las de-
to lo que no eran capaces de comprender los unos y de imitar los nominen bailarinas. Si el público podrá ó 110 negar el completo y
otros. Andrés Prieto no por esto se mortificó : exactamente lo mis- brillante estado de la Compañía dramática, que lo digan los especta-
mo habíale pasado al gran Máiquez á su presentación en Madrid, cu- dores que han asistido á las funciones dadas hasta el día, y que no
yo vulgo, también de recalcitrante ignorancia, encontró imperfecto hay una de que hayan salido contentos y sí muy mortificados y aun
todo lo que no fuese enfático y ridiculamente cadencioso; " n o ac- reventados por haber tenido que sufrir la dirección de Estremerà, los
cionar, no gesticular como un demente—dice un ilustre crítico es- gritos descompasados y contorsiones de Amador, la voz chirriosa,
pañol, — era ser frío; no declamar con énfasis, y casi cantando, era llorona y amujerada de Herrera y al demasiado ridículo de Fernán-
ser insulso: porque se rebeló contra estos defectos, mereció Mái- dez. Es cierto que esta Compañía tiene mucha más gente que el año
quez de sus contemporáneos los dictados de galán de invierno, agua pasado; pero, como se dijo en El Iris, tiene muchos zoquetes, y la me-
de nieve, voz de cántaro y otros no menos necios y despreciables. " jora que debe darle Prieto (que hasta ahora no nos consta), será úni-
Máiquez no sacrifico sus ideales al mal gusto del público y con ad- camente para los días en que él trabaje, 3' aun en esos, ¿quién le ayu-
mirable constancia le hizo frente hasta conseguir que su escuela dará? ¿podrá sólo un buen actor desempeñar una función para que sal-
prevaleciese, pues solía decir " q u e la constancia y el tiempo todo lo ga completa, aunque sea un Taima ó un Máiquez? Si Prieto es tan
vencen, y que los obstáculos puestos á una innovación en sus prin- bueno como se dice, ¿qué distancia habrá tan grande de él á cualquie-
cipios no impiden que sea por fin admitida con aplauso, si tiene por ra de los que deben hacer el segundo papel? Dicen los asentistas que
apoyo la razón, " y el tiempo acreditó esta verdad. Máiquez, á su re- recargar hoy la Compañía con la plaza del Sr. Diego María Garay,
greso de. París, alcanzó tantos triunfos cuantas representaciones dió sería multiplicar sin necesidad los quebrantos de la Empresa; es ne-
en el teatro de los Caños del Peral. cesario perdonarlos, porque 110 saben lo que se dicen; pero sí es atre-
vimiento, sólo disimulable por la ignorancia, que digan que no hay
Lo mismo sucedió en México á Andrés Prieto, pero hasta que lo- necesidad de este actor á un público que ha visto las ocho funciones
gró triunfar é imponerse con su talento, no le faltaron penas. Para que llevan dadas, de las que ni una sola siquiera ha sido regularmen-
ignominia propia, varios escritores, cuyos nombres 110 merecen ser te desempeñada."
sacados del olvido, atacaron y censuraron al distinguido artista;
pueden verse en el periódico El Sol, varios de los artículos esos. El descaro del articulista no llegó al atrevimiento de atacar á Prie-
So pretexto de que la Empresa había fijado los precios de abono á to en la interpretación de Los Templarios, en que dicen estaba ad-
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mirable, y aguardó que llegase otra función para decir lo que sigue:
"Anteanoche, por primera vez en esta temporada, asistí al Teatro en todos los papeles; la Munguía no lo hizo tan mal como esperá-
Principal, estimulado de lo mucho que había oído decir acerca de la bamos."
habilidad del antiguo actor Prieto. Se representó la comedia El sor- El crítico pasaba después á vapular á Prieto so pretexto de haber
do en la posada, y, á la verdad, diré á ustedes francamente que la fa- éste osado decir, en recomendación de la tragedia, que los actos gene-
ma que había corrido preconizando la habilidad de este actor, no co- rosos del héroe español al liberar á su patria ó iniciar su reconquis-
rrespondió con lo que ejecutó; yo esperaba ver una habilidad extraordi- ta, tenían analogía con los de los héroes insurgentes mexicanos. El
naria y nunca vista; pero, sea que el papel que representaba no tal articulista dióse por ofendido y mostró su estúpida instrucción y
prestase materia para lucir, ó sea que el Sr. Prieto trabajó mal, el ninguna caballerosidad en la siguiente diatriba: " L a tragedia, Sr.
resultado es que no agradó á una porción de gentes que estaban á mi Prieto, por más que usted nos dijo ser análoga á nuestros héroes, no
inmediación; yo esperaba de un actor tan afamado que hiciese guar- me lo parece: si se compara con la historia, poco ó nada tiene de se-
dar en la escena decoro y compostura; pero, cuál fué mi sorpresa al mejanza: en ésta sabemos que Pelayo, ese que nos presenta por hé-
ver lo contrario, y únicamente aconsejo al Sr. Prieto, si quiere con- roe y le quiere dar analogía con los nuestros, desapareció de la ba-
servar su buen nombre, n o olvide que el teatro es la escuela de las talla de Jerez; luego en Gijón fué grande amigo del moro, y según
buenas costumbres, y que debe guardarse el respeto, la buena moral se deduce, su confidente en sus amores con su hermana. Ese grande
y el decoro á un público tan respetable " amor patrio que demuestra Pelayo, no lo despertó el deseo de la li-
Por supuesto que en esas apasionadas censuras, además de las in- bertad, y sí solamente el odio y la ansia devengarse de un golpe que
trigas de Garay, entraban en grado máximo el odio y la mala volun- le dió el moro, jugando á las damas, con el tablero. Ya ve usted que
tad que en grado creciente iba desarrollándose contra los españoles. 110 tiene esto semejanza con nuestros héroes, porque éstos no han li-
En la sesión de la Cámara de Diputados, de 15 de Abril, el famoso bertado su patria por medios débiles ni por venganzas particulares,
Cañedo—y copio aquí el acta respectiva—"expuso que en todas las sino por amor á la libertad y por deseos de verla libre é independien-
naciones civilizadas se prohibe la entrada á los enemigos; que conti- te de la esclavitud en que la tenían esos godos que usted nos presen-
nuamente, á pretexto de emigración, están entrando muchos espa- ta llenos de honor y de virtudes. La representación de esta pieza y
ñoles, y éstos han conspirado en Guatemala, lo que se debe evitar, otras de su jaez, no me parecen políticas en las circunstancias pre-
prohibiéndoles la entrada mientras dure la guerra. Que, además, han sentes por infinitas razones que usted conoce y yo y todos conoce-
vuelto con unas intenciones perversas muchos de ios que se fueron, mos." Difícil parece que puedan superarse semejantes groserías y
desembarcando por varios puntos y bajo otros nombres, y siendo sa- falta de educación para con el huésped extranjero.
bido que la España se vale de estos individuos para sus ideas, no de- Llevó nuevos materiales á esas rencorosas críticas el poeta cubano
ben permitirse aquí. Que también es público y notorio que'hay un D. José María Heredia, que había llegado á México huyendo de los
rezago de expedicionarios y que éstos no pierden tiempo. Y, última- disgustos y peligros que en la Isla habíase buscado. Queriendo seña-
mente, que ya no es tiempo de andar con negligencia en esa materia, larse entre los malquerientes de los españoles, contra los que en esos
debiéndose asegurar la tranquilidad pública." días circulaba un insultante papel, titulado Odio eterno á los gachupi-
El influjo de esas predisposiciones de nacionalidad en ciertos ata- nes que intentan nuestra esclavitud, obra del profesor de primeras le-
ques al actor español, se reveló más claro con motivo de una repre- tras C. Ignacio Paz, hizo Heredia una apasionada crítica de algunos
sentación de la tragedia Pelayo. Un articulista de El Sol, refiriéndo- defectos de Prieto y censuró acremente la traducción de la comedia
se á los actores que no teniendo la tacha de españolismo tomaron El marido cortejante, obra del actor. Hasta allí, Andrés Prieto había
papel en la obra, decía: " L a tragedia me parece buena, aunque mal sufrido en silencio las críticas y las diatribas, porque ellas partían de
escritores mexicanos y porque no estimó prudente empeorar la situa-
ejecutada por Estremerà, pues no sabía su papel, y á la verdad, más
ción que preparándose venía á sus compatriotas. No le pareció deber
valía que estudiara lo que va á representar que no estarse metiendo
hacer lo mismo con Heredia, quien, por más que renegase del país
á diredor de piezas teatrales que el público detesta. E l Sr. Mel-
de su cuna, nacido había en territorio español, y el actor contestó
quíades lo hizo como regularmente acostumbra, y es, n o sabien-
duramente á la crítica, volviendo injuria por injuria.
do su papel. Los demás así, así. La Sra. Cecilia lo hizo bastante
bien, pues se conoce había estudiado: le suplico, y al Sr. Herrera lo Los periodistas mexicanos simpatizaban con Heredia é hicieron su-
propio, dejen de usar ambos el tono que se han tomado, de plañir ya la cuestión y diéronse vuelo en contra de Prieto, sin respetar la
varonil dignidad de su víctima, que así dábales muestra de poseer
Jt, H , T . — T . I . — 3 0
no sólo un gran talento como artista, sino un enérgico valor civil co-
mo caballero. El Café, El prisionero de guerra, Indulgencia para todos, El marido
cortejante, El desdén con el desdén, Los Templarios, El vergonzoso en
" E n resumidas cuentas, dijo el articulista de El Sol, procurando
Palacio, Don Diegmto, Eduardo en Escocia, El Abate LEpée, El es-
envenenar la polémica al tomar contra México lo que sólo se refería
condido y la Tapada, La Mojigata, El sutil tramposo, Graco, El Alcal-
á Heredia, nosotros los mexicanos fuimos unos majaderos porque no
de de Zalamea y otras muchas obras del teatro antiguo, del contem-
aplaudimos los afectos bien expresados en la tragedia del Pelayo, que
poráneo, del español y del francés, fueron el repertorio de esa Com-
arrancaron aplausos á los españoles y franceses, porque no nos puede
pañía, muy justamente favorecida por el público. Otelo ó el Moro de
ser placentero el patriotismo de los Godos, porque fué siempre servil y
Venecia, fué siempre un triunfo en cada repetición.
siempre el rey era antes que la patria, con quien confundían á esos mise-
rables enemigos de la especie humana; y finalmente, si allí no encontra- En 1? de Agosto púsose en escena la tragedia en cinco actos, Sehm,
ban defectos, aquí, hablando conforme á nuestro paladar, podemos obra del autor mexicano D. Luis Anteparán, que la dedicó á D. Ig-
encontrarlos; y aquel que sufra la crítica debe procurar corregirse ó nacio Esteva, entonces Ministro de Hacienda. Según los papeles de
defenderse con la moderación debida, con razones y no con sarcasmos, la época, la tragedia era perfectamente mala. El 14 de Octubre se pre-
porque ofender de un modo tan grosero á un escritor de tan buenas sentó con El sí de las niñas y en el papel de Doña Paquita, la actriz
cualidades como Heredia, es atacar el decoro de un público que apre- mexicana Guadalupe Munguía, de quien el revistero dijo: " n o cabe
cia demasiado sus virtudes y su talento.—Finalmente, Prieto es un expresión más fiel de inocencia, sencillez, candor y sensibilidad, que
actor sobresaliente, pero es hombre y puede y debe incurrir en algu- la demostrada por Guadalupe; ojalá adelante en la carrera que empieza
nos defectos, y que éstos se anoten y se le corrijan por Heredia ó por con tan buenas esperanzas, bajo la dirección de- su maestro Andrés
otro de los que pagamos nuestro dinero, es una cosa natural y una Prieto, quien estuvo verdaderamente magnífico en su papel."
excesiva soberbia no sufrirlo. Las autoridades, inclusas las supremas, El distinguido actor español vino por fin á reconciliarse con el poeta
sufren la crítica de un cualquiera ciudadano, y la aguantan, porque D. José María Heredia, quien le pagó con imparciales y continuados
para esto es la libertad de imprenta, y el Sr. Prieto ¿no ha de tener elogios las injustas y apasionadas críticas á que nos hemos referido.
calma para sufrir una ligera reconvención, después de tanto mundo El artista español agradeció el cambio de proceder de Heredia, po-
y de haber vivido tanto tiempo en países libres? Yo no dudo, por con- niendo en escena el 8 de Enero del siguiente año de 1827 la comedia
siguiente, que en adelante se eviten personalidades odiosas, que He- El Tiberio, original del escritor cubano. Parece que la obra agradó y
redia seguirá con su crítica teatral del mismo modo que siempre, evi- que Prieto hizo una insigne creación de su papel, arrebatando al audi-
tando la más leve sospecha de la parcialidad de que con razón ó sin torio y enloqueciendo de gratitud á Heredia.
ella lo acusa Prieto, y que éste continuará desempeñando sus pape- La sección coreográfica obtuvo á su vez numerosos éxitos con los
les con la maestría que acostumbra, oyendo con ánimo sereno las bailes Los hermanos enemigos, La niña mal guardada ó el novio despe-
críticas." dido, Zéfiro y Flora, El fanático por el baile, Los celos del Serrallo, Las
bodas de Camacho, Ni amor se libra de amor, La heroína americana y
A pesar de toda esa enemistad que en parte se moderó al ser con- otros. Los directores del cuerpo coreográfico eran Andrés Pautret y
tratados en fines de Abril Diego María Garay y Manuela García Gam- su esposa, que establecieron una academia en la que admitían cuantos
bormo, el talento y la buena escuela de Andrés Prieto lograron im- jóvenes y niños les fueron presentados. Entre éstos estuvo Soledad
ponerse y ser admirados, como lo demuestra el hecho de que aun el Cordero, llamada más tarde á ser insigne actriz mexicana: nacida en
mismo apasionado censor, cuyo artículo en El Sol acabo de copiar 1816 entró en la academia de Pautret en 1825, es decir, á los nueve
en parte, le llama actor sobresaliente y le recomienda continúe desem- años de edad, y lució mucho en el citado baile Zéfiro y Flora, estre-
peñando sus papeles con la maestría que acostumbra. Esos ataques fue- nado el 5 de Mayo de 1826, según leo en un artículo de El Sol. Tam-
ron pues, hijos más de la pasión política, que de la escasez de crite- bién tomó parte en el baile Ni amor se libra de amor, composición de
rio del censor. Pautret y muy elogiado á su estreno, verificado el 9 de Agosto, por su
Largo sería dar siquiera breve noticia de las buenas y numerosas bonita combinación y buena música; la Pautret estuvo muy bien en
funciones puestas en ese año en el Teatro Principal, ya tomando parte la parte de Psiquis, la Gamborino en Venus, Aguila en Mercurio, y la
en ellas Andrés Prieto, ya simplemente bajo su magistral dirección. Cordero, Martínez, Rodríguez, Reinaldi, la Munguía y Juan Medina
Eltutor celoso, El Viejo y la Nina, El sordo en la posada, Pelayo, Tar- en los pasos para los que fueron designados. Entonces, como en los
tufo o el hipócrita, La niña en casa, Oscar, La escuela de los maridos, tiempos siguientes, los artistas tan pronto representaban como baila-
ban, como tomaban parte en las óperas, con sólo que tuvieran media- principalmente por el Sr. Prieto en el carácter de un sabio, prudente
na voz. Acabamos de ver que la Gamborino bailó en Zéjiro y Flora, y sensible ministro del altar; la Sra. Munguía en el de la joven Ma-
lo que no impidió q u e desempeñase el papel de la protagonista en la tilde encantó á los espectadores por la energía, nobleza y propiedad
comedia Fray Lucas ó el Monjío deshecho, dada á su beneficio el 15 de con que manifestó los sentimientos de una víctima despechada y en-
Agosto. Dijimos también que los papeles públicos se la habían re- tregada al dolor, al mismo tiempo que respetuosa y afable con su tirano
comendado á Prieto, como una primera actriz, que, con el primer actor padre. Esta amable actriz se hace cada día más apreciable por su apli-
Garay, le era indispensable. cación, al paso que da con sus gracias un nuevo esplendor al teatro
A propósito de los progresos de la sección coreográfica y en elogio mexicano. El Sr. Salgado no dejó que apetecer en el papel del joven
de su maestro Andrés Pautret, El Sol de 6 de Mayo publicó un remi- Don Carlos."
tido en que se decía: ' 'Con singular deleite hemos visto ejecutar ano-
che el baile de Zéjiro y Flora. Esta graciosa invención no desmiente
el genio fecundo y la maestría de su compositor el Sr. Pautret. Los
episodios en que abunda están llenos de expresión y de gracia: la mú-
sica es encantadora, los bailables bien colocados y vistosos, con par- CAPITULO IV
ticularidad el cuarteto. Su desempeño en lo general ha sido el mejor,
y por él se ve la asiduidad y esmero con que el director hace sus en-
sayos. No contento con cumplir dignamente con los deberes de un
1827.
buen director, ha tomado el noble empeño de dejar una grata y eterna
memoria á los mexicanos, para cuando haya de salir de entre nosotros,
Tremendo fué aquel año de 1827. No discutiré si tuvo ó no razón
como lo prueban sus desvelos en la enseñanza gratuita de los niños
D. Carlos María Bustamante para asentar que los disgustos de esos
que tiene á su cargo: el joven Melquíades dentro de poco tiempo será
días provinieron de que D. Guadalupe Victoria no conocía la natu-
-un buen bailarín, lo mismo que la niña que lo acompañó en el padedú.
raleza del sistema según el cual estaba obligado á gobernar, ni la
Debemos estar m u y agradecidos al Sr. Pautret, y recompensar en parte
aplicación de las leyes complementarias, ni menos aún las garantías
sus afanes y trabajos, tributando continuos aplausos á su conocido mé-
que ofrece; pero sí haré observar, apoyándome en Bustamante, en
rito. Su esposa y Aguila, también son dignos de nuestro aprecio, por
Zavala y en otros historiadores, que el Gobierno de Victoria no fué
la parte que toman en las tareas de Pautret, y por su delicada ejecu-
ni tan fausto, ni tan próspero, ni tan benéfico á su patria como la
ción. En la Cordero y Rodríguez notamos cada día adelantos que son
vulgaridad ha querido presentarlo.
debidos á la eficacia del director. Sentimos que en algunos bailes no
se presente el Sr. Pautret, y deseamos nos vuelva á hacer el de El fa- En una oda, y no en verdad de las peores, que obtuvo mucha bo-
nático, en el que desempeña con la mayor perfección el protagonista." ga, increpábale así el anónimo poeta:

Por lo que al cuadro de ópera toca, dícese que fué grato á aquel pú-
" Podrás, fiero tirano,
blico, por entonces poco exigente. La Santa Marta ó sea Rita Gon-
llegar á domeñar la patria mía;
zález de Santa Marta, cantó con buen éxito Tancredo, La Italiana en
podrás, ardiendo en ambición, insano,
Argel, El tío y la tía, La travesura, El Marinerito, La peña negra, El
alzado en medio de la turba impía
Secreto, El Barbero de Sevilla, La Isabela, La novia impaciente, Adolfo
mil sacrificios exigir. Acaso
y Clara y La Urraca ladrona, en que lució mucho Andrés Castillo, y
los suspiros del pobre desvalido,
desempeñó la Santa Marta el papel de Pipo. Esta cantante fué tam-
el llanto d e la viuda, y los sollozos
bién una excelente profesora que abrió una muy buena academia en
del que fuera en tu nombre perseguido,
su casa habitación, en la calle de Betlemitas, núm. 1, y dió lecciones
de placer llenarán tu pecho duro.
particulares á las señoritas de las más distinguidas familias de la Capital.
" Desde el recinto lóbrego y oscuro
Pongo fin á las citas relativas á ese año, copiando el siguiente ar-
do celebras del vicio los misterios,
ticulejo del tantas veces nombrado Sol: "Anoche 13 de Noviembre se
do oprimes la verdad, do se levanta
representó el interesante drama nuevo, titulado: La Víctima del Claus-
el crimen colosal que ya presenta
tro, y el público quedó gustosísimo por lo bien desempeñado que estuvo,
el agudo puñal á la garganta
ban, como tomaban parte en las óperas, con sólo que tuvieran media- principalmente por el Sr. Prieto en el carácter de un sabio, prudente
na voz. Acabamos de ver que la Gamborino bailó en Zéjiro y Flora, y sensible ministro del altar; la Sra. Munguía en el de la joven Ma-
lo que no impidió q u e desempeñase el papel de la protagonista en la tilde encantó á los espectadores por la energía, nobleza y propiedad
comedia Fray Lucas ó el Monjío deshecho, dada á su beneficio el 15 de con que manifestó los sentimientos de una víctima despechada y en-
Agosto. Dijimos también que los papeles públicos se la habían re- tregada al dolor, al mismo tiempo que respetuosa y afable con su tirano
comendado á Prieto, como una primera actriz, que, con el primer actor padre. Esta amable actriz se hace cada día más apreciable por su apli-
Garay, le era indispensable. cación, al paso que da con sus gracias un nuevo esplendor al teatro
A propósito de los progresos de la sección coreográfica y en elogio mexicano. El Sr. Salgado no dejó que apetecer en el papel del joven
de su maestro Andrés Pautret, El Sol de 6 de Mayo publicó un remi- Don Carlos."
tido en que se decía: ' 'Con singular deleite hemos visto ejecutar ano-
che el baile de Zéjiro y Flora. Esta graciosa invención no desmiente
el genio fecundo y la maestría de su compositor el Sr. Pautret. Los
episodios en que abunda están llenos de expresión y de gracia: la mú-
sica es encantadora, los bailables bien colocados y vistosos, con par- CAPITULO IV
ticularidad el cuarteto. Su desempeño en lo general ha sido el mejor,
y por él se ve la asiduidad y esmero con que el director hace sus en-
sayos. No contento con cumplir dignamente con los deberes de un
1827.
buen director, ha tomado el noble empeño de dejar una grata y eterna
memoria á los mexicanos, para cuando haya de salir de entre nosotros,
Tremendo fué aquel año de 1827. No discutiré si tuvo ó no razón
como lo prueban sus desvelos en la enseñanza gratuita de los niños
D. Carlos María Bustamante para asentar que los disgustos de esos
que tiene á su cargo: el joven Melquíades dentro de poco tiempo será
días provinieron de que D. Guadalupe Victoria no conocía la natu-
-un buen bailarín, lo mismo que la niña que lo acompañó en el padedú.
raleza del sistema según el cual estaba obligado á gobernar, ni la
Debemos estar m u y agradecidos al Sr. Pautret, y recompensar en parte
aplicación de las leyes complementarias, ni menos aún las garantías
sus afanes y trabajos, tributando continuos aplausos á su conocido mé-
que ofrece; pero sí haré observar, apoyándome en Bustamante, en
rito. Su esposa y Aguila, también son dignos de nuestro aprecio, por
Zavala y en otros historiadores, que el Gobierno de Victoria no fué
la parte que toman en las tareas de Pautret, y por su delicada ejecu-
ni tan fausto, ni tan próspero, ni tan benéfico á su patria como la
ción. En la Cordero y Rodríguez notamos cada día adelantos que son
vulgaridad ha querido presentarlo.
debidos á la eficacia del director. Sentimos que en algunos bailes no
se presente el Sr. Pautret, y deseamos nos vuelva á hacer el de El fa- En una oda, y no en verdad de las peores, que obtuvo mucha bo-
nático, en el que desempeña con la mayor perfección el protagonista." ga, increpábale así el anónimo poeta:

Por lo que al cuadro de ópera toca, dícese que fué grato á aquel pú-
" Podrás, fiero tirano,
blico, por entonces poco exigente. La Santa Marta ó sea Rita Gon-
llegar á domeñar la patria mía;
zález de Santa Marta, cantó con buen éxito Tancredo, La Italiana en
podrás, ardiendo en ambición, insano,
Argel, El tío y la tía, La travesura, El Marinerito, La peña negra, El
alzado en medio de la turba impía
Secreto, El Barbero de Sevilla, La Isabela, La novia impaciente, Adolfo
mil sacrificios exigir. Acaso
y Clara y La Urraca ladrona, en que lució mucho Andrés Castillo, y
los suspiros del pobre desvalido,
desempeñó la Santa Marta el papel de Pipo. Esta cantante fué tam-
el llanto d e la viuda, y los sollozos
bién una excelente profesora que abrió una muy buena academia en
del que fuera en tu nombre perseguido,
su casa habitación, en la calle de Betlemitas, núm. 1, y dió lecciones
de placer llenarán tu pecho duro.
particulares á las señoritas de las más distinguidas familias de la Capital.
" Desde el recinto lóbrego y oscuro
Pongo fin á las citas relativas á ese año, copiando el siguiente ar-
do celebras del vicio los misterios,
ticulejo del tantas veces nombrado Sol: "Anoche 13 de Noviembre se
do oprimes la verdad, do se levanta
representó el interesante drama nuevo, titulado: La Víctima del Claus-
el crimen colosal que ya presenta
tro, y el público quedó gustosísimo por lo bien desempeñado que estuvo,
el agudo puñal á la garganta
O

V j
v -

del que á sus solas tu maldad lamenta, "Salvad la Libertad, y vuestros nombres
dispones d e la suerte y la fortuna, en tablas de diamantes esculpidos,
los brazos de los libres encadenas, recordarán constantes á los hombres
y apagando la luz de sus ingenios vuestros hechos, por siempre esclarecidos."
á dura servidumbre los condenas.
" S e aproxima tu tiempo. Ven y espera; Claras están en la anterior composición las alusiones á la masone-
el premio de tu afán que aqueste sea; ría de esos tiempos, tan funesta para México. " E l establecimiento
las provincias al hambre reducidas, de las sociedades yorquinas—dice D. Lorenzo de Zavala—fué un lla-
las ciudades y villas derrocadas, mamiento al pueblo para organizarse contra las clases privilegiadas.
y á tus miradas tristes y encendidas Las dos asociaciones de yorquinos y escoceses parecían dos ejércitos
las tribus de tus siervos prosternadas. lanzados el uno contra el otro en toda la extensión de la República.
" Pero n o esperes, no, fiero tirano, Un entusiasmo general se había apoderado de muchos hombres que
de todos merecer adoraciones, veían en el establecimiento de los yorquinos su felicidad; los preten-
que aun respiran los Brutos y los Casios dientes de empleos un fácil acceso á los que los distribuían; los libe-
y renacen los Decios y Catones. rales una columna fuerte de la libertad y de las instituciones; los
" ¡Ciudadanos! ¡valor! El monstruo indigno grandes empleados un sostén, un apoyo en la fuerza de la opinión;
educado en la escuela del ibero, los ricos y grandes propietarios un asilo en las turbulencias políticas.
violar intenta nuestro augusto fuero. En ese año, 1825, nació esa funesta clasificación de yorquinos y es-
El d e r r a m a tesoros, él prodiga coceses, bajo cuyos nombres han combatido en la República durante
á la traición funesta sus desvelos, cinco años las ambiciones disfrazadas de sus directores. La inmensa
él insulta sacrilego á los cielos, mayoría de la nación no tomaba parte en esas agitaciones en que los
desgarra el seno de la paz amiga, hombres que predicaban más patriotismo eran los que menos servi-
concita la venganza y las injurias, cios hacían á sus conciudadanos. Empleados y aspirantes á destinos
á nuestra vida insidia temerario públicos poblaban las logias yorquinas y escocesas; los generales que
y enciende las antorchas de las Furias ambicionaban mandos ó ascensos á grados superiores ó quizás la pre-
sidencia de la República; Senadores, Diputados que procuraban ser
" E l veneno, el puñal, las asechanzas,
Ministros ó reelectos en sus destinos; Ministros que esperaban con-
los odios y los celos, son los frutos
servarse en sus puestos por ese arbitrio: hé aquí los elementos de las
de su vil ambición; el caro hermano
asociaciones de que trato. Para encubrir estas miras se hacían mu-
al h e r m a n o aborrece: el asesino
tuas recriminaciones y se acusaban ante el público los unos á los
exige el precio de su infando oficio.
'' ¿Y dormidos yacéis en ocio blando? °tros " E n Setiembre de 1826, varios senadores que no podían ser
¡Oh! ¡padres de la Patria! El edificio tachados de poco liberales, pidieron se procurase la extinción de las
que los héroes del mundo levantaron logias, por lo que pudieran influir en la pérdida de la libertad y en
al alma libertad y á las virtudes, el desprecio de las instituciones; pero el gobierno encontró modo de
¿abrigará en su seno burlar á los proponentes, quienes no se atrevieron por entonces á in-
á un reptil débil de ignorancia lleno? sistir, mereciendo Ja burla de un periodista, que los puso en ridículo
" Ea gloria mexicana, los trofeos en un papel que, al uso de la época, tituló: " Tronó en el Senado un
con tanta sangre y vidas adquiridos, cohete y salió un domingo siete."
nuestras leyes eternas é inmutables Según el atrabiliario pero valiente periodista ó folletista de esa épo-
¿habránse de perder en sólo un día ca D. Francisco Ibar, el modo con que el gobierno burló el clamor de
sucediendo la negra tiranía? quienes pedían la supresión de las logias, fué el autorizarlas para que
" ¡Oh! ¡padres de la Patria! en vuestras manos tomasen la apariencia de casas de juego, pretextando que el tesoro pú-
la espada vengadora resplandece blico estaba necesitado de recursos, y podía sacarlos de la reglamen-
y el rayo, destructor de los tiranos. tación de un vicio que no era fácil extirpar, y convenía hacer menos
peligroso y ruinoso reglamentándolo y obligándolo á no ocultarse y General,verificada el día primero de Enero: " M á s de la mitad de sus
miembros—dice Zavala—lo eran también de la sociedad de yorqui-
esconderse: " Qué vergüenza!— exclama Ibar,—qué vergüenza pa-
nos y muy pocos solamente de las logias escocesas; en los Estados
ra la República el que se vean grandes rotulones, en los que se leen
las Legislaturas estaban también compuestas de yorquinos. Entramos
con indignación estos lemas de la corrupción: Juego de monte con su-
pues, en un período en que las facciones, abandonando los trámites
perior permiso / " A s i pues, "el antemural con que se parapetan
constitucionales, se lanzaron á la arena para disputarse la presa en
esos facciosos, es ese vuelo dado á los juegos, autorizándolos con su
el campo de batalla, buscando en las bayonetas el apoyo que no en-
consentimiento, con tal que paguen. De aquí es, que al sorprender
contraban en la justicia de la causa y oponiendo la fuerza brutal al
una reunión de masones inmorales sacan sus barajas, y con desca-
imperio augusto de las leyes." E11 el último tercio del siguiente año
ro exponen que es una reunión de amigos que se están divirtiendo. habrían de verificarse las elécciones de sucesor de Victoria, y antes
Tal es el descargo con que inutilizan la prueba auténtica de cogerlos de que ellas llegasen, importaba á los yorquinos haber nulificado á los
reunidos, y con el que trabajan en la ruina de la patria, á la sombra escoceses, que con grande actividad venían reorganizándose, y á su
del mismo gobierno. Y después de esto ¿aun permitirán nuestros ac- vez á los escoceses importaba haber debilitado á los yorquinos para
tuales jefes que se prolongue esa licencia de jugar públicamente, con que no hiciesen jugar en las elecciones la influencia gubernativa de
dafio de la tranquilidad pública y con el escándalo universal? Dero- que disfrutaban.
gúese al instante esa ley inicua; recójanse esas patentes vergonzosas,
Uno y otro partido son igualmente criminales ante la historia, pues
y entonces se podrá agarrar á los facciosos: quitando el pretexto, ellos
como con exactitud dice el autor citado, los escoceses se dirigían á la
se guardarán de formar reuniones, y si las formaren y se les sorpren-
tiranía militar y los yorquinos al despotismo de las masas, tanto más
diere, cuélgueseles al momento de los balcones de la casa misma en
insufrible cuanto mayor es la ignorancia que las domina. La astucia
que se pillen: de lo contrario, ellos se burlarán con insolencia de las
y los mayores elementos estaban de parte de los escoceses, como que
providencias más enérgicas . . . . Las reuniones esas se forman en la
en ellos vinculaban todos los intereses que produjeron con el Plan de
mitad del día y en los parajes más públicos de la ciudad; se forman
Iguala la independencia; pero ese mismo hecho arrojaba sobre ellos la
en San Jacinto en la posesión que ba adquirido Isidro Rafael Gon- tacha de borbonistas por sus alianzas con los españoles que aun que-
dra: en la calle de Cadena, en la casa de Rejón; en la casa de Mone- daban en el país, intereses que se suponían contrarios á la indepen-
da, en la habitación de Rionda, en el Colegio de San Ildefonso, en dencia no reconocida por España, que era sabido trabaj aba con la Santa
los entresuelos llamados de la Pinacata, esquina de la calle Real; en Alianza para la reconquista de sus antiguas colonias. Los yorquinos,
el cuartel de cívicos, á la sombra de la guardia, de la calle del Hos- que iban á su fin sin pararse á discutir los medios, encontraron en esta
picio: en la calle de Ortega, en la casa de Arce, quien al ser descu- última circunstancia el arma decisiva de su triunfo, y lanzando la acu-
bierto tuvo el descaro de decir con insolencia ¿ya no se pueden reu- sación de traidores á los escoceses, revivieron los no extinguidos odios
nir los amigos?; pero si era una reunión de amigos ¿por qué se despa- insurgentes y provocaron á las masas ignorantes y burdas al combate,
chan fuera de la casa á los criados, mientras que la forman? ¿por qué alentándolas con la promesa del despojo de gachupines, disfrazado de
dicen que era un almuerzo, cuando no había que almorzar?" patriotismo y de exigencia de salud pública.
A poner en peor estado las cosas vino el periódico diario El Correo
A cada instante, á cualquier movimiento de un buque español que
de la Federación, del cual D. Lorenzo de Zavala, que fué uno de sus
entraba ó salía de la Habana, se anunciaba como próxima é inminente
editores, dice lo que sigue: "Estaba escrito en el sentido del partido
la invasión de las costas de México, y el Gobierno, necesitado de re-
yorquino, y de consiguiente contaminado de las aficiones de secta: en
cursos, explotaba estos rumores, ya para obtener facultades discrecio-
estos diarios se depositaban los odios, los rencores, las pasiones de
nales con que anonadar á sus enemigos, haciéndolos sospechosos de
los partidos, y, lo que es peor, de las personas sin atención á lo traición, ya para hacerse de dinero y obtener, como obtuvo del Senado,
que se debe á la verdad, á la decencia pública y á la conciencia. A la facultad de disponer de dos millones de pesos para fortificar la costa
falta de datos se fingían hechos, se fraguaban calumnias . . . . Así es de Veracruz.
que los periódicos redactados por semejantes gentes, corrompen el
Hasta allí ningún fundamento evidente habían reconocido estas
gusto del pueblo, hacen odiosa, ó al menos desagradable, la libertad
alarmas; pero á partir del 19 de Enero de 1827, las supuestas traiciones
de imprenta, extravían el gusto del público y alimentan los odios de
borbonistas presentáronse como innegables, con motivo de una cons-
partido." piración iniciada por un fraile de pésimos antecedentes, llamado Joa-
Principió el año de 1827 con la instalación del segundo Congreso E. H. T.—T. I.—31
quín de Arenas, t a n imbécil ó loco, que lo mejor que se le ocurrió para
atentar contra la independencia de México, fué el proponérselo á las Gobierno no se atrevió á hacer pública la causa íntegra, quizás para
mismas autoridades mexicanas interesadas en impedirlo. E l partido que no se echasen de ver torpes intrigas, y se limitó á dar de ellas un
escocés, de quien se supuso ser hechura ó agente el tal Padre Arenas, extracto que formó, de orden superior, Bocanegra. N o faltan quienes
protextó contra ello, proclamando que la ponderada conspiración era den como cosa cierta que todo lo sucedido en el asunto del Padre Are-
una farsa de los yorquinos, sin base ni fundamento de n i n g u n a especie; nas fué efectivamente una intriga yorquina, mala y torpemente trama-
pero sus negativas se achacaron á cobarde empeño de negar su com- da, para salir de la cual, fué necesario sacrificar al imbécil y desventura-
plicidad en un plan abortado, y los yorquinos lograron su propósito de do Arenas y á otros infelices. Y se apoyan para creerlo así en lo confuso
presentar como traidores á los escoceses y como un peligro para la in- de los extractos y documentos publicados, y en la defensa que del prin-
dependencia á los españoles, identificando con éstos á aquellos ante cipal reo hizo el teniente del primer batallón permanente D. Manuel
el odio de las masas, q u e eran su fuerza principal. Andonegui, no por amor del prójimo ni por su gusto, pues claramente
manifestó que le dolía el que siendo mexicano no estuviese en su ar-
Entonces y después se dijo, y tuvo Ibar el valor de imprimirlo en
bitrio eximirse de defender á un español. E l teniente Andonegui no
su periódico La Regeneración, que todo fué obra " d e desvergonzadas
pudo, á pesar de la repugnancia con que aceptó aquel cargo de oficio,
intrigas puestas e n j u e g o para apoderarse de los empleos, quitándolos
cerrar sus ojos á la verdad, y vino á demostrar ' 'que no h a y en la causa
á los que los tenían. E n el centro de las tinieblas, en la gran logia de
toda un dato positivo que acredite que el plan era restablecer el go-
York, que había sustituido á la del Aguila Negra, gracias á la maldad bierno del tirano de España, y sí sólo presunciones que no salen de la
del inicuo Poinsett, se tramó la conspiración más sangrienta y tam- esfera de presunciones: que falta la existencia del cuerpo del delito,
bién la más falsa que los siglos han visto, para perder á aquellos que porque por mucho que se trabaje no se encontrará el plan que se ase-
podían hacer sombra á los planes de los aspirantes. Para ello se pro- gura presentó al Comandante General, y sí sólo algunas copias, nin-
curó exaltar el fanatismo del fraile Arenas, y pronto se le condujo al guna de las cuales tenía el Padre Arenas cuando se le aprehendió y
matadero para que nada pudiese descubrir. Si se registraran por per- cuando se hizo un cateo formal en su celda, debiéndose tener enten-
sonas imparciales las tales causas del fraile Arenas y de los demás que dido que no se le dió lugar para prepararse á una ocultación. Esas
fueron al patíbulo,se hallaría que la intriga y el odio fué la única causa copias y otros papeles, aparecieron preso ya el Padre Arenas y por con-
que les proporcionó la muerte. Esta verdad es inconcusa, y es de notar ducto miserable y sospechoso. Su delito, que el defensor no niega, se
que cuando todos los mexicanos esperaban ver comprendidos en el aten- reduce no á volvernos al dominio de España, pues no hay dato positivo
tado del fraile Arenas á la mitad de la República, según la exageración que lo acredite, sino á haber querido reducir al Gral. D. Ignacio Mora
de los inventores de la conspiración, vimos que sólo cuatro individuos para que se adhiriese á un plan, que tampoco corre en la causa, cuyo
fueron el blanco de su rencor y rabias. No habiendo surtido el efecto objeto principal era conservar la religión en los propios términos en
deseado este plan (porque los escoceses negaron la supuesta complici- que se hallaba en el año de 1808: así, no se trató más que de cosas de
dad con A r e n a s ) , se echó mano de otra trampa más inaudita; la de aspecto religioso, y no hay mérito para aplicarle la pena de muerte. E n
suponer despachos de F e r n a n d o V I I para los hombres más amantes de todo ello sólo se ve que Arenas tiene la cabeza trastornada por el fu-
su país, cuyos despachos se habían de interceptar en los correos, y ror del fanatismo, y así dió el paso atrevido de dirigirse al Sr. Mora
de esta manera hacerlos criminales, y por consecuencia castigarlos con sin llevar amistad con él, sin contar con su opinión, y sólo frenética-
la pena de muerte como traidores á la patria. A pesar de que esta ma- mente cegado por demente fanatismo religioso pudo entregarse á sus
niobra se puso en planta, fué á tiempo denunciada al público por me- manos para que procurara su castigo."
dio de un impreso titulado Los malvados se descubren cuando menos se
Pero el golpe ya estaba dado; ni se podía ni convenía retroceder, y
imagina, y sus autores abandonaron la empresa casi al e j e c u t a r l a . "
bueno ó malo se tenía el pretexto para aniquilar á los escoceses y á los
D. José María Bocanegra que en su calidad de abogado tuvo que
españoles, á quienes en ese tiempo se les llamaba coyotes, y contra los
hacer las causas formadas al Padre Arenas y demás reos, no logró sin-
cuales se cantaba una copla que decía:
cerarse de la fea nota de haber intervenido en un asesinato jurídico,
según indicó Zavala en su Ensayo Histórico. De la débil defensa q u e
de sus actos y contra lo dicho por Zavala, intentó Bocanegra, resulta Nula es nuestra independencia,
falsa nuestra libertad,
que para dictar las sentencias sólo se procedió por indicios, sin haber
mientras tengan los coyotes
obtenido plena prueba de la conspiración, y resulta también que el
el palo, el mando y el p a n .
Preciso era aprovechar las circunstancias y para convencer á los Quien porfía mucho, alcanza; El poeta calculista, y otras primicias de
yorquinos de esa precisión, empleáronse todos los medios hasta el de su genio original y fecundo.
aplicarles una fabulilla que con deleite reprodujeron todos los papeles, El nombre hasta allí adquirido y su noble ambición de gloria, le
y decía así: llevaron á París, en cuyo teatro Italiano hizo su primera representa-
ción el 11 de Febrero de 1808, con la Griselda de Paér, alcanzando
' "Todos los días barría un extraordinario triunfo. Allí se hizo admirar y querer por la fogo-
mi criada el aposento, sidad con que animaba la escena, contrastando con la frialdad y fal-
quitando como de intento t a ' d e mímica de los cantantes italianos. E n 1811 cantó en Turín,
cuanto una araña tejía. Nápoles y Roma, entusiasmando á aquellos entendidos públicos: allí
"Maldita tela! decía; recibió lecciones de Anzani, uno de los mejores tenores italianos,
¡que no he de poder con ella! quien le enseñó vocalización y le infundió las tradiciones de los gran-
Mas yo la dije:—Doncella, des artistas del siglo X V I I I , que García trasmitió más tarde á sus
¡cuánto tu celo te engaña! discípulos.
como 110 mates la araña E n 1812 hizo cantar en el San Carlos de Nápoles su ópera El Ca-
110 acabará tu querella." lifa de Bagdad, con gran éxito, y allí conoció á Rossini que escribió
para él la Elisabetta. " E l compositor, exclama un biógrafo del artis-
Poniendo manos á la obra, el 14 de Mayo se promulgó una ley dic- ta español, acaba de encontrar á su más digno intérprete, y nadie ha
tada el 10, ordenando la inmediata separación de los españoles de los llegado á personificar á Almaviva con mayores gracias y finezas."
empleos públicos que venían disfrutando; en 2 de Junio y en el camino En 1816 volvió al Italiano de París, haciendo la delicia de sus admi-
de Chapultepec que conduce á Tacubaya, al pie del puente que aun radores en el Paolino del Matrimonio Secreto, en Cosifan tutte de Mo-
existe allí, fué fusilado por la espalda el Padre dieguino Fr. Joaquín zart, y en la Italiana en Argel de Rossini. La Empresaria, Mad. Ca-
Arenas. Animados con estos ejemplos de rigor, en Oaxaca y en el Sur talani, sintió celosa envidia del aprecio que García alcanzaba, y el
numerosos cabecillas volviéronse á alzar en armas, renovando sus exi- gran artista dejó su compañía y pasó en 1817 á Londres, donde, co-
gencias de expulsión de españoles, que allí y aquí y en todas partes mo en todas partes, obtuvo inmarcesibles lauros.
se vieron injuriados, maltratados y perseguidos con un encono y Una Su cariño á París le hizo regresar bien pronto á la gran Capital
crueldad de que es difícil dar idea en un libro como éste, que ni puede del arte, y en ella, de 1819 á 1824, continuó cosechando laureles en
ni debe entrar en más pormenores. Otelo, en Almaviva y en Don Juan, los tres florones de su corona ar-
Así las cosas, el Coronel D. Luis Castrejón, dueño de una regular tística, "pues que, habla su biógrafo francés, esos personajes jamás
fortuna y como pocos entusiasta por los espectáculos teatrales, tuvo han encontrado más potente y sublime intérprete y
la para él pésima ocurrencia de hacerse empresario de nuestros Coli- La fama de Manuel García, salvando los mares llegó á la Améri-
seos, para traer á ellos la ópera italiana, que en los Estados Unidos ca; los Estados Unidos del Norte quisieron á su vez admirar á aquel
venía haciendo las delicias de nuestros vecinos, cantada por los sin- grandioso talento, y García partió para ese país al frente de una ex-
gulares artistas de que era jefe y alma el gran tenor, grande entre los celente Compañía en la que figuraban el tenor Crivelli, Angrisani,
más grandes, y célebre entre los más célebres, D. Manuel García, na- el bajo Rosihc, la Barbieri, su misma esposa y sus hijos María y Ma-
cido en Sevilla en 22 de Enero de 1775, muerto en París el 2 de Junio nuel. Los resultados, así artístico como pecuniario de su estancia en
de 1832. Nueva York, fueron tan buenos que García resolvió fijar allí su re-
sidencia: pero los rigores de aquel clima extremoso quebrantaron á
Este eminentísimo artista había empezado su carrera musical á los
tal punto su salud, que mudando de parecer y ya suficientemente ri-
seis años de edad, como niño de coro en la catedral de Sevilla. Las
co, resolvió regresar á su querido París. Contaba entonces cincuenta
excepcionales condiciones de su voz hicieron que fuese solicitado para
y dos años de edad y treinta y cinco de brillante carrera.
algo de mayor lucimiento que el canto eclesiástico, y á los diez y siete
años se estrenó con extraordinario éxito en el teatro de Cádiz. No lo Sobre sus méritos, se expresa así el Diccionario de Larouse: "Pue-
alcanzó menor en Madrid, en el de los Caños del Peral, con la inimi- de decirse que García no ha tenido rival ni como cantante ni como
table Briones y el donosísimo Cristiani, y allí también se reveló com- actor: esta sorprendente reunión de cualidades escénicas, rara vez se
positor con sus operetas El reloj de madera, No hay guarda para el amor, ha encontrado en tan superiores proporciones como en el tenor sevi-
llano. Ya era un día el elegante Almaviva, gracioso y correcto, ya Pasada la Cuaresma y venida la Pascua, en que quedaron, con dis-
otro el admirablemente satánico Don Juan, ya, en fin, el salvaje Ote- gusto del público, fuera del cuadro la Munguía, Fernández, Estre-
lo rugiendo como un león y sacudiendo su negra cabellera en terrible merà, Garay, Amador y Herrera, suplidos con Palomera y con Arias,
acceso de celos. Qui pourra jamais nous rendre García?"—exclama y sin ajuste Rita González de Santa Marta, dió principio la nueva
el biógrafo. temporada, siguiendo siempre al frente de la Compañía Andrés Prie-
Las obras de García cantadas y aplaudidas en todos los teatros de to. Sin embargo, sus tareas casi se redujeron á las de simple Direc-
Europa, fueron, aparte de las ya citadas, La Florinda, El Califa de tor, pues como acababa de pasar lo del Padre Arenas, el público ba-
Bagdad, El Príncipe de Ocasión, é II Fazzoletto, óperas cómicas; La j o andaba exaltado contra los españoles; Prieto, que lo era y hacía
Donzella di Raab, La Muerte del Tas so, Flores tán ó el Consejo de los gala de serlo, fué molestado más de una vez hallándose en escena,
Diez, y El Abufar. Umversalmente conocidas eran su Endimión, can- por los que con el nombre de cócoras formaban y forman aún un círculo
tata á tres voces: sus excelentes misas, sus arias, sus oberturas, sus de espectadores groseros, ordinarios y, las más de las veces, indecentes.
sinfonías y las innumerables composiciones del género español, que Muchas veces, cuando su talento se imponía obligando al público
circulaban en todos los conciertos y academias. Pero lo que más con- á estallar en formidable salva de aplausos, los cócoras le gritaban:
tribuyó á perpetuar su nombre, fué su incomparable Método de canto ¡Bravo por el gachupín! ¡Bravo por el coyote! denigrantes apodos muy
ó Arte de aprender á cantar, obra enteramente original y única, en en uso entonces, y nadie ignora cuán doloroso es verse insultado allí
que no sólo se hallan filosóficamente combinados todos los principios donde uno está de visita ó se hospeda, y sin posible revancha por la
que puede necesitar el que desee cantar bien, sino que se dan reglas mayoría numérica de los cobardes ofensores.
seguras para evitar los defectos que se oponen al fácil manejo de la Cuando estuvo seguro de que García habíase puesto en camino
voz y para adquirir la flexibilidad que requiere el canto más difícil, para México, el Coronel Castrejón procedió á recomponer y adornar
sea cual fuere la calidad de la voz del que aprende. García da en esos con relativo lujo el Teatro Principal, empleando en ello una fuerte
elementos consejos útiles para adquirir la expresión musical, perfec- suma, y desde luego sufrió un primer tropiezo al solicitar del Ayun-
ción rara que hasta allí había sido considerada más bien como un don tamiento la licencia para el nuevo espectáculo, pues la Corporación
de la naturaleza que como una cualidad que el arte puede trasmitir. Municipal encontró excesivos los precios señalados á las localidades
Con tales principios fué como formó á sus eminentes discípulos Nou- por la Empresa, y dispuso se rebajasen según tuvo por conveniente.
rrit, Meric Ealande, Rimbaut, Favelli, Geraldi y, sobre todo, á sus Reclamó Castrejón con energía y aun llegó á anunciar que en caso
hijos Manuel, María ó la Malibrán, y Paulina ó la Viardot. de no permitirle cobrar dos pesos en patio, ocho en los palcos, veinte
" M a n u e l García—añade otro de sus biógrafos—ejecuta con igual reales en anfiteatro y cinco por entrada general, desistiría de dar
principio á las funciones. En apoyo de su solicitud adujo la cuantía
facilidad las obras maestras de los más eminentes compositores: la
de sus sacrificios en pro del esplendor y fausto de nuestros teatros,
flexibilidad de su talento como actor es una de sus prendas más dig-
lo nulo de sus utilidades por efecto de la situación angustiosa y alar-
nas de admiración: en Otelo parece inspirado por la musa tenebrosa
mante que atravesaba el país, ponderó los méritos mil de Manuel
y sangrienta de Shakespeare; en Almaviva lo está, en efecto, por los
García y trató de demostrar la importancia civilizadora del nuevo es-
recuerdos de su patria y por toda la gracia y soltura de Andalucía."
pectáculo.
Tal era el artista, que, después de muchas dilaciones y á costa de
mil esfuerzos, hizo D. Luis Castrejón venir á México, que sólo co- El Regidor D. Matías Fernández, á nombre de la mayoría de sus
nocía medianías muy apreciables, pero medianías al fin. compañeros, impugnó los fundamentos de la solicitud del empresario
El 22 de Enero del año de 1827, año de cuyos espectáculos nos y el dictamen de la Comisión de Teatros y petición de los síndicos fa-
ocupamos, nuestro Andrés del Castillo había cantado por primera vez vorables á aquél, sosteniendo que ni al Ayuntamiento le importaban
en México, en castellano, por supuesto, y en el Teatro Provisional un ardite las pérdidas ó ganancias de un empresario, ni á sus miem-
ó de los Gallos, el Otelo de Rossini, repetido con mucho éxito el 30 bros les constaba si el mérito del artista era real ó exagerado, ni podía
permitir la Corporación Municipal, como representante del pueblo,
del mismo y el 4 y el 13 de Febrero, en cuyo mes el insigne Andrés
que á las clases ínfimas se les impidiese civilizarse é instruirse, estor-
Prieto y su Compañía dieron El Gran Conde de Saldaña, La Muerte
bándole con lo exagerado de los precios, la asistencia á la ópera. Tam-
de Agamenón, El Seductor moralista, El amigo íntimo, y otras, con las
bién creyó oportuno que se hiciese lo posible para estorbar que los extran-
óperas Otelo y Tancredo, alternando con sus espectáculos las expe-
jeros se llevasen el dinero que tan necesario era en México, aunque esos
riencias y suertes del físico y aeronauta Mr. Perinor.
249

extranjeros fuesen grandes artistas, tasando á cuotas altas su talento. ingerencia en los teatros, hasta el extremo de arreglar por sí los precios
Al fin, la mayoría armada en autoridad, triunfó del empresario y le de entrada, cuando no se maneja del mismo modo respecto á la mul-
ordenó que cobrase los sillones de anfiteatro á dos pesos, el asiento en titud de objetos de su inspección, y de que el pueblo tiene necesidad
patio á doce reales, los palcos á siete pesos y la entrada á las cazuelas más forzosa que de espectáculos de puro lujo. Si nuestro ilustre Ayun-
ó galería, á cuatro reales. tamiento se cree autorizado para estos procedimientos con respecto á
" E s menester, escribía El Sol, reclamar francamente la conducta nuestros teatros, ¿por qué no ejerce esas facultades en señalar el valor
del Ayuntamiento de México, que llevado de su excesivo celo por el del agua, pan, carne y otros comestibles? ¿Por qué asimismo no obliga
bien público, ha traspasado nuestras instituciones y los principios, á los mercaderes á vender sus efectos por precios cómodos á juicio de
obligando á los empresarios á dar sus famosos espectáculos por los los Regidores? De este modo lograría el Ayuntamiento en todas oca-
siones el fin que hace valer en cuanto á teatros. Porque si redujese á
precios que fijó la misma Municipalidad, bajando los que había desig-
quince ó veinte pesos el vestido de cincuenta, sería más extensa la
nado la empresa. Nosotros, que no tenemos ni el más ligero participio
órbita de las personas que disfrutasen este lujo. Pero para nada de
en ella y vemos, por consiguiente, el negocio con despreocupación,
esto se halla autorizado el Ayuntamiento, y 110 se alcanza de dónde
consideramos el ataque formidable que el Ayuntamiento ha dado á la
emana tan desmedida autorización, por la que se sobrepone á las sa-
libertad y á la propiedad. Todos los días oímos recomendar estas pre-
gradas consideraciones expuestas; y ya que la ha ejercido, el Gobierno
ciosas garantías; la Constitución las consagra y son los primeros prin-
contendrá abuso tan escandaloso.
cipios de una República: cada uno es libre para hablar, para escribir
y para obrar, como no ofenda la moral y las leyes; cada uno tiene en " N o se justifique el Ayuntamiento con haber creído que es suma-
su propiedad un derecho absoluto por el que dispone de ella igual- mente alto el valor de asientos propuesto por los empresarios, porque
mente á su arbitrio, sin que ningún particular ni autoridad alguna, además de que todo hombre puede imponer á sus mercaderías los pre-
por elevada que sea, pueda perturbarlo en el uso de ese derecho: este cios que quisiere, so pena de atacarse la libertad y propiedad por el
es el sistema en que vivimos, éste el de un país libre, éste el de una funcionario que impida ese arbitrio, se ha de atender á que nada es
República. caro ni barato sino respectivamente. Eos precios que ha habido en el
teatro antes de ahora pueden llamarse subidos, porque las más de las
"¿Cómo, pues, el Ayuntamiento se ha entrometido á que los em-
funciones eran malas, y el público estaba disgustado como lo mani-
presarios de la grande ópera hayan de presentar sus diversiones por
festó muchas veces; los que habían arreglado ahora los empresarios
cierto precio contra su voluntad, quitándoles por la fuerza de la au-
pueden decirse regulares, supuesto que se presenta un espectáculo que
toridad el arbitrio en que se hallan de arreglarlos conforme á sus in-
por todos sus aspectos es digno del gusto de los mexicanos, y que en
tereses? Si las Constituciones no son los almanaques para sólo el año
las capitales y principales ciudades de otros países se paga bien; por-
en que se sancionan, si las leyes no han de ser de resorte, y si hemos
que para su establecimiento se escogen las mejores habilidades en los
de ser escrupulosos para salvar los principios, el Ayuntamiento ha
ramos que lo componen, y todo se ejecuta con ostentación y elegancia.
cometido una violencia que no podía pasar en silencio.
" E n buena hora que sus deseos se dirijan á que se extienda el círculo " E n la Grande Opera Francesa de París el asiento en balcón cuesta
del pueblo que haya de disfrutar de las distracciones públicas; pero diez francos, y en la Italiana siete francos cincuenta céntimos; la di-
si estos deseos se han de cumplir á trueque de tropelías anticonstitu- ferencia que hay entre esos dos pesos y doce reales y los precios se-
ñalados por los empresarios para iguales lugares en nuestra Gran Opera
cionales, el pueblo que agradece á los señores capitulares su empeño,
Italiana, la producen mil causas, y entre otras el dinero con que contri-
les dispensa de los medios de lograrlo á tanta costa. El Ayuntamiento,
buyen los gobiernos para sostener esos teatros, la mucha mayor ca-
para conseguirlo legalmente, puede reponer á los empresarios el déficit
pacidad que ofrecen los edificios, la comodidad de la obra de mano para
que les resulte por seguir la tarifa capitular.
todo lo necesario de adornos, instrumentos y demás.
" E n Europa los gobiernos gastan sumas cuantiosas para conservar
los teatros principales: imitando el Ayuntamiento de México tales ' '¿Tendrán los mismos precios en México que en Francia ó Ingla-
terra los pianos, arpas é instrumentos precisos para la orquesta, los
ejemplos, se convendría fácilmente con los asentistas en la baja de los
candiles para la iluminación, las lanas, sedas y lienzos para los ves-
precios. Así quedaría el público complacido de todos modos, y reci-
tidos, las pinturas y adornos para decoraciones y otra infinidad de ar-
biría con mayor aprecio la caravana de Su Excelentísima Municipa-
tículos indispensables para la empresa? E s imposible. Con todo eso,
lidad, pues que 110 se la haría con sombrero ajeno.
en la Gran Opera de Eondres, cuyo teatro es capaz para más de seis
" N o sabemos por qué el Ayuntamiento ha tomado esa particular
R. H. T. —T. I.—32
25°

mil personas, en un país tan sumamente barato para los objetos ex-
presados, cuesta un asiento igual á los referidos veintiún reales." ¿ ser elogiado en todas partes, y para él todos los países eran uno
El redactor de El Sol, concluía su artículo insistiendo sobre la li- solo y, como artista, se tenía sin distinción por ciudadano de todos
bertad en que debía dejarse á los empresarios para imponer sus pre- Mucho por consiguiente le extrañó que en su contra influyese el he-
cios, y recomendando al Gobernador del Distrito que pusiese coto á cho de haber nacido en España, circunstancia que él estimaba debie-
los abusos de autoridad del Ayuntamiento, pero sin conseguir su pro- se haberle sido aun más favorable en México, puesto que su gloria
pósito, según pronto vamos á ver. artística refluía en cierto modo sobre la raza hispana de que México era
¿ ü u é t e m a él
^ v e r c o » los motivos más ó menos fundados
que asistiesen á México para ver mal á la colectividad de sus anti-
guos dominadores? ¿Acaso había influido él, ni poco ni mucho, en la
desatentada conspiración del Padre Arenas?
CAPITULO Y Justos y lógicos eran estos reparos del insigne artista; pero en aquel
entonces el partido anti-espafíol no veía ni pelo ni color en sus mons-
truosos odios. Quienes conozcan la historia de México en aquellos
días se habrán asombrado del sinnúmero y apasionamiento de los
1 8 2 7. papeles insultantes para los españoles, que vomitaban las imprentas-
se habrán dolido de las burlas impías de que fué objeto la nobilísima
El viernes 29 de Junio, festividad de San Pedro y San Pablo, y año c ama, esposa de D. Pedro Celestino Negrete, por haber salido á la
de 1827, dió Manuel García su primera función de ópera en el Tea- defensa de este, aprehendido el 2 2 de Marzo por orden del Ministro
tro Provisional ó de los Gallos, con El Barbero de Sevilla, de Rossi- Gómez Pedraza, solo porque Negrete era español, y con olvido de lo
ni, cantado en italiano: la segunda la dió en la noche del domingo bien que había servido á la causa de la Independencia á partir del
primero de Julio, repitiendo la misma obra, en la que, como hemos Plan de Iguala; y sin duda se habrán avergonzado de que la historia
dicho, no tenía rival. de ese tiempo diga, al hablar de la ejecución del General español D
\ ícente Arana en la plazuela de Mixcalco: "Arana fué insultado por
E l periódico El Observador de la República Mexicana, dijo del estre-
toda la carrera: hubo malvado que acercándose á él le tocó el hom-
no: " Desde el día 29 se presentó este distinguido actor en el Teatro
bro y le dijo : ve á morir; de nada te sirvió tu San Juan de Esco-
Provisional, habiendo su desempeño correspondido á la impaciente
cia - L u e g o que cayó muerto le rodearon muchos espectadores y una
expectativa que fué común desde que se anunció su arribo á las pla-
malvada mujer pisó su sangre y dijo que á honra tenía hacerlo por ser
yas de nuestra República, por lo que todos se hallan contentos, an-
la sangre de un traidor; á imitación de esta harpía algunos arrojaron
siosos y satisfechos.'' En el mismo número de El Observador, se insertó
piedras sobre el cadáver."
un estudio biográfico de García, escrito en Londres por D. José Joa-
quín de Mora, y publicado en su No me olvides del año de 1825. En su calidad de español, no pudo llegar García en época peor de
La fama del artista, el buen gusto de muchos y el instinto novele- la que lego. Prevalidos de la intentona del Padre Arenas, los anti-
ro de los más, llenaron de bote en bote el Teatro Provisional, elegi- españoles procuraban á todo trance hacerlos odiosos á los ojos del
do por Castrejón con preferencia al Principal que también tenía arren- vulgo ignorante, y promover definitivamente la expulsión " T o d a s
dado y en que mantuvo á Prieto y su Compañía Dramática, por ser eran ficciones de partido, dice D. Lorenzo de Zavala; pero ¿quién po-
el de las Moras mucho más capaz que el antiguo Coliseo. Todas las dría desimpresionar al vulgo de la opinión de que los españoles re-
primeras funciones fueron extraordinarias, hasta el 9 de Julio, en que sidentes en el país trabajaban por restablecer su dominación > Nin
se publicó un aviso citando á las personas que desearen abonarse á guno podía creer que en efecto estuviesen satisfechos con el cambio
verse con el Administrador del Principal, I). Cayetano Castañeda, en en el orden de cosas y de sistema; mas ¿era justo castigarlos é impo-
la inteligencia de que las funciones de abono comenzarían el viernes nerles penas por malos pensamientos? Aunque yo era uno de los prin-
13, con el estreno de la ópera Abufar, composición de García. cipales directores entre los yorquinos, me opuse á los proyectos de
Con gran sorpresa encontróse aquel incomparable artista blanco de expulsión, y circulé á las Legislaturas de los Estados una manifesta-
las más enconosas censuras, y decimos con gran sorpresa, porque co- ción contra esta medida, por la que, en mi opinión, se faltaba á las
mo él mismo manifestó á los editores del Sol, acostumbrado estaba promesas del Plan de Iguala, á los pactos del tratado de Córdoba y
a las garantías ofrecidas en la Constitución á todos los ciudadanos
25°

mil personas, en un país tan sumamente barato para los objetos ex-
presados, cuesta un asiento igual á los referidos veintiún reales." ¿ ser elogiado en todas partes, y para él todos los países eran uno
El redactor de El Sol, concluía su artículo insistiendo sobre la li- solo y, como artista, se tenía sin distinción por ciudadano de todos
bertad en que debía dejarse á los empresarios para imponer sus pre- Mucho por consiguiente le extrañó que en su contra influyese el he-
cios, y recomendando al Gobernador del Distrito que pusiese coto á cho de haber nacido en España, circunstancia que él estimaba debie-
los abusos de autoridad del Ayuntamiento, pero sin conseguir su pro- se haberle sido aun más favorable en México, puesto que su gloria
pósito, según pronto vamos á ver. artística refluía en cierto modo sobre la raza hispana de que México era
hijo. ¿ Qué tenia él que ver con los motivos más ó menos fundados
que asistiesen á México para ver mal á la colectividad de sus anti-
guos dominadores? ¿Acaso había influido él, ni poco ni mucho, en la
desatentada conspiración del Padre Arenas?
CAPITULO Y Justos y lógicos eran estos reparos del insigne artista; pero en aquel
entonces el partido anti-espafíol no veía ni pelo ni color en sus mons-
truosos odios. Quienes conozcan la historia de México en aquellos
días se habrán asombrado del sinnúmero y apasionamiento de los
1 8 2 7. papeles insultantes para los españoles, que vomitaban las imprentas-
se habrán dolido de las burlas impías de que fué objeto la nobilísima
El viernes 29 de Junio, festividad de San Pedro y San Pablo, y año c ama, esposa de D. Pedro Celestino Negrete, por haber salido á la
de 1827, dió Manuel García su primera función de ópera en el Tea- defensa de este, aprehendido el 22 de Marzo por orden del Ministro
tro Provisional ó de los Gallos, con El Barbero de Sevilla, de Rossi- Gómez Pedraza, solo porque Negrete era español, y con olvido de lo
ni, cantado en italiano: la segunda la dió en la noche del domingo bien que había servido á la causa de la Independencia á partir del
primero de Julio, repitiendo la misma obra, en la que, como hemos Plan de Iguala; y sin duda se habrán avergonzado de que la historia
dicho, no tenía rival. de ese tiempo diga, al hablar de la ejecución del General español D
\ ícente Arana en la plazuela de Mixcalco: "Arana fué insultado por
E l periódico El Observador de la República Mexicana, dijo del estre-
toda la carrera: hubo malvado que acercándose á él le tocó el hom-
no: " Desde el día 29 se presentó este distinguido actor en el Teatro
bro y le dijo : ve á morir; de nada te sirvió tu San Juan de Esco-
Provisional, habiendo su desempeño correspondido á la impaciente
cia - L u e g o que cayó muerto le rodearon muchos espectadores y una
expectativa que fué común desde que se anunció su arribo á las pla-
malvada mujer pisó su sangre y dijo que á honra tenía hacerlo por ser
yas de nuestra República, por lo que todos se hallan contentos, an-
la sangre de un traidor; á imitación de esta harpía algunos arrojaron
siosos y satisfechos.'' En el mismo número de El Observador, se insertó
piedras sobre el cadáver."
un estudio biográfico de García, escrito en Londres por D. José Joa-
quín de Mora, y publicado en su No me olvides del año de 1825. En su calidad de español, no pudo llegar García en época peor de
La fama del artista, el buen gusto de muchos y el instinto novele- la que lego. Prevalidos de la intentona del Padre Arenas, los anti-
ro de los más, llenaron de bote en bote el Teatro Provisional, elegi- españoles procuraban á todo trance hacerlos odiosos á los ojos del
do por Castrejón con preferencia al Principal que también tenía arren- vulgo ignorante, y promover definitivamente la expulsión " T o d a s
dado y en que mantuvo á Prieto y su Compañía Dramática, por ser eran ficciones de partido, dice D. Lorenzo de Zavala; pero ¿quién po-
el de las Moras mucho más capaz que el antiguo Coliseo. Todas las dría desimpresionar al vulgo de la opinión de que los españoles re-
primeras funciones fueron extraordinarias, hasta el 9 de Julio, en que sidentes en el país trabajaban por restablecer su dominación > Nin
se publicó un aviso citando á las personas que desearen abonarse á guno podía creer que en efecto estuviesen satisfechos con el cambio
verse con el Administrador del Principal, I). Cayetano Castañeda, en en el orden de cosas y de sistema; mas ¿era justo castigarlos é impo-
la inteligencia de que las funciones de abono comenzarían el viernes nerles penas por malos pensamientos? Aunque yo era uno de los prin-
13, con el estreno de la ópera Abufar, composición de García. cipales directores entre los yorquinos, me opuse á los proyectos de
Con gran sorpresa encontróse aquel incomparable artista blanco de expulsión, y circulé á las Legislaturas de los Estados una manifesta-
las más enconosas censuras, y decimos con gran sorpresa, porque co- ción contra esta medida, por la que, en mi opinión, se faltaba á las
mo él mismo manifestó á los editores del Sol, acostumbrado estaba promesas del Plan de Iguala, á los pactos del tratado de Córdoba y
a las garantías ofrecidas en la Constitución á todos los ciudadanos
mexicanos; se cometía un acto de injusticia contra una clase de ha- las más modernas; sin embargo, aquel gran teatro siempre estaba
bitantes, imponiéndoles penas graves sin causa; se proscribía una lleno de gente en una ciudad en que hay como quince espectáculos
porción de familias inocentes; se castigaba en cada español, padre de grandes de representado.
familia, á cinco ó seis mexicanos; se destruían muchas fortunas; se '' Mas como la repetición continua será siempre fastidiosa, y por otra
extraían otras del territorio y se empobrecía al país en muchos mi- parte, todos somos amigos de la novedad, yo aconsejaría á los empre-
llones de pesos, en población y en brazos útiles é industriosos. Pero sarios, que las grandes óperas no se repitiesen continuadamente más
¿qué puede la débil voz de la razón contra el torrente de las faccio- de una vez, tan luego como haya caudal suficiente de piezas ensaya-
nes? La Gran Logia me llamó á su seno para hacerme cargos severos das, y que las demás repeticiones fuesen después de haberse dado otras
de que sostenía á los españoles, y yo contesté que no podía entrar en funciones de óperas diferentes, también con su única repetición cada
ligas ni en partidos en que se intentaba una injusticia; que 110 hay una. Así entiendo que se llenan todos los objetos.
libertad en donde 110 se respetan los principios, y que en mi opinión "E11 cuanto al idioma en que han de darse las grandes óperas ita-
era un crimen que 110 quedaría impune proscribir tantas familias y lianas, sobre que habló otro articulista, yo suplicaría encarecidamente
derramar la desolación en las casas de tantos m e x i c a n o s . . . . ' ' á los empresarios, á nombre del buen gusto, que jamás variasen el
Pero volvamos á Manuel García, al cual molestaron ciertos grupos original de la composición: una ópera traducida del italiano al caste-
del público y del periodismo, acusándole de poca novedad, de fre- llano ó á cualquier otro idioma, queda enteramente desgarrada en la
cuentes repeticiones, y de cantar las óperas en italiano. E l mejor mo- letra, y por consiguiente en la música á que había acomodado el autor
do de enterar de todo á mis lectores, es el darles á conocer la defensa los períodos, acentos y sonidos italianos, con las medidas y ajustes del
que de García hizo El Sol, contra un cierto articulista, y dice: "Dos arte. Y ya redondeada así la letra con la música ¿qué oído delicado
representaciones se han dado hasta ahora con II Barbieri di Siviglia podrá pasar por ese trastorno y descomposición?
en el teatro destinado para la Grande Opera, bien dispuesto, pintado " Y o me atrevo á llamar la consideración del público sobre este punto,
y adornado, y en verdad que nos hemos complacido mucho con una con algunas versiones que he leído de ciertas arias en la célebre ópera
función tan magnífica en toda su extensión. No creo que el articu- II Tancredi, de que se puede inferir si se lograría formar concepto,
lista tuviese idea de ella cuando escribió, conformándose con los pre- ni aproximado siquiera, de la composición ni en la música, ni en la
cios y reclamando anticipadamente las repeticiones de una ópera que letra, ni en su sentido, cuando la traducción se hace para cantarse.
habíamos visto tantas veces, porque de lo contrario se hacía muy po- ¿Qué conexión se advierte en la de te adoraré eternamente con la pre-
co favor confundiendo las óperas cómicas que se nos han presentado ciosa y significativa frase nei tuoi bei rai mipascero? ¿Es siquiera literal
antes, con la grande Opera Italiana de que comenzamos á gozar, y te veré por ti revedró? Y aun cuando haya alguna expresión cuya ver-
en este caso sería para el articulista una misma cosa la maroma que sión salga casualmente ajustada como la d ero te saludo por io tesaluto,
el baile grande, y lo malo, regular y bueno, igual á lo muy bueno. ¿podrá darse á es evo el acento sonoro del io italiano, con el que parece
se canta aun cuando se usa en la conversación?
" Y a que se ha tocado este punto de repeticiones diré, francamen-
te, que las de óperas sobresalientes, como espero sean todas las de " N o desacreditemos nuestra delicadeza, gusto y finura en un arte á
nuestro teatro italiano, y tanto más en adelante en que habrá abun- que tenemos una pasión tan decidida que puede llamarse innata en los
dancia de excelentes voces, debe apetecerse como efecto del buen mexicanos. Si el reclamo del articulista para traducir las expresadas
gusto, pues en la vez primera que se representa una gran ópera de óperas lo hubiese hecho un inglés, alemán ú otro semejante, no era
esta clase, la imaginación más bien queda enajenada que satisfecha, extraño por la extremada diferencia entre la aspereza del idioma de
y es en la repetición cuando se toma todo el gusto, se estudian mejor esos extranjeros y suavidad del italiano; pero por un americano cuyo
los encantos y se saborea verdaderamente el alma: jamás se llena el idioma tiene tanta analogía con éste, es bastante raro.
espectador con oir una ocasión las piezas bien desempeñadas, aun " U n medio podía adoptarse para no incidir en las dificultades apun-
cuando no sean filarmónicas. tadas y dar gusto á los que no quieran justamente perder ni una pa-
'' Apenas habrá teatro de grande ópera en que no se repitan mu- labra de la letra, y es el que se usa en los teatros de ópera italiana en
chas veces las funciones. La Lámpara Maravillosa, en París, se re- Europa: tradúzcanse literalmente al castellano las óperas italianas que
pitió tantas, que baste decir que los ejemplares que se expendían al se den y véndanse al público con los dos textos á la vista. Con esta
público á mediados del año de 1822, eran ya de tercera edición, sien- providencia, sobre conservarse ileso el original para el canto, y gus-
do así que en cada impresión se tiraban muchos y que la ópera es de tarse por consiguiente de la dulzura é integridad de letra y música
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conforme la compuso el autor, se va adquiriendo insensiblemente la Santa Marta algunos dúos, tercetos y aun actos sueltos del Barbero,
inteligencia de un idioma extranjero que siempre es útil, mayormente el Otelo y la Urraca.
cuando en él debemos tener las mejores composiciones de canto, y
El vulgo no se dió por satisfecho con estas concesiones, y poco á
cuando mucho tiempo antes nos hemos familiarizado con varias, can-
poco fué dejando de concurrir al Teatro Provisional, sin que García,
tándolas en nuestros estrados sin traducirlas, y oyendo algunas en
que por ser ya suficientemente rico no se dolió del fracaso pecuniario,
nuestro Teatro Principal desempeñadas igualmente para llenar in-
se decidiese á ceder á la exigencia: á mediados de Agosto, la Gran
termedios."
Opera Italiana había hecho fiasco y quedado en ruina I). Luis Cas-
El artista español no se mostró dispuesto á acceder á la exigencia trejón, y mal visto García, de quien se habló mucho y pésimo como
de que las óperas fuesen cantadas en castellano, y hé aquí cómo en el de 1111 gachupín orgulloso con su dinero y con su fama, digno del odio
Aguila Mexicana, periódico sumamente desafecto á los españoles, se con que eran vistos todos sus compatriotas, contra los cuales en ese
insistió en la exigencia: "Anoche, viernes 13 de Julio, se ejecutó por mismo mes de Agosto la Legislatura del Estado de México, pronun-
primera vez en el teatro Provisional la ópera italiana El Abufar, que ció de una manera decidida y resuelta la expulsión, que el Congreso
ciertamente llenó la expectación del numeroso y lucido concurso que General había de decretar á fines de aquel año, fundándose en el he-
asistió á ella. Eos aplausos fueron vivos y sinceros; el Sr. García, su cho innegable de una conspiración descubierta, con más ó menos apa-
esposa é hijo, manifestaron su grande y extraordinaria habilidad y'co- rentes ramificaciones en Puebla y Oaxaca, y complicidades y ligas con
nocimientos en el arte, no quedándose atrás el Sr. Waldek y la Sra. los escoceses sospechosos de estar en tratos para restablecer la monar-
Santa Marta. Sin embargo, somos de opinión que si no se trata de quía española.
ejecutar las óperas en el idioma del país, aun cuando desmerezcan un
No quiere decir esto que el gran artista 110 hubiese encontrado en
poco en su mérito musical, 110 es fácil que se sostenga la Empresa
México público más ó menos escaso, pero bastante entendido para
porque el número de personas inteligentes en el italiano, ó que se con-
apreciarle y aplaudirle. La alta sociedad mexicana fué entusiasta y
tenten sólo con el gusto del canto y de la música, sin entender de lo
devota de su talento. E11 19 de Setiembre los propietarios de la Lonja
que se trata, no puede ser en México tan considerable como en París
dieron un gran baile y concierto con el concurso de García, su esposa,
y Londres, ni bastar por consiguiente para cubrir los costos que de-
Castillo, la Santa Marta y el profesor D. Manuel Elízaga. Todos ellos
mandan esta clase de representaciones. Si el Sr. García y su familia
fueron regiamente obsequiados por los socios de aquel antiguo círculo
fuesen italianos, habría mayor dificultad; pero tratándose de que can-
de comercio y de recreo.
ten en el idioma de su patria, no nos parece que dejarán de prestarse
á ello si los señores empresarios toman empeño." Manuel García hubiérase puesto desde luego en camino para fuera
de la República, á 110 habérsele enfermado gravemente su esposa y
No era tan llano como se lo parecía á los editores del Aguila y de vístose forzado á aguardar su restablecimiento ó cuando menos su ali-
otros papeles, poder cantar las óperas traducidas al castellano- hacía vio. Además, manteníale en América el deseo de 110 apartarse mucho
muchos años que García faltaba de España y habíase olvidado mucho de su hija María Felicia, la más célebre cantatriz italiana del siglo XIX,
de su idioma nativo, que pronunciaba defectuosamente, con acento como se la llama en el Diccionario de Pierre Larouse. Esta artista
ya italiano, ya francés, ya inglés; sucedíale otro tanto á su esposa Joa- insigne sobre toda ponderación, nacida en 1808, presentada por su
quina Briones, y en cuanto á sus hijos Manuel y Paulina, el primero padre y maestro c i Kings Theatre de Londres en 1824 con el Romeo
había sido llevado á la edad de tres años á París, v la segunda tuvo y Julieta de Zingarelli, y por él traída á los Estados Unidos como la
por cuna la gran Capital: ambos poseían el francés y el inglés y por joya de su Compañía, casó en Nueva York con un comerciante fran-
razón natural el italiano, como no conocían el español. Waldek la cés apellidado M. Malibrán, que pasaba por ser inmensamente rico.
Pellegrini y los demás artistas que acompañaban al gran tenor no'co- María Felicia, más conocida por la Malibrán, que contaba en 25 de
nocían ni poco ni mucho el castellano. Sin embargo, la empresa hizo Marzo de 1826, fecha de su matrimonio, diez y siete años, casó con
que se contratasen Andrés del Castillo y Palomino, y con ellos y la Malibrán contra su propia voluntad y sólo por obedecer á García. Po-
Santa Marta ofreció García algunas obras en español, como El poeta cas semanas después de su enlace, el banquero se presentó en quiebra
calculista, y otras de las que él mismo compuso allá en sus primeros y María Felicia hizo á su padre tan severos cargos por haberla hecho
anos en el idioma nativo, pero ninguna de las da legítima escuela ita víctima de su ambición, que hija y padre se disgustaron y éste vínose
liana, si bien en algunas funciones con carácter más bien de concierto á México, dejando en Nueva York á María, que 110 sólo se negó á se-
que de función de ópera, cantó con los dichos Castillo, Palomino y la guirle, sino que, con resolución varonil, tomó por su cuenta la empresa
lírica y la regenteó con grande acierto é inteligencia, 110 sólo para man-
El Sol de mediados de Octubre, decía: "Sabemos con desespera-
tenerse y mantener á sus artistas, sino también para pagar muchas de
ción que la Empresa ha faltado á la Santa Marta, anulándole de su
las deudas de aquél cuyo apellido había de hacer eternamente célebre
propia autoridad una escritura pública, en que está contratada para
en los fastos del arte.
el servicio de ambos teatros; que ha anulado, igualmente, la de An-
María Felicia García de Malibrán, después de algunos meses de drés Prieto como Director y Actor, y faltádole al pago de algunas
esa brega, partió en 1827 de Nueva York para Francia, y por consi- semanas devengadas, por el injusto y frivolo pretexto de no haber
guiente, nunca estuvo en México, como algunas personas creen y yo presentado dos ó tres comedias nuevas que tenía ensayadas y que no
á mi vez he dicho en alguna ocasión equivocadamente y por fiarme pudo verificar por la separación de Salgado, la Santa Marta y otro
de inexactos informes. De las hijas de Manuel García sólo le acom- actor cuyo nombre no tenemos presente, á cuyo defecto la Empresa
pañó en su estancia entre nosotros Paulina, de edad entonces de sie- debió subvenir, pues que Prieto no puede representar solo, ni la E m -
te años, casada más tarde con el distinguido literato francés Luis presa obligarle á semejante imposible.
Yiardot, y sucesora en la escena lírica de los triunfos de su hermana
" L a Santa Marta y Prieto llamaron á la Empresa á conciliación;
María. Esta, á su regreso de América á París, sentó sus reales en
pero ésta 110 quiso asistir, provocándolos de este modo á juicio con-
aquel Gran Teatro, presentándose con Semiramis, y compartiendo
tencioso, tal vez segura de su triunfo por el fastidio en que necesa-
con la eminentísima Enriqueta Sontag, el cetro del arte y el imperio
riamente habían de caer los agraviados al verse envueltos en un plei-
de la música. En Marzo de 1835 se divorció de su primer marido, y
to ruinoso, cuyos trámites y diligencias arredrarían al hombre más
un año después casó con el famoso Carlos Beriot, yendo á morir po- tenaz. En este estado las cosas, mediaron varias personas imparcia-
cos meses más tarde, en Manchester, cuando apenas acababa de cum- les, abocándose con D. Luis Castrejón y D. Juan Francisco Azcára-
plir veintiocho años. Su fallecimiento causó un duelo universal. te, su apoderado, y consiguieron se firmasen las tres siguientes pro-
Manuel García, hijo, sí estuvo, según he dicho, en México, y can- posiciones:
tó en nuestro Teatro Provisional. Su voz fué de escasa importancia y
"Se le darán á la Sra. Santa Marta cuarenta pesos cada noche, que
no pasó de un segundo bajo; sólo la obediencia filial le pudo obligar
' 'serán dos veces de obligación para el empresario, y si cantare tres
á presentarse en la escena, que dejó tan pronto como no consideró
" ó más por disposición del mismo, lo verificará aumentándole los
necesario su concurso: su justa celebridad la hizo 110 como cantante,
"mismos cuarenta pesos: tendrá un beneficio por la noche con la
sino como profesor, y como autor de muchas obras de enseñanza,
' 'obligación de repetirlo á beneficio de la Empresa íntegro, y quedan
inspiradas en el método de su padre, entre ellas su Memoria sobre la
' 'concluidas todas las diferencias pendientes. A Prieto, al respecto de
voz humana, presentada á la Academia de Ciencias de París, su Es-
"cinco mil pesos, con seis tardes de dos cruces ó domingos, á medias
cuela de García ó tratado completo del arte del canto, y sus Observacio-
' 'con la Empresa, ó al respecto de seis mil pesos sin tardes, con una
nes fisiológicas sobre la vos humana, por él mismo elegantemente es-
' 'noche de beneficio, ó mitad de líquido de entrada eventual ó cuarta
critas en francés y en inglés.
"parte de abono en cada día que represente, y sin beneficio.
En el último tercio de 1827, los teatros en México habían caído en ' 'Pero á lo mejor la Empresa se negó á cumplir lo convenido y fir-
la más absoluta postración: la mayoría de las familias que sostenían mado, y quiso que Prieto pasase por ciento treinta pesos semanarios
ese género de espectáculos se abstenían de concurrir á ellos, preocu- y un beneficio, por representar y dirigir trece funciones al mes, con
padas con el mal giro que iba tomando la mala voluntad contra los obligación de dar dos de ellas nuevas, y á la Santa Marta á cuarenta
españoles, con los cuales estaban ligadas, pues como con exactitud di- pesos á la semana por no quererse que cante sino sólo una vez en ella.
ce Zavala, el mal que se hiciese pesar sobre cada español de México,
" E s t o pasa entre la Empresa y Prieto; se le debe y no se le satis-
hería á la vez á cinco ó seis mexicanos con él identificados.
face so pretextos insuficientes; se sobresee por parte de Prieto, en
Ante la perspectiva de los peligros y de la expulsión, los actores y cuanto á la deuda, á virtud de nuevo contrato celebrado por apode-
artistas de la maltratada nacionalidad habían perdido el entusiasmo rados mediadores, y se falta á lo pactado sin más que el no quiero ya
para el trabajo, y con ese pretexto los empresarios, que veían vacías sino esto otro. El agraviado conoce la intriga, está convencido de q u e '
las principales localidades de sus coliseos, dejaban de satisfacerles los una conspiración ratera le obstruye los medios de servir al público;
sueldos y faltaban escandalosamente á las obligaciones de sus con- éste calla porque está cansado de gritar para obtener lo que desea,'
tratos, seguros de que, dada la pasión popular, los quejosos no halla- y entretanto el público se aburre noche por noche, perdiendo en ello
rían justicia ante los tribunales del país. indefectiblemente la Empresa misma, por dejarse arrastrar de los
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enemigos irreconciliables del mérito y de la superioridad, siéndonos
liarto sensible que el Ayuntamiento hasta ahora no haya dicho á la " A u n diremos más: en algunas le saca algunas ventajas, merced
Empresa: cumple lo que has pactado. ' ' á ciertas circunstancias personales, como en el Opresor de su familia,
" E a Empresa contestó que el fracaso de la Opera Italiana no había en la que los dos primeros actos, siendo del carácter del Sr. Prieto,
sido obra suya sino de las circunstancias y de los mismos actores. , no se despegan del de el Sr. Garay; pero los dos últimos en que el
Que Prieto trabajaba con desgano y sin poner nada nuevo, y que su protagonista desenvuelve toda la sensibilidad reconcentrada y ocul-
separación de la Compañía la hizo sobresaltado por el odio que se ta en su corazón, son entera y exclusivamente del resorte del último.
había acarreado de los demás actores por el mal trato que les daba, Decimos lo mismo de la Misantropía y otras.
y por no habérsele pagado una semana. Queriendo conciliario todo—
"Ultimamente, confesemos que este señor, aunque nos ha dejado
sigue diciendo la Empresa—se consiguió que Garay se encargase de
asombrados en el Darlemón, del Abate LEpée, en el Don Diego del
la dirección, volvió Palomera, se ajustó al Sr. Fernández y á la Sra.
Si de las ruñas y en el Pedro Laínez del Cid, también es de creer que
Artoud; se entró en capitulación con Prieto, ofreciéndosele ciento
si siempre estuviéramos viendo representar viejos y más viejos, se
treinta pesos semanarios, sin embargo de las escaseces del teatro,
podría decir á los que suspiran por D. Andrés Prieto, aquello de Go-
presentándosele el ejemplo de los demás actores, que generosa y vo-
rostiza que él dice tan bonitamente en el Amigo intimo, de que si á un
luntariamente habían hecho una rebaja de sus sueldos: si este señor
hombre le dieran huevos moles al almorzar, huevos moles al comer,
no se conviene, ¿es culpa de la Empresa?"
huevos moles al cenar y huevos moles á todas horas, daría los hue-
Para mejor justificarse, la Empresa ocurrió á censurar al artista vos moles á todos los diablos.
que hasta allí la había sostenido, y por ser muy característica de la
" P o r conclusión, y dejando aparte el mérito de ambos en su res-
época, reproduzco la crítica, que dice así:
pectivo lugar, ¿quién es más preferible, el Sr. Prieto que se retira y
Queremos solamente hablar del Sr. Garay y poner á éste y al Sr. sacrifica á una desmedida ambición el gusto mexicano, ó el Sr. Ga-
Prieto en su justo lugar. El Sr. Prieto, delicado y exacto en los vie- ray que con la mayor generosidad, sin ajuste, sin sueldo y con grave
jos de Moratín, Molière y Gorostiza, no puede compararse con Ga- nesgo de su salud, redacta un drama liberal para celebrar el aniver-
ray, noble y sublime en los brillantes rasgos de Alfieri, Racine, Dur- sario del 16, que lo ensaya, lo ejecuta, y que sigue aún bajo el mis-
val y Shakespeare, y fino y galán en los diálogos de Eope de Vega, mo orden reorganizando, dirigiendo y trabajando?
Moreto y Calderón, que ha sabido transportarnos á los campos del
" Prescindimos de la dureza, orgullo y despótica altivez con que
Morven y patria de Fingal, y que ha podido aterrarnos y enterne-
el Sr. Prieto trata á sus compañeros y aun al dueño de la negocia-
cernos con los cuadros borrascosos de las pasiones y presentarnos y
ción: pero el Sr. Prieto, muy apreciable en la sociedad y en la esce-
hecho admirar las virtudes de Régulo, Bruto, Tito y Graco, y detes-
na, es intratable en cuanto funge de protagonista y se acuerda que
tar y aborrecer los crímenes de Sila, los Filipos y los Tiberios: él ha
es uno de los hijos de Edipo, el gran Maestre de los Templarios ó el
sabido recrearnos con la galantería del siglo de Carlos V y ha hecho
Emperador César Augusto, porque se reviste de más tono que un sul-
saltar nuestras lágrimas con los melancólicos sentimientos de Kotze-
tán en medio de sus mujeres, eunucos y esclavos. Dígalo Martínez
bue, y darnos por fin, el ridículo de la hipocresía y de los vicios y
que estuvo muy cerca de embutirle en la cabeza un candelera en el
preocupaciones pintadas por Moliere y Martínez de la Rosa.
acto de la representación de la comedia El Distraído."
" N a d i e negará que el Sr. Prieto, confesando antes el acierto ori- Demos aquí término á este capítulo, que, reflejo exacto y fiel de
ginal y único quizá, con que desempeña los papeles de bata y pelu- la historia de esa época, como ella es triste, desconsolador y amargo.
ca, en lo que ciertamente es inimitable, al grado de habernos hecho Meditando sobre los sucesos de esos dolorosísimos días, es como me-
conocer obras que jamás nos interesaron en la escena antes de su ve- jor pueden apreciarse el progreso y bienestar de los presentes, y la
nida, se ha chasqueado cuando ha salido de su línea y ha querido lucha cruel que México hubo de sostener con la adversidad para lle-
hacerse general. Díganlo si no el Sancho Ortis, el Orestes, la Ciega, gar á la altura de civilización que hoy alcanza.
la Novia impaciente, y otras en que no ha podido convenirse la ima-
ginación con su físico, su voz y sus maneras,.cuando al contrario el
Sr. Garay, si no ha desempeñado tan perfectamente el Anciano y los
jóvenes, á lo menos se puede asegurar que el público ha quedado com-
placido,
y órgano del tercero, y mucho menos llenar el hueco de la Santa Marta
con la Gutiérrez y la Amada Plata, espera del empresario remedie
estos males."
El semanario El Amigo del Pueblo, decía á su turno: "Visiblemente
CAPITULO VI vamos retrocediendo en lo que el teatro adelantó anteriormente. Mien-
tras la verdadera escuela de las costumbres pueda ser objeto de espe-
culación y codicia, mientras se ponga precio al talento y á los esfuerzos
del genio, debemos desesperar de que los trabajos escénicos sean dig-
1827.—1828. nos de la gran México.
' 'El Sr. Prieto, sublime cuando calza el coturno é inimitable cuando
E n la defensa de sus actos y en sus ataques á Andrés Prieto, el ar- ridiculiza los caprichos y la fatuidad de la última edad del hombre, se
ticulista nos da los siguientes pormenores de los gastos y productos entrega también al abandono, acaso por disgustos con la Empresa.
del Teatro en aquel último tercio de 1827: " E l abono mensual está La ausencia de las tablas del Sr. Garay ha debido contribuir á esta
reducido en la actualidad á cuatro mil doscientos pesos: los sueldos desidia, por la falta de competencia de que tan vivamente se afectan
de la Compañía importan al mes nueve mil pesos y ciento cincuenta los hombres de talento. El Sr. Garay en la ejecución del terrible Os-
el arrendamiento de casas. Repartidos en treinta días al mes, corres- car, es tan superior como Taima en el Régulo, y el Sr. Prieto en el Sí
ponden á cada uno trescientos veinticinco pesos, á cuya suma hay que de las niñas, en el Anciano y los jóvenes, no puede tener competidor
agregar cuarenta y cinco ó cincuenta de papeleta. Las entradas even- acaso en el mundo. El público se complacería de que estos dos sobre-
tuales no dan para cubrir esos gastos, y noches hay en que la Empresa salientes actores le dedicasen sus servicios nuevamente, y vería sin
ha perdido doscientos diez pesos cuatro reales.'' duda con agrado que la joven Guadalupe Munguía, la discípulamás
"Como el que más—decía el articulista en otro párrafo—lamenta- adelantada del Sr. Prieto, restituida á México adquiriese los conoci-
mos la pérdida de la ópera, ramo precioso que embelesa y encanta, mientos que nadie le puede dar en Puebla, donde brillará como her-
deplorando permanezca en México una habilidad tan sobresaliente mosa, pero 110 como Rita Luna.
como la del Sr. D. Manuel García, y que no sólo estemos privados de " L a Sra. Manuela Gamborino, trágica fama de la escena y con
sus dulces y melodiosos trabajos, sino lo que es más, que paladeados las mejores disposiciones para desempeñar el papel de primera dama,
con las grandes óperas, carezcamos de las que antes de su venida pro- no se esfuerza hoy día más allá de lo preciso para cumplir. El Sr. Sal-
porcionaban muy buenos ratos al público; sería de desear que á costa gado es sin duda merecedor de la satisfacción del público y de nues-
de alguna alteración en el precio de los abonos se combinase el agre- tros elogios, por su constante aplicación. Hemos notado que se inclina
gado de una ópera semanaria, pero trabajada y dirigida por el citado á las chanzas de la comedia más bien que á las fuertes concepciones
célebre actor, lo que contribuiría mucho para sacar el teatro de la so- de la tragedia, y se ha extraviado en el camino de la gloria que se le
ledad y abatimiento en que lo vemos noche por noche: pero por su- prepara. Así que se le ve declamar vivamente cuando el asunto no
puesto que habían de ejecutarse en el Teatro Principal, pues pensar pide más que la ironía del desprecio y modulaciones suaves: lo invi-
en el de la calle de las Moras es un disparate, porque á todos incomoda tamos á que haga el estudio de las pasiones vehementes, y á que arre-
la distancia." bate al Sr. Prieto el sangriento puñal de Otelo.
Las razones alegadas por el empresario á nadie parecieron buenas, " L a Sra. Agustina Montenegro se acerca á una edad en que 110 se
y El Sol de 15 de Octubre las combatió así: "Siempre será de lamen- puede avanzar mucho en esta clase de estudios; sin embargo, agrada
tarse la separación del inimitable Prieto y de la contralto Santa Marta. por su decoro en las tablas y porque al menos no retrocede. La sola
¿Quién después de haber visto á Prieto en el Sí de las Niñas, el Ocu- presencia del Sr. Arias en la escena, es un insulto al público; aunque
lista por amor y los Hijos de Edipo, ha de soportar con paciencia el parezca exagerado este concepto, no lo omitimos, pues que ya no da
Guillermo Tell, el Aviso á los solteros y el Avaro, desempeñados por esperanza de enmienda: el público se enfada de encontrar á Sileno en
individuos de tan inferior mérito y reputación? El público que conoce los júbilos de la gran Toledo.
que ni la salida de Garay, ni la vuelta de Fernández, ni la adquisi- " E l Sr. Pautret, compositor, según dicen, de los carteles en que se
ción de Palomera pueden compensar la ausencia de este profesor, por anuncian los grandes bailes, y nada más, nos obsequia, y esto si no
las enfermedades del uno, la desaplicación del otro, y la falta de juicio ha enfermado á mademoiselle Rubio, con ciertos bailes tan repetidos,
que los podemos bailar hasta en sueños. E n el año de 1826 todas eran precio de cada boletín á dos pesos, dando principio la función á las
promesas, y hoy que se ha conocido la gran paciencia del público mexi- siete y media de la noche."
cano, ningún empeño se tiene en agradarle. La Sra. Pautret sorprende Apenas anunciada esa serie de conciertos, estallaron de modo irre-
siempre con su asombrosa agilidad, y no es en esta parte menos digna primible los odios civiles, sirviéndoles de base y pretexto el aun 110
de elogio la niña Gamborino. El Sr. Aguila es un Hércules volando resuelto punto de la expulsión de españoles. La abortada conspira-
por los aires Aunque la Sra. Cordero y Rodríguez no han entrado ción del Padre Arenas y otra que se dijo iniciada en Jamiltepec de
en la moda de los palmoteos, merecen ciertamente aplausos. Los de- Oaxaca por dos frailes, dieron pábulo á las voces de que todo debía
mas que componen la festiva familia bailarina, hacen bien el acom- temerse de los españoles, y á la creencia de que todo era lícito para
pañamiento. exterminarlos y salvar á la patria. El Alcalde de Petatlán y Teniente
" N o tenemos grande ópera por ahora, y es ciertamente muy sen- de Milicias Gallardo; el Gral. Montes de Oca, Comandante de Aca-
pulco; Vázquez en Michoacán, y otros más insignificantes, pero no
TlnZucZ " 6 a m 0 S P d V a d 0 S k r g 0 t Í e m P ° d e e S G U c h a r a l R u i s e ñ o r menos terribles cabecillas en Izúcar, Chietla y Chalchicornula, ha-
bíanse alzado en armas persiguiendo gachupines y pidiendo su expul-
Inútiles fueron las tentativas hechas para convencer á Manuel Gar-
sión, tan de acuerdo con el Gobierno General, que el Ministro de la
día11
E Z L I T " ' ° S P R F C Í ° S Í N F I M ° S « U E P° el Empresario y Guerra, Gómez Pedraza, al dar cuenta al Senado de esos desórdenes,
el pubhco de.mediopelo que al teatro asistía, más que por gozar éins- pretendió persuadirle " q u e ésta era la uniforme voz de la nación,"
¿
mente T ' ^ ^ ^ a C t 0 r e S e n * e n e r a l - y especial- á lo cual un senador contestó, "que si así lo creía el Gobierno, presen-
mente a los españoles, con los cuales más de una vez pasaba de las tase la iniciativa correspondiente, pues el Senado 110 estaba dispuesto
T^IL N ^ S T N Í M S U L T
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á que sobre él recayese la odiosidad."
e eXP ne Se á esas vejaci0nes SU
valS r r , ° - ' y ^ A la Legislatura del Estado de México, que fué la primera en de-
val o mas y mas la antipatía del vulgo, pero sólo del vulgo; las prin-
g a es familias solicitaban sus visitas, y las correspondían inmedia- cretar la expulsión, sin más excepciones que las de imposibilidad fí-
dG
sica ó moral, siguió la de Puebla, que dictó igual decreto el 12 de
S ' ~ " a c i ó n amena y de un consejo para los Diciembre. Desde el 26 de Noviembre, el Senador Alpuche, había
individuos de ellas que al estudio del canto dedicaban sus ocios con- presentado á la Cámara un proyecto de igual naturaleza, que 110 fué
fianza" p a r m n ° U e g t ' SÍ b Í e " Méxic0
- se dedicó á ía en- admitido, corriendo mejor fortuna el que inició ante la de Diputados,
sena iza. Para corresponder de alguna manera á esas atenciones y facultando al Gobierno para confinar á determinados sujetos, cuyos
satisfacer el ansia que de oírle se tenía, el gran artista d i s p u s o T r unos nombres hizo públicos un papel que se imprimió con el título de "Eje-
onciertos en salón que no fuese teatro, y no á menos precio deI qu cución de justicia en coyotes despojados."
estaba acostumbrado á hacerse pagar en Europa y en los Estados Un
Admitida esa iniciativa, por sus pasos naturales se trajo al tapete
dos y en 20 de Noviembre circuló el siguiente aviso-
la de la expulsión franca y resuelta, pedida por los pronunciados de
C J Z profesores de Música, Manuel García, su esposa, Andrés del
Ajusco y Toluca, á quienes, se dice, ofrecieron Zavala y el Gral. Gue-
Castillo y Santa Marta, unidos en sociedad han d e t e r m i n o con e
rrero que sus deseos serían cumplidos. ' 'La discusión en las cámaras
correspondiente permiso, servir al público que carece y solicitl oí la
fué muy acalorada: los escoceses y los imparciales, dice Zavala, sos-
bellas producciones músicas de los más célebres autores, candando a
tenían, fundados en principios de justicia, de conveniencia y de ra-
T l ó n 3d H a S
r 0 g
^ 1 0 C U a l
^ S 0 H C Í t a d 0
* el g r a n zón, que el Congreso General 110 tenía facultad para dar una ley en
Salón de la Lonja, donde se darán espectáculos escénico-llarmónfcos que se imponía una pena tan grave á una considerable porción de
desempeñados por los cuatro profesores arriba mencionados y una br ! ciudadanos, como eran los españoles avecindados en el país después
V e r i f i
S r ™ r ° S e 61 ~ eljuevespróximo de muchos años, con hijos, esposas, familias numerosas y bienes ad-
m e n t e - D i c h o s espectáculos se compondrán de arias, dúos tercetos quiridos legalmente.
y cuartetos en los idiomas italiano y castellano.-La ocieda^ofr c e
'' Los españoles habían venido al país á establecerse cuando era
medÍ
iTs S H ° qUC ^ " SU d C a n C e la
comodidad de parte de la monarquía española; habían adquirido, ó mejor dicho,
q U e SC d l g n e n h n r a r l 0 S a s í c o m o
br , T ° ' P ^ el decoro y conservado, sus derechos civiles y políticos, y con el Plan de Iguala
M a n ez de los espectáculos.-Los billetes se expenderán desde el
miércoles a las diez del día hasta las seis de la tarde en el almac n de se había estipulado que permanecieran como los demás mexicanos.
Entraron en la nueva sociedad formada en 1821. Contribuyeron, co-
Sr. Ackerman, frente de la Profesa, y en la misma Lonja, siendo
mo los hijos del país, á la Independencia, unos activamente con sus
y contrarrestar una opinión pública facticia expresada con amenazas
caudales, otros con sus servicios como militares; continuaron en los
y furor.
destinos de mayor confianza, y no se había advertido que faltasen á
" E l Congreso General, movido por los agitadores, dió el primer
sus deberes, pues si unos cuantos, traidores á sus juramentos, habían
decreto de expulsión de los españoles el 20 de Diciembre. Las hijas,
proclamado la ruina de las instituciones ó conspirado para el resta-
las esposas, las familias de los expulsos corrían de uno á otro punto
blecimiento del sistema colonial, en lo general no se notaba el mis-
implorando la clemencia de los legisladores. Hicieron exposiciones
mo espíritu.
enérgicas, pidieron al Presidente Victoria apoyo en su infortunio; pe-
" Los yorquinos, hablando á las pasiones y á la imaginación, ex- ro no encontraban quien escuchase sus reclamos, y apenas puede
ponían que los españoles 110 habían cesado de conspirar contra la in- creerse cómo el corazón de los mexicanos, tan noble, tan generoso,
dependencia nacional desde que, pasado el primer momento de sor- tan compasivo, resistía al espectáculo que presentaban esas familias
presa, habían vuelto á sus antiguas esperanzas. Recordaban los su- desoladas, que reclamaban un derecho como se pide una gracia, que
cesos de Juchi y Toluca, cuando las tropas expedicionarias intentaron exponían sus desgracias y no inspiraban compasión, que manifesta-
en Abril de 1822 restablecer la dependencia; pintaban con los colores ban sus pequeños hijos, la miseria y abandono en que iban á que-
más fuertes las escenas sangrientas de la pasada revolución; invoca- dar, ó la obligación de seguir la suerte de un padre desventurado, en
ban los manes de las víctimas ilustres sacrificadas por las manos de países desconocidos, y no hacían revocar una resolución tan bárba-
los españoles, quienes en el seno de la nación que habían despedaza- ra. ¡Tanto el espíritu de facciones desvirtúa el verdadero carácter del
do disfrutaban tranquilos de las riquezas que habían usurpado en las hombre y sustituye á la razón los efectos de la pasión!"
guerras civiles: Yo no voy á la ciudad, decía uno de los e x a l t a d o s , / ^
no ver á los asesinos de mis padres: las familias arruinadas, las viudas La ley de expulsión se publicó el 22 del mismo Diciembre, fecha
y huérfanos que pedían venganza, y la justicia nacional hollada, á la en la cual el Teniente Coronel D. José Manuel Montaño publicó á su
que se debía una reparación correspondiente á la magnitud de los vez un Plan en Otumba, pidiendo la extinción de las sociedades ma-
males. Muchos oradores se remontaban hasta Hernán Cortés y se sónicas, el cambio de Ministerio, el pasaporte para el Ministro Poins-
constituían defensores de Cuauhtemotzín y Moctezuma. Pero el pro- set y el cumplimiento de la Constitución. Gómez Pedraza desplegó la
yecto horrendo de la última conspiración, ese atentado que era impo- mayor actividad para reprimir aquel movimiento, al que se adhirió
sible, según se decía, que 110 fuese el resultado de combinaciones pro- el Gral. D. Nicolás Bravo, Vicepresidente entonces de la República
fundas y de una complicidad general, era suficiente causa para que y enemigo abierto y franco de los yorquinos. El 7 de Enero de 1828
el Congreso, acordándose de que la salud del pueblo es la suprema ley, el Gral. D. Vicente Guerrero, jefe de las tropas del Gobierno, ocupó
decretase la general expulsión de los españoles. á Tulancingo, cuartel general de los rebeldes, y D. Nicolás Bravo,
amigo insigne y grandiosa hechura del gigantesco D. José María Mo-
" L a exaltación era extraordinaria, y el Presidente Victoria nada relos, fué traído preso á México y vilmente insultado por los patrio-
hacía para contenerla; el Gral. Guerrero influía para que se diese la teros de los cafés y del Congreso.
ley de expulsión y Pedraza hacía otro tanto, aunque con menos fran-
" E n la tarde del día en que se tuvo noticia de la prisión de Bra-
queza.
vo— dice Bustamante—la Gran Sociedad, lugar de cita de nuestros
" Sostenían la expulsión en la Cámara de Diputados: D. José Ma- holgazanes y viciosos, á semejanza de la Fontana, de Madrid, fué el
ría Tornel, D. Juan Tames, D. Ramón Pacheco, D. José Manuel He- teatro donde comenzaron á desarrollar estos perdidos sus pasiones.
rrera, D. Anastasio Cerecero, D. Isidro Rafael Gondra y otros. En Más de quinientos se presentaron allí blasfemando de Bravo, llamán-
el Senado: D. José Sixto Verduzco, D. Juan Nepomuceno Acosta, D. dole traidor y gritando anatemas contra él y los españoles, con voces
Juan N. Rosáins y D. Demetrio del Castillo. y palabras descompasadas y una alegría frivola, efecto del calor del
" C o n t r a la expulsión se pronunciaron con calor y energía en la vino: hé aquí la primera parte de la horrorosa escena representada en
Cámara de representantes: D. Andrés y D. Matías Quintana, D Ma- aquella botillería.
nuel Crescencio Rejón, D. Cayetano Portugal, D. Fernando del Va- " A l son de una ronca corneta y desentonado tambor, como á las
lle, D. José Ignacio Espinosa y D. Juan de Dios Cañedo. En la de seis de la tarde se reunió una comparsa de léperos, capitaneada por
Senadores: D. Francisco Molinos del Campo, D. Ignacio Paz, D el Senador Alpuche: uniéronsele el Diputado Cerecero, un cocinero
Francisco Tarrazo y otros. italiano y porción de frailes, y pusiéronse en marcha cogidos de los
" E r a un esfuerzo de filosofía y civismo hacer frente á la multitud brazos. En la calle del Espíritu Santo, unos franceses de la calaña
R. H. T—T- 1 , - 3 1
del cocinero, les dieron una bandera nacional: tomáronla dos indivi-
duos de á caballo por los extremos, y uno, con una espada cortó la Justicia. Mas como ésta temiese dictar sentencia contra el héroe, el
faja verde, que simboliza la unión, y la hizo pedazos, que aquella mul- Gobierno ocurrió á promover y obtener del Senado el destierro por
titud se disputó á golpes y á gritos, como si fueran de una reliquia ó seis años de los cómplices en la conspiración de Montaño, y en 21
talismán. La comitiva siguió su marcha, entró en San Francisco, de Abril, el caudillo insurgente fué sacado de la Sala Capitular del
donde yacía de cuerpo presente el cadáver del Padre Fray José de Ayuntamiento de México, que le servía de prisión, y conducido al
las Piedras, sabio sacerdote español, y sobre él pasaron la mutilada Puerto de San Blas, en donde se le embarcó para Guayaquil.
bandera entre gritos é imprecaciones indecorosas. Marcharon después La mejor censura de aquellos actos, que daban el triunfo al Minis-
á la Plaza Mayor, aumentados hasta el punto de 110 caber en ella, y tro de la Guerra Pedraza y al Ministro americano Poinsset, contra
allí pidieron al Presidente que cortase á Bravo la cabeza y la coloca- los cuales iba el plan de Montaño, la hizo la musa popular, fijando
se en su balcón. En el Coliseo ó Teatro Principal, en la representa- en las esquinas el siguiente pasquín:
ción de ese día 8, se presentaron dos mequetrefes de éstos, con ha-
chas, y uno en medio leyendo en voz alta la lista de los oficiales pre-
sos juntamente con Bravo; á cada nombre que leían acompañaban '' Por sostener á un ministro
un epíteto deshonroso, que era correspondido con grita y palmoteo." y á un extranjero bribón,
que perezca la nación."
D. Nicolás Bravo 110 desmintió en aquella ocasión el alto valor que
puso en la obra de dar á México su independencia, y al ser por sus
jueces preguntado con qué derecho se ponía á la cabeza de una revo- Sería ofender á mis lectores detenerme á demostrarles que durante
lución armada, respondió: esos meses ningún éxito ni brillo pudieron alcanzar los espectáculos
—"Con el que me daba la ley para oponerme á un trastorno d é l a públicos en la Capital. Las obras más aplaudidas por la plebe á que
"constitución y de las leyes; con el mismo con que el Presidente Vic- el empresario procuraba halagar para ayudarse siquiera á cubrir los
" t o r i a resistió á las intentonas de Iturbide, que nos preparaba una gastos, fueron Fray Lucas ó el Monjío deshecho; A un engaño otro ma-
"esclavitud, y con el que me daba la cualidad de segundo Magistra- yor ó el burro afeitado; Encontrar tres imposibles: mujer firme, amigo fiel
d o de la República, para hablar y velar sobre la observancia de las y criado agradecido; El fiscal de su delito, juez cuerdo, y testigo cíe*o; El
" leyes y hacerlas cumplir." perlático fingido; El Abate LEpée, y otras por el estilo. * '
Como la derrota de Bravo significaba el triunfo definitivo de los Bien es verdad que todo perdía su interés para reconcentrarse en
yorquinos sobre los escoceses, los vencedores, con aquella confusión el que los partidos ponían en las elecciones de Presidente y Vicepre-
de ideas que caracteriza esa época tristísima de la historia de Méxi- sidente de la República que habían de tener lugar en el inmediato Se-
co, época de absurdas amalgamas, en la que es casi imposible deslin- tiembre, jugando en ellas D.Vicente Guerrero, candidato délos yor-
dar campos políticos y clasificar opiniones, los vencedores, repito, ce- quinos y D. Manuel Gómez Pedraza protegido por Victoria que le deja-
lebraron en la iglesia de Santo Domingo en la mañana del 20 de Enero ba usar y aun abusar de los elementos oficiales, y apoyado por los esco-
una función de gracias al Todopoderoso, y en ella predicó el Doc- ceses, que después del fracaso de Montaño decidiéronse por el Minis-
tor D. Francisco Argándar, orador que era de la cámara de la Gran tro á quien debieron su derrota, por considerar que entre uno y otro
Logia Yorquina. A la función de iglesia siguió un ambigú, servido extremo debían decidirse por el menos malo. Verificadas las eleccio-
en el aula teológica, y estando á la mesa, alguien dió la voz de ¡mue- nes triunfó Gómez Pedraza por el voto de once legislaturas contra el
ra Bravo! que D. Vicente Guerrero, que á la función había asistido de nueve que obtuvo Guerrero.
con toda su oficialidad, contradijo enérgicamente y reprimió la inso- Comprendieron los yorquinos la suerte que les aguardaba con aque-
lencia de quien la profirió. lla audaz maniobra de los elementos que habían creído aniquilar en
Tulancingo, y resolvieron disputar con las armas la victoria, ó hacer-
Señalado el 23 para decidir en la Cámara de Diputados la suerte de
la tan costosa que su enemigo llegase al poder debilitado y vacilante.
Bravo se citó á éste para que, si lo tenía á bien, concurriese á pre-
Al efecto influyó con D. Antonio López de Santa-Anna, incansable
senciar su juicio; pero Bravo contestó que no lo haría porque confiaba
agitador, el primero en alzarse por todo y contra todo, y á la vez
en la justicia de su causa y descansaba en la rectitud de sus intenciones.
partidario de Guerrero, y 110 le fué difícil impulsarle á proclamar,
Como era de esperarse, el Congreso declaró haber lugar á formación
como lo hizo en 16 de Setiembre, la nulidad de las elecciones en fa-
de causa, y el asunto pasó á la resolución de la Suprema Corte de
vor de Pedraza, la validez de las de Guerrero, y la total expulsión
de españoles como origen de los males públicos. Puesto fuera de la lieron de la Capital con todos sus bienes, en los días más angustiosos,
ley por el Congreso General y eficazmente combatido por el Gral. bajo la escolta de unos cuantos gendarmes á las órdenes del Capitán
Mora y el Coronel Rincón, que impidieron que Jalapa y Veracruz Rito Velasco, que en esa vez libertó las vidas é intereses de esos in-
secundasen el movimiento, Santa-Anna hubo de escapar al Estado felices, con valor y serenidad. . . . "
de Oaxaca, en donde dió gran impulso y fuerza á su rebelión, que Puesto que hablaba en defensa suya y de sus actos como autoridad
poco tardó en verse apoyada en diversas localidades y por distintos del Distrito, Tornel no pudo decir sino que todo había pasado del
jefes, y en estallar en la misma Capital por obra de D. Lorenzo de Za- mejor modo posible. Sin embargo, es falso que sólo la ruina del sa-
vala, director del formidable motín de 30 de Noviembre de dicho año queo hubieran tenido que lamentar los españoles europeos, según eran
de 1828, conocido por el motín ó revolución de la Acordada. llamados los que en México residían.
La pluma se resiste á entrar en detalles de aquella asonada que El famoso tenor D. Manuel García, sabedor de que su hija la Ma-
durante tres días afligió á la ciudad con toda clase de crímenes y atro- librán habíase embarcado para París, convencido de que en México
cidades, que terminó con la fuga de Pedraza y tuvo por epílogo el nada podría hacer, y deseoso de salir de aquella fragua de odios con-
saqueo del edificio ó bazar, que con el nombre de El Parían, fué por tra los españoles, despidióse de sus amigos de la Capital y después de
más de un siglo el emporio del comercio de nueva España, y que aún solicitar y obtener una escolta, con su familia se puso en camino para
en estado de decadencia, encerraba un valor en numerario y en efec- Veracruz. Bueno estaba México para teatros, y para convencerse de
tos que se hace subir á la enorme suma de dos millones y medio de ello basta leer El Sol de 1828, cuyos redactores, después de anunciar
pesos. "Durante la tarde del 4 y toda la noche se robó sin intermi- que, según sus corresponsales, la Malibrán estaba causando furor en
ción alguna, dice Tornel, y se cometieron crímenes de mucho tama- el teatro Italiano de París, " e n cambio, decían, nosotros nos vemos
ño, incluyéndose en ellos asesinatos á sangre fría, para disputar va- privados de los placeres que nos causaban García y Madamas Pel-
liosos ó miserables artículos que pasaban de las manos de unos ladro- legrini y Santa Marta y Prieto; falta tanto más sensible cuanto que
nes á las de otros. La devastación del Parián se asemejaba á la que todos conocíamos los adelantos de la Salgado al lado de Prieto y de
causa un voraz incendio; todas las puertas fueron desquiciadas y ro- Amada Plata al de García; hoy se ajustan cincuenta y dos días de
tas: algunos techos ardieron y 110 quedó ileso ni un mostrador, ni una cerrado el teatro por nuestras discordias civiles, y contamos por única
sola tienda. El empeño de azuzar al pueblo contra los españoles eu- diversión los espectáculos de Mr. Perinor, que en la calle del Espíritu
ropeos había producido sus efectos, y como eran ellos los propietarios Santo núm. 3, casa de la Marquesa de Miravalle, exhibe su aparato
del mayor número de los cajones del Parián, fácil fué á los instigado- solar megascomicroscópico, que nos permite ver la circulación de la san-
res marcarlo como botín de la inmoral guerra de que era presa la in- gre en los insectos, y una pulga de veinticinco ó treinta varas de su-
feliz ciudad." perficie . . . . "

" L a revolución había tenido por móvil y verdadero fin — continúa A pesar de su escolta, el artista español no pudo hacer sano y salvo,
diciendo Tornel — evitar que el Sr. Pedraza llegase á poseer la Presi- como los españoles protegidos por Tornel, el trayecto entre nuestra
dencia para que había sido nombrado; pero sea que los directores del Capital y nuestro primer puerto. " A l regresar á Europa, dice su no-
motín no considerasen esta causa de suficiente prestigio para agitar ticia biográfica publicada en el Diccionario de Orozco y Berra, Manuel
la masa del pueblo, sea que la fermentación de los ánimos tienda siem- García fué acometido en el camino de Veracruz por unos ladrones que
pre entre nosotros á señalar á los españoles como su blanco favorito, le despojaron de todo el fruto de su trabajo, por lo cual se vió preci-
lo cierto es que la expulsión de esos hombres desgraciados estaba en sado, así que llegó á París, á comenzar de nuevo á dar sus lecciones
todas las bocas. de c a n t o . . . . "
"Como Gobernador del Distrito y para evitar mayores perjuicios á Mucho tiempo busqué en periódicos y papeles de esa época porme-
los españoles, discurrí—habla D. José María Tornel—expedirles res- nores de ese asalto á García, ó informes siquiera del punto en que se
guardos, mientras que el Congreso resolvía definitivamente acerca de perpetró. No pude hallar nada en esas fuentes, pero consultando más
su suerte: estos documentos, repartidos de balde y profusamente, sal- •tarde la Relación de la Expedición Francesa del Almirante Baudin, es-
varon á los nativos de España, si no de la violencia, que estimé muy crita por Blanchard y Dauzats en 1839, me encontré que al describir
remota, sí al menos de investigaciones que los hubieran atormentado ese libro el camino que pasa al pie de las montañas de la Malinche y
mucho. Y no me limité á estas demostraciones; procuré seguridad á del Piñal, dice: "C'est dans ce défilé formé par les deux montagnes,
los que resolvieron abandonar la República; cuarenta españoles sa- que le célebre ténor García, pére de madame Malibrán, de glorieuse
et douloureuse mémoire, fut dépouillé par une bande de voleurs, du nicó al Gobernador del Distrito el Ministro de Relaciones D. José María
fruit des économies qu'il avait faites; non content de lui dérober Bocanegra, y el siguiente, 21, lo publicó por bando D. José María Tornel
son argent, ils le forcèrent à leur chanter un de ses airs favoris; ou y Mendívil, Coronel, Diputado y Gobernador del Distrito Federal.
ne se serait guère attendu à trouver des mélomanes parmi les voleurs D. Francisco del Moral, como Presidente de la Cámara de Diputados,
des savannes de l'Amérique!" y D. José Farrera, como Vicepresidente del Senado, habían firmado
Tal fué la ûltima y desgraciada aventura que Manuel Garcia corriô el decreto.
en sus expediciones en la América. Constaba de once artículos, y completábanle trece providencias acla-
ratorias: los españoles deberían salir de los Estados ó territorios un
i mes después de publicada la ley, y dentro de los tres siguientes deja-
rían la República, sin exceptuar más que á los impedidos físicamente,
y aun esto sólo mientras durase el impedimento, y á los hijos de ame-
CAPITULO V I I ricanos. En caso de no salir en los términos señalados, sufrirían una
prisión de seis meses en una fortaleza y serían embarcados después:
á los que careciesen de recursos se les costearía el viaje hasta un puerto
de los Estados Unidos, por cuenta de la Hacienda pública, y con la
182». más estricta economía: los exceptuados por impedimento físico no po-
drían avecindarse en las costas.
Consecuencia del triunfo de los amotinados de la Acordada fué que Tal fué en sus principales artículos aquella inicua é impolítica ley,
el nuevo Congreso General, instalado el x? de Enero de 1829, decla- cuya publicación constituye uno de los últimos actos del Gobierno de
rase á los pocos días insubsistente y de ningún efecto la elección de D. Guadalupe Victoria, ni próspero, ni feliz, ni tranquilo para su patria.
Gómez Pedraza y subsistentes y valederos los votos de las legislaturas Entre los males sinnúmero que formaron la triste herencia legada
que 110 habían sufragado por él. Acto continuo, la Cámara procedió á su sucesor, hubo de contarse el de hacer que se cumpliese el decreto
á la elección de Presidente de la República entre D. Vicente Guerrero de expulsión, tarea inicua que tocó llenar á D. Vicente Guerrero, quien
y D. Anastasio Bustamante, que seguían á aquél en número de votos, ocupóla Presidencia el día 1? de Abril de 1829. El mismo Zavala, que
y de las quince diputaciones que allí estaban representadas, la una- tanta culpa tuvo en ello, confiesa que, convencido de la injusticia de
nimidad votó por Guerrero para Presidente y la mayoría de trece por la medida, la combatió por medio de la prensa, aliándose al insigne
Bustamante para la Vicepresidencia. patriota y distinguidísimo escritor y hombre público, D. Andrés Quin-
El principal objeto de los yorquinos estaba logrado. Guerrero sería tana Roo: "difícil es, añade, resistir á la voz de la humanidad doliente,
Presidente de la República: faltaba sólo conseguir el que los rebeldes y el corazón sensible de un magistrado lo forzaba á 110 cumplir el de-
de la Acordada habían invocado como primero y primordial para al- creto con aquellas personas que se presentaban cargadas de familia y
zarse contra el Gobierno y encubrir el de la elección del héroe del Sur. de miseria, cuyo destino iba á ser el de perecer en un país extranjero,
El acta firmada en aquel edificio el 30 de Noviembre de 1828, dice: por falta de recursos y por los rigores del c l i m a . . . . La ley se dió más
" S e convino en adoptar el plan propuesto por el Sr. Cadena, reducido rigurosa, de manera que dejaba poco lugar á excepciones. . . . y mul-
" á que se pasara al Gobierno un oficio pidiendo que dentro de veinti- titud de gentes honradas Corrían por las calles de México buscando
" cuatro horas hiciera reunir en la Cindadela á todos los españoles resi- asilo para ocultarse á la terrible persecución. El hecho es que nume-
dentes en este Distrito, para ser de allí conducidos bajo escolta de nuestro rosas familias se vieron obligadas á abandonar el país para ir á perecer
" ejército para hacerlos embarcar." de miseria y de necesidad á los Estados Unidos, después de haber su-
Elevado el asunto al Congreso, en vano ilustres oradores le comba- frido maltratos y latrocinios infames por parte de los capitanes de bu-
t i é r o n l a mayoría le fué favorable, y el decreto se expidió sin que de ques de esa nacionalidad. Los expulsos más pudientes se trasladaron
nada sirviesen los lamentos y voces de misericordia de las esposas é á Francia. El resentimiento de todos se desbordó, como era de espe-
hijas de españoles, ni la exposición que á Guerrero presentaron aque- rarse, exagerando, en donde quiera que fueron, los vicios y defectos
llas infelices, poniéndose ante él de rodillas, según se dice. El decreto de una República que, como dice el escritor mexicano, tan rudo golpe
lo expidió y firmó en el Palacio del Gobierno Federal en 20 de Marzo daba á la civilización y al interés nacionales."
de 1829 el Presidente D. Guadalupe Victoria; el mismo día lo comu- Facultado el Gobierno para exceptuar de la aplicación de la ley á
et douloureuse mémoire, fut dépouillé par une bande de voleurs, du nicó al Gobernador del Distrito el Ministro de Relaciones D. José María
fruit des économies qu'il avait faites; non content de lui dérober Bocanegra, y el siguiente, 21, lo publicó por bando D. José María Tornel
son argent, ils le forcèrent à leur chanter un de ses airs favoris; ou y Mendívil, Coronel, Diputado y Gobernador del Distrito Federal.
ne se serait guère attendu à trouver des mélomanes parmi les voleurs D. Francisco del Moral, como Presidente de la Cámara de Diputados,
des savannes de l'Amérique!" y D. José Farrera, como Vicepresidente del Senado, habían firmado
Tal fué la ûltima y desgraciada aventura que Manuel Garcia corriô el decreto.
en sus expediciones en la América. Constaba de once artículos, y completábanle trece providencias acla-
ratorias: los españoles deberían salir de los Estados ó territorios un
i mes después de publicada la ley, y dentro de los tres siguientes deja-
rían la República, sin exceptuar más que á los impedidos físicamente,
y aun esto sólo mientras durase el impedimento, y á los hijos de ame-
CAPITULO V I I ricanos. En caso de no salir en los términos señalados, sufrirían una
prisión de seis meses en una fortaleza y serían embarcados después:
á los que careciesen de recursos se les costearía el viaje hasta un puerto
de los Estados Unidos, por cuenta de la Hacienda pública, y con la
182». más estricta economía: los exceptuados por impedimento físico no po-
drían avecindarse en las costas.
Consecuencia del triunfo de los amotinados de la Acordada fué que Tal fué en sus principales artículos aquella inicua é impolítica ley,
el nuevo Congreso General, instalado el x? de Enero de 1829, decla- cuya publicación constituye uno de los últimos actos del Gobierno de
rase á los pocos días insubsistente y de ningún efecto la elección de D. Guadalupe Victoria, ni próspero, ni feliz, ni tranquilo para su patria.
Gómez Pedraza y subsistentes y valederos los votos de las legislaturas Entre los males sinnúmero que formaron la triste herencia legada
que 110 habían sufragado por él. Acto continuo, la Cámara procedió á su sucesor, hubo de contarse el de hacer que se cumpliese el decreto
á la elección de Presidente de la República entre D. Vicente Guerrero de expulsión, tarea inicua que tocó llenar á D. Vicente Guerrero, quien
y D. Anastasio Bustamante, que seguían á aquél en número de votos, ocupóla Presidencia el día 1? de Abril de 1829. El mismo Zavala, que
y de las quince diputaciones que allí estaban representadas, la una- tanta culpa tuvo en ello, confiesa que, convencido de la injusticia de
nimidad votó por Guerrero para Presidente y la mayoría de trece por la medida, la combatió por medio de la prensa, aliándose al insigne
Bustamante para la Vicepresidencia. patriota y distinguidísimo escritor y hombre público, D. Andrés Quin-
El principal objeto de los yorquinos estaba logrado. Guerrero sería tana Roo: "difícil es, añade, resistir á la voz de la humanidad doliente,
Presidente de la República: faltaba sólo conseguir el que los rebeldes y el corazón sensible de un magistrado lo forzaba á 110 cumplir el de-
de la Acordada habían invocado como primero y primordial para al- creto con aquellas personas que se presentaban cargadas de familia y
zarse contra el Gobierno y encubrir el de la elección del héroe del Sur. de miseria, cuyo destino iba á ser el de perecer en un país extranjero,
El acta firmada en aquel edificio el 30 de Noviembre de 1828, dice: por falta de recursos y por los rigores del c l i m a . . . . La ley se dió más
" S e convino en adoptar el plan propuesto por el Sr. Cadena, reducido rigurosa, de manera que dejaba poco lugar á excepciones. . . . y mul-
" á que se pasara al Gobierno un oficio pidiendo que dentro de veinti- titud de gentes honradas Corrían por las calles de México buscando
" cuatro horas hiciera reunir en la Cindadela á todos los españoles resi- asilo para ocultarse á la terrible persecución. El hecho es que nume-
dentes en este Distrito, para ser de allí conducidos bajo escolta de nuestro rosas familias se vieron obligadas á abandonar el país para ir á perecer
" ejército para hacerlos embarcar." de miseria y de necesidad á los Estados Unidos, después de haber su-
Elevado el asunto al Congreso, en vano ilustres oradores le comba- frido maltratos y latrocinios infames por parte de los capitanes de bu-
t i é r o n l a mayoría le fué favorable, y el decreto se expidió sin que de ques de esa nacionalidad. Los expulsos más pudientes se trasladaron
nada sirviesen los lamentos y voces de misericordia de las esposas é á Francia. El resentimiento de todos se desbordó, como era de espe-
hijas de españoles, ni la exposición que á Guerrero presentaron aque- rarse, exagerando, en donde quiera que fueron, los vicios y defectos
llas infelices, poniéndose ante él de rodillas, según se dice. El decreto de una República que, como dice el escritor mexicano, tan rudo golpe
lo expidió y firmó en el Palacio del Gobierno Federal en 20 de Marzo daba á la civilización y al interés nacionales."
de 1829 el Presidente D. Guadalupe Victoria; el mismo día lo comu- Facultado el Gobierno para exceptuar de la aplicación de la ley á
los españoles que á su juicio lo merecieseu, publicáronse diversas lis-
y verso casi todos son españoles. No negamos el mérito de éstos, aun-
tas en que constaban los nombres de los agre ciados, y en una de ellas
que sean paisanos del mismo Cid Campeador, y sólo queremos alguna
encabezada así: "Lista de los españoles exceptuados de la ley de 20
consideración para nuestros lares y penates. ' De otra manera no po-
de Marzo de 1829 por impedimento físico temporal," se encuentra D.
drán justificarse los altos precios á que se asegura van á abonarse los
Andrés Prieto: no consta ni he podido averiguar cuál fué el impedi-
palcos y lunetas. Ya que el Ayuntamiento sacrifica á este objeto fon-
mento temporal que se prestó á que el distinguido actor español eva-
dos que podrían N hacer falta para otros de preferencia, que sea agra-
diese aquella pena común á sus compatriotas, de que no pudo eximirse
dando tanto á la opinión, que enmudezca.
otro actor español, por entonces casi inapercibido, y sin fama alguna,
y más tarde señalado y distinguido en primera línea. Me refiero á D. " Observamos con dolor que los ingenios mexicanos, favorecidos
Miguel Valleto, nacido en 1808, presentado como actor en Zaragoza tan singularmente por el Cielo, no se dedican á formar composicio-
á los diez y seis anos de edad, venido á Veracruz cuando apenas con- nes para el Teatro, cuando la historia de la antigua México abunda
taba diez y nueve, es decir, en 1827. En el de 1828 subió á la Capital y en sucesos dignos del sublime cantor de Ulises. ¿Por qué la viva-
trabajó en el Viejo Coliseo, sin que por entonces, repito, se señalase cidad de los mexicanos y las gracias de su entendimiento no han
más que por su juvenil y agraciada presencia y exquisitos y finos mo- de marchar sobre las huellas de Corneille y de Molière? Tene-
dales. Comprendido de lleno en la ley de 20 de Marzo de 1829, Miguel mos costumbres originales, y la invención encontraría un campo
Valleto hubo de salir del país en que más tarde había de dejar sus ce- ameno."
nizas y una familia artista como él, aunque en distinto ramo, y en El Sol, menos optimista, encontraba que las comedias eran mal
que es perdurable su memoria al par de la de Soledad Cordero, que elegidas y peor ejecutadas por Amador, " q u e cada d í a — dice,—des-
en ese mismo año de 1829 decididamente dejó el género coreográfico cubre un nuevo defecto, y aunque 110 dejan de salir Prieto y Garay,
para dar los primeros pasos en el cómico y dramático, aleccionada por el primero 110 representa nuevas piezas, y el segundo 110 sale de las
el insigne Andrés Prieto y por la excelente Agustina Montenegro, antiguas. La ópera cuenta con un cantante malo, el Sr. Ramati, al
pasada en años pero rica en talento escénico. que se le pueden dar los tres mil pesos que gana de sueldo con tal de
que no vuelva á cantar, y mejor sería repartirlos entre Plata, Cordero
Ignoro, vuelvo á decir, cuál fué el impedimento temporal que sirvió y otros, para justificar los altos precios de abono de diez y seis pesos
á Andrés Prieto para evadirse por entonces de la expulsión, pero el luneta y cien palco."
hecho es que en el Amigo del Pueblo encuentro un artículo relativo á
En efecto, en mi lista de las comedias representadas en ese año,
teatros, en que se decía: "Para la compañía de verso se ha ajustado
figuran, como en los anteriores, La Moza de cántaro, La mujer de dos
á Prieto y á los mejores actores y actrices, contándose entre las se-
maridos, Juana Calas, La Mujer firme, La Mogigata, La Juventud de
gundas á la mexicana Cecilia Ortiz. Desearíamos que se incluyese
Enrique V, El perro del Hortelano, Los inquilinos de Sir John ó la fa-
en la lista á la joven Guadalupe Munguía, que ha manifestado dispo-
milia de la India, El jugador, El amigo intimo, El sordo en la posada,
siciones muy excelentes, y que cultivaría con suceso al lado de ma-
La reconciliación, La Elmira, La Fulgencia, El diablo predicador, El
dama Dubreville, tan recomendable en su clase."
Agamenón y cien obras, buenas muchas, malas las más, y realmente
El artículo continúa con los siguientes conceptos, que recomiendo todas muy gastadas y vistas. E n t r e l o s bailes figuran: Las bodas de
como una demostración de la manera con que entonces se entendía Camacho, Las Ruinas de Palmira, La heroína americana, El fanàtico,
la libertad, y del criterio de nuestros patriotas y escritores públicos. El Macbet y La lucha de mar.
' 'El señor Gobernador del Distrito ha nombrado un censor ilustrado
La importancia de los sucesos políticos, quitaba la suya á los es-
para piezas de teatro, encargándole muy particidarmente que no aparez-
pectáculos. El 31 de Junio súpose en la Capital que pocos días antes
can en la escena reyes, si tío es para recomendar su muerte ó su castigo,
había desembarcado en Cabo Rojo á algunas leguas de Pueblo Viejo
cuando hayan infringido las santas leyes de la sociedad y de la natu-
de Tampico, un ejército español al mando de D. Isidro Barradas, que
raleza. De este modo corregirá la risa las costumbres, y el teatro será
en nombre de Fernando V I I debía procurar la reconquista de Nueva
una escuela de virtud.
España.
"Sabemos con sentimiento que caprichos de amor y celos impedirán
Este suceso, que venía esperándose de mucho tiempo atrás, sor-
tal vez que tengamos baile en la presente temporada. Recomenda-
prendió, sin embargo, á todo el país, al grado de que muchas perso-
mos al Ayuntamiento, por si aun fuese tiempo, esta Compañía, que
nas lo pusieron en duda y otras más lo negaron, suponiéndolo un ar-
es la única en que casi todos son mexicanos, cuando en las de ópera
did del Gobierno para arrancar á las cámaras facultades discrecionales
B. H. T . - T . ! • - 35
con que vengarse de sus numerosos enemigos y hacerse de recursos
en dinero. La completa derrota de los invasores se supo en México en la no-
Pero pronto se tuvo de un modo indudable la certeza del hecho, y che del 20 de Setiembre por un parte que D. Vicente Guerrero reci-
la justa indignación de los mexicanos unió por un momento sus di- bió hallándose en el Teatro Principal, en el que asistía á la repre-
vididas y aun opuestas voluntades, y es seguro que si Fernando V I I sentación de la comedia Un momento de imprudencia. En la emoción
no hubiese dispuesto, con la torpeza que distinguió siempre todos sus que experimentó el ilustre suriano, dió á comprender que algo fausto
actos, aquella expedición, y hubiérale dado elementos para sostener- pasaba, y hecho público el suceso, la concurrencia toda prorrumpió
se algún tiempo, toda la República habríase movido con patriótico en atronadoras aclamaciones de júbilo y siguió al Presidente que se
impulso sobre Barradas. trasladó á Palacio entre los vítores de la multitud entusiasta. En un
Por fortuna, tan necio alarde no estuvo apoyado con los formida- momento se cubrió la ciudad de improvisadas iluminaciones y los co-
bles elementos de guerra que más tarde desplegó la Francia, á cu- hetes y los repiques pusieron en vela á todos sus habitantes.
yas exigencias hubimos de sucumbir, y la República venció y ano- D. Vicente Guerrero, rodeado de cuanto había en la Capital, desde
nadó á bien poca costa á la reducida y mal aconsejada división de el más pobre hasta el más rico, confundido entre las oleadas de los
Barradas. que le hablaban á la vez y le llamaban el Padre de la Patria, sólo
Pero esto no podía saberse en los primeros instantes, y por lo mis- contestaba con lágrimas de gozo y recibía en sus brazos á toda clase
mo, la facilidad de la victoria no quita su mérito al entusiasmo con de ciudadanos, entre los que no se conocía en aquellos felices mo-
que todo mexicano se preparó á haber cooperado á ella. mentos ninguna diferencia de partidos ni opiniones. Parecieron ha-
Como era de esperarse y de disculparse en ese momento, el odio á ber desaparecido, en aquella noche de general alegría, el odio y el
los españoles llegó á un período álgido, y los ingenios y las imprentas resentimiento.
se desataron en invectivas contra ellos. Toda venganza, toda repre- En la del 1? de Octubre, llegaron á la Capital los oficiales Mejía,
salia quedó permitida y aun autorizada, y un himno que la plebe voci- Stávoli, Wol y Beneski, conduciendo las banderas tomadas al ene-
feraba á todas horas y por todos lados, incitaba al combate contra ellos, migo. El Presidente dispuso dedicarlas á la Virgen de Guadalupe
poniéndolos en peor condición que á perros callejeros, á los que 110 se- y ofrecer ese trofeo á la patrona de los mexicanos. Nada faltó á es-
ría un crimen exterminar.—Hé aquí el estribillo ó coro de ese himno: ta augusta ceremonia, viéndose la calzada que se extiende desde
México á la Villa de Guadalupe, cubierta de un gentío inmenso, que
" A la lid, á la lid, mexicanos; saludaba á D. Vicente Guerrero con aclamaciones de una alegría sin-
alentad, preparad los mastines; cera y legítima.
no mancháis vuestras diestras, hermanos, Los poetas pulsaron sus liras (no me atreveré á llamarlas de oro),
sólo vais á matar gachupines." y produjeron odas, cantos épicos, coplas é himnos infinitos, cuyo mé-
rito dejo á juicio de mis lectores, presentándoles breves muestras
El patriotismo en esa vez se sobrepuso á todas las dificultades y para que califiquen.
suplió cuanto pudo necesitar el Gobierno de la época. El Gral. D. D. Luis Antepara fué autor de un himno que comenzaba así:
Antonio López de Santa-Anna, con arrojo y resolución altamente
meritorios, fué el primero en improvisarlo todo, lo mismo las tropas " D e Terán y Santa-Anna las frentes
que los recursos, y pronto cayó sobre el ejército invasor, que, victo- con el lauro de Palas cubrid.
rioso en los primeros combates, perdió todas sus ventajas por las tor- ¡Vivan, vivan los dos vencedores
pezas de su jefe, por la insalubridad del clima y por la astucia de de los hijos guerreros del Cid!
Santa-Anna, que no perdonó medio que le condujese al fin de escar- "Cual relámpago brilla en el cielo,
mentar al audaz é insolente invasor, quien se vió precisado á capi- en la espléndida lucha brillaron
tular el 11 de Setiembre del mismo año de 1829, después de haber las espadas que invictos sacaron
perdido en acción de guerra y á resultas de la peste terrible que se mil guerreros de lustre inmortal.
desarrolló con los calores y las lluvias en el campamento español, ' 'A Landero y á Lemus y á Iberri
mil setecientos ocho hombres de los tres mil quinientos que, según arrayanes y mirtos y rosas,
D. Manuel de Mier y Terán, desembarcaron. y las cítaras más sonorosas,
y la oliva, el amor y la paz.

277

" Y a Santa-Anna á la América puso dirán: " S i al gachupín bate Santa-Anna


en su globo divino asentada, el triunfo es de la patria mexicana." -
de diamantes y perlas ornada,
nos anuncia las dichas y el bien;
Del mismo D. Jacobo Amat son las dos siguientes estrofas de
"Celestial su sonrisa nos dice silva:
que del mundo será la señora,
que aproximan los cielos la aurora "¡Oh Hidalgo, Allende, Aldamas y Morelos,
de su grande y eterno poder. Matamoros invicto, ilustre Bravo,
' 'A la bóveda suba del cielo que allá desde la altura de los cielos *
del gran pueblo la bélica gloria, habéis llevado al cabo
y en sus páginas diga la historia la justa independencia comenzada
que es ya México libre y feliz. que con vidas tan dignas fué comprada;
"¡Cuál la palma del triunfo en la mano recibid héroes divos la memoria,
con un plácido orgullo tenemos! que hoy la patria felice en oblación,
Seis millones de libres sabremos dignamente consagra á vuestra gloria,
ó salvar nuestra patria ó morir." y pues el Septentrión
se mira libre del furor hispano,
reconozca tal suerte á vuestra mano!
De D. Jacobo Amat son las siguientes octavas á la gloria de las
armas nacionales:
" Y a no Fernando Séptimo, el tirano
" Y a el ibero rindió la frente altiva eres de la pupila americana,
al valor de las armas mexicanas: ya tu mano de bronce, tu cruel mano,
vió frustrada su torpe tentativa, á pesar de tu gana,
sus necias esperanzas las vió vanas: no osará descender á la cerviz
nuestra valiente tropa siempre viva de la nación que hicistes infeliz.
pues supo castigar plantas profanas, Está ya constituida; ya sus leyes,
que tuvieron, osadas, el arrojo bajo el sabio sistema federal,
de ocupar nuestra playa en Cabo Rojo. detestan á los reyes
y queriendo ser justa y liberal,
"Triunfó Santa-Anna del usurpador, para siempre arrojó tu despotismo
bárbaro, fiero, español tirano; á la caverna oscura del abismo."
mostró en Tampico todo su valor
batiendo brioso al orgulloso hispano, Un aficionado, D. J . A. S. B., produjo la siguiente décima-.
¡Oh joven General! eterno loor 1
te canta agradecido el mexicano, "¿Qué hará Vives en la Habana
que á tu brazo concede y á tu espada cuando vea que á sus soldados
honor, valor y lustre de su armada. vencidos y desarmados
se los remite Santa-Anna?
"Héroe divino, castigaste brioso ¡Viéralo de buena gana!
el temerario arrojo del ibero; y con voz muy varonil
pero ¿cuándo creyó que victorioso diríale á ese esclavo vil:
no salieras al fin México entero? ¿qué tal fué de borbonistas?
Aquí las gentes llenas de alborozo ¿cómo va de reconquistas?
y de confianza á tu vibrante acero, ¿No envías otros cuatro mil?"
J

En la función dedicada por los moradores del barrio de Regina á del candidato, eleváronle á la Presidencia, causa de todas las desgra-
celebrar el triunfo de Tampico, se hicieron célebres las siguientes cias é infortunios del héroe suriano. Su tardanza en desprenderse de
octavas: su Ministro Zavala, odioso á la generalidad; en despojarse de las
facultades extraordinarias que se le otorgaron al desembarco de Ba-
Dijeron Santa-Anna y Terán. rradas; la confianza Cándida con que permitió á D. Anastasio Bus-
tamante seguir al frente del ejército de reserva acantonado en Jalapa,
" H u y e , Barradas, al inmenso Océano cuando no era de temerse que España intentase ya reconquista alguna,
y sepulta en su abismo proceloso decidieron su rápida caída del puesto de Presidente que tan ilegal-
esas Huestes serviles del tirano mente ocupaba. *
que intenta perturbar nuestro reposo; E l susodicho ejército de reserva se pronunció el 4 de Diciembre
huye y respeta al libre mexicano contra Guerrero, ofreciendo la suprema jefatura á Bustamante, que
que humilla la cerviz del león furioso; la admitió incontinenti, y cuando el héroe suriano, cediendo á Boca-
huye y dile á t u rey, á ese impotente, negra la Presidencia, salió contra los rebeldes, la Capital se adhirió
que México ya es libre, independiente." al pronunciamiento de los jalapistas y creó un poder Ejecutivo for-
mado por D. Pedro Vélez, D. Luis Quintanar y D. Lucas Alamán,
que aunque opuestos en ideas, estrecharon amistad, al decir uno de
Respondió Barradas.
ellos: "contra estos malvados todos somos u n o s . " Guerrero, aban-
donado por su misma escolta, decidió retirarse á la vida privada, y
' 'Si arrogante intenté la reconquista así lo comunicó al Congreso, y en 31 de Diciembre de 1829, Busta-
de este pais de mi rey infortunado, mante entró victorioso en la Capital, y como Vicepresidente que era,
me apoyé en el partido borbonista, se encargó del gobierno de la República.
que en mil folletos me tenía anunciado.
Los poetas de aquella reacción cantaron su triunfo y la derrota de
¿Pero dónde se encuentra? A nuestra vista
Guerrero, víctima expiatoria de los crímenes del yorquinismo, con una
furiosos hombres se han presentado
marcha patriótica cuyo estribillo ó coro decía:
que conservan su ser independiente
y humillan la cerviz del león rugiente."

" Ya respiran los hombres virtuosos,


Para honor de las letras mexicanas, no fueron las citadas las úni- la justicia del crimen triunfó,
cas composiciones que cantaron ese triunfo. Eas hay del mérito que los perversos se miran destruidos,
falta á éstas, y con gusto citaría alguna de sus estrofas, pues las fir- de las leyes se escucha la voz.''
man D. Joaquín del Castillo y Lanzas, D. Francisco Ortega y D.
Francisco Manuel Sánchez de Tagle; pero ninguna es de la época
del triunfo de Tampico sino m u y posteriores, como que fueron escri- Otro poeta enderezó su péñola contra los caídos y dió á luz el si-
tas en las buenas épocas de Santa-Anna, y para halagarle en días guiente soneto, titulándolo paralelo entre los médicos Zavala y Bus-
de prosperidad. Por lo tanto ni pueden ni deben caber aquí. tamante:
Reanudemos, pues, nuestras referencias á la historia política de
aquellos afios, distantes por fortuna. "¿Qué mucho que Zavala impunemente
En México, país de impresiones, las glorias y las famas duran po- al político cuerpo americano
co, y pasados los primeros días de festejos por la victoria de Tampi- lo dejase tan débil, tan insano,
co, el Gral. D. Vicente Guerrero volvió á ser el blanco de las cen- si lo sangró tan repetidamente?
suras que le valieron las torpezas, abusos y errores de sus consejeros, "¿Qué mucho que este médico imprudente
á quienes desgraciadamente se sometió casi de un modo incondicio- no dejase del cuerpo hueso sano,
nal, ya por lo débil y corto de su carácter, ya porque no pudiese elu- si no pudo escaparse de su mano
dir la influencia de quienes, más por interés propio que por méritos ni su benefactor el Presidente?
vl^---
" Mas por contrario imperio, Bustamante, vez de recurrir á ese expediente de la incapacidad moral, se hubiese
tú, médico también, le diste vida declarado, como se hizo con la de Pedraza, insubsistente la elección
á la pobre nación, que ya fluctuar.te, de Guerrero."
"Víctima pudo ser de un homicida, Tal fué el origen del poder del partido que, según Alamán, se for-
mereciendo t u fama ser brillante mó "de los restos de los escoceses, y de toda la gente respetable que
y entre nuestros campeones distinguida." había entre los yorquinos, y del clero, y del ejército y de toda la cla-
se propietaria, tomando la denominación de partido de los hombres de
Ese mismo vate új(Dtro que valía tanto como él, compuso y publicó bienr
el siguiente epitafio: Ese partido hizo mucho bueno por el progreso de los espectáculos
públicos en México, pero ese asunto lo será del siguiente capítulo.
" E n este oscuro agujero
York, alfin,quedó sumido:
murió solo y desvalido
y nació de un extranjero.
"¡Oh! sensible pasajero CAPITULO VIII
que pisas estos lugares!
Mira á aquel por quien á mares
derraman lágrimas tiernas
las cárceles, las tabernas, 1830.—1831.
garitos y lupanares."
En el año de 1830, primero del gobierno jalapista, no fué grande
el impulso dado á nuestro teatro, porque los gobernantes apenas en
El extranjero á quien en esa décima se alude, fué Mr. Joel Poins-
verdad tuvieron tiempo para más que combatir la revolución que se
set, funesto Plenipotenciario'americano, que, al ver la derrota de
encendió en el Sur, acaudillada por Guerrero, Alvarez y otros; en
sus hechuras, salió para los Estados Unidos el domingo 3 de Enero
San Luis, por Márquez y Gárate; en Michoacán, por Salgado y Coda-
de 1830. El >Stf/dijo al dar noticia d é l a marcha de Poinsset: "al huir
llos, y en Puebla, por Rosáins. Como éste no es un libro de historia,
de entre nosotros el famoso autor del yorquinismo, va acompañado de
aunque en él se toque todo aquello que sirva para explicar los moti-
millones de maldiciones."
vos de decaimiento ó de adelanto de nuestros espectáculos, no haré
A los pocos días de instalado Bustamante en la Presidencia, el Se- referencias á la energía desplegada por el Gobierno para reprimir la
nador Pacheco Leal propuso se declarase al Gral. Guerrero imposibili- revolución, sin pararse en medios, lo cual dió á la guerra un horrible
tado para gobernar la República. Abierto dictamen sobre esta propo- carácter de ferocidad.
sición, los miembros de la Cámara encargados de extenderle, opinaron
E l Teatro Principal vivía miserablemente con las Ruinas de Pal-
que no debiendo considerarse al héroe como un obstinado delincuente,
mira,, Felipa la Lavandera, La Llave falsa, La huérfana de Tlalnepan-
sus faltas y errores debían estimarse hijos de su incapacidad moral,
tla, La niña en casa y la madre en las máscaras, Si se empeña una mu-
efecto de su absoluta ignorancia, que es una grave enfermedad del alma.
jer no hay remedio que ha de ser, El Babú y otras.
Pasado el 18 del mismo Enero el dictamen á la Cámara de Diputa-
E n varias ocasiones cantábase alguna cosa, allá como se podía: en
dos, en vano el ilustre Quintana Roo se opuso á aquel atentado, ob-
uno de los programas de mi colección se lee: "Consecuente á lo que
servando con justicia que los hechos de Guerrero podrían probar ma-
se tiene ofrecido, cantará la Sra. Pellegrini la cavatina y dúo de la
la administración, pero no incapacidad moral, y el día 4 de Febrero
ópera intitulada El Turco en Italia."
se publicó el Decreto declarando, sin más explicaciones, que el Gral.
En una revista de espectáculos del mes de Mayo, se dice: "Mag-
D. Vicente Guerrero tenía imposibilidad para gobernar la República.
nífico espectáculo tuvimos á la vista la noche del domingo 9 del co-
" C o m o esta declaración en nada tocaba á los actos electorales,—
rriente en el Teatro de esta Capital; el agradable y crítico argumento
dice Alamán —Bustamante quedó gobernando como Vicepresidente de la comedia titulada La escuela del gran tono; la propiedad, exacti-
sin ninguna contradicción, cosa que no habría podido hacerse si en tud y buen gusto con que fué representada, fueron sin duda los obje-
R. H. T.—T. I.—3ti
vl^---
" Mas por contrario imperio, Bustamante, vez de recurrir á ese expediente de la incapacidad moral, se hubiese
tú, médico también, le diste vida declarado, como se hizo con la de Pedraza, insubsistente la elección
á la pobre nación, que ya fluctuar.te, de Guerrero."
"Víctima pudo ser de un homicida, Tal fué el origen del poder del partido que, según Alamán, se for-
mereciendo tu fama ser brillante mó "de los restos de los escoceses, y de toda la gente respetable que
y entre nuestros campeones distinguida." había entre los yorquinos, y del clero, y del ejército y de toda la cla-
se propietaria, tomando la denominación de partido de los hombres de
Ese mismo vate új(Dtro que valía tanto como él, compuso y publicó bienr
el siguiente epitafio: Ese partido hizo mucho bueno por el progreso de los espectáculos
públicos en México, pero ese asunto lo será del siguiente capítulo.
" E n este oscuro agujero
York, alfin,quedó sumido:
murió solo y desvalido
y nació de un extranjero.
"¡Oh! sensible pasajero CAPITULO VIII
que pisas estos lugares!
Mira á aquel por quien á mares
derraman lágrimas tiernas
las cárceles, las tabernas, 1830.—1831.
garitos y lupanares."
En el año de 1830, primero del gobierno jalapista, no fué grande
el impulso dado á nuestro teatro, porque los gobernantes apenas en
El extranjero á quien en esa décima se alude, fué Mr. Joel Poins-
verdad tuvieron tiempo para más que combatir la revolución que se
set, funesto Plenipotenciario'americano, que, al ver la derrota de
encendió en el Sur, acaudillada por Guerrero, Alvarez y otros; en
sus hechuras, salió para los Estados Unidos el domingo 3 de Enero
San Luis, por Márquez y Gárate; en Michoacán, por Salgado y Coda-
de 1830. El Stf/dijo al dar noticia d é l a marcha de Poinsset: "al huir
llos, y en Puebla, por Rosáins. Como éste no es un libro de historia,
de entre nosotros el famoso autor del yorquinismo, va acompañado de
aunque en él se toque todo aquello que sirva para explicar los moti-
millones de maldiciones."
vos de decaimiento ó de adelanto de nuestros espectáculos, no haré
A los pocos días de instalado Bustamante en la Presidencia, el Se- referencias á la energía desplegada por el Gobierno para reprimir la
nador Pacheco Leal propuso se declarase al Gral. Guerrero imposibili- revolución, sin pararse en medios, lo cual dió á la guerra un horrible
tado para gobernar la República. Abierto dictamen sobre esta propo- carácter de ferocidad.
sición, los miembros de la Cámara encargados de extenderle, opinaron
E l Teatro Principal vivía miserablemente con las Ruinas de Pal-
que no debiendo considerarse al héroe como un obstinado delincuente,
mira,, Felipa la Lavandera, La Llave falsa, La huérfana de Tlalnepan-
sus faltas y errores debían estimarse hijos de su incapacidad moral,
tla, La niña en casa y la madre en las máscaras, Si se empeña una mu-
efecto de su absoluta ignorancia, que es una grave enfermedad del alma.
jer no hay remedio que ha de ser, El Babú y otras.
Pasado el 18 del mismo Enero el dictamen á la Cámara de Diputa-
E n varias ocasiones cantábase alguna cosa, allá como se podía: en
dos, en vano el ilustre Quintana Roo se opuso á aquel atentado, ob-
uno de los programas de mi colección se lee: "Consecuente á lo que
servando con justicia que los hechos de Guerrero podrían probar ma-
se tiene ofrecido, cantará la Sra. Pellegrini la cavatina y dúo de la
la administración, pero no incapacidad moral, y el día 4 de Febrero
ópera intitulada El Turco en Italia."
se publicó el Decreto declarando, sin más explicaciones, que el Gral.
En una revista de espectáculos del mes de Mayo, se dice: "Mag-
D. Vicente Guerrero tenía imposibilidad para gobernar la República.
nífico espectáculo tuvimos á la vista la noche del domingo 9 del co-
" C o m o esta declaración en nada tocaba á los actos electorales,—
rriente en el Teatro de esta Capital; el agradable y crítico argumento
dice Alamán —Bustamante quedó gobernando como Vicepresidente de la comedia titulada La escuela del gran tono; la propiedad, exacti-
sin ninguna contradicción, cosa que no habría podido hacerse si en tud y buen gusto con que fué representada, fueron sin duda los obje-
R. H. T.—T. I.—3ti
283
tos más cumplidos y satisfactorios. Mas por desgracia, 110 faltó entre
los actores quien se presentara con mucha impropiedad, pues el que de guía al hijo de Ulises; pero no nos desconsolemos tan anticipadamen-
desempeñaba el papel de Conde de la Culebra, se mostró en la escena te, persuadiéndonos de que Maldonado no corresponda á la confianza
con frac azul y pantalón blanco, vestido no propicio á semejante per- del director, pues ya conocemos su aplicación y esmero en los papeles
sonaje ni á la sociedad donde se hallaba. Las decoraciones no cum- que ejecuta en los bailes de Macbeth y de la Heroína. Persuádase ñ¡
plieron tampoco su objeto, porque es cosa muy notable que en la casa nal mente el articulista, de que el baile del Telémaco no será menos
de la Condesa de Talco, y á la que concurrían personas de alta cate- brillante y digno del buen gusto de los mexicanos, porque el Sr. Mal-
goría, hubiese por culorno una decoración con dosel y pocos muebles donado desempeña en él un papel principal."
de ostentación y lujo. Las luces faltaron á buen tiempo; de manera Discusión tan baladí fué digna de aquellos público y escritores que
que cuando se acabó el tercer acto, apenas se podían distinguir los en su Cándida vanidad se repetían, cuando hasta allí todo actor ó can-
objetos, y los directores deberían tomar algunas medidas respecto á tante notable había sido traído de fuera, ¿r necesario confesar que en
ese ramo. esta República hay elementos sobrados para todo.
"Parece que sólo falta dedicación y empeño para que nuestro tea- La creencia era falsa de toda falsedad; y por más esfuerzos que
tro tenga un buen brillo, pues el ciudadano José María Miranda, direc- Pautret hizo para sostener abierto el teatro, no pudo conseguirlo, fal-
tor de canto, nos ha presentado á la joven María López, de edad de tándole como le faltaban los primeros actores directores, Prieto y Ga-
catorce años, cuyos conocimientos, buena disposición y mejor voz, ray, que en su calidad de españoles habían salido de la República y
hacen sorprendentes sus canciones, á lo que debe agregarse el buen se encontraban en la isla de Cuba.
gusto de su maestro, ya en la elección de sus piezas, y ya en el modo En tal estado las cosas, el gobierno de D. Anastasio Bustamante
de desempeñarlas. A más de esto, se conoce que alguna señora se ha decidió ponerles remedio, facultando al Coronel D. Manuel Barrera
decidido enteramente á perfeccionarla en sus acciones y ademanes para llamar al país actores españoles, y promover la resurrección de
teatrales, cuyo nombre callo porque conozco su modestia; y en fin, es nuestros muertos Coliseos.
necesario confesar que en esta República hay elementos sobrados para todo. Al efecto, le pasó el siguiente oficio: "Primera Secretaría de Esta-
"Concluyamos con una reflexión concerniente al mismo asunto: d o . - D e p a r t a m e n t o del Interior.—Sección S e g u n d a . - D e s e a n d o el
hemos sabido que se está ensayando un nuevo baile nunca represen- Excmo. Señor Vicepresidente proporcionar á los habitantes de esta
tado en este teatro, y que por su argumento y disposición será sin Capital una compañía de teatro, digna de su ilustración, en los ramos
duda el mejor de cuantos hemos visto. La llegada de Telémaco á la de verso, canto y baile, y bien penetrado de las cualidades que ador-
isla de Calipso, presenta un campo demasiado ameno para hacer sobre nan a V. S. para llenar los indicados deseos, ha tenido á bien S E
él muy grandes representaciones; pero el Sr. Pautret ha dado el papel comisionarle para que, asociado á los demás individuos que han pro-
de Mentor, uno de los primeros actores de este emblema, al ciudadano puesto hacer algunas anticipaciones, se sirva practicar cuanto sea
Tomás Maldonado, que aunque desempeña muy bien sus papeles, no necesario al efecto, formando y presentando á esta Secretaría el Re-
está en su categoría éste, y estaría mucho mejor que el Sr. Pautret glamento que V. S. estime conveniente.—Dios y Libertad.—México
hiciera á la gran diosa Minerva bajo la figura de aquel virtuoso y an- 2 de Octubre de i83o.—Alamán.—Sr. Coronel D. Manuel Barrera."
ciano ayo á quien Telémaco debió la perfección de sus virtudes y ta- Lástima es que cuando esta ocasión se nos presenta de hacer un
lentos." elogio de ese Gobierno, la pluma se rebele contra ese propósito y por
A este artículo contestó el representante en él aludido, mostrando sentimientos de humanidad y de horror impulsada, se niegue á trazar
extrañeza por la indicación de no parecerle bien que se hubiese en- todo cuanto no sea censura y anatema á una de las más infames trai-
cargado al ciudadano Tomás Maldonado el papel de Mentor <tn el nuevo ciones que la historia registra.
baile Telémaco en Calipso: "en obsequio del mérito de Maldonado— Mientras aquel signo de civilización daba el gobierno jalapista, sus
decía la réplica—debo manifestar que, aunque no puede compararse prohombres maquinaban con el vil genovés Francisco Picaluga de
con el Sr. Pautret, que en el arte mímico es inimitable, no por eso paso en México, la compra de la vida de un compatriota y de un hé-
debe juzgársele incapaz de desempeñarlo, y esto mismo ha debido te- roe insurgente, el infortunado Gral. D. Vicente Guerrero. Las mil
y una rebeliones que por donde quiera venían brotando, no se dejaban
ner presente el Sr. Pautret, como director del ramo, para encargár-
sofocar ni por las derrotas ni por los cadalsos, y el ilustre incapacitado
selo. E s muy cierto que el Sr. Pautret desempeñaría admirablemente
por la Cámara de 1830, seguía siendo el centro y espíritu de aquellas
el papel de Minerva, que bajo el aspecto de un sabio anciano servía
manifestaciones de disgusto que surgieron á raíz misma del triunfo de
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los conspiradores del Ejército de Reserva. Bustamante quiso concluir que se encuentran entre los actores que están trabajandb'hoy, dos ó
de una vez, y su gobierno compró en cincuenta mil pesos al Capitán tres aplicados, pundonorosos y susceptibles de grandes adelantamien-
del "Colombo" la entrega del caudillo suriano. Innecesario es contar tos en su difícil arte, es también preciso convenir en que los esfuer-
á mis lectores ese drama espantoso que nadie desconoce. Todos ellos zos aislados de éstos, sin el auxilio de otros que los acompañen en la '
saben que el geuovés, repudiado por su misma patria, que de haberle escena, no podrán producir la complacencia á que aspira el concurso
dado vida se avergonzó, cumplió su palabra entregando en 20 de Enero de espectadores. f ...
de 1831 y en el puerto de Huatulco la persona de D. Vicente Guerrero, " A s í es, que para organizar una Compañía cómica y trágica que .
al cual los sicarios jalapistas, tras una apariencia de juicio militar, merezca atención y no cause tedio y fastidio, tropezó luego la Em-
fusilaron en Cuilapa el 14 de Febrero del mismo año. presa con el inconveniente que le presentaba la absoluta escasez de
Con ánimo, sin duda, de borrar la impresión dolorosa que la noti- artistas de uno y otro sexo, y ha sido indispensable ocurrir en su so-
cia de ese atentado de lesa humanidad y lesa patria había de causar, licitud fuera de los domicilios de la República, y hasta el día no pue-.
ue-,
con fecha 13 del citado Febrero de 1831, el Coronel D. Manuel d é l a de presentarse al público la lista de cuáles sean éstos, porque aun 110'"
Barrera publicó una especie de manifiesto relativo á la misión que en llegan las contestaciones de que está pendiente con relación á este
2 de Octubre anterior habíanle confiado. punto.
El Coronel empresario decía así: " E o s gravísimos acontecimientos " D e los actores existentes aquí, se hallan contratados los Sres. Sal-
políticos que han ocupado la atención del Supremo Gobierno, no han gado y Bustamante; el Sr. Carlos Palomera 110 lo está también, por-
impedido que dirigiese un día una ojeada cuidadosa sobre el teatro, que no se conforma con el sueldo de dos mil trescientos pesos que le
y notase la extrema decadencia en que se ha precipitado el de esta ofreció la Empresa en el año cómico, dándole además una función de
Capital, pues la ilustración y buen gusto mexicanos echan menos una tarde en día festivo en clase de beneficio. A la joven Soledad Corde-
diversión que siempre le ha sido grata y preferida á los demás espec- ro, que comienza ahora á adquirir una opinión y habilidad cómica se
táculos; y deseoso de restablecerla, tuvo á bien comisionarme para le han ofrecido dos mil pesos, porque se comprometa á desempeñar
que procediese á organizarlo en los términos más adecuados y pro- los papeles que, según su disposición para el arte, le reparta el direc-
pios para obtener la aprobación y complacencia del público. tor del ramo de verso, y tampoco ha admitido el precio indicado, pre-
"Inmediatamente se procedió á calcular y combinar los medios que tendiendo absolutamente el sueldo de tres mil pesos, á lo que la Em-
parecieran más á propósito para llenar las miras del Excelentísimo presa 110 puede acceder sin exponerse á experimentar muy graves y
Señor Vicepresidente, y se adoptaron los que se creyeron capaces de co- seguros perjuicios.
rresponder mejor para el logro de una empresa tanto más embarazo- " L a Sra. Agustina Montenegro, apreciando las proposiciones que
sa y difícil, cuanto que 110 se encontraban en toda la extensión de la la Empresa le hizo, contestó que no podía comprometerse desde aho-
República los elementos necesarios para realizar su plan, por la no- ra, por impedirlo el mal estado de su salud, pero que avisaría en cuan-
toria escasez de actrices y actores en todos los ramos que componen to se encontrase en tan buena disposición que no temiera faltar á sus
la armonía del teatro, careciéndose de habilidades que fueran dignas compromisos.
1
y proporcionadas al buen gusto del ilustrado público á cuya especta- ' El Sr. Melquíades tampoco ha admitido mil pesos que se le ofre-
ción se han de presentar. cieron, 110 habiéndoseles hablado á otros actores, porque no conside-
'' Eos concurrentes al teatro en la temporada cómica que está ex- rándolos en la clase de primeros ni segundos, se espera hacerlo cuan-
pirando, 110 necesitan se les repita la debilidad de la Compañía que do se tenga organizado el cuerpo principal de la Compañía, de cuya
actualmente lo ocupa, puesto que la tienen á la vista, siendo, con la reunión debe resultar el número de terceras y cuartas plazas que sean
pequeña diferencia de dos ó tres actores y actrices que se hallan en necesarias para su entero complemento. E l primer apuntador está
los teatros de Guadalajara y Puebla, la reunión de los más sobresa- también ajustado, y el segundo puede considerarse que lo quedará
lientes y señalados en el arte escénico que existe en la República, igualmente, por ser muy corta la diferencia que ha detenido la con-
restos tristísimos de las bellas Compañías que amenizaron en los años clusión del contrato.
de 1825, 26 y 27. " A la joven Guadalupe Munguía, se le han ofrecido dos mil qui-
"Pero aunque todos se hallasen en esta Capital, es innegable que 110 nientos pesos y un beneficio en la tarde de un día festivo, por la obli-
podrá formarse una Compañía de representado, digna de la fina deli- gación de desempeñar papeles que en su clase le señale el director
cadeza del público mexicano, y confesando en obsequio de la verdad en el ramo de verso, y aun 110 acaba de decidirse, renunciando á la
p r e t e n s i ó n i cuatro mil pesos que solicita, los que tampoco puede " A l Sr. Gorostiza se le ha recomendado también, para'organizar
acordarle la Empresa, siu caer en los inconvenientes y pérdidas efec- el ramo de verso, el ajuste y remisión de un primer actor cómico y trá-
# ti vas que procura cuidadosamente evitar. gico, dos ídem segundos, un ídem tercero, un primer barba, un segundo
" Ea Sra. Amada Plata y el Sr. Estremerà, que se hallan actual- ídem y dos graciosos; una dama primera, dos segundas jóvenes, unagrá- *
mente en Guadalajara, están aún pendientes de las contestaciones que ciosa, una actriz para matronas y ancianas y una sobresaliente general,
necesita resolver la Empresa para combinar sus contratos respectivos. para lo cual se han situado en Europa los caudales necesarios, tanto
A la Sra. Rubio de Pautret se le han pasado las condiciones y noti- para sus transportes, como para las anticipaciones que sea menester
cia del sueldo que puede ofrecérsele por su habilidad mímica y bailes, hacerles; en la inteligencia de que estos caudales los han franqueado
y aun no ha dado su terminante resolución. El Sr. Pautret está com- generosamente varios ciudadanos mexicanos y extranjeros, sin otro
prometido para la composición de los bailes grandes, en unión de otro interés que el anhelo de sacar el teatro del estado de anonadamiento
compositor y autores de su ramo que se esperan de Francia, habién- á que se halla reducido, y contribuir al logro de los deseos del Supre-
dose escrito al Sr. D. Tomás Murphi, Cónsul de nuestra República mo Gobierno respecto de tan interesante establecimiento, destinando
en dicho país, para que ajustase y dirigiese á esta Capital dos baila- los sobrantes que pueda producir la empresa al fomento y auxilio de
rinasprimeras, dos bailarines primeros y un segundo compositor y baila- casas de beneficencia pública.
rín grotesco, cuyos actores, unidos á los que aquí se hallan y á los alum-
nos de la escuela de Pautret para cuerpo de baile, compondrán una com- "Para que se consigan todas las ventajas de que es lícito lisonjearse,
pañía capaz de presentar espectáculos dignos del pueblo mexicano. ha hecho el Excmo. Señor Ministro de Relaciones en su Memoria pre-
sentada á las augustas Cámaras de la Unión, una iniciativa para que
" Para dar fomento á este ramo tan agradable en la escena, la Em- se destinen veinte mil pesos anuales á favor de la subsistencia de las
presa ha admitido la proposición que le ha hecho el mencionado Sr. compañías de teatro, único modo de que no decaiga ni retrase su mar-
Pautret, ofreciendo establecer una escuela gratuita de baile, en la que cha; bien entendidos de que bajo el método, arreglo y economía con
se admitirán y aleccionarán todas las niñas, niños y jóvenes de am- que está planteado el proyecto de la Empresa, es muy difícil que se
bos sexos que gusten aprender en ella, y cuyas familias convengan experimenten las desgracias que lo han sumergido en su situación
en que se dediquen á este arte, proporcionando la Empresa el local y actual, y que los fondos destinados para su entretenimiento peligren
la música para que se ejerciten y adquieran toda la agilidad y perfec- y se pierdan.
ción de que puedan ser susceptibles, con la esperanza de que de este "Para la formación de la Compañía de óperas, ha sido preciso ocu-
alegre plantel puedan salir con el tiempo algunas habilidades que rrir á Italia, donde se cultiva con mucho esmero ese arte, y al efecto,
ocupen y adornen los teatros de toda la República, abriendo este nue- se comisionó como inteligente al Sr. Cayetano Páris, para que eligiese
vo recurso de subsistencia para los que tengan el talento necesario y ajustase una dama segunda de música, otra ídem tercera, dos primeros
para aprovecharse de sus conocidas ventajas. tenores, otro ídem segundo, un bajo cantante, otro ídem segundo, un bufo
1
'Con el mismo objeto se establecerán escoletas de música y de verso cómico, otro dicho segundo, un maestro de música compositor y director, y
para los aficionados á estos dos interesantes ramos, y se les facilitarán otro ídem de coros, cuyos individuos reunidos á la Sra. Pellegrini y al
todos los útiles necesarios para que se puedan combinar funciones Sr. Benedicto, que se hallan en esta ciudad, y al cuerpo de coros que
proporcionadas á sus adelantos, cuyos productos se distribuirán á su se formará de los jóvenes que gusten aplicarse al canto, y de los que
favor, sin tener más gastos que los que les cause su representación y trabajaron en las óperas del Sr. D. Manuel García, compondrán una
el local donde las ejecuten, que será el Teatro Provisional Al pro- Compañía, que espera la Empresa merezca la aprobación de los es-
porcionar esta facilidad de aprender y adelantar á los aficionados á la pectadores.
escena en cualquiera de sus tres ramos, y con el estímulo de las uti- "También se ha encomendado al mencionado Sr. Páris la compra
lidades que les produzca el desempeño de las funciones que puedan de treinta óperas nuevas, siendo veinticuatro bufas y semibufas, y las
combinar y ejecutar, se declara suficientemente que todo el empeño seis restantes de carácter serio, para que se amenicen con ellas y en
de la Empresa se dirige á que se formen actores y actrices mexicanos alternativa los espectáculos, debiendo esta Compañía dar dos funcio-
que no dejen caer el Teatro en el deplorable estado en que se halla nes cada semana, por ser condición expresa del .contrato que se ha
actualmente ni sea necesario recurrir á climas distantes en solicitud hecho.
de habilidades que lo ocupen y entretengan al público, pudiendo sin
"De Lima se esperan también dos actores y una actriz, todos de
ninguna dificultad crearse en nuestro propio suelo.
primera clase, que desde aquel país han hecho proposiciones de ajuste
para este teatro, y se les ha contestado favorablemente en un todo,
ofreciéndoles mil pesos más sobre los sueldos que allí disfrutan, por calle del Reloj, núm. 11, desde las cuatro de la tarde
lo que no dudamos se transladarán inmediatamente para esta Capital, del actual, donde se les informará por el Contador nombrado al efecto, •
y estamos informados del mérito escénico que poseén por el Sr. D. del método que la Empresa ha adoptado para darlos, y de los precios,
Juan Alberto Gutiérrez que los ha recomendado. que tendrá el abono, en la inteligencia de que no contestándose desde
ese día hasta el sábado 26 del presente mes, se entenderá libre la Em-
" L a orquesta que ha de trabajar en la temporada entrante, y que
presa para disponer de los locales á favor de otras personas que los
se compone de los más hábiles y acreditados profesores que existen
soliciten.—México, 13 de Febrero de 1831."
en esta ciudad, está ya contratada y corriente.
Cuatro meses después la Empresa no había podido aún dar princi-
" E l miércoles 16 del presente se comenzará la obra y pintura del
pio á la temporada. Ni el cónsul D. Tomás Murphi enviaba el cuerpo
Coliseo, y para vestir completamente la escena se están construyendo
de baile, ni el agente Cayetano Páris comunicaba el resultado de su
diez decoraciones nuevas, y su pintura la desempeñan los profesores
reclutamiento de cantantes italianos.
de más opinión en esta clase de trabajos.
H é aquí como, con fecha 15 de Junio, se explicaba la Empresa:"
" L a Empresa no ha omitido nada con tal de organizar las Compa-
" C u a n d o se propuso el Supremo Gobierno tomar bajo su protec-
ñías del modo más digno y correspondiente á la ilustración y buen
ción el Teatro de esta Capital, sacándolo del abatimiento y nulidad
gusto que tanto abunda en México, y si no puede reunir todos los
á que lo redujeran las oscilaciones políticas que tanto han perjudica-
elementos necesarios para que se logren sus deseos con la velocidad
do la prosperidad y riqueza de la República, formó el proyecto de
que pretende, es porque la mayor parte de ellos dependen de viajes
que se plantease su organización con toda la extensión, dignidad y
marítimos cuyas vicisitudes no ha sido posible evitar.
decoro que se debe al ilustrado público mexicano. En el prospecto
"Este será el mayor obstáculo que tal vez impida la apertura del que se repartió con fecha 13 de Febrero del presente año, se hizo la
Teatro el domingo de Pascua de Resurrección como se acostumbra, manifestación más ingenua, de las disposiciones que había dado pa-
pero le parece preferible el carecer de dos ó cuatro semanas de fun- ra conseguir las compañías de verso, ópera y baile que necesitaba,
ciones, que luchar con las dificultades que embarazan al actual Di- escribiéndose al efecto al Excmo. Sr. D. Tomás Murphi, cónsul de
rector de la Compañía para continuar un cierto número de funciones nuestra República en Francia, para el envío de varias habilidades de
en las cuales 110 puede haber elección ni gusto, sino un sentimiento baile. El viaje á Italia del Sr. Cayetano Páris en solicitud de la Com-
servil á la fuerza de la necesidad. pañía de Opera, es de pública notoriedad, y según noticias debía em-
"Los trajes de comparsas y coros van también á construirse de nue- barcarse con dirección á esta República, en principios del próximo
vo, pues es necesario formar un depósito de guardarropa de que se pasado Mayo; y estos individuos unidos á l a S r a . Carolina Pellegrini
carece actualmente, lo mismo que de vestidos para el cuerpo de baile y al Sr. Benedicto que se hallan en esta Capital, compondrán una
y de óperas. Compañía que se lisonjea la Empresa merezca la aprobación de los
" L a Empresa tiene mucha satisfacción en dar noticia de cuanto ha espectadores, pues por conseguir este resultado confió el ajuste y elec-
practicado para llevar á cabo la reforma y restablecimiento de las com- ción de los actores á la inteligencia que el nominado Sr. Páris ha ma-
pañías que han de servir el teatro, cumpliendo el encargo que al efecto nifestado tener para el caso. Remitidos á Europa los fondos necesa-
se le hace por el Excmo. Señor Vicepresidente. rios, la Empresa no ha omitido diligencia alguna, y ha practicado
"Cuando por inopinados acaecimientos no correspondiese la exacta cuanto ha creído conveniente para acelerar la reunión de las compa-
perfección de las compañías á las esperanzas que la Empresa tiene ñías que han de divertir al público: pero no ha estado en su mano
fundadas en el conocimiento de no haber omitido la más leve diligen- impedir las vicisitudes y demoras de los viajes que la privan de la sa-
cia y precaución para que éstas sean escogidas y selectas, encomen- tisfacción de haber concluido ya su obra y llenado completamente el
dando sus ajustes á personas de buen gusto y de conocido talento, se encargo que se le cometió al efecto por el Superior Gobierno.
consolará con el testimonio de que nada ha olvidado poner en práctica,
" L a Compañía de verso se ha reunido con más prontitud, pues á
en solicitud de adquirirlas tan perfectas como todavía tiene la con-
pesar de que no han llegado á esta Capital todos los actores y actri-
fianza de que lo sean en efecto.
ces solicitados por la Empresa, hay ya un número suficiente para que
"Instruido el público de estos pormenores, se espera nos favorezca principien sus tareas y se desempeñen con desahogo las representa-
con su buen concepto, y los señores abonados que gusten conservar ciones cómicas y trágicas. Así pues, aunque no se intentaba abrir el
sus palcos y asientos en la próxima temporada, pueden ocurrir á la teatro hasta que se hallasen completas todas las compañías, para cum-
R. H. T.—T. I.—37
ymm-k .o

291
290 I L f
plir exactamente lo que se manifestó al público en 13 de Febrero úl-
timo, se han repetido con tal instancia, por muchas personas que de-
s e a n los espectáculos, las solicitudes para que comiencen las repre- I
sentaciones de la Compañía de verso, que la Empresa cree que 110 A
puede dar mayor muestra del deseo que la anima de complacerlos, CAPITULO IX
que convenir en la apertura, presentando todo cuanto hasta ahora ha
logrado reunir, y hará lo mismo con las habilidades que espera, tan
breve como lleguen á esta ciudad. También se lisonjea que su con-
descendencia en esta parte no sirva de pretexto para que se la cen- 1831.
sure y critique, pues con la mayor ingenuidad pone la lista de los
^ actores y actrices con quienes cuenta en el día como presentes en H é aquí, según el prospecto de 15 de Junio de 1831, la lista de la
esta Capital, sin procurar entretener al público con otras esperanzas "Compañía Cómico y Trágica."
1
y exageraciones que dentro de breve serían desmentidas, sino con la 'Directores: Bernardo Avecilla, Juan Salgado.—Autor de las compaT
relación exacta de cuanto ha obrado para la organización de las com- nías: Mariano Bustamante.—Actrices: María Josefa Dubreville, Sole-
pañías, lo que espera, y los sucesos acaecidos en las multiplicadas dad Cordero, Eucía Martínez, María Eópez, que hará damas jóvenes
contestaciones que ha tenido que sostener para realizar sus planes." y cantará intermedios; Guadalupe Flores, ídem. Ramona García.
Tres partes de por medio—Actores: José María Fernández, sobresalien-
En el mismo papel ó manifiesto de la Empresa, se invitaba al pú- te; Mariano Bustamante, Miguel Valleto, Evaristo González, primer
blico á concurrir á las funciones de esa temporada, con arreglo á las barba; Joaquín Martínez, gracioso; Agustín Villegas, Tiburcio Anto-
siguientes bases: nio López, José Eamadrid. Cuatro partes de por medio.
"Eos señores abonados de palcos, lunetas y demás departamentos ''Ramo de baile: Director, maestro y compositor, Andrés Pautret.—Pa-
del teatro, que han convenido, bajo sus firmas, con las proposiciones ra operaciones grotescas y con obligación de bailar intermedios, Tiburcio
de la empresa, se servirán entregar las cantidades estipuladas, en la Antonio Eópez —Para cubrir intermedios mientras llegan las primeras
r.1 calle del Reloj, casa núm. n , en la inteligencia que los que no plazas, Guadalupe Flores, Eoreto Flores, JoséOrtiz.
lo hayan verificado para el sábado 18 del actual, no tendrán dere-
' 'Empleadosy orquesta: Apuntadores, Nicolás Enato, José María Bor-
cho alguno para hacer reclamaciones, pues la empresa será árbi-
j a . Archivero, Euis Eejarazu. Portero, Juan Felveta —Orquesta: Di-
tra á disponer libremente de dichos locales.
rector, Ouiriuo Aguifiana. Primeros violines, Eduardo Campuzano,
" E o mismo se entenderá con los que gusten abonarse en lo suce- Vicente Covarrubias, Francisco Garcés, Mateo Velasco. Segundos
sivo, conforme á la tarifa siguiente: violines, José María Miranda, José Eoreto Covarrubias, Simeón Vi-
_ "Palcos; anticipación, ciento cincuenta pesos: abonos que se paga- vián, Fernando Covarrubias. Flautas y clarinetes, Joaquín Salot, Ma-
rán por quincenas anticipadas y sin entradas, cuarenta y cinco pesos. nuel Borja. Oboes, Agustín Villerías, José María Beristáin. Trompas
—Patio en lo general: anticipación, cuarenta pesos: abonos como los y clarinetes, Manuel Salot, Felipe Eozada, Timoteo Alcuí. Bajos, Jo-
anteriores, doce pesos cuatro reales.—Asientos comunes, en terceros, sé María Bustamante, Rafael Domínguez. Violoncello, Ignacio Ocá-
por cada uno y pagados por quincenas anticipadas, diez pesos.—Am- diz. Violas, Francisco Arévalo, José María Castel. Fagots, José Ma-
bas cazuelas: cada asiento, cuatro pesos cuatro reales.—Palquitos de nuel Pérez, José María Santillán —Contador de la Empresa, Cayeta-
éstas: anticipación, cincuenta pesos, abono mensual, veinticinco.— no Castañeda.
Ventilas sólo para señoras: anticipación, treinta y seis pesos; abono
" E o s expresados—dice el manifiesto de la Empresa,—son los indi-
mensual, diez y o c h o . - E a s entradas diarias serán anunciadas opor-
viduos contratados para servir al público la presente temporada en
tunamente por el cartel de la función."
el teatro de esta Capital, estando todos comprometidos á recibir los
Para evitar á la Empresa dificultades, se prohibía á los abonados papeles que les repartan los directores de sus ramos.
cambiar ó traspasar sus localidades, pues á los que por alguna razón " E a Sra. Manuela Molina, con su hija y la familia del Sr. Aveci-
quisiesen dejarlas en cualquier tiempo se les devolvería lo que les lla, se esperan de un día á otro, sin que se pueda dar una noticia
restase de las cantidades que hubiesen anticipado. Verdaderamente segura de la causa que haya originado la demora que se nota.
pocas Empresas de espectáculos habrán dado una muestra semejante
" E l Sr. Joaquín González hay noticia de hallarse ya en camino
de su buena fe mercantil.
ymm-k .o

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plir exactamente lo que se manifestó al público en 13 de Febrero úl-
timo, se han repetido con tal instancia, por muchas personas que de-
s e a n los espectáculos, las solicitudes para que comiencen las repre- I
sentaciones de la Compañía de verso, que la Empresa cree que 110 A
puede dar mayor muestra del deseo que la anima de complacerlos, CAPITULO IX
que convenir en la apertura, presentando todo cuanto hasta ahora ha
logrado reunir, y hará lo mismo con las habilidades que espera, tan
breve como lleguen á esta ciudad. También se lisonjea que su con-
descendencia en esta parte no sirva de pretexto para que se la cen- 1831.
sure y critique, pues con la mayor ingenuidad pone la lista de los
^ actores y actrices con quienes cuenta en el día como presentes en H é aquí, según el prospecto de 15 de Junio de 1831, la lista de la
esta Capital, sin procurar entretener al público con otras esperanzas "Compañía Cómico y Trágica."
1
y exageraciones que dentro de breve serían desmentidas, sino con la 'Directores: Bernardo Avecilla, Juan Salgado.—Autor de las compaT
relación exacta de cuanto ha obrado para la organización de las com- nías: Mariano Bustamaute. —Adrices: María Josefa Dubreville, Sole-
pañías, lo que espera, y los sucesos acaecidos en las multiplicadas dad Cordero, Eucía Martínez, María Eópez, que hará damas jóvenes
contestaciones que ha tenido que sostener para realizar sus planes." y cantará intermedios; Guadalupe Flores, ídem. Ramona García.
Tres partes de por medio—Actores: José María Fernández, sobresalien-
En el mismo papel ó manifiesto de la Empresa, se invitaba al pú- te; Mariano Bustamante, Miguel Valleto, Evaristo González, primer
blico á concurrir á las funciones de esa temporada, con arreglo á las barba; Joaquín Martínez, gracioso; Agustín Villegas, Tiburcio Anto-
siguientes bases: nio Eópez, José Eamadrid. Cuatro partes de por medio.
"Eos señores abonados de palcos, lunetas y demás departamentos ''Ramo de baile: Director, maestro y compositor, Andrés Pautret.—Pa-
del teatro, que han convenido, bajo sus firmas, con las proposiciones ra operaciones grotescas y con obligación de bailar intermedios, Tiburcio
de la empresa, se servirán entregar las cantidades estipuladas, en la Antonio Eópez —Para cubrir intermedios mientras llegan las primeras
r.1 calle del Reloj, casa núm. 11, en la inteligencia que los que no plazas, Guadalupe Flores, Eoreto Flores, JoséOrtiz.
lo hayan verificado para el sábado 18 del actual, no tendrán dere-
' 'Empleadosy orquesta: Apuntadores, Nicolás Enato, José María Bor-
cho alguno para hacer reclamaciones, pues la empresa será árbi-
j a . Archivero, Euis Eejarazu. Portero, Juan Felveta.—Orquesta: Di-
tra á disponer libremente de dichos locales.
rector, Quinao Aguiñana. Primeros violines, Eduardo Campuzano,
" E o mismo se entenderá con los que gusten abonarse en lo suce- Vicente Covarrubias, Francisco Garcés, Mateo Velasco. Segundos
sivo, conforme á la tarifa siguiente: violines, José María Miranda, José Eoreto Covarrubias, Simeón Vi-
_ "Palcos; anticipación, ciento cincuenta pesos: abonos que se paga- vián, Fernando Covarrubias. Flautas y clarinetes, Joaquín Salot, Ma-
rán por quincenas anticipadas y sin entradas, cuarenta y cinco pesos. nuel Borja. Oboes, Agustín Villerías, José María Beristáin. Trompas
—Patio en lo general: anticipación, cuarenta pesos: abonos como los y clarinetes, Manuel Salot, Felipe Eozada, Timoteo Alcuí. Bajos, Jo-
anteriores, doce pesos cuatro reales.—Asientos comunes, en terceros, sé María Bustamante, Rafael Domínguez. Violoncello, Ignacio Ocá-
por cada uno y pagados por quincenas anticipadas, diez pesos.—Am- diz. Violas, Francisco Arévalo, José María Castel. Fagots, José Ma-
bas cazuelas: cada asiento, cuatro pesos cuatro reales.—Palquitos de nuel Pérez, José María Santillán.—Contador de la Empresa, Cayeta-
éstas: anticipación, cincuenta pesos, abono mensual, veinticinco.— no Castañeda.
Ventilas sólo para señoras: anticipación, treinta y seis pesos; abono
" E o s expresados—dice el manifiesto de la Empresa,—son los indi-
mensual, diez y o c h o . - E a s entradas diarias serán anunciadas opor-
viduos contratados para servir al público la presente temporada en
tunamente por el cartel de la función."
el teatro de esta Capital, estando todos comprometidos á recibir los
Para evitar á la Empresa dificultades, se prohibía á los abonados papeles que les repartan los directores de sus ramos.
cambiar ó traspasar sus localidades, pues á los que por alguna razón " E a Sra. Manuela Molina, con su hija y la familia del Sr. Aveci-
quisiesen dejarlas en cualquier tiempo se les devolvería lo que les lla, se esperan de un día á otro, sin que se pueda dar una noticia
restase de las cantidades que hubiesen anticipado. Verdaderamente segura de la causa que haya originado la demora que se nota.
pocas Empresas de espectáculos habrán dado una muestra semejante
" E l Sr. Joaquín González hay noticia de hallarse ya en camino
de su buena fe mercantil.
LVP

n
O ,

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desde Guatemala con dirección á esta ciudad, contratado para el \. ti
flt \ teatro. por el señor Alcalde que se administra exactamente la justicia en di-
cho Estado: nada ha valido el haber recomendado el asufttO al mismo
/ " L a Sra. María Rubio de Pautret recibió las proposiciones que le
E x c m o . Gobernador, porque cierto señor Asesor de la referida ciu- ,
^hizo la Empresa para su ramo de baile, en la clase en que lo había
dad ha tenido la peregrina ocurrencia de querer abocarse un negocio-
desempeñado anteriormente, y contestó que resolvería á su tiempo y
originado y entablado en esta Capital, y ha estado entreteniendo el
s con oportunidad; a u n q u e ésta ha pasado, siempre aquella, consecuen- tiempo con mucha gracia, dejando correr los días y más días, pero
jgjfl te con los principios adoptados en favor de la amenidad de los espec- con la circunstancia de olvidarse de la exactitud del despacho, mas
. táculos, le sostendrá las mismas proposiciones y ofrecimientos hechos, ?io del cobro de los derechos, siendo preferible al cabo que esto hubiese
desde el momento en q u e se presente en esta Capital y se declare sucedido al revés. • •'
• pronta á servir al público unida á la Compañía de baile. " Se ha hablado con tanta extensión de Palomera, para que el pú-
" E l Sr. Carlos Palomera está ajustado para este teatro en virtud blico esté impuesto de la causa que hay para que se encuentre en la
e repetidas diligencias y empeños que hizo para serlo luego que lista de actores, después de haber asegurado la Empresa que este in-
perdió la esperanza de que la Empresa volviera á solicitarlo, sentida dividuo se hallaba contratado para este teatro. E n el día le es indi-
del modo brusco con q u e contestó á las moderadas proposiciones que ferente, porque considera que no podía esperarse un trabajo regular
se le habían hecho. Cuando afectaba la mejor buena fe, y se decía de 1111 actor que entraba en la Compañía con tan mala fe, y porque
satisfecho del nuevo contrato, que firmó según costumbre y como lo está sustituida su plaza suficientemente.
habían hecho los demás actores, haciendo ofrecimientos voluntarios Resta manifestar al público que hay noticia de que para Agosto
que no se había pensado en proponerle, cambió instantáneamente de próximo deben llegar á esta Capital varios actores de los que se le
parecer, de resultas de haber llegado á esta Capital un comisionado encargaron al E x c m o . Sr. D. Manuel Eduardo Gorostiza, y con al-
de G u a n a j u a t o con el proyecto de ajustar actores para su teatro, pre- g u n a diferencia de tiempo los dos actores y una actriz que desde Li-
firiendo burlarse de su palabra, promesa y firma, primero que renun- ma ha de enviar ya contratados D. J u a n Alberto Gutiérrez, que los
ciar al placer de correr la posta hacia la nombrada ciudad, y de hacer recomendó especialmente, y f u é autorizado para conceder las propo-
ruido con su indebido procedimiento, bien que esto mismo había he- siciones que hicieron para trasladarse á esta ciudad.
cho en otra ocasión. Sobrecargada la Empresa así por los individuos que actualmente
" Noticiosa la Empresa de la intención y proyectos de dicho actor, tiene presentes en la Compañía, como por los q u e expresa que ya se
le requirió amistosamente por la formalidad de su contrato, y viendo hayan comprometido, no ha podido admitir los buenos deseos que ha
que se obstinaba en llevar adelante su idea, le citó para comparecer manifestado el Sr. D. Diego María Garay, para trabajar en este tea-
ante uno de los señores alcaldes constitucionales, cuyo juez previno tro, cuyo actor ha venido oficiosamente de la H a b a n a á la Repúbli-
á Palomera se abstuviese de salir de esta Capital mientras 110 se de- ca, sin esperar á que se le hubiera hecho invitación alguna. E l pre-
cidiese por la autoridad que podía hacerlo, si estaba en el caso de supuesto de gastos excede ya de lo que se había señalado en un prin-
anularse el compromiso que tenía contraído para servir en este tea- cipio, y esta es otra razón por la que no se le ha colocado en la Com-
tro. Se dió por notificado y fingió acomodarse á todo, para adorme- pañía de verso, aun cuando 110 existiese el inconveniente que siempre
cer la vigilancia que pudiera tenerse de sus operaciones, aguardando produce la multiplicación de los directores en u n mismo ramo.
cautelosamente que llegasen los días de la Semana Santa, en que to- '' Consecuente con cuanto se ofreció al público en la fecha referi-
dos los tribunales han dado punto, y se fugó la noche del miércoles da, se han construido y se han pintado por el profesor F . Tamayo,
santo, habiendo enviado un caballo en la tarde fuera de la garita. arreglándose á los diseños que le ha suministrado el Sr. Carlos Páris,
1
' T a n reprobado proceder exigía se tomase alguna providencia pa- las vistas que h a n de decorar la escena, asegurándose que son ente-
ra corregirlo, en vista del desprecio que había hecho de la prohibición ramente nuevas y aprobadas por muchos inteligentes en el arte. La
que le notificó el juez constitucional y del ultraje que hacía de su au- casa se ha pintado igualmente, procurando darle el adorno de que ha
toridad. Se expidió exhorto por uno de los señores jueces de Distrito sido susceptible, y la calificación de estas obras queda sometida al
dirigido al Sr. Alcalde de primera nominación de Guanajuato, pidien- gusto de los espectadores.
do se presentase Palomera en esta Capital y contestase la demanda " E l alumbrado ha tenido un aumento de mucha consideración,
de la Empresa en tribunal competente, y ni ese exhorto, ni el que se pues no se ha omitido arbitrio alguno para darle la fuerza que nece-
expidió después, han sido obsequiados, á pesar de que se vocifera sita, una vez tocada la dificultad que se presentó para haber estable-
O % f
r
cido el de gas hidrógeno. Igualmente se ha cuidado de que la ilumi-
nación de tOítransitos de los departamentos sea decente y no manche
/ á los concurrentes, evitando la fealdad de unas candilejas sucias y en se disculpa de 110 haberle contratado, y revela que Garay se había
seontinuo goteo de aceite, que exigían un particular cuidado al pasar presentado en México sin ser llamado. Esto era grave para él, pues
inmediato á ellas. Los candiles para la iluminación están demostran- como español expulso no podía haber vuelto sin permiso especial q u e ^
do lo mucho que ha sido preciso hacer para ponerlos en el estado en sólo la Empresa, competentemente autorizada, tenía facultad de ex-
• que se hallan, pues no eran otra cosa que esqueletos y residuos de lo pedir. Para castigar á Garay se le reprochó esta transgresión de la
que habían sido. ley y aun se llegó á enviarle un pasaporte para que se pusiese en ca- —
" L o s vestidos de guardarropa han tenido también un lugar de mino para la Habana, rigor que sus amigos influentes impidieron se
consideración, pues ha sido preciso hacer nuevos la mayor parte de llevase adelante, abogando por Garay ante aquel Gobierno que nin-
sus enseres." gún interés tenía en hacer cumplir una ley á la que habíanse opues-
_ Bernardo Avecilla, director de la nueva Compañía, empezó á fi- to los hombres que le formaban.
gurar en el Teatro del Príncipe en Madrid en 1809, en tercer lugar Otro actor, también español expulso, D. Joaquín Patiño, n a t u r a l ^ "
entre los actores, de los que era primero y principal el gran Isidoro de Galicia, recurrió, para regresar á México, á obtener en Nueva Or-
Máiquez. En 1812 quedó clasificado como barba ó actor de carácter; leans carta de ciudadanía americana, que una agencia de aquel país
en 1818 figuró como autor de Compañía en el mismo primer teatro eminentemente mercantil, hacía expedir, por la módica suma de vein-
español con siete mil reales de sueldo anual y treinta diarios como ticinco pesos, á cuantos hubieran residido quince días en aquella po-
actor, al lado de Isidoro Máiquez con sesenta; como tal actor, en el blación de los Estados Unidos. Dícese que esa medida la tomaron
elenco aparece primero Máiquez, después Andrés Prieto, y en ter- excepcionalmente las autoridades americanas para librarse de mendi-
cer lugar Avecilla. En 1820 fué siempre en el Príncipe, galán prime- gos, como eran llamados los infelices expulsos que 110 tuvieron posi-
ro con cuarenta reales. Conservó su calidad de primer actor en los bilidad de ir más allá de la Gran República.
cuadros de los siguientes años, trabajando con el eminente Carlos Por el referido manifiesto de la Empresa, que he creído conveniente
Latorre y con Rosa Peluffo, y Pedro Viñolas, artistas también en el copiar íntegro, mis lectores han podido enterarse del estado misera-
Príncipe y más tarde nuestros huéspedes. Actor distinguido y de la ble en que habían caído nuestros espectáculos en esos últimos años
buena escuela de Máiquez,vino precedido de justa y merecida fama, de continuas revueltas y desórdenes de toda especie. Siento no poder
que sólo aquí pudo ser puesta en tela de juicio, por efecto de las in- entrar en mayores detalles que huelgan en un escrito que 110 pretende
trigas de sus demás camaradas en el arte, especialmente del también pasar de una simple Reseña, y que de otro modo alargarían demasiado
español Diego María Caray, artista muy estimable pero que nunca el número y tamaño de estos capítulos. Dejo, pues, los comentarios,
figuró en el primer teatro español ó sea el del Príncipe. A la presen- á juicio de los lectores; únicamente les hago notar que D. Miguel
tación de Avecilla en nuestro Teatro Principal, hubo en el público Valleto, con el tiempo tan justamente renombrado en México, sin
cierta división, resultado de esas intrigas, y corrió, muy aplaudido contar con los dos directores de la Compañía, ocupaba el tercer lugar
como ingenioso juego de palabras, el siguiente epigrama ó pasquín: en el cuadro de artistas de nuestro teatro.
En el manifiesto de la empresa se indica haber fracasado en sus
tentativas para iluminar el teatro con gas hidrógeno. Para introdu-
" Una oferta lisonjera cir esa mejora estivo en tratos con el suertista y físico Mr. Perinor,
nos hizo esperar gran cosa, al cual nombré ya anteriormente, que tuvo establecido en la calle de
y en vez de un águila hermosa Zuleta n ú m . 14, lo que llamó Teatro Pintoresco y mecánico. Copio aquí
una avecilla cualquiera." uno de sus proyectos anunciando las novedades y maravillas que daba
á conocer: "Iluminación con gas hidrógeno que cada día se hace más
importante en la sociedad: teoría de los globos aerostáticos; produci-
Diego María Garay, que contaba en México muchos amigos y apa-
miento de sonidos armónicos con una corriente de gas; glóbulos de
sionados, que era buen actor y padecía de un carácter envidioso é
aire fulminante, etc., etc. Se terminará la función con el mundo en
intrigante, no sólo atacó más ó menos disfrazadameute á Avecilla
miniatura ó panorama de las cercanías de México, con trajes y figu-
como antes había atacado á Andrés Prieto, sino también á la Empre-
ras nuevas relativas al país. — Lunetas, seis reales; patio, tres reales;
sa, dando motivo al párrafo del preinserto manifiesto en que aquella los niños, la mitad de precios."
Por fin, en 23 de Junio de 1831, se fijó en esquinas y periódicos el
297 :
"Teatro Principal. La Empresa del Teatro ha lo-
• É
tan entre los Establecimientos de beneficencia pública <jue tuvo á bien
grado vencer los inconvenientes que se habían ofrecido para su aper- designar."
• se abre, pues, desde esta noche y se proseguirán dando los es- Así las cosas, el público se regocijó al dársele noticia de que ya
pectáculos de que el público había carecido por tanto tiempo." habíase embarcado la Compañía de Opera contratada por el Sr. D.
La primera obra representada en la noche de ese día fué El labra- Cayetano Páris, trayendo á su frente á Filippo Galli, célebre cantante
dor más honrado, García del Castañar; el 24 se dió Indulgencia para italiano nacido en Roma en 1783. Hábil músico, desde la edad de .
todos, advirtiendo el programa que era "obra del Excmo. Sr. D. Ma- diez años se distinguió por su notable talento como pianista y como
nuel Eduardo de Gorostiza, Ministro mexicano en F r a n c i a . " Siguie- acompañante. Casado
ron el 25, Castillos en el aire; el 26, El hombre agradecido; el 27, Todo á la edad de diez y ocho años, las necesidades
ó nada ó el Veleta, y un baile por Loreto Flores y Jacobo Ortiz; el 28, de la vida matrimonial le decidieron á presentarse al público, estre-
' El Rico-Home de Alcalá y un dúo de la ópera Coradino, cantado por nándose en Bolonia, en 1804, con La caza de Enrique IV, de Gene-
María López y Joaquín Martínez; el 29, la comedia Los hermanos á raldi. El éxito logrado hizo que se le clasificase entre los mejores ,
la prueba. El 3 de Julio se representó por primera vez en México el tenores, cuando una grave enfermedad cambió la naturaleza de su voz,
drama en cinco actos El Pastelero del Madrigal, y el 4, la tragedia, convirtiéndose en bajo. Espautóle esta transformación, pero Paisiello
Blanca y Moncatzín, que fué un gran triunfo para Bernardo Avecilla. le consoló incitándole á perfeccionar su nuevo timbre. Galli siguió el
A éstas siguieron, y serán las últimas obras que cite, para no ha- consejo, y el estudio y el ejercicio desarrollaron en él una voz de bajo
cerme cansado, las comedias Todo extremo es vicioso, ó Don Desiderio; cantante, de una sonoridad extraordinaria. Su estreno en su nuevo
Las segundas nupcias, Las mocedades de Enrique V, Misantropía ó empleo lo verificó en Venecia con el papel de Taraboto en el Inganno
Arrepentimiento, A Madrid me vuelvo; las tragedias El ilustre sepultu- felice de Rossini. Al año siguiente creó en Milán el Sigillaro de La
rero, Los Templarios; los saínetes A un engaño otro mayor, Alcalde Pietra delparagone, del mismo maestro.
tonto discreto, El buñuelo, El enfermo fugitivo ó el enemigo de la jeringa. Los papeles del Bey en la Italiana en Argel, y de Turco en El Turco
Las funciones iban amenizadas con boleros manchegos, Minuets afan- en Italia, pusieron el sello á su reputación. Galli, encontrando de-
dangados, Boleros y cavatinas y dúos de Rossini. masiado restringido el repertorio bufo, quiso abordar los personajes
El público no estaba muy satisfecho, y la prensa menudeaba párra- dramáticos. Rossini aplaudió su determinación y escribió para él, en
fos y articulejos pidiendo la contrata de Garay. Pero éste había ofen- 1817, en Milán, el papel de Fernando en La Urraca ladrona, y después
el de Mahometto, en 1820, en Nápoles.
dido y continuaba ofendiendo á los empresarios, y éstos no quisieron
En 1821 Galli se estrenó en París, con su gran papel de Fernando,
dar su brazo á torcer y anunciaron haberse dirigido á Andrés Prieto
y causó una sensación profunda con su apasionada ejecución. Algún
que se encontraba en la Habana. " E n el próximo Agosto, dijo en un
tiempo después Galli salió de Francia para volver á ella en 1825. Ac-
aviso el agente D. Cayetano Castañeda, pueden llegar á esta Capital
tor trágico, y consumado cantante, desempeñó muchos importantes
algunos actores de los que se encargaron al Ecxmo. Sr. D. Eduardo
papeles con satisfacción general. En 1828 Galli recorrió España y
Gorostiza, y con alguna diferencia de tiempo una actriz y dos actores
regresó á Italia, en donde Cayetano Páris le contrató para México.
más que desde Lima ha de enviar D. Juan Alberto Gutiérrez. El Sr.
El Registro Oficial, nombre del periódico del Gobierno de México
Prieto, cuya habilidad ha dejado gratas memorias en este teatro, ha en esa época, dijo al dar la noticia de la llegada de Páris á Veracruz:
escrito también, haciendo proposiciones por sí y á nombre de la Sra. " E l Sr. Páris es acreedor á todo elogio, así por la prudencia y eco-
Santa Marta, que se hallan decididos á trasladarse á esta Capital y nomía en gastos con que se ha manejado, como por la pericia é inte-
trabajar en la escena; y aunque las peticiones son bien avanzadas, ligencia que ha mostrado en la elección de individuos, compra de mú-
se le ha contestado con otras proporcionadas á las circunstancias en sica, etc. H a tenido varias dificultades que vencer, y entre ellas 110
que se encuentran los fondos de la empresa y los productos del tea- fué la menor el obstáculo que le puso la policía de Milán, negándose
tro, las que serán sostenidas siempre que las acepte y se resuelva en por las circunstancias de la revolución de Italia, á conceder los pa-
su consonancia. Por esta razón no se han podido admitir los buenos saportes indispensables para la salida de la Compañía, que todo lo
deseos de D. Diego María Garay, no porque existan animosidades tenía ya listo para verificarla. Al fin, después de muchos pasos y di-
contra su persona, sino por llenar y cumplir el encargo del Superior ficultades, logró tener una audiencia particular con el Virrey del reino
Gobierno que previene se procure salvar el capital empleado en el Lombardo Véneto, que es hermano del Emperador de Austria: fué
fomento del Coliseo, y se soliciten algunas utilidades que se compar- bien acogido y le concedió el favor que solicitaba. Le habló larga-
R. H. T . ~ T . I.—38
- * - L
. •/ . V
• . i.

299 \
• y-. . \TO
mente sobre nuestro país, manifestándole la satisfacción que le cau-
señores concurrentes suelen manifestar su desagrado, hacia tal actor
saba el estado de civilización y gusto que indicaba el establecimiento
o tal pieza, pues que, en efecto, á ninguno se le corrige cón algazaras
en él de la Opera Italiana. La Empresa ha causado gran sensación, y rechiflas, y naturalmente debe quedar todo cortado un actor que se
"nc
10 sólo en Milán sino en toda Italia, siendo el asunto de la conver- ve hecho el objeto de una burla estrepitosa. El desagrado puede m a - /
sación de muchos días, y formando época en la crónica teatral, por infestarse de otro modo que produzca mejores efectos, y que sea me-
. ser la primera Compañía completa que sale de aquellos países para el nos repugnante con la decencia que debe reinar en los concursos pú-
Nuevo M u n d o . " blicos."
El párrafo transcrito pinta por sí solo la candidez y vanidad de los
Cayetano Páris y la Compañía de Opera llegaron á la Capital el 6'
redactores del periódico oficial y de sus lectores.
de Agosto, é inmediatamente se anunció que comenzarían sus repre-
En los días 24 y 25 de Julio la Compañía de Galli dió dos concier- sentaciones tan pronto como se recibiesen la música, trajes y demás
to
tos en Yeracruz en los salones de la Sociedad de " L a U n i ó n , " por no accesorios, detenidos en el camino de Veracruz á México por el mal
aber otro local más propio, pues según El Censor, periódico'de aquel estado en que teníanle las lluvias. —
puerto, " p o r una triste fatalidad dejó de existir el teatro único que Entretanto, el público tuvo una agradable sorpresa con la presen-
allí h a b í a . " ^
tación del cuerpo de baile de niños mexicanos formado por Andrés
" E n t r e la concurrencia q u e a s i s t i ó - d i c e el mismo Censor—lucida Pautret, según habíalo ofrecido. El suceso ocurrió el 6 de Setiembre
y numerosa, fué unánime el parecer de que el Sr. Páris ha desempe- y el periódico oficial dió cuenta de ello de la manera siguiente: " A n o -
ñado su comisión con particular acierto. Puede caberle esta satisfac- che se han presentado en el teatro los niños discípulos del Sr. Pau-
ción al promotor de la feliz idea de que el público no careciese de una tret, y han desempeñado á satisfacción del público el baile intitulado-
Compañía selecta de Opera: bien que por cualquier lado que se exa- El Nido de Amor, composición de su maestro. El número de niños
mine semejante determinación, se hallará tener fundados motivos que de uno y otro sexo fué de treinta y uno, y había entre ellos dos ni-
la hagan recomendable. nas, una de cuatro y otra de cinco años: las dos de mayor edad,
" S e r í a imposible entrar en una minuciosa relación personal res- cuentan diez. Debiendo comenzar dentro de poco la Opera Italiana'
pecto de la ejecución, sin extendernos demasiado. E n la Sra Masini puede presentarse el teatro de esta Capital con un lustre y conjuntó
agrado la expresión y notable sensibilidad que acompañaba á su cau- de habilidades poco c o m u n e s . "
to; en el Sr. Emaglia, el desembarazo y facilidad con que gobernaba
¡ Sorprendente candidez ! Valiente ilusión debían causar los pasos
su voz; en el Sr. Sissa la clara y bien definida entonación; del Sr Ga-
de baile de ciertas óperas, ejecutados por una criatura de cuatro años
lli esta demasiadamente bien sentada su fama para que sea necesario y su comparsa de chiquillos!
decir de ella otra cosa sino que dió testimonio de ser bien merecida- Demos razón del estreno d é l a Compañía de Galli, sirviéndonos se-
e Sr. Mussati, encantó. Las pequeñas composiciones que desempeñó gún costumbre, de incontestables documentos, que en este caso es
el Sr. Pighi, tanto en la flauta como en el corno inglés, merecieron nada menos que un artículo de fondo del Registro Oficial.
también muchos aplausos. E n fin, el mérito en la ejecución, fué ge-
" A n o c h e , lunes 12 de Setiembre de 1831, se ha presentado en el
neralmente admitido por cuantos tuvieron el gusto de hallarse pre- teatro de esta Capital por la Compañía de Opera, una de las mejores
OV.LL LEB • de Rossini.
La llegada de la Compañía y las noticias que de su mérito daban los " E l i g i ó para dar la primera muestra de las habilidades de que se
penodicos veracruzanos se prestaron á que los de la, Capital reco- compone, la grande ópera de Torbaldo y Dorlisca. El teatro estaba
mendasen al publico se hiciese digno de un tan elegante espectáculo completamente ocupado por una brillante concurrencia que manifes-
suprimiendo las demostraciones de grosería y m a l ^ e d u c a c L de q t taba los más vivos deseos de juzgar cuanto antes del talento de los
era campo la sala del teatro. " E s de sentirse, decía el Registro O f i l l nuevos operistas. Las recomendaciones del mérito respectivo de cada
que se noten algunas cosas que no sólo ofenden su b u e f a p o h S uno, el ensayo de sus talentos hecho en Veracruz, hacían esperar mu-
tenor, sino también la cultura y civilización, dando una dea p 0 cho de los todavía no conocidos, lo mismo que de la Sra. Pellegrini.
ventajosa de la educación de los sujetos que se las permiten. T d es " L l e g a d o s los momentos de la ejecución, cada uno supo exceder
desconsiderada franqueza con que se arrojan de arriba para el ™ las esperanzas concebidas. El Sr. Galli y la Sra. Pellegrini, que lle-
P
tío salivas, cigarros concluidos y otras porquerías. varon los papeles principales, los desempeñaron á toda la satisfacción
' Tampoco es muy conforme á la razón el modo con que algunos de los espectadores, excediendo el concepto que de ambos se tenía.
" E l público admiró en el Sr. Mussati una voz dulcísima, una gran
maestría, y'una ejecución brillante; en el Sr. Fiuaglia el desempeño
de un excelente bufo, y en la Sra. Baduera la perfecta ejecución del
papel que le tocó, aunque de una naturaleza secundaria.
' i •'Añadiendo á esto la propiedad y hermosura de los trajes y deco- CAPITULO X
'M ' raciones, la orquesta numerosa y compuesta de excelentes profesores
y la clase de concurrentes que llenaba el teatro, puede decirse sin exa-
geración que desde la fundación del Coliseo de México, no se había
visto el público tan perfectamente servido, ni había gozado de un es- 1831.—1832.
pectáculo tan brillantemente ejecutado y que le llenase de más satis-
facción. El éxito alcanzado por la Compañía de Filippo Galli, 110 perjudic
'' Esto puede decirse con más razón comprendiendo los demás ra- á los demás espectáculos de ese tiempo, de relativo bienestar en cuanto
mos que abraza el Teatro, como el de verso, que merece el aprecio ge- á elementos de vida, en la Capital. El físico Mr. Perinor seguía en-'
neral, y el de baile, que se ha hecho más interesante desde que se pre- cantando á su público del teatrito de Zuleta, con programas como éste:
sentaron los niños discípulos del Sr. Pautret á dar muestras de sus "Agua helada en el vacio; JJn preso por la sola presión del aire; El gato
bellos adelantos. bajo el recipiente; La lámpara maravillosa; El tubo de cristal armonioso;
Los truenos, relámpagos y formación de agua en la atmósfera; Pistolete
" Ea Capital, pues, goza de esta clase de diversión bajo un pie de
de bolsa y de gas, que se carga con aire fulminante, arroja balas de
perfección y hermosura, que así es digno de su grandeza y dignidad
plomo y se dispara con una chispa eléctrica; Combustión del acero y del
como de su buen gusto y civilización. Si ésta se mide por la natura-
fósforo en el gas oxígeno, produciendo una luz tan clara como la del
leza y carácter de los espectáculos, puede decirse que poco ó nada
sol, terminándose con el panorama de autómatas." En el teatro de los
tiene México que ceder á los demás países donde se habla la lengua
Gallos, en la calle de las Moras, hizo una buena tempbrada el circo
castellana.
ecuestre de Carlos G. Green, "artista de Nueva York y Eiladelfia,
'' La Administración actual tiene la satisfacción de haber atendido
maestro en la educación de asombrosos caballos, volteos, juegos de
con fruto, no sólo á lo necesario y útil, sino también á lo agradable.
equilibrio y otras cosas tan admirables como divertidas."
H a logrado ver tranquila y pacífica la República, restablecido el or-
den y desterrada la anarquía, y tiene también el placer de haber pro- Como según vimos en los prospectos de la Empresa del Principal,
porcionado á la Capital un espectáculo de que carecía y estaba de- la ópera sólo dos funciones daba por semana, las demás noches las
mandando la ilustración de sus habitantes." cubría el cuadro dramático. El mérito y talentos de Bernardo Ave-
cilla eran aplaudidos por unos y negados por otros, conviniendo todos
No cabe duda en que el "Registro Oficial del Gobierno de los Es-
en que como trágico valía poco ó nada, y como barba y actor de ca-
tados Unidos Mexicanos," llenaba bien su deber de encontrarlo todo
rácter era una notabilidad.
bueno por obra y gracia de la autoridad á la cual servía.
La Molina y la Dubreville adquirían en cambio, con cada represen-
tación, nuevos triunfos y nuevos amigos: el desempeño de sus papeles
en el Orestes les valió hasta el ser cantadas en verso. El poeta se duele
del infortunio que cupo á Clitemnestra, papel desempeñado por la Mo-
lina, al ser muerta por el puñal de Orestes, y pregunta:

" . . . .¿Dónde los ojos la v e r á n ? . . . . Mil veces,


mil veces, sí, que la Molina de ella
todo el carácter toma, y nos conduce
á Argos, al siglo que pasó dejando
de catástrofe tal perenne acuerdo.
¡Salve, célebre actriz! ¡Salve! Las Musas
rodean tu frente celestial y pura.
" E l público admiró en el Sr. Mussati una voz dulcísima, una gran
maestría, y'una ejecución brillante; en el Sr. Finaglia el desempeño
de un excelente bufo, y en la Sra. Baduera la perfecta ejecución del
papel que le tocó, aunque de una naturaleza secundaria.
' i •'Añadiendo á esto la propiedad y hermosura de los trajes y deco- CAPITULO X
'M ' raciones, la orquesta numerosa y compuesta de excelentes profesores
y la clase de concurrentes que llenaba el teatro, puede decirse sin exa-
geración que desde la fundación del Coliseo de México, no se había
visto el público tan perfectamente servido, ni había gozado de un es- 1831.—1832.
pectáculo tan brillantemente ejecutado y que le llenase de más satis-
facción. El éxito alcanzado por la Compañía de Filippo Galli, 110 perjudic
'' Esto puede decirse con más razón comprendiendo los demás ra- á los demás espectáculos de ese tiempo, de relativo bienestar en cuanto
mos que abraza el Teatro, como el de verso, que merece el aprecio ge- á elementos de vida, en la Capital. El físico Mr. Perinor seguía en-'
neral, y el de baile, que se ha hecho más interesante desde que se pre- cantando á su público del teatrito de Zuleta, con programas como éste:
sentaron los niños discípulos del Sr. Pautret á dar muestras de sus "Agua helada en el vacio; JJn preso por la sola presión del aire; El gato
bellos adelantos. bajo el recipiente; La lámpara maravillosa; El tubo de cristal armonioso;
Los truenos, relámpagos y formación de agua en la atmósfera; Pistolete
" Ea Capital, pues, goza de esta clase de diversión bajo un pie de
de bolsa y de gas, que se carga con aire fulminante, arroja balas de
perfección y hermosura, que así es digno de su grandeza y dignidad
plomo y se dispara con una chispa eléctrica; Combustión del acero y del
como de su buen gusto y civilización. Si ésta se mide por la natura-
fósforo en el gas oxígeno, produciendo una luz tan clara como la del
leza y carácter de los espectáculos, puede decirse que poco ó nada
sol, terminándose con el panorama de autómatas." En el teatro de los
tiene México que ceder á los demás países donde se habla la lengua
Gallos, en la calle de las Moras, hizo una buena temporada el circo
castellana.
ecuestre de Carlos G. Green, "artista de Nueva York y Filadelfia,
'' La Administración actual tiene la satisfacción de haber atendido
maestro en la educación de asombrosos caballos, volteos, juegos de
con fruto, no sólo á lo necesario y útil, sino también á lo agradable.
equilibrio y otras cosas tan admirables como divertidas."
H a logrado ver tranquila y pacífica la República, restablecido el or-
den y desterrada la anarquía, y tiene también el placer de haber pro- Como según vimos en los prospectos de la Empresa del Principal,
porcionado á la Capital un espectáculo de que carecía y estaba de- la ópera sólo dos funciones daba por semana, las demás noches las
mandando la ilustración de sus habitantes." cubría el cuadro dramático. El mérito y talentos de Bernardo Ave-
cilla eran aplaudidos por unos y negados por otros, conviniendo todos
No cabe duda en que el "Registro Oficial del Gobierno de los Es-
en que como trágico valía poco ó nada, y como barba y actor de ca-
tados Unidos Mexicanos," llenaba bien su deber de encontrarlo todo
rácter era una notabilidad.
bueno por obra y gracia de la autoridad á la cual servía.
La Molina y la Dubreville adquirían en cambio, con cada represen-
tación, nuevos triunfos y nuevos amigos: el desempeño de sus papeles
en el Orestes les valió hasta el ser cantadas en verso. El poeta se duele
del infortunio que cupo á Clitemnestra, papel desempeñado por la Mo-
lina, al ser muerta por el puñal de Orestes, y pregunta:

" . . . .¿Dónde los ojos la v e r á n ? . . . . Mil veces,


mil veces, sí, que la Molina de ella
todo el carácter toma, y nos conduce
á Argos, al siglo que pasó dejando
de catástrofe tal perenne acuerdo.
¡Salve, célebre actriz! ¡Salve! Las Musas
rodean tu frente celestial y pura.
/ 302
. " Y tú, sensible Dubreville, divina
303 \ .

para imponerse de sus papeles, pero le falta un poco de dedicación al


enemiga del hijo imperdonable estudio, y como, según malas lenguas, no le falta inclinación á los
de Thyeste; ven, del pueblo numeroso placeres de la mesa, siempre le sobra camote que tragar.— Cuando re-
toda la muda admiración recibe. presenta el Sr. López le sobran zetas y le faltan pausas.—A las que '
Animada y feliz en tus pinturas, bailan las calabacitas, la chispa, etc., sobra decoro para faltar con estos
eres, y grande y rápida tendiendo soeces sonecillos á un público decente é ilustrado.—Sobran puros,
sobre tu trono de terror el manto. cigarros, pipas y todo cuanto contribuye á formar una atmósfera de
¿Quién como tú de Electra ha trasmitido humo densa y pesadísima: sobran platicones y faltan atentos." :

el dolor y el carácter en la escena? Pero quizás para nadie había tan grande admiración como para
¡Actriz sublime y mágica! ¡cuál vibras Andrés Pautret, y todo por su almácigo de liliputienses bailarines:
el trágico puñal con mano alzada! " n o sólo nos promete, decía El Sol, las más lisonjeras esperanzas res- "
Enérgica en tus versos y terrible pecto de nuestros jóvenes y nos da á conocer de cuánto son capaces los ~
tiñes las aguas de Hipocrene en sangre. talentos mexicanos, sino que nos presentan á Pautret como á un hombre
Allá desde do moras te saluden que tanto se interesa por los adelantos de nuestra patria, y que siendo
los autores de Edipo y Catilina, digno de la protección del Supremo Gobierno, se hace también acree-
y extiéndase tu fama, cual se extiende dor al amor y reconocimiento de todos los mexicanos."
la luz del sol por el desierto cielo."
Con motivo del estreno del baile El nido de amor, ó el pimpollo y la
rosa, los niños ejecutantes fueron obsequiados con una comida en el
Pero nada da mejor idea del teatro de entonces 5' de sus críticos, Café Veroh, inmediato al teatro, en el mismo local que después se
que una especie de Revista que con el título de Lo que sobra y lo que llamó del Progreso, y en ese banquete se improvisaron varios brindis
falta en el teatro, poseo, y dice: en honor de Pautret y de sus alumnos.
El Sol publicó esos brindis, de los cuales tomo las siguientes líneas:
"Sobran quinqués; falta aceite para iluminarlos; de aquí resulta
que sobran lentes y falta que ver. —Sobran actores y falta un trágico
por mala voluntad del Empresario. — Sobran modales al Sr. Avecilla
en el género cómico; le faltan demasiado en el trágico, y muy prin- "Fuerza es que tribute este momento
cipalmente tino para dirigir; así es que sobran comedias viejas y faltan el elogio tan justo y merecido,
piezas conformes al gusto del día; también sobran años y ronquera á pues por ti la belleza y el talento
este individuo para hacer de joven galán y calavera, y le falta com- de los niños aztecas ha lucido.
postura.—Sobra talla, embompoint y edad á la Sra. Molina para que "¡Oh, juventud peregrina!
aun resuenen en sus labios amores, requiebros y desdenes; faltan vo- vuestro baile me ha encantado,
ces para explicar el mucho mérito de esta actriz que tanto ha hecho y mi pecho alborozado
ganar al teatro de México, con su despejo, dominio teatral, natura- á celebraros no atina.
lidad de sus movimientos, fuerza de su expresión, ya como trágica, "Una escena tan divina,
ya como matrona.—Sobra aplicación al Sr. Salgado, deseo de com- una tan grande belleza,
placer y fuerza para pronunciar la R; le falta que abaldone la manía \ vuestra sinigual destreza
de imitar al insigue Prieto, porque no pudiendo esto conseguirse cae y cuanto por mí pasó,
en ridículo.—Al Sr. Bustamante le sobran lágrimas para pelear cuan- nadie podrá creerlo, no,
do tiene que entrar en campaña y le falta valor; le sobra movimiento sin presenciar su certeza.
en la cadera, y le falta en el brazo contrario al que pone en acción. " T ú , de gozo alborozado,
— A la Sra. Dubreville y al Sr. González les sobra propiedad, buen has brindado en este día,
desempeño, y exactitud en el cumplimiento de su deber: les falta opo- y en efecto tu poesía
nerse á trabajar en funciones malas.—Nada sobra ni falta al Sr. Va- logró su objeto deseado.
lleto, ni al Sr. Martínez y su esposa. — Al Sr. Fernández sobra tiempo " Y o te sigo entusiasmado
y brindo por el amor

\c • \ V
J 305
304

A que rae inspira el noble honor


de unos padres tan queridos,
del Registro, que la armonía de esta ópera es deleitosa y que hay pe- , *
dazos verdaderamente sublimes; tales son el hermosísimo dúo del Sr.
Sirletti y de la Sra. Massini, en la escena sétima del primer acto, que
y estos niños, dirigidos
comienza Questo acciaro, che del sangue, y sobre todo la cuarteta, ^ / '
por tan sabio director."

El Registro Oficial, periódico del Gobierno, dedicaba á su vez fre- Vidi un raggio di contento \
cuentes editoriales á ponderar los méritos de éste, por su acierto en ¡Come rapido spari!
ilustrar á sus gobernados. "Nuestro Teatro va poniéndose cada día Le mie pene ¡Oh Dio! lo sento
' más brillante, decía, y vemos desvanecidas ciertas suposiciones que Frinir ano ed miei di, *
algunos vertían como argumentos indisputables: una de ellas, que
_siendo nuestros conciudadanos sólo amigos de la novedad, no gusta-
rían las óperas más de la primera vez que se representasen. Los he- que fué ejecutada con un gusto, con una modulación, que arrebata-_
chos han probado lo contrario, y los mexicanos han dado pruebas en ron al auditorio. Pero no hay elogio suficiente para el admirable, el
el particular, de que son susceptibles de tanto gusto como en cual- encantador dúo de las Sras. Massini y Pellegrini, que comienza ¡Ah!
quier otro país civilizado de Europa puede tenerse. La ópera de Tor- finiendo; a me non lice, cuyo final mereció reiterados aplausos, y se le
baldo y Dorlisca nunca ha gustado tanto como en la cuarta vez que se hubiera dado el honor de la repetición, según el público pedía, si no
ha representado; los concurrentes han encontrado en dicha represen- fuese un pedazo tan largo y de una ejecución muy fatigosa para estas
tación nuevas bellezas en la música, que en las otras no habían ad- dos excelentes cantarinas.
vertido. '' Paréceme ésta una maravillosa observación muy en su lugar " S i este dúo pareció admirable, no lo fué menos la tiernísima es-
en las columnas del periódico oficial de un Gobierno. cena que comienza con el sublime recitado Notte tremenda ¡ orribil
notte! oh! fiossi, el cual con el aria que lo termina Caro suono lusin-
En otras ocasiones, sus redactores desmentían, enérgica y compe-
ghier, con acompañamiento de arpa, cantó la Sra. Massini, de una ma-
tentemente autorizados, las voces propaladas por la oposición, de que
nera, que desde la primera noche que se la ha visto en la escena, le
la Compañía de ópera andaba desunida. " T o d o falso: si la Cenicienta
ha dado un lugar muy distinguido en ella. El público quedó muy
no se había cantado aún, eran porque faltaban diez y seis bastidores
contento también del Sr. Sirletti, y toda la pieza, así como todos los
y nueve bambalinas que pintar. Falso era también que á la Badue-
actores, merecieron repetidos aplausos. El aparato en decoraciones,
ra se le hubiese suprimido una aria en esa ópera, para impedirle lu-
trajes, etc., fué ciertamente magnífico, haciéndose cada vez más ho-
cirse; lo cierto era que ella misma la había cambiado por otra más en
nor en las primeras nuestro hábil artista el Sr. T a m a y o . "
armonía con sus cuerdas vocales. Carecía á su vez de fundamento la
especie de que Cayetano Páris retardaba la salida de la primera con- Así escribíase en ese tiempo el periódico oficial del Gobierno, y
tralto Sra. Massini de Sirletti, para no opacar á la Sra. Pellegrini, aunque su tamaño 110 llegaba al de un pliego de papel florete, el re-
pues ni la Massini, ni el tenor Sirletti, estaban comprendidos en el dactor ocupaba con su crónica una columna, de la sección editorial
presupuesto que se le dió, y él los trajo voluntariamente; prueba ma- nada menos.
nifiesta de su buena fe, porque si hubiera querido no deslucir á la No por esto, sin embargo, debe entenderse que el país se hallase
Pellegrini, le hubiese bastado con no traer á otra primera, sujetándose en un lecho de rosas bajo aquella administración; la guerra civil per-
de este modo exactamente á las instrucciones que sé le dieron para sistía indominable, y la inseguridad y los atentados contra las perso-
no traer más que cuadro bufo. Entre una y otra cantante había tan nas habían tomado escandaloso incremento, sin que las autoridades
buen acuerdo, que cuando á la Massini se la invitó á que ella misma judiciales se preocupasen en mejorar aquel tristísimo estado de cosas.
designase la ópera con que quisiera estrenarse, y ella eligió Tebaldo e Según mi costumbre, ó por mejor decir, mi procedimiento de evitar-
Isolina, la Pellegrini, á pesar de no tener en dicha obra un papel muy me polémicas, apoyando mi dicho en documentos de notoria autori-
brillante ni el más á propósito para su voz, condescendió con gusto dad, copio del Registro Oficial lo que sigue: "Mientras el Sr. Sirletti
en su desempeño, en obsequio y lucimiento de su compañera." y su esposa la Sra. Massini encantaban al público en el Teatro, otros
se divertían á expensas de estos actores de otro modo. Algunos mal-
En efecto, y por lo que á esto último respecta, en la noche del 27
vados aguardaban la ocasión de su ausencia, para introducirse en su
de Octubre se cantó la ópera en cuestión, Tebaldo é Isolina, de Mor-
casa y robarlos: así empezaron á hacerlo, mas por fortuna, se sintió
lachi, con un éxito colosal. " E s menester confesar, dice el redactor
R. H. T.—T. I.—39

»
1 J 306 , * ) f-!
T . * '

307
ruido en la vecindad, ocurrió gente, y Boemondo, que perdió la sobe- V 7
ranía de Altembürgo en la escena, perdió muy poco de sus efectos mexicano, puede lisonjearse de tener en la Massini una rival digna
en su casa. El público está verdaderamente escandalizado del grado á de ella. También debemos celebrar á un buen tenor como el Sr. Luis
Sirletti, y á un actor tan discreto como el Sr. Sissa, quien con elSr.
N qiie ha llegado la impudencia en los ladrones y el número de los asesi-
vftos en estos días. Eo está todavía más de ver la falta de castigos de Lombardi completa el exceleute'cuadro de artistas de la Opera. -y/
' 'Todo en ella es perfecto, y así lo ha probado en la Italiana en Ar-
estos criminales, pues ellos se repiten todos los días, y los primeros
, : no se ven sino raras veces, y esto casi exclusivamente por la juris- gel, que estuvo muy bien desempeñada. La Sra. Massini, que tanto
. dicción militar. tardó en darse á conocer, nos agrada cada día más: no sólo cantó su
"No parece sino que Temis ha huido de su palacio, y parece que en- parte esta nueva prima donna con la mayor expresión, gusto y maes-
contrando inútil en sus manos la espada de la justicia, la ha puesto en tría, particularmente el aria del Espejo y la coreada del fin del segundo '
las de los asesinos, que la usan despiadada é impunemente. El honor acto, sino que ha acreditado su talento cómico en el papel de coqueta,
' - ^ d e nuestra civilización, de nuestras leyes, y el personal de nuestros tan ajeno al de Tebaldo. Del ilustre Galli, ¿qué podremos decir, si
Magistrados, todo se interesa igualmente en que estos males tengan que su Mustafá iguala, si no es superior, al mérito del Duque Ordow,
remedio pronto. ¡Tribunales encargados de la administración de jus- de Don Magnífico y de todo cuanto hace? En fin, es digno de su fama.
ticia! ¿qué es esto? ¿Eos mexicanos no sentirán, no gozarán del in- E l S r . Mussati cantó mejor que nunca la cavatina Languirper una bella.
flujo de las leyes y serán víctimas de los ladrones y asesinos?" Qué En suma, nada dejó que desear la ejecución de esta alegre opereta.
tal andarían las cosas, que así hablaba el periódico oficial del Go- " A propósito: hemos oído varios elogios de la ópera Doña Caritea
bierno. Reina de España, del célebre Mercadante, que desearíamos se nos
La ópera de Tebaldo é Isolina, fué un buen filón para la Empresa, diese después de la de Ricardo y Zoraida, que se está ensayando.
pues verdaderamente fanatizó al público en sus numerosas y bien aco- Creemos que será tan bien recibida como lo han sido hasta hoy Tor-
gidas repeticiones. Los periódicos hicieron con ese motivo memorias baldoy Dorlisca, La Italiana en Argel, La Cenicienta, Tebaldo é Isolina
del gran Manuel García, y El Matrimonio Secreto."
á cuya obstinación artística en repetir ópe- No debiendo extenderme de modo que esta Reseña pierda su ca-
ras y en cantarlas en italiano, se debía que Galli hubiese encontrado rácter modesto, me limitaré en lo relativo á espectáculos de ese año,
al público bien dispuesto á aceptar una y otra cosa. Sembrados están á citar una que otra función notable de las compañías de verso y de
los papeles de la época de elogios á los intérpretes de la obra de Mor- baile. El miércoles 30 de Noviembre, Miguel Valleto dió su primer
lachi y á la obra misma. " L a Sra. Carolina Pellegrini desempeñó el beneficio con el estreno, en México, de la comedia en tres actos Los
aria Ce forse a mivicino con una maestría que atrajo la atención de dos sargentos franceses en el Cordón Sanitario, obra que venía siendo
los inteligentes por lo firme de sus entonaciones y la expresión que aplaudidísima en los teatros europeos, y cuyo argumento decíase ser
supo darle: en el cuarteto Ahí no so vincere, la armonía que formaban de oportunidad por los estragos que la epidemia del cólera morbus viene
las voces de los Sres. Sirletti y Finaglia y las Sras. Pellegrini y Mas- causando en el Viejo Mundo, con grande alarma del nuevo.
smi, es de lo más expresivo que puede darse; mas lo que acabó de La anunciada función tuvo 1111 buen éxito, por la curiosidad que
arrebatar fué la escena novena del segundo acto, en que Tebaldo cau- el drama despertó, y porque día á día Miguel Valleto hacíase más
ta acompañado del clave que se figura estarse tocando en el palacio simpático y querido á la sociedad mexicana, en la cual había de aca-
del hermano de Acomberga. Yo vi correr las lágrimas á más de u n bar por tener lugar honroso como perfecto caballero.
espectador y con esto basta para hacer el elogio más cumplido de la Con menos fortuna anduvo Bernardo Avecilla, eternamente discu-
Sra. Massini. Gran compañía es ésta, y nunca dejaremos de conmo- tido por sus partidarios y por sus enemigos, pues aunque todos an-
vernos con el talento de Galli, ni oiremos sin afectarnos la voz atrac- daban conformes en reconocerle mérito en papeles cómicos y de barba,
tiva de Mussati, y la admirable de la Massini, ni dejará de hacernos los segundos 110 le aceptaron jamás como artista dramático y trágico,
impresión el Sr. Sirletti, ni nos cansaremos de elogiar lo sonoro y cla- por más que en la interpretación de Otelo rayó, según varios periódi-
ro de la voz del Sr. Finaglia." "Debemos insistir en los elogios que cos, á grande altura. Manuela Molina sí pudo alcanzar amigos nume-
la Sra. Angela Massini merece por su rara habilidad: el metal y dul- rosos y éxitos notables; su función de beneficio, celebrada el miércoles
zura de su voz, la maestría de su ejecución, la expresión que sabe dar 7 de Diciembre con la tragedia en cuatro actos El Duque de Weimar
a la música esta singular actriz, han producido indecible entusiasmo y el baile El chasco de los casados, composición de Pautret, le valió
La Sra. Pellegrini, cuyo concepto está tan acreditado en el pueblo buenos productos y entusiastas aplausos.
:
309 :
de Noviembre, los niños del Conservatorio del • F
ejecutaron el bonito baile Los amores campestres agresor, y cuando lo estimó oportuno hizo suyo el plan cíe las Legis-
laturas de Zacatecas y de Jalisco, que pidieron la separación de Bus-
•.al Alcalde, con argumento tomado de los cuentos de Marmontel
tamante y el reconocimiento de D. Manuel Gómez Pedraza como
no puede encarecerse, dice un cronista, la gracia con que lo hi-
Presidente constitucional. En 6 y 7 de Agosto, el Congreso general /
sin una equivocación en más de cuarenta niños, el mayor de
nombró Presidente interino al Gral. de Brigada D. Melchor Múzquí¿ :
de nueve años, que van descendiendo hasta cinco."—Uno de
y dió licencia á D. Anastasio Bustamante para ponerse al frente del
esos niños éralo Angel Padilla, de edad muy corta entonces, y más
Ejército. •
tarde acreditado actor mexicano.
En 18 de Setiembre se libró la reñida acción del Gallinero, entre •
Sin variación alguna en la composición y trabajo de las compañías, Bustamante y el disidente Moctezuma que quedó completamente d e -
principió el año de 1832, último de la administración jalapista, que á rrotado. E n cambio, en 1? de Octubre, S a n t a - A n n a derrotó en San
habíase herido de muerte al sacrificar impíamente al ilustre Agustín del Palmar á D. José Antonio Fació. La victoria del Galíi-__^-
Vicente Guerrero. Su sistema opresor y cruel; la insolencia con ñero permitió á Bustamante restablecer en San Luis sus autoridades,
que sus folletistas insultaban á los escritores independientes como y la del Palmar facilitó á S a n t a - A n n a la ocupación de Puebla. Este
Quintana Roo, á quien atacaron al extremo de ofenderle por sus re- último suceso desconcertó y acobardó al gobierno de Múzquiz, que
laciones amorosas con la noble patriota D? Leona Vicario, que era ya vanamente procuró un arreglo; los rebeldes victoriosos salieron de
su esposa; la inmoral organización de sus empleados en cuerpo de po- Puebla el 18 de Octubre con ánimo de atacar por las armas á la Ca-
licía, encargado de espiar en cafés, teatros, paseos y tertulias á las pital, en la que llegó á reinar un pánico profundo; pero al tener no-
personas prominentes del partido contrario; su renovación de odios y ticia de que Bustamante acudía en auxilio de la ciudad federal, S a n t a -
enemistades entre los insurgentes de los dos distintos períodos de la Anua regresó á Puebla el 6 de Noviembre para evitar que de ella se
guerra de independencia, con su torpe y pequeña intriga de celebrar apoderase el Vicepresidente, cuyas avanzadas, al mando del Gral.
raquíticamente las fechas de los aniversarios de la revolución de Hi- Durán, habíanse de improviso presentado en las inmediaciones.
dalgo, y con fastuosas solemnidades los de las campañas de Iturbide;
éstas y otras muchas causas que no puedo ni debo enumerar aquí, Tras de varios combates sangrientos é infructuosos, los represen-
hicieron que donde quiera se indicasen síntomas de posibles y próxi- tantes de S a n t a - A n n a y de Bustamante convinieron el 11 de Diciem-
mos trastornos, contra los cuales quiso prevenirse el Gobierno esta- bre en convocar al pueblo á nuevas elecciones, reconociendo, hasta
bleciendo un cantón de sus mejores tropas en Orizaba, so pretexto de que ellas se verificasen, como legítimo Presidente á Gómez Pedraza,
tener á raya á los cosecheros de tabaco, pero con el efectivo y secreto quien el 5 de aquel mes había desembarcado en Veracruz, traído por
propósito de estar ojo avizor sobre S a n t a - A n n a , de quien se murmu- los revolucionarios. Negó el Congreso su aprobación á ese tratado, y
raba hallarse pronto á acaudillar cualquier revolución que allanase el entonces Bustamante, de propia autoridad lo celebró y firmó en la ha-
camino á su candidatura á la Presidencia. cienda de Zavaleta, de la cual tomó nombre el plan que dió al traste
con la administración jalapista. Pedraza se encargó en Puebla de la
Sus temores no eran infundados: el 2 de Enero la guarnición de presidencia, Múzquiz se retiró tranquilamente á su casa, después de
Veracruz inició la revuelta con un plan en que pedíala remoción del haber visto á la guarnición de la capital pronunciarse por los conve-
Ministerio: el Secretario de Guerra, Fació, salió á su defensa y la de nios de Zavaleta, y, según habíaselo propuesto, D. Antonio López de
sus compañeros, separándose temporalmente de su cartera, para ase- S a n t a - A n n a vió surgir, como la única posible en aquellas circuns-
sorar en su campaña al Gral. Calderón, quien en 3 de Marzo derrotó tancias, su candidatura para la presidencia.
en las inmediaciones del pueblecillo de Tolomé á los rebeldes, ácuyo
La tristísima situación del país la pinta así el Manifiesto expedido
frente habíase puesto S a n t a - A n n a . Este, vencido pero no deshecho,
por las Cámaras, condenando el plan de Zavaleta: " L o s Estados de
regresó á Veracruz, y ante sus murallas, la división victoriosa se vió
la Federación se hallan unos en fermento, otros invadidos, algunos
reducida á entablar un sitio desastroso. Tamaulipas, Zacatecas, Ja-
en neutralidad insostenible, y todos amagados. De las autoridades
lisco y otras entidades federativas, pidieron, como Veracruz, k re-
constitucionales de ellos, unas están depuestas con violencia, otras
moción del Ministerio que Bustamante acordó así en 17 de Mayo
contagiadas, y todas sin verdadera libertad. El Gobierno Supremo
pero sin darle sucesor y encargando del despacho á los oficiales ma-
carece de recursos aun para lo más indispensable, y ya no puede
yores. Tomado esto como burla, la rebelión no cejó en sus vías de
llamar suya la tropa que debe sostenerlo. Los lazos sociales están
hecho; S a n t a - A n n a salió de Veracruz convirtiéndose de agredido en
laxados todos, los giros arruinados, el crédito perdido y la miseria
J

r 310
che y otros notables artistas de diferentes
oprime despiadadamente multitud de familias. La desconsoladora in- lo fué menos bien en nuestro Principal, al decir de
quietud quiere y no puede rasgar el velo futuro, y la incertidumbre Pero el gran éxito fué para Semíramis, cantada el 20
atormenta los ánimos. Todo, en fin, nos indica que pesa sobre nos- repetida numerosas veces sin que el público se cansara de oírla. El •
.otros, la justa cólera del cielo, y que la sociedad sufre uno de aquellos Registro Oficial decía: " L a s decoraciones, los trajes, todo ha sido co- /
sacudimientos peligrosos con que se destruyen ó regeneran las nacio- respondiente, y sin duda en la Opera Italiana de París no se mejo'-'
n e s . " Con estos antecedentes pasemos á reseñar la historia de nues- raría el lujo y la propiedad con que se ha montado en México la
tro teatro en 1832. miramis. Así lo hemos oído con complacencia á extranjeros inteligen-
tes y de gusto. En efecto, el templo y la estatua de Belo, el salón de
mármoles verdes del alcázar, el salón regio, el interior del santuario,
el exterior de la tumba de Nino, y la tumba misma, son tan bien eje-
cutadas, que producen la ilusión más completa á la vista,
CAPITULO X I que el alma se penetra del interesante argumento y de su apropiada
música.
" E n lo general todos han llenado su papel, y sobre todo las Sras.
Pellegrini y Massini y el Sr. Galli; las primeras en los papeles de Se-
1832.-1833. miramis y Arsace, y el segundo en el Assur, arrebataron muchas ve-
ces los aplausos del público. Cuando la Sra. Pellegrini ejecutó su
parte entre el terror general que poseé á los espectadores por el trueno
Con un alumbrado malo y escaso por haberse sustituido con velas que interrumpe la unión de Semíramis y Arsace y por el apareci-
de esperma muchos de los antiguos candiles de aceite; renegando de miento de la sombra de Nino, el entusiasmo de los aplausos casi no
los peinetones de las señoras, que 110 permitían ver la escena á los la dejaba concluir, y en verdad es imposible ejecutar con más inteli-
que tomaban asientos detrás de ellas; maldiciendo de los desórdenes gencia el excelente trozo que comienza Qual morto gemito—Da quella
á que daba lugar la entrada libre del dulcero en las cazuelas de hom- tomba. La sangre parecía helarse en las venas de los espectadores al
bres y de mujeres; quejoso de los gritos del apuntador, á ello obliga- oir los dos versos II sangue gelasi di vena in vena, que hace parte de
do por la semisordera de Bernardo Avecilla, que representaba las co- la misma estrofa.
medias sin saber de memoria sus papeles; aplaudiendo á la Platero
"Iguales aplausos mereció en el dúo del segundo acto con la Sra.
por bonita y por graciosa; celebrando á la Cordero por lo bien que se
Massini, y el primero de ésta con el Sr. Galli. Sería demasiado pro-
vestía y doliéndose de su extrema frialdad; encantado con las repeti-
lijo enumerar todas las bellezas de primer orden que ofrece esta bri-
das pruebas que de su talento daban la Dubreville, la Molina, la Mar-
llante composición; pero no podemos excusarnos de citar la cavatina
tínez, la Munguía y la Flores, y González, Valleto y Fernández, nos
de la Sra. Massini Ah quel giorno ognor rammento.... el aria coreada
pinta un revistero de la época el estado de nuestro Teatro Principal
de Semíramis, Bel raggio lusinghier, el dúo de ésta y de Arsace y todo
en principios de 1832, y en lo referente á su compañía de verso.
el final del primer acto, que es una obra maestra.
La de Opera Italiana continuaba siendo la favorita de ese público, " E n el segundo acto el dúo entre Assur y Semíramis, que comien-
al cual, en los primeros días de Enero, dió á conocer con el nom- za Se la vita ancor te caro, y en especial la parte del mismo dúo que
bre de La Inés, la ópera en dos actos Agnese, del Maestro Paér. Los comienza La forza premiera. La propiedad con que la Sra. Pellegrini
concurrentes, acostumbrados á las obras de Rossini y de Morlachi, hace esta clase de papeles, brilla principalmente en este pasaje, y,
no la recibieron con mucho agrado, salvándose de un fracaso gracias ciertamente, la Reina Semíramis en su palacio no podría decir con
sólo á la perfecta ejecución que de ella hizo el excelente cuadro de mayor fuerza y dignidad Regina e guerriera punirti saprò! Es excelen-
artistas que Felipe Galli dirigía. te y perfectamente ejecutada por la Sra. Massini el aria coreada Si,
Agradó mucho más El Matrimonio Secreto, de Cimarrosa, notabi- vendicato elge::iicre. No gustó menos la grande escena y aria de Assur
lísima en la invención melódica, pero muy débil en su instrumenta- antes de bajar al p u l c r o de Nino. E l clúo entre Semíramis y Arsace
ción, basada toda en los más sencillos efectos. Esa obra, interpreta- Giorno d'orrore escilo el mayor entusiasmo, expresado por una tri-
da de un modo admirable en Europa por Rubini, Crivelli, la Todolini, ple salva de aplausos, particularmente al E dolce al misero. El último
la Strinassachi, la Amigo, la Damoreau, la Pasta, Raffanelli, Labia-
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che y otros notables artistas de diferentes
oprime despiadadamente multitud de familias. La desconsoladora in- lo fué menos bien en nuestro Principal, al decir de
quietud quiere y no puede rasgar el velo futuro, y la incertidumbre Pero el gran éxito fué para Semíramis, cantada el 20
atormenta los ánimos. Todo, en fin, nos indica que pesa sobre nos- repetida numerosas veces sin que el público se cansara de oírla. El •
.otros, la justa cólera del cielo, y que la sociedad sufre uno de aquellos Registro Oficial decía: " L a s decoraciones, los trajes, todo ha sido co- /
sacudimientos peligrosos con que se destruyen ó regeneran las nacio- respondiente, y sin duda en la Opera Italiana de París no se mejo'-'
n e s . " Con estos antecedentes pasemos á reseñar la historia de nues- raría el lujo y la propiedad con que se ha montado en México la
tro teatro en 1832. miramis. Así lo hemos oído con complacencia á extranjeros inteligen-
tes y de gusto. En efecto, el templo y la estatua de Belo, el salón de
mármoles verdes del alcázar, el salón regio, el interior del santuario,
el exterior de la tumba de Nino, y la tumba misma, son tan bien eje-
cutadas, que producen la ilusión más completa á la vista,
CAPITULO X I que el alma se penetra del interesante argumento y de su apropiada
música.
" E n lo general todos han llenado su papel, y sobre todo las Sras.
Pellegrini y Massini y el Sr. Galli; las primeras en los papeles de Se-
1832.-1833. miramis y Arsace, y el segundo en el Assur, arrebataron muchas ve-
ces los aplausos del público. Cuando la Sra. Pellegrini ejecutó su
parte entre el terror general que poseé á los espectadores por el trueno
Con un alumbrado malo y escaso por haberse sustituido con velas que interrumpe la unión de Semíramis y Arsace y por el apareci-
de esperma muchos de los antiguos candiles de aceite; renegando de miento de la sombra de Nino, el entusiasmo de los aplausos casi 110
los peinetones de las señoras, que 110 permitían ver la escena á los la dejaba concluir, y en verdad es imposible ejecutar con más inteli-
que tomaban asientos detrás de ellas; maldiciendo de los desórdenes gencia el excelente trozo que comienza Qual morto gemito—Da quella
á que daba lugar la entrada libre del dulcero en las cazuelas de hom- tomba. La sangre parecía helarse en las venas de los espectadores al
bres y de mujeres; quejoso de los gritos del apuntador, á ello obliga- oir los dos versos II sangue gelasi di vena in vena, que hace parte de
do por la semisordera de Bernardo Avecilla, que representaba las co- la misma estrofa.
medias sin saber de memoria sus papeles; aplaudiendo á la Platero
"Iguales aplausos mereció en el dúo del segundo acto con la Sra.
por bonita y por graciosa; celebrando á la Cordero por lo bien que se
Massini, y el primero de ésta con el Sr. Galli. Sería demasiado pro-
vestía y doliéndose de su extrema frialdad; encantado con las repeti-
lijo enumerar todas las bellezas de primer orden que ofrece esta bri-
das pruebas que de su talento daban la Dubreville, la Molina, la Mar-
llante composición; pero no podemos excusarnos de citar la cavatina
tínez, la Munguía y la Flores, y González, Valleto y Fernández, nos
de la Sra. Massini Ah quel giorno ognor rammento.... el aria coreada
pinta un revistero de la época el estado de nuestro Teatro Principal
de Semíramis, Bel raggio lusinghier, el dúo de ésta y de Arsace y todo
en principios de 1832, y en lo referente á su compañía de verso.
el final del primer acto, que es una obra maestra.
La de Opera Italiana continuaba siendo la favorita de ese público, " E n el segundo acto el dúo entre Assur y Semíramis, que comien-
al cual, en los primeros días de Enero, dió á conocer con el nom- za Se la vita ancor te caro, y en especial la parte del mismo dúo que
bre de La Inés, la ópera en dos actos Agnese, del Maestro Paér. Los comienza La forza premiera. La propiedad con que la Sra. Pellegrini
concurrentes, acostumbrados á las obras de Rossini y de Morlachi, hace esta clase de papeles, brilla principalmente en este pasaje, y,
no la recibieron con mucho agrado, salvándose de un fracaso gracias ciertamente, la Reina Semíramis en su palacio 110 podría decir con
sólo á la perfecta ejecución que de ella hizo el excelente cuadro de mayor fuerza y dignidad Regina e guerriera punirti saprò! Es excelen-
artistas que Felipe Galli dirigía. te y perfectamente ejecutada por la Sra. Massini el aria coreada Si,
Agradó mucho más El Matrimonio Secreto, de Cimarrosa, notabi- vendicato elgc::itcrc. No gustó menos la grande escena y aria de Assur
lísima en la invención melódica, pero muy débil en su instrumenta- antes de bajar al p u l c r o de Nino. E l clúo entre Semíramis y Arsace
ción, basada toda en los más sencillos efectos. Esa obra, interpreta- Giorno d'orrore escilo el mayor entusiasmo, expresado por una tri-
da de un modo admirable en Europa por Rubini, Crivelli, la Todolini, ple salva de aplausos, particularmente al E dolce al misero. El último
la Strinassachi, la Amigo, la Damoreau, la Pasta, Raffanelli, Labia-
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313 * •
terceto entre éstos y Assur, Lusato ardir el mió valor dove? es,
placer á los espectadores nacionales y extranjeros que han concurri-
igualmente, trozo excelente y bellísimamente ejecutado.
do al nuestro, con su rara habilidad.
' 'Los coros merecen una mención particular, pues que en ninguna
' 'Prescindamos del defecto de la dureza de su carácter personal, con
otra ópera se lian ejecutado mejor que en la Semiramts, siendo de
que lo han tachado nuestros cómicos mexicanos; considerémosle co-
tanto más aprecio su buen desempeño, cuanto que en ésta son mucho
mo actor célebre y pongamos fuera de duda que su presencia aquí es
más difíciles. También merecieron, en justicia, ambas orquestas, los
de absoluta necesidad, si se quiere disfrutar de las escenas de la vida,,
elogios del público, haciendo un efecto muy mágico la música mili-
representadas por el arte dramático. ¿Podremos olvidarnos por ven-
tar tras de las decoraciones. Sólo nos falta recomendar que se reme-
tura del Sí de las niñas, del Anciano y los jóvenes, del Solterón y su
dien pequeños defectos para completar en todas sus partes el espec-
criada, del Opresor de su familia, de Misantropía, del Hombre agrade-
' táculo más magnífico que ha visto nunca México."
cido y de tantas otras piezas en que aquel hombre singular arrebató '•
La entrada de la Cuaresma detuvo esa sucesión de triunfos, á los nuestra admiración y conmovió nuestra sensibilidad en toda clase de
que se mezclaron el éxito de Mr. Crombé, uno de los bailarines con- afecciones?
tratados en Francia, "debido—habla El Registro—á su excelente
"Mas 110 se limita á esto sólo su relevante mérito: él también for-
ejecución llena de gracia y finura, y á su buena presencia," y el duelo
maba actores con sus lecciones y ejemplo. Ya lo vimos en la joven
de multitud de personas, causado por el fallecimiento del Gran Elefante
actriz Guadalupe Munguía; lo hemos palpado igualmente en nuestro
del Mogol, que venía siendo exhibido, de algunos meses atrás, en las
Salgado, cuya nimia decisión por imitar las maneras de aquel maes-
plazas de toros. Los periódicos noticiaron así esa catástrofe: " E l ele-
tro, le hacen incurrir en un extremo que desluce su natural habili-
fante que por muchos días ha atraído la atención de México, murió
dad. Si Prieto hubiese permanecido en nuestro teatro, Salgado sería
ayer 12 de Abril. Creése que la causa haya sido la enorme cantidad
hoy un acabado actor; la joven Cordero se habría formado á los gol-
de alfalfa que consumía y que es muy dañina cuando se da húmeda.
pes de aquel duro cincel, y movería á sus oyentes no sólo con el atrac-
La Administración del Museo quiso comprar el cadáver; pero 110 lo
tivo de su bella figura, sino con el imperio de su voz y de su modo
hizo por lo exagerado del precio de mil quinientos pesos que pidió
de expresar las pasiones. Pero ahora, ¿qué es esta novel actriz?: una
su propietario."
hermosa figura de mármol, fría como él é incapaz de excitar ningu-
Al acercarse la Pascua y disponerse la formación del cuadro de ver- no de los sentimientos del poeta, cuyos conceptos simplemente rela-
so, se suscitó la discordia entre los inquietos cómicos. ' ' Sabemos— ta. La joven Munguía nos servirá de prueba para lo que acabamos de
dijo El Sol—que las Sras. Molina y Dubreville están contratadas afirmar; todos la vimos y admiramos cuando nos manifestó los ade-
para la temporada entrante; el Sr. Martínez y su esposa, la Sra. Pla- lantos de una tan sabia dirección.
tero, el Sr. Evaristo González y el Sr. Fernández lo están igualmente;
pero el Sr. Salgado y la niña Cordero no han querido comprometer- "Así es que considerado Prieto ya como actor, ya como director y
se. Dícese que elSr. Salgado se rehusa á que el Sr. Avecilla le diri- maestro, es absolutamente preciso en nuestro teatro, si es que en él
ja, y aunque á éste no se le pueda conceder el don acertado de la han de presidir el buen gusto y el juicio. ¿Quién podrá imaginar que
dirección, pues se le han visto cosazas atroces, no debía ser esto un los Sres. Avecilla y González, ni separados ni los dos juntos, sean
pretexto para la repugnancia de aquél. Uno y otro merecen recibir capaces de reemplazar á Prieto? Hemos visto ya lo que es Avecilla;
lecciones del memorable Prieto, y también del Sr. Garay, que en de las diez comedias que nos da, las nueve causan sueño: los carac-
cuanto á Director, los sobrepuja ventajosamente. No hemos conse- teres que puede desempeñar con acierto son muy pocos, y carece del
guido averiguar en qué se funda la repugnancia de la Corderito, y si don de dirigir y de aquel espíritu creador de Prieto. Si hubiésemos
insiste, perderá mucho del mérito adquirido y podrá sucederle lo sido únicos gobernantes en nuestra patria, ese hombre no habría sa-
mismo que á la niña Munguía, que llegó á ser tan interesante por su lido de ella, pero las cosas van como quiere la suerte, y Prieto salió
aplicación en tiempo del Sr. Prieto, con el que adelantaba prodigio- de aquí dejando nuestro teatro á oscuras. Mas ya que aun existe, ¿por
samente; después se marchó á Puebla y olvidó mucho de lo que sa- qué no se le hace volver? Nosotros daríamos por él tres Avecillas.
bía y se atrasó lastimosamente en su carrera. "Garay ha dado igualmente muestras de su habilidad en los tiem-
pos anteriores. Su mérito no es comparable al del primero, porque
"Insistimos sobre la necesidad de que se contrate á Prieto y á Ga-
también es de otro género. La tragedia carece de órgano para hacerse
ray: el primero de estos dos actores, único seguramente hoy en su
entender entre nosotros desde que falta este actor. Su dirección con-
línea en los teatros españoles, ha dado en mejores días el más puro
tribuiría á que en nuestra escena se viesen piezas dignas de la ilus-
R. H. T—T. I.—40
m O
•i

r 3H 315 V
l
tracióf el siglo, y á que se ahuyentasen de ella los insulsos é inmun- cien más ó menos conocidas ya, de varios géneros y autores diversos.
dos fárragos con que se ve prostituida. Su parte material también se De los grandes bailes, el más aplaudido fué el titulado.Lo£vendi-
mejoraría, pues de nada sirve que nuestro hábil pintor Tamayo se miadores del Medoc.
\ queme las cejas para dejar bien acabada una decoración, si el direc- A veces los programas iban precedidos de advertencias explicato-
' -tor no sabe presentarla ni tiene gusto para fingir ciertos fenómenos, rias de la razón por que eran representadas algunas piezas. Al anun- /
cómo los relámpagos, para los que allá va un puño de brea encendi- ciarse los ensayos de Treinta años ó la Vida de un jugador, la Empre^pr1'
da por entre los bastidores, y á la vista del espectador " dijo: "Eas repetidas cuestiones y disputas literarias entre clásicos y'
Este artículo del antiguo y acreditado periódico, tributaba, aunque románticos, reducidas á criticar los primeros las monstruosas compo-
tardíamente, á Andrés Prieto, la justicia á que era acreedor y mu- siciones dramáticas que por desgracia han infestado la escena, parti- '
chos habíanle negado en otro tiempo, y á la vez produjo uno de los cularmente las tituladas melodramas, y la obstinación de los segundos
, efectos que con él se buscaban, pues Diego María Garay fué contra- pretendiendo probar que guardando las unidades que prescriben las
tado para compartir la dirección con Bernardo Avecilla. Esto pudo reglas del arte, no es fácil interesar al público con los argumentos, - ^ "
hacerse, gracias á haberse separado de la gerencia del teatro el Coro- fueron poderosas razones para estimular á Víctor Decance á presentar
nel Barrera, que de ella hizo dimisión en 3 de Mayo, por medio de en uno de los teatros de París el furibundo melodrama de que se trata,
un oficio en el cual con vivos colores pintaba los disgustos, burlas y lo que verificó no sin un justo recelo de que fuesen infructuosos é
aun insultos de que venía siendo blanco por parte del público en ge- incapaces sus trabajos de contrarrestar los esfuerzos del partido con-
neral, y de los abonados en particular. El Gobierno aceptó la renun- trario. Pero muy pronto quedaron desvanecidos sus temores, pues en
cia, y encomendó la dirección de la Empresa á una junta formada por el momento que Decance concluyó su composición y el público de
los Sres. D. Francisco Fagoaga, Dr. D. Francisco Antonio Cendoya, París se penetró del plausible objeto de su argumento, reducido á
Coronel D. Eulogio Villa Urrutia, D. José Pizarro y D. José María manifestar los males que acarrean á las familias las innumerables casas
Gutiérrez Estrada. de juego que, con autorización del Gobierno, hay en París, los em-
presarios de éstas se apresuraron á ofrecer á Decance cuarenta mil
A esa Junta tocó presentar al público, y en 7 de Junio, á la bailarina francos porque no la diese á luz; pero él, constante en su propósito,
Amada Gueuo, contratada para nuestro teatro por el Cónsul mexica- despreció la oferta y el drama se puso en escena. E l efecto que causó
no en París, D. Tomás Murphi, según se anunció en los programas en París fué tal, que se dieron cien representaciones consecutivas,
respectivos, sin que nadie se asombrase de este nuevo oficio de nues- consiguiendo por este medio el saludable fin que había concebido,
tros empleados consulares. Amada Gueno agradó mucho, y con el pues el horror que inspiró esta pieza á los habitantes de París fué de
muy aplaudido Crombé hizo las delicias de los numerosos aficiona- tal naturaleza, que visiblemente se hizo sentir el ejemplo, disminu-
dos á este género de espectáculos, que entre sí cuotizaban á altos pre- yéndose considerablemente el número de aficionados á los juegos lla-
cios las lunetas laterales y las más próximas al escenario para recrear- mados imperial ó ruleta. E s necesario confesar de buena fe, que el
se de cerca con los menudos pies de bailarinas y actrices. drama es disparatado, pero al mismo tiempo brillan en él escenas de
Citaré, para conocimiento de mis lectores, las principales obras lle- mucho interés, y la prueba de esta verdad se halla corroborada con
vadas á la escena por los cuadros de ópera y de verso del Teatro la aceptación que ha merecido en todos los teatros de Europa en que
Principal, bastante favorecido por el público, para poder dar, como ha tenido lugar su representación.
daba, sin interrupción, función diaria. Constituyeron el repertorio de
Galli y sus excelentes artistas, La Cenicienta, Mahometto II, El ma- " P a r a que en el de esta Capital, cuyo delicado gusto se manifiesta ca-
trimonio secreto, Tebaldo é Isolina, Clotilde, del maestro Coccia; Se- da día más y más á manera que se le proporcionan ocasiones de ejercitar
míramis, La Inés, Tancredo, cantada por primera vez por esa compa- su juicioso criterio, la Empresa y el Director de escena Avecilla no
ñía el 4 de Agosto; Torbaldo y Dorlisca y Elisa y Claudio. han perdonado gasto ni fatiga alguna para ofrecerla con todo su teatro
E l cuadro de verso representó Malek Adhel, del Duque de Rivas; correspondiente, esperando por premio de sus desvelos la aprobación
Treinta anos ó la Vida de un jugador, estrenada en 11 de Mayo; Tar- de un público á quien por tantos títulos son deudores del más grande
tuffo, La Villana de Vallecas, El Barbero diplomático, El carpintero de reconocimiento."
Livonia, Las tres hijas de la viuda, El Babú, La escuela del gran to- Nada, digno al menos de especial mención, queda por decir en
no,La Mogigata, Don Dieguito, Los falsos hombres de bien, El desdén cuanto á espectáculos de ese año, como no sea la separación de Fina-
con le desdén, El pastelero del Madrigal, Los hijos de Edipo y otras glia de la Compañía de Opera, y la presentación del jugador de manos
3i7
Mr;,Wiess en el salón del Café de la Gran Sociedad, pocos días des-
pués del susto mayúsculo que dieron á la Capital las tropas del Gral. " N u n c a en campo raso dieras,
Santa - A n n a , contra el que los poetas jalapistas vertieron las siguien- S a n t a - A u n a , nunca, batallas,
tes décimas: pues con ellas mal te hallas
y sabes pegar carreras.
V "Cual un Proteo descarado
Pero siempre entre barreras
- S a n t a - A n u a á su patria aflige, eres valiente atrevido,
no hay sistema en que se fije, lo mismo con el vencido,
nada para él es sagrado. porque esto es propio de tu alma
• Si á Pedraza ha proclamado nunca disfrute de calma
en su actual revolución, tu corazón pervertido.
no lo hace de corazón,
lo aborrece en su alma impura, "Rodeado de las pasiones
su conducta lo asegura; y lleno de criminales,
él contrarió su elección. á tu patria muchos males
has dado con tus legiones.
"¿Hasta cuándo tu ambición,
E11 todas las ocasiones
S a n t a - A n n a cruel, inhumano,
que se ha alzado rebelión,
nos dejará de su mano
de la infamia el cruel pendón
y cesará su opresión?
tú el primero has colocado:
El clamor de la nación
cesa de vivir, malvado,
se levanta contra ti:
no alcances de Dios perdón."
infeliz, triste de mí,
dice la patria afligida,
tú me has quitado la vida,
Ningún resultado práctico dieron esas maldiciones, sin duda por-
yo á tu muerte doy el sí.
que por lo detestable de los versos la Providencia no quisó oírlas, y
" N o te bastan los millares S a n t a - A n u a , armado del triunfo por los convenios deZavaleta, entró
de hombres que has sacrificado en México el 2 de Enero de 1833, é instaló en la Presidencia á Gó-
á tu soberbia, malvado, mez Pedraza, quien en 16 del dicho mes decretó que se diera cumpli-
y has hecho llorar á mares. miento á la ley de 20 de Marzo de 1829, que expulsaba de la Repú-
Juro al fin por nuestros lares, blica á los españoles 110 exceptuados. El decreto de Pedraza, publicado
que tu ambición refrenada por su Ministro de Relaciones y de Guerra D. Bernardo González
será por la invicta espada Angulo, era amplio en excepciones, acordándolas á los casados ó viu-
del virtuoso Bustamante; dos que tuviesen hijos mexicanos y á los naturalizados en naciones
S a n t a - A n n a , llega el instante, amigas; pero tenía uu art. 4? que le facultaba á expedir pasaporte á
teme á la patria enojada. cualquiera de los mismos exceptuados, siempre que su permanencia
" E n Zumpango te has metido en el país fuese calificada de perjudicial al orden público, facultad
S a n t a - A n n a , cobardemente; discrecional de que se quiso armar al poder para todos aquellos casos
nada tienes de valiente, en que creyese conveniente hacer uso de ella. Una vez obtenida, el
sí de traidor fementido. Gobierno no se dió prisa alguna á cumplir esa ley, que, aunque fe-
T u vida un tejido ha sido chada el 16, no vino á publicarse sino diez días más tarde, porque
de sorpresas y patrañas; S a n t a - A n n a no quiso que lo fuese hasta después de haberse él reti-
las maldades más extrañas rado á su hacienda de Manga de Clavo, para la que salió el 21 de Ene-
fueron y son tus laureles: ro, con el propósito firme de aparentar que no tomaba parte en nin-
así es como los lebreles guna de las medidas extremas de la reacción liberal, que tenía que
manifiestan sus hazañas. ser resultado del triunfo de los enemigos de la opresora administra-
ción ,de Bustamante, y ganarse así las simpatías de las clases privile- á mediados de Junio, produciendo verdaderos estragos en la hacien-
giada^, únicas que podrían proporcionarle elementos de engrandeci- da del Jaral. En la ciudad de México se dió el primer caso er 6 de
miento/ Esé cloble juego había de verse coronado por el más completo Agosto, y en sólo el día 17 de ese mes, murieron mil doscktifas diez
éxito; por lo pronto, á los liberales debió su elección para la Pre- y iiuevepersonas. Mientras el cólera devastaba la Capital, Gómez Fa-
V sidencia de la República, á la que en 30 de Marzo fué elevado por rías secularizaba misiones, se incautaba de sus bienes, suprimía la
declaración de las Cámaras y por los votos de diez y seis Legislaturas, Universidad, relevaba á los fieles de la obligación de pagar diezmos,
de las que once sufragaron por D. Valentín Gómez Farías para la y á los religiosos de uno y otro sexo del cumplimiento de votos mo-
Vicepresidencia. La crítica de estas elecciones y de estos manejos la násticos; disponía la nulidad de cuantas operaciones hiciese el clero
hizo un insolente impreso publicado, al estilo de la época, con un epí- con sus bienes, que debían estimarse como propiedad nacional, y li-
grafe ó título, que decía: cenciaba los cuerpos de tropas permanentes y activas que se hubieran
sublevado contra el sistema federal. Tan continuados ataques á lo
hasta allí sagrado é inmutable, y el crecimiento del cólera, dieron de
" E s t a es la verdad pelada,
través con el buen humor de todos, y mataron el ansia de diversio-
tan picaro es Bustamante
nes, que vinieron á caer en profundo abatimiento. La ciudad se vió
como Pedraza y S a n t a - A n n a . "
convertida en un vasto hospital y lugar de duelo, y espantaba la fre-
cuencia, ó mejor, continuidad con que atravesaban en todas direccio-
Comunicada al hacendado de Manga de Clavo su elección, el há- nes calles y plazas los conductores de cadáveres, los más sin acompa-
bil Proteo político, como ya era y siguió siendo llamado, contestó ñamiento ni pompa algunos. Pocos iban metidos en ataúdes, los más
afectando desinterés, ó quizás porque así lo hubo ofrecido para ga- envueltos en sábanas ó petates; los sepultureros huían del oficio, ate-
narse partidarios, que su salud delicada no le permitía por entonces rrados al ver á muchos que se les entregaban como cadáveres, levan-
pasar á México á encargarse de la Presidencia, de la cual, en 1? de tarse demacrados pero vivos, en el instante de ir á ser depositados en
Abril, se encomendó Gómez Farías como Vicepresidente. las fosas. Por donde quiera que se tendiese la vista, sólo descubríanse
En esos primeros meses de 1833, el Teatro Principal no había in- fúnebres comitivas, personas vestidas de luto y semblantes doloridos
terrumpido su serie de diarias representaciones, sin ofrecer el cuadro y desolados. "Entrábamos en los templos, cuyas campanas, por orden
de ópera otra novedad que la intitulada Federico Segundo de Prusia, de la autoridad, estaban mudas—dice D. Carlos Bustamante—y sólo
entre numerosas y bien aceptadas repeticiones de Tancredo, Clotilde, oíamos preces, letanías y ruegos fervorosos al Señor Sacramentado,
Mahometto, La Urraca, Semíramis, Torbaldo, Elena y Claudio, Tebal- implorando misericordia: las casas de los particulares semejaban mo-
do y La Cenicienta. El cuadro de verso repitió su repertorio común y nasterios, ya por la sobriedad con que se comía, ya por los rezos re-
corriente, con especialidad las obras de Bretón de los Herreros. En gulados á ciertas horas del día y de la noche, teniendo el primer lugar
la Plaza de toros de la Alameda, convertida en circo de equitación, el Rosario de la Buena Muerte, que por momentos esperábamos oírlo
Mr. Green se atrajo al todo México con su aplaudida escena de El sol- á las cabeceras de nuestras c a m a s . . . .
dado borracho y su pasatiempo famoso el Guardarropa volante ó las mo-
" L a s golondrinas huyeron de aquella atmósfera envenenada. . . .
das de las señoras de México, y su celebérrimo salto sobre ocho caba-
En el laboratorio químico de Minería se hizo el análisis del agua que
llos pasando por un globo de fuego elevado á diez y seis pies del suelo.
bebíamos en México, y resultó que abundaba en gas liidro-sulfúrico
Vinieron después la interminable serie de alarmas y agitaciones y que era necesario hervirla para t o m a r l a . . . .
provocadas por las avanzadas medidas reformistas de Gómez Farías; " A l terror causado por la epidemia en sí misma, se unió el que causó
el pronunciamiento de Escalada por Religión y Fueros en Morelia; la el sinnúmero de procesiones, de rogativas que invadían las calles,
extrañísima aventura de la prisión de Santa-Anna, por sus mismas procesiones que los devotos veían pasar postrados en tierra y pidiendo
tropas rebeladas con Arista; y la mentadísima ley del Caso que abrió á voces misericordia y perdón de culpas que sin ningún secreto pu-
las puertas del destierro á elevados personajes del partido conserva- blicaban á gritos, entre patéticos sollozos, ayes y lamentos de toda
dor. En medio de todo ese desorden, cuyos mil y un incidentes, to- especie, sin que las autoridades se atreviesen á impedir aquellos actos
dos graves, no puede detallar un libro como el mío, tuvo lugar en que, en último resultado, refluían en mal público, propagando la
México la aparición del cólera morbus. La terrible enfermedad entró alarma, por temor de concitarse la animadversión general que atribuía
en la República por Tampico; de allí saltó á San Luis y Guanajuato aquella plaga á castigo que la Providencia enviaba sobre los mexi-
! F *

A
su cobardía eu sufrir á un Gobierno como el de Gómez Fa- en Madrid con tal entusiasmo, que La Revista Española dice que 110
criminal, impío y sacrilego." se había visto igual desde los tiempos del Sí de las ufáis." 'y
Solemne de aquellas imponentes procesiones fué la de 25 En lo que á otros espectáculos toca, hallo en los periódicas de la
de Agosto, dedicada á honrar la imagen del Señor de Santa Teresa; época el siguiente anuncio que puede servirles de interesante dato á
D. Carlos Bustamante asegura que, á partir de aquel día, comenzó á quienes escriben sobre progresos materiales en México:
disminuir la fuerza del cólera. Como para mostrar su reconocimiento "Nuevo espectáculo.—A los capitalistas y amigos del adelanta-
á la misericordia divina, la multitud timorata acogió con alegría el miento de las Artes y de las mejoras de la Gran Nación Mexicana..
pronunciamiento del héroe insurgente, D. Nicolás Bravo, cuya pro- — Con este objeto se exhibirá á la espectación de este respetable pú-
clama, que remitió á S a n t a - A n n a invitándole á aceptarle y á sepa- blico, en la calle de Zuleta núrn. 5, letra B, una muestra de los mayores
rarse de la canalla, concluía así: "glorioso será el morir mártires, á descubrimientos alcanzados por el ingenio humano; es decir, una re :
" u n tiempo por la fe de Jesucristo y por la^libertad de la p a t r i a . " presentación perfecta, aunque en pequeño, del modo con que en el
día se puede viajar con una velocidad de doce leguas por hora, eri
Francia, en Inglaterra y en los Estados Unidos de N o r t e - A m é r i c a .
Dicha representación se hará por un carruaje y una máquina de vapor
que lo impulsa á correr por un camino de mortaja, semejante á los que
CAPITULO X I I últimamente se han construido en las referidas naciones, para hacer
fáciles, cómodas y seguras las comunicaciones y los transportes de las
personas y efectos. También se mostrarán las observaciones científi-
cas, mapas, modelos y presupuestos de gastos necesarios para la cons-
1833.-1834. trucción de un camino semejante para carruajes de vapor, que se puede
establecer de esta ciudad á la de Veracruz; todo lo cual se ha impreso
En medio del trastorno producido en las conciencias por las refor- y dedicado al pueblo mexicano, con el especial intento de convencer
mas que intentó Gómez Farías, y en las familias por aquella primera de la utilidad y conveniencia que este género de empresas acarrea á
visita del cólera, la Empresa del Principal hizo cuanto pudo por sos- las naciones.— La casa se hallará abierta todo el día, siendo el precio
tener sus espectáculos. En 4 de Junio puso en escena Galli, el Moisés de entrada dos reales por persona."
en Egipto; en 7 del siguiente el Ricardo y Zoraida, y en 10 de Diciem- Otras novedades de aquellos días últimos de 1833 y primeros de
bre La dama del lago, y repitió El Barbero de Sevilla, El Conde Ory, 1834, fueron el Gran Cosmorama establecido, por primera vez en gran-
Semiramis, La Urraca, Clotilde, Inés, Tebaldo, Cenicienta y otras dé des proporciones, en la casa núm. 15 de la i'} calle de Plateros; el for-
su abundante repertorio. El cuadro de verso ofreció durante ese mis- midable chasco de un fracaso de ascensión en globo por Mr. Adolfo
mo año de 1833, poquísimas obras nuevas, mereciendo apenas citarse, Theodore, de cuyo asunto hablaré eu extenso más adelante, y el pe-
por su grande éxito, la comedia La musa aragonesa; por los aplausos ligro en que México estuvo de quedarse sin Opera Italiana.
con que Palomares fué recibido, la titulada Las tramas de Garulla,
" E l Sr. Galli — copio aquí un artículo de La Lima de Vulcano—
y por haber servido para la presentación del actor Soler, la llamada
en unión de toda la compañía de ópera, se resistía á cantar en la pre-
La mujer de dos maridos.
sente temporada, mientras 110 se le pagasen los tres ó cuatro meses
En Junio de ese año regresó á México, su patria, D. Manuel Eduardo de sueldos que se le deben, y sobre todo se le asegurase k validez de
de Gorostiza, cargado de laureles y de méritos de toda especie: el Re- la nueva contrata que por dos años más hizo con el mismo Gobierno
gistro Oficial del 4 de Diciembre publicó, á propósito del eminente que hoy trata de anularla, por aquella liberal y cómoda regla de sic
poeta y diplomático citado, el siguiente curioso párrafo: "Vamos á volo siejubeo. Siguiéronse muchas contestaciones sin que los italia-
dar á los amantes del teatro una noticia que no puede menos de agra- nos prescindiesen de su derecho, y entonces nuestro ilustrado, bene-
darles, y es que mañana jueves 5, se representará una comedia nueva mérito, paternal y justo Gobierno del Sr. Gómez Farías, adoptó el
y original de nuestro Gorostiza, intitulada Contigo pan y cebolla. Sa- mezzo término de poner el pasaporte en la mano del Sr. Felipe Galli,
V bemos igualmente que su autor la escribió en Londres con intención por conducto del Ministro de Relaciones D. Francisco Lombardo, pa-
de que se estrenase en su patria, pero los españoles obtuvieron, por ra que saliera de México dentro de tres días, y de la República den-
alguna superchería sin duda, una copia, y la acaban de representar tro de treinta, á la vez que se hacía lo mismo con el Obispo de Pue-
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su cobardía eu sufrir á un Gobierno como el de Gómez Fa- en Madrid con tal entusiasmo, que La Revista Española dice que 110
criminal, impío y sacrilego." se había visto igual desde los tiempos del Sí de las nyüis." "•/
Solemne de aquellas imponentes procesiones fué la de 25 En lo que á otros espectáculos toca, hallo en los periódicas de la
de Agosto, dedicada á honrar la imagen del Señor de Santa Teresa; época el siguiente anuncio que puede servirles de interesante dato á
D. Carlos Bustamante asegura que, á partir de aquel día, comenzó á quienes escriben sobre progresos materiales en México:
disminuir la fuerza del cólera. Como para mostrar su reconocimiento "Nuevo espectáculo.—A los capitalistas y amigos del adelanta-
á la misericordia divina, la multitud timorata acogió con alegría el miento de las Artes y de las mejoras de la Gran Nación Mexicana..
pronunciamiento del héroe insurgente, D. Nicolás Bravo, cuya pro- — Con este objeto se exhibirá á la espectación de este respetable pú-
clama, que remitió á S a n t a - A n n a invitándole á aceptarle y á sepa- blico, en la calle de Zuleta núrn. 5, letra B, una muestra de los mayores
rarse de la canalla, concluía así: "glorioso será el morir mártires, á descubrimientos alcanzados por el ingenio humano; es decir, una re :
" u n tiempo por la fe de Jesucristo y por la^libertad de la p a t r i a . " presentación perfecta, aunque en pequeño, del modo con que en el
día se puede viajar con una velocidad de doce leguas por hora, eri
Francia, en Inglaterra y en los Estados Unidos de N o r t e - A m é r i c a .
Dicha representación se hará por un carruaje y una máquina de vapor
que lo impulsa á correr por un camino de mortaja, semejante á los que
CAPITULO X I I últimamente se han construido en las referidas naciones, para hacer
fáciles, cómodas y seguras las comunicaciones y los transportes de las
personas y efectos. También se mostrarán las observaciones científi-
cas, mapas, modelos y presupuestos de gastos necesarios para la cons-
1833.-1834. trucción de un camino semejante para carruajes de vapor, que se puede
establecer de esta ciudad á la de Veracruz; todo lo cual se ha impreso
En medio del trastorno producido en las conciencias por las refor- y dedicado al pueblo mexicano, con el especial intento de convencer
mas que intentó Gómez Farías, y en las familias por aquella primera de la utilidad y conveniencia que este género de empresas acarrea á
visita del cólera, la Empresa del Principal hizo cuanto pudo por sos- las naciones.— La casa se hallará abierta todo el día, siendo el precio
tener sus espectáculos. En 4 de Junio puso en escena Galli, el Moisés de entrada dos reales por persona."
en Egipto; en 7 del siguiente el Ricardo y Zoraida, y en 10 de Diciem- Otras novedades de aquellos días últimos de 1833 y primeros de
bre La dama del lago, y repitió El Barbero de Sevilla, El Conde Ory, 1834, fueron el Gran Cosmorama establecido, por primera vez en gran-
Semiramis, La Urraca, Clotilde, Inés, Tebaldo, Cenicienta y otras dé des proporciones, en la casa núm. 15 de la i'} calle de Plateros; el for-
su abundante repertorio. El cuadro de verso ofreció durante ese mis- midable chasco de 1111 fracaso de ascensión en globo por Mr. Adolfo
mo año de 1833, poquísimas obras nuevas, mereciendo apenas citarse, Theodore, de cuyo asunto hablaré eu extenso más adelante, y el pe-
por su grande éxito, la comedia La musa aragonesa; por los aplausos ligro en que México estuvo de quedarse sin Opera Italiana.
con que Palomares fué recibido, la titulada Las tramas de Garulla,
" E l Sr. Galli — copio aquí un artículo de La Lima de Vulcano—
y por haber servido para la presentación del actor Soler, la llamada
en unión de toda la compañía de ópera, se resistía á cantar en la pre-
La mujer de dos maridos.
sente temporada, mientras 110 se le pagasen los tres ó cuatro meses
En Junio de ese año regresó á México, su patria, D. Manuel Eduardo de sueldos que se le deben, y sobre todo se le asegurase k validez de
de Gorostiza, cargado de laureles y de méritos de toda especie: el Re- la nueva contrata que por dos años más hizo con el mismo Gobierno
gistro Oficial del 4 de Diciembre publicó, á propósito del eminente que hoy trata de anularla, por aquella liberal y cómoda regla de sic
poeta y diplomático citado, el siguiente curioso párrafo: "Vamos á volo siejubeo. Siguiéronse muchas contestaciones sin que los italia-
dar á los amantes del teatro una noticia que no puede menos de agra- nos prescindiesen de su derecho, y entonces nuestro ilustrado, bene-
darles, y es que mañana jueves 5, se representará una comedia nueva mérito, paternal y justo Gobierno del Sr. Gómez Farías, adoptó el
y original de nuestro Gorostiza, intitulada Contigo pan y cebolla. Sa- mezzo término de poner el pasaporte en la mano del Sr. Felipe Galli,
V bemos igualmente que su autor la escribió en Londres con intención por conducto del Ministro de Relaciones D. Francisco Lombardo, pa-
de que se estrenase en su patria, pero los españoles obtuvieron, por ra que saliera de México dentro de tres días, y de la República den-
alguna superchería sin duda, una copia, y la acaban de representar tro de treinta, á la vez que se hacía lo mismo con el Obispo de Pue-
R. H. T.—T. I . — 1 1
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bla,\por su resistencia á las reformas en asuntos eclesiásticos. ¿No es "Ilustre americano Papantzin,
un contraste chocante ver aplicar en un mismo día la famosa ley del ¿por qué fatal destino, por qué
caso á Un príncipe de la Iglesia porque protesta contra actos ilega- ha de quedar tu nombre oscurecido
les, y á un operista porque no canta gratis, y á quien no sólo no pa- é incógnito á la Historia y á la Fama?
ga el Gobierno lo que le debe, sino que declara nula la nueva con- ¿Acaso porque fuiste infeliz padre
trata, celebrada hace seis meses con todas las formalidades legales?" de la Xóchitl hermosa y desgraciada
Por fortuna para el público, el Gobierno retrocedió ante la censura que dió á luz el azote destructor
general, y celebró con Galli un nuevo arreglo. de la nación tolteca y de su patria?
Antes de pasar adelaute, citaré, como otra curiosidad las famosas Mas ¿qué culpa ha tenido un hombre honrado,
y celebérrimas funciones lúpico-númico-acrobáticas de la compañía que su deshonra con valor reclama
Green en la Plaza de toros de la Alameda; hé aquí algunos de los nú- y resistir no puede á la violencia
meros de un programa de esa compañía México-Americana: "Caye- de la pasión furiosa de un monarca?
tano, el joven sin igual, hará juegos portentosos que ha ensayado Nadie te inculpa. Ni los hombres fueron
nuevamente.—El Sr. Eeón, después de una serie de actitudes y jue- la
gos primorosos, saltará por cima de una mesa servida y cubierta de causa principal de las desgracias
vajilla.-—El Sr. Green comenzará por las actitudes romanas, dando que han destruido ciudades y naciones
el dificilísimo salto inverso en forma de Mercurio alado.—El payaso con grande estrago de la especie humana.
cantará con su acostumbrado gracejo una canción popular.—Caye- Este influjo funesto desde luego
tano, á pelo y sin freno, ejecutará mil travesuras, con la velocidad y á sólo la mujer se reservaba,
gracejo que 110 tienen segundo en ningún niño de tan tierna edad.— desde que la primera trajo al mundo
Para fin de fiesta, la gran pantomima de Don Quijote y Sancho Pan- el desorden fatal con la manzana.
za, nunca vista en esta República, según el siguiente reparto de ac- . . . . Y porque no quedase el nuevo mundo
tores: D. Quijote, Sr. Cristóbal; Sancho Panza, Suárez; Mujer, due- sin sentir esta influencia malhadada,
ña del molino, Cayetano; Capitán de caballería, Eeón; Ladrones, Los las bellezas de Xóchitl y Malintzin
de la Compañía." hacen la desventura americana.
Así textualmente lo dice el programa respectivo. ¿Por qué, pues, ¡oh! buen viejo, no eres loado
No eran ladrones lo que entonces faltaba: El Telégrafo, que tal ni tu renombre con buril se graba
era el nombre que en esa época llevaba el periódico oficial del Gobier- en el registro de los hombres grandes
no, decía en su sección editorial del 17 de Enero de 1834: " L a Capi- que bien merecen de la gente indiana?
tal de la Federación se halla tan plagada de ladrones, que sus pací- No hay más razón, si bien se considera,
ficos habitantes no se encuentran ya seguros ni en los lugares más que ser americano, y esto basta
concurridos, ni en el recinto de sus mismas casas. Diariamente se para que el preocupado mundo antiguo
advierte el aumento que adquiere la insolencia de los bandidos, que, ó 110 te conociera ó te olvidara.
no contentos con robar, añaden muchas veces á este crimen el detes- . . . . T ú eres el Noé del nuevo continente
table del homicidio, ó cuando menos el de herir gravemente á los in- que ha sabido hacer uso de una planta
felices que asaltan." que no ofrecía á la vista el dulce fruto
como al primero lo mostró la parra.
Y pues de asaltos hablo, no debo dejar sin cita el que á las Musas
T ú hiciste
dió un Sr. Lclardo, á quien no citaría ante mis lectores si su compo-
conocer al mexicano
sición no hubiese sido considerada digna de ser publicada en la
el maguey que en sus campos sin cultivo
ción de Variedades del periódico del Gobierno, con el nombre de Be-
creciera inútilmente en abundancia.
lla Literatura, Canto en elogio del tolteca Papantzin, inventor del agua-
T ú analizaste la naturaleza
miel y de otros varios usos del maguey. El canto llevaba por epígrafe
de aqueste vegetal, producción rara
este verso de Horacio: Dignum laude virum Musa vetat morí. Y así
que da al hombre el vestido, el alimento,
comienza:
bebida, medicina, armas y casa.
T ú con ella enriqueces tu nación,
% y , *
y un licor le convidas, que aventaja
reliauo D. Francisco Manuel Sánchez de Tagle,-el cantor de \a.¿¡En-
os que celebraron las antiguas trada del Ejército Trigarante, de A la luna en tiempo de'discordias croiles,
y á cuantos hoy la moda usa y alaba. y de Al Ser Supremo, estimadas como verdaderas joyas ctehi literatura
. . . . Por él sin duda cambiarían con gusto mexicana; al poblano D. José Joaquín Pesado que, allá p o f e l año de
su té la China, su café la Arabia, 1821, empezó á escribir versos y á adquirir Hombradía con sus com-
jjflf*
su cerveza el Albión, su ponderado posiciones religiosas; á D. Manuel Carpió que, hacia 1831 y á los cua- j
y generoso vino Iberia y Francia. renta de edad, no satisfecho con sus glorias de médico distinguido
. . . . T u s descendientes, en mejores días, experto arqueólogo y clásico literato, publicó sus primeras poesías y
-NK : en días de paz, de gloria y de abundancia, entregó á la memoria de sus amigos admiradores, aquello de:
cuando más justos sepan apreciar
los bienes que el destino les prepara;
cuando unidos y ricos y contentos, érase un valle plácido y ameno
convirtiendo las lanzas en azadas poblado de frondosos tamarindos,
se apliquen al cultivo de la tierra de palmeras ruidosas y flotantes,
harto con sangre y con sudor regada; de naranjos altísimos y lindos. . . .
en medio de sus grandes magueyales
de blanco mármol formarán tu estatua,
y los más conocidos versos de su famoso Camino del Gòlgota:
y con manto de ayatl, por tirso el quiote,
y de su flor tejida la guirnalda,
en su torno danzando alegremente, Flotan en Siria lánguidas las palmas
alternando los brindis y las salvas, y en Jericó desmáyanse las r o s a s . . . .
vivan Papan, dirán, Papantzin viva,
que con dones tan gratos nos regala.'' Allá, repito, entiéndanse y decidan mis lectores, pues yo 110 me
atrevo á tanto, ni me creo voto para terciar en la no resuelta cuestión
de si Carpió y Pesado fueron los restauradores de la poesía lírica y
En los humildísimos tamaños de mi libro, no pueden caber juicios descriptiva entre nosotros, ó si lo fué Fr. Manuel de Navarrete, ó si
críticos sobre la poesía en general entre nosotros, máxime cuando, ese honor no corresponde de derecho á ninguno de los tres, según
sin falsa modestia, 110 me estimo competente para el caso. Simple y opinan muchos críticos.
llano cronista, me limito y continuaré limitándome á presentar ejem- Entre éstos 110 faltan quienes acuerden la preferencia al ilustre D.
plos, dejando la ardua sentencia á cargo de mis lectores. Ellos podrán Andrés Quintana Roo y le estimen poeta eminente, restaurador del
decidir por sí mismos acerca de esa literatura ó gongorina ó prosaica, buen gusto, árbitro entre la exageración del gongorismo y la desnu-
sin inspiración, sin estilo, vulgar, sin prosodia, casi enteramente pri- dez del prosaísmo, modelo en lenguaje castizo, estilo noble, versifi-
vada de la vida y el genio de la poesía, y en la que —sigo en esto la cación armoniosa, tono inspirado, sentimiento vivo, giros valientes
opinión del distinguido I'imentel,—son caracteres distintivos la falta y oportunos adornos poéticos, citando al efecto su oda á La Libertad.
de novedad, las imágenes trilladas, la falta de elevación y de profun- Este intachable patriota, verdadero patriota, fué hijo de Yucatán,
didad, el abuso de palabras y de expresiones prosaicas, la ordinariez como lo fué también D. José María Alpuche, autor de muy estimadas
en lo jocoso y lo epigramático, el desprecio de la gramática y de la composiciones patrióticas; calificación de bondad á su vez acordada
corrección de la forma. al jalapeño D. José Jesús Díaz, el mejor productor de leyendas y ro-
No quiere decir esto que por el mismo rasero deban estimarse to- mances de la Conquista y de la Independencia, tan excelentes para
dos los escritores de aquella primera parte de la historia literaria de algunos críticos, que no falta quien se extienda á decir que sus ro-
México independiente. De vez en cuando el investigador y el que mances susodichos nada desmerecen comparados con los del Duque
V» \ estudiar ansia, encuéntranse con más ó menos reducidos oasis en aquel de Rivas. A
(
V il
desierto del buen gusto, y aplaude á D. Anastasio de Ochoa, á D. Y pues de poetas tratamos, procurando señalar los más distingui-
Francisco Ortega, autor de algunas estimables odas y elegías; al mo- dos, citaré también, sin entrar en detalles, á uno de grandes méritos
%

que,i si bien no nació en México, aquí vivió, casó y dejó sus cenizas Y v
en 1838. Le nombré diversas veces al tratar de las camparlas artísti- " Y , en efecto, naciera el valiente
cas de A n d " ^ Prieto, y con esta seña, mis lectores se acordarán de que de tronos libró al Nuevo Mundo,
que el pbefa á que me refiero fué D. José María Heredia. Nacido en y en Tampico al abismo profundo
1803 en Santiago de Cuba, trájole á México su padre, aquí enviado á los leones de España lanzó:
A P°r el Gobierno español con un alto empleo en 1819. De regreso en con justicia los genios del cielo
»ja isla, el joven Heredia tomó parte en una conspiración para hacerla descendieron entonce á la tierra;
' independiente, y fué desterrado. Volvió á México en 1825 y logró el Libertad y el dios de la guerra
aprecio de D. Guadalupe Victoria, que le otorgó varios empleos y le cada uno su cuna meció."
r hizo Diputado á la Legislatura del Estado de México. Para no traer
á cuento sino una opinión suficientemente autorizada, diré que D.
- —-Alberto Lista calificó á Heredia de gran poeta, versificador fluido y Los versos no podían ser peores; mas debieron sonar gratos á los
valiente, pero poco correcto. oídos de Santa-Anna, cuyo cumpleaños se celebró entonces con gran-
de regocijo: "desde temprano por la mañana—dice El Periódico Ofi-
Estos señalados escritores y poetas, ameritadísimos sin eluda fue-
cial,—multitud de pueblo que le esperaba en la plaza lo proclamaba
ron; pero debemos convenir en que hasta el instante en que mi Rese-
con vítores á su persona, á la libertad y á la Religión: por la tarde,
ña alcanza, poco habían hecho sentir su influencia sobre el infinito
el paseo, en que se hallaban situadas músicas militares, estuvo so-
número de los versistas detestables que producían composiciones co-
lemnemente asistido, y en la noche el teatro ofrecía, por la numero-
mo la Oda á Papantzin, del caballero Le/ardo, vista sin duda con sufi-
sísima y lucida concurrencia de gente toda decente, un espectáculo
ciente aprecio, puesto que nada menos que el Periódico Oficial le daba
que de muchos años atrás 110 se había visto. Al presentarse S. E . re-
acogida en sus exiguas columnas.
petidos vítores anunciaron la complacencia general; pero siempre rei-
En ellas también puede leerse el " H i m n o Cívico," que, dedicado á
nando en aquel lugar y en todo el día la tranquilidad y el orden."
celebrar los días del Exmo. Sr. Presidente D. Antonio López de Santa-
En otro de sus números decía el mismo periódico, elogiando la re-
Anua y para cantarse en el Teatro Principal, compuso el Lie D Ig-
presentación de la ópera nueva Zelmira-, "la composición es excelen-
nacio Sierra y Rosso, que allí se intitula "traductor de óperas italia-
nas del mismo teatro.'' No puedo resistir á la tentación de copiar sus te y fué perfectamente ejecutada por los individuos del ramo: la Sra.
primeras estrofas: Pellegrini, después de hacerse cargo de la parte más difícil de las di-
versas piezas interesantes de toda ella, ejecutó admirablemente el
difícil é interesante final con que concluye. El papel del Sr. Galli es
propio y bien desempeñado. El Sr. Mussati llenó también los deseos
"Cuando el yugo de Iberia espantoso del público, y sería de apreciarse cantara íntegra la letra de la pieza
sobre México triste pesaba, con que da principio."
y en letargo profundo velaba
noche eterna, tiniebla letal; No faltaba motivo á tanta alegría del órgano oficial: la buena ciu-
una aurora bellísima y pura dad de México, con su Ayuntamiento al frente, habíase, el 13 de Ju-
se anunció venturosa en el cielo, nio de 1834, pronunciado por el plan de Cuernavaca, allí firmado el
augurando fatídica al suelo 25 de Mayo, desconociendo al Congreso, derogando todas sus leyes,
que llegaba la fin de su mal. excluyendo á Gómez Farías y declarando supremo protector y auto-
ridad única á D. Antonio López de Santa-Anua.
" Y fué el trece de Junio brillante
cuando rico de púrpura y grana, Los pronunciados en la Capital lucían en los sombreros cintas
del excelso, del grande Santa-Auna, blancas ó azules con el letrero Viva la Religión y el Ilustre Santa-
Febo alegre el natal anunció: Amia, que convertido á las sanas ideas clericales, nombró su Minis-
de Aquilón detenidas las furias, tro al Obispo de Michoacán, D. Juan Cayetano Portugal, y pronto
estos ecos al manso Favonio: puso término á cuanto en su tarea reformista habían iniciado las
''Libertad, ha nacido un Antonio,'' Cámaras y el Vicepresidente Gómez Farías: éste, ante el general cla-
susurrando decir se le oyó. mor de las multitudes conservadoras, pidió y obtuvo licencia para re-
tirarse, y el 8 de Setiembre salió para el extranjero "abrumado este
' J 328
< i . ' Nuevamente los poetas palaciegos pulsaroi su lira en
hombre execrable—dicen los periódicos gobiernistas,—con las impre- vencedor de Tampico; dejémosles hablar:
caciones más juntas de toda una ciudad, la primera del Nuevo Mun-
do de Golójj^sobre la que pesaron inmediatamente sus terribles desa- " N o es la adulación, yo la detesto,
fueros. Gómez Farías atrajo, cual ominoso cometa, el cólera y la mi- la que mueve mi labio :
seria, la inmoralidad y la tiranía, el espionaje y la traición, la ignorancia es la santa verdad ; ella me inspira
• W e l sacrilegio, la exaltación de los delincuentes y la depresión de los y sus acentos cantará mi lira.
honrados, el triunfo de la canalla soez y el abatimiento de la porción "Nació Santa-Anna en el lugar más bello
escogida, el terror y el luto de las familias, las proscripciones, el llanto, que en la creación hiciera el numen santo
•la muerte bajo mil y más formas horrorosas. Fernando V I I se aver- en el jardín del mundo;
gonzó de ver que en sus antiguas colonias se produjo y fué elevado vedlo que apenas el brillante bozo
un monstruo que le excediera en escándalos y terrorismo, y descen- á su semblante agraciando viene,
lió al sepulcro satisfecho de que ya no era necesaria su presencia so- cuando valiente ciñe
bre la faz de la tierra para afligir á la H u m a n i d a d . " la espacia del honor; joven esbelto
No pueden exagerarse más la inquina y el insulto; en cambio, de sangre noble y de figura grata,
S a n t a - A n u a , á quien también vimos insultado en las décimas in- á la campaña parte
sertas en el precedente capítulo, era entonces una especie de nuevo magnánimo, resuelto,
Mesías, con el cual le comparó el Cabildo Metropolitano al anunciar hijo mimado del sañudo Marte.
un solemne Triduo de acción de gracias. La literatura periodística "Sed de laureles, de brillante gloria,
oficial, decía a) referirse á un baile dado en la Lonja en obsequio de lo lleva por doquier á la victoria:
S. E.: "el General Presidente ha recibido un nuevo testimonio de deja en eterno olvido
aprecio de todas las clases: la mala noche no estorbó una hermosa y el blando lecho, el pabellón dorado,
numerosísima concurrencia de las señoritas más decentes, y podrían y en la grama tendido
calcularse en más de ochocientas las personas de ambos sexos que en mientras el astro de la noche impera
aquella inocente reunión manifestaban su alegría y entusiasmo; tocio tranquilo se reposa,
era orden y decoro, y por la propiedad de los trajes y de la etiqueta ceñida á la cintura
se conocía desde luego que estábamos á mediados del año de ocho- para su ardor ligera,
cientos treinta y cuatro." pero pesada y fúlgida armadura.
El mismo Periódico Oficial dice en 13 de Setiembre, haciendo to-
" S u pais recorre entero,
mar parte á la Providencia en los festejos al héroe que nos libertó
entonces oprimido,
de Farías: "Cuando ha sido constante que las festividades nacionales
y sus costumbres observando aprende :
que se solemnizan en este mes, regularmente son interrumpidas por
pero sonó guerrero
recios aguaceros, consiguientes á la fuerza de la estación, y hemos
visto que la del once, aunque amagada por aparatos, no llegaron á en Iguala el clarín; Santa-Anna entonces
verificarse, diríamos, hablando poéticamente, que hasta la naturaleza " ¡Viva la Patria! " grita, y ardoroso
quiso por su parte cooperar á solemnizar el plausible aniversario al fragor de los bronces
de los triunfos gloriosos de Tampico. Su Excelencia recibió en la allá marcha adelante,
Ciudadela las felicitaciones ele las autoridades, y después de servido empuñando brioso
allí un decente ambigú, á las ocho de la noche una salva de artillería el pabellón invicto trigarante.
anunció la salida del General Presidente para el Teatro. En éste se "¡Heroica Veracruz! los fuertes muros
representó la ópera Mahomet II, y ya por lo exacto de la ejecución que ostentas elevados y seguros

(
como por el adorno, iluminación y numerosísima concurrencia, pre- escalados están. El héroe joven
sentaba el espectáculo más interesante. Así cada vez más, afiañzán- los derribó el primero,
\ dose la libertad y sistemándose el orden, este hermoso suelo adelanta el adalid á quien el Orbe entero
en ilustración y cultura." ya saluda entusiasta;
R. H. T
. - T . I.—12
X
330

oíd él-'.himno santo


con que dirige al vencedor su canto.
" Y el canto no cesaba todavía ¡ Oh Nación ilustrada !
ando otros miles de entusiasmo ardiente Fomentemos la empresa
publican sonorosos alegría: y Carolina amada
" Ha vencido, ha vencido el valiente, tan expresiva y dulce
loor eterno, inmortal á S a n t a - A n n a ; que nunca de aquí p a r t a . "
al enviado infeliz de la Habana
de Tampico en la arena humilló. El motivo que inspiró esa Oda fué el haberse anunciado que :1a
"Vencedor del Panúco, te levanta, Pellegrini se separaría del cuadro de Opera, disgustada con la Em-
gritara Veracruz, con breve planta presa, á cuyo frente habíase puesto D. Manuel Eduardo de Gorosti-
vuela, vuela y caiga en este día za, quien delegó todos sus poderes en un antiguo y mal
la doméstica, odiada tiranía. nombrado Joaquín Patiño, hombre no desprovisto de ingenio, x
" Y el tirano cayó, y la victoria intrigante y mal intencionado para con todo artista, según nos lo pin-
al héroe santo coronó de gloria. tan los periódicos de esa época, entre ellos el que se tituló La Lima
La patria venerable de Vulcano, que haciéndose eco de injustas prevenciones llegó á de-
entonces se salvó; salvóse luego cir de él: "como buen gallego es torpe y obstinado en sus torpezas,"
también de la impiedad, y agradecida y más adelante añadía: " L a s intrigas de Patiño para indisponer á
bendijo al salvador, su nombre adora los artistas del cuadro de Opera Italiana, han producido fuerte alar-
ma en el público y originado entre los abonados y en la Empresa un
y en él enclava ahora
conflicto que acaba de resolver el Ministro Sr. Lombardo, expidién-
sus ojos celestiales
dole pasaporte para que salga del país. ¿ Hasta ahora le vino á las
brillantes con la luz de la esperanza,
mientes á S. E., que Patiño debía ser expulsado de la República co-
y en segura confianza
mo español no exceptuado ? ''
de hallar alivio á sus infandos males."
A su tiempo volveré á tratar de Patiño, cuyas intrigas estuvieron,
en 1836, á punto de promover un motín, que del teatro trascendie-
1 al era el lamentable modo con que ensayábase en lo épico el poe-
se á la política.
ta ese, dejando á otros cosechar no el laurel de Apolo, pero sí la ador-
midera de Morfeo, con s i m p l í s i m a s composiciones sobre asuntos
chavacanos.
De ese género es la oda-así la intituló su autor, - q u e dedicada á
la distinguida cantante Carolina Pellegrini, decía : CAPITULO X I I I

" Los actores ilustres


de la ópera italiana,
1833 1835.
divinamente accionan
y bellamente cantan.
Excitan movimientos No pretendiendo mi libro, como no pretende, señalarse como un es-
de amor y de esperanza, tudio filosófico y crítico de la marcha y progreso del Teatro en Mé-
las almas enternecen xico, pues de ello no me juzgo capaz, vengo procurando hacerle me-
y los pechos inflaman. nos insignificante al convertirle en una especie de repertorio de noticias
¡ Cómo será posible de nuestros espectáculos, á fin de que tenga, al menos, esa curiosidad.
que ilusiones tan gratas Por tal motivo, hablaré aquí de las primeras ascensiones aerostáticas
terminen para siempre! intentadas ó realizadas en México en aquellos días.
El primero que procuró verificarlas fué Mr. Adolfo Theodore, fran-
cés, natural de Lyou. Este individuo, de quien ya dije ser conocido

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oíd él-'.himno santo


con que dirige al vencedor su canto.
" Y el canto no cesaba todavía ¡ Oh Nación ilustrada !
ando otros miles de entusiasmo ardiente Fomentemos la empresa
publican sonorosos alegría: y Carolina amada
" Ha vencido, ha vencido el valiente, tan expresiva y dulce
loor eterno, inmortal á S a n t a - A n n a ; que nunca de aquí p a r t a . "
al enviado infeliz de la Habana
de Tampico en la arena humilló. El motivo que inspiró esa Oda fué el haberse anunciado que :1a
"Vencedor del Panúco, te levanta, Pellegrini se separaría del cuadro de Opera, disgustada con la Em-
gritara Veracruz, con breve planta presa, á cuyo frente habíase puesto D. Manuel Eduardo de Gorosti-
vuela, vuela y caiga en este día za, quien delegó todos sus poderes en un antiguo y mal
la doméstica, odiada tiranía. nombrado Joaquín Patiño, hombre no desprovisto de ingenio, x
" Y el tirano cayó, y la victoria intrigante y mal intencionado para con todo artista, según nos lo pin-
al héroe santo coronó de gloria. tan los periódicos de esa época, entre ellos el que se tituló La Lima
La patria venerable de Vulcano, que haciéndose eco de injustas prevenciones llegó á de-
entonces se salvó; salvóse luego cir de él: "como buen gallego es torpe y obstinado en sus torpezas,"
también de la impiedad, y agradecida y más adelante añadía: " L a s intrigas de Patiño para indisponer á
bendijo al salvador, su nombre adora los artistas del cuadro de Opera Italiana, han producido fuerte alar-
ma en el público y originado entre los abonados y en la Empresa un
y en él enclava ahora
conflicto que acaba de resolver el Ministro Sr. Lombardo, expidién-
sus ojos celestiales
dole pasaporte para que salga del país. ¿ Hasta ahora le vino á las
brillantes con la luz de la esperanza,
mientes á S. E., que Patiño debía ser expulsado de la República co-
y en segura confianza
mo español no exceptuado ? ''
de hallar alivio á sus infandos males."
A su tiempo volveré á tratar de Patiño, cuyas intrigas estuvieron,
en 1836, á punto de promover un motín, que del teatro trascendie-
1 al era el lamentable modo con que ensayábase en lo épico el poe-
se á la política.
ta ese, dejando á otros cosechar no el laurel de Apolo, pero sí la ador-
midera de Morfeo, con s i m p l í s i m a s composiciones sobre asuntos
chavacanos.
De ese género es la oda-así la intituló su autor, - q u e dedicada á
la distinguida cantante Carolina Pellegrini, decía : CAPITULO X I I I

" Los actores ilustres


de la ópera italiana,
1833 1835.
divinamente accionan
y bellamente cantan.
Excitan movimientos No pretendiendo mi libro, como no pretende, señalarse como un es-
de amor y de esperanza, tudio filosófico y crítico de la marcha y progreso del Teatro en Mé-
las almas enternecen xico, pues de ello no me juzgo capaz, vengo procurando hacerle me-
y los pechos inflaman. nos insignificante al convertirle en una especie de repertorio de noticias
¡ Cómo será posible de nuestros espectáculos, á fin de que tenga, al menos, esa curiosidad.
que ilusiones tan gratas Por tal motivo, hablaré aquí de las primeras ascensiones aerostáticas
terminen para siempre! intentadas ó realizadas en México en aquellos días.
El primero que procuró verificarlas fué Mr. Adolfo Theodore, fran-
cés, natural de Lyou. Este individuo, de quien ya dije ser conocido

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\ V ¿ • •-• w cias que excedieron de la justicia, concluyendo por meterlo en la


y apreciado como físico y prestidigitador, y por haber sido el primero cárcel. _ /
que aqüUpefaló el alumbrado por gas hidrógeno en un teatrito de la Visitado en ella por el Gobernador del Distrito, el infelí^ aeronauta
calle de Zuleta, en que también expuso un pequeño modelo de ferro- fué puesto en libertad bajo fianza, después de obligarse ante el Escri-
carril de vapor, fué presentado y recomendado al General D. Manuel bano D. Francisco Bala á verificar la ascensión, siempre que Barrera
i Barrera, el famoso negociante y empresario, por el actor español Ber- franquease lo necesario para la construcción de un globo más capaz.
nardo Avecilla. Construido este segundo aeróstato, los catedráticos de Minería D . :
Theodore mostró á Barrera periódicos de la Habana y de Matanzas, Manuel Tejada, D. Manuel Castro y D. Tomás Ramón del Moral, en
recomendando lo sorprendente de sus operaciones de ascensión de glo- 10 de Octubre del mismo año de 1833, informaron, por comisión del
bos, y solicitó formar una Compañía que explotase tan nuevo y bri- Gobierno, que el globo tenía volumen y capacidad bastantes para so-
llante espectáculo, por no creer que una sola persona se determinara portar su carga, aun cuando no se llenasen de gas más de las tres
IT aventurar cinco mil pesos que calculó necesarios para verificar la cuartas partes: observaron á la vez que para la producción del gas e r a ~
ascensión. Barrera se entusiasmó con la fácil verba del buen francés, suficiente la provisión de hierro hecha por Theodore, pero 110 la de
y le ofreció ministrarle esa suma en calidad de que le sería reembol- ácido sulfúrico, que, en su concepto, debía ser de veinte quintales
sada con los productos de la primera función. más.
Theodore dió el primer paso, obteniendo en 11 de Enero de 1833,
El aeronauta tuvo su dificultad para conseguirlos, pues el fabrican-
y de D. José Joaquín de Herrera, General de brigada y Gobernador
te dijo 110 tenerlos listos y necesitar tres semanas para su elaboración.
del Distrito Federal, licencia para hacer ascensiones aerostáticas en
Theodore los buscó por varios lados y logró conseguirlos, si bien á
la Plaza de Toros de San Pablo, propiedad de Barrera. En tal con-
mayor precio del ordinario, y anunció su ascensión para día 13 del re-
cepto, éste principió á ministrarle cuantas cantidades iba necesitando
ferido Octubre; pero la víspera de él, el Gobierno mandó suspenderla,
para la construcción del globo, aparatos, compra de ácidos, etc., has-
informado de que faltaban al aeronauta los conocimientos necesarios
ta llegar á ocho mil trescientos y pico de pesos, que consumió en sus
para hacerla sin riesgo de su persona.
preparativos, hasta anunciar su sexta ascensión, y primera en esta ciu-
En un largo escrito del General Barrera, de que me sirvo, casi á
dad, para el primer día de Mayo de 1833.
la letra, en estos apuntes, se dice: ' 'Yo me había abstenido de hablar
Del programa respectivo tomo el siguiente curioso párrafo: ' ' E s
sobre este particular, porque no quería decir que el Supremo Gobier-
en aquel momento que el impávido viajero se desprende de este sue-
no había sido la causa y origen principal de que no se hubiera veri-
lo privilegiado de la naturaleza ( quizá para no volverle á pisar nunca,
ficado la ascensión, de que se hubieran hecho tantos gastos inútil-
según los arcanos de la Divina Providencia), que los mayores sínto-
mente y de que á Mr. Theodore le quedase camino para disculparse.''
mas de sensibilidad se manifiestan en el semblante de cada uno de los
Fenomenal fué la zambra que se armó con este segundo chasco: Ba-
espectadores, fluctuando sus espíritus entre el temor y la esperanza,
rrera y Theodore fueron insultados á más y mejor en los papeles pú-
al considerar el desamparo total que sigue al viajero en tan espanto-
blicos y el asunto se consignó á las autoridades judiciales á fin de que
sa carrera. A la elevación de mil varas, el volador dejará bajar un
se procurase la devolución del precio de los boletos vendidos; pero
hermoso paracaídas de tafetán, conducido hasta el suelo por un águi-
Barrera, personaje de grandes influencias, se descargó con el desven-
la dedicada al Sr. General D. Manuel Barrera, en prueba de su agra-
turado Theodore y demostró que, si bien era cierto que los billetes
decimiento y respeto por haberle suministrado las cantidades para ha-
habían producido catorce mil cuatrocientos veintiséis pesos, los gas-
bilitar esta función. Remontándose más en su vuelo, 110 se distinguirá
tos ascendían á catorce mil quinientos cincuenta y seis y gastádose,
al aeronauta, cuando todavía se divisará desde el imperio de Júpiter
por lo tanto, ciento treinta pesos de más sobre aquella suma. E n el
el globo mexicano como un lucero de fuego en medio de los celajes."
primer globo se emplearon setecientas treinta varas de tafetán, que
El día citado para la primera ascensión aviso Mr. Theodore, por costaron mil cuatrocientos pesos, y mil trescientas treinta y cuatro
carta que pasó al Alcalde en turno, D. José María Mejía, que 110 po- en el segundo, con un valor de mil doscientos cincuenta y un pesos:
dría verificarla, "supuesto que se preparaba en la atmósfera tempes- cincuenta quintales de ácido sulfúrico valieron mil novecientos pesos.
tad y lluvia,'' excepciones que había puesto en su cartel, y " que con
tales aparatos le era imposible cumplir su compromiso." El mencio- Queriendo probar que Theodore y 110 él era el responsable de tan-
nado Alcalde y el Síndico D. Agustín Buenrostro, graduaron de frivo- to fracaso, Barrera demandó al aeronauta, le redujo á prisión y en ella
lo pretexto los temores de Theodore y tomaron contra él providen- le tuvo hasta el 26 de Marzo de 1835, en que consiguió que le devol-
(
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vieáe el segundo globo y los utensilios y ácidos que no habían tenido recreativa con multitud de ingeniosos d
empleo. Theodore, reducido á la miseria, fué escarnecido así por los obra que intituló La Minerva ó navio aéreo,
redact'óres^e La Lima: "Nosotros tuvimos la fortuna de calificarlo mientos, propuesto á todas las Academias europeas, y
de calabaza ó bribón á la vista del aparato con cuyo auxilio se iba á mió en dos volúmenes sus memorias, interesantes por su saber en
remontar hasta el anillo de Saturno, porque desde luego se notaba ciencias físicas, por su estudio de las costumbres de los diversos paí-
que era necesario desconocer las leyes generales de los fluidos para ses que visitó, y por sus picantes anécdotas acerca de los soberanos
haber intentado henchir el globo de la manera que él lo pretendía. y hombres célebres con quienes mantuvo relaciones. Esta obra estu-
Mas cuando hemos visto que de nada influyó su gas alcalino para as- vo de venta en la librería de Seguín, sita en el Portal de Mercaderes,
cender, 110 podemos dejar de rendirnos á la evidencia, diciendo que al precio de once pesos en pasta.
voló, 110 el Montgolfier, sino el dinero de los empresarios, el del pú-
blico y la más pequeña opinión que pudiera recomendar al físico via- Su hijo, Guillermo Eugenio, fué también notable por sus expe-
jero. ¡ Qué tunante ! " riencias de física y por sus numerosas ascensiones aerostáticas en Lis- _
boa, Oporto, Madrid y París. Hallándose en Lisboa, ejecutó en 10 de
D. Manuel Barrera, para acallar la grita que encima se le vino por
Diciembre de 1S19 un descenso en paracaídas, desde la altura de dos
la no devolución de las entradas, procuró, con pretexto de compensar
mil quinientas toesas. Físico entusiasta por su arte, trajo al Nuevo
al público, proporcionarse otro aeronauta, y explotar este nuevo es-
Mundo el majestuoso espectáculo de las ascensiones aerostáticas, y
pectáculo, que tanto parecía interesar á sus conciudadanos, puesto
Filadelfia, Nueva York, Nueva Orleans y la Habana, por él conocie-
que al anuncio del primer ensayo habían acudido con la respetable su-
ron este importante descubrimiento, gloria y honra del genio francés.
ma de más de catorce mil pesos.
Volvamos á tratar de su venida á México. "Luego que supe que
^ La fortuna, que siempre siguió á Barrera, hizo que llegase á los Mr. Robertson se encontraba en los Estados Unidos—dice D. Ma-
Estados Unidos, precedido de justa fama, el notable aeronauta Mr. nuel Barrera — y que había verificado varias ascensiones en Nueva
Guillermo Eugenio Robertson, nacido en París en 1799, é hijo del York, practiqué las mayores diligencias para atraerlo á esta Capital,
celebérrimo Esteban Gaspar, natural de Lieja en Bélgica. Este últi- á cuyo efecto hablé con D. Antonio Parrot para que invitara ¿d ae-
mo, distinguido profesor de física en la Universidad de su patria, pasó ronauta á emprender el viaje. Cuando llegó á esta ciudad lo solicité
á París en 1793, época la más tempestuosa de la revolución francesa, por medio del corredor D. Ernesto Massón, y acordamos las condi-
á proponer á aquel gobierno un espejo de Arquímedes perfeccionado', ciones bajo las cuales verificaría su ascensión, quedando estipulado
con el cual pretendía poder incendiar las flotas de Inglaterra. En sus y firmado que le he de entregar diez mil pesos por el desempeño de
gabinetes del Jardín de Capuchinos y del Pabellón de Echiquier, sor- la función, cuya suma será depositada tres días antes, en la casa de
prendió y asombró á todo París con sus experiencias fantasmagóri- comercio que el aeronauta señale, sin hacer uso de ella hasta el día
cas, en las que hacía presentarse los espectros de los revolucionarios siguiente de haber verificado la ascensión, de cuyo contrato fueron
y de sus víctimas, con tan perfecta ficción, que la autoridad hubo de testigos, y lo firmaron también, el coronel D. Francisco Garay, que
intervenir en moderar el escándalo, y se creyó obligada á desterrar á casualmente se hallaba presente, D. Ernesto Massón, como corredor,
Robertson de la Capital. y D. Manuel Pruneda."
Algún tiempo después, y de regreso en París, dió la primera idea
Previa Ucencia del Gobierno del Distrito, el aeronauta anunció pa-
de emplear los globos como recurso estratégico, y construyó y montó ra el jueves 12 de Febrero de 1835, su primera ascensión en México,
el aeróstato histórico Fleurus. El genio activo de Napoleón, encon- á las once en punto de la mañana, y en la Gran Plaza de Toros de
trando el globo muy molesto y muy lento para seguir el vuelo de sus San Pablo.
águilas, se deshizo de esta máquina, que no le pareció útil desde el
" A las nueve de la mañana—dice un periódico—se franquearon
momento en que también el enemigo podía servirse de ella. las puertas de la Plaza, y vióse el esferoide de proporcionada magni-
Esteban Robertson fué el primero, á su vez, que dió á conocer en tud, henchido ya de gas hidrógeno cuanto cabe para el efecto que se
Francia el Galvanismo. Como aeronauta ejecutó en Europa cincuenta pretende. Consecutivamente fueron lanzados los pequeños globos pre-
y nueve ascensiones, y en la que verificó en Hamburgo en 18 de Ju- cursores, para indicar la dirección del viento. A las once, poco más,
lio de 1803, alcanzó la altura de tres mil seiscientas sesenta toesas entró Mr. Robertson en su preparada barquilla, donde se despidió
a que nadie antes de él había llegado. Suya fué también la invención tierna y afectuosamente de sus amigos y otras personas notables que
del paracaídas, malamente atribuida á Garnerín. Enriqueció la física detenían el vuelo del globo hasta el debido momento de verificarlo.

\
Lenita,- majestuosamente y con toda la expresión de la calma en su No le faltaron en las diversas funciones de fantasmágoría- y..física
semblante, recorrió en torno del anfiteatro, para rendir las demostra- recreativa, que dió en el Teatro Principal, en combinación^con el
ciones'de' su urbanidad y finura ante el Excmo. Sr. Presidente D. cuadro de verso, y cuando el tiempo hubo mejorado ycedifcTb en par-
Miguel Barragán y respetable público, y concluyó en particular sa- te la fuerza de las lluvias, llevó por fin á cabo su segundo viaje ae-
ludando al Gral. Barrera que se hallaba en la Plaza. A la sazón que- rostático el domingo 13 de Setiembre, en celebridad del aniversario
. dó libre el globo, y tomando una dirección vertical se elevó muchos de la victoria de Tampico.
~ pies sobre la Plaza; de ahí describió una línea oblicua hacia el Su-
" E n menos de una hora y media —dice el cronista — Mr. E u g e y
• deste y después al Sudoeste, remontándose hasta un punto que no
nio Robertson llenó su grande aeróstato, de modo que los espectado-,
podía distinguirse á la simple vista."
res vieron desde el principio la operación hasta el desprendimiento
" ¡Cuántas y cuán vivas, añade La Lima, fueron las emociones de del globo. Estando todo arreglado, el impávido Robertson se embar-
^ t e r n u r a y de placer, al contemplar lo grandioso y patético de aquel có en su leve navecilla, teniendo en su diestra el pabellón mexícañQj__
acto! Las almas sensibles eran agitadas por la suerte del hombre in- después de haberse despedido de todos los concurrentes, puesto en
trépido que así penetraba sobre el aire inconstante, y los espíritus pie, en su barquilla, dió la orden de soltar las amarras á las once y
ilustrados hallaban un deleite suavísimo, observando tranquilos las cinco minutos. Al salir del medio de la plaza y á la altura del techo,
inmutables leyes de la Naturaleza. Robertson se ha hecho digno de fué arrojando una cantidad de papelitos que contenían versos análo-
nuestros elogios, y de eterna remembranza para México. Desde el gos al día que se celebraba, y agitando su pabellón, entre los víto-
momento en que se perdió de vista hasta hoy 14 de Febrero, todas res y palmoteos de la multitud. El globo continuó elevándose en lí-
habían sido vanas conjeturas y noticias sin fundamento sobre la suer- nea vertical hasta que llegó á la altura de las nubes, que eran de un
te del aeronauta, que en efecto era ignorada; pero al fin se halla den- color blanquísimo ; el globo entonce.? apareció transparente como el
tro de la ciudad, testigo de su talento é impavidez: su viaje aéreo fué cristal, presentando un efecto maravilloso y verdaderamente indes-
tan rápido que atravesó veintidós leguas en menos de dos horas, pues criptible. Poco á poco fué desapareciendo hasta perderse completa-
á la una y media de ayer, posó sobre un árbol á inmediaciones de mente de vista, pero como á los quince minutos se le vió aparecer
Chalma; allí necesitó auxilios para su regreso, y hoy ha sido cumpli- por el Oriente dentro de las altas regiones.
mentado según su mérito por su S. E . el Presidente, por las personas
más visibles, por sus amigos y por el público todo que le aprecia." " M r . Robertson, después de haber pasado por encima de toda la
ciudad y de haberla inspeccionado minuciosamente, empezó á ma-
Poseo un rarísimo ejemplar de una estampa litogràfica que repre-
niobrar para verificar su descenso. Por fin, el globo vino á parar en
senta á Robertson en la barquilla de su globo, al que circunda una
el Potrero de Balbuena, detrás de la Candelarita, donde una multi-
ancha faja con una fecha que no puede leerse completa: el aeronauta
tud inmensa se agolpó para socorrer al valiente y audaz aeronauta.
tremola dos banderas mexicanas, y la estampa dice: " P r i m e r a as-
Desde una grande altura Robertson se dirigió á los circunstantes, y
c e n s i ó n en México por Eugenio Robertson.— Febrero 12 de 1835.
con su bocina les gritó: / Viva la Nación Mexicana! ¡ Viva la Liber-
" — E s t e célebre aeronauta, el primero que ha viajado por la atmósfe-
tad! ¡ Viva el General Santa-Anna! ¡ Viva el héroe de Tampico! y
" ra mexicana, dió el agradable espectáculo de su elevación á las once
el pueblo le respondió con entusiasmo. Cuando hubo tomado tierra
" y media de la mañana, y descendió á las dos horas en la falda del
dió libre salida al gas, y entró en la ciudad aclamado como un triun-
"cerro de Zempoala, á 20 leguas de distancia, con dirección S. O. E . "
fador."
Motivos independientes de su voluntad impidiéronle ejecutar una
Pero la más famosa de sus ascensiones en México, fué la tercera
segunda ascensión el 22 de Marzo, y hubo de transferirla, primero al
en nuestra República y vigésimatercera en su vida, realizada el do-
domingo 5 de Abril y después al jueves 30 del mismo, sin poder en
mingo 11 de Octubre del mismo año de 1835.
ninguno de ellos verificarla, lo que le valió varias injustas burlas en
prosa y verso, entre ellas unas décimas que concluían: "Creemos imposible, dicen los redactores de La Lima, que el pú-
blico haya sido jamás llamado para ser testigo de un espectáculo más
(
hermoso, más interesante y más digno de una gran Nación, que el
' ' preparad breve otro adobo
que nos ha sido ofrecido con la ascensión de Mr. Eugenio Robertson
como éste tan sazonado,
y su compañera y compatriota nuestra.
pues quedaréis bien pagado
á costa de tanto bobo. ' ' " A las nueve y media de la mañana se comenzó á echar en los to-
neles el ácido sulfúrico, lo cual se hizo con el mayor orden y con una
R. H. T.—T. I.—43
•/ /

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puutVaíidad admirables. Esta operación, de un género más difícil de do piloto, mostrándose tan serena como si hubiera ido al teatfo ó á
lo qué vulgarmente se cree, fué dirigida con tal acierto y con tanta un baile. " * •. • )
felicidad,=.q<ie á las once menos cuarto el grande aeróstato había re-
"Elevado un tanto el globo, la joven se despidió del público con
cibido toda la cantidad de gas suficiente para llevar á los dos nave-
graciosos ademanes, arrojando á la vez multitud de flores y poesías,
gantes aéreos.
luciendo en su rostro una sonrisa agradable y sincera. Después de
" E l aviso anticipado que se tenía de que una joven de nuestro un instante el globo quedó libre, entre los sones de los instrumen- í
í^-país debía acompañar al aeronauta y participar de los peligros de se- tos guerreros. La joven mexicana continuó durante los primeros mo- *
méjante viaje, había picado vivamente la curiosidad general, pero mentos de su ascensión esparciendo flores y versos, y saludando c.011
más particularmente la de su propio sexo. Por este motivo, desde por su blanco pañuelo.
la mañana, todas las calles que conducen á la Plaza de Toros de San
"'Robertson, en pie en la barquilla, con ademán noble y satisfecho,' :
Pablo estuvieron intransitables, por el gran número de curiosos que
parecía un vencedor conduciendo un trofeo al Capitolio. Gritos de
querían gozar del espectáculo nuevo y magnífico que se les ofrecía.
alegría y ruidosas aclamaciones saludaron la partida de los intrépidos
Las lumbreras de la plaza, vendidas á 24 pesos, estaban ocupadas
aeronautas. Nada es capaz de describir un momento tan patético y
por una multitud de señoras, á cual más hermosas y vestidas con mu-
una satisfacción más general: este hermoso cuadro se concibe mejor
cho lujo y elegancia ; un sinnúmero de personas ocupaban los demás
que puede pintarse. Hubiera sido necesario tener un corazón de hie-
asientos, vendidos, sin distinción de sol ni sombra, á dos pesos cada
lo para 110 ser conmovido é interesado en favor de los atrevidos que
uno. Por la parte de afuera una población inmensa cubría los sitios
se confiaban con tanto ánimo y valor al elemento más ligero, pero
vecinos y las ventanas, azoteas y hasta los árboles estaban cubiertos
alguna vez el más terrible.
de espectadores.
"La madre de la joven 110 había consentido en dejar ascender á s u
" E l cielo, enteramente cubierto en los días anteriores, se despejó
hija y confiarla al Sr. Robertson, sino bajo la precisa condición y la
y el sol parece que quiso alumbrar con sus rayos benéficos los pri-
promesa de que no se elevaría demasiado alto y 110 prolongaría su
meros pasos que iba á dar una joven mortal en las inmensas regio-
viaje, á fin de que pudiera encontrarse cerca de ella en el momento
nes de su imperio, é inspirarle más confianza en el día en que iba á
del descenso. Fiel á su compromiso, en cuanto el globo se dirigió á
emprender por primera vez un viaje tan majestuoso.
campo raso, Robertson abrió la válvula del aeróstato, y dejando sa-
"Lanzáronse varios globitos de prueba, uno de ellos adornado con lir una cantidad de gas, descendió en una pradera llamada de las Cu-
las armas nacionales y la inscripción : A D. Miguel Barragán, y otro lebritas, después de haber permanecido en el aire media hora. Soco-
en forma de esfera celeste con una banda de seda en que estaba pin- rridos por D. Manuel Viveros, de Mixcoac, y por el destacamento de
tado el retrato del Excmo. Sr. Presidente D. Antonio López de San- Caballería enviado por el Sr. Conde de la Cortina, nuevo Gobernador
ta-Auna. Al tiempo de elevarse este globito fué saludado con mil del Distrito, Robertson empleó tres cuartos de hora en vaciar com-
gritos de alegría. pletamente el globo, y él y su compañera, montando hermosos caba-
1
'Concluidos los preparativos, se suspendió al aeróstato una ligera llos, entraron en la ciudad por la garita de San Antonio, rodeados
góndola adornada con mucho gusto con géneros de seda y guirnal- de inmensa cabalgata que los aclamaba con entusiasmo indefinible
das de flores. E l Sr. Robertson se ausentó por algunos instantes, y el por el atrevimiento de Robertson y el valor de aquella joven, la pri-
público esperaba verle aparecer con la joven que debía participar de mera de su nación, que sin ningún temor había arrostrado unos pe-
la gloria y de los peligros de este memorable día; pero como le vie- ligros que quizá algunos hombres hubieran temido.
ran volver solo, un murmullo corrió por toda la concurrencia, creyen-
" N o s hemos informado del Sr. Robertson del modo con que nues-
do que la joven renunciaba á su peligrosa empresa, y que esto servi-
tra joven compatriota se había conducido durante el viaje, y nos
ría de motivo para no verificar la ascensión. Pero Robertson se ausen-
asegura que mostró la misma resolución y presencia de ánimo que en
tó de nuevo y regresó dando la mano á una señorita vestida muy
el momento de su salida de la Plaza.
elegantemente. Los aplausos retumbaron por todas partes en señal
" E l público ha estado muy satisfecho de este último viaje aéreo,
de aprobación y de entusiasmo. La joven era hermosa y de un porte
que ha excedido á los deseos de todo el mundo. No hay mexicano
\ muy decente, y se adelantó con paso firme y seguro hacia la barqui-
que no se lisonjeé de haber visto lanzarse con ánimo en el vasto
lla, entre dos vallas de espectadores que la aclamaban. En todo este
océano de los aires y por la primera vez, á una de sus couciudadanas.
tiempo demostró tanta sangre fría é intrepidez como su experimenta-
Su sexo se enorgullece de la intrepidez que una de sus semejantes ha
Inosfrado, y-que da á-conocer que las mujeres tienen, cuando ellas tema federal era ya un hecho, y en ese día dió principio el imperio
quieréu, una fuerza de sentimiento y de carácter, así como una reso- del centralismo, triunfo conservador amargado por la rebelión ¿e la
lución determinada, que sólo parecía reservada para el otro sexo, y Provincia de Texas, contra la cual fué necesario enviar uirpjército,
prueban con esto que saben asociarse á las empresas más grandes del á cuyo frente se puso Santa-Anua, saliendo al efecto de México para
hombre. San Luis en 28 de Noviembre.
" N o tenemos que añadir ningún elogio en favor del Sr. Eugenio En ese año de 1835, nuestros espectáculos, salvo lo relativo á las
/^-Robertson; continúa siempre mereciendo los favores y la estimación ascensiones aerostáticas de Robertson, no ofrecieron mucho de par- j
del público, sin acrecentar por esto su reputación, que está demasia- ticular. Desavenidos artistas y empresarios, el cuadro de ópera tra-
do bien establecida entre nosotros, así como en otros países donde bajó con mucha intermitencia, conquistando de vez en cuando me-
pasa por ser uno de los más valientes é intrépidos aeronautas del recidos aplausos con el Moisés en Egipto y Adelaida y Comingio, de la
mundo." que se elogiaron mucho la primera y la última aria cantadas por la
Por el momento sólo me queda por decir, que en la librería de Gal- Pellegrini, los dúos de ésta con Galli y con Mussati, un quinteto y
ván estuvieron de venta las relaciones de los Viajes aéreos de Mr. algunos coros. El cuadro de verso no andaba mejor avenido: en prin-
Eugenio Robertson, en las que podrán hallarse detalles que no co- cipios de Marzo Valleto y la Dubreville anuuciaron su separación,
rrespondería hacer caber aquí. fuertemente hostilizada la última so pretexto de que sólo quería des-
empeñar damitas jóvenes, lo que ella negó invocando el testimonio
del empresario D. Manuel Gorostiza y del Director D. Bernardo Ave-
cilla.

CAPITULO X I V De las pocas funciones notables dadas entonces, debo citar la ve-
rificada el sábado 14 de Noviembre, á beneficio del actor José M. La
Madrid: principió con la obertura de Fra Diavolo; siguió la comedia
La Chimenea, cuyo protagonista estuvo á cargo de Palomera, y se
1835.—1836. terminó con un concierto en que se cantaron un terceto de Rossini
por Galli, Mussati y Spontini, un dúo por Galli y la Isabel Martínez,
una Cavatina de Bellini por Spontini, otra de Mercadante por la Mar-
Expatriado Gómez Farías, y en auge el partido antirreformista, el tínez, y un dúo del maestro Geueralini por Galli y Mussati.
nuevo Congreso declaró, en 26 de Enero de 1835, que el Vicepresi-
E l domingo 29 de Noviembre y en el Teatro de los Gallos, Joaquín
dente cesaba en sus funciones en virtud de haber sido desconocido
Pastrana puso en escena la tragedia famosa intitulada Recompensa á
por la nación; y para que el Presidente S a n t a - A n u a pudiese gozar
la codicia por la indiana Tepoczina, ó sea dos víctimas inmoladas por el
de la licencia que pidió para retirarse á su hacienda de Manga de Cla-
tirano opresor. E n el mismo teatro habíase dado otra función cuyo
vo, nombró en 28 del mismo, á D.Miguel Barragán, Presidente in-
programa creo deber insertar íntegro, con su peculiar idioma y no
terino.
menos pulida sintaxis, dice así:
Dados estos primeros pasos en la senda de la reacción, derogáronse
" T e a t r o Provisional d é l o s Gallos.—Gran función por la tarde.
sucesivamente todas las leyes expedidas por Farías; la guarnición de
—Domingo 22 de Noviembre de 1835.—Reunidos algunos alumnos
Ulúa proclamó en 23 de Febrero el centralismo; se redujeron ó nuli-
del Teatro Principal, los cuales, atendiendo á la consideración con
ficaron en 26 de Marzo las milicias cívicas; derrotó S a n t a - A n u a al
que otras veces se les ha visto en sus anteriores representaciones, hoy
Gobernador de Zacatecas D. Francisco García, que quiso oponerse á
acordándose de la benevolencia de tan distinguidos espectadores, y
esa reducción ó nulificación; se declaró justo y necesario el Plan de
buscando medios con que recompensar esa misma indulgencia, han
Cueruavaca, fuente de aquella situación política; se erigió en consti-
hecho elección de una pieza enteramente nueva, en la que 110 vacilan
tuyente el Congreso y en 22 de Octubre dictó sus Bases Constitucio-
1111 punto ser de su agrado, por presentar en ella los milagros de una
nales, que Barragán juró solemnemente el 3 de Noviembre, y, como
imagen, á quien hemos prodigado nuestra devoción todos los mexi-
dice D. Carlos Bustamante, "la Constitución de 1824 quedó con ella
canos.
sepultada, y buena sólo para ser llevada á un museo como monumento
de nuestros errores cometidos en la infancia política." Ea ruina del sis- '' Después de una brillante Obertura, composición del acreditado
maestro Rossini, seguirá la comedia intitulada El Sol eclipsado en Ita-
mostrado, y-que da á-conocer que las mujeres tienen, cuando ellas tema federal era ya un hecho, y en ese día dió principio el imperio
quieren, una fuerza- de sentimiento y de carácter, así como una reso- del centralismo, triunfo conservador amargado por la rebelión ¿e la
lución determinada, que sólo parecía reservada para el otro sexo, y Provincia de Texas, contra la cual fué necesario enviar uirpjército,
prueban con esto que saben asociarse á las empresas más grandes del á cuyo frente se puso Santa-Anua, saliendo al efecto de México para
hombre. San Euis en 28 de Noviembre.
" N o tenemos que añadir ningún elogio en favor del Sr. Eugenio En ese año de 1835, nuestros espectáculos, salvo lo relativo á las
/^¡Robertson; continúa siempre mereciendo los favores y la estimación ascensiones aerostáticas de Robertson, no ofrecieron mucho de par- j
del público, sin acrecentar por esto su reputación, que está demasia- ticular. Desavenidos artistas y empresarios, el cuadro de ópera tra-
do bien establecida entre nosotros, así como en otros países donde bajó con mucha intermitencia, conquistando de vez en cuando me-
pasa por ser uno de los más valientes é intrépidos aeronautas del recidos aplausos con el Moisés en Egipto y Adelaida y Comingio, de la
mundo." que se elogiaron mucho la primera y la última aria cantadas por la
Por el momento sólo me queda por decir, que en la librería de Gal- Pellegrini, los dúos de ésta con Galli y con Mussati, un quinteto y
ván estuvieron de venta las relaciones de los Viajes aéreos de Mr. algunos coros. El cuadro de verso no andaba mejor avenido: en prin-
Eugenio Robertson, en las que podrán hallarse detalles que no co- cipios de Marzo Valleto y la Dubreville anuuciaron su separación,
rrespondería hacer caber aquí. fuertemente hostilizada la última so pretexto de que sólo quería des-
empeñar damitas jóvenes, lo que ella negó invocando el testimonio
del empresario D. Manuel Gorostiza y del Director D. Bernardo Ave-
cilla.

CAPITULO X I V De las pocas funciones notables dadas entonces, debo citar la ve-
rificada el sábado 14 de Noviembre, á beneficio del actor José M. La
Madrid: principió con la obertura de Fra Diavolo; siguió la comedia
La Chimenea, cuyo protagonista estuvo á cargo de Palomera, y se
1835.—1836. terminó con un concierto en que se cantaron un terceto de Rossini
por Galli, Mussati y Spontini, un dúo por Galli y la Isabel Martínez,
una Cavatina de Bellini por Spontini, otra de Mercadante por la Mar-
Expatriado Gómez Farías, y en auge el partido antirreformista, el tínez, y un dúo del maestro Geueralini por Galli y Mussati.
nuevo Congreso declaró, en 26 de Enero de 1835, que el Vicepresi-
E l domingo 29 de Noviembre y en el Teatro de los Gallos, Joaquín
dente cesaba en sus funciones en virtud de haber sido desconocido
Pastrana puso en escena la tragedia famosa intitulada Recompensa á
por la nación; y para que el Presidente S a n t a - A n u a pudiese gozar
la codicia por la indiana Tepoczina, ó sea dos víctimas inmoladas por el
de la licencia que pidió para retirarse á su hacienda de Manga de Cla-
tirano opresor. E n el mismo teatro habíase dado otra función cuyo
vo, nombró en 28 del mismo, á D.Miguel Barragán, Presidente in-
programa creo deber insertar íntegro, con su peculiar idioma y no
terino.
menos pulida sintaxis, dice así:
Dados estos primeros pasos en la senda de la reacción, derogáronse
" T e a t r o Provisional d é l o s Gallos.—Gran función por la tarde.
sucesivamente todas las leyes expedidas por Farías; la guarnición de
—Domingo 22 de Noviembre de 1835.—Reunidos algunos alumnos
Ulúa proclamó en 23 de Febrero el centralismo; se redujeron ó nuli-
del Teatro Principal, los cuales, atendiendo á la consideración con
ficaron en 26 de Marzo las milicias cívicas; derrotó S a n t a - A n u a al
que otras veces se les ha visto en sus anteriores representaciones, hoy
Gobernador de Zacatecas D. Francisco García, que quiso oponerse á
acordándose de la benevolencia de tan distinguidos espectadores, y
esa reducción ó nulificación; se declaró justo y necesario el Plan de
buscando medios con que recompensar esa misma indulgencia, han
Cueruavaca, fuente de aquella situación política; se erigió en consti-
hecho elección de una pieza enteramente nueva, en la que 110 vacilan
tuyente el Congreso y en 22 de Octubre dictó sus Bases Constitucio-
1111 punto ser de su agrado, por presentar en ella los milagros de una
nales, que Barragán juró solemnemente el 3 de Noviembre, y, como
imagen, á quien hemos prodigado nuestra devoción todos los mexi-
dice D. Carlos Bustamante, "la Constitución de 1824 quedó con ella
canos.
sepultada, y buena sólo para ser llevada á un museo como monumento
de nuestros errores cometidos en la infancia política." Ea ruina del sis- '' Después de una brillante Obertura, composición del acreditado
maestro Rossini, seguirá la comedia intitulada El Sol eclipsado en Ita-
lia y grillante eñ nuestro suelo, ó sea la Milagrosa aparición de Nuestra
Señora de los Remedios.— La que será exornada con todo el aparato
fe^f
la opinión, y lo sagrado con lo profano, torciendo el fin de la verda-
dera piedad, y mezclando en un semiburdel las oraciones consagra-
i
teatral que exige su grandioso argumento, pues nada ha omitido la das por la Iglesia, con las hablillas libres de una concurrencia en
Compañía para-darle el realce que en sí requiere, en obsequio de sus desorden.
favorecedores. Para el efecto, se ha construido una amena montaña, "¿A quién culparemos más de que haya salido al teatro semejante
iiJfiw la que será poblada con magueyes, plantas propias de nuestro país pieza monstruosa, en la noche del citado domingo? No á otro que al
mw natal, siendo uno de éstos en que la Santísima Virgen se nos mostró Sr. Gobernador del Distrito; á él incumbe por razón del oficio, el A
mM imo madre, cuya escena será adornada con una vistosa Gloria, gru- examen y aprobación de los dramas con que se haya de divertir al

II <• pos d e ángeles, nubes, etc. A continuación, el feliz catástrofe de Juan


Tóvar, el que fué privado de la vida por un imprevisto acontecimien-
;o, y restaurado á ella por un milagro de esta Señora, cantándose en
público, deleitándolo é instruyéndolo, y las notorias luces, la fina ci-,
vilización, los viajes, hacen menos disimulable esta falta en el Sr.
Conde de la Cortina. Además, su Señoría fué advertido oportuna-
este preciosísimo paso el Tota pulchra est María. Acto continuo, ha- mente por el Ordinario, con el objeto de que se evitasen aquella pro-""'
brá una ordenada procesión por el patio, para llevar á la Santísima fanación y escándalo; mas no pudo obtenerse un fin tan loable del
Imagen al templo, bailándose una graciosa danza de indios, la que celo decantado del actual jefe político."
ha sido ensayada con la mayor prolijidad, la cual será en el discurso
Y tras esta cita, pasamos al funestísimo año de 1836: en él ocurrió
de la procesión, y concluyéndose el todo de la función con una gran
la breve y vergonzosa campaña de Texas, cuyos colonos norte-ame-
Salve, después de la colocación de la Sagrada Imagen.—¡Generosos
ricanos, allí establecidos desde 1819, tomando por pretexto el derro-
mexicanos! si conseguimos que esta función sea de vuestro agrado,
camiento del sistema federal en México, proclamáronse independien-
se habrán colmado los deseos de la Compañía, pues no es otro su an-
tes, acaudillados por Samuel Houston é instigados á la rebeldía por
helo, más que el de complaceros."
el tristemente célebre D. Lorenzo de Zavala, dueño de grandes terre-
Los redactores de La Lima dedicaron un editorial á ese programa nos en aquel territorio, que él ayudó á segregar de su patria. En un
y á esa representación, diciendo con sobrada justicia: " L o s que han principio, las armas mexicanas derrotaron por donde quiera á los
atribuido á las personas que consumaron la feliz revolución del año aventureros texanos; pero en 21 de Abril el Gral. Santa-Anua, fué
de 1834 tendencias propias del Siglo X; los que inculpan á la pre- vencido á su vez y hecho prisionero en San Jacinto, mientras dormía
sente administración de una siesta frente al enemigo, y su segundo, Eilisola, afirmó el triunfo
una marcha retrograda en la carrera de las del territorio rebelde con su indisculpable retirada, hecha á virtud
luces, ¿110 encontrarán un argumento especioso para confirmar estas de órdenes del Presidente prisionero, que obedeció diz que por 110
acusaciones, haciendo mérito de las piezas dramáticas que hoy se dan exponer á Santa-Anna á ser asesinado por sus aprehensores.
en la escena ? ¿ Quién no nos creerá en los tiempos de Marquina si Ya por ese tiempo había muerto D. Miguel Barragán en 1? de Mar-
pasa los ojos por el anuncio de la función teatral, que se ejecutó en zo, y sido electo por el Congreso en 27 de Febrero, D. José Justo
el de los Gallos la noche del domingo último? ¿Quién 110 nos consi- Corro, Presidente interino; á él tocó hacer publicar las llamadas Siete
derará en el más deplorable estado de abyección mental, al ver que Leyes, Código Constitucional del Centralismo, aprobado y firmado
se ofrece al público de México como espectáculo digno de su civili- por las Cámaras en 29 y 30 de Diciembre del año de 1836.
zación y costumbres, una pieza tan bárbara por medio de un cartel
Durante él, varias y notables fueron las novedades teatrales en
más bárbaro?
nuestro Principal. D. Joaquín Patiño, representante y Gerente de la
" Hay cosas que se debilitan comentándolas, y ésta es una de ellas;
Empresa, durante la ausencia de D. Manuel Eduardo de Gorostiza,
porque el menos instruido echa de ver toda la deformidad de tal abor- que se encontraba en los Estados Unidos del Norte encargado de la
to. En él se profana lo más sagrado de nuestra augusta religión, se Legación de México en ese país, acababa de reformar la Compañía
la envilece é insulta, se la deprime, se la burla y desfigura con los de Opera Italiana bajo la dirección y según las indicaciones del insig-
más sucios andrajos de un misticismo exótico, de una superstición ne Felipe Galli.
estúpida y de un culto idolátrico. En él se corrompe más el gusto
El estreno tuvo lugar el lunes 1? de Febrero con Sonámbula, de
de la gente incivil, y se injuria enormemente á la porción ilustrada
Bellini, cantada por las Sras. Passi, Majocchi y Baduera, y por Mus-
de la Capital, suponiéndola capaz de solazar el ánimo con insulsas y
sati, Santi, Spontini y Leonardi. A Sonámbula siguieron Norma,
pueriles escenas, milagros apócrifos, y revelaciones erótico-profauas.
para presentación de la Albini y el tenor Strazza, y á ésta sucedió
En él, por último, se deprava la moral, confundiendo el dogma con
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y
344

Semiramis, para estreno de la Césari y de Fornasari. Cantáronse des-


pués-^íz-Cenicienta y Moisés en Egipto.
345

y aquel que á tu vista de gozo respi


se extasia, te admira, te da el corazón. -
í
" S i acaso afligida remedas quejosa
La protagonista de Sonámbula la desempeñó la Passi, parece que á amante llorosa ó á madre infeliz,
con bastante perfección. " E s t a artista — dice un periódico de la épo- anubla tus ojos el lúgubre llanto
ca,—se halla dotada de excelentes disposiciones, notándosele sola- y se oye en tu canto la voz del gemir.
mente los defectos de desentonarse algunas veces y de darle á su voz
" El hombre, entretanto, de todo se olvida,
| | v V - \ u n temblor continuo que desagrada, especialmente en algunos pasa-
te ve enternecida, resiente tu mal, fS.
j e s en que en ninguna manera conviene." Hablando de ella en el
se exalta, suspira, padece martirio,
<y~' papel de Adalgisa, otro crítico se expresa así: " esta interesante jo-
de dulce delirio se siente embriagar.
ven tiene elementos para llegar á ser sobresaliente en su arte; siente
" Si juegas amable la voz voluptuosa
la música con vehemencia y con la misma expresa todo lo que siente;
que infunde ardorosa la intensa pasión,
su voz es agradable, sobre todo, en los puntos bajos, que son de ex-
el pecho al instante se abrasa en tu fuego,
celente calidad; pero es preciso que trate de corregir ese constante
se pierde el sosiego, se embriaga de amor.
temblor y falta de afinación de los puntos agudos de exaltación, que
no parece sino que dimanan de debilidad del pecho. " " M a s ¿ quién cuando cantas perdido no te ama?
Como dije, la Albini se presentó á su turno con la protagonista de y ¿ quién no se inflama si sabe sentir ?
Norma: " s ó l o el temor de alargar demasiado este artículo —decía el De amor, de ventura, me brindas los goces;
cronista del Diario del Gobierno,—nos contiene en los justos elogios Cuando oigo tus voces no soy infeliz.
que merece la Sra. Albini, especialmente en esta ópera que bajo todos "Alcance mi musa del tiempo memoria,
aspectos le concierne; baste decir que se mostró en ella superior á y guarde la gloria tu canto inmortal;
cuanto habíamos oído hasta entonces." " L a Sra. Albini —añadía tu nombre, y el nombre del grande Bellini,
otro revistero,—ha llenado en el papel de Norma los deseos de las ¡oh mágica Albini! resuenen en p a z . "
personas más difíciles de contentar, que no son pocas entre los inte-
ligentes y muchas más entre los que no 1o. son; la pureza y extensión
de su agradable voz, la singular exactitud de su ejecución, la afina- Esta excelente artista, cuyos nombres y apellidos fueron María Na-
ción en todas las notas y la expresión tan verdadera que da á cuanto poleona Albini de Vellani, había nacido en Modena á fines de 1808
canta, hacen á esta artista digna de ser colocada en primer rango. y era oriunda de familia ilustre é hija de uno de los primeros y más
Sus puntos bajos son, á la verdad, tan llenos, tan gratos al oído, tan ricos comerciantes de aquella ciudad. Su decidida vocación por el
claros y sonoros, como los de la célebre Malibrán; pero los demás, y arte la hizo presentarse, á la edad de trece años, en un teatro de afi-
principalmente los agudos, son inmejorables. Como actriz, no es me- cionados que existía en Parma, con un éxito tal, que pronto desea-
nor su mérito que como cantante." A esta distinguida artista cantó ron contratarla los más acreditados maestros directores, pero se re-
así nuestro insigne Guillermo Prieto, en la infancia eutonces de su sistió á ello hasta 1823, en que cantó con gran aplauso en el teatro
talento y de su vida: de Mantua; de allí pasó al Comunal, de Modena; al Re, de Milán; al
Cárcano, de la misma ciudad; al de Venecia, al Principal, de Barce-
lona, con Bonoldi y la Remorani, y al Italiano, de París, con Galli,
" T u dulce, tu grato, tu plácido canto, la Césari, Donzelli, Bordogna y Zucheli, adquiriendo gran nombra-
excita mi encanto, mi tierna emoción. día en Semiramis, Otelo, Zelmira y otras.
Rival de las gracias, de amor precursora,
ya se oye sonora tu angélica voz. Colmada de aplausos y asegurada en la fama, trabajó en el Princi-
pal, de Madrid, de 1827 á 1829; volvió á Italia con la Pantanelli y
"Desplega su raudo, su eléctrico vuelo,
Montresor, y después fué á Roma con la Marianni ; en el San Carlos,
se pierde en el cielo su curso fugaz,
de Nápoles, hizo furor en El Asedio de Corinto y en la Inés de Castro,
-x eu tanto que luce con noble hermosura
en la que tuvo la satisfacción de cantar en compañía de la inmortal
tu nítida y pura, tu cándida faz.
Malibrán.
"Arroba las almas tu armónico acento,
inspira tu aliento sublime fervor, En México dejó imperecedera memoria en Norma, El Pirata, La
B. H. T.—T. I.—ii
' \ " 7
\ / 346

Straniera, La Ümtiia{lel Lago, Zelmira, Juana Shor, Cenicienta, 6wz-


letra del himno de Rossi fué obra de un patriota
Hermó Tell, LoS Normandos en París, /í«« Bolena, Capuletos y otras
zaba así:
óperas, luciendo en ellas su hermosa voz, su maestría artística, y la
dignidad y finura en la acción, elogiadas por Fetis y Torelli.
"Himnos de civismo, de honor y de gloria,
La Césari se dió á conocer con Semíramis, ópera en que no entu-
en el patrio suelo se oigan resonar;
siasmó porque el público estaba acostumbrado á oírsela y aplaudírsela
himnos mil se entonen á la gran victoria
á la Massini. Sin embargo, como era maestra en su arte, no tardó en
que contra los viles se llegó á alcanzar.
conquistarse partidarios y admiradores; actriz consumada y del más
"Malhadado día, tiempo sin ventura,
puro método, no en balde los largos años de su trabajo en Europa
en que generosa la augusta nación,
habían pasado, haciendo perder alguna claridad á su voz.
á infames extraños, para su amargura,
Copiando siempre los juicios de los periódicos de la época, véase les diera acogida, para su baldón.
cómo fueron estimados en méritos, los artistas de aquel cuadro: " l a
Ingratos, traidores, hollaron las leyes
Srita. Majocchi posee una bonita voz, pero tiene aún mucho que es-
y se apoderaron del feraz terreno,
tudiar y trabajar; su graciosa carita y bonito cuerpo suplen muchas
y en él se colocan cual si fueran reyes
faltas. La voz del tenor Strazza es de corta extensión y casi siempre
y escuchar hicieron de la guerra el trueno.
tiene que cantar con esfuerzo; de ahí proviene que en los puntos al-
"Así á la victoria á los bravos guiara
tos se queda las más de las veces más bajo que la orquesta; obser-
vamos igualmente que tiene mal modo de sacar la voz, de lo que re- el hijo de Marte, varón eminente,
sulta una lentitud en su ejecución que hace padecer al que oye; su el que los destinos de la patria cara
falsete es, asimismo, débil, y el tránsito de éste á la voz natural, es rige, y sus destinos sostiene valiente.
duro y penoso; sin embargo, tiene algunos momentos felices, sobre " I l u s t r e Santa-Anua, preclaro caudillo,
todo, en aquellos en que lo que tiene que ejecutar no excede los todo á tu presencia se vuelve vencible,
límites de su voz. Spontini ha desempeñado bien el papel de Oroveso, eres en el triunfo bondoso y sencillo,
y dado pruebas de un estudio y empeño que le hacen digno de la pero en el combate, con razón temible."
aprobación del público.
' 1 El verdadero mérito de Fornasari ha hecho que se le prodiguen
Pero déjense ustedes de aquella guerra, pues salvo lo que tuvo de
merecidos aplausos; posee este artista cualidades de mucho valor.
cruel y vergonzoso para la patria, fué juego de niños comparada con
Su voz potente, sonora y agradable, de rara extensión en los canto-
la que se suscitó en nuestro coliseo entre el empresario y el público
res de su cuerda, y lo que es aun más raro en ellos, de una flexibili-
y Jos artistas. El celebérrimo Joaquín Patifio, representante, según
dad extraordinaria, unida á una afinación exacta, y á un excelente
dije, de la Empresa y del ausente Gorostiza, dió en proteger con toda
método y buen gusto, le hacen digno de ocupar un lugar muy distin-
su influencia á la Passi y en deprimir á la Albiní y á la Césari, no
guido entre los bassi cantanti. Hemos oído en Europa á los más cé-
sólo en las tablas sino en la prensa, posponiéndolas en aquellas y'cri-
lebres de esta clase, como Lablache, Tamburini, Santi y Zuchelli, y
ticándolas en ésta por medio de unos artículos que firmaba con el
sabemos que Fornasari puede competir con ellos.
seudónimo de El Pelón; artículos ofensivos para el público más que
" E l Sr. Santi, que se presentó con el papel deRodoljo en Sonám- para nadie, pues Patiño no pudo sufrir que sus abonados no fuesen
bula, tiene buena voz, pero es bisoño en el canto y medianísimo có- de acuerdo con sus preferencias.
mico."
Como era de esperarse, Patiño, generalmente mal querido, no se
Director y maestro de esa Compañía de Opera, lo fué el Sr D. Lau- quedó sin contestación, y esto le irritó hasta hacerle perder los es-
ro Rossi, autor de la música de un himno patriótico, cantado por sus tribos, adquiriendo la polémica proporciones que llegaron á ser ex-
artistas el 17 de Abril en una función dedicada á socorrer á los heri- plotadas por los desafectos al Gobierno, cuyo Periódico Oficial dijo,
dos y á las viudas de los valientes que habían perecido en la toma del allááprincipios de Setiembre: ' 'De resultas de algunas cuestiones tea-
Fuerte del Alamo por las tropas de Santa-Anna, en su campaña con- trales, los abonados ocurrieron al Excmo. Ayuntamiento con diversas
tra los texanos. En esa función cantaron el Mahomet, de Rossini, la solicitudes, en vista de las cuales mandó suspender la representación
Albini y la Césari, y Galli, Strazza y Sissa. Según el programa,' la de la ópera Capulleti e Montechi, y parece que después varió de deter-
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minación; pero habiéndose dicho de nulidad ante el Supremo Gobier- los dicterios, y todos los síntomas precursores de una ruptura hostil.
|¡fj no, el señot Oficial Mayor, encargado de la Secretaría de Relaciones, E n este inminente conflicto quizás se había preparado algún combusti-
para poder contestar á la nulidad elevada contra el Ayuntamiento, ble serio para un incendio político en circunstancias tan delicadas, figu-
pidió el expediente que se ha formado en el Gobierno del Distrito. rando en ello personas conocidas por sus esfuerzos en alterar la paz, y es
. H é aquí los hechos que han dado margen á los señores del Cosmopolita de sentirse que con tan frivolos pretextos se comprometa la tranqui-
para impugnar acremente al Excmo. Ayuntamiento y para querer lidad del vecindario y aun el buen orden social."
ridiculizar al Gobierno; pero lo más singular es que no quiereu que Lejos de darse término á tan estrambóticas rencillas, passistas, al-r
- sea éste un asunto de policía, y que después, á continuación, se que- bulistas y cesaristas se exaltaron más y más, y escribieron verdaderas
m\ \ V' atrocidades, de una de las cuales habló así el Diario del Gobierno:
jan de que no se tomasen providencias sobre el desorden ocurrido en " H e m o s leído con el mayor disgusto un folleto titulado La Euro-
el mismo teatro,'pidiendo la representación de la ópera mencionada.'' pa y la Cesan: la virulenta pluma de su autor ataca en él y despeda-
Eos opositores á Patiño desatáronse verdaderamente contra él y sus za cuanto encuentra delante, y la Administración de la Opera Italia-
intrigas, sobre la base de que el público de México era uno de los na, las actrices, los concurrentes, los franceses, los mexicanos, el
primeros públicos del Universo: " S e puede decir—escribía uno de General Tornel, los demás Ministros, el Gobierno Nacional, el de
nuestros críticos,— que el público de México, excepto en el número, Francia, las naciones amigas, todo se impugna y á todos se calum-
no cede en nada á los públicos de otras capitales, y se puede tener nia, tomando por pretexto una cuestión puramente artística y tea-
por mejor que los de otras ciudades muy populosas de aquel viejo tral. Desde luego se conoce que sólo la odiosidad contra la actual
mundo: y ¿cuál habrá sido mi sorpresa al ver que se ataca á ese pú- Administración dirige la pluma del despreciable autor del folleto,
blico, y se trata á nuestro escogido pueblo de ignorante y de gente pues se atreve á estampar que ha hollado la Constitución y las leyes
de mal gusto? Tal arrojo no podía ser más que de un músico y lite- del país, y que su empeño se dirige á que no quede una sola igno-
rato pelón, que para atacar al público y á México la toma nada menos minia, una sola desgracia que 110 haga llover sobre la patria. . . . "
que con la Césari, una de las actrices que hacen sus delicias. Atacar Creo que lo dicho basta para dar una idea de nuestro teatro, nues-
al público de México en su Césari, su Albiui, su Mussati, su Galli, tro público y nuestros empresarios en ese año de 1836. En medio de
su Fornasari y su Santi, es causa desesperada. No se imagine el pelón esos escándalos, disgustos y pequeñeces, cantáronse, además de las
que me voy á ocupar de contestarle, y basta que la Césari nos haga óperas que ya he citado, y de repeticiones de otras ya conocidas, El
la justicia de acordarse que su único y poco noble enemigo no es me- Pirata, Ana Bolena, El Condestable, La Pietra del Paragoney Guiller-
xicano. Esfuércese la Passi cuanto quiera, y obtenga algunas veces mo Tell, ejecutada ésta por primera vez en nuestro Teatro Principal
aplausos, mas nunca subirá á la riqueza de una Albini, ni á la gracia el 16 de Setiembre de dicho 1836, por ser, según reza el revistero del
seductora de una Césari, ni á la maestría escénica de un Galli, ni al periódico del Gobierno, análoga á la celebridad del día.
gusto y exactitud de un Mussati. No, nunca llegará á superar á la Cé- Al acercarse Diciembre y con él los últimos días de la temporada,
sari de laque con razón dice un literato mexicano: " Mas cese la ilusión, el inquieto Patiño de nuevo suscitó odios y rencores, disponiendo
rasgúese el velo,—Adela es la que encanta, la adorable." En lo que 110 que Fornasari quedase fuera del cuadro. "Corre por ahí — dice un
cabe duda es en que el teatro de esta Capital, jamás se ha visto tan cronista — la voz de que el compromiso del Sr. Fornasari en nues-
mal servido como bajo la dirección del gallego pelón, que en la épo- tro teatro, concluye con el año, y que no quiere el Sr. Patiño que
ca en que fué cómico demostró que ninguno se encontraría con más continúe. No creemos que este señor lleve á tal punto las pasiones
defectos que él, y 110 comprendemos como pueda estar en sus intere- mezquinas que se le han supuesto en los debates teatrales que han
ses arruinar á la Empresa á que representa; él destruyó la ópera anti- ocurrido desde que trajo esta Compañía, y que al gusto de satisfacer
gua, después la Compañía de verso que teníamos, y por último, con- esas pasiones todo lo sacrifique, y pasiones mezquinas se llama tener
cluirá con la que existe hoy; es indispensable que las autoridades una predisposición de odio contra un actor, ó celo miserable y mal
intervengan y vigilen para evitar mayores males, y que los disgustos entendido de no haberlo ajustado. Obsérvase que tenemos cinco ba-
tomen un carácter que á ellas mismas perjudique." jos, que son: Galli, Santi, Spontini, Leonardi y Fornasari. Galli es
Estos temores no tardaron en verse confirmados, y un editorial del el músico más instruido, el actor más sobresaliente, y el director más
periódico gobiernista, dijo después de uno de aquellos escándalos. hábil; por nada de este mundo quisiéramos privarnos de nuestro Ga-
"Anoche se susurraba un motín en el teatro, en que pudimos con- lli, pero no es culpa suya si su laringe sigue la suerte general de la
templar la algazara acalorada, la grita descompuesta, las amenazas,
X
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351

¿sus pildoritas curan


estos papeles debe brillar más el actor que el cantor, mas por su pro-
pia gloria debe dejar los caracteres serios: su Asumo es ya aguanta- callos de pies?
ble, su Enrique no tiene una entonación en su lugar, y su Fernando ¿Hay, por ventura,
no vale más: en la Urraca, en el dúo que canta con la Passi apenas algún certificado
se sueltan los dos es cosa de echar á correr, por los desentonos de de aquella c u r a ? "
ambos. Ni Eeonardi ni Spontini se pueden poner en comparación con
:
Fornasari: la diferencia de sonidos de sus voces es la que hay entre
Y el irritado agente, que parece que era un sastre, contestó tam-
el sonido de una campana y el de una puerta, y el Sr. Santi no es ba-
bién por medio de un periódico:
jo sino barítono. Así, pues-, ninguno de ellos puede reemplazar al
^ Sr. Fornasari. Suplicamos á la Empresa que nos conserve al Sr. Ga-
para director de escena y para los papeles bufos, y que nos con- ' 1 Mediquín, tu versito
serve á Fornasari para reemplazar á aquél en los serios." bien nos enseña,
Al copiar este artículo, el Diario del Gobierno añadió: " E s t a m o s que tú tienes los callos
enteramente de acuerdo con el articulista, porque somos apóstoles en la cabeza.
del orden y de la libertad bien entendida, y por nada quisiéramos que Si quieres cura,
volviesen á ocurrir los desórdenes tan desagradables de días pasados: Morison te aconseja
no se puede dejar de convenir en que en los espectáculos establecidos trépano y muda."
para el público y con los que se especula sobre su bolsa, tiene dere-
cho este público á pedir tal ó cual cosa, y á ser servido de ésta ó de
aquella manera, sin que esto ofenda el derecho de propiedad: éste es Como se ve, no faltaban ingenio ni buen humor en medio de las
amplio é indispensable para abrazar ó no empresas de este género; infinitas calamidades que entonces afligían á México.
pero una vez entrado en ellas se aceptan todas las obligaciones anexas Dejando á un lado esos chistes, y volviendo á nuestro teatro, diga-
á servir á un público." mos algo del actor mexicano Antonio Castro que no ha mucho nom-
bré. Ea hermosa Guadalajara, Capital de Jalisco, fué el lugar de su
Del cuadro de verso, poco menos que nada tengo que decir. Según nacimiento, ocurrido el 2 de Mayo de 1816. Hijo del Teniente Coro-
hemos visto en algunas de las críticas que dejo copiadas, las malas nel D. Antonio Castro y de D? María Montes de Oca, fué traído á
voluntades y pequeñeces de Patifio, también entre los actores del México á la edad de seis años, con objeto de darle una educación co-
Principal habían introducido la desunión, y los mejores faltaron en mo á su clase convenía, pero cuando la hubo adquirido y llegó el ca-
ese año de 1836. Ea Dubreville y la Cordero, y Fuentes, Castro y so de elegir carrera, venciendo las preocupaciones de familia y socia-
González llevaron el peso del trabajo, distinguiéndose los susodichos les optó por la de artista dramático, y para seguirla, ingresó en la
Soledad Cordero y Antonio Castro que, si bien muy al principio de Academia ó Conservatorio que fundó el Gobierno en 1831, poniéndola
su carrera artística, iban ya descubriendo los méritos sobresalientes bajo la dirección de D. Bernardo Avecilla, de quien el joven Castro
que debían conquistarles lugar eminente en los anales del arte dra- recibió las primeras lecciones de declamación. Protegido por D. Ma-
mático en su patria. nuel Eduardo de Gorostiza, Antonio Castro hizo su presentación en
Patiño y sus errores como autor de esas compañías, compartieron el Teatro Principal el 15 de Agosto de 1834, en la comedia francesa
la celebridad con las pildoras inglesas de Morison, introducidas en La Madrastra, traducida por Gorostiza. El éxito de esa presentación
ese ano en México con grande escándalo y oposición de los boticarios fué de lo más satisfactorio para el nuevo actor, que en el invierno del
que combatieron su uso como peligroso, en miles de articulejos y pá- mismo año trabajó con mucho aplauso en Veracruz. Ya con alguna
rrafos de periódico, ya en serio, ya de burla. En cierto día uno de experiencia y con algún caudal de obras, regresó á México en 1835,
esos farmacéuticos, criticando que á las pildoras se las titulase uni- para desempeñar el puesto de galán joven en la Compañía Dramática
versales, se dirigió á un agente con la siguiente pregunta: del Principal, puesto que supo llenar honrosamente, descubriendo,
como hace poco dije, los méritos sobresalientes que debían conquis-
" S e ñ o r Morisoniano, tarle en pocos años, lugar distinguidísimo entre los artistas mexi-
dígame usted: canos.
. . . . " Ya del astro la frente radiosa V
aparece en el Código Santo,
y las sombras retiran su manto,
CAPITULO X V y el Averno va el mal á ocultar
"Sabios padres del pueblo escogidos,
vuestro afán nos sazona este fruto,
recibid el debido tributo
1837 —1838. de alabanza, de amor, gratitud "

La verdadera novedad artística de 1837, 110 fué, sin embargo, ni


Cansaríanse mis lectores, y yo con ellos, si pretendiéramos seguir
ese himno ni los nuevos triunfos de los Galli y los Santi, y de las
paso á paso la historia de los espectáculos en la Capital en el año de
i8 Albini, Césari y Passi; lo fué la exhibición de que da cuenta el si-
37> que con pocas variantes tuvo las mismas compañías de Opera
guiente prospecto, que por curioso copio:
y de Verso que el precedente y aun el sucesivo.
"Espectáculo extraordinario de las pulgas industriosas y sabias.
Ni tampoco fué favorable el tiempo para diversiones: la plata ha-
— Para el domingo 22 de Enero y días siguientes en la calle del Co-
bía sido retirada de la circulación y sólo abundaba, signo de la pú-
liseo Viejo núm. 18.—Estas pulgas son las tínicas que han obtenido
blica pobreza, la moneda de cobre, causa de revueltas y motines gra-
generales aplausos en las principales capitales de Europa, y las que
vísimos, semejantes á los de la moneda de níquel en nuestra época.
han causado la admiración de los espectadores: han conseguido en
Las intrigas políticas moviéronse como pocas veces para nulificar la
París en Noviembre del año pasado el premio más lisonjero, después
Presidencia de Santa-Anna, que en 20 de Febrero entró en Veracruz
de haber demostrado sus habilidades ante las Augustas Personas Rea-
de regreso de su cautiverio en los Estados Unidos, y para alzar Pre-
les de Francia, Inglaterra y Bélgica, y últimamente en las más gran-
sidente á D. Anastasio Bustamante, que de ese puesto tomó posesión
des ciudades de los Estados Unidos de América, la Habana y el Ca-
el 19 de Abril. A cambio de que en 1? de Mayo aprobaron las Cáma-
nadá.
ras los tratados de paz y amistad con España, que por fin reconocía
la Independencia de México á los quince años de consumada, Fran- '' Se representará una sala de baile donde se presentarán dos pul-
cia se preparaba á declararnos una cruel é injusta guerra. Pequeñas gas vestidas de señoras á bailar un wals: al mismo tiempo, otras diez
ambiciones hicieron que en el mismo Mayo encendiesen de nuevo la pulgas formarán una orquesta, cada una con su instrumento de un
guerra civil los Grales. Moctezuma y Paredes, originando la muerte tamaño proporcionado, cuya orquesta será dirigida por otra pulga,
de aquél. Nuevo México se rebeló contra la madre patria, siguiendo que representará á M. Gabenek, de París. Además, las pulgas indus-
el mal ejemplo de Texas; ocurrieron por doquier numerosos pronun- triosas se baten á la espada, arrastran coches, cañones, cajas de gue-
ciamientos; Bustamante llegó á temer que lo destronaran los mismos rra, un navio de guerra, un elefante llevando sobre su lomo el obe-
á quienes debía la Suprema Magistratura; las famosas Siete Leyes re- lisco de Luxor, cuarenta millones de veces más grande que la pulga
sultaron inaplicables é impopulares, y para que nada en punto á fa- que lo lleva. Se verá al Duque de Wellington, al Gral. Jackson y al
talidades faltase, el 22 de Noviembre espantó á México el terremoto Rey de Argel montados sobre pulgas lujosamente enjaezadas, que
formidable conocido por temblor de Santa Cecilia. aparecerán en seguida paseándose con toda uniformidad.
'' La exposición de estas escenas estará franca todos los días por
Mis citas de espectáculos serán, pues, reducidas: el primer día de
poco tiempo, desde las diez de la mañana á las diez de la noche: pre-
Enero se dió en el Teatro Principal una función dedicada á celebrar
cios de entrada, cuatro reales por persona y dos para niños que no
el juramento de la Constitución centralista, cantándose por la Com-
pasen de diez años.—Se verá en dicha exposición un autómata de un
pañía de Opera Italiana un himno que comieuza:
mecanismo perfecto, representando al Emperador de los chinos, que
ejecutará varios juegos de manos."
" ¡Salve, Salve! Sagrado tesoro
E n compensación de esas y otras bobadas, que eran, después de
conque Themis la patria enriquece,
todo, lo único que producía dinero, pues la ópera y la comedia deca-
y en que el cielo bondoso le ofrece
yeron mucho, la literatura mexicana comenzó á animarse de un mo-
paz constante, ventura c a b a l . . . .
do notable. En 1837 comenzó á publicarse El Año Nuevo y Presente
R. H. T.—T. I.—45
Amistoso, colección, muy digna de estima, de composiciones en prosa
y verso, firmadas por J. M. Lacunza, J . Navarro, J . J. Pesado, J . mundo sabía los escasos arbitrios de los aventureros y negociantes
Rodrigue? Galván, J . R. Pacheco, M. Tossiat Ferrer, Guillermo Prie- franceses que marchaban a países extranjeros con sus insignificantes
to, Manuel Payno, F. Ortega, José M. Tornel, M. Navarro y Anto- pacotillas, cuyo valor llegaba apenas á algunos cientos ó miles de
nio Larrafiaga. Entonces empezó también El Mosaico Mexicano, se- francos. En esa época el comercio de exportación de Francia para Mé-
manario que, entre mil copias y traducciones, publicó artículos y xico, apenas alcanzaba á siete millones de francos; ¿cómo no había
poesías de mérito de nuestros literatos mexicanos, que 110 se desde- de ser absurda la reclamación de tres millones, por sólo el concepto
ñ a b a n entonces de adornar con sonetos y composiciones cortas, cal- de perjuicios?
zadas con sus firmas, los tarjetones del Templete de la Alameda en Pero como sin injusticias no habría guerras, Francia insistió en la
los aniversarios del 16 de Setiembre. suya, y obrando con felonía en 27 de Noviembre atacó la fortaleza
^ Y dió principio el tristísimo año de 1838 viéndose obligado el Go- de Ulúa y se hizo dueña del castillo, y en 5 de Diciembre sorprendió
bierno á solicitar de la empobrecida nación fondos para proseguir la al puerto y ciudad de Veracruz, y sus fuerzas de desembarco se reti-
guerra con Texas y hacer frente á la que Francia se preparaba á traer. raron á sus buques, llevando prisionero al Gral. Arista, y dejando
Eos ministros entraban y salían sin conseguir hacer nada por su país, mal herido á D. Antonio López de Santa-Auna, á quien un cañona-
llamáranse Mora, Bravo, Cuevas, Gorostiza, Pesado, Tornel y tan- zo causó la pérdida de la pierna izquierda, que fué necesario ampu-
tos y tantos otros. El 4 de Marzo se publicó por bando nacional so- tarle más abajo de la rodilla. Como no se supo aprovechar el patriotis-
lemne la anudación de relaciones con España, y el 26 recibió el Go- mo de los unos, y el Gobierno nacional se vió combatido aun en esos
bierno el insolente ultimátum del Barón Deffaudis. Como si se espe- instantes supremos por revolucionarios poco dignos del nombre de
rase que quien tuvo la fortuna de consumar la Independencia en 1821 mexicanos, nada mejor pudo hacerse que aceptar los buenos oficios
fuese en sus manes propicio á la justa causa de México contra Fran- del enviado inglés, Mr. Pakenham, para dar solución al conflicto, so-
cia, el 22 de Agosto fueron exhumados los restos de D. Agustín de metiéndose con pocos cambios á las exigencias de Francia.
Iturbide, trasladados á la Capital el 25 de Setiembre y depositados el En El Recreo de las Familias, semanario de literatura, editado por
24 de Octubre en la Catedral. la casa de Galván en 1837 y 1838, y muerto á los pocos meses por
¡Vano empeño! Cuatro días después, el 28 de Octubre de 1837, el falta de suscritores, encuéntranse noticias de nuestros teatros en esos
Almirante Baudin, se presentó con su formidable escuadra frente á años desgraciadísimos. Fuentes, Salgado, Palomera, la Dubreville,
Veracruz á sostener con todas las insolencias, con todos los abusos la Platero y los cada día más adelantados Soledad Cordero y Anto-
del fuerte contra el débil, las demandas del Gobierno Francés, en su nio Castro, compartían con fortuna escasa los aplausos y las entra-
mayoría notoriamente absurdas: con motivo de un tumulto fueron das de reducido público. Angelo, tirano de Padua; El/iombre gordo,
rotos unos cuantos vidrios en la tienda de un francés, y por ello re- de Bretón; Marino Faliero, El tirano como cualquiera, parodia de An-
clamó de indemnización dos mil quinientos pesos; otro de los recla- delo, y otras obras con las cuales se procuraba ó conmover hasta el
mantes era un pastelero, que, por la destrucción ó violento consumo horror ó divertir hasta no tenerse de risa, formaron el repertorio de
de algunos pasteles por una partida de soldados hambrientos com- la temporada en el ramo de verso.
prometidos en los disturbios civiles, presentó un cargo que llegaba La Albini, la Césari, la Passi, y Galli, Santi, Mussati y el distin-
nada menos que á la suma de veinte mil pesos; otro tercero, exigía guido Juan Bautista Montresor, que vino en refuerzo de la Compa-
treinta mil por habérsele decomisado treinta barras de plata en el ac- ñía de Opera, mantenían ésta con no menores dificultades que los ar-
to de ponerlas en Mazatlán á bordo de un buque, estando prohibi- tistas dramáticos la suya.
da absolutamente su extracción por una ley, á no ser en el caso de Ese cuadro lírico puso, entre otras obras, en escena El Cruzado en
especial permiso. Egipto, ópera que á los redactores del Recreo pareció bellísima, inme-
Esas demandas pueden servir como muestra de la mayor parte de jorables los trajes, buenas las decoraciones y magnífico el desempe-
las presentadas por los franceses, hasta la suma de seiscientos mil ño. Al repetirse la obra, hiciéronsele algunas supresiones en las es-
cenas más largas, "pero el público se enojó con aquella prudencia,
pesos, con más la exigencia de la degradación y castigo de varios al-
habla el citado periódico, y un magnífico concierto de palmadas, gri-
tos funcionarios, generales, jueces, etc., y cien otras ventajas que po-
tos, palos, chiflidos y patadas, regaló por algún tiempo los oídos de
nían á los franceses en mej or condición que á los mismos mexicanos
los filarmónicos. El coro era el que trabajaba en aquel lance fatal, y
Esa demanda de dinero era tanto más excesiva, cuanto que todo el
como el público observase que la ópera continuaba sin hacérsele caso,
comenzó á entonar la voz, y bien pronto se acompañó con el coro, y pulque por unas partes, y por otra taladrada con los cigarros encen-
n o se escuchaba ya más que un bramido espantoso y pausado como didos que caían sobre ella.
el que produciría un volcán poco antes de reventar. "Levántase el telón y da principio el drama; es Angelo, tirano de
" N o gustándole al coro el acompañamiento, se retiró de la escena Padua ¡Oh Víctor H u g o infeliz! Si hubieras visto, como yo, á
quedándose uno de sus respetables miembros para arengar al pueblo, tu hijo aporreado, estropeado, derrengado, asesinado, despedazado,
á quien dirigió la empanada siguiente: "Una palabra.—Porque so- cuál hubiera sido tu dolor, tu angustia, tu desesperación!
" m o s americanos se nos trata así: gracias." Y dió la vuelta ponién- "Erase de ver allí un Homodei con una pierna no buena, vestido
dose el turbante, que á la sazón tenía en la mano. Al público no le de turco y con cachucha: un Angelo, una Tisbe, una Catalina, que no "
gustó la arenga, y la chifló como era de esperarse, y algunos grita- hay más que pedir; un Rodolfo ¡ah! un Rodolfo que se dispara-
ron que llevaran al orador á la cárcel, y era, en verdad, la medida ba más que sus compañeros, que agachaba la cabeza y embestía co- •
más prudente: el público fué insultado por un hombre sin mérito ar- mo un toro á Tisbe, hablándole así:—1"¿ Y me lo decís á mí? Vos mis-
tístico que le recomendara, por un hombre que tal vez venía de la ta- " ma acabáis de decírmelo, y aun creo que con jatancia."
berna y en ella se armó de atrevimiento y de insolencia; tampoco se "Todos allí corregían al autor á su antojo, embrollando el diálogo,
trataba de mexicanos y extranjeros, sino de que se representara la diciendo, en fin, lo que á las mientes se les venía, y aun creo que
ópera completa; por consiguiente, el orador se apeó por el rabo." con jatancia. Con gritar, levantar las manos y los ojos al cielo, ó más
Si esto acontecía en el primer teatro, en el Teatro Principal, figú- bien á un mal tejado guarnecido de petates, ya se creían, sin duda,
rense los lectores qué ocurriría en el Provisional ó de los Gallos, en- unos Prieto ó unos Máiquez. Durante la representación y principal-
tregado entonces á compañías de medio pelo. Vuelvo á copiar escri- mente cuando Catalina y Rodolfo se figuraban solos, salía un hom-
tos de los redactores del Recreo. Trata de su asistencia á ese teatro. bre á recoger ya una guitarra, ya una vela, etc. Aquello fué sólo pa-
"Aquello parecía un teatro y era de forma circular; en el patio había ra visto.
mucha gente de todas calidades y condiciones; junto á una capa una " L o s espectadores, durante la representación, estuvieron apalean-
frazada; junto de un frac una camisa; junto de un pantalón de paño do los bancos y riendo incesantemente: el estruendo aumentó des-
un calzón de manta; junto de un tápalo de seda un rebozo de lana. pués de concluida la pieza: se levantó el telón y aparecieron, para
E n los palcos se veía lo mismo, y en lo que se puede llamar la cazuela, ser aplaudidos, todos los actores, hasta Anafesto Galeoja, que ape-
una piña de cabezas tan compactas como un empedrado. No viéndo- nas había hablado dos palabras en el drama. E l telón volvió á caer
se más que las cabezas, imposible me era reconocer de pronto á qué y el estruendo no cesaba; chiflidos, patadas, gritos, manotadas, pa-
sexo pertenecían; pero al cabo observé que era un revoltillo de hom- los, cuantos recursos puede inventar el hombre para dejar sordo á su
bres y mujeres.—¡Oh! exclamé para mis adentros, esto es lo que se semejante, otros tantos se pusieron en práctica. Volvió á levantarse
llama vivir con libertad y sin ceremonia; aquí deberán ser las gentes el telón y volvió la celebérrima Compañía á presentarse: el bramido
muy sencillas, muy inocentes, muy puras: no ha llegado hasta estos de la tempestad, el del mar, el de un volcán vomitando lavas, fue-
lugares el aire corruptor de la malicia humana; la candidez debe rei- ron nada en comparación de aquello. Entonces vi que los hombres
nar en los diversos corazones que pertenecen á esta multitud de ca- aplauden silbando y ríen con el terrible Angelo: quizás llorarán con
bezas que veo y otras que no distingo; si fuera lo contrario, ya la El médico á palos: quizás se calentarán á la sombra y se refrescarán
policía hubiera puesto remedio. al sol; reirán con un entierro y llorarán con un baile, se pondrán el
"Chilló un violín y empezó á bramar el teatro; cada espectador te- sombrero en los pies y los zapatos en la cabeza.—La función conclu-
nía un palo, ó cuando más dos: á mi lado estaba un hombre que yó con el anuncio de la próxima, con un majadero bailecillo y con
gritaba, pateaba, y azotaba dos garrotes sobre la banca, como si to- la borrasca susodicha.''
cara un tambor. Me levanté despavorido, 110 sin recibir al paso mu- Tales eran en aquel entonces los espectáculos que ofrecía y el es-
chos pisotones y palos. Me creí libre al fin y fuera de peligro, cuan- tado que guardaba el teatro de los Gallos ó de la calle de las Moras,
do sonaron dos silbatos en mis oídos. Corrí á otro lado, me senté, y inaugurado, según dije á su tiempo, el 9 de Octubre de 1822, por el
lanzó uno tras de mí tan estrepitosa carcajada que me hizo estreme- famoso Luciano Cortés. Lo muy provisional de las obras materiales
cer. Arrojé un suspiro, levanté el cuello de mi capa y sumí la cabe- ejecutadas en ese local, hizo que fuera necesario reconstruirle en Ma-
za como un armadillo. Me sentí algo mejor en aquella postura, pero yo de 1825, y así reformado, le estrenó el aplaudido cantante Andrés
mi capa padeció bastante, porque resultó escupida, empapada en Castillo. Después, en 29 de Junio de 1827, el que fué antiguo palen-
]

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| " .r-N.
gusto y seguridad de entonaciones que se pudieran pedir á uii cla-
que de Gallos, se vio honrado con la presencia del muy insigne tenor rinete. La amable Passi estuvo magnífica: ¡qué expresión de fisono-
Manuel García, y más tarde su mala situación por su lejanía del cen- mía! ¡qué talle tan esbelto! ¡qué gallardía para llevar y manejar
tro, fué causa de que el público dejara de concurrir á su sala, buena aquel traje! ¡qué gracia, qué coquetería, qué finura en todo! Era siem-
únicamente para compañías como la que nos describe el cronista de pre Amina, aquella Amina que hizo llorar á México de emoción, y
El Recreo. Nuevamente y andando el tiempo, el Teatro de los Gallos que 110 podrá ser reemplazada por nadie en ese papel."
se levantó de su miseria, y, según pronto diremos, albergó á la muy Y es cuanto creo necesario decir, pues extenderme más equival-
distinguida Castellán, y á Mariquita Cañete, y otra vez más descen- dría á estar repitiendo los títulos de óperas y de comedias ya varias
dió á verse ocupado por compañías pésimas y poco cultos espectácu- veces citadas, y los de los artistas de uno y otro cuadro, que pronto
los, y como ya dije también, vino á desaparecer en un incendio que iban á desmembrarse con la separación de la Dubreville y de Salga-
se debió á la inflamada esponja de un globo. Ese incendio del Teatro do, con la marcha de Galli para Europa y con la de la Albini para la
* de los Gallos, ocurrió poco antes del medio día del viernes 1? de No- Habana. La Passi vino al fin á ser esposa de Patiño, explicándose
viembre de 1844, según se lee en el Diario Oficial del Gobierno de Mé- así sus preferencias por esa artista, causa de los disgustos de que á
xico, correspondiente al sábado 2 del mismo Noviembre de aquel año; su tiempo di razón.
en ese periódico se publicó el parte que el Gral. D. Joaquín Rangel Verdad es que entonces esa clase de zambras eran de uso común y
elevó á la autoridad superior, dándole noticia de las disposiciones que corriente: hablé ya de las del Teatro de los Gallos, y algo dije de las
tomó para impedir que el fuego se comunicase á las casas vecinas al del Principal; pero ninguna de ellas fué última. En el Recreo, tantas
teatro, ya que fué totalmente imposible evitar que el incendio redu- veces citado, hallo la descripción de uno de esos motines ocurrido en
jese á pavezas aquel coliseo que permaneció consagrado á espectácu- el Antiguo Coliseo, por Diciembre de 1837, al representarse la paro-
los teatrales casi veintidós años. dia de Angelo, con el título de Un tirano como cualquiera.
Ea Compañía de Opera y el maestro Lauro Rossi tuvieron un gran "Apenas principiaba la comedia hubo en el patio su ruido, pero
triunfo con la ópera nueva, con letra castellana y música del susodi- sordo: cayó el telón y cada uno calificó el primer acto como su gana
cho maestro, La casa deshabitada. "Muchos placeres hemos disfru- se le dió. Al segundo ya hubo gestos, y se marcaron algunos resor-
tado con esa ópera, dice un cronista. Poseemos un hábil maestro que tes de conspiración contra la comedia. Principió el tercer acto, y al
ha acertado con la cuerda de los mexicanos en lo serio como en lo llegar á la escena en que el Tirano envenena á su esposa, se oyó un
bufo. Los que lloran con Juana Shore han reído de buena gana con chifiido, luego otro, luego golpes descompasados, y en fin, una voz
Doña Sinforosa, y México se complace de ser el teatro de la gloria terrible que dijo: ¡abajo el telón!
del maestro Rossi. " Y como los chiflidos, los golpes y los gritos continuaban, tuvie-
" E l asunto ha sido muy bien escogido, pues se trata de un hom- ron los actores que callarse, y los mites que bajar el telón. Sin em-
bre que se vale de la credulidad de las gentes para que se abandone bargo, siguieron los gritos; unos decían: "quesiga la comedia;" otros
una casa que le interesa conservar inhabitada. La música, perfecta- "no, no•;" algunos pidieron un saínete, otros su dinero, hasta que le-
mente acomodada al género, tiene una travesura, una ligereza, una vantado el telón y calmado el bullicio, dijo el Tirano con tono muy afa-
gracia que encantan y se sostienen en todo el cuerpo de la obra. El ble: "Señores, se ha preguntado al señor juez de Teatro, qué es lo
primer cuarteto es magnífico, y aunque se dice que tiene semejanza que se debe hacer, y nos ha dicho que de su orden se continiie la come-
con otras piezas que ya conocemos del maestro Rossi, es porque obe- dia. ¿Qué hacemos?" Entonces redoblaron los gritos de: "abajo el
dece á su modo y carácter propios. El público pidió que se presen- telón" "110 queremos esa comedia" "que nos echen un saínete" y no sé
tase el Sr. Rossi sobre la escena para aplaudirle y darle las gracias. cuántas cosas más. Lo cierto es que cayó el telón para no volverse
" E n la ejecución no hay que notar si no es la perfección con que á levantar.
á porfía ha sido desempeñada la obra, y lo que es más, la habilidad " P e r o el bullicio continuó, aunque de cuando en cuando'había in-
de hacerlo en un idioma que no es el propio de los artistas que tra- tervalos de profundo silencio; luego, repentinamente, crugió el cielo,
bajaron. Galli, el mejor bufo que se ha conocido, es el alma de esta temblaba la tierra, silbaba el viento y resonaba'con estrépito el rayo de
clase de composiciones que morirán con él, como murieron otras con la mofa. Concluyó esta escena, con un múdese cada uno á su casa,
García, y como con Taima la tragedia francesa. La Sra. Albini ca- pues el director mandó que se apagasen las luces, y se fuesen los ac-
racteriza su papel á maravilla, así en su traje como en su parte tea- tores en compañía del público."
tral. El jilguero Mussati canta la primera aria con la flexibilidad,
361 ' • ••'•
De un artículo descriptivo, también publicado en el Recreo, tomo V• J
los siguientes detalles del modo de ser del público y del Teatro en obertura, que apenas se oía por el interminable habladero de los con-
1837 y 38. currentes, el cual iba aumentando conforme llegaba más gente. Le-
" A la entrada del teatro se forman dos hileras de ociosos para ver vantaron el telón y la representación dió principio, pero 110 fué posi-
pasar á las gentes, y hacer de ellas anatomía comparada y descripti- ble enterarse de ella. El Teatro Principal es una gran tertulia adonde
va. Si en el infierno se murmurara, debían nuestros ociosos ir á po- se va por tono y no por gozar del espectáculo, por consiguiente, la
ner cátedra en él, y sin duda saldrían airosos. J u n t o á mí estaban dos etiqueta exige entrar lo más tarde que se pueda y haciendo ruido
pisaverdes c h a r l a n d o . . . . ¡Qué lenguas las suyas, gran D i o s ! . . . . po- para llamar la atención. Una parte de los asistentes comienza por
dían apostarlas con la más afamada verdulera, y puedo asegurar sin indagar la vida y milagros de la parte pacífica; luego que levantan el,
temor de equivocarme, que eran los más moderados. telón se sigue con la de los cómicos, conforme van saliendo á las ta-'
"Cuando me resolví á entrar, no poco trabajo me costó encontrar blas, y concluyen por despedazarse á sí mismos.
un asiento, pues aun cuando había muchos desocupados, tenía yo "Algunos de los que no quitan créditos, se entretienen con sus ne-
que andar errando á merced del acomodador que no me dejaba sen- gocios particulares, en hablar de política, en noticiar las ocurrencias
tar en ninguno, á no ser en el anfiteatro, porque, según decía, todos del día, en valorizar los trajes de las señoras y de los cómicos, en
los de la luneta eran de sujetos abonados. Resuelto en un principio apuntar sus anteojos, sirviéndoles de respaldo el infeliz que está á su
á salirme, varié de resolución y decidí quedarme, y en consecuencia lado, en quien se recargan para poder dirigir bien y con descanso su
llamé con fuerte voz repetidas veces al acomodador, que estaba á la telescopio de dos cañones.
sazón con seis cojines sobre la cabeza, para alquilarlos al primero " J u n t o á mí estaba un francés elogiando á gritos la ópera, y pal-
que los necesitara, y después de gran tiempo se fué acercando á mí moteando, y pateando y gesticulando sin cesar; otro individuo nos
con pasos lentos, y poniéndome cara de condenado ó de sepulturero, enflautó también en voz alta, el argumento de la ópera con todos sus
que es peor. pelos y señales, al mismo tiempo que un otro estaba delante de mí
— " ¿Será posible — le dije — que no haya un asiento para mí? leyendo á voz en cuello un programa á su compañera. Todo, en fin,
— " Y a le he dicho á vd. que n o — m e respondió con voz y ceño se oía, menos la música de la ópera.
de superior. "Inesperadamente un individuo de un palco, que para ver mejor
"Paciencia y barajar, me dije, y poniéndole en la mano una pro- estaba de pie sobre una silla y apoyado en los hombros del que tenía
pina todo se me facilitó. delante, perdió el equilibrio y salió disparado sobre la orquesta, rom-
— " ¿ P o r dónde quiere vd. su asiento?—me preguntó el acomo- piendo un bajo, tres violines y dos trompas. El público se alarmó
dador con halagüeño semblante. creyendo se trataba de un pleito ó riña, que eran frecuentísimos, ó de
—"Do más cerca posible. un pronunciamiento, que eran el pan de cada día. Algunos, ó por
—1 'El caso es que tengo dados unos y abonados otros pero no falta- miedo ó por chiste, gritaron: ¡Fuego! ¡Fuego! y toda la gente se le-
rá y dicho y hecho, me dió uno de los mejores. Como los asien- vantó, todos querían salir á la vez; los muchachos chillaban, las mu-
tos no están numerados ni son fijos más que para los abonados, quien jeres y todos estábamos pálidos como cadáveres.
toma una luneta tiene que gratificar al acomodador, .si quiere estar " ¡ Q u é estrépito! ¡qué movimiento! Unos saltaban á los palcos
bien colocado. ó á las tablas para salvarse más pronto; otros, dejando los sombre-
" E s t a n d o en esta fatiga, oí un estruendo horrible y á continuación ros y las capas, se hacían lugar á codazos y puñadas; una señora cla-
sentí algo que se desprendía sobre mí; el ruido lo producía el público, maba por su hijo; otra por su marido; aquélla por su padre, y las
dando palos, palmadas, puntapiés, gritos y chiflidos, y lo que cayó puertas, pequeñas, muy pequeñas, apenas daban salida á una per-
sobre mí eran anises de dulce, arvejones y confites que arrojaban de sona.
las localidades altas, por ser las carnestolendas de 1838; al mismo " A l salir á la calle, la escena era otra. El Gobierno, que siempre
tiempo, y por igual motivo, se estrellaron sobre mí dos ó tres casca- vivía alarmado, había tenido noticia del escándalo, y temeroso de que
rones rellenos de harina y papelitos de colores, que mancharon to- envolviese un fin político, había enviado cantidad de tropas; los sol-
do mi traje; hube de consolarme con ver que á todos los demás concu- dados daban cañonazos á diestro y siniestro; los coches se atropella-
rrentes les pasaba lo mismo. ban unos á otros, y por todas partes las gentes corrían gritando: ¡Re-
'' De pronto se oyeron los golpes de los timbales y comenzó la volución! ¡Revolución! haciendo cundir el miedo y el espanto hasta los
barrios extremos de la ciudad "
E . H T . ~ T . I.—46
k

363
362
mia que pronto hizo rápidos adelantos, tan rápidos y tan brillantes,
E l humorístico articulista no exageraba gran cosa en su cuadro de que menos de un año después, el 17 de Julio de 1839, sus alumnos pu-
costumbres de ese tiempo. Más de una vez aconteció algo muy se- dieron cantar en uno de los salones del edificio de la antigua Inqui-
mejante. sición la Sonámbula de Bellini. La Sra. Lizaliturri desempeñó con
perfección la parte de la protagonista, mereciendo al poeta I . G. el
siguiente soneto en su elogio:

CAPITULO XVI
' 'Al elevar tu acento de armonía
mi pecho te escuchaba enternecido; i .
de tus vivos afectos conmovido
palpitaba veloz, veloz latía.
183».—1810.
" T u dolor, tu placer, mi alma sentía,
y en un sueño también me crei dormido,
Con la perspectiva del pago de una fuerte indemnización de gue- cuando de tu entusiasmo poseído
rra y con el Erario en bancarrota, poco podía hacer el Gobierno de casi maquiualmente te aplaudía.
D. Anastasio Bustamante para atender como era debido al heroico " P a r a el que la Sonámbula ha escuchado
ejército mexicano, cuya historia, que aun está por escribir, si por al- de tu escénica acción y voz preciosa
guien fuese hecha, asombraría al mundo, no ya como crónica mili- tal ha sido el poder, tal el encanto,
tar, sino como anales de martirio. Ea miseria y abandono de nues- "Eliua, que se veia transportado
tros soldados, valientes como el que más y cual ninguno humildes á la mansión etérea, deliciosa,
y sumisos, movieron á piedad el corazón de la sociedad civil y un nu- con las ondulaciones de tu cauto.'
meroso grupo de damas y caballeros distinguidos acudió en su auxi-
lio, organizando diferentes funciones con cuyos productos se atendie-
se al alivio de los heroicos necesitados. En 17 de Agosto se repitió el concierto de i ? d e Febrero, dedicán-
dose sus productos al piadoso Establecimiento de la Cuna, que en-
Entre esas funciones fué brillantísimo el concierto que en 1? de Fe- tonces regía una Junta formada por las Sras. D!.1 María Luisa Vica-
brero de 1829 y en el Teatro Principal, á favor de los hospitales de rio de Moreno, Di1 Manuela Rangel de Flores y D? María Josefa Ro-
sangre, organizó una Junta cuya representación llevaron las Sras. dríguez de Uluapa.
D? María Luisa Vicario de Moreno, D? Juana Castilla de Gorostiza,
En ese tiempo el bello sexo mexicano daba frecuentes ejemplos de
D? Agustina Bonilla de Tornel, D? Ana Bringas de Mangino, D!} Pi-
filantropía, de talento y de ilustración, no faltando en él distingui-
lar Tovar de Andrade y D!! EinaFagoaga de Escandón. Fueron di-
das cultivadoras de las letras, como la Srita. Rosario Bossero, auto-
rectores de la parte musical D. José María Chávez y D. Juan Nepo-
ra de una novela que, con el título de Amor Filial, publicó en 1839
muceno Retes, y la función produjo más de tres mil quinientos pe-
la colección de autores mexicanos impresa por Cumplido con el nom-
sos, utilizándose á favor de los heridos casi dos mil novecientos. Eos
bre de La Guirnalda.
palcos se vendieron á veintidós pesos, la luneta á tres y los asientos
de galería, que en esa noche fueron ocupados por concurrentes tan En la suma pobreza á que habían llegado las cajas federal y mu-
distinguidos como los de las localidades bajas, costaron dos pesos y nicipal, fué necesario ocurrir á funciones de teatro y toros para dis-
dieron un producto de cuatrocientos seis. poner de fondos con que hacer los gastos de las festividades del 15 y
16 de Setiembre. " E n razón de las notorias escaseces del erario y de
La misma Junta ofreció al público en el mismo teatro y en 3 de Mar- la penuria general — decía el Diario del Gobierno—el pensamiento ha
zo, la ópera Capidetosy Montequios, desempeñada por particulares afi- sido muy feliz, pues sin él, esos preciosos recuerdos de la grandiosa
N cionados á l a música, con el deseado éxito material, y con el más ex- obra de nuestra independencia, 110 se perpetuarían con la solemnidad
traordinario lucimiento para los improvisados artistas. que otros años." Al efecto, los Sres. José María Iturralde, Alejan-
Bien es verdad que el cultivo de la música venía haciendo notables dro Ihary, Antonio de Icaza y Luis G. Chávarri, individuos de la
progresos en los últimos años. En el de 1838, los profesores D. Joa- Junta Patriótica, dispusieron para el sábado 31 de Agosto, y en el
quín Beristáin y D. Agustín Caballero, habían formado una Acade-
k

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mia que pronto hizo rápidos adelantos, tan rápidos y tan brillantes,
E l humorístico articulista no exageraba gran cosa en su cuadro de que menos de un año después, el 17 de Julio de 1839, sus alumnos pu-
costumbres de ese tiempo. Más de una vez aconteció algo muy se- dieron cantar en uno de los salones del edificio de la antigua Inqui-
mejante. sición la Sonámbula de Bellini. La Sra. Lizaliturri desempeñó con
perfección la parte de la protagonista, mereciendo al poeta I . G. el
siguiente soneto en su elogio:

CAPITULO XVI
' 'Al elevar tu acento de armonía
mi pecho te escuchaba enternecido; i ,
de tus vivos afectos conmovido
palpitaba veloz, veloz latía.
183».—1810.
" T u dolor, tu placer, mi alma sentía,
y en un sueño también me crei dormido,
Con la perspectiva del pago de una fuerte indemnización de gue- cuando de tu entusiasmo poseído
rra y con el Erario en bancarrota, poco podía hacer el Gobierno de casi maquiualmente te aplaudía.
D. Anastasio Bustamante para atender como era debido al heroico " P a r a el que la Sonámbida ha escuchado
ejército mexicano, cuya historia, que aun está por escribir, si por al- de tu escénica acción y voz preciosa
guien fuese hecha, asombraría al mundo, no ya como crónica mili- tal ha sido el poder, tal el encanto,
tar, sino como anales de martirio. Ea miseria y abandono de nues- "Eliua, que se veia transportado
tros soldados, valientes como el que más y cual ninguno humildes á la mansión etérea, deliciosa,
y sumisos, movieron á piedad el corazón de la sociedad civil y un nu- con las ondulaciones de tu canto.'
meroso grupo de damas y caballeros distinguidos acudió en su auxi-
lio, organizando diferentes funciones con cuyos productos se atendie-
se al alivio de los heroicos necesitados. En 17 de Agosto se repitió el concierto de i ? d e Febrero, dedicán-
dose sus productos al piadoso Establecimiento de la Cuna, que en-
Entre esas funciones fué brillantísimo el concierto que en 1? de Fe- tonces regía una Junta formada por las Sras. D!.1 María Luisa Vica-
brero de 1829 y en el Teatro Principal, á favor de los hospitales de rio de Moreno, Di1 Manuela Rangel de Flores y D? María Josefa Ro-
sangre, organizó una Junta cuya representación llevaron las Sras. dríguez de Uluapa.
D? María Luisa Vicario de Moreno, D? Juana Castilla de Gorostiza,
En ese tiempo el bello sexo mexicano daba frecuentes ejemplos de
D? Agustina Bonilla de Tornel, D? Ana Bringas de Mangino, D!} Pi-
filantropía, de talento y de ilustración, no faltando en él distingui-
lar Tovar de Andrade y D!! EinaFagoaga de Escandón. Fueron di-
das cultivadoras de las letras, como la Srita. Rosario Bossero, auto-
rectores de la parte musical D. José María Chávez y D. Juan Nepo-
ra de una novela que, con el título de Amor Filial, publicó en 1839
muceno Retes, y la función produjo más de tres mil quinientos pe-
la colección de autores mexicanos impresa por Cumplido con el nom-
sos, utilizándose á favor de los heridos casi dos mil novecientos. Eos
bre de La Guirnalda.
palcos se vendieron á veintidós pesos, la luneta á tres y los asientos
de galería, que en esa noche fueron ocupados por concurrentes tan En la suma pobreza á que habían llegado las cajas federal y mu-
distinguidos como los de las localidades bajas, costaron dos pesos y nicipal, fué necesario ocurrir á funciones de teatro y toros para dis-
dieron un producto de cuatrocientos seis. poner de fondos con que hacer los gastos de las festividades del 15 y
16 de Setiembre. " E n razón de las notorias escaseces del erario y de
La misma Junta ofreció al público en el mismo teatro y en 3 de Mar- la penuria general — decía el Diario del Gobierno—el pensamiento ha
zo, la ópera Capidetosy Montequios, desempeñada por particulares afi- sido muy feliz, pues sin él, esos preciosos recuerdos de la grandiosa
N cionados á l a música, con el deseado éxito material, y con el más ex- obra de nuestra independencia, 110 se perpetuarían con la solemnidad
traordinario lucimiento para los improvisados artistas. que otros años." Al efecto, los Sres. José María Iturralde, Alejan-
Bien es verdad que el cultivo de la música venía haciendo notables dro Ihary, Antonio de Icaza y Lnis G. Chávarri, individuos de la
progresos en los últimos años. En el de 1838, los profesores D. Joa- Junta Patriótica, dispusieron para el sábado 31 de Agosto, y en el
quín Beristáin y D. Agustín Caballero, habían formado una Acade-
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función: "Obertura por la orquesta: siendo el resultado la victoria de éstos contra aquellos, la libertad de
de la ópera Belisario, de Donizetti, nuevo en este tea- Am
e n c a y la unión de los guerreros.
por los Sres. Sissa y Spontiui: primer acto de la comedia
" Concluido esto, la colocarán ambos en un hermoso caballo y la
La mujer de un artista: magnífico rondó de la ópera antes citada, por la
conduarán en triunfo por todo el círculo de la plaza, hasta ponerla
Sra. Majocchi, con acompañamiento decoros de ambos sexos, y con
todo el aparato que exige su interesante argumento: graciosa Ober- Zrl 7 ,°' e u C U y a P 0 S Í C Í Ó n d a r á u u s a l t 0 s o b r e un pedestal de dos
tura que precederá á un recreo de majos, desempeñado por las Sritas. varas de altura quedando el caballo en actitud de estatua, tremolán-
Jesús Moctezuma y Soledad Sevilla, y los Sres. Antonio Castañeda dose p 0 r ella el pabellón nacional. Acto continuo, se presentará un
Maldonado: acto continuo se ejecutará, por las Sritas. Au- vistoso carro con el retrato del Señor Iturbide, adornado de una rá-
Joaquina Pautret, el sonecito español el Jaleo, compuesto por faga, en el cual los guerreros de ambas naciones colocarán á la Amé-
Pautret; aplaudido dúo de la ópera Los Normandos de París, rica, acompañada de los genios de Libertad, Independencia yUuióíiV
la Sra. Majocchi y el Sr. Spontini, terminando el todo de la fun- y entre aquellos la conducirán por toda la plaza, esparciendo octa-
ción con el' segundo acto de la comedia ya anunciada: las piezas de vas alusivas, retirándose todo este aparato al son de una marcha mi
canto serán desempeñadas con los trajes y aparato correspondientes.'' litar. Un toro tigre lidiará con los mexicanos que se separarán del
grupo anterior, picándolo en caballos en pelo y dándole muerte con
El programa de la función de toros fué el que sigue: "Domingo una macana de fuego. Seis toros serán lidiados por la Compañía y
i? de Setiembre. Tan luego como se presente S. E. el señor Presi- en el intermedio, vistosos equilibrios, que ejecutará el ciudanano Ig-
dente, las músicas de los regimientos lo saludarán, y á continuación nacio Osornio, con dos niñas de nueve á diez años "
se hará el despejo del circo por la compañía de Granaderos del Ba-
Ultimo espectáculo notable del año de 1839, que no tuvo comple-
tallón del Comercio: siete toros escogidos de las razas de Huaracha
tas ni Compañía de Verso, ni Compañía de Opera, fué la instalación
y Thahuipilpa, alternándose la corrida con las diversiones siguien-
solemne, en un salón del Colegio de Minería, de la Gran Sociedad
tes: un globo adornado con las armas nacionales y los retratos de los
Filarmónica, fundada en 15 de Diciembre por el profesor D. José An-
héroes Hidalgo é Iturbide: en su elevación hará una salva de bom-
tonio Gómez, quien pronunció un discurso en el cual, entre otras co-
bas, y al mismo tiempo arrojará porción de pájaros y obleas que for-
sas, dijo: "Observando yo por la historia, por la inducción y por la
marán una hermosa vista: un toro jineteado por Ignacio Chávez: el
experiencia, que el carácter dulce del pueblo mexicano le hace el más
salto que ejecutará Marcelino Salceda, ypor fin de fiesta, la pantomima
apto para la adquisición y cultivo de las bellas artes como de las be-
de Los mecos, en laque se lidiará un toro embolado, picándolo en ca-
lias letras, hasta el punto de que podrá llegar á no necesitar de otro
ballos en pelo y dándole muerte con una macana de f u e g o . "
alguu pueblo y á rivalizar con todos los demás, y siendo, por últi-
Uno y otro espectáculo dieron el resultado apetecido, y las fiestas mo, constante, que menos prometía y menos importancia tuvo en su
patrióticas del 16, en que el Ministro de Relaciones D. Juan de Dios principio el Conservatorio de Madrid, concebí el proyecto de reali-
Cañedo pronunció el discurso oficial, terminaron con la representa- zar este pensamiento sobre escala más extensa "
ción, en el Principal, del drama histórico en cinco actos traducido
En el mismo acto el joven D. Alejandro Gómez recitó una oda de
del francés, El Gondolero, adornado con el aparato teatral que le co-
la que tomo los versos que en seguida van:
rresponde.
El viernes 27 de Setiembre se celebró, entre otros festejos, con el
que reza el siguiente programa: ''Plaza de T o r o s . — E n justa cele- "Sublime inspiración, tiempla mi lira,
bridad de la entrada del Ejército Trigarante á esta Capital, con que hincha mi pecho de entusiasmo ardiente,
f u é consumada la grandiosa obra de nuestra independencia, la em- y tu canto robusto y elocuente
presa ha dispuesto una sobresaliente función para la tarde'de este concédeme esta vez . . . .
día, del modo siguiente: Euego que llegue el Excrno. Señor Presi- " ¡Música celestial! ¿quién desconoce
dente y haga la tropa el despejo, se presentará el Triunjo de la Inde- tu hechicero poder?. . .
1?'
pendencia: un grupo de españoles traerá cautiva la América, y vista ¿Habrá queja más tierna y dolorida
por los mexicanos procurarán librarla, empeñándose unos y otros en que tu queja infeliz, Norma engañada?
una vistosa lucha, sostenida por los españoles á caballo y los mexi- Miradla, delirante y conturbada
canos á pie, cada uno con los trajes y armas propios de su nación cabe á los hijos del amor violado;
] 366
367 ^s ' í
ved al rival que sus delicias era,
""'lleva el engaño en el semblante impreso; sistema central sufrió rudo golpe en Acajete el 3 de May'b con la vic-
escuchad los sollozos de Oroveso toria por S a n t a - A n n a obtenida sobre las tropas de D. José Urrea y
al conducir la víctima á la hoguera. D. Antonio Mejía, que allí fué fusilado; pero sin ser completamente
" M a s ¿quién canta tan plácido y festivo? dominada en otros puntos, al de estallar en México estuvo en 23 de
Ved á Fígaro allí, loco, contento, Noviembre, y aunque sofocada entonces quedó 110 domeñada y la-
con sus cantares abrumando al viento. tente para 1840; en él volvió á levantar la cabeza acaudillada enton-
¡Cuán ingenuo! ¡qué vivo! ces por Urrea y Gómez Farías, quienes echaron toda suerte de ca-
Su vida nos relata, lamidades sobre los pacíficos é indefensos vecinos, en las luctuosas
su casa nos retrata, jornadas del 15 al 26 de Julio, en que de nuevo salió vencedor , D.
en placer nos aniega, Anastasio Bustamante, para ser definitivamente vencido en 1841. s
con la música juega, En el de 1840, la primera diversión notable, fué un baile de trajes
en tonos seductores dado en el Teatro Principal el 8 de Enero por la Junta de Beneficen-
sabemos sus amores, cia, á favor del Hospicio de Pobres. La Comisión la constituían D.
y el público embebido Mariano Domínguez, Mr. Erven C. Makintosh y D. Diego Ramón
está ufano al mirarle complacido . . . . " Somera: éste cedió á los pobres asilados el producto del consumo de
helados, licores y cenas que hicieren los concurrentes, los cuales pre-
cisamente habían de ser personas conocidas y honorables, y de pagar
Quien algo conozca la Historia de México, 110 encontrará extraña
diez pesos por sus boletos: las señoras concurrirían gratis y por invi-
tanta pobreza de espectáculos en 1839. La impía é injusta guerra,
tación personal é intransferible.
que, apoyada en su fuerza y en nuestra debilidad, nos trajo la Fran-
cia, concluyó con los recursos nacionales y con el prestigio del Go- Con tales precauciones, y á influjo de la novedad, el éxito del bai-
bierno, batido á la vista del francés por numerosos y poco patrióticos le fué tan bueno como era de desearse, y excusado parece decir cuán-
pronunciamientos, que llegaron á hacer preciso que el mismo Presi- to sería el lujo que desplegó en él nuestra elegante sociedad, esplén-
dente D. Anastasio Bustamante tomase el mando del Ejército, de- dida como la que más, y por ese tiempo muy unida y bien dispuesta
jando en su lugar como interino á D. Antonio López de Santa-Anna á reunirse siempre que la ocasión se le ofrecía.
rehabilitado de los fracasos de Texas, ante la movilidad de senti- Más tarde fué cuando se pronunciaron en ella la división y los odios,
mientos de sus compatriotas, por su herida del 5 de Diciembre an- llevados éstos á un indecible extremo de exageración. Por entonces,
terior en el muelle de Veracruz. Más afortunado y mejor sostenido y cuando 110 la afligía alguna calamidad, en cuyo caso toda á la vez
Baudin que Barradas, el Almirante francés impuso á nuestros ple- se retiraba como una sola familia poniendo en bancarrota á cual-
nipotenciarios el inicuo tratado de paz de 9 de Marzo, no entregó Ulúa quier empresa, la sociedad mexicana á todo concurría y lo embelle-
sino hasta el 7 de Abril y no zarpó de Veracruz sino en 29 del mis- cía todo.
mo, cuando hubo recibido parte de los seiscientos mil pesos de in- Así lo hizo en el gran concierto que la Sociedad Filarmónica de D.
demnización y asegurádose de que no dejaría de satisfacérsele el res- José Antonio Gómez dió el sábado 1? de Febrero con arreglo á este
to. La injusticia con que México fué entonces tratado por la Francia, programa: "Fantasía de piano y violín, de Rumet, por la niña Mer-
110 quedó compensada con el ridículo nombre de la guerra de los cedes Agestas; Cavatina de Sonámbula por la niña Josefa Cordero;
pasteles que se dió á esa página nada envidiable de la historia de esa Aria de Semiramis por la Srita. María de Jesús Lombardini, coreada
nación. por los Sres. Jaime Simpson, Martín Miguel Azparren, José Castro,
Agustín Sebet, Jorge Iñarra, Tomás Murphi, Juan Tamariz, Manuel
En ese año de penas y amarguras, la Capital se estremeció con el
Muguiro, José Carrascosa y José María Tamariz; Fantasía de piano
escándalo del descubrimiento de la formidable banda de ladrones que
y trompa, de Gallai, por la Srita. Angela Yáñez; Aria de la Opera
tenía acosada á media República, bajo la dirección nada menos que
Amelia, de Rossi, por la Srita. Dolores Mozo; Variaciones para pia-
de un Coronel del Ejército, el desventurado D. Juan Yáñez, que,
no, de Hunter, por la Srita. Lombardini; Casta Diva, de Norma, por
descubierto, aprehendido y sentenciado á muerte, se libró de haber
la Srita. Bonilla, coreada por las Sritas. Cayetana Agestas, Josefa
salido vivo al cadalso degollándose con una navaja de barba en su
Pina, Bonilla, Josefa Cordero, Concepción Arellano, Mercedes Ages-
calabozo de la ex-Inquisición el 13 de Julio. La revolución contra el
tas, María Lombardini, Dolores Mozo, Bárbara Ortiz, Angela Yáñez,

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1 . ' f ^ J 368
E n el de Setiembre se celebraron, con relativo esplendor, los ani-
María Loreto Aguirre y Villaseñor, y los señores antes nombrados;
versarios patrióticos, que en ese tiempo se conmemoraban con misas
Rondo, de H u n t e r , por la Srita. Bárbara Ortiz; Aria de Lucia, por
Alejandro Gómez, y Aria de Ana Bolena, por la Srita. Mercedes Ages- de gracias en todas las parroquias, entre siete y nueve de la mañana
tas y coros." del 16. A las nueve, el Presidente de la República y todos los fun-
cionarios civiles y militares, asistían en la Catedral á un solemne Te
E n ese tiempo, la Sociedad Filarmónica y su Conservatorio, tenían Deum y á la misa cantada que celebraba de pontifical el l i m o . Señor
al servicio de sus alumnos las siguientes cátedras: Solfeo, vocaliza-
Arzobispo. De regreso en Palacio el Presidente era felicitado por to-
clon, canto, piano, violín, vihuela, clarinete, flauta y acompañamien-
das las autoridades y corporaciones, y de allí salía en comitiva para
to: Escritura inglesa y española, gótica, redonda, formación de ca-
el templete levantado en la Alameda, para escuchar el discurso cívi-
r á t u l a s y modelos: Idiomas italiano, francés é inglés: Teneduría de
co; en 1840 pronunció ese discurso el Gral. D. José María Tornel.
Libros, baile y esgrima: Dibujo natural, miniatura y aguada. Los
En la tarde las músicas militares situábanse en los paseos públicos,
conciertos se verificaban reglamentariamente los días 1? y 1 S de cada
y en la noche se iluminaban los edificios del gobierno y la mayoría
mes.
de los particulares: seguíase la función de teatro, que en el año de
Sin extenderme á más que á simple cita, diré que en el Carnaval que tratamos se dió en el Principal, estrenándose la comedia El mé-
de ese año se dieron, por primera vez con carácter público, en el dico y la huérfana, y cantando una aria el Sr. Leonardi. Por supues-
1 eatro Principal, bailes de máscaras, tan bien concurridos, elegan- to no faltaban los fuegos artificiales en la Plaza, á las ocho de la no-
tes y ordenados, cuanto no lo son en la actualidad, y obtuvo boga che, siempre que el tiempo lo permitiera, que era pocas veces.
grande en una casa de la r? calle de San Francisco el gran panorama
artístico formado por el pintor Calyó. E n el aniversario del 27 se seguía un programa m u y semejante al
del 16. E l discurso en la Alameda corrió en ese año á cargo del Co-
. A n á P ° r e l m e s d e J u l i o > visitó nuestra Capital el insigne violinista ronel D. Manuel Micheltorena. E n ese día y en esa fiesta, fueron
pianista y compositor Guillermo Vicente Wallace, profesor del Real distribuidos por el Presidente Bustamante, en persona, los premios
Conservatorio de Londres, Director de la Sociedad Anacreóntica de decretados por el Congreso, á las tropas que se mantuvieron fieles al
Dublm, y aplaudido concertista en los principales teatros europeos Gobierno durante los tristes días de la revolución de Julio. Digamos
Brillante pianista, se distinguió por su firme y á la vez delicada pul- algo de ella.
sación, y por el ligado y picado más perfectos. " S u ejecución dice
Poco después de la media noche del 14 de ese mes, el 5? Batallón
uno de sus críticos, es rapidísima y h a y momentos en que el oído
de Infantería, el del Comercio de México y una porción de oficiales
apenas puede seguirle: tiene u n singular tino para saltar con suma
sueltos, sorprendiendo á la guardia de la ex-Inquisición en cuyos ca-
presteza y con la misma mano dos, tres y más octavas; se complace
labozos se hallaba detenido D. José Urrea, puso á éste en libertad,
en j u g a r con las fugas de Hendell y Bach, y al presente es muy su-
y, con él al frente, apoderáronse, también por sorpresa, del Palacio
perior a Thalberg y á L i s z t . " E n t r e los conciertos que dió en Méxi-
Nacional, aprehendieron á D. Anastasio Bustamante, y corrieron á
co, fué notabilísimo el del 4 de Noviembre en el Principal, según el
buscar á D. Valentín Gómez Farías, á quien colocaron al frente del
programa que copio aquí: ».Primera Áparte: obertura de Preciosa, de
audaz movimiento.
Weber a grande orquesta; Aria de Lucia por el Sr. Leonardi; Varia-
ciones brillantes para violín, de Mayseder, Wallace; Dúo de Bel,sa Avisado el Gral. D. Gabriel Valencia, que se hallaba de tempora-
rio, por los Sres. Avecilla y Leonardi; Gran fantasía, de Paganini da en Tacubaya, se trasladó rapidísimamente á la Ciudadela, y con
ejecutada por Wallace sobre una sola cuerda, quitando todas las otras fuerzas competentes se dirigió sobre el Palacio, despachando sus co-
a su violili. Segunda parte: Obertura de la Muda de Pòrtici, de Auber lumnas por las calles de las Rejas de Balvanera, San Pablo y Santa
por la orquesta; Aria de Roberto Devereux, de Donizetti por el S r ' Teresa. E n los momentos de disponer así su ataque, se le presentó el
Leonardi; Grandes variaciones para piano, sobre la marcha de Otelo Director del Colegio Militar D. Pedro García Conde con todos sus
de Hertz, por Wallace; Dúo de Lucia, por los Sres. Avecilla y Leonar- alumnos, que con generoso impulso pedían se les permitiese tomar
di. A petición de v a n o s aficionados á la música, el Sr. Wallace eiecu parte en la liberación del Presidente de la República. Valencia acce-
tara por ultima vez las aplaudidas variaciones de Paganini, para vio- dió á ello y tomando á sus inmediatas órdenes á los alumnos d e ma-
lín con acompañamiento de orquesta, sobre el tema Nel corpm non mi yor edad, encomendó á los más pequeños la guardia y defensa de la
sento. A su tiempo veremos que el aprecio que Wallace se conquis- Ciudadela.
to en Mexico le hizo no abandonar la Capital durante largos meses Rudos combates fueron aquellos: los pronunciados habían formado
B. H. T.—T. r.—47
barricadas en las bocacalles que afluían á la Plaza, y las
tropas 'd"etr Gobierno se vieron rechazadas con mucha pérdida, y les Numerosos edificios públicos y particulares, en especial los de la
fué necesario romper á conveniente distancia fuego de cañón; acto i laza de Armas, sufrieron daños de consideración. Muchos particu-
continuo, fueron ocupadas por las tropas fieles y como puntos estra- lares y ciudadanos pacíficos, fueron muertos por las balas que entre
si cruzaban los contendientes, y las familias carecieron aun de lo más
tégicos, el Convento del Espíritu Santo, la Profesa, las casas de la
indispensable para su sustento, ó lo pagaron á enormes precios, con-
Condesa de Mira valle y de Mr. Moren, la Concepción, Santa Clara,
siguiéndolo con indecibles riesgos.
San Francisco, Santa Isabel y el Hospital de Jesús.
La energía y decisión de Valencia, que no cesó de hacer fuego D. Carlos Bustamante computa en más de novecientas las víctimas
grueso sobre el Palacio, sin arredrarse por la idea de que en él se de la revolución del 15 de Julio. "Encontráronse, añade, no pocos
encontraba preso el Presidente, tan sereno éste ante sus aprehensores, cadáveres enterrados en los patios, callejones y caballerizas del Pa-
que se negó á todo avenimiento con ellos ni aun en medio del peli- lacio y aun en la Universidad, que despedían un pésimo olor. Tam-
gro que corría, pues las balas de sus tropas atravesaban los tabiques bién en las calles de Portacceli y Monterilla se encontraron cadáve-
de la pieza que le servía de prisión, dieron por resultado que los pro- res comidos de perros; muchos de ellos se sepultaron en el cemente-
nunciados dejasen en libertad á Bustamante, bajo la promesa de que rio de San A g u s t í n . "
les facilitaría una reconciliación. Aquella sangrienta revolución inspiró á Guillermo Prieto la si-
guiente oda:
Abierta la serie de proposiciones de parlamento, ni Bustamante ni
Valencia pudieron acceder á las exigencias de los revolucionarios y " E r a la noche: en lóbrega tiniebla
el fuego continuó durante mortales días, hasta desconcertar á los re- México sollozando se envolvía;
beldes, á tal grado, que no faltaron muchos de los más pusilánimes, Ni una estrella en el alto firmamento,
que, según el parte de Valencia, ofrecieron á éste entregarle mania- • Ni una voz, ni un sonido interrumpía
tados á Urrea y á Farías si se oponían á un pronto arreglo. La escena pavorosa
Por fin, á las n de la noche del 26, y en el edificio de la Gran So- De este drama tristísimo y sangriento.
ciedad, se celebró un convenio por el que las fuerzas pronunciadas
se pusieron á disposición del Gobierno y dejaron el Palacio para ir á "Lejana al Sur la tempestad rugía
situarse en los puntos que se les designaron, para deponer las fratri- En los cargados cielos; si su lumbre
cidas armas. Lívida exhala el precursor del rayo
A las 11 del lunes 27, el Presidente y sus Ministros, el General en Refleja en el semblante macilento,
jefe y su oficialidad y las demás autoridades, se dirigieron desde su De la ciudad en llanto sumergida.
cuartel general de San Agustín á la Catedral, para asistir al Te Deum Era el dolor estúpido y profundo
que cantó D. Manuel Posada y Garduño, primer Arzobispo mexica- De la madre que envuelve con su manto
no consagrado después de la Independencia, en 31 de Mayo de aquel Al hijo destrozado, moribundo.
año de 1840.
"Causacompasión, dijo el Diario del Gobierno, el estado del Pala- "¿Y eras la misma, patria idolatrada,
cio y de algunas de sus oficinas, especialmente el Ministerio de Re- Que á la sombra de bélicos pendones,
laciones Exteriores y el Archivo General, que han sido destrozados, De tus antiguos lazos libertada,
faltando del primero muchos objetos importantes, entre otros, los tra- Te acataron, señora, las naciones?
tados originales celebrados con algunas naciones extranjeras, lo que
sólo puede atribuirse á los sellos que los acompañaban y á los adornos ' 'El buitre atroz de la ambición proterva
de oro y plata que los guarnecían " Desgarra las entrañas de tus hijos,
Las pérdidas materiales fueron grandes; los destrozos causados por Ludibrio vil de impúdica caterva
la artillería del Gobierno en el Palacio, hicieron necesarias importan- Eres, patria adorada, patria mía,
tes reparaciones, y mientras éstas se llevaban á cabo, el Presidente y No la patria gallarda y opulenta
los altos funcionarios hubieron de alojarse provisionalmente en San Que en rico trono de diamantes y oro
Agustín. Se mostró tras catástrofe sangrienta
Vindicando su nombre y su decoro.
f m j
y * - — 3 7 2
f ^ ^
" E l fatídico silbo de las balas Medio cubiertos del marcial vestido,
Era el gemido de la paz que buía. Y con gozo feroz los sacudían.
Y en el mismo lugar que respetaron ¡Qué horror! ¡qué horror! la esposa desdichada
Eos procónsules viles de los reyes, Estúpida no mira aquella escena,
Destrozó la discordia aborrecida Y no quise ver más, patria adorada.
E l código sagrado de las leyes.
"¡Ay! de los que vertieron á torrentes
"¿Más sangre? ¿más horror? ¿Eos mexicanos Sangre de sus hermanos, los maldigo
De experiencia tristísima herederos, Y los maldice la deidad suprema,
Aun esgrimen furiosos los aceros, A vista de este cuadro de escarmiento
Y los clavan riendo en sus hermanos? Les lance Dios airado su a n a t e m a . "

" E a s caducas naciones, nuestra lucha Para no cerrar este capítulo con ese triste relato de una de las mu-
Ven más allá de los inmensos mares;
Su compasión mentida es el sarcasmo da n o t S s a q r ; r i e r e l r g e d e n u e s t r o s e s P e c t á c u i ° s - ^
A nuestros intensísimos pesares. da é noticia de la función solemne celebrada en el Sagrario Metro
P htano en la Noche-Buena de ese año, porque esa función fué una
qUG pUS
"¿Huyes por siempre, paz idolatrada, lantos r i olos profesores
lantos de r y aficionados de México ° d e m a n i f i e s t o los ade-
De la cuna opulenta de Morelos?
Con sangre de asesinos mancillada „I1" ^ F a U S t a ' d G D ° n i z z e t i ' s i S u i e ™ u n a aria y un
l 0 S
T u túnica se encuentra, virgen bella 7n a r o T t í " ^ ^ > mÚSÍCa d e » ^
Y y Guadalu e
Del Septentrión. ¿De libertad la estrella contralto T > T ^ ^ ^
contralto. La Gloria, música de Rossini, comenzó por hermosísimo^ P ^ e l ,
Por siempre nos cubrió guerra ominosa? coros; después la Srita Zepeda ejecutó el aria de i J a m u s ^ t Z
Octavia Amevas un solo coreado con un obligado de violín por el Sr
"¿Y siempre nuestros sueños borrascosos Chavez; a continuación un trío por las Sritas. Anievas, Rosario Mar-
Perturbarán el fratricida bronce, nbl J f ,Blymi^an' también cantó un solo de bajo con un
Y de muerte los llantos pavorosos? obligado a clarinete que ejecutó el Sr. Villerías
En el Gradual, música del Sr. D. Manuel Espinosa de los Monte-
' '¿Siempre veremos en desiertas calles ros, ejecutó un solo la Srita Anievas.
Como yo vi ¡qué horror! aun me parece El Credo, composición del Sr. Wallace, así como el resto de la
Que lo tengo delante de los ojos?
UU b r Í I a n t G C r 0 ; 61 I n C a r > i a t U S f u é
n T I T r r Í ° - " t a c l o á dúo
por las Sntas. Marzán y Anievas; la Sra. D* Eanny Calderón de la
" E r a un valiente de membruda talla, Barca toco un obligado de arpa, acompañada por el Sr. Wallace que
Rostro marcial, marcial su continente: ejecuto a solo de violín el CrucifixiisyeX Sanctus, con acompañamiento
Era su pecho intrépida muralla: de coros. 1 oco en seguida la orquesta la obertura de Emma de Riz-
Tiene el sello de honor sobre la frente. burgo, de Mercadante.
A su lado y gimiendo de amargura E n el Agnus ejecutaron un trío las Sritas. Zepeda, Marzán y Anie-
Con ambas manos el semblante oculto, vas concluyendo la misa con la obertura del Caballo de Bronce de
H u y e ver el cadáver insepulto Auber. '
La esposa que adoraba con ternura: Los coros estuvieron desempeñados por las Sritas. Jesús Anievas
Entre tanto los canes devorantes Enriqueta y Dolores Letamendi, Ana O'Gorman, Cruz Drusina, Jo-
Del guerrero entre sí se disputaban sefa Leño, Francisca y Carmen Heras, María Vergara y Rosario Qo-
Los miembros palpitantes rostiza; y por los Sres. Juan Escalante, Teodoro Bahre, Hipólito
Por el suelo sangriento los llevaban Thyvol, Héctor Tousis, José Tornel, Manuel Bazabe, Camilo Bros
Vicente ;T.agle, Germán y Adolfo Sengstak, Agustín Letamendi, Be-
nedetto Lombardy, Dueñas, Inda, Rebollar y Vergara.
Da orquesta, en número de 52 individuos, estuvo formada por los De él aprendiste, Elízaga: su mano
siguientes profesores y aficionados: Violines: Wallace, De Bary, Pa- T e guió desde su infancia;
blo Martínez del Río, Castro, Moráu, Araugo, Barrueta, Gana, Lam- Y sé que con jactancia,
berg, Murillo, Chávez, Garcés, García, Miranda, Aguiñagar, So- No bien habías nacido,
to, Ramírez y Buitrón.— Clarinetes: Trujeque, Gambino, Villerías y Selló tu tierna frente
R a s t r o . —Flautas: Salot, Anievas y López— Fagot: Buenrostro.— Con el beso de amor más encendido.
Trompas: Manuel Salot, Dozada, Julio Salot y Alpuí, padre é hijo, Lo sé, lo sé muy bien; y de otro modo
Trombones: Guazco y Benavides.—Trompa baja: Florencio.—Clari- No hubiera comprendido
nes: Leotrón y Villegas.— Violoncellos: Espinosa de los Monteros. Cómo puede tu mano
Foutecha, G u z m á n y Z a y a s —Contrabajos: Coronel Garmendia, Bus- Decir con expresión tan elocuente
tamante, Ríos y Cortés.—Timbales: Ortega. El Director fué I). Juan Cuál piensa tu alma, y tu alma cómo siente:
Nepomuceno Retes. Jamás entendería
Aquella manifestación del talento de nuestros aficionados, que á sí De qué modo tus dedos
mismos se excedieron, según dice un cronista, mereció justamente Presentan á mis ojos
el aplauso y el entusiasmo de la concurrencia más brillante y selecta El pensar y sentir del gran Bellini,
de México; esta función, por sí sola, fué la prueba más auténtica de De Mozart, de Bethoven, de Rossini.
los adelantos del buen gusto, del aprecio de la música y de los pro- Mueves tus manos, explicando el suave,
gresos de la culta sociedad mexicana en ese año de 1840. E l tierno, el agradable sentimiento,
De su entusiasmo por el arte y por nuestros compositores y maes- Y veo correr el arroyuelo manso,
tros da una idea la oda que pongo aquí, escrita en elogio del nota- Y deslizarse al céfiro apacible.
bilísimo músico mexicano, D. Mariano Elízaga, varias veces citado Expresas las pasiones tumultuosas,
en mi libro. Dice así: Y aquellas miro en duro movimiento,
* Cual nos pifita atrevida
"Absorto, embebecido, Nuestra imaginación acalorada
Y en éxtasis divino arrebatado Caer á la cascada estrepitosa
Te oí, te contemplé, Genio sublime. Y saltar, y volverse enfurecida.
A los primeros giros de tu mano Nos dices el coraje y la bravura,
La cuerda suena maestramente herida, Y son tus dedos huestes denodadas,
Y el alma conmovida Que corren, que se traban, que se chocan
De un modo desusado Destrozándose, en fin, desapiadadas.
Sacude fuertemente ¿Y qué diré si el pensamiento exige
Mi fibra descaecida. Un paso majestuoso, ó si travieso
Inclínase á los juegos y á la trisca?
El corazón se ensancha, y al rehacerse
Diré que imitan con cabal finura
Salta la roja sangre á borbotones;
El pasear del Monarca de la selva,
Y rápida circula, y se enardece,
O al suelto cabritillo en la llanura.
Y comunica, por doquier que toca,
Con toda su energía, ¡Tus pausas ¡Oh mi amigo! ¡Cuán preciosas,
Qué mano tan tranquila!
E l inefable influir de la armonía.
Qué descauso de dedos tan p r o f u n d o ! . . . .
Vuelve aquella á su curso,
Eres inimitable, hombre divino,
Y en cada movimiento repetido
Eres inimitable. Yo quisiera
Vigoroso latido al alma incita;
(¡Oh si dable me fuera!)
Y en ese mutuo de sentir sabroso
A todo aquel, que uniera por su dicha que, hasta donde es posible, da y debe dar muestras de los diferentes
Suavidad y dulzura, ramos de las letras en México.
Y un ojo filosófico-avisado " S e cree generalmente que las naciones no adelantan en la carre-
Un ojo entendedor; y que te viera: ra social durante la época tormentosa d e s ú s revoluciones. Ea agita-
Estoy seguro de que repitiera, ción perpetua en que viven, agita en efecto las pasiones; y perpe-
Sin dudar de su tino, tuando la agitación, enjendra las reacciones que se suceden, alcan-
Eres inimitable, hombre divino. zándose unas á otras, como las olas del mar. La multitud de las leyes,
¡Oh! con razón la Furia descarnada cuando no se ponen en práctica ni se obedecen puntualmente, origi-
Por once lustros respetado hubiera nan la división de un país en bandos y fracciones que se odian y
Vida tan apreciada! detestan. La corrupción de las masas y el disgusto que les inspira al
Sí; no le toques, insaciable fiera: trabajo el hábito que contraen de estar con las armas en la mano, y
Debe ser inmortal: mira su frente, otras mil causas que sería difícil enumerar, se miran comunmente
Y abate tu cabeza orgullecida; como las señales más inequívocas de que la nación se desmorona, á
Y sabe, maldecida, la manera de un viejo edificio minado por el tiempo, y á quien sacu-
den violentos terremotos, ó como las convulsiones de un cuerpo que
Que si envidiosa, y necia, y cruel, y dura
anuncian se ha apoderado de él la gangrena, que por instantes le va
Descargares el golpe irreparable,
privando del principio de la vida. Pero las personas capaces de ver
Nunca te será dable
más allá de la superficie de las cosas, bajo de esa corteza de muerte,
Exterminar su plácida memoria.
descubren una nueva existencia, que se desarrolla progresivamente,
Vive Elízaga agora, y vivir debe
dotada del vigor lozano de la juventud, y amaestrada por las reflec-
En todo corazón tierno y sensible
ciones del escarmiento en cabeza propia, únicas capaces de enseñar
Mil años, y otros mil, y cien tras ellos.
el conocimiento de la verdad á la raza humana, á pesar de la niebla
Nunca podrá tu mano
•espesa en que envuelven á los pueblos semejantes crisis, los ven ca-
De sangre llena, de pavor y luto,
minar á la verdad por una vereda estrecha y resbaladiza, pero que
Evitar el tributo, sin embargo se acerca á la eminencia escarpada de la prosperidad que
Que la grata armonía llegarán á ganar aunque á paso lento, pero tal vez más seguro.
Ee rendirá sobre la losa fría.
Debe ser inmortal, grita este siglo. "Mucho hemos sufrido: la república ha padecido mucho: nuestras
Debe ser inmortal, dirá el futuro. revoluciones presentan escenas que quisiéramos borrar con nuestra
Debe ser inmortal, del cielo puro sangre del libro de la historia; y porque no figurasen en ella, desea-
Oiráse siempre el eco repetido. ríamos, á costa de cualquier sacrificio, que fuesen devoradas por el
¡Honor bien merecido, olvido; pero la sangre derramada y las aberraciones de nuestra inex-
Que ha destinado el Evo venturoso periencia no han dejado de producir algún fruto.
A este hombre portentoso, " T a l es el convencimiento que han adquirido ya los pueblos, de
Al dulce americano, que el oficio ú ocupación natural de los ciudadanos, no es conspirar
Bello ornato y decoro ni sublevarse, ni combatir bajo la bandera de éste ó aquel partido,
Del apacible suelo mexicano!" sino dedicarse á industrias útiles que aseguren la subsistencia propia
y la de sus familias. La mayoría de los mexicanos se va curando ya
de aquella fiebre perniciosa que le hacía creer como positivos los
En cuanto á la poco propicia situación de la cosa pública, tan con- sueños irrealizables en política, que les habían infundido como dog-
trariaren ese entonces á los espectáculos teatrales, nada tenemos que mas, ciertos genios exaltados, cuando por el contrario, la práctica
añadir á lo que apuntado queda. Sin embargo, como una demostra- más constante les ha demostrado con fuerza irresistible, que no son
ción más del optimismo de los periódicos oficiales, cierro este capítu- sino el corrosivo que produce inevitablemente la disolución de las
lo con el juicio que al órgano del Gobierno merecieron los sucesos instituciones sociales.. Los pueblos conocen ya que el objeto de éstas,
del agitadisimo año de 1840: no está fuera de lugar en este mi libro es la amalgama del orden con la libertad, y no una licencia desen-
E . H T.—T. I.—48
378 — 379

frenada,,tumultuosa, alborotadora, cubierta con los andrajos de la


miseria, respirando el ambiente de los vicios, y hablando el lengua-
je del desenfreno á que por una especie de mofa insultante á la espe-
cie humana, se ha querido apellidar libertad. Los gobiernos han co-
nocido también en la experiencia de lo pasado, la necesidad de cal-
mar las pasiones, de evitar las persecuciones, de contener el influjo INDICE
de los partidos, y de sostener el orden público, sin degenerar en
aquel despotismo feroz que nada respeta y nada considera.
"Semejantes elementos hacen esperar con razón, que la violenta
crisis que México ha sufrido, agitado por el espíritu revolucionario,
se halla próxima á su término, y que los mexicanos, más cautos en
TOMO PRIMERO
el porvenir por el recuerdo de lo pasado, se unirán más íntimamen-
te, sacrificando sus particulares intereses y opiniones en las aras de
la patria, y reformando en medio de la calma y de la tranquilidad,
sus instituciones políticas." PRIMERA P A R T E - D E 1538 A 1821.

*
Págs.
C A P I T U L O I.—1538.—1560.—Los religiosos como introductores de las represen-
t a c i o n e s t e a t r a l e s . — P r i m e r o s Autos r e p r e s e n t a d o s e n T l a x c a l a y e n M é -
xico.—Prohibición d e representaciones p r o f a n a s en las Iglesias.—Los
actores y los tablados p a r a las r e p r e s e n t a c i o n e s 5
C A P I T U L O II.—1560.—1700.—LOS poetas a u t o r e s — F e r n á n González de Eslava
y s u s coloquios—rusos d e la Pasión.—Los neixeuitüli.—El Bachiller Vi-
l l a l o b o s a u t o r d e A utos— C a r r o s p a r a l a s r e p r e s e n t a c i o n e s . — E l c o m e -
d i a n t e N a v i j o . — L o s tablados— P r i n c i p i o s d e l T e a t r o e n E s p a ñ a . — L o s
corrales— P r i m e r Coliseo d e M é x i c o e n el H o s p i t a l d e N a t u r a l e s . — L a s
F I N D E L TOMO PRIMERO.
conquistas— Mateo J a r a m i l l o y su c o m p a ñ í a d e cómicos.—Días y horas
de l a s representaciones en los siglos X V I I y X V I I I . — L a s guanajos.—
R e p r e s e n t a c i o n e s e n las fiestas d e l a c a n o n i z a c i ó n d e S a n J u a n d e Dios. 13
C A P I T U L O III—1700.—1753.—Representaciones anteriores á la Conquista.—Te-
r r a p l e n e s p a r a representaciones en Tlaltelolco y Cholula.—Representa-
c i o n e s b u r l e s c a s p o r los i n d í g e n a s . — P a n t o m i m a s y d a n z a s s a g r a d a s . —
Prohibiciones de representación de comedias en Espafia.—Pobreza é im-
p r o p i e d a d e s del T e a t r o e n E s p a ñ a . — A s e n t i s t a s ó c o n t r a t i s t a s d e l Coli-
seo d e l H o s p i t a l R e a l d e N a t u r a l e s e n 1 7 0 7 y 1 7 1 2 . — L o s asentistas J o s é
y E u s e b i o V e l a . — E u s e b i o V e l a a u t o r d r a m á t i c o . — I n c e n d i o d e l Coliseo
d e l H o s p i t a l R e a l e n 1722.—El s e g u n d o Coliseo e n el H o s p i t a l R e a l . —
E l t e r c e r Coliseo c o n s t r u i d o e n 1725.—Esteban V e l a y s u c o m p a ñ í a d e
c ó m i c o s . — T e a t r o e n el P a l a c i o V i r r e i n a l . — L a a c t r i z A n a M a r í a d e Cas-
tro y su conversión.—El galán Diego Francisco de Asís.—Compañía
a j u s t a d a p o r D. J o s é C á r d e n a s , A d m i n i s t r a d o r del H o s p i t a l . — R e f o r -
m a s y c o m p o s t u r a s e n e l t e r c e r C o l i s e o . — F u n d a c i ó n del Coliseo N u e v o
e n 1 7 5 2 . — I n a u g u r a c i ó n del Coliseo N u e v o el 2 5 d e D i c i e m b r e d e 1 7 5 3 . —
D e s c r i p c i ó n del Coliseo N u e v o . — T e m p o r a d a s c ó m i c a s . — N o t i c i a s d e l a s
r e p r e s e n t a c i o n e s e n l o s p r i m e r o s a ñ o s d e l Coliseo N u e v o y d e l o s a u t o -
r e s de comedias en aquellos días 21
C A P I T U L O IV.—1755.—1786.—José de Calvo R e n d ó n p r i m e r arrendatario del
Coliseo N u e v o . — O t r o s a r r e n d a t a r i o s . — E l Coliseo d u r a n t e e l v i r r e i n a t o
d e B u c a r e l i — P r o d u c t o s y g a s t o s d e l Coliseo e n 1778.—Comedias, s a i n e -
tes, t o n a d i l l a s , s e g u i d i l l a s y óperas e n b o g a e n 1 7 7 8 . — G u a r d a m u e b l e s y
g u a r d a r r o p a . — L o a e n h o n o r d e C a r l o s I I I . — E l Coliseo d u r a n t e el vi-
r r e i n a t o d e I). B e r n a r d o d e G á l v e z . — P r i m e r r e g l a m e n t o d e l Coliseo en
378 — 379

frenada,,tumultuosa, alborotadora, cubierta con los andrajos de la


miseria, respirando el ambiente de los vicios, y hablando el lengua-
je del desenfreno á que por una especie de mofa insultante á la espe-
cie humana, se ha querido apellidar libertad. Los gobiernos han co-
nocido también en la experiencia de lo pasado, la necesidad de cal-
mar las pasiones, de evitar las persecuciones, de contener el influjo INDICE
de los partidos, y de sostener el orden público, sin degenerar en
aquel despotismo feroz que nada respeta y nada considera.
"Semejantes elementos hacen esperar con razón, que la violenta
crisis que México ha sufrido, agitado por el espíritu revolucionario,
se halla próxima á su término, y que los mexicanos, más cautos en
TOMO PRIMERO
el porvenir por el recuerdo de lo pasado, se unirán más íntimamen-
te, sacrificando sus particulares intereses y opiniones en las aras de
la patria, y reformando en medio de la calma y de la tranquilidad,
sus instituciones políticas." PRIMERA P A R T E - D E 1538 A 1821.

*
Págs.
C A P I T U L O I.—1538.—1560.—Los religiosos como introductores de las represen-
t a c i o n e s t e a t r a l e s . — P r i m e r o s Autos r e p r e s e n t a d o s e n T l a x c a l a y e n M é -
xico.—Prohibición d e representaciones p r o f a n a s en las Iglesias.—Los
actores y los tablados p a r a las r e p r e s e n t a c i o n e s 5
C A P I T U L O II.—1560.—1700.—LOS poetas a u t o r e s — F e r n á n González de Eslava
y s u s coloquios—rusos d e la Pasión.—Los neixeuitüli.—El Bachiller Vi-
l l a l o b o s a u t o r d e A utos— C a r r o s p a r a l a s r e p r e s e n t a c i o n e s . — E l c o m e -
d i a n t e N a v i j o . — L o s tablados— P r i n c i p i o s d e l T e a t r o e n E s p a ñ a . — L o s
corrales— P r i m e r Coliseo d e M é x i c o e n el H o s p i t a l d e N a t u r a l e s . — L a s
F I N D E L TOMO PRIMERO.
conquistas— Mateo J a r a m i l l o y su c o m p a ñ í a d e cómicos.—Días y horas
de l a s representaciones en los siglos X V I I y X V I I I . — L a s guanajos.—
R e p r e s e n t a c i o n e s e n las fiestas d e l a c a n o n i z a c i ó n d e S a n J u a n d e Dios. 13
C A P I T U L O III—1700.—1753.—Representaciones anteriores á la Conquista.—Te-
r r a p l e n e s p a r a representaciones en Tlaltelolco y Cholula.—Representa-
c i o n e s b u r l e s c a s p o r los i n d í g e n a s . — P a n t o m i m a s y d a n z a s s a g r a d a s . —
Prohibiciones de representación de comedias en Espafia.—Pobreza é im-
p r o p i e d a d e s del T e a t r o e n E s p a ñ a . — A s e n t i s t a s ó c o n t r a t i s t a s d e l Coli-
seo d e l H o s p i t a l R e a l d e N a t u r a l e s e n 1 7 0 7 y 1 7 1 2 . — L o s asentistas J o s é
y E u s e b i o V e l a . — E u s e b i o V e l a a u t o r d r a m á t i c o . — I n c e n d i o d e l Coliseo
d e l H o s p i t a l R e a l e n 1722.—El s e g u n d o Coliseo e n el H o s p i t a l R e a l . —
E l t e r c e r Coliseo c o n s t r u i d o e n 1725.—Esteban V e l a y s u c o m p a ñ í a d e
c ó m i c o s . — T e a t r o e n el P a l a c i o V i r r e i n a l . — L a a c t r i z A n a M a r í a d e Cas-
tro y su conversión.—El galán Diego Francisco de Asís.—Compañía
a j u s t a d a p o r D. J o s é C á r d e n a s , A d m i n i s t r a d o r del H o s p i t a l . — R e f o r -
m a s y c o m p o s t u r a s e n e l t e r c e r C o l i s e o . — F u n d a c i ó n del Coliseo N u e v o
e n 1 7 5 2 . — I n a u g u r a c i ó n del Coliseo N u e v o el 2 5 d e D i c i e m b r e d e 1 7 5 3 . —
D e s c r i p c i ó n del Coliseo N u e v o . — T e m p o r a d a s c ó m i c a s . — N o t i c i a s d e l a s
r e p r e s e n t a c i o n e s e n l o s p r i m e r o s a ñ o s d e l Coliseo N u e v o y d e l o s a u t o -
r e s de comedias en aquellos días 21
C A P I T U L O I V — 1 7 5 5 . — 1 7 8 6 . — J o s é de Calvo R e n d ó n p r i m e r arrendatario del
Coliseo N u e v o . — O t r o s a r r e n d a t a r i o s . — E l Coliseo d u r a n t e e l v i r r e i n a t o
d e B u c a r e l i — P r o d u c t o s y g a s t o s d e l Coliseo e n 1778.—Comedias, s a i n e -
tes, t o n a d i l l a s , s e g u i d i l l a s y óperas e n b o g a e n 1 7 7 8 . — G u a r d a m u e b l e s y
g u a r d a r r o p a . — L o a e n h o n o r d e C a r l o s I I I . — E l Coliseo d u r a n t e el vi-
r r e i n a t o d e B . B e r n a r d o d e G á l v e z . — P r i m e r r e g l a m e n t o d e l Coliseo en
SJ

V CAPITULO X I V . - 1 7 9 4 - 1 8 0 5 . - D i f i c u l t a d e s p a r a el b u e n a r r e g l o de l o s espoc-
P4gs.

1786.—Reformas y m e j o r a s en el Coliseo.—Aventuras de la p r i m e r a da- táculos.—Nuevas a c t r i c e s . - L a actriz M a r í a B á r b a r a Ordóñez pasa d e


32
m a A n t o n i a d e San M a r t í n la p r i s i ó n á la e s c e n a . - E l c o n d e de R e v i l l a Gigedo y s u s disposiciones
C A P I T U L O Y.—1786.—Razón de los i n d i v i d u o s q u e f o r m a b a n las c o m p a ñ í a s s o b r e el C o l i s e o . - D i f i c u l t a d e s y tropiezos en la t e m p o r a d a - P r e t e n d e
de cómicos, bailarines, empleados, y o r q u e s t a del Teatro de la Capital, el asentista la s u p r e s i ó n de los b a i l e s . - E l Bachiller Córdova, a u t o r
sus s u e l d o s y obligaciones, en 1786 •• 43 d r a m á t i c o . — I n f o r m e del censor, d e s f a v o r a b l e á C ó r d o v a . - F u n c i o n en
C A P I T U L O V I . — 1 7 8 6 . — D i s p o s i c i o n e s r e l a t i v a s filos Teatros en la época virrei- el Coliseo en celebridad d e la erección d e la estatua ecuestre de Carlos ^
nal.—Reales c é d u l a s do 1 7 0 3 , 1 7 4 1 , 1 7 5 9 —Ordenanzas ó R e g l a m e n t o del IV.—Periódicos en M é x i c o d
Conde d e Gálvez, en 1786.—Cartel relativo á las fiestas del Carnaval.— C A P I T U L O XV.—1805-1806.—Mejoras y r e f o r m a s en el C o l i s e o . - C o m p a m a
R e g l a m e n t o p a r a escoletas y ensayos.— Represión d e desórdenes y abu- p a r a la t e m p o r a d a d e 1S06 á 1 8 0 7 . - A n a t e m a social c o n t r a los c ó n n c o s . -
sos _ E 1 a l u m b r a d o del Coliseo.—Disposiciones referentes al p ú b l i c o Diversos espectáculos y recreos en p r i n c i p i o s del siglo: la Comedia:
c o n c u r r e n t e al Coliseo.—Representaciones d e comedias con títeres.— J u e g o de pelota: P e l e a s de Gallos: los Cafés: Paseos d e la A l a m e d a y
E q u i p a j e de u n actor en 1786 53
la Viga.—Representaciones en el C o l i s e o . - L o s b e n e f i c i o s . - L a s Follas.
C A P I T U L O V I I . — 1 7 8 6 — C a p a c i d a d d e l Coliseo y d i s t r i b u c i ó n d e sus localida-
Tonadillas.—Bailes.—Piezas de cantado •••••••• 108
des.—Luneta, P a t i o ó P l a t e a , Mosquete, Cuartos ó palcos, Cazuelas de C V P I T U L O XVI.—1806—1812.—Representaciones en los p r i m e r o s m e s e s d e la
h o m b r e s y de m u j e r e s . — E n t r a d a s gratis.—Precios d e localidades y pro- t e m p o r a d a . — C o n c u r s o s abiertos p o r el "Diario de México."-Compa-
d u c t o d e las funciones.—Abonos.—Presupuestos de g a s t o s - C o m e d i a s , ñías p a r a l a s temporadas d e 1807 á 1808 y de 1808 á 1809.-E1 circo d e
Loas, Tonadillas.—Prestidigitadores y j u g a d o r e s d e manos.—El físico, L a i l s o n . — N u e v a c o m p a ñ í a . - L e t r i l l a c o n t r a los f r a n c e s e s . - P r i n c i p i o
m a q u i n i s t a y m a t e m á t i c o F a l c o n i — G i m n a s t a s y equilibristas.—Espec- d e la g u e r r a de I n d e p e n d e n c i a . - F u n c i o n e s en h o n o r d e C a l l e j a . - I n -
t á c u l o s d u r a n t e la c u a r e s m a . — N i e v e y fiambres 64 t r i g a s d é l o s c ó m i c o s . - L a I n e s i l l a . - B e n e f i c i o de I n é s C a r c í a . - E s p l e n -
C A P I T U L O VIII.—1787.—1790.—D. J u a n P i s ó n y Vargas, autor d r a m á t i c o - dideces en los beneficios.-,S'oieío acróstico de la Inesilla .... l ' a
A v e n t u r a s d e las actrices Josefa y B á r b a r a González, alias lasllabaile- C A P I T U L O XVII—1812—1821—Letras de d i v e r s a s tonadillas—ISA orquesta.
ras.—Mejoras de los espectáculos en el v i r r e i n a t o del s e g u n d o Conde - L o s cantarínes.—Actores y A c t r i c e s . - P r o d u c t o s d e l C o l i s e o . - M a r -
de Revilla Gigedo.—Solicitudes y proyectos de e m p r e s a r i o s en 1790.— cha patriótica d e n i g r a n t e p a r a D. J a v i e r M i n a . - L a Arcadia Mexica-
C o m p a ñ í a d e J e r ó n i m o Marani.—Crítica de la C o m p a ñ í a p o r el Cofra- na, s u s mayorales, dreades, y za<;aíes.-Miseria de l a s l e t r a s . - C r í t i c a
de del Recato 74 d e los poetas del siglo X V I I I y p r i n c i p i o s d e l X I X t o m a d a á D. F r a n -
CAPITULO I X . — 1 7 9 0 . — D . Cosme d e M i e r y Trespalacios, J u e z d e Teatro.— cisco Pimentel.—Decadencia d e los espectáculos al fin de la d o m i n a - ^
E l P a d r e F e r n á n d e z del R i n c ó n , Censor de comedias.—Comedias some- ción colonial
t i d a s á la c e n s u r a d e l P . Rincón.—Incidentes de la representación y
c e n s u r a de la c o m e d i a México rebelado, d e a u t o r d e l país.—Polémica
e n t r e el P . S i l v e s t r e Diaz d e la V e g a y el P . Rincón, c o m o censores y
Mier y Trespalacios como J u e z , á p r o p ó s i t o de la comedia México re-
belado.— Disgustos e n t r e criollos y españoles con m o t i v o de esa come-

SECUNDA P A R T E - D E 1821 A 1840.


dia.—Enojo d e l P . R i n c ó n 85
C A P I T U L O X . — L o a en obsequio de la P u r í s i m a . — E n t r e m é s para las Posa-
das.— Loa en obsequio de N u e s t r a S e ñ o r a d e G u a d a l u p e 97
C A P I T U L O XI.—Caprichos métricos: Q u i n t i l l a s á la Concepción: Décimas del
sol y de la luna.—Parlamento d e la Culpa.—Réplica de la Gracia— E l CAPITULO I -1821-1824.—El T e a t r o y s u s espectáculos al c o n s u m a r s e la I n -
i n d i o criado.—Coloquios y Pastorelas.—La caída de Luzbel: E l pecado d e p e n d e n c i a de México.—Poesía en h o n o r del cómico A r a g ó n . - F u n -
d e E v a y A d á n : E l conciliábulo: E l P e c a d o original: Casamiento d e ción n o t a b l e en la j u r a d e l a l n d e p e n d e n c i a . - D . F r a n c i s c o Ortega y su
María: Gila, Bato y Bras: P e l e a s con Lucifer: L a Anunciación: E n bus- m e l o d r a m a México libre.-Tratamiento r e p u b l i c a n o . - P r o g r a m a s do
ca d e p o s a d a : E l N a c i m i e n t o 117 v a r i a s f u n c i o n e s .-Ciudadanas y Madamas.-Los carteles.-Estreno
C A P I T U L O X I I . — 1 7 9 1 . — 1 7 9 2 . — F u n c i o n e s n o t a b l e s . — A l u m b r a d o del T e a t r o d e l T e a t r o d e los G a l l o s . - L u c i a n o C o r t é s . - C e c i l i a O r t i z . - R o m a n c e
en días solemnes.—Nuevos a r r e g l o s d e e n t r a d a s y salidas.—El galán d e Erasmo Lujan en h o n o r d e los c ó m i c o s . - F r a c a s o d e u n p r o y e c t o d e
L a g e u h e i m . — C o m p a ñ í a d e volantines.—Funciones de beneficio.—Pro- 197
E m p r e s a d e Opera ••••••
g r a m a s cu verso.—Concesión d e beneficios.—Nuevas a v e n t u r a s de la C A P I T U L O I I . - 1 8 2 4 - 1 8 2 5 . - E s t a d o y necesidad d e r e f o r m a s de los espectácu-
San M a r t í n . — I n t r i g a s de la p r i m e r a d a m a y del asentista y el juez.— los públicos.—Presentación del actor español Diego M a r í a G a r a y . -
Otros volantines.—Compañía del Coliseo p a r a la t e m p o r a d a de 1791 á 1792. P r o h i b i c i o n e s d e c o m e d i a s . - F a n a t i s i n o y s u p e r s t i c i o n e s . - E l prestidi-
—Real cédula d e 1792 r e g l a m e n t a n d o a s u n t o s del Coliseo 137 g i t a d o r C a s t e l l i . - F u n c i ó n d e obsequio á V i c t o r i a . - ® * Solitario, ó p e r a
C A P I T U L O X I I I . — 1 7 9 2 . — 1 7 9 4 . — C o m p a ñ í a del Coliseo p a r a la t e m p o r a d a d e d e C r i s t i a n i - F u n c i ó n en celebridad d e l desagüe d e la Valenciana.-
1792 a 1793.—Informe s o b r e a s u u t o s d e l Coliseo.—Contrata de cómicos y C e n s u r a d e r e p r e s e n t a c i o n e s . - P a n t o m i m a s i r r e v e r e n t e s d u r a n t e la Se-
b a i l a r i n e s de los teatros d e M a d r i d y d e Cádiz p a r a el de México.—Dis- m a n a Santa.—Conciertos de C r i s t i a n i . - F u n d a c i ó n d e u n a S o c i e d a d F i -
g u s t o de los cómicos del Coliseo.—Resistencias y rebeldías de los cómi- larmónica.—Baile á W a r d y P o i n s s e t . - I n c e n d i o d e la P l a z a d e Toros.
cos.—Desagrado é irritación del V i r r e y R e v i l l a Gigedo. - D i s p o s i c i o n e s - L a Compañía Lancasteriana.-Epidemias y bandidos.-Reconstruc-
violentas del V i r r e y : destierros, detenciones, m e d i d a s de policía dicta- ción d e l T e a t r o d e los G a l l o s - C o m p a ñ í a de A n d r é s C a s t i l l o . - Diego
d a s c o n t r a los cómicos.—Defensa de los cómicos.—Enérgica p r o t e s t a d e M a r í a G a r a y . - M a n u e l P a t i ñ o . - E l yorquinismo.-Rendición de b l ú a .
J e r ó n i m o M a r a n i . — T é r m i n o conciliatorio del conflicto e n t r e el V i r r e y - F u n c i ó n en el T e a t r o d e los Gallos ó P r o v i s i o n a l 208
y los cómicos "
) 382
383

CAPITULO HFC*-1826.—Funciones e n el P r i n c i p a l y e n el P r o v i s i o n a l . — F u n -
ciones líricas.—El p r i m e r actor A n d r é s Prieto.—Intrigas contra Prie- jugador—YA jugador de manos Mr. W i e s s . - D é c i m a s contra Santa-
to. - L a S a n t a M a r t a . — D i s g u s t o s e n t r e A n d r é s P r i e t o y D . J o s é M a r í a A u n a . - N u e v a e x p u l s i ó n d e e s p a ñ o l e s . - F u n c i o n e s d e ó p e r a y d e co-
H e r e d i a . — R e f o r m a s e n l a C o m p a ñ í a del P r i n c i p a l . — E l Selim, d e A n - m e d i a . — E l circo G r e e n e n l a A l a m e d a . — E l v i c e p r e s i d e n t e G ó m e z F a -
t e p a r a n , y El Tiberio d e H e r e d i a . — A n d r é s P a u t r e t d i r e c t o r d e b a i l e . 310
r í a s . — E l C ó l e r a d e 1&33—Las p r o c e s i o n e s
—Bailarines mexicanos.—Operas cantadas por Rita González de San-
CAPITULO X I I — 1 8 3 3 — 1 8 3 4 — R e p r e s e n t a c i ó n d e l a c o m e d i a Contigo pan y
ta M a r t a . — E l D r a m a La víctima del Claustro 228
cebolla d e G o r o s t i z a . — E x h i b i c i ó n d e u n m o d e l o d e F e r r o - c a r r i l d o v a -
C A P I T U L O IV.—1827.—Oda c o n t r a D. G u a d a l u p e V i c t o r i a . — E s c o c e s e s y y o r -
p o r - G r a n Cosmorama.—Adoldo Theodore y su p r i m e r ensayo y fraca-
q u i n o s . — C o n s p i r a c i ó n d e l P a d r e A r e n a s . — A v e r s i ó n á los e s p a ñ o l e s . so d o ascensión a e r o s t á t i c a e n M é x i c o . - D e c r é t a s e el d e s t i e r r o d e Galli:
—El e m i n e n t í s i m o a r t i s t a l í r i c o D. M a n u e l G a r c í a . — G a c h u p i n e s y co- suspensión de l a orden.—La c o m p a ñ í a acrobática G r e c n — L a d r o n e s -
y o t e s . — E l c o r o n e l C a s t r e j ó n e m p r e s a r i o d e la O p e r a . — D i f i c u l t a d e s d e Canto á Papantzín. -Escritores y poetas mexicanos. - H i m n o á Santa-
C a s t r e j ó n c o n el A y u n t a m i e n t o . — C e n s u r a d e l o s a b u s o s del A y u n t a - \ n i i a - F u n c i ó n de ópera en el aniversario de la acción de T a m p i c o . -
miento 237 Ensayo épico—Oda á l a P e l l e g r i n i . - P a t i ñ o y sus intrigas contra la f
C A P I T U L O V . — 1 8 2 7 . — P r i m e r a f u n c i ó n d e M a n u e l G a r c í a e n el T e a t r o P r o - _ * o¿(J
v i s i o n a l . — O d i o p ú b l i c o c o n t r a los e s p a ñ o l e s . — A t a q u e s ;'t G a r c í a — CAPiTULo a XIlÍ.--1833.—183-5.—Los f r a c a s o s d e a s c e n s i o n e s a e r o s t á t i c a s p o r
Pretensión de q u e las óperas fuesen cantadas e n español.—Defensa
Theodore - E l célebre aeronauta Guillermo Eugenio Robertson—Pri-
del g r a n artista h e c h a por la p r e n s a sensata.—Negativas de García á
m e r a ascensión aerostática en M é x i c o . - O t r a s ascensiones d e Robert-
c a n t a r l a s ó p e r a s e n c a s t e l l a n o . — E l fiasco d e l a ó p e r a . — O b s e q u i o s á
s o n . - U n a j o v e n m e x i c a n a a c o m p a ñ a á R o b e r t s o n en u n a d e s u s ascen-
G a r c í a . — L o s h i j o s d e G a r c í a , F e l i c i a (la Malibran), P a u l i n a (la Viar-
siones aerostáticas.—Entusiasmo público •••••• 3 3 1
dot).—Decaimiento de los espectáculos.—Disgustos de Prieto y la San-
C A P I T U L O XIV.—1S35.—1836.—Intermitencias e n l o s t r a b a j o s d e l a c o m p a ñ í a
t a Marta, c o n s u s e m p r e s a r i o s , c o n l o s p e r i ó d i c o s y con o t r o s a c t o r e s . . . 250
do G a l l i - L a t r a g e d i a Tepoczina. - C o m e d i a h i s t ó r i c o r e l i g i o s a d e Nues-
C A P I T U L O VI.—1827—1828. — Dificultades de empresarios y compañías.—Con-
tra Señora de los Remedios, c e n s u r a s d e q u e f u é o b j e t o . - L a c a m p a n a d e
c i e r t o s d e M a n u e l G a r c í a e n e l S a l ó n d e la L o n j a . — L a e x p u l s i ó n d é l o s
T e x a s - N u e v a c o m p a ñ í a d e Galli: l a P a s s i , l a A l b i n i , l a C é s a r i — H i m -
españoles.—Desórdenes y atropellos.—Motín de la Acordada y saqueo
n o patriótico d e R o s s i . - G r a v e conflicto provocado p o r P a t i ñ o . - L a s pil-
d e l P a r i á n — D e s p e d i d a d e M a n u e l G a r c í a . — R o b o á ( j a r c i a e n el c a m i -
doras de M o r i s o n . - V a l l e t o , la Cordero, A n t o n i o Castro ......... áW
no de V e r a c r u z 200
C A P I T U L O X V _1837.-lS38.-Función e n c e l e b r i d a d d e l j u r a m e n t o d e l a
C A P I T U L O VII.—1829.—Cumplimiento del decreto de expulsión de españoles.
Constitución C e n t r a l i s t a . - E x h i b i c i ó n de las p u l g a s i n d u s t r i o s a s . - E l
— A n d r é s P r i e t o q u e d a e x c e p t u a d o d e la e x p u l s i ó n . — E l G o b i e r n o del
* -1 ño nuevo y Presente amistoso. - I n i c u a g u e r r a p r o m o v i d a p o r F r a n c i a ,
D i s t r i t o p r o h i b e q u e a p a r e z c a n r e y e s e n la e s c e n a . — L o s a c t o r e s y las re-
-El Recreo de las Familias.-El t e n o r J u a n B. M ó n t r e s o r r e f u e r z a l a
p r e s e n t a c i o n e s . — E x p e d i c i ó n d e B a r r a d a s . — C e l e b r a c i ó n d e la d e r r o t a d e
c o m p a ñ í a d e ó p e r a d e G a l l i y l a A l b i n i . - E s c á n d a l o s e n el P r i n c i p a l y
B a r r a d a s . — H i m n o s , o d a s y p o e s í a s r e f e r e n t e s á la d e r r o t a d e B a r r a d a s .
e n el d e los G a l l o s . - R e f e r e n c i a s a l e s t r e n o , c a m p a ñ a s é i n c e n d i o d e l
— P r o n u n c i a m i e n t o c o n t r a G u e r r e r o . — Z a v a l a y P o i n s s e t y los y o r q u i -
T e a t r o d e los G a l l o s . - / . « casa deshabitada, ó p e r a e s c r i t a p o r el M a e s -
n o s . — E l p a r t i d o d e los H o m b r e s d e B i e n 270
t r o L a u r o R o s s i , con l i b r e t o e n c a s t e l l a n o , y e s t r e n a d a e n M é x i c o - S a -
C A P I T U L O V I I . — 1 8 3 0 . — 1 8 3 1 . — V a n i d a d patriótica en a s u n t o s teatrales.—Com-
l e n p a r a E u r o p a Galli, l a A l b i n i y o t r o s o p e r i s t a s - C a s a m i e n t o d e P a -
petencias de méritos entre actores mexicanos y extranjeros.—Postra-
t i ñ o c o n la P a s s i . — E s c á n d a l o e n l a r e p r e s e n t a c i ó n d e u n a p a r o d i a d o
c i ó n d e los e s p e c t á c u l o s . — E l P r e s i d e n t e B u s t a m a n t e p r o m u e v e l a m e -
Angelo.-El T e a t r o y el p ú b l i c o d e M é x i c o e n 1837 y 1838
j o r a d e l a s r e p r e s e n t a c i o n e s t e a t r a l e s — N o m b r a m i e n t o d e l c o r o n e l D.
CAPITULO X V I -1S39—1840-Grandes c o n c i e r t o s o f r e c i d o s p o r i l u s t r e s afi-
M a n u e l B a r r e r a p a r a la f o r m a c i ó n d e u n r e g l a m e n t o ó p r o y e c t o d e m e -
cionados de l a m e j o r sociedad m c x i c a n a . - D . J o a q u í n B e * .
j o r a d e l T e a t r o . — T r a i c i ó n d e P i c a l u g a y sacrificio d e D. V i c e n t e G u e -
A g u s t í n C a b a l l e r o . — L a S r a . L i z a l i t u m e n Sonámbula.-LaSrita R ^
r r e r o . — P r o s p e c t o d e la r e o r g a n i z a c i ó n d e c o m p a ñ í a s p a r a e l t e a t r o —
. a r i o B o s s e r o , n o v e l i s t a m e x i c a n a . - C o n c i e r t o e n el a n i v e r s a r i o d e l a
Contratas d e actores, cantantes y bailarines.—Condiciones de a b o n o 281 1
I n d e p e n d í e l a . — F u n c i o n e s de toros.—La Sociedad J *^
C A P I T U L O I X . — 1 8 3 1 . — C o m p a ñ í a d e B e r n a r d o Avecilla.—Actores, bailarines,
d a p o r e l p r o f e s o r D. J o s é A n t o n i o G ó m e z . - L a b a n d a d e l a d r o n e s d e l
orquesta.—Deserciones de varios cómicos.—Alumbrado y guardarro-
c o r o n e l Y á ñ e z - B a i l c d e t r a j e s e n el T e a t r o P r i n c i p a l b a j o l a d i r e c -
p a . — B e r n a r d o A v e c i l l a . — D i e g o M a r í a G a r a y . — P a t i ñ o . - E l físico P e r i -
ción d e M a k i n t o s h y S o m e r a . — G r a n c o n c i e r t o e n q u e t o m a r o n p a r t e
nor y su Teatro Pintoresco. - I l u m i n a c i ó n de gas hidrógeno.—Primera
í a s d i s c í p u l a s d e D. J o s é A n t o n i o G ó m e z - C á t e d r a s d e l C o n s e r v a t o r i o
f u n c i ó n e n el P r i n c i p a l . — L a c o m p a ñ í a d e ó p e r a del g r a n F i l i p p o CJalli.
c ^ l a S o c i e d a d F i l a r m ó n i c a - P r i m e r o s b a i l e s de; m á s c a r a e n e l T e a £ 0
— N i ñ o s m e x i c a n o s d i s c í p u l o s d e P a u t r e t . — E s t r e n o d e l a c o m p a ñ í a Ga-
P r i n c i p a l — E l gran violinista, pianista y compositor, Guillermo Vicen-
lli el 12 d e S e t i e m b r e d e 1831.—Exito d e la C o m p a ñ í a G a l l i 291
te W a U a c e v i s f t a á M é x i c o - L a r e v o l u c i ó n d e J u l i o - S o l e m n e f u n c i ó n
C A P I T U L O X—1831—1832—Perinor—Avecilla—La M o l i n a . - L a Dubreville.
d e fin d e a ñ o e n el S a g r a r i o M e t r o p o l i t a n o c o n el c o n c u r s o d e ^
— L o q u e f a l t a y lo q u e s o b r a a l T e a t r o . — F i e s t a á l o s d i s c í p u l o s d e P a u -
d i s t i n g u i d o s a f i c i o n a d o s d e la c u l t a s o c i e d a d m e x i c a n a : l a s S r t a s J e s ú s
tret,—La ópera.—Intrigas de empresarios y cantantes.—Inseguridad
Z e p e d a y Cosío, G u a d a l u p e T o r n e l , O c t a v i a A n i e v a s , R o s a r i o M a r z á n
pública.—Lucimiento de los espectáculos líricos.—Revolución contra
V l a S r a F a n n v C a l d e r ó n d e l a B a r c a : Coros d e d i s t i n g u i d a s p e r s o n a s :
los Jalapistas y caída de B u s t a m a n t e JQ^
O r q u e s t a d e aficionados i l u s t r é bajo la dirección de Wallace. - P o e s í a
C A P I T U L O X I . — 1 8 3 2 . — 1 8 3 3 . — C o m p a ñ í a Avecilla.- - Nuevos triunfos de la com-
en honor de D. L orenzo Elíz - L a política en
p a ñ í a d e O p e r a — E l b a i l a r í n C r o m b é — E U vn E l e f a n t e d e l M o g o l —
L a c o m p a ñ í a d r a m á t i c a : recuerdos de Ai. Js Prieto.—La b a i l a r i n a
A m a d a G u e n o . - O p e r a s , d r a m a s y b a i l e s . - T , • < , „ , « años ó laVida de un

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