Universidad de Nariño

Facultad de Humanidades
Programa Sociales
Angela María Montenegro
Presentado a: Jairo Pabón

IMPLICACIÓN SOCIAL DE LA DOCENCIA

Hay una serie de sentimientos axiológicos que inciden en la identidad de un ser

humano con las cuales el actor social orienta sus conductas y construye su propia
historia. El fin de esta construcción es llegar a resolver y superar conflictos y
contradicciones de acuerdo a distintas determinaciones de la vida, hay relaciones
de poder en las cuales se implican actores que se definen y reconocen como tal.

El sentimiento de identidad se encuentra estrechamente relacionados con la

acción, con las obras, el que hacer, así mismo el compromiso y toma de
responsabilidades, pues este camino lo conduce al ser a encontrar una
valorización del otro y ante sí mismo; es aquí donde la sociedad motiva la
conducta lo que hace que el sujeto no sea actor sino reactor que trabaja para
contar con otros, lo cual le asegura un lugar en la sociedad y así mismo una
actitud de coherencia de su ser y de su actuar.

Por otra parte el fin que le da sentido a una forma de vida se encuentra en la
constitución de la identidad llevada de la mano con la orientación y la valoración.

La identidad es un proceso constructivo desde la asunción de roles donde el

sujeto se mira a sí mismo y forma a otro generando una estabilidad de conducta y
consiguiendo de esta manera su propia autoidentificación, este proceso se
encuentra enmarcado por una serie experiencias personales como su verdad
personal, profesional, dando como resultado su propia interpretación reflexiva de
su autobiografía.

Cada maestro cuenta con su propio pensamiento representacional, lo cual es

transmitido mediante su propio discurso, este se encuentra cargado por decirlo así
de su propio mundo identitario con su respectivo orden individual y social, donde
su propia definición de su imagen cuenta, todo esto encierra el concepto de su
desempeño profesional. 1

Así mismo la identidad del Maestro de Ciencias Sociales con respecto a su labor
profesional está relacionada con la experiencia difícil, decepcionante, subvalorada.

1
GARCÍA, Leyna. Los Maestros de Ciencias Sociales: Identidad Personal y Social en el Maestro de Ciencias
Sociales. Encontrado en: http://biblioteca.universia.net/html_bura/ficha/params/id/54554044.html. Fecha
de consulta: 10 de Marzo de 2013
Es decir se encuentra presente un sentimiento de inutilidad, como también de
ausencia de significado frente a construir conocimiento en los diferentes espacios
de intercambio como el encuentro inmediato entre maestro –alumno. Sin embargo
la labor de ser docentes a veces pasa a ser una tarea ingrata y frustrante, ya que
no siente tan valorada con lo que realmente se sabe que se puede aportar, al igual
que no se siente el reconocimiento como otras vocaciones.

Estas valoraciones sobre el que hacer como maestros de Ciencias Sociales, como
sus actividades y disciplina, no son tenidas en cuenta y forman parte de la opinión
de un colectivo que se ha encargado de darle unos rasgos particulares con
respecto a su enseñanza como un maestro que simple mente enseña una serie de
datos memorísticos como fechas, lugares, personajes etc. Por lo tanto se
encuentra en nuestras manos esa trasformación a ese estigma que la sociedad
nos ha impuesto, ya que nuestra función debe ser la de educar, socializar y
moralizar, con el propósito de ser unos maestros ejemplares que proponen
cambios en un modelo de virtudes.

A portas de la práctica docente cada vez son más las inquietudes que surgen
vinculadas al cómo apropiarse de los conocimientos adquiridos a lo largo de la
formación profesional, para enfrentar los retos que implica dejar de ser un
estudiante universitario de ciencias sociales y convertirse en un maestro capaz de
asumir la docencia de forma crítica, idónea y consecuente con las necesidades de
los educandos; más aún en un contexto marcado por problemáticas que afectan
todos los ámbitos de la vida humana y en donde lamentablemente muchos
deciden tomar el camino más fácil, desarticulando la docencia del compromiso
social; es así de esta manera como esta en nuestra manos darle un sentido más
trascendental a la labor educativa, inculcando más valores como el respeto, la
responsabilidad, el buen comportamiento.

A lo largo de la formación académica pocos son los maestros que logran influir de
forma significativa en las concepciones de los estudiantes. Sin duda alguna uno de
los principales desafíos que tendremos que afrontar en nuestro ejercicio
pedagógico es el hecho de educar en y para la diversidad, teniendo en cuenta las
falencias y los obstáculos del sistema educativo colombiano.

Pero si somos conscientes de nuestro papel como sujetos transformadores y

entendemos que cada individuo es diferente y por tanto cada estudiante, sin
importar su condición, tiene necesidades educativas, nuestra labor como
docentes, es encontrar las formas de usar los elementos adquiridos a lo largo de
nuestra formación académica para enfrentar las dificultades y lograr verdaderas
transformaciones, al construir una educación integral en donde las ciencias
sociales no se enfoquen solamente a trasmitir conocimientos vacíos sino que
propendan por ayudar a los estudiantes a superar sus interrogantes potenciando
el fortalecimiento de sus habilidades.

Debemos tener en cuenta con respecto a nuestro ejercicio educativo, de que

estamos formando seres humanos y que esta enseñanza no se convierta o haga
referencia al moldeamiento de un ser que convierta en un sirviente dócil que tenga
la capacidad de asumir todo tipo de tareas encomendadas y específicamente las
que competan a propender por la supervivencia de la comunidad, como el mito
judío de Golem.2

Cuando el educador pretende crear un ser perfecto que satisfaga sus deseos y
aspiraciones termina creando un golem, un monstro que se rebela contra los
deseos de su amo.

Al igual que El mito de frankenstein, el cual se relaciona con el ejercicio educativo

porque al igual que los otros mitos se trata de la fabricación de un ser al cual el
educador transmite todo su saber y empeña toda su voluntad y energía en su
creación, sin embargo esta fabricación al igual que el mero ejercicio educativo se
detiene en cuanto alcanza su objetivo sin trascender del acto a la actividad.

Si tenemos en cuenta que como futuros licenciados en Ciencias Sociales

debemos pensar y asumir la docencia de forma crítica, idónea y consecuente con
las necesidades de los educandos, es pertinente que conozcamos las
experiencias académicas cotidianas que surgen en las instituciones educativas
que se enmarcan dentro de nuestro propio contexto, ya que es evidente que la
educación actual se ve enfrentada a nuevos retos que comprometen la ética, la
preparación intelectual y la creatividad de los docentes para impulsar propuestas
pedagógicas críticas, novedosas y emancipadoras que promuevan en los
estudiantes el deseo de convertirse en sujetos activos dispuestos a transformar la
realidad social.

2
RIVAS, Ana Gonzales. El Mounstruo de Frankestein: Texto e imagen en la génesis de un mito moderno.
Universidad Complutence de Madrid. Encontrado en:
http://biblioteca.unedteruel.org/La%20Biblioteca%20Recomienda/el%20monstruo.pdf . Fecha de Consulta.
10 de Marzo de 2013