Curso: Lectura 1° a 3° Básico para Educar en la Diversidad

Título: Lección 1: De la Decodificación a La Lectura Fluida

Unidad: Nº 4

De la Decodificación a La Lectura Fluida

Los lectores que leen con fluidez muestran expresión y precisión, y lo hacen a un ritmo
adecuado, lo que les permite comprender mejor lo que leen. Cuando se ha adquirido la
fluidez suficiente, es posible centrarse en lo que dice el texto y orientar nuestra
comprensión para entenderlo. Todo esto redunda además en que el alumno lee en forma
fluida, se demora menos tiempo en leer cualquier material académico, por lo tanto todo el
trabajo escolar se ve beneficiado (Joshi, 2005).

Al comienzo la conciencia fonémica y la decodificación ayudan al niño a ir adquiriendo un

amplio vocabulario visual, lo que agiliza la lectura. Al leer en forma fluida el niño no
necesita gastar toda su energía cognitiva en decodificar letra a letra o palabra por palabra,
y puede destinarla a la comprensión.

¿Qué sabemos de la fluidez?

La fluidez es un predictor importante del dominio lector y abre las puertas a la

comprensión (Fuchs, Fuchs, Hosp & Lenters, 2001). La velocidad lectora (número de
palabras que un niño lee en un minuto) no es lo mismo que la fluidez. Es cierto que una
lectura fluida es una lectura rápida, pero no sirve de nada que un niño lea muchas
palabras por minuto si lo hace sin ritmo o entonación, o si no respeta las pausas propias
del texto. Es bueno ejercitar la velocidad lectora, pero siempre recordando a los niños la
importancia de que la lectura en voz alta exprese el sentido del texto. Recuerde siempre
que usted es el primer modelo y referente de sus alumnos y alumnas.

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La fluidez es distinta de la automaticidad. La automaticidad se refiere a ser capaz de leer
un texto sin mayor esfuerzo. Por ejemplo, el reconocimiento de palabras de vocabulario
visual es automático, lo cual es un pre-requisito de la fluidez, pero la fluidez, como hemos
dicho, facilita la comprensión y por ende es mucho más que solo automaticidad. Implica
cargar la lectura de sentido a través de la entonación, prosodia, pausas, etc.

La fluidez debe trabajarse en todos los cursos, no es lo único ni lo más importante pero
hay que incluirlo dentro de la programación, buscando estrategias adecuadas.

La comprensión y la fluidez están relacionadas mutuamente. Los alumnos que no leen de

manera fluida muchas veces no captan toda la información en un texto. Esto suele ocurrir
con los alumnos de los primeros años de educación básica, que necesitan usar su energía
cognitiva para decodificar, pero una vez que reconocen las palabras de manera
automática, les es más fácil centrar la atención en las ideas más que en el código
impreso. Un lector fluido es capaz de atender de manera simultánea a distintos estímulos:
letras, palabras, puede cambiar el tono de la voz para denotar significado, y comprender
el texto, todo al mismo tiempo. No tienen que leer letra por letra o palabra por palabra.

Algunos Consejos para trabajar la fluidez:

1. Preocuparse de retroalimentar a sus alumnos: dígales cuándo están leyendo

en forma fluida y qué es lo que necesitan mejorar.

2. Aumente el repertorio de palabras de vocabulario visual, aquellas que pueden

reconocer en menos de 1/4 de segundo, para esto use una gran variedad de
textos, no siempre los mismos.

3. Haga que sus alumnos lean un mismo texto varias veces. El método de las
lecturas repetidas mejora la fluidez.

4. Establezca criterios para la ejercitación de la lectura en voz alta: más que decir
a sus alumnos que lean un mismo texto un determinado número de veces, o
que se espera que lean un determinado número de palabras por minuto, insista
en el ritmo, la entonación o las pausas.

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 5. Establezca instancias para que sus alumnos ejerciten la fluidez leyendo
palabras en contexto. Esto facilita su posterior reconocimiento instantáneo.

La selección de un texto adecuado es un factor importante en el desarrollo de la fluidez.

Por tanto busque textos:

1. Cuyo lenguaje sea lo más semejante al lenguaje natural que usamos los
chilenos, aunque no coloquial ni vulgar.

2. Con los niños pequeños, use textos con patrones predecibles.

3. Use poesía o cuentos con rima: ayudan a los niños de todas las edades, les
enseña a hacer pausas, etc.

4. Use obras de teatro breves. El teatro lector es una gran herramienta para
trabajar la fluidez. El teatro lector es como el radioteatro antiguo: se escoge
una obra breve con un diálogo interesante, y los niños van leyendo según el
personaje asignado, poniendo énfasis en el ritmo y la entonación que
corresponde. También se puede agregar efectos especiales de sonido para dar
más dramatismo a la lectura.

Usted como profesor debe modelar la fluidez lectora para sus estudiantes. Dígales cuándo
estará modelando una lectura fluida, léales un texto más bien corto, para mantener su
atención. Inmediatamente después de modelar, haga que ellos ejerciten la lectura.

Recuerde que dentro de los objetivos de aprendizaje para los cursos de primero, segundo
y tercer año básico la fluidez tiene un papel muy importante. Se espera que los alumnos
lean fluidamente:

• Pronunciando cada palabra con precisión, aunque se autocorrijan en

algunas ocasiones.

• Respetando el punto seguido y punto aparte.

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 • Leyendo palabra a palabra.

En tercer año básico se espera además que se haya alcanzado un nivel de precisión
mayor, que los alumnos y alumnas sean capaces de respetar la coma, punto, y signos de
interrogación y exclamación, además de haber adquirido una velocidad adecuada al nivel
(Bases Curriculares 2012).

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